ESCRITURA CREATIVA - Cuadernillo de Trabajo

TAMARA PALOMA
ESCRITURA CREATIVA
CUADERNILLO DE TRABAJO
TALLER I
2021
ESCRITURA CREATIVA. Cuadernillo de trabajo - Taller I
Autor:
©Tamara Paloma
Editor:
©Tamara Pequeño
Calle Federico Gerdes 141. San Miguel
sos.milibro@gmail.com
Diseño y diagramación: Tamara Pequeño

Imagen de portada: Una dama escribiendo una carta. Gerard Terborch.
Quedan prohibidos, sin la autorización escrita del autor, bajo las sanciones
establecidas en las leyes, la reproducción parcial o total de esta obra por
cualquier medio o procedimiento, comprendido la reprografía y el tratamiento
informático, y la distribución de ejemplares de ella mediante alquiler o
préstamo público.
Primera edición (digital): marzo, 2021

lulu.com
Hecho el Depósito Legal en la Biblioteca Nacional del Perú N°: N° 2021-02130

ISBN: 978-612-00-6065-0
Tamara Paloma (Lima,
1974) Es escritora fantas-
ma desde hace 18 años.
Ha publicado los libros
colectivos “Mundos en
Tinieblas” (Buenos Aires,
2009) y la antología de
ensayos “Buenos Aires, la
otra ciudad. Una mirada
del extranjero en tránsi-
to” (Buenos Aires, 2009).
El 2019 publicó el poema-
rio “El otoño de las horas
muertas”, entre otras pro-
ducciones.
Fue destacada en el Concurso de microrrelatos Bibliotecuento
2019. Magíster de Escritura Creativa de la Universidad Nacional
Mayor de San Marcos e integrante del colectivo de escritoras
“Saqra”. Además de su oficio de escritora se desempeña como
docente en talleres de escritura.
Escritura Creativa - Tamara Paloma
Indicaciones y recomendaciones
Cada módulo iniciará brindándote información teórica escrita de
manera directa y sencilla. Si tienes un interés por conocer más
detalles podrás consultar la bibliografía adicional que te envia-
remos.
Seguir los consejos prácticos y desarrollar cada ejercicio te ayu-

dará a progresar, aunque estos inicialmente te parezcan muy
sencillos es importante que los desarrolles progresivamente.
Sé puntual. Cumple con el cronograma de entrega de trabajos

y reuniones. Esto es importante para que puedas tener a tiem-
po los comentarios que te ayudarán a cumplir con los objetivos
trazados. Para un escritor es muy importante tener comentarios
oportunos porque ayudan a afinar el proyecto y a tener puntos
de vista distintos.
Realiza las consultas que necesites hacer a tu entrenador. Todos

estamos para aprender y no debes quedarte con ninguna duda.
Disfruta el trabajo creativo y guarda, incluso, aquel poema o rela-

to del que no estés convencido/a completamente de su calidad.
Ya tendrás tiempo para mejorarlo.
Todas las lecturas recomendadas las encontrarás de manera libre

y gratuita en Internet.
INTRODUCCIÓN
La calidad de la escritura se logra con la práctica, la corrección,

también con la lectura y el intercambio de lo escrito con otras
personas que sepan del oficio y que nos puedan dar sugerencias
para mejorar. Todo esto debe ser constante, y poco importan las
publicaciones que se logren tener o los premios y reconocimien-
tos conseguidos, la calidad de la escritura requiere práctica cons-
tante y de la interacción con el colectivo por su propia naturaleza
comunicativa.
El autoaprendizaje puede lograrse, pero toma mucho más tiem-
po que ir de la mano de alguien que tiene la experiencia.
Por eso, en este taller inicial te entregamos de manera sintética
conceptos, recomendaciones y ejercicios que te llevarán a con-
seguir una escritura fluida y con estructura.
El método utilizado ha logrado buenos resultados tanto para es-
tudiantes sin conocimientos previos de literatura ni redacción,
como para participantes de niveles más avanzados. Lo principal
es que cumplas con todos los ejercicios en el orden en que son
presentados porque en las reuniones se comentará lo que hayas
podido presentar con antelación.
No queda más que felicitar tu decisión de participar en este taller
que, sin duda, será de gran provecho para tu formación profe-
sional –sea del campo laboral que sea– y tu desarrollo personal.
05
MÓDULO 1
Redacción básica y estilo. Objetivos de la escritura. La puntuación
y la ortotipografía al servicio de la narrativa. Ejercicios. Lecturas.
ALGUNOS CONCEPTOS INICIALES
La escritura creativa puede ser aplicada tanto a los textos de fic-

ción como a los de no- ficción. Su rasgo principal es salir de la
convención expresiva –que puede resultar aburrida– para captar
la atención del lector (receptor).
Tiene características que deberás tomar en cuenta para que pue-
das crear un texto que logre cumplir con los objetivos, y no ter-
mines enredándote entre las palabras. Estas son:
Claridad. Construcción de frases sencillas y concretas que inte-

gren sujeto y predicado. Procurar que el párrafo que construyas
no tenga más de cinco líneas.
Economía. Evitar ser reiterativo enunciando afirmaciones ya di-

chas. Todo lo que se coloca en un relato deberá tener un papel
dentro de la historia. Si un personaje se encuentra con otro se-
cundario, aquel hecho deberá tener una consecuencia o ser un
elemento útil para la trama.
Riqueza del lenguaje. Se requerirá siempre trabajar con un dic-

cionario de sinónimos para evitar la repetición. El uso de un vo-
cabulario limitado no solo da la impresión de la poca capacidad
expresiva e intelectual del escritor, sino que le da monotonía al
texto, que se traducirá en agobio para el lector.
06
Con la práctica continua de la escritura, el estilo básico tomará
de manera progresiva un estilo particular que responde a las ca-
racterísticas y la forma de ver el mundo de cada autor. Este estilo
particular es parte de lo que entendemos como la poética del
autor y que hace que podamos reconocerlo, de la misma manera
como un intérprete expresa una canción, un escritor interpretará
su concepción del mundo.
La escritura es una forma de comunicar. Un escritor tiene que ser

consciente sobre qué es lo que espera de esta práctica. Si estás
en este grupo es porque has considerado que la escritura, para
ti, va más allá de una descarga emocional y quieres comenzar a
ser leído y con gusto, de manera que vas a tener que considerar
ciertos objetivos:
Objetivos de la escritura creativa

