Objetivos de la planificación fiscal

Dentro de los objetivos más sobresalientes en el desarrollo de una adecuada

planificación fiscal se encuentran:

Crear sistemas y políticas para que la empresa cumpla oportunamente con las
disposiciones fiscales al menor riesgo y costo justo, sobre una base de neutralidad de los
impuestos.

Prevenir al contribuyente sobre cualquier suceso o evento fiscal que ocurra y tenga
consecuencias importantes en el normal desarrollo empresarial.

Seleccionar la mejor alternativa para optar por la aplicación del régimen tributario que
permita lograr ahorros financieros y respiro fiscal.

Evitar la aplicación y el pago de impuestos innecesarios y obtener una mejor capacidad

de adaptación de la empresa a las nuevas reformas fiscales

Estar preparada para adoptar con éxito cualquier cambio de la legislación fiscal que
tenga como consecuencia una afectación o perjuicio económico.

Ventajas del utilizar planificación fiscal

Mejora el flujo de efectivo de la empresa, optimizando los recursos financieros de la

empresa, aumenta la rentabilidad de los accionistas, se crea y mantiene una cultura de
prevención, lo cual representa además del ahorro de tiempo y dinero, mayores beneficios para
la empresa, pues prevenir es mejor que corregir, se optimiza la carga tributaria, facilitando el
cumplimiento de las obligaciones fiscales en tiempo y forma, se mantiene simultáneamente
una continua revisión entre las áreas operativas de la empresa y las implicaciones tributarias
que éstas pudieran tener.

Desventajas de no utilizar una planificación fiscal

Pago indebido de impuestos, es decir, que el monto declarado no corresponde al que

realmente debió presentarse, lo cual crea posibles contingencias fiscales. Pago de impuestos
fuera de tiempo, quiere decir que al no contar con una planificación fiscal es más probable que
la calendarización del pago nos afecte de tal forma que no se presenten en el tiempo
establecido, o bien omisión de la presentación de declaraciones de impuestos, lo cual también
crea inconsistencias ante la Administración Tributaria. Elegir de manera equívoca el régimen
tributario al que la empresa le tenga más conveniencia estar y no aprovechar al máximo los
recursos de la empresa.

Para qué sirve

Una planificación fiscal le sirve al empresario como herramienta financiera, ya que su

uso adecuado puede pronosticar períodos de iliquidez en los que es necesario tomar ciertas
decisiones internas y externas dentro de la actividad mercantil o de la entidad de que se trate
para atender de manera oportuna las responsabilidades económicas pagando adecuadamente
los impuestos correspondientes.

Una planificación fiscal cuidadosa es fundamental para el éxito de los negocios en una
economía global impredecible. La planificación fiscal también es necesaria para las personas
que se enfrentan a sus propios retos de poseer, gestionar y preservar empresas y patrimonio en
un entorno normativo complejo. (David Helmer, EY Global Tax and Finance Operate
Leader,2019)