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Tema 13
DEFORMACIÓN PLÁSTICA IV. CONFORMADO DE CHAPA
13.1 Introducción
En estos últimos años el conformado de chapa fina, por diversos procedimientos, ha adquirido
un notable desarrollo debido a la extensa variedad de aplicaciones en la fabricación de piezas
[Figura 13.1.] (carrocerías de automóviles, aviones, aparatos electrodomésticos, ordenadores,
muebles para oficinas, etc.).
13.2
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
La mayoría de los procesos se realiza en frío, excepto cuando el material es grueso, frágil o
la deformación es significativa. Las características fundamentales que proporcionan a estos
productos su importancia industrial son:
a) Economía de la fabricación de las piezas de chapa por estampación en frío (para
grandes series).
b) Uniformidad de las características mecánicas obtenidas de las piezas (no existe
transformación térmica).
c) Excelente acabado superficial de las piezas.
d) Elevada resistencia mecánica.
Los espesores de trabajo se encuentran en el intervalo 0,4 mm a 6 mm, aunque podemos
encontrarnos espesores más pequeños. Cuando es mayor de 6 mm se llama placa en lugar
de chapa.
Las condiciones que deben cumplir las chapas de los metales y aleaciones, para obtener los
mejores resultados en el conformado de chapas en frío, son las siguientes:
1. Sus superficies no han de tener marcas ni defectos.
2. Espesor uniforme.
3. Características uniformes del material.
De entre todos los materiales utilizados en la fabricación de piezas, los más empleados en el
conformado en frío son la chapa de acero, la chapa de aluminio y la chapa de latón.
Las tres grandes categorías de los procesos de chapa metálica son las siguientes [Figura
11.1.]:
a) Operaciones de corte: Obtención de piezas más pequeñas o de algún elemento o
forma definida
b) Doblado y curvado: Deformación del material alrededor de un eje
c) Embutido: Transformación de chapa metálica en piezas de geometría determinada
La primera se usa para obtener piezas más pequeñas, para obtener algún elemento o hacer
alguna forma en la pieza de trabajo. Las restantes se realizan para transformar chapas en
piezas de geometría determinada.
13.3
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
(b)
Entre la matriz y el punzón ha de existir un juego para que las dos líneas de fractura se
encuentren (matriz y punzón) y la separación sea limpia. Si se aumenta la separación, el
material tiende a adherirse a la matriz más que a ser cortado, originándose rebabas mayores.
Si es demasiado pequeña, la fractura es peor y se necesitan fuerzas excesivas. Generalmente
oscila entre 0,05 y 0,10 del espesor de la chapa a cortar, aunque si los materiales sonduros y
las láminas gruesas, se requerirán mayores holguras.
13.4
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
Los dos métodos más usados son el doblado en V [Figura 13.4.(c)], realizado con punzón y
apoyo en V y el doblado de bordes [Figura 13.5.(e)], ejecutado mediante un mazo deslizante.
Cuando se ha de obtener una pieza doblada, hay que partir de otra cortada en forma plana,
cuyas dimensiones deben de ser determinadas de antemano calculando su desarrollo [Figura
13.6.].
Figura 13.6. Línea neutra ("y" es la posición de la línea neutra; a, b, r se miden tras el
doblado).
Para obtener la posición de la línea neutra, se despeja "y" de: c a b r y
2
La longitud de la chapa plana coincidirá con la de la línea neutra.
13.5
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
Todos los materiales tienen un módulo finito de elasticidad, por lo que la deformación plástica
siempre va seguida de alguna restitución elástica cuando se retira la carga [Figura 13.7.]. En
el doblado, a esta restitución se le llama rebote, que puede observarse con facilidad si se dobla
una hoja metálica o de alambre, y luego se libera. La restitución o recuperación se puede
calcular en términos de los radios Ri y Rf, como:
3
Ri RY RY
4 i 3 i 1
Rf ET ET
siendo T, el espesor de la lámina. Se puede observar que la recuperación elástica aumenta al
incrementarse la relación R/T.
Por lo común, la recuperación elástica en las operaciones de conformado se compensan
sobredoblando la pieza.
13.4 Embutido
El embutido consiste en el conformado de chapas metálicas con espesores en el rango que
va desde las décimas de milímetro (material de partida) hasta los 12 mm., para hacer piezas
de forma acopada, de caja y otras formas huecas. Ejemplos de piezas obtenidas por
embutición son: latas de bebida, utensilios de cocina partes de carroceras de automóviles,
casquillos de municiones, etc.
En el proceso básico de embutido profundo, se coloca una pieza en bruto de lámina metálica
redonda sobre la abertura de una matriz circular y se mantiene en su lugar con una placa o
anillo de sujeción. El punzón baja y empuja la lámina dentro de la cavidad de la matriz,
formando una copa o depresión.
Las variables importantes en el embutido profundo son las propiedades de la hoja metálica, el
diámetro de la hoja metálica en bruto (Do); el diámetro del punzón (Dp); la holgura entre el
punzón y la matriz; el radio de transición del punzón (Rp); la fuerza de la placa de sujeción; y
el rozamiento y la lubricación entre todas las superficies en contacto [Figura 13.8.].
