Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Introducción
La cinematografía ha funcionado como una importante herramienta y fuente de
información para los estudios de lo social y de los procesos de cambio de nuestros entornos
desde muchas disciplinas, de la geografía al psicoanálisis, las posibilidades de documentar
y de proporcionar información que tienen las películas, permite la comprensión de
múltiples fenómenos, entre ellos, conocer cómo nuestros espacios y entornos son
utilizados, presentados e incluso influenciados por el cine y cómo el cine ha sido
transformado y ha ido evolucionando a partir de su propio contexto.
El propósito de este ensayo es abordar otra ciudad fronteriza: Mexicali, que aunque
más joven, también tiene un papel en el cine de ficción que ha sido poco explorado pero que
lleva consigo vestigios de nuestra propia historia y de nuestros paisajes requeridos en
múltiples ocasiones para enmarcar, pero también para protagonizar diferentes producciones.
Así entonces, este documento contiene un breve recorrido por las películas que se han
hecho sobre ésta entidad a través de la identificación y clasificación del tratamiento y
participación que tiene una ciudad como ésta en ellas, así como los géneros más recurrentes,
las temáticas, los espacios utilizados y los motivos para su utilización así como las
características y descripciones con las que se presenta como una propuesta para el estudio de
las representaciones de las ciudades fronterizas en el cine de ficción.
1
Sobre el cine y las representaciones de la frontera
Es a través de las mediaciones, al compartir ciertos códigos o referencias que las
representaciones se producen y reproducen. Así, ciertos espacios y personajes encarnan
características particulares, portan discursos determinados y se configuran en un dialogo y/o
discusión constante entre la representación misma y aquello que representan en el contexto
social. Así, por ejemplo, ciertos paisajes trascienden la pantalla repercutiendo en los procesos
sociopolíticos y culturales de sus propios entornos, como por ejemplo Nueva Zelanda y el
impulso al fenómeno económico del turismo cinematográfico que representó la zaga del
Señor de los Anillos que le significó al país un aumento del 30% de visitas luego de la
proyección de esta trilogía (Gámir y Valdés, 2007, p. 25); o ciertas ciudades que se han
convertido en fotogramas vivientes o en imaginarios enmarcados como Las vegas y Los
Ángeles, exploradas y explotadas desde géneros y temáticas diversos dejando muy poco
espacio a lo desconocido. De modo tal que la trascendencia de los entornos como parte de la
narración ha pasado de escenografías inmóviles, al protagonismo y determinación que se
acompañan de nuestra propia relación con el entorno.
Al respecto, Rodrigo Culgovski (1998) proporciona tres aspectos por los cuales es
importante considerar la relación de las ciudades con el cine: primero, el cine proporciona
la representación de un espacio urbano; segundo, es también un factor de influencia y una
fuente de información respecto a la creación de ciudades por su capacidad de representar y
crear imágenes y deseos; y finalmente es un producto industrial perteneciente al contexto
de la ciudad como hecho económico y comercial. A partir de esta relación triple que
mantiene el cine “tanto de mirar una realidad, darle forma y surgir de ella, hace que el
análisis del cine relacionado con ciertas urbes nos pueda ayudar a entender sus procesos de
cambios y la percepción social de estos procesos” (1998, p. 1).
¿Pero qué pasa con las ciudades fronterizas? Norma Iglesias considera que la
atracción de los cineastas por este espacio se debe a tres elementos: su riqueza visual, el
dramatismo que conllevan los fenómenos sociales que aquí se sostienen y las posibilidades
de excesos y sensacionalismo; de este modo, las producciones pueden explotar aun más su
espectacularidad a partir de temas “emocionalmente fuertes, del uso de los géneros de acción
2
y melodrama, además, por el mismo carácter espectacular de la región, que comúnmente se
asocia al escándalo” (Iglesias, 2006, p. 1).
El análisis tanto de las películas, como del medio y las audiencias fronterizas, nos da
elementos para comprender la fuerza de la cinematografía, el poder de la imagen en
movimiento y el papel que el cine, como fenómeno sociocultural, está desempeñando
en la vida cotidiana de sus públicos, especialmente en la frontera (Iglesias, 2003,
p.328).
3
a lugares a los que quizás no podremos acceder de otra forma, difumine fronteras y disminuya
distancias territoriales, por otro lado, también puede contribuir a amplificar las distancias
culturales al instaurar modos de representación tanto a los lugres como a las personas.
