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Convocatoria: Educación

El concepto de familia
y la formación académica
en Trabajo Social

Claudio Robles* y Lía Di Ieso**

Fecha de recepción: 14 de diciembre de 2011


Fecha de aceptación: 28 de febrero de 2012
Correspondencia a: Claudio Robles
Correo electrónico: mgclaudiorobles@gmail.com

* UBA-UNLaM; Magíster en Trabajo Social.


** UNLaM-CONICET Lic. en Trabajo Social.

Resumen:

Este trabajo recoge algunos de los resultados de la investigación “Representaciones del


concepto familia en estudiantes de Trabajo Social”, realizada por los autores en el marco
del Programa de Incentivos para docentes investigadores en el período 2009-2011.
Nuestro punto de partida señala que dichas representaciones conforman un habitus
que delinea el modo de interpretar la realidad, lo que hace necesario reconocerlas,
reflexionar críticamente en torno a ellas y someterlas a un proceso de transformación,
que partiendo del sentido común permita construir conocimiento científico. Ello es aún
más necesario si entendemos la centralidad que revisten dichas representaciones sobre
las familias a la hora de intervenir profesionalmente junto a ellas.
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Partimos de conceptualizar las categorías familia, representación social y habitus para


luego hacerlas dialogar con los discursos de los/as encuestados/as y entrevistados/as,
estudiantes de Trabajo Social que inician, promedian o concluyen su carrera de grado.
Sostenemos que la formación académica opera a nivel de la construcción de mediaciones
conceptuales de la realidad, re-significando lo aprendido, abandonando patrones
uniformes que regulan la categoría familia e interpelando modos de naturalización de
los procesos sociales. Esa tarea supone la capacidad para trabajar las prenociones y
prejuicios que los/as estudiantes traen al espacio académico a efectos de su posterior
problematización.

Palabras clave: Familias, representación social, formación académica.

Resumo

Este artigo apresenta alguns resultados da pesquisa “Representações do conceito família em estudan-


tes de Trabalho Social”, realizado pelos autores no âmbito do Programa de Incentivos para profes-
sores pesquisadores no período 2009-2011. Partimos supondo que essas representações formam
um habitus que descreve o modo de interpretar a realidade, tornando-se necessário reconhecer, pensar
criticamente sobre elas e submetê-las a um processo de transformação, que do senso comum permita a
construção de conhecimento científico. Isto é ainda mais necessário se entendermos a centralidade dessas
representações sobre famílias quando trabalhamos profissionalmente com elas.
Começamos conceituando a categoria família, representação social e habitus para depois discuti-las
com os discursos dos/as consultados/as, estudantes que iniciam, mediam ou concluem a carreira. De-
fendemos que a formação acadêmica trabalha na construção de mediações conceituais da realidade, re-
significando o aprendido, deixando padrões uniformes que regem a categoria família e questionando
modos de naturalização dos processos sociais. Esta tarefa envolve a capacidade de trabalhar os precon-
ceitos que os estudantes trazem para o espaço acadêmico para sua posterior problematização.
Palavras clave: famílias, representação social, formação acadêmica.

Introducción mos por identificar las posibles relaciones entre


esas representaciones y la estructura familiar del/
El texto que aquí presentamos recoge algunos la estudiante y si es posible advertir un proceso
de los resultados de la investigación “Represen- de reformulación de dichas representaciones so-
taciones del concepto familia en estudiantes de ciales a lo largo del proceso de formación aca-
Trabajo Social”, correspondiente al Programa démica. Finalmente nos propusimos reflexionar
de Incentivos para docentes investigadores, que respecto a las estrategias pedagógicas que debe-
se llevara a cabo en el Dpto. de Humanidades y rían implementarse en el análisis y tratamiento de
Ciencias Sociales de la Univ. Nacional de La Ma- las nociones que portan las/os estudiantes desde
tanza, en el período 2009-2011. sus experiencias familiares cotidianas.

Nos hemos propuesto indagar las representa- Encuadre metodológico


ciones sociales que portan las/os estudiantes de
Trabajo Social acerca del concepto ‘familia’ -si las Si bien la formulación de nuestras hipótesis de
mismas guardan relación con criterios de norma- trabajo no persiguen la finalidad de probarlas o
tividad o, si contrariamente dan lugar a la diver- refutarlas, sino antes bien orientar el proceso de
sidad y heterogeneidad- y sus eventuales efectos investigación, es preciso señalar que partimos de
sobre la intervención profesional. Nos interesa- dos ideas centrales: 1) la concepción de familia de
robles - De Ieso : El concepto de familia y la formación académica en Trabajo Social 45

