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Control de La Secrecion Pancreatica
Control de La Secrecion Pancreatica
Control de La Secrecion Pancreatica
INTRODUCCION:
Los animales necesitan de materias primas y energía para crecer, mantenerse y reproducirse. Estos
materiales y la energía en su metabolismo, proceden de los alimentos: los alimentos se usan como
material para la producción de tejido nuevo, la reparación del tejido existente y para la reproducción. El
alimento también sirve como fuente de energía para los procesos permanentes, tales como movimiento
y el metabolismo. El consumo y digestión de alimentos tanto en animales como en humanos, posee
notorias diferencias si tenemos en cuenta las diversas especies que constituyen a esta rama biológica; a
su vez que hay que tomar en cuenta los diversos mecanismos que están implicados en el desarrollo de
los procesos de digestión de los alimentos consumidos por los animales.
Entre las partes más importantes de la digestión de los alimentos, tenemos en cuenta las enzimas que
actúan en la digestión de los alimentos, los cuales son: las amilasas pancreáticas, tripsinas,
quimiotripsina, ribonucleasas, las cuales son muy importantes para la descomposición de los alimentos,
como también en la activación de otras enzimas que intervienen en el proceso digestivo.
MARCO TEÓRICO:
Entre los vertebrados, el principal estímulo para la secreción de los jugos digestivos en una porción
determinada de los mismos es la presencia del alimento en la misma o, en algunos casos, en cualquier
otra parte del tracto. La presencia de las moléculas de alimento estimula los terminales
quimiorreceptores, conduciendo al reflejo de las eferentes autónomas que activan o inhiben la
motilidad y la secreción exocrina. Algunas moléculas apropiadas de alimento también estimulan
directamente, las células epiteliales endocrinas por contacto con sus receptores, dando lugar a la
secreción de hormonas gastrointestinales en la circulación local. Estos reflejos permiten que los órganos
secretores situados fuera del tracto digestivo (páncreas, por ejemplo) estén adecuadamente
coordinados con la necesidad de la digestión del alimento.
Las características de la secreción digestiva (cantidad de secreción) dependen de distintas pautas que
interactúan entre sí, incluyendo: a. Si la secreción está controlada por vía nerviosa u hormonal b. en
que punto del tubo del tubo digestivo tienen lugar las secreciones y c. cuanto tiempo está presente el
alimento en la región que se está estimulando. Por ejemplo, la secreción salival es muy rápida y está,
por completo, bajo el control nervioso involuntario; las secreciones gástricas están bajo control
hormonal y nervioso, mientras que las secreciones intestinales son lentas y están, principalmente bajo
control hormonal. Al igual que en otros sistemas el control nervioso predomina en los reflejos rápidos,
mientras que los mecanismos endocrinos están involucrados en los reflejos que se desarrollan a lo largo
de minutos u horas.
En comparación con los vertebrados, se sabe muy poco a cerca del control de las secreciones digestivas
en los invertebrados. Evidentemente, los filtrados mantienen una secreción estacionaria de fluidos
digestivos ya que se alimentan de forma continuada. Otros invertebrados secretan enzimas en respuesta
a la presencia del alimento en el tubo digestivo, pero el mecanismo preciso de control todavía tiene que
ser estudiado en profundidad. La enorme variedad de tipos de invertebrados hace difícil la
generalización acerca de sus sistemas digestivos. (1)
Control de la secreción Pancreática:
El páncreas se compone de dos tipos de tejido glandular de diferente funcionalidad. Una pequeña, pero
importante porción, del tejido pancreático está dispuesto en islotes separados dentro del parénquima
de la glándula. Este conjunto celular se conoce como páncreas endocrino por secretar hormonas
directamente al torrente sanguíneo. La gran mayoría del tejido pancreático está implicado en la
elaboración de secreciones digestivas. Esta porción se conoce como páncreas exocrino ya que sus
secreciones se liberan en la luz intestinal. (1)
Además de la secreción endocrina de insulina desde los Islotes de Langerhans, el páncreas produce
distintas secreciones digestivas, que entran en el intestino delgado mediante el conducto pancreático,
por medio de su tejido exocrino (páncreas exocrino). Las enzimas pancreáticas, incluyendo la α-amilasa,
tripsina, quimiotripsina, elastasa, carboxipeptidasas, aminopeptidasas, lipasas y nucleasas, son liberadas
en un fluido alcalino, rico en bicarbonato, que ayuda a neutralizar el quimo ácido formado en el
estomago. Esta amortiguación es especial puesto que los enzimas pancreáticos requieren un pH neutro
o ligeramente alcalino para una actividad óptima.
