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6 Puede ocurrir, igualnlcnte. que el joven canlpesino se sienta impelido a
re::unirse (sic) a b guerrilb, como un escape a situaciones c0I11presivas o Se presentan los argumentos al
modo causa-efecto: el efecto es
asfixiantes en su hogar. Ello sucede en conlunidades de tr:tnsición, donde:: la unión de los jóvenes a la gue
enlpieza a haber inconfornlidades con el statu quo. El joven que ha cobra rrilla. y las C2usas son: el hecho
do aversión a las modalidade::s del lar palerno, encuentra en 1.:1 gtle::rrilla un de que el joven viva en una co
munidad en transición, y la o'.'er·
susti tu to que le satisface para realizarse en la vida. " sión que experimenta hacia el
hogar desin:agrado.
La escuela
7 Son pocos los datos disponibles sobre las fallas de:: bs escudas dentro de las áreas
de:: violencia, aunque hay indicios de que también sufrieron los efef:tos de la
crisis general. No faltaron m:1estros que adoctrinaron alunlnos en el odio polí
tico y en la intolerancia religiosa. No fue esporád~co el caso de escolares indu
cidos a bnzar piedras y dar gritos soeces contra grupos minoritarios, en algu
nos lug:tre::s del país. En pieno re::cinto de la Dirección de Educación dd ToliIna,
una nuestra que actuaba en áre::a de:: violencia abofe::te::ó J.1 Se::cre::tario porque la
d~stinab;l a otro sitio. En el proce::so de:: quiebra de la escucb influyó tre::.nendJ.
I11ente el asesinato de ITIaestros o su rapto, C01110 acaeció en Quinchb, San
13ernardo,Vt:I1:tdillo y Lérida, en el Tolinu. muchas zonJS las nue::stras fue::ron
sOInctidJS al torturante:: asedio donjuanesco de nutone::,5 de:: \'creda y a guardar
sikncio ante el crin1en para s:1h'ar la vida.
S La escuela rural hubo de:: conve::rtirse:: en guarida de antisociales o refugio
antiaéreo; los rnisnl0s estudi:1ntes construyeron cuevas donde ácolnod:1rse
durante los bonlb:1rde::os, conlO sucedió en Herrera (Tolinla). En ocasiones
er:1n los escobres quienes te::rnlin:1ban la l:1bor de descuartizanliento de las
\'íctilll:1S, servÍln de estafetas y participaban en otros aspe::ctos de b lucha
arnlad:l. Si la institución escolar rural ya tenía sus fallas, por no responder a las
ne::ce::sid:ldes del canlpo,la violencia la halló aún n13S fue::ra de tono e incapaz
de poner diques al de::sbordan1iento resultante. Los escolares adnliraron al
matón conlO un héroe.
9 Pero cabe reflexionar sobre si los colegios n1isn10S y la universidad no sufren
un proceso de desadaptación al actuar de espaldas a lJ. realid;ld nacionaL
MOrISel10r Germán Guzmán Call1po~ y Orlando Fal~ Borda