Está en la página 1de 52

Organización

de las Naciones Unidas


para la Educación,
la Ciencia y la Cultura
el
Correo de la
UNESCO

2008 • Número 5 •
Edición revisada

Claude Lévi-Strauss:
miradas distantes
© UNESCO/Danica Bijeljac
2 Claude Lévi-Strauss en el sexagésimo aniversario de la UNESCO

Sumario
3 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Editorial

5 . . . . . . . . . . . . . . Claude Lévi-Strauss y la UNESCO

10 . . . . . . . Pakistán: hogar espiritual y realidad nacional

12 . . . . . . . . El Occidente puede aprender mucho de Asia

17 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . “¿Primitivos?”

21 . . . . . . . . . . . . . . . Las matemáticas del hombre

“ Nos forjamos sin duda la

ilusión de que la igualdad y la


25 . . . . . . . . . La aportación de las ciencias sociales a la

humanización de la civilización técnica

29 . . . . . . . . . . . . . . La feria anual de los presagios


fraternidad reinarán algún día
31 . . . . . . . . . . . . . Los hechiceros y el psicoanálisis
entre los hombres, sin que corra
35 . . . . . . . . . . . . . . . . . . Sinfonía de los sabores


peligro su diversidad . 39 . . . . . . . . . . ¿La antropología en peligro de muerte?

Claude Lévi-Strauss, 47 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Una encuesta difícil

el 22 de marzo de 1971 49 . . . . . . . . . . . . . . . . . Lévi-Strauss rememora…

51 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Archivos
en la UNESCO

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Editorial
Jasmina Šopova

“ El esfuerzo de la ciencia no debe


ser tan sólo ayudar al progreso
de los hombres; es necesario que
acceso a sus fondos para que este
número especial, a falta de ser
exhaustivo, pudiera ser lo más diver-
samiento antirracista– se dedicó a
demostrar que era inútil combatir la
idea de desigualdad de las razas, si
trabaje también por su unión y soli- sificado posible. se dejaba perdurar la tesis de la
daridad”, afirmaba en 1951 Claude aportación desigual de las distintas
Lévi-Strauss en su primer artículo La idea del papel fundamental de sociedades al acervo común de la
para El Correo, revista con la que iba las ciencias en la evolución de la humanidad.
a colaborar regularmente en el humanidad, y más concretamente la
decenio de 1950, exponiendo ideas de la interacción entre las ciencias Año tras año, en sus artículos
que más tarde desarrollaría en obras humanas y las exactas, constituye para “El Correo” reproducidos en
hoy célebres en el mundo entero. uno de los centros de interés esen- este número especial, Claude Lévi-
ciales de este pensador fuera de lo Strauss remachó esa idea, señalando
En otro artículo, al preconizar la común, que colaboró con nuestra sucesivamente que Occidente no
unificación de los métodos de pen- Organización desde su fundación, había tenido en cuenta las enseñan-
samiento de las ciencias humanas y inmediatamente después de la zas de Asia, que los pueblos llama-
las ciencias exactas, señalaba que Segunda Guerra Mundial, como dos primitivos trataban a los 3
“las especulaciones de los primeros podrán ver nuestros lectores en el dementes con métodos muy pareci-
geómetras y aritméticos apuntaban artículo “Claude Lévi-Strauss y la dos a los del psicoanálisis cuando en
más al hombre que al mundo físico”. UNESCO” del antropólogo Wiktor Europa se les encadenaba, que una
Citaba el caso de Pitágoras, que Stoczkowski. comida ritual de los kwakiutl no
“estaba totalmente impregnado de difería mucho de los banquetes de
la significación antropológica de “Raza e historia” –texto escrito a los países llamados civilizados, que
los números y las figuras geométri-
cas”, y el ejemplo de los sabios de
petición de la UNESCO que ha lle-
gado a ser una obra clásica del pen- …
todo hombre es tal porque habla,
fabrica instrumentos y 
China, la India, la América preco-
lombina y el África precolonial, que
“se interesaron por el significado y
las vir tudes propias de los
números”.

“En un primer momento nuestras


ciencias se han aislado para profun-
dizarse, pero, una vez alcanzado un
determinado nivel de profundidad,
consiguen volver a agruparse. Así se
va verificando paulatinamente –en
un terreno objetivo– la vieja hipóte-
sis filosófica de […] la existencia
universal de una “naturaleza
humana”, decía el antropólogo en un
documento de 1956 conservado en
la Unidad de Archivos de la UNESCO, © Museo del Quai Branly (París)
que nos ha facilitado el pleno Brazalete caduveo, traído del Mato Grosso (Brasil) por Lévi-Strauss.

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… ajusta su conducta a una del proyecto de la UNESCO de reali-
serie de reglas, y no porque el mate-
rial con el que fabrica su casa sea de “ No hay nada que indique
que los prejuicios raciales
zar una encuesta sobre las tenden-
cias de la investigación en las
uno u otro tipo… Con estos y otros ciencias sociales y humanas. Ese
ejemplos el antropólogo apoyaba las estén disminuyendo. En informe se acompaña con otros
tesis defendidas por la UNESCO cambio, sí hay indicios de documentos que muestran el
desde su creación. que, tras breves períodos de debate suscitado por este tema en
aquel entonces: el “esquema del
calma en algunas partes,
Wiktor Stoczkowski relata tam- capítulo antropología” redactado
vuelven a resurgir en otras
bién el conflicto que se produjo en un año después por Lévi-Strauss,
1971 entre Lévi-Strauss y la con intensidad redoblada. un texto complementario del antro-
Organización con motivo de la inter- De ahí que la UNESCO haya pólogo belga Luc de Heusch y unos
vención del antropólogo en el acto creído necesario entablar breves comentarios ásperos del
inaugural del Año Internacional de periódicamente una lucha cuyo profesor soviético Tokarev (en
la Lucha contra el Racismo y la línea). 
resultado es, por lo menos,
Discriminación Racial. El texto de
esta intervención sobre el tema ”
incierto .
Claude Lévi-Strauss,
“Raza y cultura” se haría después
famoso en el mundo entero. “Raza y Cultura”, 1971

Treinta y siete años después, la primera vez también, la gran


4 grabación sonora de esta interven- mayoría de los artículos
ción se hace pública por primera en publicados por Claude Lévi-
este número del El Correo (versión Strauss en nuestra revista se
en línea de El Correo). han traducido al árabe, el
chino y el ruso. La elabora-
El 16 de noviembre de 2005, ción de este número especial
Claude Lévi-Strauss volvió a la nos ha ofrecido también la
UNESCO para participar en los actos oportunidad de revisar las
de celebración del sexagésimo ani- traducciones al español y el
versario de la Organización (en inglés publicadas antaño. A
línea). Fue un momento de excep- este respecto, queremos
cional emoción que los lectores agradecer a nuestros colabo-
podrán descubrir en las diferentes radores Francisco Vicente-
secciones de este número, junto con Sandoval y Cathy Nolan sus
algunos documentos manuscritos y traducciones y el trabajo de
un testimonio inédito del antropó- revisión realizado en estos
logo aportado en una entrevista dos idiomas.
concedida a la UNESCO el 20 de
noviembre de 2006, una semana Por último, queremos
después de que cumpliera 98 años. agradecer también a nues-
tros colegas Jens Boel y
Por primera vez en su historia “El Thierry Guednee la labor
Correo” recurre simultáneamente al realizada para seleccionar y
sonido, la imagen y la escritura, digitalizar documentos de
para enriquecer el contenido de este archivo como el informe del
número especial en homenaje a esta 13 de marzo de 1964, en el
© Museo del Quai Branly (parís)
ilustre personalidad que va a cumplir que Lévi-Strauss formula Barboquejo de sombrero traído del Mato Grosso
cien años en 2008 (en línea). Por una serie de reparos acerca (Brasil) por Claude Lévi-Strauss.

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Claude Lévi-Strauss y
la UNESCO
Claude Lévi-Strauss fue uno de los artífices de la primera
declaración de la UNESCO sobre la cuestión racial y
autor de “Raza e historia”, opúsculo escrito a petición
la Organización, así como de “Raza y cultura”. En 2005
participó en la celebración del sexagésimo aniversario
de la UNESCO. Esta es la historia de medio siglo de
relaciones entre el antropólogo y la Organización.
Wiktor Stoczkowski,
Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales (EHESS), París.
Autor de “Anthropologies rédemptrices.
Le monde selon Lévi-Strauss” (2008).
© Claude Lévi-Strauss
Lévi-Strauss en Estados Unidos. Entre 1940 y 1944

L a primera contribución de Claude entonces. Sin embargo, en residió en este país, y fue uno de los miembros
fundadores de la Escuela Libre de Altos Estudios de
Lévi-Strauss a la labor de la los últimos años se produjo Nueva York.
UNESCO data de 1949, cuando un acercamiento entre la
empezó a participar en una comisión UNESCO y Claude Lévi- lución que deseaban debía hacerse 5
internacional de científicos encar- Strauss, que culminó con la reconci- sin violencia alguna, gracias a una
gada de redactar la primera declara- liación entre ambos y la presencia transformación radical de la con-
ción de la UNESCO sobre la cuestión de este último en los actos organi- ciencia moral de los individuos que
racial, publicada en 1950. Este zados con motivo de la conmemora- sentaría las bases del nuevo huma-
mismo año, la UNESCO le encargó ción del sexagésimo aniversario de nismo necesario para edificar una
que efectuase una encuesta sobre el la Organización en 2005. sociedad igualitaria, justa y pací-
estado de las ciencias sociales en fica. Aspiraban a que las relaciones
Pakistán. Más tarde, en 1951, fue Estas vicisitudes atestiguan una entre los pueblos fueran regidas por
designado miembro del comité de evolución paralela, a lo largo de organismos internacionales capaces
expertos encargado de crear el Con- medio siglo, del pensamiento de de resolver los conflictos entre
sejo Internacional de Ciencias Socia- Claude Lévi-Strauss, por un lado, y Estados, ­suprimiendo así el recurso
les, del que sería su primer Secretario de la doctrina de la UNESCO, por a la guerra. Estas ideas concorda-
General entre 1952 y 1961. En 1952, otro lado. El tema principal de ban con las del programa del Insti-
a petición de la UNESCO, escribió debate giraba en torno a la diversi- tuto Internacional de Cooperación
“Raza e historia”, que con el correr dad biológica y cultural de la espe- Intelectual que, entre los años
del tiempo se ha convertido en un cie humana. veinte y treinta del siglo pasado,
texto clásico del antirracismo. En sostuvo principios que prefiguraban
1971, la UNESCO invitó a Lévi- la futura doctrina de la UNESCO. Por
Strauss a pronunciar una conferen-
Acuerdos… eso, fue muy natural que Lévi-
cia con motivo del Año Internacional Claude Lévi-Strauss comenzó a for- Strauss aceptase en 1949 la invita-
de la Lucha contra el Racismo y la marse intelectualmente en un cír- ción a participar en las tareas de la
Discriminación Racial sobre el tema culo de jóvene s soc ialis t a s Organización, ya que el programa de
“Raza y cultura”. El contenido de hondamente marcados por la catás- ésta encarnaba perfectamente sus
ésta se estimó poco conforme a la trofe de la Primera Guerra Mundial, convicciones personales.
doctrina de la Organización, dando en la que no habían tomado parte.
lugar a una ruptura de la prolongada
colaboración mantenida hasta
Todos ellos eran visceralmente paci-
fistas y antinacionalistas. La revo-
Después del desastre provocado
por el nazismo,  …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
ción a esa campaña educativa. ción Racial sobre el tema “Raza y
El propósito del autor era pro- cultura”, sus ideas acerca de la doc-
porcionar un argumento que trina de la UNESCO eran mucho más
pudiese remediar una imper- críticas que en 1952. Confesó que
fección importante de la doc- dudaba de que “la difusión del saber
trina antirracista de la UNESCO. y el fomento de la comunicación
Para qué sirve –decía Lévi- entre los seres humanos consiguie-
Strauss– demostrar que no hay ran algún día hacerles vivir en armo-
prueba biológica alguna que nía, aceptando y respetando su
corrobore la idea de la des- diversidad”, y concluyó diciendo
igualdad entre las “razas “, si que la lucha contra el racismo había
luego dejamos que perdure la resultado poco eficaz por ser erró-
creencia en una desigualdad neos los principios fundamentales
en el plano cultural, anclada del diagnóstico inicial en el que se
en una convicción intacta de basaba el programa de la Organiza-
que las diferentes sociedades ción a este respecto. En efecto,
no son capaces de aportar con- según Lévi-Strauss, el carácter
tribuciones equivalentes al racial que adopta la intolerancia no
© UNESCO
“Raza e Historia” en japonés. patrimonio común de la huma- se basa en ideas falsas sobre la
nidad. Lévi-Strauss se dedicó a raza, sino que tiene un fundamento

