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GEOMORFOLOGÍA E HIDRÁULICA FLUVIAL Dr. Ing. Pedro A.

Basile

CAPÍTULO 3
PROPIEDADES DE LOS SEDIMENTOS

1. INTRODUCCIÓN
2. TAMAÑO
2.1 Determinación de tamaños (análisis granulométricos)
2.1.1 Tamizado
2.1.2 Sedimentación
2.2 Representación de análisis granulométricos
2.3 Parámetros estadísticos de las distribuciones granulométricas
3. FORMA
4. DENSIDAD
5. VELOCIDAD DE CAÍDA
6. POROSIDAD
7. DENSIDAD GLOBAL IN SITU
8. ÁNGULO DE REPOSO
9. BIBLIOGRAFÍA

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CAPÍTULO 3
PROPIEDADES DE LOS SEDIMENTOS

1. INTRODUCCIÓN
El material sólido granular que se encuentra en el lecho de los ríos aluviales es generalmente
denominado sedimento. El Subcomité de Terminología Sedimentológica de la American
Geophisical Union (AGU) ha adoptado la siguiente definición:

“Fragmentos de material transportado por, suspendido en, o depositado por agua o aire, o
acumulado en los lechos por otros agentes naturales; cualquier acumulación detrítica, tal como
loess”.

Esto no comprende hielo, madera o material orgánico que flota en superficie. El sedimento es
también denominado aluvión (alluvium): “terreno formado por la acumulación de cieno, arena,
etc., debido a la acción del agua”.
Los procesos de erosión, transporte, deposición y consolidación de sedimentos, debido a la
acción del agua, no dependen solo de las características del flujo hídrico (representadas
sustancialmente por la tensión de corte sobre el fondo) sino que dependen también de las
propiedades del mismo sedimento.
Las propiedades de los sedimentos pueden dividirse en propiedades individuales (de cada
partícula) tales como tamaño, forma, densidad, velocidad de caída, etc. y propiedades grupales
(de un conjunto de partículas) tales como composición granulométrica, porosidad, densidad
global in situ y ángulo de reposo.

2. TAMAÑO
Las partículas de sedimento que conforman los lechos de los ríos aluviales poseen diferentes
formas, desde redondeadas hasta chatas y alargadas. Distintas definiciones de “diámetro” como
índice de tamaño son posibles:

Diámetro de tamiz: es la abertura de la malla cuadrada del tamiz a través de la cual puede
pasar una partícula de sedimento.
Diámetro de sedimentación: diámetro de una esfera de igual densidad y velocidad de caída
en el mismo fluido y a la misma temperatura.
Diámetro nominal: diámetro de una esfera de igual volumen.
Dimensiones triaxiales: considerando la partícula como un elipsoide se definen tres ejes
perpendiculares. Las longitudes medidas sobre los respectivos ejes son: a (mayor), b
(intermedia) y c (menor). Se adopta b como índice de tamaño de la partícula.

Una clasificación de partículas de acuerdo al tamaño fue realizada por Udden (1914) y
modificada por Wentworth (1922). Tal clasificación se presenta en la Tabla 1. La misma ha sido
adoptada por el Subcomité de Terminología Sedimentológica de la AGU. Para arenas y

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sedimentos más gruesos el diámetro d se expresa generalmente en milímetros (mm) y para


sedimentos finos (d<62.5 µm) en micrones (1 µm = 10-3 mm).

Krumbein (1934) define la escala sedimentológica phi (φ) como:

d = 2 −φ (1)

Aplicando logaritmo a ambos miembros de la ec. (1) tenemos:

log10 d
φ = − log 2 d = − (2)
log10 2

con d en mm. En la escala φ los rangos de d para las diferentes denominaciones se convierten
en números enteros constantes e iguales a una unidad φ (ver Tabla 1). La escala φ es de gran
utilidad para la representación gráfica de las distribuciones granulométricas y para la
determinación de sus parámetros estadísticos.

Tabla 1. Escala de Udden-Wentworth.


