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LA DEFENSA EN EL PROCESO

PENAL.
Juana Ma. Cruz F.
Maritza Ramírez
Gregorina Suero
Johann Reyes
Yulis Adames.
LOS ¿Qué son los
PRINCIPIOS principios?
EN EL
PROCESO
PENAL.
Robert Alexy.
Son mandatos de optimización que se caracterizan
en que pueden ser cumplidos en diferentes grados
y porque las medidas ordenadas de cumplimientos,
no sólo dependen de las posibilidades fácticas, sino
también de las posibilidades jurídicas.
-Normas jurídicas de gran valor moral

LOS -Los principios son normas, pero contrario a las


reglas no pierden su existencia y aplicabilidad ante

PRINCIPIO una colisión.


-La preponderancia estará en la carga
S EN EL argumentativa.
Los principios son pilares fundamentales que tienen
PROCESO un marco de aplicación amplio en el entendido de
que son “mandatos de optimización”. Los principios
PENAL. tienen una concentración de respuesta casi infinita.
(Derecho Procesal Penal. Alberto Bender, revisado
por Jacinto Castillo).
PRINCIPIOS CONSTITUCIONALES
DE APLICACIÓN PROCESAL PENAL:

1.- Libertad personal. 10.-Personalidad.


2.- Igualdad. 11.-Resocialización.
3.- Dignidad.
12.-Proporcionalidad.
4.- Primacía de la Constitución y los
13.-Interpretación a favor
Tratados de Derechos Humanos. persona.
5.- Plazo razonable. 14.- Excepcionalidad de la medida
6.- Presunción de inocencia. de
◦ coerción
7.- No bis in ídem.
8.-Legalidad. 15.- Personalidad de la pena.
9.-Irretroactividad. 16. ¿Indubio pro reo?
PRINCIPIOS PROCESAL PENALES CONFORME EL CPP.
En razón de la persona o partes del proceso.

Dignidad de las Personalidad de la


personas persecución.
Igualdad ante la ley Derecho de defensa.
Igualdad entre las Derecho a indemnización
partes
Derechos de la victima.
Única persecución.
No autoincriminación
Presunción de
inocencia.
Estatuto de la libertad.
Limite razonable de la
PRINCIPIOS PROCESAL PENALES CONFORME EL CPP.
De índole procesal.

 Supremacía de la Constitución y de Derecho al recurso.


los Tratados Internacionales.
Separación de funciones.
Solución de conflicto.
Obligación de decidir
Juicio previo.
Motivación de las decisiones.
Juez natural.
Interpretación.
Imparcialidad e Independencia.
Legalidad de la prueba.
Participación ciudadana.
Ejecución de la pena.
Legalidad del proceso.
Plazo razonable.
Formulación precisa de cargos
EN RAZÓN DE LA PERSONA
PRINCIPIOS PROCESAL PENALES CONFORME EL CPP.

Dignidad de la persona.
 Hace referencia al valor inherente al ser humano en cuanto ser racional,
independientemente de su raza, condición social o economía, edad, sexo, ideas políticas o
religiosas. Es el derecho que tiene cada ser humano de ser respetado y valorado como ser
individual y social con sus características y condiciones particulares (T.C.D. Sentencias: 81-
14/44-17)
Entendido como derecho fundamental autónomo, la Corte ha determinado que la dignidad
humana equivale: (i) al merecimiento de un trato especial que tiene toda persona por el
hecho de ser tal; y (ii) a la facultad que tiene toda persona de exigir de los demás un trato
acorde con su condición humana. Por tanto, la dignidad humana se erige como un derecho
fundamental, de eficacia directa, cuyo reconocimiento general compromete el fundamento
político del Estado (Sentencia 291-16 CCColombia).
Todo hombre tiene un legítimo derecho al respeto de sus semejantes y también él está
obligado a lo mismo, recíprocamente, con respecto a cada uno de ellos. La humanidad
misma es una dignidad; porque el hombre no puede ser utilizado únicamente como medio
por ningún hombre (ni por otros, ni siquiera por sí mismo), sino siempre a la vez como fin, y
en esto consiste precisamente su dignidad. (Inmanuel Kant. Comentado por José Thompson
y Paula Antezana. Revista jurídica IDH)
Declaración Universal d los Derechos Humanos “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en
dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los
unos con los otros”.
“Está más allá de toda duda que el Estado tiene el derecho y el deber de garantizar su propia seguridad.
Tampoco puede discutirse que toda sociedad padece por las infracciones a su orden jurídico. Pero, por graves
que puedan ser ciertas acciones y por culpables que puedan ser los reos de determinados delitos, no cabe
admitir que el poder pueda ejercerse sin límite alguno o que el Estado pueda valerse de cualquier
procedimiento para alcanzar sus objetivos, sin sujeción al derecho o a la moral. Ninguna actividad del Estado
puede fundarse sobre el desprecio a la dignidad humana” (Corte IDH, Velásquez Rodríguez Vs. Honduras,
1988, párr. 154)
Corte IDH presenta la dignidad como superior al poder del Estado (Velásquez, par. 165).
El aislamiento prolongado y la incomunicación coactiva representa forma de tratos crueles, inhumanos y
degradantes, que contradicen la dignidad humana (Casos Velásquez).
La desnudez forzada de reclusas afecta la dignidad humana (Caso Penal Miguel Castro Castro vs. Perú)
Tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes (Caso Ximenes López vs. Brasil)
Constitución Dominicana (Art. 38):
◦ No la define.
◦ Establece características: sagrada, innata e inviolable.

Código Procesal Penal (Art. 10):


Relaciona la dignidad con la integridad física, psíquica y moral. Tratos crueles, inhumanos y degradantes.
Igualdad ante la ley

El principio de igualdad en la ley se traduce para la autoridad legislativa en la


obligación de tratar idénticamente situaciones análogas, y solo hacerlo de forma
diferente cuando no se asimilen, situación que queda expresada en el apotegma
“tratar igual a los iguales y desigual a los desiguales” (TCD Sentencia 35-2017).
Igualdad ante la Ley o igualdad como prohibición del trato arbitrario: Ésta se basa
en la idea que la ley debe aplicarse de forma similar a todos los individuos con
independencia de sus características. Debe evitar la arbitrariedad, por lo tanto
debe ser objetiva y razonable (Concepciones y cláusulas de igualdad en la
jurisprudencia de la Corte Interamericana. A propósito del Caso Apitz* Marianne
González Le Saux** y Óscar Parra Vera*).
Igualdad ante la ley
Principio de igualdad ante la ley, igual protección ante la ley y no discriminación,
pertenece al jus cogens, puesto que sobre él descansa todo el andamiaje jurídico del
orden público nacional e internacional y que entre en conflicto con dicho principio
fundamental, es un principio fundamental que permea todo ordenamiento
jurídico. Hoy día no se admite en ningún acto jurídico tratos discriminatorios en
perjuicio de ninguna persona, por motivos de género, raza, color, idioma,
religión o convicción, opinión política o de otra índole, origen nacional,
étnico o social, nacionalidad, edad, situación económica, patrimonio,
estado civil, nacimiento o cualquier otra condición. Este principio (igualdad y
no discriminación) forma parte del derecho internacional general. En la actual etapa
de la evolución del derecho internacional, el principio fundamental de igualdad y no
discriminación ha ingresado en el dominio del jus cogens. (OC 18/03 Corte IDH).
En razón de los efectos derivados de esta obligación general, los Estados sólo podrán
establecer distinciones objetivas y razonables, cuando éstas se realicen con el
debido respeto a los derechos humanos y de conformidad con el principio de la
aplicación de la norma que mejor proteja a la persona humana.
Tex de igualdad
Sentencia TCD 35-2017 ( Sents.: 33-12, 94/12 y 49/13, 320/14 acoge el tex de
igualdad Corte Constitucional de Colombia –C-78-09, d/f 09 de octubre del 2009).
Test o juicio de igualdad:
1. Existencia de casos o supuestos fácticos semejantes.
2. Que tal diferenciación resulte objetiva, proporcional y razonablemente justificada.
3. Que no implique consecuencias desproporcionadas en cuanto a la finalidad
perseguida.
Constitución Dominicana:
Derecho inherente a la persona “nacen” (art. 39) Igual protección, trato, derechos,
libertades y oportunidades.
CRD Art. 39.3: El Estado debe promover las condiciones jurídicas y administrativas
para que la igualdad sea real y efectiva y adoptará medidas para prevenir y
combatir la discriminación, la marginalidad, la vulnerabilidad y la exclusión.
  Sentencia 337-17 TCD.
9.9 El principio de igualdad de armas típico de un sistema penal acusatorio dentro del marco de un proceso
penal, implica que tanto la parte acusadora como la defensa deben tener la posibilidad de acudir
ante el juez con los mismos instrumentos, las mismas herramientas, sin que ninguno se encuentre
en estado de privilegio, pero tampoco en desventaja.
 
9.11. Es por ello que, no estando la parte acusadora en una condición idéntica –ni siquiera parecida a la que
se encuentra la persona imputada quien indiscutiblemente se encuentra en un estado más vulnerable, no
necesariamente el legislador, cuando dispone una extensión de un plazo a favor del segundo, está afectando
derechos ni garantías fundamentales del otro, como el principio de igualdad de armas.

