Está en la página 1de 119

Estructuras

yabordajes
en psicoterapias
.psicoanalíticas .
Héctor Juan Fiorini

M
Nueva Visión
Colección Psícologfa Contemporánea
Héctor Juan Fiorini

Estructuras y abordajes
en psicoterapias
psicoanalíticas
,1

., ' .'
DanIel A. Castillo S.
PskdClIa C,,"1ea • Psicoterapia
,:.; t ," "
.. ;".: v 1'.271.~31 FPV N'l7.340.

Ediciones Nueva Visión


Buenos Aires
INTRODUCCION
Fiorini, Héctor Juan
Estructuras y abordajes en psicoterapias psicoanalíticas - 1ª ed., 7ª
reimp.- Buenos Aires: Nueva Visión, 2008.
240 p.; 19x13 cm. (Psicología Contemporánea)
I.S.B.N. 978-950-602-286-0
1. Terapias psicoanalíticas. 1. Título
CDD 150.195

LS.B.N.: 978-950~602-286-0 Este libro expone una línea de investigaciones clínicas en el cam po
de las psicoterapias de orientación psicoanalítica. Contiene varios
estudios cuya unidad y diversidad intentaremos ubicar en esta
introducción.
En primer lugar cabe señalar que estos estudios amplían y
profundizan etapas previas d~ nuestras investigaciones. En un
primer volumen de trabajos! expusimos un conjunto de parámetros
y criterios técnicos propios de las psicoterapias dinámicas, cuya
eficacia instrumental resultaba sólidamente fundada en registros y
evaluaciones de varios equipos de trabajo de nuestro país y de otros
centros preventivos '1 asistenciales de Europa y de Estados Unidos.
Ese primer volumen expuso un conjunto teórico técnico. Un
Toda reproducción total o parcial de esta obra por
cualquier sistema -incluyendo el fotocopiado-
segundo estudio? nos permitió profundizar en propuestas acerca
que no haya sido expresamente autorizada por el del vínculo paciente-terapeuta, otorgándole una eficacia
editor constituye una infracción a los derechos del instrumental particular en la medida en que el mismo pueda
autor y será reprimida con penas de hasta seis resultar capaz de dar lugar a la creatividad del paciente y del
años de prisión (art. 62 de la ley 11.723 y arto 172 terapeuta. El principio de creatividad se nos presentó entonces
del Código Penal). como el más amplio principio regulador de los procesos de cambio
en psicoterapias, bajo el cual deben ser colocadas las aplicaciones
de la regla de abstinencia, el criterio técnico de neutralidad, las
consideraciones dinámicas sobre la frustración en la transferencia.
Una vez constituido en sus alcances generales ese cuerpo de
lineamientos técnicos, nuestra investigación ha intentado explorar
© 1993 por Ediciones Nueva Visión SAl C. Tucumán 3748, (C 1189AAV)
Buenos Aires, República Argentina. Queda hecho el depósito que las condiciones de aplicabilidad de esos recursos según la estruc-
marca la ley 11. 723. Impreso en la Argentina / Printed in Argentina tura de personalidad del paciente en tratamiento. Esa búsqueda

7
está sistcmatizada, para las estructuras neuróticas de personalidad, las variables múltiples que podemos categorizar como diferentes
y sus condiciones diferenciales de abordaje, en la primera parte de niveles del diagnóstico. A continuación estudiamos los fenómenos
este volumen. Cotejando observaciones panorámicas y microscó- de intcrrclación entre esas variables" que permiten definir un
picas de procesos terapéuticos desarrollados con 145 pacientes de concepto de "situación". Concebido como el espacio dinámico
personalidad ncurótica predominante (fóbica, histérica. obsesiva) donde numerosas intcrrclacioncs potencian sus efectos. el concep-
hemos ido registrando las condiciones de abordaje y las secuencias to de situación constituye un objeto particular cuyo abordaje es
que cada una de esas estructuras de personalidad establece: decisivo en numerosas experiencias clínicas. Mostramos allí en un
La teoría general del proceso que podemos sostener sobre la caso clínico cuántas modalidades de manejo técnico pueden con-
base de estos estudios propone considerar que cada fase de los verger a lo largo de las múltiples dimensiones que configuran la
procesos de cambio que enfrenta cada tipo de personalidad presen- situación de ese paciente.
ta como primordial cierta tarea. El proceso de elaboración apunta La tercera parte de este libro ahonda otras direcciones que
a producir cierto movimiento, cierta apertura en el nivel de la juzgamos de importancia teórica y a la vez técnica. Comprende una
estructura en cuestión, como condición para el avance de ese indagación de un nivel inconsciente de las funciones yoicas
proceso hacia una fase subsiguiente. comprometidas en el conocimiento y el manejo eficaz de lo real.
Desde ya, nuestros estudios de esos procesos no agotan todos Destacamos la participación de ese nivel yoico inconsciente en la
sus movimientos ni los elementos dinámicos intervinientes desde cstructuración de numerosas situaciones de conl1icto (aquellas en
cada psicopatología involucrada. Nuestros estudios destacan sólo la que uno de los polos conl1ictivos está asentado en dimensiones
aquellos aspectos de esas estructuras de personalidad que se de conocimiento. intentos de dominio. tendencias adaptativas y
recortan con particular nitidez y cuya progresión se nos muestra en creativas, movimientos evolutivos). El estudio siguiente investiga
la práctica clínica como eficaz para consolidar efectos de cambio todo un ámbito de fenómenos psíquicos: aquellos vinculados con
psicológico profundo. la creatividad en cuanto condicién universal del sujeto humano. Se
Creemos que en términos metodológicos nuestra indagación se postula un sistema especial de funciones y procesamientos que
ubica en un nivel Icnorncnológico, nivel que Octave Mannoni. en tienen efectos creadores. El reconocimiento de este sistema. de su
La otra ese..'eI1(l3 destacaba como mediador para ligar de modo accionar .cn niveles inconscientes y prcconscicntcs, es esencial
fecundo la teoría y la organización de una práctica clínica. para interpretar un nivel particular de ansiedades. defensas. con-
La primera parte. entonces. al estudiar variaciones del proceso flictos, A nuestro juicio la consideración de estos dinamismos
según la personalidad del paciente. recorta aquellas variables que creadores es esencial en nuestra interpretación clínica. nos permite
caracterizan a esa estructura de personalidad. Este recorte nos ampliarel registro de los sistemas involucrados en la conducta del
permite ahondar sus variables, pero importa subrayar paciente y en la nuestra. Una y otra vez nos ha resonado una
mctodológicamcntc los problemas clínicos que introduce esa tesis de Pcrls: "la neurosis es un estancamiento de la creatividad". 5
dclim itación. La mism a fue indagada por Lowen en sus est udios biocncrgéticos. 6
La segunda parte se propone ampliar el conjunto de variables Nuestro enfoque intenta arrojar luz sobre algunos aspectos
en consideración, profundizar aspectos de la sobrcdctcrminación psicodinámicos de nivel inconsciente comprendidos en fenóme-
que es propia de los efectos psíquicos que indagamos (síntomas, nos de gran complejidad. como son aquellos que interrclacionan lo
conílictos activados, defensas). En primer término consideramos neurótico con lo creador y sus fracasos.
Estas tres partes no son separables en nuestro trahajo clínico.
*' Esa cifra de pacientes observados responde a registros, estudios y discusiones
Con un paciente nos importa considerar a la vez variables de su
clínicas tic los últimos doce años tic nuestra prrictica clínica y docente. estructura de personalidad. otras que son propias de su situación.

8 9
intentando su confrontación -convergencias, oposiciones, pun-
otras que derivan de movimientos profundos de procesos cognitivos tos de articulación-- con las orientaciones psicoanalíticas Ycon
y creativos acti vados de modo singular en esa persona. Cada sesión
el universo de las prácticas clínicas.
podrá ir recorriendo, en distintos momentos, cada uno de los d) La apertura a hipótesis y modelos provenientes del pensam ien-
enfoques que en este libro, por razones de investigación y de to antropológico, sociológico, pedagógico y materiales emergen-
exp?s~c!ón, hemos ~ebido colocar en un orden de sucesión. La tes de ámbitos de procesos creativos.
poslblltda? de ar.tlcul.ar estos enfoques, de detectar sus e) La convicción profunda de que sólo el diálogo más amplio
entre~azamlentos dinámicos, exige del terapeuta un constante -entre diferentes producciones teóricas, entre distintas investi-
trabajo creador. A esa capacidad del terapeuta, de enfrentar con- gaciones clínicas, y entre docentes y alumnos- puede dar lugar
Juntos d.c notable complejidad, y de hacerlo, como pudo hacerlo a una más rigurosa comprensión del objetivo de estudio propio de
F~e~d, Sl~e.squemas reduccionistas, atento ala riqueza de la escena las disciplinas involucradas en la tarea clínica.'
cltmca, dirigimos el conjunto de estos estudios.
Comparto actualmente la tarea docente del Centro de Estudios
~n los últimos ~inco a~os' nuestra investigación se ha visto en psicoterapias con Humberto Gobbi, Nilda Guerschman, Celia
estImula?a por el fecundo intercambio realizado con docentes y Mauri. Pedro Menéndez, Ana María Femández y María Elena
~ol~gas. mtegr~t~~ del Centro de Estudios en Psicoterapias, García Novarini.
mstlt~clón q~e .dmJo en Buenos Aires desde su fundación. Varios Esta orientación dada a nuestra tarea profesional ha sido tam-
~at~nales cl~mcos, observaciones e ideas teóricas que integran bién impulsada en reuniones de trabajo con colegas del interior del
d~stmt?s capítulos de este libro han sido aportados en grupos de país (en especial de Rosario y de Mendoza, estos últimos nucleados
dISCUSIón,ate.ne.osclínicos y jornadas de este Centro de Estudios. en el Centro de Estudios en Psicoterapias Dinámicas) así como en
Los 3D? p~ofeslOnales que han participado en 1983 de nuestra el fecundo intercambio con profesionales de Brasil, en especial de
labor cl~ntlfica y docente constituyen para nosotros una notable Porto Alegre, con quienes l[evo ya siete años de labor docente (en
p.resencla que respalda y alienta el espíritu de estas investiga- la Cátedra de psiquiatría y el Instituto de psiquiatría Comprensiva
ciones. dirigidos por Manoel Albuquerque, en el Curso de Especialización
Creo necesario tran~c~ibir aquí la orientación general que de Psicoterapias paraPsicólogos que coordina Isaac Sprinz, ambas
o~orgamos a nue.stra actividad docente y científica en la institu- Cátedras pertenecientes a la PUC-RS, Pontificia Universidad
ción, ya que la m.lsma explícita el enfoque básico que recorre cada Católica de Rio Grande do Sul, así como en el Núcleo de Estudios
una de nuestras indagaciones:
en Psicoterapias que dirigen Inubia Duarte Andrade y Kenia
Bal1vé Behr, y en otros prestigiosos centros profesionales de Rio
1:atar~a científica que anima nuestra orientación asienta en varias
direcciones peculiares, Grande do Sul).
a) Una ~úsq~eda,e~haustiva centrada en los materiales y datos de He recibido también aportes y sugerencias críticas de colegas de
la expeflen~Ia ~hntca emergente del empleo de diversas modali- España, coordinados por Amoldo Libennan y Edgardo Gili,
dades terapeuncas. integrantes del Centro de Psicología y Desarrollo Humanístico de
b) ~na i~dag~ción teórica que tiene su eje en el psicoanálisis, con Majadahonda, Madrid, con quienes tuve el placer de discutir en
un interés abierto a la producción de las principales corrientes julio de 1983 parte de los trabajos que integran este volumen.
desarrolladas a partir de la obra de Freud. Todos estos núcleos de trabajo científico, que suman en la
e) La con~ideración atenta de producciones teóricas y técnicas de actualidad más de 600 profesionales, nos respaldan y acompañan
ot~asco~entes (~om~nicaci~nal, gestáltica, dinámica de grupos, en direcciones de la teoría y de la práctica clínica que estos estudios
psicología evolutiva, indagaciones corporales y psicodramáticas)

11
10
4. GEDO, John y GOLDBERG, Arnold, ModeléiS de la m!!/'JJ<', Buenos Aires.
intentan profundizar. Para todos ellos nuestro más hondo recono-
Amorrortu. 1980.
cimiento. 5. P"'RLS, Frcdcrick, Sueños y existencia. Terapia gostáltica, Santiago de
Por último, en varios capítulos se habla del paciente, y se CJ¡jlc, Cuatro Vientos, 1974.
mencionan, para la labor del terapeuta, criterios técnicos. Es 6. LOW.EN, Alexander, Bioenergética, Mé)(ico, Diana, 1979.
oportuno recordar, como lo hizo Jung en su momento, que no hay 7. CENTRO DE ESTUDtOSEN PStC.OTERAPJAS,Programacián anual, Buenos Aires,
"técnicas" que aseguren intervenciones saludables y fecundas, 1983.
dado que el instrumento es siempre el operador, el hombre,
presente con todas sus dimensiones en la situación clínica. Para
prevenimos contra los riesgos de una confianza excesiva, no
crítica, en los poderes de las "técnicas", quiero subrayar el
contrapunto que un periodista norteamericano, David Young,
sostenía en diálogo con Norman Mailer: así como el arte, a
menudo, es "incohcrcntcmcntc cierto" la ciencia resulta, en mu-
chos aspectos, "coherentemente incierta".
Para nosotros, hablar de técnicas, de métodos, es señalar
caminos posibles, organizaciones racionales de los recursos, pero
el terapeuta es convocado personalmente siempre a crear. Esto
supone comprometerse en profundidad con las búsquedas del
paciente, a colocar sus propias búsquedas en resonancia con las
del otro, evitando quedar encerrado en las identificaciones
contratransfcrcncialcs. y dando lugaren cambio al amplio espacio
de las identificaciones creadoras. El terapeuta está hermanado con
el paciente en una universal búsqueda de sentidos, de más hondos
sentidos para la experiencia vivida en cuanto reveladora de poten-
cias que la neurosis captura, y que la indagación terapéutica intenta
conjugar para impulsar esas potencias en las direcciones de un
proceso original liberador.

Bibliografía

l. FHlRlNl, Héctor Juan, Teoría y técnica de psicoterapia. Buenos Aires, N lleva


Visión. (,a. cd., 1981.
1. -, "Repetición y diferencia: propucstas del paciente y del terapeuta para
el desarrollo del proceso", en FlORlNl, H. y I'I'YRlI, G., Aportes tcárico-
clínicos en psicotcrapias, Buenos Aires. Nueva Visión, 1978.
3. MANNo~l, Octuvc, La otra escena. Claves de lo imaginario, Buenos Aires,
Amorrortu, 1973.

12 13
PROLOGO A LA SEGUNDA EDICION

Afirmamos en esta edición ampliada la vigencia de una línea de


investigaciones clínicas y técnicas cuya propuesta es comprender
que las vías de acceso al paciente, las modalidades estratégicas y
técnicas capaces de llevar adelante el proceso terapéutico depen-
den de condiciones establecidas por la estructura psicopatológíca
predominante, las que incluyen modos de vincularse y de comuni-
carque establecen un amplio espectro de variantes. En esta edición
extendemos lo indagado anteriormente para las neurosis, al incluir
nuevos capítulos de estudios sistemáticos realizados sobre
psicopatología y abordajes de los trastornos del narcisismo.
Incorporamos en este voumen una actualización de nuestra
fundamentación epístemológica para una clínica de psicoterapias
psicoanalíticas, donde procuramos abarcar fenómenos propios de
conjuntos heterogéneos (como los que configuran individuo,
grupo, institución en articulaciones múltiples) en los que se trata
de comprender singulares efectos de configuración, a la vez que
intensidades, ritmos y proporciones, en fenómenos que la tradi-
ci6n psicoanalítica identificó inicialmente por categorías de con-
tenido, es decir, cualidades.
Estamos entonces consolidando una orientación donde las
grandes categorías teóricas, los modelos freudianos, deben ir al
encuentro de la singularidad de cada consulta y allí encontrar su
alcance y su límite, su capacidad comprensiva y su propio
cuestionamiento, la conciencia de su no-saber.
Situación creadora, crítica y autocrítica de la teoría y de sus

15
prácticas, que nO.simporta destacar como constituyente esencial,
decisivo. para la clínica pslcoanalítica.
Dimensión creadora de la clínica que comenzamos a buscar en
sus fundamentos teórícos posibles, precisamente, en un capítulo.
de este volumen ("Creatividad: dinamismos fundantes de un
sistema ..."). Desdeentonces, nuestros estudios sobre la creativi-
dad han ido. creciendo hasta hacer necesario destinarles un volu-
men aparte, 'cuya prep,aracíón nos ocupa actualmente.

Hemos tenido ocasión, en los últimos años, de realizar un


constante intercambio con Asociaciones Psicoanalfticas y con
Instítuclones de Salud Mental de Buenos Aires, Córdoba. Mendoza
y provincia de Buenos Aires .•en el ámbito nacional, así 'Como.con
colegios de Psicélogos y Cátedras Universitarias de Santiago de DIRECCIONES TEORICAS y EPISTEMOLOGICAS
Chile, Montevideo, Porto Alegre, San Pablo, Río. de Janeiro, ACTUALES PARA LA CLINICA
Barcelona, San Sebasrián, Segovia, Sevilla, Madrid y Nueva York PSICOANALITICA *
(Instituto. de Psicoanálisis). Ladiscusión sostenida en estos colo- ,
quios y seminarios nos ha permitido revisar, confrontar y conso-
lidar los alcances de nuestras líneas de trabajo.
Destacaré asimismo. el intercambio que sostenemos con estu-
diantesy COlegasde la Facultad de Psicología de la Universidadde
Buenos Aires, desde la 'cátedra de "Clínica Psicológica y
Psicotcrapias' en la que me acompaña un valioso equipo. de
colaboradores doeenrcs.
Subrayoaqutmi rcconocimlento ..para la elaburacío« de nuestra
producción científica, por los aportes 'que de modo permanente
realizan dírecnvos. docentes y graduados en nuestro Centro de
Estudios en Psicoterapias, de Bltlcnos Aircs.Institucién que nutre
sin cesar nuestras ínvcstigacíones.
Deseo expresar finalmente mi .agradecimiento a nuestro maes-
tro, Dr. Mauríoio Goldcnberg, 'inspirado creador, con su Servido.
de Psícoparología del PolicUilico de Lanas, de una enseñanza que
de dar ,{Irüt{ls.:SI:I ~]emplo y sus ideas csran presentes
no ha 'cleja¿~O.
en cada uno. de nuestrosfl1r.<Jb'ajO.'s. La figura del maestro hacrecldo
con IO.saños, cobrando Ilil'raenorme dimensión por su original
lucidez ,y extraordinaria generosidad.
.Clase de introduccióu para "Clfnica Psicológica y Psicoterapias", Facultad de
BJl{'ITOS Aires. abril de /993 Psicología, Universidad de Buenos Aües,
Nuestra materia, "Clínica psicológica y psicoterapias", alude al
campo de las prácticas clínicas, es una materia donde vamos a
hablar de prácticas psicoterapéuticas. Hace tiempo un colega dijo:
"por favor seamos prácticos, tengamos una buena teoría". De
modo tal que conectarse con el universo. de las prácticas en salud
mental requiere ver con qué teorías uno. se aproxima a esas
prácticas, con qué e ncepción de las relaciones entre teoría y prác-
ticas uno.se manéja, y entonces resulta que para manejarse adecua-
damente en el terreno. de las prácticas es necesario. tener claros
criterios de orden epistemológico. Sin una epistemología más o.
menos definida las prácticas clínicas so.n prácticas a ciegas. Se
reducen a un nivel de -ernpíria.
Con esta inquietud, quiero desarrollar criterios epistemológicos
co.n los cuales trabajar en la clínica.
La primera cuestión podría plantearse así: ¿Unidad o.diversidad
de la experiencia clínica? La experiencia clínica, ¿es una o. es
muchas? ¿Es una o.es múltiple?
Nosotros trabajamos una línea en la que creemos que la expe-
riencia de la clínica no.es una. Creemos claramente que la experien-
cia de la clínica es la experiencia de una diversidad, es decir que
tenemos múltiples direcciones y múltiples dimensiones de la clí-
nica. El tema de la unidad o. diversidad es un teina de la epis-
temologta, Vo.y a hacer alusión en esta exposición a autores que se
ocupan del modo de pensar al ser humano, el modo de pensar en
las ciencias humanas y, entre otros temas, piensan si podemos

19
unificara tenemos que diversificar en nuestro pensamiento sobre alguna experiencia de unidad que configur: al~ún tipo de.absol~t?
el hombre y las ciencias humanas. Por eso destacamos autores j.acan también habló.de la castración en tcrnunos de la irnposibl-
como Foucault, Deleuze, Sartre, Feycrabcn, Umbcrto Eco. Eugenio lidad de acceder al uno. la imposibilidad de lograr un uno, una
Trías (filósofo español actual). José Ferrater Mora y cierro la lista unidad estable en los vínculos. en la relación con el mundo.
con Albert Carnus filosofo que. en uno de sus trabajos importantes, De modo tal que, de algún modo, asumir una diversidad,
El mito de Sisifo se ocupó de pensar en esta cuestión de si la diversidad de fenómenos en la clínica. en lugar de pretender una
práctica es una, si las teorías son unificables o bien comportan el mítica unidad. es un modo de asumir la castración. Todas las
espacio de lo diverso.
formas de omnipotencia aparecen pretendiendo cerrar algún uno.
Les quiero leer un pasaje de Carnus al respecto. Dice así: y el trabajo de la castración remite siempre aasumiralgo que decía
Bachclard: que aIlí donde parece reinar un concepto. cuando
El espíritu que trata de comprcnderla realidad no puede consíde- profundizamos siempre están en vigencia por 10 menos dos. Un
rarsc satisfecho salvo si la reduce a términos de pensamiento. Si
ejemplo de esto: en la clínica psicoanalítica y .en la teoría
~I ~ensamiento .descubrie&e en los espejos cambiantes de los
psicoanalítica se ha hecho mucha insistencia en los fenómenos de
lenomenos relaciones ctcrnasque lospudiesen resumir y resurnirse
a sí mismas en un principio único. se podría hablar de una dicha repetición. pero la categoría de repetición no. encuentra su lugar
?cl espíritu. Esta nosralgin de unidad. este apetito de absoluto claro en la clínica hasta que no tenemos el Juego de un par de
ilustra ~Il movimiento esencial del d.ramahumano, pero que esta conceptos. Y el concepto de repetición sóll~ se v~ a entender si se
nostalgia sea un hecho no significa que dcha ser satisfecha. recorta sobre la posibilidad de que esté en vigencia el concepto de
di Icrcncia. Si no podemos jugar con lo heterogéneo de los conce~-
Pero si aflnnamos, nos dice Camus: tos (repetición \'s. diferencia) sino solo un universo de la repcu-
ción eso no existe en la clínica, existe más vale en la mente que
la rca lid;ld del uno.cualquiera que sea, caemos en Iacontradícelón quiere encontrar un solo tipo de fenómenos que unifiquen su
dc qae uuespíruu capaz de esa un ifica.CÍóo establece-ya oon et resto clínica.
d~1 ull,í'Verso su propia difcrencia. y afirma así '1.111principio de Del mismo modo les diría que se ha trabajado en la técnica
dlvc~sldad; "T?d? se ordena en la uJlidad(k~lquelhl nostalgia pero psicoanalítica. más de una vez. con el concepto de ausencia del
.d pnmer movrmrento el mundo se agrieta en infinidad de trozos. analista. Pero si nosotros unificáramos la clínica en tomo al
Bn psicología como en Iógica hay vcrdadccs. JlO bay verdad".
concepto de ausencia estaríamos haciendo algún tipo de simplifi-
Husserl y los fcllOllIenólogos restituyen al mundo su diversidad.
cación, porque el concepto de ausencia va a requerir, para tener
Pensar no es ya unificar, es volver a ;¡prcnde;r a estar 'alcnJo para
alguna vigencia clínica, de algún juego con su heterogéneo, que es
hacer de cada imagen.de c.adaüka.llIllug:'IJdi.fercnte. Scabreuna
p~olj~crac,i<Í1J.de tos fenómenos, caminos quc llevan a todas las el concepto de presencia del analista en la clínica. l?e modo q.ue
cicncras o a ninguna. Las experiencias serecortan en un desierto vamos a tener un mundo diverso: presencia-ausencia. ausencia-
que no hay que abandonar. presencia. No vamos a tener ni el primado único de la re~tición
ni el primado único de la ausencia, sin~ ~,ue va~l~os a t~ner ~uegos
,E~encíalrnenteeslC problemanos preocupa porque en el trabajo complejos de interacciones entre rcpcucion y diferencia, aSI COJllll
teórico, en el debate teórico que tenemos también en ía facultad entre presencia y ausencia. , .
muchas veces está la tcnracíon de contarcon una teoría única, con Por otra parte nosotros en la clínica tenemos una dlversl51ad de
una teoría que uniflquc .. Y este tema del uno, que Camus refiere .a situaciones de consulta. Las si tuacioncs de consulta no configuran
Pam\.é~nides. efectivamente a las filesoñas presocrancas, aparece un mundo homogéneo. todo lo contrario. abren un espectro múl-
también tratado en la obra de Lacan como In nostalgia de crear tiple de condiciOl~es de consulta. Tenemos una diversidad de tipo

20
21
de personalidad en los pacientes que nos consultan de modo tal que
buscando la manera de apoyarse en esa obra fundadora y en los
lo que nosotros vamos a operar como nuestra práctica de la
desarrollos que la han continuado.
entrevista con un paciente neurótico, digamos un paciente fébico,
¿Por qué hablar de diversidad? Gran parte de nuestra
no forma una sola clínica homogénea al respecto de cómo vamos
psicopatología piensa cualidades de fenómenos, y entonces pode-
a actuar en la entrevista con un paciente borderline descompensado.
mos decir "he aquí el fenómeno de la, angustia" o "he aquí el
Nuestros instrumentos van a ser diferentes, nuestra manera de
pensamiento confu.sion~l" o bie~ "he aq~í una con?ucta
manejar la presencia o la ausencia van a ser diferentes, el modo de
persecutoria". Pero SI yo digo angustia, pensamiento confuslO~al,
nuestra intervención (cuán pasivos o cuán activos podamos ser)
o conducta persecutoria, defino cualidades de conducta, cualida-
van a ser modos diferentes. Entre ese paciente fóbico, neurótico,
des que puedo observar y puedo fundamentar en la ~línica ..Pero ~a
que nos consulta, que en una serie de áreas de su vida está
clínica no se hace sólo de cualidades, se hace también de íntensí-
relativamente adaptado al mundo que lo circunda, lo cual no quiere
dades, es decir. el factor cuantitativo es tan importante para la vida
decir perfecta ni armónicamente adaptado, pero que tiene concien-
de la gente como el factor cualitativo. De modo que ~i dec~mos
cia de tiempo y espacio, por ejemplo, con ese paciente no vamos angustia vamos a preguntar "cuánta angustia, con qué intensidad,
a tener instrumentos idénticos a los que vamos a usar con una con qué frecuencia". Si decimos pensamiento confusional vamos
persona que llega desorientada en tiempo y espacio, que llega con a averiguar en la clínica cuántas veces, con qué extensi6n, con qué
un pensamiento psicótico, y esto hace a clínicas diversas. Clínicas preponderancia. Y vamos a hacer preguntas no sólo s~bre la
diversas que en términos psicoanalíticos, remiten a una obra cualidad de esos fenómenos sino también sobre la temporalidad de
fundante que es la obra de Freud.
esos fenómenos. No s610 vamos a preguntar por la angustia sino
Pero esa obra de Freud tampoco es una, voy a citar referencias cuándo emerge, en qué condiciones aparece, cuándo reaparece, es
de Pontalís. Después de que Pontalis publicó con Laplanche el decir qué ritmo tiene y nos hacemos preguntas por ritmos, a veces
Diccionario de psicoanálisis se le hizo una entrevista que fue por ciclos o por periodicidades.
publicada en Buenos Aires,en la RevistaArgentinade Psicología, De modo tal que yo ya estoy en un espacio diverso, pero no sólo
en la cual le preguntan: "después de haber revisado la obra de porque los fenómenos son diversos sino porque las categorías que
Freud, como ustec la ha revisado en detalle junto con Laplanche, tengo para analizar los fenómenos ya son diversas, porque uso
¿usted diría que configura una teoría?" Pontalis dice: "en modo cualidad de conductas, uso intensidad de conductas y uso tempo-
alguno, se trata de un conjunto de teorías con desiguales grados de ralidad de conductas. Con lo cual ya todo eso no se piensa como
desarrollo, con diferentes niveles en el interior de esa obra y no uno, se piensa como múltiples parámetros que me van a permitir
podríamos decir que es tina obra unificable por el hecho de que acercarme al fen6meno clínico.
responde a un mismo autor." De hecho este tema se ha planteado En este sentido de la clínica que no es una, sino diversa, es que
en la literatura también. El hecho de que un solo autor firme nosotros orientamos el programa de la materia. Ese programa
diversos trabajos o diversas obras de ficción no le confiere a esa habla de un campo de psicoterapias, en plural. Cada vez que yo
producción una unidad estricta, porque un autor es varios autores. escucho la palabra psicoterapia o psicoanálisis, en general me
. Bueno, si la obra de Freud no es única, homogénea, sino que es produce un estado de zozobra, porque no sé c6mo se pretendería
diversa, contiene múltiples direcciones de desarrollo, tiene múlti- generalizar esto que es diverso. _ .
pl~s.zonas en desarrollo, además, menos podría ser una la práctica Si alguien dice la psicoterpia, en singular, no sabremos bien qué
clínica que se va a basar en esa obra, que va a estar siempre tipo de diseño técnico y para qué experiencia clínica está utilizando
sus formulaciones. '

22
23
Con ese criterio es que nosotros d
terapias de insighr y las contra a~os en ~l progra~la líneas de cuando termine de estudiar la repetición ya tengo en mis manos un
de continencia. ¿Por qué present<irl1~~n~~~~io~ pSlcotera~ias anlla, un poder. Esto es muy peligroso en ciencias, siempre es
Porque queremos mostrar esa d' id d P s de terapias? peligroso.
hay situaciones clínicas dond ,Iv~rsl a ,querem?s mostrar que ¿Qué ocurre entonces? Nosotros planteamos una clínica que, en
cia, que en ese momento no v: :~ Impone u.n t~abaJo de continen- esa diversidad, avanza con un doble frente de preguntas. Doble
de apuntar a un insighi en un puntar ~l insighr, aunque sípue- frente que es: el de la pregunta sobre la práctica, que es una
.'.. momento srguícnt
Del mismo modo nosor .e. pregunta sobre la intervención clínica, dé! porqué de su oportuni-
mos de niveles del diagnÓ~i~~o ha~lamos de diagnóstico, habla- dad y el para qué de sus efectos, pregunta sobre la práctica: y una
que el diagnóstico es plural, qU~ne~J.rogra~l~a. P?rque decimos correlativa pregunta sobre la teoría que se podría poner en juego
trama de múltiples niveles del di . I~gnóstlco se hace en una ahí.
todo el tiempo en casos clínicos.lagnÓSIICO, y esto lo mostramos Un doble frente porque la teoría con la que trabajamos, y la
Del mismo modo, cuando hablamos . práctica con la que trabajamos, en principio no se unifican, están
halblamos en plural, de modalidades d~~~;o~:Ii~~c~~¡z¿~ t~rapias, siempre en interjuegos. Nunca se sintetizan de un modo armónico.
so a ma~e.ra de focalizar en terapias, hay más d cron. o ayuna De modo que suponer que "con esta teoría perfectamente aplicada
Por último, cuando hablamos en e una. en esta práctica enteramente coherente, lograremos efectos cla-
terapéuticos también hablamos en 1 ell programa de procesos ros", es un ideal. No hay tal clínica. Esa clínica es mítica, puede
-uuos en p ura , porque no hay
so, no h ay un pensamiento de un . un proce- existi r en los deseos de mucha gente, pero si esa gente nos muestra
todos los juegos y los desPlieguer~~C~so ~u.e~le pcrmrra abarcar su material clínico, allí no vamos a encontrar esa clínica. Si
el proceso con categorías diversas ,a cll~lca, te~go que pensar realmente existiera una clínica donde la teoría se une armónicamentc
de cam bio. Y haymás de un tipo d~ ~~~t~;S de ,un tipO de procesos con la práctica, y la práctica produce efectos enteramente claros,
Desde luego esta situación de div ,', de cambIO en la clínica. podría tratarse de un sistema robótico al que el paciente no se
complicarle su tarea, porque cuand er,sl,da~p~~de, al estudiante, acomoda bien.
detenllinado concepto es traba' o~sta ~stU(f¡,lI1do,ya aprender ¡,Qué ocurre? Acá está el problema del teoricismo como un
el alumno aprenda ciertos co~~~s~. o es~amos en contra de que problema que aparece con frecuencia. Me acuerdo de algunos
primer escalón aprenderclertos e p os en smgular, creo que es su alumnos que en el último examen, decían así: "nosotros sabemos
cuanto individual. El problema n~lCe~tos ~n cuanto singular, o en mucha teoría, pero cuando vamos a bajar a la práctica ...". Entonces
alumno sepa que ahí no tennin6 s ~~t,a a~, el problel~la es que el me quedé pensando en esta idea de bajar a la práctica. Yo creo que
su clínica, o que ahí no termlno ~ tusq~e a, y que ahí no termino esa relación espacial está mal planteada. Creo que en todo caso, si
su cona Porque h d hubiera un desnivel, habría que subir a la práctica, porque una vez
que para hacerse cargo de los niveles de . .. no a~ uda de
la clínica es necesario ir sub'. d compleJidad que mtrocluce aprendido cierto nivel de complejidad en la teoría, la práctica nos
una etapa donde yo deba'est~~~a~t~~.es~alones, y a veces habrá va a presentar un universo más complejo, un universo de articula-
~OIllOsi fueran únicos. Tendré q ueo~ e~lolll~nos de la repetición ciones entre lecturas teóricas. De modo que yo diría, si hay un
t"el1()lllenoscomo si fueran único , p, oncent rannc y recortar esos desnivel va a haber que subir a la práctica, desde teorías que están
estoy estudiando los fcn()menos ~icro y~).~~ng()que ~abercuando en un plano de generalización y tienen que esforzarse por acceder
el mundo del paciente. s uc rcpcucmn que ahí no se acaba al nivel de una singularización.
Si sé que ahí no se acaba ya m ,,' El problema del tcoricismo, de todas maneras, es un gran
después otros conceptos Si 'no ~ es~~re pre~arando para estudiar problema en todas las universidades, no s610en esta facultad, es un
,. o se estare convencido de que viejo problema en las disciplinas en general, y en psicoanálisis hay

24
25
siempre tentación de desvíos teoricistas. Había la historia de un programa con el concepto de situación] contexto real, externo, no
psicoanalista kleiniano, en Buenos Aires, que nos daría una pauta contexto formal del mensaje que comprende ideologías y circuns-
de qué quiere decir teoricismo. Este psicoanalista estaba totalmen- tancias de comunicación. No todas las circunstancias se resuelven
te fascinado con la teoría kleiniana del psiquismo, con muchas en signo, hay un margen último de la circunstancia en el que ésta
referencias al pecho y a la etapa oral (esto ocurría en el Hospital se sustrae al torbellino de los códigos y de los mensajes y se escapa.
Borda, y en el Borda había un paciente esquizofrénico catatónico La circunstancia irrumpe para estorbar la vida de los signos y se
presenta como residuo sin resolver, como un complejo de factores
que estuvo un año sin hablar). Un día llega al hospital y ve que hay
biológicos, sociales y económicos que se modelan como marco de
un montón de gente alrededor del paciente catatónico.
toda relación comunicativa, como una realidad que flexiona y
Dice: "¿Qué pasó?". "Habló", le contestan. Entonces dice: "¿Ha modela los movimientos no autónomos de los procesos de signi-
dicho leche?". "No". "¡Qué lástima!" exclama, y pega un puñetazo ficación. La vida de los signos es frágil sometida a la corrosión de
muy decepcionado. las denotaciones y las connotaciones bajo la presión de circunstan-
A mí me parece que esto ilustra la problemática del teoricismo. cias que modifican la potencia significativa original.
El odio que le produce a uno cuando la práctica no cierra exacta-
mente la teoría. Uno trata de que cierre, pero el paciente no está Necesitamos de esos sistemas de signos que son las teorías; las
obligado a decir "leche". Y las teorías se hacen así más difíciles circunstancias desbordan siempre a esos sistemas de signos. Esto
de elaborar. es inherente al procedimiento mismo de las ciencias que es siempre
Feyerabend es un epistemólogo actual que tiene un trabajo in- ir iluminando sus límites. El modelo de trabajo científico no es so-
teresante que se llama "Tratado contra el método". "Tratado contra lamente iluminar el centro de una escena, sino aclarar dónde están
el método" es una dirección que varios epistemólogos y filósofos los límites de lo que abarca y de lo que no abarca. De modo que yo
han tomado en Europa, que es hacerse cargo de que estamos en una diría que en esto que está planteando Eco, la imposibilidad de que
etapa teórica de fin de las grandes síntesis. Fin de las grandes un sistema de signos termine de abarcar todas las circunstancias a
síntesis que obliga a volver a revisar las condiciones de particula- las que se quiere aplicar, en esto radica la vida de las ciencias, en
ridad en las cuales pensamos, condiciones singulares y particula- esto radica el pensamiento en cuanto vivo. Si el pensamiento no
res en las que podemos ejercer teoría. En este "Tratado contra el tiene esa dinámica, ese pensamiento envejece, se queda demasiado
método" dice algo: "Tengamos en cuenta que ninguna teoría quieto, demasiado satisfecho narcisísticamente, porque ha ilumi-
nado un centro pero ha perdido conciencia de límite.
abarca todos los hechos del dominio a que se refiere".
Sobre esta relación entre teoría y práctica, me interesaba comen-
El mismo asunto lo va a plantear Umberto Eco, que por eso lo
tarles un análisis del problema realizado entre Foucault y Deleuze.
he citado acá también, en un libro que se llama La estructura
En un diálogo que ellos sostienen hace unos años sobre los
ausente. Introducción a la semiótica. Les voy a leer lo de Eco, intelectuales y el poder, llegan a esta conclusión: "toda teoría llega
porque aclara un poco más por qué es que una teoría no puede a un punto de detención que se levanta frente a ella como un muro
abarcar el dominio de los hechos, sino que intenta abarcarlo, pero infranqueable. Ese muro tendrá que ser atravesado, perforado, por
siempre se le escapa. Umberto Eco lo plantea en términos cierto tipo de práctica". Ahí se habla de un interjuego entre teorías
lingüísticos, en términos semióticos, pero el problema es el y prácticas que nos interesa mucho en la clínica, porque la clínica
mismo. Dice Eco, terminando su estudio: es el lugar donde nos tenemos que dar cuenta de hasta dónde nos
llega la teoría, hasta dónde da y dónde ya no da. Porque ahí donde
Si se enfrenta a los sistemas semióticos cerrados con procesos que la teoría no da, es probable, y éste es el diálogo de Deleuze y
responden a un modelo abierto, aparece un elemento extrasemiótico Foucault, es probable que tenga que aparecer una práctica, que
que es la circunstancia [que es lo que nosotros planteamos en el haya que inventar una práctica para movilizar el límite de la teoría.
1,.

26 27
De modo tal que esta visión a mí me resulta mucho más rica que comprender los procesos creadores que se juegan en cada escena
la de Althusser, en su momento. La visión de Althusser y algunos clínica. Dcscífrarlos (porque en gran medida son inconscientes,
otros teóricos franceses suponía que en realidad la práctica es nada inconscientes para el paciente. inconscientes para el ana-
más que aquello que una teoría permite ver, de modo tal que para lista e inconscientes para la propia interacción), nombrarlos, traba-
Althusser la práctica era un momento teórico. Esta es una visión jar en su registro de modo constante. es parte esencial del proceso.
limitada del fenómeno, y una visión que termina limitando y De paso. podríamos decir que investigar la dinámica incons-
empobreciendo la ciencia, porque la práctica no es sólo el lugar ciente de procesos creadores nos coloca en el centro de una bús-
donde uno lee con la teoría que tiene, además tiene que saber que queda actual que es fundamental, que es: hablarde inconsciente no
va a tener que encontrarse con eso que Eco llama "no cxpresable es hoy hablar solamente de ese inconsciente que muy profunda-
todavía en signos", con eso oscuro que se escapa. La conciencia de mente investigó Freud en tomo a psicopatología de la vida coti-
que algo oscuro se me escapa en la práctica es lo que me va a diana, el chiste. los sueños y el síntoma. sino que éste es un
permitir revisar permanentcrncnte mi teoría. Si yo no tengo esa inconsciente de gran importancia clínica, pero no es el único. El
conciencia quedo capturado en la teoría, pero esa teoría es un falo primero que comprendió esto fue Frcud, en un trabajo de 1923, que
~mnipotente, es decir, es un mito. Un mito que se cava la propia es "El yo yel ello". A esa altura se da cuenta de que hay un incons-
fosa. porque si la teoría no tiene conciencia de límite y conciencia ciente del yo, lo cual le hace replantcarse el alcance de la noción
de cambio interno. esa teoría no va a irmuy lejos. Justamente hoy de inconsciente que él había formulado en la primera tópica.
el tema de la ciencia es cómo se trabaja en los límites. cómo se Efectivamente, en el año 1923 Frcud estaba formulando su
elabora y se crea en los límites. segunda tópica del aparato psíquico donde intcractuaban como
He mencionado a Eugenio Trías. filósofo español que hace un sistemas el yo, el ello, el supcryó, 10 real y éstos interactuaban
par de años publicó un libro que se llama La aventura filosófica. como inconscientes, 10cual abría una investigación que Freud vio
Este libro está centrado en el problema del límite. sobre la claramente en ese momento: 10 inconsciente no definía a un sólo
importancia de comprender que es en los límites entre diferentes sistema. sino que aparecía como una cualidad de múltiples siste-
mas. Uno de los sistemas donde nosotros creemos que hay que
tipos de objetos. y en los límites entre diferentes ciencias, allí
poner el énfasis para comprender la clínica. es entender un incons-
donde el pensamiento puede seguir creando. Es decir. el límite ciente de procesos creadores. Inconsciente de procesos creadores
como objeto de estudio actual en la filosofía. es el espacio donde que no anula ni deja de lado a ese inconsciente de la repetición que
se ponen en marcha dinámicas de creación. Freud investigó con suma claridad por ejemplo en las neurosis.
¿Por qué? Porque todas las dinámicas de creación emergen en Sino que más vale nuestra clínica se presenta como un interjuego
el choque de elementos heterogéneos. En un mundo homogéneo complejo. dialéctico. entre inconscientes: un inconsciente de la
lentamente la creación se detiene. repetición. un inconsciente creador de diferencias. Allí es donde
Nosotros vamos a hablar de procesos creadores. porque (y esta nos vamos a plantear la clínica.
es una orientación central en nuestro enfoque) creemos que sin una El tema es el siguiente, retorno ahora algunas ideas sobre único,
clara concepción de procesos creadores, procesos creadores en el uno o diverso. unidad o diversidad. y después vamos a hablar de
paciente. procesos creadores en el analista, y procesos creadores en clínica. A nosotros se nos plantea en la clínica tratar de ver y
entender pacientes concretos, no pacientes abstractos. Pero, ¿qué
el intcrjucgo de ellos en cada terapia. sin una concepción de
quiere decir concreto? Yo voy a tomar el concepto de concreto
procesos creadores hay una clínica estática. hay una clínica dete- que utilizó Marx para replantear su relación con la ícnomcnologfa
nida. de la historia de Hegel. Hegel presenta una visión de la historia
Nosotros creemos que dinamizar la clínica. en gran medida, es donde él encuent ra una causa eficiente para los procesos hi sróricos,

2R 29
que llama "espíritu absoluto". Y Marx se enfrenta ~on esa visión En uno de sus trabajos Gilles Deleuze dice así: "En la actualidad
de la historia, y dice: ésta es una visión abstracta, es abstracta nos toca investigar articulaciones de superficie". ¿Qué son las
porque busca un cierto tipo de determinantes y los cree rigiendo articulaciones de superficie? Son las maneras en que dinámicas
absolutamente el fenómeno en estudio. El concepto de causa profundas del individuo, del grupo, de la institución y del país se
eficiente es que hay un tipo de agente determinante, de una abrochan en un momento dado y producen un efecto (por ejemplo,
determinada calidad, que da lugar a un universo de efectos. síntoma fóbico). ¿Por qué? Porque esto es lo que ocurre en un
Entonces Marx dice que esta filosofía de Hegel es abstracta, que tiempo y un lugar determinado, esto no ocurre ni ayer ni mañana,
para pensar la historia concreta tenemos que multiplicar nuestra esto ocurre hoy. En esa superficie del tiempo hoy, y en este espacio
lectura sobre los determinantes. que agrupó a la gente en facultad, allí vamos ~ tener que d~tectar
Entonces aparece ahí un contrapunto ya claro en Marx, que es articulaciones en los límites. Ese es un pensamíento de conjuntos.
así: simplifico, abstraigo, recorto un tipo de determinaciones, Deleuze dice: lo oculto.las dinámicas de profundidad se revelan
produzco un objeto teórico abstracto -multiplico los ejes de por esos "efectos de superficie".
referencia, comprendo que hay una serie de determinaciones Lo que abre la revisión de las relaciones entre teoría y prácticas
entrecruzadas potenciándose, y entonces produzco un objeto teó- es un horizonte diferente, y es importante que para el estudio de una
rico concreto. Escuchen: objeto teórico concreto, porque claro, no teoría ese horizonte esté trazado desde sus comienzos. Es el
salimos del ámbito de la teoría. Pero si yo voy multiplicando mis horizonte de una perspectiva crítica del discurso teórico, una
ejes de referencia para comprender dónde está puesta la vida de la conciencia de que toda teoría debe tener problematizada su capa-
persona (siempre hay más de un eje de referencia, no se trata sólo cidad de dar respuestas y jerarquizada su capacidad de renovar las
del deseo, no se trata sólo de la neurosis), entonces estoy aspirando
propias preguntas.
a producir ese concreto. ¿Logro abarcar enteramente la vida de esa Recordemos con Deleuze: "Lo verdadero sólo se presenta al
persona? Seguramente no, estoy intentando aproximarme. Segura- saber a través de las problematizaciones; y éstas surgen a partir de
mente no la abarcaré, pero trataré de aprcximarme con el mayor prácticas, prácticas de ver y prácticas de decir".
rigor, con la mayor amplitud posible.
Lo que sostenemos, entonces, frente a los absolutos siempre
En el año '30 en Francia, aparece un filósofo que no llegué a supuestos posibles en las formas de todo discurso dogmático, es
incluir, que es George Politzer. Politzer revisa el psicoanálisis de una Epistemología (le Pensamiento Crítico. El criticismo en
la época en Francia y dice: "éste es un psicoanálisis abstracto", filosofía abrió un tercer camino, en esa clásica polaridad de
porque "no me habla de la gente, me habla de la fijación, de la dogmatismos y eclecticismos. No estamos obligados a caer en una
regresión, de la libido y del Edipo". Yo aspiro, dice Politzer en el ortodoxia ni en las limitaciones del eclecticismo. Es posible operar
año '30, a que haya una lectura de una psicología concreta, es decir con un pensamiento crítico. (Línea de varios autores italianos,
"una psicología que me muestre a la gente viviendo, a la gente CarIo Viano, Massimo Cacciari, creemos que Umberto Eco en sus
trabajando, a la gente respirando, y desde luego, en esa gente que últimos libros.)
está viva, entrarán la fijación, la regresión, la libido, el Edipo, pero La consideración de "SITUACIONES" va más allá de una amplia-
entrarán de modos singulares". Yo tendré que descubrir las mane- ción de los objetos en estudio: supone el empleo de otras modali-
ras singulares en que cada persona vive su regresión, su fijación, dades de pensamiento.
su libido, su Edipo. Ferrater Mora, en Modos de hacer filosofía, destacó dos modos
El problema que aparece acá es un problema filosófico amplio de razón, la razón "analítica", y la razón "integradora". La razón
que está en juego en todas las ciencias, sostenido por la pregunta: analítica, de tendencia generalizadora, sistematizante, opera me-
¿cómo podemos generalizar, hasta dónde podemos generalizar, y diante procedimientos lingüísticos-reductivos. La razón integradora
dónde tenemos que particularizar? de tendencia particularizante, procede mediante construcción de

30 31
conjuntos y emplea modelos de historización para esos conjuntos. Una problemática abordada en direcciones similares es conside-
La primera esqucmatiza ciertos hechos construyendo modelos de rada por Umbcrto Eco en La estructura ausente.Introduccián a la
objetos en los cuales explica comportamientos que se repiten. semiótica quien ha distinguido un pensamiento que aísla estructu-
Generaliza "razones parciales", insistentes segmentos de relacio- ras de un pensamiento "serial". El pensamiento serial registra la
nes causalcs. Opera reducción por dos vías: generalizar semejan- disposición cornpositiva de las series, su variabilidad posicional,
zas, y definir cierto hecho o ley como el esencial. donde no se suponen constituidos "todos" sino conjuntos sólo
En la razón integradora, pensamiento contcxtuantc, se constru-
temporariamente unificados,
yen conjuntos en los que cada problema tiende a ramificarse, a
Tales conjuntos (con cuyo modelo proponemos pensar las
descomponerse en varios. Hay una temporalización ydiversificación
de hechos en tales conjuntos. Pensamiento pluralista (no una "situaciones" de la clínica) retienen en sí 10 heterogéneo, lo no
esencia sino varias entrccruzadas en sus leyes y efectos), leyes abarcahle de las series, ya que éstas contienen líneas de fuga, vías
diversas son reconocidas en su mutua irrcductibilidad, se genera- de desplazamiento que traspasan los límites de cada configura-
liza una especie de ley de diversificación, se reconocen no sólo ción. Para el pensamiento serial el límite es de configuración,
semejanzas de comportamientos sino diferencias (Wittgcnstcin: perteneciente a un diseño de esa configuración.
"enseñar es mostrar diferencias"). El pensamiento serial se abre a las potencialidades de pensa-
Me da la impresión que todo versus entre estos dos modos de miento creador: una multiplicidad de elementos (seriales, no
razón podría sostener el equívoco de suponerlos en el mismo plano aislados, no recortados) dan lugar al diseño de una diversidad de
lógico, lo cual es posi blc pero no forzoso. configuraciones. Los efectos son de configuración, no de esencias
El estudio que recorta objetos y el que los articula pueden, en aislables. Así, como en otro capítulo destacaremos el pensamiento
parte, responder a registros de di Icrcnte orden de complejidad. lIya serial en Ccrvantcs, aquí merece que recordemos el de Borges en
Prigogine en Elogio de /a complejidad señala así que el problema su cuento "La muerte y la brújula":
está en comprender
En el segundo piso ... la casa le pareció infinita y creciente. La casa
cosas que cambian (diferencias) en un mundo que también muestra no es tan grande. pensó. La agrandan la penumbra. la simetría, los
el no cambio (repetición de comportamientos). Una ciencia que espejos. los muchos años, mi desconocimiento. la soledad.
analiza todo en fragmentos, en pequeñas porciones, que procede
separando. aislando objetos, no puede dar cuenta de órdenes de Las series producen su efecto de composición por convergen-
complejidad.
Complejidad indica pluralidad, diversidad de modos de funciona- cias (resonancias múltiples en puntos de anudamicnto propios de
miento. Ha hahido un modelo prestigiado en ciencias (que el físico la red situacional). un efecto de casa abrumadoramcntc enorme,
Bohm por ejemplo propuso para pensar el universo) que es creer monstruosa. Punto crítico que como sugirió Piera Aulagnier debe
que hay una información preexistente. oculta. una trama inicial comprenderse en el cruce de un acontecer y un fantasma.
que se despliega sin novedad. de modo que ocurre lo que ya estaba Pensamiento serial que también encontramos, una y otra vez, en
inscripto en esa trama inicial. Gilles Delcuze. Así en su trabajo La filosofía de Francois
Hoy tales ideas no se sostienen: se hace evidente que hay sistemas Chátelet donde destaca que Chátclct dijo de sí: "he teniclo una
inestables. bifurcaciones: nada queda atrapado en una trama educación burguesa, he sido influido por Hcgcl, he vivido una de
previa. Hay dirección del tiempo. irrevcrsibilidadcs, no mera
permanencia de lo trazado en los orígenes. esas épocas de la historia que enferman a cualquier alma un poco
sensible ...".

32 33
Tres hechos diferentes, dice Deleuze, magma estratificado, descomponible en láminas o niveles, algu
nos de los cuales responden a un orden relativamente determina-
un conjunto plural, desplegamiento de algo que no es lo "vivido" ble y formalizable en relaciones de sentido, mientras que otras
subjetivo que puede aislar singularidades, ni el concepto que las capas y el conjunto de ellas en consecuencia, mantienen desorden,
ahoga en lo universal, suponiéndolas simples momentos de una creatividad radical, márgenes de lo enigmático imprevisible que
esencia, sino la operación que produce una configuración, la más resisten a toda fonnalización. El psiquismo resulta así, por sus po-
consistente posible para esas singularidades. En tal campo de
tenciales de desorganización y reorganización creadoras, un activo
singularidades se efectúan operaciones que establecen para las
mismas el diseño de una configuración, acto de desplegamiento generador de enigmas. Estos modelos resultan esenciales para
que traza relaciones de unos a otros puntos, los conectan y hacen sostener una clínica abierta en sus fines y en sus intervenciones.
converger entornos.

Eugenio Trías, a quien citamos antes, ha mostrado en sus


últimas obras (La aventurafi/osófica y Lógica de/límite), que "la Bibliografía
filosofía actual apunta a indagar al ser en los límites, el límite como
objeto. Lo que el límite une y escinde, deslinda, son siempre obje-
tos heterogéneos". BALANDlER,Georges, El desorden. La teoría del caos y las ciencias sociales,
Barcelona, Gedisa, 1990.
Allí se sustenta la diversidad que sólo puede ser configurada por
CASTORIADIS, Cornelius, El psicoanálisis, proyecto y elucidación, Buenos
un pensamiento serial. En el límite "se da cita la diferencia", lugar Aires, Nueva Visión, 1992.
de concordancia en disparidad. En este punto destaca la posi- DELEuZE,GilIes, La philosophie de Francois Chille/el, Paris, Minuit, 1988.
ción de Heráclito que pudo pensar "un lugar donde se cita en su Eco, Umberto, La estructura auserue.Lntroducclán a la semiótica. Barcelona,
diferencia lo dispar". Lumen, 1986.
FERRATER MORA, José, Modos de hacer filosofía, Barcelona, Criterio, 1985.
También los trabajos más recientes de Castoriadis insisten en la
PROGOGINE,I1ya, Elogio de la complejidad, Madrid, Revista de Occidente,
perspectiva de un modelo heterogéneo de instancias y espacios 1989.
psíquicos. "Cada instancia del psiquismo arma su propio mundo TRIAS,Eugenio, La aventura fiíosáfica, Madrid, Mondadori, 1988.
en oposición al mundo de las otras". -, Lógica del límite, Barcelona, Destino, 1991.
Castoriadis desarrolla una concepción de pluralidades, conjun-
tos a pensar según un modelo de "lógica de magmas" que no
admiten la reducción a un solo tipo de lógica. Tal modelo de
magmas señala condiciones particulares para pensar relaciones
entre orden y desorden.
El orden y el desorden en mezclas siempre inevitables aparecen
como categorías centrales en estudios de Georges Balandier: la
inexorable coexistencia de caos y orden, de desorden en el orden,
hace imperioso reconocer que toda propuesta de discurso científi-
co dotada de intención ordenadora encontrará en lo esencial de su
objeto resto no ordenable, azar y desorden, que hacen subsistir en
ese objeto toda clase de enigmas.
Para Castoriadis el psiquismo aparece con un modo de ser de

34 35
EL ABORDAJE CLINICO
DE LAS ESTRUCTURAS NEUROTICAS
EN PSICOTERAPIAS
ESTRUCTURAS PSICOPATOLOGICAS YSU ABORDAJE
EN PSICOTERAPIAS:
EL PROCESO EN LAS ESTRUCTURAS FOBICAS*

En esta comunicación me interesa transmitir ideas y experiencias


clínicas que hacen a una concepción estratégica para el abordaje en
psicoterapias de diferentes estructuras de personalidad. Esta con-
cepción destaca, yo destaco, la necesidad de adecuar los recursos
y las actitudes del terapeuta a las condiciones particulares que
presentan para el desarrollo del proceso diferentes estilos de
personalidad que concurren a la consulta.
Creo que esta dirección de investigación fue inaugurada por
Freud, sobre todo en dos trabajos donde hace referencia a proble-
mas técnicos. Un trabajo de 1910 que fue la intervención en un
congreso de psicoanálisis, en Nuremberg, que se llama "El porve-
nir de la terapia analítica" y, más explícitamente, en otro trabajo de
1918 (del congreso de Budapest) que se llama "Los caminos de la
psicoterapia psicoanalítica", donde Freud plantea muchos de los
problemas que actualmente estamos investigando, que personal-
mente y con un equipo grande de colaboradores venimos investi-
gando en los últimos años, porque creemos que son problemas
enteramente abiertos, nada resueltos todavía.
El pasaje de Freud que quiero mencionarles, para ubicar el
espíritu de esta línea de investigaciones, señala en "Los caminos
de la psicoterapia psicoanalítica" lo siguiente:

El descubrimiento de que las distintas formas patológicas que

* El contenido de este capítulo fue presentado como conferencia especial en el IV


Congreso Argentino de Psicología, Rosario, 16 de octubre de 1980.

