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Pádua Fernandes

cálcio

Libros
de la talita dorada
Pádua Fernandes, Antonio
cálcio / Pádua Fernandes, Antonio. - 1a ed.
City Bell: De la talita dorada, 2013.
104 p. ; 20x12 cm. - Los detectives salvajes / J. A. 15

ISBN ------------------------------------

1. Poesía Argentina. I. Título


CDD A861

Fecha de catalogación: -------------------

Los detectives salvajes / 15


Dirigida por J.A

Diseño de cubierta e interior: Leopoldo Dameno


Corrección: ...............
© 2013, J. A.
Libros de la talita dorada
Calle 471, esquina 29 Nº 3429
(1896) City Bell, Prov. de Bs. As., Argentina
Tel. (0221) 472-1429
delatalitadorada@yahoo.com.ar
www.coleccionlosdetectivessalvajes.blogspot.com
ISBN -----------------------

Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723


Impreso en Argentina

NOTA: Este libro obtuvo en 2011 el Premio Gobierno


Minas Gerais de Literatura, en la categoría poesía.
Dedico este libro a Fabio, compañero de vida,
y a Julián, hermano en la poesía.
[...] y ahora de esos jóvenes ya no queda nada, los que
no murieron en Bolivia, murieron en Argentina o en Perú,
y los que sobrevivieron se fueron a morir a México
o a Chile, y a los que no mataron allí los mataron
después en Nicaragua, en Colombia, en el Salvador.
Toda Latinoamérica está sembrada con los
huesos de esos jóvenes olvidados.

Roberto Bolaño – Entre paréntesis

Ah, si viejas gotas de sangre pudieran hablar,


como sucede en las fábulas, tal vez ellas nos
enseñarían qué hacer; pues en cada aposento de
esta casa trágica fluye una sangre instructiva

Heinrich Heine – Französische Zustände


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Prólogo

Los muertos no están a salvo

"El don de atizar en el pasado la chispa de la


esperanza no pertenece más que al historiógrafo
íntimamente persuadido de que, si el enemigo triunfa,
ni siquiera los muertos estarán a salvo.
Y este enemigo no ha dejado de triunfar"
Walter Benjamin

Un día hace ya algunos años, un poeta brasilero caminaba


por calle Corrientes, y en una vidriera de una librería halló
un libro cuyo título lo sorprendió. Compró el libro de
inmediato y al tiempo se puso en contacto con el autor. El
otro poeta buscaba voces a la distancia, intentaba entrelazar
versos como pistas perdidas en la creencia obsesiva de que
toda Latinoamérica está sembrada con los huesos de
jóvenes olvidados y sacrificados. Por lo tanto, los versos
que eventualmente pudieran juntarse, podrían tejer un
manto de amor y potencia; no solo de recuerdo. Y esa
posible textura de extraño Frankenstein no solo tendría que
trascender fronteras, sino referir a nosotros encontrados de
esa forma, bajo parecer casual; salido del fondo del agujero;
vitales y perdidos, extenuados; bajo idéntico deseo de
pesquisa, de tanteo, de futuros nuevos sueños.

Tengo el gusto de presentar la poesía de Antonio Pádua


Fernandes al lector Argentino, reedición y traducción de
Cálcio (premio Mina Gerais de poesía 2010, edit. Averno,
Lisboa-2011), libro que conjuga apuesta formal y
continuidad dentro de una línea temática ensayada en Cinco
lugares da fúria (2008). Búsqueda de la palabra que nombra
costados arrojados por el Mal, donde lo telúrico en espacio
y letra se convierte en límite que nombra cuerpo penumbra
deambulando por zonas quebradas. Búsqueda de espacio
íntimo y público latente de un pasado que es todo tiempo
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presente. En la región telúrica, Antonio convive y se mueve


cual detective salvaje. Voz que –aun cuando refiere a otra
lengua o genealogía– no evidencia corte entre tradición
Brasilera, Chilena, Boliviana o, acaso, Argentina. Si bien
podríamos escarbar parentescos con Ferreira Gullar,
Oswald de Andrade, Alberto Pimenta; Pádua Fernandes es
un poeta versátil que digiere (antropofágicamente
hablando) a toda poesía latinoamericana como para señalar
punto y lugar (podría señalar incluso a Néstor Perlongher,
quien vivió mucho tiempo en Brasil y no es lejano en
formas y contenidos con las que trabaja Antonio). Por eso
límites estaduales resultan artificiales y no tienen sentido
allí donde el suelo poético comparte trama de historias,
sueños y males. Pero principalmente cadáveres, cenizas y
fosas.

El ciclo de la materia es el ciclo de los cuerpos que se


componen y descomponen en entre la tierra y el vacío. No
hay límites bio-políticos. Los cuerpos no solo son carne y
hueso, también son silencio y palabra conservada en un
archivo. Vida y muerte del registro del horror, terror de la
vida que merece ser vivida, y la que no. Poblaciones y
pulsión de vida-muerte. El ciclo es el del germen Cálcio
envenenado por Masacres. Si existe una arché que establece
la clave de la forma del que el ciclo del Cálcio malparido
por masacres, entonces estará signado por esa secuencia.
Aun cuando se quemen los cuerpos, o los genocidios
utilicen técnicas de arrojar cadáveres NN a fosas; tarde o
temprano, el humo de ceniza carbonizada o la materia viva
es absorbidos por la tierra, viaja a los ríos y mares; está en
el aire. Es energía que reciben plantas y animales,
componen su fase química que se traslada a otros cuerpos.
Y tarde o temprano retorna a seres humanos vivos que, sin
saberlo, reciben aquella energía en sus cuerpos
(parafraseando a Baruch Spinoza: en esa inmanencia su
destino es componer sucesivos cuerpos alegres o tristes).
Cuerpos que fueron torturados y masacrados hablarán y
compondrán un futuro lenguaje dentro de nuevas
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estructuras óseas y piel de futuros cuerpos, metabolizados


en maldiciones de la que no se suele ser conscientes. La
repetición de un síntoma.

Me refiero a aquello que decía Maurice Blanchot: El


designio de la ley: que los prisioneros construyan ellos
mismos su prisión. Es el momento del concepto, la marca
del sistema.1 La prisión de los cuerpos, son los propios
cuerpos, una cárcel para la piel fabricada a partir de una
estructura ósea maldita por origen. Como dice por ahí
Antonio:… ¿y si liberásemos a las paredes / construyendo
para cada prisionero / una jaula hecha con sus propios
huesos? O dicho para la poesía latinoamericana: la prisión
de la poesía de nuestro continente serían los versos cuya
cárcel contiene el vacío de una estructura compuesta de
egoísmo y desencuentro, ante la pila de cadáveres que no
vimos o escuchamos.

La maldición del Cálcio se recicla continuamente porque


los muertos están incómodos, y todavía no están a salvo de
la antigua destrucción como seres vivos. De allí que
perpetúen la maldición. Esa es la cárcel de la comunidad, el
cuerpo como realidad política que hoy intenta acercar
fronteras y liberarse. El dialogo intergeneracional con los
muertos desaparecidos del continente es latencia; y en la
romántica que defecciona hay poetas cuyo destino es ser
médiums de la naturaleza torturada, para intentar hacer algo
con eso. Son los que tienen el don de atizar en el pasado la
chispa de la esperanza. Los que portan, o quieren un legado
mesiánico que trastoca la dialéctica de la Historia. Poetas.

Pero para atizar, hay que hurgar en quejidos, murmullos,


chasquidos de huesos espectrales que son descoyuntados en
noches infernales; y eso implica sumergirse en la memoria
poética del perpetrador biopolítico y su sueño de
exterminio. Tamaño desafío el de Odiseo circunstancial,

1. "Le dessein de la loi: que les prissioners construissent eux mêmes leur prisson.
C'est le moment du concept, la marque du système", Maurice Blanchot, L'écriture
du desastre, Gallimard, 1989, pág. 76.
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que a la vez busca registros, despliega una lengua


experiencia que tiene la capacidad de contar hurgando en la
voz-agonía de interrogatorio, confesión hálito de
condenado, escritura de máquina que escribe la sentencia
que Kafka pensó para la Colonia Penitenciaria, pero no
imaginó como secuencia fraguada al ciclo de una escritura
con huesos, ceniza y el Cálcio. Esta máquina lee la sangre
/ y escribe con huesos / 90 % del polvo se compone el
mundo…

Hay algo de la poesía de Pádua Fernádes que me recuerda a


La sonrisa de Hiroshima de Eugen Jebeleanu, quizás la
poesía que nace de los peores abismos e intenta renovar un
aire contaminado por los horrores del siglo XX, y los que
todavía siguen. De allí que para salvar a los muertos que ni
siquiera fueron reconocidos como tales, hay que salir a
buscar un habla que juegue al límite con un lenguaje
canalla, y que más tarde lo exceda fabricando el Golem
biopoético: la justicia de los elementos: La rebelión de un
cuerpo sólo hecho de fracturas. Juntar materia aleatoria en
esos retazos, el Cálcio ya no maldito, el Cálcio renovado
desde la garganta y por el toque mágico de cierta palabra
poética. Cálcio que puede batallar simientes de lo siniestro,
y de ese modo, salvar a los muertos. A las futuras
generaciones salidas de la cárcel de los propios huesos, o de
la de sus padres en algún lugar enterrados o carcomidos:
Falta la piel / que cubra los vientos / y los convierta en un
cuerpo / entero de rebelión. Una nueva piel para los huesos
de la poesía actual; la estructura ósea de una comunidad
grande biopoética, espacio de encuentro, compromiso y la
solidaridad entre los vivos de acá, y de más allá.

Quiero agradecer al poeta Aníbal Cristobo, por la


traducción de este libro. Y en especial al entrañable Fabio
Weintraub, compañero de vida y consejero de Antonio en el
recorrido de estas palabras.
Julián Axat, Marzo de 2013
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Pisando hojas secas

una caja como pierna, cartón, tres embalajes de


galletitas como dos brazos, haciendo de pelo las tapitas
de botella, hojas secas o huesos –

la cabeza como trozo de vidrio, cartón, piernas como


embalajes de compresas, en la bolsa de cal para paredes
restos de uña, codos o ventolera –

– no se formó la figura.

intercambiar los elementos;

– la figura nunca más se formará.

II

vivo o no, no va a caminar;


eso basta para las calles;

caminando o no, jamás


estará vivo;

eso basta para la seguridad.

III

copiar en la piel los agujeros del suelo;

se oyen tiros, se esconde en uno de los agujeros del


suelo;
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los tiros están más próximos

se esconde en uno de los agujeros de la piel.

IV

es santo el frío; cubre el suelo


y trae el milagro del hielo al centro del pecho.

andar bajo el hielo o andar dentro del pecho:


ningún milagro

el cuerpo también es una ciudad,


aunque él la abandone
y la trate como sudor, evaporado
recuerdo de la sal,
la ciudad jamás dejará de ser del cuerpo
así como en la arena la memoria del desierto

VI

pero la ciudad también es un cuerpo


basta cegarla para ver
que tenía ojos
basta amputarla para saber
que tenía miembros
pisotearla
y descubrir la cotización de los huesos
torturarla para oírla
lástima que no diga palabra alguna
articulada para los oídos
que esperan el punto en que los huesos cedan
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y canten con su voz seca


que todo es un cuerpo y muere

VII

caja de gaseosas, carcasa de computador, baterías


usadas, los rastros invisibles del polvo bajo la próxima
capa de tierra –

sabiduría del cartón con instrucciones, embalajes


enciclopédicos de remedios con la muerte descartados,
papel de caramelo mordido por el hambre –

el esqueleto del polvo arrastrado por la lluvia, ese que


dejó su marca fósil en la corriente de la alcantarilla –

los agujeros crean una ciudad bajo el suelo, las casas


erguidas en ella sólo de muros derruidos –

– he aquí, a la vista, todos los elementos humanos


aceptados.1

1. Pisando folhas secas: uma caixa como perna, papelão, três embalagens de biscoito
como dois braços, à maneira de cabelos as tampinhas de garrafa, folhas secas ou
ossos – // a cabeça como caco de vidro, papelão, pernas como embalagens de
absorvente, no papel de cal para muros os restos de unha, cotovelos ou ventania – //
– não se formou a figura. // intercambiar os elementos; // – a figura nunca mais se
formará. II vivo ou não, não andará; / isso basta para as ruas; // andando ou não,
jamais / estará vivo; // isso basta para a segurança. III copiar na pele os buracos do
chão; // ouvem-se os tiros, esconde-se em um dos buracos no chão; // os tiros estão
mais próximos; // esconde-se em um dos buracos da pele. IV é santo o frio; cobre o
chão / e traz o milagre do gelo ao centro do peito. // andar sob o gelo ou andar dentro
do peito: / nenhum milagre. V o corpo também é uma cidade, / mesmo que ele a
abandone / e a trate como suor, evaporada / lembrança do sal, / a cidade jamais
deixará de ser do corpo / assim como na areia a memória do deserto. VI mas a cidade
também é um corpo / basta cegá-la para ver / que ela tinha olhos / basta amputá-la
para saber / que ela tinha membros / pisoteá-la / e descobrir a cotação dos ossos /
torturá-la para ouvi-la / pena que não diga palavra alguma / articulada para os
ouvidos / que esperam o ponto de os ossos cederem / e cantarem com sua voz seca /
que tudo é um corpo e morre. VII caixa de refrigerantes, carcaça de computador,
baterias usadas, os rastros invisíveis do pó sob a próxima camada de poeira – //
sabedoria do papelão com inscrições, embalagens enciclopédicas de remédios com a
morte descartados, papel de bala mordido pela fome – // o esqueleto da poeira
carregado pela chuva, ele deixou sua marca fóssil na correnteza do bueiro – // os
buracos criam uma cidade sob o chão, as casas nela erguidas só de muros derruídos
– // – eis, à vista, todos os elementos humanos aqui aceitos.
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Memoria y fractura

No sé qué significa enterrar a los muertos;


si murieron,
no pueden escapar, están aquí.
Nada está al abrigo de la vida
sea sobre la tierra,
sea en el vientre de la piedra.

Cuando como, es para alimentarlos,


si hablo, es para oírlos
y nada oigo
excepto el hambre
que los sustenta.

La oigo
y me parece que hoy los muertos
son casi enteramente
hambre.
Por eso están aquí.

(En este continente ser humano y


simultáneamente estar vivo
¿te parece imposible hoy? Más valdría
visitar a los muertos fuera del limbo entre el fin
y el remordimiento.)
No piden otro alimento
sino su propia hambre. Les entrego
menos que eso,
el polvo
retirado de la tierra expoliada
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a los que vivieron y a quienes hoy,


a falta de mejor título,
llamamos muertos.

(Mirá la tierra abierta:


no es otra la sonrisa de este continente.)2

2. Memória e fratura: Não sei o que significa enterrar os mortos; / se morreram, / não
podem escapar, estão aqui. / Nada está ao abrigo da vida / seja sobre a terra, / seja
no ventre da pedra. // Quando como, é para alimentá-los, / se falo, é para ouvi-los /
e nada ouço / exceto a fome / que os sustenta. // Ouço-a / e parece-me que hoje os
mortos / são quase inteiramente / fome. / Por isso estão aqui. // (Neste continente ser
humano e simultaneamente estar vivo / parece-lhe hoje impossível? Mais valeria /
visitar os mortos fora do limbo entre fim e remorso.) // Não pedem outro alimento /
senão a própria fome. Entrego-lhes / menos do que isso, / o pó / retirado à terra
sonegada // aos que viveram e a quem hoje, / à falta de melhor título, / chamamos de
mortos. // (Veja a terra aberta: / não outro é o sorriso deste continente.)
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Auto de resistencia3

la sangre enseña:
los profesores
bajo cachiporras;

la sangre olvida:
en los profesores
quien ya se infiltra

es la policía
y los corredores
cambian de piel

como quien viste


todos los colores
carnicerías;

la sangre enseña
a los profesores
que no se aprende

sino en la piel:
“ya no son dolores
pero honrarías

esto que enseña


a los profesores
la cachiporra:

3. En portugués, "Auto de resistência" posee un sentido jurídico: se trata de un


documento oficial emitido cuando un sospechoso muere en un enfrentamiento con la
policía. Según diversos movimientos de derechos humanos, esos autos encubren, en
muchas ocasiones, ejecuciones extrajudiciales. (N. del T.)
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los cuerpos fiebres


transformadores
de lo que extermina

en la propia vida”
y los corredores
caen inertes

sobre los pedestres,


nos visten hoy
de ayer en día.

II.1

– Abedeefe
jotaequisele
emeteú
zetadoblevé.
– ¡Tá todo en orden!
Sólo falta el nombre
de tu trabajo.
– Esta maestría
me dio mucha hambre.
Las letras desaparecen
de norte a sur,
de la ce a la u
casi me pierden.
– Vos sos maestro
y ya podés
leer el menú.
No hinchés las bolas.
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III

Por dar mis clases,


aprendo el hambre.
El hambre enseña,
eso aprendemos.

– Es profesor,
investigador,
evaluador.
– ¿Pero trabaja?

Nada que aprender


mas que el hambre.

Así este mundo


nos alimenta.

– Para vivir,
se hizo payaso
profesional
– ¿No lo era antes?

Llamar al mundo
nuestra hambre;

ese es el alimento
que cultivamos.

IV

– Primero la bomba,
después el tiro.
– Primero el tiro,
después la honra.
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– Jamás la honra
sin enemigo.

– Iremos todos
ya recibámoslo.
– Sí, recibámoslo
con todo el fuego.
– Tomarle el fuego,
nuestro deseo.