Qué me presten atención y conservar esta atención hasta el final.
Comunicar.
Emocionar.
La hoja en blanco
La primera dificultad para quienes desean comenzar a escribir es
la hoja en blanco. Simplemente no se les ocurre nada. No logran
hacer que las ideas salgan y no encuentran esa primera frase que
capture la atención del lector.
En otros casos, los iniciados tienen el deseo e impulso de escri-
bir algo que sea grandioso, trascendental y fuerzan el relato con
tantas historias e ideas en un pequeño espacio, que terminan
enredándose.
La puntuación y la ortotipografía al servicio de la narrativa

Si escuchas una melodía podrás apreciar que, en esta, varía la
velocidad, lo cual le da el ritmo y es lo que contribuye a la atmós-
07
fera y nos transmite diversas emociones. Los silencios también
pueden ser muy elocuentes. Este ritmo se consigue gracias a lo
señalado por las semicorcheas, corcheas, negras, blancas y re-
dondas colocadas en el pentagrama, que para el músico tienen
un valor determinado de tiempo.
En la escritura tenemos lo mismo. Los signos de puntuación guia-
rán el ritmo de la lectura y también la entonación.
Las frases cortas separadas con puntos, las palabras separadas
con comas le darán al párrafo que las contiene una velocidad
mayor que un párrafo con oraciones más largas. Y si deseamos
establecer un relato que denote acción, no solo nos apoyaremos
en lo contado, sino en la manera en que lo contamos.
Pero la puntuación no solo le da ritmo a lo escrito, también pue-
den llegar a cambiar el significado, por eso es imprescindible co-
locarlos respetando las reglas ortográficas.
Una breve historia que nos da un ejemplo del cambio de signifi-
cado por una mala colocación de signos de puntuación, o la falta
de estos, en el lugar que corresponde:
Un hombre no sabía si dar el consentimiento para que su hijo

fuera como voluntario a la guerra. Por una parte ir podría sig-
nificar una serie de ventajas y reconocimiento –si volvía de la
batalla– pero por otro lado, también podía terminar perdiendo a
su único hijo. Así que decidió ir a consultarle a una vieja adivina.
La anciana, después de realizar los rituales previos, quedó en
trance y escribió en una hoja el futuro del muchacho.
El hombre retornó a su casa y abrió el papel entregado por la
pitonisa. En este decía lo siguiente:
“Irás y volverás nunca en la guerra perecerás”
Feliz de saber que a su hijo le esperaba el retorno lo alistó de

inmediato en el grupo de soldados.
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Pero no pasaron ni dos meses y le dieron la mala noticia: Su hijo
había muerto.
Triste y furioso por lo que consideró una estafa que había llevado
a la muerte a su hijo fue a reclamarle a la vidente, y esta, que lo
recordaba muy bien, le respondió:
–Jamás dije que volvería con vida. Yo anuncié solo la verdad:
“Irás y volverás nunca. En la guerra perecerás”
No resulta una exageración cuando afirmamos, entonces, que

los signos de puntuación pueden hasta salvarnos la vida.
Dentro del material que te brindamos te entregamos un anexo
para que revises los signos de puntuación más usados, sus fun-
ciones y las reglas para su uso.
MANOS A LA OBRA
En esta primera sesión vamos a desarrollar algunos ejercicios
iniciales para lograr “soltar la mano”. Recuerda siempre que el
escritor no es el personaje y si bien todos los escritores partimos
de nuestra experiencia (lo pensado o lo vivido) y de experiencias
ajenas, lo que escribamos no debe realizarse sin un plan porque
ello nos llevará a divagar. Ya profundizaremos más sobre este
punto cuando lleguemos a la tercera sesión.
Sin embargo, todo nuestro conocimiento adquirido a través de
los años, lo que leamos, las películas que hayamos visto, la mú-
sica escuchada, las personas con las que hemos conversado nos
ayudarán en nuestro proceso creativo. Toda historia, aunque no
hable de nosotros, tiene, en definitiva, algo de nosotros.
Trabajar con estructura no significa censurarnos para solo escri-
bir lo que pensamos que los demás esperan de nosotros.
A continuación, te dejo unos ejercicios para que empieces este
maravilloso viaje de creación.
09
EJERCICIOS
Desarrolla los siguientes ejercicios en el orden en que son plan-
teados.
GLOSARIO PERSONAL
Ejercicio práctico nº 1
En esta oportunidad crearás tu propio glosario. Este tendrá un

estilo muy diferente a los conceptos que indicaría un diccionario
convencional.
La idea es que comiences a dejar suelta tu imaginación. Procura
usar el humor, tal como lo indican los siguientes ejemplos.
Ejemplos:
a. AMOR:
Enfermedad temporal que se cura con el matrimonio. Palabra de
cuatro letras, dos consonantes, dos vocales y dos idiotas.
b. HÉROE:
Individuo que, a diferencia del resto, no pudo salir corriendo.
c. MENÚ:
Lista de cosas indigeribles.
1. Redes Sociales:
2. Congresistas:
3. Vacaciones:
4. Sueldo:
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5. Ingeniero:
6. Computadora:
7. Jefe:
8. Jubilación:
PONIÉNDOLE LA COLA AL TEXTO

Instrucciones: Conservando el estilo de lo escrito en cada blo-

que, continúa la narración iniciada (solo agrega un párrafo).
1. Antes de nacer, sabía ya que le esperaba un gran destino. Sin

embargo, sentía tanto miedo de salir del vientre de su madre que
decidió quedarse algunos meses más.
2. Lulú vestía una batita fresca y dura como una hoja de col. Su
rostro, de muñeca de solterona, tenía los colores demasiado vi-
vos. Había sin duda que dejar envejecerla.
3. Iba con él Panagurgo, que, como siempre, llevaba debajo de la

ropa un frasco de vino y algunos pedazos de jamón, pues nunca
salía sin eso.
4. El diablo se levanta crujiendo y se echa a andar cuesta arriba

por los matorrales. Le sirve de bastón el cetro de siete dientes de
hierro: los siete soldados, guardianes de los portones del infier-
no, lo guían en la negrura de la noche y le prestan puertas para
sostenerse los músculos mientras elude las piedras y los ramajes
del morro.
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5. A Demetrio Huachano nadie le preguntó nada. Lo cogieron de
los pelos y se lo llevaron para amarrarlo en el asta de castigos.
6. Electra abrió los ojos, echada en el césped recordó su último

viaje intergaláctico. Tragó saliva y oliendo la hierba fresca se re-
lajó tanto como una hoja otoñal. La sensación de tener dentro
suyo al universo entero, infinito, la alucinaba y la agobiaba de tal
manera que por momentos la garganta se le cerraba como un
nudo marinero.
7. Cuando se presentó, sin decir su nombre, no le reconocí. Ha

cambiado su color y me parece que hasta de corpulencia.
8. Nunca se supo cómo había llegado el marqués a semejan-

te desidia, ni porqué mantuvo un matrimonio tan mal avenido
cuando tenía la vida resuelta para una vejez apacible.

