Introducción al tema

En 1850 Robert Angus Smith investigaba la química del aire de las

industrias británicas, los molinos de algodón y las poderosas industrias
pesadas que funcionaban gracias al carbón las cuales vertían y liberaban
grandes cantidades de humo al ambiente. Robert demostró que estas
fábricas hacían una emisión de hollín y otras sustancias que cambiaban de
forma directa a la lluvia y eran causantes de que esta fuera más acida.
A finales de 1950 fueron detectados que los resultados de la
contaminación provenientes de las industrias si eran uno de los causantes,
ya que se hizo evidente su efecto anverso en los bosques. Aunque esta
forma de contaminación es comúnmente conocida como lluvia acida, el
termino mas formal y adecuado es deposición acida, esto porque esta
acides puede ser liberada como gas o como polvo, y estas partículas acidas
son arrastradas por medio de la lluvia a la tierra.
Desde que se descubrió la lluvia acida se han creado y se han
realizado investigaciones para monitorear y controlar la lluvia acida para así
lograr que este fenómeno sea menos habitual; aunque esta lluvia sea menos
habitual ahora, aun se sigue presentando en algunas ocasiones. Durante
los últimos años, los gobiernos de los países más desarrollados han juntado
fuerzas para reducir las actividades que generan este fenómeno.
El agua de la lluvia ya de por si se le puede considerar acida ya que
tiene un pH de 5.6 y esto es debido a que en condiciones normales el dióxido
de carbono es absorbido por las gotas de agua formando una solución que
es débilmente acida, pero en las ocasiones en las que se da el fenómeno
de lluvia acida, este pH es diferente.
Durante bastante tiempo se pensó que la lluvia acida era
consecuencia principalmente de los gases que contenían grandes
cantidades de azufre, los cuales se produce por la quema de algunos
combustibles fósiles, específicamente en carbones de pobre calidad y de la
fundición de minerales metálicos, cosa que ahora sabemos que no es así
de simple.
 Estrategias de control
A principios de los años 90 y finales de los años 80 los países que
tienen grandes industrias comenzaron a desarrollar estrategias y políticas
medioambientales para que se controle la emisión de gases de efecto
invernadero, y como medida de prevención, lo que optaron por hacer fue
que se empezaron a emitir impuestos a estas empresas de industria que
emitían cualquier tipo de contaminante atmosférico. Pero, al contrario de lo
que se buscaba, este organismo regulador no fue para nada efectivo, pues
durante más de una década la emisión de gases de efecto invernadero
avanzó a grandes pasos pese a todas las medidas de control, los efectos
medioambientales no pueden ser controlados a la perfección a tan grandes
escalas.
Actualmente la lluvia acida sigue siendo uno de los problemas del
medio ambiente que sigue sufriendo nuestra tierra. Según los reportes del
norte de Estados Unidos y varios otros países desarrollados, quienes son
considerados como los países con mayor emisión de gases de efecto
invernadero, pone en efecto que la degradación del aire esta afectando de
manera significativa las plantas, ya que estos países están viendo como sus
bosques están muriendo bajo los efectos de la lluvia acida.
Este fenómeno sin duda alguna afecta a varias zonas del cultivo y
pone en peligro la sustentación de los bosques al verse afectado todo el
ecosistema.
Según la convención de 1992 realizada en Rio de Janeiro, se
estableció un mecanismo de pago o compensación por servicios
ambientales, el cual permite que los países con poco desarrollo industrial
puedan adquirir recursos de los países que si están desarrollados
industrialmente, entre los mismos están: la protección de cuencas,
conservación de la biodiversidad, almacenamiento de carbono y
mantenimiento de los bosques, esto debido a que estos son los ecosistemas
únicos que tienen la capacidad de mantener el equilibrio ecológico ya que
son reguladores del clima de forma global.
En todo el mundo, una generación nueva de iniciativas de
conservación pretende crear sistemas en los cuales los usuarios de uno o
más servicios ambientales compensen a los regentes del recurso de la
conservación de dichos servicios. Estos sistemas de les llama “pago por
servicio ambiental” y tienen el potencial de proteger servicios ambientales y
al mismo tiempo estos países desarrollados pueden adquirir beneficios
económicos para mantener los ecosistemas sin perturbaciones que alteren
su equilibrio