– No basta la bomba,
si resta el nombre.
– Quemar el nombre,
si aún suena.
– Las cenizas suenan
el cuerpo del hombre.

– No basta el tiro,
si resta la lengua.
– ¿Quemar la lengua
es terrorismo?
– No. Terrorismo
es la poesía,

que dice no basta


la propia lengua.
– Quemar la lengua,
toda palabra,
pues sin palabras
nos basta la ceniza.

– Odiar la política,
amar la policía.
– Amar el tiro,
sin terrorismo.
– Para ellos, bomba.
Ellos son contras.
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II.2

– A, después be
pero nadie ve
como sigue.
– Vos sos maestro,
el doctorado
da más trabajo.
– Pero el alfabeto,
si está completo,
es muy pesado
y autoritario.
Nadie lo sigue,
ni el cedeefe.
– ¿Y serás vos
quien detendrá
la vía del te
hasta la u, el acceso
a la ve? – ¡Correcto!

(un fuego sangra:


las facultades
bajo gestión
de Seguridad;

un fuego calla:
en las facultades
nada que aprender
salvo la gestión,

que vuelve el fuego,


antes de la llama,
directamente ceniza;
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segura, la vida
administrada
aprende el frío)

– administrar
el fuego, es decir,
gestionar la ceniza.

– convertir la ceniza
en la educación
del propio cuerpo.

– convertirse en cenizas
o respirar
el propio soplo
– ¡una didáctica

por la asfixia!
– en las facultades
nada que encender
sino el frío.

(de la calle a la ley,


en cada paso
una sangre se enfría

en una ciudad
que antes unió
y ahora separa
cuerpo y deseo,

el fuego y el habla,
ya corregidos
de que hayan sido
una ciudad;
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en la ley, en la calle,
a cada paso
el frío camina)

– ¿corrupto? pero
sigue el sistema;
lo que no quisimos
es un juez de izquierda.

– corregidor
de tribunal
y profesor
cuarenta horas,

aprobó la cautelar
a las facultades
– ¿los profesores

van a aprender
bajo fuego la ley?
– pues la ley sangra.

VI

Este pueblo primitivo escribía con pasos. Para leer, sus


miembros tenían que mirar al suelo, incapaces de
trascendencia, impotentes para percibir cuándo las nubes
borrarían el discurso. Además, eran obligados a caminar
para escribir y a escribir al caminar, errancia celebrada
del sentido, esos vagabundos no podían ir lejos. En las
celdas no hay espacio para moverse, pero no confundirán
la palabra con el suelo, y el fin de la tierra con el
alfabeto, no podrán comunicar unos a los otros la
sentencia escrita en la tapa de la trampilla.
Los antiguos etnólogos (investigaban etnias, el curso de
ellos fue cerrado después de que todas las becas fueron
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dirigidas a la investigación del agua transgénica y de la


extracción aérea de cenizas para combustible) recogieron
una historia de los primitivos de que el hambre se originó
por un error de grafía, de un sendero erróneo en el
bosque. En vez de caminar hacia el sol-pez, fueron hacia
el sol-poniente, y no encontraron el camino de regreso
por culpa de un problema de puntuación, no recuerdo
bien, creo que esa leyenda surgió porque, antes del
contacto con los civilizados, la lengua de ellos no
conocía el punto final.

II.3

– A, después a,
¡sin blablabá!
Soy Secretario
y mi trabajo
en la educación
no es en vano:
el fin de las letras
llega sin tristeza.
¿Saben leer? No,
ni notarán
que el abecedario
fue borrado.
– ¿Cómo evaluar
el año escolar
si sólo queda la A?
– ¡A merendar!
¡Ah! ¡Ah! ¡Ah! –¡Epa!

VII

Bajo cachiporras.

Si amputamos la pierna,
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sobrevivirá.

Dejémoslo entero;

bautizaremos la gangrena
con el nombre del cuerpo.4

4. Auto de resistência. I: o sangue ensina: / os professores / sob cassetete; // o sangue


esquece: / nos professores / quem já se infiltra // é a polícia / e os corredores / trocam
de pele // como quem veste / todas as cores / carnificinas; // o sangue ensina / aos
professores / que não se aprende // senão na pele; / “já não são dores, / mas honrarias
// isto que ensina / aos professores / o cassetete: // os corpos febres / transformadores
/ do que extermina // na própria vida” / e os corredores / caem inertes // sobre os
pedestres, / nos vestem hoje / do ontem em dia. II.1: – Abedeéfe / jotaxiséle / emeteú
/ zedabliú./ – Tá tudo em ordem! / Só falta o nome / do seu trabalho. / – Este
mestrado / deu muita fome. / As letras somem / do norte ao sul, / do cê ao u / quase
me perdem. / – Você é mestre / e já consegue / ler o cardápio. / Não encha o saco. III:
Por lecionar, / aprendo a fome. // A fome ensina, / isso aprendemos. // – É professor,
/ pesquisador, / parecerista. / – Porém trabalha? // Nada a aprender / senão a fome.
// Assim o mundo /nos alimenta. // – Para viver, / virou palhaço / profissional. / – E
já não era? // Chamar o mundo / de nossa fome; // eis o alimento / que cultivamos.
IV– Primeiro a bomba, / depois o tiro. / – Primeiro o tiro, / depois a honra. / – Jamais
a honra / sem o inimigo. // – Iremos todos / já recebê-lo. / – Sim, recebê-lo / com todo
o fogo. / – Tomar-lhe o fogo, / nosso desejo. // – Não basta a bomba, / se resta o nome.
/ – Queimar o nome, / se ainda soa. / – As cinzas soam / o corpo do homem. // – Não
basta o tiro, / se resta a língua. / – Queimar a língua / é terrorismo? / – Não.
Terrorismo / é a poesia, // que diz não basta / à própria língua. / – Queimar a língua,
/ todas palavras, / pois sem palavras / nos basta a cinza. // – Odiar política, / amar
polícia. / – Amar o tiro, / sem terrorismo. / – Pra eles, bomba. / Eles são contra. II.2:
– A, depois bê, / mas ninguém vê / como prossegue. / – Você é mestre, / o doutorado
/ dá mais trabalho. / – Mas o alfabeto, / se for completo, / é muito chato / e
autoritário. / Ninguém o segue, / nem o cedeéfe. / – Mas é você / quem vai deter / a
via do tê / ao u, o acesso / ao vê? – Correto! V: (um fogo sangra: / as faculdades / sob
a gestão / da Segurança; // um fogo cala: / nas faculdades / nada a aprender / salvo a
gestão, // que torna o fogo, / antes da chama, / direto em cinza; // segura, a vida /
administrada / aprende o frio) // – administrar / o fogo, isto é, / gerir a cinza. // –
tornar a cinza / a educação / do próprio corpo. // – tornar-se cinza / ou respirar / o
próprio sopro. /– uma didática // pela asfixia! / – nas faculdades / nada a acender /
senão o frio. // (da rua à lei, / em cada passo / um sangue esfria // numa cidade / que
antes unira / e ora separa / corpo e desejo, // o fogo e a fala, / já corrigidos / de terem
sido / uma cidade; // na lei, na rua, / a cada passo / o frio caminha) // – corrupto? mas
/ segue o sistema; / o que não pode / é juiz de esquerda. // – corregedor / no tribunal
/ e professor / quarenta horas, // deu liminar / às faculdades. /– os professores // vão
aprender / sob fogo a lei? / – pois a lei sangra. VI: Este povo primitivo escrevia com
pegadas. Para ler, seus membros tinham de olhar para o chão, incapazes de
transcendência, impotentes para perceber quando as nuvens apagariam o discurso.
Ademais, eram obrigados a caminhar para escrever e a escrever ao caminhar,
errância celebrada do sentido, esses vagabundos não poderiam ir longe. Nas celas
não há espaço para se movimentarem, não mais confundirão a palavra com o solo, é
o fim da terra como alfabeto, não poderão comunicar uns aos outros a sentença
escrita na tampa do alçapão. Os antigos enólogos (pesquisavam etnias, o curso deles
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Permiso de demolición

en el campo
el código de paz
legislado por armas

(brea cautiva
propaga las sombras
de los palacios de la república
a las azadas de los esclavos:

– Visionaria sostenibilidad de la ceniza


de los penachos ensangrentados
a las ferias de artesanía tradicional)

los nervios roídos por la lucha


nada sentía mientras disparaba
hasta que el olor de carne quemada
lo obligó a mirar su propia mano

bajó las cejas sin pelos


y el rostro habitado por orificios nuevos
cavernas
donde el virus reconstruía el origen del hombre

vio los tacos de los dedos


todavía firmes
empuñando el fuego rupestre

foi fechado depois que todas as bolsas foram direcionadas à pesquisa de água
transgênica e de extração aérea de cinzas para combustível) recolheram uma história
dos primitivos de que a fome originou-se de um erro de grafia, de uma trilha errada
na floresta. Em vez de caminharem para o sol-peixe, foram para o sol-poente, e não
acharam o caminho de volta por causa de um problema de pontuação, não lembro
bem, acho que essa lenda surgiu porque, antes do contato com os civilizados, a língua
deles não conhecia o ponto final. II.3: – A, depois a, / sem blabablá! / Sou Secretário
/ e o meu trabalho / na educação / não é em vão: / o fim das letras / vem sem tristeza.
/ Sabem ler? Não, / nem notarão / que o abecedário / foi apagado. / – Como avaliar /
o ano escolar / se só resta o A? / – A sobremesa! / Ah! Ah! Ah! – Eta! VII: Sob
cassetetes. // Se amputarmos a perna, / sobreviverá. // Deixemo-lo inteiro; //
batizaremos a gangrena / com o nome do corpo.
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(brea cautiva
cayó sobre el día y no es noche
hizo caer la noche sin ser eclipse
sino poniente continuo,
el cielo de esta república

– Sostenibilidad sólida de la sequía


de los viejos manantiales a las nuevas represas
desagua en mi copa)

el humo dibuja en las paredes


el animal
la caza
él mismo

en el campo
el código del bosque
sembrado por cuerpos

nacen brotes
transgénicos
propagan otra cosa que ya no es la ley
y sí una orden más imperiosa
que la arena impone a los quilómetros cuadrados del sol

(cautiva brea
de los fuegos de artificio
conmemorativos de la república
encendida en la tierra ancestral
donde los muertos vivían
y están siendo asesinados nuevamente

cautiva brea
¿cómo el exterminio puede ser sostenible?
le preguntan, y apaga las luces
cuando se leería la respuesta ninguna
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– Algunos resisten con flechas o fuego,


pero la sostenibilidad está de nuestro lado:
nuestras armas tienen puntería automática)

él vio el fuego entero en los tacos de la mano


y continuó disparando
como los árboles, todavía de pie
aunque lo perforasen, como a las aguas
y preparasen
el fuego en la sierra donde el fuego se cierra

deshaciendo el origen del mundo5

5. Alvará de demolição: no campo / o código da paz / legislado por armas // (cativo


breu / propaga a sombra / dos palácios da república / às enxadas dos escravos: // –
Visionária sustentabilidade da cinza / dos cocares / ensanguentados / às feiras de
artesanato tradicional) // os nervos roídos pela luta / nada sentia enquanto atirava /
até que o cheiro de carne queimada / obrigou-o a olhar para a própria mão // baixou
as sobrancelhas sem pelo / e o rosto habitado por orifícios novos / cavernas / onde o
vírus refazia a origem do homem // viu os tocos dos dedos / ainda firmes / a
empunhar o fogo rupestre // (cativo breu / caiu sobre o dia e não é noite / fez cair a
noite sem ser eclipse / mas poente contínuo, / o céu desta república // –
Sustentabilidade sólida da seca / dos velhos mananciais às novas represas, / deságua
na minha taça) // a fumaça desenha nas paredes / o animal / a caça / ele mesmo // no
campo / o código da floresta / semeado por corpos // nascem brotos / transgênicos /
propagam outra coisa que já não é a lei / e sim uma ordem mais imperiosa / que a
areia impõe aos quilômetros quadrados do sol // (cativo breu / dos fogos de artifício /
comemorativos da república / acesa na terra ancestral / onde os mortos viviam / e
estão sendo mortos novamente // cativo breu, / como o extermínio pode ser
sustentável? / perguntam-lhe, e apaga as luzes / quando se leria a resposta nenhuma
// – Alguns resistem com flecha ou fogo, / mas a sustentabilidade está do nosso lado:
/ nossas armas têm pontaria automática) // ele viu o fogo inteiro nos tocos de mão /
e continuou a atirar / como as árvores, ainda de pé / embora o perfurassem, como às
águas / e preparassem / o cerrado em fogo no fogo cerrado //desfazendo a origem do
mundo
Pádua Fernandes - 30 - cálcio

Los nombres heridos

A la piel, preguntarle
el nombre de la vida; pero sólo ver
la cicatriz.

Preguntarle a la cicatriz
el nombre de la piel;

no oír nada.

Los nombres fueron heridos.

II

Los nombres proliferan sobre el cuerpo,


sangran por estar entre el sol y los huesos.

Luz invertebrada,
gritan, te comparamos al insecto en su vuelo y en el
enjambre,
¿qué deseás al desvelar las letras
sobre el cuerpo
que solamente con descargas eléctricas y látigo
aprendiste a escribírnoslo?
¿El cuerpo que solamente aprendió el mensaje de las
letras
cuando se volvió lápida de sí mismo?

III

La mudez tiene una piel


toda de cicatrices; ellas
hablan
Pádua Fernandes - 31 - cálcio

pero discrepan entre sí, algunas


emisarias del látigo, otras
portavoces del coágulo que cerró el camino
entre la garganta y la luz.

IV

Que la cicatriz tome el lugar


del cuerpo y reconstruya la voz
en grito y desocupe la boca
del gusano rojo de la lengua;
para siempre libere a los labios
del feroz destino de abrirse,
sitie la garganta con muros,
fosas, túneles, minas, con todo
lo que va a separarla del soplo,
y que los pulmones al fin cansados
de robar parte de la ruta
de los pájaros se encierren
en el vasto corazón del vacío;
el vacío será corazón
y en las venas aún abiertas
circulará el soplo libre
de que hayan existido pulmones,
chorreará el flujo continuo
de la garganta arrancada al grito,
y, cuando las lenguas lo prueben,
la sed será todo el cuerpo,
la cicatriz, todo lugar.

Lo vi en el tren.
Estábamos de pie. No me di cuenta, al principio, hasta
qué punto su camiseta estaba agujereada, porque los
tatuajes se mezclaban con aquellas estampas que bien
podrían haber sido suciedad antigua.
Pádua Fernandes - 32 - cálcio

La camiseta le iba muy justa, probablemente no había


sido comprada para aquel cuerpo, o lo fue cuando aquel
cuerpo era otro. Comenzaban a confundirse;
probablemente ya era necesario lavarlos
simultáneamente, para que esta no se rompiera.
Quedarían los tatuajes, que son algo que nos desnuda.
Cuando pensé en los arañazos, miré mejor y decidí que
algunas de las estampas eran también piel, pero no
tatuajes ¬–cicatrices parecían. Eran demasiado regulares
para ser industriales. Aquel patrón parecía ser el de la
masacre.
El tren estaba más lleno. Sería así hasta la estación final.
Él no llevaba ninguna camiseta. Estaba todo cubierto de
Historia. No podía lavarse más.
Vestido con aquello ¿cómo podría hablarle? Las
cicatrices tienen otro discurso. No usan cuchillo. Y era un
cuchillo lo que yo llevaba.
Comencé a abrir el tren. Rasgarlo por dentro. Los otros
van a entender, estoy señalando al viejo, que pasó
corriendo. Sin ropas, todos seremos la travesía.

VI

dos gangrenas o dos sexos:


y ambos aman tanto la cicatriz
que le arrancan al mismo tiempo la piel y la desnudez6

6. Os nomes feridos: I: À pele, perguntar / o nome da vida; mas só ver / a cicatriz. //


Perguntar à cicatriz / o nome da pele; // não ouvir nada. // Os nomes foram feridos.
II: Nomes proliferam sobre o corpo, / sangram por estarem entre o sol e os ossos. //
Luz invertebrada, / gritam, comparamo-la ao inseto no voo e no enxame, / o que
deseja ao desvelar as letras / sobre o corpo / que somente a choque e a chicote /
aprendeu a escrever-nos? / O corpo que somente aprendeu a mensagem das letras /
quando se tornou lápide de si mesmo? III: A mudez tem uma pele / toda de cicatrizes;
elas / falam // mas discordam entre si, algumas / arautos do chicote, outras / porta-
vozes do coágulo que fechou o caminho / entre a garganta e a luz. IV: Que a cicatriz
tome o lugar / do corpo e reconstrua a voz / em grito e desocupe a boca / do verme
vermelho da língua; / para sempre liberte os lábios / da feroz sina de se abrirem, / sitie
a garganta com muros, / fossos, túneis, minas, com tudo / que vá separá-la do sopro,
/ e que os pulmões enfim cansados / de furtarem parte da estrada / dos pássaros se
trancafiem / no vasto coração do vácuo; / o vácuo será coração / e nas veias ainda
abertas / circulará o sopro livre / de pulmões terem existido, / jorrará o fluxo contínuo
/ da garganta arrancada ao grito, / e, quando as línguas o provarem, / a sede será todo
o corpo, / a cicatriz, todo lugar. V: Eu o vi no trem. / Estávamos em pé. Não percebi,
Pádua Fernandes - 33 - cálcio

Seca y desborda

¿Cuánto de la sangre continúa inédito? ¿O


es necesario investigarlo mientras es pisoteada
por dormir al relente bajo el aire en vigilancia?
¿Investigar
si el flujo abierto por las botas
irriga los caminos del orden?

