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UNIVERSIDAD DE LAS FUERZAS ARMADAS “ESPE”

INGENIERÍA GEOGRÁFICA Y DEL MEDIO AMBIENTE


SOCIOECONOMÍA AMBIENTAL
Nombres: Fernando Cervantes, James Imbaquingo, Daider León
Fecha: 24 de mayo del 2021

EL TEOREMA DE COASE, BIENES Y SERVICIOS AMBIENTALES

El teorema fue creado por Ronald Coase que nació en Reino Unido, en 1951 se convirtió en un
icono por su famoso “Teorema de Coase” que fue utilizado por políticos, agencias reguladoras
y jueces para justificar un enfoque no intervencionista de grandes empresas que dejaba la
contaminación y otros problemas económicos a manos del mercado, todo empezó cuando
Coase reflexionaba como las acciones de las empresas de negocios tienen efectos perjudiciales
en otros, como fábricas que emiten mucho ruido o generan gases tóxicos, la solución más
común era enjuiciar legalmente a los contaminadores o fijar un impuesto que desalentara la
actividad, para Coase estos enfoques eran erróneos diciendo: ”Mi opinión es que los cursos de
acción propuestos son inapropiados porque llevan a resultados que no necesaria o incluso
usualmente son deseables” (Cassidy, 2013).

Ronald Coase a través de su Teorema expone la importancia y necesidad de disponer de


derechos de propiedad para evitar las externalidades que pueden producirse dentro de un
proceso económico o ya sea en la vida cotidiana. Estas externalidades se definen como todas
las actividades que afectan la utilidad o función productiva de un proceso productivo o
actividad económica, es decir, que no existe ningún tipo de compensación por la externalidad
que puede producirse. Cabe mencionar que no todas las externalidades tienen un impacto
negativo hacia la sociedad; suele presentarse así: A (dañador) causa un perjuicio a B (víctima)
y, entonces, debe decidirse cómo reprimir a A, pero esto es incorrecto. Según Coase se trata de
un problema de naturaleza recíproca, evitar el daño de B implica causar un daño a A, por lo
que realmente debe resolverse es si se debe permitir a A perjudicar a B, o si se debe permitir a
B perjudicar a A. El criterio que se debe guiar esta decisión es el de evitar el daño más grave
cuando el objetivo económico es la eficiencia, es decir, que, en la búsqueda de la eficiencia
económica, cuando estamos ante fenómenos dañosos (externalidades), nos enfrentamos con un
problema recíproco, lo que se debe hacer es evitar la eliminación de la actividad productiva
más valiosa, permitiendo que siga el trabajo que tenga una producción con un mayor valor
(Míguez, 2002). Los bienes y servicios ambientales son universales, todo el mundo tiene acceso
a ellos, pero los derechos de propiedad que son definidos por Coase ayudan a delimitar límites
que deben existir en el uso y aprovechamiento de dichos bienes y servicios. Así que el derecho
a la propiedad está vinculado directamente con el derecho de uso de un recurso que puede ser,
por ejemplo; la tierra para cultivar cierto producto. Por consiguiente, puede existir conflictos,
entre dos o más partes, por externalidades que puede existir dentro de un proceso productivo o
por la titularidad al derecho de un recurso que genere un bien o servicio ambiental. No están
limitadas las situaciones que pueden existir por la disputa que genera lo antes mencionado pero
el teorema que define Coase simplifica todo al incluir los derechos de propiedad los cuales
deben estar siempre bien definidos. En el mundo real son desgraciadamente frecuentes las
situaciones en las que la negociación entre las partes no puede conducir a un resultado
económicamente aceptable, la frecuencia de ese caso se debe tanto a la ausencia de criterios
judiciales de eficacia en la asignación de los derechos como a que los costes de transacción
necesaria para corregir esas situaciones son terriblemente altos.
Se modela una situación como una industria y un productor rural que está aguas abajo de la
industria, la industria contamina el agua con sus efluentes, generando una externalidad negativa
al productor rural quien usa el agua para riego u otras actividades, se hace una suposición donde
el productor rural tiene derecho a una agua limpia, en este caso la industria deberá ofrecerle
una compensación al productor para poder emitir, supongamos ahora que es la industria la que
tiene derecho a emitir sus emisiones que maximicen sus beneficios, en este caso el productor
es que qué tendrá que ofrecerle un pago para que la industria pueda reducir sus emisiones,
como es fácil de observar la solución a este problema es cuando el derecho del recurso agua
estaba en manos del productor, por ende, “con derechos de propiedad bien definidos y bajos
costos de transacción, la externalidad será internalizada por una negociación voluntaria entre
las partes. El resultado de la negociación será la óptima desde el punto de vista social y será la
misma quien quiera sea el titular de los derechos de propiedad sobre el recurso. La titularidad
de los derechos de propiedad sólo determinará la distribución del ingreso resultante: quién tiene
que compensar a quien” (Caffera, 2019).

