Está en la página 1de 8

El Hato Ganadero (Samuel salas 2021-0693).

Causas que dieron origen al hato ganadero en santo domingo.

Existía un problema comercial.

España trataba de mantener el esquema monopólico en el comercio con las colonias.

El Estado Español interpretaba el comercio ilegal como fuente de enriquecimiento de los países
enemigos.

Este trajo consigo grandes cambios tanto para la economía como para el estilo de vida de los
esclavos y colonos.

Esto trajo también como consecuencia las transformaciones económico sociales.

Se le denomina Devastaciones de Osario a la orden dada por el rey de España Felipe III al
gobernador de La Española en ese entonces Antonino de Osario de despoblar la parte occidental
de la isla para luego trasladarla hacia la parte cerca de Santo Domingo. Este suceso transcurrió
entre 1605 y 1606.

Condiciones de los habitantes en el siglo XVIII.

Las Devastaciones de 1605 y 1606. Después de largas discusiones en la corte española, el rey
Felipe III decidió despoblar totalmente las comarcas donde se llevaban a cabo los contrabandos y
trasladar sus habitantes a zonas interiores cercanas a la ciudad de Santo Domingo. -Felipe II había
contemplado muchos años esa posibilidad, pero nunca se resolvió a llevarla a cabo, quizás
consciente de la peligrosidad que envolvía.

Felipe III decidió atenerse a las recomendaciones de López de Castro un oficial real en desgracia
que entonces visitaba la corte y propuso de nuevo la medida - Encomendó las Devastaciones al
Gobernador Osorio y al Arzobispo Dávila Padilla, otorgándoles poder para cualquier medida que
consideraran prudente.

El anuncio de las Devastaciones provocó las protestas de todos los vecinos de la isla y
principalmente de los de las regiones, afectadas, a través de peticiones de los cabildos todas, en
que se solicitaba la revocación de la medida.
A pesar de eso, el Gobernador Osorio, quien por el fallecimiento del Arzobispo Dávila y Padilla no
tenía poder para realizar la medida, decidió cumplir al pie de la letra con lo estipulado en las reales
Cédulas que la disponían.

Para llevar a cabo las devastaciones se hizo traer un contingente de tropas del presidio de Puerto
Rico, ya que se esperaba que los habitantes de las regiones afectadas resistieran con las armas en
las manos. Estas tropas también tendrían la misión de combatir a los piratas y contrabandistas
larga, a la formación de la colonia francesa en las zonas abandonadas.

Las causas de las Devastaciones fueron de diversos órdenes. En primer lugar, estaba el problema
comercial. España trataba de mantener el esquema monopólico en el comercio con las colonias.
Los rescates de los habitantes de la isla con los extranjeros inferían grave daño a los intereses de la
burguesía comercial de Sevilla y al propio Estado español que dejaba de recaudar sumas
importantes por concepto de impuestos. En otro orden de ideas, el Estado español interpretaba el
comercio ilegal como fuente de enriquecimiento de los países enemigos, por lo que las
motivaciones económicas se unían a las dé índole política y militar.

Características de la esclavitud en la colonia española de Santo


Domingo.

Con la conquista y colonización de la isla, los españoles empezaron a importar grandes


contingentes de esclavos africanos para sustituir a la mano de obra nativa, muy mermada por las
guerras, brutales condiciones de trabajo y epidemias. Aproximadamente un 80 o 90% de la
población nativa murió en el primer siglo de la conquista. Por su parte, entre 1492 y 1870 se
importaron unos 30.000 africanos al territorio dominicano.

Hasta la conquista de Jamaica por los corsarios ingleses del almirante William Penn y el general
Robert Venables, en 1654 los españoles solo tenían un control permanente de la zona sureste de
la isla, dejando un amplio sector del centro y el norte de la isla, regiones muy montañosas, como
lugares donde africanos y tainos, esclavos en las plantaciones, pudieran fugarse. Tanto en las
plantaciones como en los pueblos aislados de fugados se producirá un fuerte mestizaje entre
indígenas y africanos y también europeos. De este mestizaje junto al dominio social, cultural y
económico del elemento europeo se constituira la base de la identidad nacional de los
dominicanos. Se estima que la población de la colonia en 1777 era de 400.000 personas, de los
cuales 100.000 eran europeos y criollos, 60.000 africanos, 100.000 mestizos, 60.000zambos y
100.000 mulatos.

