DIBUJO TÉCNICO

Época Primitiva

Aún antes de convertirse en Homo Sapiens, el hombre demostró talento

para pintar. Las denominadas pinturas rupestres encontradas en las
paredes de algunas cavernas son testimonios de ese talento. El hombre
primitivo solía pintar figuras de animales o de personas con extraños
atuendos o a grupos de hombres cazando a algún animal, porque tenían
la creencia de que la representación gráfica de la acción le daría suerte
en la cacería. Las pinturas prehistóricas constituyen documentos De
incalculable valor, porque de ese modo narró su historia el hombre que
no conocía la escritura.

Época Antigua

Desde su aparición sobre la tierra, el hombre a tenido la necesidad de

comunicarse con sus semejantes basado en dibujos. De esto tenemos
vestigios de pinturas y grabados Rupestres en Altamira España y en
las Cavernas de Lascuax, en Francia, además los podemos encontrar
también en diferentes puntos al norte de Europa y en el norte de
África. La primera prueba escrita de la aplicación del Dibujo Técnico
tuvo lugar en el año 30 a. C., cuando el  arquitecto Romano Vitruvius
escribió un tratado sobre arquitectura en  el que dice, “El arquitecto
debe ser diestro con el lápiz y tener conocimiento del dibujo, de
manera que pueda preparar con facilidad y rapidez los dibujos que se
requieran para mostrar la apariencia de la obra que se proponga
construir”. Luego continúa discutiendo el uso de la regla y de los
compases para las construcciones geométricas, para el trazado de la
planta y la elevación de un edificio y para dibujar perspectivas.

Edad Media

Esta época fue representada por la importancia del alma y lo

religioso. El cuerpo era concebido como la cárcel del espíritu, por lo que el hombre
medieval debía buscar trascender mediante la oración. Dados los conflictos bélicos
suscitados en este periodo, se edificaron ciudades amuralladas.

El dibujo se utilizó principalmente con fines bélicos, en el trazo de fuertes, castillos,

torreones; en el diseño de armas y como medio para ubicar las posiciones
enemigas.
Los monasterios eran los únicos lugares en donde el hombre del medioevo podía
acceder a una gama de conocimientos; dentro de estos centros, se impartían a los
monjes las cátedras de dibujo y geometría, entre otras.

Época Clásica

Grecia es considerada la cuna del pensamiento

occidental. De ésta nacieron diversas manifestaciones que intentaron enaltecer
al hombre en todos sus planos. Surgieron así, la filosofía, la lógica, la ética, la
estética, entre otras tantas doctrinas más, que incentivaron el crecimiento del
hombre en lo bueno y lo bello.
El empleo del dibujo tuvo su mayor aplicación en la arquitectura, ya que fue la
base para la construcción de magnas obras de carácter civil: templos, teatros,
palestras, gimnasios, etc. Sin duda, un ejemplo viviente, producto del
razonamiento y armonía, entre otras virtudes, es la construcción del Partenón.

Renacimiento
Éste fue un periodo de grandes cambios, pues el hombre se convirtió en el
centro de todo y, al mismo tiempo, una extensión de Dios. Esta etapa vio nacer
grandes artistas como: Leonardo Da Vinci, Miguel Ángel Bonarotti, entre otros.
Los creadores de esta época eran versátiles, motivo por el cual, eran buscados
con frecuencia para elaborar obras de arte por encargo.

Bajo la influencia de este contexto histórico, en el que la forma de pensamiento

predominante fue el humanismo, cuya premisa principal era considerar al
hombre como elemento primordial, se dio el desarrollo de las ciencias como la
física, las matemáticas y los estudios de anatomía.

Por otro lado, el artista fijó su atención en sus rasgos (para subrayar la
dimensión psicológica de su personalidad) y en los colores diluidos (para
observar el paso del tiempo sobre su rostro). El artista no sólo era
comprendido, sino también reconocido.

Edad Moderna
En el marco de estos años, grandes desarrollos se dieron en todos los ámbitos del
conocimiento, tanto en las ciencias como en las artes; se manifestaron grandes
aportaciones que contribuyeron, en gran medida a la conformación de una era sin
precedentes. Siempre con el dibujo de por medio.
Veamos algunos de los avances que se dieron durante la época moderna:
Filippo Brunelleschi (1337-1445), creó la perspectiva, que constituye un
instrumento de cálculo y un medio de reproducción racional de los edificios, que
pone en evidencia las líneas de fuerza de la arquitectura (columnas) y las
escansiones del espacio (alternancia de los vacíos y los llenos).
Las contribuciones de René Descartes (1596-1650) a las matemáticas se
encuentran en su tratado llamado Discurso del Método (1637), creando así, la
geometría analítica y el sistema de coordenadas cartesianas.
Gaspard Monge (1746-1818), es considerado el inventor de la geometría
descriptiva, la cual representa, sobre una superficie bidimensional, las superficies
tridimensionales de los objetos con aplicaciones en perspectiva cónica, así como el
sistema de planos acotados y el sistema diédrico
Jean-Victor Poncelet (1778-1867), definió los lineamientos de la geometría
proyectiva, incorporando el concepto de infinito, el cual indica que dos rectas se
cortan o se cruzan, pero no pueden ser paralelas, ya que se cortaron en el infinito.

Época Actual

El mundo contemporáneo surgió

desde inicio del siglo pasado y se prolonga hasta nuestros días. Una de las
manifestaciones artísticas más importantes de este periodo es el cubismo,
desarrollado en París por Pablo Picasso y Georges Braque. Esta corriente pictórica
consistió en proyectar formas geométricas, tomando a la realidad en sus
elementos más puros.

Por otra parte, hicieron representaciones de la cotidianidad, en la cual se buscaba

la grandeza; lo simple cobró importancia. Paul Cezzane es un ejemplo claro de
este tipo de arte, quien representaba paisajes y naturalezas muertas, basándose
en las formas dinámicas de la escultura africana e ibérica. El cubismo llegó a ser el
estilo artístico que más influencia ejerció en todo el siglo XIX.

En 1924 André Bretón dio el nombre de surrealismo al movimiento artístico que

proclamaba lo irracional como vía para encontrar una verdad. Los surrealistas más
importantes fueron Ernst, Salvador Dalí, Joan Miró, René Magritte, Jean Arp y
André Masson.