9.12 El principio de igualdad de armas constituye un elemento esencial de la garantía del derecho de
defensa, de contradicción, y más ampliamente del principio de juicio justo, y hace relación a un
mandato según el cual, cada parte del proceso penal debe poder presentar su caso bajo unas condiciones y
garantías judiciales, que permitan equilibrar los medios y posibilidades de actuación procesal, dentro
de las cuales se presente como esencial las facultades en cuanto al material probatorio a recabar, de tal
manera que no se genere una posición sustancialmente desventajosa de una de las partes frente a la otra
parte procesal, como la que de hecho se presenta entre el ente acusador y el acusado, a favor del primero y
detrimento del segundo (536-08, Corte Constitucional de Colombia).
9.19 . Justifica no condición de igualdad entre el imputado y la parte acusadora, por al condición del primero.
No aplica test de igualdad.
Igualdad de las partes en el proceso

Artículo 69 Constitución.- Tutela judicial efectiva y debido proceso. Toda persona, en el


ejercicio de sus derechos e intereses legítimos, tiene derecho a obtener la tutela judicial
efectiva, con respeto del debido proceso.
CD. 69.4 . Derecho a un juicio en plena igualdad.
Corte Constitucional de Colombia. Sent. 690-08.
Misma oportunidad de:
◦ Presentar demanda y de contestar.
◦ Pruebas a cargo y a descargo.
◦ Oportunidad de alegar.
◦ Derecho a impugnar la decisión.

◦ Art. 12 del CPP: . Las partes intervienen en el proceso en condiciones de igualdad. Para el pleno e
irrestricto ejercicio de sus facultades y derechos, los jueces deben allanar todos los obstáculos que
impidan la vigencia o debiliten este principio.
Única persecución
Constitución Dominicana. Ninguna persona puede ser juzgada dos veces por una misma causa (Art. 69.5).
CPP Art. 9.- Única persecución. Nadie puede ser perseguido, juzgado ni condenado dos veces por un
mismo hecho.
Sentencia 397-2015 SCJ. (Archivo provisional y se realiza un nueva persecución por los mismos hechos).
La seguridad y orden en las relaciones jurídicas, esencia misma del principio de doble persecución.
“Esta garantía se le debe dar el alcance más amplio posible, pues se sustenta, esencialmente, en razones de seguridad
jurídica; la misma no puede vedar solo un nuevo juzgamiento por el mismo hecho, anteriormente perseguido, sino también la
exposición de que ello ocurra mediante una nueva persecución de quien ya la ha padecido por el mismo hecho,
evitando así que el aparato estatal, que goza de un poder penal inmensurable, ponga al imputado en el riesgo de afrontar
una nueva persecución penal, ya sea posterior, simultánea o sucesiva, con abstracción del grado alcanzado en el
procedimiento, realizando así repetidos intentos para obtener la condena de un individuo por la comisión de un supuesto delito,
sometiéndolo a vivir en un continuo estado de amenaza e inseguridad, como ocurre el presente caso. Habiendo sido
comprobadas la concurrencia de las entidades requeridas para la transgresión del principio, persona, objeto y causa”.
262. Para que se configure una violación del artículo 8.4 de la Convención Americana: (i) el imputado debe haber sido absuelto; (ii) la
absolución debe ser el resultado de una sentencia firme, y (iii) el nuevo juicio debe estar fundado en los mismos hechos que motivaron la
sustanciación del primer juicio. (Caso J. Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 27 de noviembre
de 2013. Serie C No. 275)
Convención ADH. Art. 8.4.  4. El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser sometido a nuevo juicio por los
mismos hechos. (Caso J. Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 27 de noviembre de 2013. Serie C No. 275, párr. 259)
Excepciones al Nom bis in
ídem.
131. El desarrollo de la legislación y de la jurisprudencia internacionales ha
permitido el examen de la llamada “cosa juzgada fraudulenta” que resulta de
un juicio en el que no se han respetado las reglas del debido proceso, o
cuando los jueces no obraron con independencia e imparcialidad. En el
mismo sentido: Caso Nadege Dorzema y otros Vs. República Dominicana.
Fondo Reparaciones y Costas. Sentencia de 24 de octubre de 2012. Serie C
No. 251, párr.196.
154. no resulta aplicable cuando: i) la actuación del tribunal que conoció el
caso y decidió sobreseer o absolver al responsable de una violación a los
derechos humanos o al derecho internacional obedeció al propósito de
sustraer al acusado de su responsabilidad penal; ii) el procedimiento no fue
instruido independiente o imparcialmente de conformidad con las debidas
garantías procesales, o iii) no hubo la intención real de someter al
responsable a la acción de la justicia. Una sentencia pronunciada en las
circunstancias indicadas produce una cosa juzgada “aparente” o
“fraudulenta”. (Caso J. Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 27 de noviembre de 2013. Serie C No. 275, párr. 267)
No autoincriminación

Por un lado, el derecho a no declarar contra uno mismo permite al acusado —a


diferencia del testigo— negarse a declarar en absoluto, sin que de ello se
deban seguir consecuencias negativas para él. Por el contrario, en virtud del
derecho a no confesarse culpable, se permite al acusado que declare sobre los
hechos presuntamente delictivos, aunque se le acepta que guarde silencio
sobre aquellas cuestiones que podrían suponer su incriminación. (El
derecho a ser informado de la acusación, a no declarar contra uno mismo y a no
confesarse culpable Julio. Banacloche Palao Profesor Titular de Derecho Procesal de
la Universidad Complutense )
Constitución dominicana: Nadie podrá ser obligado a declarar contra sí mismo (Art.
67.7).
CPP (Art. 13) No declarar contra si mismo y guardar silencio.
¿Con cual otro principio se relaciona o se fundamenta?
No autoincriminación

El derecho a no autoincriminarse presupone que las autoridades logren probar


su caso sin recurrir a pruebas obtenidas mediante métodos coercitivos o de
presión en contra de la voluntad de la 'persona acusada'. Proporcionando al
acusado protección contra la coacción indebida ejercida por las autoridades,
estas inmunidades contribuyen a evitar errores judiciales (Tribunal
Constitucional Español. SENTENCIA 18/2005, de 1 de febrero (BOE núm.
53, de 03 de marzo de 2005
"En este sentido -concluye el Tribunal de Estrasburgo- el derecho está
estrechamente vinculado a la presunción de inocencia recogida en el
artículo 6, apartado 2, del Convenio" (Sentencias Saunders, § 68; Heaney y
McGuinness, § 40; Quinn, § 40; Weh, § 39).
Presunción de inocencia.
TCD. Sentencia 153/2018. Pár. 12.2: “principio de inocencia o derecho a la presunción de
inocencia”, es un estado jurídico de inocencia que ... no se destruye con el procesamiento
ni con la acusación, sino, con la decisión definitiva sobre la responsabilidad penal de
quien se acusa y en cuanto a los hechos de la imputación”; ... que este principio o
derecho fundamental del que goza toda persona a quien se le imputa la comisión de una
infracción, permanece hasta el momento en que se dicta en su contra una sentencia
definitiva que haya adquirido la autoridad de la cosa irrevocablemente juzgada.
El principio de la presunción de inocencia, tal y como se desprende del artículo 8.2 de la
Convención, exige que una persona no pueda ser condenada mientras no exista prueba
plena de su responsabilidad penal. Si obra contra ella prueba incompleta o
insuficiente, no es procedente condenarla, sino absolverla (Caso J. Vs. Perú. Excepción
Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 27 de noviembre de 2013. Serie C No.
275, párr. 228)
Exhibición ante los medios de comunicación (Corte IDH. Caso Lori Berenson Mejía Vs.
Perú. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 25 de noviembre de 2004. Serie C No. 119).
Que el Estado no condene informalmente a una persona o emita juicio ante
la sociedad, contribuyendo así a formar una opinión pública, mientras no se
acredite conforme a la ley la responsabilidad penal de aquella. (Corte IDH. Caso
Acosta y otros Vs. Nicaragua. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 25 de marzo de 2017. Serie C No. 334.).
154. La Corte considera que el derecho a la presunción de inocencia es un elemento
esencial para la realización efectiva del derecho a la defensa y acompaña al
acusado durante toda la tramitación del proceso hasta que una sentencia
condenatoria que determine su culpabilidad quede firme (Corte IDH. Caso Ricardo
Canese Vs. Paraguay. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de
2004. Serie C No. 111).
Este derecho implica que el acusado no debe demostrar que no ha cometido el
delito que se le atribuye, ya que el onus probandi corresponde a quien acusa. (Caso
J. Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 27 de
noviembre de 2013. Serie C No. 275, párr. 233. Párr. 154)
184. De acuerdo con lo establecido por el Tribunal Europeo, el principio de presunción de inocencia implica que los
juzgadores no inicien el proceso con una idea preconcebida de que el acusado ha cometido el delito que se le imputa, por
lo que la carga de la prueba está a cargo de quien acusa y cualquier duda debe ser usada en beneficio del acusado. La
presunción de inocencia se vulnera si antes de que el acusado sea encontrado culpable una decisión judicial relacionada
con él refleja la opinión de que es culpable. (Corte IDH. Caso Cabrera García y Montiel Flores Vs. México. Excepción
Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 26 de noviembre de 2010. Serie C No. 220)

Corte IDH. Caso Zegarra Marín Vs. Perú. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 15 de
febrero de 2017. Serie C No. 331.2

119. i) la imputación realizada por dos coimputados y su alegada apreciación como única prueba de cargo; ii) la alegada
inversión de la carga de la prueba; iii) la alegada falta de valoración de la prueba de descargo y de oficio; iv) la supuesta
falta de certeza para determinar la responsabilidad penal del señor Zegarra Marín, y v) la alegada falta de motivación de
la sentencia condenatoria y su relación con el principio de presunción de inocencia .

