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Olivier Blanchard / Daniel Pérez Enrri

MACROECONOMÍA
Aplicaciones para Latinoamérica
2da Edición
Autores

Olivier Blanchard
Massachussets Institute of Technology

Daniel Pérez Enrri


Universidad de Buenos Aires
Otras universidades latinoamericanas

Revisión técnica
Dolores Reynolds
Rodolfo López Warr
Universidad de Buenos Aires
Índice general
Sobre los autores XXIII
Prólogo a la segunda edición XXV
Prólogo a la obra original XXVII

Parte I El Núcleo
I.1 Introducción 3
Capítulo 1 Una gira por el mundo 5
Capítulo 2 Una gira por el libro 37

I.2 El corto plazo 67


Capítulo 3 El mercado de bienes 69
Capítulo 4 Los mercados financieros 95
Capítulo 5 Los mercados de bienes y financieros: el modelo IS-LM 133

I.3 El mediano plazo 163


Capítulo 6 El mercado del trabajo 165
Capítulo 7 Análisis conjunto de todos los mercados: el modelo OA-DA 197
Capítulo 8 La tasa natural de desempleo y la curva de Phillips 229
Capítulo 9 La inflación, la actividad económica y el crecimiento de la cantidad
nominal de dinero 253

I.4 El largo plazo 277


Capítulo 10 Los hechos del crecimiento 279
Capítulo 11 El ahorro, la acumulación de capital y la producción 301
Capítulo 12 El progreso tecnológico, el crecimiento y el desarrollo 331
Capítulo 13 El progreso tecnológico, los salarios y el desempleo 385

Parte II Extensiones
II.1 Las expectativas 413
Capitulo 14 Las expectativas: los instrumentos básicos 415
Capítulo 15 Los mercados financieros y las expectativas 441
Capítulo 16 Las expectativas, el consumo y la inversión 473
Capítulo 17 Las expectativas, la producción y la política macroeconómica 499

VII
II.2 La economía abierta 521
Capítulo 18 La apertura de los mercados de bienes y financieros 523
Capítulo 19 El mercado de bienes en una economía abierta 557
Capítulo 20 La producción, el tipo de interés y el tipo de cambio 589
Capítulo 21 Los sistemas de tipos de cambio 613

II.3 Patologías 645


Capítulo 22 Las depresiones y las crisis 647
Capítulo 23 La inflación alta 679

Parte III
De vuelta a la política macroeconómica
Capítulo 24 ¿Deben imponerse limitaciones a las autoridades económicas? 717
Capítulo 25 La política monetaria: recapitulación 743
Capítulo 26 La política fiscal: recapitulación 775
Capítulo 27 La historia de la macroeconomía 807

Apéndices

Apéndice 1: Introducción a la contabilidad nacional 825


Apéndice 2: Repaso de los conocimientos de matemáticas 831
Glosario 837
Índice Analítico 851
Créditos de las fotografías 859
Símbolos utilizados en este libro 860

VIII
Una gira CAPÍTULO
2
por el libro
Las palabras producción, desempleo e inflación aparecen diariamente en
la prensa y en las noticias de la televisión, por lo que cuando las utilizamos en el
Capítulo 1, el lector sabía más o menos de qué estábamos hablando. Ahora es
necesario definirlas exactamente, y es lo que hacemos en los primeros dos apar-
tados de este capítulo.
En el Apartado 2.1, centramos la atención en la producción agregada. Mos-
tramos cómo podemos examinarla tanto desde el punto de vista de la produc-
ción como desde el punto de vista de la renta.
En el Apartado 2.2, examinamos la tasa de desempleo y la tasa de inflación.

En el Apartado 2.3, presentamos los tres conceptos fundamentales en torno a


los cuales está estructurado el libro:
El corto plazo, es decir, lo que ocurre en la economía de un año a otro.
El medio plazo, es decir, lo que ocurre en la economía durante una déca-
da aproximadamente.
El largo plazo, es decir, lo que ocurre en la economía durante unos cin-
cuenta años o más.
Basándonos en estos tres conceptos, en el Apartado 2.4 presentamos al lector
un mapa de carreteras del resto del libro.

37
2.1 La producción agregada
Los economistas que se dedicaron a estudiar la actividad económica en el si-
glo xix o durante la Gran Depresión no disponían de ningún indicador de la
actividad agregada al que recurrir (agregada es el término que emplean los
macroeconomistas para referirse a total). Tenían que reunir distintas informa-
ciones, como la producción de mineral de hierro en lingotes o las ventas de
algunos grandes almacenes, para tratar de deducir lo que estaba ocurriendo
en la economía en su conjunto.
Dos economistas, Simon No fue hasta el final de la Segunda Guerra Mundial que se reunieron las
Kuznets, profesor de la cuentas nacionales de la renta y el producto (o contabilidad nacional, para
Universidad de Harvard, y abreviar). En Estados Unidos, vienen publicándose sistemáticamente indica-
Richard Stone, profesor de la dores de la producción agregada desde octubre de 1947, mientras que, en los
Universidad de Cambridge,
recibieron el Premio Nobel por
países de América Latina, su elaboración de manera periódica hubo de tardar
su aportación al desarrollo de varios años más (décadas en algunos países de la región). El lector encontrará
la contabilidad nacional, indicadores de la producción agregada de fechas anteriores, pero estos se han
gigantesco logro intelectual y elaborado retrospectivamente.
empírico.
La contabilidad nacional, al igual que cualquier sistema contable, define
primero los conceptos y después elabora indicadores que corresponden a estos
conceptos. Basta con observar las estadísticas de los países que aún no han
desarrollado sistemas de ese tipo para darse cuenta de lo fundamentales que
De vez en cuando, también son esa precisión y esa coherencia. Sin ellos, las cifras que deberían de cuadrar
encontrará el lector otra expre- no cuadran; a menudo, tratar de comprender lo que ocurre es como tratar de
sión, producto nacional bruto o cuadrar la cuenta bancaria de otra persona. No vamos a abrumar aquí al lector
PNB. Existe una sutil diferencia
entre interior y nacional, y, por lo
con los detalles de la contabilidad nacional. Pero como de vez en cuando
tanto, entre el PIB y el PNB, que necesitará conocer la definición de las variables y la relación entre ellas, en el
examinamos en el Capítulo 18 Apéndice 1 que se encuentra al final del libro presentamos el método contable
(véase también el Apéndice 1 básico que se utiliza en Estados Unidos (y, con pequeñas variaciones, en casi
que se encuentra al final del
libro). Sin embargo, de
todos los demás países). Le resultará útil siempre que quiera examinar los datos
momento, prescindiremos de económicos por su cuenta.
esa diferencia.
El PIB: la producción y la renta
El indicador de la producción agregada en la contabilidad nacional se llama
producto interior bruto o PIB, para abreviar. Para comprender cómo se elabo-
ra el PIB, es mejor trabajar con un sencillo ejemplo. Consideremos el caso de
una economía en la que solo hay dos empresas:
En realidad, para producir La empresa 1 produce acero, empleando trabajadores y utilizando máqui-
acero se necesitan no solo tra- nas. Lo vende a 100 dólares a la empresa 2, que produce automóviles. La
bajadores y máquinas, sino
empresa 1 paga a sus trabajadores 80 dólares y se queda con el resto, 20,
también electricidad, mineral
de hierro y otros materiales. como beneficio.
Sin embargo, para simplificar La empresa 2 compra el acero y lo utiliza, junto con trabajadores y máquinas,
el ejemplo, no los tendremos para producir automóviles. Obtiene unos ingresos por las ventas de los auto-
en cuenta.
móviles de 200 dólares, de los cuales 100 se destinan a pagar el acero y 70,
a los trabajadores de la empresa, por lo que queda un beneficio de 30.
Toda esta información puede resumirse en una tabla:

Empresa siderúrgica (empresa 1)


Ingresos derivados de las ventas $100
Gastos $80
Salarios $80
Beneficios $20

38 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Empresa automovilística (empresa 2)
Ingresos derivados de las ventas $200
Gastos $170
Salarios $70
Compras de acero $100
Beneficios $30

¿Cuál sería, según el lector, la producción agregada de esta economía for-


mada por dos empresas? ¿La suma de los valores de todos los bienes produci-
dos, es decir, 100 dólares de la producción de acero y 200 de la producción
de automóviles, o sea, 300? ¿O simplemente el valor de los automóviles, que
es igual a 200 dólares?
La respuesta correcta es 200 dólares. ¿Por qué? Porque el acero es un bien
intermedio. Una vez que contabilizamos la producción de automóviles, no
queremos contabilizar también la de los bienes utilizados para producirlos.
Eso nos lleva a la primera definición del PIB.
1. El PIB es el valor de los bienes y servicios finales producidos en la econo-
mía durante un determinado periodo.
La palabra importante aquí es final. Solo queremos contabilizar la produc-
ción de bienes finales, no de bienes intermedios. Utilizando nuestro ejem-
plo, podemos hacer lo mismo de otra forma. Supongamos que las dos
empresas se fusionan, por lo que la venta de acero se realiza dentro de la
nueva empresa y ya no queda registrada. La contabilidad de la nueva em-
presa vendría dada por la tabla siguiente:
Empresa siderúrgica y automovilística
Ingresos derivados de las ventas $200
Gastos(salarios) $150
Beneficios $50

Lo único que veríamos sería una empresa que vende automóviles por 200
dólares, paga a los trabajadores US$ 80 + US$ 70 = 150 dólares y obtiene
unos beneficios de US$ 20 + US$ 30 = 50 dólares. El valor de 200 dólares
no variaría, como debe ser. No queremos que nuestra medida de la produc-
ción agregada dependa de que las empresas decidan fusionarse o no.
Esta primera definición nos permite calcular el PIB de una forma: registran-
do y sumando la producción de bienes finales. Esta es, de hecho, más o
menos la forma en que se calculan en realidad las cifras del PIB. Pero el
ejemplo también sugiere otra forma de concebir y calcular el PIB.
2. El PIB es la suma del valor añadido de la economía durante un determina-
do periodo.
El término valor añadido significa exactamente lo que sugiere. El valor que
añade una empresa es el valor de su producción menos el valor de los bie-
nes intermedios que utiliza para ello.
En nuestro ejemplo de las dos empresas, la empresa siderúrgica no utiliza
bienes intermedios. Su valor añadido es simplemente igual al valor de su
producción de acero, 100 dólares. Sin embargo, la compañía automovi-
lística utiliza el acero como bien intermedio. Por lo tanto, el valor añadi-
do de la compañía automovilística es igual al valor de los automóviles
que produce menos el valor del acero que utiliza para producirlos, $200

Capítulo 2 • Una gira por el libro 39


− $100 = 100 dólares. El valor añadido total de la economía o PIB es igual
a $100 + $100 = 200 dólares. Obsérvese que el valor añadido agregado
sería el mismo si la empresa siderúrgica y la automovilística se fusionaran
y se convirtieran en una única empresa. En este caso, no veríamos un bien
intermedio producido –el acero se produciría y se utilizaría para fabricar
automóviles dentro de la empresa– y el valor añadido por la empresa
sería simplemente igual al valor de los automóviles producidos, o sea,
200 dólares.
Esta definición permite concebir de una segunda forma el PIB. Las dos
definiciones implican en conjunto que el valor de los bienes y servicios
finales –la primera definición del PIB– siempre puede concebirse como la
suma del valor añadido por todas las empresas de la economía, que es la
segunda definición del PIB.
Hasta ahora, hemos examinado el PIB desde la perspectiva de la produc-
ción. La otra forma de examinarlo es desde la perspectiva de la renta. Vol-
vamos a nuestro ejemplo y pensemos en los ingresos que le quedan a una
empresa una vez pagados los bienes intermedios.
Algunos de los ingresos van a parar a los trabajadores: este componente se
denomina renta del trabajo. El resto va a parar a la empresa: ese compo-
nente se llama renta del capital o beneficios.
De los 100 dólares de valor añadido por el fabricante de acero, 80 van a
parar a los trabajadores (renta del trabajo) y los 20 restantes van a las em-
presas en forma de beneficios (renta del capital). De los 100 de valor aña-
dido por el fabricante de automóviles, 70 van a parar a la renta del trabajo
y 30 se destinan a la renta del capital. En el caso de la economía en su
conjunto, la renta del trabajo es igual a $150 ($80 + $70) y la renta del
capital es igual a $50 ($20 + $30). El valor añadido es igual a la suma de la
renta del trabajo y la renta del capital, que es $200 ($150 + $50).
Eso nos lleva a la tercera definición del PIB.
3. El PIB es la suma de las rentas de la economía durante un determinado
periodo.
En nuestro ejemplo, la renta del trabajo representa un 75% del PIB y la
renta del capital equivale a un 25%. La Tabla 2.1 muestra la desagregación
del valor añadido en los diferentes tipos de renta en Estados Unidos en
1960 y 2003. Incluye una categoría de renta que no teníamos en nuestro
ejemplo, los impuestos indirectos, que son los ingresos que obtiene el Es-
tado procedentes de los impuestos sobre las ventas (en nuestro ejemplo son
iguales a cero). La tabla muestra que la renta del trabajo representa un 64%
del PIB de Estados Unidos. La renta del capital representa un 28%. Los
impuestos indirectos representan el 8% restante. Estas proporciones no han
variado mucho desde 1960.
Recapitulemos: podemos concebir la producción agregada –el PIB– de tres
Dos lecciones para recordar:
formas distintas pero equivalentes:
1. El PIB es el indicador de la
producción agregada, que Desde el punto de vista de la producción: el PIB es igual al valor de los
puede analizarse desde el bienes y servicios finales producidos en la economía durante un determi-
punto de vista de la produc- nado periodo de tiempo.
ción (producción agregada) o
desde el punto de vista de la También desde el punto de vista de la producción: el PIB es la suma del
renta (renta agregada). valor añadido en la economía durante un determinado periodo de tiempo.
2. La producción agregada y Desde el punto de vista de la renta: el PIB es la suma de las rentas de la
la renta agregada siempre son economía durante un determinado periodo de tiempo.
iguales.

40 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Tabla La composición del PIB de Estados Unidos según el tipo de renta,
2.1 1960 y 2007

1960 2007

Renta del trabajo 66% 63,83%

Renta del capital 26% 27,64%

Impuestos indirectos 8% 7,868%

Fuente: Survey of Current Business, marzo, 2009

PIB nominal y real


El PIB de Estados Unidos fue de 13,8 billones de dólares en 2007, mientras que
en 1960 fue de 520.000 millones. ¿Fue la producción de Estados Unidos real-
mente 26 veces mayor en 2007 que en 1960? Evidentemente no: una gran parte
del aumento se debió a la subida de los precios y no a un incremento de las
cantidades producidas. Eso nos lleva a distinguir entre el PIB nominal y el real.
El PIB nominal es la suma de las cantidades de bienes finales producidos
multiplicada por su precio corriente. Esta definición pone de manifiesto que el
PIB nominal aumenta con el paso del tiempo por dos razones:
En primer lugar, la producción de la mayoría de los bienes aumenta con el
paso del tiempo.
En segundo lugar, el precio de la mayoría de los bienes también sube con
el paso del tiempo.
Si nuestro propósito es medir la producción y su evolución con el paso del
tiempo, necesitamos eliminar el efecto que produce la subida de los precios
en nuestra medida del PIB. Esa es la razón por la que el PIB real es la suma de
las cantidades de bienes finales multiplicada por los precios constantes (en
lugar de corrientes).
Si la economía solo produjera un bien final, por ejemplo, un determinado
modelo de automóvil, sería fácil calcular el PIB real. Utilizaríamos el precio
del automóvil en un año dado y lo multiplicaríamos por la cantidad de auto-
móviles producidos cada año. Supongamos, por ejemplo, que el número de
automóviles producidos y su precio fueran los siguientes:

Año Cantidad de Precio de los PIB nominal PIB real


automóviles automóviles (en dólares
de 2000)
1999 10 $20.000 $200.000 $240.000

2000 12 $24.000 $288.000 $288.000

2001 13 $26.000 $338.000 $312.000

El PIB nominal, que es igual a la cantidad de automóviles multiplicada por


su precio, pasa de 200.000 dólares en 1999 a 288.000 en 2000 (lo que repre-
senta un aumento del 44%) y de 288.000 en 2000 a 338.000 en 2001 (lo que
representa un aumento del 16%).
Para calcular el PIB real, hay que multiplicar el número anual de automóviles
por un precio común. Supongamos que utilizamos como precio común el

Capítulo 2 • Una gira por el libro 41


precio de un automóvil vigente en 2000. Con este método obtenemos el PIB
real en dólares de 2000.
Utilizando este método, el PIB real de 1999 (en dólares de 2000) es igual a
10 automóviles x US$24.000 por automóvil = 240.000 dólares. El de 2000
(en dólares de 2000) es igual a 12 automóviles x $24.000 por automóvil =
288.000 dólares, igual que el PIB nominal de 2000. El PIB real de 2001 (en
dólares de 2000) es igual a 13 x 24.000 = 312.000 dólares.
Para verificarlo, calcule el PIB Por lo tanto, el PIB real aumenta de 240.000 dólares en 1999 a 288.000
real en dólares de 2001 y, a dólares en 2000 (lo que representa un aumento del 20%) y de 288.000
continuación, la tasa de creci-
miento registrada entre 1999 y
dólares en 2000 a 312.000 dólares en 2001 (lo que representa un aumento
2000 y entre 2000 y 2001. del 8%).
¿Habrían sido distintos los resultados si hubiéramos decidido calcular el
PIB real utilizando el precio de un automóvil vigente, por ejemplo, en 2001 en
lugar de 2000? Evidentemente, el nivel del PIB real de cada año sería diferen-
te (ya que los precios no son los mismos en 2001 que en 2000); pero su tasa
de variación de un año a otro sería la misma que antes.
El problema que plantea el cálculo del PIB real en la práctica se halla en
que hay evidentemente más de un bien final. El PIB real es la media ponderada
de la producción de todos los bienes finales, lo que nos lleva a preguntarnos
qué ponderaciones debemos utilizar.
Parece que lo lógico sería utilizar como ponderaciones los precios relativos
de los bienes. Si un bien cuesta por unidad el doble de lo que cuesta otro, es
evidente que debería dársele el doble de peso en el cálculo de la producción
real. Pero eso plantea una cuestión. ¿Qué ocurre si, como sucede normalmen-
te, los precios relativos varían con el paso del tiempo? ¿Debemos elegir los
precios relativos de un año dado como ponderaciones o debemos modificarlas
conforme pase el tiempo? Es mejor dejar para el apéndice de este capítulo el
análisis de estas cuestiones y de la forma en que se elabora el PIB real en Esta-
dos Unidos. Aquí lo que necesita saber el lector es que el indicador del PIB
real que aparece en la contabilidad nacional de Estados Unidos utiliza ponde-
raciones que reflejan los precios relativos que varían con el paso del tiempo.
El indicador se denomina PIB real en dólares (de 2000) encadenados («2000»
porque, al igual que en nuestro ejemplo anterior, 2000 es el año en que por
definición el PIB real es igual al PIB nominal). Es el mejor indicador de la pro-
ducción de la economía de Estados Unidos, y su evolución muestra cómo ha
aumentado esta con el paso del tiempo.
Suponga que el PIB real se La Figura 2.1 representa la evolución tanto del PIB nominal como del PIB
midiera en dólares de 1970 real de Estados Unidos desde 1960 y de Chile desde 1986. Por definición, los
en lugar de dólares de 2000.
dos son iguales en 2000 en Estados Unidos y en 2003 en Chile. La figura mues-
¿Dónde se cortarían las curvas
del PIB nominal y el PIB real? tra que, en Estados Unidos, en 2007 el PIB real fue alrededor de 4,6 veces
mayor que en 1960, lo que significa un aumento considerable, pero claramen-
te muy inferior al del PIB nominal, que se multiplicó por 26. En Chile, el PIB
real en 2008 fue más del triple que en 1986, mientras que el PIB nominal se
multiplicó por 25 en el periodo 1986-2008. La diferencia entre los dos se debe
a las subidas de los precios registradas en ese periodo.

42 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


 igura 2.1 El PIB
F nominal y real
(a)Estados Unidos, 1960-2007

Desde 1960 hasta 2007, el PIB nominal de Estados Unidos se multiplicó por
26, pero el PIB real sólo se multiplicó por 4,6.

(b)Chile, 1986-2008

Desde 1986 hasta 2008 el PIB nominal se multiplicó por 25, mientras que el
PIB real sólo poco más que se triplicó.