Denominación d (mm) φ µm)
d (µ
Cantos rodados muy grandes 4096 – 2048 -12 a -11
Cantos rodados grandes 2048 – 1024 -11 a -10
Cantos rodados medianos 1024 – 512 -10 a -9
Cantos rodados pequeños 512 – 256 -9 a -8
Guijarros grandes 256 – 128 -8 a -7
Guijarros pequeños 128 – 64 -7 a -6
Grava muy gruesa 64 – 32 -6 a -5
Grava gruesa 32 – 16 -5 a -4
Grava mediana 16 – 8 -4 a -3
Grava fina 8–4 -3 a -2
Grava muy fina 4–2 -2 a -1
Arena muy gruesa 2–1 -1 a 0
Arena gruesa 1 – 1/2 0 a 1
Arena mediana 1/2 – 1/4 1 a 2
Arena fina 1/4 – 1/8 2 a 3
Arena muy fina 1/8 – 1/16 3 a 4 125 – 62,5
Limo grueso 1/16 – 1/32 4 a 5 62,5 – 31,3
Limo mediano 1/32 – 1/64 5 a 6 31,3 – 15,6
Limo fino 1/64 – 1/128 6 a 7 15,6 – 7,8
Limo muy fino 1/128 – 1/256 7 a 8 7,8 – 3,9
Arcilla gruesa 1/256 – 1/512 8 a 9 3,9 – 1,95
Arcilla mediana 1/512 – 1/1024 9 a 10 1,95 – 0,98
Arcilla fina 1/1024 – 1/2048 10 a 11 0,98 – 0,49
Arcilla muy fina 1/2048 – 1/4096 11 a 12 0,49 – 0,24

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2.1 Determinación de tamaños (análisis granulométricos)

• Cantos rodados, guijarros grandes: medición directa.


• Gravas, arenas: tamizado.
• Arena muy fina, limo, arcilla: sedimentación, análisis microscópicos.

2.1.1 Tamizado
El tamizado puede ser aplicado para gravas y arenas haciendo pasar la muestra de sedimentos
por una serie de tamices. En la Tabla 2 se presenta la serie de tamices de la U.S.STD (United
States Standard Sieves) adoptada por la ASTM y especificada en ASTM E-11.

En la escala Udden-Wenworth d se incrementa siguiendo una serie geométrica en razón 2. En la


serie de tamices ASTM las aberturas de malla aumentan hasta 5.657 mm siguiendo también una
serie geométrica pero en razón 21/4 .

Tabla 2. Serie de tamices ASTM.


Abertura de Tamiz Abertura de Tamiz Abertura de
Tamiz
malla (mm) N° malla (mm) N° malla (mm)
4" 101,6 3.5 5,657 35 0,500
3½" 88,9 4 4,757 40 0,420
3" 76,2 5 4,000 45 0,354
2½" 63,5 6 3,364 50 0,297
2" 50,8 7 2,828 60 0,250
1½" 38,1 8 2,378 70 0,210
1" 25,4 10 2,000 80 0,177
7/8" 22,2 12 1,682 100 0,149
3/4" 19,1 14 1,414 120 0,125
5/8" 15,9 16 1,189 140 0,105
1/2" 12,7 18 1,000 170 0,088
3/8" 9,52 20 0,841 200 0,074
5/16" 7,94 25 0,707 230 0,0625
1/4" 6,35 30 0,595 270 0.0526

En la Tabla 3 se presentan los tamices de mallas cuadradas especificados en la Norma IRAM


1501-2.

Tabla 3. Serie de tamices IRAM.


