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Homenaxe ó

Banquete Democrático
de Conxo de 1856 (no
161 aniversario) e ós
seus bardos (Eduardo
Pondal, Aurelio
Aguirre e Luís
Rodríguez Seoane)
161 aniversario do Banquete de Conxo

Conferencia de Xesús Alonso


Montero (Presidente da RAG) no
IES Castelao de Vigo o 2 de marzo
de 2017.
Departamento de Lingua Galega e Literatura e EDLG
02/03/2017
Homenaxe ó Banquete Democrático de Conxo de 1856 (no 161 aniversario) e ós seus bardos
(Eduardo Pondal, Aurelio Aguirre e Luís Rodríguez Seoane)

Conferencia de Xesús AlonsoMontero (Presidente da RAG)

no IES Castelaode Vigoo 2 de marzo de 2017.

Programa (con textos)

Un feito relevante (e moi rechamante) nos inicios da concienciación democrática en


Galicia

1. Data: 2 de marzo (domingo) de 1856


2. Escenario: a carballeira de Conxo (nas aforas de Santiago)
3. Os poetas do Banquete: Eduardo Pondal (1835-1917), Aurelio Aguirre (1833-1858),
Luis Rodríguez Seoane (1836-1902)
4. Estudantes universitarios e artesáns dos obradoiros de Santiago. Tamén patróns?
5. Unhas cen persoas.
6. O xantar servido, de frac, polos estudantes.

II

Escolma de versos dos poemas (“brindis”) lidos no Banquete

1. Eduardo Pondal (21 anos): 64 versos (8 oitavas reais)


[...]
Y brindo por el pueblo soberano,
y a quien acate, libre como el viento,
el vuelo del humano pensamiento.
[...]
Campeones de Dios, sabio y clemente;
iguales os formó naturaleza;
[...]
Decid: ¿quién hizo al hombre diferente
de su hermano? ¿Quien dio mayor nobleza
al corazón de un déspota tirano
que al honrado sudor del artesano?
[...]
¿Hay razón a que uno esté gimiendo
y duerma el otro en el dorado lecho?
[...]
¿Quién es tu juez, oh pueblo? No tu hermano:
tú eres de tí mismo soberano.
[...]
Caiga, pues, esa turba de reptiles
que ostenta con orgullo sus blasones:
písalas todas cual gusanos viles:
queme el fuego sus necias distinciones,
[...]

2. Aurelio Aguirre (23 anos): 80 versos (10 oitavas reais)


[...]
...no ha nacido para esclavo el hombre.
[...]
Todos hijos de un padre hemos nacido
y es mengua el privilegio de la cuna:
honra da la virtud, no el apellido,
ni el halago de próspera fortuna.
Cristo es hijo del pueblo.El ha querido
que la familia humana fuese una,
[...]
Al nacer de un humilde carpintero,
desnudo en un portal, lección sublime
ofrece de igualdad al mundo entero.
[...]
Déspotas insensatos de la tierra
temed, temed el día tremebundo
en que gritando “¡Libertad y guerra!”
se estremezcan los ámbitos del mundo.
Temed, temed; al pueblo no le aterra,
cuando rompe sus frenos iracundo,
la necia pompa y esplendor del trono...
Todo lo vence al fulminar su encono.
[...]
Y vosotros ¡oh turba envilecida!
que arrastráis indolentes vil cadena,
jornaleros, esclavos y mendigos,
venid a ser de la verdad testigos.
[...]
Harto, pueblo leal, hemos sufrido:
fue vergonzoso sufrimiento tanto...
Si dignos de otra suerte hemos nacido,
alcemos de una vez el grito santo,
y que suene el cañón... Yo a su estampido
libre y guerrero entonaré mi canto,
y os llevaré con él a la victoria,
o a morir en la lid, pero con gloria.

3. Luís Rodríguez Seoane (20 años): 44 versos (11 serventesios)


Un brindis me pedís?... Hubo una idea
pura al nacer que se adornó de gracia,
y como el soplo del eterno crea
otro mundo de luz: la democracia.
[...]
Do se introdujo el Evangelio sabio,
despavorida huyó la servidumbre.
[...]
Tú llevarás ventura a los hogares,
y al corrompido mundo la armonía:
Pobre bardo, te ofrezco mis cantares,
pobre bardo, a ti doy mi idolatría.