122. Cualquier duda debe ser usada en beneficio del acusado.

123. implica que los juzgadores no inicien el proceso con una idea preconcebida de que el acusado ha cometido el delito
que se le imputa.

124. En este sentido, la Corte estima que la presunción de inocencia exige que el acusador deba demostrar que el ilícito
penal es atribuible a la persona imputada, es decir, que ha participado culpablemente en su comisión y que las
autoridades judiciales deban fallar [con un criterio] más allá de toda duda razonable para declarar la responsabilidad
penal individual del imputado, incluyendo determinados aspectos fácticos relativos a la culpabilidad del imputado.

125. El principio de presunción de inocencia es un eje rector en el juicio y un estándar fundamental en la apreciación
probatoria que establece límites a la subjetividad y discrecionalidad de la actividad judicial. Así, en un sistema
democrático la apreciación de la prueba debe ser racional, objetiva e imparcial para desvirtuar la presunción de inocencia
y generar certeza de la responsabilidad penal.

127. Es posible afirmar la limitada eficacia probatoria que debe asignarse a la declaración de un coimputado, más allá de
su contenido específico, cuando es la única prueba en la que se fundamenta una decisión de condena, pues
objetivamente no sería suficiente por sí sola para desvirtuar la presunción de inocencia.
Relación con la prisión preventiva: (Corte IDH. Caso Suárez Rosero Vs. Ecuador. Fondo.
Sentencia de 12 de noviembre de 1997. Serie C No. 35, párr. 77).
110. Este Tribunal ha establecido que, al ser la prisión preventiva una medida cautelar y no punitiva,
existe una “obligación estatal de no restringir la libertad del detenido más allá de los límites
estrictamente necesarios para asegurar que aquél no impedirá el desarrollo del procedimiento ni
eludirá la acción de la justicia”224. Proceder de otro modo equivaldría a anticipar la pena, lo cual
contraviene principios generales del derecho ampliamente reconocidos, entre ellos, el principio de
presunción de inocencia. Corte IDH. Caso Bayarri Vs. Argentina. Excepción Preliminar, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 30 de octubre de 2008. Serie C No. 187
198. Estuvo privado de su libertad, es decir, sin estar condenado, más de cuatro años y tres meses , lo
cual fue equivalente a anticipar un castigo. Por lo tanto, se contravino el principio de presunción de
inocencia (Corte IDH. Caso Herrera Espinoza y otros Vs. Ecuador. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 1 de septiembre de 2016. Serie C No. 316).
TCD. Sentencia 153/2018: No define el principio, pero lo acoge en razón de la emisión de una
certificación sobre antecedentes penales, en el que se hace referencia a un proceso abierto.
“El hecho de que la certificación emitida por la Procuraduría General de la República haga constar que
tiene un proceso penal abierto , atenta directamente contra el principio de la presunción de inocencia
dispuesto en el citado artículo 69 numeral 3 de la Constitución y los precedentes establecidos por este
tribunal constitucional”
Constitución (Art. 69.4). Presenta tres características necesarias: presunción de inocencia, trato
de inocente y sentencia irrevocable de culpabilidad.
CPP (art. 14) las mismas características que la Constitución.
Agrega: Responsabilidad de la acusación de destruir la presunción de inocencia.
Estatuto de libertad.
Constitución: Artículo 40
Regulación general : “Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad
personal”
Regulación especifica (40, numerales 1-17).
CPP (art. 15):
◦ Derecho a la libertad y a la seguridad personal.
◦ Principios de excepcionalliad, proporcionalidad y legalidad.
◦ Control judicial.
Estatuto de la libertad.
TCD. Sentencia 153/2018. El derecho a la libertad personal del individuo sólo puede ser limitado en los
casos y en los fines limitativamente previstos por la Constitución y las leyes (Pár. 13.3 ).
La protección de la libertad se pueden salvaguardar “tanto la libertad física de los individuos como
la seguridad personal (Caso Juan Humberto Sánchez Vs. Honduras. Excepción Preliminar, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 7 de junio de 20031, párr. 77)
El artículo 7 de la Convención tiene dos tipos de regulaciones bien diferenciadas entre sí: una general
y otra específica. La general se encuentra en el primer numeral: “[t]oda persona tiene el derecho a
la libertad y a la seguridad personales”. Mientras que la específica está compuesta por una serie de
garantías que protegen el derecho a no ser privado de la libertad ilegalmente (art. 7.2) o arbitrariamente
(art. 7.3), a conocer las razones de la detención y los cargos formulados en contra del detenido (art. 7.4),
al control judicial de la privación de la libertad y la razonabilidad del plazo de la prisión preventiva (art.
7.5), a impugnar la legalidad de la detención (art. 7.6) y a no ser detenido por deudas (art. 7.7). (Caso
Yvon Neptune Vs. Haití. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 6 de mayo de 2008, párr. 8910 /).
52. En sentido amplio la libertad sería la capacidad de hacer y no hacer todo lo que esté lícitamente
permitido. En otras palabras, constituye el derecho de toda persona de organizar, con arreglo a la ley, su
vida individual y social conforme a sus propias opciones y convicciones. La seguridad, por su parte, sería
la ausencia de perturbaciones que restrinjan o limiten la libertad más allá de lo razonable(Caso Chaparro
Álvarez y Lapo Íñiguez. Vs. Ecuador. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia
de 21 de noviembre de 2007, párr. 51)
235. Independientemente de la razón de su detención, en la medida en que se trata de una
privación de libertad ejecutada por un Estado Parte de la Convención, dicha privación de la
libertad debe ajustarse estrictamente a lo que la Convención Americana y la legislación
interna establezcan al efecto, siempre y cuando ésta última sea compatible con la
Convención (Corte IDH. Caso Wong Ho Wing Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 30 de junio de 2015. Serie C No. 2971).

89. La restricción del derecho a la libertad personal, como es la detención, debe darse
únicamente por las causas y en las condiciones fijadas de antemano por las Constituciones
Políticas o por las leyes dictadas conforme a ellas (aspecto material), y además, con estricta
sujeción a los procedimientos objetivamente definidos en la misma (aspecto formal). (Caso
Servellón García y otros Vs. Honduras. Sentencia de 21 de septiembre de 2006).

Necesidad de orden judicial. Caso Escué Zapata Vs. Colombia. Fondo, Reparaciones y
Costas. (Sentencia de 4 de julio de 20073, párr. 66)

Necesidad de la existencia de una ley “únicamente a través de una ley puede afectarse el
derecho a la libertad personal” (Caso Chaparro Álvarez y Lapo Íñiguez. Vs. Ecuador.
Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 21 de noviembre de
2007, párrafo 56).

Cualquier requisito establecido en la ley nacional que no sea cumplido al privar a una
persona de su libertad, haría que esa privación sea ilegal y contraria a la Convención
Personalidad de la
persecución.
Constitución.
40.14 Nadie es penalmente responsable por el hecho de otro.
40.8 Nadie puede ser sometido a medidas de coerción sino por su propio
hecho;
CPP. Art. 17: No puede ser sometido, investigado ni sometido a medida de
coerción, sino por el hecho personal.
SCJ: “Esto evidencia una responsabilidad en el hecho de otro. Dicha
presunción de responsabilidad resulta arbitraria, toda vez que se persigue
como autor principal a un director por el hecho de un periodista, sustentando
la responsabilidad penal en ámbitos de control vinculados a la posición
dentro de la estructura de los medios de comunicación, lo que es
incompatible con el principio de personalidad de la pena”. Exp. 2015-561 Rc:
Celso Marranzini Pérez Fecha: 12 de septiembre de 2016.
TCD-S 190-13, del 21 octubre del 20013. Presunción de inocencia,
descartando la aplicación a las personas morales.
Derecho de Defensa.
Constitución: Art. 69.4 “El derecho a un juicio público, oral y contradictorio, en plena
igualdad y con respeto al derecho de defensa”.