Valenzuela Arce, señala que la frontera se concibe como una ruptura de manera
inicial a partir del año 1848 y la pérdida del territorio nacional, es entonces que
4
Ciudad Juárez protagonizaban, “representadas como espacios de perdición, prostitución,
vicio y juego” (Valenzuela, 2012, p. 39).
5
Como lo señala Schantz, Mexicali se asoció con la red-light del Barrio Chino, la
cultura de salón y la hibridación de la frontera con Estados Unidos, y asegura que tanto los
medios como los rumores propiciaron que se sembrara la semilla de lo que él llama una
“topografía imaginaria” a partir de las experiencias de quienes la visitaban (2001, p.549).
Así mismo, agrega que se limitó su identidad a la dicotomía que ya describían otras
ciudades como abiertas o cerradas, secas o húmedas o como civilizadas o bárbaras y anota
un fragmento del periódico La Crónica de Calexico para ejemplificar esta situación: “París
tiene su Versalles, El Paso es Juárez, Detroit su Windsor, Calexico su Mexicali, y ahora
viene Yuma con Algodones” (2001, p.572).
Wide-open, permisiva, degenerada, bárbara, peligrosa eran los adjetivos con los que
se describía a la ciudad y con los que se asociaba a sus habitantes y a aquellos que cruzaran
la frontera para visitarla, parecía ser un acto de degeneración social y cultural (Schantz,
2001, p.555)
Bajo estas descripciones, el cine no tardó mucho en llegar como una herramienta de
la época para limpiar el nombre de Mexicali y de sus buenos habitantes. Productores como
Rafael Corella hacen los propio a través de un par de documentales turísticos y
empresariales de promoción de la región, y en 1927, con la dirección y actuación de
Guillermo Calles, produce Raza de bronce (Calles, 1927), considerada la primera película
de ficción de producción mexicalense, encomendándole a Alfonso Tovar, periodista de La
opinión de Los Ángeles y empleado de gobierno en Mexicali, la tarea de escribir el guion de
6
esta película que aseguraba a la prensa, elevaría el prestigio de México pero sobretodo el de
Baja California (Agrasánchez, 2010).
Con esto como base, con el propósito de identificar las representaciones de entornos
particulares, tales como los de las ciudades fronterizas, es que he establecido una
clasificación sobre el tratamiento, intervención y/o presencia que se les da en el cine, con la
cual es posible identificar tanto los espacios utilizados como las temáticas y características
que se proponen en largometrajes de ficción. Esta clasificación la he aplicado
específicamente para Mexicali, con el propósito de establecer un ordenamiento que permita
acercarnos a las representaciones de esta ciudad y posteriormente su abordaje analítico desde
una metodología pertinente (que no será objeto de este ensayo).
Para realizar el compilado de producciones relacionadas a Mexicali, he recurrido a
diversas fuentes, tales como bases de datos digitales, ensayos, crónicas, blogs, etc.; con las
que he podido clasificar alrededor de 47 producciones de ficción y de larga duración, tanto
nacionales como extranjeras; para este ensayo menciono únicamente aquellas en las que
mejor se muestren y ejemplifique la características de cada clasificación.
7
La ciudad ausente
En este grupo refiere a aquellas producciones en las que la ciudad o el entorno en
cuestión no aparece, sin embargo se menciona o referencía, sin necesidad de agregar
siquiera alguna imagen o explicación al respecto.
Para el caso de Mexicali, algunas de las películas que cumplen con estas
características, son: Mexicali Rose (Kenton, 1929), The Mexicali Kid (Fox, 1938), y
Mexicali Rose (Sherman, 1939). Todas estadounidenses y ninguna filmada en la ciudad
sino en locaciones de Los Ángeles y sus alrededores.
Las dos películas con nombre Mexicali Rose, aunque no están relacionadas entre sí,
refieren a la canción del mismo nombre que ya he mencionado líneas arriba, compuesta por
Jack Tenney en 1923 (Palacios, 2015), y cuya letra se inspira en un amor imposible nacido
en esta ciudad.
