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REVISIÓN | REVIEW 757

Tamizaje masivo: una revisión de la


literatura sociológica
Population screening: a narrative review of the sociological literature

Marcela Beatriz Belardo1, Kenneth Rochel de Camargo Junior2

DOI: 10.1590/0103-1104201811818

RESUMEN Se provee una revisión de la literatura sociológica a partir de 79 obras referentes


a cribados de cáncer y se excluyeron los cribados genéticos prenatal y neonatal. El tamiza-
je implica el monitoreo de poblaciones aparentemente sanas para rastrear una determinada
condición. El rastreo invirtió la concepción tradicional de comprensión sobre las enfermeda-
des al disminuir los umbrales de definición de enfermedad y rompió con la distinción médica
tradicional entre enfermos y sanos. A partir de entonces, la práctica clínica comenzó a buscar
enfermedades en personas asintomáticas, y así también modificó los comportamientos de los
pacientes, que pasaron a ser responsables del cuidado de sí mismos.

PALABRAS-CLAVE Tamizaje masivo. Neoplasias. Revisión. Factores sociológicos.

ABSTRACT A review of the sociological literature is provided from 79 works referring to screen-
ing for cancer and prenatal and neonatal genetic screening were excluded. Screening involves
monitoring apparently healthy populations to track a certain condition. Screening reversed the
traditional conception of understanding about diseases by lowering disease definition thresholds
and breaking the traditional medical distinction between the sick and the healthy. Clinical prac-
tice began to look for diseases in asymptomatic people and thus also modified the behavior of the
patients, who became responsible for the care of themselves.

1 Universidade
KEYWORDS Mass screening. Neoplasms. Review. Sociological factors.
do Estado
do Rio de Janeiro (Uerj),
Instituto de Medicina
Social – Rio de Janeiro (RJ),
Brasil.
Orcid: https://orcid.
org/0000-0001-9032-
3919
marcelabelardo@yahoo.
com.ar

2 Universidade do Estado
do Rio de Janeiro (Uerj),
Instituto de Medicina
Social – Rio de Janeiro (RJ),
Brasil.
Orcid: https://orcid.
org/0000-0003-3606-
5853
kenneth@uerj.br

Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo la licencia Creative Commons


Attribution, que permite el uso, la distribución y la reproducción en cualquier
medio, sin restricciones, siempre que el trabajo original sea correctamente citado. SAÚDE DEBATE | RIO DE JANEIRO, V. 42, N. 118, P. 757-772, JUL-SET 2018
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Introducción Este tipo de programas se viene implemen-


tando en los países desarrollados desde hace
En las dos últimas décadas, se ha instalado por lo menos tres décadas, con resultados muy
en la agenda de la salud internacional una dispares. En los últimos años, se produjeron
creciente preocupación por la prevalen- fuertes polémicas en torno a su eficacia3, los
cia de las Enfermedades no Transmisibles sobrediagnósticos que los tamizajes producen4
(ENT) en los países de bajos y medianos in- y el uso de las tecnologías5,6. Uno de los debates
gresos, según la clasificación que realiza el más importantes fue el que desató el screening
Banco Mundial. Dentro de esta clasificación de cáncer de mama con el uso de la mamogra-
médica se encuentra el cáncer y, según las fía7, en el que las diversas partes interesadas
estadísticas, su incidencia en América Latina (desde grupos de pacientes hasta responsables
y el Caribe es inferior a la de regiones más de políticas y administradores de servicios de
desarrolladas en el mundo, pero la diferencia salud, médicos clínicos, científicos de laborato-
radica en que la mortalidad es notablemente rio y el complejo médico industrial-financiero)
mayor1. Esto puede explicarse, en parte, por se involucraron acaloradamente. En 2011, se
un diagnóstico de la enfermedad en etapas constituyó la Red de Institutos Nacionales de
más avanzadas de su desarrollo junto con un Cáncer, que depende de la Unión de Naciones
menor acceso a los servicios de diagnóstico, Sudamericanas (Rinc/Unasur), organismo
detección y tratamiento. estructurante y operativo que articula entre
Una de las recomendaciones de la instituciones públicas, de ámbito nacional,
Organización Mundial de la Salud (OMS) para desarrollando o ejecutando programas para el
la prevención y control de las ENT, y en parti- control del cáncer en la región, entre los que
cular del cáncer, es que los países de medianos se encuentra el cribado para el cáncer cervi-
y bajos ingresos fortalezcan sus sistemas de couterino. De los países asociados, Argentina
salud para mejorar el diagnóstico precoz con y Uruguay ya están implementando pruebas
la implementación de tamizajes masivos para piloto de cribado masivo para el cáncer colo-
ciertos tipos de cáncer, como el cervicouterino, rrectal y cervicouterino.
el de mama, el de colon-recto y el bucal2. El ta- Asimismo, existe una prolífica literatura en el
mizaje masivo implica la observación y moni- campo de la salud pública que discute diferen-
toreo de poblaciones aparentemente sanas para tes aspectos de los tamizajes masivos. Solo por
rastrear precozmente una determinada condi- citar algunos ejemplos, se están desarrollando
ción a través de diferentes exámenes, como estudios que refieren a los sistemas de informa-
las mamografías, ecografías o diferentes test. ción y registro de cáncer de América Latina y el
Existen dos tipos de tamizaje: el oportunístico Caribe1,8, el análisis de costo-efectividad de los
y el organizado. El primero se da cuando una programas de tamizaje nacionales9 o se propo-
persona busca los servicios de salud por otro nen mejoras en el diseño de esos programas10,11.
motivo y el profesional de salud aprovecha la La proliferación de estos estudios, a la par de
oportunidad para rastrear la enfermedad. Por la alianza cooperativa de los institutos nacio-
el contrario, en el segundo caso el profesional nales de cáncer de los países de Sudamérica y
de salud invita a la persona de un determina- los países asociados del Caribe, está indicando
do grupo (género, edad o mayor riesgo) a ser que este tipo de intervenciones preventivas se
objeto de seguimiento durante la implementa- está imponiendo en las agendas sanitarias de la
ción del programa, por lo tanto, existe un mayor región, aunque son relativamente escasos los
control de las acciones. Concebimos a los tami- estudios que abordan los aspectos sociales y sus
zajes tanto una intervención médica como una consecuencias.
intervención de la salud pública, por lo que Esta revisión busca exponer los aspec-
conllevan desafíos legales, éticos y sociales. tos sociales de los tamizajes masivos, que