RECONTAR EL CUENTO
Cuento: La migala (autor: Juan José Arriola) https://ciudadseva.

com/texto/la-migala/
Extensión: Libre
Instrucciones: Este ejercicio no consiste en hacer un resumen
del cuento. Sino de hacer una adaptación. Colócate en el lugar
del escritor y cuenta la historia con tus propias palabras como
lo haría el autor. Reflexiona sobre lo que generó en ti el relato, e
intenta reproducir emociones similares. Que tu relato no sobre-
pase las 1000 palabras.
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Recomendaciones:
Trabaja con oraciones cortas.
Que tus párrafos no tengan más de 5 líneas
Procura mostrar un vocabulario variado. No seas reiterativo con
el uso de las palabras. Para ello existen muchísimos sinónimos,
elige el más conveniente tomando en cuenta su significado y so-
noridad en conjunto con los demás elementos de la oración.
Lee tu trabajo en voz alta antes de entregarlo para que detectes
las fallas de organización lógica, ortografía y eufonía (sonoridad
agradable resultante de la acertada combinación de las pala-
bras).
LECTURAS
Leer “Escribir un cuento” de Raymond Carver.
Consultar el Anexo: Reglas de puntuación.
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MÓDULO 2
Mecanismos de producción textual. Creatividad y la búsqueda
de un lugar en el mundo. Ejercicios. Lecturas.
MECANISMOS DE PRODUCCIÓN TEXTUAL
Con el desarrollo del oficio, cada escritor va desarrollando sus es-

trategias para producir diversos textos. Un mismo escritor pue-
de tener variedad de formas para llegar a elaborar un texto. Los
mecanismos varían no solo entre los creadores sino, también, de
acuerdo a la necesidad que el producto a redactarse requiera.
La experiencia que tenemos los escritores fantasmas nos brinda
una ventaja muy valiosa frente a los escritores establecidos en
un solo tipo de género. El aprendizaje, por supuesto, nos resulta
útil, además, para nuestros propios proyectos de creación.
La producción poética requiere trabajar mucho la memoria emo-
cional y social y, como en toda la práctica de la escritura: la ob-
servación, aunque el tema que se aborde no busque tratar de
rememorar las experiencias propias.
En narrativa tenemos diferentes estrategias, desde basarnos
en momentos puntuales de la Historia, pasando por la explora-
ción de artículos de desarrollo científico, notas periodísticas –la
prensa policial ofrece una enorme gama para ser trabajada en
la literatura–, las cartas, las conversaciones propias y ajenas y la
reflexión sea filosófica o no, a partir de alguna pregunta. A con-
tinuación juguemos a realizar alguna de estas preguntas. Yo em-
pezaré con una lista de preguntas que podrás continuar y que,
en el futuro, podría resultarte útil para la elaboración de alguno
que otro cuento.
¿Qué sucedería si un día amaneciera el mundo con la tv, el inter-
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net, la radio, los teléfonos sin funcionar?
¿Qué sucedería si los gobiernos descubrieran que podrían domi-
nar a la población con los olores?
Creatividad y la búsqueda de un lugar en el mundo

Se han generado grandes y largas discusiones sobre lo qué es la
“poética” de un escritor.
Aristóteles en su Poética (2015) señala que esta se refiere a la
técnica de la composición, más que el contenido. Pero con el
transcurrir del tiempo, resultaría rígida y extemporánea defen-
der esta concepción aristotélica.
Coinciden varios autores, tanto poetas como narradores, que la
poética no solo es la forma sino, el contenido.
Este contenido literario permite crear otros mundos, tomar una
posición en el mundo, trascender la historia, siendo producto de
esta (Paz, 2015: 187). La metáfora, el ritmo, las analogías no solo
son elementos estéticos, sino que esa forma a la que se refería
Aristóteles contiene una intención para hablar de aquello que se
hace difícil utilizando el lenguaje convencional.
Por eso, considero que forma y contenido constituyen una amal-
gama para expresar existencialmente nuestros puntos de vista
como parte de la sociedad.
Los temas y la forma escrita en cada tiempo suelen darnos indi-
cios de lo que inquietaban a la sociedad de su momento.
Algunos escritores planifican su obra a partir de una clara re-
flexión sobre su posición en el mundo. Otros, no lo hacen pero
no se libran de darnos señales sobre la sociedad de su tiempo o,
incluso, al escribir, ellos mismos irán descubriéndose como parte
de esa estructura social.
La literatura no solo es creación estética, de ahí que tener una
amplia lectura de temas variados siempre ayudará a mejorar tu
producción. Hay escritores novatos que consideran que solo le-
yendo literatura lograrán conseguir herramientas para escribir.
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Se debe lee de todo, porque todo producto humano es un pro-
ducto histórico, pero leer siempre con mirada crítica y contes-
tando al autor nuestra posición con respecto a sus afirmaciones.
Para empezar a ser un buen escritor es necesario ser un lector
activo y no uno pasivo.
Sugerencias de algunas estrategias de producción:

Leer y buscar noticias extrañas.
Leer novedades científicas (descubrimientos, nuevas operacio-
nes, amenazas biológicas, etc.)
Leer filosofía, historia, geografía y otras ciencias humanas y usar
un punto concreto para empezar una investigación y realizar una
creación literaria.
Hacer entrevistas a personajes no convencionales.
Realizar ejercicios de observación y procurar relatar desde la
sencillez. Ej. Escribir sobre una flor, sus características, darle per-
sonalidad, describir su olor y lo que puede llegar a lograr con
este, etc.
Tomar un personaje de una historia y continuar con la historia
no contada.
Hacerse la pregunta ¿Qué sucedería si…? Y comenzar a desarro-
llar un relato.
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EJERCICIOS
LA PESCA
Instrucciones: Elige tres noticias (pueden ser sobre tu campo de

investigación) que consideres que podrían derivar en un cuento,
sea por lo extraño del suceso, por alguna cualidad de los per-
sonajes, por lo interesante de la anécdota. Haz una captura de
imagen que pueda ser leída de las noticias seleccionadas.
LA PESCA 2
Instrucciones: Haz una lista de 10 preguntas por cada una de las

noticias elegidas que no hayan sido respondidas en estas notas
periodísticas. Estas preguntas no necesariamente están relacio-
nadas con la información que te presentan, puede que surjan a
partir de un personaje, su pasado, su destino, o de alguna infor-
mación satélite a la principal. Esta curiosidad adicional te ayuda-
rá a construir la trama.
COCINANDO EL PESCADO
Instrucciones: De las tres noticias seleccionadas elige una para

que desarrolles una historia. No tienes necesidad de conservar
los elementos reales de la noticia, esta solo servirá como dis-
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parador para crear el relato. Cuenta la historia usando la terce-
ra persona en singular o plural, según sea la necesidad. Envía
el ejercicio antes de la reunión con tu coach literario para que
puedan realizarse un comentario en clase.
LECTURAS
Leer “Filosofía de la composición” de Edgar Allan Poe.
Antes de iniciar con los ejercicios lee las siguientes lecturas:
“Decálogo del perfecto cuentista” de Rilke
“Decálogo para cuentistas” de Julio Ramón Ribeyro
“Diez consejos para escribir un cuento” del Centro GABO