Serie principal R 20/3
(µm) 180 - 250 - 355 - 500 - 710
Abertura
(mm) 1- 1,4 - 2 - 2,8 - 4 - 5,6 - 8 - 11,2 - 16 - 22,4 - 31,5 - 45 - 63
Serie suplementaria R 40/3
(µm) 150 - 300 - 600
Abertura
(mm) 1,18 - 2,36 - 4,75 - 9,5 - 13,2 - 19 - 26,5 - 37,5 - 53 - 75

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Algunas cuestiones que se deben considerar al realizar el análisis granulométrico por tamizado
son:

• No sobrecargar los tamices: partículas más pequeñas que la abertura del tamiz podrían
quedar retenidas por bloqueo. Se recomienda (Shergold, 1946):

Tabla 4
Peso retenido máximo (gramos)
Abertura de Tamiz ASTM
malla (mm) N° Serie 2 Serie 21/2 Serie 21/4
2,378 8 150 75 38
1,189 16 100 50 25
0,595 30 70 35 18
0,297 50 50 25 12
0.150 100 35 18 9
0.074 200 25 12 6

• Muestra mínima:

Tabla 5
d máximo (mm) Muestra mínima (kg)
5 0,50
25 10,0
50 20,0
80 32,0

• Tiempo de tamizado: con tamizadoras automáticas se emplean de 10 a 20 minutos.

2.1.2 Sedimentación
Los métodos basados en el proceso de sedimentación se aplican principalmente para
sedimentos finos, φ < 4 (62.5 µm), considerando como límite inferior el valor de 0.5 µm debajo
del cual el movimiento Browniano de las moléculas de agua comienza a afectar la decantación
de las partículas. Se utilizan distintos métodos e instrumentos tales como el método del
hidrómetro, el método de la pipeta, tubos de acumulación visual (V.A. Tube), etc. (ASCE, 1969).

Método del hidrómetro


El método del hidrómetro se basa en la ley de Stokes, la cual vincula la velocidad de una esfera
que cae en un fluido homogéneo de extensión infinita con el diámetro (la velocidad de caída
terminal de una partícula se define en el punto 5).

El método consiste en dejar decantar una muestra de sedimentos cuantificando, a diferentes


tiempos, el peso de las partículas de un determinado tamaño que se encuentran en suspensión.
Aplicando la ley de Stokes se obtiene el diámetro equivalente de la partícula, que es el diámetro
de una esfera, de la misma densidad, que sedimenta con la misma velocidad de la partícula real.

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La peso de las partículas en suspensión se determina mediante mediciones con un hidrómetro.


Este instrumento es un densímetro cuyas lecturas corresponden a la cantidad de sedimentos en
suspensión en g/l. El hidrómetro estandarizado para este tipo de análisis es el ASTM 152-H.

Aspectos a considerar:
• Total dispersión de las partículas (no se debe presentar floculación).
• Proceso de sedimentación a temperatura constante.
• Concentración diluida (25-50 g/l) para que no se afecte la viscosidad.

Método de la pipeta
Consiste en determinar el peso de sólidos en las muestras (20 ml aprox.) que se extraen
mediante pipeta de una suspensión, inicialmente uniforme, a tiempos previamente calculados y
en un punto cuya distancia (H) desde la superficie de la suspensión sea conocida. Con la ley de
Stokes se obtiene el diámetro. Si se lo realiza con rigurosidad el método de la pipeta puede
competir en exactitud con el método del hidrómetro.

2.2 Representación de análisis granulométricos


Los datos de los análisis granulométricos se presentan en un gráfico semilogarítmico. En
ordenadas se representa la fracción acumulada o el porcentaje acumulado en peso de material
más fino que un determinado diámetro y en abscisas el diámetro d en escala logarítmica como
se muestra en la Figura 1.

La misma distribución de la Figura 1 puede representarse en la escala sedimentológica phi (φ)


como se muestra en la Figura 2. Se observa que φ en escala lineal es equivalente a d en escala
logarítmica ya que φ está relacionado linealmente con log10 d a través de la ec. (2).

0,8

0,6
F(-)

0,4

0,2

0
0,01 0,1 1 10

d (mm)
Figura 1. F versus d en escala logarítmica.

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0,8

0,6
F(-)

0,4

0,2

0
-1 0 1 2 3 4 5

Figura 2. F versus φ en escala lineal.

