Está en la página 1de 1

Estímulo reforzador y conducta operante.

La observación nos indica claramente que hay algunas operante que ocurre más frecuentemente
que otras, y que la frecuencia con que ocurra una cierta operante puede ser cambiada. Un
observación más cercana sugiere que la frecuencia de ocurrencia de un operante está influenciada
en gran medida por la consecuencia que produce. Mientras la frecuencia de la conducta
Respondiente está determinada principalmente por la frecuencia del estímulo que le evoca (el
evento ambiental que va antes que ella), la frecuencia de la conducta operante básicamente está
determinada por el efecto que produce (el evento ambiental que va después de ella).

Los efectos o consecuencias de la conducta pueden ser la aparición de una parte adicional del
medio o bien que lo que se aparición de una parte de ese medio. Aparición de un estímulo como
consecuencia de una respuesta resulta de una mayor probabilidad de que la respuesta ocurra en
el futuro, el estímulo recibe el nombre de estímulo reforzador de positivo o forzado positivo.

Un reforzador siempre se define en términos de sus efectos sobre la frecuencia posterior de la


respuesta inmediatamente lo procede. Por ejemplo un día un perro hablo con sus patas delanteras
la puerta de su patio de juego. Si esta conducta ocurre con más frecuencia en el futuro el acto de
abrirte la puerta del patio se le dominará reforzador positivo. El reforzador negativo involucra la
eliminación de un estímulo aversivo. Supóngase que el perro intenta sacarse una garrapata
rascándose en el costado de una se lo sé. Si en el futuro hay una tendencia a rascarse y la celosía
cada vez que se le pega una garrapata, el insecto lo denominamos estímulo aversivo, eliminación
reforzador negativo el cual refuerza la respuesta de rascarse a rascarse y la celosía.

También podría gustarte