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MÓDULO 3
Estructura narrativa. La perspectiva del narrador. Creación de
personajes. Ejercicios. Lecturas.
ESTRUCTURA NARRATIVA
Una estructura básica que funciona muy bien para planificar el

relato es la del clásico 3: Presentación, nudo y desenlace. En el
caso de los microrrelatos se ingresa a la historia, incluso, desde el
título, que ya nos ubica en un determinado ambiente para desa-
rrollar, como un zarpazo, el nudo y el desenlace. Pero hablemos
de un relato más extendido: el cuento.
Toda historia nos muestra la transformación de los personajes o
el personaje. Esta transformación se da a partir de una batalla li-
brada por este, sea a nivel psicológico contra sus propios miedos
o deseos, o sea contra las circunstancias que debe enfrentar.
Pero, veamos que va sucediendo en las diversas etapas.
Presentación
En la presentación tenemos la oportunidad de mostrar los per-
sonajes y el contexto para que el lector pueda tener un punto de
referencia y apreciar las transformaciones de las circunstancias y
el proceso de la historia hasta llegar al clímax.
En esta etapa, ingresamos al relato desde el tono con que se nos
cuentan los acontecimientos. Vamos a ir descubriendo si se trata
de una historia de misterio, de acción, de terror, una historia de
corte realista, fantástica, o demás. En resumen, el lector, en la
presentación, recibe las referencias de lo que vendrá.
La presentación debe tener un párrafo inicial que consiga atrapar
al lector. Iniciar con una acción, un diálogo que genere curiosi-
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dad, o, incluso, una consecuencia producto de una acción que
podría considerarse de resolución –como en el caso de Crónica
de una muerte anunciada– donde hasta el título nos adelanta el
final.
Nudo (Compromiso – evolución - clímax)

En toda historia, los personajes toman decisiones, se destapan
situaciones, la trama (el tejido narrativo) sufre una complicación
que marca una distancia con el planteamiento inicial desarrolla-
do en la presentación.
Lo que se ha etiquetado como “Compromiso” es el momento del
nudo en que los personajes toman decisiones y generan el giro
en la trama; estas decisiones tendrán consecuencias, dándose la
“Evolución” y finalmente se llega al “Clímax”, el punto más álgi-
do sin posibilidad de retorno, puesto que de ahí se producirá un
desenlace (Coronado, 2014).
Desenlace
El desenlace es la fase final de la historia. En esta puede darse un
giro que sorprenda al lector llevándolo por el desarrollo más in-
esperado, o varios giros –lo que demanda más experiencia en el
oficio– lo que produce un gran efecto, sobre todo en los relatos
de suspenso, misterio y policiales.
En esta fase, el personaje ya consiguió una total transformación.
El desenlace es una de las fases más complicadas. Incluso más
que el inicio, que para algunos autores llega como un conjunto
de imágenes de gran potencia que posibilita el inicio de un relato
interesante.
En el final se debe buscar tener un ritmo de resolución y elegir
muy bien cada palabra.
La palabra final de un relato si es aguda (fuerza de voz en última
sílaba) o grave (fuerza de voz en penúltima) causará mayor efec-
to en el lector. Y jamás… jamás, termines la historia dando una
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lección o dando una moraleja o un resumen del hecho. Debes
confiar en el lector y dejarlo sacar sus conclusiones.
Cada lector puede interpretar la historia de modo distinto, si das
moralejas no solo recortas esta libertad, sino que caerás muy
mal. Nadie quiere que le den lecciones de moral en un relato.
Tampoco realices finales simplones y fáciles, como terminar di-
ciendo que todo era un sueño o cosas de ese tipo. Con ello solo
destruyes todo el trabajo realizado.
Una historia es un edificio, con una estructura donde un piso te
lleva a otro. Trabaja el final pensándolo antes de escribirlo, aun-
que sea a grandes rasgos pero con la libertad de ir colocando en
la estructura “la carne” que le de forma al esqueleto.
LA PERSPECTIVA DEL NARRADOR
Antes de ingresar a este ámbito, empecemos por definir ¿Qué

es un narrador? El diccionario de narratología nos brinda la si-
guiente definición “entidad ficticia a la que, en el escenario de la
ficción, cabe la tarea de enunciar el discurso” (Reis/López, 2002).
El narrador nos dará las referencias para que los lectores nos ubi-
quemos dentro del tiempo y contexto de la historia.
Siempre debemos recordar que el escritor y el narrador son suje-
tos independientes y de naturalezas diferenciadas (el primero es
un sujeto real y el segundo es un personaje del mundo ficticio).
El escritor debe tomar distancia de los personajes y, por tanto,
también del narrador.
Esto hará que podamos conducir la trama sin terminar sufriendo
con ellos y abriéndonos el pecho, pues, para el productor narra-
tivo el oficio de la escritura se trata de un trabajo que requiere
planificación, investigación, escritura y corrección. Si quieres ser
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leído o leída deberás trabajar en tus textos y dejar de escribirlos
como lo harías en una terapia: soltando todo.
La voz que el escritor decida usar para su narrador, deberá pen-
sarla sin dejar de considerar el tipo de historia que desea contar.
Narrador en primera persona (Yo)

Si el narrador es también uno de los personajes contará los acon-
tecimientos en primera persona. Esto le dará la ventaja de trans-
mitir con detalle el mundo emocional del personaje y de conver-
tir al personaje en testigo.
En el cine estaríamos utilizando la cámara subjetiva que avan-
za con nosotros y que mira el mundo a través de nuestros ojos.
Un narrador en primera persona no puede saber lo que piensan
otros personajes de los que, incluso, tenga sospechas; a cambio,
podrá contar sus sentimientos más profundos.
Pero como narrador en primera persona, también, se presenta-
rán otras dificultades. El escritor deberá ser cuidadoso para evi-
tar darle exceso de presencia solo al personaje principal que es,
al mismo tiempo, el narrador, y dejando a los demás en el olvido.
También, podría ser más complicado burlarnos un poco de este
narrador-personaje, si lo deseamos.
La narración en primera persona es una estrategia expresiva que
resulta muy efectiva para las historias de suspenso, misterio, te-
rror, policiales porque mantenemos ocultos los intereses y las
acciones de los demás personajes.
Narrador en segunda persona (Tú)