13.6
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
Figura 13.8. (a) Proceso de embutición (antes y después), Pieza inicial y embutida;
(b) Características del proceso de embutición
La fabricación de latas [Figura 13.9.] es una industria competitiva a nivel mundial, con casi 100
mil millones de latas para bebidas y 30 mil millones para alimentos, producidas cada año, sólo
en EE.UU. Estos contenedores son fuertes y ligeros, y se encuentra bajo una presión interna
de 0,6 MPa, de manera fiable y sin fugas. Los cuerpos embutidos se producen a partir de
numerosas aleaciones, pero las más comunes son el aluminio 3004-H19 y el acero A623
ASTM, con recubrimiento electrolítico de estaño. Las tapas de aluminio se utilizan para las
latas tanto de acero como de aluminio y se producen de aluminio 5182-H19 0 5182-H48. La
tapa no solo debe cortarse con facilidad (ranuras curvas alrededor de la pestaña), sino que
incluye un remache que se coloca en la tapa para mantener la pestaña en su lugar.
Durante la operación de embutido profundo, el movimiento de la pieza en bruto dentro de la
cavidad de la matriz induce esfuerzos circunferenciales de compresión en el reborde, que
tienden a hacer que éste se pliegue durante el proceso. Este fenómeno se puede visualizar
simplemente intentando forzar una pieza circular de papel dentro de una cavidad redonda,
como un vaso para beber. Debido a las múltiples variables involucradas, es difícil calcular
directamente la fuerza necesaria.
Es evidente que la fuerza aumenta al incrementarse el diámetro, el espesor, la resistencia y
la relación Do/Dp de la pieza en bruto. La pared de la copa se somete principalmente a un
esfuerzo longitudinal (vertical) de tensión por la fuerza de la operación. La elongación debida
a este esfuerzo hace que la pared de la copa se vuelva más delgada, y si es excesiva, puede
ocasionar que la copa se desgarre.
13.7
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
13.8
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
(a) (b)
Figura 13.10. (a) Distribución de esfuerzos en embutición; (b) defecto de borde ondulado en
embutido profundo
(a) (b)
Figura 13.11. (a) Embutido sin estirado; (b) Embutido con estiramiento (bordes del material
inmovilizados)
Es evidente que no todos los materiales son aptos para el embutido, y los que lo son (latón,
acero suave y extrasuave, Al), se pueden clasificar en función del número de fases necesarias
para alcanzar su conformado final. Los materiales al ser embutidos pierden parte de su
13.9
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
ductilidad primitiva, por ello cuando es necesario embutirlos en fases, han de efectuarse
tratamientos de recocido intermedios con el fin de eliminar la acritud y evitar agrietamientos
en estas fases sucesivas.
Las tolerancias de las piezas obtenidas se sitúan en el rango de las décimas de milímetro, y
las rugosidades oscilan entre 0,4 y 12,5 m. La lubricación es necesaria, ya que de no existir
daría lugar a esfuerzos innecesarios, calentamientos excesivos, y por lo tanto piezas
defectuosas.
En el conformado de chapa mediante este proceso, la matriz hembra se reemplaza con una
cojín de hule grueso (u otro material flexible) para conformar la chapa sobre un punzón o
bloque de forma positiva, como se muestra en la Figura 13.12. Se puede apreciar que la
superficie exterior de la hoja se protege del daño, ya que no entra en contacto con una
superficie metálica dura durante el conformado. El cojín de hule está confinado en un
recipiente de acero.
13.5.2 Hidroformado
13.10
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
Este procedimiento permite un control muy estrecho de la pieza durante el conformado y evita
los pliegues y el desgarramiento. Se obtienen embutidos más profundos que en el
convencional, ya que la presión alrededor de la membrana de hule fuerza la chapa contra el
punzón. El resultado es que aumenta el rozamiento en la interfaz punzón-chapa, que después
reduce los esfuerzos de tensión longitudinal en la chapa y, de esta forma, retrasa la fractura.
El control de las condiciones de rozamiento en el conformado con hule, así como en otras
operaciones de conformado de chapa, puede ser un factor crítico para fabricar piezas de forma
satisfactoria. También es importante el uso de lubricantes apropiados y sus métodos de
aplicación.
En el hidroformado de tubos [Figura 13.14.], el tubo metálico se forma en una matriz y se
presuriza internamente mediante un fluido. Este proceso puede formar tubos simples y
diversas formas huecas intrincadas. Las piezas fabricadas por medio de este proceso incluyen
los componentes de los escapes de automóvil y los componentes de estructurales tubulares.