los estudiantes de Trabajo Social de la UNLaM lística de estudiantes de Trabajo Social. Se selec-
está fuertemente asociada a los modelos tradi- cionaron los casos de mayor potencial informa-
cionales familiares y 2) dichas representaciones tivo, quienes actúan como informantes claves.
sociales conforman un habitus que sustenta la in- Mediante esta técnica se privilegió la obtención
tervención profesional y configura determinadas de información referida a la percepción que tie-
prácticas de los/as trabajadores/as sociales. nen los informantes respecto de su concepto de
familia. El cruzamiento de los abordajes cuanti-
Hemos desarrollado una investigación básica res- tativo y cualitativo se realizó en base a la deno-
pecto de su naturaleza y descriptivo-exploratoria minada triangulación metodológica, que permite
respecto de su diseño y profundidad. El objeto tener una comprensión más efectiva del objeto
de estudio fue abordado desde una estrategia me- de estudio ya delimitado.
todológica que contempló aspectos cuantitativos
y cualitativos, siendo la unidad de observación la Consideraciones centrales
carrera de Trabajo Social de la UNLaM. El alcan- del entramado teórico
ce temporal fue de tres años.
El concepto de familia
Las indagaciones teóricas nos condujeron a la de-
finición de cuatro dimensiones de análisis (per- El desarrollo de la investigación comprendió una
sonal, familiar, representacional y formativa) y revisión exhaustiva y sistemática de la bibliogra-
sus respectivas variables e indicadores, a partir de fía disponible centrada en el tema general y en tal
las cuales se confeccionaron los correspondien- sentido se abordaron cuestiones referidas a los
tes instrumentos de recolección de información períodos en la evolución histórica de la familia,
(cuestionario autoadministrado y entrevista en para llegar a la familia contemporánea y mono-
profundidad). gámica. Partiendo de Engels (1986) destacamos
que la monogamia no resultó del acuerdo entre
La dimensión personal se orientó a disponer el hombre y la mujer, ni fue una forma elevada
algunos datos personales de los/as estudiantes de matrimonio sino que significó una forma de
que permitieran apreciar los perfiles subjetivos esclavitud de un sexo por otro. O como señala
de quienes componen nuestro universo, mostrar el autor: “El primer antagonismo de clases que apareció
promedios estadísticos y analizar tendencias. La en la historia coincide con el desarrollo del antagonismo
dimensión familiar abarca algunos datos acerca de entre el hombre y la mujer en la monogamia; y la primera
las familias de origen de los/as estudiantes. Ambas opresión de clases, con la del sexo femenino por el mascu-
dimensiones permitieron conformar un perfil so- lino. La monogamia fue un gran progreso histórico, pero
ciodemográfico de las/os consultadas/os. al mismo tiempo inaugura, juntamente con la esclavitud y
con las riquezas privadas, la época que dura hasta nues-
La dimensión representacional se vincula a las tros días y en la cual cada progreso es al mismo tiempo
ideas que giran en torno al concepto de familia un regreso relativo, y el bienestar y el desarrollo de unos
que cada estudiante sostiene. Por último, la di- verifícanse a expensas del dolor y de la represión de otros”
mensión formativa indaga sobre el momento que (Engels, 1986: 61).
se transita en la carrera y la incidencia de la for-
mación académica en las representaciones sobre Therborn (2007) sostiene que la familia y el ma-
el concepto de familia. trimonio no están desapareciendo ni convirtién-
dose sólo en otro ejemplo de relación social, sino
En los aspectos cuantitativos, los datos fueron que siguen siendo la institución dominante de las
tratados de modo estadístico, con presentación relaciones sexuales y generacionales en el mundo.
final de frecuencias absolutas y cruzamientos de Asimismo, enfatiza que la afirmación de la igual-
información. A los fines del abordaje cualitativo, dad de sexos y de géneros no tiene precedentes
se llevaron a cabo ocho entrevistas semi-estruc- históricos y, por lo menos a un nivel global, pa-
turadas a una muestra intencional y no probabi- recen ser irreversibles. Ariza y de Oliveira (2003)
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también señalan que las transformaciones opera- cesidades básicas, materiales y emocionales y a
das en torno a la familia en América Latina apun- perpetuar el orden social, y que se ha llegado a
tan hacia la flexibilización del modelo tradicional reconocer que el feminismo ha tenido una gran
de familia, más que a una crisis de la institución repercusión al poner en tela de juicio la visión de
familiar como tal. Como afirma Roudinesco: “Lo la familia como ámbito armonioso e igualitario.
que perturba a los conservadores de todos los pelajes ya no Gracias a este debate, se ha pasado a entender la
es la impugnación del modelo familiar sino, al contrario, complejidad y diversidad de las familias, buscan-
la voluntad de someterse a él. Excluidos de la familia, los do superar la disociación simbólica entre las es-
homosexuales de antaño eran al menos reconocibles, iden- feras pública y privada, planteando la articulación
tificables, y se los marcaba y estigmatizaba. Integrados, (simbólica y práctica) entre ambas y tratando de
son más peligrosos por ser menos visibles” (2003: 10). incorporar en la familia los principios de la de-
mocracia y el imperio de la ley, siendo probable-
A los fines de conceptualizar la institución fa- mente el hecho más notable en este ámbito la
milia, hemos puntualizado que el Derecho la ha penalización de la violencia doméstica en prácti-
comprendido en tanto “conjunto de personas entre las camente todos los países.
cuales existen vínculos jurídicos, interdependientes y recípro­
cos, emergentes de la unión intersexual, la procreación y Jelin (1998) sostiene que las tres dimensiones
el paren­tesco” (Zanoni, 1989). Dicha definición de- que conforman la definición clásica de familia
viene caduca al no adecuarse a las modificaciones (sexualidad, procreación y convivencia) han su-
en torno al matrimonio civil en la Argentina, que frido enormes transformaciones, evolucionando
hacen posible el matrimonio entre personas del en direcciones divergentes. Es en este sentido
mismo sexo, al tiempo que restringe las relacio- que tales categorías resultan insuficientes a los
nes familiares a los vínculos estrictamente jurí- efectos de conceptualizar las familias. La autora
dicos. Compartimos algunas conceptualizaciones comprende a la familia como “una institución social
de familia realizadas desde la Sociología, entre las anclada en necesidades humanas universales de base bioló-
que destacamos a Göran Therborn (2007), Sonia gica: la sexualidad, la reproducción y la subsistencia coti-
Montaño (2007) y en nuestro medio Elizabeth diana. Sus miembros comparten un espacio social definido
Jelin (1994, 2007). en términos de relaciones de parentesco, conyugalidad y
pater/maternalidad. Se trata de una organización social,
Therborn (2007) expone un análisis institucional un microcosmos de relaciones de producción, reproducción
comparativo de las familias en el mundo, consi- y distribución, con su propia estructura de poder y fuertes
derando tres dimensiones o aspectos de la insti- componentes ideológicos y afectivos, pero donde también