El narrador busca la complicidad del lector, lo hace parte del
juego, de la historia. Los tiempos verbales más recomendables
para usar con este narrador son: el uso del presente y del futu-
ro. (Ejemplo 1: Escuchas lo que dices, pero no se te ocurre nada
mejor que ponerte a correr sin parar, sin que nada te detenga.
Ejemplo 2: La mirarás a los ojos y sabrás que no podrás resistirte,
22
entonces, confesarás todo). Usar la forma imperativa, también
funciona.
Aunque es una voz narrativa que no suele ser usada porque pue-
de ser algo limitante, se logran grandes efectos si está bien tra-
bajada. Es recomendable para microrrelatos o cuentos breves y
no para relatos extensos o novelas.
El narrador en tercera persona (Él/Ella)

Este narrador es también llamado heterodiegético (narrador ubi-
cado fuera del espacio y tiempo de la narración). Está ubicado en
el punto de vista opuesto al narrador en primera persona.
Este narrador puede ser objetivo y funcionar solo narrando “lo
que ve” distanciándose de los personajes o tomar el papel total-
mente opuesto como la del narrador omnisciente, también co-
nocido como “Narrador con focalización cero”.
El narrador omnisciente controla de manera absoluta la informa-
ción sobre todos los personajes del relato, tanto sus ubicaciones,
planes, su pasado, su destino y sus sentimientos más profundos.
No hay que abusar de este narrador, los diálogos también pue-
den mostrarnos el perfil de cada personaje y, de esa manera,
descargamos el peso colocado en el discurso del omnisciente.
Más que “contar”, podemos “mostrar”.
CREACIÓN DE PERSONAJES
Hay algunas convenciones que se toman en cuenta en los rela-

tos de la escritura de ficción. Los saltos de tiempo para cambiar
de escena, el obviar algunas acciones cotidianas que podría tener
cualquier persona en la vida real, y no por eso dejamos, como lec-
tores, de creer en la historia como si se tratara de una historia real.
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Sin embargo, como escritores, debemos trabajar con algunas se-
ñales que les den a nuestros personajes ciertos anclajes que nos
hagan intuir sobre su manera de ser.
Siempre es mejor mostrar que calificar. Si tengo un personaje
al que quiero mostrar como egoísta, descarado y, sin embargo,
amoroso con su círculo íntimo –no son creíble los personajes to-
talmente buenos o malos, los seres humanos tenemos matices–,
entonces mostraré con diálogos o actos la forma con que se re-
laciona con los demás y deberé confiar en que el lector sacará su
propia conclusión.
Algunos autores recomiendan, para evitar crear estereotipos,
construir un personaje reuniendo sus rasgos básicos a partir de
sus virtudes, defectos, hábitos, fragilidades, identidad moral,
temores, habilidades, traumas, manías y otros elementos que
puedan definir sus posibles reacciones e interacciones, sin haber
determinado su género, lo cual ya se irá decidiendo, según sea
necesario, con el avance de la historia.
Utilidad de los personajes

A través de los personajes se desarrolla la narración. Ya hemos
mencionado que sin conflicto no hay historia y es con los perso-
najes que surge el conflicto, condición que hará que el personaje
busque un propósito y tome una decisión fundamental que afec-
tará la trama.
En una trama, el conflicto marca la pauta de la dirección hacia
donde se conduce la historia, los giros –o cambios de rumbo–
que también son causados por los personajes frente a los acon-
tecimientos logran que la trama se enriquezca y se haga más in-
teresante para el lector que esperará la reacción (producto del
conflicto) del personaje.
El personaje entra en escena

Los personajes que van interviniendo, se van presentando de di-
24
versas maneras. Su presencia, en algunos casos, es como cuando
se ingresa a un escenario, el foco de atención se concentra en el
sujeto de manera contundente.
El papel del personaje debe ser muy concreto, si su presencia
no cambia nada en la historia ni fuerza a los demás personajes
a tomar actitudes y decisiones, no será un motor dentro de la
trama y no tendrá necesidad de existir. Ningún personaje debe
salir sobrando.
Un personaje puede ser presentado describiendo su aspecto fí-
sico pero también a través de su mundo interior, esa elección
dependerá de la necesidad de la trama.
El personaje puede ser presentado no solo de manera descripti-
va por el narrador –como lo hemos mencionado– sino también
por medio de diálogos entre otros personajes o a través de la na-
rración de acciones a través de las que obtendremos información
sobre su temperamento.
Estas acciones que se desarrollan pueden ser eventos extraordi-
narios o patrones habituales. La cotidianidad de un personaje nos
da información importante sobre sus costumbres y su relación con
el mundo, además de un marco de referencia para hacerlo crecer
y desarrollarse, es decir, transformarlo a través de la historia.
Tipos de personajes
Protagonista (a través de sus ojos vemos el mundo y desarrolla-

mos la historia. Es un personaje eje).
Secundario (la historia se enriquece con los conflictos e interre-
laciones y los personajes secundarios hacen que el personaje
central y la propia historia tengan matices, credibilidad y diversas
texturas que enriquecen el texto).
Catalizador (cumplen la función de bisagras porque nos ayudan
a conectar a los personajes. Aparecen en momentos muy con-
cretos para facilitar el vínculo de manera natural).
25
EJERCICIOS
El juego de las consignas

Te brindaré dos consignas para que, como mínimo, desarrolles la

que prefieras y produzcas a partir de esta, un cuento (Extensión
límite: 1000 palabras). Luego desarrolla en 6 líneas la reseña de
tu cuento.
• Escribe una historia en el que exista una abuela malvada.
• Escribe una Bio-bibliografía, en el que cuentes la historia de tu
vida pero utilizando frases o títulos de libros que te hayan impre-
sionado.
Busca el clímax
En los cuentos señalados a continuación –en el ítem “Lecturas”–

determina cuál es el clímax de cada historia.
LECTURAS
“Los asesinos” de Hemingway. (Observa la construcción de los
personajes).
“Casa tomada” de Cortázar.
“La insignia” de Julio Ramón Ribeyro
26
MÓDULO 4
Descripción, narración, diálogos. Ejercicios. Lecturas.
DESCRIPCIÓN Y NARRACIÓN
La descripción nos proporciona información sobre los atributos