6 … deslegitimar la ideología de
demostrar que la capacidad de
realizar progresos culturales no
más profundo: la saturación demo-
gráfica de nuestro planeta; y estas
la desigualdad de las razas se impo- estr ibaba en la
nía como una tarea prioritaria. La superioridad de tal
UNESCO tenía empeño en promover o cual sociedad con
la difusión de las ideas que los respecto a otras,
nazis habían cuestionado: la unidad sino en la aptitud
de la especie humana, la arbitrarie- que cada sociedad
dad de las clasificaciones raciales, tenía para estable-
la igualdad de los seres humanos, cer intercambios
los efectos anodinos del mestizaje recíprocos con las
y el instinto de cooperación como demás. Al hacer de
característica esencial de la espe- los intercambios la
cie humana. Todas estas ideas cons- condición básica del
tituyeron el mensaje principal de la progreso, “Raza e
primera declaración de la UNESCO historia” se armoni-
sobre la cuestión racial (1950). zaba perfectamente
© UNESCO/Claude Bablin
con la ideología de
Claude Lévi-Strauss y René Maheu en la UNESCO (1971).
Después de la publicación del la cooperación que
texto de la declaración, se editaron la UNESCO deseaba
rápidamente varios folletos desti- propagar. ideas falsas sólo son el disfraz ideo-
nados al público en general, que lógico revestido para ocultar los
fueron preparados por la división conflictos que emanan de esa
de la UNESCO encargada del estudio
… y desacuerdos saturación.
de la cuestión racial en el contexto Diecinueve años más tarde, cuando
de una “ofensiva educativa”. El Claude Lévi-Strauss fue invitado a Lo que resulta verdaderamente
opúsculo “Raza e historia”, escrito pronunciar la conferencia inaugural paradójico es que Lévi-Strauss con-
por Claude Lévi-Strauss en ese
entonces, representó su contribu-
del Año Internacional de la Lucha
contra el Racismo y la Discrimina- …
cibiera esta idea de las repercusio-
nes nefastas 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… del crecimiento de la
población mundial cuando se tra-
taron cuestiones relacionadas con
la demografía en el Consejo
Internacional de Ciencias Sociales,
a raíz de una iniciativa suya de
organizar varios coloquios sobre
esta disciplina.

Después de esta conferencia se


patentizó el desacuerdo de Lévi-
Strauss con la doctrina de la
UNESCO. En su opinión, la
Organización se equivocaba al
tratar de reconciliar dos tenden-
cias antinómicas: por un lado, el © UNESCO/Danica Bijeljac
Claude Lévi-Strauss y Koichiro Matsuura en la UNESCO (2005).
progreso civilizador que genera un
aumento de la población y de los Lévi-Strauss, el proyecto de la Vergara] en la que se incluyó el
intercambios culturales; y por otro UNESCO era en parte inválido, ya texto “Raza y cultura”.
lado, conjuntamente, el desvaneci- que no cabía esperar que se pudiera
miento de la diversidad cultural modificar la inalterable naturaleza
ocasionado por esos intercambios y humana tratando de influir en su Preservar el inestimable 7
la saturación demográfica provo- componente social mediante la patrimonio de la
cada por el crecimiento de la pobla- educación y la lucha contra los diversidad
ción con su inevitable cortejo de prejuicios.
intolerancias y hostilidades contra
pueblos que se han convertido en No obstante, veinticuatro años más
rivales. En este contexto, Lévi- Los propósitos de Lévi-Strauss tarde, Claude Lévi-Strauss será de
Strauss llegó a afirmar que cada causaron una fuerte conmoción. Se nuevo invitado por la UNESCO a
cultura tenía derecho a permanecer puede imaginar sin esfuerzo alguno ocupar la tribuna del gran auditorio
ciega y sorda a los valores del Otro, el desasosiego de los funcionarios de la sede de la Organización con
e incluso a cuestionarlos. Esto de la UNESCO que, al encontrarse motivo del sexagésimo aniversario
suponía sustituir la idea defendida con él en un pasillo, después de la de su fundación. En esta ocasión, la
por la UNESCO de que el ser humano conferencia, le expresaron su hosti- conferencia pronunciada por el
se abre espontáneamente al Otro y lidad porque había puesto en tela antropólogo suscitó una reacción
es proclive a cooperar con sus con- de juicio los “artículos de fe” de diametralmente opuesta: el público
géneres, por la idea de que el una Organización a la que habían le tributó en pie una larga y entu-
hombre es naturalmente propenso a decidido servir por estimar que siástica ovación. Por paradójico que
ser, si no hostil al Otro, por lo valía la pena defenderlos. El enton- parezca, Lévi-Strauss vino a decir
menos cauteloso con él. ces Director General de la UNESCO, en 2005 más o menos lo mismo que
René Maheu, que invitó al antropó- en 1971. Reiteró que la explosión
La xenofobia – en la forma logo a pronunciar esta conferencia, demográfica es una catástrofe cau-
moderada que reviste en la concep- quedó muy contrariado. “Aquello sante de muchos de nuestros males
ción de Lévi-Strauss, esto es, la fue un escándalo sonado”, así e inductora de un empobrecimiento
insensibilidad a los valores del Otro comentará Lévi-Strauss, algunos de nuestra diversidad cultural, y
– pasaba así de la categoría de años más tarde, este incidente y las agregó que para mantener ésta es
hecho cultural modificable a la de consiguientes reacciones en el pre- necesario que los pueblos limiten


hecho natural imposible de des- facio a su obra “La mirada distante” sus intercambios y sepan guardar
arraigar. Por eso, en opinión de [Barcelona, 1984, Editorial Argos distancias. 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… Si las ideas que se estimaron primeros en defender. El proyecto ground for all peoples” [La educación
escandalosas en 1971 pudieron reci- fundacional de la UNESCO preveía fundamental, base común para todos
bir una buena acogida en 2005, esto llevar a cabo una acción educativa a los pueblos] publicado en 1947. De
se debe a que la doctrina de la Orga- escala planetaria con el propósito de hecho, este programa pretendía
nización había evolucionado en ese impulsar el ­progreso social y edificar imponer por doquier el mismo modelo
intervalo de más de un cuarto de una “nueva unidad humana”, según la cultural, concebido esencialmente
siglo, acercándose a la visión que
Claude Lévi-Strauss fue uno de los
expresión utilizada en el informe
“Fundamental education - Common- …
por los occidentales. A finales del
decenio de 1940, 

Declaración sobre la cuestión racial (1950)

La “raza”, un mito social


El 27 de noviembre de 1978, la Conferencia General de la UNESCO adoptó en su 20ª reunión la Declaración sobre
la Raza y los Prejuicios Raciales.
El texto primigenio del que emanó esta declaración fue la Declaración sobre la cuestión racial del 20 de julio de
1950, en cuya elaboración Lévi-Strauss desempeñó un papel de primer plano.

Extractos.
1. Los hombres de ciencia están de acuerdo en reconocer que la humanidad es una y que todos los hombres per-
tenecen a la misma especie, la del “Homo sapiens”. […]
4. En resumen, la palabra “raza” designa algunas concentraciones en las cuales la frecuencia y distribución de los
genes o características físicas aparecen, fluctúan y en algunos casos llegan a desaparecer en el curso del tiempo,
8 en virtud, ya sea del aislamiento geográfico, ya del cultural, ya de ambos a la vez. […]
5. Estos son los datos científicos. Pero, por desgracia, cuando la mayor parte de la gente emplea el término “raza”,
no lo hace en el sentido anteriormente definido. Para la mayoría de las personas, una raza es un grupo humano
al que se complace en definir como tal de una manera arbitraria. […]
6. […]Como se cometen ordinariamente graves errores de este género al emplear en el lenguaje corriente el tér-
mino “raza”, sería conveniente renunciar a su empleo de manera definitiva cuando se habla de las razas humanas,
y adoptar la expresión “grupos étnicos”.
7. ¿Cuál es la opinión de los hombres de ciencia sobre los grupos humanos que actualmente pueden ser distingui-
dos como grupos étnicos? Las razas humanas pueden ser y han sido clasificadas de diversos modos por los antro-
pólogos, pero hoy la mayoría de éstos se muestra de acuerdo en clasificar a la casi totalidad de la humanidad
actual en tres grupos principales, a saber: el grupo mongoloide, el grupo negroide y el grupo caucasoide.
9. Sea cual fuere la clasificación que el antropólogo hace del hombre, jamás incluye en su clasificación las carac-
terísticas mentales. […] Los tests han demostrado la semejanza esencial que hay, desde el punto de vista psíquico
e intelectual, entre los diferentes grupos humanos. […]
11. En lo que respecta al temperamento del hombre, debe decirse que nunca se ha podido probar de manera deci-
siva la existencia de diferencias innatas entre los grupos humanos. […]
13. Todos los datos que se han podido obtener demuestran que desde los tiempos más remotos no han dejado de
producirse mezclas de razas. […] Por otra parte, nunca se ha demostrado que las mezclas de razas tengan efectos
biológicos desfavorables. […]
14. […] A decir verdad, la “raza” es más un mito social que un fenómeno biológico, y un mito responsable de
grandes daños en el terreno humano y social. No hace mucho que este mito ha percibido un tributo muy elevado
en vidas humanas y ha sido responsable de innumerables padecimientos. […]

15. Debemos ahora considerar en qué medida las afirmaciones expuestas influyen en el problema de la igualdad
humana. Pero antes es necesario afirmar, del modo más categórico, que la igualdad, en tanto que principio moral,
no se funda en la tesis de que todos los seres humanos están igualmente dotados. […] Pero las características
que hacen diferir a unos grupos de otros se exageran a menudo, recurriéndose a ellas para poner en duda la validez
de la igualdad en el sentido étnico. […] Por último, cabe decir que los estudios biológicos corroboran la ética de
la fraternidad humana. […] Cada ser humano no es sino parte de una humanidad a la que se encuentra indisolu-
blemente ligado.

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… ese proyecto unificador se sideraba una amenaza para la diver- desde decenios atrás. Ahora, en los
consideraba revolucionario y progre- sidad cultural, que hoy en día no se inicios del siglo XXI, Lévi-Strauss y la
sista. En 2005, la perspectiva de la percibe como un obstáculo para el UNESCO compartían la misma convic-
UNESCO se había invertido con res- progreso, sino como un inestimable ción. Así, el combate humanista del
pecto a esta concepción inicial. La patrimonio que todos debemos pre- antropólogo y el de la Organización
unificación llevaba ahora el lúgubre servar. Claude Lévi-Strauss venía han vuelto a concordar.
nombre de “mundialización” y se con- defendiendo este punto de vista

La idea de densidad subjetiva de la población


En su “Nota preliminar sobre el programa del Consejo Internacional de Ciencias Sociales”, fechada el 27 de febrero
de 1953, Claude Lévi-Strauss se extiende sobre la cuestión demográfica. He aquí algunos pasajes.

Extractos.
Los demógrafos han enfocado los problemas de población con una óptica demasiado objetiva. Ahora bien, la densi-
dad de población no se deriva solamente del número de habitantes por kilómetro cuadrado o de la relación existente
entre necesidades y recursos.
Hay otros factores que intervienen en ella, por ejemplo el desarrollo de los medios de comunicación, que multi-
plica los contactos entre los individuos (si tomamos en consideración las carreteras y los medios de transporte) y
entre las conciencias (si ampliamos la perspectiva y tomamos en consideración los medios de comunicación intelec-
tual). Una población reaccionará de modo diferente en función de que sea consciente o no de su densidad objetiva,
de que ésta le infunda ánimo o le inspire temor, y de que la minimice o exagere sus efectos.
Para evaluar la evolución demográfica, es preciso que en las variables estudiadas por la demografía se integren
otras variables estudiadas por otras ciencias sociales como el derecho, la ciencia económica, la ciencia política, la 9
sociología, la antropología social y la psicología.
Otro aspecto particular del mismo problema –que me ha señalado A. Sauvy, Presidente de la Comisión de Población
de las Naciones Unidas, y sobre el que los demógrafos están de acuerdo para pedir la colaboración de otras ciencias
sociales– es la reacción diferente de cada país ante el aumento de la presión demográfica, que es absolutamente
imprevisible si se recurre a análisis exclusivamente demográficos. Esta reacción puede ser positiva como ocurre en
Holanda, prácticamente inexistente como sucede en Francia, o negativa como la que se ha producido en la India.
Aquí tenemos, una vez más, un caso en el que sólo se podrían formular previsiones gracias a un estudio comparativo
de los regímenes jurídicos, las instituciones políticas, la situación económica, las costumbres ancestrales y la psi-
cología del grupo.
Ampliación de las dimensiones de las agrupaciones nacionales
Estamos familiarizados con la idea de que el mundo político actual comprende agrupaciones nacionales que no
son de la misma magnitud. El continente europeo está compuesto todavía por Estados de un tamaño que podríamos
llamar tradicional, en comparación con el de los Estados Unidos, la Unión Soviética, China y la India. Se suele admi-
tir en general que estos “Superestados” representan un tipo de estructura normal para el mundo moderno, lo cual
explica por ejemplo las dinámicas de unificación en Europa. Hoy en día podemos, por lo tanto, observar la existencia
no sólo de formas extremas de agrupaciones nacionales, sino de toda una serie de formas intermedias. Sería muy
interesante estudiar las consecuencias de la ampliación de las agrupaciones nacionales. Se puede emitir “a priori”
la hipótesis de que los Estados grandes no pueden tener el mismo tipo de estructuras jurídicas, políticas, económi-
cas y sociales que los pequeños y de que la comunicación entre sus miembros debe efectuarse en función de moda-
lidades diferentes. De esas diferencias ¿cuáles son las que obedecen de manera exclusiva o predominante a la talla
de las agrupaciones? Despejar este interrogante exige la colaboración de los demógrafos (que están estudiando
ahora el problema del mínimo de población), los antropólogos (que estudian los grupos de dimensiones muy reduci-
das) y los historiadores (que conocen un proceso análogo, aunque de menor escala: el de la formación de las nacio-
nalidades en el siglo XIX). También exige, obviamente, el concurso de los juristas, economistas, sociólogos y
psicólogos.
No es seguro que se consiga de esta manera determinar un tamaño óptimo de las agrupaciones nacionales, pro-
blema éste que ya había preocupado en su tiempo a Augusto Comte. Sin embargo, sí sería posible llegar a conclusio-
nes e hipótesis que ayudarían a los hombres de Estado –especialmente en Europa– a prever las consecuencias de los
esfuerzos que están realizando con miras a una federación o unificación.

