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Ética, ciencia, evolución y calidad de vida, 4 conceptos que combinados pueden generar preguntas
poderosas como:
¿Se justifica el uso de otras especies vivientes, muy particularmente los animales para un
descubrimiento o avance hacia la sociedad?
¿Qué pasa si la investigación que usa animales para comprobar sus hipótesis no da
resultados y afectó la calidad de vida de estos?
¿La evolución y calidad de vida se ha incrementado y ha requerido el sacrificio de muchos
animales, es ético?
¿Sin el uso de experimentaciones con animales no tendríamos los niveles de bienestar y
calidad de vida actuales? ¿Se ha justificado el sacrificio?
¿Es ético usar los animales como cosas? ¿Acaso esta facilidad de usar animales ha hecho
que no se impulsen otros métodos alternativos en los experimentos?
Pareciera un dilema no fácil de resolver, por un lado la respuesta a la pregunta ¿se puede hacer
ciencia sin experimentación animal? Y del otro ¿es la experimentación con animales un hecho
reprobable?
Asumo la posición de reconocer los avances científicos como inductores de una mejor calidad de
vida, y creo que si para llegar a una vacuna, a un procedimiento, a una terapia que permite la
evolución y bienestar del ser humano se usan los animales para experimentar y poder entregar un
producto de alta confiabilidad, está justificado este método investigativo. Para no sentir
culpabilidad frente a la declaración universal de los derechos humanos, diría que, la ética es
precisamente el respeto de lo humano por lo humano, de las obligaciones que aplicando una
racionalidad moral logren un buen vivir.
Hasta hoy el uso de modelos animales es necesario para validar diversas hipótesis que favorecen
la Biología, esto implica en los investigadores obligaciones éticas, científicas y legales que bajo mi
apreciación deberán seguir de manera rigurosa el principio de las tres R’s: Reemplazo, Reducción
y Refinamiento
Las condiciones y principios para la experimentación animal están dadas, creo que ha personas
científicas, donde su cerebro izquierdo funciona con altos niveles de racionalidad deberá formarse
en toma de conciencia para que una vez se encuentre debidamente justificado y evaluado el
proyecto de investigación, la ética haga parte integral del proyecto y se aplique de manera
escrupulosa los principios establecidos de las tres R’s. (Reemplazar- Reducir – Refinar).
Respuesta a Andrea.
Comparto tu posición, sin embargo te invito a reflexionar sobre el cómo realizar esta
metodología de experiemntación en animales, si bien es cierto la necesidad de hacer
progresar el conocimiento de la biología, también lo es la necesidad de hacer valer la
declaración universal de los derechos de los animales, donde debe considerarse el
reconocimiento por parte de la especie humana de los derechos de la existencia de las
otras especies de animales que constituye el fundamento de la coexistencia de las
especies en el mundo, lo que implica el uso responsable de animales en los proyectos de
investigación. Los avances en biomedicina particularmente en las últimas décadas no
habrían sido posibles sin el uso apropiado de modelos animales,
El compromiso y comprensión de la importancia del bienestar animal debe permear
todos los procedimientos que se desarrollen en un animalario, incluyendo el
entrenamiento del personal para la manipulación apropiada y el diseño de experimentos
con animales de laboratorio. Es en este contexto de responsabilidad institucional que
considero el bienestar animal como el pilar fundamental de las actividades de
investigación animal, de forma que se consiga contribuir al progreso de la ciencia mientras
se mantengan los máximos estándares de buenas prácticas para proteger a los animales
utilizados para fines científicos y de investigación.
De gran importancia sería considerar en tu planteamiento los principios rectores del uso
por parte de los seres humanos de animales sensibles en la investigación científica se
denominados las 'tres erres' (3R- Reemplazar-Reducir-Refinar). Los investigadores
necesitan demostrar por qué no existe ninguna alternativa y qué se va a hacer para
minimizar el número y el sufrimiento de los animales utilizados en experimentos y
ensayos.
Respuesta a Maria Camila
Hola María Camila, la palabra indiscutiblemente con la que inicias tu posición en el foro,
diría que si tiene discusión, te cito la posiciónde Doctor Against Animal Experiment (2018).
“El respeto por la vida de los animales es la razón principal por la que muchas personas
rechazan los experimentos con animales. Pero incluso si se enfoca en los humanos como
la justificación ética de los experimentos con animales, el enfoque es equivocado. No
existe un dilema ético «sufrimiento animal en lugar de sufrimiento humano», sino
abundantes pruebas científicas que evidencian que los experimentos con animales
perjudican a los humanos en lugar de beneficiarlos.”
Se argumenta también resolviendo la pregunta: ¿Por qué todavía se realizan
experimentos con animales?
Es realmente asombroso que un método que está desactualizado y sea demostrablemente
infructuoso haya durado tanto tiempo. En una economía de mercado libre, las tasas de
éxito muy por debajo del uno por ciento, o resultados que incluso podrían superarse
lanzando una moneda, normalmente serían fatales. No es así en el «estándar de oro» que
representan los experimentos con animales; porque esa tradición se remonta a un siglo y
medio y está profundamente arraigada en la mente de la mayoría de los investigadores y,
por lo tanto, también en sus laboratorios.
Los jóvenes científicos, suponiendo que no cuestionen el sistema, automáticamente
«crecen» con experimentos con animales y los dan por sentados.
Y cuando haces referencia al “justo equilibrio” considero que es allí donde la academia
debe intervenir para inculcar y formar a todos los profesionales en la ética como una serie
de obligaciones morales que define lo correcto y lo equivocado en nuestras prácticas y
decisiones. Muchas profesiones tienen un sistema formalizado de prácticas éticas que
ayudan a guiar a los profesionales en el campo y los investigadores deberán tomar
conciencia y practicar con ahínco el concepto de los principios rectores del uso por parte
de los seres humanos de animales sensibles en la investigación científica denominados las
'tres erres' (3R- Reemplazar-Reducir-Refinar).