de varios elementos de la historia, como: los personajes, el es-
cenario, el contexto y nos brindan una suspensión temporal para
calmar el ritmo que brinda la narración y los diálogos. La descrip-
ción le otorga un efecto de credibilidad a la historia.
El lugar más convencional de la descripción es el inicio de un re-
lato, porque estructura la escena.
Es necesario evitar el exceso de descripción porque distrae al
lector y podría quitarle eficacia a la historia. La descripción y la
narración interconectadas dentro del discurso le dan riqueza al
texto.
Las descripciones más usadas están centradas en los personajes
y lugares, sean ciudades o ambientes (estructuras arquitectóni-
cas) donde se desarrolla la historia. Es necesario recordar que
los ambientes, como sucede con otros objetos, solo son descri-
tos con mucho detalle cuando una transformación o un hecho
importante sucederán en el futuro de la historia. Ningún objeto
demanda detalle si no se obtendrá, luego, algún provecho para
el relato.
DIÁLOGOS
Los diálogos enriquecen la narración porque rompen con la mono-

tonía de tener solo la mirada (punto de vista) y la voz del narrador.
Si bien los diálogos nos brindan información sobre las situacio-
27
nes y los personajes, no debemos forzar a los personajes a dar-
nos datos que no sean coherentes con el tipo de conversación
que están teniendo los personajes.
Los diálogos nos ayudan a deducir la personalidad de los perso-
najes. Debemos, como escritores, dejarlos interactuar de mane-
ra natural sin que ello nos conduzca a la realización de diálogos
sin importancia, forzados o extenderlos demasiado. Son mucho
más efectivos los diálogos breves.
En un diálogo deberemos procurar ir al tema que nos interesa de
manera concreta: “ir al grano”. Para los detalles está la voz del
narrador. Los diálogos sirven para hacer avanzar la historia y no
para obstaculizarla.
La corrección de los diálogos en voz alta nos hará notar si el diá-
logo está escrito o no con naturalidad. Tampoco se trata de in-
troducir un diálogo inútilmente. Los diálogos se introducen en la
trama cuando son necesarios para darle un nuevo ritmo, generar
nuevos giros y hacer creíbles a nuestros personajes.
Algunas formalidades para la redacción de diálogos:

Para marcar la línea dicha por un personaje se usa el guion largo
( — ). Este se logra escribiendo en el sistema de Windows de tu
PC con Alt+0151.
Los guiones van acompañados por breves descripciones que
puedan darle alguna referencia al lector sobre quién habla o con
qué estado de humor se está expresando, por ejemplo:
Rosales se bajó del caballo y caminó hasta doña Rosa, y le dijo:

—Ya sé qué hacías ese día en casa de Pablo —estaba agitado— y
sé también quién te llamó.
—No debiste venir —respondió ella sin dejar de barrer la vere-
da— pero ya que estás aquí, mejor ve por tus cosas que bastan-
tes problemas me han traído.
28
Como verás, los guiones llevan una sangría (un espacio en re-
lación al marco que da el resto del relato) y la información de
apoyo también va entre guiones.
EJERCICIOS
Realiza la descripción de tu calle. Fíjate en los detalles (el olor, los

colores, los sonidos, etc.). Realiza este ejercicio antes de realizar
las lecturas y después de leer lo encargado, mejora, modifica, o
vuelve a escribir una nueva versión del mismo ejercicio. Conser-
va las dos versiones trabajadas.
Analiza y compara tus dos escritos para conversarlo en el taller.
En ambos casos, el texto no debe sobrepasar las 700 palabras.
Escribe un diálogo entre dos personas en la que una de ellas de-
cide contarle a la otra un secreto o una decisión que cambiará
su vida. (La extensión es libre). Léelo en voz alta y haz las correc-
ciones pertinentes hasta encontrar que el diálogo suene fluido y
natural.
LECTURAS
“Rojo y Negro” (Capítulo I) de Stendhal (Observar la descripción
y la narración).
“Conversación en La Catedral” (Capítulo I) de Vargas Llosa (Ob-
servar la estructura de los diálogos).
29
MÓDULO 5
El cuento. Técnica, estructura, revisión y corrección. Manejo del
tiempo, creación de atmósfera. Tensión e intensidad. Ejercicios.
Lecturas.
EL CUENTO
El cuento es un género narrativo. La extensión que tiene no es la

que le da la condición de cuento, sino su estructura. A diferencia
de la novela el cuento restringe la participación de los personajes
y del esquema temporal, para lo cual el uso de la elipsis resulta
muy útil, a diferencia de la novela que puede detenerse en deta-
lles. El cuento está constituido por una anécdota o una serie de
hechos breves.
Toda buena obra de arte deberá procurar emocionar profunda-
mente al receptor, y un cuento no es la excepción, aunque, sobre
todo, debe asombrar e impactar al lector, darle un knock-out,
como decía Hemingway . Una obra creativa no debería necesitar
la explicación de su creador, debería poder comprenderse desde
la emoción.
No coloques en un cuento explicaciones, los actos por sí mismos
deben mostrar lo necesario al lector para que este vaya descu-
briendo y comprendiendo lo que sucede.
Ese “no explicarlo todo” y evitar los lugares comunes es la sutiliza
que debe tener el cuento. De otra manera no dejarás espacio
para la sorpresa.
Exígete precisión y armonía en las palabras usadas. La práctica
hará que mejore tu intuición para tomar el rumbo que debes en
cada cuento y hasta para elegir las palabras más apropiadas.
30
No escribas siguiendo la moda de los estilos o los géneros. Es-
cribe desde adentro, desde lo que necesites responderte sobre
el mundo, desde lo que te mortifique, te indigne y te agobie. La
escritura de ficción es la oportunidad para crear otros mundos y
por eso nace desde la insatisfacción.
Técnica, estructura, revisión y corrección

El cuento también se compone del clásico 3: Presentación, nudo
y desenlace. A diferencia de la novela, el cuento –y mientras el
relato es más breve, esta condición se acentúa– posee más in-
tensidad que tensión y llega a agotar la cadena de hechos, por
intensidad.
Para Giardinelli, el cuento tiene tres estratos: (1) la anécdota o el
hecho que se narra, (2) la imagen que se desprende del hecho y
(3) la selección de las palabras.
Estos tres estratos están interrelacionados y no deben ser con-
fundidos con el llamado “Clásico 3” ya mencionado, porque son
niveles distintos para darle forma al cuento.
El clásico 3 está en la línea de tiempo para construir la trama, y
los estratos a los que se refiere Giardinelli tienen que ver con la
decisión y el estilo que quiero brindarle al cuento.
Un grave error que comenten los entusiastas escritores novatos