Art. 18 CPP. Defensa material/técnica. Designación bogado. Comunicación libre y previa


con defensor. Todo el proceso.
“Insoslayable derecho subjetivo individual, de carácter publico, de intervenir en el
proceso penal en todo momento, de probar y argumentar en él , por sí y por medio de
abogado todas las circunstancias de hecho y fundamentos de Derecho que desvirtúen la
acusación, con el objetivo de obtener una declaración de eximición o atenuación de la
responsabilidad penal atribuida” (Eduardo M. Jauche).
María Fernanda López Puleio. “La idea de defensa desde el punto de vista de la defensa
material, la defensa del propio imputado tiene que ver con el sentido de dignidad
humana, la defensa técnica, que se integra a la misma que realiza el propio asistido,
tiene que ver justamente con el acceso a la justicia, es decir, son dos ámbitos que deben
empezar a caminar juntos” .
Tribunal Constitucional Dominicano:
Sent. 44/12. Tal y como considera el Tribunal Constitucional de Perú: “…el derecho de defensa es un derecho que
atraviesa transversalmente a todo el proceso judicial, cualquiera que sea su materia. La posibilidad de su ejercicio
presupone, en lo que aquí interesa, que quienes participan en un proceso judicial para la determinación de sus
derechos y obligaciones jurídicas tengan conocimiento, previo y oportuno, de los diferentes actos procesales que
los pudieran afectar, a fin de que tengan la)”. oportunidad de ejercer, según la etapa procesal de que se trate, los
derechos procesales que correspondan” (Sent. 4945-2006-AA/TC de fecha 16 de agosto del 2006 Tribunal
Constitucional de Perú)
Uno de los pilares del derecho de defensa, es la posibilidad que tiene la persona de estar presente en todas
las etapas del proceso judicial donde está en juego algún interés o derecho fundamental que le pertenece. La
presencia de las partes en un proceso se garantiza, de manera principal, mediante la notificación a cada
parte de la fecha, hora y lugar donde se discutirán los asuntos relativos al proceso. (285-17 y 404-14)
El derecho de defensa no debe limitarse a la oportunidad de ser representado, oído y de acceder
a la justicia. Este derecho procura también la efectividad de los medios para dar a conocer el resultado de un
proceso y que nada quede a merced de la voluntad o dejadez del abogado que asiste al ciudadano, sino que
la parte afectada conozca por una vía de acceso directo a ella la solución dada a un conflicto de especial
interés (478-16, 34-13 y 574-18)
Contradecir los argumentos de la contraparte (Sent. 06-14 y 478-16)
La violación del derecho a la defensa no se ha producido por efecto de la sentencia recurrida, sino que
continúa incidiendo en su esfera como realidad procesal en la medida en que no ha sido subsanada por
el órgano jurisdiccional, proyectándose igualmente sus efectos sobre el debido proceso y la tutela
judicial efectiva del señor Valerio García Castillo (Sent. 360-17)
Corte IDH. Caso Ruano Torres y otros Vs. El Salvador. Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 5 de octubre de 2015. Serie C No. 303, párrafo 153:

El derecho a la defensa es un componente central del debido proceso que obliga al Estado a
tratar al individuo en todo momento como un verdadero sujeto del proceso, en el más
amplio sentido de este concepto, y no simplemente como objeto del mismo .

El derecho a la defensa debe necesariamente poder ejercerse desde que se señala a una
persona como posible autor o partícipe de un hecho punible y sólo culmina cuando finaliza el
proceso, incluyendo, en su caso, la etapa de ejecución de la pena . (Además: Corte IDH.
Caso J. Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 27 de
noviembre de 2013. Serie C No. 275, párr. 194).

El derecho a la defensa se proyecta en dos facetas dentro del proceso penal: por un lado, a
través de los propios actos del inculpado, siendo su exponente central la posibilidad de
rendir una declaración libre sobre los hechos que se le atribuyen y, por el otro, por medio de
la defensa técnica, ejercida por un profesional del Derecho, quien cumple la función de
asesorar al investigado sobre sus deberes y derechos y ejecuta, inter alia, un control crítico y
de legalidad en la producción de pruebas
Necesidad de ser informado de las razones de la detención y de los cargos en su contra
(Corte IDH. Caso Herrera Espinoza y otros Vs. Ecuador. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 1 de septiembre de 2016. Serie C No. 316
Necesidad de conocimiento oportuno de acusación en su contra (Corte IDH. Caso Acosta
Calderón Vs. Ecuador. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 24 de junio de 2005.
Serie C No. 129, párr. 119)
Necesidad de abogado que asista a la persona imputada, en las indagatorias (Corte IDH.
Caso López Álvarez Vs. Honduras. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 1 de
febrero de 2006. Serie C No. 141, párr. 150)
Debe informar al interesado no solamente de la causa de la acusación, esto es, las
acciones u omisiones que se le imputan, sino también las razones que llevan al Estado a
formular la imputación, los fundamentos probatorios de ésta y la caracterización legal
que se da a esos hechos. (Corte IDH. Caso Barreto Leiva Vs. Venezuela. Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 17 de noviembre de 2009. Serie C No. 206, párr. 28)
Evidentemente, el contenido de la notificación variará de acuerdo al avance de las
investigaciones, llegando a su punto máximo cuando se produce la presentación formal y
definitiva de cargos. (Caso J. Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 27 de noviembre de 2013. Serie C No. 275, párr.199.)
La potestad de reserva de indagatoria debe armonizarse con el derecho de defensa del
investigado, que supone, inter alia, la posibilidad de conocer los hechos que se le imputan.
(Corte IDH. Caso Barreto Leiva Vs. Venezuela. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 17
de noviembre de 2009. Serie C No. 206, párrf. 45)

No puede esperarse a que la persona sea formalmente acusada o que –como en el presente
caso- se encuentre privada de la libertad para proporcionarle la información de la que
depende el oportuno ejercicio del derecho a la defensa. (Acosta, párr.. 46).

Por otra parte, esta Corte recuerda que para garantizar el derecho a la defensa es necesario
que en la formulación de una acusación criminal se expongan todos los fundamentos
probatorios de ésta. (Corte IDH. Caso J. Vs. Perú. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 27 de noviembre de 2013. Serie C No. 275, párrf. 293)

El derecho a contar con comunicación previa y detallada de la acusación en materia penal


contempla que debe realizarse una descripción material de la conducta imputada que
contenga los datos fácticos recogidos en la acusación, que constituyen la referencia
indispensable para el ejercicio de la defensa del imputado y la consecuente consideración del
juzgador en la sentencia. (Corte IDH. Caso Maldonado Ordoñez Vs. Guatemala. Excepción
Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 3 de mayo de 2016. Serie C No. 311.
párr. 80)

Concesión de medios y tiempo para la preparación de la defensa. Restricción a la labor de los


abogados defensores y la escasa posibilidad de presentación de pruebas de descargo han
El nombrar un defensor de oficio con el sólo objeto de cumplir con una formalidad procesal,
equivaldría a no contar con defensa técnica, por lo que es imperante que dicho defensor actúe de
manera diligente con el fin de proteger las garantías procesales del acusado y evite así que sus
derechos se vean lesionados. (Caso Cabrera García y Montiel Flores Vs. México. Excepción
Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 26 de noviembre de 2010. Serie C No. 220
155)

Derecho a conocer la prueba y la identidad de los testigos (Caso García Asto y Ramírez Rojas Vs.
Perú. Sentencia de 25 de noviembre de 2005. Serie C No. 137, párr.152).

La reserva de identidad del testigo limita el ejercicio de este derecho puesto que impide a la
defensa realizar preguntas relacionadas con la posible enemistad, prejuicio y confiabilidad de la
persona misma del declarante, así como otras que permitan argumentar que la declaración es falsa
o equivocada (Caso Pollo Rivera y otros Vs. Perú. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 21 de
octubre de 2016. Serie C No. 319, párr.205)

Resentar prueba para esclarecer los hechos. (Corte IDH. Caso Ricardo Canese Vs. Paraguay. Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 31 de agosto de 2004. Serie C No. 111, párr. 164).

Derecho a asistencia consular. Caso Vélez Loor Vs. Panamá. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia de 23 de noviembre de 2010 Serie C No. 218, párr. 154.

El llamado “principio de coherencia o de correlación entre acusación y sentencia” implica que la


sentencia puede versar únicamente sobre hechos o circunstancias contemplados en la acusación.
Corte IDH. Caso Ruano Torres y otros Vs. El Salvador. Fondo, Reparaciones y Costas.
Sentencia de 5 de octubre de 2015. Serie C No. 303.

Inculpado tiene derecho de “defenderse personalmente o de ser asistido por un defensor de su


elección” “derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado por el Estado,
remunerado o no según la legislación interna”, (P.154)

derecho irrenunciable de todo inculpado de delito de ser asistido por un defensor, actuación
eficiente y en igualdad de armas con el poder persecutorio. La Corte ha reconocido que para
cumplir con este cometido el Estado debe contar con defensores idóneos y capacitados que
puedan actuar con autonomía funcional.

Párr. 166: La negligencia inexcusable o una falla manifiesta genera implicaciones en cuanto al
derecho a la defensa.
Supuestos indicativos de una vulneración del derecho a la defensa y, en razón de su entidad,
han dado lugar como consecuencia la anulación de los respectivos procesos o la revocación de
sentencias proferidas: a) No desplegar una mínima actividad probatoria . b) Inactividad
argumentativa a favor de los intereses del imputado . c) Carencia de conocimiento
técnico jurídico del proceso penal . d) Falta de interposición de recursos en
detrimento de los derechos del imputado . e) Indebida fundamentación de los
recursos interpuestos . f) Abandono de la defensa .
Derecho a Indemnización.

