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LA SAGRADA FAMILIA(*)
"La salvación del mundo vino a través del corazón de la Sagrada Familia y se enraizó
en la historia del hombre una vez por siempre.
Oremos hoy por todas las familias del mundo para que logren responder a su vocación
tal y como respondió la Sagrada Familia de Nazaret.
Oremos especialmente por las familias que sufren, pasan por muchas dificultades o
se ven amenazadas en su indisolubilidad y en el gran servicio al amor y a la vida para
el que Dios las eligió" (Papa San Juan Pablo II. Ángelus. Domingo 30 de Diciembre
1984, Fiesta de La Sagrada Familia).
(*)
Esta festividad se celebra el Domingo que cae entre la Octava de Navidad
(25 de Diciembre al 1 de Enero), o el 30 de Diciembre, si no hay un Domingo entre estos dos días.
Este año 2020 la celebramos el Domingo 27 de Diciembre.
(*)
Oración del Papa Francisco. Carta Apostólica Patris Corde.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Dios quiso nacer dentro de una familia y así ha santificado la familia humana. Dentro
de unos días celebraremos la festividad de ella, recordaremos que Dios quiso nacer
dentro de una familia para que tuviera alguien que lo cuidara, lo protegiera, lo ayudara
y lo aceptara como era.
Al nacer Jesús en una familia, el Hijo de Dios ha santificado la familia humana. Por
eso nosotros veneramos a la Sagrada Familia como Familia de Santos. Esta es una
buena ocasión para renovar nuestro ruego, para que Dios esté presente en todas las
familias de la tierra.
Oh Jesús, acoge con bondad a nuestra familia que ahora se entrega y consagra a Ti,
protégela, guárdala e infunde en ella tu paz para poder llegar a gozar todos de la
felicidad eterna.
Oh María, Madre amorosa de Jesús y Madre nuestra, te pedimos que intercedas por
nosotros, para que nunca falte el amor, la comprensión y el perdón entre nosotros y
obtengamos su gracia y bendición.
Meditación:
Jesús, María y José, hoy queremos ser reflejos de vuestra unión, de vuestra
perseverancia, de vuestro amor filial, intercedan para que nuestras familias sean fiel
reflejo de las de ustedes, que reine la comprensión y el entendimiento.
Palabras del Papa Pablo VI:
Sagrada Familia de Nazaret... "Lección de vida doméstica. Enséñanos lo que es la
familia, su comunión de amor, su sencilla y austera belleza, su carácter sagrado e
inviolable; enséñanos lo dulce e insustituible que es su pedagogía; lo fundamental e
insuperable de su sociología" (Iglesia de la Anunciación de Nazaret
Domingo 5 de enero de 1964).
Oración Final:
Señor Nuestro Jesucristo, que junto con María y José consagraste con inefables
virtudes la vida doméstica, haz que por intercesión de ambos sepamos instruirnos con
el ejemplo de tu Sagrada Familia. Elevemos nuestras oraciones a ti Señor, para poner
nuestra familia bajo tu mirada, te pedimos la acompañes, la asistas en sus
necesidades, la mantengas en amorosa unión y guíes sus pasos hasta conseguir tu
eterna compañía en el cielo. Que en ella cada hijo aprenda de Jesús la obediencia, el
estudio y el trabajo. Que cada mujer aprenda de María, la humildad y el espíritu de
sacrificio. Que cada hombre aprenda de José a amar a Jesús y a su familia con
fidelidad y rectitud.
Jaculatoria:
Jesús, María y José, junto a ustedes no tiene lugar la tempestad, ustedes son nuestro
refugio. Auméntanos Sagrada Familia, nuestra fe, para sabernos aunados con
ustedes. Amén.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Oh Jesús, acoge con bondad a nuestra familia que ahora se entrega y consagra a Ti,
protégela, guárdala e infunde en ella tu paz para poder llegar a gozar todos de la
felicidad eterna.
Oh María, Madre amorosa de Jesús y Madre nuestra, te pedimos que intercedas por
nosotros, para que nunca falte el amor, la comprensión y el perdón entre nosotros y
obtengamos su gracia y bendición.
Amén.
Oración por la Familia:
Señor haz de nuestro hogar un sitio de tu amor. Que no haya injuria porque Tú
nos das comprensión. Que no haya amargura porque Tú nos bendices. Que no
haya egoísmo porque Tú nos alientas. Que no haya rencor porque Tú nos das el
perdón. Que no haya abandono porque Tú estás con nosotros. Que sepamos
marchar hacia Ti en el diario vivir. Que cada mañana amanezca un día más de
entrega y sacrificio. Que cada noche nos encuentre con más amor. Haz Señor
con nuestras vidas, que quisiste unir, una página llena de Ti Haz Señor de
nuestros hijos lo que anhelas, ayúdanos a educarlos, orientarlos por tu camino.