39
tratamos no pueden ser curadas todas con la misma técnica, nos ha estructura psícodinámica profunda, a diferentes formas de organi-
impuesto otra especie totalmente distinta de actividad. Sería zación caractcrológica ya distintos estilos de comunicación.
prematuro tratar ya aquí detalladamente de esta cuestión, pero sí Para ampliar un poco más el problema que quiero introducir
puedo haceros ver, en dos ejemplos, en qué medida surge aquí una aquí: cuando hablamos de una organización psicodinámica pro-
nueva modalidad activa de nuestros métodos. Nuestra técnica se funda creo que estamos hablando de posiciones con respecto al
ha desarrollado en el tratamiento de la histeria y permanece aún proceso edípico, desarrollo del proceso de identi ficaciones, angus-
orientada hacia esa afección. Pero las fobias nos obligan ya a tias y defensas.
salimos de nuestra conducta habitual. No conseguiremos jamás Pero ese mundo, el de esa organización psicodinámica profun-
dominar una fobia si esperamos que el análisis llegue a mover al da, se encarna en una organización caracterológica y en un modo
enfermo a abandonaría, pues no aportará entonces nunca el
de comunicación. Se encarna, se expresa a través de. y se mantiene
análisis el material indispensable para conseguir una explicación
porla existencia de una organización caracterológica y de un estilo
convincente de la misma. Por tanto, habremos de seguir otro
de comunicación.
camino. Tomemos como ejemplo la agorafobia en sus dos grados,
Una organización caracterológica quiere decir: formas estables
leve y grave. El enfermo de agorafobia leve siente miedo de ir solo
nuromatlcas (le regulación de esas angustias, de esos conflictos de
por la calle, pero no ha renunciado ahacerlo. El enfermo grave se
protege ya contra la angustia, renunciando en absoluto a salir solo. nivel profundo, que funcionan como sistemas de homeostasis
Con estos últimos no alcanzaremos jamás resultado positivo reiterada, automática, para el manejo de esos conflictos propios de
alcuno si antes no conseguimos resolvcrlos, por medio del influjo la estructura profunda. Y desde esas formas de organizaciones
:1I~llítico, a conducirse como los primeros, esto es, a salir solos a de carácter estable, se instalan modalidades de comunicación, que
la calle, aunque durante tales tentativas hayan de luchar penosa- hacen a modalidades de emisión y recepción de mensajes y
mente con la angustia. Así pues, hemos de tender antes a mitigar modalidades semánticas, como referencia a ciertos temas que
la fobia, y una vez conseguido esto mediante nuestra intervención insistentemente cada estructura tiene como "sus" temas. los temas
activa, el enfermo se hace ya con aquellas ocurrencias y recuerdos de su propia fantasmática que son los temas a los que vuelve
que permiten la solución de la fobia. La actitud expectante pasiva reiteradamente.
parece aun menos indicada en los casos graves de actos obsesi vos, Lo que ocurre es que esa estructura profunda. entonces. está
los cuales tienden, en general, a un proceso curativo "asintótico", funcionando a través del carácter y del modo de comunicarse el
a una duración indefinida del tratamiento, surgiendo en ellos, para paciente; pero justamente esas pautas del carácter y modos de
el análisis, el peligro de extraer a luz infinidad de cosas sin comunicación son los que se nos presentan en el trabajo clínico en
provocar modificación alguna del estado patológico. cada momento de cada sesión. Y son esos problemas los que
aparecen primero. como problemas a abordar de alguna manera
Muchos autores siguieron luego estas líneas de indagación eficaz. De este modo los problemas de abordaje y eficacia pasan
tanto en psicotcrapias individuales como grupalcs. En nuestro país por anali zar cuáles son las formas de funcionamiento
debemos destacar los trabajos de David Libcrman con su énfasis caracterolágico y comunicacional el/ las que se expresan las
en la comprensión del estilo propio de cada tipo de personalidad estructuras profundas.
y en la necesidad de encontrar el terapeuta un estilo complemen- Es a partir de ahí que se abren numerosos problemas técnicos,
tario. a mi juicio totalmente abiertos a una investigación que tenemos
Las diferencias entre esos tipos de personalidad y los proble- por delante y de la que ya llevamos realizados tramos. creo que
mas de abordaje técnico que plantean, pueden ser consideradas bastante importantes.
desde una perspectiva amplia como inherentes a diversos tipos de Diría desde ese ángulo, y entendiendo lo que la estructura de

40 41
carácter mantiene en cada paciente, la homeostasis que regula, que Desde luego no estoy sólo centrado en esta estructura, sino que
en el proceso terapéutico no se avanza atacando defensas, ni este plan de investigación que estoy tratando de transmitirles está
barriendo defensas; se avanza a través de vías, de desfiladeros que buscando la manera de sistematizar los elementos que hacen al
esas defensas nos dejan abiertos. abordaje técnico de estructuras histéricas, estructuras obsesivas,
Encontrar las vías y las maneras de transitar esas vías, eso, es estructuras borderline. patologías narcisistas. En una segunda
enfrentar los problemas de las técnicas terapéuticas. El abordaje etapa, más adelante, tendremos que abordar con la misma línea las
estratégico, decía en el resumen, de cada personalidad, requiere estructuras perversas, psicóticas y psicosomáticas, que también
tomar en consideración los obstáculos y las vías de acceso ofreci- suponen numerosos problemas técnicos diferenciales.
das por esos diversos parámetros. Además, con un equipo amplio de colaboradores estamos tra-
Para ilustrar estas cuestiones de orden general, quiero mencio- bajando en otros numerosos casos, a los que sigo de cerca en
nar en esta conferencia los problemas y recursos que pueden supervisiones, en ateneos clínicos, en grupos de trabajo, y la
movilizarse en el tratamiento de pacientes predominantemente muestra de pacientes fóbicos con la que puedo ampliar estas
fóbicos. generalizaciones está en este momento en cincuenta pacientes.
El interés de trabajar sobre esas estructuras, estaba ya señalado Es desde esta experiencia de cincuenta pacientes que les voy a
en el párrafo que les cité de Freud, era porque "ya las fobias", decía ir transmitiendo los puntos que más pueden interesamos para los
Freud, replanteaban la técnica. Además, creo que nuestro interés fines de esta comunicación.
en estas estructuras está ligado a la gran frecuencia de consultas Me parece posible pensar el proceso terapéutico que se desen-
alrededor de patologías fóbicas. vuelve con pacientes fóbicos como el despliegue progresivo de
Todo terapeuta recibe, seguramente, más de un paciente fóbico varias fases; cada fase presenta ciertas tareas como posibles y
y posiblemente más pacientes fóbicos que con otras patologías. necesarias con cierto grado de prioridad, pone enjuego con mayor
Las consultas son habitualmente por problemas de eficacia intensidad, ciertos cont1ictos y activa correlativamente problemá-
laboral, por problemas de decisión vocacional, por dificultades ticas transferenciales particulares.
sexuales o de relación de pareja. Para formular un primer panorama general paso a plantear a
Lo cierto es que tenemos que vemos continuamente enfrentados continuación las fases en el orden de sucesión en que el proceso
entonces, con una patología para la cual ya la llamada "técnica suele desplegarlas.'La sucesión de esas fases se me presenta como
clásica" no servía en J 9J 8. el despliegue de un sistema telescópico. Cada fase emerge de la
Por otro lado, para referirme a estas patologías fóbicas que precedente, a la cual no suprime. Las tareas se van encadenando,
puedo ir generalizando los datos de una experiencia clínica bastan- se van agregando, se superponen; ansiedades y conflictos del
te amplia. Personalmente he trabajado a lo largo de varios años con comienzo mantienen su vigencia pero va variando su intensidad,
catorce pacientes predominantemente fóbicos. He trabajado la frecuencia y el sentido, en función de tareas de fases siguientes.
exhaustivamente con ellos. Algunos de estos pacientes han termi-
nado ya sus tratamientos y los resultados de esos tratamientos han l. Primero menciono estas fases en términos globales y después
sido para mí muy importantes como para poder reflexionar qué trato de entrar en detalles. Se me presenta una primera fase de
hice, cuánto hicimos con los pacientes en esos tratamientos, trabajo que es la fase de creación del vínculo terapéutico, es decir
qué permitieron poner en marcha procesos muy ricos. Algunos de la fase de especificar condiciones de contrato, objetivos, encuadre,
esos pacientes fóbicos están actualmente en tratamiento conmigo para la puesta en marcha del proceso. Para todas estas tareas los
y estoy constantemente tratando de indagar cuántos y cuáles son pacientes fó bicos pl an tean condi ciones especi ales al mostrar desde
los problemas para el abordaje especial de esa estructura. el comienzo una gran ambivalencia con respecto a aceptar un

42 43
contrato, comprometer cierta duración del proceso y cierta fre- ese modo de aproximación: "Todavía no me animo a pensar que
cuencia de sesiones. El problema es muy amplio para esta primera todo eso también me pasa a mí".
fase del trabajo. El problema es que el paciente y el terapeuta parten En esa fase yo no tengo apuro por convencerlo de que todo eso
desde ópticas muy diferentes acerca de 10 que es necesario y de 10 también le pasa a él. creo que tendrá que ser el paciente el que
que es posible, y desde esas diferentes ópticas esta fase inicial llegue en un momento dado de su proceso de maduración a
requiere trabajar hasta elaborar delicadamente zonas de tran- interesarse por saber si eso también le pasa a él. El trabajo sobre
sacción entre 10 que es posible y lo que es necesario, zonas en las estas situaciones de interacción permite esbozar modos de co-
que tendrán que estar en juego todas las divergencias de ópticas nexión entre dinamismos del paciente y pautas y estilos de otros.
iniciales y desde las cuales los puntos de desacuerdo puedan para él significativos.
comenzar a ser objeto de un trabajo compartido. Creo que en esta fase nuestro trabajo se realiza en una zona de
entrecruzamiento. entrecruzamiento entre unaópticade psicología
2. La segunda fase del proceso se me presenta como la fase de grupal y una óptica de psicología individual. de mecanismos
relevar detalladamente la situación de interacción donde el pacien- intrapsíquicos.
te fóbico está incluido, y en las que relata vivir habitualmente con Es en esta intersección donde creo que el paciente Ióbico puede
emergencia de ansiedades. En ese relevamiento se trata de realizar instalar con nosotros una relación de trabajo que puede ir avan-
progresivamente un reconocimiento de pautas vinculares, las zando.
pautas que hacen a esta organización del carácter. al estilo de
comunicación. 3. Hablo de una tercera fase del proceso cuando se ha logrado ir
El trabajo en esta segunda fase del proceso es abordar la creando progresivamente. ir delimitando un espacio interno como
problemática del paciente a través de situaciones de interacción. reconocimiento de una realidad psíquica individual.
Esta parece ser una vía singularmente accesible para el trabajo del Ese es un largo proceso. Cuando hablo de progresiva delimita-
ción, quiero destacar que nosotros. por nuestra formación, por
paciente. dado que las defensas disociativas y proyectivas de las
nuestro oficio. concebimos ya (y no nos ha sido muy fácil
fobias, tienden a configurar un espacio intermedio en el cual 10
asumirla), la noción de una realidad psíquica individual; el pacien-
interno y lo externo están constantemente en relaciones ambiguas.
te Ióbico no la tiene y iampoco está en condiciones de asumirla, por
La ambigüedad de ese espacio aparece en las fobias como una
lo tanto tiene que llegar a aprchcndcrla y. fundamentalmente. a
condición de tolerancia para aproximarse y contactar con sus tolerarla.
propias pautas.
Esa realidad psíquica es una de las zonas peligrosas,
Diría que en una etapa inicial del proceso es probable que para amenazantes. del universo fóbico, La cuestión estriba, en la
el paciente Ióbico sea más tolerable hablar de su relación con los segunda fase, para llegar a la tercera, en ir aproximando al paciente,
otros y hablar de los otros, pero en ese hablar de los otros no están en ir construyendo condiciones para aceptar y reconocer esa zona
en juego sólo los elementos disociativos y proycctivos. Además temida que es la de su psiquismo.
creo que es el camino que un paciente Ióbico tiene para empezar a En esa progresiva delimitación de ese espacio interno va
incorporar modelos que después le servirán para pensarse él. tom ando intens idad la posi bi Iidad de investigar el uni verso descarne
.En muchas situaciones en sesión el paciente Ióbico sigue bien del paciente. 10 que podemos llamar contlictos profundos.
1;.l Idea de lo que le estará pasando a tal persona de su entorno y la Esa puede ser una etapa de elaboraciones profundas en cuanto
sigue con interés y puede ir incorporando allí todo un aprendizaje a la manera de plantearse los conflictos. que antes eran planteados
acerca de vínculos y mecanismos intcmos, pero está diciendo con más en términos interaccionalcs. Ciertos conflictos básicos en

44 45
términos de progresi6n-regresi6n y sus correlatos profundos como Si esto avanza en esa dirección y se consolida, es posible iniciar
conflictos de identificaciones y conflictos en las posiciones del un trabajo de terminación.
Edipo (en relación con castración y posiciones fálicas) se hacen
trabajablcs en esta tercera etapa. 5. Este trabajo de terminación de tratamiento replantea y reactiva
En esta etapa es posible profundizar sobre las funciones de los todos los conflictos de todas las fases que mencioné y da lugar a
objetos fobígenos y de los objetos protectores en la estructura nuevas síntesis, da lugar a nuevas reconstrucciones. Ese trabajo
propia de ese paciente. estará destinado seguramente a continuar el curso de un autoanálisis
Esta elaboración permite entrar a discriminar fantasmas de intenn inable.
castración y las experiencias actuales que evocan a esos fantasmas
y que parecen "realizarlos". Antes de ahondar en cada una de estas fases quisiera volver a la
idea general de la conferencia, la idea general que se ejemplifica
4. Hay una cuarta etapa en esta visión del proceso (que desde s610a través de esta problemática fóbica y su tratamiento. Quisiera
luego admite también otras puntuaciones de etapas). ~anre~oas~ .
Yo ubico esta etapa como aquella en la cual, como resultado de Pennitamos en nuestra tarea que cada estructura de personali-
todo ese proceso de trabajo profundo, emerge la angustia en el dad nos revele cuáles son sus caminos, los cam inos para un proceso
paciente fóbico con una intensidad y con una calidad nuevas. de elaboración y reestructuración profunda de sí misma.
Porque la angustia emerge a partir de un proceso en el que el No le impongamos al paciente la violencia, no sólo la violencia
paciente ha ido debilitando sus defensas. Esto en función de que ha de interpretación, como lo acentuaba un texto de Piera Aulagnier,
ido aprendiendo algo fundamental: que sus defensas fóbicas sino la violencia de los prejuicios técnicos acerca de lo que
estaban instaladas para defenderlo de amenazas de castración, pero supuestamente de modo universal tiene que ayudar a un paciente
en la práctica y todos los días de su vida, sus defensas fóbicas eran y de lo que supuestamente también, de modo universal, no puede
la ejecución de sus verdaderas castraciones. "ayudarlo" en su proceso.
Permi tamos que cada estructura, que cada paciente en consecuen-
En el momento en que ese paciente ha podido interiorizar con
cia, nos enseñe a ayudar/o. Intentemos abrir una amplia investiga-
suficiente insight esta perspectiva, en ese momento el paciente
ción en ese punto todas los días, con cada paciente, acerca de cuál
asume que sus defensas son sus enemigas, que las defensas que
es la manera en que podremos ayudarlo, que seguramente no es una
parecieran protegerlo, en realidad son las maneras de funcionar
manera universal ya reglada y fijada pornadie. Freud mismo esta-
que lo condenan.
ba viendo este problema en 1910 y en 1918, con mucha claridad.
En ese momento la emergencia de la angustia es muy fuerte, Desde ese ángulo yo creo que es interesante investigar qué
pero es el momento en el cual el paciente está en condiciones de factores, cuántas razones y de qué tipos, han llevado a muchos
empezar a adquirir pautas distintas de funcionamiento y a despren- grupos de trabajo profesional, reiteradamente, a suponer que había
derse de sus viejas pautas defensivas, disociativas yevitativas. que constituir una técnica única para todo tipo de trastornos.
En esa etapa creo que se abre la posibilidad de que el paciente "La técnica", una especie de configuración mitica, que defini-
vaya aceptando que sólo con ciertas experiencias de desprendi- ría idealmente las terapias correctas y las incorrectas.
miento (que empiezan por ese desprendimiento de las propias Digo un mito referido a una técnica fija y universalizable,
pautas defensivas), sólo con esas experiencias de castración es porque en la práctica muchos de los autores que pretenden susten-
posible empezar a hacerse cargo, a adquirir efectivas potencialida- tar "la técnica" en singular, con sus pacientes no pueden sostener-
des, efectivas potencialidades con valor evolutivo. la, yeso creo que por un feliz respeto al sentido de realidad.

46 47
Creo que la fantasía de que constituyendo una técnica única se en las fobias y sus correlativos aspectos comunicacionales; los
fundaría un trabajo clínico riguroso, esa fantasía, hoy, no se trabajos de Mom .sobre aspectos caracterológicos en las fobias,
sostiene. especialmente en lo referido a las regulaciones de las distancias en
Creo que hay suficientes elementos para pensar todo lo contra- los vínculos y en la relación transferencial y los trabajos de la
rio estrictamente y es que "la técnica" así llamada, en singular, no orientación cstructuralista, en particular el trabajo de Lacan sobre
guarda rigurosa relación con ninguno de los problemas clínicos el historial clínico de Freud, que transcribió Pontalis y que fue
planteados por la diversidad de estructuras psicopatológicas. publicado en la Revista lmago de Buenos Aires: "Las relaciones de
Creo que en ese sentido las apariencias engañan y que si supone objeto y las estructuras freudianas". Creo que es un trabajo que
que una técnica. por ser planteada como una y muy pautada, es pemlite profundizar ricamente los problemas edípicos en las
rigurosa. eso es sólo una apariencia de rigor. Yo creo que el rigor fobias y su Iantasmática, que el historial clínico de Frcud estaba
estriba en investigar la diversidad de condiciones clínicas en las revelando con una notable sagacidad.
cuales nuest ro trabajo se pueda hacer eficaz y que el rigor está en
inst rumentar al servicio del proceso todos los recursos que esa En la primera fase del vínculo, en la fase de constitución de la
estructura permita y admita. relación terapéutica. ¿qué problemas se nos plantean? AlIímencio-
Esta apertura que estoy planteando, este cuestionamiento total né ya varios. quiero cspccificarlos.
de la idea de una técnica fija y universal ¿signi fica entonces que Nos encontramos con un paciente que como resultado de todo
todo vale? ¿que hay lugar para una especie de espontaneidad un proceso edípico intensamente conl1ictivo con ambas figuras
caótica? Todo lo contrario. Creo que nos compromete a investigar parentalcs. se encuentra tanto con amenazas de encierro (que
muchísimo más. seriamente. las condiciones de empleo de cada remiten a ansiedades claustrofóbicas), como con amenazas de
instrumento técnico en cada momento de cada proceso y en cada abandono (que remiten a ansiedades agorafóbicas).
sesión. Todo ese mundo conflictivo se nos instala en la relación
Para poder seguir hablando de los problemas cjcmpliflcados en tcrapéut ica desde la primera consulta y nosotros somos. desde ese
el caso de la estructura Ióbica voy a ir haciendo referencia a momento. tanto objetos protectores como objetos peligrosos.
aspectos psicoparológicos y a sus problemas técnicos. No voy Todo ese cont1icto toma en el paciente la forma de una
a hacer una exposición psicopatológica global de la estructura ambigüedad de comienzo, una ambigüedad con respecto a con-
fóbica porque eso me insumiría todo el tiempo de la conferencia. ciencia de enfermedad ya disposición y condiciones para tratarse.
Supongo en los colegas un conocimiento general de los psi- Es un paciente que viene "pero no sabe si se podrá quedar". no
codinamismos de la estructura fóbica. Y además remito a los sabe si tendrá horarios disponibles, o condiciones económicas
colegas para el conocimiento de esa visión psicodinámica global adecuadas y además "no sabe si se tiene que tratar" porque "a lo
a numerosos trabajos de psicopatología, de autores que a mí me mejor la solución está cn otra parte".
han pcrrn itido esclarecer muchos aspectos de est a est ructura. Diría Todo ese es el comienzo de una relación difícil. Me parece que
que tal vez debamos tomar como trabajo Iundantc el historial frente a esta ambigüedad inicial es importantc que el terapeuta
clínico de Frcud sobre el caso Juanito: ..Análisis de la fobia de un pueda espcci Iicar ciertos elementos que juegan en el interior de esa
niño de cinco años". ambigüedad, que son los elementos de una ambivalencia
Luego quiero mcncionarlcs trabajos de orientación klciniana, transfcrcncial. Pero posiblemente sea importante actuarno prcsio-
como los de Harina Segal sobre las ansiedades persecutorias y los nando ninguno de los polos de esa ambivalcncia. El paciente
mecanismos disociativos y proyectivos en las Ioblas: trabajos fóbico tiende a manejar sus conflictos de un modo proyectívo
argentinos como los de David Libennan sobre psicodinamismos delegando alguno dc los términos del conl1icto en el otro. No es

4X 49
conveniente que el terapeuta asuma enfáticamente que el paciente aJIlos a ir viendo por cuántos lados tenemos que ser pacientes con
"debe" tratarse. Creo que lo que el terapeuta tiene que devolver
son ambos términos de esa polaridad conflictiva inicial de modo
;1 paciente fóbico. .
Con respecto al tiempo de duración del tratamiento: el paciente
que el paciente pueda ir haciéndose cargo de que eso es él, ese llega planteando que no sabe si se va a quedar, en realidad es muy
querer tratarse y ese no querer tratarse también. probable que se asome al tratamiento a ver de qué se trata, a verle
El problema es que de entrada necesitamos, el terapeuta nece- la cara a un terapeuta y plahtee de entrada que a lo mejor podría ser
sita, dado que este tipo de paciente necesita, contar con márgenes que se quede dos o tres meses si lo aguanta, o seis meses si es muy
de movimientos para establecer un contrato que tenga flexibili- audaz. Y nosotros no tenemos probablemente otra alternativa que
dad, es decir hay que tener una ubicación, una actitud flexible para trabajar con ese tiempo incierto, empezar a trabajar con la idea de
crear las condiciones de contrato sobre cuya base se pueda poner que no sabemos hasta cuándo vamos a trabajar.
en marcha este proceso. Y muchos procesos fracasan porque de Es posible que el paciente plantee, o que el terapeuta proponga
entrada no hay flexibilidad en el contrato. un lapso de prueba, a partir del cual se haga posible hacer un
¿Qué problemas de contrato nos plantea el paciente? Uno balance, evaluar el proceso desarrollado hasta ese momento y
referido a la frecuencia de las sesiones con las que vaa trabajar. desde allí ir estableciendo recontratos.
Otro referido a qué tiempo se compromete a trabajar con noso- Yo he trabajado con varios pacientes fóbicos sucesivos lapsos
tros. Otro referido a cómo va atrabajar con nosotros: ¿mirándonos de prueba cortos, efectuando balances al terminar cada período de
prueba, hasta que en algunos momentos el avance del proceso
a la cara, dialogando, en un encuadre de diván, de silencio ana-
permitió contratar otro tiempo diferente, un tiempo sin límites.
lítico? ~
Porotro lado, el trabajo frente a frente. Con la mayor frecuencia
Ahí ya están planteados muchos problemas de comienzo.
los pacientes fóbicos no están dispuestos a acostarse en un diván,
Desde la experiencia clínica que les mencioné con ese grupo de
pacientes no es frecuente que un paciente fóbico pueda tolerar más y a la vez están dispuestos a aceptar una tarea que se propone ser
de dos sesiones semanales, es raro, me parece casi asombroso profunda.
cuando puede hacerlo. Más aún, el hecho de que acepte tres El interrogante aquí es: ¿Es posible, frente a frente, en las
sesiones semanales tampoco muestra que puede trabajar en esa condiciones de diálogo que crea el encuadre de trabajo frente a
. frecuencia. Suele darse que si el paciente acepta una frecuencia frente, desarrollar un trabajo profundo y técnicamente riguroso?
mayorde dos reuniones semanales, falta a una, o el material de esa Mi respuesta es sí, es posible desarrollar ese trabajo en condicio-
tercera sesión resulta tan intensamente bloqueado que se trasforma nes técnicas serias. Esas son las condiciones que el paciente admite
casi en el equivalente de una ausencia. Digo "casi el equivalente" porque no puede otras. Porque en otras condiciones, la intensidad
porque indudablemente no será lo mismo. . de sus bloqueos, tal vez se haga muy evidente en términos
Pero en este sentido lo que destaco es que la intensidad de la psicopatológicos pero muy estéril, lentificadora o esterilizante
terapia que se pone en marcha no es sinónimo de eficacia, no para los aprendizajes que queremos instalar en cada proceso
siempre esos términos van parejos. terapéutico.
La pregunta es: ¿es posible trabajar un proceso de reestructura- Por eso les decía que el encuadre de trabajo tendrá que ser la
ción profunda de la personalidad de un paciente fóbico con una zona de transacción entre lo que creemos necesario y lo que parece
frecuencia de dos sesiones semanales? La respuesta es sí, yo no posible.
tengo dudas de que con esa frecuencia de trabajo es posible llevar Esas zonas de transacción se irán convirtiendo, en el proceso,
adelante un proceso muy rico en desarrollos. en zonas de acuerdos que tendrán una base en común posiblemente
Requiere desde ya, por muchos lados, mucha paciencia. Ya creciente.

50 51
Con respecto a esa segunda fase que yo llamo de relevamiento nado pero se dcscoloca y se distancia si proponemos que él hable
de situaciones de intcracción. el paciente plantea de entrada una también de otros temas. Frente a estas disociaciones básicas creo
gran ambigüedad entre un adentro y un afuera. entre el adentro que que el terapeuta necesita por un lado tener un margen amplio de
sería lo propio del paciente y un afuera que parece localizarse en tolerancia para con tales disociaciones,
los otros, en la circunstancia, en el contexto, en el grupo familiar. En esta etapa de trabajo no es posible forzar integraciones; creo
En ese material ambiguo que el paciente trae, él y los otros están que eso sería forzar reintroyecciones masivas.
íntimamente mezclados, confundidos. Es muy difícil discernir Se presenta una posibilidad de trabajo que a mí con varios
dónde se ubica cada uno, hay como un magma inicial. pacientes me ha resultado útil. Es la posibilidad de que el paciente
Winnicott hablaba en sus trabajos de espacios transicionales, Olevea a mí ligar los elementos disociados. Pero yo lo hago como
zonas intermediarias, donde lo externo y lo interno del individuo para mí. no para que él pueda ya seguirmc, pero sí para que él pueda
no se delimitan sino que se confunden. mirar cómo yo ligo, cómo yo asocio, cómo yo traigo otros temas,
Me parece posible pensar que el paciente Ióbico está enclavado e intento relacionarlos. El terapeuta, un paso más adelante que el
en esa zona y habla desde y por esa zona transicional. paciente, lo guía como modelo.
Lo que llamo relevamiento de situaciones de interacción es La imagen que tengo ahora es que se trata de mostrarlc a alguien
entonces ir recibiendo todo ese material e ir pensándolo de manera cómo se teje en un telar pero no pedirle a él que teja, sino que él
simultánea como un material que alude a un grupo y alude también mire cómo el otro, que es tejedor, trata de ir juntando las hebras del
a ese individuo. material que él trae fragmentado y disociado. En ese sentido yo
Desde ese material confuso tendremos que entrar en un largo acepto un trabajo activo de mi parte en muchos momentos de esa
trabajo de discriminaciones. etapa.
Lo que destaco entonces es que ese material no es trabajablc de Activo, en el sentido de que yo soy el tejedor, acepto cierta
modo directo como intrapsíquico. Creo que si ese material fuera pasividad del paciente en el sentido de que él me mira hacer; no
abordado de modo directo como intrapsfquico (y por cierto que las estoy para nada violentado pensando que estamos invirtiendo los
teorías psicopatológicas más desarrolladas insisten de modo pre- papeles de un modo inadecuado.
dominante en categorías irurapsíquicas de mecanismos y produc- Ya vendrá la etapa en que el paciente crecerá, y él será activo
tos). posiblemente las intervenciones en términos imrapsíquicos y yo lo miraré tejer. \
violentarían y forzarían las condiciones de ese espacio intermedio En el paciente funciona, y esto está bien planteado en los
en el cual está depositando el paciente su vida psíquica. trabajos de Mom, una organización de carácter que tiende a
La tarea va enfrentando en esta etapa otras disociaciones bási- establecer la homeostasis sobre la base de una tendencia a anular
cas: la disociación entre adentro y afuera de la sesión; ladisociación y recrear permanentemente distancias, límites y espacios, espacios
entre adentro y afuera de la relación con el terapeuta; la disocia- de tiempo y espacios geográficos.
ción entre lo que es mani Iícsto y es latente en el material : es decir, En todos los casos hay tendencias a establecer ciertas rcgulacio-
el paciente acepta que hablemos de 10 manifiesto pero no se nesque permitan lnstalarsc en una especie de distancia óptima que,
conecta bien cuando aludimos a lo latente. La disociación entre un por otra parte, nunca es estable. El paciente está buscando esas
tema yotros temas asociablcs. El paciente suele ir corno dosificando regu laciones a través de la ambigüedad, de oscilaciones en el grado
las zonas de investigación y cada sesión puede estar programada de compromiso con sus temas, a través de cortes, es decir de
como para tratar un tema, un aspecto de su psiquixmo, pero no bloqueos, de silencios, de olvidos y de pronto estableciendo
tolera bien que asociemos eso con otros temas. de modo tal que si especies de reconexiones bruscas, compensatorias de los momen-
hablamos de ese tema se siente más o menos cómodo y acornpa- tos d~ corte y anulación de la tarea.

52 53
En estas regulaciones funciona (me parece posible pensarlo a extrayendo del material clínico, y que estaría destinado a neutra-
partir de la experiencia con estos pacientes) una serie de regulacio- lizar los desequilibrios en el mantenimiento de esas ecuaciones
nes automáticas de las distancias, de los tiempos, del contacto en que acabo de mencionar. Desequilibrios porque siempre el control
el vínculo. Me parece posible entender que el paciente tiende del tiempo de contacto y el control de la distancia fallan, por algún
automáticamente, e inconscientemente, a regular especies de lado se exceden, o se quedan cortos.
ecuaciones, de las cuales hasta aquí he formulado tres. Ecuaciones Hay una tercera regulación que creo que funciona sobre esta
con las que creo posible entender movimientos en sesión, y entre base: que la intensidad del contacto y de la comunicación por el
sesiones, y en el mes y a lo largo del año. reconocimiento de ese contacto que se ha establecido tengan que
Una ecuación es la que, me parece, establece que el monto del mantener un producto constante. Esto significa que si el paciente
contacto y de la comunicación del paciente consigo mismo y está trabajando intensamente en una sesión luego su regulación
conmigo, multiplicado por el tiempo de ese contacto, tiene que homeostática estribe en que desconoce el haber trabajado intensa-
producir una constante. Esto quiere decir clínicamente que, si el mente en esa sesión. Y si hubo un material de sueños muy rico,
paciente está en un momento de intenso contacto con cierta luego el paciente pueda olvidar el sueño como una manera de que
problemática que él reconoce como propia, es posible que ese sus contactos con esa realidad psíquica vayan siendo regulados en
tiempo tenga que ser breve; es posible que si el paciente está a distancias óptimas.
distancia, está más lejos de su problemática y de nosotros, enton- Esta noción de "distancia óptima" que acentúan los trabajos de
ces ese tiempo, en ese nivel de contacto, puede sermás prolongado. Mom, creo que es una noción clínicamente muy interesante,
Esta ecuación indica que si una sesión fue muy intensa, encontra- porque lo que muestra es que el paciente está siempre de viaje, en
mos nuevos materiales, y el paciente se conectó mejor con él y un estado dé movilización constante.
conmigo, la sesión siguiente deba estar marcada por la ausencia o ¿Qué necesitamos hacer con estos movimientos, con estas
el bloqueo. regulaciones?
Hay una segunda regulación que creo funciona en base a una Diría que en primer lugar poder tolerarlas, porque el margen de
ecuación de este tipo: la intensidad del contacto y de la comunica- ansiedad que nos genera un paciente que está con nosotros y no está
ción del paciente consigo mismo y conmigo por la inversa de la con nosotros, que está con nosotros y no se sabe hasta cuándo va
distancia geográfica, esto es, la distancia física, tiene que mante- a estar con nosotros, que está trabajando y de pronto nos dice que
nerse como un producto constante. no reconoce haber trabajado, nos expone a constantes frustracio-
Esta regulación sobre la base de las distancias explica, por nes, a constantes sentimientos de pérdida o amenazas de pérdida.
ejemplo, que el paciente se encuentre mejor con nosotros cuando ¿Qué más tenemos que hacer con estas regulaciones?
está entre sesiones que en sesión, explica también que si estuvo Creo que tener siempre en cuenta el conjunto de esos movimien-
separado de nosotros, el reencuentro al comenzar la sesión podrá tos. no detenemos de modo fragmentario en ninguna de las etapas
ser intenso, cargado de expectativas. Se agregará un clima de de esos movimientos sino poder mostrar el encadenamiento de
choque, cierta perplejidad porque hay en ese reencuentro una esos movimientos, sus secuencias, que hacen que si está cerca; está
brusca modificación de las distancias. cerca porque estuvo lejos y porque volverá aestar lejos y viceversa.
Esto explica también que, ante la posibilidad de un alejamiento Por otro lado me parece im portante mostrar al paciente el efecto
como el de las vacaciones, el paciente, antes de irse, pueda confusional que producen estos sistemas de regulación
producir mucho material y trabajar en sesión casi como si no fuera homeostática.
fóbico. Estas maneras de funcionamiento basadas en tiempos, distan-
Hay un tercer modo de regulación que me parece factible ir cias y reconocimientos. producen una duda constante acerca de

54 55
Mencionamos una etapa de angustias de gran intensidad y que cuerpo. Sólo puede ~vanzar en ~ste proceso en cuanto lo g:~ a .lavez
entrañan un estado cualitativamente nuevo: aquel en el que se omprobar que aqui se va abriendo una etapa de adqUISICIOnes:
desestructuran las defensas fóbicas tradicionales (disociaciones, ~ayortolerancia a la ~nsiedad, estados de sere~dad hasta entonc~s
evitaciones, confusiones) en función de que el crecimiento psíqui- desconocidos, capacidad para proyectar y realizar planes, capaci-
co del paciente lo impulsa a enfrentarse con sus miedos. Este dad de gozar de lo q~e v~ logran~o. .
estado 10 confunde al paciente, quien llega a sesión cuestionando El trabajo de terminación también puede requenr del terapeuta
el tratamiento ya "que nunca se sintió tan mal". El paciente debe un papel activo. En más de un tratamiento el paciente está ya en
saber, el terapeuta tiene que ofrecerle la información que explique condiciones de proponerse una terminación, pero se cuida mucho
que este estado no es un retroceso, no es un fracaso del proceso (apegamiento regresivo) de serél quien lo mencione. El terapeuta
Sino efecto de su evolución, el producto conjugado de insights, tendrá que interpretar ese silencio, pero en ocasiones no bastará
elaboraciones, avances cognitivos y creativos del paciente que lo con ello, tendrá que hacer propuestas concretas (formular fechas
conducen a vivir experiencias inéditas, situaciones desconocidas, tentativas de terminación, luego evaluar y confirmar esas fechas,
lo cualsupone abandonar la órbita de sus fantasmas de siem pre. La por ejemplo). Ese trabajo de terminación, con las condiciones de
tolerancia a esta angustia crece en la medida en que el paciente esa intervención activa en ciertos momentos clave, podrá avanzar
pueda significarla como fortalecimiento de su capacidad de en- con nuevos saldos madurativos.
frentar 10 temible. Para concluir este desarrollo quiero dejar una imagen que para
En esta etapa el paciente está cerca de desprenderse de si tuacío- mí sintetiza el sentido de este abordaje, la dirección más amplia
nes regresivas (etapas evolutivas no concluidas como las que han que orienta las propuestas de nuestra investigación:
dejado ciclos de estudios debiendo una materia, aferramiento a la Un escultor modela distinto, es decir, usa distintos instrumen-
convivencia con los padres teniendo ya condiciones y edad para tos y diferentes ritmos según el material con el que trabaja.
ensayar una vida independiente, como ejemplos muy frecuentes en Veamos si podemos aprender a ser sensibles escultores. Permi-
la clínica). En tales circunstancias enfrentar los miedos requiere tamos que nuestro material pueda ir modelándose en el proceso
desprendimientos activos. Si el paciente no puede generar el mismo de enseñamos a modelado.
impulso para producir estos desprendimientos alguien debe asu-
mir, en este momento del proceso, el rol de "partero", esto es,
inducir al paciente a experimentar sus desprendimientos. Muchas
veces ese rollo juega alguien cercano al paciente, un amigo íntimo, Bibliografía
un familiar que lo sigue en su evolución. En algún caso, a falta de
tales personajes, el terapeuta podrá ser el único integrante del
entorno que pueda actuar como impulsor de un movimiento DIO BLEICHMAR,Emi\ce, "Temores y fobias. Condiciones de génesis en la
(intervenciones sugestivo-directivas en el sentido de que ese infancia", Buenos Aires, Acta, 1981.
FREUD,Sigmund, El porvenir de la terapia psicoanalítica (1910), Madrid,
cambio ahora es esencial para su proceso). Sugerir y acompañar,
Biblioteca Nueva, 1948, tomo n. Las perspectivas futuras de la terapia
impulsar y evaluar, se presentan como tareas fundamentales para psicoanalitica, Buenos Aires, Amorrortu, 1979, vol. XI.
el avance de esta etapa. -, Los caminos de la terapia psicoanalitica (1918), Madrid, Biblioteca
El paciente experimenta con esos desprendimientos (rendir su Nueva, 1948, tomo 11.Nuevos caminos de la terapiapsicoanalítica, Buenos
materia, ensayar una vida autónoma) sus temidas escenas de Aires, Amorrortu, 1979, vol. XVII.
castración: pérdidas, desprendimientos, mutilaciones, muchas veces -, Análisis de la fobia de un niño de cinco años, Madrid, Biblioteca Nueva,
1948, tomo II (Historiales clínicos), Buenos Aires, Amorrortu, 1980,
representadas en sueños como desgarramientos de partes del vol. X.

58 59
LACAN, Jacqucs, "Las relaciones de objeto y las estructuras freudianas" EL ABORDAJE CLINICO
(transcripción J. B. PONTALlS),Buenos Aires,/mago, No. 6, "Fobias", 1978.
LmERMAN,David, Comunicación en terapéutica psicoanalítica, Buenos Aires,
DE LAS ESTRUCTURAS HISTERICAS*
Eudcba. 1962.
-, Linguistica, interaccián comunicativo y proceso psicoanalítico, Buenos
Aires, Nueva Visión, 1972.
- Y MALDAVSKY,David, Psicoanálisis y semiótica. Sentidos de realidad y
categorizaciones cstillstlcas, Buenos Aires, Paidós, 1975.
MOM,Jorge, "Aspectos teóricos y técnicos en las fobias y en las modalidades
fóbicas", en Jorge SAURI(comp.), Las fobias, B ucnos A ires, Nueva Visión
1976. '
SEGAL, Hanna, "Sobre los mecanismos esquizoides que subyacen en la
formación de la fobia", Buenos Aires,/mago, No. 6, "Fobias", 1978.

1. Modalidades de abordaje
consideradas en un material clínico

En este relato me interesa com unicar una línea de investigación


clínica y teórica, psicopatológica y técnica que desarrollo desde
hace varios años en el campo de las psicotcrapias. Esta línea indaga
las modalidades de organización y las fuerzas inherentes a diferen-
tes zonas o subcstructuras de la personalidad que estudiamos y
tratamos en cada caso, así como las relaciones entre esa persona-
lidad y su medio. Diferencio entonces como zonas y subcstructuras
a corrcJacionar e indagar de manera diferencial en cada abordaje
terapéutico, las siguientes: por una parte, en cuanto a aspectos
psicopatológicos del paciente, lo que llamaré estructura psicodi-
námica profunda de esa personalidad; su organización caracte-
rológica y su estilo de comunicación. Por otra parte me interesa
diferenciar en cada diagnóstico, en cada tratamiento y en cada
momento de cualquier sesión, entre componentes patológicos de
esa personalidad y sus potenciales de salud, potenciales realizado-
res, aclaptativos y creativos. Por otra parte me interesa investigar
las relaciones entre los dinamismos individuales de esa per-

* La primera parte de este capítulo fue presentada COl1l0 relato central en 1Congreso
sobre Psicotcrapias, B~fnos Aires. Universidad de Bclgmno, 18 de noviembre de 1981.
La segunda parte es inédita.

60 61
sonalidad y lo que hace a dinamismos grupales en los que esa exigiría un largo trabajo de exposición; expondré muchos de es~s
personalidad habitualmente vive sus conflictos. Cada una de estas elementos sistematizados en un trabajo sobre el proceso terapéuti-
subestructuras presenta cualidades particulares. Supone por ello (y co en estructuras histéricas. He elegido otro camino que es tomar
esa es la hipótesis de trabajo con la que vengo investigando hace un material clínico, un fragmento de una sesión y tratar de
ya varios años), abordajes técnicos diferenciales propios para cada mostrarles allí cómo aparecen los diferentes aspectos
una de esas zonas y subestructuras en juego en el campo clínico. psicopatológicos Yde potenciales de salud, individuales y grupales.
De la diversidad de zonas que relevo y que acabo de enumerar, se Antes les vaya mencionar brevemente que la psicopatología con
desprende una diversificación técnica en cuanto a las modalidades la que investigo estas estructuras responde a varias fuentes. Predo-
de intervención indicadas en psicoterapias para cada una de ellas. minantemente, aunque no exclusivamente, psicoanalíticas. Para el
La dirección de las investigaciones clínicas que realizo, en inter- estudio de las personalidades histéricas parto de los estudios
cambio con un equipo amplio de colaboradores, apunta a mostrar clásicos de Freud sobre el tema, como son los Estudios sobre
que esa diversidad de intervenciones técnicas debe adecuarse en histeria Y le doy importancia particular al historial de Freud del
cada tratamiento a numerosas variables singulares. Algunas de caso Dora, Análisisfragmentario de una histeria. Tengo en cuenta
esas variables singulares se definen en función de la estructura los trabajos de David Liberman, sobre el estilo de comunicación en
de personalidad predominante. la "persona demostrativa". Considero los estudios de Schapiro,
Trataré de transmitir algunos de esos criterios aplicados a sobre las modalidades de comunicación verbal en el estilo histéri-
pacientes con personalidad histérica predominante. El método co, en un libro que se llama Los estilos neuráticos. Le asigno
global del estudio que vengo realizando con varios equipos de importancia para pensarlos aspectos caracterológicos de la histeria
trabajo es el siguiente: seleccionar determinado tipo de estructura a un trabajo de un autor francés, Paul Racamier, que se llama
Histeria y teatro. Asimismo le doy importancia a ciertos trabajos
psicopatológica y estudiar una muestra amplia de pacientes que
de orientación estructuralista a partir de las investigaciones de
presentan esa estructura. Ese estudio supone: estudio global de
Lacan, que permiten ahondar aspectos de la estructura
historias clínicas, estudio del proceso terapéutico y estudio mi-
psicodinámica profunda en la histeria (en particular un trabajo de
croscópico de material de sesiones. En el caso particular que quiero
Lacan que se llama Las formaciones del inconsciente donde se
transmi tirles , de investigaciones de pacientes con estructura histé-
pueden ver aspectos muy interesantes de los desarrollos normal y
rica predominante, trabajo con una muestra de 65 casos. Esa patológico del proceso edípico en la mujer). Por otra parte hay un
muestra se compone así: hay 23 pacientes con los que he trabajado número de la revista 1mago, edi tada en Buenos Aires, que contiene
personalmente, en tratamientos de duración variable, de estructura algunos trabajos de interés para el tema que estudio (en este caso,
histérica predominante; fundamentalmente histéricos, 12 casos histerias). Son los que hacen a un panel sobre histerias con varios
seguidos exhaustivamente; combinaciones entre patología histéri- participantes, los trabajos de Lucien Israel (sobre el goce en la
ca y otras patologías (especialmente histerofobias) en 9 casos de estructura histérica) y un artículo de David Maldavsky (sobre las
pacientes mujeres, que suman 21, y hay 2 casos de patología escenas en la estructura histérica). Todo esto de alguna manera
histérica predominante en hombres. Otros casos en estudio son: 17 hace a esa base de categorías psicopatológicas con las que escucho
pacientes que hemos estudiado en 5 grupos anuales de estudio el material clínico que les vaya transmitir en seguida.
(constituidos por 70 médicos y psicólogos integrantes de los El caso clínico que he seleccionado para transmitirles de la
niveles III y IV del Centro de Estudios en Psicoterapias) y otros 25 muestra en estudio es el siguiente: se trata de Estela, una mujer de
casos seguidos a lo largo de varios años de supervisiones clínicas. 56 años, que se ha separado hace 14 años de su primer marido y
Sistematizar los datos de esta investigación con 65 pacientes me . tiene dos hijos varones que en el momento de la consulta son

62 63
casados y tienen 30 y 28 años. Ella se casó hace tres años por fecIUOSO.Y una hora después el jarrón no estaba mas.en su lugar
segunda vez y en los años en que estuvo separada. antes de este había un tlorerito con tres jazmines. Le digo a Ernesto: 'Esta debe
segundo casamiento. vivió una relación de mucho apego con los ser IU mujer, el jarrón con las flores desapareció. ¿A vos no te
hijos varones (sobre todo con el hijo menor) con quien realmente parece una ral~a d~r~speto?' ?I no me di~e nada; se va. al ~ato
configuró en muchos aspectos una pareja edípica muy intensa. vuelve y me dícc: SI. las saco Ana y a nu me parece muy bien,
Esta mujer se trató durante tres años. antes de consulrarmc, con un porque vos .no qucrés ubicarte en qu~ estás de visita y la dueña de
enfoque clásico psicoanalítico. con una analista mujer y ella casa es ella. No le hablé más. la comida me cayó mal y por dentro
comenta que ese análisis le sirvió en algunos aspectos. aunque no estoy destrozada. ¡me acuerdo y lloro!" Este es el fragmento de
le permitió cambiar su modo de ser predominante; es un modo de sesión. el material clínico al que microscópicamcnrc se lo puede
ser muy afectivo, muy dominante. sufriente y agresivo. como indagar desde varios ángulos. para pcnsar dívcrsos abordajes. Voy
caracteriza a ciertas personalidades histéricas. Es dueña de un a ir mencionando algunos de esos ángulos de comprensión del
comercio de actividades inmobiliarias, donde tiene un notable material y sus diversos abordajcs. Hay un primer aspecto a pensar
éxito económico. Se maneja muy bien en las relaciones sociales. en este material que hace a lo que podemos llamar estructura
interpersonales y éste es un factor importante de orgullo para ella. psicodinámka profunda en la histcrin. Esta estructura profunda en
ya que durante sus años de separación ese buen funcionamiento la histeria es la manera en que inferimos que está constituida una
económico. social y comercial, le ha permitido sostenerse con sltuacián cdipica infantil, que supone relaciones de conflicto muy
eficacia. Es una mujer muy enérgica. vivaz, comunicativa y intensas en el triángulo edípico. Esas situaciones de intensa
expresa sus alegrías y sus sufrimientos con gran intensidad, con conflictiva edípica en la histeria guardan relación con ciertas
mucha exaltación. Vuelve a tratamiento con la sensación de que ya ident iflcacioncs dist ribuidas a lo largo de est e triángulo edí pico; lo
no puede seguir porque se lleva muy mal con los hijos. con las más claramente estudiado como estructura profunda del Edipo en
nueras y con el segundo marido; que las relaciones de agresión son la histeria muestra el juego de los conflictos entre una figura
constantes y ella se da cuenta de que tiene una parte importante de idealizada del hombre. una figura idealizada de la mujer que está
responsabilidad en eso. pero no puede cambiar. Está haciendo en pareja con ese hombre y una figura denigrada de una tercera,
conmigo un tratamiento de psicoterapia frente a frente. de dos como mujer excluida de esa pareja. En esta historia, esta situación
sesiones semanales y el momento critico que les quiero comentar edípica se presentaba todo el tiempo y también está latente
es el siguiente: es una sesión de día lunes y era muy frecuente que expresada en esta anécdota, en esta situación de conflicto
esta mujer llegara los días lunes con grandes "dramas de fin de intcrpcrsonal, donde ella lucha por afirmar su jarrón y la nuera
semana", que ocurrían en momentos en que se tenía que encontrar lucha por afirmar el de ella. El hombre idealizado en este caso es
con sus dos hijos y las nueras; entonces para mí era ya esperable el hijo con el cual ella formó una pareja durante muchos años, de
que la sesión del lunes ibaa tcncrun dramatismo muy. muy grande. la cual le cucst a 111 ucho desprenderse. Las angustias inherentes a
La paciente llega a sesión muy angustiada. deprimida, y llora con esa estructura profunda histérica giran alrededor de angustias de
mucho desconsuelo. Comento el comienzo de la sesión en que me ~astración; podemos decir que la histeria expresa de maneras muy
dice: "No aguanto más, mis hijos. especialmente el menor, me tnte.nsas el complejo de castración y que en ese sentido sus
dejan de lado, me maltratan. yo me desvivo por complacerlos y al?s~edades oscilan alrededor de una oposición fundamental entre
siempre me pagan mal. Llego a la quinta de Ernesto (que es el hijo VIvIrla castración o colocarse en una posición rálica omnipotente
menor) temprano. Ellos no se habían levantado; entonces, ¡,qué que la rescate de la experiencia y de las fantasías de castración.
hago?,junto flores, an110un ramo precioso. enorme, y 10pongo en Frcn!e a esta angustia. la estructura profunda de la histeria estable-
un jarrón en el cent ro de la sala. Se levantan. los saludo. todo muy cc cicrtus defensas típicas: la represión de la sexualidad y los

64 65
fenómenos disociativos. En este caso diría que la represión sexual El segundo aspecto caracterol6gico lo destacaría como la posición
toma la forma de invertir los afectos con relación al hijo; ella está
pendiente del hijo, vive atada libidinalmente a ese hijo, pero de
alguna manera da vuelta ese lazo, libidinal, incestuoso, de modo
e:: centrada, la posici6n narcisista histérica. En este episodio se
senta la siguiente secuencia: en primer lugar hay un yo narcisista
P e en un papel activo inicia la puesta en juego de una escena
que l? provoca, provoca agresión y allí donde había amor genera ~~ática. Digo jugando un papel activo, ya que ella "va al frente",
agresión, u~a de las formas de expresarse las sustituciones propias aal ataque. Después pide explicaciones, también en un rol activo,
de la represión sexual. El otro mecanismo de defensa típico, el de Vcerca de la desaparici6n del jarr6n, y pide tomas de posici6n, le
las disociaciones, aparece también en este pasaje, porque esta pide al hijo que defina quién estuvo mal ahí, si la nuera o ella.
mujer tiene una historia de peleas con el hijo y con la nuera Cuando le responden "mal", cuando la desilusionan, entonces pasa
reiteradas peleas todas las semanas. Sin embargo, ella tien~ a la posici6n pasiva, herida. Este rol narcisista egocentrado se
disociada esta historia, que no influye frente al impulso que tuvo desplaza en una de las contradicciones q~e Freud, e~ 1~troducción
ese día de volver "a la carga" colocando sus flores en el centro de al narcisismo, mostr6 para la problemática del narcisismo, que es
la sala. Es decir, disocia este impulso, ese deseo de entrar en la oscilaci6n entre actividad y pasividad. Una vez que a ella le
relaci6n conflictiva en ese triángulo edípico con el hijo y la nuera responden mal, eso es vivido pasivamente: "Fíjese c6mo me
de todos los episodios previos y además están disociados los tratan, mire lo que me hacen sufrir, mire c6mo me devuelven mal
elementos de amor y agresi6n de modo tal que está convencida de lo que yo ofrecí con todo amor". El tercer aspecto de carácter
que lo que ella hacía al buscar ese ramo de flores era un acto histérico que está en juego tam bién en este momento del material,
de amor; por eso no puede entender c6mo le han respondido con es la tendencia de la estructura histérica a presionar las situaciones
agresi6n. . de interacci6n de modo de hacer hablar a todos un lenguaje de
Lo que tiene totalmente disociado es que esa conducta, además afectos. El ramo de flores, ¿quién sac6 las flores? Con todo el
de implicar amor hacia el hijo, implica agresi6n hacia la pareja. significado afectivo que le otorga al hecho de que fueron sacadas
Estos aspectos de estructura psicodinámica profunda son todos de circulaci6n. ¿Qué opina el hijo de este acto? Condena de la
aspectos a interpretar, aspectos que trabajaré en ésta y en otras nuera porfaltade respeto. Condena y rechazo por parte del hijo, por
sesiones, a lo largo de todo el proceso terapéutico, interpretando y no ocupar ella el lugar que le corresponde. En todo esto ella ha
buscando vías de insight y de elaboraci6n. inducido, ha propuesto al grupo, "hablemos un lenguaje de afec-
He mencionado otras zonas a considerar también en este mate- tos", no hablemos solamente de las flores en primavera.
rial, porque estas otras zonas de la paciente y del grupo requieren
otras maneras de abordaje que no son meramente la interpretaci6n, He mencionado otra zona de investigaci6n clínica en todos los
e~ins~ght y la elaboraci6n. Hablé entonces de aspectos de la orga- casos que estudio. Es la zona del estilo de comunicaci6n, el estilo
nización caracterol6gica. Esos aspectos hacen a lo que podemos de comunicaci6n histérico presenta ciertos rasgos peculiares y voy
llamar el carácter histérico. Les vaya mencionar tres aspectos que a mencionar aquí tres aspectos también. Primero, es un estilo
están claros en este fragmento de sesi6n. Primero, el carácter his- impresionista, se basa en vivencias, se basa en sensaciones: las
térico tiene tendencia a manejar situaciones grupales de interacción flores, un hermoso ramo, un ramo que ha sido quitado de lugar, un
cotidiana de modo de configurar escenas. Es decir, tiende a crear hijo que no escucha y que condena. Esencialmente el impresionismo
escenas en las cuales un determinado grupo y la persona histérica del relato, el estilo de esta comunicaci6n rechaza la posibilidad de
~nclui~aen ese grupo, representan aspectos deladramáticaedípica: establecer articulaciones y consideraciones reflexivas de tipo
l~clusI6n, exclu~i6n, ilusi6n, desilusi6n, idealizaci6n, denigra- histórico (Por ejemplo: ¿qué viene pasando en la lucha por el
ción, La tendencia a crear escenas es un rasgo de carácter histérico. poder, en este triángulo? ¿qué ha pasado otras veces? En éste y

66 67
otros fíne,\)d~ :s~n~alila,~n esta ql!lint~. con d olcnú. con los juegoS iaempática es necesario que se hable un lenguaje de afectos y no
y con orms 1~ai\llchos \Objetos de d;.sfH~Ja).Este retaro imprc$i,onista ~npensamiento de significaciones.
Olnite toda ·o0.msü1craCÍ6ij g'liU:pa~.en ,el sentido de qué le pasa a los Clínicamente quiero .dcstacarlcs que yo puedo abordar cual-
otros, a¡fl·art,ede rechazaría a elJa:apaJ1C de maltrataría. ¿qué quiera de estas zonas en primer lugar y después las otras. Es
sentirán los otros? ¿.qué tes puccte.ocurri:r? Eso está. omitido en el probable que, como criterio clínico ~e~eraI. sea útil comenzar por
relato, ,omjfe la/nibién con sideracionc s de tipo inS11.tuclonal o los observables. comenzar por describir las partes que son suscep-
cultural, como por ejemplo: si es canvenicnre respcrar comn tibles de descripción en esta conducta de comienzo de sesión. Es
arregía ta casa qeíen .es la dueña ..o sí es fweferib1.cque la suegra probable que yo empie~e tra~ajand~) sobr~ este último aspecto:
decldacémo decorar el living. Ese .,iflode consideraciones cultu. cómo vienen los mensajes, como vienen fragmentados. Que yo
ralcs están todas omitidas. está como naturallzado un relato que comente que sí, que ella realmente está viviendo una situación
dice: "Yo 1~j. puse tas ílores y me las sacaron .." Otro ;ISpccto del penosa. pero que habría más elementos para evaluar. más elemen-
estilo de comunicación histérico está en fragmentar el registro de tos para registrar en esa situación que está relatando.
los observables necesarios p:amev.i:;,;.ard acontecer. Por ejemplo: Es probable que yo señale la fragmentación de los mensajes
¿.cÓIn() prefieren decorar eí sa~ón el hijo yla Buera? ¿Lo prefieren para empezar a abordar este material. que yo interrogue mucho.
con flores ..lo prefieren con pocas flores. con muchas llores. cómo tratando de enseñarle a ella a pensar más acerca de lo que ocurrió
Ies gust a aellos? Eso está mniljdo en el relato. ¿Qué importancia allí. Por ejemplo. "¿qué antecedentes hay? ¡,qué ha ocurrido otras
veces con esta situación del arreglo de esta casa? ¡,ha habido
Je 4:~,torgaf'¡nel hijo y la nuera a ser ellos quienes decidan arreglar
otras peleas por situaciones similares. cuál fue el desenlace?".
ese dí~ ese espacio? Eso fJmbi,én está omitido. De alguna manera
Toda esta investigación, hecha de minuciosas indagaciones. apun-
esa fragnlCIltaci6n de los datos observables para evaluar la situa-
taría a ir ayudando a la paciente a integrar maneras de pensar.
ción hace 1••mbién a una presión transfercncial. La paciente selec-
maneras de percibir los hechos y de comunicarlos. Es decir. en
ciona tos datos y los ordena de un modo que lo único que me queda cierta medida esta intervención sobre el estilo de comunicación
a mí es rccíbirlos para "condenar la Injusticia" LjUC le han hecho. apunta a cierto adiestramiento CI/ UIl aprendizaje del pensar,
Es una scícccion y un ngrupamíemo particular de los observables pensamiento que en la estructura histérica está sumamente inter-
en juego de modo que la presión transfcrcncial apunta a ver si me ferido en general por las presiones impulsivas. fundamentalmente
pongo del lado de ella o del lado del hijo y de la nuera. El tercer por la gran presión que ejerce el principio de placer instaurado en
aspecto coruunicacional que est.áen juego. en el csrilo histérico. es conflictos cdípicos y que interfiere los procesos secundarios de
la tendencia a vivir emociones y a hacer vivir emociones antes que pensamiento. En segundo lugar abordaría probablemente esos
pensar signiflcacioncs: el supuesto naturalista de este estilo de aspectos caractc-rológicos que mencioné antes. En clínica los
comunlcacíon es que "éstos son los hechos" y que "los hechos aspectos carac-tcrológicos de alguna manera se abordan a través de
hablan por sí solos": hubo un ramo que fue quiladn de lugary hubo una pregunta que es: ¿Veamos cómo es usted? No todavía qué le
una condena, ¿Qué más se puede pedir? es decir. "las emociones ocurre a nivel profundo. ya llegaremos ahí. a la situación cdípica
hablan y no h~IY stgníñcacíones que aclarar ni que ampliar" y ésta y sus angustias. pero hay un nivel todavía descriptivo que apunta
es una presión que yo recibo en el relato, a través del estilo de a cánu¡ es usted, ver si podemos objetivar su manera de ser. "Usted
comunícaeíon. Indudablemente esta manera de relatar apunta es una persona que llega y activamente se mete en la situación y ya
también a una íntcncionalidad en 1;1 interacción conmigo que es la se puso a hacer algo que de alguna manera comprometía a los
tendencia a provocar resonancia empanen: para provocar rcsonan- otros". Es un modo de ser que en el uso popular se diría es el de una
mujer "metida"; bueno. en sesión habría que objctivar que "usted

