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¿QUE NOS DICE LA ESTELA C DE QUIRIGUA SOBRE EL 2012?

UNA REVISION ARQUEOLOGICA, EPIGRAFICA E ICONOGRAFICA

Elizabeth Marroquín y José Crasborn


Dirección General del Patrimonio Cultural y Natural

E-mail: arqueologiabm@gmail.com ó parquequirigua@mcd.gob.gt

Ponencia presentada en el I Congreso de Turismo Arqueológico 13.0.0.0.0, Octubre 2011,


Antigua Guatemala, Guatemala.

INTRODUCCIÓN
La antigua ciudad maya de Quiriguá es reconocida a nivel mundial, por la belleza, calidad
artística y altura de sus monumentos, características que lo hacen único dentro de la antigua
Mesoamérica, por lo que en 1981 le fue otorgado por UNESCO el titulo de Patrimonio Mundial
de la Humanidad.

Dentro de lo que hoy es el Parque Arqueológico Quiriguá, se encuentran aun in situ 17


monumentos, los que fueron tallados entre los años 731 y 810 d.C., uno de los que más ha
llamado la atención del público en general es la Estela C, debido a que en su lado este presenta
un texto jeroglífico, el cual hace referencia a la fecha 13.0.0.0.0 4 ajaw 8 kumk’u, que equivale al
13 de agosto de 3114 a.C.

Esta es una fecha importante dentro de la cultura maya, dado que sus mitos señalan que en este
tiempo los dioses colocaron las piedras de la creación, marcando el inicio del orden cósmico que
conocemos en la actualidad. Sin embargo, erróneamente este monumento ha sido asociado con el
fin del mundo y se ha indicado que este tiene relación directa con el final del 13vo b’aktuun, el
cual ocurrirá el 23 de diciembre de 2012, cuando se llegue a la fecha 13.0.0.0.0, 4 ajaw 3
k’ank’in.


 
Sin embargo, este monumento ha sido descontextualizado y no ha sido interpretado de forma
correcta, dejando a un lado el verdadero mensaje que el gobernante de Quiriguá conocido como
k’ahk’ tiliw chan yopaat quiso transmitir a través de este, en 775 d.C. cuando mando a tallar este
monumento.
Por lo que para entender el mensaje de la Estela C, es necesario hacer un análisis arqueológico,
iconográfico y epigráfico para entender de forma más clara las intenciones, políticas y religiosas
que motivaron la erección de este monumento por parte del gobernante de Quiriguá.

ANTECEDENTES HISTORICOS
La referencia más antigua sobre los monumentos de Quiriguá la encontramos en el libro,
“Incidentes de Viaje por Centroamérica, Chiapas y Yucatán”, publicado en 1841 por John L.
Stephens, donde se presenta una breve descripción del sitio, de los monumentos y los primero
dibujos de las estelas ahora conocidas como E y F (Stephens 1841: 129) (Figura 1).

Esta publicación que tuvo bastante aceptación a nivel mundial, motivando la visita a Quiriguá
por investigadores como Karl Schetzer en 1854 y Simeon Habel en 1880, quienes también
publican breves descripciones del sitio y especialmente de sus monumentos (Chinchilla 1994:5).

Hacia finales del siglo XIX, aparece la monumental obra “Biologia Centrali-Americana” la cual
consta de 6 volúmenes que fueron publicados en 1889 y 1902 por Alfred Maudslay, quien
incluye descripciones, mapas, fotografías y dibujos de alta calidad de varios sitios del área maya,
entre los que se incluyen Quiriguá, en este trabajo se presenta una breve descripción de la Estela
C, señalando que esta es muy similar a la estela A (Maudslay 1889-1902, Vol. II Plates 16 a 20
y Vol V: 9), cabe señalar que es Maudslay, quien le da nombre a cada uno de los monumentos
del sitio, mediante la utilización de letras, nomenclatura que sigue vigente hasta la actualidad
(Figura 2).