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Pakistán: hogar espiritual
y realidad nacional
Sería un craso error el considerar solamente en su aspecto
económico los angustiosos problemas que ha de abordar
el Pakistán, dice Lévi-Strauss en este primer artículo,
que fue publicado por El Correo en mayo de 1951. País
joven y muy viejo a un tiempo, el Pakistán condensa en
sus problemas los de gran parte del mundo.
Claude Lévi-Strauss

D e todos los Estados que se repar-


ten la extensión de la tierra
habitada, el Pakistán es, sin duda
una fisonomía geográfica y
social bien determinada.
Como hogar, se adelanta, en
© Kiran Zindagi
El Pakistán “fue fundado para permitir
que todos los musulmanes vivieran con arreglo
a los principios del Islam”.
alguna, uno de los que poseen una cierta manera, a su indivi-
fisonomía más original. Las leyes dualidad nacional presente,
orgánicas que definen su existencia lo que le obliga a mantener un Pakistán Occidental y la Bengala
proclaman que fue fundado para impulso creador constantemente Oriental difieren por el clima, la
10 permitir a todos los musulmanes renovado, modelándose a imagen de fisiografía e, incluso, en el plano
vivir de acuerdo con los principios la gran promesa en que quiere con- humano, por la lengua. Esta última
del Islam, y en ese sentido consti- vertirse no sólo para sus propios es la parte más reducida del país y la
tuye un hogar abierto a todos los nacionales, sino para todos los que más poblada al mismo tiempo, y no
miembros de una misma comunidad un día puedan venir a solicitarle la ha de extrañarnos que su déficit ali-
espiritual, sea cual fuere su origen protección islámica. menticio sea cubierto por la parte
nacional. Sin embargo, el Pakistán menos fértil y más dilatada. Además,
es, al mismo tiempo y en el sentido la economía de Bengala Oriental
más exacto del término, una nación;
El yute, llave de está completamente centrada en la
reúne bajo una misma soberanía a la economía producción de yute, en la que se
territorios humanizados durante Basta contemplar el mapa para com- basa el equilibrio del presupuesto
milenios por un mismo pueblo que prender la complejidad de los pro- común de las dos partes del Pakis-
desde hace siglos viene profesando, blemas a que debe enfrentarse tan tán. Este producto sólo puede ser
en su mayoría, los principios mora- gran exigencia. Separados por transformado en el extranjero,
les, políticos y religiosos que son 1.500  km de territorio hindú, el debido a la total carencia de una
hoy el fundamento del nuevo Estado. industria nacional.
Ese doble carácter de hogar espiri-
tual y de realidad nacional otorga al
Pakistán su f isonomía propia. “ ¿Quién mejor que la UNESCO
para recabar la atención
El Pakistán tiene prácticamente
el monopolio mundial de una mate-
Explica, asimismo, algunas de sus ria prima que no puede elaborar por
paradojas, sobre todo la de que, a de los sabios y los técnicos la carencia de las fábricas adecua-
pesar de querer reagrupar a todos sobre el hecho -que con tanta das y que no puede exportar en
los musulmanes de la antigua India, frecuencia suelen olvidar- de mayor cantidad por la insuficiencia
unos 40.000.000 de entre ellos (es que la ciencia no tiene por de instalaciones portuarias. Frente
decir, un 30% del total) se encuen- única misión el resolver los a los vastos proyectos del gobierno
tren todavía dispersos por el resto paquistaní -fábricas para el yute en
problemas científicos, sino
del subcontinente. Como nación, el
Pakistán posee fronteras definidas y
también los sociales?
” fábrica de papel  …
Narayanganj, presa hidroeléctrica y

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… de Karnafully, Junto a problemas de carác-
—instalaciones del ter parecido, otros, más parti-
puerto de Chittagong y culares, se plantean en la
construcción de dárse- Bengala Oriental: su solución
nas en el delta del reclamaría un gran esfuerzo
Ganges, dique de imaginativo y para eso la cola-
Malakand y refinerías boración internacional sería
de azúcar en Mardan-, muy bien acogida. Por intenso
se plantean los graves que sea el cultivo del yute, no
problemas de su finan- alcanza a absorber la actividad
ciación y de la transfor- ni asegurar la subsistencia de
© Claude Lévi-Strauss/Museo del Quai Branly (París)
mación de una gran Muchachas kuki de la localidad de Boshonto (Bangladesh). una población cuya densidad
parte de la población Fotografía de Lévi-Strauss (1951). llega a los 1.000 habitantes
campesina analfabeta por kilómetro cuadrado. Desde
en una clase obrera con es menos urgente el problema de la hace varios siglos, esta pobla-
educación técnica y social; factores readaptación de los niños a un modo ción ha venido buscando trabajo en
que constituyen los más fuertes de vida dotado de una cierta segu- las industrias de la región (telares),
obstáculos para el progreso del ridad. Este es el mismo problema como la famosa manufactura de
Pakistán y que, en una cierta que se ha planteado con los niños muselinas, que dieron notoriedad a
medida, podrán ayudarle a superar víctimas de la Segunda Guerra Dacca. Pero ese artesanado rural
la “Ayuda Técnica para el Fomento Mundial, para cuya solución ha sido presenta características únicas: tri-
Económico” de las Naciones Unidas necesario el concurso conjunto de butario del mercado internacional 11
y las disposiciones del punto cuarto psicólogos, sociólogos, psiquiatras para la mayoría de sus materias
del discurso del Presidente Truman. y educadores del mundo entero. primas, depende también del mismo
La labor, pues, que se propone llevar para su venta. Así, hemos podido
a cabo la UNESCO en esta empresa visitar, no lejos de Dacca, la región
de solidaridad, posee una indudable
El drama de los de Langalbund, donde, en pueblos
importancia. El hecho mismo de su botones de nácar de increíble pobreza, más de 50.000
independencia ha acarreado inmen- “¿Quién mejor que la UNESCO para personas viven totalmente de la
sos perjuicios al Pakistán. Desde recabar la atención de los sabios y confección de botones de nácar (del
1947, el Pakistán Occidental (Sind y los técnicos sobre el hecho -que con mismo tipo del utilizado en la cami-
Punjab) ha prestado acogida a tanta frecuencia suelen olvidar- de sería barata), que producen en can-
8.000.000 de refugiados proceden- que la ciencia no tiene por única tidades fabulosas, utilizando para
tes de todas las regiones de la anti- misión el resolver los problemas cien- ello herramientas tan primitivas
gua India, que abandonaron todo tíficos, sino también los sociales?” como las utilizadas durante la Edad
-fortuna, bienes materia- Media. Desde la indepen-
les, tierras y deudos ente- dencia, las materias primas
rrados- para integrarse en (productos químicos, hojas
la comunidad espiritual de cartón y fantasía para
de su elección. A pesar de la presentación los boto-
los esfuerzos realizados nes) no llegan a los lugares
por el Gobierno central, de producción y el mercado
todavía viven en espanto- internacional está parcial-
sas e indecibles condicio- mente cerrado. La produc-
nes de miseria muchos ción ha caído de 60.000
millares de esos refugia- gruesas semanales a menos
dos. Por de pronto, los de 50.000 por mes, mien-

…
© UNESCO/Patrick Lagès
adultos precisan de una En el Pakistán Oriental (actual Bangladesh) pueblos enteros vivían
tras que el precio abonado
ayuda material, pero no
 al productor
exclusivamente de la fabricación de botones de nácar.
suite à la page 16

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


El Occidente puede
aprender mucho de Asia
Al precipitar a un Asia todavía primitiva a una economía
mundial preocupada únicamente por la explotación de materias
primas, por la mano de obra y las posibilidades de absorción
de los nuevos mercados, Europa ha desatado una crisis que
hoy en día tiene la responsabilidad de remediar, estima
Lévi-Strauss en este artículo publicado en El Correo en junio
de 1952.
Claude Lévi-Strauss © Toufiq Siddiqui
Ruinas de Mohenjodaro (Pakistán), sitio del Patrimonio
Este artículo es un resumen condensado del que fue publicado en el “Boletín Internacional Mundial de de la UNESCO.
de Ciencias Sociales” (Vol. III, n°4), publicación trimestral editada por la UNESCO.