6X 69
señora es metida, su estilo puede suscitar muchas respuesta d exploración del rasgo de carácter que es la confrontación.
desfavorables porque usted de entrada asume un papel y n s epongo a ella que imagine cómo contaría el hijo el episodio
c?nsulta ~ ucho para v~r si los otros esperaban otra cosa de ese día~ pror y cómo 10 contaría la nuera. Si el estado emocional de ella
SInOque directamente mgresa en la situación y ya empieza a crea de a~eyintenso, puede darse que no quiera ponerse para nada en el
una escena. " S e trata entonces de entender cómo es ella y tambiénr ~Olrdel hijo y de la nuera. En tal caso me dice que no sabe, ni le
cóm~ ~se modo de serde ella afecta a los otros; porque la respuesta ~f:resa para nada lo que dirían ..En ese caso evalúo, ~~gún el clima
del hIJOy la nuera no es sólo la respuesta a ese episodio del ramo Olocional. si puedo ser yo qutcn hable desde el hIJO y desde la
de flores, es la respuesta a una historia muy larga de situaciones de e era. Entonces en un momento, si lo veo factible, le digo que a mi
intromisión. Ese ser "entrometida", ese aspecto del carácter histé- :.oe parece que si el hijo estuviera aquí me diría: "Mire, trabajé toda
rico, está generando una gran carga de conl1icto interpersonal, de la semana, me estuve rompiendo el alma y llega el domingo. Me
un modo que un elemento técnicamente importante (siguiendo la dije, •fenómcno, un día tranquilo, en la quinta, jugamos al vóley'
línea de explorar la zona del carácter histérico), consiste en y de pronto cae la vieja y pone un ramo de flores y arma un
producir confrontaciones, las confrontaciones que he visto traba- despelote ..." Esta es la versión del hijo que yo imagino. Este tipo
jar muy bien, con mucha riqueza, sobre todo en los estudios de de confrontación a través del role playing nos permite aproximar-
interacción grupal, en especial en la corriente gestáltica que nos a objetivar su modo de ser, ya la vez intuir la sensibilidad de
desarrolló Fritz Perls. En la corriente gestáltica, en la intervención los otros para esos modos de ser del carácter histérico. Después
técnica de la confrontación, lo que se trata de confrontar es "cómo habría un momento en que trabajaremos o nos iremos acercando a
me veo yo, cómo me ven los otros, cómo me ve usted". "Y bueno, trabajar sobre esos aspectos de la estructura profunda que mencio-
yo soy una persona bien intencionada que lo que quiero es que ellos né en primer término. Habrá que hablar de ese triángulo, habrá que
estén bien. Lo que trato es que tengan flores en la casa y no sé por hablar de las posiciones de idealización y denigración que ella
qué me responden así". Bueno, yo le vaya decir cómo la veo yo: internamente vive, según se sienta incluida o excluida de esa
"Yo creo que usted en ese momento posiblemente no pensó en pareja. Esto da lugar a toda una línea interpretativa sobre las
ellos, sino que se dio más lugar a sí misma; tal vez usted se deja estructuras profundas. Lo que diré es que estas inferencias sobre
arrastrar por impulsos internos suyos y no se pregunta cómo va a las estructuras inconscientes del Edipo en la histeria van tomando
ser recibida su acción por los otros; yo diría que en ese sentido es formas diferentes a lo largo del proceso terapéutico. En cada fase
usted imprudente". Yo recuerdo que con esta paciente a veces del proceso toma formas distintas. Yo diría que en los comienzos
hacia intervenciones de este tipo y ella abría los ojos enormemente del tratamiento son primeras aproximaciones, alusiones a que debe
porque estaba casi a punto de ofenderse. Pero ella sabía que yo lo haber conflicto a nivel profundo. A medida que el proceso terapéu-
decía con afecto, que yo, a pesar de su imprudencia, la quería. De tico avanza. seguramente interpretaciones que al comienzo eran
modo tal que al tenninarel tratamiento una de las cosas que me dijo esbozos, anuncios, conjeturas, podrán ir teniendo una base mayor
fue: "Mire, yo a usted le acepté cosas, le aguanté que me dijera de sustentación; se afirmarán con un poco más de fuerza (aunque
cosas que a nadie le aguanté jamás". La tercera visión de esta entendiendo que toda interpretación será siempre conjetural, será
exploración que se llama confrontación de los rasgos de carácter siempre una hipótesis sobre inferibles). En etapas avanzadas del
es: ¿Cómo la ven los otros? Y ahí la pregunta es: "¿Dígame, si su proceso es probable que la interpretación sobre aspectos profundos
hijo y su nuera estuvieran aquí, qué me dirían a mí? ¿Cómo me de la estructura histérica pueda provenir a veces de la misma
contarían este episodio?". Eso nos permite entrar en una zona de paciente. Eso indicaría que el proceso pudo avanzar. Algunas
la técnica que hace al role playing , a la dramatización en lo interpretaciones profundas es probable que la paciente las pueda
imaginario, que es un recurso técnico muy importante para este hacerconmigo y algunas antes que yo también. A través de aquella

70 71
confrontación de los aspectos caracterológicos estamos exploran- necesidad de reformular esta pregunta. Yo creo que desde la
do las relaciones entre ella y este grupo, las relaciones conl1ictivas histeria. más precisamente en rérm inos clínicos. la pregunta sería:
entre el individuo y el grupo. Quiero dcstacarlcs, por último, "¿Cómo es posible ser mujer Iálica y evitar las angustias de la
aspectos de las relaciones entre lo enfermo de esta mujer (los castración?". Frente a esa pregunta. que sería la pregunta de
aspectos psicopatológicos histéricos) y sus potenciales de salud. la estructura neurótica histérica ( " ¿Cómo es posible ser mujer
Me ha interesado mucho una rellexión de Sartre, dicha más de una tálica y evitar las angustias de la castración?"). desde los potencia-
vez por él. que dice lo siguiente: "Todo padecimiento humano les de salud la empresa de una mujeres siempre preguntarse "¿Qué
lleva consigo. oculta, alguna empresa". Qué interesante reflexión es ser mujer?" (por ejemplo. entre tantas variantes de esa pregunta
para quienes pensamos más en términos de padecimientos, es general: "¿En qué consiste ser madre?"). Todas las contradiccio-
decir, en términos de patología: "Todo padecimiento humano lleva nes entre la existencia a que apunta esa empresa y la existencia
consigo oculta. alguna empresa". ¿Cuál es la empresa de esta ncurótica son las contradicciones entre dos tipos de preguntas. que
mujer? Porque hasta ahora hablamos de su padecimiento. de su se piensan distinto. se formulan distinto y buscan sus respuestas
lucha con los hijos. con el actual marido. del cual no pude hablar por distintos caminos, preguntas que chocan entre sí. que son
en este fragmento. pero con quien también tiene muchas situacio- incompatibles. porque ser mujer Iálica es una cosa. ser mujer (a
nes de conflicto, muchas situaciones deagresión. La empresa de secas) otra y no encajan. divcrgcn entre sí. De modo tal que en este
esta mujer. por la cual ella también sostiene el esfuerzo de tratarse mismo punto lo que estoy formulando responde a dos tradiciones.
y sostiene el dolor del insight, es la búsqueda. el esfuerzo por llevar Desde la tradición psicoanalítica la pregunta más fuertemente
adelante ciertas tareas que le permitan una realización como investigada es la de la histeria. la pregunta ncurótica ("¡,Cómo es
persona. Ycom o mujcr ella est á buscando sanear de alguna manera posible ser mujer Iálica?"). Es más. desde una tradición existencial
relaciones intcrpcrsonalcs que están siempre invadidas por el (por eso cité a Sartre) se trata de entender qué es lo que esta persona
trata de realizar en su vida. qué es lo que una persona está luchando
conflicto histérico. las fantasías y las actuaciones histéricas. Pero
por realizar en su vida. Entre esas dos preguntas. la de la neurosis
ella está llevando adelante esta empresa dolorosa y costosa. porque
y la de la existencia. yo no elijo jerarquizar más una de ellas. La
está buscando la manera de realizarse como mujer. como madre o respuesta clínica que Iormulo es investigar el entrelazamiento
como suegra. En la búsqueda de esa empresa de realización, que entre ambos tipos de interrogantes, las contradicciones entre
hace a un proyecto personal. se encuentra con que su histeria le ambos tipos de irucrrogantcs, interpretar las dos preguntas y
frustra permanentemente ese camino. Esto entonces hace a tener también los dos tipos de respuestas, las respuestas neuróticas y las
que planteamos en cada momento. en cada sesión. qué zonas de respuestas que hacen a un desarrollo evolutivo y creativo de esa
esta persona están hablando. si las de la histeria o las de la empresa persona a lo largo de su proceso terapéutico y de sus etapas vitales.
que lucha por avanzar a pesar de la histeria. Yo quiero formular en
términos aun más claros para que entendamos que al paciente no Lo que estoy tratando de mostrarlcs en esta comunicación es
sólo hay que interpretarle y comprenderlo en sus aspectos neurót icos esencialmente una línea cleinvestigación clínica que. al considerar
sino también en sus potenciales de salud, en especial los interjuegos diversas zonas de objetos. de abordajcs, de instrumentos técnicos
entre aspectos neuróticos y potenciales de salud. Lo voy a precisar y de modos de intervención (donde está el preguntar. donde está el
mejor tomando como punto de partida un pensamiento de Lacan. confrontar. el actuar en un tole playing , y también está interpretar).
Lacan dice en este trabajo que les mencioné. "Las formaciones del en esta línea de investigación clínica apunto a superar ciertas
inconsciente": la histeria gira alrededor de una pregunta "¿Qué es disociaciones que en general vienen trayendo históricamente las
ser mujer?". "¡,En qué consiste ser mujer?". Yo a partir de esta posturas que responden a diferentes escuelas.
reflexión sobre aspectos neuróticos y potenciales de salud siento Ciertas orientaciones psicoanalíticas nos han planteado que lo

72
esencial es investigar la estructura psicodinámica profunda: el procesos. I~tent~ré d~scribir esos momentos incluyendo su com-
Edipo y sus transferencias. Desde esta línea psicopatológica de prensión psicodinámica, .
tradición psicoanalítica se ha planteado que el instrumento funda-
mental es la interpretación de esas angustias profundas y de esas
transferencias. 1. Constitución del vínculo terapéutico. Las estructuras histéricas
En cierta corriente gestáltica se ha planteado: lo esencial es que concurren a la consulta llegan a establecer un contrato terapéu-
enfrentarlos modos de ser, enfrentar el carácter y la manera técnica tico con relativa facilidad (si las comparamos con las dificultades
de abordar el carácter es a través de confrontar, es a través de hacer que presentan los pacientes fóbicos y obsesivos para configurar esa
enfrentar al sujeto con su problemática. etapa de contrato). Sin embargo, esa facilitación no constituye
En ciertas orientaciones comunicacionales la postura dice: 10 siempre una paralela capacidad de alianza terapéutica. La relación
esencial es tomar la distorsión de los mensajes y la intervención transferencial presenta las dificultades propias de una ambivalencia
técnica fundamental apunta a corregir las distorsiones en los intensa. La lucha porel poder inherente a la ilusión histérica de una
mensajes. posición fálica, ya asumida como propia, ya proyectada al terapeu-
En algunas orientaciones existenciales se ha planteado: lo ta y convertida en objeto de disputa, desarrolla sus vicisitudes
esencial es el proyecto y la intervención terapéutica fundamental alrededor de los parámetros propios de un contrato (horarios,
apunta a reconocer el proyecto, la empresa de la persona. honorarios, cambios de horarios, vacaciones). La aspiración histé-
Esencialmente 10 que trato de dcmostrarles con este material
rica a establecer como dominante un eje regido por el principio de
clínico es que en esta orientación que estoy desarrollando lo
placer lleva a esta estructura a resistir todas aquellas intervencio-
esencial no está en ninguno de esos recortes; lo esencial está en
nes que destaquen la vigencia de un principio de realidad (realidad
poder ver que ésas son diferentes dimensiones o aspectos del sujeto
psíquica, realidad de las interacciones grupales, realidad del otro
y de los grupos con los que vive y que lo esencial, desde el punto
y del terapeuta). En la medida en que tales intervenciones cuestio-
de vista de las tareas clínicas, está en poder integrar diferentes
nan su posición egocentrada, la respuesta histérica tiende a colocar
formas de abordaje técnico que hacen a estas diferentes zonas de
estudio. Lo que planteo es que en las posturas tradicionales en cuestión el derecho a la continuidad en esa dirección de las
de alguna manera siempre flota una lógica de exclusiones. Lo que intervenciones terapéuticas. En ese aspecto la constitución del
propongo como orientación es una postura teórica y técnica basada vínculo terapéutico se transforma en un campo de trabajo
eri una lógica de inclusiones y de articulaciones, es decir, de interpretativo permanente, En el clásico historial de Dora,
integraciones. la interrupción del tratamiento llevó a Freud a revisar numerosos
aspectos transferenciales que no había llegado a trabajar
exhaustivamente. Esa lección nutre hasta hoy la experiencia de
elaborar la am bivalencia histérica con el vínculo y con la tarea. Nos
II. Diferentes momentos en el proceso terapéutico propone un estado de alerta constante, una especial receptividad
de las estructuras histéricas para toda manifestación resistencial y transferencial.

2. En nuestro enfoque, puestos en marcha el contrato y el


Nuestra revisión clínica de procesos terapéuticos desenvueltos con vínculo, el trabajo se centra en la exploración de situaciones
personalidades histéricas nos permite reconocer en ellos el des- habituales de conflicto. Esta exploración comprende varias tareas;
pliegue de una sucesión de momentos o fases. propias de estos

74 75
el despliegue de esas tareas da lugar, en esta etapa, a distintos cuest ionar esa actitud ingenua, "naturalista", con \(1' que la. perso-
momentos. nalidad histérica relata el acontecer y sus efectos emocionales
a) El relato histérico aporta referencias a una gran variedad de ("pero dígamc, ante esa respuesta yo no podía m~nos. qu~ ...",
situaciones conl1ictivas. Las anécdotas se multiplican, se abren en .•'(ll!Ié puede hacer uno cuando' le muestran semejante dcsprc-
un vasto abanico. La riqueza pcrccptiva y expresiva peculiar de la e
do?", "yo con la mejor intenci 'ó'n... i y mire con qu me sa len.,f" '
é

personalidad histérica le permite ejercer una presión convincente "en mi lugaryo lo desafío a quc errcucntrc alguien que no estalle').
acerca de la diversidad de confl ictos que debe enfrentar, subrayan- En esta fase vamos al encuentre de tos modos histéricos de
do su sorpresa ante esa diversidad, como encarnando una condena codificar las conductas propias y ajenas, sistemas d~ códigos g"ue
a que "todas las experiencias de conllicto le estén destinadas" (con ordenan los datos, de un modo lejano' al que la conciencia supo.ne
la pareja, con la familia, con amigos, con un grupo de trabajo, la corno obviamente "objetlvo". EJ.código histérico asienta en vanas
lista es inagotable). La tarea consiste para el terapeuta en reconocer polaridades- semámicas: 1) acuvo-pasívo. 2) sujeto-o~jero del
y poder mostrar que hay cierta unidad subyacente a esa diversidad deseo, 3)desco-prohihici6n, 4) fá\.ico-castrado, 5) placcr-displacer,
de experiencias conflictivos. Ese trabajo de uni ílcación de sentido, 6) se~l'ucción-fracaso de la seducción, y 7) resonancia empática-
unificación de pautas de interacción, permitirá reconocer que hay indiferencia.
una cierta monotonía oculta, un ciclo rígido de repeticiones, en las Estas-categorías, instaladas con carácter de absolutos, en estric-
cuales UII tipo de situacián de conflicto se manifiesta, una y otra tas oposiciones antinómicas, son aplicadas en, la interpretación
vez, con variaciones: esa secuencia tipo comprende las fases de ínconscicntc histérica a las situaciones de intcracción y a la
ilUSiÓIl,Irust ración, decepción, agresión, respuesta agresi va de los evaluación de símisma con una notable movilidad y ubicuidad. En
otros, depresión, nueva ilusión. la búsqueda de ciertas categorías scmánticas típicas de cada
b) El reconocimiento de tales situaciones repetitivas de conflic- estructura psicopatológica, Libcrman y Maldavsky han propuesto
to pasa también por relevarlos modos histéricos de comunicación, para la histeria cI' eje seducción (como impa~to estético) versus
percepcion e ideacián a los que aludimos antes en el caso clínico fracaso (le la sceíucción (como impacto de fealdad). Belleza y
que inicia este capítulo (apelar a un lenguaje de afectos, exigir de fealdad contrastadas en las categorías cid yo ideal narcisista
los otros definiciones, recortar los datos de acuerdo con un estilo contrapucsro canel ncgartvo de ese yo idea! (el éxito ~n la c~~nhre
impresionista de registro, ordenar esos datos según las tensiones (\)cUdcrruurbc total). 'La experiencia clfnica nos permite conl irmar
creadas a la organización narcisista histérica). Se tratará de com- la ímportancla de ese eje scmántico en la histeria. En mi experien-
prenderen qué medida la interacción es afectada, así como cuántas cia clínica se presenta con frecuencia otro eje scmántico en cJ cual
y cuáles de las respuestas hostiles de los otros pueden ser reaccio- se polarizan las categorías de atraer al interlocutor (como impacto
nes inconscientes frente a esas modalidades histéricas dedistorsión de resonancia cmpática) versus fracasar en esa atracción (pro~u-
de la comunicación. El registro yel señalamiento de estas moda- cicndo lo que es codificado como indiferencia, vacío, ausencia,
lidades en sesión operará como un material de especial fuerza aburrimiento del intcrlocuter).
ilustradora.
e) El avance en la exploración de tales situaciones de conflicto 3. El trabajo a lo largo de esos momentos que localizamos como
permitirá ir creando una progresiva discriminacián entre los segunda etapa del proceso terapéutico. nos permite delimita~' un
"datos" de una determinada situación (los "hechos", como pue- ámbito propio de la personalidad histérica, el de su realidad
den serio conductas y mensajes de los otros), y la repercusión que psfquinr, a diferenciar de la realidad psíquica del grupo y del otro
los mismos logran en la estructura histérica dada su particular con las-cuales despliega su modo de intcracción en conflicto. Esa
fJ/(IJ/C}"(/ de interpretar esos datos. Aquí se entra de lleno a diferenciación de la realidad psíquica peculiar de la histeria se va

76 77
cumpliendo a través del reconocim iento de un conjunto de escenas derivadas del proceso edipico infantil particular de la estructura
que constituyen en un nivel inconsciente "la realidad" para el histérica. Se trata de comprender que aquellos juegos de triunfos
psiquismo histérico. Se trata de escenas básicas, primordiales, que y exclusiones remiten a esa historia de una ubicación conflictiva,
la estructura histérica vive, busca, induce y cree encontrar en sus excitante y frustrante, entre las figuras materna y paterna. No se
vínculos con los otros. Maldavsky ha destacado varias de esas trata meramente de aquellas figuras reales, sino de las imagos
escenas. Reformulo algunas y cito otras de su estudio, de acuerdo constituidas en los interjuegos de las interacciones reales y
con los modos como las veo asumir en los pacientes que más he fantasmáticas. En esas imagos aparecen cristalizadas las identifi-
estudiado: caciones propias del Edipo histérico: hombre idealizado, hombre
castrado, m ujer idealizada, mujer denigrada. El reconocim iento de
1) Situación depresiva, monótona, en la que la protagonista esas figuras de identificación que habitan el universo histérico
sueña con un paraíso utópico. permite desenvolver asimismo una tarea de reconstrucciones de
2) Escena de seducción, de tentación y erotización vitalizadoras. su historia personal. Esa tarea permitirá ir descubriendo una
3) Consumación de la seducción, exclusión del rival en una historia de interacciones subjetivizadas, subyacente a laconstruc-
situación triangular, seducción del personaje idealizado, represen- ción de aquellas escenas e imagos absolutizadas.
tante del falo omnipotente. Escena de triunfo y exaltación.
4) Fracaso de la seducción, retorno triunfante del rival, castra- 5. El trabajo de reconstrucciones de aspectos de la historia
ción propia y/o castración del personaje idealizado en la escena 3, infantil abre, en un nivel profundo, los movimientos de otra etapa:
pérdida del paraíso, situación infernal. la de un retorno desde los conflictos centrados en figuras mascu-
5) Nueva situación depresiva, monótona, rumiando decepcio- linas (representantes de la imago paterna) hacia las carencias y
nes, heridas y resentimientos resultantes de aquella secuencia. demandas pendientes de maternaje y de satisfacción oral que
Lento retorno hacia la posibilidad de ensoñar la aparición de una hubieron de dirigirse originariamente hacia la figura materna
nueva situación paradisíaca. (recordemos aquí que en el Edipo histérico se reclama precozmente
Se desarrolla aquí un trabajo para crear discriminaciones, insights del padre lo que se busca del padre en todo proceso edípico, pero
y elaboraciones acerca de estas escenas propias del mundo inter- - también todo lo que ,la madre hister6gena deja sin satisfacer en el
no y los modos de su "encuentro" en el mundo cotidiano. La plano de la demanda oral). Esta es una etapa de duelos, crucial para
personalidad histérica irá asumiendo en esta etapa sus modos de
una reestructuración profunda de la personalidad en tratamiento:
inducir tales escenas, convocando y provocando a los otros para
duelo por debilitamiento de las idealizaciones puestas en los
que tomen sus lugares en el juego argumental preestablecido en un
representantes fálicos de la imago paterna, duelo por toma de
nivel inconsciente (recordar aquí nuevamente la escena creada por
contacto con necesidades maternas que estaban negadas a través
Estela, la paciente con la que iniciamos este capítulo). Esta
de una erotización seudogenital y de la rivalidad hostil con la
personalidad tendrá que reconocertam bién aquellas situaciones en
las que ella cree ver elementos de aquellas escenificaciones como figura de la mujer.
si estuvieran instalados de un modo inequívoco, mientras para Esta etapa requiere del terapeuta una actitud especial de conti-
otros observadores los elementos en juego pueden carecer de ese nencia. Esta actitud supone capacidad de presencia y de resonancia
sentido supuesto como ineludible. empática con el dolor psíquico, producto del sufrimiento- por
carencias reales vividas en la crianza del paciente. Supone también
4. Se abre entonces una etapa en la cual se va captando pro- conservación a la vez de toda la tarea interpretativa, para discrimi-
. gresivamente que aquellas escenas son actualizaciones de escenas nar aquello que faltó desde la madre y aquello que la estructura

78 79
histérica "hizo faltar" desde una lectura rivalizante de las conduc- Bibliografía
tas de la madre.
Esta etapa, en la que predomina ese retorno desde los conflictos FKEUD, Sigmund, La histeria, Madrid, Biblioteca Nueva, 194R, tomo 1.
Estudios sobre la histeria, Buenos Aires, Amorrortu, 19RO, vol. 11.
siempre centrados en la figura del hombre (ya idealizado-ya _, Ensayos sobre la vida sexual y la teoria de las neurosis, Madrid, Biblioteca
castrado) hacia la figura materna, suele dar lugar. en pacientes que Nueva, 194R, tomo l.
están en tratamiento con terapeuta hombre, a ideas, ensueños o _, Historiales clínicos: análisis fragmentario de una histeria, Madrid,
sueños en los que se hace deseable el tratamiento con una mujer. Biblioteca Nueva, 1948, tomo Il. Fragmento de análisis de un caso de
En esta etapa la mujer deja de ser la eterna rival. La paciente histeria, Buenos Aires, Amorroriu, 197R, vol. VII.
GREEN, André, "Neurosis obsesiva e histeria. Sus relaciones en Frcud y desde
histérica pasa a aceptar en un nivel profundo la posibilidad de ser entonces. Estudio clínico, crítico y estructural", en 1. SAUKI(comp.), Las
mujer sin ser por ello inevitablemente castrada y denigrada, histerias. 1975.
LAcAN, Jacqucs, Las formaciones del inconscicnle, Buenos Aires, Nueva
6. La elaboración de esos duelos (lenta, trabajosa, pero efectiva- Visión, 1976.
mente sostenible) abre posibilidades de asumir relaciones nuevas LIIIERMAN,David, "La persona demostrativa", en Comunicación en tcrapéuti-
ea psicoanalitica, Buenos Aires, Eudcba, 1962.
cOII/a realidad: realidad de la propia estructura y realidad de los MAI.OAVS¡;Y, David, "Argumentos", Buenos Aires,/Tl/ago, N°, 4, "Las histe-
otros comprendidas en términos de categorías no restringidas a las rias", 1976.
escenas ni a los códigos específicos de la histeria. Este proceso PERKIEK,Francois, "Estructura histérica y diálogo analítico", en Juan D. NASIO
permite ampliary consolidar capacidades adaptativas y creativas (comp.). Ac:to psicoanalítico, Buenos Aires, Nueva Visión, 1974.
mediante las cuales la persona puede encontrar fuentes de placer en RACAMIER, Puul, "H isícria y teatro", en Jorge SAUKI (comp.), Las histerias,
Buenos Aires, Nueva Visión, 1975.
su realidad. Emerge en esta etapa la capacidad, inédita para la ROSOI.ATU,Guy, "La histeria. Estructuras psicoanalílicas". en J. SAUKI(comp.),
personalidad histérica, de encontrar goce sexual genital en condi- Las histerias, 1975.
ciones de estabilidad de un vínculo amoroso. El desarrollo de sus SClIAl'lKO, David, Los estilos neuroticos, Buenos Aires, Psique, 1970.
potenciales. de salud abarca buena parte de esta etapa avanzada del WISOOM, John O., "Un acercamiento mctodológico al problema de la histeria ",
proceso terapéutico. Hemos destacado, a propósito del caso clíni- en J. SAURI (comp.), Las histerias. \975.
co, la importancia. de distinguí r conductas histéricas de conductas
eficientes (en el sentido en que White ha entendido eficacia o
efectancia de las capacidades yoicas). En esta etapa la capacidad de
discriminar una y otra calidad de conductas se transforma en un
vector primordial para el insighr y la elaboración.

7. La consolidación de estos desarrollos establece las condicio-


nes para encara!' U.!1 trabajo de terminación.

81
80
JALONES y LINEAS DIRECTRICES
EN EL PROCESO TERAPEUTICO
DE LAS ESTRUCTURAS OBSESIVAS

El trabajo psicoterapéutico.con pacientes de personalidad obsesiva


presenta no pocas dificultades. Las dificultades de comunicación
de la "persona lógica" fueron destacadas en trabajos de Liberman'
y Schapiro? entre otros. Las disociaciones idea-afectos, mente-
cuerpo, representación-impulso constituyen algunos de los pro-
blemas fundamentales a trabajar con estas estructuras.': 4, 5 Las
contradicciones entre conductas retentivas, de control, y conduc-
tas expresivas, son asimismo objeto de necesaria atención.
Me interesa destacar ciertos movimientos básicos en el proceso
terapéutico de estas estructuras, líneas cuya consolidación va
configurando verdaderos jalones para el conjunto de procesos de
cambio que una psicoterapia psicoanalítica intenta desarrollar.
Estos movimientos resultan observables con toda nitidez en una
muestra de 30 pacientes con una personalidad obsesiva predomi-
nante, a los que he venido estudiando por varios años. De ese
conjunto, 12 son pacientes que he tratado personalmente. En
grupos de estudio y de supervisión hemos estudiado los 18
pacientes restantes.
Menciono a continuación esos jalones y especifico sus caracte-
rísticas.

1. Revertir la perspectiva del ego obsesivo

El paciente obsesivo, de un modo consciente en muchos casos, e

83
inconsciente en algunos otros, suele depositar en el tratamiento 2. Crear nociones y experiencias de sujeto y de subjetividad
expectativas de "perfeccionamiento", con el supuesto de que su
problema es la falta de perfección y no la aspiración a esa
perfección. El yo ideal narcisista propio de la estructura obsesiva VeJllOSque en la estructura obsesiva el yo ideal tiraniza al sujeL?,
espera encontrar las claves para el logro de esa perfección y el establece un implacable sistema de demand~s (que en la fantasía
tratamiento es llamado a ofrecer esas claves." De modo que ese habrán de originar escenas dotadas de un inagotable poder de
ideal es egosíntónico. El trabajo terapéutico tendrá que orientar- prem io, de compensación con creces). Se t~ata para nosotros
se en la dirección de poner en evidencia, de un modo progresivo, de poner en evidencia que en toda esa modalidad de cO~lporta-
Olientos no hay un "sujeto", alguien que pueda elegir ~ntre
que el ideal es enemigo del sujeto, es su atacante, bajo la apariencia conductas alternativas, que pueda ser centro de autocvaluacioncs
de ser su exaltador y defensor. En uno de nuestros pacientes su para tal elección, que pueda considerarse con necesidades a colocar
conducta aparece insistentemente orientada a lograr un reconoci- en'relación con necesidades de los otros. La búsqueda incesante de
miento acabado de sus méritos, en cuanto servicial, atento, sacri- un objeto descarne para el sujeto deseado ha encubierto a un sujeto
ficado ante toda clase de necesidades: puestas de manifiesto por tambr'én descarne (éste ha quedado rígidamente encauzado en el
quienes lo rodean. Conscientemente éJ suele aludir al egoísmo sistema del desear ser objeto del deseo del otro). Si la mujer de
de quienes aprovechan de sus esfuerzos sin cempcnsarto adccua- Eduardo es colocada como sujeto descarne ("querida, ¿te parece
darncntc. No obstante, a un nivel Inconscíenrc, multiplica constan- que vayamos a visitar a tus padres este sábado"?) ¿porqué Ed~?rdo
temente esos esfuerzos (OUlO' si "pcrrcccíorrandotos'' hasta el no? ¿Eduardo no necesita nada para este sábado? Lleg~la sesl~n.el
límite de lo humano posibk, cnrorrces fuera a fesuktmr inex orabl e relato de un agotador fin de semana donde Eduardo hIZOla visrta
la conñnrracién Jaudaitoria por parte de todo su mcdío, Una y otra a los suegros, ltevólos chicos al parque, al cine, a comprar perritos,
reemplazó unas horas en la guardia del hospital a su compañero
vez se pregunta dónde csC;ísu "aHa" porque fúzo "C'ShJ, y f¡()l OU/i(íy" y
que "necesitaba" salir con una novia nueva, compró comidas, lavó
In de más aHá", y 1m hay caso, d p¡rcrnio no vretre. Sc' agota, se
el coche, consultó a su mujer acerca de si ella tendría deseos
deprime, se desilusiona, no sabe adÓ1<Tdc'drri¡gff'S-UFahFalímpetenrc. sexuales y quedo paralizado ante su negativa. Una de mis pregun-
Buena parte de esa rabia se d~rige hacfa' si IIHfsmo. fmnamlo la tas en sesión es: "¿En medio de todo este despliegue, en medio de
fonrra de una exigencia hnprac~~hfc=- fm hay ahvíos, )l)'(, intervalos, todas estas hazañas de Hércules, dónde está Eduardo?" "¿Y si
ni desmayos aceptables: la matfl1íflaria debe rcndrnodo de' si. La Eduardo empezara por reconocer que, antes que nada, él tendría
tarea terapéutica se oricJllfahada una ampl'iapcr~pC'cLivade insig ht: deseos sexuales, o deseos de ser atendido también?". Si Eduardo
comprender que más <fUáde cada fTiraeasoanecdéríco, to terrible se consultara a sí mismo, podría descubrir que en él también laten
esfá en el ideal. dotado de una perfección s~hrcfu(Jmana, es decir, necesidades. Desde luego entendamos que la propuesta está desti-
antihumana. Un modo tic apertura en ese' circulo cerrado de nada a encontrar obstáculos, no está en juego para nosotros el su-
cxigcncia-dcccpción-mfeva cxígcncí« to.n1a'para: nosotros" en este puesto conductista que creería encontrar la posibilidad de respues-
caso por e.iempro. fa forma de una Co.JI"Ücf.tJralqcrc'i:fwíra aJtrabajar tas relativamente fáciles a preguntas que se hicieron imposibles
para laestructuración obsesiva de un ego basado en la omnipotencia
en lo. imaginario: ¿.Hlmagínemos cómo.' prnJJifa ser Eduardo si no
y en la ocupación estricta del lugar de objeto del deseo del otro. No
fuera .ISí"? y "¡,C6mo' rcaccionenan otros a so:alrededor sí Eduar- se trata de eso. Pero la creación de intcrrogantcs sobre el lugar del
dO' no se cOJ~duJeradd lH(\fd@! en que lo. ñaec?". "Por ejemplo, le sujeto que no están destinados a encontrar respuestas inmediatas,
piden un rccmpfuzoca Fa gU'¡:mHade] h'(Jspi~aly Eduardo di ría que es para nosotros la creación de una dirección en el camino del
no pucde ».rccrrc",'Veamos>(j.ué'sucede a:parfr,r'~fcaltf", lnsigh], en el camino del working through y de la elaboración. Es

&5
también una manera fecunda de enfrentar al ego obsesivo con la sino a la vez de proponer el des~rrollo de esas capacidad~s
evidencia de suslimitaciones pero no sólo con la experiencia de expresivas como conductas necesanas para su proceso de creer-
esa evidencia sino a la vez con la presencia de una tarea. Responder miento con maduración emocional. Indagación y propuestas de
a esa interrogación sobre su ubicación en cuanto sujeto, así como ensayo en el nivel de las conductas, que es para nosotros cornple-
vivir experiencias en las que ese sujeto vaya gradualmente emer. nlentaria de ese nivel interpretativo en el cual se aborda el plano de
giendo, son direcciones abiertas desde los comienzos del proceso las estructuras inconscientes (en el cual las dificultades expresivas
y destinadas a persistir a lo largo de todo su desarrollo. se comprenden enlazadas con la represión erótica y de impulsos
Entre las experiencias a constituir como tareas, en función del agresivos, con la modalidad retentiva anal de los afectos, así como
proceso terapéutico a desenvolver, debemos privilegiarIa creación con las disociaciones ideas-impulsos). Precisamente, cuando el
de experiencias de "soledad". Se trata de constituir espacios, tiem- paciente toma conciencia de la posibilidad y de su necesidad de
pos, en los cuales el paciente quede temporariamente libre de las expresar estados emocionales que ha aprendido a r~c?nocer,
presiones propias de su modalidad de interacción con otros signi- entonces las dificultades para llevar a cabo esa expresividad se
ficativos (esa modalidad en la que el otro es dueño de su imagen, transforman en un factor revelador, de puesta en evidencia de la
el amo al que debe conformar amoldándose a sus deseos). Coloca- influencia de ansiedades y defensas estructurantes de un mundo
do en situación de alivio de esas presiones inmediatas, el paciente inconsciente dinámico. Esa puesta en evidencia es para el trabajo
obsesivo podrá encontrarse más de lleno con sus dificultades de un yo observador un elemento impulsor de elaboraciones de
internas, con su vacío de funciones de sujeto, con su desconoci- profundidad creciente. ... .
miento de sí mismo, con su dificultad para ocupar ese tiempo yese Eduardo ha recibido de su jefe una exigencia que lo unta
espacio. Esas dificultades no podrían ya atribuirse a los otros, no (trabajo de horas extra sin justificación suficiente, a su criterio).
podrán confundirse con las conductas efectivamente demandantes Comenta su respuesta: "Y yo le dije: esto queda estrictamente a
que a menudo los demás juegan. Estas experiencias serán inicial- cargo suyo, usted sabrá por qué dispone las cosas de esta forma",
mente experiencias de angustia, experiencias de una falta indiscu- El paciente cree haber dejado bien sentada su oposición. Sin
tible de autonomía. Poco a poco se transformarán también en embargo no suena exactamente así, hace pensar que en el tono
experiencias de registro de potenciales propios, de esbozos de posiblemente hubo un matiz de réplica, pero en el texto se trata en
autonomía, de localización incipiente de impulsos no derivables realidad de ratificar lo que el jefe supone: que quien manda allí es
de mandato exterior. La experiencia clínica nos va destacando la él. Se lo hago notar al paciente y lo comprende de esa manera. Se
fecundidad de cultivar atentamente esta dirección de experiencias. queda pensativo, como rumiando su falla en la respuesta. Le digo
entonces: "Si usted hubiera podido decir claramente allí qué
sentía, o qué pensaba de esa medida, ¿qué le hubiera dicho?"
Eduardo ensaya su "respuesta" auténtica: "Que estoy cansado de
3. Movilizar conductas expresivas y deseantes medidas que salen de lo acordado, de lo reglamentado". El
paciente queda entonces colocado delante de su confrontación, por
una parte su respuesta automática, de autocontrol, y ahora otra
En esta dirección se trata de enfrentar al paciente con varias tareas: respuesta posible, aquella que en otras condiciones él podría llegar
reconocer emociones propias y ajenas, nombrar una gama crecien- a pronunciar.
te de afectos a identificar, expresar esos afectos que van siendo
reconocidos. No se trata solamente de mostrar para el paciente sus
dificultades con el reconocimiento y la expresión de emociones,

86 87
4. Dar lugar a la emergencia del terapeuta aire, por ese espacio se va introducie?do lo real, sus diferencias, la
en el lugar del tercero independencia de cada uno, una radical soledad.

Hay un largo período en el que el paciente no puede dejar de ubicar


al terapeuta en el lugar de un ot.ro que le exige talo cual conducta, 5 Desarrollar relaciones de integración
un otro demandante. Ese lugares para el paciente el de un segundo e~tre diferentes niveles y tipos de pensamiento y lenguaje
personaje, el otro de una díada especular. Es en función de ese otro
que gu ía su conducta en sesión (" ¿de qué querrá que yo le hable?",
"lo estaré cansando volviendo otra vez al conflicto con mi jefe", EstamoS trabajando con una estructura que ha hecho del proceso
"trataré de llevar nuevos asuntos a sesión, mis propias conclusio- secundario de pensamiento uno de sus bastiones defensivos. Que
nes. recuerdos interesantes"). Aquí estamos tomando en cuenta nos propone, como recordaba Batcson de un pocmadc Wordsworth,
una parte considerable de las conductas transferenciales del pa- "que un narciso en la ribera del río sea un narciso y nada m~s". Que
ciente ohsesivo. Durante ese largo período inicial la aclaración del tiende a utilizar el concepto no para acercarse a las conexiones de
tcrapcut a acerca de su neutralidad, así como la interpretación de las sentido. que de modo singular puede evocamos. sino precisamente
proyecciones que el paciente hace en él de una figura superyoica, para despojarlo de esas conexiones. Que nos presenta un mundo
no logran aIterarmayormente esos automatismos transferenciales. "objetivo", estados de cosas antes que significaciones. Desde allí
Sin embargo hay un trabajo del terapeuta que a cierto plazo habrá se ¡lOS presenta como riesgoso (pasiblc de una asimilación
de producirmovilizaciones de esa estructura diádica repetitiva. Es resistencial, racionalizadora) emplear nociones conceptuales a las
el trabajo de colocarse efectivamente en una posición no dcscante. que nuestra formación intelectual nos hace proclivcs (hahlar así de
Hasta donde ese rol no dcscantc es posible, se hace decisivo poder "agresión". "dominación", "censura", "emoción", "rechazo", por
cnsayarlo. No descarne en sesión, en cuanto a la posibilidad de ejemplo). Nuestra tarea apunta a introducir un lenguaje capaz de
aceptar un paciente que no asocia, racionaliza. rechaza interpreta- acercar al paciente al mundo propio del proceso primario de
ciones muy cercanas a los observables. No descarne en relación al pensamiento. Un mundo de condcnsacioncs, de desplazamientos
afuera, ya que el paciente espera cambios, se impacienta ante sus de sentido. mundo de la metáfora, de la imagen. de la escenif1cación.
dificultades para todo cambio, y espera del terapeuta la misma Antes que un lenguaje de ideas necesitamos recurrir a un lenguaje
impaciencia. Entonces se trata en primer lugar de que el terapeuta plástico. a un lenguaje poético, a un lenguaje dramático. Tengo que
pueda asumir que la sesión no "debe" producir nada, excepto la evocar con la palabra el mundo de la acción, para lo cual de algún
evidencia de las dificultades para una producción (la del trabajo modo tengo que hahlar al paciente no desde mi mente. sino desde
sobre un material). Si el terapeuta puede sostener esa posición no una conexión intensa entre mi mente y mi cuerpo activado por esa
dcscantc.cntonces su rol va cmcrgicndo como el efectivo lugar del palabra-acción.
tercero, el que sale del mundo diádico narcisista y desde allí puede Quiero entonces hahlarle a Eduardo de un estilo de conducta de
aceptar sin escándalo que el paciente es un sencillo ser humano, ése él. que es pasivo, receptivo de los deseos de los otros, siempre
que puede tener trabas, bloqueos, represiones. y mostrar que todo colocado para cumplir con ellos. y buscaré alguna forma "no
eso puede ser registrado sin escándalo, nada se desmorona. es eso, intelectual" de dccírsclo. Por ejemplo: "Usted funciona como una
a trabajar. Esta posición va introduciendo para el psiquismo del txllsa receptora de pedidos. reclamos. urgencias a discreción. Allí
paciente una organización vincular novcdosa, no regida por las todos pueden meter lo su yo, y usted guarda todo, se carga con todo.
presiones de una demanda en espejo ("dehe usted actuar de un ¡,Ctímo queda'! Como tiene que quedar: agotado". En otro momen-
modo que me permita a mí. .."). Entre el paciente y el terapeuta no to en que dice que no llega a hacer todo lo que tendría que hacer,
hay lazos de intercambio prcscriptos. no hay dcst inos ligados, hay

X9
mi comentario es: "¿Sabe c6mo 10 veo? Corriendo por toda la ondiciones de ese lucimiento. Sus agresiones y sus fantasías de
ciudad, desenfrenado. tapando miles de agujeros, y siempre que- egresi6n. El juego de identificaciones familiares en el que fue
dan más sin tapar". auedando sujetado. Estos niveles de el~boraci6n condu.cen .a
Con Esteban, otro paciente de estructura obsesiva predominan- ~visar todo aquello que venía establecido como una historia
te, estoy tratando de mostrarle su fuerte dependencia de la figura "oficial" para el ego obsesivo. Esa historia pasa ahora aser armada,
materna y la repetici6n de esa dependencia en su pareja: "Usted teniendo en consideraci6n todos los elementos que se abren en
estaba demasiado atado a la fuerza de ella (su madre). Un día dijo: múltiples direcciones de sentido. . . .
'No doy más, corto con esta dominaci6n', y levant6 una pared entre En uno de nuestros pacientes esa revisión lo condujo a descu-
los dos, de modo de no verla y no tentarse. Termin6 la pared, se brir que él, que siempre criti.c6 el auto~tari~mo ~e su madre, t~nía
par6 en la vereda, y cuando estaba por largarse a caminar pas6 una exactamente la misma actitud. La ídentiflcación con la figu-
mujer. Y allí se dijo: '¡Ah, no!, pudiendo irme en mujer no voy a ra materna apareci6 así refo~nulada, ~e un m~do so~ren~ente
caminar', y se fue de mamá, pero subido a ella". para él. En otro paciente también se trato de re~blcar la hIs~ona de
Los recursos dramáticos son aquí de un especial valor. La dra- la relación con la madre (no es casual que esta figura, cuya Imagen
matizaci6n imaginaria, el juego de roles en sesión, el ensueño diri- ha sido soporte esencial para la estructura obsesiva, sólo p~eda ser
gido, son otros tantos recursos técnicos que pueden enriquecer de reconsiderada en estadios avanzados del proceso terapéutico). En
un modo decisivo los lenguajes que la estructura obsesiva debe su versión tradicional, la madre había sido atenta, ocupada de él,
descubrir y desarrollar. Varias orientaciones clínicas vienen apor- irreprochable. Revisados muchos episodios de la vida familiar, la
tando recursos técnicos muy valiosos para poder lograr esta inte- relaci6n entre los padres, la atención prestada a sus hermanos,
graci6n de lenguajes y modos de pensamiento. La corriente la conclusi6n fue muy distinta: la madre pareció ocuparse más de
gestáltica de Perls, así como los enfoques transpersonales, ofrecen sí misma que del resto de la familia, incluido el paciente. t:- es~o
caminos técnicos de gran eficacia expresiva, dramática, vivencial. denominamos reconstruir la historia. Cada figura de esa historia
Estos permiten establecer contactos con zonas reprimidas e inex- revela entonces otras facetas, los lugares cambian, los vínculos
ploradas del self, contactos que configuran impactos de experien- deben encontrar nuevas definiciones. No es una "historia" en el
cia y aprendizaje sobre los cuales es posible desarrollar el trabajo sentido literal, es una posición que el paciente pasa a ocupar como
del insight y la elaboración que se sustentan en las investigaciones nuevo observador crítico de ese acontecer grupal.
psicoanalíticas. Las estructuras obsesivas nos obligan así a una
profunda búsqueda clínica para encontrar eficacia técnica por la
vía de una articulaci6n de recursos resultante de la convergencia de
aportes y experiencias de varias corrientes psicoterapéuticas. 7. Apertura a experiencias profundas de castración,
asumiendo su carácter liberador

Un avance en el proceso de las estructuras obsesivas encuentra


6. Desarrollar las condiciones jalones fundamentales en experiencias de pérdida, de abandonos
para una reconstrucción de la historia personal dela imagen de sí, que pasan a ser deseados. Pérdidas ydescontroles
de esa imagen que pasan a ser pasajes necesarios en un camino de
Como un momento avanzado de este proceso, el paciente puede liberaci6n del sujeto.'
revisar su lugar en su historia, deseos, rivalidades, posiciones en Lo que está en juego es ese movimiento por el cual el paciente
el triángulo edípico. Sus fantasías de triunfo, los alcances y mitos se desprende activamente de aquellos rasgos que lo sometían
de sus triunfos. Su lucimiento pero a la vez la sumisión a las haciéndolo pasivo. En un paciente es abandonar la posici6n de

90 91
servicial para todo su entorno. Animarse a suscitar irritación abandonad caballo y luego el sujeto de es~a.c~eación abando~a al
reproches, no correr a dar explicaciones, no aplacar. Perder el roi r6cer, aliviado y estimulado con las adquisiciones que a partir de
del "monitor". ~SIOS desprendimientos se hacen. entonces sí. posihles.
En otro paciente es tolerar contraer deudas. El se había
reasegurado en el control anal retentivo del dinero, basado en una
posición de estar autoabastccido y no pedir a nadie, no debiendo Referencias bibliográfícas
a nadie. La omnipotencia sustentada en ser eterno acreedor, jamás
deudor. Una larga elaboración de las fantasías asociadas con este l. LIBEItMAN. David. "La persona lógica". en Camunicación en terapél/tica
psicoanalítica, Buenos Aires. Eudcba, 1962.
papel de no deudor, y una confrontación con una realidad laboral 2. SCIIAI'I1{().David. "Los estilos ncuróticos", Psique, Buenos Aires.1970 ..
que hacía necesario contraer deudas. condujo al paciente a enfren- ::1 FltEIID. Sigmund. Historiales clínicos: análisis de IIn caso de 11l'lIroS/S
tar esa novedad en su historia. .' ob.\'('si\,{l. Madrid. Bihlillleca Nueva, 194R, lomo 11. A proptÍsito de 1In.caso
En un tercer paciente la castración simbólica pasa por la de nel/rosis obsesiva, Buenos Aires. Amorrortu, 19RO. vol. X.
experiencia de perder el tono. la compostura. en una antigua 4. FltEtIll. Sigmund. llistorialcs clinicos: historia de una neurosis infantil,
discusión familiar sobre intereses de una herencia. Grita. se enoja,
Madrid. Biblioteca Nueva. 1948. tomo n.
De la historia de una neurosis
i,.~(an/il. Buenos Aires. Amorrortu, 1979. vol. XVII.
reclama, acusa, y en todo ese despliegue acepta ir perdiendo una 5. MANNONI. Octavc, "El hombre de las ralas". en La otra escena. Claves de
imagen de sí, la que creía acercarlo a un ideal basado en el control lo imagi/lario. Buenos Aires. Amorrortu, 1973.
y el sometimiento. 6. LECI.AlltE. Scrgc, "Tres observaciones: Jeromc o la muerte en la vida del
Esta etapa es la de abrir el camino de desarrollos creativos. que ohsesivo. Philon o el obsesivo y su deseo. Duroc o el punto de vista
económico en psicoanálisis", en LECI.AlltE. SElWE y NASIO. Juan D .. Desen-
son aquellos capaces de desestructurarlo dado, lo que existía C01110
mascarar lo real, Buenos Aires. Paidós, 1975.
rasgos estereotipados de conducta, y pcrmit ir la emergencia de lo
7.ldem.
desconocido, lo espontáneo, lo inédito. Allí va apareciendo un
nuevo sujeto, sorprendente para el paciente y para el terapeuta,
alguien sólo present ido y nunca presente hasta entonces. Descubri- Bibliografía complementaria
miento de condiciones nuevas para la configuración de un sí
mismo abierto, más auténtico, libre de un rígido compromiso con LEVY. Norberto. "Abordaje corporal en psicoterapia". Actl/alidad psicológi-
imágenes de valoración ideal. ca. Buenos
Aires. diciembre de 19RO.
Aquí la castración. en cuanto experiencia profunda libcradora, MASLOW.Abraham y otros, Más allá del ego. Textos de psicología trnnspcrsonal,

nos hace evocar aquella lúcida imagen que André Breton y Paul Barcelona. Kairós, 19R2.
MASSOTA. Oscar. "Consideraciones sobre el padre en El hombre de las ratas" ,
Eluard nos legaran en su lnmaculada Concepcián. "Recorres el en MASSOTA. Oscar y JIN¡;:IS.Jorge (comps.), El hombre de las ratas, Buenos
mundo hasta encontrar tu estatua y allí donde la encuentras. la Aires. Nueva Visión. 1973.
destrozas a maní llazos". Porque de eso se trata en los su ictamicntos PERI.S. Frcdcrick , SI/dios y existencia.
Terapia gestáltlca. Santiago de Chile,
de la estructura obsesiva. ya que el individuo debe estar siempre Cuatro Vientos, 1974.
RElCII. Wilhclm , Análisis del carácter, Buenos Aires. Paidós. 6a. cd .. 1978.
colocado en una forma adecuada al bronce, posando para la
STEVENS. John O .. El darse cuenta. Sentir. imaginar, vivenciar, Santiago de
posteridad (según mandatos del yo ideal. enlazados de maneras Chile, Cuatro Vientos. 1977.
diversas con aquellos otros, más cxplicablcs para la conciencia,
que configuran los ideales del yo).
El trabajo de elaboración se asienta. en este proceso. en expe-
riencias de demolición, la estatua va siendo desmontada, el prócer

93
92
EL ABORDAJE DE LOS TRASTORNOS
DEL NARCISISMO
PERFIL CLlNICO y PSICODINAMICO
DEL TRASTORNO NARCISISTA

En las últimas décadas nuestro espectro de comprensión sobre


diferentes problemáticas que concurren a la consulta en salud
mental. se ha ampliado considerablemente. Las líneas tradiciona-
les. de una psicopatología de las neurosis. de las psicosis y de las
perversiones. han sido enriquecidas con estudios clínicos y
psicodinámicos centrados en la indagación de formas de narcisismo
patológico. Estas configuraciones han recibido. dada su diversi-
dad. diferentes nombres: trastomos narcisistas de la personalidad.
patologías de la identidad. del sí mismo (sclf), caracteres "como
si". personalidades infantiles. entre otros.
Desde luego. toda referencia a patología del narcisismo nos
\ remitirá a una conceptualización Ircudiana, psicodinárnica, tópica
y estructural sobre génesis y organizaciones del narcisismo. espa-
cios y límites yo-no yo. identificaciones. distribuciones de la
Iibido narcisista y objctal, formaciones en un registro imaginario,
entre otros aspectos básicos de su problemática. Debemos remitir
al lector a los autores que fundamentan este campo (señalados en
las referencias bibliognificas y en la bibliografía complementaria
con un asterisco). de modo tal que basados en esos estudios.
podamos avanzar hacia la consideración de aspectos patológicos
del narcisismo que se nos presentan como relevantes en una clínica
psicoanaIítica de adultos.
Las diferentes formas clínicas del trastomo narcisista muestran
una serie de rasgos en común. además de otros que son di tcrcncia-
les. Es a un conjunto de rasgos comunes a varias formas del

97
narcisismo patológico que nosotros denominaremos "perfil clíni- Hacemos la salvedad de que nuestro perfil caracteriza a trastor-
co y psicodinámico" del trastorno. Precisar ese perfil es el propó- nos narcisistas de las etapas adultas. En la adolescencia muchos de
sito de este trabajo. estos rasgos pueden presentarse en relación a las crisis evolutivas
Puestos a caracterizar estos trastornos nos ha dado la im presión y a las dificultades inherentes a configurar y remodelar una
de que los mismos tienden a configurar un síndrome, de modo que identidad, tareas esenciales para esta etapa vital.
sus rasgos surgen interrclacionados, remiten unos a otros, tanto en Comentaremos a continuación cada uno de estos rasgos y los
el plano de la descripción clínica como en las hipótesis psicodinamismos que operan a través de sus conductas.
psicodinámicas que intentan dar cuenta de sus conexiones pro-
fundas.
Hablamos de trastorno narcisista cuando una persona presenta:
l. Problemática centrada en el sí mismo
1. Una problemática centrada en el sí mismo, una preocupa-
ción constante por definir su identidad y la estima que esa imagen Desde la antigüedad, el mito de Narciso destacó dos parámetros
de sí pueda merecer ante los otros significativos y ante sí mismo. claves para comprender los fenómenos de orden narcisista: el
2. Una constante preocupación puesta en el saldo, que en sujeto dependiendo de imágenes de sí y del amor que esas
términos de identidad y estima de sí, pueda resultar de toda imágenes merezcan.
interacción con los otros.
3. Una constante angustia centrada en la ubicación de esos En un valle encantador había una fuente de agua extremadamente
resultados interaccionalcs con los otros, en términos de responder clara ... lo primero que vio Narciso fue su propia imagen rcllejada
a un yo-ideal o al absoluto opuesto, el negativo del ideal. en el limpio cristal. Insensatamente creyó que aquel rostro hermo-
4. Alteraciones en la percepción y en la configuración de una sísimo que contemplaba era el de un ser real, ajeno a sí mismo. Sí,
imagen del propio cuerpo. él estaba enamorado de aquellos ojos ... el objeto de su amor era él
5. Frecuentes temores hipocondríacos. mismo ¡y deseaba poseerse!- Como una voz interior le reprochó:
6. Reiteración en la demanda de modos primarios de vínculos, ¡Insensato! ¿Cómo te has enamorado de un vano fantasma? Tu
pasión es una quimera ... tu imagen contigo está, contigo ha venido,
caracterizados por una dependencia patológica.
se va contigo ... ¡Y no la poseerás nunca! Ya entregado al abismo,
7. Ansiedades vinculadas con objetos sexuales parciales, hundido en lo imposible de su pasión de aprisionar su imagen, ya
pregenitalcs, amenudo integrados en fantasías perversas (oralidad, transformado en flor, al borde de las aguas, se seguía contemplan-
anal retentivo, conductas expulsivas evacuativas) y consecuentes do en el espejo sutilísimo.'
dificultades en el plano de la sexualidad genital adulta.
8. Pensamiento confusional prcvalente, correlativo de las En otro siglo Quevedo dirá:
modalidades de vínculo fusional infantil preservadas como predo-
minantes hasta edades adultas. En las aguas del abismo, donde me enamoraba de mí mismo.
9. Estados depresivos frecuentes. Un fondo depresivo cons-
tante. Partiendo del modelo creado enel relato mítico, la investigación
10. Di ficultades para el rcgisro y la comprensión empática de las psicoanalítica ha profundizado en direcciones múltiples ese fenó-
conductas y los motivos.de los otros, lo cual acarrea perturbaciones meno especial del investimento libidinal de la propia imagen,
en la esfera social. Green2 ha sintetizado así algunos componentes universales de la
aspiración narcisista:

98 99
Ret~·;~tode Narciso: ser único, t~dopoderoso por el cuerpo y por el b. Las imágenes de sí son afectadas por una gran inestabilidad.
csprn tu encarnado en su verbo, independiente y autónomo no bien quéllas que precariamente esbozan una configuración son alta-
lo desea, pero del que dependen todos los demás sin que él se sienta ente vulnerables, puestas en cuestionamiento por cada confron-
portador del menor deseo para con ellos. Sin embargo, radicado tación con el juicio de los otros. La inestabilidad es la oscilación
entre los suyos ... por los signos visibles de la Divinidad ... una
entre nnágcncs antagónicas, extremadamente polarizadas. Un
figura de lo Mismo, de lo inmutable, lo intangible, lo inmortal y
lo intemporal. Dlédico de 50 años consulta por las dificultades para asumir una
etapa de nuevos compromisos profesionales: "Si tengo que dar
Ideal al que aspi ra la organización narcisista del sí m ismo y de clases entro en pánico porque allí, frente a otros médicos, me
sus relaciones con el mundo. Ideal enteramente problemático, al consagro como genio o como tarado. Eso es tan terrible para mí,
cual tienden con mayoregosintonía ciertos caracteres "hipemarci- tan delinitorio, que no puedo preparar una clase".
sizados". El trastorno narcisita instaurado en el déficit pena, en c. Falta de una cierta coherencia entre las diferentes
cambio, lejos de aquel ideal, meta tan deseable como imposible, rcpresentacines del sí mismo. La discordancia es extrema en los
maravillosa e inaccesible, la cual forma parte de su fondo depre- cuadros borderline, pero afecta a otras formas del narcisismo
sivo, sobre el cual volveremos. pat?lógico. "Yo ~reoque doy t~clo pormi hija, pero si algo me pone
Snmi-Ali ' ha destacado tres momentos en el Mito de Narciso: íuríosa. me veo finalmente egoísta. una mala madre, la peor; de allí
Narciso percibe a otro en lugar de pcrcibirsc a sí mismo. Narciso salto a que nadie ha hecho tantos méritos y que tengo derecho a ser
percibe a otro como a él mismo. Ese otro remite a otro que no es exigente". Esos diferentes registros de la experiencia no encuen-
él mismo. Estas contradicciones condensadas por Borgcs en uno tran modo de coexistencia. no pueden establecer transacciones
de sus títulos ("El Otro, El Mismo") son material constante en las diferencias de grado o de matices. '
ansiedades propias del trastorno narcisista. d. Inestabilidad y conflicto en la valoración de esas imágenes
Si analizamos ese fenómeno global del centramiento en una de sí, lo que hace a la autoestima. La estima oscila entre juicios de
problemát lea referida a sí m ismo. podemos reconocer en la m ixma pcrfe~ción. \a~ribuídos ~l Yo Ideal, cargado de omnipotencia
la incidencia de una serie de parámcuux':' en los que quedan infantil) y JUICIOS de denigración (categorías absolutas de condena
comprometidas las representaciones a las que el sujeto apela para por un supcryó arcaico cargado del sadismo infantil).*
identificarse como un "yo", dotado de alguna consistencia, de
cierta constancia, reconocible para sí en alguna medida. En el ejemplo anterior, no se trata de una madre que "en esto
Debemos mencionar varios de esos parámet ros en los que el estuvo mal", sino de la peor de ellas, la que por ser tan mala verá
trastorno narcisista presenta alteraciones: los (hUlOS e~ la hija, éstos serán irreparables, todo será un castigo.
Este conjunto de alteraciones coloca al individuo en constante
a. Dificultades en la configuración de las imágenes de sí Zozobra, una inseguridad básica, un clima de ataques y de lamen-
mismo: precariedad, carácter coníusional de las mismas. El pa- !o~, .ya que cada confrontación con el mundo lo pone en tela de
ciente no logra pensar en sí mismo con alguna aproximación, y lo JUICIO. no de modo relativo sino radical.
expresa de modo manifiesto ("No sé cómo soy, necesito que me
lo digan ... varío tanto que no sé cómo dcfinirmc ... soy según con
quién estoy ... no me hallo a mí mismo --estamos citando comen- *Esla constelación de alteraciones en la configuración y sostén del sí mismo acarrea
tarios muy Irccucurcs=- ... me confundo con una opinión que no me para .•el individuo
&01, C.fcct
1111el: o uc.',' mconsis. '1'encra,
" ue.• f a Ila uC
.• compactacron.
. , una excesiva
cVcdad del ~..,.....
ob'... ser" Este rcui .tro es'. con fre ,.... uc nvauo
rccuencra .• en demandas hacia sus
imaginaba y quedo perdida, me vuelo, no sé cómo quedo ubica- Ct:- S

d ~C.I.os.conw SI algo del otro pudiera otorgar experiencia de existencia. con una
da"). enSillad consistente.