tución familiar: la regulación del orden sexual, la hay bases estructurales de conflicto y lucha. Existen en
estructura de poder interno -patriarcado y poder ella tareas e intereses colectivos, pero sus miembros tam-
familiar- y los resultados en cuanto a hijos o fe- bién poseen intereses propios diferenciados, enraizados en
cundidad. Con respecto a las características de su ubicación en los procesos de producción y reproducción”
los actuales modelos y tendencias de la familia, (2007: 95). Asimismo y abordando la problemá-
el autor indica que los mismos pueden resumir- tica de la violencia doméstica, Jelin plantea la
se en tres palabras: complejidad, contingencia y familia como un espacio paradójico: es el lugar
contradicción. Complejidad, en el sentido de la del afecto y la intimidad, pero es también el lugar
coexistencia y entrelazamiento de las formas fa- privilegiado para el ejercicio de la violencia.
miliares; contingencia de relaciones, debido a las
opciones y accidentes que siguen al debilitamien- Entre los hechos societales más significativos
to de la regulación institucional; y contradicción que han operado transformadoramente en las
entre preferencias, situaciones y recursos. familias podemos mencionar: la defensa de los
derechos de las minorías sexuales; la lucha de las
En tanto, Sonia Montaño (2007) afirma que el mujeres por la igualdad de género; los movimien-
concepto funcionalista de familia la concibió tos feministas; la adopción; el derecho al aborto;
como institución destinada a atender las ne- el divorcio; la incorporación sostenida de la mu-
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jer al ámbito productivo; la tenencia compartida; los desafíos de otras y diversas configuracio-
la inseminación artificial; la unión civil de parejas nes familiares, aún silenciadas pero no por ello
del mismo sexo; el derecho a morir; la donación inexistentes.
de semen; el alquiler de vientres; la disminución
de matrimonios; el aumento de parejas conviven- De Jong se pregunta por qué interpelar a la fa-
ciales; el matrimonio igualitario; los cambios en milia como una constitución estática y prototípi-
los roles parentales, sólo para citar algunos. ca, afirmando que se trata de un estereotipo que
vuelve a los sujetos incapaces de dar cuenta de las
El matrimonio (y su indisolubilidad religiosa, en vidas concretas de las múltiples familias (2001:
algunos casos) ha sido la institución por excelen- 135). Esta autora plantea la necesidad de “com-
cia que ha reforzado aquella idea tradicional de prender a cada familia en la materialidad de su
familia, erguida sobre los pilares del parentes- existencia, como un producto histórico cultural
co, la convivencia y la sexualidad (heterosexual). particular y singular en su constitución” y enfatiza
Desde tales parámetros, difícilmente pudiera ha- que la familia tradicional, como ideario de la mo-
blarse libremente de relaciones concubinarias, dernidad, prácticamente ya no existe. Para de Jong,
uniones homosexuales, parejas divorciadas, fa- la familia no es un producto ideal sino un produc-
milias ensambladas, mujeres sin pareja que adop- to real que se constituye “como puede”, histórica-
tan un niño, etc. Estas modalidades de relación e mente y en relación a un tiempo y un espacio de-
interacción vienen imponiéndose en el escenario terminados (como espacio instituido socialmente
colectivo, recreando la concepción tradicional y e instituyente en la vida de los sujetos). Por esta
patriarcal que de la familia se tenía. razón, de Jong alerta sobre la necesidad de aban-
donar criterios de normalidad para referirnos a la
La familia patriarcal convive en la actualidad con familia y enfatiza que frente a la heterogeneidad
otras configuraciones familiares, aunque el ima- de formas que la familia adquiere se pretende una
ginario social perpetúe la representación de la homogeneización de la organización familiar.
familia nuclear como ideal familiar, casualmente
llamada “familia tipo”. Se trata, sin lugar a dudas, Como hemos descripto en otro trabajo, pensar
de un proceso de disciplinamiento social y mo- hoy las familias, implica desembarazarnos de
ralización de los procesos familiares, que Jacques fuertes ideas preconcebidas que nos indicaban
Donzelot (2008) describe como “policiamiento”. con escaso margen de incertidumbre, a qué debe-
Para Donzelot, la familia se constituyó en reina y mos llamar familia. “La clásica representación social
prisionera del Estado, recayendo sobre ella los me- de la familia como la unidad entre un padre, una madre
dios de control para solidificarla, fomentarla y evi- y uno o más hijos está sufriendo (deberíamos decir que
tar su derrumbe. También Roudinesco se expresa también está gozando) de importantes transformaciones.
en ese sentido, al afirmar: “las instituciones educativas, La mayor aceptación social del divorcio, la homosexuali-
sociales, médicas y culturales organizaron la vida privada dad, los procesos de liberación femenina y los cambios en
de todos para hacer de la familia el foco normativo de una el rol masculino, entre otros fenómenos sociales que han
individualidad ciudadana y democrática” (2003: 157). logrado mayor visibilidad en el escenario contemporáneo,
han hecho posible abandonar la idea totalitaria de la fa-
Los avances tecnológicos han derribado la cer- milia tradicional y comenzar a caminar nuevas formas de
teza de que la concepción es el resultado de una ser familia. Ocurre que tras la prescripción de una única
relación sexual entre un hombre y una mujer. forma de ser familia, toda formación que se apartara de
Nuevas maternidades y nuevas paternidades se la norma pasaba a la categoría de “problema” y así debía
despliegan en el marco de las nuevas configura- ser pensada”. (Robles, 2004: 30)
ciones familiares y obligan a reformular los mar-
cos conceptuales desde los cuales se interpretó la Para Eva Giberti (2005) la noción familia resul-
realidad de los sujetos. Tener dos madres o tener ta polisémica, en tanto que la subjetividad de los
dos padres, hoy ya no escandaliza y la sociedad miembros de la familia está ligada a la precariedad
deberá seguramente prepararse para enfrentar y polisemia que resultan de la identidad política,
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económica y psicológica de sus miembros. Señala habitus, que produce, luego, determinadas prác-
esta autora que “las nuevas organizaciones familiares ticas sociales y modos de comprender el mundo.
no son nuevas; nuevo es el registro de lo que existía, omi- Partimos de la consideración de las representacio-
tido, silenciado o negado” (2005: 342). nes sociales como constituidas y constituyentes
de un imaginario social en el que existen anclajes
En un estudio hecho con familias que viven en significativos, que se encuentran determinados
un barrio de la periferia de São Paulo, Szymanski por situaciones históricas y socioculturales que
(1992) observó que al mismo tiempo en que las conforman la matriz de las prácticas cotidianas.
familias iban adaptándose a los problemas coti-
dianos, había un modelo de familia por detrás, La importancia de las representaciones sociales
que era invocado por la familia cuando se hacía radica en que la representación que elabora un
autocrítica de su modo de vivir. Al modelo die- grupo sobre lo que debe llevar a cabo, define