Esta disposición también la encontramos en el articulo 148 de la Constitución


Dominicana (Derecho procesal penal. Escuela Nacional de la judicatura, pag.
55)
Artículo 148.- Responsabilidad civil. Las personas jurídicas de derecho público
y sus funcionarios o agentes serán responsables, conjunta y solidariamente,
de conformidad con la ley, por los daños y perjuicios ocasionados a las
personas físicas o jurídicas por una actuación u omisión administrativa
antijurídica.
Código Procesal Penal. Art. 20. Indemnización en casos de error judicial.
Tribunal Constitucional Español. Casos de prisión preventiva.
Derecho de la Víctima.
CPP: (art. 27) Derecho a intervenir en el proceso y a ser informada de los resultados.
Tribunal Constitucional reconoce el derecho al debido proceso a favor de la victima. (Set. 399-
15)
Vulneración del debido proceso por la inadmisibilidad de la acusación del querellante, cuando el
ministerio público no presenta acusación. Que en la acusación privada existían ilícitos penales
que no competían, de forma absoluta, al Ministerio público.
Derecho a la verdad. CorteIDH, Caso Niños de la Calle (Villagrán Morales y otros),
Reparaciones (art. 63.1 CADH), sentencia del 26 de mayo de 2001, Serie C No. 77, párr. 100
Obligación de juzgar los responsables. CorteIDH, Caso de la Masacre de la Rochela,
sentencia de 11 de de mayo de 2007. Serie C No. 163, párr. 195.
Constitución:
◦El derecho a una justicia accesible, oportuna y gratuita;
◦El derecho a ser oída, dentro de un plazo razonable y por una jurisdicción competente,
independiente e imparcial, establecida con anterioridad por la ley
◦El derecho a un juicio público, oral y contradictorio, en plena igualdad y con respeto al derecho
de defensa
◦Derecho al recurso.
◦Asistencia legal gratuita (art. 177)
EN RAZON DEL PROCESO
Supremacía de la Constitución y de los
Tratados Internacionales
Artículo 6 de la Constitución. Todas las personas y los órganos que ejercen potestades
públicas están sujetos a la Constitución, norma suprema y fundamento del ordenamiento
jurídico del Estado. Son nulos de pleno derecho toda ley, decreto, resolución, reglamento o acto
contrarios a esta Constitución.
Artículo 74 de la Constitución. 3) Los tratados, pactos y convenciones relativos a derechos
humanos, suscritos y ratificados por el Estado dominicano, tienen jerarquía constitucional y son
de aplicación directa e inmediata por los tribunales y demás órganos del Estado.
CPP.1.- Primacía de la Constitución y los tratados. Los tribunales, al aplicar la ley,
garantizan la vigencia efectiva de la Constitución de la República y de los tratados
internacionales y sus interpretaciones por los órganos jurisdiccionales creados por éstos, cuyas
normas y principios son de aplicación directa e inmediata en los casos sometidos a su
jurisdicción y prevalecen siempre sobre la ley. La inobservancia de una norma de garantía
judicial establecida en favor del imputado no puede ser invocada en su perjuicio. Art. 2.- Sol
Este principio podría considerarse como el más importante, consagrando lo que se ha
denominado “la dimensión trasnacional del derecho y la justicia”, por la cual se aspira al
respeto de las libertades humanas a un nivel supranacional, a través de organismos y
preceptos con vigencia a-espacial que vienen así a completar la dimensión constitucional del
derecho y la justicia, en búsqueda de una “lex universales”, una suerte de “paraguas
protector”, un mínimo de derechos y garantías que acompañan al ser humano en cualquier
lugar donde se encuentre. Lo cual representanta un importante avance en la protección de los
derechos de los seres humanos, sobre todo en aquellos países donde la ley se muestra
Este principio sienta las bases para el establecimiento de una jerarquía normativa, en cuya
cúspide están las normas que nuestra Suprema Corte de Justicia ha denominado “el
bloque de constitucionalidad”, al cual está sujeta la validez tanto formal como material
de toda norma adjetiva o secundaria. Dicho bloque está integrado por dos fuentes
normativas de igual jerarquía: a) la nacional, formada por la Constitución y la
jurisprudencia constitucional, y b) la internacional, compuesta por los tratados
internacionales, las opiniones consultivas y las decisiones emanadas de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos. Los Jueces están llamados a aplicar estas
disposiciones como fuente primaria de sus decisiones. Resolución 1920, dictada por la
SCJ el 13 de noviembre del 2003.

Todas las decisiones del Tribunal Constitucional, en sus consideraciones


y fundamentos, hace acopio a la supremacía de la constitución.

SENTENCIA TC/0620/18: Expediente núm. TC-02- 2018-0003, relativo al control


preventivo de constitucionalidad del “Acuerdo entre la República Dominicana y los Estados
Unidos Mexicanos sobre Cooperación y Asistencia Administrativa Mutua en Asuntos
Aduaneros”, suscrito el quince (15) de mayo de dos mil diecisiete (2017), en La Habana,
República de Cuba.
Solución de conflicto
Art. 2 del CPP.
Contribuir a la paz social.
Proceso penal como medida extrema de la política criminal.
Este principio conlleva dentro las cuestiones más importantes de las que contiene el Código Procesal Penal es que
los derechos de los justiciables se ven masificados, sino que también permitirá que las autoridades puedan
concentrarse en la investigación, persecución y enjuiciamiento de aquellos delitos y crímenes verdaderamente
importantes y causan perjuicios significativos a la sociedad, en la medida en que la aplicación de medidas
alternativas va a permitir que la jurisdicción penal este descongestionada de asuntos sin mayor interés o bagatelas.
Esto supone entonces que no necesariamente todas las denuncias e investigaciones que inicie el ministerio público,
van a ser instruidas o van a ir a juicio. El ministerio público tendrá la facultad de una de estas cuatro opciones: o
formaliza la instrucción, o aplica un criterio de oportunidad conforme a las reglas del código, o desestima la
denuncia y ordena el archivo provisional de esa denuncia.
Todo proceso penal se inicia producto de la existencia de un conflicto entre particulares, víctima/victimario, lo que
se ha dado en denominar conflicto primario. Sin embargo, en nuestra tradición jurídica la idea de conflicto ha
quedado tradicionalmente relegada por la dualidad “obediencia/desobediencia” que obliga a una referencia directa
al Estado a través de los imperativos del derecho penal, desplazando el conflicto primario y constituyéndose un
conflicto de segundo orden. Cfr. Alberto Binder. “Introducción al Derecho Penal”, 2004, Págs. 21-26.
Resolución 2142/2018 de la Suprema Corte de Justicia que crea el Reglamento de
los Métodos Alternos Resolución de Conflictos en la República Dominicana.

Sentencia No. 627-2007- 311 del 23 de noviembre 2007 de la Corte de Apelación


del Departamento Judicial de Puerto Plata: “… la solución del conflicto parte de la idea
de la necesidad de búsquedas de alternativas a la solución del conflicto diferentes de la
imposición de una pena luego del juicio oral. Por ello se encuentran instituidas en la
legislación procesal vigente instituciones tales como la conciliación, la suspensión
condicional del procedimiento, el procedimiento penal abreviado, la aplicación de criterios de
oportunidad; destinadas todas reservar el juicio sobre el fondo sólo para aquellos casos en
que resulte estrictamente necesario…”.
Juicio previo.
Implica la exigencia primaria de una sentencia condenatoria firme para poder imponer una pena, y
secundariamente que esa sentencia esté precedida de un proceso regular: nulum poena sine iuditio.
(Eduaro M. Jauchen. Derechos del imputado, pag. 96)
TCD: Sentencia 133-2019. El derecho a un juicio público, oral y contradictorio, salvaguardando el
principio de igualdad y el derecho de defensa de las partes constituye otros de los fundamentos
esenciales del debido proceso.
Art. 3 del CPP:
◦ No sanción ni medida de seguridad sin un juicio previo.
◦ Principios del juico: oralidad, publicidad, contradicción, inmediación, celeridad y concentración.

Constitución (Art. 69.4).