En el apéndice del volumen VI de esta misma obra J. T Goodman es el primero en señalar que el
monumento presenta la fecha 4 ajaw 8 kumk’u, refiriéndolo al inicio del 13vo Gran Ciclo, sin
embargo este autor es claro al señalar que desconoce la razón para que hubieran colocado esta


 
fecha, aunque también señala la presencia de otras fechas en este monumento (Maudslay 1889-
1902, Vol. VI: 127-128).

Años más tarde el arqueólogo Sylvanus G. Morley, también describe la estela haciendo especial
énfasis en que él personaje principal en ambos lados (norte y sur) se encuentra parado sobre una
banda jeroglífica en lugar de una máscara grotesca y que presenta la fecha 13.0.0.0.0 4 ajaw 8
kumku, una fecha que para los antiguos mayas representaba el inicio de la creación del mundo
(Morley 1936: 102-107 y 1937: 156-163).

Es importante señalar para la época de Morley la epigrafía no se había desarrollado mucho, por
lo que las lecturas de los textos únicamente se concentraban en fechas de calendario. Algunos
autores, creían que esta era la única información que estos contenían, careciendo de datos
históricos, es en esta misma época cuando surge la idea de que los nobles y sacerdotes mayas
dedicaban su vida a la contemplación de cosmos, viviendo en armonía con la naturaleza, idea
que se ha mantenido en algunos círculos hasta la actualidad.

Hacia los años 60, los estudios epigráficos se habían desarrollado significativamente, siendo así,
que en esta época David Kelley, logra identificar parte de la secuencia dinástica de de los
gobernantes de Quiriguá (Kelley 1962:323-335), con lo cual se dio incremento
considerablemente el conocimiento que se tenía sobre este sitio, ya que esto permitió ver quiénes
fueron los responsables de la elaboración de estos monumentos.

Desde esta época hasta años recientes, el interés sobre Quiriguá se ha mantenido, ya que se han
continuado los estudios en el sitio, especialmente sobre sus monumentos, entre los trabajos más
destacados podemos mencionar a: Popenoe de Hatch (1982, 1986), Stone (1983, 1985, 1988,
1991), Looper (1995a, 1995b, 1999, 2003, 2007), Schelle (1990) Schelle y Looper (1994),
Martín y Grube (2000), Grube et al (1991), Vega (2007) y Velásquez (2001) entre otros.

ANALISIS ARQUEOLOGICO


 
Previo a comentar sobre la evidencia arqueológica relacionada con la Estela C, es importante
desarrollar brevemente la historia de esta ciudad, para entender un poco más sobre este
monumento.

Los datos con los que contamos indican que Quiriguá fue fundada en el año 426 d. C. sobre la
margen norte del Río Motagua, como parte de una estrategia de expansión económica y política
de la ciudad de Copán (Honduras), con lo cual se pretendía controlar una de las rutas comerciales
más importantes de la época prehispánica.

Los textos jeroglíficos de Quiriguá mencionan a varios gobernantes quienes estuvieron en el


poder por al menos cuatro siglos, sin embargo sobre los primeros reyes se conoce muy poco, ya
que las únicas referencias que tenemos sobre ellos proceden de algunos monumentos, donde son
mencionados de forma directa o en retrospectiva, sin embargo la mayoría de datos históricos
conocidos, en este sitio corresponden a los últimos tres reyes, quienes gobernaron entre el 724 y
810 d.C. (Figura 3).

Dentro de estos resalta el gobernarte conocido como k’ahk’ tiliw chan yopaat, “el dios Yopaat
quema el fuego del cielo”, conocido anteriormente como Cielo de dos Piernas o Cawak Cielo,
(Looper, 2007:184), quien estuvo en el poder entre el 724 y 785 d.C. y es durante su reinado que
esta ciudad logra su independencia económica y política mediante la captura y decapitación del
rey de Copán waxaklaju’n ub’aah k’awiil, “el dios K’awiil de dieciocho cuerpos o imágenes”, en
el año 738 d.C. acto que sería de gran importancia en el desarrollo de Quiriguá y que sería
recordado aun después de su muerte.

