Está en la página 1de 3

ACTIVIDAD No.

TEXTO REFLEXIVO SOBRE LOS PROCESOS DE APRENDIZAJE Y LA


EVALUACIÓN

MARCELA DÌAZ PULIDO

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS UNIMINUTO

NEIVA-HUILA

ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS

SEGUNDO SEMESTRE
LA EVALUACIÓN, FACTOR ESENCIAL EN TODO EL PROCESO DE

APRENDIZAJE

En todo quehacer y en todo aprendizaje, se produce naturalmente, de forma

mediadora o autónoma, una regulación, control, retroalimentación, rectificación de lo

que se hace o se aprende. Y ello desde el inicio, en el camino y al final. En el símil

con un viaje, sabemos que se controlan los preparativos, la marcha, el mejor camino y

la satisfacción o no de la llegada. En la evaluación formativa se llama la atención

sobre todos esos aspectos y momentos para favorecer el mismo proceso, desarrollando

estrategias y actividades que permitan alcanzar la meta de forma satisfactoria. El

objetivo no se centra en dar una calificación final sino en favorecer, confirmar o

rectificar el método y orientar al aprendiz sobre la misma marcha para progresar. En

palabras de Scallon (1999) la finalidad de esta evaluación es mejorar y el eje de todo

ello es la reflexión.

Resumiendo lo anterior definiríamos la evaluación formativa, de progreso o para

aprender, como un factor esencial de aprendizaje, integrado en el mismo proceso y

que tiene como objetivo favorecer ese proceso en tiempo real, a través de la

observación, interpretación y regulación continua de todos los elementos que lo

integran: desde la motivación y fijación de objetivos, de acuerdo con el potencial de

aprendizaje en cada estadio y por cada alumno, a la regulación del empeño, de los

intentos, de las hipótesis, de las reparaciones, de la superación de las dificultades y del

análisis de los logros. En síntesis, es una evaluación que llevan a cabo alumnos y

profesores, valorando dónde se está, dónde se quiere llegar y proponiendo en cada

momento las vías y estrategias oportunas para conseguir la meta.


ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE Y EVALUACIÓN

Otro campo sumamente fructífero en el desarrollo de la persona en general y en el

del aprendizaje de las lenguas en particular, y con incidencia especial en el de la

evaluación como elemento esencial de ese aprendizaje, es el referido al desarrollo de

la competencia estratégica. Citando al Marco común europeo de referencia

(Marco) recordamos que esta competencia es la capacidad general de la persona de

“observar y participar en nuevas experiencias e incorporar conocimientos nuevos a los

existentes, modificando éstos cuando sea necesario. En el desarrollo de la

competencia comunicativa, la competencia estratégica es la encargada de movilizar y

equilibrar todos los recursos disponibles para llegar a utilizar la lengua y cumplir

exitosamente tareas comunicativas.

Desarrollar esta competencia, es por tanto, favorecer el aprendizaje ya que

podemos definir las estrategias como operaciones mentales, mecanismos,

procedimientos, planes, acciones concretas que se llevan a cabo de forma inconsciente

y potencialmente consciente y que movilizan los recursos para maximizar la eficacia

tanto en el aprendizaje como en la comunicación. Ese mismo es el objetivo de la

evaluación formativa o evaluación para aprender, poner los medios para regular y

mejorar el aprendizaje, activando la forma más eficaz y gratificante de aprender y

desarrollando estrategias de planificación, realización, control y reparación del acto

comunicativo.

También podría gustarte