100 101
De cada acontecer surgen interrogantes: ¿Quién es? ¿Cuál es su Angustia centrada en la ubicación de esos resultados
identidad? ¿Cuál es su valor? •teraccionales con los otros, en términos de responder a un yo
El individuo está expuesto, no tiene un "capital" acumulado de ideal o al absoluto opuesto, el negativo del ideal
reconocimiento de sí que pueda referirse a una experiencia de lo ya
vivido. Todo se apuesta de nuevo en el acontecer por vivir. Vivir
es, entonces, riesgo, amenaza, fragilidad. Opera entonces. en estos trastornos, un código valorativo polari-
zado en los extremos del yo ideal y del negativo del yo ideal.
El yo ideal sosteniendo representaciones de triunfo omnipoten-
tes, de perfección absoluta. El negativo definiendo la castración,
2. Preocupación por el saldo el fracaso irreparable e inapelable.
que en términos de identidad y estima de sí Vemos aquí en acción los fenómenos disociativos que Melanie
pueda resultar de toda interacción con los otros KIein atribuyó al psiquismo temprano. Este código valorativo
supone que sólo existen aquellos lugares llevados al límite. Niegan
la existencia de grados en una escala.
El sujeto del trastorno narcisista, así expuesto, vive lo amenazante Hemos trabajado con el profesional antes mencionado esa
dela interacción, ya que toda conducta propia o ajena tiene el poder ausencia de puntos intermedios de localización: "genio o tarado",
de otorgar o de negar una identidad. Dada una falta de referencias su total creencia en la validez de esta escala sin grados.
identificatorias estables (y esto es lo que merece llamarse con Clínicamente esta ausencia deja sólo lugares para la euforia o la
Balint, una "falta básica"), el individuo pasa, de registrar una depresión.
conducta a establecer o a detectar cómo establece un otro, el juicio La defensa caracterológica, frente a los riesgos de esa oscilación
devalorsobrelamisma. Como lo ha interpretado Hugo Bleichmar' extrema, es la restricción del yo.
se trata de inferir la imagen de sí de la cual aquella conducta sería Se evita así pasar por el riesgo de esas valoraciones inexorables,
una expresión particular: de un fracaso, o de una dificultad, el limitando diversas áreas de la relación con el mundo (puede ser el
individuo pasa a localizar aquella imagen de sí que explicaría ese trabajo, el sexo, el encuentro de una vocación, la vida social, lo que
fracaso, esa dificultad.
encierre el peligro de instaurar el temible código valorativo de un
"Mire, yo tengo que ser muy mala en mi conexión con mi hija,
área particular que pone en juego las identificaciones del sujeto.
porque si no podría ser que ella no me entienda, o se olvide del
Otra defensa caracterológica consiste en la identificación con lo
horario en que habíamos quedado". Una y otra vez el paciente
que Kohut ha denominado "self grandioso" (modalidades manía-
aplica como natural esta lógica, que va de la conducta a un yo
supuesto sustancial, un yo de cualidades esenciales que destinan a cas, en unos casos variantes de las personalidades "como si"),
esa conducta y a ninguna otra. identificación que tiende dinámicamente a mantener alejada la
El pasaje directo de la conducta (particular) a las representacio- experiencia del negativo del ideal.
nes de sí (dotadas de una cualidad general) lleva a soslayar la
consideración de muchas condiciones que hacen a lo singular del
acontecer (modos en que se emiten los mensajes, papel de los
otros, antecedentes de esa dificultad, otros elementos concurren-
tes). No se analiza una situación, se cree que todo lo que había que
encontrar era qué defecto de esencia (el ser del sujeto) explica cada
falla en logros esperados.

102 103
4. Alteraciones en la percepción 5. Frecuentes temores hipocondríacos
yen la configuraci6n de una imagen del propio cuerpo

Esas fallas de esquema corporal se acompañan de acentuadas


El trastorno en las representaciones de sí afecta también a la ansiedades hipocondríacas. La fragilidad de las representaciones
configuración de una imagen del propio cuerpo. Las representacio- de sí se extiende a una fantasía de fragilidad del "cuerpo real".
nes de esquema corporal resultan entonces confusas, de límites Ante síntomas menores. el paciente es presa de grandes miedos:
borrosos. a morir. a padecer enfermedades graves, miedos invasores. mu-
Hay fallas en el registro de partes del cuerpo. Confrontado el chas veces sin nombre, angustias sin objeto. experiencias agudas
individuo a evocar su cuerpo, a dibujarlo o a mirarse en un espejo, de fragilidad.
surgen distorsiones en el registro de las formas, de los volúmenes "No sé qué pasa con mi cuerpo. algo debo tener, tal vez sólo sean
de rasgos propios de ese cuerpo. ' ideas mías. me parece que algo se hincha en mi abdomen, ¿será
"Me veo terriblemente gorda. no me puedo ver así y cuando lo sólo constipación? Los médicos no le dan importancia, pero yo
comento en casa todos me dicen que estoy loca. que no me sobra creo que algo tengo. el otro día tuve palpitaciones, claro, había
un kilo por ninguna parte. pero yo me veo gorda". expresa una corrido un poco. pero me pareció que era demasiado ..."
paciente cuya relación entre peso y estatura y sus formas entran A diferencia de una patología psiquiátrica hipocondríaca. aquí
holgadamente en los límites del tipo que nuestra cultura llama se trata de temores más confusos. crraticos. carentes de precisión,
" norma 1". Se hacen en estos trastornos muy evidentes las diferen- a menudo favorecidos por la presencia de somatizaciones de la
cias (divergencias, oposiciones) entre "cuerpo real" y "cuerpo ansiedad.
imaginario" (Sami-Ali).7 Una variante clínica del trastorno narcisista. la personalidad
En los ~cnómenos de obesidad aparecen las distorsioncs opues- infantil. presenta ya un repertorio constante de desórdenes
tas de registro de masa corporal: "Comí muchísimo últimamente. psicosomáticos. Las incertidumbres sobre el propio cuerpo resul-
pero cosa rara. no engordé", dice un paciente cuyo clínico constata tan de los obstáculos que el sujeto ha encontrado para configurar
un aumento significativo en pocas semanas. su percepción de cuerpo en cuanto soporte de las representaciones
Sami-Ali ha destacado un relato de Henri Michaux: del sí mismo. Sami-Ali sintetiza el trastorno:
Conozco tan poco de mi rostro que si me mostraran uno de mismo
tipo no sabría ver la diferencia ... miro fácilmente otro rostro como Descentrado. el sujeto se coloca en relación con una pluralidad de
si fuera el mío. Lo adopto. Descanso en él... Cuando el rostro objetos que son imágenes del cuerpo.
conlcmplado se va con su cuerpo. me siento más que triste: me
~iento desposeído y sin rostro. Acaban de arrcbatármclo. j Si no Esta proyección de la superficie corporal a una especie de
fuera mas que amor! ¡Lo que se llevaron es mi cara! espacio exterior al sujeto rige aun para las sensaciones propioccp-
tivas. Cita a un paciente: "El dolor no está en mi cuerpo, antes bien
Aquel autor comenta: yo estoy en el dolor". A diferencia de otras formas clínicas de la
Estar sin rostro y tener un rostro que se pierde inmediatamcnte son hipocondría (como las ligadas por el psicoanálisis a la paranoia, ,
dos maneras de expresar una intuición fundamental del ser. proyccción-introycccién del objeto perseguidor al interior del
Esa intuición sc ahrc a un mundo en el que el objeto, ya sea cosa, cuerpo). el trastorno narcisista presenta una problemática múltiple
ya ~e~~ostro. no alcanzó todavía su permanencia y en el que la en sus referencias al cuerpo: déficits de la configuración, déficits
posibilidad de la representación parece ya problemática." de apropiación-irucriorización, y toda clase de incertidumbres a

104 105
I
Pm:tir d~ estos déficits. Una disfunción neurovegetativa gas- constituye". Cf. El Ser y la Nada, 3a. parte, "La existencia del
1:
troInte~tInal l~ve (malestar gástrico, náuseas) tiene efectos rójimo", "La mirada"). Fue también acentuada en las tesis de
confusionales Intensos, en una paciente que trato actualmente' [acan sobre el "Estadio del Espejo"!", considerada en su función
"No sé qué me pasa, tod?, se me mueve, estoy perdida ... no estoy: formadora por Winnicott ("Papel del espejo de la madre y la
no sé para dó~de ag.ar:~r . Más allá de este estado subjetivo, esto familia en el desarrollo del niño", Realidady juego, cap. 9) ypor
se expresa en tmposíbüídad concreta de hacer dieta, o de consulta J(ohut ("La transferencia especular", Análisis del self)",
al clínico. r El trastorno narcisista es resultado de perturbaciones de esa
La experiencia de un paciente psicosomático se ha sintetizado función de espejo familiar, interferido en la capacidad de interiorizar
en estos términos: imágenes de sí coherentes y aceptables (dicho esto en el sentido
relativo, pero psíquicamente registrable, en que es posible referir
A. s~fre fenómenos .de despersonalización durante los cuales el a coherencia y aceptabilidad el complejo juego de identificaciones
p~OplO cuerpo, perdida su densidad, se convierte en el espacio que como un mosaico van dando el montaje de un sí mismo nunca .
circundante: desprovista de interioridad por falta de inserción
uno, sino múltiple). El trastorno narcisista, por aquellos déficits,
corporal, la conciencia no es más que "un cierto estado" que
queda fijado al momento de exterioridad, aquél en que el otro,
resbala sobre las cosas y forma parte de las cosas ... todo es en
~xtremo ligero y et~re? .. La labilidad de lo percibido es tal que un
omnipotente en la función de espejo, detenta toda imagen del
Incesante estre~eclmlent? (que refleja el ir y venir de la mirada) sujeto. De allí la inexorable dependencia, se va al otro a buscar el
reco~e el ~spaclO ~ue, al ntmo de las inspiraciones y exhalaciones sí mismo.
respiratonas, se dilata y se comprime alternativamente (Sami- Esta función "espejo", función dadora de imagen, mantenida en
Ali). el desarrollo más allá de las etapas en que es imprescindible como
formadora del "yo" del niño, da lugar a intensas ansiedades
confusionales (desde el vínculo fusionalla identidad de uno queda
localizada enteramente en las conductas del otro, depende de todo
6. Reiteración en la demanda de modos primarios ese acontecer subjetivo propio del mundo fantasmático del otro) y
de vinculación, de dependencia patológica a ansiedades persecutorias (el otro está dotado de un enorme
poder, es temido, pero también desafiado y atacado en el interior
del vínculo fusional, las fricciones, las acusaciones mutuas, el
El trastorno narcisista mantiene algún equilibrio de su lábil siste- constante estar pendiente de las mínimas reacciones del otro,
ma de representaciones mediante vínculos soportativos, fusionales respondiendo a las mismas con máxima sensibilidad, son
en con?icion~s d~ dependencia pa!ológica, con figuras capaces d~ clínicamente los motivos de consulta más frecuentes, el tema-hilo
cumplir una función parental. Tal función parental queda in vestida conductor de muchas sesiones). Ansiedades depresivas también,
con poderes de sostén y continencia estructurante, poderes en los ya sea por amenazas o alejamientos del vínculo fusional soportati-
que es proyectada una ilusión de protección omnipotente ("imago vo, ya por las imágenes denigradas, condenatorias que resultan de
parental idealizada" en la terminología de Kohut). Este rol parental la función de espejo jugada en el interior del conflícto vincular.
del otr~ pa~ece demandado a cumplir funciones de "espejo", Esta relación de dependencia patológica supone un constante
analogía óptica a la que han recurrido Lacan, Winnicott, Kohut. borramiento de los límites entre el yo y el no-yo. El trastorno
La función de la mirada del otro, dadora de imagen para el narcisista gira en la confusión de esos límites. Gran parte del
sujeto, fue destacada en los estudios de Sartre? ("Basta que otro me proceso terapéutico necesariamente pasará por la interpretación, la
mire para que yo sea lo que soy". "La mirada de los otros me discriminación y el registro de la necesidad y posibilidad de operar

106 107
Una ausencia de espejo ha devorado mis ojos.
el trazado, en cada experiencia vincular, del límite entre esos
(Carlos Riba, Elegies de 8iel'ille).
espacios yo-no yo.
Hemos estudiado a una paciente cuyo "trauma", detonador de
Busca en tu espejo al otro.
una angustia constante (que motivó su consulta) fue un asalto
al otro que va contigo.
ocurrido en su casa. Ella no estaba, no hubo mayor violencia, el (Antonio Machado. Cantares)
robo fue menor. A partir del episodio la sal ida a la calle, el control
de puertas y ventanas, la relación con cada repartidor a domicilio, . Por qué persistes, incesante espejo.
pasaron a ser todos episodios angustiantes. Lo hemos interpretado rol' qué en la sombra el súbito reflejo?
como desequilibrio resultante de la invasión del espacio del yo (la Eres el otro yo de que habla el griego
casa) por representantes del espacio no-yo (ladrones, lo descono- y acechas desde siempre... .
cido), una desorganización de las demarcaciones previas que (Jorge Luis Borgcs. El Oro de los Tigres. "Al espejo")
establecían ese límite.
Somos ese quimérico museo de formas incesantes.
Frcudllamó la atención sobre esa operación típica del narcisismo,
ese montón de espejos rotos.
consistente en atribuir lo placentero al espacio del yo y evacuar
(Jorge Luis Borgcs, "Elogio de la Sombra")
proyectivamente lo displacentcro adjudicándolo al espacio no-yo.
El mantenimiento del tal economía psíquica supone un trabajo En su dormitorio los espejos están velados porque en ellos ve mi
constante, un control sobre el sí mismo y sobre sus objetos que a reflejo usurpando el suyo... ."
menudo toma modalidades obsesivas, control siempre amenazado (Jorge Luis Borges. Eí tl accdor, "Los espejos velados)
y cuando quebrantado, generador de confusión y persecusión.
La función del espejo, ese enorme poder del otro en el que se En el espejo de csta noche alcanzo
confunden yo y no-yo, ha nutrido la literatura de todas las épocas. mi insospechado eterno.
Shakespeare la ha volcado con precisa elocuencia: (Jorge Luis Borgcs, El Otro, el Mismo. "Poema Conjetural")"

Pobre espejo quebrado, yo contemplé con frecuencia en tu dulce Estos múltiples espejos nos hablan de una dinámica un~v~rs~l
luna mi vejez rejuvenecida, pero ahora este espejo. antes vivo y para la const rucción de las representaciones del sí mismo, dinámi-
brillante, oscurecido y arruinado. me muestra un esqueleto de ea que Lacan ha invcstigado particularmente en sus desarrollos
muerte consumido por la edad ... tú has arrancado mi imagen .
sobre el rcgrstro I lo
uc () iunagmano
. . ..1.1 1'\" 1(,
de tus mejillas y hecho trizas de tal modo la hermosura de mi
espejo. que ya no puedo ver lo que antes fui.
(William Shakcspcarc. "La violación de Lucrccia")
7. Ansiedades vinculadas cun
Como tu rostro altivo. si se retrata objetos sexuales pardales, pregenitales,
en el húmedo espejo de mi amargura a menudo integradas en fantasías perversas
pues brillas en cada una de las lágrimas que lloro.
y consecuentes dificultades
y guardarás así mis lágrimas para espejos.
en el plano de la sexualidad genital adulta
(William Shakespcarc, 'Trabajos de Amor Perdidos")"

En innumerables poemas insisten los espejos: El trastorno narcisista aparece vinculado con objetos sexuales
parciales, prcgcnitalcs, El objeto es fijado, queda instalado en un

109
108
plano de oralidad o analidad (Bela Grunberger)'", manifestándOse hombre, viviendo exactamente lo mismo que en la relación real
en modali~ades esta.bles de con.ducta. En lo oral, el otro de la externa.18
dep.endencla patológica está destmado a proveer suministrus Una A propósito de este relato, cabe señalar la relación de esa mirada
ansIeda~ c.onstante en el trastorno narcisista, fuente de conflicto y con los fenómenos de espejo, de "doble" ligados al trastorno de
de agresividad permanentes, es referida a lo que el otro hace faltar identidad Ya la vez al retraimiento narcisista como defensa frente
la frustrante del otro. '
a la invasión-fusión con el otro en la relación sexual: se preserva
"El no me da lo que necesito, es avaro, es mezquino con dinero una zona no invadida, la que mira la escena, retirada del lugar de
y con afect~s y yo ,exploto po~que no tolero esa mezquindad" (en protagoni sta.
algunos pacientes este es el estilo de la queja central, la que aparece La restricción de la experiencia genital es otra modalidad de
una y otra vez, el eje manifiesto de sus desdichas).
conducta protectora para la fragilidad del self narcisista. Winnicott
En el nivel anal el objeto es el evacuador ("me trae todos sus ha explicado así la función de esta defensa:
problemas, todas sus porquerías y me deja a mí llena de eso que es
de él, pero yo siento que se va y la cabeza me estalla" --ex- Sólo cuando alguien ha logrado constituir un self es que la
presiones de la misma paciente-), o bien, en otros momentos satisfacción pulsional deja de convertirse en un factor de
debe ser el otro el contenedor de la expulsión anal: "al final estallé desintegración o alcanza un significado más allá de lo estrictamen-
te fisiológico."
y le .dije de todo, todo lo que tenía acumulado de tantas salidas
arruinadas y de las vacaciones que por su mal humor también me El trastorno narcisista comprende también conflictos y defensas
las arruinó, todo se lo largué en una hora; vi que él se quedaba de nivel neurótico (ansiedades de castración, defensas histéricas,
mudo, pálido, se ve que no se imaginaba que yo un día le iba a fébicas, obsesivas, por lo cual se plantean problemas de diagnós-
largar todo eso junto". tico diferencial). .
. ~a fijación erótica en los niveles pregenitales trae consigo Las conductas neuróticas acompañan siempre a esa constela-
dificultades para una mayor organización de las relaciones con el ción que hemos delimitado hasta aquí en nuestra exposición. La
otro en un nivel de genitalidad. Esto no excluye la posibilidad de diferencia con una caracterología asentada en el orden de las
log~ar ~rección u orgasmo. Se trata de la limitación del goce en la neurosis estriba en que las manifestaciocnes neuróticas son en el
genitalidad, del malestar que acompaña la sexualidad, dado que las \ trastorno narcisista, proteiformes, diversas, inestables, varían con
deman~as orales yfantasías de expulsión anal introducen siempre frecuencia según vicisitudes del acontecer individual y grupal;
en el vmculo erótico componentes persecutorios de frustración, reflejan, de modo más directo que las neurosis (en las que las
culpa, amenaza de pérdida, resentimientos. formaciones del inconsciente actúan como mediatizadoras)
Los objetos parciales, pregenitales, son habitualamente inclui- las emergencias de ansiedades propias de cada situación con sus
dos en fantasías sexuales perversas, las que también inciden para crisis.
crear un fondo de ansiedad y culpa en el plano de la sexualidad. Dinámicamente las conductas de orden neurótico aparecen,
Veamos un comentario clínico de Lía Ricón: pero no son dominantes en la organización del conjunto de la
conducta del sujeto, no ordenan su estructura. En trabajos previos
La sexualidad de Ana nunca fue traída al análisis como problema,
ya que ella y su marido tenían satisfacción y orgasmo con un ritmo hemos consignado las cualidades propias de las estructuraciones
aceptable para ambos. Sin embargo cabe señalar que esas rclacio- neufÓticas tal como aparecen en sus procesos terapéuticos, con sus
n.es eran en cierto modo "rnediatizadas", ya que siempre, o casi angustias, modalidades de relación de objeto, identificaciones,
SIempre, las acompañaba una fantasía en la que ella se observaba posiciones en relación con una triangularidad edípica, defensas
e imaginaba a sí misma en una relación con su marido u otro establemente instauradas en cada tipo de estructuracíón neurótica.

110 111
La e~t~ctura de, I~ conducta ~s en el ~ra~tomo narcisista, de El relato allí termina, no entra en los temas de la histeria ("él
predominio prc-cdípico: el conflicto es diádlco. la problemática deseaba a otra, para qué me quería .;" ) aunque seducir y evitar son
nuclear no es la del falo-castración y sus fantasmas, sino la de I conductas histéricas. Aquel contacto, para ella el más importante
ex~.:teJ~ciade UJ/si "./ismo o su disolución. ya en la depcndel1ci~ en cuanto al tipo de identificaciones que permite establecer, no se
fusional, ya en su quícbra. No es el yo perdiendo oartes valorad- basa en poseer al otro (ansiedad de posesión del falo y de su
'( . I I . as
(eI SI ansrcr ac especial que Freud entendió debía vincularse e
t:
pérdida, a través del hombre poseído, en la histeria), sino de poder
el " ~omp lci ió ••
eJ? (e castrací n. -nota
í

de 1923 agregada al caso


011
ser por el vínculo de continencias recíprocas tendidas con el otro,
Juaniio-c-) Sll10 que está en Juego la pérdida de! yo. y por el encuentro de una imagen de sí en el otro.
Esta distinción fue nuevamente expresada por F'reud en una not- En este caso clínico, de déficits en la narcisización del sí mismo,
póstuma: a
el vínculo contenedor es diádico (a diferencia de la histeria donde
la matriz vincular básica es triádica: posesión del hombre y
Te~ler y no l~ner en el niño. El niño prefiere expresar la relación amenaza por la rival. triunfo por la exclusión del rival. distribución
obJet.al mediante la identificación: yo soy el objeto. El tener es en los lugares de la constelación triangular del falo y de la
ulterior y vuelve a recaer en el ser una vez perdido el ohjeto castración, Iaruasmatizados),
Modelo: e,1pecho materno. El pecho es una parte de mí. yo soy ei
Esta paciente nos ilustra el comentario de Winnicott. Primero,
pecho. Mas tarde. tan sólo: yo lo tengo. es decir yo no lo soy ... 20
el intento de ser, luego cobrarán importancia poseer, perder,
sustituir, en lo que Simonc de Beauvoir llamó "esa distancia
Winnicou (sin citar a Freud, tal vez guiado por la huella de su
necesaria al deseo".
lectura) ,~~1 el resumen, de su artículo "La creatividad y sus
ongenes ,_1 concluye ase Destacamos ahora que la fusión no es un estado estable sino un
estado deseado estático, como un cierto ideal, inestable, siempre
y ahora deseo decir: "Después de ser. hacer y que se le haga a 1II1O. amenazado, lo cual supone una constante inversión de esfuerzos
Pero primero ser". para recrearlo en el nivel de ilusión y en las interacciones que
pcrm itan darlc sustento.
Mencionaré la entrevista reciente con una joven de 25 años, Comentario clínico sobre un paciente que está en este nivel de
cuya conducta con los hombres es manifiesta como histérica trastornos:
(seducción, evitación, cambios constantes, contactos fugaces).
Hablamos de estas relaciones y su modo de abordarlas. En su Por miedo a vaciarse. en el momento en que comienza a disolverse
verb;~1izaciól: carece del dramatismo de la histeria; hay risas, hay la fusión con el objeto. se produce en él el fenómeno contrario de
un clima de Juego, como una niña que se asoma al mundo de las querer tornarlo todo dentro de sí. .. cl esfuerzo defensivo se
seduc~iones homh.re-mujer, pero de algún modo "sabe" que ella cncam ina en adelante a negar una agresividad anal que se encarga
neceslta.algo previo. aunque desconoce qué es, qué le falta. de separar al sujeto de sus percepciones."
Menciona un encuentro diferente con unjoven en un viaje: "Yo
supe que era igual a mí (pensemos en la identilicación especular, Separarse de las propias percepciones: el sujeto desea no ver, no
donde lo buscado es lo igual, postulación hecha por Frcud como saber. Factor dinámico de importancia en el mantenimiento de
un~ ?tapa en la evolución del narcisismo) porque los dos habíamos vínculos y pensamientos de tipo confusional. Factor también
sufrido pro~lema.s. de familia muy parecidos, con él yo hice importante, con función defensiva, que se erige como resistencia
contacto, alll yo fUI yo, no daba para una pareja; tal vez éramos activa a avanzar en un saber que resulte de la indagación
como hermanos". psicoanal ít ica.

112
113
8. Pensamiento confusional Tenemos que considerar en todo su alcance esta dificultad para
sostener ya la percepción. En los com ienzos de una psicoterapia el
paciente habla de ansiedades y de conflictos con seres a los que no
El pa~iente necesita mantener la ilusión de fusión con el objeto; percibe. Detenerse en la percepción, registrar su vaguedad, sus
necesita entonces no discriminar, no hacer nada, relativo a los fragmentaciones, es una parte esencial a trabajar, ineludible. Toda
vínculos primarios, con carácter de separable o sustituible. propuesta interpretativa, que abstrae, relaciona, organiza conjun-
Asimismo la falta de delimitación entre un adentro y un afuera tos, tiene que considerar las dificultades cognitivo-afectivas que
expresa, a la vez que refuerza, un conjunto de falencias en la presenta el paciente al cual está destinada.
organización de las operaciones yoicas inherentes a la maduración
y el crecimiento psicológicos.

Cuando quiero encontrar algo, una idea, un teorema, y hasta un 9. Depresiones


rostro o cualquier otra cosa, a menudo no consigo encontrarlo, no
consigo reconstituir el rostro, el paisaje, la posición. No logro
reestructurar una parte de tiempo concreto. Todo se embrolla, Debemos distinguir en el trastorno narcisista un fondo depresivo
aparece vago y si no es vago se me presenta en fragmentos (constante) y reacciones depresivas (relativamente puntuales). El
pequeños. Cuando quiero reconstituir algo debo realmente hacer
fondo depresivo expresa un estado sufriente que pena por la falta
un esfuerzo enorme. Y por fin, en general no logro mi objeto. Por
de un sí mismo (estimable, consistente, relativamente estable).
ejemplo, si pierdo la visión de la cara de alguien tengo que ir a verlo
de nuevo. Lo que ocurre es que me acuerdo de ciertos rasgos del Depresión que resulta de la experiencia de fragilidad, de vacío, de
carác~er~especialmente de ciertas expresiones, pero no llego a búsqueda fallida, insistente e infructuosa. Una mujer de 40 años
consnruir un todo con esos elementos. Sin embargo, tenso la resume esta experiencia: "Al final yo estoy en nada, floto, navego
. .'; . b ,o
rmpresion de que podría acordarme, sólo que hay algo que se sin llegar a nada, como a la deriva; un día me lleva una corriente,
opone a ello. No sé lo que es. Y esto resulta particularmente me alivio, creo que ya tomé un rumbo, al otro día todo cambió",
molesto en el colegio, porque cuando leo algo, un libro por y el desánimo inunda su rostro.
ejemplo, me e~ imposible recordar el comienzo cuando estoy al Las reacciones depresivas surgen una y otra vez, ante fracasos
final. Y es particularmente molesto en matemática y en todas las en los vínculos y en la adaptación social, laboral, económica. Cada
materias en las que hay que recordar algo. Es la falta de puntos de situación de amenaza o de pérdida del vínculo sostenedor primario
referencia ...23
especular es fuente de reacciones de ansiedad y depresión. "Hago
todos los esfuerzos, creo que así vamos a quedar de acuerdo, él
Aquí se presenta toda una problemática en operaciones de orden
llega y me tira todo abajo, me critica todo, para él todas son fallas
cognoscitivo, dificultades a tener en cuenta en la evaluación y en
en mí, y yo me licúo, me quedo sin sangre en las venas" (en esta
el manejo de los procesos psicoterapéuticos.
expresión, de la misma paciente, podemos registrar asimismo la
referencia corporal para la experiencia de aniquilación del sí
Dice A.: "Los objetos me molestan de la misma manera en que me
mismo, concordante con la hipótesis freudiana acerca de la prima-
moles~a.mi cuer~o:'. Po~su sola presencia los objetos lo asaltan y
desquician, Percibir es literalmente recibir el choque de lo sensible cía del yo corporal en la génesis del sí mismo).
(la impresión de que el ojo es herido por una esquina del armario El trastorno narcisista encuentra dificultades adaptativas: la
o el estómago por un ángulo de la mesa)." inseguridad sobre el sí mismo acarrea una ansiedad constante que
interfiere en las funciones yoicas necesarias para discriminar,

114 115
ordenar, jcrarquizar, planificar cualquier tipo de tareas. Los fraca- problema de esas condiciones para el ab~rdaje del tra~tomo
sos precipitan juicios sobre una identidad negativa con los que la narcisista en psicoterapias tendrá que ser objeto de otro ~l1lcul.o.
depresión retama de modo persistente. En nuestra línea de trabajo se trata de comprender las articuiacio-
nes que cada proceso va a requerir; en las particulares condiciones
de su desarrollo, entre los siguientes parámetros de orden estraté-
gico y técnico: interpretacion, discriminacil~ll, experiencia =:
10. Dificultades en el registro empático de sí y de los otros lar colocados en los ejes de la construccion Y de la crcacton.
At~ntos a un príncipio más abarcativo: para U!1aeficacia de. !a
clínica el campo de las intervenciones debe conlr~ur~rse: ~amblen
El trastorno narcrsrsta aparece dependiendo de resultados, de para estos trastornos, sobre el trazado de una mul.tlpltcaclOn de las
conductas cuyo saldo sostenga al sí mismo. Esta ansiedad mono- perspectivas y de los instrumentos, que es propia de todo campo
poliza su atención, no deja margen para atender a los procesos, creador.
motivaciones y modos de intcracción. Importan ante todo los actos
en cuanto sus efectos para el sí mismo. Empatía supone poder salir
de la perspectiva del sí mismo, abandonar momentáneamente su Referencias bibliográficas
vigilancia, para captar todo desde otra perspectiva. Esto resulta
muy difícil. Si preguntamos al paciente por los motivos que otro l. OVIDIO.Las Ml'Iamolfosis, Madrid, Espasa-Calpe, 19RO. Lihro IIl, pp, 61-
pudo tener para la conducta que comenta y le ha afectado su 63. . "
2. G1HóEN,A .•* "Uno, Otro, Neutro, Valores Narc isistas de lo Mismo, en
primera respuesta es "no sé ni me interesa". Este trastorno de la Narcisismo de Vida, Narcisismo de Muert«, Buenos Aires, Amorrortu,
empatía es generador de múltiples dificultades en los vínculos. Sus 19R6. . . •
efectos, clestructivos en la vida social, se cuentan entre los princi- 3. SAL!-Al.I, M., Cuerpo real.cuerpo imaginario, Buenos Aires, Paidós, 1979.
4. SToLUKnw, R. y LACllMANN,Psyclwanalisis of Developfl/enlal Arrcsts.
pales motivos de conducta de estos pacientes.
Tlieorv and Trrat mcnt, N. Y.,Int. Univ. Prcss, 19RO.
Hasta aquí relevamos la existencia, frecuente en la clínica, de 5. ANZIEU,D., "La envoltura sonora del sí", en El Yo Piel. Madrid, Bihlioteca
una constelación caracterológica y dinámica propia del trastomo Nueva, 1987. • .
narcisista. Cada rasgo de carácter nos envía a las estructuras 6. BLEICIIMAK, H., * EINarcisismo. Estudiosobre la cl1ul1ciaciñn y la gramal/ca
psicoclinámicas que en él convergen y se expresan. Pero el nivel de inconscienle, Buenos Aires, Nueva Visión, 19R1.
comprensión caracterológica impide una caída en supuestos 7. SAMI-Au. M., ob. cit.
rcductivos: los de creer que s610 es significar iva la interpretación 8.Idem.
9. Si\KTKE,J. P., El ser y la Nada, Buenos Aires, Losada. 1 9R3.
psicodinámica. Supuesto esencialista, en última instancia, de afán 10. LACAN,J .. * "El estadio del espejo como fonnador de la función del yo tal
simpliticador, mientras que en las distintas ciencias los modelos corno se nos revela en la experiencia psieo-analítica", en Lectura
que van encont raudo lugar creciente son los que se hacen cargo de Estructuralisto de Frl'ud. México, Siglo XXI, 1971.
"niveles de complejidad", estrati Iicacioncs. con circuitos en redes 11. KOIlUT,H.,* Análisis del Sel] (1971), Buenos Aires, Amorrortu. 1977.
12. SIIAKESI'EAKE, W., Obras Completas. Madrid, Aguilar, 1961.
de causalidad "emergente". El rasgo de carácter no es sólo 10
13. BOK(;l~s,J. L.. Obras COlllpletlls, Buenos Aires, Emccé, 1974.
aparente, manifiesto, de un latente psicodinamismo." Además es
14. LACAN,J .• oh. cit.
un existente, nudo en una red, mensaje inserto en matrices grupales 15. LACAN,J., * " La tópica de lo imaginario", en Los escritos técnicos de
y en cuanto constituido como hábito de conducta un existente con Frl'ucl. Barcelona, Paidós, 1981.
el cual el pxiquismo tiene a la vez que enfrentarse, tomar posición. 16. Li\CAN, J.,* "De la mirada como objeto a minúscula", en Los Cuatro
Concepto» Fundamentales del psic:oanálisis. Barcelona. Burral, 1977.
Es también creador de condiciones para su abordaje clínico. El

117
116
f~' ~RUNBERG;,R,B.,* El Narcisismo, Buenos Aires, Trieb, 1978.
. ICÓN,L., La ruptura de una simbiosis clfni , DIRECCIONES DEL PROCESO
de objetos transicionales", en W. Bar~n e ica a traves de .Ia recuperación EN EL ABORDAJE PSICOANALITICO
to de objeto en psicoanálisis Buenos Ag.r, y CAol.,Aportaclones al concep:
19 WINNI . ' . tres, morrortu, 1980. DEL TRASTORNO NARCISISTA
20' FRE COIT"p" T/¡e .locatlOn 01 cultural experience, 1967.
. ~'S,: ~oncluslOnes, Ideas, Problemas" (1938) Ob . C
Madnd, Blbhoteca Nueva, lII, 1968, p. 446 ,raJ ompletas,
21. WINNICOIT,0.,* "Papel del es . dI' ..
del niño" en Realid d J . peJBo e a m~dre y la familia en el desarrollo
22 *' 1. ~ y uego, uenos Aires, Granica, 1972.
' SMAYER, H., Narcl~lsmo, Buenos Aires, Kargieman, 1982.
23 . AMI-ALI,M., ob. CI!. .
24. Idem.
25'1~~;~ERET, s.. La personalidad normal y patológica, Barcelona, Gedisa,

Bibliografía complementaria Los desarrollos que presentaré continúan a los estudios sobre
"Perfil Clínrco y Psicodinámico del Trastorno Narcisista".' Sobre
AUt~~~~ER, P.,* La violencia de la interpretación, Buenos Aires, Amorrortu, el final de ese trabajo destaco que lo que viene después de plantear
FREUD, •. S ,* "1n tro d UCClOnal
.,
una caracterización de esa constelación clínica y psicodinámica, es
Narcisismo" (1914) Ob . C
Buenos Aires, Amorrortu 1979 ' ras ompletas, XIV, . preguntamos por cuestiones relativas a los abordajes, cuestiones
F S * ,. relativas a las técnicas psicoterapéuticas con los trastornos
REUD, ., "Duelo y melancolía" (1917), lbid,
GEDO,L, Advances In Clinical Psychoa 1 . N Y . narcisistas. Resulta complejo pensar el trabajo en el interior del
GOLBERG,A. (dir.) Advances in Ir P n~ ylsls, . ., In!. UnIV. Press, 1981.
Press. ' . se~ syc 10 ogy, New York, 1983, Int. Univ. proceso psicoanalítico de estos trastornos. Proceso que no es uno,
no es generalizable como uno, sino que tiene la diversidad propia
GOyLBERLG, A. (dir.), Prolfress in selfPsyc/¡ology, vol. 1,1985 Y vol 1I 1986 N
., ondon The Guilford Press. ., ,. de estos trastornos. Lo que intentaré es ubicar algunas cuestiones
KILLINGMO,B "Confli t d éfi .. ' . . relativas a los problemas del abordaje de estos trastornos y a sus
Anual de P~'icoanál;~i~ Lo edIC~!.119m8P9hcaclOnes para la técnica", Libro
K ' n res, líneas técnicas.
K~::' ~.,: ~ca ,;estauraci°l'n d~l.s~lf(1977), Buenos Aires, Paidós, 1980. Si partimos de una primera caracterización del "perfil clínico y
, ., ¿ omo cura e análisis? (1984) B A' . ,
LAPLANcHE1 * Vid. M . . ,uenos ires, Paidós, 1986. psicodinámico", ubicamos ya ciertos problemas que det1nen al
1973.
. ,., 1 a y uerte
.
en PSICO '1" B .
ana ISIS, uenos Aires, Amorrortu,
trastorno narcisista: la problemática centrada en la imagen del sí
MAsUD KHAN M * L . . .
M . ,., a intimidad del sí mismo Madrid Saltés 1980 mismo, dificultades en la configuración de un esquema corporal,
c. OOUGALL,l.,* "Narciso en busc d f ,,' es, .
los modos primarios de vínculo con el objeto de dependencia
anormalidad, Barcelona, Petrel~ 1~8~.una uente ,en Alegato por cierta
Me. OOUGALL,l.,* "El paciente d f ti . do" narcisística, los problemas del pensamiento confusional. Estos
Psicoanalítica 4 U le9s8a5eciviza o . Rev, de Psicoterapia
P ARKIN A * "El N
, , rug.uay, sct, . rasgos nos crean dificultades en el trabajo clínico con estos
"
P '1 ., I a~clslsmo: sus estructuras, sistemas y afectos", Int. l. pacientes. Cada uno de esos rasgos va a incidirenel trabajo clínico
syc roana " en Libro Anual de Psicoanálisis 1985
ROSOLATOG. * "El narcisismo" N " . constitu yendo una serie de dificultades, de obstáculos y tendremos
80, 1983. ' ,en arctstsmo, Buenos Aires, Ediciones del
que ver cómo vamos a trabajar con ellos.
WINNICOIT O * "L' "
. ':' a lll.t~graclOn del ego en el desarrollo del niño", en El Aparecerán también otros obstáculos, que se refieren a las
proceso di maduraciñn en el nino, Barcelona, Laia, 1975. organizaciones defensivas que asumen los trastornos narcisistas.
Con respecto a estas organizaciones defensivas podemos referir-

118
119
nos a los trabajos de Joyce Mac Dougall C'Narciso en busca de una las áreas mente y cuerpo no están relativamente delimitadas, si no
fuente'? y "El paciente dcsafcctivizadovj.tque plantean los proble- que gran parte de lo que tendría que ocurrir como procesos
m~~sde las transferencias narcisistas, las defensas esquizoidcs con mentales ocurre en términos de registros corporales, por lo tanto el
el Impacto contratransferencial que estas defensas producen. proceso terapéutico de estos trastornos será aquel que vaya ayu-
Lo cierto es que el trabajo con estas estructuras requiere un dando a construir delimitaciones mente-cuerpo trazados que en el
sentido del timing muy particular que va vinculado al paciente, proceso evolutivo de estos pacientes no fueron facilitados ni
como capacidad de holding, un sentido del tacto muy particular, organizados.
porque algunas de estas organizaciones defensivas podrán ser Sobre este punto quiero comentar experiencias clínicas que he
señaladas, pero durante mucho tiempo serán elementos realizado con pacientes que necesitaban integrar mejor su esquema
sostenendores del paciente, no podrán ser atacadas, movilizadas. corporal, sobre la posibilidad de incluir en alguna etapa del
Esto supondrá un cuidado muy particular de las organizaciones proceso trabajos con el propio cuerpo, trabajos a rcclaborar en las
defensivas y de los modos de instalar el paciente su vínculo con el sesiones de terapia, pero donde el trabajo sobre el propio cuerpo va
analisra. Se acentúa la capacidad de holding y el sentido de timing, a ir dando más conciencia al paciente de lo disperso, de lo
como elementos de especial cuidado en estos abordajcs. desorganizado y de lo organizablc. como experiencia que abre un
Ahora si el proceso terapéutico avanza, será porque puede camino que tendrá que ser reclaborado e integrado asimismo en el
tomar algunas direcciones: área mente.
4) El otro movimiento del proceso que quiero destacar, es aquel
1) Del aislamiento, o encapsulamiento de la fragilidad que en el ámbito de las iclealizaciones marcharía desde la
narcisística, poder pasar a la dependencia regresiva ya la continen- polarización de las valoraciones hacia una gradación de estas
cia en el vínculo terapéutico. La posibilidad de este pasaje y su valoraciones. Polarización de las idcalizacioncs que remite más a
importancla clínica fue fuertemente acentuada por Winnicott en un la órbita del yo ideal, y gradación de valoraciones que remite al
informe clínico último publicado en Londres hace dos años espacio del icleal del yo. Un paciente que yo comento en. "Pert:í1
("H~)lding ,.mcl Jntcrprctauon").' Allí, Winnicott destacaba que Clínico ... " me decía: "lo que me da pánico de dar una conferencia
habla una Iasc Importante del trabajo clínico que era el poder es que allí me consagro corno genio o como tarado", lo que
construir los elementos de pasaje del aislamiento narcisístico a mostraba una máxima polarización de las idealizaciones. En el
una dependencia regresiva útil. Si el proceso terapéutico avanza proceso terapéutico fue evolucionando hasta que él pudo dar una
habrá otro pasaje, más lento aún, que es el pasaje de la continencia conferencia, pero la pudo dar cuando integró que entre genio y
en el vínculo terapéutico al desarrollo de una capacidad de tarado, en el medio, había una serie de grados. Cuando fue a dar una
autocontinencia. clase supo que ya no se jugaban en él ni el genio ni el tarado, sino
2) Otro movimiento importante en el proceso será aquel que que iba a producir algo interesante, más o menos interesante, pero
marche de la confusión hacia la discriminación. Voy a hablar rcscatablc, yeso ya estaba en las gradaciones del sistema del ideal
después del instrumento técnico de la discriminación en el proceso del yo.
terapéutico. 5) La otra dirección del proceso que quiero señalar es aquella
3) Otro movimiento esencial del proceso será aquel que partien- que podría marchar de la dispersión, de la fragilidad e inestabilidad
do de los registros dispersos, de las percepciones parciatcs del de las imágenes de sí, hacia una mayor cohesión, consistencia,
cuerpo, conduzca hacia una progresiva construcción de un csque- estabilidad, definición de la imágenes de sí. Proceso lento, proceso
~11acorporal más integrado. Esto me lleva a señalar dos aspectos largo, de muy minuciosa elaboración.
mrportantcs: uno, quc cstarncs trabajando corruna patologíad'ondc

120
121
1'1
I

Para caminar en la dirección de estos procesos, ¿cuáles son 1) Crear vínculo con el paciente, crear vínculo actIvamente
nuestros instrumentos técnicos? Hay un instrumento técnico tradi- desde el terapeuta con el paciente. No siemp~e ~se paciente que
cional en el análisis que tiene la mayor jerarquía teórica, que es la viene "desafectivizado", o en estado esquizoide, como dice
interpretacián y que indudablemente nos va a ayudar en todo el Winnicott, está en condiciones de trabajar él para~rearví~culo, ésa
camino; pero lo que quiero destacar ahora, en términos de instru- es su patología. Entonces aquí desde la patología propia ~ay un
mentos técnicos, es que hay que poder llegar a la interpretación. llamado a la actividad del terapeuta como capaz de crear vínculo.
y cuando trabajamos con trastornos evolutivos, cuando trabaja- es decir, capaz de ofrecer modelos de ví~lculo.
mos con pensamiento confusional, hay que ir creando condiciones 2) Hay intervenciones vinculares que t~e~~n que mostr~r que se
grad~ales, escalonadas, para acceder a un psiquismo capaz de tolera ese vínculo con sus cargas y sus vicisitudes. Hay. mt~rven-
trabajar eficazmente con la interpretación como instrumento ciones vinculares que tienden a desarrollar la e~pertenCl~ del
de empleo técnico.* vínculo a cultivar el vínculo en desarrollo. Hay tntervenciones
Entonces quiero hablar aquí de cuatro tipos de instrumentos vinculares que tienen que expresar modos de participar el terapeu-
técnicos que me parecen esenciales para mover estas direccio- ta en ese vínculo y hay íntervenctones vinculares en las que el
nes de proceso que acabo de señalar. No vamos a trabajar sólo con terapeuta da respuestas en las que denota su resonar c~n ese
esos cuatro, creo que vamos a trabajar con muy diversos instru- vínculo. Las formas son muy diversas, pero creo que es posible el
mentos técnicos, pero justamente dada la amplitud de este campo agrupamiento teórico conceptual de que hay un instrumento ac-
de la clínica focalizo en cuatro instrumentos lo que quiero mostrar, tuando en estas conductas, que es el crear vínculo y el desarrollar
que son direcciones de nuestro trabajo. Este camino es un camino vínculo como un instrumento terapéutico básico, primordial del
?e instrumentos múltiples, donde no sólo la interpretación es \ proceso'. Porque si no trabajamos .enla ?irección del crear vínc~lo,
Importante y operante. las palabras que intenten producir registros y efectos de sentido,
yaya hablar de la lntervencián Vincular (un concepto que nunca van a alcanzar. .
~Ulero presentar ~ la discusión). La Discriminación como segundo Voy a citar dos intervenciones de Winnicott, ~~ una en~rev:sta
Instrumento téCnICO.La Confrontación como tercer instrumento con la señora X, de treinta años, madre de una runa de seis anos,
técnico y después hablar de la Interpretación como cuarto modo para mostrar la diversidad y el alcance de estas intervencion.~s
de trabajo técnico y versus efectos en la clínica y sus implicaciones vinculares." Se trata de una madre que no estaba cuidando a su hija
teóricas. en las consultas médicas, que debía hacer en un hospital de niños.
Intentamos abarcar con el concepto de intervención vincular El hospital le pide a psiquiatría que intervenga p~r~ ver por qué la
una serie muy amplia de intervenciones que a menudo realizamos mamá no llevaba a la hija a las consultas médicas. Entonces
los terapeutas y que no están habitualmente conceptuadas en Winnicott la va a entrevistar y de entrada le dice: "Bien, hablemos
términos de instrumento técnico, sino que parecen más ser inter- de su hija, eso quebrará el hielo". .'
venciones "de sentido común" o de una "práctica de vínculos", Me detengo en esta intervención y digo, ésta es una intervención
digamos. Pero creo que merecen ser conceptualizadas como inter- vincular donde el terapeuta está diciendo que a él le importa
venciones muy especiales, porque estas intervenciones tienen construir vínculo, él quiere "romper el hielo", no dejarlo librado
varias funciones: a ver si ella quiere quebrar ese hielo o mantenerlo en toda la
entrevista (que es otra alternativa, el paciente li~ra~o a s~ ~sron-
*Deseo mencionar el trabajo de las licenciadas María del Carmen Calvo e Inés táneo desarrollo del vínculo puede jugarla). Winnicott nuera la
Loustalet s~bre "La interpretación. Elementos del análisis del discurso", integrantes de
entrevista diciendo vamos a quebrar el hielo, con 10 cual ustedes
nuestro equipo docente, que subrayan este problema teórico y técnico, discutido en 1988
en Ateneos de la Cátedra-de Psicoterapias y del Centro de Estudios en Psicoterapias. comprenderán la infinidad de mensajes que está dando en esa ,
122 123
vínculo se juega en un nivel preverbal con cierta frecuencia.
mínima frase telegráfica Y 1 .' .
cópico de la infinidad de ~eonsoa~I~Vlto a hacer u~ análisis micros- tenemos un problema de importancia en el hecho de que el analista
I ajcs quc sc transmitcn cn vh bl
cuenta con un instrumento clásico. la interpretación. que es la
e e modo que podamos quebrar el hielo". La . a .e~os
contar su historia de asilos de hué ,', apelación al orden de la palabra. Porque en ciertos casos. este clima
. ,r ana, a andonada por la n I a
b mujer empieza
de vínculo preverbal puede ser afectado por el acto de decir, no
y una cantidad de vicisitudes terribles de la infanci d I rac ~e
de ella, y cómo en plena adolcsccn . era y a o es~encla importa qué palabra; a veces el acto de decir ataca al orden
homosexuales I . ' era c?menzó con Juegos preverbal. por la distancia que la representación de palabra induce
terrible" I tque a angustl~ban mucho. Winnicott dice "esto es frente a las representaciones de estados de cosas.
interven~i~~, p~~tqOu~Oe~~oSndolCet' Pler? yo creo. saber el tono de la Este nivel de análisis de las intervenciones vinculares. nos
. . (e a intervención no es I d I pennite tomar un material clínico y estudiar allí .cn la microscopia
opiruoncs
, , valorativas desde el .supcryó de W..ínnícott es ele tono e das
de la sesión. si se está intentando construiro no el vínculo y cuánto
expi esar resonancia empática con las valoraciones de 'la ' e
acerca de esa etapa y lo terrible q' lla vi ' paciente aporta cada uno de ellos a la tarea de construir vínculo. De paso
homosexual ue e a VIVIÓcon el juego digo que resulta delicado. en la tarea de crear vínculo, que se hable
EntO\~ces :lig'~orlc!ue,eso es lo ~ue está diciendo ella en la sesión. de ese vínculo en el mismo momento de estar construyéndolo. Las
, . iay mtcrvcncioncs vincula '1 I
resonancia empática apunta a un objetivo t róes.conéce ~a.e,xpresa líneas tradicionales kleinianas que han planteado una intervención
tanto que .,', ' e nco-t cnrco unpor- sistemática sobre la transferencia. han sido a mi juicio muy
de, m~~I()e~sp:)I~t~:~~:) ~~\~:~c:I(~~~~~:~~(~~'~':e~s~~~~~~aclio no s~ bc~~a nocivas. a veces de\ctéreas para la posibilidad deconstruirvínculo.
m1l1UClOSO. J e e un tra cIJO Porque cuando lo hago no lodigo,dado que ese decires distanciante.
Voy a citar aquí a Winnicolt en un inlorm I ". , Se hablará de este vínculo en otros momentos.
que mencioné, donde él dice así: e e e ese último libro Bien. el nivel de intervención técnica que quiero plantear ahora
es el de la discrimillaciáll. La discriminación pone palabras, intro-
duciendo un orden. un modelo de proceso secundario de pensa-
miento. Es una intervención organizadora que va al encuentro del
problema confusional propio del trastorno narcisista. Los pacien-
tes hablan de un modo condensado, confusional Ytomo una frase
al azar de una paciente mía de treinta y seis años. casada, que dice
muy rápido: "me agarré una bronca con Eduardo, el tarado se raya.
se manda de cabeza a un negocio, por ahí se funde, a. él no le
calienta". Esta es la frase de un trastorno narcisista. ella no supone
tie;~ ~~~~:e~~~sl~~~~:~~<;(~~ ~~I~í~ue esa esquizoidía del paciente que yo tengo que entender cada palabra, ella supone que estamos
estas intervenciones vin~ulares~~l~euta.¿.ue va a su encuentro. En automáticamente conectados a través de vínculo transferencial
en el texto. sino en el tono en el ~e se Ice muchas veces no está
T'
narcisístico y además ella no cree en el valor pensante de la palabra.
de texto de la sesión no :os va ~esto. d~.lllodo tal que un análisis lo usa casi como una cosa, dice algo, pero no cree que el mensaje
minuciosidad lo que se esta' p'r I ~emll1tlr comprender con tocla deba se discriminadO; entonces. al decir su comentario. no sabe la
. . oducicndo a ni 11" cantidad de planos que está vinculando Y presuponiendo. sacan-
que inv,est~gar no s610 textos sino climas. c~vn~e~/~~co.Tenemos
do consecuencias. antecedentes. trazando una serie de nexos ló-
Aquí quiero destacarIo que se está tratando de crea ' gicos. Es un modo de hablar que a veces me recuerda a Borges,
que desde el nivel ev l ' ,, re.lr, un vínculo
tica del paciente a ~ u.~l~~ en el c~al esta instalada la problema- cuando contaba que en una antigua clasificación de los animales se
.npc ara <1 ser un VII/culo de nivel preverbal. Si el
125
124
los dividía en "los que vuelan, los chanchos, los pertenecientes al el que usó en este caso Kohut. Es posible imagina~ en esa entrevista
emperador y los que acaban de romper el jarrón", entre otros. otra intervención, de manera distinta, que efec~u~ u~a confronta-
Resalta allí esa falla en las categorías lógicas. ió también Le diría al paciente, por ejemplo: SI nmáramos esta
CI n . , " " r
Entonces, la intervención discriminadora, ésa es su importancia conducta suya ahora, pensemos cómo la venamos , vamos a ve
técnica a mi juicio, es una intervención que va a introducir cómo la ve usted, cómo podría ser vista por ot~os" (l~ cual es
preguntas (cómo, cuándo, de qué modo, cuál es el nexo causal). remitimos a otros significativos, actuales en su Vida, o bien otros
Preguntas todas que son portadoras de un modelo lógico. Esta en su historia). Evitaríamos el "enfrentamiento" pero estaríamos
intervención discriminadora apunta el nivel de formalización del haciendo la confrontación. .
discurso, nivel de categorías cognitivas que es otro nivel profundo Con esta intervención estamos trabajando con las ?peraClOnes
sobre el cual trabajar. constituyentes de imagen, diría que estamos tra~aJand~ en la
Creo que esta intervención opera en el proceso terapéutico con textura de ese registro imaginario. Para aclarar dlfe~encl~s co~
un doble efecto: creo que tiene que apuntar a la desconstrucción de algunas orientaciones lacanianas, destac~ que este registro Imagi-
las formas de una lógica confusional y a la vez tiene que apuntar nario no es meramente dinámico, es decir, un lugar de fue~as y
a la construcción de formas lógicas del proceso secundario, como pasajes, sino que es un lugar de anclaje. Un~,frase de pontalIs me
instauración de lógicas altemati vas allí donde está imperando sólo pareció interesante: "El ojo crea est~cturas .' ~e modo tal que lo
una lógica confusional. imaginario no es un nivel relativo sino relatIvlzante, que. ~s otra
El tercer tipo de instrumento técnico que quiero destacarles es cosa, pero es un nivel estructurante Yen el trasto~o narcisista es
el de las confrontaciones. Voy a citar un pasaje de Kohut que , el nivel estructural, por desconstruir Ypor construir, co.n 10 cU,alla
ilustra una confrontación; dice así; jerarquía de ese uamado registro imaginario, en la termínología de
Lacan, es máxima. Creo que para comprender la densidad
El paciente, residente de psiquiatría de un hospital donde yo daba de textura de ese registro imaginario hay mucho que aprender en
un seminario de psicoterapia, llegó a sesión veinticinco minutos los estudios de Lacan, pero no todo se aprende en Lacan: Lacan en
tarde, .tiró su abrigo en la silla y saludando apenas, se dejó caer
sus seminarios proponía que los alumnos leyeran especIaI~~ente a
estrepitosamente en el diván; comenzó a hablarme en tono
Sartre y él recomendaba especialmente la.:ercera parte ,?e El S~r
desafiante, arrogante, sobre su detención por exceso de velocidad
~n la ruta y cómo habiendo provocado al oficial, éste le había y la Nada", que es donde Sarte destaca e~ se~ para otro .es decir,
Impuesto una fuerte multa. Siguió en tono airoso contando otros la mirada en cuanto estructurante de la IdenUda~., .
episodios donde tuvo m ultas y accidentes por exceso de velocidad Por último quisiera mencionar la interpretaclOn como I~~tru-
y sejactaba de ello. Ledijeque ibaa formularla interpretación más mento. Tenemos muchísimo a interpretar, en el trastorno narctsísta.
profunda de todo su análisis hasta entonces. Frente al anuncio se Tenemos todos esos psicodinamismos involucrados en esta cons-
desconcertó, era algo distinto por completo a cualquier cosa vista telación del perfil clínico y psicodinámico. Ten~mos la.s defensas
antes, entonces le dije seriamente: "Usted es un perfecto idiota".'
y las transferencias Ytodo eso tendrá que ser objeto de mterpreta-
ción. Lo que quiero señalar es que las .interpretac.lOnes ~o pueden
A mí me parece que lo que Kohut está ejemplificando acá (él le
limitarse a puntuar un discurso. Las mterpretaclOn~s tle~e~ que
llama confrontaciones y el traductor traduce mal y le llama
mostrar un complejo juego de estructuras, espacios, limites Y
enfrentamientos) es la posibilidad de confrontar al paciente con
una imagen, es decir, realizar un pasaje de indicios de conductas mecanismos involucrados. Voy a mencionar un ej~mplo de ~ac
diversas a un trabajo en el nivel de la imagen. Creo que nosotros Dougall y otro de Winnicott y vamos a ver CÓI~lO la mterpretaclón
podemos trabajar la confrontación de un modo menos drástico que tiene una extraordinaria densidad Ylo que articula son elementos

127
126
muy di,versos que no están todos solamente en 1 ' no admite, a mi juicio, reducciones lingüísticas (o "lenguajeras"
lenguaje, se dicen a través del lenguaje, e orden del

a me que abine
tz:
hecMhOaCaDsOub~all)dice a ver una interpretación que ella le ha
como propuso en su momento Lacan). Puntuar el discurso es
solamente una parte de esta intervención, parte que no abarca todo
este juego que nuestra interpretación tiene que poner de relieve.
Esa densidad de las operaciones involucradas en este trastorno se
hace evidente en ese pasaje de Shakespeare que he citado en el
"Perfil Clínico ••... (tomado de "La violación de Lucrecia"),
pasaje cuyos juegos no nos pcnnitirían la reducción al lenguaje,
como recordarán:

Tú has arrancado mi imagen de tus mejillas y hecho trizas de tal


cO~~(cj~c:~:::f~ I~~~l~~~~~~:~~if~~~ ~iun~l~~~~~!U~e~tue~ta la modo la hermosura de mi espejo, que ya no puedo ver lo que an-
tes fui.
narcisrsrn Winnicolt dice así en este infonlle: ras amo
Este breve pasaje nos compromete a discriminar analíticamente
:,Odemos 'decir que el paciente se trajo al tratamiento y hablabn de
SI como la madre y el padre pod ' " " • una serie de mecanismos, juegos de proyecciones e introyecciones,
hi los , • flan traer al hiJO y hablar sobre el de historia y actualidad de ese vínculo; de modo tal que los
~,~oy os ,~flmeros S~ISmeses no podía hablar directamente con
1~1Il0:Durante lo~_sel~ meses siguientes él no podía hablar dir e~ enfoques lacanianos, de raíz, digamos, cstructuralista, aunque
t.II~,e,llte,CO,l,lel nrno. el mismo y desde él mismo; al sexto m:~C~1 \ pueden mostramos partes interesantes en su análisis del juego del
p~,Cle~l~edijo que ahora venía el tratamiento, habló de él " , slgnificantc, no van a alcanzar para mostrar todos aquellos
pruncra vez estuvo esperanzado, y pOI entrecruzamientos dinámicos. Y podemosagrcgar otro argumen-
to: el juego del significantc se efectúa en el idioma originario, y
este pasaje, traducido al español. contiene una frescura y riqueza
en~~~~II~~~l~~I~t~~~~~t~~~:~~.~~r~~¿tl~ieOnn?S
está en juego mostr~run
. ,', '" " juego Illostraruna sene de de significaciones notable. No necesito del juego en inglés de los
oper.!clOnes: mtcmalizar, extemalizar y c/c 't . I " significantes para llegar a un nivel de producción semántica de
con saldos en im: r' " C os e e operacIOnes
comple,'o Por ' ,Igelne> cle !llodo que se est<Í mostrando algo alta significación .
. ' ejemp o se esta mostrando: Bien, vuelvo al proceso en su conjunto, que habrá de avanzar en
base a este espectro de intervenciones técnicas, noen el privilegio
a)quclaexistenciasehacegirarentomo enelej'ecle " , unilateral de alguna de ellas. Si el proceso hace su despliegue, el
de sí: ,un.! 1I11.!gen
mismo conducirá desde formas que hemos caracterizado como
b) que,esa imagen se constituye en el terreno del otro histórica- propias de un narcicismo "cerrado" hacia otras, más saludables,
~~~~:tl~Zs;s~
vuelve arugar en las interacciones del sujeto c~n otr~s que hemos denominado de narcisismo "abierto" (conceptos del
trabajo "Narcisismo y Creatividad", elaborado por el Seminario
,c) !a existencia, es registrada como los efectos de imri enes de Productividad Científica de nuestro Centro de Estudios)."
~~~~I~~~~~I~)~,el sujeto. en cuanto resultantes de las VicisitUd~Sde En esa mirada panorámica sobre el proceso psicoanalítico del
trastorno narcisista, quiero establecer una distinción fundamental.
Una operación, considerada central para el proceso terapéutico de
Toda esa complcja operatoria activada en el trastorno narcisista las neurosis, es la denominada como "atravcsamicnto del famas-

1215 )
"
129
ma", "travesía del fantasma". En el proceso, en cambio, de los
trastornos narcisista, la operación que estimo fundamental es ese
relevamiento, elaboración y recomposición de un vasto mosaico
identificatorio. Hagamos una distinción: también en el proceso
terapéutico de las neurosis está en juego el trabajo sobre las
identificaciones. Pero estas identificaciones se organizan en torno
a ejes tales como latriangulación, la represión, los polos semánticos
de falo y castración. En los trastornos narcisistas el mosaico
identificatorio es disperso, carece de aquellos ejes organizadores;
se presenta como los casilleros de un tablero de ajedrez que
hubieran sido separados, colocados en planos distintos al del
tablero, y manteniendo entre sí relaciones más laxas.
Entonces cabe comprender que en el proceso de las neurosis
prevalece el modelo del triángulo (con sus posiciones t.ípicas: DESARROLLOS EN UN ENFOQUE
posesión, exclusión, celos, rivalidad). En el proceso del trastorno MULTIDIMENSIONAL DEL DIAGNOSTICO
narcisista el modelo prevalente es otro: es recorrer lo que Borges Y DE LAS ESTRATEGIAS PSICOTERAPEUTICAS
llamó "la trama de un laberinto". En sus palabras: "un laberinto
de espejos incesant.es y ruinas circulares".

