Está en la página 1de 3

3 TÉCNICAS PARA DESMONTAR LOS PENSAMIENTOS

NEGATIVOS.
Los pensamientos son eso, solo pensamientos, y no tienen por qué
corresponderse con la realidad. Por tanto, si hay alguna idea que te esta
haciendo sentir mal merece la pena, cuando menos, someterla a debate y no
creértela de buenas a primeras tal cual.
1. Lo primero que debemos hacer es tomar conciencia de nuestros
pensamientos. Nos debemos convertir en unos “detectives” de los
pensamientos que nos rondan la cabeza para averiguar cuál es la
calidad o el signo de mis pensamientos.

2. Una vez que ya puedo ser consciente de ellos me debe para a pensar si
algunos son repetitivos y, cuando los tenga localizados, trabajaré sobre
ellos.

3. La primera pregunta que te harás es: ¿”Este pensamiento es útil o me


hace daño? Si no le encuentras la utilidad, pasaremos a los siguientes
pasos.

Tus pensamientos son una interpretación subjetiva de la realidad y ésta


interpretación está muy influenciada por tu estado de ánimo, traumas,
recuerdos… En general, por su vida pasada.
Pasa tus pensamientos por los siguientes filtros.

- FILTRO DE LA EVIDENCIA.
Lo primero que tienes que plantear es si aquello que estás pensando es cierto
o tiene algún tipo de evidencia.
 ¿Es totalmente cierto lo que estoy pensando?
 ¿En que me baso? ¿Tengo suficientes evidencias?
 Evidencias a favor y en contra. Sería como poner en una balanza que
“pruebas” tengo a favor de mi pensamiento y cuales en contra, y qué pesa
más.
 ¿Tengo toda la información para hacer esa inferencia?
 ¿Me infravaloro? Tengo que tener en cuenta que cuando tengo un bajo
concepto de mi mism@ éste influirá en la percepción de los pensamientos,
me enfocaré más en los negativos que corresponden con la visión que
tengo de mi mismo y mi realidad.
 ¿Mi interpretación es parcial?
 ¿Exagero?
 ¿Me responsabilizo en exceso?
 ¿Podría existir otra explicación u otra forma más realista de pensar?

Hay veces que al analizar un pensamiento negativo y pasarlo por el filtro de la


evidencia si se ajusta a la realidad. Entonces pasaremos al siguiente filtro.
- FILTRO DE LA GRAVEDAD.
¿Es tan grave como yo pienso?
En caso de que el pensamiento fuera cierto nos vamos a hacer preguntas
encaminadas a evaluar la magnitud de las consecuencias.
 ¿Serían tan horribles las consecuencias?
 ¿Qué ocurriría si…)
 ¿A cuántas áreas de mi vida afectaría?
 ¿Podría encontrarme bien aún cuando esto será así?
 ¿Hay otras personas a quienes les haya ocurrido y cómo lo han vivido?
 ¿Tiene alguna consecuencia positiva?
 ¿Sería una circunstancia desagradable o insuperable?
 ¿Me afectaría durante un periodo de tiempo (un mes, dos meses, un año) o
durante toda mi vida?
 ¿Me podrían pasar cosas más graves? ¿Cuáles?

Cuando un pensamiento pase los dos filtros anteriores, es decir, que sea real y
grave, vamos a proponernos las preguntas siguientes para pasarlo por el:

- FILTRO DE LA UTILIDAD.

 ¿Qué consecuencias tiene para mí pensar así?


 ¿Me ayuda a solucionar mis problemas?
 ¿Me hace sentir bien?
 ¿Me sirve de algo darle vueltas al pensamiento de manera improductiva?
 ¿Me ayuda darle vueltas y más vueltas?
 Seguro que hay algo que puedo hacer al respecto. ¿Qué es lo que puedo
hacer?
Parada de pensamiento:
Esta técnica consiste en aprender a cortar los pensamientos que nos produce
el malestar.
Dos pasos para aplicar esta técnica:
1. Se capaz de darnos cuenta cuando aparecen esos pensamientos. Es
muy importante ser consciente o detectar los pensamientos que quieres
o necesitas parar.
2. Comienza a decirte: “No empieces”, “Ya estás con tus miedos”, “Para”,
“No te voy a hacer caso”…

También podría gustarte