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Uso del densímetro (hidrómetro)

El densímetro, también conocido por el anglicismo hidrómetro, es un instrumento que mide la densidad
específica de un líquido. La densidad específica es la medida de la densidad de un líquido en comparación a
la del agua. La densidad del agua es 1.000, entonces si un líquido es más denso que el agua tendrá un valor
mayor a 1.000.

Para los cerveceros el densímetro nos sirve para monitorear un aspecto de la fermentación que se llama
atenuación. Ésta es un indicador del grado de fermentación del mosto, nos dice qué tanta azúcar del mosto
se convirtió en alcohol y dióxido de carbono durante la fermentación.

Para hacer esto, se mide la densidad específica del mosto antes de agregarle la levadura y se vuelve a
medir cuando terminó la fermentación. La primera lectura se llama densidad inicial o DI (OG u original
gravity en inglés) y a la segunda lectura se le denomina densidad final o DF (FG o final gravity en inglés). Y la
fórmula para calcular la atenuación es: Atenuación = (OG-FG) /OG.

Usualmente la densidad inicial ronda entre 1.035 y 1.060, mientras que la densidad final oscila entre 1.005
y 1.015. El valor de la densidad final siempre será aproximadamente una cuarta o quinta parte de la
densidad original. Por ejemplo, si haces una stout y tu densidad inicial es de 1.054, y si la levadura trabaja
correctamente deberás tener una densidad final de más o menos 1.012.

Para medir la densidad de tu mosto o de tu cerveza vas a requerir lo siguiente:


- Aspersor con alcohol
- Probeta
- Densímetro
- Termómetro
* Hay densímetros que ya tienen un termómetro integrado.

Para tomar una lectura de la densidad específica tendrás que llenar tu probeta con una muestra de tu
mosto o cerveza, para ello recuerda que es muy importante la sanidad. Utiliza el aspersor con alcohol para
sanitizar lo que vayas a utilizar para tomar tu muestra y para rociar tus manos y alrededor del fermentador
cuando lo vayas a abrir, disminuyendo así la posibilidad de que se contamine tu cerveza.

Luego introduce tu densímetro en la probeta y gíralo como pirinola, deja que flote en la muestra y evita
que se pegue a las paredes de la probeta. El valor de la densidad es el que está al nivel de la muestra y no el
que está en la curvita de muestra que se sube un poco al densímetro.

Saca el densímetro y toma la temperatura de la muestra, si estás usando un densímetro con termómetro
sólo sácalo y toma nota de la temperatura. Es importante tomar la temperatura de la muestra porque la
densidad depende de la temperatura, entre más caliente un líquido menos denso es. Como cuando
calientas miel y conforme va aumentando su temperatura se va volviendo menos espesa.

Ya que tomaste las lecturas de densidad específica y de temperatura desecha la muestra, no vale la pena
que por no querer desperdiciar un poco regreses la muestra al fermentador y te arriesgues a contaminar
todo tu lote de cerveza.

Casi todos los densímetros están calibrados para tomar una lectura correcta a 60ºF, que son como
15.556ºC, digamos 16ºC. Entonces si tomas una lectura de la densidad de tu muestra cuando está a 16ºC, el
valor que estás obteniendo es correcto. Si la temperatura es otra vas a tener que sumarle o restarle un
factor de corrección al valor de la densidad que te dio tu densímetro. A continuación, hay una tabla con los
factores corrección correspondientes a cada temperatura. Entonces si por ejemplo la densidad inicial de tu
stout es de 1.054 y tomaste la lectura a 31ºC, la densidad inicial real es 1.058.

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