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usualmente no se toman en consideración y cuidados de la salud por parte de los pacientes


por la mayoría de la literatura, pero que (gestión de la salud y la enfermedad). En este
tienen importantes consecuencias debido a sentido, la revisión es una revisión crítica que
que rompen con la lógica tradicional de com- resume la literatura sobre un tema y extrae
prensión de las enfermedades y modifican la conclusiones. Este tipo de revisión es útil
práctica clínica y el cuidado de la salud por porque reúne un volumen de literatura sobre
parte de los pacientes. un tema específico, lo condensa y sintetiza. Su
Con la intención de traer este debate al propósito principal es proporcionar al lector
campo de la salud colectiva, se presenta un los antecedentes de un tema para comprender
conjunto de asuntos descritos en la litera- el estado actual del conocimiento alcanzado
tura anglosajona, que ha sido la que más ha y ayudar a destacar nuevos significados para
publicado sobre los aspectos sociológicos de futuras investigaciones. Puede inspirar ideas
los tamizajes. El artículo no tiene el objetivo de investigación identificando brechas o in-
de ser una revisión exhaustiva de la totalidad consistencias en un cuerpo de conocimiento,
de los trabajos sociológicos, sino de proveer ayudando así al investigador a determinar o
una visión panorámica de los conceptos más definir preguntas o hipótesis de investigación y,
significativos relativos a los aspectos men- también, puede servir al desarrollo de marcos
cionados. Se han incluido los trabajos sobre conceptuales o teóricos12. Además, se diferen-
screenings poblacionales referentes al cáncer cia de la revisión sistemática en que esta última
y se han excluido aquellos referidos a los cri- utiliza un enfoque más riguroso y bien definido
bados genéticos prenatal y neonatal. para revisar la literatura en un área temática
El texto está dividido en dos partes. La específica, generalmente, para responder pre-
primera refiere a una revisión de la literatu- guntas centradas en la práctica clínica. Las re-
ra sociológica que trata las transformaciones visiones sistemáticas detallan el tiempo dentro
que los tamizajes masivos produjeron en del cual se seleccionó la literatura, así como los
el conocimiento médico sobre enfermeda- métodos utilizados para evaluar y sintetizar
des, en la práctica clínica y en la gestión de los hallazgos de los estudios en cuestión. Este
la salud y la enfermedad por parte de los tipo de revisiones utilizan criterios explícitos y
pacientes. La segunda parte discute dichas rigurosos para identificar, evaluar críticamente
transformaciones porque tiene la intención y sintetizar toda la literatura sobre un tema en
de aportar al debate actual, teniendo en particular13. A diferencia de esta revisión, el
consideración la decisión de las autoridades propósito de una revisión sistemática es pro-
sanitarias de varios países de la región de porcionar una lista lo más completa posible de
iniciar la implementación de los tamizajes todos los estudios publicados e inéditos relacio-
poblaciones para diferentes tipos de cáncer. nados con un área temática en particular12.
La búsqueda, la lectura y la selección de
la literatura para esta revisión se realizaron
Metodología entre los meses de marzo y agosto de 2017.
La primera etapa consistió en la búsqueda de
El artículo provee una revisión de la literatu- artículos en bases de datos en salud, como
ra sociológica sobre tamizajes para el cáncer PubMed y Biblioteca Virtual en Salud (BVS),
dando cuenta de tres aspectos: 1) la manera utilizándose los descriptores ´screening´, ´ta-
en que los tamizajes han modificado la com- mizaje´ y ´cribado´ para el cáncer de la última
presión y construcción de enfermedades década. La búsqueda arrojó una cantidad
(conocimiento médico); 2) la forma en que descomunal de artículos, lo que entonces
han transformado la práctica clínica; y 3) los solo permitió explorar e identificar, grosso
modos en que han cambiado las percepciones modo, los tipos de trabajos que abordan la