Cabe señalar que los primeros monumentos de k’ahk’ tiliw (diminutivo del nombre), los altares
M y N, fueron erigidos 7 años después de haber iniciado su reinado, los cuales fueron colocados
cerca de la Plaza del Juego de Pelota en el 731 d.C., pero fue hasta el año 751 d. C. cuando este
gobernante inicio su programa escultórico colocando en la parte sur de la Gran Plaza la Estela H.

Es a partir de este momento que este gobernante inicia un ambicioso programa escultórico,
erigiendo una estela cada 5 años o ho’tuun, lo que lo convirtió en el personaje más representado


 
en la ciudad, ya que de los 29 monumentos que se conocen en el sitio, 12 fueron erigidos durante
su reinado, la mayoría de estos presentando su imagen (Figura 4).

Es en este contexto que hacia finales del año 775 d.C. k’ahk’ tiliw coloca al frente de la fachada
sur de la Estructura 1A-3, las estelas A y C, la primera en el extremo suroeste y la segunda al
centro del edifico, formando una línea junto con la Estela D, en el extremo sureste, la cual fue
erigida en el 766 d.C.

La estela C fue tallada en piedra arenisca de color café, una roca de tipo sedimentaria de origen
local, extraída a 4 km. al noroeste de Quiriguá. Esta fue labrada en sus cuatro lados, el frente y la
espalda (lados sur y norte respectivamente) presentan a dos personajes (Figuras 5a y b) y en los
costados (lados este y oeste) dos textos jeroglíficos, cada uno con su propia fecha en cuenta
larga (Figuras 6a y b).

Strómsivk (1941:80-83), señala que durante los trabajos de re erección de algunos monumentos
colapsados, llevados a cabo por parte de la institución Carnegie en los años 30, se excavaron las
bases de estos en busca de ofrendas (práctica común en el área maya), pero no se reporto ninguna
para la Estela C.

En este sentido vale la pena mencionar que en los años 70, la Universidad de Pennsylvania
durante sus trabajos en el sitio, le asigna a cada monumento un numeral en lugar de letra, en este
caso la Estela C seria la Estela 3, pero este sistema no ha tenido mucha aceptación por
investigadores y público en general (Sharer 1990:30-32).

ANALISIS ICONOGRAFICO
Como fuera mencionado, los lados nortes y sur de la Estela C, presentan una escena en la que
aparece un solo personaje, en cada lado, los cuales serán descritos en este apartado. En el lado
sur se observa la representación frontal de k’ahk’ tiliw, un tipo de representación poco usada en
el arte maya, ya que la mayoría de reyes por lo general son representados de perfil.


 
Looper (2007: 50-55), señala que en esta escena observamos que este se encuentra de pie, parado
sobre una banda jeroglífica (descrita más adelante) con los pies colocados de perfil en 180°, estos
se encuentran adornados con tobilleras, su braguero presenta un adorno de bandas cruzadas,
sobre su cintura y parte de su pecho porta un gran cinturón adornado con conchas y piel de
jaguar y un collar, el cual, este autor interpreta como un mosaico hecho de concha, al igual que
sus orejeras. Porta un tocado grande, el cual está formado posiblemente por varias cabezas de
serpiente colocadas una sobre otra, en los laterales porta unos elementos en forma de rombos,
asociados con perforaciones en ceremonias que involucran fuego.

Otra referencia a fuego se encuentra en la banda sobre su cabeza, la cual, presenta unas bandas
similares al dios chaahk, en frente de su pecho sostiene una barra cubierta con piel de jaguar y
huesos cruzados, en cada esquina de esta barra hay una cabeza de jaguar las cuales de su boca
emerge probablemente sangre interpretada como energía divina. Esta barra es interpretada por
este autor como una de los tronos o piedras de la creación y la constante referencia a fuego debió
involucrar este elemento durante la creación (Figura 7a).

En el lado norte se observa una imagen de un personaje representado de perfil al estilo clásico
maya, la forma en que los pies de este personaje fueron colocados en forma dinámica indican
que esta danzando, sus tobilleras y muñequeras se encuentran adornadas con rostros que parecen
ser deidades, así también porta un braguero similar al del lado norte.