8
Este minúsculo dato es crucial para la
configuración de Rosa y de su identidad, le otorga
realismo a su caracterización como una mujer
despreciada y al mismo tiempo deseada, de moral
cuestionada que seduce y engaña a los hombres,
oportunista y vengativa, que además se interpone
entre los lazos familiares y de amistad de dos buenos
Fotograma 1. Did we meet somewhere,
before? - Mexicali Rose, 1929. “patrones” como son llamados, pero que finalmente
no es nada más que una joven inmadura.
9
Entre charros, chinas poblanas, mujeres andaluces, y versiones apropiadas del
“Cielito Lindo” y “Allá en el rancho grande”, el contexto es poco relevante más allá de
saber que se trata del desierto fronterizo en donde el español intenta sonar fluido y en donde
los salvajes y malvados mexicanos solo necesitan un poco del encanto de un auténtico
cowboy hollywoodense para mostrar su lado más civilizado.
Esta categoría es la que incluye la menor cantidad de películas que además son las
más lejanas en tiempo, de 1929 a 1950. En este periodo, las condiciones de traslado aunado
a la caracterización de la franja fronteriza debieron ser factores determinantes para no
ubicar las producciones a la entidad.
Aunque no sea un factor decisivo ni se haga más referencia, Mexicali forma parte de
todos los títulos de las producciones en este apartado, sugiriendo que la referencia viene
desde la presentación misma de la película: pese a su ausencia en la pantalla, Mexicali
como una ciudad fronteriza, propicia una relación, una asociación y la posibilidad de
sentido que no es explícito pero que está ahí en los casos descritos, desde la mujer
“peligrosa”, las estafas y los grandes casinos, hasta el calor mismo del desierto.
La ciudad suplantada
Para este caso, los paisajes de cierta región se vuelven escenarios que son utilizados
con el propósito de “doblar” a otros entornos, es decir, funcionan meramente como una
locación sin que se de crédito o se mencione la procedencia de esas imágnes, salvo por las
fichas técnicas, estos entornos pueden pasar desapercibidos para quienes no tengan
referencia al respecto. La principal característica de esta clasificación es que el paisaje, el
entorno o la ciudad, se etiquetan con otro nombre, de este modo, se presentan objetos en el
espacio que no les corresponden, filtros para caracterizar y/o ciertas tomas para dar la
impresión de tratarse del lugar que se anuncia.
10
Así, Mexicali interpreta los desiertos árabes y africanos en películas bélicas como
Jarhead (Mendes, 2005) y Soy Nero (Pitts, 2016); es el escenario ideal para las hazañas del
agente 007 en License to kill (Glen, 1989) y Quantum of Solace (Forster, 2008); Viento
Negro (González, 1965) y El moro de Cumpas (Hernández, 1976) requieren sus paisajes
para interpretar los desiertos de Sonora; incluso presenta las condiciones ideales para
enmarcar escenarios post apocalípticos como ocurre en Resident Evil: Extinction (Mulcahy,
2007).
La ciudad genérica
Al igual que en la ciudad suplantada, en este caso, el entorno en cuestión también se
presenta como escenario y sin crédito al entorno en que se realiza la producción más alla de
la ficha técnica, la diferencia con la clasificación anterior, es que tampoco se da crédito a
otro espacio, es decir, el entorno funciona como referencia a cualquier otra parte del mundo
sin existir una identificación como tal.
Para el caso de Mexicali, esto ocurre en películas como Desierto (Cuarón, 2015) y
Mano a Mano (de producción independiente) (Torres & Dyer, 2015), cuya temática gira en
torno a la migración, por lo que, de forma implícita –a través de la temática y de la
11
narración- entendemos la región de la que se trata. Los personajes en este par de
producciones, al ser abandonados por los “coyotes” deben sobrevivir, no sólo a las
condiciones extremas del desierto, sino a los cazadores de “mojados” que rondan por estas
zonas. Sabemos que se realizaron en escenarios mexicalences gracias a las fichas técnicas.
Para esta categoría, resulta determinante revisar con detenimiento los elementos que
se incluyen, a los que se les da relevancia a cuadro y aquellos que se dejan fuera o que son
discriminados en pantalla, de modo que se hace posible identificar los modos en que se
caracterizan a ciertas zonas y a sus habitantes.