S i hay una noción que el europeo


interesado por comprender los
problemas del sur de Asia debe des-
hoy se llamaría varias “cuadras” o
”manzanas”; baños públicos, cañerías
y alcantarillas; y barrios residencia-
tas del mundo antiguo iban dando al
mundo moderno sus propios linea-
mientos. Sin duda alguna, ese cre-
terrar en absoluto de su mente, es la les donde abundan las casas cómo- púsculo de una protohistoria de
12 del “exotismo”. A la inversa de lo que das, pero construidas sin gracia carácter uniforme anunciaba ya la
tantas manifestaciones literarias alguna, como ocurre cuando se aurora de otras historias de carácter
–corroboradas a veces por la expe- atiende al bienestar de toda una disímil. Pero tales divergencias no
riencia del viajero– podrían hacer colectividad y no al placer de una fueron nunca estables o continuas.
creer, las civilizaciones orientales no minoría privilegiada. Es imposible Desde la prehistoria hasta la época
acusan esencialmente gran diferen- que todo esto no provoque en el moderna, el Oriente y el Occidente
cia con las de Occidente. visitante la comparación con los han intentado constantemente res-
mejores rasgos y también las taras tablecer esa unidad, comprometida
Echemos un vistazo a los austeros de una gran ciudad moderna, aún en por evoluciones de carácter dispar.
vestigios que los siglos, las arenas, las formas avanzadas de la civiliza- Pero aún en los casos en que pare-
las inundaciones, el salitre y las ción occidental de las que los Estados cían apartarse uno del otro, el carác-
invasiones arias han dejado de la Unidos de América constituyen un ter sistemático de su oposición, que
cultura más antigua de Oriente en modelo hasta para Europa misma. colocaba en un extremo, geográfica
Mohenjodaro y Harapa, sitios del y hasta se podría decir moralmente,
valle del Indo donde hace cerca de A través de cuatro o cinco mil el escenario más arcaico -la India- y
seis mil años florecía una civiliza- años de historia, uno diría que se ha en el otro el más reciente -América
ción. ¡Qué desconcertante espectá- cerrado un ciclo; que la civilización del Norte- bastaría para suministrar
culo ofrecen! Calles rectilíneas como urbana, industrial y pequeñobur- una prueba suplementaria de la soli-
un cordel, que se cortan en ángulo guesa de esos pueblos del valle del daridad del conjunto.
recto; barrios obreros cuyas vivien- Indo no era tan diferente, en lo pro-
das son monótonamente iguales; fundo de su inspiración (aunque si lo
talleres industriales para la molienda fuera en cuanto a proporciones se
Amazonia y Asia, tan
de las harinas, la fundición y el cin- refiere) de la que, tras su larga invo- similares y diferentes
celado de los metales, y aún para la lución dentro de la crisálida europea, a un tiempo
producción en masa de esas vasijas estaba destinada a cobrar plenitud
baratas cuyos trozos se ven ­todavía absoluta de forma en el otro lado del Entre esos dos polos corresponde a
desparramados por los suelos; grane-
ros municipales que ocupan lo que
Atlántico. Así, aún en sus primeros
tiempos, las civilizaciones más remo-
Europa una posición intermedia;
posición modesta,  …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
… sin duda alguna, que trata cía de andar descalzo y de poseer que han afectado a Europa y Asia
de ennoblecer criticando lo que con- como únicos bienes terrenales tres diversos trastornos históricos, fun-
sidera excesivo en ambos extremos: túnicas de algodón que él mismo damentalmente los mismos para
el interés predominante de los nor- lavaba y remendaba; aquel filósofo una y otra, aunque sus repercusio-
teamericanos por los bienes mate- que creía haber resuelto el pro- nes hayan sido opuestas.
riales, y la preocupación demasiado blema social cocinando sus alimen-
exclusiva del Oriente por los valores tos en un fuego de hojas secas que
de orden espiritual; abundancia por él mismo había recogido y macha-
Europa es la América
un lado y miseria por el otro, situa- cado. Esta doctrina de la reducción de Asia
ciones que se trata de resolver en sistemática de las necesidades, Cuando se vuela sobre los vastos
uno y otro de los extremos por medio este esfuerzo por reducir a un territorios del Asia del Sur, de Kara-
de dos dogmas económicos opues- mínimo los contactos y cambios chi a Saigón, después de haber cru-
tos, que tienen como artículo de fe entre gentes y cosas, este reple- z ado el desier to de Tar, el
el dispendio por una parte, y por la garse sobre sí mismo para no usur- espectáculo de este territorio, divi-
otra el ahorro llevado a la mayor par cosas a otros y establecer al dido en parcelas ínfimas y cultivado
parsimonia. mismo tiempo una comunión más hasta el último acre, resulta algo
honda con el Ser, no son producto familiar al visitante europeo. Pero
Cuando, luego de varios años de una mentalidad fundamental- cuando se mira con más atención el
pasados en ambas Américas, el que mente irreconciliable con la de cuadro cambia; esos tonos rosa y
esto escribe recibía el año pasado, Occidente. En realidad, ciertos filó- verde, marchitos y descoloridos,
de un conservador bengalí de sofos occidentales dedicados a esos contornos irregulares de los
manuscritos, su primera lección de estudiar los problemas del Asia de campos y de los arrozales, restitui- 13
filosofía asiática, pudo haberse los monzones han acabado por dos luego a la regularidad con tra-
sentido tentado a caer en tesis llegar a una conclusión que no es zados diferentes; esos límites
excesivamente simplistas o esque- sino una forma apenas racionali- indistintos, con algo de la vaguedad
máticas. A la América amazónica, zada de estas soluciones tradicio- de las colchas de retazos... la alfom-
región tropical pobre, pero despo- nales. Las soluciones son el lógico bra entera, por decirlo así, es la
blada (cosa ésta que compensa par- resultado de la distinta forma en misma. Pero por ser la forma y el
cialmente la otra) se podía color menos claros, menos defini-
oponer el sur de Asia, que es dos que en el paisaje de Europa, se
también una región tropical tiene la impresión de estarla
pobre, aunque superpoblada mirando del revés. Esto, desde
(cosa ésta que, por el contrario, luego, no es más que una imagen.
agrava la otra). Así también, Pero es una imagen que refleja
entre las regiones con climas bien la posición respectiva de
templados, la América del Europa y Asia por lo que respecta a
Norte, con vastos recursos y su civilización común: desde el
una población relativamente punto de vista material, por lo
pequeña, podía oponerse a una menos, una parece ser el envés de
Europa de recursos relativa- la otra; una ha sido siempre la
mente limitados y una cifra ganadora y otra la perdedora,
elevada de población. Pero al como si en el curso de una empresa
pasar del plano económico al dada (que, como recordábamos
plano moral y psicológico, esos más arriba, fue resultado de una
contrastes se hacían más com- acción conjunta) una se hubiera
plejos. Nada parecía estar más asegurado todas las ventajas y la
lejos del estilo vital americano otra todas las dificultades y mise-
que la existencia de aquel filó-
sofo bengalí que se enorgulle-
© Harold Lush
Manuscrito bengalí. guntarse, ¿por cuánto  …
rias. En un caso (pero, cabe pre-

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… tiempo más?) la expansión Sin necesidad de remontarse a crisis que hoy en día tiene la res-
demográfica ha permitido el pro- cinco o seis mil años atrás, hubo ponsabilidad de remediar.
greso agrícola e industrial, si bien una época en que este infortunio y
los recursos han aumentado con miseria no parecía que fueran Comparándose con Estados
mayor rapidez que los consumido- ineluctables, ni tampoco que data- Unidos de América, Europa reco-
res; en el otro, el mismo fenómeno sen de mucho tiempo atrás. Todavía noce de buen grado su posición
se ha traducido, desde principios en los siglos XVII y XVIII –gracias, menos favorable en cuanto respecta
del siglo XVIII, en una baja cons- en gran parte, a los emperadores a las riquezas naturales, la densi-
tante de la participación que corres- mogoles, que fueron unos adminis- dad relativa de población, la pro-
pondía a cada individuo en un fondo tradores magníficos– la población ductividad individual y el nivel
común que ha permanecido más o del Sur de Asia no era excesiva- medio del consumo; y por otro lado
menos est ac ionar io. se enorgullece, con o sin
Europa se ha acostum- razón, de prestar mayor aten-
brado a asociar sus valo- ción y tener mayor interés
res más refinados -tanto que ese país por los valores
en el plano mater ial espirituales. ¿Cómo no se va
como en el plano espiri- a reconocer que, “mutatis
tual- al nacimiento y mutandis”, Asia puede
desarrollo de la vida hacerse el mismo razona-
urbana. Pero el ritmo miento frente a Europa, cuya
increíblemente rápido de modesta holgura constituye
14 la evolución urbana en para ella el más injustifi-
Oriente (piénsese en la cado de los lujos? En cierto
© UNESCO/ Jean Mohr
población de Calcuta, Muchedumbre de obreros de Bangladesh. sentido, Europa viene a ser
cuya población ha cre- los “Estados Unidos” con
cido de 2 a 5 millones y que sueña Asia. Y esta Asia,
medio de habitantes en un plazo de mente numerosa, y al mismo tiempo más pobre y más poblada, a la que
pocos años) ha tenido solamente abundaban los productos agrícolas faltan los capitales y los técnicos
como efecto el concentrar, en las y manufacturados. Los viajeros necesarios para industrializarse y
zonas más castigadas por la pobreza, europeos describieron los famosos que al mismo tiempo ve que su
miserias y tragedias que nunca han bazares que, en pleno campo, se suelo y su ganado se van arruinando
hecho su aparición en Europa, sino extendían por espacio de 20 a 30 más cada día, mientras su pobla-
como contrapartida de un proceso kilómetros (por ejemplo, de Agra a ción aumenta con ritmo insospe-
feliz. En efecto, la vida urbana en Fatipur Sikhri) y donde las merca- chado, tiene una ­t endencia
Oriente no significa otra cosa que la derías se vendían a un tan precio constante a recordar a Europa el
promiscuidad, la falta más elemen- irrisorio que no estaban lejos de origen común de sus dos civiliza-
tal de comodidad y de higiene, las pensar que habían llegado a Jauja. ciones y la desigualdad de su suerte
epidemias, la desnutrición, la inse- por lo que respecta a la explotación
guridad, la corrupción física y Nunca se cansará uno de repetir de un patrimonio común.
mental que sólo puede surgir cuando que Europa, al precipitar a un Asia
las gentes viven en condiciones de todavía primitiva a una economía Es necesario que Europa reco-
tremendo hacinamiento. Se podría mundial preocupada únicamente nozca que Asia tiene sobre ella
decir que todo lo que en Occidente por la explotación de materias iguales títulos y derechos, morales
no parece ser sino accidente patoló- primas, por la mano de obra y las y materiales, que los que ella misma
gico resultante de un crecimiento posibilidades de absorción de los pretende hacer valer a veces ante
normal, constituye la situación nuevos mercados, ha desatado (sin los Estados Unidos de América. Si
típica de un Oriente librado al mismo quererlo, indudablemente, y tanto Europa se imagina que tiene dere-
juego, pero condenado a tener siem-
pre en la mano las peores cartas.
por los beneficios indirectos como
por los abusos del proceso) una
chos sobre el Nuevo Mundo, cuya
civilización emana de ella,  …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
… qno debe olvidar que esos diana. Sólo en épocas muy recientes, otros sistemas similares) una red de
derechos están fundados a su vez con el desarrollo de la psiquiatría, actos y representaciones, de expe-
en bases de orden histórico y mora- el psicoanálisis y la medicina psico- riencias mentales y mecanismos
lue le crean a su vez duros deberes somática, ha comenzado el Occi- físicos cuyo desconocimiento impe-
para con un mundo del que ella dente a tener conciencia de la diría que el pensamiento psicoló-
misma ha surgido: el mundo del inseparabilidad de esos dos mundos gico y filosófico del Oriente fuera
Oriente. contenidos en cada hombre. Esta para el Occidente otra cosa que una
llave, que parece tan nueva para el serie de fórmulas desprovistas de
Pero el Occidente no tiene por Occidente, y que éste maneja de todo contenido.
qué temer que en este ajuste de una manera tan torpe, está en
cuentas entre Oriente y él, sea el manos del Oriente desde hace El sentimiento tan agudo que
Oriente el que reciba todos los siglos, y el Oriente ha sabido usarla Asia tiene de la “interdependencia”
beneficios. Preocupado por dema- con tradicional aplomo, aunque para de aspectos de la vida que en otras
siado tiempo, como ha estado, por ciertos fines que no son los mismos partes del mundo se ha procurado
el aspecto económico de las rela- del Occidente. Orientado desde hace aislar y mantener aparte, así como
ciones entre los dos mundos, ha tres siglos hacia el desarrollo de los de la “compatibilidad” de ciertos
pasado por alto, quizá, un conjunto medios mecánicos, éste ha olvidado valores que a veces se consideran
de lecciones que hubiera podido (o mejor dicho, no se ha preocupado incompatibles, se da también en la
recibir de Asia y que aún no es nunca por desarrollar) los procesos esfera del pensamiento político y
demasiado tarde para solicitar. y técnicas del cuerpo humano que social. El primer ejemplo de ello lo
permiten obtener de este instru- tenemos en el  campo religioso.
mento -el único natural y asimismo Desde el budismo hasta el Islam,
El cuerpo y el espíritu el más universal que existe a dispo- pasando por las diferentes formas
15

Pese al interés manifestado por los sición del hombre- efectos de una del hinduismo, las religiones del sur
eruditos y la obra prestigiosa de los diversidad y una precisión general- de Asia han demostrado ser las
orientalistas de los siglos XIX y XX, mente desconocidas. mejor capacitadas para vivir en
la mentalidad occidental ha perma- buenos términos con otras creen-
necido ­impermeable, en general, a Este redescubr imiento del cias muy diferentes.
los mensajes del pensamiento asiá- cuerpo del hombre, para el que Asia
tico. Pero si éste ha resultado poco podría servir de guía a la humani-
inteligible, ha sido porque se pre- dad, será asimismo un redescubri-
Cuando los musulmanes
tendía comunicarlo a una sociedad miento de su mente, ya que pondría controlaban el mercado
que no había sufrido las experien- en evidencia (como en el yoga y de carne porcina…
cias fundamentales en que
ese pensamiento se apoya. En Bengala Oriental [el actual
Toda la civilización occiden- Bangladesh], no lejos de la
tal ha tendido a disociar, de frontera de Birmania, hemos
la manera más completa visto, unos junto a otros,
posible, las actividades cor- mezquitas vacías de imáge-
porales y las espirituales, o nes, templos hindúes donde
más exactamente, a tratar- se agrupan en familia los
las como dos mundos cerra- ídolos, cada uno de los cuales
dos, sin comunicac ión es receptáculo de un dios, y
posible. Esta actitud se pagodas budistas en que se
refleja en sus conceptos acumulan las imágenes (sim-
filosóficos, morales y reli- ples objetos de contempla-
giosos, y también en la © Simon Knott ción) de un Sabio único,


forma adoptada por sus téc- Mezquita principal de Ipswich (Reino Unido), situada junto a la superior a los dioses y los
iglesia católica de Saint Pancras. Fue construida en 1970 para
nicas y por su vida coti- la comunidad bangladesí de esta ciudad. hombres. 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… Estas formas irreconcilia- tica -antes de que Europa la
bles, pero al mismo tiempo preci-
samente complementarias, de fe
“ Es necesario que Europa
reconozca que Asia tiene sobre ella
obligara a pensar en términos
europeos sobre el asunto- se
humana, pueden coexistir apaci- iguales títulos y derechos, morales y desarrollaron en un ambiente
blemente, a tal punto que una materiales, que los que ella misma totalmente distinto de aquél.
administración musulmana contro- pretende hacer valer a veces ante Desde Asoka, de quien dijera el
laba el funcionamiento de ciertos Director General de la UNESCO,
los Estados Unidos de América.
mercados en donde el único tipo de en su discurso ante la Comisión
Si Europa se imagina que tiene
carne en venta era la de cerdo -ali- Nacional de la India, que llegó a
derechos sobre el Nuevo Mundo,
mento básico de los campesinos de adquirir “la noción de una cola-
origen mongólico en el “hinter- cuya civilización emana de ella, boración universal cuyo motivo
land” de Chittagong- y que, bajo la no debe olvidar que esos derechos fue el bien de todas las criatu-
mirada tolerante y divertida de sus están fundados a su vez en bases de ras”, hasta Gandhi, el ideal per-
bonzos, varios adolescentes budis- orden histórico y moral que le crean seguido fue siempre el de la
tas ayudaban con entusiasmo a a su vez duros deberes para con fraternidad pacífica. Este ideal
arrastrar hasta el río la carroza de un mundo del que ella misma ha está particularmente bien expre-
la diosa Kalí con motivo del festi- surgido: el mundo del Oriente. Pero sado en la obra política, y esté-
val anual de los hindúes. el Occidente no tiene por qué temer tica del emperador Akbar, cuyos
que en este ajuste de cuentas entre palacios en ruinas -en los que
Fácil es, por otra parte, hacer Oriente y él, sea el Oriente el que aparecen unidos los estilos persa