2.3 Parámetros estadísticos de las distribuciones granulométricas

Consideremos una función discreta de distribución acumulada de los diámetros F(φj) como la
representada en la Figura 2. Supongamos que se definen N clases granulométricas. Para la
clase i-ésima es posible determinar un diámetro representativo en la escala phi φi y su fracción
en peso asociada fi como:

φi = φ j + 1 / 2 = 0.5 (φ j + φ j +1 ) (3)

fi = F(φ j ) − F(φ j +1 ) (4)

donde el índice j está asociado a los extremos de cada clase (j=0,N), mientras i es el índice que
identifica cada clase (i=1,N).

N
Se recuerda que: ∑ fi = 1
i =1

Los parámetros estadísticos más importantes para la caracterización sedimentológica se


determinan mediante las siguientes expresiones:

N
• Media: φm = ∑ φi fi (5)
i =1

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12
N 2 
• Desvío estándar: σ = ∑ (φi − φm ) fi  (6)
 i =1 

N
∑ (φi − φm )
3
• Asimetría: sk = fi (7)
i =1

El diámetro para el cual un porcentaje x del material es más fino (con x igual al 50, 90, etc.) es
obtenido mediante la siguiente expresión:

d x = 2 − φx (8)

El d50 es la mediana de la distribución y se utiliza generalmente para calcular el transporte


esquematizando el lecho como monogranular. El d90 por ejemplo es generalmente utilizado
para evaluar la resistencia de grano y para calcular la altura de la capa activa o de mezcla en el
caso fondo plano.

El diámetro medio aritmético en función de los diámetros en escala phi puede ser expresado
como:

N N
dm = ∑ di fi = ∑ 2− φ fi i
(9)
i =1 i =1

El diámetro medio geométrico dg, el desvío estándar geométrico σg y la asimetría geométrica skg
se definen respectivamente mediante:

N
log10 d g = ∑ fi log10 di (10)
i =1

12
N 2 
log10 σ g = ∑ (log10 di − log10 d g ) fi  (11)
 i =1 

N
∑ (log10 di − log10 dg )
3
log10 s k g = fi (12)
i =1

Por lo tanto, dg , σg y skg pueden ser obtenidos a través de los respectivos valores definidos en
la escala phi mediante las ecuaciones (1), (5), (6) y (7) como:

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dg = 2 − φm (13)

σg = 2σ (14)

3s
s k g = 10 − (log10 2) k
(15)

Para sedimentos perfectamente uniformes resulta σ=0 y por lo tanto σg = 1. En la práctica,


sedimentos con σg < 1.4 pueden ser considerados como uniformes. Además, para distribuciones
perfectamente simétricas sk=0 y por lo tanto skg=1.

La medida adimensional de la asimetría de una distribución puede ser expresada mediante la


relación entre el cuadrado de la asimetría y la potencia sexta del desvío estándar, en escala phi
ésta se expresa como:
β= sk2/σ6 (16)

La distribución granulométrica de un lecho arenoso muestra una forma típica de S, con desvío
estándar geométrico menor que 2 aproximadamente y asimetría despreciable. La misma puede
ser generalmente representada mediante la ley de distribución de probabilidad normal en la
escala phi (log-normal en d). Efectivamente, en las Figuras 3 y 4 se presentan dos distribuciones
observadas, típicas de ríos de lechos arenosos, como es el caso del río Paraná (Km 454) y del
río Brenta (Ponte di Brenta, Italia), a las cuales se les ha ajustado una distribución log-normal.

Para una distribución granulométrica normal en la escala phi (log-normal en d) la mediana y el


diámetro medio geométrico son idénticos.

0,8

0,6
F(-)

0,4

0,2 log-normal
observada
0
0,01 0,1 1 10
d (mm)

Figura 3. Distribución granulométrica de sedimentos del lecho. Río Paraná (Argentina) en


progresiva + 454 km. (Basile, 2002).

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0,8

0,6
F(-)

0,4

0,2 log-normal
observada
0
0,01 0,1 1 10
d (mm)

Figura 4. Distribución granulométrica de sedimentos del lecho. Río Brenta (Italia) en Ponte di
Brenta, S15V1. (Basile, 1991).