Así por ejemplo, en The Game (Fincher, 1997), David Fincher lleva a Michael
Duglas como Nicholas hasta un panteon hubicado en lo que podemos entender como
alguna ciudad fronteriza mexicana, el personaje despierta desconcertado en una tumba
abandonada y camina entre los barrancos, deshuesaderos, basura y perros callejeros, humo
y carros por todos lados para poder llegar hasta la embajada, en donde, más que recibir
ayuda, es extorcionado. Luego de comerse un taco en la calle, Nicholas debe viajar en
camión ante las miradas de los pasajeros para cruzar la frontera y volver a casa en San
Francisco.
Hay varios elementos explícitos que intentan contrastar con el estado emocional y
físico por el que está pasando Nicholas, más que presentar postales de Mexicali en pantalla:
tomas panorámicas de su recorrido por la ciudad, la inclusión de humo negro y denso que
lo reodean, casas abandonadas, polvo y basura, un filtro sepia de alto contraste que hacen
evidentes la desolación y abandono tanto del personaje como del entorno y por supuesto las
dificultades de comunicarse para pedir ayuda y varios anuncios en español lo que da pistas
de su ubicación geográfica.
Otros elementos son menos explícitos pero también cumplen con el proposito: como
el trato que recibe en la embajada, el desgaste de su atuendo y los golpes en su cara, el calor
que padecen los personajes extras que lo rodean, así como la saturación tanto de personas
como de automoviles, las condiciones en que viaja de regreso a su hogar hacinado en un
camión, así como su desgaste físico.
Cabe mencionar que varios puntos carecen de sentido lógico si es que intentáramos
buscarlo, por ejemplo, la ubicación que pudieramos identificar para dicha embajada no
12
corresponde en absoluto, tanto el edificio como el seguimiento que el perosonaje hace para
llegar; el panteón así como su caracterización se suponen artificiales, Gabriel Trujillo en
Baja California: Ritos y Mitos Cinematográficos (1999) cita a Ángel Norzagaray y señala:
Junto al puente Colorado nace un cementerio. Digo nace porque apenas ayer no
existía. Pocas cosas tan paradójicas como un cementerio recién nacido. Fue
construido para que de entre una de sus tumbas aparezca como acabado de
Entre las producciones sobre Mexicali consideradas para esta clasificación están:
C.A.T. Squad: stalking danger (Friedkin, 1986), Act of valor (McCoy & Waugh, 2012),
Pilgrim (Inferno) (Cokeliss, 2000) y Down and dangerous (Forsman, 2013) (de producción
independiente), con temáticas sobre crimen organizado. En ellas, esta región representa una
especie de punto de encuentro para grupos de terroristas que intentan atacar Estados
Unidos.
13
En los primeros dos casos, un grupo llamado “de élite” extranjero, se encuentra aquí
encubiertos para desmantelar una organización criminal, por lo que se les ve rondar las
calles de la Zona Centro y los alrededores, casi casi mapeando el área. Es posible
identificar varias calles a las que se les da seguimiento de manera lógica, así como edificios
conocidos de la entidad, aunque en su mayoría se presentan lugares abandonados, en
algunas tomas se ponen a cuadro perros callejeros, el polvo de la terracería y se incluyen
elementos propios como algunos extras locales que forman parte del grupo de criminales,
armados y de sombrero.
Border Incident (Mann, 1949) aborda también el tema del crimen y la migración en
la frontera pero a diferencia de las anteriores, el peligro que preocupa se centra en los
asesinatos y asaltos que sufren los “braceros” al ser reclutados por organizaciones
criminales de ambos lados de la frontera para ser abandonados en el desierto o vendidos a
los rancheros como mano de obra feudal.
14
Al mismo tiempo enfatiza que esto es gracias
al trabajo de los migrantes, específicamente
mexicanos: los braceros. Describe ampliamente cómo
se da la condición para que estos puedan entrar
legalmente a su país a partir de los permisos
otorgados por el gobierno, el contraste lo hace con
aquellos que cruzan de forma ilegal, quienes corren el
Fotograma 5. "Living under the
protection of two great republics" -
riesgo de ser asaltados o asesinados por bandidos que
Border Incident, 1949.
asegura, infestan ambos lados de la frontera. Termina
esta secuencia introductoria con la siguiente invitación al espectador: “It is this problema of
human suffering and injustice about which you should know”.
Esta clasificación, junto con la ciudad suplantada son las que tienen mayor numero
de películas, la diferencia es que en ésta, sí se da crédito a Mexicali, aunque significa un
espacio de escape o de peligrosidad en el cual no se puede permanecer, funciona como
mero trámite para lograr objetivos mejores, nada mejor para concebir a una ciudad
fronteriza.