es la de escribir a prisa y publicar de inmediato –con las redes
sociales esta mala práctica se ha hecho aún más extendida– y
lo que terminan mostrando es una serie de errores, incluso, or-
tográficos y de coherencia gramatical, además de inicios poco
atractivos, finales débiles, personajes estereotipados, voces na-
rrativas censuradoras, poca fluidez, limitado vocabulario, frases
reiterativas y lugares comunes.
Todos estos errores pueden superarse si la historia se deja re-
posar, para que el aspirante a escritor pueda tener un distan-
31
ciamiento con lo escrito y en la lectura del trabajo realizar las
correcciones, agregados y eliminaciones pertinentes.
Al lector no se le brindan todos los datos de inmediato, debemos
sorprenderlo y confiar en que tiene la capacidad para sacar sus
propias conclusiones.
MANEJO DEL TIEMPO
Cuando se inicia con la práctica de la escritura, lo más sencillo

para mantener el control del tiempo en la historia es trabajarla
como una crónica, con el tiempo lineal relatado cronológicamen-
te.
También podemos gestionar el tiempo, a través del ritmo, con el
objetivo de causar ciertas sensaciones (angustia, ansiedad, agi-
tación, etc.) en el lector, para lo que nos ayudará mucho la pun-
tuación y las formas creadas con palabras.
Técnicas para trabajar con el tiempo

Anacronía: Etimológicamente se forma de la reunión de las pala-
bras: inversión y tiempo. Es una técnica por medio de la cual se
cambia el orden de los hechos cronológicos. El narrador puede
mirar hacia el pasado (analepsis) o hacia el futuro (prolepsis).
El relato principal es el que marca la pauta y los saltos de tiem-
po pueden contarnos eventos ocurridos dentro del relato princi-
pal o fuera de este. De esa manera logramos conocer detalles o
eventos fuera de la historia o indicios de lo que estará o podría
ocurrir –para no darnos todo– y dejarnos, como lectores, algo de
sorprensa.
Anisocronía: Etimológicamente se forma de la reunión de las
32
palabras: a (sin) iso (igual) cronía (tiempo) y se refiere a los dife-
rentes ritmos que se le da a un relato. Por ejemplo, el narrador
puede detenerse en el tiempo por medio de la descripción de un
lugar (pausa descriptiva) y en la misma historia puede desarrollar
en un párrafo breve lo sucedido en varios años.
Digresión reflexiva: Le da una pausa rítmica al relato como el

caso de la pausa descriptiva, pero a diferencia de esta, es una es-
pacio en el cual, uno de los personajes realiza una expresión de
su mundo interior, como si fuese una confesión frente al lector o
un monólogo.
Elipsis: Es la supresión de lapsos temporales que se ejecuta en

un relato. Sirve para obviar tiempos que no son necesarios de
contar para la historia.
CREACIÓN DE ATMÓSFERA
Cuando entras a un ambiente donde acaba de haber una discu-

sión sientes lo que llamarías “una atmósfera de tensión”. En la
escritura sucede lo mismo, debes crear la atmósfera deseada y
para ello te ayuda la narración, el diálogo entre los personajes y
la descripción del conjunto de elementos del escenario elegido.
El escenario que se va a elegir para contar una historia es muy
importante. Es muy distinto que se elija tener diferentes espa-
cios, donde se desenvuelven los personajes, a decidir que toda
la historia suceda en una habitación. La sensación de recorte de
libertad, ansiedad, angustia, aislamiento o lo que sea que la his-
toria demande se logrará, con mayor posibilidad, eligiendo la se-
gunda opción.
33
Y el estado en que se encuentre el escenario seleccionado, sin
duda, también causará impacto en el lector.
Una casa también se puede ir deteriorando junto a los perso-
najes como una metáfora de la destrucción frente a situaciones
negativas. El escenario puede llegar a ser un personaje dentro de
la historia.
TENSIÓN E INTENSIDAD
Para la RAE (Real Academia de la Lengua Española), “la tensión

es el estado de oposición u hostilidad latente entre personas o
grupos”. La misma academia nos brinda en su diccionario que
“la intensidad es el grado de energía, el nivel de magnitud o un
grado de fuerza”.
Es decir, que mientras con la tensión se espera que algo pueda
suceder, con la intensidad “ese algo” está sucediendo.
A nivel narrativo ambos conceptos, también, son pertinentes. En
la construcción narrativa breve, como el cuento o el microrrela-
to, –como decía Cortázar al respecto– “la historia se expresa con
intensidad, al eliminar todo lo que puedan ser frases de transi-
ción”. Al contrario, en la novela podemos extendernos con des-
cripciones y darnos el espacio para crear atmósferas de tensión.
Aunque la tensión y la intensidad no son exclusividades absolu-
tas de géneros en específico; el uso de la tensión en los cuentos
de suspenso y algunos capítulos de novelas narrados con gran
intensidad, son ejemplo de ello.
Algunas preguntas para aplicar la tensión narrativa

¿Quién lo hizo? Nos conducirá hacia una narración detectivesca.
¿Qué ocurrirá ahora? en conjunto con ¿quién lo hizo? Nos acarreará
34
hacia la construcción de un thriller.
¿Cómo lo hizo? Nos llevará hacia la escritura de una crónica.
¿Quién o qué es? Nos trasladará hacia una narración de misterio.
Ejemplo de intensidad
Fragmento de “El zorro”, de Isabel Allende
Tres veces pudieron recargar los mosquetes antes de que el jefe

Lobo Gris, seguido por sus más valientes guerreros, lograra tre-
par la barricada e invadir la nave, donde fue recibido por los es-
pañoles. En el caos de la batalla el capitán Alejandro de la Vega
nunca perdió de vista al jefe indio, y tan pronto logró liberarse
de los enemigos que lo rodeaban, le saltó encima, enfrentándolo
con un rugido de fiera, sable en mano. Dejó caer el acero con
todas sus fuerzas, pero dio en el vacío, porque el instinto del jefe
Lobo Gris le advirtió del peligro un segundo antes y alcanzó a
hurtar el cuerpo, echándose hacia un lado. El brutal impulso em-
pleado en la estocada desequilibró al capitán, quien se fue hacia
delante, tropezó, cayó de rodillas y su espada se golpeó contra
el suelo, y se partió por la mitad. Con un grito de triunfo, el indio
levantó la lanza para traspasar al español de lado a lado, pero no
alcanzó a completar el gesto porque un culatazo en la nuca lo tiró
de boca y lo dejó inmóvil.
EJERCICIOS
Lee, al menos, un cuento de cada selección propuesta en la sec-
ción “Lecturas” ubicada líneas abajo, y considerando todas las
herramientas que conoces, hasta ahora, elabora un cuento. Co-
menta en clase, brevemente, cuál de los cuatro estilos te gustó
más.
35
LECTURAS
“Cuento seleccionados” de Monterroso
“Cuentos rusos” de Tolstoi
“Cuento japonés” de Rampo
“La muerte viaja en una Olivetti” de Miguel Ángel Molfino. ht-
tps://www.excentrica.com.ar/la-muerte-viaja-en-una-olivetti/