– Abrí el libro; te empapa los dedos.


– Abrí los dedos; el vacío de la palma resecará el libro.

¿Ineditismo de la sangre? Sin embargo


debemos investigar
si el estruendo de los fusilamientos de la madrugada
deriva rítmicamente del látigo de la mañana
o si la noche
al escavar estrellas en el cráneo
prepara los metales del día siguiente.

– Necesito la masacre para vivir.


– Ella no te necesita para ser la vida.
¿Cuál de los dos es superior?

Y en los medios virtuales, ¿alguna sangre


todavía inédita? Sin
manos empapadas, se puede observar

inicialmente, o quanto sua camiseta estava furada, pois as tatuagens misturavam-se


com aquelas estampas que bem poderiam ser sujeira antiga. / A camiseta estava
muito justa, provavelmente não havia sido comprada para aquele corpo, ou o foi
quando aquele corpo era outro. Começavam a confundir-se; provavelmente já era
necessário lavá-los simultaneamente, senão ela rasgaria. Restariam as tatuagens, que
são coisa de desnudar a gente. / Quando pensei nos rasgões, olhei melhor e julguei que
algumas das estampas eram também pele, mas não tatuagem – cicatrizes pareciam.
Eram regulares demais para serem industriais. Aquele padrão parecia ser o do
massacre. / O trem estava mais cheio. Seria assim até a estação final. Ele não tinha
camiseta alguma. Ele estava todo coberto da História. Não podia mais lavar-se. /
Vestido com aquilo, como poderia falar-lhe? As cicatrizes têm outro discurso. Elas
não usam faca. E era uma faca o que eu levava. / Comecei a abrir o trem. Rasgá-lo
por dentro. Os outros vão entender, estou apontando para o velho, que já correu. Sem
vestes, todos seremos a travessia. VI: duas gangrenas ou dois sexos: / e ambos amam
tanto a cicatriz / que lhe arrancam ao mesmo tempo a pele e a nudez.
Pádua Fernandes - 34 - cálcio

la transición del vapor


para que la sangre sea publicada en un mundo mejor
donde verdugo y víctima no necesiten encontrarse para
que irrumpa la masacre.

– Abrí el libro. Duele, grito.


– No son gritos, sino reacciones de los mecanismos a la
resistencia de la carne.

Archivos cerrados guardan sangre


inédita. La sangre aprisionada,
pero el derramamiento sigue
mientras la identidad seca del rojo
permanece archivada entre la mordaza de la toga
y la basura que chorrea del uniforme.

¿Investigar antes que los libros denuncien


la paz de la piel sobre los órganos dilacerados?

– Tengo que cerrarlo, o sus palabras serán mías.


– Cuando la palabra es para ninguno, el candado es
para todos.

Abrimos un continente y un silencio,


los edificios bajo el suelo
erguidos por el exilio.

– Descubrimos que las palabras eran cuerpos.


– ¿Por eso quemaron los archivos?
– Pero la orden de quemarlos también fue quemada.
–¿Hasta el último diente?

Si tenemos el libro, tenemos el escombro.7

7. Seco e transborda: Quanto do sangue resta inédito? Ou / é necessário investigá-lo


enquanto é pisoteado / por dormir ao relento sob os ares em vigilância? / Investigar
/ se o fluxo aberto pelas botas / irriga os caminhos da ordem? // – Abra o livro; ele
encharca os dedos. / – Abra os dedos; o vazio da palma ressecará o livro. // Ineditismo
do sangue? Porém / devemos investigar / se o estardalhaço dos fuzilamentos da
madrugada / deriva ritmicamente do chicote da manhã / e se a noite / ao escavar
estrelas no crânio / prepara os metais do dia seguinte. // – Preciso do massacre para
viver. / – Ele não precisa de você para ser a vida. / Qual dos dois é superior? // E nos
Pádua Fernandes - 35 - cálcio

Al atravesar la mordedura

querer la mandíbula como se quiere el amor

preferir los dientes a las cavidades


donde raíces no brotarán

y sí una nueva tierra


toda cercada de presas

II

querer lo opuesto de lo que se muerde, es decir,


la vida
mientras la saliva como lluvia
ahoga a la presa y sus alrededores, antes llamados
mundo

III

los dientes flotan en el cielo


para nosotros, es lo que queda de la sonrisa

los dientes sustituyen al cielo


esta sonrisa nos sustituye

meios virtuais, algum sangue / ainda inédito? Sem / mãos encharcadas, pode-se
observar / a transição ao vapor / para que o sangue seja publicado num mundo
melhor / onde algoz e vítima não precisem se encontrar para que irrompa o massacre.
// – Abro o livro. Ele dói, eu grito. / – Não são gritos, mas reações dos mecanismos à
resistência da carne. // Arquivos fechados guardam sangue / inédito. O sangue
aprisionado, / mas o derramamento prossegue / enquanto a identidade seca do
vermelho / permanece arquivada entre a mordaça da toga / e o chorume da farda. //
Investigar antes que os livros denunciem / a paz da pele sobre os órgãos dilacerados?
//– Tenho que fechá-lo, ou suas palavras serão minhas. / – Quando a palavra é para
nenhum, o cadeado é para todos. // Abrimos um continente e um silêncio, / os prédios
sob o solo / erguidos pelo exílio. //– Descobrimos que as palavras eram corpos. / – Por
isso queimaram os arquivos? / – Mas a ordem de queimá-los também foi queimada.
/ – Até o último dente? //Se temos o livro, temos o escombro.
Pádua Fernandes - 36 - cálcio

IV

esto que rechina durante la noche


y tritura todo el día,
se muestra por estar feliz o feroz
y es más feliz cuando es feroz,
esto posee raíces y flota en el viento:
su fruto, el vacío en el corazón del aire,
y el vacío crece inexpugnable

en otros días sería posible acostarse a la sombra de los


dientes
y confundirla generosa con la noche;

pero no volvió a amanecer


después que la sombra
fue confundida con la noche.

VI

en otros países
para atravesar la mordedura
hay que pagar el peaje de la propia boca y su relleno de
palabras y dientes;
en otros, se exige el de la carne y su envoltorio de piel
y palabras;

aquí
se cobra generalmente sólo en palabras;

los que pagan no pueden proseguir:


sin ellas, no hay travesía.
Pádua Fernandes - 37 - cálcio

VII

de un punto a otro punto, ningún camino;


de camino ninguno al punto, ni siquiera el ninguno,

que aún sería un oasis


en el espacio sin travesía.

(una sombra se compone de innúmeros puntos;


cada uno imita a la esperanza)

VIII

la tercera gangrena,
o la boca que perfora la carne
sin alimentarse jamás8

8. Ao atravessar a mordida. I: querer a mandíbula como se quer o amor // preferir


aos dentes as cavidades / onde raízes não brotarão // e sim uma nova terra / toda
cercada de presas. II: querer o oposto do que se morde, isto é, / a vida / enquanto a
saliva como chuva / afoga a presa e seus arredores, antes chamados de / mundo. III:
os dentes flutuam no céu / para nós, é o que resta do sorriso // os dentes substituem
o céu / este sorriso substitui-nos. IV: isto que range durante a noite / e tritura por
todo dia, / mostra-se por estar feliz ou feroz / e é mais feliz quando feroz, / isto possui
raízes e flutua no vento: / seu fruto, o vácuo no coração do ar, / e o vácuo cresce
inexpugnável. V: em outros dias seria possível deitar-se à sombra dos dentes / e
confundi-la generosa com a noite; // mas não voltou a amanhecer / depois que a
sombra / foi confundida à noite. VI: em outros países / para atravessar a mordida /
deve-se pagar o pedágio da própria boca e seu recheio de palavras e dentes; / em
outros, exige-se da carne e seu invólucro de pele e palavras; // aqui / cobra-se
geralmente apenas em palavras; // os que pagam não podem prosseguir: / sem elas,
não há travessia. VII: de um ponto a outro ponto, nenhum caminho; / do caminho
nenhum ao ponto, nem mesmo o nenhum, // que ainda seria um oásis / no espaço sem
travessia. // (uma sombra compõe-se de inúmeros pontos; / cada um imita a
esperança). VIII: a terceira gangrena, / ou a boca que perfura a carne / sem se
alimentar jamais.
Pádua Fernandes - 38 - cálcio

Dientes con metacarpos

para Julián

Mi amigo se detiene frente al abismo


busca a sus padres desaparecidos;
qué encontrará, no sabemos,
cuánto sus manos se sumergirán
en la materia viscosa de la nada, lo ignoramos,
qué tipo de nada, sin embargo humana,
retirarán de ella, falta saber,
aunque imaginemos
que en el fondo del abismo
otro se abra
y después otro
indefinidamente.

Veo que mi amigo murmura,


pero no a mí;
les habla a sus manos,
les enseña que el abismo es una tierra
sobre la cual pisamos
todos los días
y que puede ser excavado
de la misma forma que el tuétano
dentro de los huesos.
Él les susurra a sus manos
En el mundo entero
hay casi únicamente desabrigo,
todos los refugios de la humanidad
se componen principalmente del abismo.
Los felices que allí caen
parecen creer
que nada hay más profundo
que lo humano
y que los hombres
desde siempre
fueron hijos de la caída.
Pádua Fernandes - 39 - cálcio

Sus propias manos no le creen.

Mi amigo salta al abismo;


grito, pero la caída no ocurre,
lo retiene en la superficie
la superficie de la nada.9

9. Dentes com metacarpos (para Julián): Meu amigo para diante do abismo, / procura
os pais desaparecidos; / o que encontrará, não sabemos, / o quanto suas mãos
mergulharão / na matéria viscosa do nada, ignoramos, / que tipo de nada, porém
humano, / dele retirarão, resta saber, / embora imaginemos / que no fundo do abismo
/ outro se abra / e depois outro / indefinidamente. // Vejo que meu amigo murmura,
/ mas não comigo; / fala com suas mãos, /ensina-lhes que o abismo é uma terra / sobre
a qual pisamos / todos os dias / e que pode ser escavado / da mesma forma que o
tutano / dentro dos ossos. / Ele sussurra para as mãos / No mundo inteiro / quase só
há desabrigo, / todos os refúgios da humanidade / compõem-se principalmente do
abismo. / Os felizes que nele caem / parecem crer / que nada há mais profundo / do
que o humano / e que os homens / desde sempre / foram filhos da queda. // Suas
próprias mãos não acreditam nele. // Meu amigo salta para o abismo; / grito, mas a
queda não ocorre, / retém-no na superfície / a superfície do nada.
Pádua Fernandes - 40 - cálcio

Dúo para verdad y palo de papagayo10

y si el cuerpo cesó de vibrar


no por eso dejó de mentir

II

Si la verdad hablara, ¿se equivocaría?


Grito, pero ella se calla,
por miedo a equivocarse.

Si la verdad se alimentase del error,


¿se atragantaría? Dudo
y le niego cualquier alimento,
hasta que el hambre arranque de la verdad
el mejor de ellos.
Cuando ella vomita,
¿no es el error lo que ensucia el parqué? La hago
limpiar todo, pero la verdad
deja todo más inmundo.

¿Y si la hiciera defecar en su propia boca?


¿Tendría cosas más sinceras que decir?

Tal vez. Pero no voy a seguir oyendo.


Si la verdad hablase,
pero rechina,
y el ruido es un error.

III

10. Palo de papagayo (en portugués pau-de-arara) fue el nombre dado a una técnica
de tortura utilizada en Brasil durante la dictadura militar que consistía en una barra
de hierro atravesada entre los puños amarrados y la dobladura de las rodillas. Cada
una de las puntas de la barra era colocada en una mesa, quedando el cuerpo del
torturado colgando a cerca de 20 o 30 centímetros del suelo. En esa posición el preso
sufría descargas eléctricas, golpes y quemaduras con cigarrillos. (N del T.)
Pádua Fernandes - 41 - cálcio

Se comunica que el racionamiento de energía afectará


las declaraciones de los prisioneros, que no podrán
seguir siendo animados mediante electroshocks durante
la madrugada.

(– La subversión depende de nosotros. Cada grupo es


un diente del dragón. Sin nosotros, cada uno intentaría
masticar al otro y el monstruo jamás mordería nada.
– Una boca sólo de odio, ninguna paz la alimentaría.
– Cada subversivo es una caries, es todo lo que ellos
pueden alcanzar del blanco.
– Los dientes son de ellos, pero el fuego es nuestro.)

Rectificación del acta:


los propios prisioneros, encendidos, nos conceden la
energía.

IV

Hago a propósito
lo que los otros compañeros cumplen por casualidad.
Como las flores, la muerte tiene sus campos.
Necesitan al perito
que conozca el adobe e indique el arado.

(como los espacios entre los miembros


y el cuerpo, para saciarme
preciso aumentar los espacios entre
los miembros y el cuerpo)

La frontera entre el shock y el aborto,


el golpe y la mutilación,
la quemadura y el incendio
delimito en los cuerpos abiertos.
¿Todavía respiran? ¿Todavía hay pulso? Mientras no
haya verdad
la vida debe continuar.
Soy, en verdad, un cartógrafo
Pádua Fernandes - 42 - cálcio

e indico nuestro país de los dos lados de la frontera.

(separar los miembros del cuerpo,


volver el espacio entre ellos táctil, retráctil, sonoro,
y oír la canción de la despedida
que el cuerpo entona para los miembros desbandados)

Aplico abolicionismo penal y posmodernos


con la jeringa canónica.

El prisionero puede preferir la coma a la palabra.


Aumento la dosis del pesticida
y los gusanos no serán avistados más por los campos.

A la noche, enseño medicina legal;


pura redundancia.

El primer día,
miraba las rejas.

(– Cuando gritan, ¿por quién gritan?


– Por el odio que los anima, ¿Lavaste la cachiporra?)

Le entregan un dedo de la novia.


Señal de que el resto puede estar entero.

El segundo,
le daba puñetazos a las rejas.

(– Cuando se callan, ¿es más peligroso?


– Escupen los dientes. Dejalos.
Es mejor para cuando el suelo se los trague.)

Arrojaron a la celda un grito de la novia.


El grito no decía nada.
Señal de que ella había preservado todo.
Pádua Fernandes - 43 - cálcio

Un mes más,
lamía las rejas.

(– Cuando se arrastran por el suelo ¿es mejor?


– Hieren la dignidad del suelo.)

Finalmente el útero, barrido hacia la celda


sin el feto. El nacimiento, sin embargo,
estaba intacto.

Al final, él era las rejas.


No podría ser liberado nunca más.

(– La parte más difícil es lavar las paredes.


Necesito cambiar de trabajo.
– No te entiendo.
Son los prisioneros los que diferencian
el mundo y las rejas.)

VI

encarcelado entre las cuatro gangrenas,


algo hiede en esta carne antes humana;
¿la sangre o el hierro? ¿cuál de ellos
es el nuevo cuerpo?
¿y si liberásemos a las paredes
construyendo para cada prisionero
una jaula hecha con sus propios huesos?11

11. Dueto para verdade e pau-de-arara. I: e se o corpo cessou de vibrar / nem assim
deixou de mentir. II: Se a verdade falasse, erraria? / Grito, mas ela se cala, / temerosa
de enganar-se. //Se a verdade se alimentasse do erro, / engasgaria? Duvido / e nego-
lhe qualquer alimento, / até que a fome arranque da verdade o seu melhor. // Quando
ela vomita, / não é o erro o que suja o assoalho? Faço-a / limpar tudo, mas a verdade
/ deixa tudo mais imundo. // E se a fizesse defecar na própria boca? / Teria coisas
mais sinceras a dizer? // Talvez. Porém não ouvirei mais. / Se a verdade falasse, / mas
ela range, /e o ruído é um erro. III: Comunica-se que o racionamento de energia
afetará os depoimentos dos prisioneiros, que não poderão mais ser animados a
choque durante a madrugada. // (– A subversão depende de nós. Cada grupo é um
dente do dragão. Sem nós, cada um tentaria mastigar o outro e o monstro jamais
abocanharia nada. / – Uma boca só de ódio, nenhuma paz a alimentaria. / – Cada
subversivo é uma cárie, é tudo que eles podem atingir do branco. / – Os dentes são
deles, mas o fogo é nosso.) // Retificação do ofício: / os próprios prisioneiros, acesos,
concedem-nos a energia. IV: Faço expressamente / o que outros colegas cumprem por
acaso. / Como as flores, a morte tem os seus campos. / Necessitam do perito / que
Pádua Fernandes - 44 - cálcio

Úlcera

Ninguna paz superior


a la de vivir en la úlcera.

Vio un pan casi entero,


más entero para ella que toda la calle.

Donde se queman libros,


¿se quemarán personas?
Soy intendente y no leo.
Edificios son mis negocios.

Donde se queman edificios,


¿se desmoronarán personas?
Nunca. Sólo las más lentas.
No me culpen. Soy rápido.

