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“Cuando el modernismo se pregunta: ‘¿quién conoce qué?, ¿cómo lo conocen y cuán confiable
es este conocimiento? (…) el posmodernismo- se pregunta ¿cuál mundo es éste? ¿qué se debe
hacer con él? ¿cuál de mis yos tiene que ver con él?” (2003: 10). Traducción propia
A fin del siglo XX el ocaso del Posmodernismo comienza a ser considerado un
hecho. Según Robert Rebein (2009) “como eje estético, el posmodernismo se
institucionalizó y se convirtió en un tipo de literatura de la academia, por la academia y
para la academia” (loc942). Es así como, a comienzo de la última década del siglo,
aparecen los primeros artículos académicos que se preguntan sobre lo que vendrá
después del posmodernismo3 y postulan que éste ha perdido su lugar preponderante en
el mundo de la cultura y el arte. ¿Habrían dejado de imperar la “era del vacío”
(Lipovetsky ,1979) y se habrían vuelto a revalorizar las “Narrativas Maestras”? ¿La
tecnología, foco de las pesadillas distópicas de posguerra, había ganado la batalla? ¿El
hombre ¨cool¨ se había convertido en el hombre social?
A modo de respuesta basta considerar como la tecnología, la informática y las
comunicaciones, que fueran metáfora del caos, la incomunicación y la alienación en la
literatura posmoderna, parecen ser celebradas en un nuevo mundo globalizado y
organizado alrededor de las redes sociales. En la actualidad, la conectividad y la
tecnología resultan, en ciertos ámbitos, sinónimo de orden y organización. La
tecnología, la informática y las comunicaciones que fueran metáfora del caos, la
incomunicación y la alienación en la literatura posmodernista parecen ser celebradas en
un nuevo mundo globalizado y organizado alrededor de las redes sociales, que
revolucionaron los patrones culturales y sociales.
Por otro lado, ¨toda revolución artística se mantiene por un lapso de tiempo, y
es, inevitablemente, sucedida por un nuevo clima artístico generado por escritores que
no comparten el entusiasmo de grupos anteriores, y que están ansiosos por
definirse/diferenciarse como artistas¨ (en McCaffrey: s/p) Estos últimos son los
escritores nacidos en Estados Unidos a partir de la década del ’70, quienes sintieron la
necesidad de diferenciarse del legado del posmodernismo y sus representantes. Como
parte de este grupo, David Foster Wallace, aunque agradecido a la herencia de sus
“padres posmodernos” (en McCafferry, s/p), sentenció que el “parricidio” era la única
manera de fundar una nueva expresión artística.
Agrega Wallace diversas características de la estética posmodernista fueron tomadas y
naturalizadas por los mass media y la publicidad.
2
Todos los textos citados, salvo el de Marisa Gómez, son traducción propia del inglés. Por
“Loc” nos referimos a “Locación” en el libro electrónico.
3
Un hito fue el “Primer Seminario de Estudios Culturales”, realizado en Stuttgart en 1991,
titulado “El fin del posmodernismo: nuevos rumbos”.
La ironía, el anarquismo, y la auto-referencialidad que caracterizaron al
posmodernismo fueron absorbidos por la cultura comercial
estadounidense, con pésimas consecuencias para la estética
posmoderna4… [desde los ‘80] la televisión ha ido absorbiendo
ingeniosamente, homogeneizando, y representando la misma estética
cínica posmoderna, por lo tanto, llevándola a la decadencia” (182)
Sumado a eso, Brooks y Toth hacen referencia a hitos históricos que marcan el
¨deceso¨ y el surgimiento de diferentes dominantes culturales. Dado que el
posmodernismo se define entre otras características por la oposición a los impulsos
utópicos, el surgimiento del posmodernismo se fundaría en el hito histórico de la caída
del muro de Berlín. Brooks y Toth declaran que el ocaso del posmodernismo y el
nacimiento de una nueva dominante cultural van de la mano de otra ¨caída¨, la de las
torres gemelas en la ciudad de Nueva York en 2001. La hipótesis de Brooks y Toth
sostienen que ¨una cultura que demanda un sentido empático de ¨indignación moral¨ no
parece ser reconciliable con un sostenido rechazo de metanarrativas y una demanda de
experimentación estilística. ¨ (1) Entendemos que se refieren a la metanarrativa del ¨eje
del mal¨, que construyó un imaginario social que influyó la cultura estadounidense.