36
PRÁCTICA OPCIONAL
Ejercicios opcionales de calentamiento diario
Aunque te dediques a la narrativa, la escritura constante de poe-

mas te ayudará con tu ejercitación expresiva, tu capacidad de
observación y la construcción de metáfora de manera natural.
La construcción de haikus (poemas de tres versos) no solo ejer-
cita la creatividad, sino que conduce a la mente hacia un estado
de calma.
Atención: Los versos son cada una de las líneas que conforman
un poema.
Reglas de métrica
Regla 1: Cuando el verso acaba en palabra aguda, o en un mono-
sílabo, se cuenta una sílaba más.
Regla 2: Si es llana no varía el número de sílabas.
Regla 3: Cuando el verso acaba en palabra esdrújula, se cuenta
una sílaba menos.
Regla 4 (Sinalefa): Cuando en el interior del verso una palabra
termina en vocal y la siguiente empieza por vocal, se funden las
sílabas a las que pertenecen ambas vocales y se cuentan como
una única sílaba.
A continuación, te dejaré algunos haikus para animarte a empezar.
Haikus
Tampoco yo he
encontrado un hogar
Tarde de otoño.
(Kobayashi Issa)
37
Mi pueblo natal
En medio de la lluvia
Caminando descalzo.
(Taneda Santoka)
¡Qué soledad!
Después de los juegos artificiales
una estrella fugaz.
(Masaoka Shiki)
La libélula
Intenta en vano posarse
Sobre una brizna de hierba
(Matsuo Basho)
Indicaciones
Observa un objeto o un ser vivo y elabora un haiku diario. Antes
de empezarlos, te daré algunos haikus para que puedan ser una
inspiración en esta enriquecedora práctica.
Poco a poco, podrás crear, por día, mayor número de haikus. No
los deseches aunque algunos de ellos no te gusten. La lectura e
interpretación de estos, también, puede ser muy gratificante.
Escribe los haikus respetando la estructura original de 5-7-5 síla-
bas métricas por cada verso, según las Reglas de métrica.
La lectura activa (analítica) de microficciones, que incluye micro-

rrelatos y haikus son una buena fórmula para detectar los clímax
y los giros sorpresivos. Revisa cuanto puedas y luego intenta los
propios.
38
ÍNDICE
Introducción 05
Módulo 1
Redacción básica y estilo. Objetivos de la escritura. La puntuación
y la ortotipografía al servicio de la narrativa.
Ejercicios. Lecturas 06
Módulo 2
Mecanismos de producción textual. Creatividad y la búsqueda
de un lugar en el mundo. Ejercicios. Lecturas 14
Módulo 3
Estructura narrativa. La perspectiva del narrador. Creación de
personajes. Ejercicios. Lecturas 19
Módulo 4
Descripción, narración, diálogos. Ejercicios. Lecturas 27
Módulo 5
El cuento. Técnica, estructura, revisión y corrección. Manejo del
tiempo, creación de atmósfera. Tensión e intensidad.
Ejercicios. Lecturas 30
Práctica opcional. Ejercicios 37

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Diseño y diagramación: Tamara Pequeño

Primera edición (digital): marzo, 2021

Hecho el Depósito Legal en la Biblioteca Nacional del Perú N°: N° 2021-02130

Seguir los consejos prácticos y desarrollar cada ejercicio te ayu-

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La escritura creativa puede ser aplicada tanto a los textos de fic-

Claridad. Construcción de frases sencillas y concretas que inte-

Economía. Evitar ser reiterativo enunciando afirmaciones ya di-

Riqueza del lenguaje. Se requerirá siempre trabajar con un dic-

La escritura es una forma de comunicar. Un escritor tiene que ser

Objetivos de la escritura creativa

La puntuación y la ortotipografía al servicio de la narrativa

Un hombre no sabía si dar el consentimiento para que su hijo

“Irás y volverás nunca en la guerra perecerás”

Feliz de saber que a su hijo le esperaba el retorno lo alistó de

“Irás y volverás nunca. En la guerra perecerás”

No resulta una exageración cuando afirmamos, entonces, que

En esta oportunidad crearás tu propio glosario. Este tendrá un

PONIÉNDOLE LA COLA AL TEXTO

Instrucciones: Conservando el estilo de lo escrito en cada blo-

1. Antes de nacer, sabía ya que le esperaba un gran destino. Sin

3. Iba con él Panagurgo, que, como siempre, llevaba debajo de la

4. El diablo se levanta crujiendo y se echa a andar cuesta arriba

6. Electra abrió los ojos, echada en el césped recordó su último

7. Cuando se presentó, sin decir su nombre, no le reconocí. Ha

8. Nunca se supo cómo había llegado el marqués a semejan-

Cuento: La migala (autor: Juan José Arriola) https://ciudadseva.

MECANISMOS DE PRODUCCIÓN TEXTUAL

Con el desarrollo del oficio, cada escritor va desarrollando sus es-

Creatividad y la búsqueda de un lugar en el mundo

Sugerencias de algunas estrategias de producción:

Instrucciones: Elige tres noticias (pueden ser sobre tu campo de

Instrucciones: Haz una lista de 10 preguntas por cada una de las

Instrucciones: De las tres noticias seleccionadas elige una para

Una estructura básica que funciona muy bien para planificar el

Nudo (Compromiso – evolución - clímax)

LA PERSPECTIVA DEL NARRADOR

Antes de ingresar a este ámbito, empecemos por definir ¿Qué

Narrador en primera persona (Yo)

Narrador en segunda persona (Tú)

El narrador en tercera persona (Él/Ella)

Hay algunas convenciones que se toman en cuenta en los rela-

Utilidad de los personajes

El personaje entra en escena

Protagonista (a través de sus ojos vemos el mundo y desarrolla-

El juego de las consignas

Te brindaré dos consignas para que, como mínimo, desarrolles la

En los cuentos señalados a continuación –en el ítem “Lecturas”–

La descripción nos proporciona información sobre los atributos

Los diálogos enriquecen la narración porque rompen con la mono-

Algunas formalidades para la redacción de diálogos:

Rosales se bajó del caballo y caminó hasta doña Rosa, y le dijo:

Realiza la descripción de tu calle. Fíjate en los detalles (el olor, los

El cuento es un género narrativo. La extensión que tiene no es la

Técnica, estructura, revisión y corrección

Un grave error que comenten los entusiastas escritores novatos

MANEJO DEL TIEMPO