Se alimentaba de ella.
Soñar era hermoso dentro de la úlcera.

conheça o adubo e indique o arado. // (como os espaços entre os membros e o corpo,


/ para saciar-me / preciso aumentar os espaços entre os membros e o corpo) // A
fronteira entre o choque e o aborto, / a pancada e a mutilação, / a queimadura e o
incêndio / delimito nos corpos abertos. / Ainda respiram? Ainda pulsam? Enquanto
não há verdade / a vida deve continuar. / Sou, na verdade, um cartógrafo / e indico
nosso país nos dois lados da fronteira. // (separar os membros do corpo, / tornar o
espaço entre eles táctil, retrátil, sonoro / e ouvir a canção da despedida / que o corpo
entoa para os membros debandados) // Aplico abolicionismo penal e pós-modernos /
com a seringa canônica. // O prisioneiro pode preferir o coma à palavra. / Aumento a
dose do pesticida / e os vermes não mais serão avistados pelos campos. // À noite,
ensino medicina legal; / pura redundância. V: No primeiro dia, / olhava as grades. //
(– Quando gritam, por quem gritam? / – Ao ódio que os anima. Já lavou o cassetete?)
// Entregaram-lhe um dedo da namorada. / Sinal de que o resto pode estar inteiro. //
No segundo, / esmurrava as grades. // (– Quando se calam, é mais perigoso? / –
Cospem os dentes. Pode deixar. / É melhor para quando o chão engoli-los.) //
Jogaram na cela um grito da namorada. / O grito não dizia nada. / Sinal de que ela
tinha preservado tudo. // Mais um mês, / lambia as grades. // (– Quando se arrastam
no chão, é melhor? / – Ferem a dignidade do chão.) // Enfim o útero, varrido para a
cela / sem o feto. O nascimento, porém, / estava intacto. // No fim, ele era as grades.
/ Não poderia mais ser libertado. //(– A parte mais difícil é lavar as paredes. / Preciso
mudar de trabalho. / – Não entendo você. / Prisioneiros é que diferenciam / o mundo
e as grades.) VI: encarcerado entre as quatro gangrenas, / algo fede nesta carne antes
humana; / o sangue ou o ferro? qual deles / é o novo corpo? / e se libertássemos as
paredes / construindo para cada prisioneiro / uma jaula feita de seus próprios ossos?
Pádua Fernandes - 45 - cálcio

Era villa, la ceniza.


Hoy, nuevas licencias.
¿Dónde demuelen edificios,
quién permanecerá de pie?

Podría llegar cerca del pan,


más cerca de ella de lo que lo estaba de la calle.

Las cenizas alimentan


esta nueva ciudad
que la caída financia
con cuerpos y destrozos.

Soy intendente y construyo


los espacios vacíos
para la circulación
de corbatas y bombas.

Allí excavaba las riquezas.


El arte rupestre tendría siempre imágenes de la úlcera.

Soy intendente, la chispa


es el mejor instrumento
para el dócil gobierno
de inmuebles y personas.

Si tragase el pan,
si aún pudiera hacerlo,
ahora que su estómago estaba todo tomado por la calle.

Donde demuelen edificios,


hay gente que fue quemada;
arquitecto de la ceniza,
haré que vivan en el aire

a pesar del pequeño


intervalo entre los vientos
Pádua Fernandes - 46 - cálcio

útil para abrigar


ex-ciudadanos terrestres.

A ella oraban el pan y el relente, el abrigo y el hambre


en la hagiografía completa de la úlcera.

Admiro en el humo
cómo la ciudadanía
huele tras la limpieza
de edificios invadidos

y oigo las bombas, higiénicas.


¿Mi negocio? Negocios,
esta nueva ciudad,
esta casa de cenizas.

Fuego y desmoronamiento
se sentaron al banquete.
¿La úlcera tuvo tiempo de perdonar el hambre
antes de la llegada del desastre?

Las ciudades dejadas al capital,


los palacios habitados por el desierto.12

12. Úlcera: Nenhuma paz superior / à de morar na úlcera. // Ela viu um pão quase
inteiro, / mais inteiro para ela do que toda a rua. // Onde se queimam livros, / pessoas
serão queimadas? / Sou prefeito e não leio. / Prédios são meu negócio. // Onde se
queimam prédios, / pessoas desabarão? / Nunca. Só as mais lentas. / Não me culpem.
Sou rápido. // Dela se alimentava. / Sonhar era belo dentro da úlcera. // Era favela, a
cinza. / Hoje, novas licenças. / Onde se explodem prédios, / quem ficará de pé? //
Poderia chegar perto do pão, / mais próximo dela do que lhe era a rua. // As cinzas
alimentam / esta nova cidade / que a queda financia / com corpos e destroços. // Sou
prefeito e construo / os espaços vazios / para a circulação / de gravatas e bombas. //
Nela escavava as riquezas. / A arte rupestre / teria sempre imagens da úlcera. // Sou
prefeito, a faísca / é o melhor instrumento / para o dócil governo / de imóveis e
pessoas. // Se engolisse o pão, / se ainda pudesse fazê-lo, / agora que seu estômago
estava todo tomado pela rua. // Onde se explodem prédios, / gente já foi queimada; /
arquiteto da cinza, / farei que morem no ar // apesar do pequeno / intervalo entre os
ventos / útil para abrigar / ex-cidadãos terrestres. // Oravam para ela o pão e o
relento, o abrigo e a fome / na hagiografia completa da úlcera. // Admiro na fumaça
/ como a cidadania / cheira após a limpeza / dos prédios invadidos // e ouço as
bombas, higiênicas. / Meu negócio? Negócios, / esta nova cidade, / esta casa de
cinzas. // Fogo e desabamento / sentaram-se ao banquete. / A úlcera teve tempo de
perdoar a fome / antes da chegada do desastre? // As cidades deixadas ao capital, /
os palácios habitados pelo deserto.
Pádua Fernandes - 47 - cálcio

Cotidiano fisible

hombre corriendo
adelante de su propia piel

esta, sin embargo, a salvo


entre hormigas y piedras.

II

corriendo sin piel;


ver esto sólo es poder constatarlo,
no poder recomponer
el espacio entre el cuerpo y las calles.

III

tendones y músculos descubiertos

el cuerpo desguarnecido

tensión entre mundo y nervios

el cuerpo se vuelve pura corrida

y pierde
Pádua Fernandes - 48 - cálcio

IV

nunca una corrida pura, sin la confusión heteróclita con


partes de fuga y coraje, desánimo y audacia, política y
policía, testimonio y renuncia.
Antes de la explosión: la corrida se mezclaba con los
elementos fisibles de la trama.

Después de la explosión: el hombre sin piel no huía del


fuego, sino que buscaba en qué fragmento de la corrida
se encontraría el mundo todavía entero.

cuerpo sin piel

todavía corriendo

pero para este credo la desnudez ofende a dios

una razón más

que bendice la masacre

(sin piel
jamás estará desnudo de nuevo,
así como dios)

VI

gangrena en las cinco direcciones, la fuga no puede


salvarlo
de volverse un cuerpo cubierto por la catástrofe
(que es otra piel,
sin cuerpo alguno: los tiros la atraviesan por completo,
Pádua Fernandes - 49 - cálcio

las bombas la dispersan,


ella se alarga y cubre el planeta,
sin corazón, sexo, risa y otros órganos que le
impedirían ser pura piel)13

13. Cotidiano físsil. I: homem correndo / na frente da própria pele; // ela, porém,
salva / entre formigas e pedras. II. correndo sem pele; / ver isto e só poder constatá-
lo, / não poder recompor / o espaço entre o corpo e as ruas. III: tendões e músculos
descobertos // o corpo desguarnecido // tensão entre mundo e nervos // o corpo torna-
se pura corrida // e perde. IV: nunca uma corrida pura, sem a confusão heteróclita
com partes de fuga e coragem, desânimo e audácia, política e polícia, testemunho e
desistência. // Antes da explosão: a corrida misturava-se aos elementos físseis da
trama. // Depois da explosão: o homem sem pele não fugia do fogo, mas buscava em
qual fragmento da corrida encontrar-se-ia o mundo ainda inteiro. V: corpo sem pele
// ainda a correr // mas para este credo a nudez ofende a deus // mais uma razão // que
abençoa o massacre // (sem pele, / jamais estará nu de novo, / assim como deus) VI:
gangrena nas cinco direções, a fuga não pôde salvá-lo / de tornar-se um corpo
coberto pela catástrofe / (que é uma outra pele, / sem corpo algum: os tiros
atravessam-na inteira, / as bombas dispersam-na, / ela se alarga e cobre o planeta, /
sem coração, sexo, riso e outros órgãos que a tolheriam de ser pura pele)
Pádua Fernandes - 50 - cálcio

Discurso de la erosión del fin del mundo

si, antes de todo, fuese la rata;


se alimentaría del cielo
para que de los agujeros abiertos
cayese el vacio sobre la tierra
y en toda la tierra
no hubiese más riqueza que el roerla;

porque, antes de todo, precisaríamos


de la rata
para roer el camino entre el continente y los hombres;

la boca de la rata: cuando ella


terminase su trabajo,
todos los elementos habrían pasado por ella
y el mundo podría por fin comenzar;

la digestión de la rata: después


de que todos los elementos hubiesen atravesado
la digestión omnívora de la rata, la mierda
depositada en las cloacas
conocería todos los elementos
y el mundo podría por fin comenzar

en los dientes de la rata: la casa


de todo lo que iría a nacer:
erosión y saliva;

también la peste sería inútil sin la rata;


esta precedería a sus dos hermanas,
vida y devastación;

la rata antes del mundo


roería lo que sería la luz y la sombra
y no se volvería jamás luz y sombra
Pádua Fernandes - 51 - cálcio

sino hendiduras
por donde escaparía la nada;

sin embargo, antes de todo


no era la rata;
el mundo no pudo comenzar.14

14. Discurso da erosão do fim do mundo: se, antes de tudo, fosse o rato; / alimentara-
se do céu / para que dos buracos abertos / caísse o vazio sobre a terra / e em toda a
terra / não houvesse mais riqueza do que roê-la; // porque, antes de tudo,
precisaríamos / do rato / a roer o caminho entre o continente e os homens; // a boca
do rato: quando ele / encerrasse o seu trabalho, / todos os elementos por ela teriam
passado / e o mundo poderia enfim começar; // a digestão do rato: depois / de todos
os elementos terem atravessado / a digestão onívora do rato, a merda / depositada
nos esgotos / conheceria todos os elementos / e o mundo poderia enfim começar; // nos
dentes do rato: a casa / de tudo que viria a nascer: / erosão e saliva; // também a peste
seria inútil sem o rato; / ele precederia as duas irmãs, / vida e devastação; // o rato
antes do mundo / roera o que seria a luz e a sombra / e não se tornaria jamais luz e
sombra / porém fendas / por onde escaparia o nada; // porém, antes de tudo, / não era
o rato; / o mundo não pôde começar
Pádua Fernandes - 52 - cálcio

La vaca

En los ojos de la vaca,


el cielo rojo.

La vaca está muerta.


Los cuernos no.

El cielo rojo.
La vaca podría lamerlo,
sorber toda la sangre
y salvar al cielo.

Pero la vaca está muerta.

Sería una solución,


de no ser por los cuernos.

II

El rojo gotea
desde los ojos de la vaca
y abre un río
que ahoga las calles.

Grises eran los edificios,


calzadas y callejones,
pero no después
de la muerte de la vaca.

La vaca era una vaca,


amenazaba a la sociedad.
Pádua Fernandes - 53 - cálcio

Edificios y esquinas
se yerguen contra el río.
¿Alguien irguió el puñal
cuando la vaca fue asesinada?
¿O la muerte fue mera
consecuencia de la arquitectura?

III

Los caramelos de goma son hechos de vaca.


Los chicos los comen.

La vaca
replicaba las proteínas,
giraba las hélices duplas,
retorcía la nada.

Los chicos giran,


se retuercen, replican
los antropófagos
ensuciándose
con la nada.

Vos sos lo que comés,


dicen los vegetarianos.

IV

En el campo el cadáver improductivo de la vaca.

¿Cortarlo en trozos, para que los gusanos besen el sol?


¿Quemarlo, para que las cenizas esterilicen el territorio?
¿Abrir agujeros en él, para penetrar en la
podredumbre inmensa,
Pádua Fernandes - 54 - cálcio

fundar en ella colonias, devastar bosques


llegar al útero
y descubrir que estaba embarazada del laberinto?
Salieron de adentro de la vaca.
Miraron los campos. Ningún espacio
que no sea ya el laberinto.

El jugador se envuelve en la bandera de su país,


se acuesta en el pasto
y promete hambriento la victoria.

El jugador se atiborra de pasto


verde como la bandera de su país
y descubre que la victoria es una vaca.

Muge. Así
declama correctamente
las frases de la bandera del país

mientras abre las piernas


a los diez toros;
lame la victoria en los veinte cuernos.

VI

Réquiem para la vaca.


¿Quién lo cantaría?
Mozart mugía mal.
Lacrymosa

Descansa en paz
con el semen de los necrófilos,
con la pala de los profanadores.
Quid sum miser
Pádua Fernandes - 55 - cálcio

Réquiem para la vaca.


Nadie lo contaría.
Verdi no rumiaba,
no sabía imitar las mandíbulas de la tierra
que recibe los cuerpos amorosa.
Kyrie eleison

Descansa todavía en paz;


el vientre visitado por los necrófilos
será abierto por la pala de los profanadores.
Naceremos todos de ti.
Rex tremendae

La ira de dios.
Pero en la tumba de la vaca
suyo es el cuerpo que se pudre.
Libera me

VI

De seis gangrenas,
nació la manada.

Muerta,
la vaca ha vuelto.15

15. A vaca. I: Nos olhos da vaca, / o céu vermelho. // A vaca está morta. / Os chifres
não. // O céu vermelho. / A vaca poderia lambê-lo, / sorver todo o sangue / e salvar o
céu. // Mas a vaca está morta. // Seria uma solução, / não houvera chifres. II: O
vermelho pinga / dos olhos da vaca / e abre um rio / que afoga as ruas. // Cinzas eram
os prédios, / calçadas e becos, / mas não depois / da morte da vaca. // A vaca era uma
vaca, / ameaçava a sociedade. // Prédios e esquinas / erguem-se contra o rio. //
Alguém ergueu o punhal / quando a vaca foi assassinada? / Ou a morte foi mera /
consequência da arquitetura? III: Jujubas são feitas da vaca. / Crianças comem-nas.
// A vaca / replicava as proteínas, / girava as hélices duplas, / retorcia o nada. // As
crianças giram, / retorcem-se, replicam / os antropófagos / lambuzando-se / do nada.
// Você é o que come, / dizem os vegetarianos. IV: No campo o cadáver improdutivo
da vaca. // Retalhá-lo, para que os vermes beijem o sol? / Queimá-lo, para que as
cinzas esterilizem o território? / Abrir-lhe buracos para penetrar na podridão imensa,
/ nela fundar colônias, devastar florestas / chegar ao útero / e descobrir que estava
grávida do labirinto? // Saíram de dentro da vaca. / Olharam os campos. Nenhum
espaço / que já não fosse o labirinto. V: O jogador enrola-se na bandeira do país, /
deita na grama / e promete faminto a vitória. // O jogador empanturra-se de grama
/ verde como a bandeira de seu país / e descobre que a vitória é uma vaca. // Ele
muge. Assim / declama corretamente / os dizeres da bandeira do país // enquanto
Pádua Fernandes - 56 - cálcio

NN

en el hueco
del habla
el cuerpo
de la fosa;
un hueso
estalla
en la falla
del suelo
y luego
el soplo
calla
en la nada;

centro de todo:
un fuego huye;
quema, con todo,
sin que se aloje
en tierra o viento,
ayer u hoy;
es el olvido
y no la llama
en este instante
apuesta y gana
la cosa en fuga
que el fuego emana;

(¿voz bajo el fuego o bajo el agua?


si tanto ceniza cuanto lodo
sirven a los muertos de palabra)
en la nada
abre as pernas / para os dez touros; / lambe a vitória nos vinte chifres. VI: Réquiem
para a vaca. / Quem o cantaria? / Mozart mugia mal. / Lacrymosa // Repousai em
paz / com o sêmen dos necrófilos, / com a pá dos profanadores. / Quid sum miser //
Réquiem para a vaca. / Ninguém o cantaria. / Verdi não ruminava, / não sabia imitar
as mandíbulas da terra / que recebe os corpos amorosa. / Kyrie eleison // Repousai
ainda em paz; / o ventre visitado pelos necrófilos / será aberto pela pá dos
profanadores. / Nasceremos todos de vós. / Rex tremendae // A ira de deus. / Mas no
túmulo da vaca / é dele o corpo que apodrece. / Libera me. VII: De seis gangrenas, /
nasceu a manada. // Morta, / a vaca está de volta.
Pádua Fernandes - 57 - cálcio

del cuerpo
resbala
el suelo
e inunda
el foso
que anónimo
naufraga,
y grasa
la nada
en la panza
de la náusea;

centro de la lucha:
un fuego grita
la ceniza ruge
su enigma
amordazado
en la propia lengua;
sin tener espacio
la voz se calla
repitiendo el grito
que la ceniza exhala;
el fuego en todo
huye y no hay nada;

(¿yace bajo agua o bajo fuego?


a la memoria, nadie la draga:
ceniza y sangre, se va a la cloaca)

en el asco
se sacia
el gusto
de la nada
y como
la barca
atraca
en el puerto
del cuerpo
Pádua Fernandes - 58 - cálcio

sólo hueco
ni halla
ni agua,

nada es el fruto
cuando el incendio
se ha vuelto el mundo;
la llama, el premio
por estar vivos
en carne y vena,
en sangre y ríos,
en hueso y suelo,
y la cosecha
se hace cizaña
secando al sol
de un cielo muerto;

(¿cómo se llamaba realmente?


en lápida se ha convertido el suelo
el suelo que los nombres borra)

ni nada
ni todo
atraca
en la cloaca
que inunda
los puestos,
los sueldos,
las armas
de luchas
calladas
de los muertos
en el lodo;

centro de la voz:
hunde la nada;
desembocadura extrema,
el cuerpo falla,
Pádua Fernandes - 59 - cálcio

en el centro del hueso


el hueco nos calla,
se junta con el lodo
que nos recubre
de la cosa en juego
que la llama sorbe;
centro del yugo:
un fuego huye

