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Título: Cuidado con lo que sembramos

Cita Bíblica: Proverbios 22:8; Oseas 10:12

Pbro. José Luis Zepeda Oliveros


Alabanza: “Un corazón –Frutos- ” (Cielo en la tierra)
Fecha: 29-01-21
I.N.P. Nueva Vida

“El que sembrare iniquidad, iniquidad segará, y la vara de su insolencia se quebrará”,


(Proverbios 22:8)
“Sembrad para vosotros en justicia, segad para vosotros en misericordia; haced para
vosotros barbecho; porque es el tiempo de buscar a Jehová, hasta que venga y os enseñe
justicia”, (Oseas 10:12)
Existe una frase que ilustra el mensaje de hoy: “Lo que hoy siembras, mañana cosecharás”.
Nuestras acciones tienen una respuesta, sea inmediata o al tiempo, pero siempre regresan.
Todos sembramos a lo largo de nuestra vida, semillas buenas o semillas malas, y esto
determina la cantidad de frutos buenos o malos a cosechar.
Existen diferentes terrenos en los que sembramos, el terreno de los social, familiar,
económico, la salud y lo espiritual.
Es necesario sembrar con sabiduría en todos los aspectos de nuestra vida, pues hay un
tiempo adecuado para sembrar; por ejemplo, un padre comienza a sembrar buenos frutos
con sus hijos desde su gestación para que cuando lleguen sus años donde pintan las canas,
recoja los buenos frutos de amor y honra.
No todo es sembrar en el reino material, también debemos aprender a sembrar en el mundo
espiritual. el Señor dijo: “haceos tesoros en el cielo”. Dios estableció leyes físicas y
espirituales que se cumplirán, ya sea que las entendamos o no. El que planta árboles,
cosechará frutas, quien siembra trigo cosechará pan, quien siembra flores, obtendrá
perfumes, el que planta lealtad, cosechará buenos amigos, el que siembra alegría, recogerá
felicidad, quien siembra la verdad, cosechará confianza, el que planta sobre la fe, su
cosecha está segura, quien cultiva afecto, recogerá gratitud, el que siembra para la
eternidad, cosechará vida eterna.
Sin embargo, algunas personas prefieren sembrar vientos y recoger tempestades, sembrar
la tristeza y cosechar desconsuelo, cultivar odio y sembrar rechazo, sembrar la discordia y
obtener soledad, sembrar indiferencia y cosechar el adiós, plantar injusticia y cosechar
abandono, sembrar cizaña y cosechar discordia. Se cumple la enseñanza bíblica: “pues
todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. Porque el que siembra para su carne,
de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida
eterna. No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no
desmayamos” (Gal.6:7, 9)
Es un buen momento para hacerte la pregunta: ¿Qué estoy sembrando? ¿me gusta lo que
estoy cosechando? O ¿eres de las personas que piensan que los demás son los culpables
de lo que cosechas?
Querido lector, analizar lo que estas sembrando y qué frutos esperas cosechar. La palabra
de Dios es clara al decirnos que de nuestras decisiones depende la calidad de frutos que
vamos a cosechar. A lo largo de la Biblia encontramos muchos ejemplos que lo que se
siembra se cosecha: Caín sembró envidia, y cosechó el repudio social; Jacob engañó a su
padre y a su hermano, por eso recogió engaño y traición por parte de su suegro, Judas
sembró traición y cosechó la muerte.
Oremos
“Amado Dios, dame de tu semilla para sembrar en amor y servicio, permíteme plantar con
gusto tu semilla de amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre,
templanza, no me permitas sembrar acciones que provengan de mi carácter imperfecto,
permíteme cosechar buenos frutos en esta vida, y en la eternidad. Amén”

Motivos de oración

• Oremos porque nuestro Dios nos guarde y fortalezca en salud

• Oremos por el consuelo de las familias que han tenido pérdidas, que nuestro Dios envié
consuelo y resignación:
- Familia Paredes
- Familia Segura
- Familia Soto
- Familia Martínez
- Familia Zavaleta
- Familia Ledezma
- Familia Sánchez
- Familia López Mistega
- Familia Velazco
- Familia Zamorano Ceja
- Familia González García
- Familia Montaño Chaparro
- Familia Álvarez Pérez
- Familia Ruiz (hermano Adrián)
- Familia Santos (hermano Gonzalo)

• Oremos por los enfermos en esta contingencia:


- Gustavo Rivera Navarro
- Hermana Lucy y su hijo David
- Hermana Ruth Navarro
- Hermana Rosa y esposo
- Hermana Karina Dorado

• Oremos por todos los enfermos de COVID- 19 que hay en nuestra Iglesia Nacional
Presbiteriana de México
• Oremos por el personal médico que nuestro Dios les fortalezca y guarde en su tarea de
salvar vidas
• Oremos por la reapertura de los templos

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