La ciudad protagonista
Las películas en esta clasificación son aquellas en que podemos ver e identificar la
ciudad en cuestión, sus paisajes, características y a los habitantes, etc. En general, el
entorno aparece si no de forma protagónica, de evidente relevancia y relación con los
personajes y/o la trama. La mayoría de las secuencias ocurren en dicho espacio o se indica
que es así, es decir, la narración o el relato describe las acciones en esta locación aun
cuando en algunos casos no es posible ubicarla ni en créditos ni en fichas técnicas.
Esto último ocurre, para el caso de Mexicali, en dos producciones que aunque tratan
sobre esta ciudad, no se grabaron ni se utilizaron imágenes de la misma: el videohome
Frontera de Mexicali (Gómez, 1988) y el thriller estadounidense Happy birthday (Tebo,
2016), utilizan y adecúan otros entornos a través de descripciones o la añadidura de ciertos
elementos a cuadro, para representar a la región.
15
un gran anuncio en donde se pueden leer las palabras “secuestro”, “extorsiones” y
“templarios” en una misma oración; personajes caricaturizados que dan la bienvenida entre
prostitutas, sarapes, papel picado de colores, maracas e incluso la integración de extras con
malformaciones físicas a cuadro y un extraño ambiente brumoso.
En este escenario Tommy (Riley Litman) y Brady (Matt Bush) nos muestran el
retrato de una ciudad que bien podría representa a todos los méxicos estereotipados de las
películas a través de la adición de elementos a la trama que permiten ampliar la
configuración de Mexicali aun más: una pelea de gallos clandestina, un enfrentamiento con
escopeta en una cantina entre bailes eróticos, una fiesta entre gánsteres chicanos que se sale
de control, comida callejera (salvadoreña por alguna razón desconocida) y claro, drogas de
todo tipo proporcionadas –por qué no- por un chamán azteca, Kasape Sukka (Steven Tyler,
vocalista de la agrupación Aerosmith) que le dará un toque psicodélico y surrealista a los
acontecimientos que se desarrollan a lo largo de la película.
16
Aunque en esta producción los personajes llegan y se van (como en la ciudad
coyuntural), me parece relevante colocarla en este apartado ya que, salvo los primeros
minutos de presentación, toda la narración se desarrolla en este Mexicali imaginario.
17
producción (incluso el apoyo de la Universidad Autónoma de Baja California) y cuyas
narraciones se desarrollan mayormente en Mexicali.
Belzebuth, es la más reciente del compilado en ella, más que Mexicali, se resalta la
condición de frontera, aun con la participación activa del entorno, la ciudad no se
menciona. La trama es protagonizada por el agente Emmanuel Ritter, interpretado por
Joaquín Cosío quien, en los primeros minutos y como presentación, pierde a su hijo recién
nacido de manera sangrienta en un extraño ataque en los cuneros por una enfermera
poseída. Años después, debe involucrarse en las investigaciones de extraños y violentos
atentados en contra de niños de la edad que tendría su hijo. Ante estas escenas
perturbadoras, el FBI llega a México con un escuadrón de investigaciones de lo paranormal
liderada por Tate Ellington, como el agente Iván Franco. Ambos agentes se unirán para
descifrar lo que ocurre, llegando hasta Vasilio Canetti, un sacerdote excomulgado,
interpretado por la cara de la saga Saw, Tobin Bell.
A diferencia del resto de las producciones, esta película de horror trae a esta región
otras temáticas e imágenes nunca antes tomadas en cuenta y que rompen de algún modo
con la tradición fronteriza de la migración y el crimen organizado: posesiones satánicas,
prácticas religiosas, el asesinato de infantes e incluso cristos que hablan.
18
fronteriza que permite la ubicación geográfica de la trama; y finalmente, entre lo
paranormal y la superstición, las fronteras también se trasladan al plano místico y
existencial desdibujando los límites entre la vida y la muerte, entre la maldad y la bondad,
lo creíble y lo increíble y lo posible e imposible dejando a los personajes en medio, donde
el héroe se convierte en enemigo y el enemigo ya no se sabe muy bien quién es.
19
Centro y sus alrededores o la carretera de La Rumorosa, y otras menos identificables pero
igualmente familiares como las periferias o el valle de Mexicali.