III
A repercusión dun feito tan insólito

1. Crónica anónima no periódico vigués La Oliva (nº 11, 8-3-1856).


Por no dejar pasar desapercibido otro de los hechos que dan gloria a la
juventud que trabaja la senda del progreso en nuestra patria, debo manifestaros lo
ocurrido en una comida de campo, de jóvenes liberales y de virtud, y contra la que
tanta saña han desprendido los partidarios del oscurantismo que por tanto tiempo
nos ha nublado el hermoso sol de la libertad.
Cierto número de estudiantes han proyectado un convite en el campo con
los laboriosos artesanos de esta poblacion que debia tener lugar el domingo dos
en el extenso bosque del ex-monasterio de Conjo; mas ciertas gentes, y entre ellas
los individuos de cierta malograda cofradia, han empezado á cundir las mas
absurdas especies para desunir y neutralizar el proyecto; todo fué en vano y se
estrelló contra la entereza de un centenar de jóvenes que han dado un mentis con
sus hechos á los retrógrados que atizan la discordia por todas partes.
El domingo á las dos concurrieron nuestros virtuosos estudiantes
acompañado cada uno de un artesano al convite. Antes de dar principio á la
comida salió una comisioná buscar al campo los símbolos de la libertad, como son
el laurel y la palma, con los que se adornó un hermoso targeton que ocupaba el
puesto principal de la mesa y en cuyo centro se leía la inscripcion de “ORDEN,
FRATERNIDAD”. Al sentarse se intercalaron los artesanos entre los estudiantes.
Algunos jóvenes inspirados improvisaron composiciones y brindis de general
aceptacion. Se terminó la comida con el mayor órden sin disturbio ni disgusto
alguno: esto no obstante ha llegado á nuestros oidos que las autoridades habian
tomado una aptitud anormal; sin duda por los simulados chismes de algunos que
llevando en el rostro la sonrisa de la libertad ocultan en su corazon el
emponzoñado veneno del despotismo, si esto es cierto y tambien que estuvo la
guarnicion sobre las armas, esa flor debemos á los que se llaman nuestros amigos
y correligionarios políticos.