(a) 12.000

10.000
Billones de dólares

8.000

6.000
PIB real

4.000

2.000
PIN nominal

0
1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005

(b) El PIB nominal y real, (b) Chile, 1986-2008


100.000.000
90.000.000
80.000.000
Miles de pesos

70.000.000
60.000.000
50.000.000
40.000.000
30.000.000
PIB a precios corrientes
20.000.000 PIB a precios reales
10.000.000

1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1995 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Capítulo 2 • Una gira por el libro 43


TEMA CONCRETO

El PIB real, el progreso tecnológico y el precio de los computadores

Un difícil problema que plantea el cálculo del PIB real del año pasado tenían una velocidad de 3. Y suponga-
son los cambios de la calidad de los bienes existentes. mos que el precio en dólares de los computadores nuevos
Uno de los casos más difíciles es el de los computadores. de este año es idéntico al de los computadores nuevos
Sería claramente absurdo suponer que la calidad de un del año pasado. En ese caso, los economistas encarga-
computador personal de 2004 es igual que la de un dos de calcular el precio ajustado de los computadores
computador personal fabricado en 1981 (año en que llegarán a la conclusión de que los nuevos son, en reali-
IBM presentó la PC). Con la misma cantidad de dinero dad, un 10% más baratos que el año pasado.
se compraba claramente mucha más capacidad de cál- Este método, denominado cálculo hedonista de los
culo en 2004 que en 1981. Pero ¿cuánta más? ¿Presta precios, da un precio implícito a cada una de las carac-
un computador de 2004 diez veces más servicios infor- terísticas de un bien: en el caso de un computador, la
máticos que uno de 1981, cien veces más o mil veces velocidad, la memoria, etcétera. (hedone significa placer
más? ¿Cómo debemos tener en cuenta las mejoras de la en griego). Lo utiliza el Departamento de Comercio de
velocidad interna, del tamaño de la RAM o del disco Estados Unidos, que calcula el PIB real para estimar las
duro, el hecho de que los computadores de 2004 pue- variaciones del precio de bienes complejos que cambian
dan acceder a internet, etcétera? rápidamente, como los automóviles y los computadores.
El método que utilizan los economistas para tener en Utilizando este método, el Departamento de Comercio
cuenta estas mejoras es observar el mercado de compu- estima que la calidad de los computadores nuevos ha
tadores y ver cómo valora los computadores de diferentes aumentado, en promedio, un 18% al año desde 1981.
características en un determinado año. Ejemplo: supon- En otras palabras, un computador personal representativo
gamos que la evidencia basada en los precios de los de 2004 presta 1,1823 = 45 veces más servicios que
diferentes modelos en el mercado muestra que los consu- uno de 1981.
midores están dispuestos a pagar un 10% más por un Los computadores no solo prestan más servicios, sino
computador que tiene una velocidad de 4 gigahercios que también se han abaratado. Su precio en dólares ha
(4.000 megahercios) en lugar de 3 (en la primera edi- bajado alrededor de un 10% al año desde 1981. Eso
ción de este libro, publicada en 1996, comparamos dos significa, junto con la información del párrafo anterior,
computadores que tenían una velocidad de 50 y 16 que su precio ajustado para tener en cuenta la calidad
megahercios, respectivamente; el cambio es un buen ha descendido a una tasa anual media del 18% + 10%
ejemplo de progreso tecnológico). Supongamos que to- = 28%. En otras palabras, con un dólar gastado hoy en
dos los computadores nuevos de este año tienen una ve- un computador se compra 1,2823 = 292 veces más
locidad de 4 gigahercios, mientras que todos los nuevos servicios informáticos que en 1981.

Las expresiones PIB nominal y PIB real tienen muchos sinónimos y es pro-
bable que el lector los encuentre en sus lecturas:
El PIB nominal también se denomina PIB monetario o PIB en unidades
monetarias corrientes.
El PIB real también se denomina PIB expresado en bienes, PIB en unidades
monetarias constantes, PIB ajustado por la inflación o PIB en unidades
monetarias de 2000, si ese es el año base.
En los capítulos siguientes, a menos que se indique lo contrario:
El PIB se referirá al PIB real e Yt representará el PIB real del año t.
El PIB nominal y las variables medidas en unidades monetarias corrientes
se representarán con un signo del dólar, por ejemplo, $Yt en el caso del PIB
nominal del año t.

44 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


El PIB real indica las dimensiones económicas de un país. Un país que
tiene el doble de PIB que otro es económicamente el doble de grande que el
otro. Asimismo o quizás aun más importante, es el nivel del PIB real per cápi-
ta, es decir, el cociente entre el PIB real y la población del país. Indica el nivel
medio de vida del país.
Un país puede tener un elevado nivel de PIB o un elevado nivel de PIB per
cápita, pero estar creciendo lentamente; piénsese en Japón. Un país puede
tener, por el contrario, un bajo nivel de PIB o un bajo nivel de PIB per cápita,
pero estar creciendo rápidamente; piénsese en China. Hasta ahora, hemos
centrado la atención en los niveles de PIB y de PIB per cápita. Para evaluar los
resultados de una economía de un año a otro, los economistas centran la aten-
ción en la tasa de crecimiento del PIB real, es decir, en el crecimiento del PIB.
Los periodos de crecimiento positivo del PIB se denominan expansiones y los
de crecimiento negativo se llaman recesiones.
La Figura 2.2 muestra la evolución del crecimiento del PIB de Estados
Unidos desde 1960 y en América Latina desde 1990. El crecimiento del PIB
en el año t se calcula de la forma siguiente: (Yt − Yt−1)/Yt−1. La figura muestra
que la economía de Estados Unidos ha pasado por diversas expansiones, inte-
rrumpidas por breves recesiones. Obsérvense en particular los últimos veinte
años, cuando una recesión a principios de los años noventa dejó paso a una
larga expansión entre 1992 y 2000. En 2001, el crecimiento fue positivo pero
muy bajo. Luego, fue aumentando hasta 2004, pero a partir de entonces fue

 igura 2.2 Tasa


F de crecimiento del PIB
(a)Estados Unidos desde 1960
Desde 1960, la economía de Estados Unidos ha experimentado una serie de expansiones
interrumpidas por breves recesiones.

(b)América Latina, desde 1990


Desde 1990, las economías latinoamericanas han experimentado ciclos expansivos y recesivos.

(a) 7

4
Porcentaje

1

2
1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005

Capítulo 2 • Una gira por el libro 45


(b)
7,00
6,00
5,00

Porcentaje
4,00
3,00
2,00
1,00
0,00
-1,00
-2,00
1990 1991 1992 1993 1994 1995 1995 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Año

disminuyendo. Actualmente, la economía de Estados Unidos se encuentra en


una recesión. En el Panel (b) de la Figura 2.2, podemos apreciar, para el caso
de América Latina, las fases de expansión y contracción de las economías de
la región durante las últimas dos décadas. Se puede apreciar, por ejemplo, el
efecto en la región de las caídas de las economías mexicana y argentina hacia
1995 y 2002, respectivamente. Asimismo, se pueden observar las altas tasas
de crecimiento en el periodo expansivo 2004-2007, así como también que ya
en 2008 las economías comenzaron a desacelerarse, siguiendo la evolución
de la actividad económica mundial.

La figura suscita una pregunta: si el crecimiento del PIB de Estados Unidos


fue positivo en 2008, ¿por qué se dice que la economía sufrió una recesión ese
año? La razón se hallá en que los economistas observan el crecimiento del PIB
trimestre a trimestre en lugar de año a año. No existe una definición oficial de
recesión, pero convencionalmente se habla de recesión si la economía tiene
un crecimiento negativo al menos durante dos trimestres consecutivos. Aun-
que el crecimiento del PIB fue positivo en 2008, en su conjunto fue negativo
durante cada uno de los dos últimos dos trimestres de ese año, por lo que 2008
se califica de recesivo. Para comprobarlo vuelva al Capítulo 1donde se mues-
tra la evolución de éste hasta el 2010*.

2.2 Las otras variables macroeconómicas


principales
Como el PIB es un indicador de la actividad agregada, evidentemente es la
variable macroeconómica fundamental. Pero hay otras dos –el desempleo y la
inflación– que nos suministran información sobre otros importantes aspectos
del funcionamiento de la economía.

La tasa de desempleo
Comencemos con algunas definiciones. El empleo es el número de personas
que tienen trabajo. El desempleo es el número de personas que no tienen em-
pleo, pero están buscando uno. La población activa es la suma del empleo y
el desempleo:
L = N + U
población activa = empleo desempleo

*Estimado

46 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


La tasa de desempleo es el cociente entre el número de desempleados y el
número de personas activas:

U
u
L
tasa de desempleo = desempleo/población activa
Calcular la tasa de desempleo es menos obvio de lo que puede parecer. Es
fácil saber si una persona está trabajando o no. Es más difícil saber si está des-
empleada. Recuérdese que, según la definición, para que una persona se con-
sidere desempleada, debe cumplir dos condiciones: (1) no debe tener empleo
y (2) debe estar buscando uno. Esta segunda condición es difícil de evaluar.
Hasta la década de 1940 en Estados Unidos y hasta años más recientes en
casi todos los demás países, la única fuente de datos sobre el desempleo era
el número de personas inscritas en las oficinas de desempleo, por lo que solo
se consideraban desempleadas estas personas. Este sistema proporcionaba un
indicador insatisfactorio del desempleo. El número de personas realmente
desempleadas que se inscribían variaba, de hecho, de unos países a otros y
con el paso del tiempo. Las que no tenían ningún incentivo para inscribirse
–por ejemplo, quizá porque habían agotado sus prestaciones por desempleo–
probablemente no se tomaban la molestia de acudir a la oficina de desempleo
y, por lo tanto, no se contabilizaban. Los países que tenían sistemas de presta-
ciones menos generosos probablemente tenían menos desempleados inscritos
y, por lo tanto, unas tasas de desempleo medidas más bajas.
Actualmente, la mayoría de los países ricos se basan en grandes encuestas
a los hogares para calcular la tasa de desempleo, y progresivamente su meto-
dología se ha ido estandarizando siguiendo las recomendaciones de la OIT
(Organización Internacional del Trabajo), aunque aún existen algunas diferen-
cias entre los países.
En Estados Unidos, la encuesta a partir de la cual se efectúa la medición
del desempleo se denomina Current Population Survey (CPS) y es realizada
por el U.S. Bureau of the Census. En Brasil se lleva a cabo la Pesquisa Mensal
de Emprego; en Chile, la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Na-
cional; y en Uruguay, la Encuesta Continua de Hogares: todas ellas brindan
los datos de campo con los cuales se llega a la medición. Similares tipos de
encuestas y sondeos se realizan en los diversos países latinoamericanos.
En la Argentina, la tasa de desempleo se mide a través de los resultados ob-
tenidos en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que lleva a cabo el Institu-
to Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Se basa, a partir de 2003, en un
relevo continuo de 17.240 hogares ubicados en 31 centros urbanos del país.
La encuesta, en la Argentina, define la situación en que se encuentran las
personas con respecto a su participación o no en la actividad económica, y
divide a la población, como se observa en la Figura 2.3, en dos grandes gru-
pos: la población activa y la inactiva.
Población económicamente activa (PEA). Como vimos antes, la integran
las personas que tienen ocupación o la están buscando activamente. Está,
por lo tanto, compuesta por la población ocupada más la desocupada.
 Ocupados. Se incluye a quienes trabajaron al menos una hora en la se-
mana anterior al relevamiento, percibiendo un pago en dinero o en espe-
cie por la tarea que realizaron. También, a quienes se encuentren en goce
de una licencia por cualquier motivo y a quienes realizan tareas regulares
Capítulo 2 • Una gira por el libro 47
de ayuda en la actividad de un familiar, reciban o no una remuneración
por ello. Se destacan tres subgrupos dentro de esta categoría:
- Subocupados visibles u horarios. Este tipo de población comprende a
todos los ocupados en empleos de tiempo reducido, que trabajan me-
nos de 35 horas semanales y quisieran trabajar más. Pueden ser, a su
vez, subocupados demandantes o no demandantes, según estén bus-
cando activamente un trabajo de tiempo completo o no lo estén.
- Ocupados plenos. Son las personas que trabajan entre 35 y 45 horas
semanales.
- Sobreocupados. Población ocupada que trabaja más de 45 horas
semanales.
 Desempleados. Esta categoría se refiere a personas que, no teniendo
ocupación, buscan trabajo de manera activa. Corresponde a la desocu-
pación abierta; por lo tanto, no incluye otras formas de precariedad la-
boral también relevadas por la EPH (tales como el carácter transitorio
de ciertas ocupaciones, trabajos de tiempo parcial cuando se tiene vo-
luntad de trabajar más horas, y el cese de la solicitación de empleo ante
el desaliento por una búsqueda infructuosa).
Población inactiva (o no activa). Esta categoría comprende a todas las per-
sonas no incluidas en la población económicamente activa: a los niños, los
estudiantes y la población adulta que está realizando tareas domésticas
(amas de casa), que está jubilada, demasiado enferma para trabajar o que
está desanimada y simplemente no está buscando trabajo. Los que consti-
tuyen este caso son inactivos marginales en oposición a los inactivos típi-
cos, que son los que de todos modos no están dispuestos a trabajar.

 uadro 2.1:
C
Clasificación de la población según su condición de actividad en la Argentina.

Población total

Población activa Población inactiva

Ocupados Desocupados Típicos Marginales

Subocupados Niños Desanimados


Estudiantes
Amas de casa
Ocupados

Sobreocupados

Con base en la información de la EPH, el INDEC también publica algunos


indicadores ocupacionales básicos, entre los cuales los más importantes son
los siguientes:
Tasa de actividad. Calculada como porcentaje entre la población económi-
camente activa y la población total.

48 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Tasa de empleo. Porcentaje de la población ocupada con respecto a la
población total. En el caso de información censal, se calcula sobre la po-
blación de 14 años y más.
Tasa de ocupación. Es el porcentaje entre la población ocupada y la pobla-
ción económicamente activa.
Tasa de desocupación. Calculada como porcentaje entre la población des-
ocupada y la población económicamente activa.
Tasa de subocupación. Se calcula como el porcentaje entre la población
subocupada y la población económicamente activa.
En Estados Unidos, las estimaciones basadas en la CPS muestran que en
2008 había, en promedio, 145,4 millones de personas ocupadas y 8,9 millo-
nes de personas desempleadas, por lo que la tasa de desempleo era igual a 8,9/
(145,4 + 8,9) = 5,8%. En la Argentina, según las estimaciones de la EPH para
el último trimestre de ese mismo año, había en los 31 aglomerados urbanos
10,43 millones de personas ocupadas y 825.000 personas desocupadas, por
lo que la tasa de desocupación era igual a 0,825/(10,43 + 0,825) = 7,3%.
Una vez más, obsérvese que solo se consideran desempleadas las personas
que están buscando trabajo; como vimos recién, las que no tienen empleo ni
lo están buscando se consideran inactivas. Cuando el desempleo es elevado,
algunas de las personas desempleadas renuncian a buscar trabajo y, por lo
tanto, ya no se consideran desempleadas. Estas personas se conocen con el
nombre de trabajadores desanimados. Por poner un ejemplo extremo, si todos
los trabajadores que carecen de trabajo renunciaran a buscar uno, la tasa de
desempleo sería igual a cero y eso haría que fuera un indicador muy insatis-
factorio de lo que ocurre en el mercado de trabajo. Este ejemplo es demasiado
extremo; en la práctica, cuando la economía se desacelera, normalmente ob-
servamos tanto un aumento del desempleo como un aumento del número de
personas que abandonan la población activa. En otras palabras, normalmente
un aumento de la tasa de desempleo va acompañado de una disminución de
la tasa de actividad, que es el cociente entre la población activa y la población
total en edad activa.
El Panel (a) de la Figura 2.4 muestra la evolución del desempleo en Estados
Unidos desde 1960. Desde ese año, la tasa de desempleo ha fluctuado entre
el 3 y el 10%, disminuyendo durante las expansiones y aumentando durante
las recesiones. Obsérvese, en particular, que la larga expansión de los años
noventa provocó una disminución de la tasa de desempleo del 7,5% en 1992
al 4% en 2000 y que la recesión de principios de la década de 2000 provocó
un aumento a un 6% en 2003, un valor similar al que alcanzaría cinco años Al principio de la reforma eco-
más tarde, producto de una nueva (y más profunda) recesión. nómica en Europa oriental, en
los inicios de los años noventa,
En Perú, como podemos observar en el Panel (b) de la Figura 2.4, la evo- el desempleo aumentó especta-
lución de la tasa de desocupación también se ha visto afectada por las diversas cularmente. Pero también expe-
fases de expansión y recesión que ha vivido la economía peruana desde los rimentó un descenso igualmente
años ochenta hasta la actualidad. Los momentos de mayores niveles de des- espectacular la tasa de activi-
dad. En Polonia, en 1990, el
ocupación que ha vivido la economía peruana han sido en 1985, cuando la 70% de la reducción del empleo
tasa traspasó el 10%, aunque luego se redujo rápidamente. Sin embargo, en se debió a las jubilaciones anti-
los últimos quince años, la tasa ha venido oscilando entre un 8 y un 10%, cipadas, es decir, a las perso-
valores claramente más elevados que los de Estados Unidos pero similares a nas que abandonan la pobla-
ción activa en lugar de
los correspondientes a buena parte de los países de la región. convertirse en desempleadas.

Capítulo 2 • Una gira por el libro 49


 igura 2.3
F
Tasa de desempleo

(a) Estados Unidos desde 1960


Desde 1960, la tasa de desempleo de Estados Unidos ha fluctuado entre el 3 y el 10%, bajando
durante las expansiones y subiendo durante las recesiones.

(b) Perú, desde 1980


Desde 1980, la tasa de desempleo de Perú ha ido oscilando entre el 5 y el 10%. En 1985 alcanzó
el máximo valor del período, traspasando el umbral del 10%. En los últimos quince años, se ha
mantenido relativamente constante, fluctuando entre el 8 y el 10%.

(a)
10

8
Porcentaje

3
1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005

(b) Tasa de empleo (b) Perú, desde 1980


11

10

8
Porcentaje

3
1980 1981 1982 1983 1984 1985 1986 1987 1988 1989 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1995 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

50 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


TEMA CONCRETO

¿Tenía España realmente una tasa de desempleo del 24% en 1994?


En 1994, la tasa oficial de desempleo de España al- social– representaba entre el 10 y el 15% del empleo,
canzó la cifra del 24% (ha descendido desde enton- pero estaba formada principalmente por personas que
ces, pero aún es hoy de más del 10%). Esta tasa era ya tenían un trabajo y que realizaban un segundo o
aproximadamente la misma que tenía Estados Unidos incluso un tercero. Según la mejor estimación de la
en 1933, que fue el peor año de la Gran Depresión. encuesta, solo alrededor de un 15% de los desemplea-
Sin embargo, España en 1994 no se parecía en abso- dos estaban trabajando realmente, lo cual significa que
luto a Estados Unidos en 1933. Había pocas personas la tasa de desempleo, que entonces era oficialmente
sin hogar y la mayoría de las ciudades parecían prós- del 21%, en realidad se acercaba más al 18%, que es
peras. ¿Podemos creer realmente que casi una cuarta una cifra todavía muy alta. En suma, la economía su-
parte de la población activa española estaba buscan- mergida española era significativa, pero la mayoría de
do trabajo? los desempleados no estaban trabajando en ella.
Para responder a esta pregunta, debemos ver ¿Cómo sobrevivían los desempleados en España?
cómo se calcula la cifra del desempleo en España. ¿Sobrevivían porque las prestaciones por desempleo
Procede, casi de la misma forma que en Estados Uni- eran excepcionalmente generosas? No. Salvo en el
dos, de una encuesta mensual realizada a 60.000 caso de los generosísimos sistemas de dos regiones,
hogares. Las personas se clasifican en la categoría de Andalucía y Extremadura –que, como cabría esperar,
desempleadas si indican que no están trabajando, tenían incluso un nivel de desempleo superior al del
pero que están buscando empleo. resto del país–, las prestaciones por desempleo eran
¿Podemos estar seguros de que dicen la verdad? muy parecidas a las de otros países de la OCDE. Las
No. Aunque no existe un incentivo claro para mentir prestaciones normalmente representaban un 70% del
–las respuestas son confidenciales y no se utilizan salario durante los primeros seis meses y un 60% a
para averiguar si los encuestados tienen derecho o no partir de entonces. Se pagaban durante un periodo
a percibir prestaciones por desempleo–, es posible que oscilaba entre los cuatro y los 24 meses, depen-
que las personas que trabajan en la economía sumer- diendo del tiempo que hubiera trabajado antes el des-
gida prefieran no arriesgarse y declaren que están empleado. El 30% de las personas que llevaban más
desempleadas. de dos años desempleadas no percibían prestaciones
Las dimensiones de la economía sumergida –que por desempleo. Entonces, ¿cómo sobrevivían? La cla-
es la parte de la actividad económica que no se mide ve de la respuesta se hallá en la estructura de la fami-
en las estadísticas oficiales, bien porque la actividad es lia española. La tasa de desempleo más alta corres-
ilegal o porque las empresas y los trabajadores prefie- pondía a los jóvenes. En 1994, era cercana al 50%
ren no declararla y no pagar así impuestos– son una en el caso de los jóvenes de 16 a 19 años y giraba
cuestión que viene de lejos en España, por lo que sa- en torno al 40% en el caso de los jóvenes de 20 a
bemos realmente mucho más sobre ella que en otros 24. Normalmente, los jóvenes permanecen en el ho-
países. En 1985, las autoridades españoles intentaron gar hasta cerca de los 30 años, tendencia cada vez
averiguar más y realizaron una minuciosa encuesta a mayor a medida que ha aumentado el desempleo. Si
60.000 personas. Para tratar de conseguir que los examinamos los hogares en lugar de los individuos,
encuestados dijeran la verdad, el cuestionario les pe- en 1994 la proporción de hogares en los que no ha-
día que describieran con suma precisión cómo utiliza- bía ningún miembro ocupado era inferior al 10%; la
ban su tiempo, por lo que era más difícil mentir. Las proporción que no percibía ninguna renta salarial ni
respuestas eran interesantes. En España, la economía prestaciones por desempleo era de menos de un 3%.
sumergida –que es el número de personas que trabajan En suma, la mayoría de los desempleados recibían
sin declararlo a la administración de la seguridad ayuda económica de su familia.

