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Cuestionario 1
Autor(a):
Kerluis Soló rzano
Tutor(a):
Jesú s Eduardo
Volemia
Animales Peso vivo (%) Litros
Bovino 7 35
Ovino 8 3,2
Cabra 6,2 1,86
Búfalo 8 48
Cerdo 8 8
Hombre 7 4,9
Ave 8 0,160
La forma de los glóbulos rojos varía en los vertebrados. En los mamíferos tienen forma
de disco bicóncavo, con la zona central deprimida debido a la ausencia de núcleo
Miden unos 8 µm de diámetro y unas 2 µm de espesor en la zona más ancha.
Los eritrocitos humanos, así como los del resto de mamíferos, carecen de núcleo y de
mitocondrias es decir, pierden su núcleo celular y por lo tanto su ADN; los anfibios,
reptiles y aves tienen eritrocitos con núcleo.
1. Eosinofilos
Los eosinofilos componen aproximadamente 2-4 % del total de glóbulos blancos.
Se ocupan principalmente de las infecciones parasitarias.
Su núcleo es, habitualmente, bilobulado con un tamaño aproximado de 10-12
µm. Los glóbulos están conectados por un cordón delgado. El citoplasma esta lleno de
gránulos que asumen un color rosa-naranja característico con tinción de eosina.
2. Basofilos: Los basofilos son los menos comunes dentro de los granulocitos,
representando alrededor de 0.5-1 % del total de glóbulos blancos. Sin embargo, son el
tipo más grande de granulocitos. Tienen un tamaño aproximado de 12-15 µm, con un
núcleo bilobulado o trilobulado.
Sus gránulos presentan un color azul oscuro en presencia de tinción.
3. Neutrofilos: Los neutrofilos son el tipo más abundante de granulocitos,
aproximadamente 40-75 % del total de glóbulos blancos. Forman una parte esencial del
sistema inmune innato.
Se forman a partir de células madre en la medula ósea. Los neutrofilos pueden
subdividirse en neutrofilos segmentados y neutrofilos unidos.
Tienen un tamaño aproximado de 10-12 µm, con un núcleo multilobulado. Sus gránulos
son finos y ligeramente rosados en presencia de tinción.
neutrófilos, basófilos y eosinófilos tienen gránulos que son diferentes en tamaño y color
cuando se observan al microscopio.
Se distinguen tres tipos de gránulos que pueden ser distinguidos por los distintos
componentes que contienen. Nombrados por el orden de aparición en las células
progenitoras de la médula ósea son los siguientes: primarios o azurófilos, secundarios o
secretorios o específicos y terciarios. Los gránulos primarios o azurófilos son lisosomas
que contienen las enzimas necesarias para la digestión intracelular y diversos
compuestos con actividad bactericida (fosfatasa ácida, arilsulfatasa, ß-galactosidasa, ß-
glucuronidasa, lisozima, mieloperoxidasa, proteínas catiónicas), los gránulos
secundarios o específicos contienen lisozima, proteasas neutras (colagenasa), fosfatas
alcalina y lactoferrina. Y por último los gránulos terciarios o de gelatinasa.
Glóbulos rojos (eritrocitos). Transportan oxígeno desde los pulmones al resto del
cuerpo.
Glóbulos blancos (leucocitos). Contribuyen a combatir infecciones y asisten al proceso
inmunológico.
Plaquetas (trombocitos). Colaboran en la coagulación sanguínea.
En la médula ósea se encuentran las células madre, donde se desarrollan para dar lugar a
determinadas células sanguíneas como:
Los glóbulos rojos (o hematíes), que son los responsables de transportar el oxígeno a los
diferentes órganos del cuerpo.
Los glóbulos blancos (o leucocitos), cuya misión es proteger al cuerpo de las
infecciones.
Las plaquetas (o trombocitos), encargadas de la coagulación de la sangre para evitar
hemorragias en caso de producirse heridas.
Cuando la médula ósea funciona con normalidad, las células madre viejas se
reemplazan por células nuevas, que maduran dando lugar a los glóbulos blancos, los
glóbulos rojos o las plaquetas. Sin embargo, cuando existe algún trastorno en la médula
ósea, este proceso puede verse alterado y provocar diferentes patologías hematológicas
como:
Leucemia, en la que la médula ósea produce glóbulos blancos anormales.
La anemia aplásica, en la que la médula ósea no produce glóbulos rojos.
Otras enfermedades como el linfoma, en las que los linfocitos, originados a
partir de las células madre y radicados en los ganglios linfáticos, pueden
diseminarse a la médula ósea y afectar la producción de células sanguíneas.
Enfermedades mieloproliferativas, en las que las células de la médula ósea
proliferan o crecen en exceso y de forma incontrolada.
17~ ¿Cuales son los precursores de las distintas células sanguíneas que se
obvservan en la médula ósea (formas inmaduras)
Progranulocit
Eritoblasto Linfocito Megacariocito
o
Celula en Celula en la
Celula en Plaquetas o
Reticulocito banda banda
banda basofila trombocitos
eosinofila neutrofila