16
contrastar estos idílicos cuadros
de entendimiento y tolerancia con ”
reciba todos los beneficios .
e hindú, e incluso el europeo-
afirman la voluntad y posibilidad
los incendios y masacres que han de hacer vivir armoniosamente
señalado la división de la India y el lógico que la asuma el Occidente (hasta en el seno de la familia
Pakistán. Pero la responsabilidad en primer lugar? Los únicos inten- imperial) las razas, las creencias y
de esas consecuencias universales tos que el sur de Asia ha realizado las civilizaciones. 
del veneno nacionalista ¿no es en el terreno de la unificación polí-

suite de la page 11 pesinos bengalíes, creando peque- del futuro de la humanidad. De este

… (ya explotado por toda una


ños utensilios que simplificaran
-dada la falta de energía eléctrica-
modo, padece del atraso que carac-
terizara a la Edad Media en
serie de intermediarios y especula- los procesos de la fabricación. Pero, Occidente, reproduciendo también
dores) ha bajado en un 75%. Así, ¿quién mejor que la UNESCO para los fenómenos que acompañaron al
mientras el coste de la vida aumen- recabar la atención de los sabios y despertar industrial de nuestros
taba de cinco a seis veces, los ingre- los técnicos sobre el hecho -que con países en los siglos XVIII y XIX y
sos medios se reducían a una tanta frecuencia suelen olvidar- de participando de las aspiraciones que
veinteava parte. que la ciencia no tiene por única caracterizan al siglo en que vivimos.
misión el resolver los problemas Es de desear que las naciones más
Lo anterior no es sino un ejemplo científicos, sino también los socia- desarrolladas proporcionen a este
de los angustiosos problemas que el les? El esfuerzo de la ciencia no país los medios para salvar esas
Gobierno del Pakistán ha de abordar debe ser tan sólo ayudar al progreso etapas y superar esas contradiccio-
en la hora presente, y sería un craso de los hombres; es necesario que nes y que, en contrapartida, apren-
error el no considerarlos mas que en trabaje por su unión y solidaridad. dan de él cómo el hombre puede
su aspecto económico. La clave de País joven y muy viejo a un tiempo, realizarse plenamente sin tener que
esos problemas está en manos de los el Pakistán, lo mismo que otros renunciar a ninguna parcela de su
técnicos. Considérese, por ejemplo, países asiáticos o americanos, con- legado e historia ancestrales. 
cómo podrían aliviarse las terribles densa en sus problemas los de gran
condiciones materiales de esos cam- parte del mundo y su solución es la

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


“¿Primitivos?”
La palabra “primitivo” implica una idea de inicio. ¿No llamamos acaso primitivos a
los pueblos que han conservado el presunto género de vida de la humanidad en sus
comienzos? La hipótesis es atractiva, pero se presta a graves confusiones, según
Lévi-Strauss. En este artículo, publicado en mayo de 1951 en El Correo de la UNESCO, el
antropólogo explica por qué
la noción de primitivismo es
falaz.
Claude Lévi-Strauss

A ntes se hablaba de los salvajes


y el término parecía claro. Eti-
mológicamente el salvaje es el
habitante de las selvas y con esta
palabra se designaba un modo de
vida cercano a la naturaleza, rela-
cionado con la idea más directa-
mente expresada en alemán con el
término de naturvölker. No obstante 17
–además de que no todos los pue-
blos definidos con esta palabra
viven necesariamente en las selvas,
© Edouard Duval-Carrié
por ejemplo, los esquimales– el “La destrucción de las Indias”, detalle del tríptico del artista haitiano Edouard Duval-Carrié
vocablo salvaje pronto llegó a (colección particular).

adquirir un sentido figurado que


fácilmente se convirtió en injurioso. cias, costumbres e instituciones, primitivo al de salvaje, y designa
Por otra parte, la noción de la proxi- depende de un orden que no puede con él un gran número de socieda-
midad a la naturaleza es equívoca: limitarse al orden natural. El mundo des –varios millares según un cál-
el campesino vive mucho más cerca del hombre es el mundo de la civi- culo reciente– que cree poder
de la naturaleza que el habitante de lización y ésta se opone a la natu- agrupar bajo esa denominación,
las ciudades y ambos participan, sin raleza con el mismo rigor y la misma debido a ciertas características que
embargo, de la misma civilización. necesidad, cualquiera que sea el comparten en común. Pero ¿cuáles
nivel de civilización que se tome en son esos caracteres? Aquí es donde
Pronto se llegó al convenci- consideración. Todos los hombres empiezan las dificultades.
miento de que la humanidad no hablan, fabrican instrumentos y
puede ser clasificada en función de adaptan su conducta a normas
la mayor o menor distancia de la determinadas, tanto si habitan en
¿Qué denominador
naturaleza, que antes era la carac- rascacielos como si viven en chozas común?
terística de las distintas socieda- de ramaje en el corazón de los bos- Dejemos inmediatamente de lado el
des. En efecto, lo que distingue a ques. Eso es lo que hace de ellos factor numérico, aunque sin duda
la humanidad, tomada en su con- hombres y no los materiales que tiene una significación global. A
junto, de la animalidad, en su con- ut ilizan para construir sus este respecto, cabe señalar que las
junto también, es que el hombre moradas. comunidades formadas por varios
por su uso universal del lenguaje, millones de miembros constituyen
de instrumentos y de objetos manu-
facturados, por su sumisión a creen-
Por estos motivos, la moderna
etnología prefiere el término de
un fenómeno bastante excepcional
en la historia de  …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
… la humanidad y limitado a otros periodos estas vastas forma- melanesio contemporáneo, ni a la
unas pocas grandes civilizaciones. ciones se disgregan en pequeños Tombuctú de mediados del siglo
Además, no hay que olvidar que grupos compuestos por varias fami- XIX. No pueden confundirse las
éstas aparecieron, en diversos lias –incluso a veces por una sola– civilizaciones que han precedido al
momentos de la historia, en regio- que se bastan por sí mismas. Si una nacimiento de la civilización mecá-
nes tan alejadas entre sí como el sociedad de 40 personas y otra de nica con las que se encontraban
Oriente y el Extremo Oriente, 40.000 pueden ser igualmente lla- fuera de ella y habrían permanecido
Europa, Mesoamérica y Sudamérica. madas primitivas, el factor numé- al margen de la misma durante
rico no es suficiente de por sí solo mucho tiempo si no les hubiera sido
Sin embargo, por debajo de ese para justificar esta denominación impuesta por otros.
umbral numérico, observamos for- común.
zosamente diferencias de tal ampli- En realidad, a lo que nos referi-
tud que el factor del número no mos, cuando hablamos de pueblos
puede tener un valor absoluto:
Culturas situadas fuera primitivos, es a un aspecto histó-
algunos reinos africanos han agru- de la órbita de la rico. En sí misma, la palabra “primi-
pado varios centenares de miles de civilización industrial tivo” implica una idea de inicio.
personas y algunas tribus oceánicas ¿No llamamos acaso primitivos a los
varios millares, pero en las mismas Es posible que pisemos un terreno pueblos que han preservado, o con-
regiones del mundo hay grupos for- más firme si tomamos en considera- servado, hasta la época actual el
mados únicamente por algunos cen- ción otra característica que es presunto género de vida de la
indiscut iblemente humanidad en sus comienzos? La
18 común a las culturas hipótesis es atractiva y válida hasta
que llamamos primi- cierto límite, pero se presta a
t ivas: todas ellas graves confusiones.
están –o al menos
estaban hasta una En primer lugar, no sabemos
época muy reciente– nada absolutamente de los comien-
fuera del área de la zos de la humanidad. Los primeros
civilización indus- vestigios que conocemos –armas e
trial. Pero este crite- instrumentos de piedra tallada que
rio, ¿no es todavía datan de unos centenares de miles
demasiado vasto? de años– no son obviamente las
© Claude Lévi-Strauss manifestaciones primigenias del
Niño de la tribu nambicuara con incrustaciones en la nariz y Con frecuencia se ingenio humano, ya que revelan la
el labio superior (Brasil 1935-1939).
ha subrayado, y no posesión de técnicas complejas que
sin motivo, que los forzosamente tuvieron que desarro-
tenares de miembros y, en algunos modos de vida de Europa occidental llarse paulatinamente. Además,
casos, por unas pocas decenas. no ­cambiaron prácticamente desde esas técnicas son invariablemente
el principio de los tiempos históri- las mismas en regiones geográficas
Por último, ocurre a veces que cos hasta la invención de la muy extensas, lo cual supone que
las mismas poblaciones (por ejem- máquina de vapor. Entre la existen- necesitaron tiempo para propagarse
plo, en el caso de los esquimales y cia de un noble del Imperio Romano e influirse mutuamente hasta llegar
determinadas tribus de aborígenes y la de un burgués francés, inglés u a ser homogéneas.
australianos) poseen una organiza- holandés del siglo XVIII, no hay
ción extraordinariamente flexible diferencia fundamental alguna. No En segundo lugar, todos –o casi
que les permite dilatarse, con oca- obstante, ni la Roma del siglo II todos– los pueblos que llamamos
sión de fiestas o durante ciertas antes de nuestra era, ni el primitivos conocen por lo menos
épocas del año, y contar con varios
miles de personas, mientras que en
Ámsterdam del decenio de 1750,
pueden compararse a un pueblo …
alguna de las artes o técnicas apa-
recidas muy tardíamente 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… en el desarrollo de la civili- hacer creer que estaban inmo-
zación. Recordemos solamente, vilizados y aislados in situ
para precisar las ideas, que si la desde los tiempos más remotos,
edad de los más antiguos utensi- estuvieron en contacto durante
lios de piedra tallada se remonta a milenios con todo tipo de
400.000 o 500.000 años atrás, la poblaciones mucho más desa-
agricultura, la ganadería, el arte rrolladas. Estos pueblos supues-
de tejer y la alfarería aparecieron tamente pr imitivos distan
en tiempos mucho más recientes, mucho de carecer de historia,
hace unos 10.000 años o quizás ya que precisamente ésta es la
menos. El “primitivismo” de los que explica las condiciones
salvajes que cultivan huertos, crían sumamente particulares en que
cerdos, tejen taparrabos o fabrican han sido descubiertos.
pucheros es, por consiguiente, muy © Claude Lévi-Strauss
Hombre de la tribu nambicuara con un adorno
relativo si se tiene en cuenta la Sería absurdo creer que
nasal incrustado de pluma (Brasil 1935-1939).
duración global de la historia de la –por ignorar todo o casi todo
humanidad. de su pasado– los pueblos pri-
Los aborígenes australianos sólo mitivos son ­pueblos sin historia.
También podemos preguntarnos pudieron llegar en embarcaciones a Sus más lejanos antepasados hicie-
si no hay por lo menos algunos de su continente, lo cual quiere decir ron su aparición en la Tierra al
esos pueblos en los que perdure un que conocieron la navegación y des- mismo tiempo que los nuestros. A
modo de vida mucho más remoto, pués la olvidaron. La emigración de lo largo de decenas e incluso cente- 19
parecido al de los hombres de los un pueblo a una región que carece nares de miles de años otras socie-
tiempos primitivos. Algunos ejem- de arcilla de buena calidad explica a dades precedieron a las suyas y, en
plos nos vienen enseguida a la menudo la desaparición de la alfa- todo ese tiempo, estas últimas han
mente, por ejemplo el de los aborí- rería, que llega a veces a borrarse vivido y perdurado como las nues-
genes australianos y el de los fue- por completo de la memoria humana. tras, evolucionando también.
guinos, que llevan una vida nómada La lingüística ha demostrado a Conocieron guerras, migraciones,
en regiones semidesérticas y viven menudo que algunos pueblos, cuyo períodos de miseria y prosperidad,
de la caza y la recolección. Estos bajo nivel de civilización podía y tuvieron grandes hombres que
dos pueblos utilizaban todavía dejaron su impronta en el cono-