Para Velásquez (comunicación personal 2011) este no es un retrato del rey, ya que la figura porta
un ojo cuadrado y de su boca emerge flamas y el ornamento de su nariz lo identifican como una
variante de cuerpo completo del número seis o una versión del dios del Maíz. Parte de su tocado
ha sido identificado como el techo de un templo, adornado con símbolos celestiales y sobre este
se encuentra un ave. Algo que llama la atención sobre esta escena es la presencia de dos cuerdas
las cuales emergen del ave celestial y a la altura del pecho de esta deidad se enredan, pasando
por las manos de la deidad y terminando en cabezas de serpiente, lo cual ha sido interpretado
como un cordón que une de lo celestial y lo terrenal (Looper 2007: 50-55) (Figura 7b).

ANALISIS EPIGRAFICO


 
Aunque se han realizado varias lecturas sobre el texto de la estela C, para este artículo
utilizaremos la más reciente llevada a cabo por María Elena Vega en 2011.

La Estela C fue llamada wak ajaw tuun (Piedra Seis Ajaw), debido a la fecha en Rueda de
Calendario de su consagración: 6 ajaw 13 k’ayab’, 9.17.5.0.0, 25 de diciembre de 775 d. C. el
orden de la lectura del texto inicia en el lado este, donde se, describe la acción de las deidades
creadoras en la ordenación del mundo y el cosmos, de la siguiente forma:

En la fecha 13.0.0.0.0, 4 ajaw 8 kumk’u que equivale al 13 de agosto de 3114 a. C. El fogón fue
sustituido, las tres piedras fueron atadas. Los dioses Remeros hincaron la piedra, en el lugar
llamado naah ho’ chan (primer cinco cielo); la piedra del trono jaguar. Posteriormente la deidad
ik’ naah chak… hincó la piedra, ocurrió ya en lugar llamado kab’ kaaj; la piedra del trono
tiburón (anteriormente esta piedra era conocida como trono serpiente). Entonces ocurrió la
atadura de piedra de naah itzam kohkaaj muut (Itzamnaaj), la piedra del trono agua. Ocurrió ya
[en] el borde del cielo, el sitio del primer fogón. Trece b’aktuunes se completaron. wak chan
ajaw lo ha ordenado (Figura 8a).

El texto continua en el lado oeste, iniciando con otra fecha que indica que en 9.1.0.0.0, 6 ajaw 13
yaxk’in, (455 d. C.), tutu’m yohl k’ihnich, hincó una piedra, como señor divino de Quiriguá, esto
sucedió en una locación desconocida, la cual debe estar dentro de Quiriguá, que involucra el
nombre de un colibrí. El pasaje continua con un numero de distancia que indica que posterior a
este evento transcurrieron 0 k’ines 0 winales 5 tuunes y 17 k’atuunes y que en el día 6 ajaw 13
k’aya’b, fue colocada “en el primer quinto tuun”, tiro incienso k’ahk’ tiliw chan yopaat, 5
k’atuunes, incensador (titulo) (Figura 8b).

En los lados norte y sur ambos personajes se encuentran de pie sobre un pequeño texto. El lado
norte indica que: Han pasado 8 k’ines desde la fecha 9 Ajaw (9.17.4.11.0, 11 de agosto de 775
d.C.) y en una acción indeterminada participan los dioses ju’n ajaw y yax b’olon, los cuales han
sido comparados con los gemelos del popol wuj, sin embargo estos dioses no han sido
entendidos en su totalidad.


 
Por su parte el lado sur señala que en la fecha 1 eb’ 5 yax (9.17.4.10.12, 3 de agosto de 775 d.C.)
en una acción indeterminada esta la “Piedra Seis Ajaw” (Ver figuras 7a y b).

DISCUSIÓN
Aunque este trabajo solamente se centra en la Estela C, esta no pude ser desligada del resto de
monumentos que conforman la Plataforma Norte de la Gran Plaza, especialmente la Estela A
tallada el mismo año que la Estela C y el Zoomorfo B, erigido 5 años después de estos
monumentos.