Como ocurre la lluvia normal

La lluvia se forma cuando las
moléculas del vapor de agua son
condensadas sobre cristales de
hielo o de sal que están en la
atmosfera, o sobre minúsculas
partículas de polvo de las nubes,
para formar gotitas de agua que
responden a la gravedad terrestre y
estas caen en forma de lluvia. A
medida que la lluvia va cayendo a
través de la atmosfera, puede ir
llevando elementos y productos
químicos contaminantes.
Normalmente el agua de la
lluvia tiene un pH de 5.0 a 5.5 por lo que de por sí, el agua es considerada
acida, esto se debe a que contiene acido carbónico que viene en la
disolución del dióxido de carbono.

Lluvia radiactiva
La lluvia radiactiva es cuando se depositan partículas radioactivas en
la atmosfera a través de explosiones nucleares o en fugas de instalaciones
y centrales nucleares, sobre la superficie terrestre.
 Este fenómeno se observo desde el periodo de las pruebas nucleares
atmosféricas a gran escala que se realizaban en la década de 1950 y
comienzos de 1960.
Se hicieron alegatos sobre los malos efectos durante bastante tiempo,
pero hasta 1984 no se adaptó una decisión trascendental.
Cuando un juez federal de Utah dictamino que cerca de 10 personas
se habían enfermado de cáncer gracias a la negligencia del gobierno en lo
referente a la exposición de los ciudadanos a la lluvia radiactiva en aquel
estado, en 1985 el tribunal de apelaciones de Inglaterra y Gales llago a la
conclusión de que había casos similares, como es el ejemplo de un veterano
de las pruebas nucleares británicas en una isla en la década de1950, desde
ese momento se firmó un tratado de limitaciones de pruebas nucleares en
1963, y desde entonces los niveles de lluvia radioactiva han disminuido en
todo el mundo.

Lluvia acida
La lluvia se vuelve lluvia acida debido a que desciende le nivel de pH,
llegando a medir 5.0 a 4.2, esto es
debido al dióxido de azufre y óxidos de
nitroso. Estos gases pueden alcanzar
niveles elevados en la atmosfera, ya en
la atmosfera, estos gases se mezclan
y reaccionan con el agua, oxigeno y
otras sustancias, para dar paso a la
formación de la lluvia acida.

Formas de deposición de la lluvia acida

La lluvia acida puede retornar a la superficie de la tierra en dos formas
diferentes:
La primera forma es a través de deposiciones húmedas que pueden
ser como por ejemplo la lluvia, llovizna o rocío.
 O también puede ser a través de deposiciones secas como, por
ejemplo, a través de nieve, niebla o
granizo, estas deposiciones secas
normalmente presentan niveles mas
bajos de pH por lo que la lluvia es mas
acida, esto a causa de que tienen
mayor concentración de sulfatos y
nitratos que están en la atmosfera.
Ambos tipos de deposiciones pueden
ser acarreados por el viento, otro vector a distancias grandes.

Fuentes de origen de la lluvia ácida

Los contaminantes atmosféricos como el SO2 y el NOx se oxidan
hasta sulfatos y nitratos que combinados con el vapor de agua retornan al
suelo como ácido sulfúrico y ácido nitroso en forma de lluvia, llovizna, roció
nieve niebla o granizo.
Las fuentes de origen de la lluvia ácida pueden ser; Contaminación
(actividad antrópica industria) o Polución (actividades naturales).

Contaminación antrópica o industrial

La deposición de sustancias ácidas ha sido calificada como un
problema ambiental de carácter mundial cuyas principales causas se
encuentran la emisión de óxidos de azufre y nitrógeno durante las
actividades industriales, transporte y la quema de combustibles fósiles,
estos compuestos son considerados como las principales fuentes de la lluvia
ácida. Pero el sector industrial genera otros tipos de contaminantes que
pueden contribuir a la formación de lluvias ácidas tales son los compuestos
orgánicos volátiles y los hidrocarburos que pueden reaccionar por si mismos
o pueden combinarse.

