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1 ) o c j ~ r 1x1.
o ESTVDIO-Las iiistituciones del Derecho positivo pana-
mrño scn dcsconocic!ns cri las tleinAs iiacioties hermanas del continente y
poco h211 rc?.liz:!do los doctririarios <Icl país para rcvaluar y exponer la
naturz.leza de los institutos jurídicos que normativizan la vida nacional.
T:.n muy contaclos trabajos extranjeros de Derccho comparado se
Iia hcclio alguna alusióti a las modalidades que determinada figura estu-
diada preieiila cii nuestro ordcnarniento legal, pero siempre csa remisión
al Derecho pniiariiciio Iia sido dirigida a aspectos especiales de la materia.
Quizá la exposicibn jurídica no haya tenido ninguna relevancia en
el istmo, por los escasos años de actividad universitaria de la República,
puesto que sic:npi-c cs en los centros de altos estudios superiores de
donde emerge la inquietud por los altos conocimientos de la Ciencia y el
Derecho.
80 SECUNDINO T O R R E S GUDIrJO
El articulo 214 del libro primero del Código Judicial Panameño, de-
fine la jurisdicción "en lo judicial" como "la facultad de administrar
justicia en determinada extensión territorial", y se ejerce sobre las per-
sonas y las cosas que existen dentro del limite territorial en que el juez
desempeñe sus funciones.
L a jurisdicción sólo puede ser prorrogada por la ley. Hay prórroga
de jurisdicción cuando por razón del ejercicio de derechos reales o de
inspecciones oculares o de la práctica de diligencias sobre inmuebles si-
tuados en otras jurisdicciones, la ley autoriza al tribunal para ejercer
sus funciones en territorio distinto del que le está señalado. O
E n el Derecho panameño se establece que la jurisdicción se adquiere
por el hecho de tomar posesión del cargo el magistrado o el juez y se
pierde por cualquiera de las causas que les privan del destino.
El articulo 218 de la ley 61 de 1946, establece que se pierde la juris-
dicción en un negocio determinado, cuando se decide que el conocimien-
to corresponde a otro tribunal y cuando se termina el juicio, diligencia
o comisión.
Existe la suspensión de la facultad de administrar justicia, o sea
suspensión de jurisdicción, por licencia para separarse del destino, por
causa penal, por haber sido condenado a la pena de suspensión el juez
o magistrado, y se suspende en uno o m i s negocios, por apelación en
el efecto suspensivo, por impedimento para conocer del asunto, por re-
cusación, por la suspensióii del curso del asunto en los casos previstos
por la ley. lo
Los jueces y magistrados usurpan jurisdicción, cuando la ejercen
antes de adquirirla o después de estar en suspenso, cuando proceden des-
pués de resolución ejecutoriada del supeiior y cuando se toman mayores
facultades de las que se le conceden en comisión. l1
La carencia de jurisdicción es siempre causa de nulidad de lo ac-
tuado.
7) COMPETENCIA.-Lacompetencia es el limite de la jurisdicci0n.
La jurisdicción es el género y la competencia es la especie. Puede con-
cebirse la existencia de jueces sin competencia y con jurisdicciCin, pero
ventilen, el tribunal que conozca del más antiguo, si todos fueren de igual
cuantia.
La competencia por razSn de la calidad de las partes, tampoco pue-
de ser prorrogada más que por la ley.
Como regla general, en materia civil es juez competente por razón
del lugar donde deba ventilarse el juicio, el del domicilio del demandado;
y en los actos de jurisdicción voluntaria, el del interesado.
E n general, el Derecho panameño, en cuanto a la competcncia, es-
tablece para los derechos personales, la del juez del lugar en que deba
cumplirse la obligación y en cuanto a los derechos reales, la del juez del
lugar en donde se hallen o ejerciten.
8 ) ACCION.-Alcalá-Zamora, tras sostener que a la gravitación excesiva
del Derecho romano obedece, en gran parte, a "la falta de éxito rotundo de
las investigaciones en torno a la acción", reconoce, sin embargo, la impor-
tancia de los estudios histórico-jurídicos, "indispensables como cimiento
de toda posible ciencia nacional (no nacionalista) y sin los cuales no
es posible alzar sólidas construcciones doctrinales". l5 Esta observación
la tomaríamos muy en cuenta, si nuestro propósito furra el de realizar
una revaluación de la doctrina de la acción; pero como es nuestro deseo
brindar un panorama del Derecho procesal panameño, nos contentaremos
con exponer algunas definiciones de la acción, para luego, observar lo
que entiende por tal el Derecho de mi país.