Mexicali es aquí, digamos, muy cotidiano, alejándose de las imágenes más comunes
para otras producciones o más representativas de la ciudad y poniendo a cuadro otros
elementos que, a su vez, resultan familiares: el camino que lleva al valle de Mexicali, el
valle mismo y las parcelas de algodón sobrevoladas por avionetas de fumigación, el ruido
constante de los aparatos de refrigeración, los espejismos del calor en los horizontes bajos,
el abarrotes de la esquina, las calles de terracería y los ranchos en medio de la ciudad, las
cantinas iluminadas de rojo, el termómetro climático, entre muchas otras imágenes.
Así, las propuestas cinematográficas más recientes son las que proponen temáticas
más diversas, que, aunque no omiten los temas de migración, narcotráfico o crimen, ponen
el foco en otros aspectos que abordan experiencias sociales cotidianas propias de la región
20
y no tanto a conflictos internacionales o externos que muchas veces no tienen nada que ver
con el entorno, se trasciende de la frontera como escenografía o como acumulado y
repetición de estereotipos, a la ciudad fronteriza como soporte y partícipe de sus propios
acontecimientos.
21
Con esto, podemos acércanos a un
panorama general de los tópicos y estilos
con los que se da tratamiento a los
entornos a partir de los requerimientos del
género dramático propiciando
acontecimientos de intensidad emocional;
por el mismo camino el crimen y la acción
pueden apelar al impacto en sus
secuencias con efectos especiales, pero
también a la imagen de violencia y peligro
Figura 2. Relación de películas con respecto al
que requiere de locaciones que refieran género cinematográfico.
esta idea, como se ha considerado al
paisaje cachanilla.
Además de los géneros, se identificaron aquellos lugares a los que se acude más en
estas producciones. Como era de esperarse por las características geográficas de la región,
el desierto es el paisaje más recurrente en un total de 28 películas, utilizado mayormente en
producciones bélicas o de
acción dando realismo a las
historias propuestas y
aportando dramatismo por
su impacto visual.
Seguido del
Figura 3. Lugares utilizados y su frecuencia en las películas que refieren desierto, y como ocurre en
a Mexicali.
la mayoría de las películas
mencionadas previamente en este ensayo, la Zona Centro es utilizada en 15 películas. En
estas se incluyen bares y cantinas, calles y avenidas, parques e incluso los túneles de La
Chinesca y la Escuela de Artes situada a unos pasos del muro fronterizo que también se
presenta. La Garita Internacional, que aunque también se ubica en la Zona Centro, la he
considerado de manera independiente por su recurrencia en 9 películas; después está La
Rumorosa en 7 producciones, que, aunque pertenezca al municipio de Tecate, mantiene una
conexión con el espacio mexicalense.
22
A partir de los espacios utilizados y de acuerdo al género cinematográfico, fue
posible identificar además, las temáticas predominantes en estas producciones.
En 30 ocasiones se abordan
cuestiones sobre migración y
frontera, como era de esperarse,
seguido de esto la muerte y el
peligro están presentes en 29,
crimen en 26, cuestiones
emocionales se tratan en 15 de las
producciones, y la vida nocturna en
9 películas para finalmente, en tres,
el tema de la prostitución.
Figura 4. Temáticas más recurrentes en las producciones Todas estas temáticas están
referentes a Mexicali.
evidentemente relacionadas y se
corresponden unas a otras, mas que englobarlas en un mismo tópico, intento mostrarlas
como un desglose para su análisis. Observemos que se mantiene coherencia entre los
tópicos (migración, frontera y crimen), el tipo de espacios (desierto y Zona Centro) y
géneros cinematográficos (drama y acción) que predominan.
Otra observación que realicé fue la de los motivos por los que los personajes ocupan
los espacios descritos, aunque parecieran obvios, me parece importante hacer esta
distinción con propósitos de objetividad (en la medida de lo posible). De esta manera, los
personajes son movidos principalmente, y coincidiendo con el género y las temáticas, por la
criminalidad en 26 ocasiones, y como consecuencia por la necesidad de huir o de cruzar la
23
frontera en 24. Aun así,
y con un rango de
diferencia notable con
16 presencias, otro
motivo para transitar la
ciudad radica en el
aprendizaje del
personaje o su
redención, en donde Figura 5. Relación de los motivos identificados por los cuales el entorno
mexicalense es ocupado en las películas analizadas.
llega a la zona para
transformarse en una mejor persona. Seguido de esto, en 10 películas el motivo está en la
diversión y en la aventura, después cuestiones existenciales en donde, además de
transformarse, el personaje se encuentra en busca de sentido y de su construcción de
identidad y, finalmente, visitan o transitan este entorno personajes en busca de ayuda o de
refugio.