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temática: ensayos clínicos, estudios epide- se seleccionaron 13 artículos para su lectura


miológicos y sobre implementación, costo- completa: ‘Sociology of Health & Illness’
efectividad y evaluación de los programas (256/6); ‘Critical and Public Health’ (84/4);
de screening. Luego se realizó una búsqueda ‘Medicine, Health Care and Philosophy’
en la base bibliográfica SciELO (Scientific (69/0) y ‘Health, Risk & Society’ (101/3). Se
Electronic Library Online), dado que es la realizó un resumen inicial con las ideas prin-
base de datos que agrupa los artículos de cipales de cada uno en función de las tres
origen iberoamericano, utilizándose los des- dimensiones de la revisión y, posteriormen-
criptores ´tamizaje´, ´cribado´ y ´rastreamento´ te, se realizó una revisión más sistemática y
(en portugués). El propósito de esta segunda crítica del contenido, con la utilización del
búsqueda consistió en explorar la literatura sistema de indexación por título del trabajo,
procedente de América Latina y el Caribe, autor y fecha. A partir de la lectura de esos
debido al interés que este tema está suscitan- artículos, se amplió la bibliografía a través
do en los países de la región. El filtro utiliza- de la ‘técnica de bola de nieve’ bibliográ-
do en este caso fue por revistas, entre las que fica15. Por ejemplo, ‘Sociology of Health &
seleccionamos aquellas que pertenecen a las Illness’ publicó una serie monográfica titu-
ciencias sociales y humanas en salud, como lada ‘The Sociology of Medical Screening:
revistas de salud colectiva y salud pública (se Critical Perspectives, New Directions’, de
excluyeron las especializadas en el campo 2012, editada por Natalie Armstrong y Helen
biomédico). La búsqueda arrojó 49 artículos, Eborall. La colección contiene 10 capítulos
todos dedicados a la implementación y eva- de distintos autores. De esos capítulos, se
luación de programas de screenings, temas seleccionaron 4 por su pertinencia para esta
que no son foco de atención para esta revi- revisión, incluyendo la introducción, escrita
sión, por lo tanto, fueron excluidos. por Natalie Armstrong y Helen Eborall, que
En la segunda etapa, se buscó en revistas sirvió como puntapié inicial para continuar
de sociología y filosofía de la salud de origen ampliando las referencias bibliográficas,
anglosajón, debido a la mayor experiencia en su mayoría capítulos de libros y libros.
de esos países en cribados masivos. De estas, Después, se revisaron, seleccionaron y re-
se seleccionaron cuatro consideradas per- sumieron aquellos considerados pertinentes
tinentes por el enfoque y los temas que fre- a la temática de este trabajo. La etapa final
cuentemente discuten (‘Sociology of Health consistió en la inclusión de ideas clave y co-
& Illness’; ‘Critical and Public Health’; mentarios de cada artículo. Finalmente, 79
‘Medicine, Health Care and Philosophy’; obras fueron las elegidas y utilizadas para
‘Health, Risk & Society’). Seguidamente, se componer esta revisión.
utilizó el descriptor ‘cancer screening’ y el
operador booleano NOT para excluir ‘genetic’
y ‘pregnancy’. Esa búsqueda arrojó numero- Resultados
sos artículos que fueron revisados por título
y resumen, en función de las tres dimen-
siones descritas. Una vez hecho lo anterior, Monitoreo de poblaciones sanas du-
se aplicó el método de revisión de Cohen14 rante el siglo XX
para dar cierto tipo de estructura durante el
proceso de lectura y selección. Esta técnica Desde la década de 1990, se ha desarrollado
simple consiste en realizar una ‘vista previa’, una importante producción sociológica con
reconocer a través de preguntas las dimen- el fin de comprender la ´nueva salud pública´
siones establecidas, leer, resumir e indexar. y su paradigma dominante: el de la promo-
A continuación, del universo sobre tamizajes ción de la salud16, que busca fomentar nuevas

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actitudes frente a la salud, de manera gene- cribados disponible a principios del siglo
ralizada, dentro de la sociedad, diferencián- XX); o enfermedades mentales, a través de
dose de su antecesora, la salud preventiva, cuestionarios que se aplicaban a los soldados
basada en un enfoque más individualista y que habían participado en la Primera Guerra
liberal17. Si bien describir las diferencias y si- Mundial19. Con el fin de la Segunda Guerra
militudes entre ambos paradigmas no forma Mundial, se produjo una rápida expansión
parte de esta revisión, una categoría clave e de los tamizajes a la población civil. Y a partir
ineludible es la que refiere al riesgo. Aunque de la década de 1940, se implementaron los
el vocablo sigue siendo bastante ambiguo, exámenes de glucosa y orina, para detectar
conforme a ciertos abordajes sociológicos, la diabetes; el Papanicolaou, para la detección
evaluación del riesgo que tiene una persona del cáncer cervicouterino, convirtiéndose en
de enfermar vino a dominar todo el escenario el modelo para el resto de los screenings20-22;
técnico de elaboración de normas y medidas y los exámenes mamográficos, para detectar
de prevención y de promoción de la salud17. cáncer23-25. Por otro lado, la estrategia de
La noción de riesgo se utilizó para justificar observar y monitorear a poblaciones aparen-
ciertas medidas impulsadas para promocio- temente sanas para rastrear una enfermedad
nar una vida más saludable al mismo tiempo o condición se constituye en la forma de in-
que justificó la implementación de tamiza- tervención de la salud pública del siglo XX,
jes en masa para prevenir ciertos tipos de aunque su modalidad fue transformándose
enfermedades (cáncer de mama, próstata, a lo largo del tiempo, como examinamos a
cervicouterino, colorrectal) o determinadas continuación.
condiciones rastreables por los tamizajes
prenatal y neonatal. Tamizaje y conocimiento médico
Así que entender el origen de cualquier
área del conocimiento, de una tecnología La observación y monitoreo de la población
médica, de un paradigma o, como en este ha sido analizada desde diferentes marcos
caso, de una estrategia de la salud pública, es teóricos a través de conceptos como vigilan-
importante para comprender mejor sus tra- cia26,27, riesgo28, gobernanza29, (bio)medica-
yectorias, desdoblamientos y perspectivas. lización30-32 y la medicina como institución
Según la literatura revisada, los primeros de control social33. Esta vigilancia de la po-
tamizajes masivos pueden rastrearse a prin- blación por la medicina, particularmente a
cipios del siglo XX, periodo en el que Raffle y través de los cribados, fue rigurosamente
Gray18 comparan los orígenes de los tamiza- analizada por David Armstrong, que, in-
jes en los Estados Unidos y en el Reino Unido, fluenciado por las ideas de Michel Foucault
donde los médicos comienzan a promover la –pero analizando el mundo anglosajón del
novedosa idea de las consultas periódicas de siglo XX–, reflexiona sobre un aspecto que
los pacientes sanos para encontrar signos constituye el trasfondo de los tamizajes
de alguna futura enfermedad. Previo a las masivos: el conocimiento médico, al argu-
guerras mundiales, los tamizajes implemen- mentar que la medicina no solo describe
tados estaban enfocados en dos grupos de la su objeto, el cuerpo, sino que lo construye
población: los escolares, en quienes se bus- como una realidad biológica invariable y, a
caban anomalías que podrían afectar la salud través de diversos acontecimientos médicos,
en la edad madura; y los jóvenes varones que muestra cómo la medicina ha fabricado un
ingresaban al servicio militar, en quienes se cuerpo esencialmente subjetivo y relativo,
buscaban enfermedades como la tuberculo- a diferencia del cuerpo discreto y pasivo del
sis, a través de los rayos X; la sífilis, a través siglo XIX34. Desde esa perspectiva, el autor
del Test de Wasserman (uno de los primeros analiza en sus diversas obras los supuestos