ron el nombre de familia pensada; al modo de objetivos y procedimientos específicos para sus
vivir cotidiano llamaron familia vivida. miembros, incide en el comportamiento social y
la organización del grupo y llega a modificar el
Este pensado-modelo, impersonal y recibido en propio funcionamiento cognitivo, al tiempo que
la sociedad, también es formado en el transcurso “condensa en una imagen cosificante historia, relaciones
de la vida en familia. Expectativas, reglas, creen- sociales y prejuicios” (Jodelet, 1986: 470-471).
cias y valores van siendo también construidos
dentro de la cultura familiar. Cada persona tiene Jodelet propone la siguiente definición de repre-
expectativas, creencias, valores e interpretacio- sentación social: “El concepto de representación social
nes propias en relación a la familia que quiere (o designa una forma de conocimiento específico, el saber de
no) construir. Se pueden entonces observar por sentido común, cuyos contenidos manifiestan la operación
lo menos tres vertientes en la formación de ese de procesos generativos y funcionales socialmente caracte-
pensado: lo cultural y social más amplio, lo fami- rizados. En sentido más amplio, designa una forma de
liar y lo social más restringido y lo individual. pensamiento social. Las representaciones sociales constitu-
yen modalidades de pensamiento práctico orientados hacia
La familia vivida, en tanto, se refiere a los mo- la comunicación, la comprensión y el dominio del entorno
dos habituales de los miembros de una familia; social, material e ideal…” (1986: 475). Agrega la au-
es la que aparece en el concreto del cotidiano y tora que la representación social es tributaria de
que podrá o no estar de acuerdo con la familia la posición que ocupan los sujetos en la sociedad,
pensada. Señala la autora que esta solución, que la economía, la cultura, destacando el carácter
fue una elección de una posibilidad que apareció sorprendentemente dual de las representaciones
como la viable en un momento determinado, tie- sociales, que las hace tanto innovadoras como rí-
ne el carácter de realidad vivida, distante muchas gidas, tanto movientes como permanentes, y en
veces de un pensado idealizado, que no conoce ocasiones, en el seno de un mismo sistema.
barreras para su realización. Por ello en ocasiones
se vive en una nostalgia de un pensado irrealizado En opinión de Moscovici (1986) las representacio-
e irrealizable cuando no se encaran las soluciones nes sociales no son sólo productos mentales sino
como viabilizaciones de elecciones hechas según que son construcciones simbólicas que se crean y
las posibilidades y límites del momento. recrean en el curso de las interacciones sociales; no
tienen un carácter estático ni determinan inexora-
Los conceptos “representación social” blemente las representaciones individuales. Son
y “habitus” definidas como maneras específicas de entender y
comunicar la realidad y se determinan por las per-
El principio básico que guió esta indagación es el sonas a través de sus interacciones.
reconocimiento de que las representaciones que
se construyen acerca de un determinado hecho o La noción de “habitus” fue introducida y desa-
fenómeno modelan, conforman, delinean ciertos rrollada ampliamente por Pierre Bourdieu, como
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uno de los conceptos (junto al de campo y capi- el modo de comprender las familias. El propósito
tal) organizadores de su obra. Siendo el habitus final es conocer cuáles son las circunstancias que
“lo social encarnado”, se lo identifica como un pueden hacer propicia cierta modificación de los
conjunto de relaciones históricas ‘depositadas’ habitus referidos al modo en que se conceptúan y
dentro de los cuerpos de los individuos bajo la comprenden las familias. Es decir, bajo qué con-
forma de esquemas mentales y corporales de diciones este sistema de disposiciones duraderas
percepción, apreciación y acción. Se trata de un que es el habitus, puede manifestar modificacio-
“sistema de disposiciones duraderas y trasladables que nes y de qué modo la formación académica par-
funciona como una matriz de percepciones, apreciaciones y ticipa en ellas.
acciones y designa también una manera de ser, un estado
habitual (especialmente del cuerpo) y, en particular, una El contexto de producción de las
disposición, tendencia, propensión o inclinación”. (Bour- representaciones sobre familia
dieu y Wacquant, 2005: 47)
Asistimos a un proceso de profundas transfor-
Reseña Alicia Gutiérrez (1994) que el concepto maciones sociales, políticas, económicas y cul-
de habitus ha sufrido modificaciones a lo largo turales; las políticas neoliberales aplicadas desde
de la obra de Bourdieu y es en sus últimos tra- la última dictadura militar hasta fines del pasa-
bajos donde plantea de manera explícita la po- do siglo han impactado fuertemente en las or-
sibilidad de modificar los habitus -y con ello las ganizaciones familiares, alterando sus dinámicas
prácticas-, mediante un proceso de socioanálisis, internas y obligando a nuevas modalidades de
rescatando de este modo la capacidad de inven- producción y reproducción material y social de la
ción e improvisación del agente social. Mediante vida. La Argentina ha sufrido un proceso de de-
un proceso de control reflexivo, el agente social terioro de tal magnitud, que ha impactado negati-
puede explicitar sus posibilidades y limitaciones, vamente en su economía, su producción cultural,
sus libertades y necesidades contenidas en su sis- su desarrollo socio-comunitario y, por supuesto y
tema de disposiciones y con ello, tomar distancia como no podía ser de otro modo, en el lazo so-
respecto a esas disposiciones. cial y la dinámica de los grupos familiares. La cul-
tura del liberalismo individualista, el terrorismo
Acerca de la perdurabilidad del habitus importa de Estado, la farandulización de la política y la
resaltar que, si bien perdurable, el habitus está su- devastación de lo público, no han sido ajenas en
jeto a posibles cambios “El habitus no es el destino sus efectos a los procesos vividos por las familias,
que alguna gente lee en él. Producto de la historia, es un que fueron quedando sumidas a su propia suerte,
sistema abierto de disposiciones constantemente sujeto a desprovistas de toda protección estatal y carentes
experiencias, constantemente afectado por ellas de una ma- de posibilidades de proyectar.
nera que o bien refuerza o bien modifica sus estructuras.
¡Es perdurable pero no eterno! Dicho esto, debo añadir de La descripción precedente ha convivido junto a
inmediato que hay una probabilidad, inscripta en el des- otros cambios singulares en la dinámica societa-
tino social asociado a condiciones sociales determinadas, ria, entre los cuales podemos mencionar la recu-
de que las experiencias confirmen el habitus, porque la peración del estado de derecho en la vida insti-
mayoría de la gente está estadísticamente constreñida a en- tucional del país y el advenimiento de medidas
contrar circunstancias que tiendan a coincidir con aquellas de franco progresismo, tales como la sanción de
que originalmente conformaron sus habitus”. (Bourdieu la ley de divorcio y el juicio y castigo a las juntas
y Wacquant, 2005: 195) militares de la última dictadura argentina.