Que nos esforcemos en el apoyo mutuo. Que hagamos del amor un motivo para
amarte más. Que cuando amanezca el gran día de ir a tu encuentro nos
conceda el hallarnos unidos para siempre en Ti Amén.
Meditación:
“La familia que reza unida, permanece unida".
San José, que los hombres aprendan a amar sus familias, con fidelidad y rectitud.
Glorioso San José, ayúdanos a ser persistentes en la oración.
María, como madre y protectora de tu hogar, cobija a nuestras mujeres y a nuestras
madres para que ellas también sean como tú medianeras en las dificultades que se
nos presentan.
Oración Final:
Señor Nuestro Jesucristo, que junto con María y José consagraste con inefables
virtudes la vida doméstica, haz que por intercesión de ambos sepamos instruirnos con
el ejemplo de tu Sagrada Familia. Elevemos nuestras oraciones a ti Señor, para poner
nuestra familia bajo tu mirada, te pedimos la acompañes, la asistas en sus
necesidades, la mantengas en amorosa unión y guíes sus pasos hasta conseguir tu
eterna compañía en el cielo. Que en ella cada hijo aprenda de Jesús la obediencia, el
estudio y el trabajo. Que cada mujer aprenda de María, la humildad y el espíritu de
sacrificio. Que cada hombre aprenda de José a amar a Jesús y a su familia con
fidelidad y rectitud.
Jaculatoria:
Jesús, María y José, junto a ustedes no tiene lugar la tempestad, ustedes son nuestro
refugio. Auméntanos Sagrada Familia, nuestra fe, para sabernos aunados con
ustedes. Amén.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Oh María, Madre amorosa de Jesús y Madre nuestra, te pedimos que intercedas por
nosotros, para que nunca falte el amor, la comprensión y el perdón entre nosotros y
obtengamos su gracia y bendición.
Oh San José, ayúdanos con nuestras oraciones en todas nuestras necesidades
espirituales y temporales, a fin de que podamos agradar eternamente a Jesús.
Amén.
Oración por la Familia:
Señor haz de nuestro hogar un sitio de tu amor. Que no haya injuria porque Tú
nos das comprensión. Que no haya amargura porque Tú nos bendices. Que no
haya egoísmo porque Tú nos alientas. Que no haya rencor porque Tú nos das el
perdón. Que no haya abandono porque Tú estás con nosotros. Que sepamos
marchar hacia Ti en el diario vivir. Que cada mañana amanezca un día más de
entrega y sacrificio. Que cada noche nos encuentre con más amor. Haz Señor
con nuestras vidas, que quisiste unir, una página llena de Ti Haz Señor de
nuestros hijos lo que anhelas, ayúdanos a educarlos, orientarlos por tu camino.
Que nos esforcemos en el apoyo mutuo. Que hagamos del amor un motivo para
amarte más. Que cuando amanezca el gran día de ir a tu encuentro nos
conceda el hallarnos unidos para siempre en Ti Amén.
Meditación:
Amado San José, que en los momentos de crisis dentro de nuestras familias, que los
hombres imitemos tu temple, tu cordura, tu fidelidad, tu trabajo, tu silencio, tu amor
incondicional y tu perseverancia en la fe.
Señor, como tú queremos imitarte como hijos obedientes, respetuosos de nuestros
mayores, que sepamos callar cuando algo no nos agrada, que sepamos hablar
cuando nuestra familia necesita nuestra palabra y nuestra opinión.
Sagrada Familia de Jesús, María y José, que sepamos siempre dar todo lo mejor de
nosotros, que sepamos ceder en nuestra convivencia diaria. Que entendamos que
en la felicidad de nuestra familia, estará también nuestra propia felicidad y paz.
Sagrada Familia de Nazaret... "Lección de trabajo. ¡Oh Nazaret, oh casa del Hijo del
Carpintero, cómo querríamos comprender y celebrar aquí la ley severa, y redentora
de la fatiga humana; recomponer aquí la conciencia de la dignidad del trabajo;
recordar aquí cómo el trabajo no puede ser fin en sí mismo y cómo, cuanto más libre
y alto sea, tanto lo serán, además del valor económico, los valores que tiene como
fin; saludar aquí a los trabajadores de todo el mundo y señalarles su gran colega, su
hermano divino, el Profeta de toda justicia para ellos, Jesucristo Nuestro Señor!"
(Iglesia de la Anunciación de Nazaret Domingo 5 de enero de 1964).