El derecho a un juicio público, oral y contradictorio, en plena igualdad y con respeto al derecho de
defensa.
“El principio de juicio previo exige contradicción en la actividad probatoria; que haya claramente
oralidad, publicidad, acusación, defensa, inmediación, verificación y comprobación jurisdiccional de
todos los elementos del conflicto. Implica que la sentencia judicial alcanzada en el juicio debido, es el
único medio para legitimar la intervención del poder punitivo del Estado”. (Resolución 1920 SCJ)
Juez Natural
TCD. Sentencia 133-19.
“…El concepto de juez natural se refiere a los juzgados y tribunales
creados previamente por la ley para juzgar un determinado caso; no
así la persona del servidor o servidores públicos que presiden dichos
tribunales”.
Constitución. Art. 69.7
“Ninguna persona podrá ser juzgada sino conforme a leyes preexistentes al
acto que se le imputa, ante juez o tribunal competente y con observancia de
la plenitud de las formalidades propias de cada juicio”.
CPP. (Art. 4)
◦ No comisiones especiales.
◦ Solo por los tribunales establecidos en el código.
Juez Natural
El juez natural, preconstituido por la ley, garantiza a toda persona conocer de antemano, en
relación con cualquier proceso en que se viere envuelto, cuál es el juez competente para
dirimirlo y, a la vez, el derecho correlativo que no será decidido por un “juez designado a
posteriori en relación con el hecho verificado. Virga, citado por Castillo, Pellerano y Herrera,
“Derecho Procesal Penal”, Tomo I, 2000, Pág. 158.
En fin, el derecho al juez natural constituye una de las garantías constitucionales del Debido
Proceso para hacer efectiva la tutela jurisdiccional, la cual resulta una de las condiciones
previas a dictar sentencia, e implica: a) la unidad judicial que supone la incorporación del juez
al Poder Judicial; b) el carácter judicial ordinario que significa la prohibición de crear
organismos ad-hoc o post facto, tribunales y juzgados de excepción o especiales, ni
parajudiciales y; c) la predeterminación legal del órgano judicial, por la cual solamente
mediante ley del Congreso se puede crear cualquier órgano jurisdiccional.
En la sentencia de fondo con motivo del caso Castillo Petruzzi vs. Perú, la Corte IDH
estableció que en el caso del Perú la jurisdicción militar había sido establecida por diversas
legislaciones con el fin de mantener el orden y la disciplina dentro de las fuerzas armadas
reservando su aplicación a los militares que hayan incurrido en delito o falta dentro del
ejercicio de sus funciones y bajo ciertas circunstancias. Como consecuencia, la Corte
determinó en el caso mencionado que “El traslado de competencias de la justicia común a la
justicia militar y el consiguiente procesamiento de civiles por el delito de traición a la patria
en este fuero, supone excluir al juez natural para el conocimiento de estas causas. En efecto,
la jurisdicción militar no es la naturalmente aplicable a civiles que carecen de funciones
militares y que por ello no pueden incurrir en conductas contrarias a deberes funcionales de
este carácter. Cuando la justicia militar asume competencia sobre un asunto que debe
El artículo 8.1 de la Convención garantiza el derecho a ser juzgado por “un tribunal
competente […] establecido con anterioridad a la ley”. Esto implica que las personas
“tienen derecho a ser juzgadas por tribunales de justicia ordinarios con arreglo a
procedimientos legalmente establecidos”, razón por la cual el Estado no debe crear
tribunales que no apliquen normas procesales debidamente establecidas para sustituir
la jurisdicción que corresponda normalmente a los tribunales ordinarios. Con esto se
busca evitar que las personas sean juzgadas por tribunales especiales, creados para el
caso, o ad hoc. (Corte IDH. Caso Apitz Barbera y otros (“Corte Primera de lo
Contencioso Administrativo”) Vs. Venezuela. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones
y Costas. Sentencia de 5 de agosto de 2008. Serie C No. 182. 50).
Imparcialidad e
Independencia.
TCD. Sent. 133-19. “El contenido esencial del derecho fundamental al juez imparcial
comporta una dimensión objetiva y otra subjetiva. En cuanto a la primera, «se refiere a la
imparcialidad del juez frente a la estructura del sistema de justicia». Y, respecto a la
segunda, apunta «a la imparcialidad del juez frente a las partes del proceso, de modo que
la decisión jurisdiccional a producir no resulte contaminada con pasiones, intereses y
subjetividades ajenas a la objetividad Instancia que contiene el recurso de revisión
constitucional” (TC/0050/12,de dieciséis (16) de octubre de dos mil doce (2012)).
Este criterio, es compartido por la Corte Interamericana sobre Derechos Humanos
(CIDH) que señala: “La Corte considera que el derecho a ser juzgado por un juez o
tribunal imparcial es una garantía fundamental del debido proceso. Es decir, se debe
garantizar que el juez o tribunal en el ejercicio de su función como juzgador cuente
con la mayor objetividad para enfrentar el juicio (...) La imparcialidad del tribunal implica
que sus integrantes no tengan un interés directo, una posición tomada, una preferencia por
alguna de las partes y que no se encuentren involucrados en la controversia (...) El
juez o tribunal debe separarse de una causa sometida a su conocimiento cuando
exista algún motivo o duda que vaya en desmedro de la integridad del tribunal
como un órgano imparcial” (Caso Palamara Iribarne vs. Chile; Sent. del 22 de noviembre
del 2005 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos).( SENTENCIA TC 0050/12) -
Imparcialidad e
Independencia
Constitución. (Art. 69.2).
El derecho a ser oída, dentro de un plazo razonable y por una jurisdicción
competente, independiente e imparcial, establecida con anterioridad por la
ley.
CPP. (Art. 5). Vinculados a la ley. Independencia de los demás integrantes
del Poder judicial, de los particulares y de otros poderes.
Participación de la
ciudadanía.
La participación de la ciudadanía en el marco del interés soberano, democrático y
republicano es la única fuente de legitimación del ejercicio de todos los poderes,
incluyendo el poder judicial.
Es por esa razón que la participación de la ciudadanía en el juicio, ya sea a través de la
participación activa que el Código Procesal Penal prevé a los medios de comunicación para
informar al público sobre los incidentes del juicio. Ya bien mediante la participación de las
Organizaciones No Gubernamentales. Cuando se trata de infracciones que afectan
intereses difusos, siempre que se trate de intereses vinculados al objeto de la organización,
y que tales organizaciones hayan sido constituidas con anterioridad al hecho, éstas podrían
constituirse en “querellantes”, esto es, en partes del proceso con poderes acusatorios y,
además, podrían constituirse en esos mismos casos en actores civiles.
Sentencia TC-0362-19, sobre la posibilidad de que los ciudadanos pueden
denunciar las faltas cometidas por los funcionarios públicos.
Constitución. (Art. 22.5) Denunciar las faltas cometidas por los funcionarios públicos en el
desempeño de su cargo.
CPP. (Art. 6). Participar en las condiciones y formas establecidas en el código.
Legalidad del proceso.
Constitución. (Art. 40. 4) “Toda persona privada de su libertad, sin causa o sin las formalidades
legales o fuera de los casos previstos por las leyes, será puesta de inmediato en libertad a
requerimiento suyo o de cualquier persona”.
Art. 69. 7. Ninguna persona podrá ser juzgada sino conforme a leyes preexistentes al acto que se le
imputa, ante juez o tribunal competente y con observancia de la plenitud de las formalidades propias
de cada juicio.
Art. 40. 13. Nadie puede ser condenado o sancionado por acciones u omisiones que en el momento de
producirse no constituyan infracción penal o administrativa
TCD. Sentencia 28-2017. Este tribunal se ha referido también al principio de legalidad, indicando
en la Sentencia TC/0183/14 lo siguiente: 6el principio de legalidad se configura como un mandato
a todos los ciudadanos y a los órganos del Estado que se encuentran bajo su jurisdicción para el
cumplimiento de la totalidad de las normas que integran el ordenamiento jurídico dominicano. De
conformidad con este principio, las actuaciones de la Administración y las resoluciones judiciales
quedan subordinadas a los mandatos de la ley. En este sentido, la Sentencia TC/0006/14
estableció que el principio de legalidad presupone que todas las actuaciones de las autoridades quedan
sujetas a la Constitución y las leyes. Es un principio cardinal del Estado de derecho que protege al
individuo de las actuaciones arbitrarias y discrecionalidades de las autoridades. La ley debe
preexistir a su aplicación, es decir, que los ciudadanos deben estar conscientes de las consecuencias de
sus actos y a qué se atienen cuando actúan en determinada dirección.
Plazo Razonable
El proceso no puede tener una duración desmedida, por esto este principio impone al Estado la obligación de
establecer normas claras y precisas que nadie estará sometido a un proceso indefinido, y así lo ha establecido el
Código Procesal Penal.
“Toda persona tiene derecho a ser juzgada en un plazo razonable y a que se resuelva en forma definitiva acerca de
la sospecha que recae sobre ella. Se reconoce al imputado y a la víctima el derecho a presentar acción o recurso,
conforme lo establece este código, frente a la inacción de la autoridad”. Arts. 8.1 CADH; y 14.3 PIDCP.
El art. 8 del CPP, se refiere al plazo razonable. Por su parte el Art. 150 habla del plazo para concluir la investigación
y de su lado el art. 370, se refiere al procedimiento para asuntos complejos.
En general cabe afirmar que la excesiva duración del proceso no supone, a decir de la más amplia jurisprudencia,
un impedimento procesal para la continuación del mismo. Sin embargo existen opiniones en el sentido de que los
retrasos, al menos aquellos imputables a las autoridades encargadas de la persecución penal (MP y policía),
deberían poder ser controlados asignándoseles consecuencias relevantes para el proceso, pues es precisamente a
aquellas autoridades a quienes corresponde vigilar por el escrupuloso cumplimiento de los derechos del acusado.
Sin embargo hay casos en los que el excesivo alargamiento del proceso perjudica de manera especialmente intensa
los derechos del sujeto pasivo del proceso, para estos supuestos la jurisprudencia permite la adopción de medidas
de mitigación que compense de alguna manera la lesión descrita. Puede así permitirse una reducción de la
responsabilidad penal del acusado o la desaparición del interés público en determinada persecución penal.
Todas estas etapas deben cumplirse dentro de un plazo razonable. Este limite de tiempo tiene como
objetivo proteger al acusado en lo que se refiere a su derecho básico de libertad personal, así como
su seguridad personal frente a la posibilidad de que sea objeto de un riesgo de procedimiento
injustificado. El Estado debe probar la culpa dentro de un plazo razonable para asegurar e
institucionalizar la confianza en la imparcialidad procesal del sistema. La equidad y la imparcialidad
del procedimiento son los objetos finales que debe lograr un Estado gobernado por el imperio de la
ley. Por lo tanto, el principio de legalidad que establece la necesidad de que el Estado proceda al
enjuiciamiento penal de todos los delitos, no justicia que se dedique un espacio de tiempo ilimitado
a la resolución de un asunto de índole criminal. De otro modo, se asumiría de manera implícita que
el Estado siempre enjuicia a culpables y que, por lo tanto, es irrelevante el tiempo que se utilice para
probar la culpabilidad.