Looper (2007:55-60), señala que la Estela A presenta varias similitudes en cuanto tamaño y
representaciones iconográficas, con la excepción que en el lado sur la barra que k’ahk’ tiliw que
sostiene en sus manos presenta una cabeza de serpiente en cada lado y su tocado presenta la
cabeza de un jaguar y otros símbolos celestiales y rituales con fuego y sangramiento, en este caso
está de pie sobre la personificación de un lirio acuático.

En el lado norte, la deidad quien se encuentra danzando presenta en lugar de pies y manos patas
de jaguar, en este caso otra deidad, la cual este autor señala que está asociada con fuego y al
igual que en el lado sur, está parado sobre la personificación de un lugar mítico conocido como
“Tierra negra lugar de flores” (Figuras 9a y b).

Así mismo el texto de este monumento, aunque no está directamente relacionado con el texto de
la Estela C, parece tener relación a eventos pasados en tiempos mucho más antiguos que la fecha
de 3114 a.C. en el cual, involucra la colocación de “El primer quinto tuun” (mencionada en la
Estela C) bajo el mandato de una deidad(posiblemente la misma del lado norte), acto que fue
realizado en “Tierra negra lugar de flores” y el cual involucra a k’ahk’ tiliw en un ritual de
esparcir incienso. Por último el texto hace referencia a la captura de waxaklaju’n ub’aah k’awiil,
y la denominación de este como rey sagrado de Quiriguá y otros títulos (Figuras 10 a y b).

A diferencia de los textos largos de las estelas A y C, el del Zoomorfo B consiste en jeroglíficos
de cuerpo completo que presenta una fecha en cuenta larga (780 d.C.), el nombre del rey su
titulo, así como dos jeroglíficos que no han sido leídos hasta el momento. Aunque este


 
monumento ha sido interpretado como diversos animales en realidad este representa a un
cocodrilo sobre su cuerpo lleva elementos de flores y acuáticos, con las fauces de este animal se
encuentran abiertas (lado sur), de donde emerge la imagen de k’ahk’ tiliw, lo que puede
representar la salida del inframundo (Looper 2007:61-65) (Figuras 11a y b).

Para Looper (2003:158-159, 2007: 42) estos tres monumentos forman parte de una triada
colocados en una secuencia que permita leerlos en el siguiente orden Estela, C, A y Zoomorfo B,
para este autor estos monumentos son la representación física de las tres piedras de la creación en
donde la Estela C representa el trono jaguar, la Estela A representa el trono tiburón o serpiente y
el Zoomorfo B el trono agua, recreando de esa forma las acciones de los dioses en la tierra.

Al analizar en conjunto estas esculturas, observamos que el objetivo de k’ahk’ tiliw chan yopaat
era reforzar su estatus y el fundamento mágico-religioso que sustentaba su derecho a gobernar,
mediante la exaltación de acciones de gran importancia dentro de la historia política de Quiriguá
como la captura y sacrifico del rey de Copán, así como la analogía de eventos sucedidos en un
pasado distante, como el sucedido en 3114 a.C. el cual involucra a varias deidades con acciones
y ritos, que son emuladas acá en la tierra como la colocación de una piedra por un antiguo
gobernante de Quiriguá en el 455 a.C. y la repetición del mismo acto por k’ahk’ tiliw 320 años
después, conectando de esta forma las acciones divinas con las humanas, las cuales estaban a
cargo del gobernante.

COMENTARIO FINAL
Como se menciono al principio, el objetivo de este trabajo, es analizar el mensaje trasmitido a
través de las imágenes y texto que fueron plasmados en la Estela C de Quiriguá y sí lo que esta
representa tiene alguna relación directa con el 2012, la respuesta a esta interrogante es: No, por
varios motivos:

1. El texto de la Estela C no menciona o hace referencia a la fecha 13.0.0.0.0, 4 ajaw 3


k’ank’in, la cual, equivale al 23 de diciembre de 2012.


 
2. La intención de k’ahk’ tiliw, al hacer referencia dentro de la narrativa de su monumento a
la fecha de la creación, busca vincular eventos sucedidos en el pasado y eventos
sucedidos en su presente, no en el presente de la humanidad del siglo XXI.