Referencias bibliográficas

1. FIORINI,Héctor, Perfil Clínico y Psicodinámico del Trastorno Narcisista,


Buenos Aires, publicación dc la Cátedra de Psicoterapias (Facultad de
Psicología de la Universidad de Buenos Aires), Tekné, 1988.
2. Mc. DOUGALL,Joyce, "Narciso en busca de una fuente", en ALegatopor una
cierta anormalidad, Barcelona, Petrel, 1982.
3. Mc. DOUGALL,Joyce, "El paciente desafectivizado", Rev. de Psicoterapia
Psicoanalitica, Uruguay, 4, septiembre 1985.
4. WINNIC01T,Donald, Holding and lnterpretation. Fragment of an Analysis,
London, The Hogarth Press and the Institute of Psychanalysis, 1986.
5. WINNICOTI,Donald, "Entrevista a la Sra. de X, 30 años ... ", en Psiquiatría
Clínica lnfantil, Buenos Aires, Honné, 1980.
6. WINNICOTI,Donald, Holding and lnterpretation, ob. cit.
7. KOHUT,Heinz, La restauración del self', Buenos Aires, Paidós, 1980.
8. FIORINI,Héctor; Lidia Datri; Raquel Dugliotti; María E. García Novarini;
Claudia Pérez Lloveras; Elma Russo; Sánchez Elía; Mónica Tesone, Las
relaciones entre Narcisismo y creatividad, Buenos Aires, Ed. Centro de
Estudios en Psicoterapias, 1988.

130
DIFERENTES NIVELES DEL DIAGNOSTICO

Nuestra tarea en psicopatología nos ha llevado lejos de la tradición


médica para la cual la pregunta ha sido por "el diagn6stico" (en
singular). Todavía la psiquiatría clásica se manejó con el supuesto
del diagnóst ico en singular("esquizofrenia", "clepresión reactiva",
ía
\ "psicopatía"). Desarrollos ulteriores clesde la psicopatolog
psicoanalítica, la psicología sociaL la psicología evolutiva, entre
otras disciplinas, nos han abierto el panorama en cuanto a la
necesidad de tormular cliferentes diagnósticos. Estos diferentes
diagnósticos reflejan el hecho de que todo individuo Ytodo grupa
humano expresan a la vez su inserción en diferentes planos de
interacciones sociales, de modo que sus procesos psíquicos res-
ponden a diferentes sistemas de leyes, mecanismos Y moclos de
transfonnaci6n. En el capítulo siguiente referiremos esta múltiple
inserci6n a través del concepto de serie al que ya hahía apelado
Frcud en su pnstulación de un modelo etiológico de series comple-
mentarias.
A nuestro criterio una aproximacitll1 clínica fecunda se apoya
en la indagación de diferentes niveles del diagnóstico. Esos
di icrcntcs niveles pueden desplegarse agrup(\I1dOIOSen diez cate-
gorías cliagnósticas que pasamos a enumerar y especificar
sumariamente:

)
Diagnóstico clínico cia tres tareas centrales (definir relaciones con el sexo, con una
vocación, y redefinir relaciones con el grupo familiar), cada etapa
C~mp~endemos .aquí las c~tegorías de la clínica psiquiátrica: vital, cada década, admite esa mirada en términos de logros a
p~ICOSISen sus distintas variedades. neurosis, psicopatías, altera- desenvolver. Gran parte de la problemática psicológica se enmarca
cienes por ¡enfennedades orgánicas, trastornos psicosomáticos en esta lectura, que es la de una intencionalidad inconsciente que
e~tre otr?s. Destacamos la importancia de tomar en cuenta est~ tiende a realizaciones de eficacia adaptativa y transformadora.'
dla~nóstl.co, ya que d~l mi~mo se .desprenden opciones estratégi-
c~s '. medl~as de conunencía ambiental, medicación, elección de
técnica psrcorerapeuuca, criterios pronósticos. Diagnóstico adaptativo y prospectivo

Intimarnente vinculado con el anterior, en este nivel del diagnós-


Diagnóstico psicopato/ógico psicodinámico tico se trata de evaluar cuál es el estado de las capacidades yoicas
del individuo, qué relación guarda el estado de esas funciones con
Es.te nivel díagnostíco ~?S remite al vasto panorama de la las exigencias que se trata de enfrentar." Ya la vez evaluar si está
~slcopatologl~ psicoanalftica en la cual se identifican diversos constituido un proyecto (consciente e inconsciente) al cual tienden
~IpOS.~?conütctos, de ansiedades, de mecanismos defensivos, de las conductas de esa pcrsona.v" La cualidad de ese proyecto, sus
Identl!lc~clOnes, que subyacen a .un determinado motivo de con- condiciones de viabilidad y las distorsiones propias de las estruc-
sult~, nivel en el cual se hace posible la comprensión dinámica de turas de idealización narcisista constituyen asimismo un nivel
un smtom~, de u~ ra~go de carácter, de una situación cont1ictiva. fundamental del diagnóstico.
CO~lpr~nslón'pslc~dm~ica que traza los caminos de la interpre-
tación sobre dman~Ismos mco~scientes, Allí donde se hace posible
desplegar una lógica del sentido inconsciente. Diagnóstico grupal

Este diagnóstico nos lleva a establecer evaluaciones de las dinámi-


Diagnóstico evolutivo cas grupalcs en las cuales el paciente está inserto con su cont1icti-
va, y a formular hipótesis de correlaciones entre dinamismos
Este parámetro. de la interpretación di agnóstica resulta para noso- grupales y dinamismos intrapsíquicos activados o potenciados en
tros, en eltr~baJo con adultos, de particular relevancia. Si partimos esa específica situación de interacciones grupales. Aquí debemos
para este enfoque de la línea de pensamiento de Erikson, encontra- incluir la conceptualización del síntoma en cuanto emergente
mos que cada etapa de vida supone tareas que le son propias, grupal, los roles inconscientes esterectipados, los fenómenos de
pr~blemas a resolver.' En las otras edades evolutivas este hecho es depositación en determinados miembros, los mitos que el grupo
saliente, y es ta~bién con relación a la vida adulta que el mismo comparte y su incidencia en la fantasmática reactivada en el
enfoque resulta fecundo. Desde este nivel de conceptualización la paciente, los mecanismos de homcostasis grupal frente a crisis, la
pregunta que nos hacemos ante el paciente, ante su sufrimiento, es inclusión del trastorno individual en las redes de sentido constitui-
¿cuál es la tarea que esta persona tiene por delante y no puede das como historia del grupo."
resolver? ¿Adónde apuntan, a veces de modo inconsciente sus
pr~cesos cognitivos y cre~tivos, a realizar qué etapa del des~rro-
lIo. A la manera en que Enkson propuso pensar para la adolescen-

l34
135
Diagnóstico psicosocial Diagnóstico de la problemática del cuerpo

Comprende reconocimientos sobre la incidencia de los sistemas de Comprende una consideración de diversos aspectos de la proble-
valor que constitu yen una ideología, en sus dimensiones conscien- mática psicológica referida al cuerpo: esquema corporal, aspectos
tes e inconscientes, sobre la problemática que afecta al paciente. de autoimagen referidos al cuerpo, ansiedades hlpocondríacas,
Comprende asimismo una consideración de las inserciones somatizaciones, significaciones otorgadas a disfuncioncs o a le-
instituciona1cs del paciente y de las formas en que esas institucio- siones orgánicas, fenómenos de conversión. Aspectos del
n?s, en cuanto portadoras de sistemas y prácticas ideológicas, narcisismo involucrados en los datos de orden corporal.": 13. 14
ejercen su poder de influencia sobre los conflictos, ansiedades, Arcas de intervención médica, de intervención psicológica y de
defensas, del consultame." . trabajo interdisciplinario.

Diagnóstico comunicaciouat Diagnóstico del vinculo terapéutico

~ol~lp~el~de identificación de los sistemas de mensajes que mane- Este nivel incluye para nuestro enfoque la consideración de la
Jan 1I1c1IVlduo,grupo, instituciones. Modalidades y distorsioncs en capacidad de alianza terapéutica (conciencia de enfernleda~, capa-
laemisión y en la recepción de los mensajes. Estilo comunicacional cidad de establecer y mantener un contrato y su tarea, capacidad de
propio de la estructura de personalidad que se diagnostica y de sus esperar cambios positivos como efecto de esa tarea, capaci-
grupos de pertenencia. Diagnóstico de códigos verbales y códigos dad de colaborar para la producción de esos cam bios)." Compren-
de acción. 10 de a la vez una identificación de fenómenos transfcrcncialcs y
contratransfcrcncialcs más notorios, y de su eventual poder de
interferir la alianza terapéutica.
Diagnóstico de potenciales de salud
Esta enumeración no agota, con certeza, todo el espectro de
Comprende una evaluación del estado de las funciones yoicas, de posibilidades di agnósticas. Ejcmplifica aquellos niveles cuya con-
sus condiciones de eficacia en los dominios adaprativos, creativos sideración conjunta nos permite desplegar una visión amplia del
~ el~borativos. El manejo de la ansiedad que permiten esas paciente, a la vez que rigurosa, respondiendo a las modalidades de
funciones, el estado de juicio de realidad y de acciones con valor comprensión que desde una psiquiatría dinámica" se han postula-
adaptat~vo, la capacidad de demora, rodeo, control de impulsos, do como necesarias para la construcción de un diagnóstico
regulaciones por ensayo-error, uti lización de experiencia, flexibi- "mult idimcnsional ".
lidad para el enfrentam iento de condiciones nuevas, usos cognitivos
de pensamiento y lenguaje, discriminación, anticipación, coordi-
naciones en ejecución, evaluación de la propia conducta, capaci-
dad de asociación, de insight, de elaboración. 11 Estas evaluaciones Referencias bibliográficas
son decisivas para la planificación estratégica de la intervención
terapéutica.
l. GOI.IlENIIEIW, Mauricio. Cursos de psiquiatrla dinámica. Servicio de
Pxicopatolog ía del Policlínico G. Aráoz Alfuro, Lanús, Provincia dc
Buenos Aires. 19M) a 1970.

137
2. ~~~I~EL, Otto, Teoríapsicoanalítica de las neurosis, Buenos Aires, Paidós EXPLORACION DE LA SITUACION COMO
3. ERIKSON,Erik, Identidad, juventud '.' B ,'. ' UNA MODALIDAD DE ABORDAJE
4. SHEEHY,Gail, Las crisis de la edadY CrtMS, uenos AIres, Paidós, 1974. EN PSICOTERAPIAS*
5. FIORINIHéctor "Las fUI1C' . (!~fulta, Barcelona, Pomaire, 1978
, ,. lones yoicas en T ' ,. . .
Buenos Aires, Nueva Visión 6a'd '198?eorta y técnicada pSlcoterapias,
6 . M A Y, R o11o, El hombre en busca
' d.. e.,' . -.
7, MASLOW,Abraham El/¡ombr te SI /'Iuls.mo,Buenos Aires, Central, 1974
1979 . ' ~ e au arrea Izado ' Barcelona , Kai,Iros, 3 a. ed .
8. PI:HON RIVIERE,Enrique, El proceso ru al D' .: , . . .,
gta social, Buenos Aires Nueva V·g·, p 1'97cl pSlcoana!tsls a la psicolo_
9. Idem. ., 1510n, 5.
10. LIflERMANDavid
, C .
,Ofrlun/caclOn . , en te s.,»: .
Aires, Eudeba, 1962. rape II/Ica pSlcoanalítica, Buenos
11.
?
F/OR/N/, Héctor '
ob .
cir .
1_, SAM/-Au, Cuerpo real cuerna in '. .
13. LOWEN,Alexander il', 1 I iagmar¡o, Buenos AIres, Paidós, 1979
1974. ' II anguage of th» body, Nueva York, Macmillan. He pensado trabajar hoy con ustedes un tema que denominé:
14. BERT/lERAT,Therese y BERNSTEJN ' "Exploración de la situación como una modalidad de abordaje en
Barcelona, Argos, 1977. ' Carol, El cuerpo tiene sus razones, psicoterapias". Voy a partirde relatarlcs un caso clmico basado en
15. FlOR/N/
. ' Héctor ,a "L re laci
acron de traba '0" T' un material con el que trabajamos hace pocos meses en un hospital
psrcotorapias, Buenos Aires N, V.'.;J ,en corra y técnica de de la Capital Federal. Ese caso fue relatado parla terapeuta que lo
16 . G OLDENlJEROMauricir, " ucva ISlOn 6a ed 198?
, b .
,o . cit. ' . " -.
\ atiende en unas páginas y con esas páginas trabajamos con el
equipo de Psicopatología del Foliclfnico Ferroviario de Buenos
Aires, en un ateneo clínico.
Mi idea es, a partir de esos datos iniciales, mostrarles cómo
podemos pensar todo caso clínico en términos de "situación",
¿Qué quiere decir situación? ¿Cómo entender una situación?
¿Qué tipo de aportes podemos articular actualmente, para pensar
una situación en términos teóricos? Y a la vez: ¿Qué derivaciones
clínicas? ¿Qué derivaciones estratégicas, qué consecuencias técni-
cas se extraen de esa comprensión teórica y clínica del paciente el!
situación?
Elijo un material clínico, como podría elegir muchos otros; les
diría, casi al azar.
En esta Jornada, donde ustedes trabajan sobre adultos y gerontes,
pienso que la noción de situación es particularmente importante
dado que, en ciertas etapas evolutivas, por ejemplo en la situación

*Confcrcncia central dictada en las VI Jornadas Platcnses de Psicologfa. La Plata 19


de septiembre de 1981.

138 )

139
. ribo mis registros de esa primera entrevista realizada e~
del paciente geronte, casi es inevitahle ahordarunaconsulta clínica TraflSC .' _ L pido a la paciente que me relate con sus
en términos de situación. enero de este ano. e
En los adultos en algunos casos, es posible hacer un cierto palabras 10 que le ocurre:
recorte, de modo que uno piense en un adulto en términos de un p. Estoy muy caída, no tengo ganas de nada. e~toymuy dep:i:;;~~~.
individuo, de aparato psíquico individual, pero no siempre es Me afectó mucho la muerte de mi hermano~ eram~s !"uy .
factible tal recorte. Cuando lo es. all í precisamente cabe preguntar- • , . d desde hace siete años y soy el umco apoyo de
Adem'\s soy VIUa, < .
se qué distorsiones introducimos con ese recorte. mi su~~;~ Ymi madre, que son viejitas y viven conrrugo. .
. , ?
Un tipo de consultas con frecuencia vistas en términos de T' . Vive con alguien mas. t de
situación, son aquellas que tradicionalmente se llaman "situacio- P:. Tengo
e un h"IJOdc 26
zo :an-osque se
. casó hace tres meses, yo ro
nes de crisis". Me interesa hablar de situaciones de crisis y he 20 que es soltero y vive en casa.
tomado un caso clínico donde tenemos varias situaciones de crisis .. Qué asó con su hcrmano? -
T. l.. p. . 'tal alegre como era yo. El ano pasado,
superpuestas, por cuanto la situación de crisis plantea numerosas P: MI hermano era muy VI , , y taba
demandas de abordaje técnico que son particulares para enfrentar e~ de~ir, en e~ 79. se I~ declaró cá~~~~I~t~~~!:~~~es ~e~~~lt¿
trahapndo, lo Iba a ;er siempre, ~~o e un esfuerzo tremendo. El
los dinamismos propios de la crisis.
la enfermcdad de el a mi mama. ~ bre a mí me hicieron una
Por otro lacio tienen un gran interés teórico porque pensar en falleció en, agosto dr:1 79. y en oc u Me re use físicamente,
profundidad situaciones de crisis permite comprender "situacio-
mastec~omJa, ten~ad~ap~~~;v~n~~t~~:~'añosin frabaj!lr, hasta que
nes", permite comprender cómo el psiquismo funciona en situa- pero Calen un poz "":" "" 'M' ré Desde octubre
ciones. se instala en situaciones. apoya permanentemente o pierde me cnviar~n a hacer PSI~o,t~r~~.I,1 aqur. es~J~ol~í a tener deseos
apoyos. en las situaciones en que está involucrado. estoy trabajando- aumente seis ~llos ddep. , t CZ' Qué podrá
P hora me siento ccaer o ra v .. t.
En ese sentido, a lo largo de mis comentarios hahlaré una yotra dseCr::ryreog~:lrren'loeq'
u:~~t~s fc'chas: las fiestas de fin dc a~o m.eponen
vez de situacián de crisis o bien de situación en general, que ..,,' . . . ama y mI sucara.
ma• ,<l 'Idemás me resulta intolerable VIvIrcon rrum . I "'SI'S
involucra a la de crisis. ." . 1 poco de artenoesc ero ,
No les tengo pacienCia.MImama tiene U1, Iit todo el día
Voy a comenzar leyéndoles el relato del material clínico que me mi sueura tiene chochera. Las dos están so I as
llegó a mí. escrito por la terapeuta, una psicóloga de 28 años que . , "" \1 ue de trabajar Yles cuente cosas. Pobres, yo
cspcründo que yo eg\le '0 a casa y no tengo ganas de nada y me
atiende a la paciente en el servicio de Psicopatología del Hospital las entiendo. pero y~ g < • d hería tcnerles más pacicncia.
Ferroviario de Capital Federal. Todo lo que les voy a dar es el siento mal. porque prenso que yo d e tar es la muerte de mi
material textual que recibí para pensar el caso. A partir de Pero sobre tod~, lo qu~ no pu~ o ~~~s' os~ <ro ésta no. Creo
hcrmano.Superelademlpadre,I<~~e p . -,pe
ese material textual trataré de darlcs algunas ideas, formas de
que 111. aun , SIse
'. Ine muriera un hIJO' yo sufnna tanto.
pensar el caso en términos a la vez de estructura intrapsíquica y de
T: ¿Su hermano era solt~ro'? .. d '1 tenía muchos
situación. p. No El cra casado. tema tres hiJOS.La esposa e e d.
"Se trata de una paciente de 51 años que me es derivada--dice c~los de la relación que había cntre.noso~ros ~~~.:~~ !c: q:~~~
la terapeuta- por la psicóloga con quien realizó psicoterapia
~~~~~~~;~~~~~:~~óp:~~~oq~~n:I~~;lte~ ~~a m5s frfa conmigo
durante seis meses. Este había sido el plazo acordado entre ambas
desde el principio, ya que la terapeuta sabía que más o menos por porque estaba celosa., _ d perar la depresión.
T: Usted me dijo que habla comcnza ,~a su <
ese tiempo dejaría de concurrir al Servicio. ¿ Desde cuándo se siente caída otra vez.
Al cabo de ese tiempo tengo la primera entrevista con la P: Desde hace tres meses más o menos.
ti

paciente. Es una mujer alta, delgada, correctamente vestida. )

141
140
T: ¿Qué pasó hace tres meses?
P: ~ueno, hace tres meses se casó mi hijo. mañanas de casa, traía dinero, hasta que una vez me dijo que iba
T. ¿No es eso lo que la tiene mal? a Mar del Plata por tres o cuatro días; yo estaba embarazada de
,P:. No. Yo lo tomé bien. No creo que sea eso no sé Ad ' siete meses. A mí me pareció muy bien, pero cuando mi familia
ultlmamente me preocupo mucho por mi enf~rmedad Pi~~:s se enteró, le dijeron a mi mamá que mejor sería que Antonio pagara
cosas raras, que me voy a volver a enferm T : o primero las deudas. Mi mamá empezó a averiguar y lo que pasaba
despierto llamando a mi hermano. aro engo pesadíüas, me era que él no trabajaba y la plata que traía era plata que pedía
prestada a mis familiares. El casi no tenía familia. Paradarme a mí,
para que yo no sufriera. Cuando fui al lugar donde él me había
1os ElacontecImIentos.
estilo ~e l.apaciente es el de relatar detallada y ordenadament
Cumple con s bai e dicho que trabajaba, el patrón me dijo que mi marido era una buena
quisiera no h~cer nada, ni ver a nadie~ i;~o~J~~e c;u: ~~ e~~~~li~~o
persona, pero muy cabeza dura. Que se empeñaba en trabajar por

~u~:ns~doh:bltuado d
los demás a qU(~ella es el eje de la familia. ~
su cuenta, yeso no andaba. El decía que era una lástima, porque
Antonio era muy trabajador. Tenía una gran habilidad manual
73 d á un cuan o su esposo vivra. El marido murió en el año como fundidor, como pintor, todo lo que fuera trabajo con las
e c. ncer de los ganglios.
manos. Cuando mi marido vio que yo sabía todo, dijo que iba a
Se siente abandonada por los hi 'os Se' " buscar trabajo. Yo le dije que claro que ibaa buscar trabajo, porque
~:~a:a~o e~ecapaz de ll~marla por teléfono ~~e~~ad~e~u:n ~~r~~~ si no, se iba de casa. Además le dije que el patrón iba a tener que
venir a casa para decirme que lo había empleado y cuánto iba a
atenci6n ~ a e/G,en:~ ~~oa~~~~~~ está de novio y no le presta cobrar de sueldo, porque yo ya no podía creerle nada. Y vino el
ab Es muy responsable en su trabajo. Es muy apreciada Se siente patrón a casa y yo estaba colorada desde los dedos de los pies hasta
la cabeza, pero es que yo ya a él no le podía tener más confianza,
gU~~ada pordla carga que significa tratar de alegrar o 'darlCs los
a su ma re y a su suegra que tienen 80 83 - Así que estuvo trabajando en esa fábrica hasta que la fábrica cerró.
Después de eso consiguió trabajo como changarín, pero no era
~~~e~~c~~n s~uando llega del ~rabaj?, o visitIndo ~~~~~ dp~~~~~~~ efectivo, así que cobraba cuando había trabajo y cuando no, no.
motivos de salu~~~a en r~presentacl6n de la madre, quien por Después ya se enfermó, empezó a andar mal y al final tuvo que
ella La' I?uede Ir y que por lo tanto le sugiere que vaya dejar de trabajar. A pesar de todo, yo a mi marido lo quería. El era
.' paciente va SIn ganas, para complacer a su mamá de uien