Para una distribución granulométrica normal o Gaussiana el φm más el valor de σ es igual al φ84,
por simetría, φm menos el valor de σ es igual al φ16. Por lo tanto, en este caso son válidas las
siguientes relaciones:

1
φm = (φ84 + φ16 ) (17)
2

1
σ= (φ84 − φ16 ) (18)
2

Elaborando algebraicamente las relaciones anteriores con la ayuda de las ecuaciones (8), (13) y
(14) se obtiene:

dg = d84 d16 (19)

d84
σg = (20)
d16

Es necesario señalar que las expresiones (17) a (20) son válidas para el caso particular de
distribuciones perfectamente Gaussianas.

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En la naturaleza es difícil encontrar distribuciones perfectamente Gaussianas, sobre todo si se


consideran lechos constituidos por arenas, gravas y material grueso (granulometrías
extendidas). En efecto, en éstos casos, las distribuciones granulométricas se apartan
considerablemente de las típicas curvas S simétricas log-normales de los lechos arenosos
(Basile, 2001). Tales distribuciones muestran una forma cóncava hacia arriba, excepto en la
zona de material grueso donde dicha tendencia se invierte (ver distribuciones tipo G en Figura
5). De este modo, las distribuciones son fuertemente asimétricas y no responden a log-
normalidad.

Además, algunas distribuciones granulométricas de lechos constituidos por mezclas de arena y


grava son bimodales, evidenciando la ausencia de diámetros en el rango de 1-10 mm
aproximadamente (ver distribuciones tipo B en Figura 5).

1 S1
S2

0,8 S3
S4
G1
0,6 G2
F(-)

G3
G4
0,4
G5
B1
0,2 B2
B3
B4
0
0,01 0,1 1 10 100 1000
d (mm)
Figura 5. Distribuciones granulométricas. Lechos arenosos (tipo S), lechos gravo-arenosos
unimodales (tipo G) y bimodales (tipo B). (Basile, 2001).

Para determinar los parámetros estadísticos de las distribuciones se recomienda utilizar el


procedimiento de validez general, es decir, discretizar la distribución granulométrica y aplicar las
ecuaciones (5) a (7) y (13) a (15).

La variabilidad espacial de las características sedimentológicas de lechos arenosos es


despreciable cuando se las compara con la que muestran los lechos de material predominante
más grueso. Por ejemplo, en la Figura 6 se presentan las distribuciones de sedimentos del lecho
del río Paraná (Argentina) en cuatro secciones, se observa que en un tramo de 3 km el d50 varía
entre 0.28 mm y 0.32 mm.

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0,8

0,6
F(-)

0,4 + 454 km
+ 453 km
0,2 + 452 km
+ 451 km
0
0,01 0,1 1 10
d (mm)
Figura 6. Distribuciones granulométricas de sedimentos del lecho. Río Paraná (Argentina).
Progresiva 0 km: desembocadura en Río de la Plata. (Basile et al., 2002).

Por otra parte, en la Figura 7 se muestran las distribuciones granulométricas del lecho en dos
secciones del río Mallero (Italia), se observa que en un tramo de 4 km el d50 varía entre 45 mm
y 205 mm.

1
+ 6 km
0,8 + 2 km

0,6
F(-)

0,4

0,2

0
0,1 1 10 100 1000
d (mm)
Figura 7. Distribuciones granulométricas de sedimentos del lecho. Río Mallero (Italia).
Progresiva 0 km: desembocadura en río Adda. (Basile, 2001).

No solo la variabilidad espacial en sentido longitudinal es importante en ríos con lechos de


sedimentos gruesos. También en vertical se observa la presencia de un estrato superficial
(pavement) de composición más gruesa que el sustrato (subpavement). En la Figura 8 se
presentan las distribuciones del pavement y del subpavement para el Oak Creek (Milhous,
1973), se observa que el d50 del pavement es 55 mm mientras el del subpavement 20 mm.