3. Es muy probable que para k’ahk’ tiliw, el que se completara el ciclo que inicio en 3114
a.C. y que concluiría en 2012, fuera una fecha importante, pero que no era de gran
trascendencia para su reinado, y si así fuera, él lo hubiera mencionado, en algún otro
monumento posterior, sin embargo pocos años después de la erección del Zoomorfo B su
largo reinado de casi 60 años llego a su fin.

4. La Estela C no debe verse como un monumento asilado si no como parte de un conjunto


de monumentos, que son el resultado de los hechos económicos, políticos y religiosos
que involucraron la historia del reinado de k’ahk’ tiliw y el desarrollo de la ciudad.

5. Es importante mencionar que la Estela C no es el único monumento en Quiriguá que hace


referencia a la Fecha de Creación 13.0.0.0.0, 4 ajaw 8 kumk’u, ya que el Zoomorfo P
tallado en el 795 d.C. por el gobernante chan tiliw yopaat (Xul Cielo), sucesor de k’ahk’
tiliw también parece tener un pasaje relacionado con esta fecha, sin embargo este aun no
se ha comprendido completamente.

6. Así mismo Van Stone (S/F) señala que hay evidencia de esta fecha, en otros monumentos
(Palenque, Coba), vasos policromos (Vasos de los 7 y 11 dioses), mascaras de Jade
(Mascara de Río Azul) y en códices (Dresde). Sin embargo a criterio de autores como
Looper (2007:46), Van Stone (S/F) y Vega (2007:240), la Estela C contiene la más
elaborada y completa descripción de las acciones llevadas a cabo por los dioses durante la
creación.

7. Por último es importante mencionar que la presencia de textos que describen este evento
de creación llevado a cabo en 3114 a.C. y que está presente en sitios tan distantes, dentro
del área maya, es un ejemplo de la estandarización alcanzado por esta cultura dentro de
su sistema de creencias.

10 
 
Tomando en cuenta estos argumentos debemos reformular el planteamiento hecho al principio y
preguntarnos ¿Cómo surge la idea generalizada de relacionar la Estela C con el 2012 y el fin del
mundo? En este caso la respuesta parece ser más sencilla.

Actualmente circulan muchas publicaciones y documentales sobre la cultura Maya, muchas de


ellas son de alta calidad, mientras que otras son de escaso o nulo valor científico, siendo estas
últimas las responsables de la tergiversación de la forma en que se mira o entiende a esta cultura.

Un buen ejemplo de esto es la relación que este monumento tiene con el final e inicio de un
nuevo clico, el cual sucedió hace más de 5000 años y que en teoría concluirá el 23 de diciembre
de 2012, asociándolo con el fin del mundo.

Esta asociación con el fin del mundo, ha creado una psicosis, debido a que actualmente la
humanidad atraviesa una etapa llena conflictos, incremento en los desastres naturales derivados
del cambios climáticos y la búsqueda de algo en que creer, lo que ha hecho que la humanidad
busque respuestas en culturas antiguas, como la Maya, quienes a través de sus avances en
matemática y astronomía, calcularon fechas que nos conducen, tanto a un pasado remoto, como a
un el futuro próximo, las cuales están basadas en su cosmovisión.

Desafortunadamente fechas como el 23 de diciembre de 2012, han tratado de adaptarse y ser


entendidas desde nuestro pensamiento occidental y no desde la realidad que vivió el maya del
periodo Clásico, y a pesar de los grandes logros que alcanzo esta civilización, demostrados
científicamente, es irónico que muchos busquen respuestas en una cultura que no pudo predecir
su propia caída.

11 
 
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13 
 
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14 
 
LISTADO DE FIGURAS
Figura 1. Dibujo de Catherwood Estela F (Tomado de Stephens 1841:121).

Figura 2. Vista lado norte, Estela C (Tomado de Maudslay 1889-1902: Plate 20).

Figura 3. Cuadro de Gobernantes de Quiriguá (basado en Looper, 2007:29-156 y Martín y


Grube,2000:4-33)

Figura 5a. Lado Sur, Estela C (Dibujo M. Aguirre 2011).