La secreción exocrina del páncreas está controlada por las hormonas peptídicas producidas en el
intestino delgado superior. El quimo ácido, que llega al intestino delgado procedente del estomago,
estimula la liberación de secretina y VIP, ambos producidos por las células endocrinas del intestino
delgado superior. Estos péptidos son llevados a la sangre alcanzando las células de los conductos del
páncreas y estimulándolas a producir su líquido fluido rico en bicarbonato. Las hormonas peptídicas
solo estimulan débilmente la secreción de enzimas pancreáticas. La gástrica secretada desde el epitelio
del estomago también inicia un pequeño flujo de jugo pancreático que se anticipa a la llegada del
alimento al duodeno. (Figura 15.34)
Los neuropéptidos somatostatina y encefalina también han sido identificados en las células endocrinas
de la mucosa del intestino anterior en los digestivos de los vertebrados. Ambas hormonas tiene distintas
acciones sobre la función gastrointestinal. La somatostatina, que normalmente actúa a través de efectos
paracrinos, inhibe la secreción acida gástrica, la secreción pancreática, la motilidad intestinal y el flujo de
sangre. Las encefalinas inhiben la secreción gástrica, estimulan la secreción de enzimas pancreáticos e
inhiben la motilidad intestinal. La composición de las secreciones pancreáticas pueden ser modificadas
por el contenido de la dieta en algunas especies. (3)
Los productos alimenticios son digeridos de una forma adecuada por absorción por acción de enzimas
específicas. Hay ciertos productos que para poder ser digeridos, necesitan de bacterias presentes en el
tracto digestivo de los animales.
El paso del bolo de la boca a la faringe es proceso voluntario, o sea, que el animal puede decidir en
que momento traga. En cambio el pasaje por la faringe y esófago es involuntario, es decir, el
animal no puede controlar dicho pasaje.
El alimento está ahora en el Estómago, este es un órgano con gran cantidad de fibras musculares
dispuestas en capas, que realiza también movimientos lo que favorece la mezcla con los jugos que
allí se encuentran. En su cara interna hay una serie de pliegues y glándulas que van a formar el jugo
gástrico. Aquí comienza la digestión del bolo. Lo que se ataca primariamente son las proteínas.
Se van rompiendo sus enlaces en partículas más pequeñas, pero aún no son lo suficientemente
pequeñas como para ser absorbidas. El resultado del proceso digestivo en el estómago es la
formación de una suspensión en forma de sopa espesa llamada quimo.
Este alimento que ya comenzó a digerirse va a pasar a la siguiente porción del tubo digestivo,
llamada Intestino. El Intestino se divide a grandes rasgos en: Intestino delgado e Intestino grueso.
Veremos ahora la primera porción, el Intestino delgado. Este se compone de 3 porciones llamadas
Duodeno, Yeyuno e íleon. El revestimiento interno del intestino delgado tiene aspecto
aterciopelado debido a millones de pequeñas proyecciones digitiformes llamadas vellosidades
intestinales. Estas sirven para aumentar el área superficial del intestino para la digestión y
absorción de los nutrientes.
El duodeno de las mascotas es la porción más corta del intestino, a él llegan las desembocaduras
de dos grandes glándulas anexas al tubo digestivo: el hígado y el páncreas. El hígado es un órgano
con muchas funciones, pero a nivel digestivo solo nos interesa saber que es el productor de bilis, la
cual es vertida en el duodeno y en contacto con el quimo ayuda a digerir las grasas.
El páncreas de las mascotas, también vierte su jugo pancreático en el duodeno, este es muy rico en
enzimas digestivas que atacaran a las proteínas, a los hidratos de carbono y a las grasas,
desdoblándolas en unidades cada vez más pequeñas, para poder ahora sí, ser absorbidas por el
intestino delgado.
En yeyuno e íleon continúa el proceso de digestión intestinal con la ayuda de los jugos intestinales,
también ricos en distintas enzimas digestivas.