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1
Pavement
0,8 Subpavement

0,6
F(-)

0,4

0,2

0
0,1 1 10 100 1000
d (mm)

Figura 8. Distribuciones granulométricas de sedimentos del lecho. Oak Creek, Oregon (EE.UU).
(Milhous, 1973).

Los ríos aluviales con lechos de granulometrías extendidas tales como el Mallero o el Oak Creek,
son típicos de áreas geográficas que presentan elevados gradientes topográficos. En cambio, los
ríos aluviales con lechos predominantemente arenosos, como el río Paraná y el río Brenta, son
típicos ríos de llanura, caracterizados por una baja pendiente topográfica.

En las distribuciones granulométricas que se han presentado se observa que los sedimentos
finos en el rango de arenas muy finas, limos y arcillas son prácticamente inexistentes en el
lecho. Sin embargo, dichos sedimentos finos contribuyen a la formación de diferentes
macroestructuras geomorfológicas de los sistemas fluviales tales como islas, planicies de
inundación, formaciones deltaicas, etc., también se encuentran en abundancia en el fondo de
estuarios, en los embalses, etc.

3. FORMA
La forma de la partícula es importante. Una partícula chata tendrá una velocidad de
sedimentación menor que la de una partícula esférica y además será más difícil de transportar
por el flujo hídrico.
El factor de forma se define como:
c
SF = (21)
ab

donde a, b y c son las dimensiones triaxiales definidas en el punto 2: a (mayor), b (intermedia)


y c (menor). Para una esfera SF=1. Para arenas naturales SF ≈ 0,7.

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4. DENSIDAD
Los sedimentos han sido originados por la desintegración mecánica o química de roca. Además,
algunos sedimentos son de origen orgánico. Los sedimentos presentes en ambientes fluviales y
costeros con tamaños mayores que el de los limos han sido producidos principalmente por
desintegración mecánica, incluyendo fractura en fragmentos más pequeños y abrasión. Por otra
parte, los minerales de arcilla son producidos principalmente por acción química y son diferentes
a los demás sedimentos en muchos aspectos, ya que exhiben cohesión lo cual los hace más
resistentes a la erosión, tienen la capacidad de adsorber agua lo cual significa que la porosidad
de los depósitos de arcilla pueden variar fuertemente en el tiempo, etc..

• Arcilla: fragmentos microscópicos de feldespatos y micas. Los cuatro principales minerales


arcillosos son: caolinita, ilita, montmorillonita y clorita.
• Limos: sílices.
• Arenas: cuarzo.
• Gravas, guijarros, cantos rodados: fragmentos de roca original.

La densidad de la mayor parte de las partículas de sedimentos naturales varían entre límites
muy estrechos. Debido a que en el sedimento natural predomina el cuarzo, el valor promedio de
la densidad puede considerarse igual a ρs=2650 kg/m3 (gravedad específica: s=2,65). Minerales
de arcilla varían entre 2400-2700 kg/m3. Algunas veces es posible encontrar minerales pesados
como magnetita, hematita, etc.

Tabla 6. Densidades absolutas del material sólido.


Material ρs (kg/m3)
Montmorillonita 2400
Illita 2600
Caolinita 2600
Cuarzo 2650
Calcita 2700
Basalto 2800
Biotita 3000
Magnetita 5170
Hematita 5200

5. VELOCIDAD DE CAÍDA

La velocidad de caída de una partícula de sedimento es importante en los estudios de


suspensión y sedimentación. La velocidad de caída depende entre otros factores de Re, de SF,
de la concentración y de la turbulencia.

La velocidad de caída terminal en agua quieta queda definida a través de la ecuación que
equilibra la fuerza hacia abajo debido al peso sumergido de la partícula:

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π d3
Fg = g(ρ s − ρ w ) (22)
6

con la fuerza de resistencia opuesta a la anterior, que de acuerdo a Newton puede escribirse
como:

π d2 w2
FD = C D ρw s (23)
4 2

donde CD es el coeficiente de resistencia y ws es la velocidad de caída de la partícula.