SENTENCIA TC/0214/15: En que respecta al inicio del cómputo del plazo máximo de duración
de los proceso penales, debe considerarse que el mismo empieza el día en que a una persona se
le haga una imputación formal, a través de un acto que tenga el carácter de medida cautelar o de
coerción, cuyo objeto esté encaminado a sujetar al imputado al proceso. Así, la citación tiene el
carácter de medida cautelar personal, por cuanto la misma tiene por efecto limitar, durante el
período en el cual sea cumplido el referido acto, la libertad personal del individuo a la cual va
dirigida, y por subyacer en ella la amenaza de que en caso de no comparecer pueda utilizarse la
fuerza pública para constreñirle a ello, y en casos más extremos ordenarse su arresto, restringiendo
de ese forma su derecho de libertad personal, todo lo cual implica sujetarse al proceso.
“Por otra parte, el artículo 7.5 de la Convención Americana establece que la persona detenida
‘tendrá derecho a ser juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta en libertad, sin perjuicio
de que continúe el proceso’. Toda vez que la detención de [la víctima fue ilegal y arbitraria, el
Tribunal no considera necesario entrar a considerar si el tiempo transcurrido entre su detención y su
liberación sobrepasó los límites de lo razonable”. Corte IDH. Caso Tibi, (…), párr. 120. 826 Caso
Acosta Calderón, (…), párr. 82; y Caso Tibi, (...), párr. 120.

La Corte IDH se ha ocupado a menudo en el examen del “plazo razonable” para atender una
obligación o proveer a la tutela de un derecho. Para ello ha echado mano de ciertos datos provistos
por la jurisprudencia de la Corte Europea, a saber: complejidad del asunto, actividad procesal
del interesado y conducta de las autoridades judiciales. A la luz de esos factores o referencias
se ha calificado la razonabilidad del tiempo transcurrido, es decir, la razonabilidad del plazo
cuestionado.

En la sentencia del Caso Valle Jaramillo, la Corte reiteró “que es preciso tomar en cuenta tres
elementos para determinar la razonabilidad del plazo: a) la complejidad del asunto; b) la actividad
procesal del interesado; y c) la conducta de las autoridades judiciales”; y en seguida destacó: “El
Tribunal considera pertinente precisar, además, que en dicho análisis de razonabilidad se debe
tomar en cuenta la afectación actual generada por la duración del procedimiento en la situación de
la persona jurídica involucrada en el mismo, considerando, entre otros factores, la materia objeto de
la controversia. Si el paso del tiempo incide de manera relevante en la situación jurídica del
individuo, resultará necesario que el procedimiento corra con más diligencia a fin de que el caso se
resuelva en un tiempo breve” (párr. 155) .
Formulación precisa de cargos
Este derecho es esencial para el ejercicio del derecho de defensa, pues el
conocimiento de las razones por las cuales se le imputa a alguien la presunta comisión
de un delito, permite a los abogados preparar adecuadamente los argumentos de
descargo. Este derecho se ve satisfecho si se indica con claridad y exactitud las
normas y los supuestos de hecho en que se basa la acusación, no puede fundarse solo
en la enunciación de la denominación legal de la infracción y a la enunciación de los
textos que se afirma violados. Los Principios Fundamentales del Proceso Penal /
Pedro Balbuena y Félix Tena.
Según nuestra SCJ, para satisfacer este derecho, es necesario que en los actos
encaminados a imputar el hecho se consigne claramente: 1) el hecho, en su contexto
histórico, es decir dejando claro la fecha, hora y lugar de su ocurrencia; 2) Las
circunstancias del mismo; 3) Los medios utilizados; 4) Los motivos; y 5) Los textos de
ley que prohíben y sancionan la conducta descrita en la imputación. En fin, todo
elemento que permita al imputado conocer exactamente de que se le acusa y, en
consecuencia, ejercer satisfactoriamente el derecho a defenderse. SCJ, Resolución
1920.
“El artículo 8.2.b de la Convención Americana ordena a las autoridades judiciales competentes
notificar al inculpado la acusación formulada en su contra, sus razones y los delitos o faltas por los
cuales se le pretende atribuir responsabilidad, en forma previa a la realización del proceso. Para que
este derecho opere en plenitud y satisfaga los fines que le son inherentes, es necesario que esa
notificación ocurra antes de que el inculpado rinda su primera declaración. Sin esta garantía, se
vería conculcado el derecho de aquél a preparar debidamente su defensa”. Caso Acosta Calderón,
(…), párr. 118; y Caso Tibi, (...), párr. 187.

“Si bien en los textos de los instrumentos internacionales anteriormente citados no señalan las
formas y solemnidades bajo las cuales debe ser dada la información al inculpado, se admite que
deben respetarse las que correspondan al tipo de proceso de que se trate, siempre que se tenga en
cuenta, en cada caso, el respeto a la esencia del citado derecho del inculpado”. “En la jurisprudencia
del tribunal constitucional español, rendida sobre textos similares a los que rigen en República
Dominicana, el contenido esencial del derecho del inculpado se refiere al conocimiento de los
“hechos considerados punibles que se imputan al acusado”.