En la totalidad del intestino delgado es donde se produce la absorción de los nutrientes obtenidos
del desdoblamiento de los alimentos por el accionar de las enzimas y sustancias producidas por el
estomago, intestino delgado y glándulas anexas.
El intestino grueso de las mascotas está compuesto por: ciego, colon, recto y ano.
En los carnívoros el íleon se comunica solamente con el colon y el ciego es un divertículo que se
comunica con el colon.
La mayor parte de los nutrientes presentes en el quimo de las mascotas ya han sido absorbida en el
intestino delgado, el sobrante es lo que llega al intestino grueso. Este sobrante esta formado por la
celulosa de los alimentos de origen vegetal y restos de quimo no absorbido. En el intestino grueso
el quimo pasa lentamente y en él se absorben agua y sodio, y gradualmente asume consistencia de
heces normales. También se forman algunas vitaminas del complejo B y vitamina K, que se
absorben y se utilizan.
A través del esfínter anal de las mascotas se eliminan al exterior los desechos de los alimentos
ingeridos en forma de materia fecal.(6)
B. Digestión en Aves:
En primer lugar, el aparato digestivo comienza con el pico y la boca, lugar donde no se produce
ninguna masticación, y el alimento es tragado entero. Este pasa luego por el esófago, el cual es
bastante muscular y en algunos grupos como los granívoros presenta un ensanchamiento
denominado buche, el cual sirve como almacenamiento de alimento. El estómago de las aves es
glandular, donde la acción de las enzimas gástricas ayuda a la degradación de los alimentos
ingeridos, para que sean aptos para su asimilación. Muchas aves ingieren pequeñas piedrecillas
que se sitúan en el estómago muscular llamado molleja, estas piedrecillas se denominan "grit", y
tienen como función ayudar al proceso de molienda.
A continuación el alimento pasa al intestino, el cual es bastante diferente al de los mamíferos. Sin
embargo, es posible diferenciar claramente un intestino medio, denominado duodeno, donde
desembocan los productos del hígado y del páncreas. A continuación está el intestino delgado,
donde se produce la asimilación de las sustancias alimenticias al organismo y un intestino terminal,
el cual en aves de régimen vegetariano se divide en dos ciegos. Los desechos del proceso digestivo
se eliminan por la cloaca, lugar donde convergen además los conductos del sistema reproductor y
urinario.
El sistema de excresión está adaptado para la vida aérea. Se presentan dos riñones, los cuales
excretan ácido urico, el cual se puede concentrar más, por lo que no es necesario diluir la orina con
agua, disminuyendo así el peso del ave. Los picaflores o colibrís secretan algo de urea, ya que
ingieren una alta cantidad de agua, debido a su dieta nectarívora.
En aves marinas (Procellariiformes), por sobre el pico, se presenta la glándula de la sal, la cual
concentra las sales que vienen en la dieta, y las elimina por una "lágrima", manteniendo así el
equilibrio osmótico. Las rapaces (Falconiformes), con algunas excepciones, también presentan esta
adaptación, pero no se sabe bien si es igual a la de las aves marinas. (5)
C. Digestión en Rumiantes:
La digestión ocurre cuando los materiales complejos que se encuentran en el alimento son
descompuestos en fragmentos pequeños que pueden ser absorbidos por el sistema de un animal y
luego utilizados para el crecimiento, mantenimiento, reproducción y otras funciones. En los
rumiantes (vacas, ovejas, cabras, venados, etc.) la digestión comienza cuanto el alimento pasa a
través de la boca, donde es masticado para romper las fibras. El alimento pasa al rumen y retículo –
a menudo considerado un solo órgano grande llamado el retículo-rumen – donde ocurre la
digestión microbiana (o fermentación). Los Micro-organismos (MOs) en el rumen y el retículo, tales
como bacterias y hongos, trabajan para descomponer más el alimento. Específicamente, ellos
descomponen los carbohidratos en la dieta y producen proteína para llenar las necesidades de
energía y nitrógeno del animal. Este puede regurgitar materiales muy fibrosos (‘bolo alimenticio’-
que los rumiantes mastican por segunda vez) del rumen para masticarlos más. Después de dejar el
retículo-rumen, el alimento parcialmente digerido (digesta) entra al omaso, en donde se absorbe el
agua. El rumen, retículo y omaso constituyen el intestino anterior, que es la característica distintiva
de los rumiantes. La digesta luego pasa al epigastrio, que incluye el abomaso, o estómago ‘real’, y a
los intestinos. Aquí los procesos digestivos son iguales a los que ocurren en otros mamíferos,
básicamente la descomposición enzimática (en lugar de microbiana) de la digesta y la absorción de
los nutrientes por el animal. (4)
D. Digestión en Invertebrados:
Nuestra capacidad del proceso de digestión a comparación del de los invertebrados esta basado en
la morfología y las características anatómicas de sus órganos digestivos y enzimas presentes en
ellos. El canal de alimentación de los invertebrados es relativamente simple y todas las enzimas son
frecuentemente secretadas por una glándula única. Además estas enzimas casi siempre digieren la
comida en una parte del canal alimentario el cual es anatómicamente simple y indiferenciable
dentro de zonas funcionales.
