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María y la cultura mediterránea.

La cultura es un conjunto de valores que son vivenciados durante la historia y en donde se


ponen en práctica estos valores de una forma específica y desde unas costumbres propias. Y
aquí podemos ver que la cultura judía era apenas un 10% en todo el imperio, de forma que
ellos intentaban sobrevivir ante una realidad de opresión y de imponer una cultura sobre la
propia. Sin embargo, la fidelidad a Dio y su cultura, les permitiód a los hebreos mantenerse y
lograr sobre salir a pesar de la influencia que recibía del imperio que los oprimía, al igual que
otras culturas cercanas a ellos.

María vivió dentro de esta realidad y no se tiene una gran información de su vida dentro de esta
experiencia de cultura, los estudios son pocos en torno a María, sin embargo, se entiende que
la fe judía se vive dentro de una cultura y un tiempo histórico es por eso que podemos hacer un
acercamiento a la vida de María. Los estudios sobre Jesús son más voluminosos, pero nos
ayuda evaluar las realidades sociales que vivían en este tiempo y también la experiencia de la
fe en Dios, es por eso que se puede ir conociendo lo que tuvo que vivir María.

Los primeros siglos son una base para la mariología, de forma que se torna una figura más
humana, una mujer fiel y discípula, también se dan algunas herejías donde muestran la
maternidad como una realidad alejada del proyecto de Dios. Es importante que la imagen de
María se mantenga fiel a la doctrina y a la tradición, para no tener una devoción equivocada.

Cuando se habla de maría casi siempre se menciona como un ser en relación, es decir que
pertenece o es parte alguien, en este caso a Dios, María unida a una realidad masculina que le
dé más fuerza o bien unida a Dios. Tanto en la escritura como en los padres de la Iglesia
vemos un rechazo a la participación de la mujer y su liderazgo. María es muchas veces
opacada y su imagen es de una mujer callada y humilde, que no toma liderazgo en el proceso
eclesial.

Dentro de la sociedad no existía una igualdad entre los sexos, se vivía una experiencia de
subordinación, de manera cultural la mujer debía servir a los varones de la familia, es por eso
que las mujeres sin un varón eran vistas como raras o bien peligrosas, tal es el caso de María
Magdalena.

Nos encontramos con María, como madre de Jesús, una mujer callada y que no podía expresar
su alegría y su llanto, es una figura en el evangelio que no hace notar estas experiencias
propias de un ser humano, es decir expresarlas, tal es el caso que puede hablarse de un
desprecio por el sexo femenino y por eso notamos una imagen de María alejada de la realidad
y de la experiencia del amor de Dios.

También la familia era una experiencia cultural muy importante y marcada por la tradición de la
fe en Dios, es por eso que la familia debería vivir según lo que la ley pedía, además de una
estabilidad económica y de poder, también la honorabilidad de los varones de la familia sobre
todo la cabeza de esta. Es por eso que se intenta mantener ese prestigio y sucede en el caso
de los hombres que aparecen en la Escritura, es decir en el caso de Jesús, se busca que no
pierda su honorabilidad y que sea un hombre como tal, pero no es así para el sistema opresor y
las elites religiosas de ese tiempo.

Dentro de un sistema que generaba opresión, desigualdad y que era de jerarquía de poder,
encontramos que todo se piensa desde esa experiencia, la economía, la política y la cultura, de
esta forma también llega a ser cooptada, por decirlo así, la religión, y por eso se piensa en una
estructura religiosa judía con poder y otros sometidos a ella, aquí entra el tema de las mujeres
judías, que, oprimidas por el sistema político y cultural, también la religión las tenía
subordinadas.

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