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Buena noticia
Susurradores de Dios
Un pequeño momento para acoger la presencia del Espíritu, reconocer que nos habita…
(momento de silencio)- música suave)
En medio de lo que vivimos a veces es difícil escuchar el susurro de Dios… las prisas, lo urgente,
lo inmediato, el drama, lo que sale bien, lo que sale mal, las risas, los silencios, las miradas, el
ruido político, el económico, la educación, el covid, las familias, los enfermos, los sanos, la
saturación, el vacío… y en medio de eso… siempre hay una brisa suave… un presencia que habita
en medio e invita a la esperanza y es buena noticia
―Sal y ponte delante de mí, en la montaña, pues voy a pasar por aquí —le dijo el
SEÑOR. En ese momento, sopló un fuerte viento que azotó las montañas. Era tan terrible
que hacía añicos las rocas y partía las montañas, pero el SEÑOR no estaba en el viento.
Después del viento hubo un terremoto, pero el SEÑOR no estaba en el terremoto. Y
después del terremoto hubo fuego, pero el SEÑOR no estaba en el fuego. Y después del
fuego se oyó un susurro suave y apacible. Cuando Elías lo oyó, se cubrió el rostro con
el manto, salió y estuvo parado a la entrada de la cueva. Y una voz le preguntó: ―¿Por
qué estás aquí, Elías? (1Re 19, 11-13)
hermosa
ver
de
ojos