No solo Thor, Heimdall y Odín tuvieron descendencia, sino que otros dioses también

formaron parte de la gran casta divina, independientemente de si su naturaleza era benigna

o no.

Loki, por ejemplo, también tuvo familia. Aunque muchos saben que su padre y madre
fueron los gigantes Laufey y Farbauti, pocos escaldos logran reconocer en Býleist y
Helblindi la sangre de Lopt, gigantes hermanos suyos y más que probablemente, de la
misma ascendencia. Con respecto a su progenie, ya hemos dicho que su primera esposa
fue Glut, con quien tuvo a Eisa y Einmiria, pero esta no fue su única. Sigyn se llamó la
segunda, la joven y devota esposa de padres desconocidos y de la que ni siquiera se sabe
cómo llegó a Ásgard . Esta diosa le brindó a Loki dos hijos llamados Váli y Narfi (Nari),
cuyo destino funesto será profetizado por las palabras de la Völva. Así también existió una
tercera esposa, una que le brindó al dios de las mentiras una infame descendencia, pero
este oscuro destino será retratado en un futuro más lejano.

Por otra parte, según el canto de los cuervos de Odín, de las tierras élficas llegó Idunn,
hija del elfo Ivaldi, la mayor de sus hábiles hermanos herreros, siendo los más reconocidos
Brok y Eitri, enanos que en un futuro próximo crearán el martillo de Thor. Esta amada
Álfar fue una diosa de gran belleza, afabilidad y serenidad, pero a pesar de gran su
importancia, su llegada a Ásgard no tiene un momento definido, razón por las que algunos
escaldos contrariamente aseguran que la diosa no tuvo nacimiento ni ascendencia, así
también, que la muerte no caería en ella.

Se cuenta que al llegar a Ásgard la diosa tomó el importantísimo rol de suministrar a los
dioses las manzanas de la juventud, quienes esquivaban con ello los incesantes azotes de la
vejez y de la enfermedad. Estos frutos eran cultivados por ella y los guardaba en un cofre
mágico que tenía la propiedad de multiplicar todo aquello que en él se guardara, de tal
manera que, no importaba cuántas manzanas sacaran de él, siempre había disponibles. Se
relata que tomó como hogar a las arboledas al sur en los límites de Ásgard, las que
tomaron el nombre de Brunnaker y allí cultivó.

Finalmente, otro hijo de Odín también procreó, aquel que conocemos como el dios de la
belleza, la bondad, la verdad y de la luz, así como del sol de verano. Balder era el dios más
amado por los Aesir y por lo tanto, su progenie, no podría quedarse atrás. Se narra
entonces que un día de aquellos en que la promesa del amor flotaba libremente en el
ambiente, Balder conoció a Nanna, la hija de Nept, o Nokkvi según la hechicera Hyndla.
Esta diosa de la vegetación y la pureza, célebre por su belleza, se enamoró tan
profundamente al ver a Balder, que su amor le acompañaría inclusive hasta más allá de la
muerte. De este imperecedero amor nació Forsetti, el dios de la justicia y de la ley.

De todos los dioses, Forsetti era el más juicioso y equilibrado. Se le consideraba el juez
supremo de Asgard y resolvía con inteligencia y presteza las desavenencias entre los dioses.
Si cualquier dios tenía una disputa con otro, se presentaba ante Forsetti para resolver su
caso, siendo que tras oír la versión de ambas partes, el dios pronunciaba su sentencia.

Todos los que se marcharon de su presencia vivieron a partir de entonces seguros de

convivir en paz, ya que la sabiduría que Forsetti profesaba sobre la ley era tan definitoria,
que siempre lograba propiciar la profunda admiración entre las partes litigantes, así
también porque nadie se atrevió a romper un voto que se le había hecho una vez, ya que
todos temían su justa ira y la promesa de ser heridos inmediatamente de muerte.

Pero Forseti no solo brindó justicia a los dioses, ya que así tal cual padre enseña los
matices del bien y el mal a sus hijos, se cuenta que el dios viajó a Midgard, a la isla de
Heligoland, para brindar oportuna enseñanza.

Continuará…

Edda poética; HárbarJzljód - 9 – 48 – 53

Voluspá – 34- 35

Grímnismál – 5 -42

Atlakviáa - 30

Hyndluljód – 20 - 37

Hymiskvida – 3 –15 – 34

Lokasenna - Prefacio – 53 – 54 – epílogo – prólogo.

Prymskvida – 32

Vafprúánísmál - 51

Edda prodaica; Prólogo

Edda prodaica; Gylfaginning 25- 30 – 31 - 32- 49 - 52

Skáldskaparmál 1-3- 4 –5- 10- 14 – 16 – 17 - 18 - 19- 21 – 22 - 23- 24 – 32 – 33 – 35 – 36- 44- 45

– 48- 50 –

Piedra rúnica de Karlevi

Gesta Danorum; libro tercero, capítulo cuarto.

Poema Hrafnagaldr Óðins

Myths of norsemen from eddas and sagas; H.A. Guerber.

Pequeño diccionario de mitología escandinava de Ricardo A. Carrasco Garibay.

Old Norse Sígyn (*sei ̯ku̯ -n̥-i ̯éh2- ‘she of the pouring’), Vedic °sécanī- ‘pouring’, Celtic Sēquana and
PIE *sei ̯ku̯ - ‘pour’* RICCARDO GINEVRA