Eduardo J. Couture, agrupa las diversas corrientes sobre la natura-
leza juridica de la acción, en dos grandes tendencias: A ) Las que con-
ciben a la acción como un derecho concreto a la tutela jurídica; y B) Las
que la piensan como un derecho abstracto de obrar. le
Couture toma posición dentro de las del segundo grupo y expone
"
que una teoría que trate de explicar la naturaleza juridica de la acción,
debe partir de la base necesaria de que cualquier súbdito tiene dere-
cho a que el órgano jurisdiccional competente considere sus reclamacio-
nes expuestas de acuerdo con las formas dadas por la ley procesal. Este
derecho es la porción mínima indiscutible de todo este fenómeno: el de-
recho a la prestación de la jurisdicción." "
-
15 Enreñan-as acerca de la acción, p. 769.
16 Fundamentos del Derecho Proresal Civil. (2' ed. Buenos Aires, 1951). p. 13.
17 Couture, ob cit., pp. 31 Y 32.
94 SECUNDINO TORRES CUDIRO
9) ~ x c ~ ~ c ~ o ~ . - C o n fa olar concepción
me dinámica que propugnamos
-dice Alcalá-Zamora-, a la acción se opone la reacción y se contrapone
la inacción. "Frente a la acción del actor, la parte atacada o demandada pue-
de situarse en dos actitudes distintas: de reacción o de inacción." "Pero el
contenido de la reacción (entendiendo por tal la réplica a la acción) no es
uniforme: puede consistir, ante todo, yendo de menos a m i s en la resis-
tencia, en el allanamiento, en el que hay reacción, pero no conlrapretensión,
o mejor dicho, en el que la segunda se reemplaza por adhesión o aceptación
de la pretensión del actor; en segundo lugar, en la simple defensa negativa,
con la esperanza puesta en el fracaso probatorio de la parte contraria ( a c -
fore non probante, r e u s absolvitur) ; y finalmente en el empleo de excep-
ciones." 21
-
18 Nicol5.s Coviello, Doctrina general del Derecho Civil. Trad. Felipe J . Tcm.
México, 1949, p. 554.
19 Francisco Carnelutti, Instituciones del hrt<evo Proceso Civil Italiano. Barcela-
na, 1942, trad. Jaime Guasp. Editorial Bosch, p. 184. James Goldschmidt, Derecho
procesal civil (trad. española; Barcelona, 1936), p. 96.
20 Alcalá-Zamora, EnscEanzes acerca de la acción, pp. 797 y 798.
21 Ob. antes cit., p. 801.
P A N O R A M A D E L DERECHO PROCESAL PANAWEh70 95
la casación, cuando el litigio sea de aquéllos para los cuales la ley recono-
ce este recurso extraordinario.
12) PRECLUSION PROCESAL.-Enlos sistemas procesales en los cuales
las diversas etapas del proceso son marcadas con nitidez, es en los que
opera con mayor eficacia el debatido concepto de la preclusión. El tránsito
de una fase a la otra del proceso, supone invariablemente 13 terminación
de la precedente por alguna de las causas predeterminadas en la ley: en
consecuencia, verbigracia, agotada la fase expositiva le es imposible a una de
las partes realizar en la etapa demostrativa actos de la primera. El Derecho
procesal panameño en materia civil es del tipo en que la preclusión se pre-
senta con eficacia, por la separación de los diversos grados del proceso.
Para Couture, la preclusión resulta de tres situaciones distintas: a)
por no haberse observado el orden u oportunidad dado por la ley para
la realización del acto; b ) por haberse cumplido una actividad incompatible
con otra, y c ) por haberse ejercitado ya una vez, válidamente, dicha fa-
cultad. % E n el caso a), cuando no se apela en el tiempo debido -por ejem-
plo: en el Derecho panameño, cuando no se apele dentro de los tres días
siguientes a la notificación de la sentencia-, la resolución queda ejecu-
toriada y, por tanto, entra en la categoría de cosa juzgada; en el caso b ) ,
cuando el demandado no promueve incidente de nulidad por falta de com-
petencia, después de contestada la demanda y, por el contrario, realiza cual-
quier otra gestión, existe la preclusión del derecho a impugnar la falta
de competencia; y c ) , cuando existe cosa juzgada.