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que subyacen a la salud pública en los últimos que identificar signos tempranos de una
dos siglos, desde las estrictas regulaciones enfermedad, como ocurre en la prevención
de los cordones sanitarios hasta los espacios secundaria36. La identificación de factores
constantemente monitoreados por la nueva de riesgo (prevención primaria) dio lugar a
salud pública35, y da cuenta de la emergen- una nueva era en la medicina y en la salud
cia de una nueva medicina basada en la vi- pública, ya que el concepto de enfermedad
gilancia de las poblaciones asintomáticas a (nos referimos a enfermedades no transmi-
principios del siglo XX, denominándola ‘me- sibles) se modificó al disminuir los umbrales
dicina de vigilancia’27, que implicó una rea- para designarla. En este nuevo escenario,
signación de los espacios de la enfermedad los factores de riesgo se tornaron equivalen-
al abordar cuestiones como la normalidad, el tes a enfermedad. A su vez, esta equivalen-
rediseño de la relación entre síntoma, signo y cia impactó en el significado de la cura y la
enfermedad, y la localización de la enferme- prevención, convirtiendo ambos términos
dad fuera del espacio físico corporal. en categorías borrosas cuyas fronteras se
En consecuencia, la aplicación de tamizajes vuelven más imprecisas y menos definidas,
a escala poblacional alteró tres aspectos signi- como analizaron Starfield et al3.
ficativos para la medicina en un contexto en el Otro aspecto que los tamizajes evidenciaron
que crecían en importancia las enfermedades es la incorporación de la idea de ´probabilidad´
crónicas mientras se reducían las enfermeda- de enfermar. Este cambio se empezó a producir
des infecto-contagiosas, a saber: la definición a partir del estudio de Doll y Bradford Hill37,
de enfermedad, o sea, qué es y qué no es enfer- que dio cuenta de la relación entre mortalidad
medad; la incorporación del concepto de ‘pro- y el hábito de fumar. A partir de esa asocia-
babilidad’, es decir, la probabilidad que tiene ción, se empezaron a percibir como entidades
una persona de enfermar; y el nuevo papel que inseparables el hábito de fumar y el cáncer de
ocupa la medicina en la sociedad. pulmón. Los trabajos de Jackson38 y Lupton39
Para Armstrong19, la medicina se basaba han analizado precisamente la percepción que
en un modelo lineal temporal de la enferme- la sociedad tiene no solo del fumador activo,
dad en el que era posible incidir en cualquier sino también del pasivo. No obstante, como
punto de su progresión. Precisamente, el ob- señala Armstrong19, cuando nos referimos a un
jetivo principal de un tamizaje consistía en factor de riesgo (fumar, abuso de alcohol, alto
el escrutinio de los cuerpos de los ciudada- consumo de sodio, baja actividad física) no está
nos para detectar precozmente numerosas ligado con la futura enfermedad, ni necesaria-
enfermedades y, así, alterar su curso a través mente existe una relación directa con ella, sim-
de las tecnologías disponibles. Sin embargo, plemente abre un espacio de posibilidad.
este modelo se modificó a partir del estudio El último aspecto que los tamizajes han
de Framinghan de 1948, puesto que demostró ayudado a modificar es el que tiene que ver con
que un conjunto de factores de riesgo podían el rol de la medicina en la sociedad. A lo largo
ser predictores de enfermedades cardiovas- del siglo XX, el objeto de preocupación y ocu-
culares, lo que significó una ruptura con la pación de la medicina se fue desplazando de la
manera tradicional de comprender la etio- población enferma –como fue su práctica tradi-
logía de las enfermedades. Por consiguiente, cionalmente a casi la totalidad de la población.
al modificarse la comprensión de la etiología Esta nueva manera de interpretar y compren-
de algunas enfermedades, los screenings se der las enfermedades es reforzada por los ta-
adaptaron a la nueva definición de enfer- mizajes masivos, que rompen con la distinción
medad y reforzaron dicha transformación. médica tradicional entre enfermos y sanos19.
A partir de entonces, según Armstrong, los Por consiguiente, la lógica dicotómica por la
tamizajes comienzan a detectar riesgos más que operaba la práctica clínica se desvanece.