La esclavitud fue una institución social que existió en toda América. En la provincia española de
Santo Domingo los esclavos nunca fueron la mayoría de la población, con el máximo ratio de 2-10;
es decir, en su tiempo de apogeo, solo 2 de cada 10 personas eran esclavas y de los 8 restantes, 4
eran blancos y 4 era gente libre, de color, en esencia mulatos.

Ubicación de las principales ciudades en esta etapa colonial.

Causas que dieron lugar a la rebelión de los capitanes durante el


año de 1721.

Este hecho fue un acontecimiento sociopolítico ocurrido en la época colonial y fue motivado al
hecho de que El Capitán General y Gobernador de Santo Domingo en los años del 1718 al 1724,
Fernando Constanzo (Gobernador Colonial No 58), por instrucciones del Rey Felipe V, quien se
encontraba desarrollando un proceso de modernización de la administración del Imperio Español,
prohibió los intercambios comerciales fronterizos de los productores del Cibao, con los nativos y
franceses de la parte oeste de la Isla (Saint Domingue Francés). Aparentemente los españoles con
esta medida querían evitar los contrabandos que se producían por la frontera. En esa época casi a
mitad del siglo XVIII en Santiago y alrededores, habían unos 30 mil habitantes y una gran
producción de ganado vacuno y otros animales y ciertamente desde Santiago iban a la zona de la
frontera a comercializar carnes, cueros y otros productos con los habitantes de la zona oeste de la
isla, pero el gobernador cumpliendo la instrucciones de la Corona Española, paralizó de forma
drástica el intercambio comercial, designando para esto a uno de sus lugarteniente, llamado Isidro
Minier, que de inmediato tomó medidas poniéndole gravámenes e impuestos a los artículos que
los nativos de la parte oeste le vendían a los de la zona este. Esta serie de controles y medidas
administrativas, hicieron difícil la continuación de los intercambios que por costumbre hacían los
ciudadanos de ambos lados de la frontera, situación está que trajo mucha pobreza y calamidades a
la zona del Cibao, lo que motivo un conflicto donde el Síndico de Santiago, Sr. Santiago Morel y
varios Capitanes realizaron varias protestas frente a la gobernación, desconociendo la autoridad
del gobernador en el año 1721.

Luego de esta situación fueron sometidos a la obediencia por las autoridades españolas, quienes
actuaron con mucha arbitrariedad y otras ignominias. Durante sus acciones de rebeldía el síndico y
los capitanes, siempre se manifestaron a favor del Rey, motivo por el cual lo vitoreaban, pero
hablando en contra del Gobernador y sus hombres. Los rebeldes fueron acusados por el gobierno
Colonial de varios hechos: Desafío a la autoridad, manejo indebido de fondos públicos y
desordenes público. Este hecho ocurrió debido a pugnas suscitada entre las potencias de la época
y fue uno de los hechos más importantes del siglo XVIII, al igual que las Devastaciones de Osorio
del siglo XVII. En esa época Puerto Plata era parte de la provincia de Santiago.

Medidas políticas que caracterizaron el gobierno de Pedro Zorrilla


De San Martín.

Desde su aparición en la vida política, la U.C. se colocó en poco tiempo -junto al Partido Socialista
del Uruguay y al Partido Comunista del Uruguay- en una de las tres pequeñas colectividades con
presencia parlamentaria que realizaron aportes legislativos en el campo social. El primer diputado
del partido, electo por Montevideo en 1920, fue Joaquín Secco Illa. El mejor resultado electoral del
partido se registró en 1946 cuando alcanzó el 5,25% de los votos emitidos, obteniendo un escaño
en el senado que fuera ocupado por Dardo Regules, con Juan Vicente Chiarino como suplente.
Logró también cinco bancas en la cámara baja que fueron ocupadas por Tomás Brena, Salvador
García Pintos y Juan Vicente Chiarino por Montevideo, Horacio Terra Arocena por Canelones y
Venancio Flores por Colonia. En la década de 1950 jóvenes de la Juventud Demócrata Cristiana y el
Movimiento Social Cristiano liderado por Juan Pablo Terra intentaron modernizar la U.C..
Finalmente, en febrero de 1962, en una Asamblea realizada en el local del Círculo Católico de
Obreros, de la ciudad de Durazno, se transformó en el lema: Partido Demócrata Cristiano, el que a
partir de ese momento mantendrá como sub lema a la Unión Cívica, y mantendrá todas sus
propiedades y símbolos.