recientemente utensilios de cimiento, la técnica, el arte, la
piedra e ignoraban la alfarería y
Todas estas sociedades –desde el moral y la religión. Todo ese
el telar. Los primeros descono- poderoso imperio incaico […] hasta pasado suyo ha existido, pero no
cían incluso el arco, mientras las pequeños grupos nómadas de saben casi nada de él y nosotros
que los segundos poseían sola- recolectores de plantas silvestres de lo ignoramos por completo.
mente uno de tipo muy Australia– son comparables, en el
rudimentario. siguiente aspecto por lo menos: todas La presencia y presión laten-
ellas ignoraban, o ignoran todavía, tes de ese pasado desaparecido
el arte de escribir. […] Aunque estas bastan para demostrar cuán fala-
¿Pueblos sin historia? sociedades no sean más “primitivas” ces son el término de primitivo y
El progreso de los conocimientos que las nuestras en sentido estricto, la noción misma de primitivismo.
etnológicos ha demostrado, sin su pasado es cualitativamente Pero, al mismo tiempo, solicitan
embargo, que en estos casos y en distinto. […] Ese pasado fluido sólo nuestra atención tanto el verda-
todos los demás que hubiéramos se podía preservar en una proporción dero carácter común –y distin-
podido añadir, el primitivismo reducida, mientras que el excedente, tivo con respecto a nuestras
aparente es el resultado de una a medida que se iba acumulando, sociedades– de todos los pueblos
estaba condenado a perderse
regresión y no la preservación
milagrosa de un estado prístino. irremediable y definitivamente .
” como la justificación  …
que designamos con ese vocablo,

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… que se pueda punto muy próximo del que
hallar para agruparlos zarparon o impedirles al
indistintamente bajo una menos alejarse de él, esto
misma denominación, por es, progresar.
impropia que ésta sea.
Por eso, recomendamos a
los lectores –e incluso a los
Primitivo, un especialistas– que descon-
adjetivo falaz fíen de términos tan ambi-
Todas estas sociedades guos como los de salvaje,
–desde el poderoso Impe- primitivo o arcaico. Al adop-
rio Inca, que consiguió tar como criterio exclusivo
encuadrar a varios millo- la presencia o la ausencia
nes de hombres en un sis- de la escritura en las socie-
tema económico y político © Claude Lévi-Strauss dades que estudiamos, recu-
de singular eficacia, hasta Mujer nambicuara “tocada” con un mono capuchino rrimos ante todo a una
(Brasil 1935-1939).
los pequeños gr upos característica objetiva que
nómadas de recolectores no supone ningún postulado
de plantas silvestres de Australia– Si recurrimos a un símil utili- de tipo filosófico o moral. Al mismo
son comparables, en el siguiente zando el lenguaje de la navegación, tiempo, nos referimos a la única
aspecto por lo menos: todas ellas podríamos decir que las sociedades característica adecuada para inter-
20 ignoraban, o ignoran todavía, el que poseen la escritura disponen pretar la diferencia real que las dis-
arte de escribir. Sólo podían conser- de un medio para conservar en la tingue de nosotros. La noción de
var de su pasado lo que una memo- memoria la estela de su derrota y “sociedad primitiva” es engañosa.
ria humana puede retener. Esta poder mantenerse así, durante un En cambio, la de “sociedad sin
afirmación es válida para el con- largo período, en el mismo rumbo. escritura” nos permite acceder a un
junto de esas sociedades, incluso En cambio, las sociedades carentes aspecto esencial del desarrollo de
para el número reducido de las que de escritura –a pesar de que su sin- la humanidad, explica la historia y
suplieron el desconocimiento de la gladura sea tan larga como la de las facilita las previsiones acerca del
escritura con ciertos procedimien- anteriores– se ven forzadas a seguir futuro de los pueblos en cuestión,
tos mnemotécnicos, como los quipus un derrotero fluctuante que puede así como la posibilidad de influir en
incaicos o los símbolos gráficos de conducirles, en definitiva, a un él. 
los nativos de la Isla de Pascua y
algunas tribus africanas.

Aunque estas sociedades no


sean más “primitivas” que las
nuestras en sentido estricto, su
pasado es cualitativamente dis-
tinto. La falta de escritura no les
permitía almacenar la memoria del
pasado para utilizarla a cada
momento en beneficio del pre-
sente. Ese pasado fluido sólo se
podía preservar en una proporción
reducida, mientras que el exce-
dente, a medida que se iba acumu-
lando, estaba condenado a perderse © NESCO/Danica Bijeljac
irremediable y definitivamente. Ideogramas aún no descifrados de la desaparecida escritura de los rapa nui (Isla de Pascua).

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Las matemáticas del hombre
En un artículo publicado en 1954 en el “Boletín
de Ciencias Sociales”, Lévi-Strauss preconiza
la unificación de los métodos de pensamiento
y augura que las matemáticas humanas se
liberarán de los desesperanzadores “grandes
números”, esa balsa de náufragos en la que
han venido agonizando las ciencias sociales
perdidas en medio de un piélago de cifras. He
aquí algunos extractos.
Claude Lévi-Strauss
Extractos del Prefacio de Claude Lévi-Strauss al “Boletín de Ciencias
Sociales”, Vol. VI, Nº 4, 1954.
© Claude Lévi-Strauss
Lévi-Strauss y la mona Lucinda, su acompañante

E n la historia de la ciencia todo mente en el ámbito durante la estancia en Brasil (1935-1939).

ocurre como si el hombre hubiera de las ciencias


concebido con mucha anticipación el humanas donde se ha producido la anticuado dentro de la propia disci-
programa de sus investigaciones y, evolución más sensacional. Quizás plina matemática. También se les 21
una vez determinado éste, tuviese esto sea así porque estas ciencias puede reprochar que no se hubieran
que esperar siglos para estar en con- parecen, a primera vista, las más percatado del nacimiento de las
diciones de ejecutarlo. Desde los distantes de toda noción de rigor y nuevas matemáticas que, hoy en día,
comienzos de la reflexión científica, medida, pero quizás se deba también se hallan en plena expansión.
los filósofos griegos se plantearon al carácter esencialmente cualita- Matemáticas a las que bien podría-
los problemas físicos en términos de tivo de su objeto, que les ha impe- mos llamar “cualitativas” –por para-
átomo. Sólo veinticinco siglos más dido aferrarse y ponerse a remolque dójico que pueda parecer el
tarde –y de una manera que sin duda de las matemáticas tradicionales calificativo– ya que han introducido
ellos no habían previsto– estamos –como lo que han hecho las ciencias la independencia entre la noción de
empezando apenas a ir rellenando sociales durante tanto tiempo–, rigor y la de medida. Gracias a estas
los esquemas que trazaron. Otro obligándolas a orientarse desde un nuevas matemáticas –que además
tanto ocurre con la aplicación de las principio hacia formas audaces e fundamentan las especulaciones de
matemáticas a los problemas huma- innovadoras del pensamiento mate- los pensadores de la Antigüedad y
nos ya que, en este caso también, las mático. […] las desarrollan– sabemos que el
especulaciones de los primeros geó- ámbito de la necesidad no se con-
metras y aritméticos apuntaban más Lo que se puede reprochar desde funde forzosamente con el de la
al hombre que al mundo físico. El luego a los psicólogos experimenta- cantidad.
pensamiento de Pitágoras, por ejem- les de principios de este siglo XX,
plo, estaba totalmente impregnado así como a los economistas y demó-
de la significación antropológica de grafos tradicionales, no es que
Ni adiciones, ni
los números y las figuras geométri- hubieran centrado demasiado su multiplicaciones…,
cas, y una preocupación idéntica atención en las matemáticas, sino el matrimonio puede
estaba presente en el de Platón. más bien que no lo hubieran hecho formularse con
suficientemente, limitándose a ecuaciones
Desde hace diez años las medita- tomar de ellas los métodos cuantita-


ciones de los filósofos antiguos han tivos que tienen un carácter tradi- Esa distinción quedó bien clara para
cobrado actualidad, y es probable- cional y considerablemente quien esto escribe 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… en unas circunstancias que matrimonio de los padres y la los a un tratamiento cuantitativo,
se permitirá evocar aquí. Hacia el “clase” de matrimonio de los hijos. era preciso andar trampeando con
año 1944, cuando iba adquiriendo A partir del momento en que se dis- ellos o empobrecerlos irremediable-
progresivamente la convicción de ponía de esos elementos, todas las mente. Sin embargo, hoy en día
que las reglas del matrimonio y la reglas del matrimonio en una socie- abundan las ramas de las matemáti-
filiación no eran –en cuanto reglas dad determinada se podían formular cas (teoría de los conjuntos, teoría
de comunicación– fundamental- en ecuaciones susceptibles de ser de los grupos, topología, etc.) que
mente diferentes a las que rigen en tratadas con métodos de razona- tienen por objeto establecer rela-
la lingüística y de que, por ciones rigurosas entre cate-
lo tanto, era posible dar gor ías de indiv iduos
una formulación rigurosa separadas entre sí por valo-
de las mismas, los matemá- res discontinuos, y esa dis-
ticos consumados a los que continuidad es precisamente
consultó le recibieron con una propiedad esencial de los
desdén y le respondieron: conjuntos cualitativos en sus
el matrimonio no es asimi- relaciones recíprocas, en la
lable a una adición o una que se hacía estribar su
multiplicación –y mucho carácter pretendidamente
menos todavía a una sus- “inconmensurable”, “inefa-
tracción o una división– y ble”, etc.
por consiguiente es imposi-
22 ble dar una formulación Estas matemáticas huma-
matemática del mismo. nas –que ni los matemáticos
ni los sociólogos saben toda-
Esto duró hasta que uno vía dónde ir a buscar y que
de los jóvenes maestros de sin duda distan mucho aún
la nueva escuela matemá- de estar construidas– serán
tica al que se le planteó en todo caso muy diferentes
© Claude Lévi-Strauss
este problema repuso que, Dibujo del diario de viaje de Claude Lévi-Strauss de las matemáticas mediante
para construir la teoría de (Brasil, 1935-1939). las cuales las ciencias socia-
las reglas del matrimonio, les han tratado antaño de
un matemático no estaba dar una forma rigurosa a sus
obligado en modo alguno a redu- miento rigurosos y verificados, aun observaciones.
cirlo a un proceso cuantitativo y, cuando la naturaleza íntima del
de hecho, ni siquiera necesitaba en fenómeno estudiado – el matrimo- Estas nuevas matemáticas están
última instancia saber qué era el nio– se dejara de lado y pudiera resueltas a liberarse de los deses-
matrimonio. Lo único que necesi- incluso ignorarse por completo. peranzadores “grandes números”
taba era lo siguiente: en primer –esa balsa de náufragos donde han
lugar, que los matrimonios observa- venido agonizando las ciencias
dos en una sociedad determinada
Números pequeños y sociales perdidas en medio de un
pudieran reducirse a un número cambios grandes piélago de cifras– y ya no se fijan
finito de clases; y en segundo lugar, Por sencillo y sucinto que sea, este por último objetivo la inscripción
que esas clases estuvieran unidas ejemplo no deja de ilustrar la vía de las evoluciones progresivas y
entre sí por relaciones determina- por la que tiende a encaminarse continuas en curvas monótonas. Su
das, por ejemplo que existiese ahora la colaboración entre las ámbito ya no es el de las variacio-
siempre la misma relación entre la matemáticas y las ciencias huma- nes infinitesimales detectadas por
“clase” de matrimonio del hermano nas. En el pasado, la gran dificultad el análisis de vastos cúmulos de
y la “clase” de matrimonio de la
hermana, o entre la “clase” de
estribaba en el carácter cualitativo
de nuestros ­estudios. Para someter- …
datos. El panorama que se presenta
ante nosotros 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… actualmente es más bien el
del estudio de los números “peque-
ños” y de los ­“grandes” cambios
provocados por el paso de un
número a otro. Si se nos permite el
ejemplo, diríamos que hoy intere-
san menos las consecuencias teóri-
cas de un incremento de la
población de un 10% en un país de
50 millones de habitantes que los
cambios de estructura que se pro-
ducen cuando una “pareja” se con-
vierte en un “ménage à trois”.