Capítulo 2 • Una gira por el libro 51


¿Por qué preocupa el desempleo a los economistas?
El desempleo preocupa a los economistas por dos razones:
Les preocupa por su repercusión directa en el bienestar de los desemplea-
dos. Aunque las prestaciones por desempleo son mayores hoy que durante
la Gran Depresión, el desempleo aún suele ir acompañado de problemas
financieros y psicológicos. La magnitud de estos problemas depende del
tipo de desempleo. Una de las imágenes del desempleo es la de una reser-
va estancada de personas que permanecen largos periodos de tiempo des-
La situación es muy distinta en
Europa, donde los desemplea- empleadas. Como veremos más adelante en este libro, esta imagen no re-
dos normalmente permanecen fleja lo que ocurre en la mayoría de los casos. Todos los meses, muchas
en esa situación largo tiempo, personas se quedan desempleadas y muchas de las desempleadas encuen-
por lo que la imagen de una tran trabajo. Pero algunos grupos (que suelen ser los jóvenes, las personas
reserva estancada refleja mucho no cualificadas y las minorías étnicas) sufren más que otros y se convierten
más la realidad.
en desempleados crónicos. Estas personas también son más vulnerables a
los despidos cuando aumenta la tasa de desempleo.
A los economistas también les preocupa la tasa de desempleo porque señala
que la economía puede no estar utilizando eficientemente algunos de sus re-
cursos. Si el desempleo es muy alto y muchas personas que quieren trabajar no
encuentran trabajo, eso induce a pensar que la economía no funciona bien.
Quizá sea por este tipo de
¿Puede ser también un problema un nivel muy bajo de desempleo? La
afirmaciones que la economía respuesta es afirmativa. Al igual que un motor que va a una velocidad
suele denominarse ciencia excesiva, una economía que tiene un nivel muy bajo de desempleo pue-
sombría. de estar utilizando excesivamente sus recursos humanos y padecer una
escasez de mano de obra. ¿Qué es demasiado bajo? Es una pregunta di-
fícil de responder y de la que nos ocuparemos más adelante en este libro.
Surgió en 2000 en Estados Unidos. A finales de ese año, algunos econo-
mistas pensaban que la tasa de desempleo, de un 4% en ese momento,
era demasiado baja. Aunque no abogaban por provocar una recesión,
eran partidarios de frenar el crecimiento de la producción durante un
tiempo para que la tasa de desempleo pudiera aumentar algo. Resultó que
obtuvieron más de lo que habían pedido: una recesión en 2001 en lugar
de una simple desaceleración.

La tasa de inflación
La deflación es un fenómeno
raro, pero se produce. Japón La inflación es una continua subida del nivel general de precios de la econo-
ha experimentado una defla- mía, llamado nivel de precios. La tasa de inflación es la tasa a la que sube el
ción desde finales de los años nivel de precios (y a la inversa, una deflación es un descenso continuo del
noventa.
nivel de precios y corresponde a una tasa de inflación negativa).
La cuestión práctica es cómo definir este nivel de precios. Normalmente,
los macroeconomistas examinan dos indicadores del nivel de precios, es decir,
dos índices de precios: el deflactor del PIB y el índice de precios de consumo.

El deflactor del PIB


Hemos visto antes que el PIB nominal puede aumentar porque aumenta el PIB
real o porque suben los precios. En otras palabras, si vemos que el PIB nominal
aumenta más deprisa que el PIB real, la diferencia tiene que deberse a una
subida de los precios.
Eso nos lleva a la definición del deflactor del PIB. El deflactor del PIB en
el año t, Pt, es el cociente entre el PIB nominal y el PIB real en el año t:

PIBt nominal $ Yt
Pt
PIBt real Yt

52 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Obsérvese que en el año en el que por definición el PIB real y el nominal Los números índice suelen igua-
son iguales, el nivel de precios es igual a 1. Merece la pena hacer hincapié en larse a 100 (en el año base) en
este punto. El deflactor del PIB es lo que se denomina número índice. Su nivel lugar de a 1. Si el lector observa
se elige arbitrariamente –en este caso es igual a 1– y no tiene ninguna inter- el Economic Report of the
President (véase el Capítulo 1),
pretación económica. Pero su tasa de variación (Pt − Pt−1)/Pt−1 tiene una clara
verá que el deflactor del PIB,
interpretación económica. Indica la tasa a la que sube el nivel general de pre- mostrado en la Tabla B3 del
cios con el paso del tiempo, es decir, la tasa de inflación. informe, es igual a 100 en
2000 (año base), a 100,5 en
Una de las ventajas de definir el nivel de precios como el deflactor del PIB 2001, etcétera.
se hallá en que implica la existencia de una sencilla relación entre el PIB no-
minal, el PIB real y el deflactor del PIB. Para verlo, reorganicemos la ecuación
anterior: Calcule el deflactor del PIB y la
tasa de inflación correspon-
$ Yt PtYt diente registrada entre 1999 y
2000 y entre 2000 y 2001
en nuestro ejemplo de los auto-
El PIB nominal es igual al deflactor del PIB multiplicado por el PIB real. O móviles del Apartado 2.1, en
en tasas de variación, la tasa de crecimiento del PIB nominal es igual a la tasa el que el PIB real se calcula uti-
de inflación más la tasa de crecimiento del PIB real. lizando como precio común el
precio de los automóviles de
2000.
El índice de precios de consumo Para refrescar la memoria,
El deflactor del PIB indica el precio medio de la producción, es decir, de los véase la proposición 7 del
bienes finales producidos en la economía. Sin embargo, a los consumidores Apéndice 2 que se encuentra
al final del libro.
les interesa el precio medio del consumo, es decir, de los bienes que consu-
men. Los dos precios no tienen por qué ser iguales. El conjunto de bienes
producidos en la economía no es igual que el conjunto de bienes comprados
por los consumidores, por dos razones:
Algunos de los bienes del PIB no se venden a los consumidores, sino a las
empresas (por ejemplo, las máquinas herramientas), al Estado o a extranjeros.
El IPC no debe confundirse
Algunos de los bienes adquiridos por los consumidores no se producen en con el índice de precios al por
el país, sino que se importan del extranjero. mayor (IPP), que es un índice
de los precios de los bienes
Para medir el precio medio del consumo o, en otras palabras, el coste de producidos en el país por la
la vida, los macroeconomistas examinan otro índice, llamado índice de pre- industria manufacturera, la
cios de consumo o IPC. En Estados Unidos, el IPC existe desde 1917 y se pu- minería, la agricultura, la
pesca, la silvicultura y las
blica mensualmente. En la Argentina, el IPC es confeccionado por el Instituto empresas eléctricas.
Nacional de Estadística y Censos para la zona metropolitana y también se pu-
blica mensualmente (en cambio, las cifras del PIB y del deflactor del PIB solo
se calculan y publican trimestralmente).
El IPC indica el coste monetario de una lista específica de bienes y servi-
cios en el tiempo. Esta lista, que se basa en un minucioso estudio del gasto de
los consumidores, intenta representar la cesta de consumo de un consumidor
urbano representativo. Solo se actualiza aproximadamente cada diez años.
En Estados Unidos, el personal del Bureau of Labor Statistics (BLS) acude
todos los meses a las tiendas para ver qué ha ocurrido con el precio de los
bienes que figuran en la lista. Recoge los precios de alrededor de 22.000 tien-
das minoristas, concesionarios de automóviles, estaciones de servicio, hospi-
tales, etcétera, de 85 ciudades. Estos precios se utilizan entonces para elaborar
el índice de precios de consumo.
El IPC es, al igual que el deflactor del PIB (el nivel de precios correspon-
diente a la producción agregada, o sea, el PIB), un índice. Es igual a 1 en el El IPC también suele fijarse
como el deflactor del PIB en
periodo elegido como periodo base y, por lo tanto, su nivel no tiene ninguna 100 en lugar de 1 en el
importancia especial. El periodo base actual es 1982-1984, por lo que la media periodo base.

Capítulo 2 • Una gira por el libro 53


de ese periodo es igual a 1. En 2000, el IPC era de 1,71; comprar la misma
cesta de consumo costaba, pues, un 71% más en dólares que en 1982-1984.

 uadro 2.2
C
Estructura de las ponderaciones del IPC en Argentina.

Bienes y
servicios varios
5,9%
Educación
4,2%
Esparcimiento Alimentos y bebidas
8,7% 31,3%

Transporte y
comunicaciones
11,4%

Salud Indumentaria
10,0% 5,2%

Equipamiento y Vivienda
funcionamiento 12,7%
del hogar
8,6%

Quizá se pregunte el lector cómo difiere la tasa de inflación dependiendo


de que para medirla se utilice el deflactor del PIB o el IPC. La respuesta se
encuentra en la Figura 2.4, que representa la evolución de ambas tasas de
inflación, desde 1960 en Estados Unidos y desde 1993 en la Argentina. Esta
figura permite extraer dos conclusiones:
El IPC y el deflactor del PIB varían al unísono la mayor parte del tiempo. La
mayoría de los años, las dos tasas de inflación se diferencian en menos de
un 1%.
Pero existen claras excepciones. Por ejemplo, en Estados Unidos, tanto en
1974 como a finales de los años setenta, el aumento del IPC fue significa-
tivamente mayor que el del deflactor del PIB. No es difícil averiguar la ra-
zón. Recuérdese que el deflactor del PIB es el precio de los bienes produ-
cidos en Estados Unidos, mientras que el IPC es el precio de los bienes
consumidos en Estados Unidos. Eso significa que, cuando el precio de los
bienes importados sube en relación con el de los bienes producidos en
Estados Unidos, el IPC aumenta más deprisa que el deflactor del PIB. Eso
es precisamente lo que ocurrió en estos dos periodos. En ambos casos, se
duplicó el precio del petróleo. Y aunque Estados Unidos produce petróleo,
solo produce la mitad de lo que consume. Era y sigue siendo el mayor
importador de petróleo. Por lo tanto, en ambos casos, el IPC experimentó
una gran subida en comparación con el deflactor del PIB.
Lo mismo ocurrió, pero en
Para simplificar el análisis, normalmente supondremos que los dos índices
menor escala, en 2000. La
razón fue la misma: una gran varían al unísono, por lo que no necesitamos distinguir entre ellos. Nos referi-
subida del precio relativo del remos simplemente al nivel de precios y lo representaremos por medio de Pt,
petróleo. sin indicar si estamos pensando en el IPC o en el deflactor del PIB.

54 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


¿Por qué preocupa la inflación a los economistas? Se prescinde de las variaciones
que experimentarían los salarios
Si un aumento de la tasa de inflación significara simplemente una subida más reales incluso aunque no
rápida, pero proporcional, de todos los precios y los salarios –caso que se hubiera inflación. Sería más
conoce con el nombre de inflación pura–, la inflación solo sería un pequeño exacto decir que, en una situa-
inconveniente, ya que no afectaría a los precios relativos. ción de inflación pura, la tasa
de inflación no afectaría a la
Tomemos, por ejemplo, el salario real de los trabajadores, que es el salario evolución de los salarios reales.
expresado en bienes en lugar de unidades monetarias. En una economía que
tuviera un 10% de inflación, los precios subirían un 10% al año, pero también
los salarios, por lo que los salarios reales no variarían. La inflación no sería
totalmente irrelevante; la gente tendría que mantenerse al tanto de la subida
de los precios y de los salarios para tomar sus decisiones, pero eso sería una
pequeña molestia, que difícilmente justificaría que se hiciera del control de la
tasa de inflación uno de los principales objetivos de la política macroeconó-
mica.
 igura 2.4
F
La tasa de inflación basada en el IPC y en el deflactor del PIB
(a) Estados Unidos desde 1960
(b) Argentina desde 1993
Las tasas de inflación calculadas por medio del IPC o del deflactor del PIB son muy parecidas.

(a) 14

12
Tasa de inflación
Tasa de inflación (% por año)

según el IPC
10
Tasa de inflación según
el deflactor del PIB
8
7
6

0
1960 1965 1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005

(b)
35
30
Tasa de inflación anual

25
20
15
10
5
0
-5
1993 1994 1995 1995 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007

Tasa de inflación según el IPC Tasa de inflación según el deflactor del PBI
Capítulo 2 • Una gira por el libro 55
Entonces, ¿por qué les preocupa a los economistas la inflación? Precisa-
mente porque no existe la inflación pura.
Durante los periodos de inflación, no todos los precios y los salarios su-
ben proporcionalmente. Como no suben proporcionalmente, la inflación
afecta a la distribución de la renta. Por ejemplo, en muchos países, los
jubilados reciben prestaciones que no suben al mismo ritmo que el nivel
de precios y, por lo tanto, pierden en relación con otros grupos cuando
la inflación es alta. No ocurre así en otros países, donde las pensiones
suben automáticamente con el IPC, protegiendo a los pensionistas de la
inflación. Sin embargo, en Rusia, durante la elevadísima inflación que
padeció en los años noventa, las pensiones de jubilación no subieron al
mismo ritmo que la inflación, por lo que muchos jubilados estuvieron al
borde de la inanición.
La inflación introduce otras distorsiones. Las variaciones de los precios
relativos también crean incertidumbre, por lo que es más difícil para las
empresas tomar decisiones sobre el futuro, por ejemplo, decisiones de in-
versión. Algunos precios, que se fijan por ley o que están regulados, se
quedan rezagados con respecto a los demás, lo que altera los precios rela-
La prensa a veces confunde las
tivos. Los impuestos interactúan con la inflación y crean más distorsiones.
deflaciones y las recesiones. Si los tramos impositivos no se ajustan para tener en cuenta la inflación, los
Una deflación es un descenso contribuyentes pasan a tramos cada vez más altos a medida que aumenta
del nivel de precios y una rece- su renta nominal, aunque su renta real no varíe.
sión es una disminución de la
producción real. Si la inflación es mala, ¿significa eso que la deflación (la inflación negati-
va) es buena? La respuesta es negativa. En primer lugar, una elevada deflación
(una elevada tasa negativa de inflación) plantea muchos de los mismos proble-
mas que una alta inflación, desde distorsiones hasta un aumento de la incerti-
dumbre. En segundo lugar, como veremos más adelante en este libro, incluso
una baja tasa de deflación limita la capacidad de la política monetaria para
influir en la producción. ¿Cuál es, pues, la mejor tasa de inflación? La mayoría
Este fenómeno se conoce con el de los macroeconomistas creen que es una tasa de inflación baja y estable,
nombre de deslizamiento de los
tramos impositivos. En Estados
entre un 0 y un 3%. Más adelante, examinaremos los pros y los contras de
Unidos, los tramos impositivos diferentes tasas de inflación.
se ajustan automáticamente Hemos examinado ya las principales variables macroeconómicas, la pro-
para tener en cuenta la infla-
ción. Si esta es del 5%, todos ducción agregada, el desempleo y la inflación. Una economía próspera es
los tramos también suben un claramente una economía que tiene un elevado crecimiento de la producción,
5%. En otras palabras, no hay un bajo desempleo y una baja inflación. ¿Pueden lograrse todos estos objetivos
deslizamiento de los tramos. al mismo tiempo? ¿Es compatible un bajo desempleo con una inflación baja y
Véase el análisis de Japón en estable? ¿Tienen los responsables de la política económica los instrumentos
la década de 1990 en el necesarios para mantener el crecimiento, lograr un bajo desempleo y mantener
Capítulo 22. baja la inflación? Estas son algunas de las cuestiones de las que nos ocupare-
mos a medida que avancemos. Los dos apartados siguientes son un mapa de
carreteras de lo que viene a continuación.

2.3 El corto plazo, el medio plazo


y el largo plazo

¿De qué depende el nivel de producción agregada?


La lectura de la prensa diaria sugiere una primera respuesta. Las variaciones
de la producción se deben a las variaciones de la demanda de bienes. To-
dos hemos leído noticias de prensa que comienzan como la siguiente: «La
producción y las ventas de automóviles fueron mayores el mes pasado,
debido a un aumento de la confianza de los consumidores, que los llevó a

56 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


acudir en un número sin precedentes a los concesionarios». Ese tipo de
noticias ponen de relieve el papel que desempeña la demanda en la deter-
minación de la producción agregada; apuntan a los factores que afectan a
la demanda y que van desde la confianza de los consumidores hasta los
tipos de interés.
Pero cualquiera que sea el número de consumidores indios que acudan a
los concesionarios indios, la producción de la India no aumentará, desde
luego, hasta ser igual que la de Estados Unidos. Eso sugiere otra respuesta.
Lo importante cuando se trata de la producción agregada es el lado de la
oferta, es decir, la cantidad que puede producir la economía, lo cual de-
pende de lo avanzada que esté la tecnología del país, de la cantidad de
capital que esté utilizando y del tamaño y las cualificaciones de su pobla-
ción activa. Son estos factores –no la confianza de los consumidores– los
determinantes fundamentales del nivel de producción de un país.
Podemos ir un paso más allá. Ni la tecnología, ni el capital ni las cualifica-
ciones están dados. La sofisticación tecnológica de un país depende de su
capacidad para innovar e introducir nuevas tecnologías. El volumen de su
stock de capital depende de cuánto ahorren los individuos. Las cualifica-
ciones de los trabajadores dependen de la calidad del sistema educativo
del país. También hay otros factores que pueden ser importantes. Por ejem-
plo, para que las empresas produzcan eficientemente, necesitan un claro
sistema de leyes por el que regirse y un Estado honrado que vele por su
cumplimiento. Eso sugiere una tercera respuesta: los verdaderos determi-
nantes de la producción son algunos factores como el sistema de educa-
ción del país, su tasa de ahorro y la calidad del Estado. Son estos factores
los que debemos examinar si queremos comprender los determinantes del
nivel de producción.
Tal vez esté preguntándose el lector cuál de las tres respuestas es correcta.
Lo cierto es que lo son las tres. Pero cada una se aplica a un periodo de tiem-
po distinto:
A corto plazo, es decir, en un periodo de unos años, la respuesta correcta
es la primera. Las variaciones interanuales de la producción se deben prin-
cipalmente a las variaciones de la demanda. Las variaciones de la deman-
da, que pueden deberse a los cambios de la confianza de los consumidores
o a otros factores, pueden provocar una disminución de la producción (una
recesión) o un aumento de la producción (una expansión).
A medio plazo, es decir, en el plazo de una década, la respuesta correcta
es la segunda. A medio plazo, la economía tiende a retornar al nivel de
producción determinado por los factores de oferta: el stock de capital, la
tecnología y el tamaño de la población activa. Y en el plazo de una década
aproximadamente, estos factores varían a un ritmo lo suficientemente len-
to para que podamos considerarlos dados.
A largo plazo, por ejemplo, en un plazo de cincuenta años o más, la res-
puesta correcta es la tercera. Para comprender por qué Japón creció mucho
más deprisa que Estados Unidos durante cuarenta años después de la Se-
gunda Guerra Mundial, debemos explicar por qué tanto el capital como el
nivel de tecnología aumentaron mucho más deprisa en Japón que en Esta-
dos Unidos. A largo plazo, debemos examinar algunos factores como el
sistema de educación, la tasa de ahorro y el papel del Estado.
Esta manera de examinar los determinantes de la producción subyace a la
macroeconomía y a la estructura de este libro.

Capítulo 2 • Una gira por el libro 57


2.4 Una gira por el libro
El libro está dividido en tres partes –un núcleo, tres extensiones y, por último,
un análisis más profundo del papel de la política macroeconómica– que se
muestran en la Figura 2.5. Permítasenos describirlas más detalladamente.