Aquello que nos interesa en este trabajo es co- Desde principios de este nuevo siglo y tras la pér-
nocer cuáles son los aspectos que contribuyen a dida de representatividad de la política, nuestro
conformar determinados habitus, en tanto cate- pueblo viene reconquistando el valor que ella tie-
gorías de percibir y apreciar la realidad, es decir ne, así como la protección de los derechos, am-
las determinaciones contextuales que inciden en pliando la base de sus derechos civiles, políticos
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y sociales, lo que equivale a hablar de una am- los resultados obtenidos, no resultando ajeno al
pliación de la ciudadanía, que comienza a sentar análisis, por ejemplo, el hecho de que se trata de
las bases para procesos de ciudadanización más una mirada eminentemente femenina de la reali-
integrales. Se va alejando, así, de los procesos de dad familiar.
baja intensidad y formalidad que caracterizaron
el período precedente, tras la reapertura y conso- Hemos podido advertir de manera recurrente
lidación de gobiernos democráticos. Se observan la consideración por parte de nuestros/as en-
signos de una evidente problematización de los cuestados/as y entrevistados/as referida a que
criterios de normatividad que han dominado las una familia requiere para serlo de la existencia
reflexiones pasadas en torno a las familias, que se de cualquier tipo de vínculos, o cualquier adulto
traducen en la sanción de la ley de matrimonio significativo que produzca una unión entre sus
igualitario, los debates en torno a la despenali- miembros como familia. Esta idea, sin embargo,
zación del aborto y la cada vez más masiva ad- coexiste junto a un cuarto de consultados/as que
hesión que recogen, como ejemplo paradigmá- no está de acuerdo con la idea de que homo-
tico de cambio social, las marchas del orgullo de sexuales y lesbianas estén en condiciones de ser
la comunidad LGBT, sólo para señalar algunos padres y/o madres. Se trata de una contradicción
ejemplos. que relativizaría las respuestas referidas a qué
miembros se considera familia, remitiendo a los
Éste es el escenario, dramático, complejo, con- roles tradicionales de padre y madre como indis-
tradictorio, inestable y esperanzador en el cual pensables para la conformación de la familia.
nuestros/as estudiantes encuestados/as y entre-
vistados/as han visto desarrollar sus procesos Si bien existe, por parte de los/as consultados/as,
de crianza y de educación formal y donde han un alto grado de aprobación respecto de los dere-
forjado sus matrices de aprendizaje. Progresión chos de las minorías sexuales, ocupa nuestra aten-
y regresión han sido características de la vida ins- ción la presencia de un cuarto de estudiantes para
titucional argentina, perspectiva desde la cual es quienes esta cuestión no es así pensada. Y si ello
posible pensar que las nociones de familia tam- es atendible es porque tal representación puede
bién habrán de inscribirse en el marco de ese es- acarrear importantes efectos en la intervención
cenario carente de univocidad. con familias, colisionando con los derechos con-
sagrados en torno a las minorías sexuales y los
Principales resultados alcanzados principios éticos que regulan la profesión.