Oración Final:
Señor Nuestro Jesucristo, que junto con María y José consagraste con inefables
virtudes la vida doméstica, 5haz que por intercesión de ambos sepamos instruirnos
con el ejemplo de tu Sagrada Familia. Elevemos nuestras oraciones a ti Señor, para
poner nuestra familia bajo tu mirada, te pedimos la acompañes, la asistas en sus
necesidades, la mantengas en amorosa unión y guíes sus pasos hasta conseguir tu
eterna compañía en el cielo. Que en ella cada hijo aprenda de Jesús la obediencia, el
estudio y el trabajo. Que cada mujer aprenda de María, la humildad y el espíritu de
sacrificio. Que cada hombre aprenda de José a amar a Jesús y a su familia con
fidelidad y rectitud.
Jaculatoria:
Jesús, María y José, junto a ustedes no tiene lugar la tempestad, ustedes son nuestro
refugio. Auméntanos Sagrada Familia, nuestra fe, para sabernos aunados con
ustedes.
CONSAGRACIÓN A LA SAGRADA FAMILIA I
María, Madre de Jesús y Madre nuestra, con vuestra piadosa intercesión haced que
sea aceptable a Jesús esta humilde ofrenda, y obtenednos su gracia y bendición.
Señor Jesucristo, quien con María y José consagraste la vida doméstica con tus
inefables virtudes, concede que nosotros, con la asistencia de los dos, podamos
aprender con el ejemplo de La Sagrada Familia y podamos atender a su eterna
fraternidad. Por quien vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
* * *
Usted necesitará agua exorcizada y sal exorcizada, que son aún más potentes
contra el enemigo que el agua bendita y la sal bendita.
En primer lugar, esta es una oración de tu corazón. Le preguntas al Padre a través
del Corazón de Jesús porque Él derramó Su sangre por nosotros en la Cruz. A través
de la Intercesión del Inmaculado Corazón de María, bajo la sombra del Espíritu Santo,
consagras tu hogar a la voluntad del Padre para lo que Él desea hacer con él. Él será
el dueño de tu casa ahora.
Haces lo mismo afuera con tu terreno. Diga la misma oración por su tierra para que
el Señor haga con ella lo que quiera. El Señor tiene un conocimiento perfecto de la
geografía de su propiedad. No te preocupes Cuando consagras tu tierra, le pertenece
a Él y estará bajo la protección de un ángel. Cuando llegue el momento de que las
personas entren en un refugio, nadie podrá entrar sin el signo de la cruz en su frente,
reconocido por usted y por el ángel, en la parte delantera de su propiedad.
Cuando ha consagrado su tierra, su hogar, el refugio está protegido por el santo ángel
del Señor, no solo el espacio delineado que ha consagrado, sino también a todos sus
habitantes en esa área. Esto significa que si alguien llega a su hogar con el espíritu
del demonio, el demonio se quedará afuera. La persona puede entrar, pero el espíritu
esperará a que regrese. No pasará.
No puedes consagrar el hogar de otra persona porque tiene que ser un acto de su
libre albedrío ante el Padre. La consagración debe seguir al corazón. Todos tienen la
capacidad de abrir su corazón al Padre. Él respetará su voluntad. Esto es lo que
llamamos la disposición interna del corazón para cumplir la voluntad del Señor.
¿Puede consagrar su hogar y su tierra si su cónyuge no es católico practicante? Sí,
porque usted es el dueño de la tierra y la casa. Y cuando llegue el día, estarás feliz
de que se haga.
Cuando eres un inquilino, significa que puedes consagrar el espacio que te pertenece,
pero no puedes consagrar la tierra. Simplemente consagra el apartamento donde
estás y estarás protegido.
Puedes consagrar un lugar donde no vives, si eres el dueño del espacio, porque será
para el pueblo del Señor para el momento en que el Señor sacudirá este mundo.
¿Es la consagración un evento único o habrá necesidad de repetir? Es una sola cosa.
Cuando el Padre toca algo, te aseguro que se toca para siempre, a menos que se
profana un lugar. Si hay un pecado mortal en esa tierra o en el hogar o refugio, tendría
que ser reconsagrado. Cuando una iglesia consagrada es profanada por actividades
de pecado mortal allí, el obispo tiene que reconsagrar la iglesia.
Fuentes:
http://www.vatican.va/content/john-paul-ii/es/angelus/1984/documents/hf_jp-ii_ang_19841230.html
http://www.vatican.va/content/francesco/es/apost_letters/documents/papa-francesco-lettera-
ap_20201208_patris-corde.html
http://www.vatican.va/content/paul-vi/es/speeches/1964/documents/hf_p-
vi_spe_19640105_nazareth.html
https://www.devocionario.com/varias/familia_1.html
https://www.countdowntothekingdom.com/es/por-que-fr-michel-rodrigue/