Resumiendo, los importantes cambios en patrones sociales, la canonización del
posmodernismo en la academia (que le hizo perder su capacidad provocadora), y el
inevitable patrón de quiebres y decadencia de las dominantes culturales de una época,
han generado la discusión sobre la continuidad o no de la posmodernidad.
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¨Toward a concept of Postmodernism¨
posmodernista con sus privilegios estilísticos y su metaficción ostentosa, a otra que
habilita trabajos mejor fundados, conectados a tierra y responsables” (7).
Paralelamente, se enuncian otras posturas que no consignan el fin del
posmodernismo sino su transformación, por caso, en un Posmodernismo Humanista
(Mary K. Holland) que se acerca a los postulados pre-posmodernos, propios de las
vanguardias de principios del siglo XX.
La literatura hoy sigue siendo posmoderna en su concepción de la cultura
y el mundo del que emerge, y sigue siendo posestructuralista en su
concepción de la arbitrariedad y los problemas del lenguaje, y aún así usa
el posmodernismo y el posestructuralismo con fines humanistas que
generan empatía, lazos comunitarios, preguntas éticas políticas y …
significados que vale la pena comunicar (17)
¿Retorno al realismo?
Uno de los temas controversiales en relación al post-posmodernismo es la
posibilidad que la literatura del siglo XXI implique un retorno a estéticas pre-
vanguardias como el realismo. Robert Rebein10 , Brooks y Toth, así como López y
Potter11. Para Rebein todas las estéticas post-1970 son parte del post-postmodernismo.
De tal suerte, celebra estos cambios de paradigma que se objetivan en tendencias
literarias diversas como el minimalismo, el realismo sucio 12, la literatura de frontera, la
literatura local y la literatura de prisión.13 Considera que
Los avances más significativos en la literatura de fin de siglo XX
son la revitalización del realismo, la renovada importancia del concepto
de lugar, y la expansión de nuestras ideas tradicionales de autoría…[el
neorrealismo es] más o menos tradicional en su tratamiento de los
personajes, periodístico en su descripción del medio y del tiempo, pero
es, a la vez, consciente sobre el lenguaje y los límites de la mimesis.”
(Loc 260-292)
La emergencia de un tipo de realismo que surge, según Brooks y Toth (2007)14, a
mediados de la década del ‘80 en oposición tanto a las formas tradicionales de realismo
como a los dispositivos metaficcionales del posmodernismo. No es casual que se
remitan a ese momento histórico, ya que coincide con la publicación del ¨Manifiesto
para la nueva novela social¨ de Tom Wolfe (1989), donde predijo el futuro del género:
10
Una singularidad en Rebeinn es que Rebein parte de una muy personal periodización del
posmodernismo, al que considera en declive desde el año 1970
11
También debemos sumar al escritor estadounidense David Foster Wallace a esta discusión.
12
El llamado realismo sucio, cuyos representantes son Raymond Carver, Tobias Wolf, Cormac
McCarthy, entre otros tomó esa denominación en Inglaterra luego de que en 1983 Bill Buford,
editor de la revista Granta le adjudicara ese nombre a lo que en EEUU se había comenzado a
llamar minimalismo.
13
Incluye además la literatura chicana y latina en EE. UU. Consideramos que el autor hace
generalizaciones demasiado abarcativas y que solo pueden amalgamarse en una misma
categoría por simultaneidad cronológica.
14
Este último es especialista en la materia del post-posmodernismo y autor de Passing
Postmodernism: a Spectroanalysis of the Contemporary (2010), libro en el que indaga sobre la
cuestión en los campos de lo social y económico, tomando como punto de partida el trabajo de
Fredric Jameson.
El futuro de la novela de ficción estaría en un realismo altamente
detallado basado en el reporte, un realismo más profundo que ninguno
que se halla intentado en el momento, un realismo que mostraría al
individuo en relación íntima e inextricable con la sociedad a su alrededor.
(50)
Bibliografía
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https://www.google.com/search?ei=1zKxW-
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e+new+social+novel+manifesto&gs