Cosmos Mundos Posibles

Hasta hace poco pensábamos que solo había un nivel en la materia, no se tenia la idea de
que existían otros. Cuando encendemos un cerillo una reacción química libera energía
almacenada en las moléculas, los antiguos enlaces químicos se rompen y se crean unos
nuevos, ahora las moléculas adyacentes empiezan a moverse más rápido y la temperatura
aumenta. Rápidamente, el proceso se propaga es como una especie de reacción en cadena.
La energía de la llama ha estado encerrada, tal ves durante muchos años, en enlaces
químicos entre los átomos. Moderado por los electrones que giran alrededor del núcleo.
Otro nivel de materia mas profundo que guarda otro tipo de energía, es el centro del átomo,
su núcleo, se forjó hace miles de millones de años en lejanos hornos estelares. Mucho antes
de que se formara la tierra. Es lo que le da energía a las estrellas, arrebatar este
conocimiento de la naturaleza marca un antes y un después cósmico. El secreto de la luz de
las estrellas no es algo con lo que se bromea, como el fuego, puede dar vida a una
civilización y puede reducirla a cenizas. Hace mucho, antes de que hubiera una tierra, había
una voluta de gas frio y débil. Estaba hecho por los átomos más simples y se atraían unos a
los otros gravitacionalmente. Y así la nube creció. Los átomos contenían pequeñas pero
pesadas partículas en sus núcleos. El hidrogeno tenia protones, el helio también tenía
neutrones, ambos tenían un agitado velo de electrones orbitando alrededor. Los átomos en
el interior de la nube se movían más rápido a medida que la gravedad los empujaba cada
vez mas cerca entre ellos, hasta que todo el conjunto colapso. Este colapso aumento tanto la
temperatura que la nube se convirtió en un reactor de fusión natural. En una estrella átomos
funcionando según las leyes de la física se encontraron y se fusionaron en la inquebrantable
oscuridad y entonces se hizo la luz. En esta masa de partículas elementales, el núcleo de
uno de los átomos un átomo de helio, se formó. Después de miles de millones de años, la
estrella ya es vetusta al haber convertido todo su combustible de hidrogeno disponible en
helio. Ahora que para la estrella ha llegado su hora de morir, continua la transformación
hacia el interior de sus comienzos.
Mientras tanto en otra parte de la galaxia se estaban desarrollando procesos similares según
las estrellas nacían y morían. E l otro átomo de nuestra historia se formó en el corazón de
esta estrella moribunda. En el catastrófico proceso de una supernova, 226 protones y
neutrones se fusionaron de un átomo de carbono, convirtiéndose en un átomo de uranio.
Después de deambular por la enorme galaxia de la vía láctea nuestros dos átomos de
encontraron con el ardiente nacimiento de un sistema solar. El átomo de carbono durante
todas sus reencarnaciones solo es un engranaje extremadamente pequeño en una enorme
maquina cósmica.
Nuestro mundo nació en llamas. Y el átomo de uranio fue atraído hacia él, pronto la
superficie de la tierra se enfrió, pero en el interior seguía fundido. El magma circulaba
lentamente y nuestro átomo de uranio se vio arrastrado durante eras de vuelta a la
superficie, a pesar de las altas temperaturas y presiones en el interior de la tierra, la
integridad de nuestro átomo nunca se vio amenazada. Todo este hecho de átomos incluido
nosotros.