Estos pocos intentos, los más recientes de hecho, no pretenden alejarse de las
representaciones recurrentes sino integrarlas a sus tramas, no como el único elemento al
que se deba referir, sino permitiendo otras miradas y discursos: cambiando el filtro sepia
por los colores propios del desierto, llamando a la producción local y por lo tanto a la
propia concepción del entorno, permitiendo contarnos a nosotros mismos y en el mejor de
los casos abandonando poco a poco la recurrente y superficial dicotomía que trae consigo la
concepción de la frontera.
24
Bibliografía
Agrasánchez, R. (2010). Guillermo Calles: a biography of the actor and Mexican cinema
pioneer. McFarland & Co.
Barker, C. (2003). Cultural Studies. Theory and Practice (2nd ed.). London: Sage.
Belzebuth, el demonio que llega al cine en enero de 2019 [imagen]. (2019). Recuperado 8
de mayo, 2019, de http://www.e-consulta.com/nota/2019-01-
08/espectaculos/belzebuth-el-demonio-que-llega-el-cine-en-enero-de-2019
Culgovsky, R. (1998). El cine como recreador de ciudades. Revista La Fuga, (s/n), 1–5.
Iglesias Prieto, N. (1991). Entre yerba, polvo y plomo. Lo fronterizo visto por el cine
mexicano. Colegio de la Frontera Norte. Recuperado de
https://books.google.com.mx/books?id=gLsaAQAAIAAJ&hl=es&source=gbs_book_s
imilarbooks
Lukinbeal, C., & Zimmermann, S. (2006). Film Geography: A new subfield. Erdkunde,
60(4), 315–325. https://doi.org/10.3112/erdkunde.2006.04.02
Schantz, E. M. (2001). All night at the Owl: the social and political relations of Mexicali’s
red-light district, 1913-1925. Journal of the Southwest, 43(4), 549–603. Recuperado
de
http://148.231.10.114:2136/ps/retrieve.do?tabID=T002&resultListType=RESULT_LI
ST&searchResultsType=SingleTab&searchType=AdvancedSearchForm¤tPosit
25
ion=1&docId=GALE%257CA84052458&docType=Article&sort=RELEVANCE&co
ntentSegment=&prodId=AONE&contentSet=GALE%257
Trujillo Muñoz, G. (1999). Baja California: ritos y mitos cinematográficos. (UABC & A.
de B. R. en el D. Federal, Eds.). Mexico: Universidad Autónoma de Baja California.
Filmografía
Cokeliss, H. (2000). Pilgrim (Inferno). Canada, Reino Unido, Estados Unidos: Promark
Entertainment Group, Videal GmbH.
Forster, M. (2008). Quantum of Solace. Estados Unidos, Reino Unido: Columbia Pictures.
Fox, W. (1938). The Mexicali Kid. Estados Unidos: Alpha Home Entertainment.
Glen, J. (1989). Licence to kill. Estados Unidos, Reino Unido: MGM, UA Distribution
Company.
Gómez, J. (1988). Frontera de Mexicali. México, Estados Unidos: Media Trading Network
Inc.
26
Kenton, E. (1929). Mexicali Rose. Estados Unidos.
McCoy, M., & Waugh, S. (2012). Act of Valor. Estados Unidos: 20th Century Fox Home
Entertainment.
Mendes, S. (2005). Jarhead. Estados Unidos, Alemania, Reino Unido: Universal Pictures.
Mulcahy, R. (2007). Resident Evil: Extinction. Estados Unidos, Francia, Austria, Alemania,
Reino Unido, Canada: Constantin Film.
Pitts, R. (2016). Soy Nero. Estados Unidos, Alemania, Francia, México: Pimienta Films.
Tebo, C. (2016). Happy Birthday. Estados Unidos: Momentum Pictures, Orion Pictures.
Torres, D., & Dyer, M. (2015). Mano a mano. México, Estados Unidos.
27