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Tamizaje y práctica clínica las estadísticas que se producen a través de


sus resultados sirven para apoyar o reformu-
En la década de 1990, la sociología de la salud lar evaluaciones de patrones de riesgo en la
ha examinado el estado de salud de las pobla- población39. Esta nueva modalidad que se
ciones y los medios utilizados para mantener impone en la práctica clínica se fue desarro-
una buena salud en las sociedades occidenta- llando intensamente a partir de nuevas y más
les16,39,40. Justamente uno de los aspectos que sofisticas tecnologías diagnósticas42,43.
ha estudiado con rigurosidad es la consulta El segundo aspecto a considerar son las
clínica periódica, modalidad en la que se ma- nuevas tecnologías para producir diagnós-
terializan los tamizajes, ya sea aquel que se ticos, puesto que cambian la percepción y la
produce espontáneamente o cuando el profe- construcción de los mismos, es decir, una ob-
sional invita a su paciente a formar parte activa servación más profunda y detallada del cuerpo
de un programa de tamizaje organizado. En modifica las maneras de comprender lo normal
cualquiera de las dos modalidades el principio y lo patológico y permite construir nuevos diag-
central es que las personas deben poner sus nósticos44,45. A este respecto, existe un conjun-
cuerpos a disposición de los profesionales de to de trabajos que discute sobre los límites cada
la salud para una inspección regular aunque no vez más difusos entre enfermedad y salud46-50.
presenten síntomas. Son muchos los ejemplos de anormalidades,
El primer aspecto a tener en cuenta es disfunciones o enfermedades que se diagnos-
que, para que un tamizaje alcance los obje- tican por tecnologías más y más sofisticadas,
tivos propuestos, la consulta clínica debe ru- que hacen transparentes nuestros cuerpos.
tinizarse41. En este cambio de hábito radica Además, continuamente se diagnostican en-
la primera diferencia entre este modelo de fermedades a personas que tienen niveles muy
atención y los tradicionales modelos diag- leves de disfunción, y que son completamente
nósticos en los que el paciente iba a la consul- compatibles con una vida plena51. El resultado
ta clínica a exponer sus síntomas y, a partir de esta agudeza diagnóstica es una definición
de allí, se detectaba (o no) una enfermedad. ampliada de enfermedad, lo que hace que
No obstante, los tamizajes rompen con esa aumente el número de personas ´enfermas´
lógica porque es el médico el que busca a y los problemas de sobrediagnóstico52. Aquí
su población objetivo para implementar emerge el tercer aspecto que se modifica con
exámenes diagnósticos sobre una población los tamizajes: un resultado positivo no implica
asintomática (sana). En este sentido, la bús- un diagnóstico, sino que significa que la persona
queda de determinados tipos de enfermeda- tiene una mayor probabilidad de presentar de-
des o condiciones a través de los exámenes terminada enfermedad. Este resultado desen-
produce una clasificación de las personas cadena una serie de exámenes hasta lograr un
en dos grandes grupos: aquellas con pro- diagnóstico definitivo y frecuentemente genera
babilidad de desarrollar una determinada un serio problema: el alto porcentaje de diag-
condición y aquellas en las que es impro- nósticos equivocados. Algunos pacientes son
bable19. Y esta clasificación está basada en considerados libres de una enfermedad, pero,
el concepto de riesgo, es decir, el riesgo que de hecho, la tienen (falsos negativos), y otros
tienen determinados individuos de enfermar reciben un diagnóstico de enfermedad cuando,
y aquellos que no lo tienen. Por lo tanto, la en verdad, no la tienen (falsos positivos). Esto
relación entre riesgo y las estrategias pobla- sucede cuando el examen no posee una óptima
cionales diagnósticas es sinérgica: las per- sensibilidad y especificidad -propiedades
sonas son exhortadas a asistir a un examen inherentes a cada una de las pruebas de diag-
porque se considera que están en riesgo de nóstico- para que dé como resultado pequeñas
desarrollar una enfermedad o condición, y tasas de falso positivo y para que garantice que