Inicialmente es preciso señalar que las represen- Un fenómeno similar opera en torno al acuerdo
taciones sociales de quienes conforman la mues- que existe en que el cuidado y la protección de
tra de esta investigación representa un mosaico los/as niños/as es independiente de la condición
de una relativa diversidad que no autoriza a rea- sexual de quien lo ejerce, por un lado, y el des-
lizar generalizaciones, a las que tampoco hemos acuerdo respecto de que los/as niños/as meno-
pretendido acceder en este estudio. res de 5 años sean cuidados indistintamente por
la madre o el padre, así como que gays y lesbianas
El perfil de las personas consultadas en la presen- puedan ser padres/madres. Pareciera operar un
te investigación indica que se trata mayoritaria- acuerdo formal sobre la diversidad sexual, que
mente de mujeres, de entre 21 y 25 años; que no muestra su endeblez en la perpetuación de la idea
conformaron parejas convivenciales; se desem- que sostendría que la madre es la persona más
peñan como empleada administrativa o similar; apta para el cuidados de los/as hijos/as.
dispone de bajos ingresos; reside en La Matanza
y convive en un hogar nuclear o extenso, confor- La elección de las tres funciones más importan-
mado por 3 ó 4 miembros, con predominio de tes realizadas por padres y madres en la familia
jefatura masculina. Es este carácter de la muestra permitió conocer que las representaciones de
el que habrá que considerar a los fines de evaluar los/as estudiantes de Trabajo Social reproducen,
robles - De Ieso : El concepto de familia y la formación académica en Trabajo Social 51