n~~:r~~~;:~
trabajador, no era un vago. El trabajó mucho con mi hermano. Mi
hermano siempre decía que era tan bueno trabajando que era una
~~~~~a ~~~a~l;a~~ ~rCt~~¡ir°~~o ~~~;::~~l~~~no lástima que no se ubicara, porque podría irle tan bien. Y cuando
momentos pierde la paciencia con la madre, y le contesta' al o~ mi esposo se enfermó, se amargaba tanto por no poder traer dinero
a casa, se sentía una carga para mí. Así que yo fui a la empresa
:~~~~~~~~~~~~ss: q~e~!~~!~ ~~~ustorreprocha. Vamos a ver c6n~0 donde él había estado trabajando, a pedir que hicieran como que
. u esposo y con su hermano:
me daban el sueldo de él en un sobre con membrete de la empresa
P: Me casé a los 21 año' h bí para que él lo viera y que yo les firmaba pagarés así después, más
C d ' . s, a la estado de novia desde los 16 adelante, yo les iba a ir devolviendo el dinero. El se puso tan
uan o me case nos fuimos a vivir a otro lado .
meses volvimos porque mi marido a lo tr ' pero a los nueve contento. Cuando mi hermano después me dijo que qué bien se
d " lb' , s es meses de casados habían portado en la empresa que igual le pagaban el sueldo, yo
e~J~7a~~~n d~d;~~~~~~J~nQrse ~or su cuenta, no quería tr~baja; le contesté que sí, pero qué lástima que yo había tenido que
contar con capital, ni nad~ d~e~~~~~~~t~~aé~u;dl~IOI~, pero sin arrastrarme para pedir el favor y que el gerente era un miserable
porque bien sabia él cómo mi marido, estando ya muy enfermo,
::~~~~1ao ~~~~~e ~~ ~ab~jaba. Después yo fui d:~~~b~ie~~~h;~~ igual iba a trabajar; que no podía tenerse en pie, pero igual no
. ecra que tenia un empleo, salía todas las
quería faltar. Así que lo menos que le deseé a ese hombre, es que

142
143
le dé un cáncer en la lengua, Y esa vez mi cuñada, que también Por las dudas se hizo hacer análisis de sangre y orina en dos
estaba, me dij~ que yo me había portado muy mal como esposa laboratorios u la vez. Ambos resultados dieron bien y el médico
porque lo habla degradado a mi marido, al ir a pedir eso a la que la trataba dijo que ella estaba mal por la e~fcrmedad del
empresa. Yo lo hice sólo pensando en la alegría que le daba a mi hermano. Comenzó en ese momento con un tratamiento de apoyo
esposo; pero se me quedaron grabadas las palabras de ella. A mí psiquiátrico, y fue mcdicada con un antidepresivo (Try~t~nol).
me costó mucho hacerlo. Igual que cuando vino el patrón de él a Luego, en agosto del79 murió el hermano y en octubre le hicieron
casa, pero yo no tenía otra salida. Pero todo eso ya pasó y él a mis a ella la masrectornía.
padres ~unca les fal~ó el respeto. Además como era hijo único, él La paciente no duda en afirmar que lo que no puede superar es la
se apego m ucho a mi hermano: eran como hermanos. Mi hermano muerte del hermano. "Yo sé que si me estuviera pasando todo esto,
nunc~ i.ntervin? en los problemas entre nosotros dos: decía que no pero estuviera él, él me apoyaría". Y prosigu~. "T,II vez lo que
qucna interferir: y yo Internamente se lo reprochaba. ¿Cómo, él, pasa, es que no encontré en quién apoyarme. SI yo el~contrara en
no me defendía? Pero yo sospechaba que él lo hacia a trastienda. quién apoyarmc como en él, pero mis hijos son muy Jóvenes, ¿en
Yo creo que como en mi pareja yo no tuve apoyo, vi en mi hermano quién me voy a apoyar'?".
al hombre ~ue me hubiera gustado para pareja. Ellas pasó difíciles,
pero la mujer de él nunca trabajó. Ella podía apoyarse en él. Yo Hay un último relato, no muy largo, y vamos a empezar a
hubiera querido, que mi esposo, fuera como él. trabajar sobre este material.

Una página más y termina el relato que me presentaron en el


ateneo. Síntesis det tratamiento entre enero y junio de este año (1981)
Tuvimos tres entrevistas en enero, época en la que estaba deprimi-
La paciente al ser interrogada acerca del comienzo de su decai- da. Interrumpimos en febrero por vacaciones. Tuvimos dos entre-
miento, lo relaciona con la época en que su padre estaba enfermo, vistas en marzo. época en la que estaba más animada, con la
en el año 75. El fallecimiento del esposo había OCurrido un año perspectiva de un viaje de vacaci~nes en un t~U~:1~rasi~. Durante
antes. Su relato de la enfermedad del padre es el relato del el viaje lo pasó relativamente bien. Se decidió incluirla en un
agotamiento físico de ella, al ser la que se hacia cargo de la grupo terapéutico de pacientes neuróticos de am~s sexos, d.e una
~ltuaclOn en el sanatorio, al mismo tiempo que continuaba traba- edad similar a la suya. En ese grupo estaba yo misma, trabajando
jando y atendiendo su casa. No menciona sentimientos de ninsún en coterapia con otro profesional médico. La paciente asistió a ?os
tipo: ~ólo habla del cansancio. Sin hacer reproches manifiesfos, rcunioncs.Iucgo de las cuales pidió una entrevista a solas conmigo
menciona que el hermano confiaba en que ella estaba siempre con y planteó que "'se sentía muy incómoda p~rque tenía re~ación de
el padre, y se desentendía un tanto de la situación: si bien siempre trabajo con familiares muy directos de vanos de los pacientes del
estaba dispuesto si había que trasladar al padre, por ejemplo. grupo: y sentía que no podía llegar a contar ~us probl~~nas,
En el rel,!t? de las cosas que ella siente que le afectaron, sigue una temiendo que llegaran a conocerlos en su trabajo. También le
pancreatlt~s, que la tuvo en cama casi dos meses. Luego, la incomodaba oír quejas de sus compañeros de grupo acer~.a de
~~enopaus~a, momento en que recurrió a la acupuntura que, dice, personas a las que ella conocía, y apreciaba. Com.o era el hijo de
me ayudo mucho anímicamente: me levantó". una paciente, a quien ella aprecia. "No es que quiera haccrmc la
Entre diciembre del 78 y enero del 79 se declaró la enfermedad exquisita, pero me siento muy incómoda". ~cep~a~o~ sus razones
~el hermano. y ?1.la estaba convencida de estar enferma, ya que y por el momento han proseguido entrevistas individuales sola-
este era el significado que ella atribuía al cansancio que sentía mente. Actualmente está deprimida, aunque algo menos.
entonces. Había dejado de tornar medicación porque se le había acabado y

145
144
do en términos psicodinámicos podemos pensar que se trata de una
estaban ocupados los médicos que le dan las recetas. Desde hace personalidad obsesiva tal vez con rasgos histéricos subyacentes,
dos semanas volvió a tomar la medicación; igualmente se siente
que se encuentra en estado de desorganizac.ión. . .
~csg.a~ada desd~ quese despierta. No siente deseos de ir a trabajar
Yo diría que esta mujer presenta reaccrones depreSivas ante
QUIsiera estar tirada todo el día cn la cama y sería feliz. O tal vez
me hará m~l eso, no sé; pero no quiero ir a trabajar, voy porque numerosos duelos. Algunos de ellos podríamos pensarlos como
tengo que Ir". duelos patológicos, por la intensidad de la depresi?n q~e inducen.
Esos duelos, a un nivel psicodinámico profundo, Impltca~ pr~ba-
Acá se agrega un último dato que luego voy a destacar. blemente, para esta estructura obsesiva con elementos nístencos
subyacentes, toda la problemática de la castració.n ...
La deprime el clima que hay en la oficina y en la empresa en En la historia de esta mujer hay muchos indicios de una
~ene~al. A veces se ve obligada a realizar tareas de jerarquía estructura fálica omnipotente: la que carga con todo, la que asume
inferior a la suya y esto la deprime mucho. Le afectó mucho el todo y lidera todo. Esa historia es la de un asent.amiento de esa
cambio de jefe, ya que tenía una excelente relación con éste. estructura fálica omnipotente en grupos que sucesivamente le ,han
permitido funcionar en ese rol. p~ra esa histori,a eS,tas pérd~das
La aclaración que me hizo la terapeuta en el ateneo es que lo que funcionan como sucesivas efectuaclOnes de expenenclas de castr~-
ocurre es que en la empresa ferrocarriles donde esta mujer está ción que esta mujer no puede elaborar, no pued~ tol~rar. Hast~ ~ca,
empleada, empezaron a despedir personal y en la época en que ella algunos diagnósticos psicopatológico~ en van?s mvel:s; cltm~o,
plantea esta ida del jefe, el jefe fue parte de la gente que se empezó caracterológico, psicodinámico a un nivel profundo. Dma, ~anos
a despedir en el mes de junio, y han despedido a otras empleadas \ diagnósticos vinculados con la clínica psiquiátrica y en particular
de la misma oficina. La paciente describe todo esto como un clima con una lectura psicoanalítica de esa clínica. .
muy persecutorio, muy enrarecido. A partir de estas lecturas di agnósticas individuales qUl~ro pas~r
Este es el material clínico con el que yo pude empezar a pensar a destacar de qué manera estas estructuras que e~tam?s diagnosti-
esta situación. Trataré ahora de comentarles aspectos que me cando en un individuo deben ser pensadas en situación.
importan para un abordaje clínico de la paciente en su situación. Digo deben, aunque es opcional, podemos o no pensarlas, pero
Quisiera destacar un primer nivel del diagnóstico que llamaré creo que deben ser pensadas para enriq~ecer nue~tra manera de
diagnóstico clínico. Desde un punto de vista clínico podríamos comprender cómo funcionan los confhctos profundos en. esta
mujer, y también para entender dife:entes ~aneras de ap~oxlmar-
decir que ésta es una consulta por un cuadro de depresión ante una
nos en términos terapéuticos, es decir para fundamentar diferentes
convergencia de situaciones de crisis. Es decir, la depresión es
reactiva a una acumulación de situaciones críticas que se han ido maneras de ayudarla.
La situación que vive esta mujer puede ser pensada como ~~a
encadenando. acumulación de situaciones de crisis. con una actual acumulación
La referencia a crisis acentúa el aspecto reactivo de la depresión. de elementos de crisis. Una manera de profundizar la estructura de
Los datos que tenemos muestran que cuando esta paciente puede esta situación, es pensarla como un espacio en el, que ~stán
salir en alguna medida de la situación, como le ocurrió con cierta convergiendo diferentes series ca~sale~, dife~~ntes senes de fenó-
ayuda terapéutica y en un viaje por Brasil, su depresión se alivió menos que van configurando la situación crítica.
mucho. Pudo disfrutar del viaje a Brasil. Voy a mencionar varias series y después voy a tratar de
Esto no ocurriría en cuadros depresivos con mayor peso de los
aclararlas.
componentes endógenos y si, es bastante típico, de una situación Pienso en una serie corporal, pienso en una serie familiar, fI
clínica de depresión reactiva. En un nivel caracterológico entendi-
)

147
146
pienso en una serie laboral ' ,
en una' scnc' prospectiva ,' pIenso
, en una serie,- e vo Iuliiva, pienso
, podremos entendermejorunade las series que están construyendo
social a las referencias q_'uPellenso~n una scne social (lIamándole la situación actual.
, ,a pacrcntc hac '
otros vmculos distint.os de los f e u ornrtc en cuanto a Cuando digo investigar, me refiero a que si la paciente no trae
":'~y a ir comentando brevell;~~ orman su grupo primario), espontáneamente en sus comunicaciones todos los detalles de /0
nocion de serie puede ser remitida t~I~ada una de estas series, La que hace a una institución, es decir a una empresa laboral, creo que
su postulaci6n de las "serie' l que Freud llamó series en nosotros técnicamente tendremos que ir a la búsqueda de esos
I:
Para fonlluJar conceptua~l~~~l:~ ment,arias" en ~aetiología,
~na clase homogénea de fenómenosa nocIón de senc: se trata de
datos, Porque es posible que la mujer se quede en el relato de que
"hay un clima enrarecido" y después se ocupe mucho más de
1.ldad,a cierto encadenamiento caus que respon~en a cierta lega- quejarse de la suegra, de la madre o de su vida deprimente. En este
fen()menos; por eso digo serie co ~~a¡ue es PropiO ~e esa el ase de punto destaco que utilizamos el pensamiento psicoanalúico para
de encadenamientos causale ' rp" porque remito a una serie diagnosticar elementos de la situación; pero además este abordaje
biológico también' que son d~',t9ue tienen que ver con el cuerpo supone trabajar con instrumentos técnicos que no provienen del
d 'IS mtos en cuanr I método clásicamente llamado psicoanalítico.
e otros, a los que llamo serie 1" '1' o a e ase de hechos
Cua d r ann lar En ese sentido, técnicamente, uno de los elementos que yo
n o ( Igo serie corporal me rcficm " ,
de esta m ujer con todas ' , ,a ,la hísroria del cuerpo introduciría uniéndolo y potenciándolo con todo lo que la técnica
fantasmáticas. Allí hay un' h's,uS ,resonancIas IIlconscientes y psicoanalítica estándar ha podido ir enseñando, es la idea de que
,, a Istona en la que '
pancreatltls, menopausia, día mos ' . s~ van encadenando hay que averiguar mucho, hay que preguntar mucho; yo no puedo
mamaria, intervencio'n quí ,g StlCO de cancer de glándula qucdarmc con lo que el material espontáneo del paciente me está
, , lrurglca sobre es á
Y s~gull1lJentos posteriores a esa 'in e ~ ncer, convalecencia diciendo, por más que jcrarquice, como efectivamente jerarquizo,
sene de las que podemos ene. t:rvenclón, ~Odo eso es una la importancia de la palabra espontánea del paciente. Creo que es
En la serie familiar 111e1'11CI~rar para pensar la sHuaci6n, necesario, para un abordaje clínico efectivo en psicotcrapias. tener
f '1110 a pensar co
(O Jas muertes del marido del ad mo se van encadenan- en cuenta a la vez, la importancia de la palabra espontánea del
avan: '1' f
, Z,¡«l,(elamadreydel'" .uci pa re, del heffilano " la veJez,yamuy
' paciente y la importancia de una investigación activa nuestra.
el noviazgo del hijo menor ~s~~g~a, ~I.~asanll:nto del hijo mayor, Como momentos altemantes en la tarea clínica; como momentos
un encadenamiento de suces(~ q yah~a~1no esta en casa", Allí hay destinados no a oponerse, sino a encadenarse.
nea de fcndmenos que lIam~ ¡, . u,~ ..ac~na esa otra clase homogé- Cuando pienso en la serie evolutiva, me refiero a pensar la
lo largo del tiempo' con SU<S~SIl( lIla,lllI,casde un grupo familiar a problemática de la vida de una persona que tiene ahora 51 años, y
cambí '" lovlmlelltos s . ' f' que viene pasando por etapas críticas, entendidas desde una
lOS,sus reestructuraciones, , , . us pcn Idas, sus
Cuando menciono una serie labor' I ~ psicología evolutiva. Esta mujer empezó con una serie de pérdidas
que lnvesligarqué pasa en esta cm rea.: me reflCro a que tenemos y además vivid la menopausia, sólo con el cambio fundamental
empresa que está despl'(fl'e d p sa, cuál es la realidad de esta - evolutivo que supone la menopausia, ya esta mujer tenía mucho
. '. n o gente cuál -. l' " -
mujer en esa estructura laboral "1' '. es a mserClón de esta para elaborar; pero se fueron agregando pérdidas de modo tal que
despedida? (en cuyo caso la Sl't' ~u,aóes su rol. ¿Esta mujer va a ser para ella ya la situación evolutiva menopáusica empezó a ser una
critic ) -
I ica o, por ser muy apreciada v:
. uacl n global •se vaa aa h aceraun' más situación de difícil elaboración. Y en este momento, con la
son despedidos (y en tal caso /, a ~,(~~uparel lugar de los que no acumulación de elementos críticos que está viviendo, lo que esta
c_ulposa, muy conllicliva?)' D' a poslc~ón de esta mujer ¿va a ser mujer vive es como una falta de horizonte; es como si el resultado
que SI .' nos ponemos a "" e cualqulCra de esas ' maneras creo
de todas estas pérdidas fuera esta conclusión: "aquí lo único que
. mvestlgar qué ocurre en esa e~~resa, me queda es envejecer con las viejas". De hecho, parece que la vida
148
)

149
que ella hace es actuar identificada e .
las que se siente obligada a salvar d~~ est~s dos mUjeres viejas, a
mUJer no puede imaginarse la iuven a tn.steza de la vejez. Esta nos que nos interesan en la clínica, ya que se agregan a los que
años. Por eso la serie eVolutiv~ m. tud.POSIbleen ~n cuerpo de 51 enumeré hasta ahora. Le vaya llamar la serie de los fenómenos
les propongo pensar1a como s .e renute a ~tra sene Contigua que clinicos, en términos de clinicopsiquiátricos.
En la . erte prospectlva En la serie de estos fenómenos clinicopsiquiátricos 10 que nos
sene prospectiva uno se ..
elementos que constituyen la sit 'ópregunta SI el conjunto de planteamos inicialmente es ¿qué ocurre con el nivel de angustia de
e on fiigurar un proyecto o bi SI uaci h
n de un pacIente
.
conduce a esta mujer?, ¿qué ocurre con la intensidad de la depresión", ¿qué
len a llevado . .
proyecto, a una aniquilación de a una abolICIón de tipo de intcrfercncias pueden hacer estos niveles de angustia y
P proyecto
ensando en esta serie pros ectiv . depresión con las capacidades elaborativas de esta paciente?
e~ta mujer el vacío de proyect~ Est: es ~ue notamos en el caso de Ese diagnóstico es importante porque de ese diagnóstico se va
VIvepara el futuro negro de la'· mUjer VIve para el pasado o a derivar, por ejemplo, la importancia de medicar. Si el abordaje
y de la suegra o de su propia :;Jez que va a empeorar, de la madre clínico en este caso se hizo con medicación, yo supongo que es
en el tumor que le extirparo E jez o d~ la posibilidad de recidiva porque se evaluó que la intensidad de la angustia y de la depresión
brar alguna alternativa que n. sta mujer no parece poder visíum- de esta mujer no permitían hacer un trabajo elaborativo, dado que
e . . sea proyecto
sus capacidades yoicas, con las que es necesario trabajar en toda
uando dIgo proyecto tomo en cu ".
más enfatizada por los autores exí en.ta CIerta conceptualización psicoterapia, estaban interferidas por la magnitud de estos sínto-
to voy a hablar de Sartre y la n .s,tenclaJes; dentro de un momen- mas. De modo tal que allí la medicación sedante ansiolítica o
., . OClonde pro t
nOClOnmuy importante para ,. yec o; creo que es una antideprcsiva, o la combinación de ansiolíticos y antidcpresivos,
elab ., nuestra CllOlca y q . \ van a funcionar como la entrada en la situación, a través de una
oraclOn teórica porque C ' ue rcqurcre mayor
tanto las dimensiones inconsc~~~t~ue en. el pr?yecto intervienen serie, que en un momento dado es prioritaria, prioritaria para que
(el campo de las idealizacione .1 que IOvestlg~ el psicoanálisis pueda haber otros abordajes concomitantes.
toda una serie de dinámica ~,e can~po de las Identificaciones Miradas así en conjunto, estas series que llamé corporal,
POsibilidadesquelaconciencfa:~consclentes) ~omo también la; familiar, laboral, evolutiva, prospectiva, social y clinicopsiquiátrica
hacer de su vida, desde cada t pr~se~ta al sUJeto en cuanto a que presentan una serie de cuestiones interesantes. Una de ellas es la
En la última de las serie e apa acra adelante. siguiente: el aparato psíquico circula por todas las series. Yo diría
t bié s que enumeré 10q 11 ' .
arn I n hay una ausencia pero . ' ue ame sene social. que el diagnóstico que hice de esta mujer en términos de síndrome
, J melmpOrtap 1 . '
para pensar la ausencia. ensar a precIsamente depresivo-reactivo, caracterología obsesiva con elementos histéri-
No hay referencias de esta muí . cos, dificultades para elaboraruna experiencia o muchas experien-
per~onas, salvo las de su familia /er ~ otro~ grupos, a otras cias de castración, todo eso que hace al aparato psíquico de esta
mu~er está socialmente aislada e: a. re~e~encla al trabajo. Esta mujer, circula por todas las series, gesta todas las series que
SOCI~ es otra de las series que p~ncIPIO. y ~se aislamiento menciono. Lo que ocurre es que este aparato psíquico solo no gesta
depnmente de esta mujer P con rguran la SItuación crítica ninguna de las series, sino que todas las series son a la vez
aislamiento, se nos va a pre~en~a~s:a ~?mo situación social de construidas desde su aparato psíquico y desde otras zonas de la
tamos si podemos abordar clí . ibién como cuestión pregun- realidad, que son coproductoras con ella de cada una de estas
.
V oy a IOtroducir IOlcamente por alI' 1 . .
en este listado ,. I a SItuaCIón. series. Diría, el cuerpo, en la serie corporal, el cuerpo biológico,
a~tes para no acumular más ex e ~na sepnrna serie. No 10 hice que responde más o menos a una situación de duelo patológico, tal
Situación, pero la introduzco al: cranva, en el primer esbozo de la
ora porque es una serie de fenóme-
vez a una situación de identificación con el hermano que apareció
primero con cáncer y que, desde las investigaciones que se vienen
haciendo acerca de componentes psicogenos del cáncer, posible- fI
150

151
psíquico. tenemos que pensar en instituciones. tenemos que pensar
me~te jugó como una codeterm inación. Posiblemente es necesario en un paí s en crisis. tenemos que pensar en un cuerpo biológico, De
al~un e!uel~ ,patológico para pensar (a título de hipóte~is) en una lo cont rarto. no vamos a entender la situación actual de esta mujer
p~lCog?nesls del cáncer y también es necesario pensar el cue o y no vamos a saber bien por dónde podemos ayudarla. por cuántos
biológico. cuyo~ metabolismos permiten ese tipo de PSiCOgéne;' lados podemos entrar a ayudarla en su situación,
De n~od~ q~? SI y~ digo seri? corporal. no estoy pensando sólo ~~ Este panorama de despliegue de series. esta concepción de la
términos psicológlcos o psicoanalüicos. Estoy pensando en el situación me permiten pensar en una diversidad de posibilidades
punto de encuentro ~n~re algo. q~e el psicoanálisis puede llamar de abordaje estratégico Y técnico,
con todo derecho, realidad psiquica, y otros niveles de realidad Primero. agregaré que. en una situación en crisis como ésta. la
como !a de modalidades biológicas de reproducción I I creación de un vínculo terapéutico. la creación de un vínculo capaz
As~como digo realidad del cuerpo en esta serie co;;o~a~r~r ' de ofrecer continencia. es posiblemente la creación de una nueva
laorrealidad de 1"
Ia dinámica dc un grupo enel caso de la ser' f . 'll~o,
, ' le anu lar serie en la situación.
P . que esa Iamilla no va siendo sólo el campo de las pro ' : Es decir. hasta que la paciente consulta. tenemos esas siete
del, aparar ," dc csta mui
' o pSlq~lco e esta mujer. Hay un acontecer familiar que ' yecclOnes series resonando. convergiendo entre sí y potenciando sus efectos
es el enca~1cnamlc,nto de las proyecciones de ese aparato sí uico depresores Y angustiosos; pero posiblemente la creación de una
con el cncadcnamicmo de las proyecciones de los otros rnicmb ' relación terapéutica capaz de crear un vínculo continente. es decir.
del grupo y todos los entrecruzamientos que allí se gestan en a[~~ una relación que ofrezca condiciones reales de continencia. se
que pOdem,os llamar dinámica de un grupo a lo largo del ti introduciría como una nueva serie. tal vez novedosa con respecto
D~ la m,l~ma ma,n?ra. cuando digo serie laboral. compre:~e~~~~~ , al sentido que venían asumiendo todas las demás series que
(y ~asIJ~acI,on de crisis que estamos viviendo en el país lo hace cada configuraban la situación.
vez m,IS~vlde,nt,e)qu~ te~emos que pensar. a la vez. en las maneras Esta mujer lo está diciendo todo el tiempo. dice que no aguanta
e~ ~Iuee,ste ap~lrato psiquico. todas las modalidades de conducta de más, que nadie puede cargar con ella, que ella carga con todo y que
esta mUJ?r.se insertan en un grupo de trabajo y generan una h' 't· " nadie la puede escuchar. posiblemente el primer elemento impor-
de trabajo , . pero. ae1" emas. situación laboral está diciendo' diIS /ona' tante para abordar la situación de esta mujerestá dado porcl hecho
ea de un: 't't " ,1Il,IIllI-

r d. ,1ins I ucion laboral. dinámica de la crisis social del país


e ,que m¡~n,erase entrecruzan para producir efectos muy particu~
,ares, La cnsis de este país. la crisis de esa em presa. la crisis de ese
de que esta psicóloga configura con ella una relación continente Y
esta intervención terapéutica le dice: "Acá. yo la escucho a usted,
es decir. descargue acá todo el es fuerzo tremendo de autoexigencia",
sector ~1cIa ~lllp,resa. y todas las proyecciones que esta m uj~r hace todo el esfuer/.o de progresión al que se exige una estructura
con~o ecpositacroncs de su aparato psíquico en esos conjuntos de obsesiva toda la vida que nunca ha podido aflojar en ninguna parte.
encadenamientos causalcs. Es posible que la creación de esta nueva serie vincular, la de un
De modo tal que con ese tipo de enfoque que estoy desarrollan- vínculo continente que le ofrezca a ella las posibilidades de una
do.I~: que d.est.ac~)es que. para pensar una sit uación. y digo que p~lra regresión, empiece a crear un elemento dinámicamente nuevo. de
p~l:sar en,!a p,lcle~te e~,necesario pensar en su situación también. nuevo signo en el conjunto de las series.
p,I~,1pen~.lr esa suuacion necesitamos de los íundamc t ' I 1 Es posible que la intervención medicamentosa ansiolítica Y
psicclogía l nsi , . . ' n os ee a antidepresiva pueda a su vez (en cuanto reducir a cierto nivel útil
:" ..' .~ ~.,~slcoanallsls;, necesitamos de los aportes de la clí-
llle.,1pSlqUI~II11C.I. pero además necesitamos pensar diversos órdc- la angustiao aliviaren algún grado ladepresión) aportar elementos
n~s d~,r~¡~lIdadque van sucesivamente articulando círculos con- de cambio en otra de las series, en el sentido de rescatar capacida-
centncos alrededor de esta paciente. des elaborativas que esta paciente tiene totalmente interferidas en
Tenemos que pensar en grupo. tenemos que pensar en aparato
153

152
el momento en que su depresión es máxima. Hay otras maneras de tipo de experiencias me enseña ~ucho acerca de cómo vincular un
entrar en la situación (ya, la entrada en la situación de unas u otras trabajo individual con un trabajo grup~l. . .: ,
maneras va a depender de las condiciones de que disponga el Hay otro tipo de abordaje de la situación. que consiste en
entrevistador, el servicio que atienda a esta mujer, digamos la preguntarnos si hay algún grupo social, g~?O de pares, grupo de
cultura psicológica o psiquiátrica de la región del país donde esta amigos, un grupo que realice alguna ~cuvldad en. su zona. que
persona sea atendida). Por ejemplo, otra posible entrada en la pudiera ofrecerle a esta mujer alternativas para salir de esa casa.
situación se presentaría como la entrada en ese grupo familiar. Esto se hace más claro en Centros en los que se desarrolla un
Habría entrevistas di agnósticas, entrevistas de orientación o trabajo social. A veces el asistente social, el terapeuta en otros
entrevistas terapéuticas con el grupo que forman la paciente, su casos. casi "tienen que sacar de la casa" dig~o~, buscando. a la
madre y su suegra; y podrían tener mucha riqueza; ya de entrada paciente que, regresivamente. se queda en la pasividad del encI.erro
porque no sería la paciente sola quien cargara con estas mujeres de en su casa. para llevarla a veces con pocas ganas a. un ~nme~
edad. Además habría que revisar con la óptica de la gente que contacto con un grupo alternativo, un grupo no pnmano. Es
trabaja con gerontes si se puede hacer algo poresta madre o poresta posible comprobar por esa vía cómo se ponen en ma!cha nuevos
suegra que no dependa estrictamente del esfuerzo obsesi va de esta vínculos que se introducen en la situa~ión como configurantes de
hija. Si esa intervención ocurriera, seguramente partes de la nuevas series; diría series con potenciales de sa~ud. . .
situación grupal empezarían a modificar sus dinámicas internas. Otro nivel de abordaje podría ser el aborda}e de la .sltuaclón
Otra alternativa de trabajo grupal podría presentarse en cierto desde la serie laboral. Ganaríamos mucho ~Iempo SI en esta
momento con una intervención también de tipo indagación, orien- empresa alguien con la perspectiva de un trabajo en salud mental,
tación, continencia, esclarecimiento, en el grupo que formarían , indagara las vicisitudes de esa situación donde hay gente que,es
despedida y gente que se queda, probablemente con culpas .y
esta mujer, el hijo soltero, el hijo casado, eventualmente la nuera,
perseguida. Si hubiera un trabajo institu_cional, el trabajo
eventualmente la novia del hijo soltero.
institucional ayudaría en gran medida a reconhgurar elementos de
Otro grupo del cual ella dice: "Este grupo me pone en crisis
porque estos hijos ya no me ven". Yo he trabajado con una paciente esta situación de desocupación. ,
Por último. habría, de los que se me ocurren como abordajes
de la edad de esta mujer. deprimida, que tenia dos hijos varones y posibles de la situación, un trabajo con el cuerpo de esta ~uJer:
que los hijos no querían verla nunca. Yo trabajé mucho tiempo en Prácticaniente no se ha mencionado qué pasó con la op~racló~; s~
el tratamiento individual de esta mujer tratando de ver todas las hubo extirpación parcial o total de la glándula mam.ana, ¿cu.ales
dificultades que ella podía tener para ligarse con los hijos o que era son las alteraciones del esquema corporal de esta mujer a partir de
lb que ella podía hacer para repelerlos. A cierta altura, después de esa cxti rpación? Allí se nos presenta toda la posibilidad de abordar
mucho tiempo de trabajo y como la situación con los hijos era la la situación, desde un trabajo sobre el cuerpo; cuerp~ op~ra??,
misma, le propuse reunirnos en mi consultorio. los dos hijos cuerpo que tuvo cáncer. Habría un trabajo de cOllcleIlCl,ac.:UJIl
varones. ella y yo. Hicimos en total tres entrevistas, pero el corporal posible. un trabajo de reel~boraclOn del esquema corpo-
resultado de esas tres entrevistas fue que la paciente y yo entendi- ral posible. un trabajo de expresián corporal con un cuerpo
mos mucho más, al escuchar a los hijos, cuál era la historia por la recuperado, como posible. , .
cual estos hijos no querían reunirse con la madre. El trabajo a partir En lugares donde se puede contar con profesionales que d~sarro-
de esas entrevistas fue nuevamente individual, pero condujo a que Han este tipo de tareas. que son varias (he mencionado
esta mujer pudiera tener relaciones de reencuentro, de contacto, de concienciación corporal, reelaboración del esquema corporal,
comunicación con los hijos. notablemente mcjoradas. A mí este expresión corporal) donde se pueda contar con recursos para este

155
154
con la empresa cuál podría ser una estra~egia saludable de rcinserci~n
tipo de trabajo. éste constituye un abordaje de importancia para del paciente en su vida de vendedor. ~111ese trab~Jo con l~ e~1~r~sa8
integrarse con los otros que vengo destacando, y contribuir a una yo pienso que toda la internación tracasaba. I.racasaba a las 4
rcclaboración de la situación psíquica de esta mujer. horas del alta; porque este hombre estaba saliendo de un brote
Estos distintos abordajcs requieren ser coordinados desde ese . ízofrénlco no podía resistir siete días las tensiones de tener
csquiz " dT'1 uy
vínculo de psicoterapia, bipersonal, que se ha establecido con la que vender en un mercado que sien~p~e fue muy I ICI , m
paciente. En él habrá que ir comprendiendo las situaciones diná- complejo, generador de un tremendo sti ess. ,
micas internas por las cuales ella se ve involucrada en problemá- Ese paciente evolucionó bic~, y ~re~ qu.e fue un ~unto c1a~e
ticas grupales, institucionales e individuales, de maneras tan aquel modo de abordar la dimensión l~stll~clOnal (d.el aIt.a.en este
dcscompcnsantcs, sobrcexigida, responsable de todo, tan obligada , ) A partir de este tipo de expenenclas con SItuaCIOnes ~le
a proteger a todos y no pudiendo soportar las pérdidas que. ~~~~C'iÓpo~ible teorizar que en las terapias íocalizadas, cua~qUler
desgraciadamente para ella. son muy grandes. delimitación de un trabajo íocal debía s~r hecha ~n cJ .mtenor d~
Hasta aquí, una perspectiva de los abordajcs técnicos posibles una situación. pensada como "" trabajo ~n cJ nucnor ,de una
a partir del despliegue de esta sit uación, vista en términos de series situación. Esa es un poco la tes~s de un capltul~ ~ue publiqué ~n
convergentes. Abordaré ahora otra parte de lo que quería transmi- Teoria v técnica de psicotcraptas que se llamu El co~cepto . e
tirlcs, que son los fundamentos teóricos para pensarla situación en foco". ¡¡puntando a estos desarrollos. planteando que sm pensa,r
estos términos. El tema es: pensar CIl situaciones. En primer lugar. una situación. focalizares un recorte, es h~cer~n recorte que queda
las situaciones a mí se me impusieron. se me presentaron como como en el aire. abstracto, expuesto al Idealismo de suponer un
insoslayables a lo largo de muchos años del trabajo en hospitales. aparato psíquico aislable. .' .
Trabajé doce años en cJ Servicio de Psicopatología del Policlínico \ Creo que en la obra de Freud hay dIreCCIOnes que nos ~yud~n
de Lanús, Provincia de Buenos Aires. Atendíamos allí muchísima a pensar situaciones. Para tomar un ej~n~~IOmuy claro ',~l hístonal
gente. de niveles sociales diversos y, yo diría. casi en la mayoría clínico de Frcud que se llama: Análisis fragmenta~ 10 ~e una
de los casos que tuve que ver la gente venía trayéndomc, "a gritos" . t " (el caso D/Ha) es una investigación extraordmana de la
IlIS ella . , ' . 1 di , .
situaciones. Situaciones muy complejas. de vivienda. economía. situación de un grupo, No solamente Freud ilwes~lg.a a 1!1,~n~lca
trabajo. familia. cuerpo. barrio. todo esto procesado a través de la interna de los sueños, de los síntomas y cI~la conl1~cl1va echplca de
fantasmática y de la conflictiva de cada aparato psíquico. Yo Dora. sino que además. en una índagacion rel,al1vamente breve,'
aprendí allí a pensar con los pacientes en sus situaciones y a de pocos meses, hace un re1cvamiento exhaustivo rev~lador d~ la
intervenir en situaciones. El enfoque "multidirncnsional" en psi- complejidad dinámica del grupo en el cual estaba mvolucrada
quiatría dinámica desarrollado por Mauricio Goldcnbcrg nos Dora. y de la situación que estaba atravesando .ese gru~~., De modo
condujo siempre en esa dirección. Recuerdo un paciente coincidente, en Los caminos de la terapia psicoanalítica (1918),
esquizofrénico que internamos en la sala. que era un vendedor de Frcud dice, refiriéndose al paciente:
la empresa Nestlé. Nos encontrábamos (en el momento en que
habíamos hecho un buen trabajo clínico para su externación) con Su afección depende también de múltipll:'s circ/lns/allci~s I:'xt.erio-
res . Habremos de reparar en modificar esta ~:o.Il.~t~laC/611. l~lIer-
que el día en que el paciente salía del hospital la empresa lo iba a .: '. t. d d d do? A mi JUICIO. semejante
lanzar a la calle de nuevo a vender. A vender mucho. porque si no viniendo 1:'11 ella e mo o a ccua . . .
actividad del médico analítico está más que sufiCientemente
vendía mucho. 10 despedían; entonces vimos que en ese caso la
única manera de proteger el alta. era reunirnos con la empresa; yo justificada.
cité desde el hospital al gerente de personal de Nestlé y al jefe de Con todo. creo que la obra de Freud: abrie~do esas dir~c~io~~s:
ventas. hicimos una reunión en el hospital con esta gente (que se investigó con mayor rigor y mel1culosldad las d1l1anllCaS
prestó por suerte en éste y en otros casos a concurrir) para elaborar "
157
156
ras, es decir lo que él llama realizar una síntesis transversal de un
i~tr~psíql:licas, es deci.r, las dinámicas individuales del conflicto, conjunto de estructuras. Lo que allí llama Sartre conjunto de
SI bl~n estab~ refe~das a. u~, marco objetal, a un marco de estructuras, con las cuales hay que realizar una síntesis transversal,
rel~clOnes sociales. Pichon Riviére, uno de los pioneros en nuestro es 10 que yo llamo conjunto de series. Pensar la situación, con
pais en cuanto. a p!op?nemos una lectura que sea a la vez indivi- Sartre ahora, es precisar la manera en que se totalizan conjuntos de
dual, grupal, institucional y social en su sentido más amplio estructuras, conformando por convergencia la modalidad singular
destacaba que la obra de. Freud abría esas direcciones, per~ de cada situación. En otro vasto trabajo de Sartre, que es su análisis
exploraba con may?r ~n~asls, con mayor dedicación, las direccio- de la vida y obra de Flaubert. Sartre dice: "Analizar amenaza a las
nes de un enfoqu~ individual. Creo que continuadores de la obra situaciones porque analizar es poner en palabras ciertos conjuntos.
?e Freu~, como Pichon Riviere, Bleger y otros autores que voy a Al ponerlos en palabras los descomponemos. Esos conjuntos
Ir mencionando, van mostrándonos la posibilidad de conferir
tienen que ser vistos como composiciones de fuerzas".
mayor~esan:ollo aesa~ otras dir~cciones, grupales e institucionales.
Es interesante, creo, esta reflexión, porque habría en el método
Es~as dircccíones, al I~d~gar situación, intentan pensar cómo se
que Sartre propone (tanto en el Flaubert como en Cuestiones de
artl~ulan el aparato psíquico, el grupo, la institución, las dctermi-
naciones socla~es amplias, cuáles son sus articuladores. Este es el método) la exigencia de hacer un trabajo donde siempre que
campo de,una investigación teórica en pleno desenvolvimiento. analizamos, tenemos que ser conscientes de que al analizar des-
D~spues me encontré con la obra de Sartre como un aporte muy componemos conjuntos, de modo que siempre el trabajo de
muy Importa~te par~ pensar situaciones. Hay un trabajo de Sartr~ análisis remita inexorablemente a refonnulaciones de síntesis. De
que se ll~~~ CuestlO.nes,de ~lét?d?" y que inicia el primer tomo lo contrario el trabajo analítico en cuanto descompone elementos
de la Cut/ea de la razon dialéctica. "Cuestiones de método" \de una situación, puede conducir a abstracciones, puede conducir
(!960! plantea una cosa muy ~~portante, y es que para pensar una a lo que John Bowlby, psicoanalista inglés, llamó "el riesgo de
sl~uaClón, para pens~r est~s ~Il~rentes series, el trabajo de pensa- saber cada vez más sobre un espacio cada vez más limitado". Otro
miento es, de base, interdisciplinario, Dice en el Prólogo: autor que a mí me ha importado mucho para pensar en situación,
es Gilles Dc1euze. Produjo una obra hace algunos años, El anti edipo,
L~ antropologfa seguirá siendo un confuso montón de conocí-
mJCn~os ernpmcos ... hasta que hayamos adquirido el derecho de que es una obra polémica.
Pero produjo otra obra que se llama Lógica del sentido, que
estudiara ~n ho~b~e~aun grupo de hombres, o a un objeto humano
en la t~talI~~d smtcnca de sus significados y de sus referencias a esencialmente es una investigación teórica sobre cómo se constru-
la tota~IZ~clOn en ~archa, hasta que hayamos establecido que todo ye el sentido de una situación, él lo investiga llatnándole "teoría del
c.onoclmlento parcial o aislado de~sos hombres o de sus productos acontecimiento". ¿Cómo en lo que acontece se constituye el
t1en~ que ser superado en una totalidad o se reducirá a un error por sentido para una persona? Deleuze, en este análisis del acontecer,
ser incompleto. plantea tres series de parámetros que a mí me interesan porque
hacen a este abordaje clínico, diagnóstico Yterapéutico que estoy
Lo .que Sartre enfati.za,en "Cuestiones de método" (y es un ejemplificando. Deleuze dice: en la situación, en el acontecimien-
~~t~n~l que l~s a~onseJana mucho leer y pensar) es que ninguna to, están en juego tres grandes tipos de parámetros: 1) están en
dlsclp~maen ~Ienclas human~s, so.la, puede abarcar la complejidad juego varios discursos (varios discursos, podríamos ejemplificar
y la sm.gulanda? de cada situación. La situación tiene que ser nosotros, son tanto los discursos inconscientes Y conscientes de
~onst~l?a .teó!lcamente com? una construcción de trabajo esta paciente, como los discursos inconscientes Y cons-
mte~dlsclplmano. En este trabajo, Sartre introduce muchas refe- cientes de los hijos, la madre, la suegra, los compañeros de trabajo,
rencias ~l pro.yecto, del que hablé antes, y muestra de qué manera el hermano que murió, sus entomos culturales). 2) El parárnetro
pensar situaciones es captar algo que él llama totalidades concre- "
159
158
que toma: en todo acontecer intervienen varios sujetos; no hay Un citarlcs un pasaje que tomé, casi al azar, de C?rvante.s, donde el
solo sujeto en juego; efectivamente estamos viendo cómo en el autor retrata una situación, no en la amplitud dla~nósl1ca.con que
entrecruzamiento de discursos, que es también un entrecruzamiento nosotros trabajamos, pero sí con la mirada. ~ue registra un mstante.
de intcraccíones, un entrecruzamiento de conductas, estamos en En el capítulo 20 del Quijote andan el QUijote y S.ancho de noche,
dinámicas grupales, estamos en entrelazamientos entre dinámicas perdidos en un lugar y escuchan un tremendo ruido:
grupales y dinámicas individuales. 3) Y el tipo de parámetros que Era la noche como se ha dicho, o:"cura, Y,ellos acertaron a ~ntrar
toma Dcleuze para pensar el acontecer constituye lo que él llama en unos árboles altos, cuyas hojas movidas del blando Viento,
estados de cosas. A mí me interesó muchísimo esto de estados de hacían un temeroso Y manso ruido: de manera que, la so!edad: el
cosas, como teoría, porque remite a las cosas, es decir a los niveles sitio, la oscuridad, el ruido del agua con el susu~o de I.IS h~Jas,
concretos de registro de un mundo material, un mundo que todo, causaba horror y espanto y más, ,cuand~ vieron que 111 ~os
llamamos real, que está en contrapunto con un mundo inconscien- nolpes cesaban, ni el viento dormía, 111 la manana llegaba. Aña-
te, un mundo fantasmático. En el caso de esta paciente, pensemos diélldose (J todo esto. el ignorar dónde se hallaban.
que además de toda la problemática de la estructura psfquica de Me parece que se va enfatizando todo ~lt ~empo la c~)nvergencia
esta mujer, el cuerpo es un estado de cosas, la vejez de madre y de numerosos juegos entre estados psiqurcos de Sancho y del
suegra es un estado de cosas, los despidos en el trabajo, son estados Quijote, que están muertos de espanto" y numerosos estados ~e
de cosas, la edad de los hijos y sus parejas, son estados de cosas. cosas que pemlanentemente el autor esta relevando, P?rque todas
Cuando Deleuze dice discursos y sujetos, cnfatiza sobre todo las cosas resonaban para el miedo aportando sus propios elcmen-
ciertos aspectos que llamamos intrapsíquicos y grupalcs: en los \ tos, sus propias cualidades, , .
estados de cosas está señalando otra vertiente necesaria para La última línea de desarrollo teórico qu~ v~y a mencl~nar1e~
entender cómo se crea el sentido de una situación. Una vertiente para pensar en situación, parte de Donald wmnrcou, au.to.~m?l~s,
donde, de ciertas maneras, las cosas se prestan a las proyecciones y se enlaza con trabajos actuales de dos aut,ores franceses. DI?~e~
del aparato psíquico, pero también le proponen al aparato psíquico Anzicu y René Kacs. Esta es una línea muy, irucrcsantc de.trab~J?s
ciertas proyecciones y no otras, y donde las cosas, esos estados de que a mi ju icio nos pueden a~udar mucho al ndagar en ~~? 1~n~hda(~
cosas, cuerpo, familia, trabajo, también resisten al aparato psíqui- cómo articular en las situaCIOnes de consulta y en las sltu~clO~es
co y no admiten que sea sólo fuente de proyecciones. de crisis, estados de cosas, situaciones concretas, grupos, lI1~tltU-
Por último quiero dcstacarlcs que esta idea de convergencia de ciones e individuos, El punto de partida aparece para Anzicu y
series, que producen efectos de sentido porque numerosos elemen- Kacs en las nociones que Winnicott vino desarrolla~do a,lo lar~o
tos de cierto signo se agrupan, coincide con la captación que el de su obra sobrefenómellos transicionales entr~ reahc\a~ll~tenM ~
paciente tiene cada vez que nos dice: "¡,Sabe lo que pasa? que se realidad externa al sujeto; exploración de objetos y leno~11enos
me junta todo". Ese "se me junta todo", que el paciente usa, que transicionales que para Winnicott constituyen un área conJunta.,
nosotros usamos muchas veces cuando "se nos junta todo", destaca Fíjense en los puntos de coincidencia c?n lo que ~o~ plant,eand?,
que no hay una serie de determinantes. que estamos siempre en el U/l área coniunta que Winnicott ~lama interna-externa, es, ~ecl~,
entrecruzamiento de numerosas series de determinantes para que intermedia; un espacio íntcrmcdio que se cre~_ent~e el nmo, la
todo se nos junte. Quería subrayar, antes de seguir con otras madre y objetos que ya no son ni el cuerpo del runo 111 ,el cuerpo de
referencias teóricas, que en general/a literatura es una extraordi- la madre es decir, hay un espacio vincular que se empieza a poblar
naria fuente de indicios para pensar cómo se construyen las con los p'rillleros objetos llama~los il1termedic:rh~s.que so~_COS{~S y
situaciones. Los narradores, los poetas, desde hace muchísimo que en cuanto cosas, no son 111el aparato psíquico del nm~, ~I el
tiempo piensan situaciones y nos transmiten situaciones. Quiero aparato psíquico de la madre, ni el vinculo entre ambos, Cosas que fI

161
160
se invistcn con afectos surgidos vincul .
resisten a ese investimiento H d arment~ pero que tambIén Quiero ahondar en estos desarrollos para formular, en síntesis,
~encionar, uno en particular en e~~u os trabajos qu.e les voy a la perspectiva de una generalización teórica: el concepto de
nqueza la temáticade las situaciones dal s~ puede seguir con mucha situación designa un objeto articulador. Su función de articula-
do. El trabajo es de Rcné Kacs ac: b e cnsis que e~toy desarrollan, ción se realiza por efectos de montaje, dados por yuxtaposiciones
Aires porla Revista Temas de '. a a?e se~ publIca~o en Buenos entre series cuyas resonancias ligan entre sí a diferentes tipos de
que li.mdó Pichon Rivícre El ~s~o.'ogIGSOclGlqueedltalaEscuela objetos: discursos, cuerpos, instituciones, grupos, fantasmas indi-
psiquismo individual Al . a ajo se UaI?a "El apoyo grupal del viduales. Se trata de un objeto (la situación) que se construye, se
a los conceptos de incÍivi:~as c~ns~~ue~cIas teóric~s con relación sostiene en esos conjuntos de objetos diversos, y a su vez, así
da, en un número dedicado al ~o~ ~~o·J~~tá en ~arevrsta ~enciona- constituido, es configurador del sentido otorgado a esos
g
de Grupo que se realizó en 1980 . c. ernacIOnaldePSlcoterapia agrupamicntos de objetos. A la vez que estructurado por tales
E t· en openhague conjuntos de objetos, estructura el sentido asumido por esos
n es e trabajo Kaes desarrolla t . .
Anzieu en unaconferenciadadae M em~s.~ue tal1l?l.én ha tomado conjuntos. Es así disrribuidor-selcctor- reforzadorde significacio-
en psicoanálisis" Le n . adríd: El análIsIS transicional nes a 10largo de cada una de las series, para cada uno de los objetos
. . s voy a menCIOnar dos . d
Ilustran estas propuestas sobre 1 ., .pasaJes e Kacs que que las constituyen. Este objeto teórico va siendo construido por
Anzieu, basándose en el conce a nOCIOn?e ~Ituaclón. Kacs, como los aportes de varias disciplinas: psicoanálisis, psicología social,
t
objetos transicionaIcs fornlulaPI o ~e Winnícon de área, zonas y sociología, antropología, lógica, lingüística. La situación ubica al
, o sIgUiente:
paciente, nos ubica a nosotros, en la zona de entrecruzamiento de
A lo largo del desarrollo se eonslil.' . . vastas indagaciones interdisciplinarias.
exlerna esencial para el SOSI' d' I ~Yde. U~larea potencmllllterno_ En psicología y psicoanálisis abundan hasta el presente las
. . ' '. en e 111Ividuo Esta '
pnnclpalmenleanteexperie . 'd . . arca se revela corrientes que proponen restringir la observación y la intervención
Esas rupturas crean cortes e;~~J:lSe ~up~uraen esta área de sostén. clínica a uno u otro de ciertos objetos teóricos (la fantasía incons-
relaciones con el med'o' ~ COnl!nuldaddel sí mismo y de las
I ,con vrvencras de I di . ciente individual, el grupo, la organización familiar sistémica de
prensión de esa zona de tf'lns'c' .' iun rmrcnro. La com-
diario entre el aparato ',' I.lOnalIdad, de ese espacio intcrrne- los mensajes, las conductas dramáticas, los juegos de los
significantes verbales). Esos recortes permiten efectivos
psi~ólogo y al pSicoanali~~~~~:~~/ :u~1 cont,exlOs, introduce al
SOCIal,en los elemenlos ',' P I~ crnas de la organIzación ahondamientos en sus respectivos objetos. La condición de esas
civilización. mas amp lOS de un malestar en la delimitaciones es asumir la tarea episremológica de la ida y el
El psiquismo requiere una red de '. retorno desde los recortes que establecen. Sin esa condición, se
vínculos conlinentes ru os .apoyos sol.ldanos: el cuerpo, sustenta una lógica de exclusiones. La situación, en cuanto objeto
Esos apoyos Son es~~ci;1 . , condlcllones ~?CI~IeScontenedoras. articulador, propone como alternativa opuesta, una lógica de
, did es para e eqUllIbno psr A
per I asquedesorganizan el' di id .' IqUlCO. nte inclusiones, conjunciones e integraciones.
ser en su interior un gru ' d~l.~~I uoquevlvelaexperienciade Si la enfermedad mental expresa un mundo de disociaciones, el
imagen de su unidad perdfd~1 IV; Ido busca en "" grupo real la trabajo en salud mental debe ser el esfuerzo de superar esas
desamparo dado por la qUiebr; ~e ~POY~neces~r.1Opara superar el disociacioncs. Personalmente postulo con el mayor énfasis la
trodeeseIJruporealesllec_" . aquc oseqUlllbnos.Elencuen_
.I b esano para la rcorga l' ., eficacia técnica y la pertinencia teóriea de esa lógica de integracio-
y a elaboración de la cris L '. 1izacron psíquica
l' ,ISIS. os conjuntos en lo' nes. Se me presenta como la condición de un trabajo clínico y de
as condIciones del psiquismo re' 'd·' s que se apoyan
e.sa i~entidad y esa coherenci~ dqUle~n 1 ~nllda~ ~ coherencia y un esfuerzo de contacto con el sujeto humano, que aspiren a una
flcaclOnes del adentro y del afue~~~1Ien de condICIOnesy m?di- necesaria plenitud.

162
163
Bibliografía

A 'ZIElI, Didier, "El análisis transicional en psicoanálisis", conferencia de


T
Madrid, junio de 19R l.
BLEGER,José, "Situación y campo", cap. 111. Psicología de la conducta,
Buenos Aires, Eudcba, 1963.
DEl.EIIZE,Gilles, Lágica del sentido, Barcelona, Barral, 1971.
FIORINI,Héctor , "El concepto de foco", Tcorla y técnica de psicotcrapias, cap.
6, Buenos Aires, Nueva Visión, 5a. ed., 19RO.
FREUD,Sigmund, "Análisis fragmentario de una histeria" (1905), Historiales
clínicos, Oh/'(/.I' Completas, tomo 11,B ibliotcca Nueva, Madrid, 194R.
-, "Los caminos de la terapia psicoanalítica ", 1918, Técnica psieoanalítica,
Obras Completas, tomo II, Biblioteca Nueva, Madrid, 194R.
GOLDENIlER(;,Mauricio, Cursos de psiquiatria dinámica. Servicio de AMPLIANDO LAS FRONTERAS
Psicopatología del Policlínico de Lanús, Provincia de Buenos Aires, 1966
a 1970.
DE LA INTERPRET ACION
KAr,~, Rcné, "El apoyo grupal del psiquismo individual: algunas consecuen- CON LA INDAGACION
cias teóricas con relación a los conceptos de individuo y grupo", 1980, DE DINAMISMOS INCONSCIENTES
Tenias de Psicología Social. Buenos Aires, 1981.
PICJJONRIVIERI:,Enrique, El proceso grupal . Del psicoanálisis a la psicología COGNITIVOS y CREATIVOS
social, Buenos Aires, Nueva Visión, 1975.
-, Tcoria del vinculo, Buenos Aires, Nueva Visión, 1979.
SARTRJ:, Jcan-Paul. "Cuestiones de método", 1960, Crítica de la razán dialéctica.
tomo 1. Buenos Aires, Losada, 1963.
-, El idiota di' la [amilia. Gustavo Flaubcrt desde /le.1 a IR57, tomo 1,
Buenos Aires, Tiempo Contemporáneo, 1975.
WINNJ<UTT,Donald, "Objetos transicionales y fenómenos tranxicionalcs",
1953, Realidad y jucg«. Buenos Aires, Grunica, 1972.

164

EL NIVEL INCONSCIENTE
DE LAS FUNCIONES YOICAS,
SU INTERVENCION EN EL CONFLICTO
Y EN EL PROCESO TERAPEUTICO*

Estas notas tienen el propósito de realizar una síntesis general,


introductoria. de una línea de investigaciones teóricas sobre el yo
como sistema de funciones. Esta indagación asienta en una expe-
riencia clínica. personal y grupa}, que desarrollamos sobre la base
de una orientación técnica ya expuesta en trabajos anteriores.
La conceptualización del sistema de funciones yoicas que nos
ocupará primordialmente tiene un jalón importante en El yo y el
ello, trabajo de 1923 en el que Freud formuló su segunda teoría
tópica del aparato psíquico.'
Dos cuestiones centrales de ese trabajo serán nuestro punto de
partida. Una, la constatación del carácter inconsciente de muchas
de las actividades asignadas al yo. Otra, la concerniente a localizar
enel yo los términos constituyentes del contlicto. Un pasaje de ese
artículo nos ilustra sobre los replanteos a los que llegaba Freud a
esa altura de sus investigaciones.
Freud parte de la observación clínica de los fenómenos
resistencialcs. "Entonces hacemos en el análisis esta observación:
el enfermo experimenta dificultades cuando le planteamos ciertas
tareas; sus asociaciones fallan cuando debiera aproximarse a lo
reprimido. En tal caso le decimos que se encuentra bajo el imperio
de una resistencia. pero él no sabe nada de eso y aun si por sus

*Comunicación a la Segunda Jornada Anual del Centro de Estudios en Psicoterapias


Buenos Aires. Argentina, 24 de noviembre de 1979.
"
167
sentimientos de displacer debiera colegir que actúa en él una re- oposiciones y contradicciones son las de un sistema temario: la
sist.encia: no sabe nombrarla ni indicarla. y puesto que esta conciencia, el inconsciente reprimido y las funciones yoicas
resistencia es parte de su yo y es resorte de éste, enfrentamos una configuranres de un otro sistema inconsciente.* Yo y sistema
síruacíón imprevista. Hemos hallado en el yo mismo algo que es percepción-conciencia ya no son sinónimos. Aluden a diferentes
también inconsciente, que se comporta exactamente como lo organizaciones de funciones, cuyas relaciones pasan a convertirse
reprimido, vale decir, exterioriza afectos intensos sin devenir a su en otra zona de investigación clíniea.
vez c~nsciente y s~ necesita de un trabajo particular para hacerlo 2. Las funciones yoicas consisten en conjuntos de operaciones,
cons,c~ente. He aquí la consecuencia que esto tiene para la práctica proccsamicntos, transformaciones, de Lasque el sujeto registra de
analJtlc~: caeríamos en infinitas imprecisiones y dificultades si modo consciente sólo algunos de sus resultados. Algunos de estos
prete~(j¡éramos ate?~mos a nuestro m~do de expresión habitual y, proccsamientos desempeñan funciones defensivas. Otros num~ro-
por ejemplo, redujéramos la neurosis a un conflicto entre lo sos conjuntos de operaciones se aplican, en cada etapa evolutiva,
consciente y lo inconsciente. Nuestra intelección de las constela. a cate gori zar, m anipular, aprehender, discrim inar diferentes domi-
cion~s .estructurales de la vida anímica nos obliga a sustituir esa nios de realidad. Estas operaciones, desarrolladas sobre la base de
oposición por otra: la oposición entre e] yo coherente y lo reprimi- experiencias de complejidad creciente, arrojan el saldo de un
do escindido de él". afinamiento y enriquecimiento de esquemas operatorios. Estos
. Comprue~a ~ntonces Freud que "una parte importante del yo, conjuntos de procesamientos van "construyendo" -según la
DIOS sabe cuan Importante, puede ser inconsciente" (en el sentido acertada tenninología de Piaget- diferentes zonas de lo real. 2 Las
sistemático de este término y no meramente descriptivo) "y funciones dcfcnsi vas, por su parte, intervienen en otras "construc-
seguramente ]0 es". Y este inconsciente del yo "no es latente en el \ cioncs", fantasmáticas. organizadas según vicisitudes del mundo
sentido de lo preconsciente, pues si así fuera no podría ser activado pulsional y de la estructuración narcisista. Entre las funciones de
si.~. devenir consciente, y el hacerla consciente no depararía manipulación de lo real y las funciones defensivas se trazan las
dií icultadcs tan grandes".
condiciones para una serie de interjucgos, también inconscientes:
Strachey, en sus notas introductorias, califica a este artículo superposiciones, oposiciones, escisiones.
como la última de las grandes obras teóricas de Freud. Menciona 3. Las funciones yoicas intervinientes en el manejo de lo real
un pasaje de Más allá del principio de placer que anticipaba estos constituyen un sistema destinado a crecer con las experiencias
desarroll~s: "Es ~ue si.n duda también en el interior del yo es propias de ese manejo. Crecimiento quiere decir en este caso am-
mucho lo inconsciente: Justamente lo que puede llamarse el núcleo pliación del espectro de funciones, emergencia de capacidades que
del yo; abarcamos sólo una pequeña parte de eso con el nombre de agrupan conjuntos de funciones, incremento en la eficacia para el
prcconscicntc", dominio de diferentes zonas de lo real. White" ha postulado el
Una observación atenta de los hechos clínicos nos permite interjuego entre acción eficaz y refuerzo de las capacidades nece-
avanzar desde estas constataciones de Frcud, para fomlularderiva- sarias para la eficacia de esa acción. La ley de este sistema de
ciones teóricas con consecuencias para nuestra comprensión clíni- funciones es el crecimiento en la experiencia.** Esto supone
ca y sus correlatos en instrumentaciones técnicas.
* Con la inclusión del supcryó, con sus propias estructuras inconscientes, Freud
l. Creemos que hasta estas formulacioncs Ircudianas. en la pri- postula un sistema más amplio aún de relaciones entre estructuras. Al considerar aquí las
dinámicas inconscientes del yo estamos abordando sólo un sector de esas ampliaciones.
mera teoría tópica, la oposición y contradicción es binaria: es la ** De allí la importancia que asume "la experiencia" (con todas sus dimensiones,
trazada entre la conciencia y el inconsciente reprimido. Con esta dado que incluye lo verbal, a la vez que lo desborda y ahonda sus alcances) como uno de
segunda teoría tópica del aparato psíquico las diferenciaciones, los ejes de lodo proceso terapéutico. Experiencias en el ámbito del tratamiento, experien-
cias de vida y Iodos los inrcrjucgos que se establecen entre esos dominios de aprendizajes.

168
169
tendencias al desarrollo de las propias funciones. Y necesidad de dominar". Este intento de dominio, todo el trabajo que entraña
una experimentación activa con diferentes dominios de lo real. La semejante intento, tenemos que entenderlo ligado al especial
fuerza de estas tendencias tiene suficiente presencia en la clínica principio de placer que es necesario postular para las funciones de
c~mo para que en diferentes épocas haya debido sugerirse para las realidad. Este especial principio de placer-realidad es constituyen-
mismas un carácter de pulsiones ("pulsiones yoicas", "pulsiones te importante, seguramente, de lo que clínicamente se constata
de dominio", "pulsión de saber"). La referencia al orden de lo como capacidad de alianza terapéutica. El esfuerzo de enfrentar ese
p~lsional alude, esencialmente, al hecho de que constituyen fun- particular dominio de lo real que es la realidad psíquica, todo el
ciones que son expresión directa de energías y aptitudes propias sacrificio y el dolor de un tratamiento, tendrán que entenderse
del sistema nervioso humano. De allí que Piaget ha postulado una entonces sostenidos no sólo por las referencias a efectos futuros,
y otr~ .vez la necesidad de referir una psicología de los procesos sino a las gratificaciones del presente de la tarea misma, de su
cognrtivos a sus basamentos de orden biológico. La ley de creci- realización.
miento de las funciones yoicas de realidad exige condiciones para 5. Es conveniente que nos detengamos a considerar qué signi-
su efectivo desenvolvimiento. Esta exigencia es de orden incons- fica no reducir el conflicto a la oposición entre lo consciente y lo
ciente. Depende de numerosos factores propios del individuo, de inconsciente (solamente). La propuesta de Freud es sustituir esa
sus grupos de pertenencia y de la cultura que los constituye, el que oposición por la que se establece entre el yo coherente y lo
se haga o no consciente la exigencia de ese desarrollo. Proust ha reprimido, disociado de ese yo. Tal vez la propuesta de Freud de
h.ablado de "la impaciencia de esos hombres siempre aburridos, una "susti tución" pueda ser demasiado radical. Si dejáramos de la-
siempre hastiados, que son las personas demasiado inteligentes do la oposición inconsciente-consciente perderíamos una dimen-
para la vida relativamente ociosa que llevan y en la que no se sión clínica esencial del conflicto. Pero algo decisivo queda
realizan sus facultades"," planteado: que no podemos reducir nuestra actitud clínica a la
4. La experiencia de ese crecimiento de funciones y capacidades indagación de esa oposición. Destacar que limitarse a indagar esa
entraña un principio de placer en la realidad (destinado a sustituir oposición es reductivo, tal como 10 advierte Freud, es abrirmuchos
o a entrar en oposiciones conflictivas con el principio de placer cuestionamientos sobre posiciones hasta ahora vigentes en el
propio del "ello" y de la estructura narcisista). Hendrick ha psicoanálisis, que parecen insistir en privilegiar la antítesis cons-
postulado que la experiencia de hacer y de aprender a hacer, va ciente-inconsciente. En lugar de una sustitución de esa antítesis
configurando un sistema motivacional que impulsa al dominio de por otra, creemos que la clínica nos induce a proponer una
lo real. Y que ese impulso va ligado al hecho de que ese aprendizaje inclusión de esa antítesis en la que se establece entre diferentes
de lo real constituye fuentes de placer, de un placer primordial (no organizaciones yoicas. Los conflictos intersistémicos funcionan
derivado) inherente al empleo eficaz de dispositivos funcionales incluidos en oposiciones intrasistémicas: el conflicto más abarcativo
propios del sistema nervioso.' El placer en el ejercicio de tales es el que se instala entre diferentes conjuntos de funciones del yo.
funciones entraña un régimen económico-energético especial. Tratemos de precisarlo.
Cargas y descargas de excitaciones se entrelazan y regulan en Tomemos ese concepto de "yo coherente" que emplea Freud.
función del desarrollo de tareas. El resultado de estas tareas se En términos de funciones yoicas la coherencia no es tanto un
objetiva en productos generadores de nuev.as excitaciones, resultado sino la tendencia general de funciones de síntesis,
impulsores de nuevas tareas. siempre actuantes en direcciones de construcción de conjuntos con
.Freud señala en otro pasaje de El yo y el ello: "El yo se elementos no destinados espontáneamente a constituirtotalidades.
e?nque~e con la experiencia del mundo exterior propiamente Accionan energías de unificación, trabajos de rotalización. Con-
dicho y tiene en el ello otra especie de mundo exterior al que intenta flicto intrasistérnico significa entonces oposición entre funciones

170 171
c?herentizantes y aquellas funciones que intervienen en la reprc. otro. del objeto real. que es inherente a la afirmación narcisista
sión y fo.nnan, con 10reprimi?o, sistemas disociados y disociantes, del sí mismo. Laplanche y Pontalis, siguiendo a Lagachc, desta-
antagónicas de aquellos conjuntos de funciones de síntesis. Con- can esta dimensión sadomasoquista de la relación yo narci-
n.icto entre diferentes funciones yoicas, entre diferentes organiza- sista-objeto.
cienes de estas funciones y entre sus efectos, divergentes entre sí. La toma de partido "por el objeto" señala en cambio ese trabajo
Las funciones de síntesis incluyen los datos provenientes de del yo de desciframiento, manejo y transformación de lo re~1,que
una apert.ura a la realidad. Trabajan procesando constantemente es propio del sistema de funciones cognitivas, adaptativas y
los datos de cada dominiode realidad en interjuegos con "datos" creativas que pueden llamarse de modo genérico. y en el sentido
de la realidad psíquica. Con1licto yoico intrasistémico quiere decir más amplio, "funciones yoicas de realidad".
entonces comprender que todo conflicto incluye una referencia a Lacan dirá: "Sin embargo la contradicción desaparece si nos
muy diversas zonas de la realidad. Realidad de los otros, de los liberamos de una concepción ingenua del principio de realidad y
grupos, de las instituciones, de la cultura, todos esos dominios de observamos que, si bien la realidad precede al pensamiento,
realidad intervienen, procesados por distintos sistemas de funcio- adquiere dilcrcntcs Iormas de acuerdo con las relaciones que el
nes. en la configuración de cada conflicto. Esta comprensión del sujeto mant iene con ella (Frcud no lo ignoraba. pero sus afirmacio-
conflicto amplía nuestras perspectivas sobre el funcionamiento nes al respecto no son siempre claras)".
del aparato psíquico y de la realidad psíquica. El éntasis puesto por Lacan en la Investigación del yo narcisista
6. El empleo de la noción de "yo", en singular, ha creado va a sugerir que esa estructura es la que debe entenderse por "yo":
muchos equívocos en psicologfa, En la obra de Freud, asimismo, ego de representaciones. yo especular. yo sustantivo. Un yo
"yo" ha designado diferentes sistemas, diferentes estructuras con enajenado en su constitución misma. como imagen de sí para un
dinamismos y efectos no reducriblcs a alguna instancia que pueda otro primordial. Un yo de identificaciones. fraguado sobre las
llamarse "yo" y logre abarcarlos. exigencias de un yo ideal omnipotente.
En este sentido el equívoco es muy amplío, se reitera a 10 largo La desaparición presunta. según Lacan, de aquella contradic-
de numerosos trabajos que continúan a Freud. A título de ejemplo, ción, tratada como si lucra aparente. consistiría para este autor en
Lacan en "Algunas reflexiones sobre el yo'" alude al equívoco, no entender que las funciones yoicas enumeradas en El yo y el ello
lo toma como tal sino como contradicción aparente entre distintas actúan sometidas a la organización narcisista, que no se vinculan
formulaciones de Frcud sobre el yo, cree resolver esa contradic- con la realidad sino a través de las cstructuracioncs propias del
ción proponiendo un "yo" con más derechos al uso del nombre narcisismo. Para nosotros esta postulación es parcial. Destaca un
(que sería el yo de la estructura narcisista), y a nuestro juicio, no importante sector de fenómenos clínicos. Pero también deja afuera
resuelve aquella contradicción y mantiene el equívoco. ' otra zona altamente relevante de hechos clínicos.
En ese trabajo Lacan dice que hay contradicción entre diferen- Conflicto intrasistémico quiere decir. en este aspecto, que
tes enunciados de Freud sobre el yo (lo cual es efectivamente sistemas de funciones yoicas de realidad registran las contradic-
acordablc). Señala que esa contradicci6n surgepnrejemploenque ciones y divergencias entre datos procesados desde y a través de la
el "yo" de la organización narcisista "torna partido contra el organización narcisista y. otros datos derivados de otros
objeto" y en cambio el "yo" de la segunda tcorfa topíca del aparato proccsamicntos de lo real. Registro de un contraste entre datos
psíquico "toma partido por el objeto y resiste al ello, es decir a la internos a esa organización narcisista y datos de exterioridad a la
combinación de las tendencias gobernadas únicamente por el misma. Ese registro es sólo en parte consciente. las funciones de
principio de placer". I
realidad son operaciones y proccsamicmos de esas operaciones
La toma de partido "contra" el objeto alude a esa negación del primordialmente inconscientes."

172 173
S?bre el registro de contradicciones entre lo interno y lo encamar aquellos fantasmas. Las funciones de realidad no captu-
extenor al yo narcisista, quiero citar brevemente algunas proposi- radas por aquella organización narcisista, producen constantemen-
ciones de Berenstein:"
te indicios de "que no es así", "que ser mujer no debe consistir" en
"La diferencia entre el cumplimiento de los deseos provenien- ese rol buscado por vías de una dramatización estereoripada, "que
tes del yo (destaco: este yo es aquí el narcisista) y la acción si está tan pendiente de la respuesta del otro debe haber patología"
específica proveniente de los otros está en la base de la distinción en su propia pregunta. Esta información constituye una de las
entre mundo interno y mundo externo y de una realidad interna
vertientes generadoras de inseguridad para esa personalidad histé-
diferente de una realidad externa. Ambas realidades son diferentes
rica. Tal registro será tratado de modos muy diversos y variables
sobre lo que tienen en común. Primero es la investidura narcisista
en el nivel de la conciencia. pero es porque todos esos elementos
del yo qu~ se prolonga y abarca la realidad exterior. Luego y a parti r
de autocuestionamiento están contenidos en el interior del yo
de los objetos exteriores se va definiendo y diferenciando el yo"
(cabe aclarar: ahora se habla de procesamientos del yo en cuanto funcional. que esa personalidad puede llegar a tratarse. Todo ese
sistema de funciones). "La signiticación de la realidad se relaciona procesamiento de contradicciones entre estructuración realista de
con la atención como una función del yo tendiente a detectar, en la lo real y estructuración narcisista de lo real. constituye la base
r~alidad e~terior di ferente de la real idad interior, los signos de rea- de toda alianza terapéutica (alianza compleja, confllctiva. ya que
lidad mediante el funcionamiento de los órganos sensoriales y la apoya en una constante lucha entre sistemas divergentes de orga-
comparación con los registros en la memoria de los signos de los nización de 10 real, pero clínicamente indiscutible, y esencial para
objetos". que un proceso terapéutico pueda desenvolverse como tal).
Quiero referir estas consideraciones teóricas a los hechos de 7. La conciencia aparece entonces. en estos desarrollos. como el
observación clínica, tomando como ejemplo la experiencia de tra- lugar psíquico de un trabajo. Trabajo de una capacidad del sujeto,
bajo con personalidades de estructura histérica predominante. que involucra numerosas funciones y que se aplica a descifrar los
El yo narcisista de la estructura histérica organiza la realidad datos emergentes de las operaciones yoicas inconscientes, sus
sobre la base de polarizaciones: seducción versus fracaso de la construcciones, síntesis, confrontaciones, cuestionamientos,
se~ucción. impacto estético versus evidencia de fealdad, cuerpo relati vizaciones. Lugar donde actúan efectos de desconocim iento,
fálico versus cuerpo castrado," 10 El yo funcional de esta estructura de falsa conciencia, de fascinación por las propuestas de la
presenta contradicciones internas: algunas funciones están afecta- estructura narcisista, indudablemente, pero que no se agota con
das a una organización defensiva puesta al servicio de aquellas esos efectos de desconocimiento, a través de funciones cognitivas
disociaciones (disociación, represión. negación maníaca de la nunca atrapadas de modo absoluto en esos efectos.
realidad psíquica, de la diferenciación anatómica de los sexos, de En El yo y el ello Freud conjeturó sobre la posibilidad de este
la erotización edípica, de la castración); otro conjunto de funciones tipo de vinculo entre operaciones yoicas y trabajo de la capacidad
yoicas, que opera también de modo inconsciente registra y compu- de conciencia. Se preguntó Freud: "¿Qué ocurre con aquellos otros
ta otros datos de realidad (realidad del propio funcionamiento en procesos que acaso podemos reunir --de modo tosco e inexacto--
los vínculos, de las diferencias sexuales, de la conducta de los bajo el titulo de procesos de pensamiento? ¿Son ellos los que,
otros, de las pautas de la cultura) y estos registros informan de la consumándose en algún lugar del interior del aparato como despla-
arbit~ari~dad, de. lo forzado de aquellas disociaciones y zamientos de energía anímica en el camino hacia la acción,
polarizaciones Informan de la relación precaria entre las organi- advienen a la superficie que hace nacer la conciencia. o es la
zaciones Ianrasmatícas histéricas y las condiciones de realidad que conciencia la que va hacia ellos?". Freud no pudo seguir esa
son presionadas, desde la conducta histérica, para "hacerles" indagación, tomó el camino de estudiar la cuestión de las represen-

174
175
taci?nes de palabra en el preconsciente. Sin embargo aquella I110stróque ese sujeto estaba deternlinado desde otro lugar, el de
las estructuras inconscientes. El psicoanálisis de orientación
conJetur~ de Fr~ud m~rece, para nosotros, ser retomada.'
estructuralista ha podido sintetizar ese movimiento, desde Lacan,
.To~~s_la~ref,er~nCIas.al c.uerpo como lugar de proccsamientos con la noción de "descentración del sujeto". Pero siguiendo las
yOI~ossenalan la dimensión inconsciente de esos procesamiento
líneas de la primera teoría tópica freudiana, esa orientación ha
hacia los cuales debe dirigirse el trabajo de conciencia "El s,
sobre todo una esencia-cuerpo". 11 '. yo es propuesto en cierto sentido "correr el centro": a través del
1110vimientotrazado en una fÓffimla: ubicar como sujeto del deseo
~apacidades, regula~iones, adquisiciones, aparecen operando al inconsciente dinámico. De esa fórmula se ha creído posible
en e c,uerpo y en relaciones muy variables con "la conciencia" derivar después una proposición más amplia: entender a ese
Borg~s: en un ensayo que llamó "La postulación de la realidad'; inconsciente como el verdadero lugar "del" sujeto.
cnfatizó el hecho: La noción de "sujeto" empleada en esas fOffimlaciones supone
1" ,."E~ lo co~poral, la inconsciencia es una necesidad de los actos una especial organización de procesos psíquicos. una relación de
ISICOS.Nuestro cuerpo sabe articular este difícil párrafo sabe esa organización con un tipo particular de objeto. y una modalidad
tratar, con escaleras, con nudos, con pasos a nivel con ci d d ' específica de relación sujeto-objeto instalada en esa organización
con n~s c.orrentosos, con perros, sabe atravesar u~a call~~i~ ~"~ de procesos. En tal sentido pensar el inconsciente reprimido C01110
nos aniquile el tránsito, sabe engendrar, sabe respirar sabe don;' sujeto de deseo (en el sentido de deseo sexual) constituye una
sabe tal ,'!,e,zn~atar: nuestr~ cuerpo, no nuestra inteli'gencia".12 m, fonnulación rigurosa. ampliamente fundada desde los Tres ensa-
Ellll.\s ,.tntlgUOpensamiento oriental ha sabido mostramos yos de Freud .
" rcgulacir
las guiacroncs. Ias coordi
as coordinaciones, '
los aprendizajes, transcurren sque La segunda teoría tópica freudiana. que nos ocupa desde el
,
•mtc todo como procesos corporales ,. La co nClencla
' . tiene. que comienzo de este artículo. no admite en cambio con tanta claridad
~lprel~:I~der,esos p~o.cesos internos, aprender ante todo a no aquella derivación por la cual se supone que el lugar del sujeto de
intcrlcrirlos. a descifrar sus movimientos profundos Ese b 11 deseo sea equivalente al nuevo lugar "del sujeto". Podemos
relato sustentar este cuestionamiento si c0111prendemos que lo que se
.' : c. es'Z el/ en e I arte del tiro COIlarco nos muestra
(IU ' . , quee elo
abre con la última tópica frcudiana es descubrir en el sistema de
:lpren~llzaJedel arquero es el de la espera, el de la cjcrcitación física funciones yoicas un otro sujeto illcollscicnte. "Sujeto" en cuanto
ll1can,sa~)le,~I .de la .con~entración, hasta lograr que todas las cabe aplicarle un criterio similar al que opera en la fórmula que
re~~~,I~lo.~es,smcroruzacroncs, síntesis, produzcan desde el cuer- localiza al sujeto del deseo en el inconsciente reprimido: un
po su disparo, no el de lamente intencional corriente DElc . sistema de funciones que constituye su objeto. un objeto peculiar
es., par
.' ~ ~stc~ .~~nsanlIento
ncnsarni milenario, el lugar fundamental . deuerpo
una con el cual se instaura una especílica dinámica de vínculos
producción: I,ISmanos no son manos, no tienen existencia hasta ("construcción de lo real". transfoffilaciones adaptativas Y crea-
que
r: lesarrancan
. flores y las ofrecen .'al Buda" y la's piernas
. pasan" a ser tivas). Todos los puntos tratados previamente muestran la
,1 es cuando en uso consiguen trabajar, escalar vadear El "cuerpo espcci ñcídad de este sistema de funciones Ysu definida inlluencia
en uso'":
.. .
,lp~le~e . .
como la actividad cognitiva " fundamental
. l-l A
en la estructuraci6n del aparato psíquico. Esa especificidad es la
partir de allí viene el trabajo de "darse cuenta" . que llevó a postularlo como "instancia" diferenciada.
La peculiaridad de la relación sujeto-objeto de las funciones
" 8. lEI dequívoco. que antes destacamos, lig~do al empleo en
smgu.' ar e h 110CIÓl1 de " yo " ,se. crea asmnsrno
. . yoicas puede rccortarsc con nitidez sobre el diseño teórico pro-
por l d 1
noción d .... " . . e uso e a puesto por Frcud para comprender al objeto de la pulsi6n sexual."
, .' e sujeto en.sm~ular. La psicología tradicional ex lora- Este es un objeto a reencontrar. se constituye por fijación. y en su
ba el sUJet.oc~ela concrcncra, ligado al sujeto de la teoría cart~siana carácter de imago, de objeto arcaico, está destinado a transferen-
del conocimiento. La revolución de los descubrimientos frcudíanos

177
176
cias inconscientes sobre objetos actuales. Tales transferencias se Esta perspectiva permite comprender t~óricamente lo~ ~enó-
rigen por mecanismos de asimilación (del presente al pasado). menos sublimatorios en términos más ampltos que los tradICl~na-
Emplean el proceso primario de simbolización, con sus les. Se han señalado reiteradamente las dificultades para. expltc~r
condensaciones y desplazamientos. los caminos por los cuales podría la pulsión sexual cambiar de fin
El objeto del sistema de funciones yoicas de realidad es un y de objeto. '.
objeto a descubrir, a discriminar en lo que tiene de específico. Tal Creemos posible pensar que el proceso es otro,. consistente. en
objeto se construye sobre la base de esos particulares interjuegos cambios en las relaciones de fuerzas. entre el ~I~tema ~ulsIón
que Piaget conceptualizó como asimilación y acomodación. El sexual-objeto sexual y el sistema tuncíones cognitivas-objeto de
proceso secundario de pensamiento interviene con el fin de cons- estas funciones. . .,
tituir ese objeto en cuanto diferenciable de otros, análogos y Lo que se observa como cambio de objeto en .la subltmaclO~ es
disímiles. El objeto de tal modo construido, la tarea de su construc- un cambio en las relaciones de fuerzas entre dos SIstemas. ~ambIan
ción y el conjunto de relaciones que con él se establecen tienen un las dominancias Y el sistema sujeto-obj~to, co~p.r~ndldo .en ~l
efecto altamente peculiar: desarrollan las funciones comprometi- desarrollo de las capacidades yoicas, adquiere posIbIl~dades mé.dI-
das en esas tareas. En la re/ación con su objeto se crean y crecen tas de ejercer prevalencias sobre el s~stema arcaIco. (pulsión
funciones, capacidades, que construyen al sujeto. Esta compren- sexual-objeto de esa pulsión). PrevalencIas no absolutas, pero de
sión dinámica de ese especial interjuego sujeto-objeto, nos permite
una frecuencia creciente. . .
captar el sentido profundo de un antiguo saber, que en el Quijote En sus términos más amplios nuestra perspectiva es la siguren-
se condensa en dos líneas: " ...que cada uno es hijo de sus obras". te: con la primera teoría tópica, al descubrir el co~e entre con.sclen-
Desde esta perspectiva, las fórmulas tradicionales, "hacer
te e inconsciente, Freud estableció el descentramlen~o del sUJet? de
consciente lo inconsciente" y "donde estaba el ello, debo devenir
la conciencia, y localizó en el inconsciente dinám~co otr~ sujeto
yo", adquieren un claro significado dinámico: aluden al cambio
que habrán de sufrir las relaciones entre diferentes sistemas de Con la segunda teoría tópica,la postulaci?~ ~e un slsten~a I.~c~ns-
vínculos sujeto-objeto. El inconsciente reprimido, la pulsión sexual ciente de funciones yoicas, abre la posibilidad de ~oca~l,"ar un
y su objeto arcaico, el yo narcisista y sus construcciones imagina- tercer sujeto que descentra tanto a~sujet? ~e la conciencia c?mo
rias, los sistemas de identificaciones contenidos en aquellas es- al sujeto del deseo (inconsciente r~pnmIdo ~e la sexualidad
tructuras, se transforman en el proceso terapéutico, en otros tantos infantil). * En 1ugar de limi tamos a delinear un suJ~to descentrado,
objetos de aquel sistema de funciones yoicas, y en cuanto tales son nos encontramos con múltiples sujetos, con un slste~la pl.ural de
objeto de indagaciones, registros, clasificaciones, confrontacio- estructuras dinámicas. Esdescubrirqueoperaencadal~dIvlduoun
nes, diferenciaciones. Este extraordinario conjunto de operaciones sistema de tensiones entre diferentes sujetos, que disputan sus
.movilizadas en el proceso terapéutico van dando emergencia a ese diferentes modos de organizar la realidad psíquica.. .
otro sujeto -yo funcional- que habrá de crecer hasta debilitar las 9. Hablamos de sujetos coexistentes (sistemas sUJeto-~bJeto-
dominancias hasta entonces ejercidas por aquellas estructuras del vínculos diferentes) en luchas constantes y con fuerzas vanab~es.
inconsciente dinámico. Este crecimiento en amplitud, riqueza y Sus oposiciones toman la forma de escisión a veces, de transacción
eficacia de las operaciones del yo funcional viene a modificar en ciertos casos y de agudo conflicto en otros, como competencia
profundamente las relaciones de fuerzas previamente vigentes en viva acerca del modo de organizar los signos de cada SItuación.
el aparato psíquico.*

* Estamos explorando aquí un tipo de relación entre estos sistemas: su oposición . "d t d "por
dinámica. Otras relaciones (convergencias, potenciaciones) tendrán que ser también
* Destaco aquí un momento; en otros, este tercer SUjeto es escen ra o
consideradas. aquéllos.

179
178
de dcsci trar los signos de las relaciones di ferenciales que, distintos
La literatura es pródiga en el testim . . .. sujetos en la evolución del individuo, van estableciendo con
sujetos inconscientes, y sobre s~s v~~,I~tObre est.os dIferentes
conciencia. sus vana _es relaciones con la diferentes universos de objetos (naturales, sociales, amorosos,
estéticos, intelectuales). En esa búsqueda, Proust va reconociendo
,~arc~l Prou~t detecta estos fenómenos: a esos sujetos y vislumbrando los universos contrastantes que
Habla en nu un personaje á
pero era un personaje interrn it~~~~m s o ,menos, sabía ~l1irarbien, configuran y en los que se constituyen.
se manifestaba alguna esencia . ,~ue sólO,tomab~ VIda cuando Borges, otro notable testigo de esas coexistencias Y luchas entre
constituía su alimento y su del~~ne~l, com~n a vanas c~)sas,que distintos sujetos, dice en "Borgcs y yo":
y escuchaba pero sólo e . I e. n,tonces el personaje miraba .•...al otro, a Borges, es a quien le ocurren las cosas ... yo vivo,
. ' n cierta profundid: d 1 yo me dejo vivir, para que Borges pueda tramar su literatura Y esa
Interesaba no era lo ' .. a ... pues o que me
en cuanto revelaba s;~~r~~~:;~n.d~Clr, ,s~n~)l,amanera de dccirlo, literatura me justifica ... yo he de quedar en Borges, no en mí (si es
un objeto que fue siemp;e la fi~~I~~10~as~Idl~ulas; o n~ás ?ien era que alguien soy) ... no sé cuál de los dos escribe esta página".
porque me daba un goce específico ~~ principal d~ mi búsqueda y vuelve, en su "Poema de los dones", con la pregunta:
se r" y, ' punto comun a uno y otro "¿Cuál de los dos escribe este poema,
de un yo plural y de una sola sombra?"."
"iQué caudal de observaciones . . Paul Ricoeur 2) ha subrayado que el Edipo de Sófoc1es contiene
menester ir recogiendo con .' .' pacientes, p~ro. no serenas, es
ricncia irr ,. respecto a los movmucntos, en a a- dos series de hechos de similar envergadura. Una, la que marca el
por segur~~~~I~~~~I~~~~~~lUndo~desconocidos. antes de ~ar tumplimiento de lo preclestin,ldo: parricidio, incesto, castigos por
que nuestras previ~iones no se~~;~~~~;p~~ I~~e.ra,s coincid~ncias y la transgresión de la ley. Otra, la que muestra la insistente decisión
leyes ciertas adquiridas a costa de ex au. <I(:.IS, antes de loml.ular de Edipo de buscar la verdad hasta sus últimas consecuencias.
esa astronomía de la pasión!"." pcncncias crueles que ngen Si leemos con atención el texto de la tragedia, podemos
coincidir con Ricocur: es posible asistir a un entrelazamiento
.....debía ser muy encantador sin cmbar . conmovedor de esos dos procesos. Ese desarrollo nos most rarí a en
que a éI.l ibremente aun en ac uell;l~m ' "go, ~~te ~ec~e~do, ya
asomo de necesidad ni de ;n .:. cnto, Sl~prisa, sin Iatiga, sin Edipo la coexistenda de dos sujetos; uno ligado al principio de
placer primitivo, al desconocimiento, a la repetición; otro lanzado
amor; luego, a medida que esa:~~t~t(~~la?~lI1siempre mis ideas de
te, tomó de ellas mayor f .' as o fijaron más definitivamen- al descubrimiento, a la investigación de una realidad. El devenir de
bien pronto ~~ s~pe y~erzal,pe~osetomómáSVagOenSímismo; esa historia muestra las tensiones, los cambios en las relaciones
, ..t vo vel a cncontrarlo " de fuerzas entre esos sujetos llamados Edipo.
deformaba porcomplcto e .. . _ ,., Y Sll1 duda lo
veía a la señora de G n nus cnsucnos, puesto que cada vez que
. , ucrmantcs co b: b . 10. A modo de conclusión:
diferente siempre por lo de ".' mpro a a una divergencia, Se le preguntaba a Sartre en una entrevista cómo entendía él la
que veía".)~' mas, entre lo que había imaginado y lo
"disolución del sujeto" postulada por los estudios estructuralistas.
Proust nos muestra en su obra un .' . . Sartre respondió: "la crítica estructuralista es interesante, pero lo
diferentes sujetos que lo habit '., sujeto investigador de los que deja sin aclarar es qué hace el sujeto con el conjunto de
indicios de un vivir atent' I an,q~eslguepasoapasolosinnnitos
)1) atento y sensible. estructuras que 10 detenninan".
Deleuze ha entendido la obra d P' . Es-a respuesta fue para nosotros incitante Y a la vez equívoca:
de los movimientos y matices '. e . r¡oustcomo la objctivación hablaba todavía de un sujeto, en singular.
. propios (e un largo aprendizaje: el

\8\
IRO
8 BERENSTEIN,Isidoro, "Notas sobre la realidad, la .verdad ~ el tratamiento
Nuestros desarrollos permiten, tal vez, formular de un modo '. Iíti o" Asee Psicoanalítica de Buenos Aires, noviembre de 1978.
distinto el sentido esbozado en aquella respuesta: lo que el psicoana I IC, ., .' N 4 1976
9 MALDAVSKYDavid, "Argumentos", Buenos Alre~,/ma?~ . o., .,'.
estructuralismo deja sin aclarar es qué hace el sujeto (sujeto de las . 'D 'd Y MALDAVSKY David ps,coanal,s,s Y semtottca
10. LIBERMAN, aVI . : '
funciones yoicas cognitivas, adaptativas y creativas) con las es- psicoanalítica, Buenos .Aires, Paldos, 1975 .
tructuras que lo determinan (sujeto del deseo, organización del yo 11 FREUD Sigmund, ob. CI\. , 8 B
narcisista). 12: BORGE~,Jorge Luis, Discusión (1932), Obras Completas, pago 21 , uenos
¿Qué hace? Luchar, enfrentarse con sus propias limitaciones y Aires, Emecé, 1974. B ' A'
13. HERRlGEL,Eugen, Zen en el arte del tiro con arco (1968), uenos ires,
compromisos enajenantes, trabajar en discernir falsa conciencia
y conciencia de realidad. Si se dan ciertas condiciones constitucio- 14.~~~~;'76~isetz, La doctrina zen del inconsciente (1949), Buenos Aires,
nales y contextuales apropiadas, crecer en el desenvolvimiento de Kier 1974. 1 M d id
esa lucha; y dar lugar, en ese proceso, a otro principio de placer, a 15. FRE~, Sigmund, "Una teoría sexual" (1905), Obras Comp etas, a n ,
cambio del cual se haga posible aceptar también, en alguna Biblioteca Nueva, 1948. . '. 38 39
16 . PROU.,'STMarccl En busca del. tiempo perdido, tomo 7, pags. - .
medida, el dolor de la realidad 17. _, En busca del tiempo perdido, tomo -,
? "A la s b de las muchachas
a sorn ra .
en flor", pág. 463. ." '
Estas proposiciones teóricas fundamentan y derivan a su vez de 18. _, En busca del tiempo perdido, tomo 3, "El mundo de Guermantes ,pag.
sistematizaciones técnicas expuestas en trabajos previos.22•23,24,25
Crean el espacio, en esta etapa, para nuevas indagaciones clínicas, 19.6~~LEUZE,Gilles, Proust y los signos (1970), Barcelona, ~na~r~I~~'8~~i~'
20. BORGEs,Jorge Luis, El hacedor (1960) .•Obras.Com!:letas, pa?s. .' :
que serán objeto de nuestras próximas búsquedas, 21. RICOUER,Paul, "El consciente y el II1conS~lente , en El IfIconSClent(.
(colo uio de Bonneval, coordinado por Henri E~), 1966. .' ,
?2 FIOR~I Héctor Teoría y técnica de psicoterap/Qs (19~3), Buenos :Ire~,
- 'N ueva y' ISlOn,
." 4'a ..,ed 1979 . Rio de Janeiro, Ed. Francisco Alves, a. e .

Referencias bibliográficas en portugués, 1979.


23. _, "Psicoterapia
. . " d /.r
familiar en situaciones de cnsis .Rev, e njancta y
. ,

Adolescencia, Rio de Janeiro, vol. 1 ,1975. . ." . 1


24 _ "Una orientación en el campo de las pSlcoterapta~ , Actuaiidac
1. FREUD,Sigmund, El yo y el ello (1923), trad. del original alemán, comen- .p .' 1" No 14 1976 Buenos Aires yRevistade/nfancwyAdolescen-
SICOoglca .'.' '
tarios y. notas de James STRACHEY,Buenos Aires, Amorrortu, tomo XIX, cia ? 1976 Rio de Janeiro, I
1979. 25. _: ::-Repetición y diferencias propuesta~ del paciente y del te.ra:euta e~ ~ .
2. PIAGET,Jean, La construcción de lo real en el niño (1937), Buenos Aires, desarrollo del proceso", en F!ORINI,Hecto~ y PEYRU, G~a~~ela, A~O~~~
Proteo, 1965. teórico-clínicos en psicoterap/Qs, Buenos Aires, Nueva ylslOn, ~97 .
3. WHITE,Robert, El yo y la realidad en la tcortapsicoanalitíca, Buenos Aires, de Janeiro, Ed. Francisco Alves, Desenvolvimentos en psicotcraptas. la. ed.
Paidós, 1973. en portugués, 1978.
4. PROUST,Marccl, En busca del tiempo perdido (1919-1927), tomo 7, "El
tiempo recobrado", Madrid, Alianza Editorial, 1970, pág. 16.
5. HENDRICK,Ives, "Work and the pleasure principie", The Psychoanal. Quart,
XII, 1943,311-329.
6. LAcAN,Jacques, "Some reflections on the ego",/nt. 1. Psycho-Anal., 1953,
11-17 (trad. al español de E. Masullo, serie Fichas cuademos Sigmund
Freud, tomo 1, Buenos Aires).
7. PIAGET,Jean, Estudios de psicología genética (1972), Buenos Aires, Emecé,
cap. 2: "Inconsciente afectivo e inconsciente cognoscirivo", 1973.

1~3
182
CREA TIVIDAD: DINAMISMOS FUNDANTES
DE UN SISTEMA EN EL PSIQUISMO HUMANO

Introducción*

En nuestra formación clínica, ya sea psicológica o psicoanalítica,


hay un énfasis preponderante otorgado a la perspectiva
psicopatológica, es decir, un centramiento en lo patológico del
psiquismo. Ese énfasis se expresa como un gran desarrollo teórico,
con gran despliegue temático, alrededor de cuestiones tales como
ansiedades, defensas, conflictos patológicos, regresiones, fijaciones
infantiles, trastornos propios de las estructuraciones del narcisismo.
Ese énfasis en la patología psíquica, es decir, en las estructuras
infantiles y regresivas, de alguna manera lleva consigo un relativo
descuido en la mirada clínica de un vasto conjunto de fuerzas que
se manifiestan como tendencias o como proyectos. Como tenden-
cias a la salud, al crecimiento, al desarrollo, al cambio, a produc-
ciones, a la adquisición de capacidades y de nuevos elementos de
identidad. Tendencias tanto individuales como grupales.
Este conjunto de fuerzas aparece de alguna manera relegado, ya
sea por silencios temáticos, ya porque son tratadas como obvias.

* Una versión preliminar de esto s estudios ha sido presentada en el Ateneo Clínico del
Centro de Estudios en Psicotcrapias, de Buenos Aires. Argentina. como conferencia:
"Creatividad: una dimensión clínica esencial en las psicotcrapias". el 22 de noviembre
de 1982.

185
'ntersección, zonas de encuentro entre esas dos maneras de com-
Lo cierto es que estas fuerzas son en menor medida objeto de 1 . .•

desarrollos teóricos, y en algunas posiciones teóricas aparecen preFnrdeenrt!a


:;~~j'~~~~~jetado (establecido a parti.r de estuditOS
negadas, desconocidas. . renderclertasestruc u-
estructuralistas,c~nc~ptováhdo~arac~;Pe a uf otro camino que
Si nos dirigimos a observarlas, vemos que todas esas fuerzas,
ras propias del PSlqdUlSml? neuaróottlrCoO)s'uj'et;.
unqsujeto-desujetante,
que tienden a la salud, al crecimiento, son fuerzas que encuentran rite poner e re leve . . d
placeren esos desarrollos. Se trata de un placer profundo, realzado nos p~m t. Un estudió atento a los movimientos propios e
un SUjeto-crean e. . em1itiendo obser-
ya desde la antigüedad como en esta imagen bíblica (del Eclesiastés):
diferentes procesos pSicoterapéu~I.~~:~~t~~~~j~tos, sus desplaza-
"Es dado al hombre gozar de sus obras y esa es toda su paga", una var los contrapuntos entre esos 1 . . de
acentuación importante del placer que pueden dar esas tendencias mientos recíprocos, dominancias, altemanclas, sus juegos
en cuanto realizándose. Se abre aquí la necesidad de revisar cuál
es el régimen de placer vinculado con estas tendencias que van en fue~~~ma de la creatividad es un tema muy vasto, .desborda~te;a~
, , te para quien se dISponga a m
dirección de la salud, en dirección del desarrollo, del crecimiento fascinación aSI ~om~ ~nenazan revisándolo (los cinco últimos
o de la progresión. rlo Hace vanos anos que vengo .
La idea central que quiero desarrollar es que la creatividad es la ~~os de un modo sist~mátic?) y.esa r~~~~~~~~~~~~i~~~~~~l~~~~
movilización productiva de un sistema de dinamismos psíquicos io
momentos ~na es~eclal eXCItaCIón a las posibilidades de abarcar
sosiego, de 1Ocertldumbre, en ~uan
que empujan en la dirección de esas tendencias, cuyo cumplimien-
to apunta a la realización, a la construcción, al crecimiento, al t n campo tan diverso.
\y d~en~o~~n~o, en esta exposición introductoria, de~tacar algu-
desarrollo. La creatividad es pensable como efecto de un sistema
de pulsiones y funciones psíquicas que empujan en esas direccio- nas diYecciones fu~d~lI~e~taleS para ~~nsa~;~e~~~~~'d~~~ti~~
'untos que a mt JUICIOson cen t ra es,· ,
nes. El esfuerzo entonces en pensar la creatividad apunta a tratar
de otorgarles a esos dinamismo s un lugar en el aparato psíquico, ~~~~ctos de una investi~aECniónpX~~:~7~gl ;~~~~t;:;/~l~~CC~~'¡j~~
un lugar que viene de alguna manera postergado, ya que el discurso me propongo entonces. , d fi "
'b ilidad de pensar la creatividad como un ~lstema e UlU':IO-
científico, en particular el psicoanalítico, viene restando enverga- post 1 l., di' uismo un SIstema con rasgos
dura a esas direcciones de las conductas humanas. Da toda la namiento especial dentro e pstq ,, te de otros síste-
impresión de que ese atraso responde a condiciones sociales, distintivos propios, no dd~driov:~~sl~e~~:~~:~~~nesfreudianas de
mas, como los compren I ,
culturales e ideológicas, que realizan a través de las prácticas
sociales y ciennficas una acentuación especial de los elementos de pri~~~~~S e~~ P~~~~e~t~~~~~~~ag~stacar que si as~m i~lOSen, toda
enfermedad con un correlativo descuido de los elementos de salud. profundida~ la existencia de la creatividad en el tuncIOn~m~ento
El interés en avanzar líneas de comprensión sobre la creatividad no ~~l aparato psíquico se abren nuevos modos de ver el pSlqUlsmo
va, a mi entender, en la dirección de reemplazar una perspectiva de
la enfermedad por otra de la salud, no se trataría de una sustitución, . tros la perspectiva de la creatividad
sino que una perspectiva más rica, más veraz en la clínica se logra * Quiero no obstante aclarar que para noso á' llá de la consideración de
. ,'. t s universos que van mt s a , .
en los puntos de intersección, en las zonas de oposición y constItuye otros espaCIOS, oro, it id s Espacios que IIlVolucran 10que
dif tes 1 cturas yaconstl UI a,,~, ,
"intersecciones" entre I ercn es e, "1''.1 d 'dominios de total movilidad y apertura
potenciaciones, entre aquellos dos tipos de registros: los' que Jean Baudrit1anl ha t1amado. trans-sexun I da b'1 r incluso el psicoanálisis, según el
izació al tiende a o egar, '
aluden al mundo de la enfermedad y los que remiten al universo de "que toda la orgalllzaCI n sexu '1' de la sexualidad, 10 cual le hace
axioma de que no hay otra estructura mas que '~, IC
los desarrollos y producciones. Tengo la impresión de que la ~onstitucionalmente incapaz de hablar de otra cosa,
mirada clínica es más veraz cuando se dirige a esas zonas de

186
humano, y con ellos también la clínica, se expande la perspectiva toda la problemática de lo que se llama "Cri~is de la edad media de
del p~eiente acerca de ansi~dades, conflictos y potencialidades y la vida", en términos evolutivos y productivos. m~strando c?mo
también se abren otros horizontes para nuestras interpretaciones. surge en esa etapa vital la problemática de un camhl~ necesario en
los contenidos y en la calidad de los procesos creativos.
Otros autores que abordan el tema y que tengo en cuenta son:
Fuentes bibliográficas y testimonios Rollo May, 14Abraham Maslow, 15Erik Erikson. 16 Frederick Perls, 17
Joscph Zinkcr." De este último, un Iihro qu~ se llama El p/'(~ceso
Algunas fuentes de información que he tomado muy en cuenta creativo en la psicoterapia guestáítica que introduce el enfoque
para poder entrar en el tema: en primer lugar la obra de Freud. Si gestáltico en cuanto a manera de explora~la cre.ativida~ ~través de~
bien la obra de Frcud es particularmente oscura, no desarrollada en cuerpo, a través de indagaciones de upo hlOene~getlco .. Otro~
muchos aspectos que hacen a creatividad, se me presenta como trabajos de autores norteamericanos son los que están c~)J11pllados
necesaria en cuanto a las grandes categorías teóricas y los grandes en Ec\itorial Paidós en una obra que se llama Estrategias par~l la
modelos de funcionamiento psíquico que introduce, de modo tal creatividad," que reúne trabajos de investigadores norteamerica-
que pensar la creatividad es pensar desde Frcud, pensar con las nos sobre conductas creativas, actitudes creativas, proces?s
nociones de aparato psíquico, de sujetos, de objetos internos, de creativos. Algunos de los autores más destac~dos son Vervalm,
objetos externos, toda una serie de categorías que se desprenden de Barron, Crawíord, Bradford y Guilford. Menciono a un educador
esa obra. Algunos de sus trabajos plantean en especial las nociones calíforniano, Paul Torrance,20 cuyo trabajo Oriel/taci~)1Idel talento
que emplearemos. 2, J,4.5Desde la obra de Frcud vienen realizando crcativo es muy valioso: una investigación sobre los lenómenos de
aportes muchos continuadores, en cuanto a aquellas categorías la creatividad en niños en edad escolar y de los trastomos a los que
básicas (procesos internos objetos, estructuras ínconscicnrcs)." 7,R da origen la represión de la creatividad. GregorY,Bateson, ~n~ de
. Ellos han dado lugar a diversas Iormulacioncs teóricas que son los fundadores del enfoque comunicacional. contiene en su ultimo
lI~lportantes para poder pensar el tema de la creatividad, aunque libro, Espíritu )' l/aturaleza?1 varias consideraciones sobre los
ninguno de esos desarrollos nos permite abarcar muchos de sus procesos creativos. .'. " ,
~nigmas. I?e ello~ qui~)romencionar en especial a Winnicott, cuyo Quiero mencionar el enfoque eXlstenclal: como ha sld(~desa-
libro Realidad yjuego me resulta uno de los principales puntos de rrollado por Sartrc, con su énfasis especl~1 en la ~OCIÓ~d~
partida para reflexionar sobre aspectos dinámicos de la creati- proyecto." En la noción de proyecto d~ los enloq~es eXIst~nclal~s
vidad. se sintetizan algunas dinámicas psíquicas cuya búsqueda intenta-
En tercer lugar destaco a Silvano Aricti, autor de un libro, mas a través de estos temas ligados a procesos creativos.
.. 10
C rcauvuy, que desarrolla muchos aspectos del tema. En cuarto Quiero destacar la importancia del p~n~amiento orient~l ~ara
lugar una compilación de trabajos de Didicr Anzicu que se llama ahondar nuestra comprensión de la creatividad en sus movimien-
Psicoanálisis del genio creador." Anzieu tiene allí un trabajo tos profundos. Suzuki." Hcrrigcl," Watts,25 Rajneesh,2ó. ~ao-
sobre el tema, vinculado a las separaciones y los duelos inherentes Tsé,27 Lu-Chi2M entre otros, nos muestran que la crea~I~ldad
a los procesos creativos. Hay otro autor en esa compilación, Jean comienza con la actitud de asombro frente a lo dado, a lo cotidiano.
Gui.llaumin cuyo trabajo" da lugar a reflexiones de tipo tópico, es Para poder abrirse a otras dimensio.n,es ~a.~lente ~ehe tomar
decir .sobre las relaciones entre inconsciente, preconsciente y contactos intcmos con una honda atcncion dirigida hacla el cuerpo.
consciente en los procesos creativos. Otro trabajo de esa compilación sus registros, sus mensajes. La apertura a todo 10 posible, propia
es el de Elliot Jacques, 13un trabajo muy importante porque plantea

188 r 189
de la creatividad, coloca al individuo en conexión con las leyes y Definiciones de creatividad
enigmas del universo.
En nuestro país el pensamiento psicoanalítico de la creatividad s definiciones del concepto. En el
ha encontrado en muchas reflexiones de Enrique Pichon Rivére Voy a comenzar con alguna _ 1" ar" etimológicamente, es
una particular profundidad." Esas búsquedas se continúan con las diccionario de la len.gua"espanáo af· ~dreO co~o "establecer, fundar,
"
vinculado . cnare ."Est . ed mI m oner producIr. una ora,
a " cnar, b
de Eduardo Pavlovsky," estudioso de experiencias psicodramáticas
hacer nacer una cosa, darle VIda, co ~onferirle un rolo un título
y teatrales, y con las de Fidel Moccio" quien viene llevando a cabo hacer a una persona 10 que antes no era,
numerosas observaciones de la creatividad en talleres de di ferentes
que antes no existí~".. " Ferrater Mora: "formación de
medios expresivos y en grupos terapéuticos. Hasta aquí, autores
En el diccionano filo~óflco de . t nte transfornlación de lo
que pueden damos un panorama desde el campo de la exploración algo a partir de ~,na realtdad preexls e , .
psicológica.
posible en actual. , . l Teatividad Charles Vervalm lo
Para ir comprendiendo en profundidad el tema de la creatividad En el libro EstrateglOS pala a e " . rtos problemas a la mente
necesité apelar a una serie de testimonios de diferentes fuentes, "1 roceso de presentar cre . al s
define como e p , líneas nuevas, no convenclOn , e .
testimonios de poetas, de pintores, de novelistas, de filósofos, de y originar una .res~uesta selgun tos hasta entonces desconocIdos
directores de cine. Por una combmaclón de e e~en " "
Cuando un creador en el campo del arte testimonia su experien- . 'logra algo drferente . . t
para el sujeto. se . "crear es redefimr, reestruc u-
cia, la sensación que tenemos muchas veces es que quedamos En el enfoque de Paul ~orr.a~~~ies objetos, proyectos, ideas,
afuera; el que no es artista tiene la sensación de que el artista vive rar, combinar de modos ongl
un mundo mágico pero íntimo, impenetrable; que nosotros no e~periencias". . R' Magritte es "encontrar afinidades
tenemos acceso a ese mundo, que tenemos una conexión sólo con En la visión del pl~tor en~. tos no"relacionados hasta enton-
sus productos. El interés de tomar en cuenta estos testimonios imprevistas que relaCIOnan o je .
puede tomar otra dirección: pensar la creatividad en términos muy ces"." "" ese trabajo de intentar ver bajo
amplios, en términos universales, de modo tal que las experiencias En la .visió~ de Proust cr~ar ~~·o las palabras, algo diferente,
del arte sean ejemplos particulares de esos fenómenos generales. la matcna bajo la expenencla, J. "rados" 33
Es decir, trabajar en la posibilidad de incluir la experiencia artística una plenit~d de elementos re~~~sef~~~gepor da;, como un todo
dentro de una experiencia humana mucho más general que pode- Para Cesare Pavese es el' es t'antásticas en las cuales
." plejo de re acion
mos llamar "Creatividad". S uficIente '. un com cíón de la rea lid la. d" 34 ,
Con esta propuesta voy a ir alternando comentarios desde el consiste la propl~ percep h 1 d "la creatividad es el conjunto d.e
panorama científico, desde la perspectiva psicológica en particu- En la perspectlv~ de Bac e ~r a sobrepasar su propia condi-
fuerzas que empujan al hom re
lar, y comentarios desde el arte o desde la poesía. Tengo la
necesidad de ir intercalándolos, pienso que la problemática de la ción"." .' re ar un aspecto de la creati-
Desde otra perspectIva qUIero ager~ona' crear es la capacidad
creatividad supone una combinación particular de diferentes códi-
vidad que h~ce al. des,arrollo ~~;:r;ollos d~ las propias capacida-
gos. En la creatividad se combinan códigos de tipo analógico y
para prodUCIr apl~caclOnes Y cer crecer capacidades.
códigos de tipo digital. De modo tal que podemos ganar cierta
des, es una capacld~d para ha .' d d que estoy mencionando
riqueza abordándola a través de autores que se expresan en Todos los est~dlos d.e. ~r~at~~ ~rtante: en lugar de limitarse
diferentes códigos. toman una direCCIón a nu JUICIOI 1P ue tratan de investigar es la
a investigar a algunos creadores, o q "

191
190
creati~ida? c?mo capacidad universal. Si Proust habló d.
en el mundo humano. Los esfuerzos para teorizar esas hipotéticas
~~p~~~n~~~i~~S~rtre I~ hizo, de la suya, nos importan en la me~i~~ derivaciones en términos de subliruación, siempre encuentran
, e n~sotros, Es que las experiencias crealivas obstáculos muy grandes. Si por el conductismo no tenemos lugar
empiezan a tener un mterés para la psicología Ifni
claro para la creatividad en el aparato psíquico, y si por el
~~~e~~~~~i~~lnd~~os,~ue en ellas est~ involu~r~~~sa ~i~~~~~~~ psicoanálisis no tenemos clara una derivación de los objetos de los
creatividad yo ~~~~I~~~0~n7~nd~~aq~l.ero ptanrcar ~s que ~in la procesos crcat ivos a partir de los procesos de la sexualidad infantil,
la crealividad, mirando insistenteme~fea~~~~e, y SI nO,~ntlCndo a mí se me va presentando en esta investigación la necesidad y la
posibilidad de encontrar un tercer camino, un camino que no se
de~omla~ la m.irada ~lás general que me plantea l~a~~~~~~~d~~Ya
cuanto dmámlca ul1Jversal del psiquismo. ' en detenga inexorablemente ante aquellas limitaciones. Este camino
comprende varios pasos: el primero consiste en una proposición
general derivada de observarlos rasgos que empíricamente presen-
tan los fenómenos y procesos creativos en cuanto originales, es
Pro~'emas. epistel!l0lógicos en el abordaje decir, no dar por supuesto que dcri van de otros procesos psíquicos
de la creatividad y pasos de una estrategia sino que son productos del aparato psíquico dotados de una
irrcductlblc especificidad.
El segundo paso, en esta investigación, es tratar de encontrar
El problema epistemológico' . categorías teóricas que puedan explicar características de este
la investigación del tema es que ~e pre~~l1la a ~ontmuación, para sistema; sus movimientos internos, dinamismos profundos de la
corrientes presentan en ~us ~~~d~:~sv~~~~~~~Tle~:es!,esas va~ias realidad psíquica que puedan estar involucrados en los procesos
Cada corriente presenta obst'Ículos I~IUY' , d mu acioncs senas. creativos. Dinamismos profundos podría decir para nosotros por
darlo. Si tomo las corrientes' con' . "g~an es para poder ahon- ejemplo, participación de procesamientos de nivel inconsciente.
P?lmente 1~011eam~ricana,¿tas ~!~CI~~~~:ir~:~ ~~~d~~~~~f~i~~ti- El tercer paso de los desarrollos que inicio con esta presenta-
h ,IYprocesos creativos dotaoos 1, . . .e ción (que no podré abarcar en este capítulo) sería el siguiente:
que hablar de creatividad es ha~I~~ ~~1~ al~a ongl,naliclad, e~ decir después de indagar la creatividad en cuanto original y proponer
algo original, pero lo ue estas e ' en menos que constJ!uyen categorías teóricas para buscar sus dinamismos, es de importancia
ha~er.es otorgarle a e~ Proclucci~~I~~tf~<;g~l~~cI~c.tlstas no pueden pasar a investigar qué relaciones se pueden establecer entre los
psrquico, es decir aparecen como " ,e nc~ en el aparato procesos que son propios de la creatividad y otros procesos del
creativos, efectos de creación, pero ~~~d~lct~s c~eatl~as, procesos psiquismo, como los que dan lugar a las estructuras del inconscien-
pensar qué pasa en el psi uismo cut e os nosot~os no podemos te reprimido propio de la sexualidad infantil, las estructuras del
marcha. Por otro lado mU~has de laSm~~d~¿ proc~so~ creatl~~s en narcisismo y otras que la psicopatología ut iliza con mucha certeza
para pensar la creatividad la refier~ p " croncs p.slcoanalltlcas, para entender diversos dinamismos psicopatológicos.
su~uesto como constituy~nte decisi~~I~~~~r~~I~~as~st~~la.c~ntral, Vuelvo al segundo pasó. Las categorías teóricas que voy a
sen~ el sistema de la sexualidad infantil edí lea ( pSlqu!c.a, que utilizar son en primer lugar las que hacen a una caracterización

~~~~~~:~:t~::
~~~~h;r ~~~~'~I~~~O~~~~~~:~:~,~
I{S~:C{~i~~~~~~f.
i~
~~i
que acermuyclificultosaselaborac') '. , .ucncn
topográfica de los procesos creativos. Esto supone indagar relacio-
nes entre procesos inconscientes, procesos conscientes y
prcconscientes involucrados en los procesos creativos. Deseo allí
a panír de objetos de la sexualidad li~l~~~f¡~r~~~~t~:~~t~n~~~I~í~, hacer una referencia al pensamiento de tipo inconsciente que
unrvcrsn de objetos que surgen como efecto de procesos crcarivos
utilizan los procesos creativos.
Luego se hace para nosotros necesaria la tarea de proponer