El núcleo
El núcleo consta de tres partes: el corto plazo, el medio plazo y el largo plazo.
En los Capítulos 3 a 5, analizamos la determinación de la producción a
corto plazo. Para centrar la atención en el papel de la demanda, suponemos
que las empresas están dispuestas a ofrecer cualquier cantidad a un precio
dado. En otras palabras, prescindimos de las restricciones de oferta.
En el Capítulo 3, analizamos el mercado de bienes. En el 4, centramos la
atención en los mercados financieros. En el 5, reunimos el mercado de
bienes y los mercados financieros. El modelo resultante se conoce con el
nombre de modelo IS-LM. Este modelo, desarrollado a finales de los años
treinta, sigue siendo un sencillo instrumento para examinar la determina-
ción de la producción a corto plazo y una pieza básica de la macroecono-
mía. También permite realizar un primer estudio de la influencia de la po-
lítica fiscal y de la política monetaria en la producción.

 igura 2.5
F
La estructura del libro

Introducción
Una gira por el mundo (Capítulo 1)
Una gira por el libro (Capítulo 2)

El núcleo
El corto plazo (IS-LM)
Extensión Capítulos 3-5 Extensión
Expectativas Patologías
El medio plazo (AS-AD)
Capítulos Capítulos
Capítulos 6-9
14 a 17 22 y 23
El largo plazo
Capítulos 10-13

Extensión
La economía
abierta
Capítulos 18-21

De vuelta a la política macroeconómica


Capítulos 24-26

Epílogo
Capítulo 27

58 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


En los Capítulos 6 a 9, desarrollamos el lado de la oferta y analizamos la
determinación de la producción a medio plazo.
En el Capítulo 6, introducimos el mercado de trabajo. En el 7, reunimos los
mercados de bienes, financieros y de trabajo, y mostramos cómo podemos
estudiar la determinación de la producción tanto a corto plazo como a
medio plazo. El modelo expuesto en ese capítulo se denomina modelo de
la producción basado en la oferta y la demanda agregadas (OA-DA). En
los Capítulos 8 y 9, mostramos cómo puede utilizarse para analizar algunas
cuestiones, como la relación entre la producción y la inflación y el papel
de la política monetaria y la política fiscal tanto a corto plazo como a me-
dio plazo.
En los Capítulos 10 a 13, centramos la atención en el largo plazo.
En el 10, presentamos los hechos relevantes analizando el crecimiento de
la producción tanto en los distintos países como en distintos largos perio-
dos de tiempo. En los Capítulos 11 y 12, vemos que tanto la acumulación
de capital como el progreso tecnológico determinan el crecimiento. En el
13, analizamos la relación entre el progreso tecnológico, los salarios y el
desempleo.

Extensiones
Los capítulos que constituyen el núcleo permiten al lector analizar la determi-
nación de la producción (y del desempleo y la inflación) a corto, medio y
largo plazo. Sin embargo, dejan de lado algunos elementos, que analizamos
en tres extensiones.
Los capítulos del núcleo no tienen en cuenta el papel de las expectativas.
Pero estas desempeñan un papel esencial en macroeconomía. Casi todas
las decisiones económicas que toman los individuos y las empresas –com-
prar o no un automóvil, comprar bonos o acciones, construir o no una
nueva planta– dependen de sus expectativas sobre los futuros beneficios,
sobre los futuros tipos de interés, etcétera. La política fiscal y la política
monetaria afectan a la actividad económica no solo directamente, sino a
través de las expectativas de los individuos y de las empresas.
En los Capítulos 14 a 17, centramos la atención en el papel que desempe-
ñan las expectativas y en sus implicaciones para la política fiscal y la polí-
tica monetaria.
En los capítulos del núcleo, suponemos que la economía es una economía
cerrada y prescindimos de sus relaciones con el resto del mundo. Pero lo
cierto es que las economías son cada vez más abiertas y comercian entre
sí tanto bienes como activos financieros. Como consecuencia, los países
son cada vez más interdependientes.
La naturaleza de esta interdependencia y sus implicaciones para la política
fiscal y la política monetaria constituyen los temas de los Capítulos 18 a 21.
Los capítulos del núcleo que se ocupan del corto y el medio plazo centran
la atención en las fluctuaciones de la producción, es decir, en las expan-
siones y en las recesiones. Sin embargo, a veces el término fluctuaciones
no recoge exactamente lo que está ocurriendo cuando algo va muy mal,
por ejemplo, si la inflación alcanza unas tasas muy altas o, como ocurrió
durante la Gran Depresión, si el desempleo es muy alto durante mucho
tiempo o, como ocurrió en Japón durante la década de 1990, si un país
atraviesa una prolongada recesión económica.
Estas patologías constituyen los temas de los Capítulos 22 y 23.

Capítulo 2 • Una gira por el libro 59


De vuelta a la política
La política monetaria y la política fiscal se analizan en casi todos los capítulos
del libro, pero una vez concluidos el núcleo y las extensiones, es útil volver
atrás y reunirlo todo para evaluar el papel que desempeñan:
En el Capítulo 24, centramos la atención en algunas cuestiones generales
de política económica; por ejemplo, nos preguntamos si los macroecono-
mistas conocen realmente lo suficiente el funcionamiento de la economía
para utilizar la política macroeconómica como instrumento de estabiliza-
ción, y si podemos confiar en que las autoridades económicas actuarán
correctamente.
En los Capítulos 25 y 26, evaluamos el papel de la política monetaria y la
política fiscal.

Epílogo
La macroeconomía no es un corpus fijo de conocimientos. Evoluciona con el
tiempo. En el último capítulo, el 27, analizamos su historia reciente y cómo
hemos acabado los macroeconomistas creyendo lo que creemos hoy. Vista
desde fuera, la macroeconomía a menudo parece un campo dividido en escue-
las –keynesianos, monetaristas, nuevos clásicos, economistas de la oferta, et-
cetera.– que se lanzan argumentos mutuamente. El proceso real de investiga-
ción es más ordenado y más productivo de lo que sugiere esta imagen.
Indicamos lo que son, a nuestro juicio, las principales diferencias entre los
macroeconomistas y formulamos el conjunto de proposiciones que definen
hoy el núcleo de la macroeconomía.

60 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Resumen

El PIB, que es el indicador de la producción agregada, pue- economía está utilizando sus recursos. Un elevado des-
de concebirse de tres formas equivalentes: (1) el PIB es el empleo indica que la economía no está utilizando efi-
valor de los bienes y servicios finales producidos en la cientemente sus recursos humanos.
economía durante un determinado periodo; (2) el PIB es La inflación es una subida del nivel general de precios, es
la suma del valor añadido en la economía durante un decir, una subida del nivel de precios. La tasa de inflación
determinado periodo; y (3) el PIB es la suma de las rentas es la tasa a la que sube el nivel de precios. Los macroeco-
de la economía durante un determinado periodo. nomistas examinan dos indicadores del nivel de precios. El
El PIB nominal es la suma de las cantidades de bienes fina- primero es el deflactor del PIB, que es el precio medio de
les producidos multiplicada por su precio corriente. Eso los bienes producidos en la economía, y el segundo es el
implica que las variaciones del PIB nominal reflejan tanto índice de precios de consumo (IPC), que es el precio
las variaciones de las cantidades como las variaciones de medio de los bienes consumidos en la economía.
los precios. El PIB real es una medida de la producción. Sus La inflación altera la distribución de la renta.También intro-
variaciones solo reflejan las variaciones de las cantidades. duce distorsiones y aumenta la incertidumbre.
Una persona se considera desempleada si no tiene traba- Los macroeconomistas distinguen entre el corto plazo
jo y está buscando empleo. La tasa de desempleo es el (unos pocos años), el medio plazo (diez años) y el largo
cociente entre el número de desempleados y el número plazo (cincuenta años o más). Consideran que la produc-
de personas activas. La población activa es la suma de las ción es determinada por la demanda a corto plazo y por
personas ocupadas y las desempleadas. el nivel tecnológico, el stock de capital y la población acti-
A los economistas les preocupa el desempleo debido a va a medio plazo. Por último, piensan que es determinada
los costes humanos que implica. También lo observan por factores como la educación, la investigación, el ahorro
porque envía una señal sobre la eficiencia con que la y la calidad del Estado a largo plazo.

Términos clave
bien final nivel de precios
bien intermedio número índice
cálculo hedonista de los precios Pesquisa Mensal de Emprego
contabilidad nacional PIB expresado en bienes, PIB en unidades monetarias
corto, mediano plazo constantes, PIB ajustado por la inflación, PIB en unidades
monetarias de 2000
coste de la vida
PIB monetario, PIB en unidades monetarias
crecimiento del PIB, expansiones, recesiones corrientes
cuentas nacionales de la renta y el producto PIB nominal
Current Population Survey (CPS) PIB real
deflación PIB real en dólares (de 2000) encadenados
deflactor del PIB PIB real per cápita
desempleo población activa
economía sumergida producción agregada
empleo producto interior bruto (PIB)
Encuesta Continua de Hogares producto nacional bruto (PNB)
Encuesta de Caracterización Socioeconómica tasa de actividad
Nacional
tasa de desempleo
Encuesta Permanente de Hogares (EPH)
tasa de inflación
inactivas
trabajadores desanimados
índice de precios de consumo (IPC)
valor añadido
inflación

Capítulo 2 • Una gira por el libro 61


Preguntas y problemas
Compruebe c) ¿Cuáles son los salarios y los beneficios totales obtenidos?
Según el enfoque de la renta, ¿cuál es el PIB?
1. Indique si son verdaderas, falsas o inciertas cada una de las si-
guientes afirmaciones utilizando la información de este capítulo. 4. Una economía produce tres bienes: automóviles, computadores
Explique brevemente su respuesta. y naranjas. Las cantidades y los precios por unidad correspondien-
tes a 2003 y 2004 son los siguientes:
a) La participación de la renta del trabajo en el PIB es mucho
menor que la participación de la renta del capital.
2003 2004
b) El PIB de Estados Unidos fue 21 veces mayor en 2003 que Precio Cantidad Precio Cantidad
en 1960.
Automóviles 10 $ 2.000 12 $ 3.000
c) Si una elevada tasa de desempleo disuade a los trabajado-
res de buscar trabajo, la tasa de desempleo puede ser un Computadores 4 $ 1.000 6 $ 500
indicador insatisfactorio de la situación del mercado de Naranjas 1.000 $1 1.000 $1
trabajo. Para evaluar la situación, también debe examinar-
se la tasa de actividad. a) ¿Cuál es el PIB nominal en 2003 y en 2004? ¿En qué por-
d) Una reducción de la tasa de desempleo exige un elevado centaje varía el PIB nominal entre 2003 y 2004?
crecimiento de la producción. b) Utilizando los precios de 2003 como conjunto de precios
e) Si el IPC japonés es igual a 108 actualmente y el de Esta- comunes, ¿cuál es el PIB real en 2003 y en 2004? ¿En qué
dos Unidos es igual a 104, la tasa de inflación japonesa es porcentaje varía el PIB real entre 2003 y 2004?
mayor que la de Estados Unidos. c) Utilizando los precios de 2004 como conjunto de precios
f) La tasa de inflación calculada por medio del IPC es un ín- comunes, ¿cuál es el PIB real en 2003 y en 2004? ¿En qué
dice de inflación mejor que la tasa de inflación calculada porcentaje varía el PIB real entre 2003 y 2004?
por medio del deflactor del PIB. d) ¿Por qué son diferentes las dos tasas de crecimiento de la
2. Suponga que está midiendo el PIB anual de Estados Unidos producción de (b) y (c)? ¿Cuál es correcta? Explique su
sumando el valor final de todos los bienes y servicios producidos en respuesta.
la economía. Averigüe cómo afecta al PIB cada una de las siguien- 5. Considere la economía descrita en el Problema 4.
tes transacciones:
a) Suponga que utilizamos los precios de 2003 como conjun-
a) Una marisquería compra pescado a un pescador por valor to de precios comunes para calcular el deflactor del PIB
de 100 dólares. de 2003 y de 2004. Calcule el deflactor del PIB de 2003 y
b) Una familia gasta 100 dólares en una cena en una maris- de 2004 y la tasa de inflación entre 2003 y 2004.
quería. b) Suponga que utilizamos los precios de 2004 como conjun-
c) Delta Airlines compra un nuevo avión a Boeing por 200 to de precios comunes para calcular el PIB real de 2003 y
millones de dólares. de 2004. Calcule el deflactor del PIB de 2003 y de 2004 y
la tasa de inflación entre 2003 y 2004.
d) La compañía aérea nacional griega compra un nuevo avión
a Boeing por 200 millones de dólares. c) ¿Por qué son diferentes las dos tasas de inflación? ¿Cuál es
correcta? Explique su respuesta.
e) Delta Airlines vende uno de sus aviones a Denzel Was-
hington por 100 millones de dólares. 6. Considere la economía descrita en el Problema 4.
3. En un año dado, se realizan las siguientes actividades: a) Calcule el PIB real de 2003 y de 2004 utilizando el precio
medio que tenía cada bien en los dos años.
i. Una compañía minera que se dedica a la extracción de plata
paga a sus trabajadores 200.000 dólares por extraer 75 kilos de b) ¿En qué porcentaje varía el PIB real entre 2003 y 2004?
plata y la vende a un joyero por 300.000. c) ¿Cuál es el deflactor del PIB en 2003 y en 2004? ¿Cuál es
ii. El joyero paga a sus trabajadores 250.000 dólares por hacer la tasa de inflación basada en el deflactor del PIB?
collares de plata, que vende directamente a los consumidores por d) ¿Es este método una solución atractiva para resolver los
1 millón de dólares. problemas planteados en los Problemas 4 y 5 (a saber, dos
a) Según el enfoque de la producción de bienes finales, ¿cuál tasas de crecimiento diferentes y dos tasas de inflación
es el PIB de esta economía? diferentes, dependiendo del conjunto de precios que se
utilice)? La respuesta es afirmativa y es la base de la elabo-
b) ¿Cuál es el valor añadido en cada fase de producción?
ración de deflactores de tipo encadenado. Véase el apén-
Según el enfoque del valor añadido, ¿cuál es el PIB?
dice del Capítulo 2 para un análisis más extenso.

62 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Profundice Suponga que, en lugar de dedicar una hora a hacer la cena,
decide trabajar una hora más y gana 12 dólares adicionales. En
7. Cálculo hedonista de los precios ese caso, compra comida china por 10 dólares.
Como explicamos en el primer recuadro del Capítulo 2, es difícil a) ¿Cuánto aumenta el PIB medido?
medir la verdadera subida de los precios de los bienes cuyas carac-
terísticas cambian con el paso del tiempo. En el caso de esos bie- b) ¿Debe aumentar el verdadero PIB más o menos? Expli-
nes, parte de la subida de su precio puede atribuirse a una mejora que su respuesta.
de la calidad. El cálculo hedonista de los precios permite calcular Amplíe
la subida de los precios ajustada para tener en cuenta la calidad.
9. El mercado de trabajo y la recesión de 2001 en Estados Unidos
a) Considere el caso de una revisión médica rutinaria. In-
dique algunas de las razones por las que quizá desee En esta pregunta se examina la recesión de 2001 en Estados
utilizar el cálculo hedonista de los precios para medir la Unidos. Necesitará datos de la tasa trimestral de crecimiento del
subida del precio de este servicio. PIB de Estados Unidos y del empleo y el desempleo mensuales.
Ahora, considere el caso de una revisión médica de una mujer a) Entre en la página web del Bureau of Economic Analysis
embarazada. Suponga que, en el año en que se introduce un (www.bea.doc.gov). Busque la Tabla 1.1.6 de la
nuevo método de ultrasonidos, la mitad de los médicos lo ofrece NIPA (National Income and Product Accounts). Observe
y la mitad ofrece el antiguo. Una revisión con el nuevo método los datos trimestrales en dólares encadenados de 2000.
cuesta un 10% más que una revisión con el antiguo. Represente las tasas trimestrales de crecimiento del
PIB desde 1999 hasta 2002. ¿Fue negativo el crecimien-
b) ¿Cuánto aumenta la calidad en términos porcentuales
to en algún trimestre?
como consecuencia del nuevo método?
Entre en la página web del Bureau of Labor Statistics (www.bls.
Ahora suponga, además, que el primer año en que puede utilizar-
gov). Pinche en «National Unemployment Rate» y busque «De-
se el nuevo método, el precio de las revisiones realizadas con él
tailed CPS Statistics». Seleccione «Historical Data» y, a continua-
es un 15% más alto que el de las revisiones realizadas el año
ción, en «Employment Status of the Civilian Noninstitutional
anterior (en el que todo el mundo utilizaba el antiguo método).
Population». Descargue las series de datos mensuales de la
c) ¿Qué parte del precio más alto de las revisiones reali- tasa de actividad, el empleo, la tasa de ocupación y la tasa de
zadas con el nuevo método (en comparación con las desempleo del periodo 1994-2004. Asegúrese de que todas las
revisiones realizadas un año antes) se debe a una ver- series de datos estén desestacionalizadas. Los gráficos facilitan
dadera subida del precio de las revisiones, y qué parte la interpretación de los datos. Pinche en la opción «Include
representa una mejora de la calidad? En otras palabras, Graphs» para descargar gráficos de la evolución de los datos.
¿cuánto ha subido el precio de las revisiones realizadas
b) ¿Cómo evolucionó la tasa de desempleo en 2001 y en
con el nuevo método, ajustado para tener en cuenta la
los años posteriores? ¿Cree que la tasa de desempleo
calidad, con respecto al precio de las revisiones realiza-
refleja totalmente la situación del mercado de trabajo?
das un año antes?
¿Cómo evolucionó la tasa de actividad? ¿A qué podría
En muchos casos, no se dispone del tipo de información que he- deberse la evolución de la tasa de actividad?
mos utilizado en (b) y (c). Supongamos, por ejemplo, que el año
c) Continuando con (b), algunos economistas prefieren exa-
en que se introduce el nuevo método de ultrasonidos, todos los
minar el empleo en lugar del desempleo. ¿Qué diferencia
médicos lo adoptan, por lo que el antiguo ya no se utiliza. Conti-
hay entre el crecimiento del empleo posterior a 2001 y el
núe suponiendo, además, que el precio de las revisiones realiza-
anterior? ¿Cómo evolucionó la tasa de ocupación?
das el año en que se introduce el nuevo método es un 15% más
alto que el de las revisiones realizadas durante el año anterior (en d) Según el National Bureau of Economic Research (NBER),
el que todo el mundo utilizaba el antiguo método). Observamos, que data las recesiones, entre los meses de marzo y
pues, una subida del precio de las revisiones del 15%, pero nos noviembre de 2001 hubo una recesión. En otras pala-
damos cuenta de que la calidad de las revisiones ha mejorado. bras, según el NBER, la economía comenzó a recuperar-
se en noviembre de 2001. Dadas sus respuestas a (b) y
d) Partiendo de estos supuestos, ¿de qué información ne-
(c), ¿cree que el mercado de trabajo se recuperó tan
cesaria para calcular la subida del precio de las revisio-
nes ajustada para tener en cuenta la calidad carecemos? deprisa como el PIB? Explique su respuesta.
Incluso sin esta información, ¿podemos saber algo so- Para más información sobre la forma en que el NBER data las
bre la subida del precio de las revisiones ajustada para recesiones, visite su página web (www.nber.org). Contiene una
tener en cuenta la calidad? ¿Es de más de un 15%? ¿Es historia de las fechas de las recesiones y algunos análisis de su
de menos de un 15%? Explique su respuesta. metodología.
8. PIB medido frente a PIB verdadero

Invitamos al lector a visitar la página del libro en la web de Prentice Hall cuya dirección es
www www.pearsoneducacion.net/blanchard para los ejercicios de este capítulo.

Capítulo 2 • Una gira por el libro 63


Lecturas complementarias
Si el lector desea saber algo más sobre la definición y la más información sobre las conclusiones de la comisión y
elaboración de los numerosos indicadores económicos algunos de los debates posteriores, véase «Consumer prices,
que se publican periódicamente en la prensa –desde el the consumer price index, and the cost of living» de Michael
índice de ofertas de empleo hasta el índice de ventas al Boskin et al., Journal of Economic Perspectives, vol. 12,
por menor–, existen dos publicaciones fáciles de leer: número 1, invierno de 1998, págs. 3-26.
Guide to Economic Indicators de Norman Frumkin, M. E. Para una breve historia de la construcción de la contabili-
Sharpe, Nueva York, 2000, 3.a edición. dad nacional, véase «PIB: one of the great inventions of the
The Economist Guide to Economic Indicators de The Econo- 20th century», Survey of Current Business, enero de 2000,
mist, Bloomberg, Nueva York, 2003. págs. 1-9 (dirección de internet: http://www.bea.gov/bea/
articles/beawide/2000/0100od.pdf).
En 1995, el Senado de Estados Unidos creó una comisión
para estudiar la elaboración del IPC y recomendar algunos Para ver por qué es difícil medir correctamente el nivel de
cambios. Esa comisión llegó a la conclusión de que la tasa precios y de producción, véase «Viagra and the wealth of
de inflación calculada por medio del IPC era, en promedio, nations» de Paul Krugman, 1998 (dirección de internet:
alrededor de un 1% demasiado alta. Si esta conclusión es www.pkarchive.org/theory/viagra.html). Paul Krug-
correcta, eso implica, en particular, que los salarios reales man es un economista de la Universidad de Princeton y
(los salarios nominales divididos por el IPC) han crecido columnista del New York Times. Algunas de sus columnas se
un 1% más al año de lo que se indica normalmente. Para encuentran en internet; son perspicaces y amenas.