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la persona realmente no tiene la enfermedad años entre los investigadores, que realiza-
cuando el resultado es negativo. Ello se debe a ron una revisión sistemática del cribado
que los test diagnósticos tienen una sensibili- con mamografías y concluyeron que, en un
dad (capacidad para detectar a individuos con período de 10 años, 1 de cada 2000 mujeres
la enfermedad) y una especificidad (capacidad que fueron invitadas a ser examinadas pro-
de excluir el diagnóstico en los casos de los no longará su vida, 10 se someterán a tratamien-
enfermos) que nunca son del 100%53. Cuando tos innecesarios y correrán nuevos riesgos, y
se produce un falso positivo se realizan múlti- 200 tendrán que hacer frente al efecto psi-
ples exámenes hasta que el diagnóstico original cológico de un falso positivo. Como señalaba
es descartado. La problemática del sobrediag- Geoffrey Rose58, un gran número de perso-
nóstico y, por ende, del sobretratamiento (que, nas sometidas a un pequeño riesgo puede
a diferencia del caso anterior, ocurre cuando el generar más casos de enfermedad que un
individuo es diagnosticado con una condición pequeño grupo de personas que tengan un
que no le causará síntomas, tampoco la muerte) alto riesgo.
es un debate polémico y actual en la literatura
sobre los tamizajes masivos4,51,54. Tamizaje y gestión de la salud y
Ante esta situación, los tamizajes masivos se enfermedad
implementan para detectar algunas enfermeda-
des o condiciones muy puntuales. Actualmente, Si en la sección anterior describimos las trans-
la OMS recomienda los tamizajes para rastrear formaciones que se sucedieron en la práctica
el cáncer cervicouterino, de mama, colorrectal clínica, aquí nuestro foco de atención está
y bucal (y la inmunización para HPV). No está puesto en las transformaciones que los tami-
indicado un rastreo masivo para estómago, piel, zajes masivos produjeron en los pacientes, una
próstata, pulmón, cavidad oral ni esófago, pero vez que esa práctica se hizo hegemónica en la
hasta hace poco tiempo, también se recomen- sociedad. Desde diferentes postulados teóricos
daba el screening para el cáncer de próstata, con y objetos específicos de investigación, se han
el test PSA, sin embargo la Preventive Service examinado las consecuencias de la nueva salud
Task Force de Estados Unidos, en su revisión de pública (en la que ocupa un lugar importante el
2012 de las recomendaciones de 2008, desacon- cribado poblacional). Para la práctica clínica, los
sejó el screening mediante este tipo de prueba, screenings y diagnósticos precoces son enten-
considerando que no reducía la mortalidad por didos como ´tecnologías presintomáticas´. Sin
cáncer de próstata y un tratamiento innecesa- embargo, al considerar que un individuo está
rio podía causar más daño55. En Argentina, está en riesgo, se requiere una constante vigilancia
bastante difundido este tipo de estudio en la de su entorno, tanto interno como externo, así
población masculina, a pesar de que las últimas como de su comportamiento. Estar en riesgo ha
recomendaciones lo desalientan. No obstante, configurado un dispositivo perfecto para poner
sigue siendo común que el médico y su pacien- a la población en un estado constante de prepa-
te soliciten el test PSA, por lo que termina por ración y conciencia en cuanto a su salud59.
convertirse en una especie de ´tamizaje por la Desde la teoría sociocultural, Lupton y
puerta de atrás´56. Petersen40 examinaron diferentes aspec-
Las polémicas que generan los tamizajes tos de la nueva salud pública; el que nos
son otro aspecto a tener en cuenta, dado interesa para esta revisión está relacio-
que los debates dentro del mundo médico nado con los derechos de los ciudadanos
no solo involucran argumentos científicos y y sus responsabilidades y obligaciones
clínicos, sino también argumentos sociales57. implícitas. A continuación, los autores
En este contexto, el estudio de Gøtzsche y parten de una definición de tipo ideal del
Nielsen7 causó una fuerte polémica durante ciudadano ´sano´:

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aquellos que tienen a sus hijos inmunizados, la participación en un tamizaje, fue tema de
participan en screenings de detección del cán- análisis, también, en relación con el embo-
cer cervical o exámenes de sangre para las diment femenino, o sea, la obligación que
pruebas de colesterol, controlan sus dietas, las mujeres sienten en cuanto al cuidado y
hacen ejercicio regularmente para proteger- respeto por sus cuerpos61. Pero, al mismo
se contra enfermedades cardiovasculares u tiempo, en esta rutina existen incertidumbres
osteoporosis (traducido por los autores)40(69). manifiestas y latentes. Las primeras están
asociadas con las experiencias y percepciones
Es preciso resaltar, como señalan los de las mujeres sobre el cribado e incluyen dis-
autores, que el tipo ideal de ciudadano tintos grados de ambigüedad en relación con
´sano´ descrito difiere sustancialmente entre el propósito del tamizaje, el significado de un
hombres y mujeres. Las mujeres son vistas resultado anormal y el riesgo generado por la
más como un recurso para la reproducción búsqueda de anormalidades cervicales. Por
(y, por ello, la importancia de los programas el contrario, las cuestiones de incertidumbre
en salud reproductiva) y el mantenimiento latente se asocian con las experiencias y per-
de otros ciudadanos ‘sanos’, mientras que cepciones de los profesionales encargados de
los hombres quedan apartados de la vigilan- ofrecer a sus pacientes los cribados62.
cia médica, ya que no existe equivalente a la Asimismo, otra dimensión examinada
ginecología para el estudio y tratamiento de por la literatura ha sido cómo los discursos
los cuerpos masculinos. Estos solo adquie- médicos con relación a los cribados cervicou-
ren entidad pública en tanto fuerza laboral terinos han modificado la percepción de las
o cuando forman parte de un cuerpo de mujeres en cuanto a lo ´normal´, el sentido de
defensa. Los hombres, como ciudadanos, no la obligación asociada al examen Papanicolau
tienen la responsabilidad de cuidar la salud y un nuevo tipo de feminidad63. Por otro lado,
de los demás, más bien lo contrario, ellos estudios han mostrado la contracara de este
tienen el derecho a la protección por parte aspecto. Mckie64, por ejemplo, analizó los dis-
de otros. Sin embargo, esta realidad se ha cursos de la clase trabajadora blanca masculi-
modificado durante las dos últimas décadas na relatados por las mujeres y percibió que el
debido a que se expandieron los servicios de cuello del útero era representado como sitio
salud para los hombres, siendo el screening de vigilancia y control estatal, profesional y
para el cáncer de próstata el símbolo de la masculino, mientras que Daykin y Naidoo65
vigilancia de la salud masculina4. examinaron cómo este tipo de vigilancia
Participar en un programa de cribado sobre los cuerpos toma por sentado las des-
implica que las personas deben ser esca- igualdades de género y adapta sus estrategias
neadas periódicamente —en un examen de para mantener el status quo y, en definiti-
mamas, en la visita anual al ginecólogo o en va, siguen reproduciendo las desigualdades
un examen colorrectal—. Como vimos en la existentes. Por su parte, Green y col.66 han
sección anterior, esa práctica se rutiniza y, examinado el rol que juegan las tecnologías
al hacerlo, va configurando un tipo de pa- de la salud en el manejo de los cuerpos de las
ciente responsable no solo del cuidado de mujeres de mediana edad y la manera en que
su salud individual, sino también porque va estas las interpretan.
convirtiéndose en un individuo responsa-
ble socialmente, demostrando ser un ´buen
ciudadano´ que vela por su salud. Como ad- Discusión
vierte Howson60, las prácticas preventivas se
vuelven una suerte de ´obligación moral´. En las dos últimas décadas del siglo XX, a
Este tipo de obligación, en la que se incluye diferencia del período anterior, los tamizajes