El término “el que contamina paga”, es una aplicación del Teorema de Coase, fue adoptado
por primera vez a nivel internacional en 1972 por la Organización para la Cooperación y el
Desarrollo Económico (OCDE), el cual postula, que los responsables de contaminar deben
pagar el costo de las medidas necesarias para evitar o reducir esa contaminación de manera de
cumplir con las normas y medidas de calidad ambiental, la fundamentación de este principio
es que el aprovechamiento de los bienes comunes o bienes libres desde el punto de vista de su
utilización, y gratuitos en cuanto a su costo de uso en cuanto a su costo de uso o explotación,
ha conducido a un creciente deterioro de la calidad del medio ambiente. Lo que se persigue no
es determinar culpables ni inmiscuirse en el terreno de las obligaciones de indemnización. Se
busca incorporar a los costos internos de las actividades o procesos productivos aquellos costos
que actualmente son externos a ellos y que generan deseconomías sociales, es decir, incorporar
las externalidades ambientales negativas (Chagall, 2006). El teorema de Coase se puede utilizar
cuando los impactos ambientales o sociales generados por empresa o industria son claramente
reversibles y cuantificables, como es el caso de la generación de energía nuclear que afecta a
esa generación como a generaciones futuras no es recomendable es uso del teorema de Coase,
El teorema de Coase ha sido criticado por su naturaleza tautológica. Es un resultado natural
que si los derechos de propiedad están bien de unidos (se sabe quién tiene derecho a qué) y no
hay ningún impedimento para la negociación (hay pocos involucrados, los costos de
negociación (transacción) son bajos, y la información es simétrica (ambos pueden observar
daños y beneficios marginales) (Caffera, 2019).

Entonces se puede debatir si el objetivo principal del Teorema de Coase yace en el costo de
transacción, costo que se debe pagar por algún servicio o convenio ya antes aceptado. Es
evidente que al poseer titularidad sobre el derecho de una propiedad y/o de un recurso facilita
la negociación entre varias partes y lo único que se debería realizar a partir de ese punto es
llegar a un acuerdo y ver “quién compensa a quien”. Pero eso sería en un mundo ideal ya que
el Teorema de Coase es muy optimista y alejado de la realidad ya que los beneficios
individuales son mucho más factibles que el bien común o de la sociedad. La importancia que
las sociedades actuales conceden al medio ambiente supone un reto para las ciencias
económicas que deben abordar el estudio ambiental sobre estas bases, ya que más allá del
análisis económico es necesario valorar elementos de otra índole, se debe conocer qué derechos
y deberes corresponden al individuo por encima de cuestiones estrictamente económicas, hay
que asumir que la perspectiva ecológica en las ciencias sociales debe enriquecer las categorías
tradicionales para el análisis de los procesos de desarrollo económico y social, con un enfoque
adecuado que interrelacione economía y medio ambiente.
BIBLIOGRAFÍA

-Caffera, M. (2019). Economía Ambiental. Santa María: McGraw Hill, 47-50.

-Chagall, M. (2006). La tragedia de los comunes (Garret Hardin) y el Teorema de Coase, una
visión económica del manejo de los recursos naturales. La Aldea y Yo. Escuela Nacional
Central de Agricultura. 43-47.

-Cassidy, J. (2013). Ronald Coase y el mal uso de la economía. Revista de Economía


Institucional, 15(29), 321-325.

-Míguez, G. C. (2002). Economía ambiental: perspectiva institucional. Revista Galega de


Economía, 11(2), 0.

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