Apéndice: el cálculo del PIB real y los índices encadenados


En el ejemplo que hemos puesto en este capítulo, PIB nominal en el año 0 y en el año 1
solo había un bien final –automóviles–, por lo que
Cantidad Año 0 Precio US$ Valor US$
era fácil calcular el PIB real. Pero ¿cómo se calcula
cuando hay más de un bien final? Este apéndice Potatas (kilos) 10 1 10
muestra la respuesta. Vino (botellas) 5 2 10
Para comprender cómo se calcula el PIB real en IB nominal 20
una economía en la que hay muchos bienes finales, Cantidad Año 1 Precio US$ Valor US$
lo único que necesitamos es observar una econo- Potatas (kilos) 15 1 15
mía en la que solo haya dos bienes. Lo que es váli-
Vino (botellas) 5 3 15
do en el caso de dos bienes lo es también en el de
millones de bienes. PIB nominal 30

Supongamos, pues, que una economía produce


dos bienes finales, por ejemplo, vino y patatas. La tasa de crecimiento del PIB nominal entre el
año 0 y el 1 es igual a ($30 − $20)/$20 = 50%. Pero
En el año 0, produce 10 kilos de patatas al pre- ¿cuál es la tasa de crecimiento del PIB real?
cio de 1 dólar el kilo y cinco botellas de vino al
precio de 2 dólares la botella. Para responder a esta pregunta, es necesario
En el año 1, produce 15 kilos de patatas al pre- calcular el PIB real de cada uno de los dos años. La
cio de 1 dólar el kilo y cinco botellas de vino al idea esencial en la que se basa la elaboración del
precio de 3 dólares la botella. PIB real es la valoración de las cantidades de ambos
años utilizando el mismo conjunto de precios.
En el año 0, el PIB nominal es, pues, igual a 20
dólares, y en el año 1 es igual a 30. Supongamos que elegimos, por ejemplo, los pre-
Esta información se resume en la tabla que sigue. cios del año 0. Ese año se denomina año base. En este
caso, el cálculo se realiza de la manera siguiente:

64 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


El PIB real del año 0 es la suma de las canti- Bureau of Economic Analysis (BEA) –que es el or-
dades de los dos bienes del año 0 multipli- ganismo oficial que calcula el PIB– adoptó un
cadas por su precio en el año 0: nuevo método que no tiene este problema.
(10 x $1) + (5 x $2) = 20 dólares.
Consta de cuatro pasos:
El PIB real del año 1 es la suma de las canti-
dades de los dos bienes del año 1 multipli- Se calcula la tasa de variación del PIB real
cadas por su precio en el año 0: entre el año t y el año t + 1 de dos formas
(15 x $1) + (5 x $2) = 25 dólares. distintas: primero, utilizando los precios del
año t como conjunto de precios comunes, y
La tasa de crecimiento del PIB real entre el segundo, utilizando los precios de t + 1 como
año 0 y el año 1 es igual a ($25 − $20)/$20, conjunto de precios comunes.
o sea, un 25%.
Por ejemplo, la tasa de variación del PIB entre
Esta respuesta plantea, sin embargo, una im- 2000 y 2001 se calcula:
portante cuestión. En lugar de utilizar el año 0
como año base, podríamos haber utilizado el año 1. Hallando el PIB real de 2000 y el de 2001
1 o cualquier otro. Por ejemplo, si hubiéramos utilizando como conjunto de precios comu-
utilizado el año 1 como año base, entonces: nes los precios de 2000 y calculando una pri-
mera medida de la tasa de crecimiento del
El PIB real del año 0 sería igual a PIB entre 2000 y 2001.
(10 x $1 + 5 x $3) = 25 dólares. 2. Hallando el PIB real de 2000 y el de 2001
El PIB real del año 1 sería igual a utilizando como conjunto de precios comu-
(15 x $1 + 5 x $3) = 30 dólares. nes los precios de 2001 y calculando una se-
La tasa de crecimiento del PIB real registrada gunda medida de la tasa de crecimiento del
entre el año 0 y el año 1 sería igual a $5/$25, PIB entre 2000 y 2001.
o sea, 20%. Se calcula la tasa de variación del PIB real
La respuesta que se obtiene utilizando el año promediando estas dos tasas de variación.
1 como año base sería, pues, diferente de la que Se calcula un índice del nivel del PIB real
se obtiene utilizando el año 0. Por lo tanto, si la enlazando –o encadenando– las tasas anua-
elección del año base afecta a la tasa de varia- les de variación calculadas.
ción de la producción calculada, ¿qué año base El índice se fija en 1 en un año arbitrario. En el
debemos utilizar? momento de escribir este libro, era 2000. Dado
Hasta mediados de los años noventa se elegía que la tasa de variación registrada entre 2000 y
en Estados Unidos –y aún hoy en la mayoría de 2001 calculada por el BEA es de 0,5%, el índi-
ce de 2001 es igual a (1 + 0,5%) = 1,005.
los países– un año base y se modificaba raras ve-
ces, por ejemplo, cada cinco años aproximada- El índice de 2002 se obtiene multiplicando el
mente. Así, en Estados Unidos, el año base utili- de 2001 por la tasa de variación registrada en-
zado desde diciembre de 1991 hasta diciembre tre 2001 y 2002, y así sucesivamente (el lector
de 1995 fue 1987. Es decir, las medidas del PIB encontrará el valor de este índice –multiplica-
real publicadas, por ejemplo, en 1994 correspon- do por 100– en la segunda columna de la Ta-
dientes tanto a 1994 como a años anteriores se bla B3 del Economic Report; compruebe que
calcularon utilizando los precios vigentes en es 100 en 2000, 100,5 en 2001, etcétera).
1987. En diciembre de 1995, la contabilidad na- Se multiplica este índice por el PIB nominal
cional comenzó a utilizar como año base 1992; de 2000 para hallar el PIB real en dólares (de
las medidas del PIB real de años anteriores se re- 1992) encadenados.
visaron utilizando los precios de 1992. Como el índice es 1 en 2000, eso significa
Esta práctica era lógicamente poco atractiva. que el PIB real de 2000 es igual al PIB nomi-
Cada vez que se modificaba el año base y se uti- nal de 2000.
lizaba un nuevo conjunto de precios, se calcula- Encadenado quiere decir que se encadenan
ban de nuevo todos los PIB reales anteriores y las tasas de variación como antes hemos descri-
todas las tasas de variación del PIB real anteriores: to. (2000) se refiere al año en el que, por defini-
¡se escribía, de hecho, la historia económica cada ción, el PIB real es igual al PIB nominal [el lector
cinco años! A partir de diciembre de 1995, el U.S. encontrará el valor del PIB real en dólares (de

Capítulo 2 • Una gira por el libro 65


2000) encadenados en la primera columna de la Los precios utilizados para evaluar el PIB real
Tabla B2 del Economic Report]. de dos años consecutivos son los precios correctos,
a saber, los precios medios de esos dos años.
Este índice es más complicado de calcular que
los que se utilizaban hasta 1995 [para asegurarse de Y como la tasa de crecimiento registrada de un
que comprende los pasos, el lector debe calcular el año a otro se calcula utilizando los precios de esos
PIB real en dólares encadenados (año 0) del año 1 dos años en lugar del conjunto de precios de un año
en nuestro ejemplo]. Pero es claramente mejor en base arbitrario, la historia no tiene que escribirse de
forma conceptual. nuevo cada cinco años aproximadamente, como
antes, cuando con el método que se empleaba para
calcular el PIB real se modificaba el año base.

Término clave

año base

66 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


El corto plazo
A corto plazo, la demanda determina la producción. Son muchos los
factores que afectan la demanda, desde la confianza de los
consumidores hasta la política fiscal y la política monetaria.

Capítulo 3 Capítulo 5
En el Capítulo 3, examinamos el equi- En el Capítulo 5, analizamos conjun-
librio del mercado de bienes y la de- tamente el mercado de bienes y los
terminación de la producción. Cen- mercados financieros. Mostramos los
tramos la atención en la interacción determinantes de la producción y del
de la demanda, la producción y la tipo de interés a corto plazo. Exami-
renta. Mostramos cómo puede utili- namos el papel de la política fiscal y

el núcleo
zarse la política fiscal para influir en la política monetaria. El modelo pre-
la producción. sentado en este capítulo se denomina
modelo IS-LM y es una de las piezas
básicas de la macroeconomía.
Capítulo 4
En el Capítulo 4, analizamos el equili-
brio de los mercados financieros y la
determinación del tipo de interés. Mos-
tramos cómo puede utilizarse la políti-
ca monetaria para influir en el tipo de
interés.

67
El mercado CAPÍTULO
3
de bienes

C uando los economistas analizan las variaciones interanuales de la activi-


dad económica, centran la atención en la interrelación de la producción,
la renta y la demanda:
Las variaciones de la demanda de bienes alteran la producción.
Las variaciones de la producción alteran la renta.
Las variaciones de la renta alteran la demanda de bienes.

Nada lo resume mejor que la siguiente tira cómica

En este capítulo analizamos estas interrelaciones y sus implicancias.


En el Apartado 3.1 examinamos la composición del PIB y las diferentes fuen-
tes de la demanda de bienes.
En el 3.2 analizamos los determinantes de la demanda de bienes.
En el 3.3 mostramos que el nivel de producción de equilibrio es determinado
por la condición según la cual la producción de bienes debe ser igual a su
demanda.
En el 3.4 presentamos otra manera de analizar el equilibrio, basada en la
igualdad de la inversión y el ahorro.
En el 3.5 hacemos un primer análisis de la influencia de la política fiscal en
el nivel de producción de equilibrio.

69
3.1 La composición del PIB
La compra de una máquina por parte de una empresa, la decisión de un con-
sumidor de ir a un restaurante y la compra de aviones de combate por parte
del Estado son decisiones claramente muy diferentes y dependen de factores
muy distintos. Por lo tanto, si queremos saber de qué depende la demanda de
Output y producción son bienes, tiene sentido descomponer la producción agregada (PIB) desde el
sinónimos. Use uno u otro punto de vista de los diferentes bienes producidos y de los diferentes tipos de
indistintamente.
compradores de estos bienes.
La Tabla 3.1 muestra para Estados Unidos la descomposición del PIB que
utilizan normalmente los macroeconomistas (para una versión más detalla-
da y definiciones más formales, véase el Apéndice 1 que se encuentra al
final del libro). La Tabla 3.2 muestra asimismo la descomposición de la
producción, pero en este caso para América Latina y las cuatro economías
más grandes de la región en 2007: Brasil, México, Argentina y Venezuela.
El primer componente es el consumo (que representaremos por medio de
la letra C cuando utilicemos el álgebra más adelante y a lo largo de todo el
libro). Son los bienes y los servicios comprados por los consumidores, que
van desde alimentos hasta billetes de avión, vacaciones, nuevos automóvi-
les, etc. El consumo es, con diferencia, el mayor componente del PIB. En
Estados Unidos, representaba en 2007 el 70,3% del PIB. En América Latina,
el consumo representaba en 2007 el 62,1% del PIB.

Tabla
La composición del PIB en Estados Unidos, 2007
3.1

Estados Unidos

Miles de millones de
Porcentaje del PIB
dólares

PRODUCTO BRUTO INTERNO (Y) 13.841,3 100,0

1 Consumo (C) 9.734,2 70,3

2 Inversión fija (I) 2.122,4 15,3

No Residencial 1.481,8 10,7

Residencial 640,7 4,6

3 Gasto público en consumo e inversión (G) 2.689,8 19,4

4 Exportaciones netas de bienes y servicios -708,0 -5,1

Exportaciones de bienes y servicios (X) 1.643,0 11,9

Importaciones de bienes y servicios (IM) -2.351,0 -17,0

5 Inversión en existencias (Is) 22,9 0,0

Fuente: Bureau of Economic Analysis, U.S. Department of Commerce.

70 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Tabla La composición del PBI en América Latina, Brasil, México, Argentina y Venezuela, 2007
3.2 (a precios corrientes de mercado)

América Latina Brasil México Argentina Venezuela

Millones Porcentaje Millones Porcentaje Millones Porcentaje Millones Porcentaje Millones Porcentaje
de dólares del PIB de dólares del PIB de dólares del PIB de dólares del PIB de dólares del PIB

Producto Bruto
3.571.065 100,0 4.7 1.268.460 100,0 1.022.063 100,0 262.327 100,0 228.071 100,0
Interno (Y)

Consumo (C) 2.219.161 62,1 -0,5 773.179 61,0 670.928 65,6 153.661 58,6 122.808 53,8

Inversión fija (I) 706.574 19,8 218.728 17,2 213.080 20,8 63.796 24,3 53.879 23,6

Gasto de consumo
final del gobierno 526.822 14,8 255.316 20,1 104.915 10,3 33.819 12,9 27.046 11,9
general (G)

Exportaciones
netas de bienes 48.645 1,4 21.632 1,7 -16.597 -1,6 11.263 4,3 14.438 6,3
y servicios

Exportaciones
de bienes 857.842 24,0 184.028 14,5 290.328 28,4 64.373 24,5 70.764 31,0
y servicios (X)
Importaciones
de bienes -809.197 -22,7 -162.396 -12,8 -306.925 -30,0 -53.110 -20,2 -56.325 -24,7
y servicios (IM)

Inversión en
69.888 2,0 -396 0,0 49.764 4,9 -212 -0,1 9.900 4,3
existencias (Is)

Fuente: Cepal. Estadística e Indicadores Económicos. Cuentas Nacionales Anuales.

El segundo componente es la inversión (I), llamada a veces inversión fija Advertencia: para la mayoría
para distinguirla de la inversión en existencias (que analizaremos en segui- de las personas, la inversión
da). La inversión es la suma de la inversión no residencial, que es la com- se refiere a la compra de acti-
pra de nuevas plantas o nuevas máquinas (desde turbinas hasta computa- vos, como oro o acciones de
General Motors. Los econo-
dores) por parte de las empresas, y la inversión residencial, que es la mistas utilizan el término inver­
compra de nuevas viviendas o apartamentos por parte de los individuos. sión para referirse a la com-
La inversión residencial y la no residencial, así como las decisiones en las pra de nuevos bienes de
capital, como máquinas (nue-
que se basan, tienen en común más de lo que a primera vista pudiera pare- vas), edificios (nuevos) o
cer. Las empresas compran máquinas o plantas para poder producir más en viviendas (nuevas). Cuando
el futuro. Los individuos compran viviendas o apartamentos para obtener los economistas se refieren a
servicios de vivienda en el futuro. En ambos casos, la decisión de comprar la compra de oro o de accio-
depende de los servicios que prestarán estos bienes en el futuro. Por consi- nes de General Motors u
guiente, tiene sentido agruparlos. En Estados Unidos, la inversión no residen- otros activos financieros, utili-
zan la expresión inversión
cial y la residencial representaban conjuntamente en 2007 un 15,3% del PIB. financiera.
En América Latina, ascendían al 19,8%.
El tercer componente es el gasto público (G). Representa los bienes y ser-
vicios comprados por el Estado en todas sus instancias. Los bienes van
desde aviones hasta equipo de oficina y los servicios comprenden los ser-
vicios suministrados por los empleados públicos. De hecho, en la contabi-
lidad nacional se considera que el Estado compra los servicios suministra-
dos por los empleados públicos y que, a continuación, presta estos servicios
al público gratuitamente.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 71


Obsérvese que G no comprende las transferencias del Estado, como el
servicio nacional de salud o las pensiones de la seguridad social, ni los in-
tereses pagados por la deuda pública. Aunque se trata claramente de gastos
del Estado, no son compras de bienes y servicios. Por esta razón, la cifra de
la Tabla 3.1 correspondiente al gasto público en bienes y servicios, un
19,4% del PIB de Estados Unidos, es menor que la cifra correspondiente al
gasto público total, que comprende las transferencias y los intereses (esa
cifra representó en 2007 un 31% del PIB). En la Argentina, por ejemplo, el
gasto público representa alrededor del 12,9% del PIB, sin incluir las trans-
ferencias y los intereses, y aproximadamente el doble incluyéndolos.
La suma de las líneas 1, 2 y 3 indica las compras de bienes y servicios por
parte de los consumidores, las empresas y el Estado estadounidenses. Para
hallar las compras de bienes y servicios estadounidenses, debemos hacer
dos operaciones más.
En primer lugar, debemos restar las importaciones (IM), que son las com-
pras de bienes y servicios extranjeros por parte de los consumidores, las
empresas y el Estado estadounidenses.
En segundo lugar, debemos añadir las exportaciones (X), que son las
compras de bienes y servicios estadounidenses por parte de extranjeros.
La diferencia entre las exportaciones y las importaciones (X - IM) se
Exportaciones > importacio-
denomina exportaciones netas o balanza comercial. Si las exportaciones
nes b superávit comercial.
son superiores a las importaciones, se dice que el país tiene un superávit
Exportaciones < importacio- comercial. Si las exportaciones son inferiores a las importaciones, se dice
nes b déficit comercial. que el país tiene un déficit comercial. En 2007, las exportaciones de Es-
tados Unidos representaron un 11,9% del PIB y las importaciones repre-
sentaron un 17%, por lo que Estados Unidos incurrió en un déficit comer-
cial igual a un 5,1% del PIB. En Brasil estos porcentajes fueron del 14,5%
y 12,8% respectivamente, por lo que, en dicho año, se produjo un supe-
rávit comercial del 1,7%.
Asegúrese de que com-
prende cada una de estas La producción y las ventas de un año cualquiera no tienen por qué ser iguales.
tres formas equivalentes de Algunos de los bienes producidos durante un determinado año no se venden
expresar la relación entre la ese mismo año sino más tarde. Y algunos de los bienes vendidos durante un
producción, las ventas y la
inversión en existencias:
año dado pueden haberse producido un año antes. La diferencia entre los
bienes producidos y los bienes vendidos en un determinado año –en otras
Inversión en existencias palabras, la diferencia entre la producción y las ventas– se denomina inver-
= producción - ventas.
sión en existencias. Si la producción es superior a las ventas y las empresas
Producción = ventas + inver- acumulan existencias como consecuencia, se dice que la inversión en exis-
sión en existencias. tencias es positiva. Si la producción es inferior a las ventas y las existencias de
Ventas = producción - inver- las empresas disminuyen, se dice que la inversión en existencias es negativa.
sión en existencias. Esta normalmente es pequeña, positiva unos años y negativa otros. En Estados
Unidos, en 2007 fue positiva, pero muy pequeña e igual a 2.900 millones de
dólares. En otras palabras, la producción fue 2.900 millones de dólares mayor
que las ventas. En el caso de Venezuela, por ejemplo, fue bastante más, unos
9.900 millones de dólares, equivalente al 4,3% de su PIB.
Tenemos ya lo que necesitamos para desarrollar nuestro primer modelo
de determinación de la producción.

3.2 La demanda de bienes


Representemos la demanda total de bienes por medio de Z. Utilizando la
descomposición del PIB que acabamos de ver en el Apartado 3.1, podemos
expresar Z de la forma siguiente:
Z ≡ C + I + G + X - IM

72 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Recuerde que la inversión en existencias no forma parte de la demanda.
Esta ecuación es una identidad (esa es la razón por la que se expresa utili-
zando el símbolo ≡ en lugar del signo de igualdad). Define Z como la suma del
consumo, más la inversión, más el gasto público, más las exportaciones, me-
nos las importaciones.
Ahora tenemos que analizar los determinantes de Z. Para que nuestra tarea
sea más sencilla, hagamos algunas simplificaciones:
Supongamos que todas las empresas producen el mismo bien, que puede
Un modelo casi siempre
ser utilizado por los consumidores para consumirlo, por las empresas para comienza con la palabra
invertir o por el Estado. Con esta (gran) simplificación, sólo es necesario supongamos, lo cual quiere
examinar un mercado –el mercado del bien– y averiguar qué determina la decir que la realidad se
oferta y la demanda en ese mercado. simplifica para centrar la
atención en la cuestión que
Supongamos que las empresas están dispuestas a ofrecer cualquier cantidad esté analizándose.
del bien a un determinado precio, P. Este supuesto nos permite centrar la
atención en el papel que desempeña la demanda en la determinación de la
producción. Como veremos más adelante en el libro, este supuesto sólo es
válido a corto plazo. Cuando estudiemos el medio plazo (a partir del Capí-
tulo 6), lo abandonaremos. Pero de momento simplificará nuestro análisis.
Supongamos que estamos analizando una economía cerrada, que no co-
mercia con el resto del mundo; en ese caso, tanto las exportaciones como
las importaciones son iguales a cero. El supuesto es claramente contrario a
los hechos. Las economías modernas comercian con el resto del mundo.
Más adelante (a partir del Capítulo 18), abandonaremos este supuesto y ve-
remos qué ocurre cuando analizamos una economía abierta. Pero de mo-
mento este supuesto también simplificará nuestro análisis, ya que no tendre-
mos que averiguar qué determina las exportaciones y las importaciones.
Según el supuesto de que estamos analizando una economía cerrada,
X = IM = 0, la demanda de bienes Z es simplemente la suma del consumo, la
inversión y el gasto público:
Z=C+I+G
Examinemos cada uno de estos tres componentes por separado.