Si se seleccionan apropiadamente, los procesos de conformado con hule y de hidroformado
tienen las siguientes ventajas:
a) Capacidad de obtener formas complejas
b) Formación de piezas con chapas de diversos materiales y recubrimientos
c) Flexibilidad y facilidad de operación
d) Menores daños en la chapa
e) Bajo desgaste de la matriz
f) Bajo coste de equipos
13.11
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
(a) (b)
13.12
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
Por lo general, los explosivos se utilizan para demoler edificios, construir carreteras y en
muchos otros propósitos destructivos. Sin embargo, si se controla su cantidad y forma, se
pueden emplear como fuente de energía para el conformado de láminas metálicas. Utilizado
por primera vez a principios de 1900, en el conformado por explosión, la lámina se sujeta por
una matriz y el montaje completo se baja dentro de un tanque lleno de agua. Después se
evacua el aire dentro de la cavidad de la matriz, se coloca una carga explosiva a cierta altura
y se detona la carga [Figura 13.17.].
El explosivo genera una onda de choque con una presión suficiente para dar forma a las
láminas metálicas. La presión pico (p) generada en el agua está dada por la expresión:
a
3 W
p K
R
donde K es una constante que depende del tipo de explosivo, como 21600 para el TNT
(trinitrotolueno), W es el peso del explosivo, R la distancia del explosivo a la superficie de la
lámina metálica (llamada separación), y a una constante.
13.13
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
Una estructura tipo panal consta básicamente de un núcleo de panal u otras formas
corrugadas, unidos a dos delgadas capas exteriores [Figura 13.18.]. Debido a su bajo peso y
alta resistencia a las fuerzas de doblado, las estructuras metálicas tipo panal se utilizan en
componentes aeronáuticos, edificios y equipos de transporte.
Lo más común es que las estructuras tipo panal se produzcan con Al de la serie 3000. Sin
embargo, también se fabrican con Ti, aceros inoxidables y aleaciones de Ni para aplicaciones
especiales y resistencia a la corrosión. Los desarrollos más recientes incluyen la fabricación
de estructuras tipo panal mediante plásticos reforzados, como aramidasepóxicos.
Existen dos métodos básicos para manufacturar materiales tipo panal. En el proceso de
expansión, que es el más común, primero se cortan las hojas de un rollo y se aplica un
adhesivo a intervalos (líneas nodales) sobre su superficie. Después las hojas se apilan y se
curan en un horno, desarrollando uniones fuertes en las juntas adhesivas. Por último el bloque
se corta en secciones con las dimensiones deseadas y se estira para producir una estructura
tipo panal.
El proceso de corrugado es similar al proceso utilizado para fabricar cartón corrugado. La
lámina metálica primero pasa a través de rodillos especialmente diseñados, convirtiéndose en
una hoja corrugada; después se corta a las longitudes deseadas. Se aplica adhesivo a las
líneas nodales y las hojas corrugadas se ensamblan en un bloque que después se cura.
Debido a que las hojas ya tienen forma, no existe un proceso de expansión. Finalmente, el
material tipo panal se coloca en una estructura emparedada (tipo sándwich) mediante caras
de lámina que se unen con adhesivos (o con soldadura fuerte) en las superficies superior e
inferior.
Figura 13.18. (a) Proceso de expansión; (b) Proceso de corrugado; (c) Estructura tipo panal
13.14
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
13.15
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
13.16
Deformación Plástica IV. Conformado de Chapa
Los platillos se fabrican a partir de aleaciones como el bronce B20 (80% de Cu, 20% de Sn, y
trazas de plata), bronce B8 (92% de Cu-8% de Sn), aleación de níquel, plata y latón, utilizando
diversos métodos de procesamiento. El proceso de fabricación de unos platillos de B20 se
puede reducir a [Figura 13.21.]:
1. En primer lugar, se funde el metal en lingotes con
forma de hongo, y después se enfría a
temperatura ambiente.
2. Luego se lamina sucesivamente (hasta 14
veces) con enfriamiento por agua con cada
etapa por la caja de laminación. Se tiene un
cuidado especial para laminar el bronce a
diferentes ángulos en cada pase a fin de
minimizar la anisotropía, proporcionar la
orientación preferencial del grano y desarrollar
una forma redonda.
3. Posteriormente, las piezas en bruto laminadas
se recalientan y se deforman por estiramiento
para darles la forma de copa o de campana que
determina el sonido armónico del platillo.
4. Los platillos se perforan por el centro, o se
punzonan, para crear orificios de soporte y se
recortan en una cizalla rotatoria a los diámetros
finales aproximados. Esta operación va seguida
de otro paso de estiramiento para obtener la
forma característica de “plato turco” que controla
el tono. Figura 13.21. Proceso de
5. Posteriormente se martillean para proporcionar un fabricación de platillos musicales
carácter distintivo a cada instrumento. El
martillado se puede hacer a mano o en máquinas automáticas.
6. Finalmente se efectúan varias operaciones de acabado. Esto simplemente puede
comprender la limpieza e impresión de la información para identificación.
7. Es común que los platillos se giren en un torno (en seco, sin fluido de corte) para retirar la
fuente de óxido y reducir el espesor del platillo, con el propósito de crear el peso y sonido
deseados.
13.17