192
193
qu~ exist ía ese element.o a descubrir, ese algo definido, oscuramen- Aquí encontramos un rasgo particular de los contenidos y
te Inh~r~nte a determinado objeto y no a otros; sólo que ese formas inherentes a los procesos creativos: la posibilidad de
cono.cInllento había pcrmanccídn como escondido en las zonas integrar elementos aparentemente antagónicos, di vergentes o con-
más macc~sibles de mi mente. Dado que esta investigación sola- tradictorios, y de unirIos en síntesis imprevisibles."
?lente. podía resultar en una etiqueta exacta para cada objeto, mis Aquí ya estamos destacando no sólo el nivel topográfico de
InvestIgacIOnes se convirtieron en la búsqueda de la solución de un esos procesos (elementos conscientes e inconscientes, combina-
problema a cu~o respecto yo poseía tres datos: el objeto, aquello dos e integrados en un nivel preconsciente) sino un elemento
qu~ le era propio y que yacía en la sombra demi consciente y laluz estructurante, constitutivo. de las relaciones que se instauran en los
bajo la cual aquello resultaría evidente"." procesos creativos.
~ebiclo a esta experiencia, que tuvo lugar en 1930, MagriLte Es necesario emplear "la capacidad sintética del yo para
consideraba que no bastaba asociar libremente objetos no asocia- simbolizar simultáneamente significaciones opuestas ••.45 En el
dos entre sí: se debía descubrir la única, correcta e inevitable estrato prcconscicntc se constituye un espacio de combinatorias
combinación de imágenes, solución que Magritte había conocido donde esos opuestos se encuentran y se esbozan las formas capaces
ya antes pero que había quedado perdida para sus posibilidades de de darles albergue. .
empleo consciente. Magritte explicó el proceso mediante el cual Rothcnbcrg" destacó ese carácter "bilrontc" del pensamiento
resolvió este problema con respecto a la rosa. creativo en cuanto une imágenes e ideas opuestas o contradicto-
"De acuerdo con el método que creo me pertenece exclusiva- rias. Lo llamó "pensamiento de tipo janusiano" por referencia al
mente, he estado buscando durante cerca de dos meses la solución dios Jano, que en la mitología era poseedor de dos rostros. Aquí
de ]0 que yo llamo el problema de la rosa. Al finalizar mi podemos evocar tantos cuadros de Picasso cuyos personajes
i~vest igación me doy cuenta de que probablemente ya hace mucho presentan una cara de frente y otra de perfil.
tiempo que conozco la respuesta a mi pregunta. pero en forma "Y de golpe, súbitamente, se ven dos caras que entran una en
vaga, como todos los demás. Este conocimiento, que aparente- la otra, y nace el filme", asegura, por su parte, Bcrgman."?
mente es orgánico y no consciente, ha existido al comienzo de "Todo se activa cuando se acumulan las contradicciones ••.4s
~od~s ~as investigaciones que he realizado. El primer signo que Ese "doble frente" de las construcciones creativas contribuye a
ll1stIntlvamente dibujé en un papel cuando decidí resolver este ot.orgarles (por su parcial rebeldía con las delimitaciones del
p~oblema es el siguiente: -ilustración de una rosa, con una línea pensamiento lógico) ese carácter equívoco, polivalente.
diagonal que parte de ella, hacia la derecha-y esa línea oblicua "¿Fue una visión o el despertar de un sueño?
que parte, en forma divergente, del tallo de la Ilor, ha significado La música ha volado: ¿estoy despierto o dormido?"."
para mí.una búsqueda ardua y prolongada, a fin de poder descifrar A su vez esa polivalencia es creada según combinatorias más
s~ sentido. De los muchos objetos que imaginé, recuerdo los ricas, más amplias, que las que juegan en él repertorio singular que
SIguientes: la línea es el asta de una bandera verde, la torre de un cada individuo moviliza en sus procesos de tipo primario
castillo feudal o una flecha. Finalmente di en el blanco: era una (condcnsacloncs, desplazamientos) propios de procesos como los
d~ga, ~ el ~roblellJa de la rosa quedó resuelto desde el punto de que operan en la elaboración de los sueños. Por esto Bachclard
vista pictórico haciendo que la daga creciera del tallo de la rosa". esbozó una necesaria distinción, a propósito de la poesía:
Ese cuadro se llamó El golpe al corazón. Impresiona fuerte-
m~nte por el contraste que establece entre esos dos elementos * Arthur Kocstlcr ha encontrado una pauta general de los procesos creativos (vigente
unidos, la flor y el puñal. tanto en el humor. como en el arte y en el dcscuhrimicnto cicnrífico¡ consistente en "el
hallazgo de sirnilaridndc« escnndidas".j(,

196
197
al exterior del sentimiento, un velo
"El espacio de la imagen poética es, antes que el del sueño, el
de agua, o luz, o niebla,
del ensueño"."
o, yo diría, algo
Se ha destacado que la metáfora (figura poética por excelencia) como una mano de agua, una mano
no puede ser asimilada a los fenómenos inconscientes de lúcidamente opaca, que recoge
condensación propios del sueño -analogía trazada por Lacan en suavemente las externas formas
sus trabajos- precisamente porque en la construcción y selección de ser, o de pensar, también las formas
de la producción metafórica intervienen numerosos elementos del de ver, y las sitúa
proceso secundario de pensamiento, en carácter de operadores de junto al mismo brocal a donde asoma
nivel consciente." de vez en cuando mi palabra. Entonces
Si en el proceso primario de pensamiento Freud pudo detectar puedo decir: estoy lloviendo; yo
la ausencia de un principio de contradicción, en el proceso creativo estoy lloviendo, aquí. Esta es la hora
lo contradictorio se articula manteniendo a la vez la tensión propia del poema.
Sucede que esta lluvia, o manera, o ser en sí
de lo contradictorio.
que condiciona mi salida, nace
Goldrnund, el personaje de Hermann Hesse." buscaba a tientas
de un océano extenso original
en el arté "una unión del mundo paterno con el materno, del al que vierte el dolor -porque el dolor
espíritu y la sangre ... La posibilidad de una reconciliación de sus también es agua-, Y nace
más profundos contrastes". "Un misterio ... que consiste en que los de originales lagos diminutos,
mayores contrastes del mundo conviven en una imagen: el nacer bajo los manantiales, o cascadas
y el morir, la bondad y la crueldad, la vida y la destrucción". de la dicha. En su doble,
En estos contrastes se encuentran tanto imágenes oníricas como desigual procedencia, esta lluvia,
representaciones de palabra empleadas al servicio de procesos o mano de agua, o fondo neblinoso
cognitivos. Corresponde a los procesos preconscientes establecer que engendra la palabra, que es palabra
los enlaces entre esos diferentes tipos de representaciones. Proce- anticipada a los sonidos o ecos
sos preconscientes que establecen, más allá de la tradicional . que consigue de mi oquedad, ya hereda
un más alto legado doloroso.
oposición dicotómica (conciencia-inconsciente) una dinámica de
mediaciones lnrrapsíquícas.v-"
Yo empiezo a hablar, o como
En esa zona de elaboraciones preconscientes se va configuran- quise decir, si tomo formas, modos
do una red de elementos móviles, diversos, provenientes de de ver, que me presenta el agua
diferentes estratos del psiquismo. Quisieraque un poema de Rafael desde dentro, yo empiezo
Guillén," poeta español, pueda poner de relieve ese entretejido de a llover, y contemplo cómo afuera,
elementos heterogéneos, vagos en un principio, que alcanzan sin ajeno y lejos de este velo umbroso,
embargo su forma en la materialidad cristalizada del poema: el tema o el suceso toma cuerpo
por sí mismo, y se forma
Yo sólo puedo hablar, amigos, cuando independiente de mi lluvia, pero
algo como la lluvia, desde dentro, sustentado por su humedad o aliento.
pero también cayendo dentro, pone Y puede ser que al cabo de una misma
por mi manera de mirar, y pone manera, que es la mía, de ponerme
por el cauce de entrada, o de salida a mirar, siempre abrumado
"
199
198
por el agua, los seres vantes para leer este otro sistema, el creativo, para descifrar los
que se conforman a su amparo tengan movimientos combinatorios que son propios de este sistema.
distinto germen natural.
Por eso,
amigos, sólo puedo
La creatividad como un tercer principio del acontecer psíquico
asegurar que algunas veces, pocas,
estoy en situación de lluvia, estoy
en personal estado de palabra. Bien, así como en el caso del poeta se combinan elementos de
Luego llega el poema. si es que llega. procesos primarios de sim bolizaciones con elementos de procesos
por sí mismo; no siempre secundarios, el estudio de Arieti sobre creatividad profundiza la
con una misma intensidad, o modo. idea de que los procesos primarios y secundarios se combinan de
o razón para ser. Y yo lo veo maneras particulares y singulares en todos los procesos creativos.
alejarse. Esto es todo. Esto ha llevado a Arieti a postular la existencia de un "proceso
terciario" (el proceso terciario, designado así en confrontación con
En las imágenes poéticas de Guillén aparecen elementos prima- los que Freud llamó procesos primarios y secundarios de pensa-
rios dotados de una función signi ficante múltiple (agua, humedad, miento). consistente en un modo de elaborar combinaciones
lluvia, océano, niebla, yo lloviendo) enlazados con un trabajo de particulares de procesos primarios y secundarios. dando lugar a
proceso secundario de pensamiento, con uso de conceptos (poder producciones crcativas. La idea de un proceso terciario, de un
hablar, estado interno. surgimiento del objeto-poema, alejamiento tercer tipo de procesos, entra para nosotros en resonancia con
de ese objeto). Un trabajo de ligazones preconscientes ha dado nociones de Winnicott por las cuales postula que "el juego, como
estas relaciones: un tema se forma independiente de esa lluvia la creatividad, en los niños y en los adultos emerge de una tercera
interna, pero sustentado por su humedad o aliento. zona", la zona que él llama de los espacios transicionales. La
Es posible comprobar entonces que la creatividad comprende ve como la zona donde se art.iculan experiencias de conexión con
niveles de producción inconsciente, preconsciente y consciente. objetos externos a la díada maternal: Winnicott dice: "en los
Esta es una de las razones de peso para que en el trabajo clínico fenómenos transicionales, se enlazan un mundo de experiencias,
importe escuchar no solamente los mensajes de nivel inconsciente experiencias inrcmas. con otro mundo de experiencias de relacio-
sino también los mensajes de nivel consciente. nes con objetos exteriores al sujeto, y en el enlace de estos mundos
emerge una tercera zona", la zona que él llama "intermedia" de
Si nosot ros pensáramos que la "realidad esencial" del psiquismo
experiencia. La tesis de Wirmicott. que a mí me parece digna
fuera aquella del inconsciente reprimido, entonces no habría
de especial consideración, es que los procesos creativos emergen
razones 'para prcstarlcs atención a los mensajes de nivel conscien-
en esa tercera zona, en la zona intermedia de procesos que no se
te. Pero si el nivel de los proyectos, el nivel de las fuerzas de pueden llamar estrictamente procesos internos y no se pueden
desarrollo, el nivel de las tendencias de crecimiento puede ir llamar tampoco estrictamente procesos de relación con objetos
articulando elementos de nivel ineonsciente y elementos de nivel exteriores, sino que tienen que caracterizarse de otra manera
preconsciente, entonces el registro consciente de los mensajes (intermediarios, transicionalcs). ,
también nos importa, tiene una jerarquía, que no se puede Se trata de fenómenos emergentes en el encuentro, en la
instrumcntar aislando el registro consciente sino considerando los intersección de diferentes órdenes de procesos. Pero estos fenóme-
interjucgos, aquellas combinatorias de diferentes estratos. nos emergentes no son meros efectos de transición o de
Los mensajes conscientes proveen para nosotros indicios relc- intcrmediación. Expresan el accionar de un sistema capaz de

200 201
~~oducir esos efectos sobre la base de construir "entre" d Las propuestas teóricas que quiero hacer para pensar en este
~versos, estructuras que los comprenden y re~odelan smun lOS sistema inherente a los procesos creativos, se dirigen a proponer
ciones, us re a-
los conceptos de objeto de la creatividad Y de sujeto de la
Destaco esa "tercera zona" de W· . creatividad Y de fases en sus modos de relacionarse. Voy a ir
de un modo insistente resuenan en ml~llcott ylautomáticamente,
. I as cap as de Machado>" desarrollando esos conceptos.

v
El objeto de la creatividad
Entre el vivir y el soñar
hay una tercera cosa. El objeto de la creatividad es lo transformable de todo objeto, es
Adivínala. decir, de cualquier objeto o conjunto de objetos, en cuanto se
aplica al mismo un trabajo de modificaciones reestructuralltes
UII
individuales o grupales. El objeto de la creatividad es entonces
Tras el vivir y el soñar
pensable en cuanto abstracto. "En una hoja de papel está contenido
está lo que más importa: el infinito"."
despertar. De ese objeto abstracto puede hablamos una estrofa de Manuel
Machado:60
delEse despertar
mero ..' que p ue d a co l ocamos en otro espacio más allá '"
vrvir, es el despertar cr· ti 1 . . ' En mi alma, hermana de la tarde, no hay contornos ...
sistema descubridor y generador ~a I.VO.a actIvacIón. de todo un y la rosa simbólica de mi única pasión
ciones. e Innumerables objetos y rela-
es una flor que nace en tierras ignoradas
y que no tiene aroma, ni forma, ni color.
Freud en Los dos
contrastando. d principi. lOS di'e .acontecer psiquico" fue
un régimen d~;l~~~r ~~~:~~ ~~dorgam.zarse~el psiqu.ismo: según Para Hermann Hesse las imágenes del artista no tenían contor-
sentido se encontró a con en~1l11Iento:sde realidad. En ese no, estaban veladas y sin forma alguna."
comprobar que el a~ l~s enigmas de la creatividad, al "Los objetos de la creatividad no son cosas, son símbolos" .62
limitaciones y demarc:~ig~;s e¿:mplo. no quedaba atado a las Lo transformable de cualquier objeto no es un objeto particular,
Comprobaba entonces . nmguno de aquellos principios. es cualquier objeto en cuanto puede ser reestructurado. Todo
"realidades" La que el artísta lo graba consti tuir otra clase de objeto. cualquier objeto, puede encamar al objeto de lacreatividad.
. propuesta de nuestro estudi
tuiresa otra clase de realidade (d 10 es que para consti- "Todo objeto" quiere decir objeto físico, mental, cultural
cuales el arte ofrece sólo al s pro uctos de la creatividad. de los (palabras, árboles, planetas, cuerpos, grupos, conductas, represen-
la existencia de un sistema gcU~~S~:~?elOS~es nec~sario postular taciones del self). Ese objeto emerge en la medida en que alguien
modalidad de placer y las condi ,~t81menefun~'lOnamiento, su lo localice. el sujeto de la creatividad localice que allí hay algo
tuyen la realidad para sus funcio~~;les/e los obJe~os que consti- transformable por vías imprevisibles.
un tercer tipo, modalidad de or ~ e.~andas, tiene que ser de ¿Qué entender por "tra,lsformable"? Los elementos
investigaciones hasta a uí ce gamzacion no conocida por las transformables son form as, cualidades, contenidos o relaciones de
sexualidad o aquellos oiros qntr~as len los procesos propios de la cualquier objeto o conjunto de objetos.
lo real" (Freud, Piaget). ue an ugar a una "construcción de Colocado en esa condición de transformabilidad (plasticidad de

202 203
relaciones, formas y contenidos) ese obi . El sujeto de la creatividad
or~en de "realidad" diferente de a ucie~~~{tenece a.un especial
¿Qué podemos localizar como sujeto de la creatividad? Se me
ob~etos convencionalmente adscri~tos al mu~~e ~~ ms.~alan los
presenta como un conjunto defUllcio1les que configuran capacida-
Ml.ller propuso caracterizar como" .~, real . Henry
objetos de creatividad, trazando la~u~~~~~J¡?ad ese mundo de des trallsformadoras, conjunto de funciones Y operaciones que
de un árbol y los frutos de un cuad;0.63 eras entre los frutos comprenden, por un lado. múltiples funciones yoicas y a la vez
numerosos y amplios procesos de aprendizajes en trabajos trans-
. Un rasgo esencial del objeto dc la crcati . ue fonnadores Yproductores. Múltiples funciones yoicas: funciones
bú~.quedas más diversas, es que ~e ~r~~~a~~vldadb 9 su~g~ de las de registros, de confrontación. evaluación. elaboración. indaga-
Las formas de las cosas varían d . un o 'jeto mávil,
medida común para ellas Mezcl: ~ miles de modos. no hay ción. Intervienen funciones cognitivas, funciones de realidad.
incesante. las formas v .. ' . ~~d~sy arrastradas en un flujo funciones discriminadoras. funciones de contacto con detemlina-
Se define por esa m~~:f¡~~~ de:,lll~n todas sus imit~ciones".64 dos contenidos inconscientes Y preconscientes. funciones yoicas
contrastarlo con la noción freud- cncial, l? cual hace interesante implicadas en la capacidad de soportar incertidumbre, frustración,
son efectivamente identificabl~:nt (~e~~Jetos defijacióll, como tolerar detern1Ínados montos de angustia. funciones vinculadas al
control de impulsos. Todas esas funciones van construyendo
sexualidad infantil, del mundo de lo ~s o. ~~~osgel mu~do de la
mos creatividad. nos encontramos coepnml .0. uando investiga- capacidades para regular una serie de equilibrios Ymovimientos.
mente cambiante y ese Objet~ ah~t ' n un.?bJeto que es universal- Movimientos Yequilibrios entre: desorganizar objetos Yreorgani-
materiales concretos. encarnado
nes de materialidad. Es abstra t
~I;~flto.solo p~ede .sostenerse en
os. en el mten~)r de relacio-
zar objetos. entre regresiones y progresiones. entre fen6menos de
análisis y síntesis. entre crear desorden Ycrear orden. entre instalar
un caos y organizar un cosmos. En estos movimientos se desplie-
sistemas de relaciones, 1~nna~.cc~~fJ;~~s lo transformable son
gan procesos de aprendizajes en la tarea de transfonnar Yproducir.
como tal en lo concreto s610 si es tr bai: l 1 ' pero puede emerger
dec.a~~objeto. TrabajandO~nama~e~~a~ea a esencial materialidad En estos procesanlientos intervienen también sistemas de represen-
posibilidades de transformación El b 'pueden enco~trar en ella taciones. imágenes. escenas del mundo interno. objetos que inte-
entonces aquello a extraer (le las' . o jeto de creación resulta gran fantasmas del mundo inconsciente. objetos de identificacio-
,. ' cosas no es algo que" nes. Pero la intervención de estos mundos representables no puede
mos en las cosas. Proust ha dicho" • , ," proyecta-
el énfasis dado a la extracción e c~ea~~s~xt~aer . Pensem?s en darse sin aquellas funciones procesado ras. evaluadoras. selectoras.
Si hay novedad es porque las funciones desbordan a las represen-
A~gel: "La escultura está en el in~e~~~rC e re. Imagen de Miguel
taciones constituyendo nuevos sistemas de signos. Aquellas fun-
qUltarloqu?;<;obra". Seha intentadoaPliC~~:: Ple?Ja. ~?lo hay,que
de proyeccion para entender qué s El noci ~ psicoanalítica ciones desenvuelven aprendizajes. que se procesan en gran medida
yección no expl ica m ás ue al ' .e crea: mecanismo de la pro- en el nivel inconsciente, nos damos cuenta de partes de esas
tivos, ya que estos p~o¿esos gseundm.gre(!telnte de los procesos.' crea- funciones. pero en principio este sujeto. que se aplica a los objetos
f . esenvue ven nt)rque de la creatividad es. topográfícamente. de nivel il/col/sciellte.
unciones del psiquismo (destac funci t" numerosas
mas de representaciones) trabaj~n~~C,IO~es ~ no meram~nte siste- Esto nos lleva a acentuar una distinción: el sujeto de la creati-
gu.en .encontrar en ese material un~o ,re cieno material. consi- vidad no es la persona. no es todo su psiquismo. sino funciones Y
psrquismo. que integra sintetiz a lornl~ ~ue sorprende al operaciones que integran un sistema diferenciado de otros en el
entonces inconexos. L/ rorn1a'~en~!n~~osos elementos hasta psiquismo.*
proceso crcativo, esa forma sur q . ma ~lent~ emerg~ de un
*Tanto cabe esta distinción que el sujeto de la creatividad puede también constituirse
entre ese objeto de la creatividal~ de mt~~c,lmblos muy mtensos como efectos de un grupo. conjuntos de funcioncs que son producto del acontccer grupal
y lo que ahora quiero proponer . a .matena en l~ cual va naciendo (producción grupal del sujeto crcativo que se ha vcrificado por ejemplo con toda nitidez
dad. pensar como SUjeto de la crea ti vi-
en las experiencias de "sinéctica"6s): .

205
204
producto a la vez que productor, sujeto que va ocupando un espacio
"El autor inspirado es, en lo más profundo de sí mismo, otro
distinto de sí".66 Diferencias que podrían explicar divergencias funcional en el aparato psíquico.
entre vida y obra." Pintar, componer, escribir son formas de recorrerme. En .ello
Esa no coincidencia entre sujeto creador y persona ha hecho que reside la aventura de ser en la vida. "Desde hace años he dejado
tantas veces los movimientos propios de los procesos creativos de depender de mis rasgos. Ya no habito esos lugares ... " (Henri
sean vividos por el individuo con extrañeza, zozobra, impotencia,
Michaux)." , . " ,. "
ante la relación con algo de sí no abarcable, no gobemable. ...estados situados fuera de limites, en los que el verbo edípico
Ingmar Bergman ha dado testimonios: deja de conjugarse, en los que el ser puede e~contrar aquello que
le hará convertirse a sí mismo en obra a realizar.
Cuando escribí esa escena quise expresar el sufrimiento del artista. Esos momentos en los que el yo y el no yo intercambian tan
Hay algo que se desarrolla, y no se puede hacer nada;68: fácilmente su lugar, entrañan una considerable ampliación de la
experiencia, gracias a la cual el individuo puede consumar ~u
Borges'" intentó subrayar la distinción, hablándonos de dos integración pulsional y alcanzar de esta forma su fondo mas
personajes, en "Borges y yo": auténtico (Michel de M'Uzan).73

... ~l otr?,.a Borges, es a quien le ocurren las cosas ... yo vivo, yo me Jonas. un personaje de Camus, artista en su taller, asegura: "¿Si
dejo VIVir, para que Borges pueda tramar su literatura y esa existo? No lo sé. Pero existiré"."
literatura me justifica ... La imagen poética, para Bachelard, se convierte en un sernuevo
\ en la lengua, "nos expresa convirtiéndonos en lo que expresa o,
También Proust habló en más de un pasaje de un otro "perso- dicho de otro modo, es a la vez un devenir de la expresión y un
naje": devenir de nuestro ser. Aquí la expresión crea ser" .75
Sartre pudo afirmar: "Nací de la escritura; antes de ella sólo
Había en mi un personaje que, más o menos, sabía mirar bien, pero había un juego de espejos"."
era un personaje intcrrrutente, que sólo tomaba vida cuando se Sujeto y objeto de la creatividad se van creando recíprocamen-
mani~cs~aba al~una esencia general, común a varias cosas que te, en una danza de innumerables entrelazamientos. Trataremos de
consutuía su alimento y su deleite ... era un objeto que fue siempre
precisar algunos de esos movimientos.
la finalidad principal de mi búsqueda porque me daba un goce
específico. el punto común a uno y otro ser. ..