Combustibles fósiles
 son compuestos formados por hidrógeno y carbono, de los cuales
algunos contienen también pequeñas cantidades de otros componentes.
Los hidrocarburos se forman a partir de antiguos organismos vivos que
fueron enterrados bajo capas de sedimentos hace millones de años. Debido
al calor y la presión creciente que ejercen las capas de sedimentos
acumulados, los restos de los organismos se transforman gradualmente en
hidrocarburos.
Los combustibles fósiles más utilizados son el petróleo, el carbón y el
gas natural. Estas sustancias son sacadas de la corteza terrestre y refinadas
para luego convertirse en productos adecuados, como la gasolina, el
gasóleo y el queroseno. Algunos de esos hidrocarburos pueden ser
transformados en plásticos, sustancias químicas, lubricantes y otros
productos no combustibles.

Centrales eléctricas
Las centrales eléctricas térmicas, son instalaciones que produce
energía eléctrica a partir de la combustión de carbón, fuel o gas en una
caldera diseñada al efecto. El funcionamiento de todas las centrales
térmicas, o termoeléctricas, es semejante. El combustible se almacena en
parques o depósitos adyacentes, desde donde se suministra a la central,
pasando a la caldera, en la que se provoca la combustión. Esta última
genera el vapor a partir del agua que circula por una extensa red de tubos
que están en las paredes de la caldera.

Efecto de la lluvia ácida

La lluvia ácida está afectando la fijeza de diversos ecosistemas, ya
que este fenómeno está llagando a formar parte del ciclo del agua y, por
tanto, está cambiando los patrones climáticos, llegando a alterar los
siguientes ecosistemas:

Efectos en la salud
 La lluvia ácida al caer en la superficie terrestre libera partículas
pequeñas cuyos efectos son perjudiciales para la salud humana, cuando
estas partículas ingresan a los pulmones estos pueden causar
enfermedades respiratorias tales como el asma o la bronquitis crónica,
neumonía dificultando de esta manera que la gente pueda respirar sin
ningún tipo de contratiempo, por otra estas pueden derivar a afecciones
cardiovasculares.

Efecto sobre el agua

La lluvia ácida ha hecho que muchos lagos y arroyos en la región
noreste de los Estados Unidos y en otros lugares tengan niveles de pH
mucho más bajos. Este aumento de la acidez y de los niveles de aluminio
puede ser mortal para la vida acuática. Actualmente más de 18.000 lagos
están acidificados lo que está provocando grandes daños sobre la vida
acuática, así como la perdida de sus poblaciones piscícolas. Este problema
puede llegar a ser mucho más grave durante las lluvias fuertes o al
escurrimiento de la nieve cuando se derrite en la primavera.

Efecto en los bosques

La lluvia ácida puede ser extremadamente perjudicial para los
bosques, debido a que el agua que cae al
suelo puede disolver muchos minerales y
nutrientes que los árboles necesitan para
mantenerse vivos. Los árboles que se hallan
en regiones montañosas muy elevada
corren mucho más riesgo porque están
expuestos a las nubes y la niebla ácidas,
con mucha más acidez que la lluvia. Las
nubes y la niebla ácidas disuelven los
nutrientes importantes que los árboles
tienen en sus hojas y ramas. Esta pérdida
de nutrientes disminuye la resistencia de los
árboles y los bosques a los daños causados
por infecciones e insectos, y también por el frío del invierno.
 Daños en los edificios y objetos
La lluvia ácida y la deposición seca de partículas ácidas contribuyen
a la corrosión de metales como el bronce y la deterioración de pintura y
piedra, estos efectos reducen el valor social de edificios, los puentes,
significativamente los objetos culturales, al igual que los automóviles son
afectados.