El consumo (C)
Las decisiones de consumo dependen de muchos factores, pero el principal
es, sin lugar a dudas, la renta o, mejor dicho, la renta disponible, es decir, la
renta que queda una vez que los consumidores han recibido las transferencias
del Estado y han pagado los impuestos. Cuando aumenta su renta disponible,
compran más bienes; cuando disminuye, compran menos.
Sea C el consumo e YD la renta disponible. El consumo puede expresarse
de la forma siguiente:
C = C(YD) (3.1)
(+)
Esta expresión es una manera formal de decir que el consumo, C, es una
función de la renta disponible YD. La función C(YD) se denomina función de con-
sumo. El signo positivo situado debajo de YD refleja el hecho de que, cuando la
renta disponible aumenta, también aumenta el consumo. Los economistas deno-
minan a una ecuación de este tipo ecuación de conducta, para indicar que refle-
ja algún aspecto de la conducta, en este caso, la conducta de los consumidores.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 73


En este libro utilizaremos funciones para representar las relaciones entre
las variables. En el Apéndice 2, que se encuentra al final del libro, describimos
lo que necesita saber el lector sobre las funciones, que es muy poco. En ese
apéndice presentamos los conocimientos matemáticos que necesitará para
estudiar este libro. No se preocupe: siempre describiremos las funciones ver-
balmente cuando las presentemos por primera vez.
A menudo resulta útil especificar más la forma de la función. He aquí un
caso de ese tipo. Es razonable suponer que la relación entre el consumo y la
renta disponible viene dada por la siguiente relación más sencilla:
C = c 0 + c 1Y D (3.2)
En otras palabras, es razonable suponer que la función es una relación li-
neal. La relación entre el consumo y la renta disponible se caracteriza por te-
ner dos parámetros, c0 y c1:
El parámetro c1 se denomina propensión a consumir (también se denomi-
na propensión marginal a consumir, pero prescindimos del término margi-
nal para simplificar). Indica cómo afecta al consumo un dólar más de renta
disponible. Si c1 es igual a 0,6, un dólar más de renta disponible eleva el
consumo en 1$ x 0,6 = 60 centavos.
c1 está sujeto a la restricción natural de que es positivo. Un incremen-
to de la renta disponible aumentará probablemente el consumo. Otra
restricción natural es que es menor que 1. Cuando la renta disponible
aumenta, es probable que los individuos sólo consuman una parte del
aumento y ahorren el resto.
El parámetro c0 tiene una sencilla interpretación. Es lo que consumirían los
individuos si su renta disponible fuera igual a cero en el año actual: si YD
es igual a cero en la Ecuación (3.2), C = c0.
Una restricción natural es que si la renta actual es igual a cero, el consu-
Piense en la conducta de su
propio consumo. ¿Cuáles mo será aun así positivo: con o sin renta, ¡la gente tiene que comer! Eso
son los valores de c 0 y de implica que c0 es positivo. ¿Cómo pueden tener los individuos un consumo
c 1? positivo si su renta es cero? Desahorrando, es decir, vendiendo algunos de
sus activos o endeudándose.

La Figura 3.1 representa la relación entre el consumo y la renta disponible que


muestra la Ecuación (3.2). Como es una relación lineal, se representa por medio
de una línea recta. Su ordenada en el origen es igual a c0 y su pendiente es igual
a c1. Como c1 es menor que 1, la pendiente de la línea es menor que 1. En otras
palabras, la línea es más plana que una recta de 45° (en el Apéndice 2 se repa-
san los gráficos, las pendientes y las ordenadas en el origen).

74 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


 igura 3.1
F
El consumo y la renta disponible

Función
Consumo, C

del consumo
C - c0 + c1Y0

Recta = c1
C0

Renta disponible, YD

El consumo aumenta cuando aumenta la renta disponible, pero en una proporción menor que
la renta disponible.

A continuación tenemos que definir la renta disponible, YD. Ésta viene dada por
YD ; Y - T

donde Y es la renta y T son los impuestos pagados menos las transferencias En la Argentina, el principal
del Estado recibidas por los consumidores. Para mayor brevedad, cuando impuesto que pagan los indi-
viduos es el IVA (impuesto al
utilicemos el símbolo T, nos referiremos simplemente a los impuestos, pero valor agregado). Las princi-
recuérdese que es igual a los impuestos menos las transferencias. Obsérvese pales fuentes de transferen-
que la ecuación es una identidad, indicada por «;». cias del Estado son las jubila-
ciones y pensiones.
Sustituyendo YD por su valor en la Ecuación (3.2) , tenemos que
C = c0 + c1 (Y - T) (3.3)
La Ecuación (3.3) indica que el consumo, C, es una función de la renta, Y,
y de los impuestos, T. Cuando aumenta la renta, también aumenta el consumo,
aunque en una proporción menor. Cuando suben los impuestos, el consumo
disminuye, pero también en una proporción menor.
La inversión (I)
Los modelos tienen dos tipos de variables. Algunas dependen de otras varia-
bles del modelo y, por lo tanto, se explican dentro de él. Estas variables se
denominan endógenas. Es el caso del consumo que hemos visto antes. Otras
no se explican dentro del modelo sino que vienen dadas. Estas variables se
denominan exógenas. Es así como concebiremos aquí la inversión. La consi-
deramos dada y la expresamos de la forma siguiente:
I=I (3.4)
Variables endógenas, expli-
La barra que aparece encima de la inversión es un simple recurso tipográ- cadas por el modelo.
fico para acordarnos de que está dada. Variables exógenas, conside-
radas dadas.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 75


Consideramos dada la inversión para simplificar nuestro modelo, pero el
supuesto no es inocuo. Implica que, cuando examinemos más adelante los
efectos de las variaciones de la producción, supondremos que la inversión no
responde a esas variaciones. No es difícil ver que esta implicación puede ser
bastante insatisfactoria como descripción de la realidad. Las empresas que
aumentan la producción pueden muy bien llegar a la conclusión de que nece-
sitan más máquinas y aumentar su inversión. Sin embargo, de momento deja-
remos este mecanismo fuera del modelo y en el Capítulo 5 presentaremos un
análisis más realista de la inversión.

El gasto público (G)


El tercer componente de la demanda de nuestro modelo es el gasto público,
Recuérdese que impuestos
quiere decir impuestos menos
G, que, junto con los impuestos, T, describe la política fiscal, es decir, la
transferencias del Estado. elección de los impuestos y del gasto del Estado. Consideraremos que G y T
son variables exógenas, al igual que la inversión. Pero la razón no es exacta-
mente la misma que en el caso de la inversión. Se basa en dos argumentos:

En primer lugar, el Estado no se comporta con la misma regularidad que los


consumidores o las empresas, por lo que no podemos formular una regla fiable
para G o T como la que escribimos, por ejemplo, en el caso del consumo (sin
embargo, este argumento no es a toda prueba, ya que aunque el Estado no siga
sencillas reglas de conducta como los consumidores, esta es en buena parte
predecible; estas cuestiones se examinarán más adelante, concretamente en
los Capítulos 24 a 26, por lo que las dejaremos de lado hasta entonces).
En segundo lugar, y lo que es más importante, una de las tareas de los ma-
Como consideraremos (casi croeconomistas es analizar las consecuencias de las decisiones sobre el
siempre) que G y T son varia- gasto y los impuestos. Queremos ser capaces de decir: «Si el gobierno eli-
bles exógenas, no utilizare-
mos una barra para indicar giera estos valores de G y T, esto es lo que ocurriría». En este libro consi-
su valor con el fin de aligerar deraremos normalmente que las variables G y T son elegidas por el gobier-
la notación. no y no trataremos de explicarlas dentro del modelo.

3.3 La determinación de la producción


de equilibrio
Reunamos los elementos que hemos introducido hasta ahora.
Suponiendo que las exportaciones y las importaciones son ambas iguales a cero,
la demanda de bienes es la suma del consumo, la inversión y el gasto público:
Z;C+I+G
Si sustituimos C e I por sus expresiones de las Ecuaciones (3.3) y (3.4),
obtenemos
Z = c0 + c1 (Y - T) + I + G (3.5)
La demanda de bienes, Z, depende de la renta, Y, de los impuestos, T, de
la inversión, I , y del gasto público, G.
Pasemos ahora a analizar el equilibrio del mercado de bienes y la relación
entre la producción y la demanda. Si las empresas tienen existencias, la pro-
ducción no tiene por qué ser igual a la demanda. Por ejemplo, las empresas
pueden hacer frente a un aumento de la demanda recurriendo a las existencias,
es decir, teniendo una inversión negativa en existencias. Pueden responder a

76 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


una disminución de la demanda continuando con la producción y acumulando
Pensemos en una economía
existencias, es decir, teniendo una inversión positiva en existencias. Dejemos que sólo produce cortes de
primero de lado esta complicación y comencemos suponiendo que las empre- pelo. No puede haber exis-
sas no tienen existencias. En este caso, la inversión en existencias siempre es tencias de cortes de pelo
igual a cero y el equilibrio del mercado de bienes requiere que la producción, –cortes de pelo producidos
Y, sea igual a la demanda de bienes, Z: pero no vendidos–, por lo
que la producción siempre
Y = Z (3.6) debe ser igual a la
demanda.
Esta ecuación se denomina condición de equilibrio. Los modelos contie-
nen tres tipos de ecuaciones: identidades, ecuaciones de conducta y condicio-
nes de equilibrio. Ya hemos visto ejemplos de cada una. La ecuación que de- Hay tres tipos de ecuaciones:
fine la renta disponible es una identidad, la función de consumo es una identidades, ecuaciones de
ecuación de conducta y la condición según la cual la producción es igual a la conducta, condiciones de
demanda es una condición de equilibrio. equilibrio.

Sustituyendo la demanda, Z, en la Ecuación (3.6) por su expresión de la


(3.5), tenemos que
Y = c0 + c1 (Y - T) + I + G (3.7)
La Ecuación (3.7) representa algebraicamente lo que hemos formulado de
una manera informal al comienzo del capítulo.

En condiciones de equilibrio, la producción, Y (el primer miembro de la


Relacione esta afirmación
ecuación), es igual a la demanda (el segundo miembro). La demanda depende, con la tira cómica que enca-
a su vez, de la renta, Y, que es igual a la producción. beza el capítulo.
Obsérvese que estamos utilizando el mismo símbolo, Y, para referirnos a la
producción y a la renta. ¡No es una casualidad! Como vimos en el Capítulo 2,
podemos examinar el PIB desde el punto de vista de la producción o desde el
punto de vista de la renta. La producción y la renta son exactamente iguales.
Una vez elaborado un modelo, podemos resolverlo para ver qué determi-
na el nivel de producción: cómo varía este, por ejemplo, en respuesta a una
variación del gasto público. Resolver un modelo significa no sólo resolverlo
algebraicamente sino también comprender por qué los resultados son los que
son. En este libro, resolver un modelo también significará describir los resulta-
dos utilizando gráficos –omitiendo a veces el álgebra totalmente– y describir
verbalmente los resultados y los mecanismos. Los macroeconomistas siempre
utilizan estos tres instrumentos:
1. El álgebra para asegurarse de que la lógica es correcta.
2. Los gráficos para entender intuitivamente lo que sucede.
3. Las palabras para expresar los resultados.
Acostúmbrese el lector a hacer lo mismo.

El álgebra
Expresemos de nuevo la ecuación de equilibrio (3.7) de la forma siguiente:
Y = c 0 + c 1Y - c 1T + I + G
Trasladando el término c1Y al primer miembro y reorganizando el segun-
do, tenemos que
(1 - c1)Y = c0 + I + G - c1T

Capítulo 3 • El mercado de bienes 77


Dividamos ambos miembros por (1 - c1):
1 -
Y [c0 I G c1T]
1 c1 (3.8)
La Ecuación (3.8) caracteriza el nivel de producción de equilibrio, es decir,
el nivel de producción en el que la producción es igual a la demanda. Exami-
nemos los dos términos del segundo miembro, comenzando por el segundo.
Autónomo significa indepen- El segundo término, [c0 + I + G - c1T], es la parte de la demanda de
diente: en este caso, inde- bienes que no depende de la producción. Por este motivo, se denomina
pendiente de la producción. gasto autónomo.
¿Podemos estar seguros de que el gasto autónomo es positivo? No, pero es
muy probable que lo sea. Los dos primeros términos entre corchetes, c0 e
Si T = G, entonces (G - c1T) I , son positivos. ¿Qué ocurre con los dos últimos, G - c1T? Supongamos
= (T - c1T) = que el Estado tiene un presupuesto equilibrado, es decir, que los impuestos
= (1 - c1) T > 0. son iguales al gasto público. Si T = G y la propensión a consumir (c1) es
menor que uno (como hemos supuesto), entonces (G - c1T) es positivo y,
por lo tanto, también lo es el gasto autónomo. El gasto autónomo sólo po-
dría ser negativo si el Estado tuviera un superávit presupuestario muy ele-
vado, es decir, si los impuestos fueran mucho mayores que el gasto público.
Podemos prescindir aquí de este caso sin correr riesgo alguno.
Pasemos al primer término: 1/(1 - c1). Como la propensión a consumir (c1)
es entre cero y uno, 1/(1 - c1) es un número mayor que uno. Por este moti-
vo, este número, que multiplica el gasto autónomo, se denomina multipli-
cador. Cuanto más cercano es c1 a uno, mayor es el multiplicador.
¿Qué implica el multiplicador? Supongamos que, dado un nivel de renta,
los consumidores deciden aumentar su consumo. Más concretamente, su-
pongamos que el término c0 de la Ecuación (3.3) aumenta en 1.000 millones
de dólares. La Ecuación (3.8) nos dice que la producción aumentará en más
de 1.000 millones de dólares. Por ejemplo, si c1 es igual a 0,6, el multiplica-
dor es igual a 1/(1 - 0,6) = 1/0,4 = 2,5, por lo que la producción aumenta en
2,5 3 1.000 millones = 2.500 millones de dólares.
Hemos examinado un aumento del consumo, pero la Ecuación (3.8)
pone de manifiesto que cualquier variación del gasto autónomo –desde una
variación de la inversión hasta una variación del gasto público o una varia-
ción de los impuestos– produce el mismo efecto cualitativo. Altera la pro-
ducción más de lo que influye directamente en el gasto autónomo.
¿A qué se debe el efecto multiplicador? El examen de la Ecuación (3.7)
nos da una pista. Un aumento de c0 eleva la demanda. El aumento de la
demanda provoca entonces un incremento de la producción. El incremen-
to de la producción provoca un aumento equivalente de la renta (recuér-
dese que ambas son exactamente iguales). El aumento de la renta eleva
aun más el consumo, lo que eleva aun más la demanda, y así sucesivamen-
te. Como mejor se define este fenómeno es representando gráficamente el
equilibrio. Hagámoslo.

Un gráfico
Caractericemos el equilibrio gráficamente.
Representemos primero la producción en función de la renta.

78 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


En la Figura 3.2, representamos la producción en el eje de ordenadas y
la renta en el de abscisas. Representar la producción en función de la renta
es sencillo. Recuérdese que la producción y la renta son exactamente igua-
les. Por lo tanto, la relación entre las dos es simplemente la recta de 45°, la
línea que tiene una pendiente igual a 1.
Representemos a continuación la demanda en función de la renta.
La relación entre la demanda y la renta viene dada por la Ecuación (3.5).
Formulémosla de nuevo aquí para mayor comodidad reagrupando los térmi-
nos del gasto autónomo en el término entre paréntesis:
Z = (c0 + I + G - c1T) + c1Y (3.9)

 igura 3.2
F
El equilibrio en el mercado de bienes

Producción Pendiente -1
Demanda Z, producción Y

ZZ

Demanda
A
Y Pendiente -c1

Punto de equilibrio:
Y=Z
Gasto
autónomo

45

Y
Renta, Y

Para que la producción se encuentre en su nivel de equilibrio, debe ser


igual a la demanda.
La demanda depende del gasto autónomo y de la renta, a través de su
influencia en el consumo. La relación entre la demanda y la renta se repre-
senta por medio de la línea recta ZZ del gráfico. La ordenada en el origen
–el valor de la demanda cuando la renta es igual a cero– es igual al gasto
autónomo. La pendiente de la recta es la propensión a consumir, c1. Cuan-
do la renta aumenta en 1, la demanda aumenta en c1. De acuerdo con la
restricción de que c1 tiene un valor positivo, pero menor que 1, la recta
tiene pendiente positiva, pero menor que 1.
En condiciones de equilibrio, la producción es igual a la demanda.
Por lo tanto, el nivel de producción de equilibrio, Y, se encuentra en el
punto de intersección de la recta de 45° y la función de demanda, que es
el punto A. A la izquierda de A, la demanda es superior a la producción; a
la derecha, la producción es superior a la demanda. A es el único punto en
el que son iguales.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 79


Supongamos que la economía se encuentra inicialmente en equilibrio,
representado por el punto A en el gráfico, con una producción igual a Y.
Supongamos ahora que c0 aumenta en 1.000 millones de dólares. En el
nivel inicial de renta (el nivel de renta correspondiente al punto A), los consu-
midores aumentan su consumo en 1.000 millones de dólares. La Figura 3.3,
que se basa en la 3.2, muestra qué ocurre como consecuencia.
La Ecuación (3.9) nos dice que, cualquiera que sea el valor de la renta, la
demanda es 1.000 millones mayor. Antes del aumento de c0, la relación entre la
demanda y la renta estaba representada por la línea recta ZZ. Después del aumen-
to de c0 en 1.000 millones de dólares, la relación entre la demanda y la renta está
representada por la línea recta ZZ’, que es paralela a ZZ, pero mayor en 1.000
millones. En otras palabras, la curva de demanda se desplaza en sentido ascen-
dente en 1.000 millones. El nuevo equilibrio se encuentra en el punto de intersec-
ción de la recta de 45° y la nueva curva de demanda, es decir, en el punto A’.

Observe el eje de ordena-


La producción de equilibrio aumenta de Y a Y’. El aumento de la produc-
das. La distancia entre Y e Y’ ción, (Y’ - Y), que podemos medir en el eje de abscisas o en el de ordenadas,
en el eje de ordenadas es es mayor que el aumento inicial del consumo de 1.000 millones. Este es el
mayor que la distancia entre efecto multiplicador.
A y B, que es igual a 1.000
millones de dólares. Con la ayuda del gráfico resulta más fácil saber cómo y por qué la eco-
nomía se desplaza de A a A’. El incremento inicial del consumo provoca un
aumento de la demanda de 1.000 millones de dólares. En el nivel inicial de
renta, Y, el nivel de de manda ahora se encuentra en el punto B. La demanda
es 1.000 millones más alta. Para satisfacer este nivel más alto de demanda, las
empresas aumentan la producción en 1.000 millones. Este aumento de la
producción de 1.000 millones implica que la renta aumenta en 1.000 millo-
nes (recuérdese que la renta y la producción son iguales), por lo que la eco-
nomía se desplaza al punto C (en otras palabras, tanto la producción como la
renta son 1.000 millones de dólares mayores). Pero ahí no acaba todo. El
aumento de la renta provoca un nuevo aumento de la demanda. Esta ahora
está representada por el punto D. Este punto lleva a un nivel de producción
más alto, y así sucesivamente, hasta que la economía se encuentra en A’,
punto en el que la producción y la demanda vuelven a ser iguales y que, por
lo tanto, es el nuevo equilibrio.
Podemos seguir algo más esta explicación y ver otra manera de concebir
el multiplicador:
El aumento que experimenta la demanda en la primera ronda, representado
por la distancia AB en la Figura 3.3, es igual a 1.000 millones de dólares.
Este aumento de la demanda en la primera ronda provoca un aumento
idéntico de la producción, o sea, de 1.000 millones de dólares, que tam-
bién está representado por la distancia AB.
Este aumento de la producción en la primera ronda provoca un aumento
idéntico de la renta, representado por la distancia BC, también igual a
1.000 millones de dólares.
El aumento que experimenta la demanda en la segunda ronda, representa-
do por la distancia CD, es igual a 1.000 millones (el aumento de la renta
de la primera ronda) multiplicado por la propensión a consumir, c1, por lo
tanto, c1 miles de millones de dólares.

