Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Docente
Dr. Juan Armando Santillán Marín
Chiclayo – Perú
2021
INTRODUCCIÓN
• Origen:
• Su espectro de acción:
- Espectro reducido: Son activos selectivamente frente a un grupo
determinado de bacterias. Ejemplo: Macrolidos (cocos gram+) y
gentamicina (bacilos gram-).
- Espectro amplio: Actividad frente a la mayoría de los grupos bacterianos
de importancia clínica. Ejemplo: Penicilinas de amplio espectro (bacilos
gram-), espectro intermedio g+ y bajo espectro cocos y bacilos g+.
• Mecanismo de acción:
Filiciación:
- Edad: 56 años
- Sexo: Femenino
Antecedentes:
- Histerectomía
- Tratamiento con cefalosporina
Enfermedad actual:
- Neumonía
Poseen alta afinidad por ciertas porciones del RNA, especialmente el mRNA de
células procarióticas:
Caso clínico 2
Una mujer de 23 años está siendo tratada con gentamicina por una infección por
enterococos. Veinticuatro horas después de iniciar el tratamiento se reporta que el
organismo es resistente a la gentamicina.
Un hombre de 42 años ha sido tratado con ciprofloxacino por una infección conocida
como gripe hemofílica del tracto respiratorio durante 2 semanas sin mejoría de los
síntomas. Aunque un cultivo inicial mostró sensibilidad del organismo al
ciprofloxacino, un cultivo repetido muestra que el organismo es ahora resistente.
1. ¿Cuál es el mecanismo de acción de las quinolonas?
Las quinolonas inhiben la síntesis bacteriana de DNA, siendo su blanco la
topoisomerasa II. Esta inhibición enzimática produce el efecto bactericida de las
quinolonas. Además, se ha determinado que inhiben a la topoisomerasa IV
bacteriana, encargada de separar la parte replicada del DNA. Aunque, el bloqueo de
esta última tiene mayor importancia en las bacterias grampositivas y no tanto en las
gramnegativas. También, las quinolonas producen en la bacteria una reacción de
alarma, la cual consiste en la inducción de la síntesis no replicante del DNA e
inhibición de la división celular sobre la filamentación, que determina la destrucción
de la célula, debido a la concentración y al tiempo de exposición del DNA al agente
tóxico. Este mecanismo justifica aún más su efectiva acción bactericida.