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LA PSICOLOGÍA EN EL CAMPO DE LA SALUD

SABRINA OROZCO CAMACHO

GRUPO 9191
SUAyED

CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA


SALUD

04 de marzo de 2020
CONCEPTOS BÁSICOS DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD

INTRODUCCIÓN:
Con forme el hombre fue comprendiendo su mundo se centró en ir comprendiéndose a sí
mismo y a ir prestando atención a las cosas que en principio le hacían bien de las que no,
así fue avanzado hasta empezar por interesarse en la mente, su comprensión y su
curación; lo que dio lugar a que cuando se comenzó a hablar de lo que era tener salud o
estar saludable muchas definiciones a través del tiempo fuero poco a poco englobando la
salud mental dentro de este concepto de lo que se consideraba como estar saludable,
hasta nuestros días que contamos específicamente con una ciencia que nos ayuda a
comprender y curar estos efectos.

En estos días existen países donde se la la baja laboral por depresión e incluso las nuevas
generaciones consideran que ir a terapia es fundamental, esto ha dejado de ser un
estigma o un tabú, pues cada vez somos más conscientes de la necesidad que tenemos de
tener un balance en el que mente y cuerpo son un solo ente, lo que nos lleva a entender
que si uno de los dos no está bien, paulatinamente el otro terminará por enfermar igual y
que en ambos casos, el estar saludable o no va a depender se nuestros hábitos de vida: “El
paradigma actual en este campo señala que la calidad del bienestar psicológico y físico
depende, principalmente, de nuestros hábitos de vida” (Libiano, M. 2004, p.2)

De alguna forma el lazo que existe entre mantenernos mental mente sanos y físicamente
sanos, pareciera muy obvio, pero generalmente no prestamos mucha atención a eso; por
ejemplo si entendiéramos que el correr nos secreta la serotonina, nos relaja y
mentalmente nos hace sentir bien con nosotros mismos, que el hacer ejercicio nos ayuda
a mantener esta dualidad de mente y cuerpo en equilibro, tal ves habría menos gente que
fuma, se droga o bebe ya que seríamos más conscientes de todo lo que conllevan nuestras
elecciones y el daño que que terminamos haciéndole tanto al cuerpo como a la mente.

Es importante recalcar que en el caso de nuestro país existe desde algunos años una
cultura de la prevención en cuanto al cuidado de la salud física, a través de diferentes
programas el IMSS ha impulsado a que sus afiliados cuiden su alimentación
principalmente ya que somos uno de los países que presenta mayo índice de obesidad en
el mundo; sin embrago aún no hemos logrado llegar a una cultura en la que la depresión
sea tipificada y tomada en serio como una enfermedad que amerite algún tipo de
tratamiento y no se diga pedir la baja laboral por eso.

Generalmente somos incapaces de darnos cuenta del profundo nivel que tiene nuestros
hábitos dentro de nuestra salud, no nos hacemos chequeos porque creemos que a
nosotros no nos puede dar tal o cual enfermedad, vivimos pensando que si de algo nos
vamos a morir mejor seguimos comiendo hasta reventar, pues podríamos morir mañana
atropellados y ya nos disfrutamos de ese placer; sin embargo no alcanzamos a
comprender que el sobre peso no sólo afecta a nuestro cuerpo, también afecta a nuestra
autoestima y a la percepción que nosotros mismos tenemos de nosotros; nos puede llevar
después a un círculo vicioso en el que comemos porque estamos insatisfechos con
nosotros mismos, pero estamos insatisfechos con nosotros mismos porque no nos gusta lo
que vemos en el espejo: “La persona tiene que percibir una relación significativa entre su
comportamiento específico y los síntomas que experimenta, reconocer una causa-efecto
evidente para modificar su conducta patogénica y remplazarla por otros comportamientos
más protectores y adaptativos.” (Libiano, M. 2004, p.4)

CONCLUCIÓN:
Si viviéramos en un país en el que al igual que se lanza una campaña de prevención que te
invita a que vayas notando los síntomas de que estás subiendo de peso y que por ende
busques ayuda para prevenir cualquier enfermedad que viene con la obesidad, también
existiera la campaña que te ayude a comprender que dentro de la mente también hay
ciertas alertas que te pueden decir que no está bien y que debes de buscar ayuda;
viviríamos en una sociedad mucho más empática, menos violenta y más conectada los
unos con los otros pues así como a los músculos se les entrena, pasa lo mismo con
nuestras emociones:” La psicología del presente se orienta a mejorar la calidad de vida de
las personas a través de programas preventivos que favorezcan el auto control y la
autoregulación física y psicológica así como a planificar acciones que intentan modificar la
probabilidad de ocurrencia de procesos mórbidos.” (Libiano, M. 2004, p.16)
Es tan clara la poca importancia que le damos a nuestra salud mental que cuando alguna
mujer se embaraza, el IMSS la manda a controles mensuales con su médico que incluyen
una ida al nutriólogo, una ida al dentista, una ida a Trabajo Social, pero dentro de todo ese
recorrido, jamás la manda al psicólogo, porque, claro, eso sólo es para la gente que “no se
siente bien” pero nadie le ha dicho a esa mujer que su vida va a cambiar para siempre,
nadie la ha escuchado a cerca de sus miedos personales de lo que le va a implicar ser
madre y esto sólo pensando que en el mejor de los casos, ella ha querido serlo, pero
cuando no es así, las instancias no están listas para darle la misma importancia a la
nutrióloga que al psicólogo, porque nuestros hábitos conductuales nos han enseñado que
si estás embarazada, estás feliz y por consiguiente no requieres de atención psicológica, lo
cual encuentro terriblemente erróneo, pues creo que justo en esos momentos es cuando
más sana te debes de encontrar.

BIBLIOGRAFÍA:
Libiano,M.(2004), Introducción a la Psicología de la Salud. En L.A. Oblitas
(Comp.),Psicología de la Salud y Calidad de Vida. México, Thompson Learning.

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