en general, el estereotipo sobre las funciones so- singular y no universal. Un ideal como único,
cialmente asignadas al padre, como proveedor y a irreducible, a cuya existencia el sujeto se opone,
la madre, como continente afectiva, sobredimen- EL ideal, sin perjuicio de anhelar cierta forma de
sionándose el lugar de ésta en la crianza. vivir en familia, MI ideal. Independientemente de
las diferencias que se establecen entre un ideal y
El padre muy excepcionalmente es representado mi ideal, entendemos necesario profundizar es-
en cuestiones que resultarían socialmente femeni- tos aspectos, puesto que siempre existe el riesgo
nas, mientras que se espera que la madre también de pretender instituir mi ideal en términos de un
desempeñe las funciones socialmente asignadas ideal, con sus devastadoras consecuencias para la
al varón. Respecto de la realización-organización intervención profesional.
de las tareas domésticas y el control del desem-
peño escolar de los hijos/as, la madre octuplica y Entendemos que el concepto familia ideal repre-
septuplica la misma expectativa referida al padre. senta, entonces el correlato de ese yo ideal que
En tanto, el sostén económico del hogar repre- no conoce censura y por consiguiente, incluye un
senta en la madre unas tres veces menos que la sinnúmero de expectativas que brinden respuesta
misma expectativa respecto del padre. Hemos a los deseos inconmensurables del sujeto. La fa-
destacado también como dato alentador en la milia ideal intentará responder a esa expectativa
representación de la función paterna, la expecta- narcisista, infantil y omnipotente y seguramente
tiva de contener afectivamente a los/as hijos/as, ésta sea la razón por la cual se concluye que la fa-
función que no muestra una importante distan- milia ideal no existe. Ahora bien, ¿de qué se trata
cia respecto a la expectativa materna. Otro dato el ideal de familia? De un conjunto de conductas,
alentador es la función de compartir el tiempo socialmente aprendidas e idealizadas, que marcan
libre con los hijos/as, que para el caso del padre el horizonte por el medio del cual se intentan re-
es mayor que en la expectativa materna. cuperar algunas de las aspiraciones abandonadas
por el sujeto al renunciar a la familia ideal.
El ideal de familia -construido no sólo a partir de
la intervención efectiva de los padres sobre el su- La referencia a un ideal de familia desciende
jeto, sino también desde las instancias educativas y ostensiblemente en el avance de la carrera, aun-
las organizaciones comunitarias que participan en que ese ideal persiste, independientemente de la
ese proceso- tiende a silenciar y sancionar algunos formación académica, toda vez que está presen-
de los aspectos que hacen de las familias institucio- te en el 27% de quienes sí están finalizando sus
nes transformadoras del sujeto y del contexto en estudios. Operaría en estos casos un proceso de
el que aquél se conduce. La diferencia, la autono- profundización conceptual que va desde la fa-
mía y la libertad de sus miembros no integran en milia pensada a la familia vivida, o como hemos
la representación de los/as estudiantes consulta- denominado en este estudio, un “ideal situado”,
dos/as aspectos relevantes del ideal de familia. Del adaptado activamente a la realidad y plausible de
mismo modo que al sujeto le es difícil asumirse modificaciones y variaciones.
reconociendo aquello que lo instituye como tal, las
respuestas muestran que el ideal de familia recoge Las descripciones realizadas por los/as estudiantes
una inmensa cantidad de condiciones socialmente consultados/as dan cuenta de que ese ideal de fa-
aceptadas que excluyen lo diverso. milia muestra el altísimo nivel de expectativas que
pesan sobre la función de la familia, lectura desde
Otro aspecto que se despliega a partir de las ob- la cual es posible advertir los profundos desfases
servaciones realizadas radica en la diferencia en- que se producen entre lo que las familias pueden
tre mi ideal y un ideal. Las respuestas recogidas ser y hacer y aquello que se les deposita prescrip-
permiten advertir que mientras un ideal alude a tivamente, desde un alto monto de exigencia. Esta
lo prototípico y estandarizado socialmente, mi representación de las familias también impacta en
ideal hace referencia al personal modo de cons- los sujetos y sus propias prácticas, condicionándo-
truir el deseo para la propia realidad familiar, algo las y contribuyendo a su reproducción.
52 Año 2 - Nro. 3 - Revista “Debate Público. Reflexión de Trabajo Social” - Artículos seleccionados