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quedaron reducidos a un puñado de pro- consecuencia de factores de riesgos, más que


gramas adaptados a enfermedades, como como lesiones detectables en el organismo, y
algunos tipos de cáncer o a la vigilancia de se definen, por primera vez en la historia, a
la maternidad y la niñez, en los que se pone partir de parámetros numéricos, como en el
en juego el futuro. Antiguamente, el objetivo caso de la presión arterial. De esta manera,
del cribado masivo era operar como estrate- los estudios epidemiológicos comienzan a
gia para intentar demorar la aparición de la trazar las fronteras entre lo normal y lo pato-
enfermedad o directamente detener su pro- lógico67. La enfermedad ya no está localizada
gresión, pero se modificó cuando los facto- en el cuerpo, sino en la población; sus causas
res de riesgo comenzaron a utilizarse como son más externas que internas; multifacto-
predictores de enfermedades. A partir de riales más que unicausales, además, el locus
entonces, ese nuevo raciocinio se extendió a de tratamiento ya no está situado en la cama
otro tipo de enfermedades. Actualmente, el del paciente, sino en la atención ambulatoria
foco de atención para las enfermedades no continua68. Con la ayuda de los cribados po-
transmisibles está centrado no tanto en la blacionales, entendidos como una estrategia
enfermedad en sí misma, sino en el estado de la salud pública y no solo como un examen
semipatológico prepatogénico. Como el clínico, estos cambios producidos en la prác-
caso del cáncer, cada vez se confunden más tica clínica se reforzaron. Ante ello, la reali-
las líneas divisorias entre lo patológico y el dad del cuidado de la clínica es compleja y, en
riesgo de enfermar, y la idea de riesgo refuer- ella, los tamizajes oportunistas se mezclan
za, aún más, la delimitación de la vigilancia con el cuidado clínico cotidiano, ya sea por
médica sobre ciertos grupos poblacionales iniciativa del profesional de salud o por la del
en los que se ejerce un mayor control. Por paciente. Tomando en consideración que el
ejemplo, se monitorea más a la población tamizaje y el diagnóstico o detección precoz
obesa porque pertenece a un grupo con de enfermedades son estrategias de salud
mayor riesgo de enfermedades cardiovascu- diferentes, tienen, por tanto, implicaciones
lares en relación con la población general. distintas. Mientras el tamizaje consiste en
Desde este paradigma, aún hegemónico de la observación de pacientes asintomáticos,
la biomedicina, las fronteras entre enfermos la detección precoz refiere a cuando el pa-
y sanos son cada vez más borrosas. Ahora ciente ya presenta signos y/o síntomas. Por
todos, enfermos y sanos, estamos bajo la ejemplo, luego de un estudio de viabilidad y
supervisión constante de la medicina. Más costo-efectividad, Brasil decidió no imple-
aún, los factores de riesgo existen en una re- mentar un tamizaje masivo y, mientras tanto,
lación móvil con otros riesgos, apareciendo y aplica la estrategia de diagnóstico precoz,
desapareciendo, cruzando espacios dentro y apuntando a consolidar las bases necesarias
fuera del espacio corporal19. para la implementación a futuro de un pro-
La práctica clínica también se ha modifica- grama de tamizaje masivo53. Sin embargo,
do a lo largo del tiempo. En la primera mitad ambas estrategias generan un proceso de me-
del siglo XIX, centraba su mirada en las le- dicalización social que puede generar inter-
siones patológicas que se encontraban en el venciones diagnósticas y terapias excesivas
interior del cuerpo. En cambio, en la segunda y, a veces, dañinas69,70. Se puede citar el uso
mitad de ese siglo, estuvo marcada por la fi- de nuevas tecnologías diagnósticas, como la
siopatología, que acercó el saber médico al ecografía mamaria, que nos permite mejorar
de las ciencias ‘duras’ en el dominio de lo sustancialmente la visión de esa parte del
biológico. Por lo que, a partir de la segunda cuerpo. Hallazgos frecuentes con este tipo
mitad del siglo XX, las enfermedades no de técnicas son los nódulos sólidos. De
transmisibles empiezan a ser definidas como acuerdo con las características ecográficas