El.elemento. fundamental es que a través de aplicarse a procesos


creativos funciones y representaciones, éstas crecen en sus alcan- Interacciones sujeto-objeto Y faces del proceso creativo
ces, se amplían, se enriquecen. expanden potencias. De modo tal
que l?s procesos creativos no sólo hacen surgir objetos sino que
también reparan aspectos del sujeto.t-Positívamente. hacen crecer Entre ese sujeto y ese objeto de la creatividad, se desenvuelve una
sujetos. larga y compleja relación que toma formas cíclicas, eso es lo que
Lo que la persona o el grupo pueden registrar es que en el a mí se me presenta ahora a revisar, como dinámica d~ las
proceso creativo emerge y crece un sujeto en el interior del aparato relaciones entre sujeto y objeto de la creatividad. Voy a mencronar
psíquico. Shclleyt'Io decía así: "En el proceso de crearse engendra cuatro fases en las relaciones entre sujeto y objeto de lacre~tividad,
un ser dentro de nuestro ser". Aparece algo que no estaba así antes, a modo de propuestas teóricas, para pensar qué va ocurnendo en fI

,207
206
. haci Hud'lmesnl'l' de repente me invadió esa profunda
Bajamos acia ,. , d C b .
el aparato psíquico y en la relación con cualquier objeto al cual se s~nsación de dicha que no había tenido desde los días e om r~y,
aplican procesos creativos. una dicha análoga a la que me infundieron, entre otras .c,osas. ~~
campanarios de Martinville. Pero esta vez es~ sensación que o
" plcta Acababa de ver a un lado del cammo en escarpa por
mcom ,. " , d . de entrada a un
donde íbamos tres árboles que debían e s~rvlr .'.
Fase de exploraciones paseo cubierto' no era la primera vez que vela yo aquel dIbUJOqu~
f~~naban los tres árboles. y aunque no pude encont~ar en mr
mem~ria el lugar de donde parecían haberse esca~a.do. SIIl~mbar-
di nta de que me había sido muy familiar en tiempos
Hay una primera fase (la puntuación es arbitraria. ya que supone- gome Icue , , .. be' nlreunañomuy
pasados' de suerte que. como mi CSplfltu utu o e,-..(: "1
mos estar abordando un ciclo. podemos comenzar en cualquiera de I~'~no ~I~omento presente. los alrededores de Balbec va~1 ~r?n
sus fases). Una fase en la que todavía el sujeto y el objeto de la ta~biZl Yme entraron dudas de si aquel paseo no era una ~I~c~on.
creatividad no se han encontrado: en todo caso. de modo potencial. , Miré los tres árboles; los veía perfectamente. pero rru ~!m~
uno está "a la búsqueda" y el otro Ha la espera". En esta fase se t~;lía la sensación de que ocultaban alguna cosa q~~ no p~ la ee
activan en el sujeto (especialmente en un nivel inconsciente) apreh~nder: así ocurre con objetos cotocados a IstanC!a.•, qu
operaciones exploratorias. Funciones activadas se dirigen a obje- ti os el brazo nunca logramos mas que acanclar su
aunque es ircm . , . l Y t '
tos diversos indagando su potencial transformabilidad. En esa superficie con la punta de los dedos. sin poder coger os. en onc~s
, l' ar luego el brazo con mas
etapa el sujeto y el objeto de la creatividad son potenciales, de"c'lnsa
." .•
uno un momento para ,1 arg:
, 11' P
'.,
ara que mi cspm u
't
virtuales. En esta fase, no se ven todavía claros los objetos a los fuerza aún, a ver si llega mas a a. ero, p , b;' do
hubiese podido hacer lo mismo y toma~ Impulso'l' ha drelapl~~er
cuales podrían aplicarse los mecanismos transformadores que . lo Reconoclayoesac ,Ise ,
menester que estuvIera yo so .... . . t
están en el psiquismo. En esta fase. en que todavía el sujeto de la uc re uiere es cierto, un determinado unbojo del pensarrucn o
creatividad no encontró su objeto. no siempre tenemos indicios q ~ .: obre sí mismo' pero esfuerzo muy grato comparado
verbales de su presencia activa y de su naturalezaexploratoria. ~~~~~~~~:~i~cres satisfacciones de~ abandono y la ren~n~ia'tTal
El psiquismo no emite demasiados indicios de esa exploración. placer de cuyo objeto apenas si tema un vago presentlml~n o ~
La conciencia puede estar ocupada a la vez en cuestiones ajenas a y
ca'si n~cesitaba crearlo, yo mis,~o.lo senf~í,aen;U ::;~:~ °CC~~~~I~~~
ro cada vez que aSI ocurria se me igura a q .
esa exploración. Si me propongo indagar este momento en la
clínica. a menudo busco en térm inos de acciones, más que de ideas. ~bÍ'l~ ;'lsado hasta entonces no tenían ímportancia ~. q~e
¿Qué estoy haciendo? ¿qué estamos haciendo? Averiguar qué está a~iél~dom'~ 'a su realidad me sería dable comen~ar por IIld a
~erdadera vida. Me puse la mano delante de ~o~oJosyara po er
haciendo el paciente. En lo que estoy haciendo no espero encontrar
icncrlos cerrados sin que la señora de Villepansls se dler~ cu~nt'ta.
sólo la enfermedad, además espero encontrar maniobras explora- , da Y luczo con el pcnsamten o
torias inconscientes que hacen a mundos creat ivos potenciales que Por un momento no pense en na '. o " . l
concentrado. recogido con más Iucrza, s;~lte h~cla adc antee~~
están. subterráneamente, palpitantes. Indagar debajo de las pala- dirección a aquellos tres árboles. o. mejor dlch~. ~n aqu :
bras y de los actos otras acciones: ¿qué hace su cuerpo?, ¿de qué dirección interior en donde yo los veía (~entro de ~I mismo. ?,!r'l
maneras hace lo que manifiestamente hace? Porque ahí donde su vez sentí tras ellos la existencia de un objeto conOCIdo. pe;o ~,Io~'
cuerpo está haciendo algo, mientras su mente está conectada con u~ no ude atracrmc. Entretanto. el coch.e andaba y yo os v.el~
determinados objetivos. su cuerpo puede estar ensayando sondeos, q , p . E dó nde los había yo visto ya! En los alrededores ~e
acercarse. l. n ) , T' oco cabta
indagaciones. en el nivel de un sujeto potencial de creatividad que CombnynohabíaningúnpaseoqueempezaraasJ., amp d f '. '
no encontró su objeto. Ese objeto puede no encontrarse. como, se- elluga~ que me recordaban en aquel campo alcman don e UI un
gún entiendo, lo transmitió Proust con nitidez en una experiencia: fI

209
208
año a tomar aguas con la abuela. ¿Sería acaso que venían de unos morírseme un amigo, de morirme yo mismo, de renegar a un
años muy remotos de mi vida, borrado ya enteramente en mi muerto o a un dios"."
memoria el paisaje que los rodeaba? ... ¿Formaban parte, por el
contrario, de esos paisajes de ilusión, siempre idénticos, al menos En ésta, una experiencia fallida, el autor vislumb~a y ofrece
para mí, porque en mi caso el aspecto extraño de esos paisajes no
indicios del vasto conjunto de operaciones comprometIdas en esa
era más que la objetivación en sueños del esfuerzo que hacia
cuando despierto por llegar hasta el misterio que se escondía tras búsqueda: funciones perceptuales, asociativas, mné~icas, trazan-
las apariencias de un lugar determinado donde yo le presentía, o do un sinfín de relaciones posibles: actual-pasado, I?te~o-ext~-
de ese otro esfuerzo para volver a introducir el misterio en un sitio rior, conocido-desconocido, vivido-imaginado, posIble-Impo.sI-
que estuve deseando conocer mucho tiempo y que me pareció ble concreción-desvanecimiento. Esas operaciones exploratonas
superficial en cuanto logré verlo, como me pasó con Balbec?, de;bordan, naturalmente, los registros de la conciencia. ~n otras
¿eran imagen recién desprendida de un sueño de la noche anterior, numerosas circunstancias las operaciones iniciadas localizan ese
pero tan borrosa que me parecía venir de mucho más lejos? ¿O objeto potencial, lo van haciendo posible, y entonces las b~~que-
sería quizá que no los había visto nunca y que me ocultaban tras das hunden sus raíces en una materia concreta que puede recibirlas,
su realidad una significación oscura, tan difícil de descubrir como
y admitir transformaciones.
un remoto pasado, y, por ello, al solicitarme para que profundizara
en un pensamiento, se me figuraba que reconocía un recuerdo? ¿O
acaso no encerraban pensamiento alguno y el cansancio de mi vista
era la causa de que se me representaran dobles en el tiempo, como
a veces ve uno doble en el espacio? No lo sabía. Mientras tanto, Fase de transformaciones
iban viniendo hacia mí; aparición mítica acaso, ronda de brujas o
de normas que me proponían sus oráculos. Yo me creí más bien que
eran fantasmas del pasado, buenos compañeros de mi infancia, Es una fase en la que ese conjunto de funciones comienza a
amigos desaparecidos que invocaban nuestros comunes recuer- aplicarse sobre lo transformable de algún objeto. En esa segunda
dos. Y lo mismo que sombras, parecía como que me pedían que los fase yo localizo un sujeto activo transformad?~ cOI.l~'elltrando
llevara conmigo, que los devolviera a la vida .... En una encruci-
funciones y un objeto que emite indicios de modiflcabl[¡da~. Esta
jada el coche los dejó atrás. El coche que me arrastraba en
dirección opuesta a lo único que yo consideraba como cierto, a lo fase también puede ser inconsciente, es decir, se están trabajando,
que me hubiera hecho feliz de verdad, y se parecía en eso a mi vida. se están maquinando operaciones en el interior del ce~ebro, so?:e
Vi cómo se alejaban los árboles, agitando desesperadamente sus la base de registros c...
extero. o interoceptivos, y sólo se tiene nOCIOn
brazos, cual si me dijeran: 'Lo que tú no aprendas hoy de nosotros de alguna de esas operaciones.
nunca lo podrás saber. Si nos dejas caer otra vez en el camino ese Esta es una larga fase, es la fase de la elaboración creativa
desde cuyo fondo queríamos izamos a tu altura, toda una parte de donde ocurren innumerables procesos de transformación. Quiero
ti mismo que nosotros te llevábamos volverá por siempre a la subrayar algunos de sus movimientos, que parecen seruni versales.
nada'. Y, en efecto, aunque más adelante encontré otra vez esa
clase de placer y de inquietud que acababa de sentir, y una noche En general son movimientos donde el objeto es constantemente
meentregué a él-tarde, sí, pero para siempre-, ello es que nunca desestructurado y reestructurado, es decir, se oscila entre desarmar
supe lo que querían traerme esos árboles ni dónde los había visto. y rearmar algo. se desmontan conjuntos, se arman partes: se en-
Y cuando el coche cambió de dirección, les volví la espalda y dejé sayan nuevos montajes de las partes. Bateson caractenza ese
de verlos, mientras que la señora de Villeparisis me preguntaba por procesamiento en términos de dos dinámicas básicas: una que lla-
qué estaba tan preocupado; me sentía tan triste como si acabara de ma dispersión y otra que llama seleccián." La dinámica de

210 211
----.J

dispersión-selección es la dinám ica de un procesamiento donde el Frcud, cuando él toma las conductas sexuales y las desarma
obJe~o es descompuesto en todos sus elementos. dispersado al enteramente. Separa una conducta sexual en pulsiones porun lado,
máximo, X luego se en~ayan procesos de ordenamiento, procesos y objetos sexuales por el otro. Ot ro salto insólito. Porque hasta ese
d? selección, En estos Juegos de desestructuración y reestructura- momento se pensaba que el objeto de la sexualidad era naturalmen-
cl~n se abren dos grandes caminos de la creatividad: l) se forman te un cuerpo y en especial sus genitales. Freud inventa esa
unidades nuevas, allí donde no existían previamente tales unida- descomposición en unidades no esperadas, que se constituyen en
des; 2) se descomponen conjuntos en partes. en elementos que nuevas piezas para ese conjunto, rcformulado, de la "sexualidad".
~asta entonces no eran reconocidos como posibles elementos Volvemos a esta fase de interacciones sujeto-objeto. El resul-
~~tegrantes de esos conjuntos. Rilke lo expresó sintéticamente así: tado de ese largo proceso elaborativo es la emergencia de un objeto
Crear es hacer de muchas cosas, una cosa, y de la mínima porción modi ficado. que abre el espacio dinámico de una tercera fase en el
de una cosa hacer un mundo".?" Dijo de Rodin: "El destaca en el proceso creativo.
he~ho, (~espués de habcrlo observado. una cosa independiente ...
~Sl, un fragmento de brazo, de pierna, de torso. advicnc, bajo sus
ojos, un todo"."
Fase de culminaciones
Proust lo analizó en términos semejantes:

El genio artístico obra a la manera de esas temperaturas sumamen- En la tercera fase, junto con el surgimiento del objeto modi Iicado,
te elevadas que tienen fuerza para disociar las combinaciones de emerge un sujeto modi ficado por los procesos de transformación
los ¡ítomo~ y agruparlos otra vez con arreglo a un orden enteramen- \ que ha operado. Creo posible reconocerla como etapa de encuen-
te contrano y que responda a otro tipo. tro entre el sujeto y el objeto de la creatividad. En ese trabajo se ha
creado alguna "buena forma" (gcstalt) y ese objeto reestructurado
En. realidad esos dos movimientos se ven muy claros en presenta novedad, tiene alguna cualidad reveladora. Ese objeto de
cualquier desarrollo crcativo. Tomaré un claro ejemplo en el la creatividad en esta tercera fase del proceso creativo es 1.111 objeto
desarrollo del pensamiento de Frcud. Cuando Frcud desarrolla la alcanzable, se ha hecho localizablc. Una escultura, si es lograda,
teorí~ d.e la sexualidad en Tres ensayos+ realiza esos dos grandes contiene en su materialidad al objeto de la creatividad, sustentado
m~)vlmlent?s en el p.roceso de crear una teoría. El primer movi- en el interior de las relaciones trazadas en esa materia trabajada.
nucnto de formar unidades nuevas lo realiza así: allí donde hasta Destaco que ese objeto es alcanzable. que penn itc algún encuen-
entonces había por un lado niños normales. por otro lado adultos tro entre sujeto y objeto, ya que esta condición va a hacerla entrar
perversos, ~rcud crea una nueva unidad que se llama "universali- en contrapunto con aquellas zonas del psiquismo para las cuales se
dad de los fenómenos perversos polimorfos", que abarcan tant~ a ha hecho posible teorizar un objeto no alcanzable (tal sería el
los adultos perversos como a los niños normales. objeto de la sexualidad infantil). El objeto de la creatividad se ha
La creación de esa unidad expresa un fantástico salto creativo constituido en cuanto ha encontrado una estructura que lo convier-
~l s:~lto está en armar una nueva unidad. allí donde nadie s~ te en "un todo suficiente", "capaz de sostenerse por sí 111ismo".82
ll~lagInaba q~e e~istier~: la unidad entre el niño y los perversos. Ese encuentro de objeto y sujeto contiene una experiencia de
digamos '141 Insólita unidad con la que se funda la teoría de la culminación, de realización. y el cuerpo efectúa registros de esa
sexualidad infantil. integración. El cuerpo la acusa como experiencia de plenitud, de
La segunda línea de procesos creativos (cuando se dice: se armonización. Ese registro tiene resonancias en el sistema
descomponen conjuntos en elementos hasta entonces no reconoci- ncurovcgcrativo. Las vicisitudes viscerales de las diferentes fases
dos como posibles) está en la misma teoría de la sexualidad de del proceso crcatívo han sido testimoniadas pornumerosos autores /1

212
213
que decirse que el filme que se está rodando es el último. Se debe
(tengo presentes muchos de esos testimonios puestos en palabras tener el valor de renunciar al siguiente"."
poéticas por Miguel Hemández, por Pablo Neruda, entre otros). Proust ha dado una imagen precisa de ese itinerario de despren-
Estudios e1ectroencefalográficos realizados en la clínica Mennin- dimientos que rige el devenir del sujeto de la creatividad: "todo
ger pueden dar cuenta de esos movimientos orgánicos de la creador es ciudadano de una patria desconocida diferente de
actividad creadora, que se acompañan de trazos de ondas cerebra- aquella que le dio origen"." Esto supone en el sujeto de la
les especiales (ritmos "theta") según los estudios de ElmerGreen. 83 creatividad una especial vocación de exilio. El objeto tiene que ser
superable para el sujeto. Esta ley establece inevitables ansiedades
propias de separaciones y duelos, que resultan entonces consustan-
ciales con el despliegue de esta fase de los procesos creativos. Pero
Fase de desprendimiento
el sujeto se desprende del objeto en un movimiento más profundo,
por el cual tiene que desprenderse de sí mismo. Desprendimiento
La cuarta fase de este proceso puede ser caracterizada como etapa de sí supone en primer lugar desmontar las estructuraciones
de separaciones. Etapa en que el sujeto de la creatividad tiene que funcionales gestadas en el proceso de constituir el objeto creativo.
desprenderse, porque la función esencial de las funciones que lo Implica tam bién rechazar un anclaje en las representaciones del sí
constituyen es seguir transformando y transformándose. No pue- mismo aparentemente "confirmadas" en ese proceso (identifica-
de, ese conjunto de funciones, permanecer adherido a la forma que ciones narcisistas del yo ideal y contenidos socialmente aceptables
ha constituido. Esto obliga a iniciar un trabajo de separación, del ideal del yo). El sujeto de la creatividad, a través de su
trabajo que supone pérdidas, procesos de duelo. movilización, rechaza tal captura identificatoria, desconoce al ego
Esta fase está indicada por muchos autores. Guillén termina su , (soporte de la identidad "personal") en cuanto éste tiende a
poema con esa imagen: "y yo lo veo alejarse". Termina de crear su configurar formas y contenidos estáticos, con aspiraciones de
objeto y entonces el sujeto tiene que tomar distancia. Ese aleja- absolutos. Vemos en estas oposiciones trazarse cont1ictos entre la
miento es proyectado por Guillén al objeto y cree ver entonces que persona y el sujeto de la creatividad.
es el poema el que se aleja. Se ha reiterado la "experiencia de soledad" como una constante
para todo individuo comprometido en una búsqueda creadora. Es
Tu aventura de mañana debe tener otras razones" soledad con respecto a los otros, dada la singularidad de las propias
capacidades transformadoras. Pero es ante todo soledad consigo
El sujeto debe desplazarse, continuar su viaje incesante: mismo: el sujeto de la creatividad no se apega al self, no lo
conforta, dado que no se alberga establemente en el interior de
Si me has perdido en alguna parte, busca en otra" (Whitrnan)." límites ya trazados, no admite una cristalización que pueda dar por
"realizado" al narcisismo de esa persona.
"El sabio, realizada su obra, no permanece" (Lao - Tse).86 El narcisismo exacerbado que parece acompañar a una intensa
\ actividad creativa?? puede ser comprendido como una afirmación
Fellini 10 testimonia así: "yo no soy coleccionista, no conservo reactiva, frente a ese incesante socavamiento de los soportes
nada; quiero nacer todos los días"." Esa experiencia re11eja, de identificatorios, cuestionados por un procesamiento deses-
modo consciente en Fellini, lo que el sujeto de la creatividad en sus tructurante, movilizador de todas las formas, liberador de energías
procesos inconscientes debe realizar como desprendimientos, anónimas. El lugar del sujeto de la creatividad es el no lugar, allí
como desapego. Le preguntan cuál es la película suya que más le "donde el ser y el no ser se engendran mutuamente"," espacio de
interesa y él no vacila en contestar: "la que tengo por hacer". El enlace entre innumerables puntos en una trayectoria de despla-
desapego toma en Bergman esta otra expresión: " ... siempre hay zamientos.

215
214
Nada soy yo psiquismo: en los acoplamientos y las contradicciones entre siste-
cuerpo que flota. luz. oleaje. mas de repetición y sistemas de transformaciones. En ese nudo de
todo es el viento
tensiones que Sartre sintetizó así: "Todo padecimiento lleva
y el viento es aire siempre de viaje."
consigo, oculta, alguna empresa".
Cada una de estas fases suscita en el individuo, como en el Picasso agregaba: "Si hay algo que me horroriza, es copiarmc
grupo. ansiedades y defensas peculiares, que se presentan como a mí mismo. He copiado a muchos otros, he tomado elementos de
obstáculos para el desenvolvimiento del proceso creativo. Un muchos autores, lo intolerable es copiarme a mí mismo". Expre-
rel?vamiento de esas diferentes ansiedades será para nosotros saba así a un sujeto cuya leyes el cambio."
objeto de otra comunicación. El mismo se nos presenta como el Borges, a los 84 años, dice: "Vivo mirando al futuro".
fUl~damento de una "clínica de la creatividad" esencial para los Jean Coctcau, a su vez, transmitía así esta ley del movimiento,
enfoques pedagógicos y terapéuticos.* inherente al sistema creativo: "La belleza es una dama en marcha,
desplaza las líneas y su último movimiento será el válido, aunque
sea el que haga derrumbarse a las formas que él mismo ha creado".
Rosolato, desde otros códigos, es coincidente:
El movimiento transformador como ley del sistema creativo "El arte, ante todo, exige una movilidad ejemplar respecto a la
ley: digamos más bien que sus reglas se tienen que inventar cada
De este conjunto de fases se desprende una ley: el movimiento. Lo vez, o aparecérsenos en su inagotable novedad; en este sentido una
que sus funciones y estructuras tienen que realizar inexorablcmcn- , creación lleva siempre .cn su interior su propia revolución".
t,e, es su destino de movilización. Detenerse en una de aquellas "En realidad el arte sólo florece con el misterio de la ley que
tases es congelar el sistema, dcsarticularlo. . debe guardar su ambigüedad, invencihle y móvil a la vez, irrcductible
Picasso ha dicho: "la repetición es contraria a las leyes del y renovahle mediante un movimiento que lleva la obra fuera de los
espíritu". Esta aseveración puede resultamos asombrosa. La in- senderos trillados" :)~
vcstigación psicoanalftica "del espíritu" 10 ha encontrado una y
otra vez asentado en la repetición. La contradicción puede aclarar-
se, si .pensamos que se trata de zonas diferentes del aparato
psrquico. En el mundo de las experiencias infantiles de fijación Tres principios, tres sistemas
rigen las repeticiones. En el mundo de los desarrollos creativos
(que van también implicados en los movimientos evolutivos de
progresión) la repetición es rechazada en cuanto antagónica con la La investigación de la creatividad, de sus modos de funcionamien-
ley de este sis~ma, que es la transformación. to en el psiquismo. nos lleva a reconocer que en la misma se asiste
Aquí ubicamos nuestra más amplia mirada clínica sobre el al despliegue de una "otra escena" que aquellas de lo sexual o del
conocimiento de lo real ya constituido. Sexualidad, construcción
* Nos importa asimismo ahondar en los sentidos de "crear en la clínica". Picra cognitiva de lo real, creatividad, parecen ser resultados de diferen-
Aulagnicr ha hablado especialmente de la creación que es propia deltrahajo terapéutico, tes modos sistérnicos de organizarse mecanismos y procesos de la
mencionando: la creación por el paciente de una nueva versión de su historia personal. mente y la conducta humanas.
creación por el analista de un saber cada vez que construye con el otro algo nuevo e
inesperado, creación de una historia del vínculo terapéutico. y algo 'Iue no cxplicita, pero
La diferenciación de estos sistemas ahre para nosotros varias
sugiere como "creación de un objeto psíquico" y que nosotros podemos pensar como la líneas de investigación. Una de las más amplias puede ser formu-
configuración de Ull objeto de la creatividad en cltrahajo con el psiquismo como objeto." lada de este modo: ensanchar los alcances de la oposición que

216 217
Bibliografía
Freud encontró en el psiquismo entre "principio de placer" y
"principio de realidad". Porque reconocer aquellos diferentes
modos de funcionamiento psíquico en cuanto expresión de distin-
tos sistemas, nos lleva a indagar la posibilidad de que tal diferen- 1. BAUDRILLARD, Jean, De la seducción, Madrid, Cátedr~, 1.9~1.
2. FREUD, Sigmund, Farrnulaciones sobre los dos prinCipIOS del acaecer
ciación se realice en términos de aquellas dos categorías básicas:
psíquico (1911), Buenos Aires, Amorrortu , 1980 ..
cada sistema entraña un distinto "principio de placer", que le es 3.-, Pulsiones ydestinosdepulsión (1915), Buenos ~Ires, Amorrortu, 1979.
propio (dado por la tendencia al cumplimiento de sus destinos 4.-, Introducción del narcisismo (1914), Buenos Aires, Amorrortu, 1979.
pulsionales mediante operaciones específicas), y de un modo S. -, El yo y el ello (1923), Buenos Aires, Amorrort~: 1979: , .
correlativo sostiene un distinto "principio de realidad", que es 6. LAcAN, Jacques, "Lectura estructura lista de Freud ,Escritos 1, México,
inherente al tipo de objetos que constituye por el funcionamiento Siglo XXI, 1971. Escritos 11,~éx ic?, .S.iglo XXI, 1?7S ..
7. LEcLAIRE,Serge, El objeto del pSlcoanal/Sls, Buenos Alre~, Slglo~, 19?~.
especial que tiene como sistema. 8. BARANGER,Willy y col., Aportaciones al concepto de objeto en pSlcoanall-
Se nos plantea también ampliar los fundamentos dinámicos de sis, Buenos Aires, Amorrortu, 1980. .'
una tesis, resultante de numerosas observaciones y exploraciones 9. WINNICOTI,Donald W .. Realidad y juego, Buenos ~Ires, Granica, 1972 ..
fenomenológicas, que con Deleuze," encontramos sintetizada en 10. ARIETI, Silvano, Creativity. The magic synthesis, Nueva York, Basic
las indagaciones proustianas: que el sistema creativo es capaz de Books, 1976. .,,, P' ,
11. ANZlEu, Didier, "Hacia una metapsico1ogía de la creacion ,en sicoana-
absorber, integrar y realizar en un nivel más alto, transformándo- lisis del genio creador, Buenos Aires, Vancu, 1978 .. , .
las, las determinaciones que los sistemas sexual y cognitivo 12. GUlLLAUMIN, Jean, "La creación artística y la elaboración con.s,clent~ ~e I,?
sostienen de modos más delimitados, constreñidos. , inconsciente con consideraciones particulares sobre la creacion poética ,
Precisar las articulaciones que sustentan esa generalización, en Psicoanálisis del genio creador.. ." . , .. '
promete ensanchar las bases teóricas para las experiencias que 13. JACQUES,Elliott, "Muerte y crisis de la mitad de la vida, en PSlcoanal/Sls
estamos registrando sistemáticamente en el campo de las del genio creador. .'
psicoterapias. Las que indican que la eficacia en profundidad y en
14. MAY, Rollo, La valentía de crear, Buenos Aires, Emece, 19.68. .,
15. Mxstow, Abraham, El hombre autorrealizado, Buenos Aires, Kairós,
\I
extensión del trabajo clínico depende de asentar la relación tera- 1968. \ ..
péutica, el encuadre y las tareas indagatorias e interpretativas sobre 16. ERIKSON,Erik, "Reflexiones sobre el ciclo de VtGa del doctor Borg. ~as
un eje de creatividad." Es sobre la base de una dirección orientada fresas silvestres", en La adultez, México, Fondo de Cultura ECOnOlTIlCa,
I
hacia la creatividad del paciente y del vínculo terapéutico que se 1981. . V·
17. PERLS,Frederick, Sueños y existencia, Santiago de Chile, Cuatro lentos,
hace posible dinamizar la experiencia de enfrentar y develar los
1974. . tlti B .
obstáculos propios de la enfermedad.": 99 18. ZINKER,Joseph, El proceso creativo en la terapia guesta tica, uenos
El paciente, como el terapeuta, deben colocarse, en nuestra Aires, Paidós, 1979. . .
orientación, en actitud de asumir la creatividad potencial que, en 19. DAVIS, Gary y SCOTI, Joseph, Estrategias para la creat/vldad, Buenos
tanto universal, late también en ellos. Un reconocimiento de base Aires, Paidós, 1975 . . A'
20. TORRANCE,E. Paul, Orientación del talento creativo, Buenos ires,
que 6istala una actitud, expresada por Rilke.'?? en sus vastos
Troquel. 1969. .
alcances: 21. BATEsoN.Gregory. Espíritu y naturaleza, Buenos Alres',~morrortu. 198?
"Todos somos nómades, en cuanto tenemos que llevar con 22. SARTRE,Jcan-Paul, "Cuestiones de método",en Critica de la razon
nosotros esa parte de grandeza que nos pertenece, en lugar de dialéctica, Buenos Aires, Losada, 1960. . .
23. SUZUKI,Daisetz, La doctrina zen del inconsciente, Buenos Aires, Kier,
dejarla depositada donde reside la grandeza".
1974.

"
219
218
24. HERRWEL, Eugcn, Zcn en el arte del tiro con arco Buenos Aires Kier 52. SAMI-Au, M .. Cuerpo real. cuerpo imaginario. Buenos Aires. Paidós,
1974. ... ,
1979.
25. WATTS, Alan. El camino del un. Buenos Aires, Sudamericana. 1975. 53. HE.~SE. Hermann, Narziss y Goldmund, Obras Completas. t. 111. Madrid.
26. RAJNEESII,Bhagwan, O ciprestc no jardim, San Pablo, Soma, 197R. Aguilar, 1979.
27. LAo- TSE. "Tao-te-king", en Filosofía oriental. Barcelona. Zeus, 196R. 54. GUlLLAUMIN,lean, ob. cit.
2R. Lu-CIII. "Ensayo sobre la literatura". en Textos de estética taoist a 55. Kxrs, Ernest, "Sobre los procesos mentales preconscientcs", en Psicoaná-
Barcelona. Barral, 1975. . lisis del arte y del artista. Buenos Aires, Paidós, 1964.
29. PICIION RIVIERE. Enrique, El proceso grupal, Buenos Aires Nueva Visión 56. GUlLLEN. Rafael, Tercer gesto. Madrid, Cultura Hispánica, 1967.
1975. ' . 57. MACHADO, Antonio, Manuel y Antonio MACHADO, Obras Completas.
30. p,\ V~OVSKY. Eduardo .."Historia ~~ un espacio lúdico". en PAVLOVSKY,E. y Madrid, Biblioteca Nueva, 197R.
KI~~SI"LMAN..II .Espacias y creatividad, Buenos Aires, Búsqueda.I 9RO. 58. FRElID, Sigmund, Formulaciones .... ob. cit.
31. Moccro, Fidcl, El taller de terapias expresivas. Buenos Aires Paidós 59. SARTRE, Jean-Paul, Las palabras, Buenos Aires, Losada, 1964.
19RQ . .,
60. MACHADO, Manuel, op . cit.
32. MAGRl'ITE. Rcné, "Lifclinc", View. vol. 7. No. 2, diciembre de 1946. 61. HE.~SE,Hcrmann, ob. cit.
n
33. P~OlJST, Marccl, En busca del tiempo perdido, vols. I. y VII, Barcelona. 62. PRUYSER,Paul, "An cssay on crcativity", BuU. Menninger Clinic, vol. 43,
Alianza. 1970. 4, 294-353, 1979.
34. PAVESE. Ccsarc, El oficio de poeta, Buenos Aires, Nueva Visión, 1957. 63. SARTRE, Jcan-Paul, Las Palabras. ob. cit.
35.-. La poética del espacio. México, Fondo de Cultura Económica, 1975. 64. Lu-CH!, ob. cit.
36. BATEsoN. Grcgory, ob. cit. 65. DAVIS, Gary y Scott , Joseph, ob. cit.
37. PIAGET, lean, "Algunos aspectos de las operaciones" (1972), en lean 66. SARTRE,Jean-Paul, Las Palabras. ob . cit.
11~~ET, KOJ~ad LORENz y Erik ERIKSON. Juego y desarrollo. Barcelona, 67. MATUSSEI\, Paul, La creatividad. Desde una perspecriva psicodinamica.
Crftica, 198_. Barcelona, Hcrder, 1977.
3R. WINNlcorr, Donald W., ob, cit. 68. BERflMAN, Ingmar, ob. cit.
39. RE,\!>. Hcrbcrt, "Modos inconscientcs de integración". en Educación por 69. BORGES, Jorge Luis. El hacedor. Buenos Aires, Emecé, 1971.
el arte. Buenos Aires. Paidós, 1977. 70. CIIASSEGUET-SMIRGEL,Janine, "Rcflcxions sur le concept de 'reparation ' et
40. SARTRE, Jcan-Paul. El escritor y su lenguaje. Buenos Aires, Tiempo la hiérarchie des actes créatcurs", en Pour une'psychanalyse de l' art et de
Contemporáneo, 1971. la créativité, Paris, Payot, 1971.
41. FELI.lNI. Federico. "Entrevistas". en Fellini por Fellini, Madrid. Funda- 71. S~mLLEY,Pcrcy B.,Defensa de la poesla, Buenos Aires, siglo Veinte, 1978.
mentos. 197R. 72. MICIIAUX, Hcnri, Poemas. Buenos Aires, Fabril, 1960.
42. BERGMAN.lngmar. en BJORKMAN,S., MANNs, T .. Y SIMA. L, Conversaciones 73. DE M'UzAN, Michcl, Del arte ala muerte. Un itinerario psicoanalítico,
con lngmar Bergman, Barcelona, Anagrama, 1973. Barcelona, Icaría, 1978.
43. LOWEN, Alcxandcr, Plcasure, a crcative approacli /0 lile. Nueva York, 74. CAMUS, Albert, "lonas o el artista en el trabajo", en El cxilio y el reino,
Pcnguin Books, 1970. Buenos Aires, Losada, 7a. ed., 1974.
44. MM¡RI"ITE, René, e'n TORCZYNER,H. y MAGRI1TE. R., Ideas and lmages, 75. BAcHELARD, Gasten. ob. cit.
Nueva York. Harry N. Abra1ns Iuc., 1977. 76. SARTRE,Jcan-Paul, Las palabras, ob. cit.
45. GUIl.LAUMIN.lean, ob. cit. 77. PIWUST, Marccl, ob. cit.
46. ROTIIENIlERG.A .. "Thc proccss 01' Janusian thinking in crcativity", Arch. 78. BATI~~ON,Grcgory, ob. cit.
Ceno Psvchiatr», 24: 195,1971. 79. Rll.I\E, Raincr, Cartas a Rodin, Buenos Aires, La Pléyade. 1971.
47. BERGMAN,lugmar, ob, cit. 80.-. Rodin, Buenos Aires, Goncourt, 1977.
48. BAcllELARn. Gasten, La intuicián del instante. Buenos Aires Siglo Veinte 81. FREUD, Sigmund, Tres ensayos de Tcoria sexual (1905). Buenos Aires,
1973. . ,
Amorrortu, 1978.
49. KEATS. John, "Oda a un ruiseñor", en Poesía completa. Barcelona. Río 82. PAVESE,Cesare, ob. cit.
Nuevo, 1980. 83. GREEN, Elmer y col. "Psychophysiological training for creativily",Annual
50. KOI~nLER. Arthur , The act o/ crcation, Londres, Hut~hins{)n. 19M. Meeting. Amcr. Assoc. Psychology, 1971.
51. BACllELARD,Gasten. La intuición del instante. ob. cit. 84. PAVESE, Cesare. ob. cit.
r "
220 221
85. WHITMAN,Walt, "Canto a mí mismo", en Poesía completa, Barcelona, Río
Nuevo, 1979.
86. LAo- TSE, ob. cit.
87. FELUNI, Federico, ob. cit.
88. BERGMAN,Ingmar, ob. cit.
89. PROUST,Marcel, ob. cit.
90. MATUSSEK,Paul, ob. cit.
91. LAo- TSE, ob. cit.
92. PAZ, Octavio, Condición de nube, México, Poetas, 1944.
93. AULAGNIER,Piera, El sentido perdido, Buenos Aires, Trieb, 1980.
94. - Entrevistas para la televisión francesa, 1971.
95. Rosot.xro, Guy, "Las artes plásticas en un sistema de bellas artes", en
Ensayos sobre lo simbólico, Barcelona, Anagrama, 1974.
96. DELEUZE,G., Proust y los signos, Barcelona, Anagrama, 1972 .
97. FIORINI,Héctor, "Repetición y diferencia. Propuestas del paciente y del
terapeuta para el desarrollo del proceso", en FIORINI,H. y PEYRU,G.,Aportes
teórico-clínicos en psicoterapias, Buenos Aires, Nueva Visión, 1978.
98.-, Teoría y técnica de psicoterapia, Buenos Aires, Nueva Visión, 6a. ed., APENDICES
1982.
99. -, "Estructuras psicopatológicas y su abordaje en psicoterapias", IV
Congreso Argentino de Psicología, Buenos Aires, Centro de Estudios en
Psicoterapias, 1980.
100. RILKE,Rainer, ob. cit.

222

r
PSICOFARMACOS
y PSICOTERAPIAS PSICOANALITICAS*

Dentro de esta amplia temática que hoy nos ocupa, el Dr.


Moizeszowicz.coordinador dcl panel, me propuso que me refiriera
espccíficamcntc a cómo intervienen los psicofármacos en las
psicotcrapias, dentro de mi práctica clínica.
Si bien las pslcoterapias con las cuales trabajo. son de orientación
, psicoanalíüca, habrá muchos aspectos teóricos del psicoanálisis
que no voy a recorrer y entiendo que los colegas que me precedieron.
en parte, ya 10 han hecho.
Trabajo con una psiquatria y una psicología principalmente de
orientación psicoanalítica, tomando al psicoanálisis, desde Frcud,
como un sistema abierto. es decir un sistema en constante investi-
gación. que debe crecer por estudios de intradisciplina y de
interdisciplina.
Entiendo un psicoanálisis abierto a las ciencias humanas. a las
ciencias biológicas, a la medicina. a la ecología, a la filosofía, a
las epistemologías que de la filosofía surgeny a la vez abierto a toda
práctica en la cual ese psicoanálisis se aplique y se vea interrogado
y también desafiado. es decir. cuestionado en sus premisas.
Me interesaba entonces pensar que la interdisciplina. como
trabajo de frontera entre el psicoanálisis y otras disciplinas, es
un trabajo en los límites. donde no solamente se trata de confrontar
. respuestas sino también un lugar donde intercambiar los propios
interrogantes.

*VlII Congreso Argentino -de Psiquiatría. Buenos Aires, setiembre de 1992.

225
de sistemas. Los modelos tópicos propuestos por Freud, en la
Sobre la situación de las relaciones entre teoría y práctica me primera y segunda tópica postulaban una diversid.ad de sisteI?as.
parece interesante destacar un comentario de Deleuze y Foucault La misma diversidad como modelo en el pensamiento freudiano
acerca de estas relaciones aparecía en su pensamiento del síntoma como resultante de efectos
Ellos decían que habitualmente nosotros suponemos que te~~a de convergencia de series complementarias cuando pensaba en la
y práctica forman un mundo unificado y que cuando nos ad~cnbl- constitución, la experiencia infantil o el acontecer actual como
mos a una teoría, con esa teoría suponemos que trabajamos. serie causales convergentes. Estaba usando aquí un modelo de
Deleuze y Foucault restacan que el universo de los discursos de la diversidad de sistemas.
teoría y de la práctica no son un solo universo, no conforman un En el trabajo clínico, yo trabajo especialmente con pacientes
solo discurso, sino que son por 10 menos dos espacios que tenemos neuróticos (en donde aparecen en forma habitual trastornos de
siempre en cierta discordancia: el trabajo es ver cómo los ponemos orden fóbico, histérico, obsesivo) y con ciertas patologías del
en relación. narcisismo. Patologías narcisísticas, no en la acepción freudiana
En ese punto me pareció interesante una reflexión de ellos: que tomó el Dr. Avenburg, sino al estilo de la nomenclatura de
decían que más de una vez una teoría llega a un punto de desarrollo autores americanos como Kohut o Kernberg, donde los trastornos
más allá del cual se detiene, es decir para el desarrollo de esta teoría del narcisismo aparecen involucrados en problemas clínicos tales
se levanta de pronto una especie de muro que no le permite ir más como los de la personalidad infantil, los pacientes psicosomáticos,
allá. los adictos y los síndromes fronterizos.
Decían que muchas veces lo que va a perforar ese muro es una Con este tipo de pacientes veo indicada la medicación con
práctica. La práctica le va abrir la visión a un replanteo teórico y , psicofármacos en situaciones de intens~ angustia, depresión s~ve-
sobre esa ret1exión a mí me interesaba ver lo inverso. Pensar que ra y en el insomnio que acompañan habitualmente a esos dos típos
toda práctica en nuestra profesión se detiene de pronto y encuentra de trastornos. Considero las situaciones de la práctica clínica que
un muro y que el muro de detención de-esa práctica va a tener que estoy delimitando, que no son todo el ámbito de la práctica clínica.
ser perforado por algún replanteo teórico, alguna teoría va a tener ¿Cuándo indico una medicación psicofarmacológica?
que venir a abrir el muro de una práctica que se ha encerrado y se Yo no empleo en modo alguno la medicación como hábi~o o
ha empobrecido dentro de sus propios Iímites. rutina, sino COI)lO una indicación especial en un momento particu-
y o trabajo en especial el área de las denominadas psicoterapias lar y como una aplicación puntual en el tiempo. Es decir es una
psiconalíticas, que tomando las teorías freudianas y de otros indicación farmacológica que comienza y termina en un tiempo.
continuadores, trabajan con esas teorías como ejes de referencia en En general con este tipo de pacientes con los que yo trabajo, el
diversos contextos clínicos y técnicos. tiempo de la medicación a 10 sumo suele oscilar entre dos semanas
Diversos en cuanto a los tiempos en que se ejercen (abo rdajes de y el mes y medio. .
tiempos limitados, intermedios, prolongados o sin límites de Estaba reflexionando, estimulado por la pregunta del coordina-
tiempo). En ámbitos variables que pueden ser prácticas privadas, dor del panel, acerca de cuáles son las situaciones en las que me
hospitalarios, comunitarios y barriales. Se trata de psicoterapias parece necesario utilizar la medicación en el interior de un proceso
que trabajan con individuos, grupos e instituciones. Busco muchas de trabajo verbal de orientación psicoanalític~. . .
veces la articulación, en lo que llamamos a menudo enfoques Veo dos situaciones, aparte de las ya refendas sttuaciones de
situacionales, en donde se indaga y se opera sobre las relaciones angustia o depresión.
individuo-grupo-institución con sus correlaciones y posibles arti- Básicamente creo que hay dos momentos clínicos que me
culaciones. resultan disparadores de la indicación de medicación:
Las psicoterapias psicoanalíticas operan sobre una diversidad

227
226
J. Cuando el trabajo verbal. interpretativo y elaborativo, no nes de orderi económico del psiquismo. en esto concuerdo con los
aporta efectos sobre esta angustia y esa depresión severa. es decir colegas que me precedieron. para permitir restablecer un trabaajo
aquellas ocasiones en que se nota que la palabra no alcanza. Son en lo verbal. recuperar las condiciones elaborativas e intcrprctativas
situaciones especiales del proceso que tengo que evaluar. no en una de un trabajo que se presentaba detenido. interferido.
sola sesión sino a lo largo de varias sesiones. para comprender que En ciertos casos. el uso de la medicación interfiere circuitos
el trabajo en lo verbal se detiene. no puede producir efectos patogénicos, tal es el caso de los pacientes psicosomáticos ..Por
mediante la palabra. ejemplo. un paciente con una úlcera gastroduodenal de ongen
2. En situaciones clínicas cuando la intensidad de esa angustia claramente tcnsional, conflictivo. Si no se atenúa el monto de
o de esa depresión es tal. que ya no se puede ahondar en la búsqueda angustia. el daño en los tejidos irá en aumento y la lesión. leve en
del trabajo verbal. Es decir o el trabajo verbal no produce efectos un comienzo. ocasionará lesiones mayores. produciendo una úlce-
en la angustia o bien la angustia no permite aportar efectos para el ra sangrante. En cambio si se disminuye el monto de excitación. el
trabajo verbal. Ya no hay aportes en la búsqueda de la elaboración. daño en la mucosa gástrica se hará más fácilmente reversible, en
que el trabajo de la palabra en forma habitual permite hacer en una un lapso más breve.
psicoterapia de orientación psicoanalítica. El insomnio es también parte de un circuito patogénico en la
depresión. El insomnio produce en el paciente depresivo una
Indudablemente como mencionaron ya algunos miembros del profundización de la depresión. En ese sentido la indicación de un
panel nosoiros trabajamos en la clínica con fenómenos del orden psicofármaco hipnótico. en un cuadro depresivo. contribuye a
cualitativo. Podemos entonces hablar de distintos tipos de calidad cortar el circuito patogénico de la enfermedad.
de ansiedades. es decir ese temor Ióbico, aquella ansiedad En ese sentido creo que nosotros podemos ubicar el uso de la
persecutoria, pero la clínica también se hace de cantidades. medicación como una terapéutica que no enmascare sino que sirva
Este aspecto cuantitativo. es el tema que vino remarcado por al develamiento y a la regulación de montos de angustia útiles.
algunos miembros del panel. Nosotros no trabajamos solo con Pensamos que la angustia es útil cuando aparece como indicador
cualidades. sino también con las intensidades de los fenómenos. de la existencia del conflicto. Cuando el yo registra la existencia
Como en la medicina uno pregunta cuánto es el dolor. en la clínica del conl1icto porla presencia de la angustia y ese registro lo mueve
nos preguntamos cuánta es la angustia o la depresión. a la búsqueda. en su proceso psicoanalítico.
Esta referencia a las cantidades nos permite tomar en cuenta a Pero también existen angustias de características inútiles. como
ciertos modelos teóricos, que Frcud desarrolló como modelo la que inunda con frecuencia a los pacientes bordcrline. ~a
económico de funcionamiento del aparato psíquico. Una hipótesis característica del síndrome fronterizo es tener un grado de angustia
acerca de que en los procesos psíquicos interviene una circulación incontrolable. esa angustia no le sirve a nadie y menos al paciente.
y distribución de cantidades de energía de origen pulsional suscep- Otros tipos de angustias "inútiles" son las que aparecen en las
tibles de aumentos. disminuciones y equiparaciones. o sea de llamadas crisis patológicas. AqUÍ hago referencia a la teoría de
equivalencias. Kaplan que dice que ... "la crisis aparece como una situación .brusca
Estas cargas de energía. que poseen movilidad y experimentan en las condiciones de vida del sujeto para las cuales el sujeto no
cambios de intensidad. con oposiciones que desarrolló Freud en el estaba preparado; emerge entonces un cierto modo de angustia y
concepto de contracargas. es decir "magnitudes de excitación que el sujeto buscará en un tiempo prudencial alguna respuesta nueva
se desplazan por vías nerviosas", como en J 895 lo afirmé en el para el cambio en sus condiciones. pero si el sujeto no encuentra
Proyecto. nuevas respuestas para las nuevas condiciones que se le han creado
Suponemos que el psicofánn aco interviene sobre esas condicío- en su vida entonces se crea un círeulo visioso que es el incremento

22R 229
•••

de la angustia por la imposibilidad de dar respuesta a los cambios Por último diría entonces que mi postura se mueve en esta
propios de la crisis y la regresión que sigue a esa angustia, que práctica clínica en el punto de intersección de dos polaridades, que
c~ece. y genera ~ntonces un circuito de angustia y regresión, un a menudo aparecen en nuestra especialidad como antagónicas.
círcuito que se mcrementa a sí mismo y lleva cada vez más a Una es la polaridad que cree en la omnipotencia de la palabra,
situaciones regresivas, de desorganización del paciente ..." otra la que cree en la omnipotencia de la medicación. Entre esas
En ese sentido diríamos que en toda crisis patológica se instala
dos polaridades creo que se inserta, al menos es mi práctica clínica,
est~ circuito autoalimentador de angustia y de regresión; la medí- un lugar donde, en esa intersección, entre dos posibles fantasías
cación psicofarmacológica intervendrá para interferir ese circuito omni potentes -palabra y droga- cabe evaluar, en la singularidad
retroalimentado. de cada situación clínica, de cada momento de un proceso terapéu-
Me parece también importante analizar la situación de medica-
tico, de qué modo el trabajo verbal y los efectos químicos están
ción c?mo situación vincular, todo acto de medicar es parte de un llamados a interactuar, complementarse y potenciar sus efectos.
acto vmcular y ese acto habrá que observarlo desde el interior del
proceso vincular, que es lo que comprendemos en términos
psicoanalíticos habi tualmente.
Para la medicación, tiene que haber una alianza, que será parte
de lo que ll~m.amosalianza terapéutica. Esta "alianza prescriptiva",
en forma similar a la alianza terapéutica, hace intervenir en forma
conjunta la conciencia de enfermedad, la expectativa de curación
la disposición ahacerunesfuerzo, a realizar un trabajo para encara;
la problemática que se está tratando.
. Esta alianza prescriptiva tendrá que ser registrada, evaluada e
mterpretada. Se trata de fantasías y de transferencias que se activan
en ese acto. vin~ular y ~n relación con ese objeto tan especial que
es l~ medicación. Objeto que se carga de fantasías mágicas,
ommpo~e~~es y much~ veces de fantasías persecutorias, que
hacen dIfICIl para el paciente asimilar la entrada en su cuerpo, en
su cerebro, de ese objeto extraño que es el fármaco. En ese sentido
los médicos tenemos que asumir que para nosotros el fármaco
puede ser un aliado y para el paciente no necesariamente.
Para nosotro~ puede ser un objeto familiar y para el paciente
puede ser un objeto absolutamente extraño. Portador hasta de eso
ex.t~ño que está en lo siniestro, como decía Freud; en ese sentido
me~lcar es part~ de un arduo trabajo dinámico, profundo, del
paciente y del vmculo.
y ~en.la Medicina, el acto de medicar no permitirá otorgar a la
medicación supuesto alguno de naturalidad: la medicación nunca
es "natural". Tampoco 10es en la Psiquiatría ni en el Psicoanálisis
hay que trabajar la alianza con ese artificio que es toda medicación:

230 231
CA TEDRA DE CLINICA PSICOLOGICA
y PSICOTERAPIAS.
ORIENTACION DEL
PROGRAMA DE LA MATERIA (1993)

En nuestro enfoque privilegiamos la transmisión de la experiencia


de la clínica. Nos proponemos colocar al alumno frente a esa
experiencia y estimularlo a pensar en el contacto con la misma.
Intentamos con esta línea pedagógica avanzar sobre las limitacio-
nes de una enseñanza tradicionalmente tcoricista, que deja al
alumno con serias carencias para su encuentro con el espacio de
prácticas concretas en las diferentes especializaciones de la Psico-
logía.
Cuestionamos del teoricismo el supuesto de que lo esencial
(pretendido como único parárnctro importante) para una orienta-
ción de Psicología Clínica, estaría dado por conceptos y modelos
metapsicológicos. Nuestra referencia permanente es. la obra
Ircudiana, pero colocamos sus teorías en la tensión propia de un
campo heterogéneo, en el cual deben ser articulados conceptos y
acciones concretas: espacio de la práctica que entrecruza mensajes
verbales, actos vinculares, conductas corporales y gcstualcs. Para
revertir la perspectiva unilateral del teoricismo destacamos desa-
rrollos epistemológicos últimos (Fcycrabcnd) que muestran que
ninguna teoría abarca todos los hechos del dominio al cual refiere
sus conceptos. Epistemología también presente en la discusión
que Foucault y Deleuze sostuvieron sobre las relaciones entre
teoría y práctica: se trata de dos universos que se sostienen ligados
por la tensión de sus diferencias y cuyas correlaciones nunca
terminan en un estado de armonía o ajuste final; precisamente en
sus desajustes se sostiene gran parte de la dinámica de toda

233
investigac~ón científica. Por ello el pensamiento psicológico, en social y económica, ética y política. proponemos al alumno
cuanto animado por un espíritu científico, no será terminable registrar en profundidad la acción dinámica con los efectos
en .respuestas a secas, s~no ~omo producción de enunciados hipo- fantasmáticos de esos atravesamientos. Esta comprensión nos
téticos con plena conciencia de transitar siempre en los límites lleva a estudiar modos de abordaje estratégico para demandas
entre un saber y.un no saber, registrando entonces a la vez alcances concretas, por crisis familiares Y conyugales, amenazas para la
y renovados enigmas. estabilidad laboral y pérdidas de empleos con prolongada
Nuestra concep~ión cuestiona la propuesta de Althusser acerca desocupación, crisis vocacionales, problemas evolutivos (adoles-
de que toda práctica sería "práctica teórica". Reconocemos allí cencia, embarazos, lactancias, jubilación, senectud) crisis y erner-
sólo una de las verti~ntes del espacio de la práctica que es sin duda gencias por enfermedades físicas y psicosomáticas, síntomas y
el de la puesta en aC~lón de un discurso. La práctica tiene asimismo consecuencias de alcoholismo y de otras adicciones, entre las
su espesor, su opacidad, su resistencia a hacerse representable y
consultas más frecuentes.
pensable y sus preguntas aún ~in .res¡1Uesta.Es por eso y sólo por Trabajamos entonces en esos puntos coyunturales donde una
eso que Goeth~ p~do pensar: gns es toda teoría y verde el árbol serie de determinaciones heterogéneas realiza su síntesis transver-
de or? de la vida . En esa práctica se verifica una y otra vez lo sal (Sartre), lugar de situación con articulaciones actuales, en las
sugendo por Bachelard: los conocimientos trazan conos de luz en que Piera Aulagnier ha propuesto concebir el cruce entre acontecer
tomo a.los c~ales se dibujan permanentes conos de sombras. Con y fantasma. Nunca sólo el fantasma, nunca el retomar teoricista a
esta ,on~ntaclón la ~ráctica no es mero lugar de aplicación de las las condiciones abstractas de una joven vienesa histérica, sino una
teonas SInOlugarde ingadación, confrontación, creación. Sostene- '1 histeria hoy, en las especiales convergencias que constituyen su
~os en ~aCátedra estudios destinados a esclarecer en especial esas mundo, sus ci rcunstancias singulares, la psicopatología en la
dimensiones creadoras de la práctica clínica.
persona y en la comunidad.
Trabajamos entonces con una doble pregunta: ante un hecho Este abordaje multidimensional nos conduce a fundamentar la
una conducta, un-dato de la clínica ¿cuál es el concepto que podría constitución de equipos interdisciplinarios para el trabajo en salud
dar cuenta d~l mismo? y a la vez, frente a la referencia de un mental, equipos en los cuales el terapeuta individual, como el
conce?to t~?nco ¿Qué observables podrían ofrecemos indicios de grupal (que incluye las tareas con pareja y familia) junto con
su aplicabilidad, hacerle de soportes? actividades de asistencia social, psicodiagnóstico, terapia ocupa-
pe este modo ~eñalamos al alumno que en cada encuentro cional, terapia corporal, musicoterapia, enfermería psiquiátrica y
clínico los de~cu.bnmientos freudianos deben ser puestos en estado acompañantes terapéuticos, en casos más graves, desempeñan
de nuevo nacímiento, encontrar sus fundamentos en soportes allí roles complementarios para esa organización compleja que asume
p~esente~. Le proponemos allí apelar a su pensamiento, diseñar un habitualmente cada situación de consulta. La potenciación de
diagnóstico, un pronóstico, una previsión de proceso posible una acciones de salud que en general logra el trabajo en equipo asume
estrategia de abordaje. ' particular importancia para el abordaje de emergencias psiquiátri-
Otro ~je f~ndamental?e ~uestraorientación reside en el concep- cas, otro de los puntos que nuestro programa remarca especial-
to .de situación. Esto significa no trabajar reductivamente con
mente.
obJet?s ab.stractos (el deseo, el inconsciente, el significante) sino Más allá de reduccionismos de especialidad, de localismos y
en el mtenor de situaciones donde aquellos referentes teóricos se regionalismos técnicos, se trata de abrir la intervención a las
~nc~m~n en la singularidad de individuos concretos, grupos e múltiples referencias que constituyen lo que llamamos realidad
mstítucíones.
psíquica.
En nuestro país las consultas vienen atravesadas por la crisis Fundamentamos entonces una epistemología de multiplicida-

234 235
des. Por la misma se abre para el alumno el espectro de una UNA VISION PERSONAL DE FREUD y SU OBRA*
diversidad de perspectivas. Así por ejemplo no hablamos de
"proceso" en singular sino de diversos procesos terapéuticos, que
responden a diferentes variables (tipos de personalidad
involucrados, diferentes tcmporalidadcs y diferentes objetivos) lo
cual establece diversidad en ritmos, fases, estilos de la comunica-
ción y emergentes. Destacamos entonces que no existe una
psicoterapia que pretenda ser con fundamentos y de modo univer-
sal la científica y correcta para abordar esa diversidad de la clínica.
Lo subrayamos en nuestro programa al distinguir modos de
abordaje que privilegian el insight y la elaboración, de otros que
apuntan a ofrecer continencia y orientación. Distinguimos así estas
propuestas técnicas en sus indicaciones. modos de instrumentación
y efectos clínicos. Frcud: un hombre que logró crearse como sujeto en el proceso de
Nuestra materia. en cuanto clínica, se apoya en los conocimien- crear. laboriosa e inspiradamente. una obra.
tos adquiridos en gran parte de las asignaturas previas. tales como Freud es el nombre de una obra que ha resultado fundadora,
teorías psicoanalít ícas, psicología general, métodos de psicodiag- abierta, inagotable. .
7, Un gran espacio en el que fueron buscando su lugar fuerzas,
nóstico, psicopatología, psicologías evolutivas. psicología social,
grupos. entre las principales. Creemos que la práctica clínica debe , mecanismos, transfonnaciones, deseos, funciones, palabr~s, n~r-
en.riquecerse por el empleo convergente (lo cual supone algo muy mas de la cultura, síntomas. La creación de un cosmos en el mtenor
I
lejano de todo eclecticismo, consistente en el trabajo de elabora- de un aparente caos: nuestra realidad psíquica,. . . r ,

ción crít ica de articulaciones, coincidencias y puntos de disyunción) Es la capacidad de descifrar muchas de las direCCIOnesinternas
de esas múltiples corrientes de las psicologías contemporáneas. de ese caos sin pet rificarlo, ordenándolo a la vez que respetando su
extraordinaria complejidad, su intensa vida.
Esa capacidad y ese cuidado que dieron nacimiento a una
ciencia viva: sólida y frágil, vasta y limitada, capaz de saber y de
ignorar. (Me entusiasma todo lo que el psicoanálisis logra hasta
aquí revelar. Me sorprende y compromete también comprobar
cuánto es lo que llega a desconocer, su P?der de o~u1tar~. ,
Estamos ante el ejemplo de una profunda actitud clenlt~Ca,
basada en la revisión constante de prcmisas y tesis, en la capacidad
de afirmar y de dudar, y volver a dudar de las propias certezas. Ese
movimiento testimonia la ambición y la honestidad del talento:
producir hipótesis audaces, fantásticas aves de vuelo libre, sin

* Colahoración para la muestra Frcud y la conducta del hombre, Sociedad Hebraica


Argentina. Buenos Aires, 28 de novicmhrc de 1980.

237
236
INDICE
dejar de saberse pequeño como para desconfiar de sus alcances y
registrar sus bordes inciertos.
Freud es también el nombre de una producción colectiva, que
se organizó en un autorno como el milagro en la isla, sino a través
de un diálogo total con su mundo; alguien que discutió con muchos
autores, que pudo nutrirse en muy diversos campos de la cultura,
aprender de la experiencia humana en su sentido más vasto.
Alguien inmerso en las angustias de su tiempo que es también el
nuestro: la búsqueda de placer y de realización, el choque con la
represión y la muerte encarnadas en guerras, alienación, sufri-
miento.
Freud es para mí el itinerario de un gran trabajador que con sus
materiales (frases, sueños, lapsus) constituyó, tejió, martilló día Introducción 7
tras día, como el herrero su metal, el labrador la tierra. Podemos Prólogo a la segunda edición 15
respirar en sus escritos un clima de taller.
Un trabajador que necesita colegas, pares que desde una obra DIRECCIONES TEORICAS y EPISTEMOLOGICAS AC1lJALES
propia dialoguen con la de él. No adoradores, no explotadores de PARA LA CLINICA PSICOANALITICA •••••..•.••.•••••••.......••..•...••...•••.••. 17
su esfuerzo, no "partidistas" que lo enarbolen como un mito.
Freud es para mí un clínico que supo escuchar a sus pacientes EL ABORDAJE CLINICO DE LAS ESTRUCTURAS
con capacidad de asombro. Que permitió que sus pacientes le NEUROTICAS EN PSICOTERAPIAS .•..•.••••.••....••.•....••....•......•...•••..... 37
enseñaran. Esto me parece decisivo: si somos capaces de renunciar Estructuras psicopatológicas y su abordaje .
a ambiciones de poder -esas que profesionalmente toman la en psicoterapias: el proceso en las est~ctu~as fóbicas 39
forma de posturas y actitudes de élite- tenemos que permitimos El abordaje clínico de las estructuras hlsténcas, : 61
aprender de nuestros pacientes y no sólo con nuestros pacientes. Jalones y líneas directrices en el proceso terapéutico
Si es posible seguir estas razones, se entenderá desde dónde de las estructuras obsesivas 83
puede Freud ser maestro y compañero en esta aventura de buscar-
nos, perdemos, encontramos, el paciente, yo, nosotros, el siglo. EL ABORDAJE DE LOS TRASTORNOS DEL NARCISISMO .•.••••.•• : ••: •..•.... 95
Perfil clínico y psicodinámico del trastorno narcisista ... 97
Direcciones del proceso en el abordaje
psicoanalítico del trastorno narcisista 119

DESARROLLOS EN UN ENFOQUE MULTIDIMENSIONAL DEL


DIAGNOSTICO Y DE LAS ESTRATEGIAS PSICOTERAPEUTICAS 131
Diferentes niveles del diagnóstico 133
Exploración de la situación como una modalidad
del abordaje en psicoterapias 139

239
238
AMPLIANDO LAS FRONTERAS DE LA INTERPRET ACION
CON LA INDAGACION DE D1NAMISMOS INCONSCIENTES
COGNITIVOS y CREATIVOS ....•..........••...••.•...•.•••••.•...•...•.••••..••••. 165
El nivel inconsciente de las funciones yoicas,
su intervención en el contlicto y en el proceso
terapéutico 167
Creatividad: dinamismos fundantes de un
sistema en el psiquismo humano 185

APENDICES ....•.•...•.........•................•......•......•.••......•..•.•.••....• 223


Psicofármacos y psicoterapias psicoanalíticas 225
Cátedra de Clínica psicológica y psicoterapias:
orientación del programa de la materia 233
Una visión personal de Freud y su obra 237

Esta edición, de 1000


ejemplares, se terminó de
imprimir en marzo de 2008
en Impresiones Sud Amé-
rica, Andrés Ferreyra
3767/69, Ciudad Autó-
noma de Buenos Aires.
El presente volumen amplía una línea de indagaciones
teóricas y técnicas en el campo de las psicoterapias de
orientación psicoanalítica, profundizando una dirección
iniciada por el autor en dos libros anteriores. Desarrolla el
criterio general de que la técnica no puede ser única, rígida
en su instrumentación, sino que el abordaje debe variar
según la estructura de personalidad del paciente. La
estrategia de abordaje debe también variar según las condi-
ciones de la situación del paciente. Por último, la interpre-
tación debe ser ampliada, dirigiéndose a la comprensión de
dinamismos inconscientes de carácter cognitivo y creativo,
los cuales intervienen gestando proyectos, búsquedas y an-
siedades, en interjuegos con los dinamismos propios de la
neurosis.
En síntesis: la propuesta del autor es que el proceso tera-
péutico habrá de desenvolverse considerando a la vez -en
una red de lecturas articuladas- elementos de la persona-
lidad del paciente, de la estructura de su situación y de los.
movimientos que tienden, en todo ser humano, a conocer y
a crear alternativas más plenas para su vida.

I.S.B.N.978-950-602-286-0

Psicología
Lwon,," Contemporánea

También podría gustarte