Brindar una definición de familia -tal como se que equivale a abandonar los patrones uniformes
solicitaba en los instrumentos de recolección- que regulan la categoría familia. Ello pone en evi-
implica, necesariamente, la puesta en práctica de dencia la posibilidad de revisión de los habitus
un determinado ideal, aunque se niegue su exis- por medio de los procesos de formación acadé-
tencia. Su definición supone el despliegue de un mica. Esa tarea supone la capacidad para trabajar
juego de expectativas en torno a lo esperado por las prenociones y prejuicios que los/as estudian-
cada sujeto y en tal sentido resulta singular que tes traen al espacio académico, sin negarlos o
el 94% de los/as consultados/as ofrecieran una censurarlos a efectos de poder problematizarlos.
definición, aviniéndose a la consigna. La defini-
ción de familia brindada por los/as estudiantes A modo de cierre
recoge, en general, expectativas en torno al bien-
estar, la cohesión y protección de todos sus inte- La presente investigación ha servido para inter-
grantes, excluyendo toda referencia al conflicto, pelar la tarea docente que venimos desarrollan-
el poder y la lucha que también se despliegan en do y ello es así puesto que es preciso puntualizar
su interior. acerca de la necesidad de no utilizar categorías
estereotipadas que tienden a la cosificación y
La información recabada muestra la eficacia que estigmatización de las familias. No obstante, es
adquieren los procesos formativos a nivel acadé- preciso destacar que la efectividad de los proce-
mico en el sentido de reflexionar los conceptos sos de formación académica nunca resulta total
previos que se disponen respecto de una porción y prueba de ello es una importante cantidad de
de la realidad. Todo indica que cursar la asigna- estudiantes que no modifican sus conceptos pre-
tura que trata los contenidos específicos de fami- vios. Ello muestra el orden del habitus en tanto
lia implica para los/as estudiantes una instancia social encarnado y que en algún punto se vuelve
de importante contribución a aquel proceso. En poco permeable a la transformación; de allí la
efecto, el pasaje por la asignatura Trabajo Social importancia de revisar en todo momento lo que
III (Intervención con Familias) constituye un pensamos y transmitimos, incorporando la prác-
momento muy importante en la tarea de revisión tica de la supervisión y el trabajo sobre sí, como
conceptual y personal de la idea de familia, según un aspecto reflexivo de la práctica profesional.
surge del discurso de algunos/as entrevistados/ Sabemos que ello contribuirá a la consolidación
as, dando cuenta así de la centralidad que dicha de matrices más flexibles del modo de concebir
asignatura adquiere en el proceso de aprendizaje, la familia.
produciendo una ‘movilización’ que interpela los
conceptos y las propias experiencias. Re-pensar las representaciones que las/os estu-
diantes de Trabajo Social tienen sobre las fami-
El impacto de la formación académica opera a lias, supone reconocer los diversos elementos
nivel de la construcción de mediaciones con- presentes, identificando contradicciones y posi-
ceptuales de la realidad, a través de las cuales es bilidades de re-construcciones. Ello a su vez im-
posible re-significar y articular en la práctica los plica concebir la formación académica como una
contenidos aprendidos, connotar el significado acción pedagógica en la que confluyen procesos
de los conflictos, desacuerdos y diferencias en subjetivos asociados a los cognitivos.
las familias, desnaturalizando los procesos que
han sido concebidos como naturales, en los que Esta tarea de pensar críticamente sobre dichas
la costumbre y la tradición resultan interpeladas representaciones también se ubica en relación
desde el espacio académico, en tanto lugar privi- con una concepción de identidad y práctica del
legiado de análisis crítico de la realidad, condu- Trabajo Social dinámica y en permanente nece-
ciendo a revisiones y algunas modificaciones. sidad de ser reflexionada en sus tres dimensio-
nes constitutivas: teórico-metodológicas (saber);
Una de las expresiones de ese cambio es la consi- técnico-operativa (hacer) y ético-política (poder).
deración de la familia como una construcción, lo Urge pensar las familias no sólo desde sus condi-
robles - De Ieso : El concepto de familia y la formación académica en Trabajo Social 53

ciones concretas de existencia, sino desde las dis- consolidación de prácticas emancipatorias que
tintas modalidades que ellas adopten. Creemos partan del respeto a la diversidad y amplíen los
que de este modo estaremos contribuyendo a la márgenes en el ejercicio de la ciudadanía.

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