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y el contexto clínico, el médico puede soli- resultados puedan transmitir una sensación
citar un seguimiento mediante estudios por de ‘falsa seguridad’75 y, a su vez, desencade-
imágenes o, después de la evaluación inicial, nar un efecto de ‘certificado de salud’76.
puede indicar una biopsia, cuyo resultado Otra de las consecuencias de la rutini-
puede determinar que el nódulo estudiado zación de la consulta médica es que puede
corresponde a un fibroadenoma, que es el generar un exceso de demanda de pruebas
tumor benigno de mama más frecuente. En diagnósticas por parte de la población
este caso, los nódulos no son una enferme- debido al temor a la posibilidad de enfermar,
dad en sí misma, pero son tratados como tal, a veces, sobrecargando los sistemas de salud
y la mujer, en la mayoría de los casos, fue con estudios innecesarios. Además, son fre-
intervenida. No obstante, en el caso de la de- cuentes las quejas de las mujeres en rela-
tección de un ganglio linfático intramamario, ción con las visitas ginecológicas, es decir,
que es una condición que no produce sínto- cuando el médico indica un papanicolaou y
mas ni es peligroso, el diagnóstico de este tipo no indica una colposcopia en la misma con-
de condiciones ´anormales´ genera múltiples sulta. La información que proporcionan los
consecuencias para los pacientes como, por profesionales de salud no siempre es clara y
ejemplo, angustia e incertidumbre. En este suficiente y los medios masivos de comuni-
contexto, se produce el reciente reconoci- cación frecuentemente difunden mensajes
miento de la iatrogenia como una importante confusos y contradictorios. Un estudio ha
causa de mala salud71, lo que dio origen, entre mostrado los problemas que han suscitado los
los médicos generalistas europeos, al concep- screenings masivos que deberían tenerse en
to y a la práctica de la prevención cuaterna- consideración a la hora de implementar esta
ria, relacionada con toda acción que atenúa o estrategia de la salud pública: el enojo que
evita las consecuencias del intervencionismo sienten los pacientes decepcionados por estos
médico excesivo72. programas; síntomas que son ignorados por la
La contracara de este proceso se pre- creencia de que los tamizajes ofrecen una pro-
senta en las alteraciones en la percepción tección completa; la responsabilidad que se le
y las prácticas de cuidado que generan los imputa al personal de la salud por problemas
tamizajes en los pacientes, produciendo di- que, en realidad, son inherentes al cribado, y
ferentes situaciones, que fueron analizadas los malos entendidos que se producen sobre
por la literatura. Esos ´buenos ciudadanos´, los beneficios, los límites y los costos de un
que recurren a la consulta anual – clínica o tamizaje masivo77. Como ya se ha advertido,
ginecológica– pueden ser diagnosticados de cuando se adoptan estrategias poblacionales,
cáncer entre una consulta y otra. Por con- estas deben evitar la incomodidad y el dolor,
siguiente, esta situación relativamente fre- además de ser mínimamente invasivas, so-
cuente causa una sensación de impotencia, cialmente aceptadas58 y de bajo costo.
dolor y perplejidad por el diagnóstico ines-
perado, especialmente por haber actuado
como un paciente responsable. Pero también Consideraciones finales
sucede lo contrario: la rutinización de la
consulta clínica y los resultados normales Esta revisión buscó traer al debate académi-
en un tamizaje generan diferentes impactos co una reseña de la literatura sobre una es-
en las personas. Uno de ellos es la ansiedad trategia de la salud pública contemporánea
asociada a la espera de los resultados de un denominada tamizajes masivos. También
tamizaje73,74, así como recibir resultados pretendió poner de manifiesto los aspectos
´sin riesgo´. La literatura ha puesto su foco sociales que emergieron a partir de la imple-
de atención en la preocupación de que tales mentación de este tipo de estrategia, además,

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buscó exponer tres dimensiones que, consi- valor moral a partir del cual las personas co-
deramos, rompen con la lógica tradicional de mienzan a ser juzgadas.
comprensión de enfermedades, de la prácti-
ca clínica y del cuidado por parte de los pa-
cientes y, al mismo tiempo, trató de integrar Contribuciones
esas dimensiones en una narrativa común.
Como se ha mostrado, los tamizajes Los autores han contribuido, de igual
masivos han colaborado en invertir una con- manera, en la idea de elaborar una revisión
cepción fuertemente arraigada en la forma de la temática, en el análisis de las obras y
tradicional de comprensión de las enferme- su interpretación. También han trabajado en
dades, al poner su foco de atención más en el borrador y revisión crítica del contenido y
la prevención primaria que en la secundaria, han aprobado la versión final del manuscrito.
más en la detección de riesgos que en iden-
tificar signos tempranos de una enferme-
dad. En consecuencia, este desplazamiento Agradecimientos
generó una disminución en los umbrales para
definir enfermedad y rompió con la distinción Los autores agradecen al Grupo de
médica tradicional entre enfermos y sanos. Estudios Sociales en Tecnociencia y Salud
Cuando la práctica del screening se convirtió (BIOMEDSCI), del Instituto de Medicina
en hegemónica en la sociedad, la práctica Social – Uerj, por su contribución en la dis-
clínica se modificó al buscar enfermedades cusión de este trabajo, así como reconocen
en personas asintomáticas y, al mismo tiempo, las invaluables contribuciones de Clarice
cambió los comportamientos de los pacientes, Rios, Luciana Hadid y María Belén Herrero
que pasaron a ser responsables del cuidado de en las diferentes versiones que fue adqui-
sí mismos. En otras palabras, se produce una riendo este artículo, y de Anabella Poggio, a
especie de ‘transferencia de responsabilidad’ través de su colaboración en la corrección de
de la medicina al individuo. Adicionalmente, estilo y revisión gramatical del español. s
el cuidado de sí mismo se transformó en un

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