Del machete al tractor, generando Praxis Agroforestal

“Cada persona tendrá una forma de hacerlo e incluso si está en la misma dirección, nadie
hará lo mismo. La agrosilvicultura de todos será una marca personal.”(Pedro,
Cooperafloresta)
En la lógica agroforestal, el repollo, el rábano, el plátano, la jaboticabeira, el maíz, la
mandioca y todas las demás plantas cultivadas son plantas forestales, adaptadas a diferentes
condiciones de suelo y luz. En las condiciones de desbroce de los bosques no degradados,
los cultivos encuentran la fertilidad que necesitan para su pleno desarrollo, incluyendo
humedad, nutrientes, vitaminas y vida.
Por lo tanto, implementar un sistema agroforestal agroecológico en un lugar donde la vida
del bosque y las condiciones creadas naturalmente por él han dejado de existir, implica,
sobre todo, mejorar los procesos naturales que recrean las condiciones del bosque.
“Podemos tomar una planta natural saludable. Hacemos un mini bosque y autorregulamos
el sistema, sin tanta enfermedad, sin dañar el medio ambiente.”(Jesuita, colono y agente
multiplicador)
Al favorecer los procesos vitales hacia la generación de condiciones que existen
naturalmente en un claro de un bosque fértil, los seres vivos capturan la energía solar y la
utilizan para llevar a cabo todo el trabajo que hace que el organismo de la plantación sea
fértil y productivo. Una obra de perfección sin igual se realiza mediante la “gracia divina”.
Los resultados ambientales y económicos llegan mucho más rápido de lo que generalmente
imaginamos. Una demostración de gran poder convincente se lleva a cabo observando
cómo el suelo se vuelve blando, húmedo y lleno de vida rápidamente, justo después de
haber estado bien cubierto con materia orgánica, lo que resulta en una mayor producción y
una gran reducción en el trabajo y los costos. , cómo desmalezar, regar, combatir
enfermedades y fertilizar.
“Nos sorprendió el sistema agroforestal. El suelo ha cambiado mucho, no tenía vida, hoy
tiene mucha vida. Si descubres aquí hay una lombriz de tierra. Producen mucha caca-cola,
es una bendición para el suelo ”. (Célia y Claiton, sentadas)
Sería perfectamente posible que todo el trabajo de recuperación de la fertilidad y la
productividad del Organismo Agrícola estuviera a cargo del propio organismo, alimentado
por energía solar. Sin embargo, en lugares que durante mucho tiempo han sido privados de
la vida y del trabajo perfecto realizado por las organizaciones forestales, de modo que
desde el principio las SAF permiten el buen vivir de las familias que las manejan, ha sido
decisivo utilizar energía, trabajo, técnicas y recursos al mismo tiempo desarrollado dentro
del alcance de la agricultura artificial, al comienzo del sistema. Estos incluyen la
fertilización en los moldes normalmente utilizados en la agricultura orgánica, las técnicas
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del suelo y, en algunos casos, el riego.