Igualando (22) y (23) y explicitando ws se obtiene:

12
 4
ws =  (s − 1) g d (24)
 3 CD 

El coeficiente CD depende del factor de forma SF y del número de Reynolds asociado a la


velocidad de caída: Re = ws d/ν.

Las ecuaciones de Navier-Stokes pueden ser resueltas considerando el flujo laminar alrededor
de una esfera y despreciando los términos de inercia (bajos Re). La solución da la siguiente
expresión para la fuerza de resistencia viscosa:

F = 3 π d µ ws (25)

24 ν 24
Igualando (23) y (25) se obtiene: CD = = (26)
w s d Re

Reemplazando (26) en (24) se obtiene la ley de Stokes, válida para partículas con d
aproximadamente menor que 100 µm (d<0,1 mm):

1 (s − 1) g d2
ws = (27)
18 ν

Fuera del rango de Stokes se pueden utilizar las siguientes expresiones (Van Rijn, 1984):

Para d variando entre 0,1 mm < d <1 mm:

ν   
12
0.01 (s − 1) g d3  
w s = 10  1 +  − 1 (28)
d ν2  

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Para d>1 mm:

w s = 1.1 [(s − 1) g d]
12
(29)

La presencia de una gran cantidad de partículas disminuirá la velocidad de caída de una


partícula individual. Por otra parte, un aglomerado de partículas (floc) tendrá una velocidad
mayor. La influencia de la concentración sobre la velocidad de caída fue analizada mediante
experimentos sistemáticos realizados por Richardson y Zaki (1954), obteniendo:

w s , m = w s (1 − C s )
α
(30)

donde ws,m es la velocidad de caída de una partícula en una suspensión con concentración
volumétrica Cs.

El exponente α es función de Re asociado a ws como se muestra en la Tabla 7:

Tabla 7
Re=ws d/ν ν α
< 0,2 4,65
0,2 – 1 4,35 Re-0,03
1 – 500 4,45 Re-0,1
>500 2,39

El coeficiente α es levemente dependiente de SF pero esto puede ser despreciado. Para


sedimentos finos, una concentración en volumen del 2% provoca una reducción en la velocidad
de caída de aproximadamente 10 %.

6. POROSIDAD

La porosidad p se define como la relación entre el volumen de vacíos Vv y el volumen total Vt:

Vv V − Vs V
p= = t =1− s (31)
Vt Vt Vt

donde se ha utilizado la definición de volumen total como suma del volumen sólido Vs y el
volumen de vacíos: Vt=Vs+Vv .

La relación de vacíos e es la relación entre el volumen de vacíos y el volumen sólido:

Vv Vv
e= = (32)
Vs Vt − Vv

La porosidad y la relación de vacíos se relacionan mediante la siguiente expresión:

PROPIEDADES DE LOS SEDIMENTOS 54


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p
e= (33)
1−p

Si un determinado volumen sólido, transportado por la corriente hídrica, se deposita en el lecho


del río, el volumen total depositado debe calcularse considerando que parte del mismo estará
formado por vacíos. De (31) se obtiene:

Vs
Vt = (34)
(1 − p)

La porosidad es influenciada por la distribución granulométrica, la forma de las partículas, las


condiciones de deposición y la forma de consolidación. Valores orientativos de p se presentan en
la Tabla 8. En el caso de arenas la porosidad asume valores comprendidos entre 0,35 y 0,45. En
el caso de gravas, partículas más pequeñas ocupan los vacíos y la porosidad puede descender
hasta 0,2 aproximadamente. Depósitos recientes de material fino, como por ejemplo limos y
arcillas, tienen porosidades elevadas inicialmente pero a medida que transcurre el tiempo
tienden a consolidarse bajo su propio peso, de manera que la porosidad disminuye con el
tiempo.

Tabla 8. Porosidad.
Denominación sedimento p
Grava gruesa 0,18
Grava mediana 0,23
Grava fina 0,33
Arena gruesa 0,35
Arena mediana 0,42
Arena fina 0,44
Limos 0,54

Komura (1961) obtuvo la siguiente expresión para la porosidad de sedimentos saturados no


consolidados:

−0 ,21
p = 0,245 + 0,14 d50 (35)

donde d50 se expresa en mm, (35) se determinó para valores: 4x10-4 mm < d50 < 80 mm.