(contra la memoria, río venidero,


el desierto de la nueva nada
seca la voz de la garganta al hueso)

del anónimo
que yace
sólo hueso
y larvas
en la fosa
por uniformes
castrenses,
del cuerpo
que voz
sólo soplo
asesi-
nada16

16. NN: no oco / da fala / o corpo / da vala; / um osso / estala / na falha / do solo / e
logo / o sopro / se cala / no nada; // centro de tudo: / um fogo foge; / queima, contudo,
/ sem que se aloje / em terra ou vento, / ontem ou hoje; / o esquecimento / e não a
chama / neste momento / aposta e ganha / a coisa em fuga / que o fogo emana; // (voz
sob o fogo ou sob a água? / se tanto cinza quanto lodo / servem aos mortos de
palavra) // no nada / do corpo / resvala / o solo / e alaga / o fosso / que anônimo /
naufraga, / e grassa / o nada / no bojo / do nojo; // centro da luta: / um fogo grita, /
a cinza urra / o seu enigma / amordaçado / na própria língua; / sem ter espaço / a voz
se cala / ecoando o brado / que a cinza exala; / o fogo em tudo / foge e mais nada; //
(jaz sob a água ou sob o fogo? / a memória, ninguém a draga: / cinza e sangue, leva-
a o esgoto) // no nojo / se farta / o gosto / do nada / e como / a barca / atraca / no porto
/ do corpo / só oco / nem acha / nem água, // nada é o fruto / depois de o incêndio /
tornar-se o mundo / e a chama, o prêmio / de estar-se vivo / em carne e veio, / em
sangue e rios, / em osso e solo, / e o que é colhido / torna-se joio / secando ao sol / o
céu já morto; // (como realmente se chamava? / em lápide tornou-se o solo, / o solo
que os nomes apaga) // nem nada / nem todo / atraca / no esgoto / que alaga / os
postos, / os soldos, / as armas / das vagas / caladas / dos mortos / no lodo; // centro
da voz: / afunda o nada; / extrema foz, / o corpo falha, / no centro do osso / o oco nos
cala, / junta-se ao lodo / que nos recobre / da coisa em jogo / que a chama sorve; /
centro do jugo: / um fogo foge // (contra a memória, rio vindouro, / o deserto do novo
nada / seca a voz da garganta ao osso) // do anônimo / que jaz / só osso / e larvas / no
fosso / por fardas / Armadas, / do corpo / que voz / só sopro / assas- / sinada
Pádua Fernandes - 60 - cálcio

Antes de la ceniza, la ceniza

Bosque de desaparecidos.
No hay semilla.

Un árbol y después mil.


Paisaje cerrado
de desaparecidos.

Brotan.
Suelo pródigo de los presupuestos:
en la planilla humana, se cuentan huesos.

El fruto podrido
como los dientes – huela
lo que la boca dice.

Se deforestan las semillas.


Las ramas crecen al revés.
y enredan a los hombres en el centro de la tierra.

La flor es un gesto, y las manos han sido cortadas.

Un bosque cerrado, sin embargo.


Impide la visión del cielo.

II

Recuperación de contenidos I: agrobusiness


y trabajo esclavo;
raíces arcaicas que el futuro de la nación
proyecta sobre el presente;
“la empresa es moderna, los trabajadores son
lo que no”.
Pádua Fernandes - 61 - cálcio

– ¿Esto va a salir en la prueba o sólo en las clases?


– Da igual, es educación a distancia, no nos llega.

Aprobación transversal estudiantil III: sistema


electoral y agrotóxicos;
falta de uso de guantes por los hombres y por las ratas;
“devenires contractuales y nuevas formas
de vida empresarial,
plano de la inmanencia y desterritorialización
de los intereses”.

– Parece que sí que hay gente dando clase.


– Corazón que no ve, ojos que no sienten.

Graduación e pos simultáneas X: genocidio y


enmiendas parlamentarias;
downsizing y uso de fosas comunes;
“lo más rápido posible alcanzar objetos mentales como
seres reales,
especular con derivativos, aniquilación del hombre
universal
y derivas hacia el esclavo particular”

– ¿Hay que leer bibliografía? ¿En serio?


– Es tipo bajarse el archivo directamente en la prueba.

Programa de restructuración curricular Top:


exhumación de gritos
en alabanza a la deforestación globalizada;
“el capital no refleja, no comunica, no contempla;
se deriva en singulares, ningún universal lo explica,
los cráneos no entran en consenso con las azadas”

– ¿Dónde era que quedaba la facultad?


Quiero ir a buscar mi diploma.
– Es virtual, pero ahora tiene un stand en el bar.
¿En qué te recibiste?
Pádua Fernandes - 62 - cálcio

– El primer mes, en Memoria y Sostenibilidad. El


segundo, en otra cosa, pero tengo que ir a buscar el
diploma para acordarme.

III

Me acuerdo de todo,
pero no ahora,
que hoy tengo la nada.

(la justicia está en los dientes,


el exterminio, en la garganta;
encuentran tanto el mundo como el vómito)

Toqué todo,
pero nada te entrego,
falto de manos.

(la garganta posee dientes,


el estómago, mil bocas;
el exterminio mastica,
la justicia ayuna)

¿Y si no hubiese ni tan sólo hambre


o alimento,
sino sólo la excreción
de la nada,
mierda absoluta,
que fertiliza todo suelo y explica todos los seres?

IV

El mundo decidió iniciar una expedición.


No buscaba nada sino el desierto.
Pádua Fernandes - 63 - cálcio

– Las palas se rompieron, la piedra resiste.


– Use las manos. En las tumbas,
la tierra se abre con cariños.

El mundo precisaba hacer las maletas.


Recreaba las toneladas
en el vacío que sus manos erguían.

– Sin embargo las manos restantes han sido todas


enterradas.
– Deje los cuerpos sobre la tierra; se van a calentar de
día,
y a enfriar de noche. Esa es la justicia de los elementos.

El mundo decidió partir; desamparado,


cada paso deshacía el mapa
que traía, la senda elegida en el papel
se borraba debajo de sus pies
que tomaban cada centímetro del mapa
pues era el mundo quien pisaba.

– La tierra ya está cuajada de cuerpos.


– Amontonalos. Redescubriremos las montañas.
– Las montañas se volvieron volcanes.
– Perfecto. Beberemos su sangre.

El mundo no llegó, no partió.


Donde estaba, allí estaba el desierto.

– Esta lava multiplica la sed.


– Redescubrirá las ciudades,
sustituirá las plazas,
convertirá a cada palabra en rehén del fuego
ya frío
antes de la ceniza.
Pádua Fernandes - 64 - cálcio

hubo la gangrena, se intentó medirla,


pero los números hedían17

17. Antes da cinza, a cinza: I. Floresta de desaparecidos. / Não há semente. // Uma


árvore e depois mil. / Paisagem cerrada / de desaparecidos. // Brotam. / Solo pródigo
dos orçamentos: / na planilha humana, contam-se ossos. // O fruto podre / como os
dentes – cheire / o que a boca diz. // Desmatam-se as sementes. / Os galhos crescem
ao inverso / e enredam os homens no centro da terra. // A flor é um gesto, e as mãos
foram cortadas. // Uma floresta cerrada, contudo. / Impede a vista do céu. II:
Recuperação de conteúdos I: agrobusiness e trabalho escravo; / raízes arcaicas que o
futuro da nação / projeta sobre o presente; / “a empresa é moderna, os trabalhadores
é que não”. // – Isto vai cair na prova ou é só chamada? / – Tanto faz, é educação a
distância, não nos atinge. // Aprovação transversal estudantil III: sistema eleitoral e
agrotóxicos; / falta de uso de luvas pelos homens e pelos ratos; / “devires contratuais
e novas formas de vida empresarial, / plano da imanência e desterritorialização dos
juros”. // – Parece que tem mesmo gente dando aula. / – O que o coração não vê, os
olhos não sentem. // Graduação e pós simultâneas X: genocídio e emendas
parlamentares; / downsizing e uso de valas comuns; / “o mais rápido possível atingir
objetos mentais como seres reais, / especular com derivativos, aniquilação do homem
universal / e derivas para o escravo particular” // – Tem que ler bibliografia? Como
assim? / – É tipo baixar o arquivo direto na prova. // Programa de reestruturação
curricular Top: exumação de gritos / em louvor do desmatamento globalizado; / “o
capital não reflete, não comunica, não contempla; / deriva-se em singulares, nenhum
universal o explica, / os crânios não entram em consenso com as enxadas” // – Onde
é mesmo a faculdade? Quero pegar o diploma. / – Ela é virtual, mas agora tem um
quiosque dela no bar. Você se formou em quê? / – No primeiro mês, em Memória e
Sustentabilidade. No segundo, foi em outra coisa, mas tenho que pegar o diploma
para lembrar. III: Lembro de tudo, / mas não agora, / que hoje tenho o nada. // (a
justiça está nos dentes, / o extermínio, na garganta; / encontram tanto o mundo
quanto o vômito) // Toquei em tudo, / mas nada lhe entrego, / falto de mãos. // (a
garganta possui dentes, / o estômago, mil bocas; / o extermínio mastiga, / a justiça
jejua) // E se não houvesse nem mesmo fome / ou alimento, / mas somente a excreção
/ do nada, / merda absoluta, / que fertiliza todo solo e explica todos os seres? IV: O
mundo decidiu partir em expedição. / Não procurava nada, mas o deserto. // – As pás
quebraram, a pedra resiste. / – Use as mãos. Para as covas, / a terra abre-se com
carinhos. // O mundo precisava fazer as malas. / Recriava as toneladas / no vazio que
suas mãos erguiam. // – Porém as mãos restantes já foram todas enterradas. / – Deixe
os corpos sobre a terra; vão aquecer-se de dia, / esfriar-se à noite. Essa é a justiça dos
elementos. // O mundo decidiu partir; desamparado, / cada passo desfazia o mapa /
que trazia, a trilha no papel escolhida / apagava-se sob os pés / que tomavam cada
centímetro do mapa / pois era o mundo que pisava. // – A terra já está coalhada de
corpos. / – Empilhe-os. Redescobriremos as montanhas. / – As montanhas tornaram-
se vulcões. / – Ótimo. Beberemos de seu sangue. // O mundo não chegou, não partiu.
/ Onde estava, era o deserto. // – Esta lava multiplica a sede. / – Recobrirá as cidades,
/ substituirá as praças, / tornará cada palavra refém do fogo / já frio / antes da cinza.
V: houve a gangrena, quis-se medi-la, / mas os números fediam
Pádua Fernandes - 65 - cálcio

Máquina

Esta máquina lee la sangre


y escribe con huesos.

90% del polvo se compone de mundo.

Esta máquina rasura la carne


y borra la piel

Alfabetiza el soplido con la asfixia.

73% de los ciudadanos están hechos de polvo.

(Yo era esta, pero podría ser otra, la que fue asesinada.
Me volví la de siempre, pues ya estaba muerta y, así, no
podría ser juzgada. Según el primer informe, me suicidé
con esmalte y tintura para el pelo, o incluso menos. Sin
embargo, era preciso que hubiera brindado
informaciones sobre mi organización clandestina, cuál
era el lugar de mi célula, quiénes eran mis superiores.
Tuve que suicidarme nuevamente, con los cordones de
las zapatillas y la sopa de la prisión. Ya había leído la
noticia en los diarios del día anterior. Los oficiales
responsables por mis cuidados recibieron entonces una
reprimenda por no haber indagado cuál era la imprenta
que reproducía los panfletos que distribuíamos en
sindicatos y facultades. Me llevaron nuevamente a la sala
de justicia posmoderna, moldeada directamente de los
hierros de la tradición del quattrocento. Dije menos de lo
mismo. Después me leyeron el certificado de defunción:
esta vez me suicidé solamente tomando la sopa. Ya no
recibía los diarios, no pude saber si mi nueva muerte
salió en la sección de deportes o en la de entretenimiento.
Fue el juez militar quien se dio cuenta, finalmente, de
que nadie había preguntado el nombre de mi
organización. Mandó que la averiguación se reiniciara, y
respondí el mínimo menos, pues la introducción de
Pádua Fernandes - 66 - cálcio

crucifijos eléctricos en los genitales no propició las


condiciones dialógicas para el consenso. De acuerdo con
el cuarto certificado de defunción, me maté por medio de
que no me enviaran más sopa. La última vez que me
llevaron a la sala de justicia posmoderna, teóricamente
incompatible con las ilusiones formalistas de lo jurídico,
no me preguntaron nada más. No morí más, porque
morir aún sería dar una respuesta. ¿Quieren la verdad?
No, y sí mis huesos. Pero nunca los probarán, y siempre
ignorarán que el polvo que cae sobre el país también está
hecho de mí.)

Esta máquina identifica el exilio


en la firma electromagnética
que los cuerpos dejan,
que los textos olvidan.

74% del exilio está hecho de mundo.

También se crearán máquinas contra esto.18

18. Máquina: Esta máquina lê o sangue / e escreve com ossos. // 90% da poeira
compõe-se do mundo. // Esta máquina rasura a carne / e apaga a pele. // Alfabetiza
o sopro com a asfixia. // 73% dos nacionais são feitos de poeira. // (Eu era esta, mas
poderia ser outra, a que foi assassinada. Tornei-me a de sempre, pois já estava morta
e, assim, não poderia ser julgada. Segundo o primeiro relatório, suicidei-me com
esmalte e tinta de cabelo, ou ainda menos. No entanto, era preciso que eu tivesse
fornecido informações sobre minha organização clandestina, qual era o lugar de
minha célula, quem eram meus superiores. Tive de me suicidar novamente, com os
cadarços do tênis e a sopa da prisão. Já tinha lido a notícia nos jornais do dia
anterior. Os oficiais responsáveis por meus cuidados receberam então uma
reprimenda por não terem indagado qual era a gráfica que imprimia os panfletos que
distribuíamos em sindicatos e faculdades. Levaram-me novamente à sala de justiça
pós-moderna, moldada diretamente dos ferros da tradição do quatrocento. Falei
menos do mesmo. Leram-me depois o atestado de óbito: suicidei-me desta vez apenas
tomando a sopa. Já não recebia jornais, não pude saber se a minha nova morte saiu
na seção de esportes ou na de entretenimento. Foi o juiz militar que percebeu,
finalmente, que ninguém perguntara o nome de minha organização. Mandou
reiniciar o inquérito, e respondi o mínimo menos, pois a introdução de crucifixos
elétricos nos genitais não propiciou as condições dialógicas para o consenso. De
acordo com o quarto atestado de óbito, matei-me por meio de não me enviarem mais
sopa. Da última vez que me levaram à sala de justiça pós-moderna, teoricamente
incompatível com as ilusões formalistas do jurídico, não me perguntaram mais nada.
Não morri mais, porque morrer ainda seria dar uma resposta. Querem a verdade?
Não, e sim meus ossos. Mas nunca os irão provar, e sempre ignorarão que o pó que
cai sobre o país também é feito de mim.) // Esta máquina identifica o exílio / na
assinatura eletromagnética / que os corpos deixam, / que os textos esquecem. // 74%
do exílio é feito do mundo. // Criar-se-ão máquinas também contra isto.
Pádua Fernandes - 67 - cálcio

Discurso del lugar del fin del mundo

En este cesto, vidrio y huesos.

En el otro, nada.

Vivimos en el otro.

II

En este cesto de carne y sangre,


el viento –

retírese el viento –

la verdad y la asfixia

III

En lo oscuro el puente.
En la bocina los coches.
En la basura las ruedas y la vía.

Debajo del puente, más vías y bocinas.

Ensordecedor sin embargo


el hombre sin zapatos
en el borde
que a lo oscuro buen día grita
Pádua Fernandes - 68 - cálcio

IV

Policía: Las instituciones se volcaron a la incesante


fabricación de detritos.

Política: En revancha, los detritos planean instituciones


mejores.

