Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
1. ESTAR SATISFECHOS
CON LO BÁSICO
Un sabio de la antigüedad que estudió el comportamiento
humano dijo que el dinero es “una protección”. Pero también
advirtió: “Un simple amador de la plata no estará satisfecho
con plata, ni ningún amador de la riqueza con los ingresos”
(Eclesiastés 5:10; 7:12). ¿Qué quiso decir con estas
palabras? Que aunque necesitamos dinero para vivir,
no debemos amar las riquezas, pues la codicia no tiene
límites. El sabio del que hablamos fue el rey Salomón. Él
trató de averiguar si las riquezas y los lujos podían hacerlo
feliz. “Nunca me negué ningún deseo —escribió—; jamás me
negué ninguna diversión” (Eclesiastés 1:13; 2:10, Dios habla
hoy, 2002).
3. AMAR AL PRÓJIMO
El libro Social Psychology (Psicología social) asegura que
“las relaciones personales influyen más en nuestro bienestar
que el empleo, el salario, la comunidad y hasta la salud”.
En otras palabras, para ser feliz, el ser humano necesita dar
y recibir amor. “[Si] no tengo amor, nada soy”, dice la Biblia
(1 Corintios 13:2).