En muchos animales, digestión extracelular tiene lugar completamente en el interior del tracto
digestivo. Hay algunos animales en donde parte de la digestión ciertos tipos de comida salen del
cuerpo. Cada una de las digestiones externas ha sido observada en algunas especies de
rhabdocoelidae y en gusanos moscardón. Las últimas proteasa excretadas atraviesan los
excrementos con el fin de licuar la carne en la que viven. La carne licuada es después ingerida.
El poder de la digestión de la comida es mucho más limitada entre ciertos parásitos desde que
ellos tienen débilmente desarrollado su tracto digestivo. La Fasciola hepática sangre, tiene una
proteinasa, pero mucho de otros nutrientes son absorbidos a través de la superficie del cuerpo.
Ascaris, sin embargo, no absorbe nutriente a través de la superficie del cuerpo pero ingiere tanto
alimentos digeridos y sin digerir y en su tracto digestivo son atacados por un grupo de enzimas,
amilosas, maltosas, proteasas, peptidasas y lipasas. Parasito como la Taenia no tiene tracto
digestivo y las sustancias que consumen son las predigeridas del hospedero. (2)
Digestión Pancreática
La digestión pancreática, se da en base a las acciones dadas por las enzimas que esta secreta. La
presencia de quimo ácido proveniente del estomago induce al duodeno a producir secretina (que
estimula el flujo pancreático) y pancreozimina (que estimula la producción de enzimas).
a. La Tripsina:
b. La quimiotripsina:
c. La carboxipeptidasa:
Es secretada como deocarboxipeptidasa y activada por la tripsina. Actúa sobre los polipéptidos con
grupos carboxilos libres para convertirlos en péptidos más pequeños y aminoácidos libres.
e. La lipasa o esteapsina:
Es activada por las sales biliares cuando el pH alcanza un valor de 8.0, actúa sobre las uniones
ésteres de grasa (triglicéridos) para convertirlos en ácidos grasos mono y diglicéridos y glicerol.
f. La Ribonucleasa:
g. La Deoxirribonucleasa:
h. La colesterol esterasa:
Es activada por las sales biliares convierte el colesterol libre en esteres de colesterol con ácidos
grasos.
i. La nucleasa y lecitinasa:
Son enzimas segregadas por el páncreas en unión con el intestino delgado, su función es convertir
a los ácidos nucleicos y la lecitina en nucleótidos, lisoleucina y ácidos grasos libres. (1)
CONCLUSIONES:
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS:
(1) Cunningham, James G. , 2009. FISIOLOGÍA VETERINARIA: INCLUYE EVOLVE. Elsevier España,.
4ta Edición.
(2) Rastogi, S.C. 2007. ESSENTIALS OF ANIMAL PHYSIOLOGY. Editorial New Age International
Publishers. 4ta Edicion
(3) Randall, D. Burggren W., French K. 2002. FISIOLOGÍA ANIMAL. MECANISMOS Y
ADAPTACIONES. Editorial McGraw Hill Interamericana. 4ta Edicion.
(4) http://www.midiatecavipec.com/alibal/alibal100108.htm
(5) http://aveschile.tripod.com/digest.htm
(6) M.V. Raúl Carson. REVISTA ONLINE. FOYEL MASCOTAS. Asesor nutricional del Área Técnica de
Nestlé Purina Argentina.