2. Comentario, no mesmo periódico (nº 16, 6-3-1856)


Insertamos con gusto la vindicacion que los jóvenes que tomaron parte en el
banquete de Santiago nos han dirigido, pues ella es un comprobante de las
falsedades con que los hipócritas anti-liberales quieren alarmar al público, de suyo
receloso por las lecciones que recibió durante la infausta dominación de los once
años. He aquí lo que dice la hoja impresa en Santiago:
AL PÚBLICO.
Dos palabras imparciales sobre el banquete celebrado en las inmediaciones de esta
ciudad el día 2 de marzo, en contestacion á las calumnias que, ya de palabra, ya
por escrito, se esparcen con empeño.
[...]
Trátase del banquete celebrado en el bosque de Conjo, en las inmediaciones
de esta ciudad, el dia 2 del corriente mes, entre escolares y artesanos unidos en
estrecho vínculo por lazos bien conocidos. Reinó en este banquete la paz y la
armonía, no hubo el menor desliz ni la mas remota alteracion: la gravedad de que
nos han dotado siempre nuestros sólidos y severos principios morales y políticos,
no fué denigrada por el mas ligero esceso, y, en fin, el anárquico y disolvente
proyecto; la bacanal demagógica; el escandaloso nefando y criminal consorcio, se
convirtió en su realizacion en un sencillo ágape, que comenzó y terminó como
racionalmente era de esperar, en medio del órdenmas perfecto, sin alardes ni
tumulto. Las circunstancias que por doquiera nos rodeaban, las mismas calumnias
con que se nos abrumaba hiriendo cruelmente los nobles afectos de nuestros
corazones ha hecho prorrumpir en amargos acentos á algunos de los concurrentes,
cuyas composiciones se han impreso para quitar lugar á dudas: pocas palabras mas
han salido entonces de nuestros labios, y esas sirvieron solo á recordar nombres
gratos á nuestros corazones, nombres que simbolizan las verdaderas glorias
nacionales, las mas brillantes páginas de la historia de la humanidad, lumbreras de
la Ciencia, del Arte, de la Religion, si, de esa misma religion cuya posesión nos
niegan.
Inconcebible parece que personas de algún criterio y hombres que debian
consagrar sus plumas a difundir la ilustracion por medio de la prensa, traten de
estraviar la opinion pintando siempre con los colores mas negros, los hechos mas
inocentes y sencillos: pero á bien que el espíritu de partido arrastra muchas veces
á los hombres á rebajar su dignidad, empleando sus mas preciadas y nobles
facultades en funciones incompatibles con la honradez y la virtud, que por
doquiera, se escarnecen. En fuerza de la costumbre, ahora como siempre, no
podiamos esperar otra cosa; pero las circunstancias del hecho en que nos
honramos de haber sido actores, parecían ponernos á salvo de la calumnia, tanto
mas cuanto que, habiendo levantado ya esta su asquerosa cabeza antes de la
realizacion del hecho, quedó enteramente derrotada y abatida cuando el proyecto
llegó á su entero cumplimiento: nuestras conciencias tranquilas de nada nos
acusaban... empero, salieron fallidas nuestras esperanzas.
Pues bien, este hecho tan sencillo en sí, ha sido comentado, analizado y
desfigurado de mil maneras por algunos periódicos bastante desacreditados por
ventura, ya de las provincias gallegas ya de la Córte. Nada se ha perdonado para
hacer caer sobre nosotros la vergüenza y el ludibrio. Con inoportuno y ridiculo
aparato de erudicion en una parte, con insulsas gracias en otra, se han
tergiversado los hechos mas claros, se han alterado las palabras mas terminantes
se han supuesto otras que ni siquiera han existido; hase llegado, en fin, á censurar
fuertemente la conducta de personas que, no ya por la posicion oficial que ocupan
como autoridades, sinó por sus condiciones personales, eran dignas, á la verdad,
de ser tratadas con mas respeto y consideracion que el que con ellas han tenido
esos declamadores eternos del orden y la autoridad.
Hubiéramos guardado sin duda un despreciativo silencio, si no se hubiera
hecho mas que insultarnos; pero se trata ya de intereses mas trascendentales que
nuestra honra personal, que está ya bastante á salvo por fortuna, y de ninguna
manera podriamos dejar pasar sin contestación tan torpes calumnias...
Graves, muy graves, son los cargos que se nos hacen exornados de los
epítetos mas insultantes, indignos á fé de manchar los altos timbres de la prensa,
noble dispensador de los beneficios de la civilización. Merced á mentidas y vacias
declamaciones, hásenos convertido en ajitadores sanguinarios; falsos apóstoles de
la humanidad; destructores de los fundamentos del orden social; enemigos del
Trono, la Constituciony la Religión del Estado (tambien los latinos llamaban á la
Religion de Cristo insania, estultitia, furorisinsipientiaetc. y decian que los
cristianos estaban poseidos del odium generis humanii), á nosotros que no
respiramos mas que paz y fraternidad; á nosotros, que sean cuales fueren nuestras
ideas tenemos en mucho el respeto al órden constituido; á nosotros en fin que nos
preciamos de eminentemente católicos y sinceros apreciadores de los beneficios
que una doctrina de caridad, fraternidad y fé que es la nuestra, lleva dispensados
al mundo, y ha de dispensarle aun mientras se halle en buenas manos! Y para esto
cítanse palabras que jamas se…
[...]
Para concluir de legitimar nuestros actos, baste saber que los censores hasta
ahora conocidos, son la Estrella, la España, y el Sur de Madrid: el Faro de Vigo y el
Restaurador de Pontevedra, periódicos bastante conocidos por ventura, para que
sus alharacas constituyan una circunstancia que nos releva completamente de
defensa.
En cuanto á las ofensas personales, que tan osadamente se nos dirigen,
hasta decir, para descargo de nuestras conciencias, como buenos ciudadanos y
hombres de honor, que perdonamos tanta miseria, en gracia de la Caridad que
todos sentimos, pese á la Escelentisimaopinion de nuestros contrarios.- Los
ALUDIDOS