Alsina declara que la preclusión tiene como función, ser el medio
del cual se vale el legislador para hacer progresar el procedimiento impi-
diendo el retroceso de los actos procesales. 35
13) CARGA PROCESAL.-Laspartes en el proceso tienen el imperativo
de cumplir con la realización de los actos que les impone el transcurso del
proceso. En caso de incumplimiento de uno de estos trámites, ello deviene
cn su perjuicio. Por ejemplo, una de las partes se abstiene de presentar
pruebas en la etapa demostrativa, esa actitud tendrá como consecuencia
que en la decisión no serán apreciadas las pruebas que pudo aportar en
fundamentación de su derecho.
La carga procesal no es una obligación, puesto que ésta es un derecho
relativo que tiene frente a si un acreedor y que constituye para el obligado
34 Couture, Fundamentos, pp. 96. 97 y 98.
35 Alsina, Tratodo, t . I, p. 264.
PANORA.IfA D E L DERECHO P R O C E S A L PA.%'A!4ERO 101
partes, por inactividad de las mismas, por actos del juzgador y por hechos
que impidan la continuación del proceso. 40 Añade Alcalá-Zamora que,
finalmente, "para aportar una opinión americana, Couture, en su recientí-
simo Proyecto, incluye la transacción, el desistimiento y la "pcrención"
( o caducidad) entre los modos anormales de conclusión del proceso", en
contraposición con el modo normal, o sea la sentencia, y distanciados
tanto de tsta como del allanamiento, que examina al exponer la "actitud
del demandado". 41
De los pareceres anteriores se desprende que la autocomposición seria
una segunda división en la lista de los modos previstos para la solución
de los litigios, junto a la autodefensa y al proceso. 42
La primera forma de la autocomposición es el desistimiento y debe
entenderse por tal "la renuncia a la pretensión litigiosa deducida por
la parte atacante". L a segunda especie unilateral de autocomposición es el
"allanamiento" y podemos conceptuarlo como "el reconocimiento y sumi-
sión de la parte atacada a la pretensión litigiosa contra ella dirigida." La
transacción es bilateral y constituye un convenio entre las partes. 43
Estos trrs niodos son medios anormales de extinción del proceso; y
en los dos casos primeros, los de desistimiento y allanamiento, el actor y el
demandado respectivamente, renuncian a la prosecución del juicio hasta
obtener la sentencia, o sea el modo normal de terminar la pendencia
jurídica. E n la transacción, por convenio de las partes evitan la provoca-
ción de un proceso o ponen término al que habían comenzado.
E n el Derecho panameño (artículo 591 del Código Judicial) se conci-
ben dos clases de desistimiento: expreso y tácito. El primero, se verifica
haciéndolo por escrito ante el tribunal que conoce del juicio o incidente,
o ante el superior, según el tribunal en el cual se encurntre el proceso.
Opera el desistimiento tácito cuando el actor "abandonare durante tres
meses el juicio que ha promovido". Y cuando exista nurvo abandono
de la instancia, después de iniciado nuevo juicio con el consentimiento
del demandado dentro del año. Estas dos formas de desistimiento tácito
constituyen propiamente perención o caducidad de la instancia. 44
-
40 Ob. cit., pp. 67-68.
41 Ob. cit., p. 68.
42 Ob. cit., p. 68.
43 Ob. cit., pp. 78, 80 Y 83.
44 Artículos 515 y 518 del Código Judicial.
104 S E C U N D I N O TORRES GUDZYO
determinación del juez, cuando hay acuerdo de los litigantes sobre los
hechos, en cuyo caso, se le da traslado de la contestación al actor y se
pasa a la etapa de los alegatos. Cuando no es admisible la confesión
respecto de los hechos de la demanda, aunque el demandado convenga en
los hechos se abrirá el negocio a pruebas, como si hubiese contradicción.