80 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Este aumento de la demanda en la segunda ronda provoca un aumento
igual de la producción, también representado por la distancia CD, y, por lo
tanto, un aumento idéntico de la renta, representado por la distancia DE.
El aumento que experimenta la demanda en la tercera ronda es igual a c1
miles de millones de dólares (el aumento de la renta de la segunda ronda)
multiplicado por c1, que es la propensión marginal a consumir; es igual a
c1  c1 = c12 miles de millones de dólares, y así sucesivamente.

 igura 3.3
F
El efecto de un aumento del gasto autónomo en la producción

ZZ’
A’
Demanda Z, producción Y

Y’
D 1 billón de $
B E
ZZ
C

Y
A

45º
Y Y’
Renta, Y

Cuando aumenta el gasto autónomo, la producción de equilibrio aumenta en una


proporción mayor

Siguiendo esta lógica, el aumento total que experimenta la producción,


por ejemplo, después de n rondas es igual a 1.000 millones de dólares multi-
plicado por la suma:
1+c1+c12+...+c1n
Esa suma se denomina progresión geométrica y aparecerá frecuentemen-
te en este libro. En el Apéndice 2, que se encuentra al final del libro, recorda-
mos sus propiedades. Una de las principales es que cuando c1 es menor que
uno (como en este caso) y a medida que n es cada vez mayor, la suma continúa
aumentando pero tiende a un límite. Ese límite es 1/(1 - c1), por lo que el au-
mento final de la producción es 1 $/(1 - c1) miles de millones de dólares.
La expresión 1/1 - c1 debería resultar familiar. Es el multiplicador obteni-
Una pregunta difícil de
do de otra forma. Ésta es una manera equivalente, pero más intuitiva, de responder: imaginemos que el
analizar el multiplicador. Podemos imaginar que el aumento inicial de la multiplicador es el resultado
demanda provoca sucesivos aumentos de la producción y que cada aumento de estas sucesivas rondas.
de la producción implica un aumento de la renta, el cual provoca un aumen- ¿Qué ocurriría en cada ronda
to de la demanda, el cual provoca un nuevo aumento de la producción, el sucesiva si c1, la propensión a
consumir, fuera mayor que 1?
cual provoca... y así sucesivamente. El multiplicador es la suma de todos estos
aumentos sucesivos de la producción.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 81


En palabras
¿Cómo podemos resumir con palabras nuestros resultados?
La producción depende de la demanda, la cual depende de la renta, que
es igual a la producción. Un aumento de la demanda, por ejemplo, un aumen-
to del gasto público, provoca un aumento de la producción y el correspondien-
te aumento de la renta, el cual provoca, a su vez, un aumento de la demanda,
el cual provoca un nuevo aumento de la producción, y así sucesivamente. El
resultado final es un aumento de la producción mayor que el desplazamiento
inicial de la demanda en una proporción igual al multiplicador.
El tamaño del multiplicador está relacionado directamente con el valor de
la propensión a consumir. Cuanto mayor es ésta, mayor es el multiplicador.
¿Cuál es actualmente el valor de la propensión a consumir en Estados Unidos?
Para responder a esta pregunta y, en términos más generales, para estimar las
ecuaciones de conducta y sus parámetros, los economistas utilizan la econome-
tría, que es el conjunto de métodos estadísticos que se emplean en economía.

¿Cuánto tarda la producción en ajustarse?


Volvamos a nuestro ejemplo por última vez. Supongamos que c0 aumenta en
1.000 millones de dólares. Sabemos que la producción aumentará en una
cuantía igual al multiplicador 1/(1 - c1) multiplicado por 1.000 millones. Pero
¿cuánto tardará la producción en alcanzar este valor más alto?
Según los supuestos postulados hasta ahora, la respuesta es inmediatamen-
te. Cuando formulamos la condición de equilibrio (3.6), supusimos que la
producción siempre es igual a la demanda, en otras palabras, que responde a
la demanda inmediatamente. Cuando formulamos la función de consumo
(3.2), supusimos que el consumo responde a las variaciones de la renta dispo-
nible inmediatamente. Según estos dos supuestos, la economía se traslada
inmediatamente del punto A al A’ en la Figura 3.3. El aumento de la demanda
provoca un aumento inmediato de la producción, el aumento de la renta co-
rrespondiente al aumento de la producción provoca un incremento inmediato
de la demanda, y así sucesivamente. No es un error imaginar el ajuste como
sucesivas rondas, al igual que hemos hecho antes, aunque las ecuaciones in-
En el modelo que hemos visto
antes, hemos excluido esta diquen que todas estas rondas ocurren a la vez.
posibilidad suponiendo que Este ajuste instantáneo no es realmente verosímil. Una empresa cuya deman-
las empresas no tenían exis- da aumenta puede optar por esperar antes de ajustar su producción y recurrir
tencias, por lo que no podían
recurrir a ellas cuando mientras tanto a sus existencias para satisfacer a la demanda. Un consumidor
aumentaba la demanda. que recibe una subida salarial puede no ajustar su consumo inmediatamente.
Este tipo de retrasos implica que la producción tarda tiempo en ajustarse.
Sería demasiado difícil describir aquí formalmente este ajuste de la pro-
ducción con el paso del tiempo –es decir, formular las ecuaciones de lo que
los economistas llaman dinámica del ajuste y resolver este modelo más com-
plicado–, pero es fácil describirlo verbalmente:

82 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


TEMA CONCRETO

La confianza de los consumidores y la recesión de 1990-1991


En el tercer trimestre de 1990, tras la invasión de Kuwait fue en realidad una disminución del PIB de 63.000 millo-
por parte de Irak, pero antes de que comenzara la gue- nes. Por lo tanto, el error de predicción fue igual a
rra del Golfo Pérsico, el crecimiento del PIB de Estados –(25.000 + 63.000) = –88.000 millones de dólares.
Unidos se volvió negativo y se mantuvo en esa situación ¿A qué se debieron estos errores de predicción? En
durante los dos trimestres siguientes. Este episodio se la Ecuación (3.8), ¿cuál de los determinantes del gasto
conoce con el nombre de recesión de 1990-1991. fue el culpablecausante? ¿c0, , G o T? En las investigacio-
La primera columna de la tabla adjunta muestra la nes en las que se ha analizado la evolución de cada uno
magnitud y el calendario de la recesión. Indica la varia- de los componentes del gasto se llega a la conclusión de
ción del PIB –en miles de millones de dólares de 1992– que la causa principal, en los dos últimos trimestres de la
de cada trimestre desde el segundo trimestre de 1990 recesión, fue un cambio negativo del consumo, una dismi-
hasta el segundo de 1991. En el tercer trimestre de nución imprevista de c0. La columna (3) de la tabla indica
1990, en el cuarto de 1990 y en el primero de 1991, los errores de predicción de c0. Hay dos grandes errores
la variación del PIB es negativa. Corresponde a la rece- negativos en los dos últimos trimestres de la recesión:
sión de 1990-1991. –37.000 millones de dólares en el cuarto trimestre de
¿Predijeron los macroeconomistas la recesión de 1990 y –30.000 millones en el primero de 1991.
1990-1991? La respuesta es negativa. La columna (2) Una gran disminución de c0 es una disminución del
indica el error de predicción, que es la diferencia entre el consumo, dada la renta disponible. ¿Por qué disminuyó
valor efectivo del PIB y el que predijeron los economistas tanto el consumo, dada la renta disponible, a finales de
un trimestre antes. Un error de predicción positivo indica 1990 y principios de 1991? La causa directa se mues-
que el PIB efectivo resultó ser mayor de lo previsto; un error tra en la última columna de la tabla, que indica el valor
de predicción negativo indica que resultó ser menor de lo del índice de confianza de los consumidores. Este índi-
previsto. Como puede observarse, los errores de predic- ce se calcula a partir de una encuesta mensual a unos
ción fueron negativos en los tres trimestres de la recesión 5.000 hogares, en la que se les pregunta su opinión
de 1990-1991. Fueron mayores que la disminución que tanto respecto de la situación económica actual como
experimentó el PIB en cada uno de los dos primeros trimes- respecto de la situación económica futura, desde las
tres de la recesión. Lo que eso significa es que al comien- oportunidades de empleo hasta la renta familiar que
zo de cada uno de estos dos trimestres, se predijo un esperan en un plazo de seis meses. Como verá el lector,
crecimiento del PIB positivo, pero el crecimiento fue en el índice experimentó un enorme descenso entre el ter-
realidad negativo. Por ejemplo, la predicción para el cero y el cuarto trimestre de 1990: de 90 a 61. Los
cuarto trimestre de 1990 era un aumento del PIB de consumidores perdieron confianza y redujeron su consu-
25.000 millones de dólares. Sin embargo, el resultado mo, lo cual provocó la recesión.

Tabla
El PIB, el consumo y los errores de predicción, 1990-1991
1

(1) (2) (3) (4)


Trimestre Índice de confianza
Variación del PIB real Error de predicción del PIB Error de predicción de c0 de los consumidores

1990:2 19 217 223 105

1990:3 229 257 21 90

1990:4 263 288 237 61

1991:1 231 227 230 65

1991:2 27 47 8 77

Columnas (1) a (3): miles de millones de dólares de 1992.


Fuente: Olivier Blanchard, «Consumption and the recession of 1990–1991», American Economic Review, mayo,1993.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 83


Esta conclusión nos lleva a hacernos una última petróleo y una recesión: las dos grandes subidas ante-
pregunta: ¿por qué perdieron confianza los consumido- riores de los precios del petróleo de los años setenta
res a finales de 1990? ¿Por qué se mostraron más pe- habían ido acompañadas de recesiones. Cualquiera
simistas sobre el futuro? Aún hoy los economistas no que fuera la razón, la pérdida de confianza de los
están seguros. Es más que probable que este cambio consumidores fue una de las grandes causas de la re-
de opinión estuviera relacionado con la creciente posi- cesión de 1990-1991.
bilidad de que estallara una guerra en Oriente Medio, No debe extraerse la conclusión de que todas las
guerra que comenzó a principios de 1991, tras el ini- recesiones se deben a una caída del consumo. La rece-
cio de la recesión. Se temía que Estados Unidos se in- sión más reciente en Estados Unidos, en 2001, parece
volucrara en una prolongada y cara guerra. También que se debió a una caída de la inversión y que tuvo poco
se temía que el estallido de una guerra en Oriente Me- que ver con la guerra de Irak. En el Capítulo 5 analiza-
dio provocara una gran subida de los precios del mos más detalladamente las recesiones y sus causas.

Supongamos, por ejemplo, que las empresas deciden su nivel de produc-


ción al comienzo de cada trimestre. Una vez que toman la decisión, no es
posible ajustar la producción durante el resto del trimestre. Si las compras
de los consumidores son mayores que la producción, las empresas recurren
a las existencias para satisfacer las compras. Si, por el contrario, las com-
pras son menores que la producción, las empresas acumulan existencias.
Supongamos ahora que los consumidores deciden gastar más, es decir, que
aumentan c0. Durante el trimestre en que eso ocurre, la demanda aumenta,
pero la producción –dado nuestro supuesto de que se fijaba al comenzar
el trimestre– aún no varía. Por lo tanto, la renta tampoco varía.
Es probable que las empresas, al observar el aumento de la demanda, ele-
ven el nivel de producción en el siguiente trimestre. Este incremento de la
producción provoca el correspondiente aumento de la renta y un nuevo
aumento de la demanda. Si las compras siguen siendo superiores a la pro-
ducción, las empresas incrementan aun más la producción en el siguiente
trimestre, y así sucesivamente.
En resumen, cuando aumenta el gasto de consumo, la producción no se des-
plaza al nuevo equilibrio, sino que aumenta con el paso del tiempo de Y a Y’.
La duración de este ajuste depende de cómo y con qué frecuencia revisen
las empresas su programa de producción. Si ajustan sus programas de produc-
ción más a menudo en respuesta a los incrementos anteriores de las compras,
el ajuste será más rápido.
En este libro haremos a menudo lo que acabamos de hacer aquí. Una vez
examinadas las variaciones de la producción de equilibrio, describiremos de
una manera informal cómo pasa la economía de un equilibrio a otro. De esa
forma, no sólo parecerá más realista la descripción de lo que ocurre en la
economía, sino que, además, el lector comprenderá mejor de una manera
intuitiva por qué varía el equilibrio.
En este apartado hemos centrado la atención en los aumentos de la demanda,
pero el mecanismo funciona, por supuesto, en los dos sentidos: las disminuciones
de la demanda provocan reducciones de la producción. La recesión que experi-
mentó Estados Unidos en 1990-1991 se debió en gran parte a una repentina
pérdida de confianza de los consumidores, que provocó una enorme disminución
del consumo, la cual provocó, a su vez, una enorme disminución de la produc-
ción. Los orígenes de esta recesión se examinan detalladamente en el recuadro
titulado «La confianza de los consumidores y la recesión de 1990-1991».

84 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


3.4 La inversión es igual al ahorro:
otra manera de analizar el equilibrio
del mercado de bienes
Hasta ahora hemos analizado el equilibrio del mercado de bienes desde el punto
de vista de la igualdad de la producción y la demanda de bienes. Existe otra ma-
nera equivalente de analizarlo que centra la atención en la inversión y el ahorro.
Ese es el modo en que formuló John Maynard Keynes por primera vez este mo-
delo en 1936 en La teoría general de la ocupación, el interés y el dinero.
Comencemos examinando el ahorro. El ahorro es la suma del ahorro pri-
vado y el ahorro público.
Por definición, el ahorro privado (S), el ahorro de los consumidores, es
igual a su renta disponible menos su consumo:
S ; YD - C
Utilizando la definición de la renta disponible, podemos formular el aho-
rro privado como la renta menos los impuestos menos el consumo:
S;Y-T-C
Por definición, el ahorro público es igual a los impuestos (una vez deduci-
das las transferencias) menos el gasto público, T - G. Si los impuestos son
mayores que el gasto público, el Estado tiene un superávit presupuestario,
por lo que el ahorro público es positivo. Si los impuestos son menores que
el gasto público, el Estado incurre en un déficit presupuestario, por lo que
el ahorro público es negativo.
Volvamos ahora a la ecuación de equilibrio del mercado de bienes que
hemos formulado antes. La producción debe ser igual a la demanda, la cual
es, a su vez, la suma del consumo, la inversión y el gasto público:
Y = C + I + G
Restando los impuestos (T) de ambos miembros y trasladando el consu-
mo al primero, tenemos que:
Y - T - C = I + G - T
El primer miembro de esta ecuación es simplemente el ahorro privado
(S), por lo que:
S = I + G - T
O, lo que es lo mismo:
I = S + (T - G) (3.10)
El primer miembro es la inversión y el segundo es el ahorro, que es la suma
del ahorro privado y el ahorro público.
La Ecuación (3.10) nos permite analizar de otra forma el equilibrio del mer-
cado de bienes. Establece que para que haya equilibrio en el mercado de bienes
la inversión debe ser igual al ahorro, es decir, a la suma del ahorro privado y el
ahorro público. Esta manera de examinar el equilibrio explica por qué la condi-
ción de equilibrio del mercado de bienes se denomina relación IS, pues indica
que «la inversión es igual al ahorro» (saving, en inglés): lo que desean invertir
las empresas debe ser igual a lo que desean ahorrar los individuos y el Estado.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 85


TEMA CONCRETO

La paradoja del ahorro


A medida que vamos haciéndonos mayores, se nos ha- Para verlo, volvamos a la Ecuación (3.10), que es
bla de las virtudes del ahorro. Las personas que gastan la condición de equilibrio según la cual la inversión y el
toda su renta están condenadas a acabar en la pobre- ahorro deben ser iguales:
za. A las que ahorran se les promete una vida dichosa. I = S + (T - G)
Los gobiernos también nos dicen que una economía que
ahorra ¡es una economía que crece fuerte y próspera! Por hipótesis, la inversión no varía: I = I . Tampoco
Sin embargo, el modelo que hemos visto en este capítulo varían T o G. Por lo tanto, según la condición de equili-
nos dice una cosa distinta y bastante sorprendente. brio, en situación de equilibrio el ahorro privado S tam-
Supongamos que con un determinado nivel de renta poco puede variar. Aunque los individuos deseen ahorrar
disponible los consumidores deciden ahorrar más. En más con un nivel dado de renta, esta disminuye en una
otras palabras, supongamos que reducen c0 y, por lo cuantía tal que el ahorro no varía.
tanto, reducen el consumo y aumentan el ahorro con un Eso significa que sus intentos de ahorrar más provo-
determinado nivel de renta disponible. ¿Qué ocurre con can una reducción de la producción y no alteran el
la producción y con el ahorro? ahorro. Este sorprendente par de resultados se conoce
La Ecuación (3.12) muestra claramente que la pro- con el nombre de paradoja del ahorro (o paradoja de
ducción de equilibrio disminuye. Cuando los individuos la frugalidad)1.
ahorran más con su nivel inicial de renta, reducen su ¿Debemos olvidarnos, pues, de la vieja creen-
consumo. Pero esta reducción del consumo reduce la cia? ¿Debe decirle el gobierno a la gente que sea
demanda, lo cual reduce la producción. menos frugal? No. Los resultados de este sencillo mo-
¿Podemos saber qué ocurre con el ahorro? Volvamos a delo son muy importantes a corto plazo. El deseo de
la ecuación del ahorro privado, la Ecuación (3.11) (recuér- los consumidores de ahorrar más provocó la recesión
dese que hemos supuesto que el ahorro público no varía, de 1990-1991 (véase el recuadro anterior de este
por lo que el ahorro y el ahorro privado varían al unísono): capítulo). Pero –como veremos más adelante cuando
examinemos el medio plazo y el largo plazo– hay
S = -c0 + (1 - c1)(Y - T) otros mecanismos que entran en juego con el paso del
Por una parte, 2c0 es mayor (menos negativo). Los tiempo y es probable que un aumento de la tasa de
consumidores ahorran más, cualquiera que sea el nivel ahorro eleve el ahorro y la renta. Queda por hacer,
de renta, lo cual tiende a elevar el ahorro. Pero, por otra, sin embargo, una importante advertencia: las medi-
su renta Y es menor, lo cual reduce el ahorro. Parecería das que fomentan el ahorro pueden ser buenas a me-
que el efecto neto es ambiguo, pero, en realidad, pode- dio y largo plazo, pero pueden provocar una recesión
mos saber cuál es su sentido. a corto plazo.

Para ayudar al lector a comprender la Ecuación (3.10), pensemos en una


economía en la que sólo hay una persona, que tiene que decidir cuánto va a
consumir, invertir y ahorrar, por ejemplo, una economía de «Robinson Crusoe».
Para Robinson Crusoe, las decisiones de ahorrar e invertir son una misma cosa:
lo que invierte (por ejemplo, reservando conejos para la reproducción en lugar
de comérselos), automáticamente lo ahorra. Sin embargo, en una economía
moderna, las decisiones de inversión corresponden a las empresas, mientras
que las de ahorro corresponden a los consumidores y al Estado. En condiciones
de equilibrio, la Ecuación (3.10) indica que todas estas decisiones tienen que
ser coherentes: la inversión debe ser igual al ahorro.

1 Tal vez piense el lector que el resultado según el cual el ahorro no varía se debe, en realidad, a uno de los dos supues-
tos menos atractivos que hemos postulado hasta ahora, a saber, que la inversión es fija. Si permitiéramos que la inver-
sión variara con la producción, el resultado sería aun más espectacular. Los intentos de los individuos de ahorrar más
seguirían reduciendo la producción; la reducción de la producción provocaría una disminución de la inversión y, por lo
tanto, una disminución del ahorro.