¿los hombres aquí presentes no logran formar un


cuerpo? ¿una ciudad?
pero los detritos aquí reunidos
forman un cuerpo ninguno
presente y ausente
como la calle en los agujero de la ciudad

VI

Las industrias de cestos cerraron después de que fuera


determinada la ubicuidad de la basura. El decreto partió
del presupuesto de que la ubicuidad de la propia ley
podría ser transmitida a la basura. Pero no era la ley lo
que era ubicuo, y sí la basura, por esa razón se decretó
que, si existía la ley, esta no era la basura, y debería
seguir fuera de los cestos. Con la basura oficialmente
fuera de los cestos resultó que la ley precisó entrar en
ellos, ser guardada, eventualmente ser cerrada cuando
lloviese muy fuerte, como ahora, mirá cómo flota
mientras la basura navega y los cestos se mantienen
firmes todavía, no tenemos nuevos desde las últimas
licitaciones, no recuerdo ya por qué motivo, sé que había
la ley y la basura, y alguna diferencia entre ambas.
Pádua Fernandes - 69 - cálcio

VII

El séptimo código es la gangrena: no precisamos de la


carne
para que la ley sea la descomposición;
nos basta la ley19

19. Discurso do lugar do fim do mundo: I. Neste cesto, vidro e ossos. // Em outro,
nada. // Moramos no outro. II: Neste cesto de carne e sangue, / o vento – // retire-se
o vento – // a verdade e a asfixia. III: No escuro a ponte. / Na buzina os carros. / No
lixo as rodas e a via. // Debaixo da ponte, mais vias e buzinas. // Ensurdecedor porém
/ o homem sem sapatos / na beira / que ao escuro bom dia grita. IV: Polícia: As
instituições voltaram-se para a incessante fabricação de detritos. // Política: Em
revanche, os detritos planejam instituições melhores. V: os homens aqui presentes
não logram formar um corpo? uma cidade? / mas os detritos aqui reunidos / formam
um corpo nenhum / presente e ausente / como a rua nos buracos da cidade. V: As
indústrias de cestos fecharam depois que foi determinada a ubiquidade do lixo. O
decreto partiu do pressuposto de que a ubiquidade da própria lei poderia ser
transmitida para o lixo. Mas não era a lei que era ubíqua, e sim o lixo, por essa razão
se decretou que, se havia a lei, ela não era o lixo, e deveria ficar fora dos cestos. Com
o lixo oficialmente fora dos cestos é que a lei precisou neles entrar, ser guardada,
eventualmente ser fechada quando chovesse muito forte, como agora, veja que ela
boia enquanto o lixo navega e os cestos velhos mantêm-se firmes ainda, não temos
novos desde as últimas licitações, não me lembro mais por que motivo, sei que havia
a lei e o lixo, e alguma diferença entre ambos. VI: o sétimo código é a gangrena: não
precisamos da carne / para que a lei seja a decomposição; / basta-nos a lei.
Pádua Fernandes - 70 - cálcio

Metástasis o esperanza

El barro tomó el lugar de los ojos


– ahora, sí, se puede ver el mundo

(¿plantar las órbitas arrancadas


después de recoger sus frutos? pues estos
anteceden al árbol y el árbol
anula el suelo
en la ley general de la devastación)

El barro sustituye al cuerpo


– los ciudadanos encontraron su lugar.

(¿viste mi hacienda virtual?


planté sopapos y rodillas quebradas
los mendicantes no se aproximarán a la plantación)

Vientos compiten con el barro,


sin embargo la asfixia
es la vocación de las lenguas.

(la cosecha de los mundos contaminó mi visión;


¿quién previó el impacto ambiental del mundo
sobre los ríos electromagnéticos?
mandaré a que lo aíslen;
como la metástasis, el mundo produce espacios)

El barro es el propio cuerpo virtual del barro


– sin letras escribe su mensaje entero.

(en caso de que plante órbitas,


¿nacerá la visión? sembrando impactos,
¿cosecharé ambientes?
¿semillas transgénicas
Pádua Fernandes - 71 - cálcio

con insecticidas contra campesinos y otras plagas?


necesitaré, sin embargo,
de la valla antimundo,
porque el mundo imita la metástasis
en querer la vida)

En el lugar del barro, él mismo.


El mundo podría encerrarse.

(¿arrancando el cráneo real


nacerá un busto virtual? lo intentaré,
pero antes elevo la valla de la hacienda;
pues sé que existen el mundo y la metástasis,
y ambos sólo conocen la multiplicación)

En el lugar del lugar, encontraron el barro.


– ahora, sí, somos el continente.20

20. Metástase ou esperança: A lama tomou o lugar dos olhos / – agora, sim, pode-se
ver o mundo. // (plantar as órbitas arrancadas / depois de colher seus frutos? pois eles
/ antecedem a árvore e ela / anula o solo / na lei geral da devastação) // A lama
substitui o corpo / – os cidadãos encontraram seu lugar. // (você já viu minha fazenda
virtual? / plantei sopapos e joelhos quebrados, / mendicantes não se aproximarão da
colheita) // Ventos competem com a lama, / porém a asfixia / é a vocação das línguas.
// (a safra de mundos poluiu minha vista; / quem previra o impacto ambiental do
mundo / sobre os rios eletromagnéticos? / mandarei isolá-lo; / como a metástase, o
mundo produz espaços) // A lama é o próprio corpo virtual da lama / – sem letras
escreve sua mensagem inteira. // (caso plante órbitas, / nascerá a visão? semeando
impactos, / colherei ambientes? / sementes transgênicas / com inseticidas contra
camponeses e outras pragas? / precisarei, no entanto, / da cerca antimundo, / que o
mundo imita a metástase / em querer a vida) // No lugar da lama, ela mesma. / O
mundo poderia encerrar-se. // (arrancando o crânio real / nascerá um busto virtual?
tentarei, / mas antes elevo a cerca da fazenda; / pois sei que existem o mundo e a
metástase, / e ambos só conhecem a multiplicação) // No lugar do lugar, encontraram
a lama / – agora, sim, somos o continente.
Pádua Fernandes - 72 - cálcio

Monumento y pasaje

En la amnesia de la ciudad
el memorial de las víctimas;

incontables ladrillos fueron empleados


para que no se erguiese el memorial – todos
sobre las víctimas.

(– Tuve un sueño en el que el cemento hablaba


– Los subversivos se infiltran en todo.)

II

Ama las latas de pintura


porque no tienen memoria
e instituye el memorial de las víctimas
borrando de las paredes
las inscripciones de los prisioneros;

las inscripciones podrían haber erguido otra ciudad.

III

Sustituir la historia por el monumento,


la primera medida oficial
después de la masacre.

(– El cemento nutre, el sueño desgasta...


– Ya avisé que no hay desmoronamiento que termine.)
Pádua Fernandes - 73 - cálcio

IV

Calcular la sobrefacturación per capita en la compra de


las botas uniformadas con el nuevo design de la
memoria del continente;
Anotar los números de los calzados y cruzar con el
logaritmo de los paraísos fiscales;
El trabajo está incompleto: es preciso considerar la
grandeza de los granos de polvo bajo las togas
de los magistrados;
Contar en los dedos mutilados las botellas de champán
de los subversivos cooptados;
Dividirlo por el número de plumas de los penachos que
quedaron como souvenir de los viajes al museo
de historia natural;
Elevarlo a la potencia de los diarios usados para
engrasar las botas jamás limpias;
Tendremos, al fin, el número de la función
de las víctimas.
– Memoria, cosa que ensucia.

– Ellas querían la descarga;


después, pintar con electricidad
el retrato de las víctimas.

– No es posible reconocerlas.

(– ¿Dónde está el memorial de las víctimas?


– Donde quieras, basta consagrar una nueva.)

– Dejar que la electricidad esboce lo que


le parezca, de cualquier forma
poco recordamos de las víctimas,
su número exacto jamás fue determinado;
Pádua Fernandes - 74 - cálcio

– Es inútil reconocerlas, si ya son homenajeadas.

(– ¿Dónde está el memorial de las víctimas?


– Nunca hubo nada de eso. Las calles bastan.)

– En la amplia área donde supuestamente fueron


enterradas,
las víctimas,
ya fue autorizada la construcción de una usina
hidroeléctrica.

Luz en toda la región:


ahora sí empezamos a conocer a las víctimas.

VI

Podés anotar.
De todos modos vas a perder.

el alimento que trae,


se lo entrega al hambre,
las bocas no lo reciben

– No sé el nombre de los huesos, los conozco por el


punto en que se fracturan. Hablo con ellos sin roerlos,
destruir la celda aumenta la pena.

Podés anotar.
Nadie más sabe leer.

el alimento que prepara,


el relleno es el hambre

– El punto de fractura es la sección áurea del cuerpo.


Tengo que hacerlo callar, pero no como humano, y sí
como un ser que puede hablar.
Pádua Fernandes - 75 - cálcio

Anotá, anotá.
Hay posts, no hay más discursos.

ningún alimento bastará,


es el hambre quien va a comer

– El amor del puñetazo por la carne se responde de varias


formas. Algunos huesos prefieren partirse al medio, en
otros la extremidad es, en efecto, el punto extremo. Hablo
no como prisionero, sino como alguien que sobrevivirá.

Podés anotar.
Solamente seria fidedigno si escribieses en blanco.

Aquí había un restaurante popular. Pero tenemos que


pensar en el futuro. Cuando inauguro guarderías ya
pienso en cementerios. Teníamos ese edificio que
conjugaba restaurante popular y presidio. Economía de
las instalaciones. El Estado acoge a todos en su boca
inmensa. Así evitamos las huelgas de hambre. Gente
primitiva no quiere progreso ni contratistas. Aquí ningún
ciudadano de verdad fue golpeado a causa de eso.
No era este el discurso. Perdonen. Lo encontré: aquí
había un restaurante popular. Hoy, inauguramos esta
demolición.
Preparamos el futuro.

VII

8º arcano o la gangrena: cuando ellos llegaban,


jugábamos a adivinarles el futuro; cuánto tiempo
permanecerían aquí, si serian procesados, si condenados
sin ser procesados, si ejecutados sin ser condenados, por
cuánto tiempo condenados, por cuánto tempo ejecutados
etc.; hasta que descubrimos que se les podía leer el futuro
en las escoriaciones, en un tipo de tanatomancia; algunos
de nosotros adivinaban los números de la lotería por las
Pádua Fernandes - 76 - cálcio

marcas en el cuerpo y multiplicaban los golpes para hacer


proliferar los premios; otros sólo querían ver el destino de
esos que llegaban, sin embargo el método más seguro
para eso era la lectura de vísceras, que eran retiradas,
lavadas y secadas, para que el visceromante revelase el
futuro del antiguo propietario de los órganos en cuestión;
otros querían ver más allá del destino personal y se
dedicaban a la previsión del bien público y de la
seguridad de todas las garantías sociales; sin embargo,
para descubrir el futuro del país, solamente la piel debía
ser leída, por eso esta pasó a ser retirada inmediatamente
al ingresar en esta institución, fijate que la colgamos en
sogas de tender la ropa para que, a la medianoche, los
mejores de nosotros lean lo que dicen las estrellas vistas
a través de la constelación de heridas. 21

21. Monumento e passagem. I: Na amnésia da cidade / o memorial das vítimas; //


incontáveis tijolos foram empregados / para que não se erguesse o memorial – todos
/ sobre as vítimas. // ( – Tive um sonho em que o cimento falava. / – Os subversivos
infiltram-se em tudo.). II: Ama as latas de tinta / porque elas não têm memória / e
institui o memorial das vítimas / apagando das paredes / as inscrições dos
prisioneiros; // as inscrições poderiam ter erguido uma outra cidade. III: Substituir a
história pelo monumento, / a primeira medida oficial / depois do massacre. // ( – O
cimento nutre, o sonho desgasta... / – Avisei que não há desabamento que termine.).
IV: Calcular o superfaturamento per capita na compra das botas fardadas com o
novo design da memória do continente; / Anotar os números dos calçados e cruzar
com o logaritmo dos paraísos fiscais; / O trabalho está incompleto: é preciso
considerar a grandeza dos grãos de poeira sob as becas dos magistrados; / Contar nos
dedos mutilados as garrafas de champanhe dos subversivos cooptados; / Dividir pelo
número de penas dos cocares que sobraram de souvenir das viagens ao museu de
história natural; / Elevar à potência dos jornais usados para engraxar as botas
jamais limpas; / Teremos, enfim, o número da função das vítimas. / – Memória, coisa
que suja. V: – Elas queriam o choque; / logo, pintar com eletricidade / o retrato das
vítimas. // – Não é possível reconhecê-las. // (– Onde está o memorial das vítimas? /
– Onde quiser, basta consagrar uma nova.) // – Deixar que a eletricidade esboce o que
bem / entender, de qualquer forma / pouco lembramos das vítimas, / seu número
exato jamais foi determinado; // – É inútil reconhecê-las, se já são homenageadas. //
(– Onde está o memorial das vítimas? / – Nunca houve nada disso. As ruas bastam.)
// – Na ampla área em que supostamente foram enterradas, / as vítimas, / já foi
autorizada a construção de uma usina hidrelétrica. // Luz em toda a região; / agora
sim começamos a conhecer as vítimas. VI: Pode anotar. / Você vai perder de qualquer
jeito. // o alimento que traz, / entrega para a fome, / as bocas não o recebem // – Não
sei o nome dos ossos, conheço-os pelo ponto em que fraturam. Falo com eles sem os
roer, destruir a cela aumenta a pena. // Pode anotar. / Ninguém mais sabe ler. // o
alimento que prepara, / o recheio é a fome // – O ponto de fratura é a seção áurea do
corpo. Tenho que calá-lo, mas não como humano, e sim como um ser que pode falar.
// Anote, anote. / Há posts, não há mais discursos. // nenhum alimento bastará, / é a
fome quem vai comer // – O amor do soco pela carne responde-se variadamente.
Alguns ossos preferem partir-se ao meio, em outros a extremidade é, com efeito, o
ponto extremo. Falo não como prisioneiro, mas como alguém que sobreviverá. //
Pádua Fernandes - 77 - cálcio

Salvación por el baile

Salvar a los muertos


de nunca haber sido;

– Ignoro si cuando pisé


o pateé. Pero
la cabeza estalló.
– Con el sonido, ¿conseguís bailar?

Porque están muertos


necesitan ser salvados;
la vida dispensaba
la redención;

– No recuerdo si con la navaja


o la uña. Pero le abrí
otra boca en el pescuezo.
–¿Lo que ella cantó te hizo bailar?

Son hoy apenas


los que no vivirán más;

Pode anotar. / Somente seria fidedigno se você escrevesse em branco. // Aqui era um
restaurante popular. Mas temos que pensar no futuro. Quando inauguro creches já
penso em cemitérios. Tínhamos o prédio conjugando restaurante popular e presídio.
Economia das instalações. O Estado acolhe todos em sua boca imensa. Assim a gente
evita greve de fome. Gente primitiva não quer o progresso nem empreiteiras. Aqui
nenhum cidadão de verdade foi espancado por causa disso. / Não era este o discurso.
Perdoem. Achei: aqui era um restaurante popular. Hoje, inauguramos esta
demolição. / Preparamos o futuro. VII: 8º arcano ou a gangrena: quando eles
chegavam, brincávamos de adivinhar-lhes o futuro; quanto tempo ficariam aqui, se
seriam processados, se condenados sem serem processados, se executados sem serem
condenados, por quanto tempo condenados, por quanto tempo executados etc.; até
que descobrimos que se lhes podia ler o futuro nas escoriações, num tipo de
tanatomancia; alguns de nós adivinhavam os números da loteria pelas marcas no
corpo e multiplicavam os golpes para a proliferação dos prêmios; outros só queriam
ver o destino desses que chegavam, porém o método mais seguro para isso era a
leitura de vísceras, que eram retiradas, lavadas e secas, para que o visceromante
revelasse o futuro do antigo proprietário dos órgãos em questão; outros queriam ver
além do destino pessoal e dedicavam-se à previsão do bem público e da segurança de
todas as garantias sociais; no entanto, para descobrir o futuro do país, somente a pele
deveria ser lida, por isso ela passou a ser retirada logo no ingresso nesta instituição,
veja que a penduramos em varais para que, à meia-noite, os melhores de nós leiam o
que dizem as estrelas vistas através da constelação de feridas.
Pádua Fernandes - 78 - cálcio

los comprendo, como ellos existo:


sálvenme de lo que tampoco nunca podré;

– Le abrí el estómago,
nunca más tendrá hambre, vientos
van a alimentarlo del puro cielo.
– Sin hambre, podrá por fin bailar.

El cuerpo humano puede sufrir grandes cambios, pero no


dejará de estar compuesto de partes heteróclitas que
exigen continuo y desmesurado esfuerzo a fin de que
permanezcan lo suficientemente estables para que sus
diversos componentes no se desconecten y comiencen
unos con otros a bailar por las calles ritmos oriundos
enteramente del futuro.22

22 Salvação pela dança: Salvar os mortos / de nunca terem sido; // – Ignoro se quando
pisei / ou chutei. Mas / a cabeça estourou. / – Com o som, você conseguiu dançar? //
Porque estão mortos / precisam ser salvos; / a vida dispensava / a redenção; // – Não
lembro se com a navalha / ou à unha. Mas lhe abri / outra boca no pescoço. / – O que
ela cantou fez você dançar? // São hoje apenas / o que não mais viverão; /
compreendo-os, como eles existo: / salvem-me do que também nunca poderei; // –
Abri-lhe o estômago, / nunca mais terá fome, ventos / vão alimentá-lo do puro céu. /
– Sem fome, ele poderá enfim dançar. // O corpo humano pode sofrer grandes
mudanças, mas não deixará de ser composto de partes heteróclitas que exigem
contínuo e desmesurado esforço a fim de que permaneçam estáveis o suficiente para
que os seus diversos componentes não se desliguem e comecem uns com os outros a
dançar pelas ruas ritmos oriundos inteiramente do futuro.
Pádua Fernandes - 79 - cálcio

Actos, interdicciones

Sin actores; todo el dialogo tendrá lugar entre los


paisajes.
Un país con censura, pero lleno de recursos naturales.

Teatro alegórico; basta un monólogo para expresar


las diversas corrientes políticas permitidas
y sus diálogos
con el grupo de poder; basta un monólogo
lleno de pausas,
dicho por actor ninguno,
en una escena completamente vacía,
iluminada hasta el hueso de las cortinas.

Bajar las cortinas sobre el público, no sobre el palco,


para que sepa que la realidad ha finalizado.
La próxima sesión del mundo
dependerá de los recursos financieros distribuidos
entre quienes lo suspendieron.

– Su visión del mundo ha sido superada. Hoy tenemos la


7.9, que encontró gran aceptación en los mercados
paramundiales.
– Pero nuestro cosmopolitismo tiene muchísima calidad,
es importado y compatible con todas las versiones
autorizadas del futuro.