3. Manuel Murguía en Los precursores (1886)


[Sobre A. Aguirre]
[...]
Su influencia política no se limitaba tan solamente á la clase obrera de
Santiago; pasaba más allá y se dejaba sentir con igual intensidad entre los jóvenes
que poblaban los claustros universitarios. Gracias á su cualidad de estudiante, y
sobre todo á su condición de poeta, gozaba sobre sus compañeros y amigos de un
cierto influjo y preponderancia que no le sentaban mal y honraban sobre manera á
una juventud que asi se rendía á la superioridad de la inteligencia. Por eso le fué
tan fácil unir en un solo sentimiento y en un solo amor lo que era objeto de sus
más graves preocupaciones, organizando aquel famoso banquete de Conjo, que
tan gran notoriedad le atrajo y tanta importancia le dió á su hora, sin que él se
percibiera de ello, por más que también le haya concitado las iras de sus émulos.
[...]
No acertaron á ver -tan ciegos son siempre los intereses amenazados- que el
pensamiento que guiaba á aquellas gentes era, como hijo del corazón de poetas,
más fraternal que otra cosa. Que en la mesa y al lado de cada estudiante se
sentara un artesano, y que en un momento dado se abrazasen en prueba de
hermandad, nada significaba. Que al desfilar lo hiciesen cogidos del brazo un
artesano y un estudiante, tampoco. Cierto que los versos de Pondal y los de
Aguirre decian lo necesario, y aun algo más; pero ¡ay! las musas no sirvieron nunca
para hacer programas políticos. La obra de aquel dia tuvo, es cierto, su resonancia
y fué como un destello, pero su influencia en la vida del país hubo de ser tan
escasa, que más se le recuerda por lo que de él se dice, que por lo que de él queda.
Por sus procedimientos revelaba la infancia de los partidos liberales: por sus
consecuencias también.
En cambio sus efectos inmediatos fueron de turbación para mi amigo, pues
habiendo en su brindis llamado á Jesús, “hijo de un modesto carpintero”, no se
necesitó más para que el cielo cayese sobre él. La herejía era manifiesta y brotaba
sangre: en una ciudad episcopal debía hacer ruido y andar su camino. Se comentó
el verso, se le hizo objeto de violentas discusiones y hasta se recordó con tal
motivo el famoso folleto del obispado de Autun. Las gentes se apasionaron; por
una parte y por otra se enardecieron los ánimos, y lo que no lograron estudiantes y
artesanos, lo consiguió un pobre verso, más bien hijo de la necesidad de la rima y
de la rapidez de la improvisación, que de las creencias del poeta. El conflicto era
evidente, los buenos compostelanos casi se conmovieron, y el prelado comprendió
la necesidad de poner término á la cuestión, llamando al poeta, advirtiéndole del
error en que había caido y arrancándole una ratractación que dejase las cosas tal
como se hallaban antes del 2 de Marzo. A no ser así, qué se diría? Aurelio acudió á
la cita; mas al entrar en el Palacio tropezó con el secretario, tambien de piel de
Obispo y á las primeras palabras que cambiaron la cuestión tomó un giro tan
desagradable, que á poco compromete la obra de conciliación intentada. En
presencia de aquel joven, que por lo desmedrado y enfermizo parecía más niño de
lo que era en realidad, creyó el buen dominico que los argumentos estaban de más
y que los gritos no estorbaban. Encerróse con él en un aposento y estuvo muy á
punto de tratarle como dómine irritado. El a fustibus et arguendisde las escuelas le
parecía más del caso, que no discutir con un muchacho que á leguas se veía que en
cuestiones teológicas era imperito. ¿Qué efecto, habían de hacer en su ánimo
argumentos sacados de los libros del Angel de las escuelas? Para Aguirre el mejor
teólogo del mundo era Lamennais; Las palabras de un creyente el más profundo de
los libros religiosos. Famosa controversia la que él podía sostener con un discípulo
de Santo Tomás!
La oportuna intervención del prelado puso fin á la escena. Era el obispo
aquel, ya que no un grande hombre, al ménos un buen corazón. Comprendió de
golpe lo que había de infantil en el fondo del asunto, y ganado de la simpatía, trató
sériamente de atraerse al poeta, de convertirle y arrancarle una profesión de fe.
[...]
[Sobre E. Pondal]
Fué en una hermosa mañana y bajo los árboles que brotaban, cuando se
reunieron y sentaron á la mesa los jóvenes á quienes animaba la nueva idea y que
creian en sus milagros. Todo era allí, como si dijéramos, primaveral, y venía á la
vida. La misma musa que debia hacer sagrado aquel dia y aquel acto, era nueva y
se dejaba oir por primera vez. A su alrededor no habia viejo más que el monasterio
que tenianá su espalda, como un testigo del pasado que se hundía y dejaban
detrás los alegres convivas. Realizóse entonces el milagro de que en aquella ciudad
muerta, y á la voz de dos niños, se levantase el proletariado, eterno Lázaro, que
rompiendo las losas del sepulcro y despojándose de su blanca mortaja, respiraba al
fin con todos sus pulmones el aire de libertad que pasaba lleno de perfumes, bajo
las ramas que les cubrian y sobre las corrientes del rio que les enviaban sus frescas
emanaciones.
Fiesta inolvidable que recuerdan como un dulce sueño, cuantos asistieron á
ella!
Y sin embargo, suprimid en aquel banquete los versos de Pondal y de
Aguirre, olvidad que allí se manifestaron dos poetas, y nadie los recordaría, a pesar
de sus abrazos, de las canciones y de las esperanzas que á todos animaban.
Estarían en aquellas sombras en que se sepultaron otros de mayor alcance y
trascendencia. ¡Oh posteridad! Vengadora Némesis, cuán bien hacen los que á tí
apelan de la ingratitud y desvíos de su tiempo!Qué poco tarda tu justicia!En dónde
están los notables de aquel día?Cuánto duró su obra?Nada!fué efímera y estéril
como ellos lo fueron.