En 1966 una facción se separó del P.D.C. y, como no pudo utilizar el lema "Unión Cívica", se vio
obligado a crear el "Movimiento Cívico Cristiano (M.C.C.)" que concurrió a los comicios de ese año,
sin éxito. En 1971 se produjo una nueva crisis cuando el Partido Demócrata Cristiano, junto a otros
partidos y grupos de izquierda, decidieron crear el Frente Amplio. Entonces, surgió la "Unión
Radical Cristiana (U.R.C.)", que tampoco pudo utilizar el lema "Unión Cívica", por lo cual improvisó
estructuras y trató de lograr una organización a pocos meses de los comicios de 1971, obteniendo
escasa votación.

Luego de admitida por parte de las Fuerzas Armadas la derrota en el plebiscito constitucional de
1980, la Comaspo inició una ronda de contactos a los efectos de acordar un Estatuto de los
partidos políticos y posibilitar elecciones internas dentro de estos. Los contactos comenzaron a
comienzos de julio de 1981 con representantes de los partidos Colorado, Nacional y UC.

causas por la que fue firmado el tratado de Aranjuez y sus


consecuencias para la colonia española de Santo Domingo.

Francia intentó tomar ventaja del Tratado de Paz de Ryswick de 1697, pues éste indicaba que
todos los territorios volverían a sus respectivos dueños antes del conflicto que precedió al tratado,
pero es importante recalcar que, si bien los franceses ya habitaban en la zona occidental de la isla
de La Española (lo que actualmente es Haití, dejando a los españoles la oriental, actual República
Dominicana), la presencia de los franceses en esa zona era ilegal, por lo que la estancia de los
mismos en esa región era más propia de relaciones de tolerancia por parte de los españoles que
de un tratado de paz.1 Durante todo el siglo xviii España y Francia mantuvieron unas relaciones
cordiales, basadas sobre todo en la relación de parentesco de los monarcas de ambos países,
todos ellos pertenecientes a la Casa de Borbón.

En 1773 el capitán general de la parte española de la isla, José Solano, y el gobernador de la parte
francesa, marqués de Valière, firmaron un acuerdo provisional en el que se definían los límites
entre los territorios de ambos países en la isla. En 1776 José Solano y el conde de Ennery
ratificarían este acuerdo con la ayuda de una comisión de topógrafos que señalarían físicamente
los límites establecidos, auxiliados por la creación de un conjunto de pirámides que servían como
indicadores, usando el río Dajabón en el Norte como inicio y la región de la actual Pedernales en el
Sur como fin de la delineación de la frontera.

El tratado fue firmado el 3 de junio de 1777 en la localidad madrileña de Aranjuez por el conde de
Floridablanca, en nombre de Carlos III de España, y el marqués de Ossun, en representación de
Luis XVI de Francia. En él se relacionaron minuciosamente los límites entre los territorios de ambos
países, basados en los acuerdos de 1773 y 1776, y apoyados por un mapa topográfico levantado a
tal efecto.

Revolución francesa de 1789 y sus efectos en la colonia de Saint


Domingue.

Revolución Haitiana Movimiento de protesta y rebeldía de los mulatos y negros de la colonia


francesa en 1789 en la isla de Sto. Dgo. y termina el 1ro de enero de 1804 cuando se proclamó la
independencia con Jean Jacques Dessalines.

Juan Bosch señala que la Revolución Haitiana fue una guerra: a) Social, por la lucha entre amos y
esclavos. b) Racial, por enfrentamiento de blancos y negros c) Civil, por rivalidad entre Toussaint y
Rigaud d) De liberación Nacional, por la proclamación de la primera república negra del mundo.

El ideólogo de la independencia fue Toussaint Louverture. El primer presidente fue Jean Jacques
Dessalines. Toussaint Louverture Jean Jacques Dessalines

Efectos de la Revolución Francesa En el 1789 la Revolución Francesa puso fin al estado feudal y a la
monarquía absoluta y proclamó la soberanía nacional para dar paso al capitalismo y llevar al poder
a la burguesía.