II

está en boga la contemporaneidad de la arruga;


Pádua Fernandes - 80 - cálcio

ostra es vegetal; camarón, mineral;


churrasco, se respira
como los otros frutos del mar;
la crítica todo come y clasifica.

hago proclamar la arruga, sustancia del rostro


mayor que el propio rostro;

nació para acompañar a las estrellas enanas,


el artista, y contempla el cielo
permitido por la miopía.

una arruga se encaja en otra,


esa es su naturaleza;

después de quebrar tres países y cinco monedas,


especuló con la muerte del arte y la construcción de
cien museos;
los muros siguieron pintados.

la arruga, señal de que no el tiempo, sino el


declive
viene a retirar las máscaras,
y de que sólo hay máscaras

Jajaja, ¡los poetas críticos!


Si fuesen convincentes, ¡no precisarían de la crítica!
Si fuesen inteligentes, ¡no escribirían poesía!
De no ser ambiguos,
ya habrían elegido entre una y la otra
y abandonado ambas.

– ¿La cirugía plástica sería la solución para las artes?


– Si el bisturí se infectara.
Pádua Fernandes - 81 - cálcio

III

La forma del concerto grosso, ya madura al final del


siglo XVII, dio lugar, en el siglo siguiente, a la sinfonía
concertante, mientras que el concierto solista continuó
creciendo hasta nuestros días. Tenemos la suerte de que
el concierto solista haya permanecido hasta nuestros
días, porque se puede verificar que varias formas
declinaron y fueron abandonadas a lo largo de los siglos,
como el propio concerto grosso, que generó la sinfonía
concertante que, a su vez, está en el origen de la sinfonía
clásica, sin que, pese a ello, el primero de estos haya
logrado llegar hasta nuestros tiempos.
Tenemos la suerte también de estar vivos en nuestros
días porque, en caso contrario, no podríamos ver que el
concierto solista sigue vigente, o tal vez veríamos otras
formas, de otras épocas, tal vez incluso el concerto
grosso, género en que un grupo de solistas dialoga con
otros instrumentos, sin el espíritu de confrontación y el
individualismo extraordinarios del concierto solista.
Sí, recientemente tales experimentos fueron retomados.
Pero nada que no haya sido prohibido.

IV

Una pieza compuesta toda por finales;

Proyecto de novela, “más o menos”, atravesada por fina


ironía sutil envolviendo múltiples lenguajes, el autor
domina diversas formas de arte, compre una obra y lleve
tres

– La ración con la que alimentás la catástrofe.


– Le extraje los dientes, ella precisa triturar para comer.

una pieza que jamás dejara de comenzar;


Pádua Fernandes - 82 - cálcio

Propuesta de novela autobiográfica, “aún menos”, con


lenguaje fractal e instigador al posicionar al lector en el
flujo de las redes sociales de la novela a partir de una
inversión módica

– ¿Terminó el conteo de los cadáveres?


– Nunca. Los números sobreviven a los huesos.

una pieza que comenzará siempre antes que el artista;

Esbozo de novela infantil, “menos de lo mismo”, que


mezcla ficción con teoría de la administración, escrito
sin complicaciones, futuro best seller, inteligente como
su lector

– ¿La catástrofe usó las lenguas de ellos mismos para


lamerlos?
– Sin el propio cuerpo, la lengua se mantiene muda.

una pieza que terminará, pero no para el público;

Previsión presupuestaria de un libro para


autodescubrimiento del lector, “menos paso a paso”, y
gestión en los mercados personal, sexual y financiero

– A algunos nos callan los cuchillos; a otros, los


patrocinios.
– Medidas de justicia distributiva.

una pieza larga, pero no en su duración;

Esquema para cartel, “mínimo menos”, con versos


refinados y cortos en una poética clara y sofisticada que
dispensa la lectura

– ¿Esta lluvia ácida vino de la saliva de la catástrofe?


– Fue todo lo que restó de las bocas.
Pádua Fernandes - 83 - cálcio

una pieza sin desarrollo alguno,


todos sus elementos están sometidos al juego
de existir apenas en el momento
en que renunciamos a ellos;

Idea para un banner, “mí de lo mismo”, que capta el


interés con su uso inteligente de los soportes
electrónico-digitales dominados por el autor, conocido
porque patentó todas las posibilidades actuales y
venideras de lectura y, visionariamente, registró también
la no lectura

– ¿Se secaron las expectativas globales, debemos cesar


al mundo?
– Ya no trabajamos con ese tipo de soporte.

y, porque renunciamos,
los elementos se niegan a venderse
a los juegos indecentes del triunfo;

¿No quieren conocer el argumento de mi futuro


proyecto, “miel al menos”, o “menos mismo”, ustedes
eligen, ya aprobado, de intervención textual en soporte
de papel? Es un concepto nuevo, miren que cuento los
detalles indecentes...

– Después de la masacre, entre los que quedaron,


¿quedaban aquellos que pueden hablar?
¬– No diferenciar el habla y la masacre.

gangrena versión 9.0: no necesitamos discutir,


para nosotros siempre está todo claro
como siempre.
Pádua Fernandes - 84 - cálcio

como los huesos


nuestros
cuyo sabor nunca probaremos23

23 Atos, interdições: I. Sem atores; todo o diálogo ocorrerá entre as paisagens. / Um


país com censura, mas cheio de recursos naturais. // Teatro alegórico; basta um
monólogo para expressar / as diversas correntes políticas permitidas e seus diálogos
/ com o grupo no poder; basta um monólogo pleno de pausas, / dito por ator nenhum,
/ numa cena completamente vazia, / iluminada até o osso das cortinas. // Descer as
cortinas sobre o público, não sobre o palco, / para que saiba que a realidade foi
encerrada. / A próxima sessão do mundo / dependerá dos recursos financeiros
distribuídos / àqueles que o suspenderam. // – Sua visão de mundo está superada.
Hoje temos a 7.9, que encontrou grande aceitação nos mercados paramundiais. / –
Mas nosso cosmopolitismo tem grande qualidade, é importado e compatível com
todas as versões autorizadas do futuro. II: está em voga a contemporaneidade da
ruga; // ostra é vegetal; camarão, mineral; / picanha, respira-se / como aos outros
frutos do mar; / a crítica tudo come e classifica. // faço proclamar a ruga, substância
do rosto / maior do que o próprio rosto; // nasceu para acompanhar as estrelas anãs,
/ o artista, e contempla o céu / permitido pela miopia. // uma ruga encaixa-se em
outra, / essa é a sua natureza; // depois de quebrar três países e cinco moedas, /
especulou com a morte da arte e a construção de cem museus; / os muros seguiram
pintados. // a ruga, sinal de que não o tempo, mas o / declínio / vem retirar as
máscaras, / e de que só há máscaras // Rá, rá, rá, os poetas críticos! / Se fossem
convincentes, não precisariam da crítica! / Se fossem inteligentes, não escreveriam
poesia! / Não fossem ambíguos, / já teriam escolhido entre uma e outra / e deixado
ambas. // – A cirurgia plástica seria a solução para as artes? / – Se o bisturi
infeccionar. III: A forma do concerto grosso, já madura no final do século XVII, deu
lugar, no século seguinte, à sinfonia concertante, enquanto o concerto com solista
continuou a crescer até os nossos dias. Temos a sorte de o concerto com solista
permanecer até os nossos dias, porquanto pode-se verificar que várias formas
declinaram e foram abandonadas ao longo dos séculos, como o próprio concerto
grosso, que gerou a sinfonia concertante, que, por sua vez, está na origem da sinfonia
clássica, sem, no entanto, que ele tivesse logrado chegar aos nossos tempos. / Temos
a sorte também de estarmos vivos em nossos dias, porque, em caso contrário, não
poderíamos ver que o concerto com solista permanece ainda, ou talvez víssemos
outras formas, de outras épocas, talvez até mesmo o concerto grosso, gênero em que
um grupo de solistas dialoga com os outros instrumentos, sem o espírito de
confrontação e o individualismo extraordinários do concerto com solista. / Sim,
recentemente tais experimentos foram retomados. Mas nada que não tenha sido
proibido. IV: Uma peça toda composta de finais; // Projeto de romance, “mais ou
menos”, atravessado por fina ironia sutil envolvendo múltiplas linguagens, o autor
domina diversas formas de arte, compre uma obra e leve três / – A ração com que
você alimenta a catástrofe. / – Extraí-lhe os dentes, ela precisa triturar para comer.
// uma peça que jamais deixará de começar; // Proposta de romance autobiográfico,
“ainda menos”, com linguagem fractal e instigante ao posicionar o leitor no fluxo das
redes sociais do romance a partir de um investimento módico // – Acabou a contagem
dos cadáveres? / – Nunca. Os números sobrevivem aos ossos. // uma peça que iniciará
sempre antes do artista; // Esboço de romance juvenil, “menos do mesmo”, que
mistura ficção com teoria da administração escrito sem enrolação, futuro best seller,
inteligente como seu leitor // – A catástrofe usou as línguas deles mesmos para lambê-
los? / – Sem o próprio corpo, a língua mantém-se muda. // uma peça que terminará,
mas não para o público; // Previsão orçamentária de livro para autodescoberta do
leitor, “menos passo a passo”, e gestão nos mercados pessoal, sexual e financeiro // –
Alguns calamos à faca; outros, com patrocínio. / – Medidas de justiça distributiva. //
uma peça longa, mas não na duração; // Esquema para cartaz, “mínimo menos”,
com versos refinados e curtos numa poética clara e sofisticada que dispensa a leitura
// – Esta chuva ácida veio da saliva da catástrofe? / – Foi tudo o que restou de todas
Pádua Fernandes - 85 - cálcio

Rumbo a la orilla

ciudadanos-anfibios –
las narinas aún fuera del agua

– Se les permite vivir,


¿pero quién los autorizó a respirar?

– El agua autorizó, sólo ella.

ciudadanos-anfibios –
se ven burbujas en la superficie –
¿se lamentan? ¿protestan?

– Se les permitió respirar,


¿pero para quién pueden hacerlo?

– Para el agua, sofocada.

se debaten, no nadan –
nadar sería lógico
y el infarto es la lógica de la sangre –

– ¿Por qué están libres,


si sofocan a las olas?

– El agua aceptó el destino


de no tragarlos a todos todavía.
as bocas. // uma peça sem desenvolvimento algum, / todos os seus elementos estão
submetidos ao jogo / de existirem apenas no momento / em que desistirmos deles; //
Ideia para banner, “mim do mesmo”, que prende o interesse com seu uso inteligente
dos suportes eletrônico-digitais dominados pelo autor, conhecido porque patenteou
todas as possibilidades atuais e vindouras de leitura e, visionariamente, registrou
também a não leitura // – Secaram as expectativas globais, devemos demitir o
mundo? / – Já não trabalhávamos com esse tipo de suporte. // e, porque desistimos,
/ os elementos recusam vender-se / aos jogos indecentes do triunfo; // Vocês não
querem saber o enredo do meu futuro projeto, “mel no menos”, ou “menos mesmo”,
vocês é que escolhem, já aprovado, de intervenção textual em suporte de papel? É
um conceito novo, olhem que eu conto os detalhes indecentes... // – Após o massacre,
entre os que restaram, restaram aqueles que podem falar? / – Não diferenciar a fala
e o massacre. V: gangrena versão 9.0: não precisamos discutir, / para nós está tudo
claro / como sempre, / como os ossos / nossos / cujo sabor nunca provaremos.
Pádua Fernandes - 86 - cálcio

saben que existe la orilla


y que ella existe
porque no la pueden ver –

– Les ordenamos el agua,


la sumersión jamás los aceptará.

– Pero el agua confundió la memoria con la sed.

y que las olas prosiguen


por memoria de la orilla
que nunca tocarán

– Olvidamos que las mareas tienen que estar


vedadas al soplo,
hermano de la tempestad.

cuando respiren el agua,


la orilla estará por todas partes.24

24 Rumo à orla: cidadãos-anfíbios – / as narinas ainda fora d’água // – É-lhes


permitido viver, / mas quem autorizou respirar? // – A água autorizou, apenas ela. //
cidadãos-anfíbios – / veem-se bolhas na superfície – / lamentam? protestam? // – Foi-
lhes permitido respirar, / mas para quem podem fazê-lo? // – Pela água, sufocada. //
debatem-se, não nadam – / nadar seria lógico / e o enfarte é a lógica do sangue – // –
Por que estão livres, / se eles sufocam as ondas? // – A água aceitou o fado / de ainda
não tragar a todos. // sabem que existe a orla / e que ela existe / porque não a podem
ver – // – Ordenamo-lhes a água, / a submersão jamais os aceitará. // – Mas a água
confundiu a memória com a sede. // e que as ondas prosseguem / por memória da orla
/ que nunca tocaram // — Esquecemos que as marés devem ser interditadas / ao
sopro, / irmão da tempestade. // quando respirarem a água, / a orla estará por toda
parte.
Pádua Fernandes - 87 - cálcio

Durante la invención del fuego

para Julián

El amigo,
las instrucciones para armar bombas.

En el manual las cicatrices son herramientas de


montaje.

(libertar el fuego,
¿condición necesaria
para la insurgencia?)

Mi amigo quiere reunir en un cuerpo


aquello que la explosión
acordó con los elementos;
la piel completada con los fragmentos de la arquitectura
y el coágulo que enseña el flujo a las olas.

En el mapa los huesos ocupan el lugar de las aguas:


circundan el continente.

(libertar el
cuerpo, ¿condi-
ción nece-
saria
para reinven-
tar el
fuego?)

Le digo
que es necesario que un hueso falte
para que la ausencia esté completa.
Escribiríamos entonces
el elogio de la fractura.
Pádua Fernandes - 88 - cálcio

(jamás la libertad sin considerar la ceniza)

La rebelión, un cuerpo hecho sólo de fracturas.

II

Se mató en el exilio.
La pena no necesita pasaporte.

Se tiró a las vías del tren.


El cosmopolitismo
de no volver nunca más a ningún sitio.

¿Dejó alguna línea escrita?


Después del interrogatorio
no escribió nada más,
solamente la sangre que manchó su papel,

como él mancha ahora los hierros


de la ciudad extranjera.
Alguna palabra entera escrita
por el cuerpo destrozado.

Nadie la lee.
Ahora, es extranjero para siempre.

III

Quemar. De la piel
a los huesos. De los huesos
al tuétano. De éste
a la célula indistinta entre ser y no.

No por la luz,
por la caricia sucia de la ceniza.
Pádua Fernandes - 89 - cálcio

Lamer la ceniza
para aprender el rojo.

El amigo
quiere publicar el fuego,
libertarlo
de la ceniza acumulada
a la que llamamos país.

Libertarlo
es también un país.

Frío el corazón de la llama.

Publicado,
regresaría al aire
y volvería a ser inédito.

Quemar.
Hasta que vuelva a ser crudo.

IV

se gangrenan diez países:


eso es el continente posible

Falta la bomba
para completar la arquitectura.

Falta el coágulo
para que el corazón se derrame.
Pádua Fernandes - 90 - cálcio

Falta la piel
que cubra los vientos
y los convierta en un cuerpo
entero de la rebelión.25

25 Durante a invenção do fogo (para Julián): I O amigo, / as instruções para armar


bombas. // No manual as cicatrizes são ferramentas de montagem. // (libertar o fogo,
/ condição necessária / para a insurgência?) // Meu amigo quer reunir num corpo /
aquilo que a explosão / combinou aos elementos; / a pele completada com os
fragmentos da arquitetura / e o coágulo que ensina o fluxo às ondas. // No mapa os
ossos ocupam o lugar das águas: / circundam o continente. // (libertar o / corpo,
condi- / ção neces- / sária / para reinven- / tar o / fogo?) // Digo a ele / que é necessário
que um osso falte / para que a ausência fique completa. / Escreveríamos então / o
elogio da fratura. // (jamais a liberdade sem considerar a cinza) // A rebelião, um
corpo só de fraturas. II: Matou-se no exílio. / A pena não necessita de passaporte. //
Jogou-se na linha de trem. / O cosmopolitismo / de nunca mais voltar para lugar
algum. // Deixou alguma linha escrita? / Depois do interrogatório, / nada mais
escreveu, / somente o sangue lhe marcou o papel, // e igual marca ele deixa agora nos
ferros / da cidade estrangeira. / Alguma palavra inteira escrita / pelo corpo
destroçado. // Ninguém a lê. / Agora, é estrangeiro para sempre. III: Queimar. Da
pele / aos ossos. Dos ossos / ao tutano. Dele / à célula indistinta entre ser e não. // Não
pela luz, / pela carícia suja da cinza. // Lamber a cinza / para aprender o vermelho.
// O amigo / quer publicar o fogo, / libertá-lo / da cinza acumulada / a que chamamos
país. // Libertá-lo / é também um país. // Frio o coração da chama. // Publicado, /
devolver-se-ia aos ares / e tornaria a ser inédito. // O amigo publica o país / que sob
a cinza / continua inédito. // Queimar. / Até que volte a ser cru. IV: gangrenam dez
países; / isso é o continente possível. V: Falta a bomba / para completar a
arquitetura. // Falta o coágulo / para o coração derramar-se. // Falta a pele / que
cubra os ventos / e torne-os um corpo / inteiro da rebelião
Pádua Fernandes - 91 - cálcio

Sentido de la hemorragia

(Hueso sangrando.)

Participé del grito, robé


la voz. Oigo ahora
el canto del hueso. Le tapo
la boca. Lo oigo
todavía. Le golpeo
los labios. Lo oigo
más.

(Hueso sangrando.)

¿La cicatrización de la tierra


vendrá porque serán convocados
los malabaristas de las armas blancas,
los domadores del tiro,
los magos del misil,
arquitectos de la política?
Las asambleas aún no fueron erguidas por el habla.
La tierra no cicatrizará.