7. DENSIDAD GLOBAL IN SITU

La densidad global in situ de sedimentos depositados, ρb , está vinculada a la porosidad. A partir


de (34) se puede demostrar que:

ρb = (1 − p ) ρ s (36)

PROPIEDADES DE LOS SEDIMENTOS 55


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La densidad global in situ juega un rol importante en la determinación de la vida útil de un


embalse que será gradualmente colmatado por sedimentos. Uno de los factores principales que
influencian la porosidad y por lo tanto a ρb, es la forma de consolidación. En un embalse la
consolidación de los depósitos de sedimentos será afectada por las reglas de operación del
embalse.

Una relación empírica para estimar la densidad global in situ de sedimentos depositados en
embalses fue propuesta por Lane y Koelzer (1953):

ρb (t) = ρ b1 + a log t (37)

donde t: tiempo en años, ρ b1 : densidad global in situ inicial después de un año de


consolidación (kg/m3) y a: coeficiente de consolidación. En la Tabla 9 se presentan los valores
de ρb1 y de a recomendados por Lane y Koelzer.

Tabla 9
Arena Limo Arcilla
Operación del embalse
ρ b1 a ρ b1 a ρ b1 a
Sedimento siempre sumergido 1500 0 1050 90 500 250
Normalmente moderados
descensos de nivel
1500 0 1185 45 750 170
Normalmente considerables
descensos de nivel
1500 0 1275 15 950 100
Normalmente vacío 1500 0 1320 0 1250 0

Si la composición del sedimento, en términos de porcentaje o fracción de arena, limo y arcilla,


es conocida se puede calcular el valor medio ponderado de ρb1 y a.

Lara y Pemberton (1963) analizaron 1316 muestras y obtuvieron valores ligeramente diferentes
de ρb1 (ver Tabla 10). Fue utilizada la siguiente clasificación:

Arcilla: d < 4 µm / Limo: 4 µm < d < 62,5 µm / Arena: d > 62,5 µm.

Tabla 10
Tipo Operación del embalse ρb1 (kg/m3)
Arcilla Limo Arena
I Sedimento siempre sumergido 420 1120 1550
Moderados a considerables
II descensos de nivel
560 1135 1550
III Normalmente vacío 640 1150 1550
IV Lecho del río 960 1170 1550

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Murthy y Banerjee (1976) analizaron 832 muestras de embalses en India con operación tipo II y
obtuvieron los siguientes valores de ρb1: arcilla: 561 kg/m3, limo: 866 kg/m3, arena: 1506 kg/m3.
Los resultados no pueden ser comparados con los de Lara y Pemberton porque la división entre
arena y limo fue realizada en 20 µm.

8. ÁNGULO DE REPOSO

Se denomina ángulo de reposo o ángulo de fricción al ángulo estable que adopta un conjunto de
partículas de sedimento granular cuando se las dispone apiladas tal como se muestra
esquemáticamente en la Figura 9.

El ángulo de reposo es importante en el diseño de canales estables, en la evaluación de


tensiones de corte críticas en planos inclinados, etc.

Figura 9

En la Tabla 11 se presentan valores de ϕ recomendados por Simons (1957) en función de d50 y


de características de las partículas:

Tabla 11
ϕ (en grados)
d50
(mm) Aristas Aristas Muy
vivas acentuadas redondeadas
0,3 32,0 31,4 29,2
1,5 34,5 32,9 29,5
3 36,6 33,8 29,9
15 40,0 37,5 32,5
30 40,8 39,1 34,8
150 42,0 41,2 38,3
300 42,2 41,5 39,2

El coeficiente de fricción estática de Coulomb se expresa como la tangente del ángulo de


reposo:

µ s = tg ϕ (38)

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9. BIBLIOGRAFÍA

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