Figura 5b. Lado norte, Estela C (Dibujo M. Aguirre 2011).

Figura 6a y 6b. Lados este y oeste , Estela C (Dibujo M. Aguirre 2011).

Figura 7a. Lado norte, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:21).

Figura 7b. Lado norte, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:22).

Figura 8a. Texto lado este, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:19).

Figura 8b. Texto lado oeste, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:20).

Figura 9a. Lado norte, Estela A (Dibujo M. Looper 1995:10).

Figura 9b. Lado sur, Estela A (Dibujo M. Looper 1995:11).

Figuras 10a y b. textos lados este y oeste , Estela A (Dibujo M. Looper 1995:8).

Figura 11a. Lado sur Zoomorfo B (Fotografia T. Drapper 2008).

Figura 11b Glifos de cuerpo completo Zoomorfo B (Dibujo M. Looper 1995:18).

15 
 
Figura 1. Dibujo de Catherwood Estela F (Tomado de Stephens 1841:121).
Figura 2. Vista lado norte, Estela C (Tomado de Maudslay 1889-1902: Plate 20).
Años de Fecha en Fecha
Gobernante Gobierno Cuenta Larga Gregoriana Fuente
Zoomorfo P y
8 de Escalinata
426-455 8.19.10.11.0 8 Septiembre del Jeroglífica de
Tok Casper d.C. ajaw 18 yaxk'in 426 d.C Copán
455 d.C. - 9.1.0.0.0 6 ajaw 27 de Agosto
tutu’m yohl k’inich ¿? 13 yaxk'in del 455 d.C. Estela C
24 de
Caparazón de 480 d.C. - Noviembre del
Tortuga ¿? ¿-? 480 d.C. Estela U
27 de Octubre
9.2.18.13.1 11 del 493 d.C. ó
imix 4 sak ó 5 de
493 d.C. - 9.2.18.13.10 7 Noviembre del
Ojo Jaguar ? ¿? ok 13 sak 493 d.C. Monumento 26
653 d.C. - 9.11.0.11.11 9 30 de Mayo
k´awiil yopaat ¿? chuwen 14 sek del 653 d.C. Altar L
29 de
k’ahk’ tiliw chan 724 - 785 9.14.13.4.17 12 Diciembre del Estela E, F, J y
yopaat d.C. kaban 5 k´ayab 724 d.C. Zoomorfo G
9.17.14.16.18 9
785 - 800 etz´nab 1 11 de octubre Zoomorfo G,
chan tiliw yopaat d.C. k´ank´in del 785 d.C. Altar O y P
k’ahk’ jolow? chan 800 - 810 9.18.10.0.0 10 15 de Agosto
yopaat d.C. ajaw 8 sak del 800 d.C. Estela I

Figura 3. Cuadro de Gobernantes de Quiriguá (basado en Looper 2007:29-156 y Martín y Grube


2000:4-33)
 

Figura 4. Plano de distribución de monumentos dentro del Núcleo central de Quiriguá (Tomado de Ashmore 1984:368 y modificado por el autor
2011).

 
 

 
 

 
Figura 5a. Lado Sur, Estela C (Dibujo M. Aguirre 2011).
Figura 5b. Lado norte, Estela C (Dibujo M. Aguirre 2011).
Figuras 6a y 6b. Lados este y oeste , Estela C (Dibujo M. Aguirre 2011).
Figura 7a. Lado norte, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:21).
Figura 7b. Lado norte, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:22).
Figura 8a. Texto lado este, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:19).
Figura 8b. Texto lado oeste, Estela C (Dibujo M. Looper 1995:20).
Figura 9a. Lado norte, Estela A (Dibujo M. Looper 1995:10).
Figura 9b. Lado sur, Estela A (Dibujo M. Looper 1995:11).
Figuras 10a y b. textos lados este y oeste , Estela A (Dibujo M. Looper 1995:8).
Figura 11a. Lado sur Zoomorfo B (Fotografia T. Drapper 2008).

Figura 11b Glifos de cuerpo completo Zoomorfo B (Dibujo M. Looper 1995:18).

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