Quiebro el hueso por la


mitad. Descubro dentro de él
todo el esqueleto. Convierto
el esqueleto en polvo. ¿Me cubre
todo con un trazado
de calles? ¿de plazas? Intento
lavarme del polvo. Él surca
las aguas para descubrir
otras tierras.

(Hueso sangrando.)
Pádua Fernandes - 92 - cálcio

El coágulo entre la tierra y los hombres


fue prohibido
a causa de su naturaleza política.
Crece el coágulo entre la tierra y los hombres
y porque fue prohibido
es de naturaleza política.

Después del fracaso, decidí


comerme el hueso. Conseguí
cortarlo en pedazos más pequeños
y metérmelo todo en la boca.

(Hueso sangrando.)

Fue así que él sustituyó


mi boca, dientes, lengua.
Encontró su voz verdadera.26

26 Sentido da hemorragia: (Osso a sangrar.) // Participei do grito, roubei / a voz. Ouço


agora / o canto do osso. Tapo / a boca dele. Ouço-o / ainda. Soco-lhe / os lábios. Ouço-
o / mais. // (Osso a sangrar.) //A cicatrização da terra / virá porque convocados / os
malabaristas das armas brancas, / os domadores do tiro, / os mágicos do míssil, /
arquitetos da política? / As assembleias ainda não foram erguidas pela fala. / A terra
não cicatrizará. // Quebro o osso ao / meio. Descubro dentro dele / todo o esqueleto.
Torno / o esqueleto em pó. Cobre-me / todo com um traçado / de ruas? de praças?
Tento / lavar-me do pó. Ele singra / nas águas para descobrir / outras terras. // (Osso
a sangrar.) // O coágulo entre a terra e os homens / foi proibido / por causa de sua
natureza política. / Cresce o coágulo entre a terra e os homens / e porque foi proibido
/ tem natureza política. // Após o fracasso, decidi / comer o osso. Consegui / cortá-lo
em pedaços menores / e colocá-lo todo na boca. // (Osso a sangrar.) // Foi assim que
ele me substituiu / boca, dentes, língua. / Encontrou sua voz verdadeira.
Pádua Fernandes - 93 - cálcio

Las mandíbulas

las mandíbulas permanecen en el aire

suspendidas por la muerte


sobre la vida

mandíbulas desnudas

ninguna piel las cubre

queda alguna piel entre los dientes


en la comida interminable

II

la sonrisa de la mandíbula
pura

apenas dientes a la vista

viva como la roca después del apedreamiento

III

como si flotasen
las mandíbulas permanecen

algunas partidas, otras no

incluso con los dientes cerrados


están abiertas al mundo
y lo muerden
Pádua Fernandes - 94 - cálcio

IV

el beso de la mandíbula

no en otra

sino en el aire

que nos circunda

y transmite la caricia seca del calcio

dentro de la mandíbula

alguien vive

no vos o yo

la mordedura vive
y elige sobrevivientes

VI

maxilar es el verbo de la
mandíbula
nos acoge en su discurso

la caries no sobrevive a la mandíbula

el verbo no sobrevive al discurso


Pádua Fernandes - 95 - cálcio

VII

el cielo cubierto de mandíbulas,


la noche cae sobre la tierra
y los gritos de pánico
vienen del cielo y de la tierra;

el cielo cubierto de mandíbulas,


no hay más vuelo, las aves
se arrastran de un diente a otro
sin encontrar dónde posarse;

el cielo cubierto de mandíbulas


morirá de hambre, y su
esqueleto finalmente sin alas
caerá vivo sobre la tierra;

las mandíbulas continuarán reinando


esperando que otro cielo nazca
y crezca como el cráneo nunca completado

VIII

ya no se ven
las mandíbulas; en este
aire que sofoca la posibilidad de la garganta,
en este sol que ciega la desintegración del paisaje,
en este viento que lleva la materia al destino del polvo

¿podríamos encontrarlas, o
serian ellas mismas la imposibilidad
de la garganta, la ceguera
integral del paisaje, el polvo
como materia del destino

en la ciudad erguida en el espacio entre los dientes?


Pádua Fernandes - 96 - cálcio

ya no se ven
las mandíbulas; ¿habrán mordido
el aire o la visión?

¿se agotó la posibilidad del paraíso


en las mandíbulas suspendidas?
sin embargo

es siempre posible imaginar


tu mandíbula fugándose de los rigores de la carne
reinventando el cuerpo en campo minado.
Tenés el arma. Ella te usará.27

27 As mandíbulas: I. as mandíbulas permanecem no ar // suspensas pela morte /


acima da vida // mandíbulas nuas // nenhuma pele as cobre // resta alguma pele entre
os dentes / na refeição interminável. II: o sorriso da mandíbula / puro // apenas
dentes à mostra // vivo como a rocha depois do apedrejamento. III: como se
flutuassem / as mandíbulas permanecem // algumas partidas, outras não // mesmo
com os dentes cerrados / elas estão abertas para o mundo / e o abocanham. IV: o beijo
da mandíbula // não em outra // mas no ar // que nos circunda // e transmite a carícia
seca do cálcio. V: dentro da mandíbula // alguém vive // não você ou eu // a mordida
vive / e escolhe sobreviventes. VI: maxilar é o verbo da / mandíbula / acolhe-nos em
seu discurso // a cárie não sobrevive à mandíbula // o verbo não sobrevive ao discurso.
VII: o céu coberto de mandíbulas, / a noite cai sobre a terra / e os gritos de pânico /
vêm do céu e da terra; // o céu coberto de mandíbulas, / não há mais voo, as aves /
rastejam de um dente a outro / sem encontrar pouso; // o céu coberto de mandíbulas
/ morrerá de fome, e seu / esqueleto enfim sem asas / cairá vivo sobre a terra; // as
mandíbulas continuarão a reinar / esperando que outro céu nasça / e cresça como o
crânio jamais completo. VIII: não se veem mais / as mandíbulas; neste / ar que
sufoca a possibilidade da garganta, / neste sol que cega a desintegração da paisagem,
/ neste vento que leva a matéria ao destino do pó // poderíamos encontrá-las, ou /
seriam elas mesmas a impossibilidade / da garganta, a cegueira / integral da
paisagem, o pó / como matéria do destino // na cidade erguida no espaço entre os
dentes? // não se veem mais / as mandíbulas; teriam abocanhado / o ar ou a visão? //
esgotou-se a possibilidade do paraíso / nas mandíbulas suspensas? / porém // é sempre
possível imaginares / tua mandíbula na fuga aos rigores da carne / a reinventar o
corpo em campo minado. / Tens a arma. Ela te usará.
Pádua Fernandes - 97 - cálcio

Proyecto para calcio

para Fabio

Este proyecto de creación literaria, o sea, la tentativa de


aceptar la estimativa oficialesca de que la literatura se
proyecta, y lo hace, pero como bala, cohete, misil sobre
los otros discursos, a saber, el de la economía, el del
derecho, el de la propaganda, simplemente retomándolos
y lamiéndolos con saliva ácida hasta que se disuelvan –

La justificación de este proyecto, no siendo dicha, no


pedirá disculpas por existir, pero, de hecho, es justo,
como la fractura que encuentra el punto de tensión de los
huesos y los devuelve al estado fundamental de tierra –

(el compositor, cuando aprenda a callarse, escribirá


mejor lo que no puede aprender)

patéenlo
en la boca –
es el beso que conoce

Método no habrá, salvo el difícil, el confuso, el que


exigirá más fuentes para costearlo y, por lo tanto, será
desatendido artísticamente por el sector financiero de la
institución –

(el compositor no negocia con sonidos, y sí con


materiales, andrajos, residuos, no para archivarlos, y sí
hacerles justicia: devolverlos a los aires, permitir que
respiren una vez más)

patéenlo
y la boca
aprenderá a andar
Pádua Fernandes - 98 - cálcio

Cronograma ninguno, la medida de tiempo aún posible,


la del latir cardíaco de los sonidos recuperados, o el paso
de su expiración, anoto el soplo para revivirlo, retirarlo
de la tierra para que podamos pisar en ella por fin enteros

(el compositor, en verdad, trabaja no con notas y si con


los aires, precisa componerlos, no es posible que sonidos
nuevos vibren en una atmosfera antigua)

patéenlo
en la boca
es lo que tiene para decir

En lo tocante al referencial teórico, es evidente que todo


proyecto de creación literaria debe presentar por lo
menos uno, de preferencia varios, al gusto de las
agencias financiadoras, tenemos aquí diversos, uno para
cada mineral que compone el cuerpo humano y permite
alguna familiaridad con la tierra después que el soplo
deja de animar al conjunto mitad atmósfera, mitad suelo
que anda y ríe –

(el compositor sabe que, mientras que el sonido aspira a


la condición de carne, el cuerpo tiene la vocación de
desmaterializarse, y que la música resulta de la
intersección de esas dos curvas)

Tendríamos también palabras-llave, si en literatura las


palabras abriesen puertas y no prefiriesen la
multiplicación de los laberintos –

patéenlo
y él revivirá
listo para morder el mundo

(un cuarteto de nervios, los músicos desnudos


ofreciendo sus cuerpos para construir el palco y el
público)
Pádua Fernandes - 99 - cálcio

la primera gangrena, o la boca


que revela el sentido de la vida;
adivinar en ella el futuro de la carne,
probarla
hasta los huesos; vestirla
hasta la desnudez,
hasta que la catástrofe que circunda el cuerpo
se convierta en la propia carne,

(la sinfonía del cuerpo escrita para gangrenas; con los


instrumentos traídos al palco, vemos que no hay
diferencia entre el cuerpo y la bomba)

la primera gangrena, o la calle


abierta sobre la piel
y se disemina
se vuelve continente,
en él vivimos, pero ¿podemos habitarlo?,

(percusión o montar la explosión en la máquina del


cuerpo con herramientas de lo cotidiano: papeles
arrugados, cajas, baterías usadas, calles)

la gangrena de la historia
consume los propios huesos,
vivimos el tiempo presente
como si fuera un fósil del pasado,
y el pasado asumiese
toda la tarea de la actualidad;
¿y ni la actualidad de la gangrena quedará
en el calcio y en la saliva
hermanados en lo informe
que toma toda la estructura
y devuelve a lo innumerable
lo que tenía dos pies y pocos pasos,
dos ojos y toda la ceguera,
los órganos robados al júbilo,
Pádua Fernandes - 100 - cálcio

el cuerpo o la cicatriz
que se abre
para abarcar todos los números posibles?

(o desmontar, que es lo que queda)

–pero es la tierra que respira en nosotros.28

28 Projeto para cálcio (para Fabio): Este projeto de criação literária, ou seja, a
tentativa de aceitar a estimativa oficialesca de que a literatura se projeta, e ela o faz,
porém como bala, foguete, míssil sobre os outros discursos, a saber, da economia, do
direito, da propaganda, simplesmente retomando-os e lambendo-os com saliva ácida
até que se dissolvam – // A justificativa deste projeto, a não ser dita, não pedirá
desculpas por existir, mas, de fato, ele é justo, como a fratura que encontra o ponto
de tensão dos ossos e devolve-os ao estado fundamental de terra – // (o compositor,
quando aprender a calar-se, escreverá melhor o que não pôde aprender) // chutem-no
/ na boca – / é o beijo que conhece // Método não haverá, salvo o difícil, o confuso, o
que exigirá mais fontes de custeio e, portanto, será indeferido artisticamente pelo
setor financeiro da instituição – // (o compositor não lida com sons, e sim com
materiais, farrapos, resíduos, não para arquivá-los, e sim fazer-lhes justiça: devolvê-
los aos ares, permitir que respirem mais uma vez) // chutem-no / e a boca / aprenderá
a andar // Cronograma nenhum, a medida de tempo ainda possível, a do bater
cardíaco dos sons recuperados, ou o andamento de sua expiração, anoto o sopro para
revivê-lo, retirá-lo da terra para que possamos nela pisar enfim inteiros – // (o
compositor, na verdade, lida não com notas e sim com os ares, precisa compô-los, não
é possível que sons novos vibrem em uma atmosfera antiga) // chutem-no / na boca
/é o que ele tem a dizer //No tocante ao referencial teórico, é evidente que todo
projeto de criação literária deve apresentar pelo menos um, de preferência vários, ao
gosto das agências financiadoras, temos aqui diversos, um para cada mineral que
compõe o corpo humano e permite alguma familiaridade com a terra depois que o
sopro deixa de animar o conjunto meio atmosfera, meio solo que anda e ri – // (o
compositor sabe que, enquanto o som aspira à condição de carne, o corpo tem a
vocação de desmaterializar-se, e que a música resulta da intersecção dessas duas
curvas) // Teríamos também palavras-chave, se em literatura as palavras abrissem
portas e não preferissem a multiplicação dos labirintos – // chutem-no / e ele reviverá
/ pronto para morder o mundo // (um quarteto de nervos, os músicos nus oferecendo
seus corpos para construir o palco e o público) // a primeira gangrena, ou a boca / que
revela o sentido da vida; / adivinhar nela o futuro da carne, / prová-la / até os ossos;
vesti-la / até a nudez, / até a catástrofe que circunda o corpo / tornar-se a própria
carne, // (a sinfonia do corpo escrita para gangrenas; com os instrumentos trazidos
para o palco, vemos que não há diferença entre o corpo e a bomba) // a primeira
gangrena, ou a rua / aberta sobre a pele / e dissemina-se, / torna-se continente, / nele
moramos, mas podemos habitá-lo?, // (percussão ou montar a explosão na máquina
do corpo com ferramentas do cotidiano: papéis amassados, caixas, baterias usadas,
ruas) // a gangrena da história / consome os próprios ossos, / vivemos o tempo
presente / como se fora um fóssil do passado, / e o passado assumisse / toda a tarefa
da atualidade; / e nem a atualidade da gangrena ficará / no cálcio e na saliva /
irmanados no informe / que toma toda a estrutura / e devolve ao inumerável / o que
tinha dois pés e poucos passos, / dois olhos e toda a cegueira, / os órgãos roubados ao
júbilo, / o corpo ou a cicatriz / que se abre / para abranger todos os números
possíveis? // (ou desmontar, que é o que resta) // – mas é a terra que respira em nós.
ÍNDICE

Pisando hojas secas / Pisando folhas secas ........................... 13


Memoria y fractura / Memória e fratura ............................... 16
Auto de resistencia / Auto de resistência .............................. 18
Permiso de demolición / Alvará de demolição ..................... 27
Los nombres heridos / Os nomes feridos .............................. 30
Seca y desborda / Seco e transborda ...................................... 33
Al atravesar la mordedura / Ao atravessar a mordida ........... 35
Dientes con metacarpos / Dentes com metacarpos ............... 38
Dúo para verdad y palo de papagayo /
Dueto para verdade e pau-de-arara ........................................ 40
Úlcera / Úlcera ........................................................................ 44
Cotidiano fisible / Cotidiano físsil ......................................... 47
Discurso de la erosión del fin del mundo /
Discurso da erosão do fim do mundo .................................... 50
La vaca / A vaca ...................................................................... 52
NN / NN .................................................................................. 56
Antes de la ceniza, la ceniza / Antes da cinza, a cinza ......... 60
Máquina / Máquina ................................................................ 65
Discurso del lugar del fin del mundo /
Discurso do lugar do fim do mundo ...................................... 67
Metástasis o esperanza / Metástase ou esperança ................. 70
Monumento y pasaje / Monumento e passagem ................... 72
Salvación por el baile / Salvação pela dança ........................ 77
Actos, interdicciones / Atos, interdições ............................... 79
Rumbo a la orilla / Rumo à orla ............................................ 85
Durante la invención del fuego /
Durante a invenção do fogo ................................................... 87
Sentido de la hemorragia / Sentido da hemorragia ............... 91
Las mandíbulas / As mandíbulas ........................................... 93
Proyecto para calcio / Projeto para cálcio ............................. 97
Algunos títulos de Libros de la talita dorada

Colección TATUAJE EN EL VIENTO


-Dirigida por J. M. P. y C. A.-
Naranjos de fascinante música.
Poesía contemporánea de amor en La Plata, 34 autores.
Papeles a consideración, Néstor Mux
Son dos los que danzan, José María Pallaoro
Disculpas del irascible. Antología, Néstor Mux
La camisa hawaiana, Carlos Aprea
El cazador metafísico. Poesía reunida 1, Luis Pazos

Colección LOS DETECTIVES SALVAJES


-Dirigida por J. A.-
versos aparecidos, Carlos Aiub
desear y tener, Juan M. González Moras
ylumynarya, Julián Axat
en la exacta mitad de tu ombligo. Jorge Money
panteo, Pablo Ohde
siempre tu palabra cerca, Joaquín Areta
si Hamlet duda, le daremos muerte, Antología de
poesía salvaje.
hubiera querido, Rosa María Pargas
gotas de crítica común, Emiliano Bustos
cuando seas grande, Luis Elenzvaig
restos de restos, Nicolás Prividera
subcutáneo, Juan Aiub

Colección SOBREPLAQUETAS
Basuritas y otras plaquetas. José María Pallaoro
Teatros y otras plaquetas. Carlos Aprea
Colección Línea Recta ALREDEDORES
La lluvia curó las heridas, Gabriel Sagastume

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AROMITO:
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el espiniyo - revista de poesía


cálcio
de Pádua Fernandes
se terminó de imprimir
en el mes de marzo
del año 2013
en Talleres Gráficos “Su Impres”,
Buenos Aires, República Argentina

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