Al estudiar las posibilidades y


las exigencias inherentes al número
de participantes de grupos muy
pequeños –que desde este punto
de vista siguen siendo “muy peque-
© Claude Lévi-Strauss
ños”, aun cuando los participantes Familia nambicuara (Brasil 1935-1939).
formen conjuntos que comprenden
millones de individuos– se está rico. Muy pocos de ellos poseen una ciones en Ciencias Sociales de los 23
reanudando probablemente una tra- cultura matemática y, cuando la Estados Unidos, que ha organizado
dición antiquísima. En efecto, los tienen, suele ser muy rudimentaria durante el verano de 1953 un semi-
filósofos y los sabios de China y la y conservadora. Las nuevas pers- nario de matemáticas para especia-
India, e incluso los pensadores pectivas abiertas a las ciencias listas en ciencias sociales en el
indígenas de la América precolom- sociales por algunos aspectos del ­Dartmouth College de Nueva Hamp-
bina y del África precolonial, se pensamiento matemático imponen shire. Durante ocho semanas, un
interesaron por el significado y las por lo tanto a sus especialistas un grupo de seis matemáticos ha expli-
virtudes propias de los números. esfuerzo de adaptación considera- cado a 42 cursillistas los principios
Por ejemplo, en la civilización indo- ble. Un buen ejemplo reciente de lo de la teoría de los conjuntos, la
europea se ha manifestado una pre- que se puede hacer en este ámbito teoría de los grupos y el cálculo de
dilección por el número 3, mientras nos lo da el Consejo de Investiga- probabilidades.
que entre los africanos y los ame-
rindios se ha dado más bien una Es deseable que estas iniciati-
inclinación por el número 4. Esas
preferencias obedecen a propieda-
“ La UNESCO prestaría un vas se multipliquen y generalicen.
[…] En este campo, a la UNESCO le
inmenso servicio preparando
des lógicomatemáticas precisas. incumbe una importante tarea. En
[…] una especie de modelo teórico efecto, en todos los países se expe-
rimenta la necesidad de reformar
de enseñanza de las ciencias los planes de estudios, pero la gran
Pensar en el plano mayoría de los profesores y admi-
sociales, en el que se equilibren
matemático y el nistradores han recibido una for-
sociológico la contribución clásica de éstas mación tradicional y, por lo tanto,
no están suficientemente pertre-
y la aportación revolucionaria
Hoy en día, la inmensa mayoría de chados en el plano intelectual para
los especialistas en ciencias socia- de la cultura y las concebir esa reforma y ejecutarla.
les son todavía el producto de una
formación de tipo clásico o empí-
investigaciones matemáticas

. conveniente llevar  …
De ahí que parezca especialmente

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… a cabo una acción trata es de crear unas mate-
internacional, encargando máticas nuevas. Esta fecun-
la misión de concebir esa dación recíproca entre las
reforma al reduc ido matemáticas y las ciencias
número de especialistas sociales ha sido el objeto
de ciencias sociales del principal del seminario sobre
mundo entero que, hoy la utilización de las primeras
por hoy, son capaces de en las segundas –y también
llevar a cabo una reflexión en las ciencias humanas– que
simultánea en el plano ha tenido lugar en la UNESCO,
matemático y sociológico bajo los auspicios del Consejo
con arreglo a la nueva Internacional de Ciencias
situación. Así, la UNESCO Sociales, durante el bienio
prestaría un inmenso ser- 1953-1954. En ese seminario
vicio preparando una han participado matemáti-
especie de modelo teórico © UNESCO/Dominique Roger
cos, físicos y biólogos, en
de enseñanza de las cien- Litografía de Vasarely representación de las cien-
cias sociales, en el que se cias exactas y naturales, y
equilibren la contribución clásica para que los especialistas en cien- economistas, psicólogos, sociólo-
de éstas y la aportación revolucio- cias sociales puedan beneficiarse gos, histor iadores, lingüistas,
naria de la cultura y las investiga- de los progresos más recientes del antropólogos y psicoanalistas, en
24 ciones matemáticas. Este modelo pensamiento matemático. No se representación de las ciencias
podría modificarse luego para adap- trata exclusivamente –y ni siquiera humanas y sociales. Todavía es
tarlo a los contextos locales. principalmente– de importar en demasiado pronto para evaluar los
bloque de las matemáticas toda una resultados de esta audaz experien-
No obstante, se cometería una serie de métodos y resultados ya cia, pero sean cuales sean sus insu-
equivocación si se cree que sólo se completos. Las necesidades especí- ficiencias –previsibles, por otra
trata de reorganizar la enseñanza ficas de las ciencias sociales y las parte, en esta fase de tanteos– lo
características originales de su cierto es que todos los ­articipantes
objeto imponen también a los han sido unánimes en afirmar que
matemáticos la realización de un este seminario les ha enriquecido.
esfuerzo especial en materia de
adaptación e invención. En su ser íntimo, el hombre
padece de la compartimentación y
las exclusivas intelectuales tanto
Unificación de como del recelo y la hostilidad
los métodos de entre los grupos en su existencia
pensamiento colectiva. Al esforzarnos por unifi-
car los métodos de pensamiento,
La colaboración no debe estable- que nunca podrán ser irreductibles
cerse en una sola dirección. Por para los diferentes ámbitos del
un lado, las matemáticas aporta- conocimiento, estamos contribu-
rían su contribución al progreso yendo a la búsqueda de una armo-
de las ciencias sociales y, por nía interior que probablemente es
otro lado, las exigencias especí- –en un plano diferente al del come-
ficas de estas últimas abrirían a tido de la UNESCO, pero con una
© UNESCO las matemáticas nuevas perspec- eficacia indudable– la verdadera
Portada de la edición conjunta en griego tivas. En este sentido cabe decir, base de toda sabiduría y de toda
de “Raza e historia” y “Raza y cultura”
de Claude Lévi-Strauss. por lo tanto, que de lo que se paz. 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


La aportación de las ciencias sociales
a la humanización de la civilización
técnica
Contrariamente a lo que se podría creer, la matematización de las ciencias sociales no va a
acompañada en modo alguno por una deshumanización. Así lo afirma Claude Lévi-Strauss en
este documento que lleva la fecha del 8 de agosto de 1956. La civilización técnica no es una
civilización aparte. La humanización depende de todos los hombres y todas las ciencias.
Claude Lévi-Strauss

E l problema planteado no
supone en modo alguno
que se reconozca a las cien-
sociales como ciencias
aparte, su aporte a la
humanización de la civili-
cias un ámbito propio, ni zación no resulta evidente
tampoco que se las defina en modo alguno y necesita,
con caracteres ­específicos. por lo tanto, ser demos-
¿Merecen las ciencias socia- trada. En cambio, si las
les un puesto aparte, entre ciencias sociales no son 25
las humanidades, por un distintas de los trabajos de
lado, y las ciencias natura- investigación tradicional-
les, por otro lado? ¿Ofrecen mente efec tuados en
una verdadera originalidad, nombre de las ciencias
aparte del hecho de no ser humanas, si entran en el
más sociales que las demás ámbito de las humanida-
ciencias y de ser mucho des, ni que decir tiene que
menos científicas, como entonces toda reflexión
han ironizado algunos? sobre el hombre es “huma-
nizante” por el solo hecho
Incluso en los Estados de ser “humana”. Según
Unidos –un país donde © Claude Lévi-Strauss que se tenga una u otra
Lévi-Strauss con Paulo Duarte y su esposa Juanita en Nueva York,
parecía estar sólidamente durante la Segunda Guerra Mundial.
concepción de las ciencias
establecida desde medio sociales, su contribución al
siglo atrás la división tri- progreso nos parecerá tam-
partita entre ciencias humanas, clásica en Europa desde el bién diferente. En la primera hipó-
sociales y naturales– se está pre- Renacimiento: las ciencias natura- tesis, esa contribución se concebirá
senciando la aparición de nuevas les que tratan del mundo objetivo, con arreglo al modelo de la contri-
categorías. Por ejemplo, las “beha- por un lado, y las humanidades que bución del ingeniero, esto es: estu-
vioral sciences”, que agrupan los se ocupan del hombre y del mundo dio de un problema, determinación
tres órdenes de ciencias en la en relación con éste, por otro de las dificultades para resolverlo y
medida en que tienen por objeto lado. elaboración de una solución con la
directo al hombre. Ahora bien, la ayuda de técnicas adecuadas. En
mejor traducción de “behavioral Estos problemas metodológicos este contexto, el orden social se
sciences” sería “ciencias de la con- son de una importancia inmediata contempla como un objetivo dado
ducta humana”, o sea que así volve-
mos a la distinción bipartita,
para la cuestión debatida: si se
debe considerar a las ciencias …
que sólo se trata de mejorar. En
cambio, en el segundo 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… caso se hace hincapié en la sistemas políticos o económicos saber si algunos niveles son aisla-
toma de conciencia: el solo hecho con respecto a los demás es sufi- bles, o si dependen de otros niveles
de estimar que un orden es malo o ciente para justificar la existencia con los que mantienen relaciones
imperfecto lo humaniza, habida de disciplinas separadas. Se ha lle- dialécticas. Por último, la ciencia
cuenta de que el surgimiento de una gado a sostener legítimamente que mantiene siempre el postulado de la
crítica es, de por sí, un cambio. este descuartizamiento arbitrario coherencia de su objeto y, a este
de los fenómenos sociales desem- respecto, cabe preguntarse si las
Cabe preguntarse cuál es la boca en la deshumanización de ciencias sociales en cuestión no se
característica común de los traba- diversas maneras. definen con respecto a un pseudob-
jos de investigación que se agrupan jeto y no se reducen a una especie
bajo el nombre de ciencias sociales. de juego y manipulación gratuita de
Todas estas ciencias guardan rela-
Ciencias sociales: símbolos. En caso de respuesta afir-
ción con la sociedad y la mejora del ¿manipulación gratuita mativa, nos hallaríamos en el
conocimiento de ésta, aunque por de símbolos? ámbito de la mistificación, que es
razones diferentes. Unas veces se absolutamente contrar ia a la
trata de problemas con caracterís- En primer lugar, podemos pregun- humanización.
ticas tan peculiares que optamos tarnos si todos los fenómenos socia-
por aislarlos de los demás para les tienen un mismo grado de Sin embargo, la mistificación es
poder resolverlos mejor: así ocurre también una operación humana.
con el derecho, la ciencia política Sea cual sea el grado de realidad
y la ciencia económica. Otras veces que se reconozca a los sistemas
26 nos proponemos estudiar fenóme- jurídicos y políticos y sea cual
nos comunes a todas las formas de sea, también, la función objetiva
la vida social, pero tratando de que cumplen en la vida de las
analizarlos a un nivel más pro- sociedades, esos sistemas son
fundo: este es el ambicioso propó- productos del espíritu. Estudiando
sito que comparten la sociología y su estructura y mecanismo de fun-
la psicología social. Otras veces, cionamiento y describiendo su
por último, queremos integrar en tipología, llegamos a saber por lo
el conocimiento del hombre formas menos cómo trabaja la mente
de actividad que son “muy distan- humana para dar una forma racio-
tes” en el tiempo o en el espacio, y nal –aunque sea aparente– a algo
los trabajos de investigación a este que no la tiene. Si las ciencias
respecto entran en el ámbito de la correspondientes son ciencias de
­historia y la etnología. En suma, verdad –esto es, si proceden con
peculiaridad, profundidad y distan- plena objetividad–, los conoci-
cia: he aquí tres formas de resis- mientos que agrupan son humani-
tencia de los hechos sociales que zantes porque permiten al hombre
las correspondientes disciplinas cobrar conciencia del funciona-
tratan de vencer paralelamente, miento real de la sociedad.
pero con medios diferentes. © Museo del Quai Branly (París)
Arco emblemático bororo de 175 cm., El caso de la ciencia económica
traído del Brasil por Lévi-Strauss.
Esas tres formas tienen un fun- es especialmente significativo, ya
damento distinto: es un hecho real que a su forma liberal se le ha acu-
que varios siglos nos separan de la realidad y si algunos de ellos –los sado de manipular abstracciones.
Edad Media y varios miles de kiló- mismos de los que se trata aquí– no Sin embargo, en las ciencias socia-
metros de las sociedades melane- son una ilusión, una especie de fan- les como en todo lo demás, la abs-
sias; en cambio, es una convención
considerar que el aislamiento de los
tasmagoría colectiva. En segundo
lugar, se plantea el problema de …
tracción se puede entender de dos
maneras. Con demasiada 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… frecuencia sirve de con más detenimiento. En un
pretexto para fragmentar primer momento nuestras
arbitrariamente la realidad ciencias se han aislado para
concreta. La ciencia eco- profundizarse, pero, una vez
nómica ha sido víctima de alcanzado un determinado
este error en el pasado. En nivel de profundidad, consi-
cambio, las recientes ten- guen volver a agruparse. Así
tativas de aplicar las mate- se va verificando paulatina-
máticas modernas mente –en un terreno obje-
–llamadas “cualitativas”– a tivo– la vieja hipótesis
la teoría económica han filosófica de la “unidad de
desembocado en un resul- espíritu humano”, o más exac-
tado notable: cuanto más tamente la existencia univer-
matemática –y por ende, sal de una “naturaleza
© Museo del Quai Branly (París)
más abstracta– se ha ido Dibujo del diario de viaje de Claude Lévi-Strauss humana”. Sea cual sea el
haciendo la teoría, mayor (Brasil, 1935-1939). ángulo de enfoque, siempre
ha sido el número de obje- comprobamos que el espíritu
tos históricos y concretos Un acercamiento “humanista” se humano individual o colec-
que ha ido abarcando, al principio, está produciendo también entre la tivo, en sus manifestaciones apa-
como materia de su ­formalismo. No psicología y la sociología. En rentemente menos controladas, o
hay ninguna modalidad del pensa- efecto, al estudiar los mecanismos captado a través de las institucio-
miento económico burgués más de la vida inconsciente, los psicoa- nes tradicionales, obedece siempre 27
próxima de los conceptos marxistas nalistas recurren a un simbolismo y por doquier a las mismas leyes.
que el tratamiento sumamente que es, en definitiva, el mismo que
matemático de la economía en la utilizan los psicólogos sociales y
“Teoría de los juegos y el compor- los lingüistas, en la medida en que
La tercera ola
tamiento económico”, publicada en los lenguajes y los estereotipos La etnología y la historia nos ponen
1944 por Von Neumann y sociales se basan también en acti- en presencia de una evolución de
Morgenstern. En efecto, la teoría vidades inconscientes del espíritu. tipo idéntico. Durante mucho
de estos dos autores se aplica a una tiempo se creyó que la historia sólo
sociedad dividida en grupos rivales, Esta convergencia de las cien- apuntaba a una reconstitución
entre los que se crean antagonis- cias sociales merece ser examinada exacta del pasado. De hecho, tanto
mos o coaliciones. Contrariamente la historia como la etnología estu-
a lo que se podría creer, la matema- dian sociedades “distintas” de la
tización de las ciencias sociales no
va a acompañada en modo alguno “ Situada siempre ‘más acá’
y ‘más allá’ de las ciencias
sociedad en que vivimos. Ambas
disciplinas tratan de que una expe-
por una deshumanización. Esa riencia particular cobre las dimen-
matematización corresponde al sociales, la etnología no puede siones de una experiencia general
hecho de que la teoría tiende a ser disociarse de las ciencias –o más general, por lo menos– para
cada vez más general dentro de que sea así accesible a los hombres
cada disciplina. La ciencia econó- naturales ni de las ciencias de otros países y otros tiempos.
mica, la sociología y la psicología humanas. Su originalidad
están descubriendo el lenguaje que estriba en la unión de los Al igual que la historia, la etno-
tienen en común con la expresión logía se sitúa en el eje de la tradi-
matemática, y nos estamos perca-
métodos de ambas poniéndolos ción humanista. Sin embargo, su
tando rápidamente de que ese len- al servicio de un ‘conocimiento función consiste en elaborar, por
guaje común es posible porque los generalizado’ del hombre, esto primera vez, lo que ­p odríamos
objetos a los que se aplica son
idénticos.
es, de una ‘antropología’ .