YA ROMPE NUESTRA AURORA Y CENTELLEA,

dijo Pondal en tan solemne ocasión, con profético acento, aunque ignorando que
no era aquella la aurora de la democracia, sinó la de un nuevo dia; el del poeta por
completo al servicio de la pátria gallega. Bajo aquellas frondosas alamedas, más
verdes y más risueñas que las del viejo Parnaso, la nueva musa se desposó con su
pueblo, ciñéndose su primera corona. Porque pasaron los años y los sucesos y
hasta los hombres, y empezó á comprenderse que había que intentar en Galicia
algo más noble y trascendental que proclamar una idea y levantar una clase, que
habia que formar una pátria.

[...]
4. Eugenio CarréAldao en El Eco de Galicia (Buenos Aires, 10-3-1900)
“En el 44 aniversario”
El cuerpo escolar compostelano, que siempre se significó por su amor al
progreso y a la libertad, quiso en aquella época en que el espíritu democrático
hacía su aparición en España, consagrar las nuevas ideas, y al efecto celebró en el
bosque de Conjo, un ágape en honor al cuarto estado. A él asistieron un patrono y
dos oficiales de cada uno de las artes y oficios, invitados al efecto por los
estudiantes, quienes de toda etiqueta, sirvieron a la mesa a los representantes del
proletariado. Entre el brillante cuerpo escolar de aquel tiempo figuraron en dicho
banquete Aguirre Galarraga, ilustre poeta, muerto prematuramente, para
desgracia de las letras patrias; Rodríguez Seoane (D. Luis), que es hoy una de las
ilustraciones del profesorado universitario de Compostela; Víctor Salustio
Alvarado, que fue Gobernador de Lugo; Gaspar Rodríguez, Diputado en varias
legislaturas; Valentín Moreno, actual Magistrado, y otros muchos que descollaron
después en las ciencias, letras, foro y política.
Al regresar, ya anochecido, a la ciudad los comensales, como quiera que
dicho banquete había sido objeto de grandes comentarios y habladurías, y hasta el
entonces Cardenal-arzobispo, Sr. García Cuesta, había desde el púlpito
anatematizado a los organizadores del banquete, diciendo que incitaban a la lucha
del pobre contra el rico, todos los paseantes de la Alameda de Santiago, que como
día festivo estaba concurridísima, huyeron a la desbandada poseídos del mayor
terror por haber cundido la falsísima especie de que, los obsequiados con el
banquete, venían a mano armada sobre la población, dispuestos a cometer toda
clase de excesos. Hubo carreras, sustos, desmayos, cierre de tiendas y casas y todo
el cortejo obligado en días de alarma y sobresalto.
En el banquete se pronunciaron elocuentes e intencionados brindis, por
Aguirre, Pondal y otros. A continuación tenemos el gusto de poder ofrecer a
nuestros lectores la hermosísima improvisación de Eduardo Pondal, entonces de
edad de dieciséis a diecisiete años, y que tan alto renombre había de alcanzar poco
más tarde, en la literatura gallega, donde es astro de primera magnitud.
El brindis de Pondal va conforme fue escrito en aquel día, con las
incorrecciones propias de quien empezaba su carrera literaria.
Por consecuencia del banquete y de los brindis pronunciados entonces, la
reacción se demostró en toda su desnudez, y al acto de los estudiantes se le
pretendió dar un gran alcance político, estando expuestos a ser deportados a las
Marianas, Aguirre, Pondal y Rodríguez Seoane, quienes no sufrieron el destierro
gracias a la entereza y patriotismo del Fiscal de Santiago, el anciano gallego D. Juan
Carballo, que contestó al Fiscal de la Audiencia territorial, señor La Bastida, no
haber motivo para tanto rigor, y que él se oponía a tan excesiva pena. También el
entonces diputado señor Ruiz Pons se puso del lado de la justicia, y evitó que los
escolares fuesen castigados injustamente, pues no hacían más que seguir la
política que imperaba por aquel tiempo.
El acto tuvo gran resonancia en toda España, y la prensa de aquella época
reseñó detalladamente lo ocurrido entonces.
Al conmemorar hoy este aniversario rendimos un tributo de admiración a
los estudiantes gallegos, que, antes como ahora, sin olvidar los estudios, son
siempre paladines de las causas justas, y en ellos está encarnado el espíritu de la
patria y de ellos debe esperar su redención.

