Principales ingredientes de los

productos de limpieza
Desde la revolución industrial la limpieza ha evolucionado rápidamente,
llevándonos a utilizar de manera regular como mínimo 10 productos de limpieza
diferentes en el hogar y en la vida diaria.

Estos productos de limpieza de origen industrial son una mezcla de varias

sustancias químicas, que al combinarlas aumentan sus propiedades haciendo que
funcionen sin importar la suciedad, la superficie, el espacio o la dureza del agua
con la que se limpia.
Tensoactivos
Conocidos como surfactantes, reducen la tensión superficial entre
líquido-líquido y líquido-sólido, así logran que el agua y el aceite se
puedan mezclar, al romper la cohesión de las moléculas de cada líquido.
El mayor atractivo de estos es su doble polaridad (sustancias anfifílicas),
que les dan afinidad simultánea por el agua (hidrófila) y por el aceite
(lipófila).

Los tensoactivos aportan: detergencia, resistencia a la dureza del agua,

solubilidad, dispersión, emulsión (espuma aire y agua) y humectación.
Fosfatos
Son tensoactivos aniónicos, afines con el agua (hidrófilos).
Son añadidos a los detergentes para:
Contrarrestar la dureza del agua, suavizarla.
Maximizar la eficacia de la limpieza, evitando que las partículas
de suciedad vuelvan a depositarse en la ropa.

El más común es el tripolifosfato de sodio (TFPS), coayudante,

tensoactivo auxiliar y principal aditivo de los detergentes, jabones y
productos de higiene que brinda estabilidad en el almacenamiento,
evitando compactación y asentamiento.
Cloro
Llamado blanqueador (hipoclorito de sodio) es comúnmente
usado para:
Desinfectar alimentos, superficies, pisos, baños, etc.
Mantener el ambiente sin gérmenes, libre de virus, bacterias y
hongos a bajas concentraciones.
Blanquear la ropa y eliminar manchas.
Eliminar olores desagradables.
Potabilizar el agua para consumo humano.
Se descompone rápidamente en sal y agua, por lo cual se puede verter
por los desagües y alcantarillas.
No debe ser mezclado con alcohol, vinagre y amoniaco, afectan la salud
humana.
Amoníaco
Compuesto químico a base de nitrógeno, producido por la
naturaleza y el hombre; utilizado en la limpieza de superficies
para quitar la suciedad y dejar los espacios brillantes, relucientes
y sin rayones.

Se encuentra en limpiadores de vidrios y de superficies duras,

desinfectantes, desengrasantes y quitamanchas.

El amoníaco es peligroso por su volatilidad. Mezclado con cloro genera

cloramina, un gas irritante y tóxico.
Hidróxido de sodio
Sustancia química conocida como soda cáustica (lejía, NaOH)
muy versátil, utilizada en una gran variedad de procesos de
fabricación, al ser un coproducto de la producción del cloro.
Se utiliza en productos de limpieza domésticos como
limpiadores de hornos y desagües, jabones y detergentes.

Su función es hacer que las grasas y aceites se disuelvan en el agua.

Fragancias sintéticas
Elaboradas con ingredientes químicos de síntesis en laboratorio.
Se utilizan en los productos de limpieza para:
Mejorar la experiencia sensorial de uso, proporcionar un olor
agradable y generando reconocimiento de los productos.
Ocultar o enmascarar el olor de algunos de sus ingredientes.
Se encuentran principalmente en:
Detergentes.
Suavizantes (ropa y telas).
Ambientadores y perfumes de espacios y alfombras.

Suelen ser un factor importante para los consumidores, al estar

asociadas a la limpieza.
 Ftalatos
Grupo de 80 compuestos químicos sintéticos
(ésteres de anhídrido ftálico), utilizados por su versatilidad
y bajo precio. Se usan principalmente por sus propiedades como
fijadores de aromas artificiales, conservantes y plastificantes.
Suelen encontrarse en ambientadores, detergentes, jabones, suavizantes
y desodorantes.
Por derechos de autor y leyes de propiedad, en las etiquetas no aparecen
los ftalatos, sin embargo, es muy probable si dice “aroma o perfume
artificial”.

La OMS los considera una “Amenaza Global”.

http://www.daphnia.es/revista/62/articulo/1230/Ftalatos-los-omnipresentes-silenciosos
Desinfectantes
Productos químicos cuya función principal es eliminar hongos, bacterias
y virus. 

Se encuentran típicamente en detergentes, jabones, toallitas húmedas de

limpieza y productos para aseo de baños.

Se consideran productos tóxicos para la salud, debido a que su uso continuo,

excesivo e innecesario genera cambios en la flora intestinal y el desarrollo de
bacterias resistentes a los antibióticos o “superbacterias”.

Su uso excesivo está ligado al miedo a los gérmenes.

Triclosán
Producto químico biocida (eliminador de microorganismos), se caracteriza
por su olor a alcohol. Está presente en más de 2.000 productos de cuidado
e higiene personal, textiles y plásticos.

Es un potente agente antibacteriano y fungicida, se encuentra en productos

de limpieza que eliminan bacterias, como jabones de manos,
lavavajillas líquidos y detergentes.

También en productos cosméticos, como pastas de dientes y espumas de afeitar.

Sus propiedades antibacterianas hacen que actúe como conservante.

Formaldehído
Producto químico gaseoso incoloro e inflamable a temperatura ambiente,
conocido como óxido de metileno o formol, empleado como bactericida o
conservante que se encuentra en productos cosméticos e higiene personal,
como desodorantes, champús, geles de baño, maquillaje, etc.

También esta en productos de limpieza para el hogar, como jabones, detergentes,

desinfectantes y ambientadores.

Es utilizado para combatir y/o evitar las manchas, resistir la humedad

(conservantes) y evitar las arrugas.
Amonios cuaternarios (Quats)
Son sales de aminas cuaternarias catiónicas, de carga positiva independiente
del pH de la solución. Son utilizadas como:
Desinfectantes y espermicidas: eliminan gérmenes, virus, bacterias, hongos y
sus hifas (huevos).
Agentes tensoactivos y detergentes: limpiadores domésticos antibacterianos
en spray y limpiadores para el baño.
Suavizantes de telas.
Agentes para evitar la estática, champús.

Tienen una alta estabilidad y una acción residual superior, por lo que continúan
eliminando bacterias por más tiempo aún en presencia de algo de suciedad.
Solventes
Sustancias químicas en las que se diluye un soluto de química diferente
(sólido, líquido o gas), con el fin de formar una mezcla homogénea que se conoce
como solución. Son el componente de mayor cantidad en una solución.

El agua es el disolvente universal, por la gran cantidad de sustancias en las que

actúa como disolvente.

En los productos de limpieza se emplean frecuentemente los éteres de glicol,

especialmente el 2-butoxietanol, líquido incoloro con aroma dulce.
Colorantes
Sustancias químicas capaces de producir una múltiple gama de tintes,
utilizados para dar color. Deben ser estables ante factores fisicoquímicos como
la luz, el agua y los agentes oxidantes.

Pueden ser de origen vegetal, animal o mineral y actualmente los más empleados
son los sintéticos, provenientes de la industria química.

En las etiquetas de los productos de limpieza típicamente se encuentran como:

MEA: monoetalomina o etalonamina.
DEA: dietanolamina.
TEA: trietanolamina.