La Revolución Francesa gestó la supresión de los privilegios y proclamó la Declaración de los


Derechos del Hombre y del ciudadano.

Los Declaración de los Derechos del Hombre y del ciudadano, Establecía: Nacer, Vida Libertad e
Igualdad, Libertad, Propiedad, Seguridad, Resistencia a la opresión Derechos Naturales, El pueblo y
los monarcas deben ser los representantes y ejecutores de la voluntad a la opresión La soberanía
La Revolución Francesa fue una influencia decisiva en los procesos de independencia que viviría
Américas Latina en el siglo XIX.

En la colonia de Saint Domingue, el proceso revolucionario generó un estado de agitación y toda


suerte de reacciones encontradas. Por un lado, los colonos blancos temían perder sus privilegios,
por el otro, los mulatos vislumbran la posibilidad de adquirir igualdad de derechos.

La mayor consecuencia de la revolución francesa para ambas colonias, pues el lado español sufriría
seriamente la pérdida de su fuente de comercio.

Causas y consecuencias para la firma del tratado de Basilea en 1795


para la colonia española de Santo Domingo.

La aparición de sentimientos "catalanista" y "vasquista" en las "provincias" donde se estaba


combatiendo, junto con el desastre militar y la lastimosa situación en la que quedó la Hacienda
real, los gastos de la guerra habían provocado un grave déficit, obligaron a Manuel Godoy a iniciar
negociaciones de paz. Del lado francés también había cansancio por la guerra, y la caída de
Robespierre en julio de 1794 y la llegada al poder de los republicanos moderados o
thermidorianos abrió una nueva etapa en la República. Tras unos primeros contactos infructuosos,
las negociaciones tuvieron lugar en Basilea, donde residía François Barthélemy, representante de
la República francesa ante la Confederación Helvética, a donde acudió Domingo de Iriarte,
embajador de la Monarquía de Carlos IV en la corte de Varsovia, quien conocía a Barthélemy
desde su estancia en la embajada de París en 1791, amistad que facilitó mucho llegar a un acuerdo
que también se vio favorecido por la muerte en prisión del Delfín Luis XVII el 8 de junio de 1795, ya
que Carlos IV exigía su liberación como condición para lograr la paz. Así los dos plenipotenciarios
firmaron finalmente el 22 de julio de 1795 el Tratado de Basilea que puso fin a la Guerra de la
Convención.

En virtud del mismo, España logró la devolución de todo el territorio ocupado por los franceses al
sur de los Pirineos pero tuvo que ceder a Francia, a cambio, su parte de La Española en el mar
Caribe, aunque conservó la Luisiana, también reclamada por los franceses. Esta parte del tratado
no se pudo llevar a cabo, debido a la Revolución haitiana, manteniendo España esta posesión
(actual República Dominicana), hasta la invasión desde Haití por Toussaint Louverture en enero de
1801.
En una cláusula secreta se resolvió otro tema controvertido: la liberación de la hermana del Delfín
fallecido e hija de Luis XVI (María Teresa de Francia), que sería entregada al emperador de Austria.

Por otro lado, el Tratado abría la puerta a mejorar las relaciones entre la Monarquía de España y la
República Francesa porque en su artículo 1 no solo se hablaba de paz, sino de «amistad y buena
inteligencia entre el Rey de España y la República francesa», e incluso en otro artículo se hablaba
de la firma de un «nuevo tratado de comercio», aunque este nunca vio la luz. Según el historiador
Enrique Giménez, «la modestia de las reivindicaciones francesas» se debió a que «la República
pretendía la reconciliación con España y reeditar la alianza que había unido a las dos potencias
vecinas durante el siglo XVIII frente al común enemigo británico».

Como recompensa por el éxito de tratado, Manuel Godoy, primer Secretario de Estado y del
Despacho, recibió de los reyes el título de "Príncipe de la Paz", algo que iba en contra de la
tradición de la Monarquía Hispánica que sólo reconocía el título de príncipe al heredero al trono,
en este caso al varón primogénito de los reyes, Fernando, Príncipe de Asturias.

También podría gustarte