5. E. CarréAldao (1917)
Fué organizado este banquete por los estudiantes de la Universidad de
Santiago, quienes, dando muestra de su amor al progreso, quisieron, en aquella
época en que el espíritu democrático hacía su aparición en España, consagrar las
nuevas ideas celebrando en el bosque de Conjo una fiesta en honor d ela clase
trabajadora.
Asistieron al acto un patrono y dos individuos de cada oficio, invitados al
efecto por los estudiantes, que vestidos de frac, sirvieron a la mesa a los
representantes del proletariado.
En el banquete se pronunciaron elocuentes y fogosos brindis, siendo los de
Pondal y Aurelio Aguirre, considerados como verdaderamente revolucionarios, por
lo cual, ambos estudiantes, fueron procesados por la Audiencia d ela Coruña, y a
no ser por la oposición del fiscal de Santiago, que informó que no había motivo
para tanto rigor y que se opondría a toda clase de castigo, no fueron deportados a
las islas Marianas.
El acto tuvo gran resonancia en toda España, y en la prensa de la época
puede verse la reseña detallada de lo ocurrido entonces.

III
Algunhas observacións sobre os textos lidos, sobre a reacción das autoridades e da
xente compostelá, sobre as calumnias, sobre algúns protagonistas...

1. Aurelio Aguirre, o verdadeiro organizador? Autor do verso máis litixioso:


Cristo es hijo del pueblo...
[...]
Al nacer de un honrado carpintero.

2. Para os partidarios do Banquete: “el hermoso sol de la libertad”

3. Para os detractores: “bacanal demagógica”, “agitadores sanguinarios”, “enemigos del


Trono, la Constitución y la Religión del Estado” *
*“también los latinos llamaban a la Religión de Cristo insania, estultitia... y
decían que los cristianos estaban poseídos del odiumgenerishumani”.
Entre os xornais contrarios, o Faro de Vigo.

4. Para Murguía: “...en aquellaciudadmuerta, y a la voz de dos niños se [levantó] el


proletariado...” *
O Banquete, totalmente alleo ó Manifesto (ó Manifesto por antonomasia): o
ManifestderKommunnistichenPartei(Londres, 1848) de K. Marx e F. Engels.
Distorsionaba o espírito do histórico Xantar o cardeal García Cuesta cando,
desde o púlpito, dixo que os asistentes “incitaban a la lucha del pobre contra el rico”.

5. O cristianismo dos poetas, na liña de Lamennais?

6. Problemas para os poetas que, finalmente, non foron desterrados ás illas Marianas.

7. Unhas palabras de Murguía de 1885 que cómpre ter moi en conta: “Porque pasaron
los años y los sucesos y hasta los hombres, y empezó a comprenderse que había que
intentar en Galicia algo más noble y trascendental que proclamar una idea y levantar
una clase, que había que formar una patria”.

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