86 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


Recapitulando, hay dos formas equivalentes de formular la condición de
equilibrio del mercado de bienes:
Producción = Demanda
Inversión = Ahorro
Antes hemos caracterizado el equilibrio utilizando la primera condición,
la Ecuación (3.6). Ahora hacemos lo mismo utilizando la segunda, la Ecua-
ción (3.10). Los resultados serán los mismos, pero tendremos otra forma de
analizar el equilibrio.
Obsérvese, en primer lugar, que las decisiones de consumo y de ahorro son
una misma cosa. Dada la renta disponible de los consumidores, una vez
que estos han elegido el consumo, su ahorro está determinado, y viceversa.
La manera en que hemos especificado la conducta del consumo implica
que el ahorro privado viene dado por:
S=Y-T-C
= Y - T - c0 - c1(Y - T)
Reordenando, tenemos que:
S = –c0 + (1 - c1)(Y - T) (3.11)

De la misma manera que hemos llamado propensión a consumir al térmi-


no c1, podemos denominar propensión a ahorrar al término (1 - c1). La
propensión a ahorrar indica cuánto ahorran los individuos de una unidad
más de renta. El supuesto antes postulado –según el cual la propensión a
consumir (c1) oscila entre cero y uno– implica que la propensión a ahorrar
(1 - c1) también oscila entre cero y uno. El ahorro privado aumenta cuando
aumenta la renta disponible, pero en menor cuantía que ésta.
En condiciones de equilibrio, la inversión debe ser igual al ahorro, que
es la suma del ahorro privado y el ahorro público. Sustituyendo en la Ecua-
ción (3.10) el ahorro privado por su expresión, tenemos que:
I = –c0 + (1 - c1)(Y - T) + (T - G)
Despejando la producción, tenemos que

Y= 1 [c0 + I +G - c1 T]
1-c
1 (3.12)
La Ecuación (3.12) es exactamente igual que la (3.8), lo cual no debería
constituir ninguna sorpresa. Estamos examinando la misma condición de equi-
librio, sólo que de una forma diferente, que más adelante nos resultará útil en
algunas aplicaciones. El recuadro de este capítulo titulado «La paradoja del
ahorro» es una de ellas y fue destacada por primera vez por Keynes.

La inversión y el ahorro en una economía abierta


El mismo análisis realizado anteriormente se puede extender a una economía
abierta. Es decir que ahora la demanda agregada incluye, además del consu-
mo, la inversión y el gasto público, a las exportaciones netas (X – IM). Por lo
tanto, nuestro nuevo modelo estará dado por las siguientes ecuaciones:
Y = C + I + G + (X – IM)

Capítulo 3 • El mercado de bienes 87


Restando los impuestos (T) de ambos miembros, obtenemos:
Y –T – C = I + G – T + (X – IM)
El primer miembro de la ecuación es igual al ahorro, por lo que la ecua-
ción puede expresarse como sigue:
S = I + G – T + (X – IM)
Reordenando los términos se llega a la siguiente expresión:
(S – I) + (T – G) = (X – IM)
A esta expresión que muestra los equilibrios interno y externo se la deno-
mina modelo de tres brechas. Algunos autores hacen una distinción entre in-
versión pública e inversión privada, así como también entre consumo público
y consumo privado2.
Para aclarar este tema, expondremos un ejemplo sencillo: imaginemos que
el único bien que produce la economía son sillas, y se producen 15 sillas (Y =
15 sillas). Supongamos también que el gasto agregado interno o la absorción
doméstica, que está compuesta por C (consumo) e I (inversión) a nivel público
y privado, es de 20 sillas. Es evidente que esta economía gasta más de lo que
produce; alguien está enviando desde el exterior los bienes (sillas) excedentes
que se absorbieron internamente, es decir, las importaciones se generaron
debido a la expansión interna y hay un déficit externo de 5 sillas.
Y (producto o ingreso) = 15 sillas
C + I = 20 sillas (absorción doméstica)
(X – IM) = -5 sillas
ahorro privado = Y – C
ahorro público, superávit o déficit público = T – G
(S – I) + (T – G) = (X – IM)
o bien expresado de otra forma:
(Yd – C – I) + (T – G) = (X – IM)
Un país con déficit privado (gasta más que lo que produce) y déficit públi-
co tendrá por identidad déficit externo.
El ejemplo dado de las sillas es ilustrativo a nivel de bienes. Si suponemos
que de las 20 sillas gastadas hay 3 sillas que se utilizan como inversión (20%
del PIB) –por ejemplo, para las aulas de la universidad– y 17 sillas se usan como
bienes de consumo suntuario –en camas solares o para tomar sol en una pileta–,
también podríamos dividir estos bienes entre bienes absorbidos por el sector
público (universidad pública) o el sector privado (universidad privada).
Imagine que de las 3 sillas de la inversión, 2 son absorbidas por la univer-
sidad pública y la restante, por la universidad privada; de las 17 de consumo,
12 son absorbidas por el sector privado y 5, por el sector público. Pero a efec-
tos de la comprensión y conceptualización del modelo, de tres brechas, vemos
que siempre es una identidad que demuestra que si a lo largo de los años un
país gasta o absorbe internamente más bienes y servicios que los que produce,

2 Ver Ferrucci, Ricardo, Instrumental para el estudio de la economía argentina, Macchi, Bue­
nos Aires, 1998.

88 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


alguien se los envía del exterior (5 sillas). Los países firman bonos o pagarés a
quienes les han financiado ese exceso, en este caso, las 5 sillas.
En síntesis, hacen una sustitución intertemporal para disponer de más bie-
nes hoy comprometiendo deuda a futuro con bonos públicos o privados.
Si esas sillas (o bienes y servicios) se hubieran utilizado en mayor magnitud
para inversión que para consumo suntuario presente, por ejemplo, en aulas
para la educación universitaria que mejora la competitividad futura en lugar
de usarlas para camas solares o reposeras de playa, probablemente la econo-
mía en su conjunto podría generar en el futuro excedentes para repagar el
capital y los intereses; las expectativas y la calificación de riesgo de ese país
serían más favorables, el valor de sus bonos sería más alto, la tasa de interés
sería menor y el ajuste de la economía para generar esos excedentes en el fu-
turo sería menos doloroso y profundo. Por ejemplo: supongamos que para
disminuir ese déficit comercial en 5 sillas, el país bajará su consumo público
y privado en 4 unidades y la inversión en 1 unidad. Con este ajuste se equili-
braría el sector externo, pero no estaría generando excedentes, es decir, para
que el signo sea positivo y no de 0, y se puedan pagar los intereses y devolver
los préstamos anteriores, muy probablemente el ajuste debería ser mayor, es
decir, producir más que la absorción interna para enviar sillas al exterior como
un bien externo –las exportaciones son mayores que las importaciones (X <
IM), lo cual significa un consumo e inversión públicos y privados menores.
En el caso del sector público caerá el gasto público (G) y se tendrá que
extraer recursos con impuestos (T) al sector privado, que significan menores
recursos de ese sector para la inversión y el consumo.

3.5 ¿Es el gobierno omnipotente?


Una advertencia
La Ecuación (3.8) implica que el gobierno puede elegir el nivel de producción
que desee eligiendo el nivel de gasto (G) o el nivel de impuestos (T). Si quiere
aumentar la producción, por ejemplo, en un millón de dólares, lo único que
necesita hacer es aumentar G en (1 - c1) millones; este aumento del gasto
público dará lugar, en teoría, a un incremento de la producción de (1 - c1)
millones multiplicado por el multiplicador 1/(1 - c1), o sea, un millón.
Para echar un vistazo a la
¿Pueden elegir realmente los gobiernos el nivel de producción que quieran? lista más larga véase el
Evidentemente no. Hay muchos aspectos de la realidad que aún no hemos incor- recuadro del Capítulo 26
porado a nuestro modelo y todos complican la labor del gobierno. Los incorpora- titulado «La política fiscal:
remos a su debido tiempo. No obstante, resulta útil enumerarlos brevemente aquí: ¿qué hemos aprendido y
dónde?».
Modificar el gasto público o los impuestos puede distar de ser fácil. Conse-
guir que el Parlamento apruebe los proyectos de ley siempre lleva tiempo y
a menudo puede convertirse en una pesadilla para el Presidente (véanse los
Capítulos 24 y 26).
Hemos supuesto que la inversión permanecía constante. Pero la inversión tam-
bién es probable que responda. Y lo mismo ocurre con las importaciones. Parte
del aumento de la demanda de los consumidores y de las empresas no será
demanda de bienes interiores sino de bienes extranjeros. Todas estas respuestas
probablemente irán acompañadas de complejos efectos dinámicos, que serán
difíciles de evaluar con certeza para el gobierno (Capítulos 5, 18 y 19).
Es probable que las expectativas sean importantes. Por ejemplo, la reacción de
los consumidores a una reducción de los impuestos probablemente dependerá
mucho de que piensen que es transitoria o permanente. Cuanto más crean que
es permanente, mayor será la respuesta de su consumo (Capítulos 16 y 17).

Capítulo 3 • El mercado de bienes 89


El logro del nivel deseado de producción puede producir desagradables
efectos secundarios. Por ejemplo, el intento de conseguir un nivel de pro-
ducción demasiado alto puede provocar una aceleración de la inflación y
ser insostenible a medio plazo (Capítulos 7 y 8).
La reducción de los impuestos o el incremento del gasto público puede pro-
vocar grandes déficit presupuestarios y la acumulación de deuda pública.
Una elevada deuda puede tener consecuencias negativas a largo plazo. Este
es un tema candente en Estados Unidos hoy, ya que la reducción de los im-
puestos llevada a cabo por la administración Bush ha provocado grandes
déficit y una creciente deuda pública (Capítulos 11 y 26).
En suma, la afirmación de que el gobierno puede influir en la demanda y en la
producción a corto plazo por medio de la política fiscal es importante y correcta.
Pero a medida que refinemos el análisis, veremos que la labor del gobierno, en ge-
neral, y la aplicación fructífera de la política fiscal, en particular, son cada vez más
difíciles: los gobiernos nunca volverán a tenerlo tan fácil como en este capítulo...

Resumen
Lo que debe recordar el lector sobre los componentes del PIB: A corto plazo, la demanda determina la produc-
El PIB es la suma del consumo, la inversión, el gasto ción. La producción es igual a la renta. La renta
público, la inversión en existencias y las exportacio- afecta, a su vez, a la demanda.
nes menos las importaciones. La función de consumo muestra que el consumo
El consumo (C) es la compra de bienes y servicios depende de la renta disponible. La propensión a
por parte de los consumidores. Constituye el ma- consumir indica cuánto aumenta el consumo, cuan-
yor componente de la demanda. do aumenta la renta disponible.
La inversión (I) es la suma de la inversión no resi- La producción de equilibrio es el nivel de producción
dencial (la compra de nuevas plantas y máquinas en el que la producción es igual a la demanda. En con-
por parte de las empresas) y la inversión residencial diciones de equilibrio, la producción es igual al gasto
(la compra de nuevas viviendas o apartamentos por autónomo multiplicado por el multiplicador. El gasto
parte de los individuos). autónomo es la parte de la demanda que no depen-
de de la renta. El multiplicador es igual a 1/(1 - c1),
El gasto público (G) es la compra de bienes y servi- donde c1 es la propensión a consumir.
cios por parte de las diversas instancias del Estado.
Un aumento de la confianza de los consumidores,
Las exportaciones (X) son las compras de bienes de la demanda de inversión o del gasto público o
interiores por parte de extranjeros. Las importacio- una reducción de los impuestos elevan la produc-
nes (IM) son las compras de bienes extranjeros por ción de equilibrio a corto plazo.
parte de los consumidores, las empresas y el Esta-
do de nuestro país. La condición de equilibrio del mercado de bienes
también puede formularse de otra manera: la inver-
La inversión en existencias es la diferencia entre la pro- sión debe ser igual al ahorro, que es la suma del aho-
ducción y las compras. Puede ser positiva o negativa. rro privado y del público. Por este motivo, la condi-
Lo que debe recordar sobre nuestro primer modelo de deter- ción de equilibrio se denomina relación IS (I por
minación de la producción: inversión y S por ahorro en inglés).

Términos clave
ahorro privado (S) déficit presupuestario
ahorro público (T - G) dinámica
balanza comercial econometría
condición de equilibrio ecuación de conducta
consumo (C) equilibrio del mercado de bienes
déficit comercial equilibrio

90 Macroeconomía. Aplicaciones a Latinoamérica


para / Olivier
Latinoamérica / Olivier
Blanchard • Daniel
Blanchard Pérez
• Daniel EnrriEnrri
Pérez
endógenas multiplicador
exógenas paradoja del ahorro
exportaciones (X) parámetros
exportaciones netas (X - IM) política fiscal
función de consumo presupuesto equilibrado
gasto autónomo progresión geométrica
gasto público (G) propensión a ahorrar
identidad propensión a consumir (c1)
importaciones (IM) relación IS
índice de confianza de los consumidores relación lineal
inversión (I) renta disponible (YD)
inversión en existencias superávit comercial
inversión fija superávit presupuestario
inversión no residencial transferencias del Estado
inversión residencial variables

Preguntas y problemas
Compruebe 3. Utilice la economía descrita en el Problema 2.
1. Indique si son verdaderas, falsas o inciertas cada una de a) Halle la producción de equilibrio. Calcule la deman-
las siguientes afirmaciones utilizando la información de este da total. ¿Es igual a la producción? Explique su res-
capítulo. Explique brevemente su respuesta. puesta.
a) El mayor componente del PIB es el consumo. b) Suponga que ahora G es igual a 110. Halle la produc-
b) En Estados Unidos, el gasto público, incluidas las ción de equilibrio. Calcule la demanda total. ¿Es igual
transferencias, representó un 19% del PIB en 2003. a la producción? Explique su respuesta.
c) La propensión a consumir tiene que ser positiva, c) Suponga que G es igual a 110, por lo que la producción
pero aparte de eso puede tomar cualquier valor viene dada por su respuesta a (b). Calcule el ahorro
positivo. privado más el ahorro público. ¿Es la suma del ahorro
d) La política fiscal describe la elección del gasto públi- privado y el ahorro público igual a la inversión? Explique
co y de los impuestos y se considera exógena en su respuesta.
nuestro modelo del mercado de bienes.
Profundice
e) La condición de equilibrio del mercado de bienes 4. El multiplicador del presupuesto equilibrado
establece que el consumo es igual a la producción.
Tanto por razones políticas como por razones macroeconó-
f) Un aumento unitario del gasto público provoca un micas, los gobiernos suelen mostrarse reacios a incurrir en
aumento unitario de la producción de equilibrio. déficit presupuestarios. En este problema nos preguntamos
g) Un aumento de la propensión a consumir provoca si los cambios de G y de T que mantienen equilibrado el
una disminución de la producción. presupuesto son neutrales desde el punto de vista ma-
2. Suponga que la economía se caracteriza por las siguientes croeconómico. En otras palabras, nos preguntamos si es po-
ecuaciones de conducta: sible influir en la producción modificando G y T a fin de que
el presupuesto del Estado se mantenga equilibrado.
C = 160 + 0,6YD
Comience con la Ecuación (3.7).
I = 150
a) ¿Cuánto aumenta Y cuando G aumenta en una uni-
G = 150 dad?
T = 100 b) ¿Cuánto disminuye Y cuando T aumenta en una
Halle: unidad?
a) El PIB de equilibrio (Y). c) ¿Por qué son diferentes las respuestas de (a) y
de (b)?
b) La renta disponible (YD).
Suponga que la economía comienza teniendo un presupues-
c) El gasto de consumo (C). to equilibrado: T = G. Si el aumento de G es igual al de T,
el presupuesto permanece equilibrado. Calculemos ahora el
multiplicador del presupuesto equilibrado.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 91


d) Suponga que tanto G como T aumentan en una uni- subiendo los impuestos sino pidiendo préstamos.
dad. Utilizando sus respuestas de las partes (a) y (b), Muestre en un gráfico (como la Figura 3.2) cómo
¿cuál es la variación del PIB de equilibrio? ¿Son neu- afecta esta política a la producción de equilibrio.
trales desde el punto de vista macroeconómico las Explique su respuesta.
variaciones de G y de T que mantienen equilibrado
el presupuesto? b) Suponga, por el contrario, que el gobierno financia el
aumento de las transferencias con una subida equi-
e) ¿Cómo afecta el valor específico de la propensión a valente de los impuestos. ¿Cómo afecta el aumento
consumir a su respuesta de la parte (d)? ¿Por qué? de las transferencias a la producción de equilibrio en
5. Estabilizadores automáticos este caso?
Hasta ahora hemos supuesto en este capítulo que las varia- c) Ahora suponga que la población está formada por dos
bles de la política fiscal, G y T, son independientes del nivel de tipos de personas, las que son muy propensas a
renta. Sin embargo, en el mundo real no ocurre así. Los impues- consumir y las que son poco propensas a consumir.
tos normalmente dependen del nivel de renta, por lo que Suponga que la política de transferencias eleva los
tienden a ser más altos cuando la renta es más alta. En este impuestos de las personas poco propensas a consumir
problema, vemos cómo puede contribuir esta respuesta auto- para financiar las transferencias realizadas a las personas
mática de los impuestos a reducir la influencia de las variacio- muy propensas a consumir. ¿Cómo afecta esta política
a la producción de equilibrio?
nes del gasto autónomo en la producción.
d) ¿Cómo cree que podría variar la propensión a con-
Considere las siguientes ecuaciones de conducta: sumir de unas personas a otras en función de la
C = c0 + c1YD renta? En otras palabras, ¿qué diferencia cree que hay
T = t0 + t1Y entre la propensión a consumir de las personas que
YD = Y - T tienen una renta alta y la propensión a consumir de
las que tienen una renta baja? Explique su respuesta.
G e I son ambos constantes. Suponga que t1 se encuentra Dada su respuesta, ¿cree que las reducciones de los
entre cero y uno. impuestos estimularán más la producción cuando
a) Halle la producción de equilibrio. van dirigidas a los contribuyentes de renta alta o a
b) ¿Cuál es el multiplicador? ¿Responde la economía los de renta baja?
más a las variaciones del gasto autónomo cuando t1
es cero o cuando es positivo? Explique su respues- 8. La inversión y la renta
ta. En este problema se observa qué ocurre cuando se permite
c) ¿Por qué se denomina la política fiscal estabilizador que la inversión dependa de la producción. En el Capítulo 5
automático en este caso? se analiza más extensamente esta cuestión y se introduce
una relación esencial –la influencia del tipo de interés en la
6. Presupuesto equilibrado frente a estabilizadores automáticos inversión– que no se examina en este problema.
A menudo se dice que una enmienda del presupuesto equi- a) Suponga que la economía se caracteriza por las si-
librado sería realmente desestabilizadora. Para comprender guientes ecuaciones de conducta:
este argumento, considere la economía del Problema 5.
a) Halle la producción de equilibrio. C = c0 + c1YD
b) Halle los impuestos de equilibrio. YD = Y - T
Suponga que el gobierno comienza teniendo un presupuesto I = b0 + b1Y
equilibrado y que disminuye c0. El gasto público es constante. Obsérvese que ahora la inver-
a) ¿Qué ocurre con Y? ¿Y con los impuestos? sión aumenta cuando aumenta la producción. En el Capítu-
b) Suponga que el gobierno reduce el gasto público para lo 5 analizaremos las razones de esta relación. Halle la
mantener el presupuesto equilibrado. ¿Cómo afectará producción de equilibrio.
esta medida a Y? ¿Contrarresta la reducción del gasto ¿Cuál es el valor del multiplicador? ¿Cómo afecta la relación
necesaria para equilibrar el presupuesto el efecto que entre la inversión y la producción al valor del multiplicador?
produce la reducción de c0 en la producción o la refuer- Para que el multiplicador sea positivo, ¿qué condición debe
za? No utilice el análisis algebraico. Utilice su intuición y cumplir c1 + b1? Explique sus respuestas.
responda verbalmente.
Suponga que el parámetro b0, llamado a veces confianza
7. Los impuestos y las transferencias empresarial, aumenta. ¿Cómo afectará a la producción de
Recuerde que hemos definido los impuestos descontando equilibrio? ¿Variará la inversión más o menos que b0? ¿Por
las transferencias. En otras palabras, T = impuestos - qué? ¿Qué ocurrirá con el ahorro nacional?
transferencias.
a) Suponga que el gobierno aumenta las transferencias Amplíe
a los hogares privados, pero que éstas no se financian 9. La confianza de los consumidores

92 Macroeconomía. Aplicaciones para Latinoamérica / Olivier Blanchard • Daniel Pérez Enrri


En un recuadro del texto se hace referencia al índice de datos sobre la confianza que la producción será mayor de lo
confianza de los consumidores. Entre en la página web de la normal en el futuro o menor? Explique su respuesta. Puede
Conference Board (www.conference-board.org) y descargue hacer el mismo ejercicio para el caso de Argentina utilizando
la publicación más reciente del índice de confianza de los el índice de confianza del consumidor elaborado por la Uni-
consumidores. Normalmente, la Conference Board lo facilita versidad Torcuato Di Tella (www.utdt.edu.ar). Éste es de publi-
gratuitamente. Prescindiendo de otros factores, ¿sugieren los cación mensual y gratuita.

Invitamos al lector a visitar la página del libro en la web de Prentice Hall cuya dirección es
www www.pearsoneducacion.net/blanchard para los ejercicios de este capítulo.

Capítulo 3 • El mercado de bienes 93

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