Para analizar a Maquiavelo

Los secretos del “príncipe nuevo”: poder y conflicto en “El Príncipe” de Nicolás Maquiavelo

Graciela Ferrás

Nombre y apellido: Gisela Salazar

COMISIÓN A

ACTIVIDAD

1. ¿En qué sentido expresa la autora que El Príncipe ha provocado un cráter en la historia
política de Occidente?

2. ¿Qué representan los dos humores en la sociedad política para Maquiavelo?

3. ¿Cuál es la razón de ser de la política para Logomaquia, según Ferrás?

4. ¿En qué sentido expresa Ferrás que a su vez establece Maquiavelo en su planteo teórico que
entre los grandes y el pueblo se establece una lucha irresoluble?

RESPUESTAS

1. En el sentido de que El Príncipe consiste en poner en cuestión una representación de la

sociedad, el poder es inesperadamente percibido en su desnudez, como un mecanismo de
opresión. Maquiavelo concentra todo los efectos de la angustia que incita la descomposición del
orden antiguo.
Maquiavelo pone bajo el foco, la real apariencia política de Italia por medio de comparaciones,
el relata de forma sencilla un mundo ideal en el cual existe control entre gobernantes y
gobernados en la cual se toman como medidas fundamentales para el bien. También demuestra
por medio de comparaciones las jugadas de los antiguos gobernantes. Es como que conforma
un aporte a la noción moderna de la política, Maquiavelo determina que la política conlleva
situaciones verdaderas con hombre y pueblos donde el comportamiento no responde a la moral
sino al poder.

2. Los dos humores son dos sectores sociales que luchan por oprimir y otros por no ser
oprimido, se pueden organizar a través de una República.
La relación entre el pueblo y el príncipe no puede ser entendida en una sola dirección, el
principie seria como un principio activo donde impone la forma sobre la materia inerte del
pueblo. La materia del pueblo también es parte activa, o sea, muy inestable y esta atravesada
por deseos que la descomponen y recomponen continuamente. Por eso el pueblo se relaciona
en la obra maquiaveliana con el espacio político, donde modifica la estructura que ya existe a
partir de unas figuras que se van alternando y que se superponen. Algunas de estas figuras
puede ser la del pueblo como plebe, o sea, como un principio de división de la ciudad o
república, donde esta figura Maquiavelo la expone como la doctrina de los humores en el
príncipe “ en cada ciudad se encuentran estos dos humores diversos; y de esto nace que el
pueblo desea no ser mandado ni oprimido por los grandes y los grandes desean mandar y
oprimir al pueblo”, de estos dos puntos diferentes nace en las ciudades uno de estos efectos:
principado, libertad o licencia.

3. A Maquiavelo no le importa la naturaleza humana, sino que la división (oprimir y ser

oprimido). Lo fundamental es esta división en la cual se forman dos clases antagónicas y estas
dos clases no ocupan una posición simétrica. El deseo de los grandes tiene un objeto; el otro, el
se personifica en los signos que le aseguran su posición (riqueza, rango, prestigio). El deseo del
pueblo es en revancha, sin objeto; es la intervención de la negatividad.
El pueblo no podría dominar sin perder su posición. La imagen que gobierna, determina el
deseo de los grandes es la de tener y la que muestra el deseo del pueblo es la de ser. Por esa
razón no hay simetría entre esos deseos. En esa división la determinación económica se da con
la terminación política y en esa medida del deseo se puede ver la posición del poder:
dominación- opresión e identificaciones sociales en tener y ser

4. En el sentido de que los grandes por un lado y el pueblo por el otro, están expuesto a una
lucha a causa de sus humores opuestos.