El derecho a ser informado de la acusación “es el primer elemento del derecho de defensa que
condiciona a todos los demás, pues mal puede defenderse quien desconoce los hechos por los
cuales se le acusa”. En puridad, es un derecho que se desdobla en un derecho instrumental a la
defensa y en un derecho a la asistencia de un letrado. Se reconoce que el derecho a ser informado
de la acusación da lugar a que se ponga en conocimiento del inculpado, sobre:
a) Los hechos en que se fundamenta la acusación;
b) La calificación jurídica que le atribuye quien acusa;
c) Los medios de prueba en que se fundamenta la acusación;
d) También, cualquier mutación que sufra el contenido de la acusación durante su curso.
Derecho a recurrir
El ejercicio del derecho a recurrir es conceptualizado como las "vías procesales que se
otorgan al imputado, al acusador (Ministerio Público Fiscal o querellante) y a las partes
civiles, para intentar la corrección de decisiones jurisdiccionales que por ser de algún
modo contrarias al derecho, ocasionan perjuicio a los intereses que encarnan o
representan. Procuran la revisión por parte de un órgano jurisdiccional distinto del que
las dictó…" (CAFFERATA NORES, J. Proceso Penal y Derechos Humanos. Buenos Aires.
Candil. 2000, pág. 158).
El derecho al recurso es una garantía procesal del condenado (JORGE PRATS, Eduardo.
Derecho Constitucional, Volumen II, IUSNovum. R.D. pág. 294)
Julio Maier considera el Derecho a Recurrir como "un derecho exclusivo del condenado
a requerir la doble conformidad con la condena", es decir, es decir el imputado es el
único que debe tener acceso al doble grado de jurisdicción. (Maier, J. Derecho Procesal
Penal, Vol.I. Buenos Aires. Editores del Puerto. 2004)
Derecho a recurrir
En el marco de la interpretación del artículo 8.2 de la Convención IDH la Corte IDH explicitó que el derecho a
recurrir se refiere a "las garantías mínimas de una persona que es sometida a una investigación y proceso penal.
Esas garantías mínimas deben ser protegidas dentro del contexto de las distintas etapas del proceso penal, que
abarca la investigación, acusación, juzgamiento y condena". (CIDH, caso: Mohamed vs Argentina)
El Tribunal Constitucional entiende que "el derecho a recurrir al que hacen referencia el artículo 69.9
constitucional y el artículo 8.2.h) de la Convención Americana sobre Derechos Humanos supone la posibilidad,
adecuada y efectiva, de que toda decisión judicial pueda ser contestada en los términos que a tales fines
prevean la Constitución y las leyes", vale decir, que el recurso debe estar tácitamente contenido en la ley (SENT.
TC/0038/2019). En esta Sentencia se hace acopio de las sentencias TC/0150/13, TC/0142/14 y TC/0563/15, sobre
la temática de taxatividad.
"el derecho al recurso contemplado como una garantía del debido proceso en el artículo 69.9 de nuestro Pacto
Fundamental se encuentra condicionado al poder de configuración del legislador ordinario, el cual puede
establecer condiciones y requisitos para la interposición de los recursos jurisdiccionales" (SENTENCIA
TC/150/2013)
Constitución. (Art. 69.9)
Toda sentencia puede ser recurrida de conformidad con la ley. El tribunal superior no podrá agravar la sanción
impuesta cuando sólo la persona condenada recurra la sentencia.
CPP. (Art. 21) El imputado tiene derecho a un recurso / contra sentencias condenatorias/ tribunal diferente.
Separación de funciones.
El sentido que advierte el artículo 22 del Código Procesal Penal implica la
segregación entre la labor jurisdiccional -que corresponde al juez- y las labores
de investigación y persecución penal -correspondientes al Ministerio Público.
El fin de esta separación, según lo referido por CAFERATA NORES, se fundamente
en la imparcialidad y el derecho de defensa, al referir:
"La existencia de la actividad de acusación y su separación de la actividad de
juzgamiento es imprescindible para salvaguardar la imparcialidad del juez, que
es prenda de la igualdad entre acusador y acusado, y está en la base del
derecho de defensa (nadie puede defenderse sin que exista una acusación)."
(CAFFERATA NORES, J. Proceso Penal y Derechos Humanos. Buenos Aires.
Candil. 2000.)
Este principio representa el abandono del sistema inquisitivo y la materialización
de un sistema procesal penal de derechos y garantías.
Separación de Funciones
TCD, Sentencia 43-13. “al delimitar las funciones de investigación y
ejecución de las funciones jurisdiccionales y adoptar las reglas que contiene
respecto a la fase preparatoria del proceso penal, permiten una mejor y
más eficiente función jurisdiccional en provecho de los justiciables y las
víctimas”.
Obligación de decidir.
La función de la motivación en las decisiones pronunciadas por los jueces del orden judicial, éstos están en la
obligación de establecer la argumentación que justifica la decisión, evitando incurrir en el uso de fórmulas
genéricas y aisladas que imposibiliten a las partes del proceso y a los tribunales superiores conocer las razones
que expliquen el fallo que se adopta, a fin de que éste no resulte un acto arbitrario. (Sentencia No. 188-2013 d/f
27/05/2013 la SCJ)
En ese sentido, la Suprema Corte de Justicia refiere:
“La Corte a-qua al ponderar los motivos de apelación argüidos por los hoy recurrentes en casación contra la
sentencia de primer grado, incurrió en el vicio de omisión de estatuir en cuanto al primer medio del recurso de
apelación; que en este sentido, ha sido juzgado que los jueces de fondo tienen la obligación legal, no sólo de
transcribir los pedimentos y conclusiones de las partes en el proceso, sino de ponderarlas y contestarlas
debidamente mediante una motivación suficiente y coherente, que le permita a esta jurisdicción casacional
determinar si se realizó una correcta aplicación de la ley y el derecho, lo que no ha ocurrido en la especie
El principio procesal de omisión de estatuir está ligado a mandato de prohibición con miras de realzar la labor
del juez en el respeto de la tutela judicial efectiva de cara al derecho de defensa, como lo evidencia la SCJ
mediante sentencia 112 del 25/03/2013 de la SCJ:
"…se puede comprobar, tal y como lo establece el recurrente, que la Corte a-qua omitió estatuir sobre algunos
de los puntos argüidos por el recurrente, situación que lo deja en estado de indefensión debido a que la acción
de la alzada no satisface el requerimiento de una tutela judicial efectiva, al no hacer ningún tipo de
pronunciamiento en lo referente a estos motivos, lo que implica una obstaculización al derecho de defensa de
la parte que ha resultado vencida.
Motivación de las decisiones.
La motivación de una resolución judicial es la justificación de la decisión adoptada…
(BINDER, Alberto y otros. Derecho Procesal Penal. ENJ. 2006, pág. 578)
La motivación de las sentencias debe necesariamente atender al sistema de fuentes
normativas, de donde se desprende que habrá indebida denegación del derecho a la justicia
cuando el juez funda su decisión en un razonamiento que desconoce el ordenamiento
constitucional y legal de las normas. …" (CAFFERATA NORES, J. Proceso Penal y Derechos
Humanos. Buenos Aires. Candil. 2000, pag. 292).

La Corte IDH ha manifestado en el caso Aptiz Barbera y otros Vs Venezuela, mediante


sentencia de 05 de agosto de 2008, lo siguiente “La motivación es la exteriorización de la
justificación razonada que permite llegar a una conclusión. El deber de motivar las
resoluciones es una garantía vinculada con la correcta administración de justicia, que
protege el derecho de los ciudadanos a ser juzgados por las razones que el Derecho
suministra, y otorga credibilidad de las decisiones jurídicas en el marco de una sociedad
democrática.”
El Tribunal Constitucional mediante Sentencia 696-2016 en interpretación del art. 24 del Código Procesal
Penal, ha establecido: " En ese sentido, el artículo 24 del Código Procesal Penal ha previsto la obligación a
cargo de los jueces de motivar sus decisiones de manera clara y precisa, por lo que la simple o mera
enunciación de las pretensiones de las partes, la exposición de las normativas aplicables al caso sometido a
su consideración y la presentación de las incidencias procesales debatidas en las decisión atacada, Resolución
núm. 3879-2014, no constituyen motivos suficientes para declarar inadmisible el recurso de casación, sobre
todo si para ello fue empleada la fórmula genérica de que el recurso de apelación fue contestado por la Corte
de Apelación conforme al derecho, sin precisar exactamente los fundamentos en los que sostiene ese
argumento."

El deber de motivación de las sentencias que incumbe a los tribunales del orden judicial requiere:
a. Desarrollar de forma sistemática los medios en que fundamentan sus decisiones;
b. Exponer de forma concreta y precisa cómo se producen la valoración de los hechos, las pruebas y el
derecho que corresponde aplicar;
c. Manifestar las consideraciones pertinentes que permitan determinar los razonamientos en que se
fundamenta la decisión adoptada;
d. Evitar la mera enunciación genérica de principios o la indicación de las disposiciones legales que hayan sido
violadas o que establezcan alguna limitante en el ejercicio de una acción; y
e. Asegurar, finalmente, que la fundamentación de los fallos cumpla la función de legitimar las actuaciones de
los tribunales frente a la sociedad a la que va dirigida la actividad jurisdiccional.
(Sentencia TC/009/2013)
“La motivación de la sentencia es fuente de legitimación del juez y de su
decisión. Permite que la decisión pueda ser objetivamente valorada y
criticada, garantiza contra el prejuicio y la arbitrariedad, muestra los
fundamentos de la decisión judicial, facilita el control jurisdiccional en
ocasión de los recursos, en vista de que la conclusión de una controversia
judicial se logra mediante la sentencia justa, para lo cual se impone a cada
juez, incluso con opinión disidente, la obligación de justificar los medios de
convicción en que la sustenta, constituyendo uno de los postulado del
debido proceso, la que solo puede ser lograda cuando se incluya una
valoración adecuada de las pruebas conforme a las reglas de la sana critica,
lo que fortalece la seguridad jurídica a que aspiran disfrutar los ciudadanos
de manera objetiva" (Resolución No.1920-2003 de la SCJ)
Interpretación.
SCJ. Sentencia las sentencias condenatorias solo pueden ser dictadas cuando
las pruebas aportadas sean suficientes para establecer con certeza la
responsabilidad penal del justiciable, fuera de toda duda razonable
(Sentencia 915, d/f 2-10-17).
Constitución. Art. 74.4
◦ A favor del titular del derecho.
◦ En casos de conflicto entre derechos fundamentales, procurarán armonizar los
bienes e intereses protegidos por esta Constitución.

CPP. (Art. 25).


◦ Interpretación restrictiva, si coartan la libertad o establecen sanciones procesales.
◦ Analogía e interpretación extensiva, para favorecer al imputado.
◦ La duda favorece al imputado.
Legalidad de la prueba
SENTENCIA TC/0264/17
“Sobre la legalidad de la prueba, este tribunal constitucional ha señalado que
“sólo son admisibles como medios de prueba aquellos cuya obtención se haya
producido conforme a las reglas establecidas por la Constitución, la legislación
procesal y los convenios internacionales en materia de derechos humanos”, así como
de lo dispuesto por el artículo 69.8 de la Constitución, el cual dispone que “[e]s nula
toda prueba obtenida en violación a la ley” (TC/0134/14).
Constitución. (Art. 69.8)
Es nula toda prueba obtenida en violación a la ley.
CPP. (Art. 26).
Obtenidos e incorporados, conforme a los principios y normas.
Puede ser invocado en todo estado de causa.
Provoca la nulidad del acto y sus consecuencias.
Ejecución de la pena.
TCD. Sentencia 33-2015. Todas las cuestiones relativas a la ejecución de las sentencias de
orden penal que sean firmes deben ser tratadas por el Juez de la Ejecución de la Pena, por
lo que el hecho de que el Director General de Prisiones y el Alcaide del Centro de
Corrección y Rehabilitación de Montecristino hayan ejecutado una decisión que dicho
juez dictó, se constituye en una situación anómala que tiene que ser resuelta por este
funcionario, Juez de la Ejecución de la Pena, al cual le corresponde hacer cumplir toda
sentencia firme dictada en el marco de los procesos penales.
Constitución. (Art. 40.16) Las penas privativas de libertad y las medidas de seguridad
estarán orientadas hacia la reeducación y reinserción social de la persona condenada y no
podrán consistir en trabajos forzados.
CPP. (Art. 28).
Control jurisdiccional.
Para condenados.
Acceso a las acciones ante derechos y facultades que reconoce la ley.
Garantía de condiciones de habitabilidad.
¡MUCHAS GRACIAS!

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