Para precisar la noción de la prueba traemos los siguientes con-
ceptos. Según Alsina, la prueba es "la comprobación judicial, por los
medios que la ley establece, de la verdad de un hecho controvertido del
cual depende el derecho que se pretende." Guasp, después de examinar
diversos conceptos sobre la prueba, la precisa diciendo que "probar es
tratar de convencer al juez de la existencia o inexistencia de los datos pro-
cesales que han de servir de fundamento a su decisión". 63 "Los hechos
y los actos juridicos, cuando dan motivo a un proceso, son objeto de afir-
mación por parte de aquellos individuos a quienes afecta", comienza di-
ciendo Couture, quien prosigue: "pero como el juez es normalmente ajeno
a esos hechos sobre los cuales debe pronunciarse, no puede, lógica-
mente, pasar por las sin~plesafirmaciones de las partes, y debe disponer
de medios de contralor de la exactitud de esas proposiciones. E s menester
comprobar la verdad o falsedad de esas afirmaciones, con objeto de
formarse convicción n su respecto. Tomada en su sentido procesal la
prueba es, en consecuencia, un medio de contra!or de las proposiciones
que los litigantes forinulnii en el juicio."04
La prueba tiene como objeto la demostracióri de los hechos sobre
que versa la litis procesal. Se han distinguido los juicios que versan so-
bre hechos y sobre derechos: los primeros requieren la fase denostrativa,
ya que la presunción de que el Derecho se supone conocido por todos, re-
lega de toda prueba acerca de su existencia. Hay hechos sobre los cua-
les también la ley ha establecido el principio de que se relevan de la prue-
ba, como aquéllos en que recae una presunción legal, los hechos evidentes
y los notorios. E n los hechos evidentes, "puede considerarse innecesaria
toda tentativa de prueba que tienda a demostrar un hecho que surge de
la experiencia misma del magistrado", y los notorios son aquellos hechos
que entran naturalmente en elconocimiento, en la cultura o en la infor-
-
62 Alcina, Tratado, tomo 11, pp. 171 y 172.
63 Guasp, Comentarios, toma 11, vol. 1, 2>arte, l0 ed. (Madrid, 1948), p. 362.
64 Couture, Fundamentos, p. 100.
P A S O R A I A DEL DERECHO P R O C E S A L PA!V,41iETO 111
o haciendo entrar en juego esos dos factores para eludir el proceso con-
zursal genérico o el especifico de quiebra.
Por el Código Judicial, tanto el concurso voluntario como el forzoso de
acreedores, se aplican a comerciantes o no comerciantes, cuzndo en otras
iegislaciones se prefiere la quiebra para los primeros.
E n cualquier estado del juicio universal, después de hecho el examen
y reconocimiento de los créditos, y no antes, podrán hacer los acreedores
y el concursado los convenios que estimen oportunos.
E1 concurso de acreedores, será voluntario cuando lo promueva el
mismo deudor, cediendo todos sus bienes a sus acreedores y necesario o
iorzoso, cuando se forme a instancia de los acreedores o de cualquiera de
ellos.
El concurso se forma por tres causas, a saber: 1. Por cesión vo-
luiitaria que de ellos haga con tal fin el deudor; 2. Por haberse librado
contra él tres o más ejecuciones en un mismo lugar, siempre que no haya
presentado bienes suficientes para el pago total; y 3. por hahérscle de-
clarado en quiebra, conforme al Código de Comercio.
E n el caso dcl concurso voluntario, el deudor presentará una rela-
ción de sus haberes y otra de sus créditos pasivos. La primera contetidrá
todas las indicaciones necesarias para el embargo, depósito y avalúo de
los bienes, como ubicación, linderos y señales distintivas; la segunda, los
nombrcs de los acreedores, su vecindad, cantidad debida y causa de la
deuda.
E n el caso de que sea una ejecución forzosa motivacla por tres eje-
cusioncs o más realizadas en el mismo lugar, el concurso se decretará a
petición de cualquiera de los ejeciitantes; y cuaiido se trata de quiebra
mercantil, la declaración se realizará. conforme al Có<ligo de Comercio.
E l auto en que se accede al concurso, se notificará al concursado, el
cual quedará incapacitado para la adrniiiistración de sus bienes. Cuando
la declaracióii, concursa1 se hace a instancia de los acreedores, el dcudor
podrá oponerse dentro de los tres días siguientes al en que haya sido no-
tificado.
E n el inismo auto en que se declare el concurso, se dispondrá lo
siguiente: 1. el embargo y depksito de los bienes, libros, papeles y docu-
mentos ; 2. el nombramiento de curador del concurso ; .?. el emplazatniento
por edicto a todos los interesados para que dentro de treitna días se pre-
senten a estar a derecho; 4. la citación personal de los intersados cono-