llamar un “humanismo democrá-
tico”. Tras el humanismo  …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
… aristocrático del
Renacimiento basado en la compa-
ración exclusiva de la sociedad
griega y la romana –porque no se
conocían otras más– y el huma-
nismo exótico del siglo XIX que
vino a añadir a esas dos civilizacio-
nes las del Oriente y el Extremo
Oriente –aunque sólo por interme-
dio de los documentos escritos y
© Museo del Quai Branly (París)
los monumentos figurados–, la Ornamento frontal bororo, traído del Brasil por Lévi-Strauss.
etnología viene a ser la “tercera
ola”, y probablemente la última superf icie y en profundidad Aun corriendo el riesgo de con-
porque de todas las ciencias socia- simultáneamente. tradecir el título de esta sucinta
les es la más característica del ponencia, es preciso decir que
mundo finito en que se ha conver- nuestras disciplinas no podrán
tido nuestro planeta en el trans-
La civilización técnica humanizar a la civilización procla-
curso del siglo XX. La etnología no es una civilización mándose “sociales” y aislándose de
recurre a la totalidad de las socie- aparte las demás, sino tratando pura y
dades humanas para elaborar un simplemente de ser cada vez más
conocimiento global del hombre y, A falta de textos escritos y monu- científicas. La civilización técnica
28 además, los caracteres particulares mentos figurados, estos modos de no es una civilización aparte que
de las sociedades “residuales” que conocimiento son a un tiempo más exija la invención de técnicas espe-
estudia le han llevado a forjar exteriores y más interiores –tam- ciales para su mejora, y la humani-
nuevos modos de conocimiento, de bién podríamos decir “más gruesos zación de la vida social no es el
los que poco a poco nos vamos per- y más finos”– que los de las restan- atributo privativo de una profesión.
catando de que pueden aplicarse tes ciencias sociales, ya que com- Esta humanización depende de
con provecho al estudio de todas prenden un estudio desde fuera todos los hombres y de todas las
las civilizaciones, incluida la nues- (antropología física, prehistoria y ciencias.
tra. La etnología actúa, pues, en ­t ecnología) y otro desde dentro
(identificación de la Humanizar la civilización téc-
etnología con el grupo nica supone, en primer lugar,
con el que comparte la situarla en perspectiva dentro de la
existencia). Situada historia global de la humanidad y,
siempre “más acá” y en segundo lugar, analizar y com-
“más allá” de las cien- prender los elementos motores de
cias sociales, la etno- su advenimiento y su dinámica. En
logía no puede cualquier caso, por lo tanto, debe-
disociarse de las cien- mos “conocer”. La aportación de
cias naturales ni de las nuestras ciencias no se evaluará en
ciencias humanas. Su función de fórmulas estereotipadas
originalidad estriba en sospechosas y sujetas a los capri-
la unión de los méto- chos de la moda, sino en función
dos de ambas ponién- de los nuevos horizontes que sepan
dolos al servicio de un abrir a la humanidad para que ésta
“conocimiento genera- pueda comprender mejor su propia
lizado” del hombre, naturaleza y su propia historia y
© Claude Lévi-Strauss
Lévi-Strauss en la Amazonia. A sus pies la mona Lucinda,
e s t o e s, d e una estar así, por lo tanto, en condicio-
su compañera de viaje (Brasil, 1935-1939). “antropología”. nes de juzgarlas. 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


La feria anual de los presagios
Imaginemos a Calígula esperando los
presentes de las fiestas del nuevo año en el
vestíbulo de su palacio, o a la reina Isabel I
de Inglaterra dando saltos de alegría ante las
medias de seda y las ligas que le regalaba la
nobleza… En El Correo de agosto-septiembre
de 1955, Lévi-Strauss recurre a una serie de
anécdotas para remontarse a los orígenes
del regalo y mostrar su función social. © Atlantique Japon
Papeletas con vaticinios divinos que se abren el 1º de enero en Japón.
Claude Lévi-Strauss

L a historia de los aguinaldos del


Año Nuevo es sencilla y compli-
cada a la vez. Es sencilla si nos limi-
llegado a ser nuestro primero de
enero. “¿Qué significan –pregunta
el poeta al dios Jano– los dátiles,
francesa ha recogido y mantenido
esta tradición en su verbo “étren-
ner” (estrenar) pero con un sentido
tamos a interpretar el sentido los higos secos y la miel diáfana diferente, ya que en el lenguaje
general de la costumbre, y para ofrecida en un cuenco blanco?”. Y comercial significa efectuar la pri-
comprenderla hay que recordar la el dios le contesta: “Es un buen mera venta del día. 29
fórmula ritual del Día de Año Nuevo presagio: un deseo de que los acon-
en Japón: “o-ni wa soto – fuku wa tecimientos tengan este sabor...”. Es más difícil dar con el origen
uchi” (¡Fuera los demonios! ¡Que También cuenta Ovidio que los mer- exacto de la costumbre de los agui-
venga la buena suerte!). Así como el caderes se imponían la obligación naldos de Año Nuevo en el mundo
Año Viejo debe desaparecer lleván- de abrir un momento sus tiendas el occidental. Entre los antiguos
dose consigo la mala fortuna, la primer día del año, a fin de efec- celtas, los druidas celebraban una
riqueza y la ventura del primer día tuar algunas transacciones que ceremonia en la época del año que
del año entrante, plasmadas en el augurasen negocios prósperos corresponde al primero de enero.
intercambio de regalos, deben cons- durante el resto del año. La lengua Cortaban de las encinas el muér-
tituir un presagio y casi dago –planta mágica y
un conjuro mágico para protec tor a– y lo
que el nuevo ciclo iniciado ­d istribuían entre la
se vista con los más bellos población. De ahí que
colores. en algunas regiones de
Francia se haya desig-
Desde ese punto de nado a los regalos de
vista, la fórmula ritual Año Nuevo, hasta hace
japonesa corresponde a lo poco, con los nombres
que dice Ovidio en el de “guy l’an neuf” o
primer libro de “Fastos” “aguigne t t e”, que
acerca de los ritos roma- vienen de “gui” (muér-
nos de la festividad de dago en francés).
Jano. Aunque en un prin-
cipio esa fiesta no seña- En Roma, durante la
laba el comienzo del año segunda quincena de


© Claude Lévi-Strauss
en la Roma antigua, con Indios mondé en torno a los regalos ofrecidos por los miembros
diciembre y los prime-
el correr del tiempo ha de la expedición de Lévi-Strauss a Brasil (1935-1939). ros días 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… de enero se cele- Inglaterra contaba con los regalos
braban fiestas en las que de Año Nuevo para rehacer su pecu-
se intercambiaban presen- lio y su guardarropa. Los obispos y
tes. Los regalos de diciem- arzobispos le daban de diez a cua-
bre solían ser de dos renta libras cada uno; los nobles le
clases: bujías de cera (que ofrecían vestidos, faldas de todas
nosotros ponemos ahora clases, medias de seda, ligas, casa-
en los árboles navideños) cas, mantos y pieles; y sus médicos
y muñecos de arcilla o y boticarios le enviaban presentes
pasta comestible que se como cofrecillos preciosos, tarros
ofrecían a los niños. Había de jengibre y flor de azahar y otras
también otros tipos de golosinas.
regalos que Marcial des-
cribe pormenorizadamente Durante el Renacimiento, los
en sus epigramas. Las cró- alfileres de metal llegaron a ser en
nicas romanas cuentan Europa el regalo favorito de Año
que los patricios recibían Nuevo, ya que eran una gran nove-
presentes de sus clientelas © Danny Machalini dad. En efecto, hasta el siglo XV
Los regalos de Año Nuevo son el resultado
y los emperadores de los las mujeres no usaban más que
de la democratización de un rito noble
ciudadanos. Calígula los enfaldadores de madera para suje-
aceptaba personalmente, la nuez moscada envuelta en papel tar el vestido. En cuanto a las tar-
30 permaneciendo a tal efecto el día dorado… Los regalos formaban jetas de Año Nuevo adornadas con
entero en el vestíbulo de su parte de un universo más vasto que letras floridas e imágenes, su uso
palacio. podía abarcar hasta el ganado. En estaba generalizado desde Europa
efecto, en algunas regiones de hasta el Japón. Un poeta inglés del
Europa se le hacían ofrendas consis- siglo XVII dice a este respecto:
El peculio de Isabel I tentes en fumigaciones de enebro y “algunos escriben su amor en letras
de Inglaterra aspersiones de orina. de oro”. En Francia, las tarjetas de
Los regalos de Año Nuevo parecen Año Nuevo ilustradas estuvieron en
haber conservado durante largo Tal como se conciben hoy, los boga hasta la Revolución.
tiempo las huellas de su doble regalos de Año Nuevo no son un
origen: las costumbres paganas y vestigio de esos usos populares
los ritos romanos. No se puede com- antiguos, sino el resultado de la
Una interdependencia
prender de otra manera la vanidad democratización de un rito noble, libremente aceptada
de los esfuerzos realizados por la como suele suceder con muchas Para comprender la perdurabilidad y
Iglesia durante toda la Edad Media costumbres actuales. En los comien- la generalización de los regalos de
para lograr su abolición, por consi- zos de la historia moderna, las Año Nuevo es necesario trascender
derarlos vestigios de barbarie. En la familias reales exigían presentes de la anécdota y aprehender el sentido
época medieval, los regalos no eran Año Nuevo para obtener recursos profundo de su institución. “La
solamente un homenaje que rendían suplementarios y dar a sus vasallos manera de dar vale más que lo que se
los campesinos periódicamente a una ocasión de mostrar su fideli- da”, suele decirse en Francia. Todas
sus señores, ofreciéndoles capones, dad. En Francia, el rey Enrique III y las sociedades, salvajes o civiliza-
requesón y frutas en conserva, ni se el duque de Berri se hacían ofrecer das, parecen estar convencidas de
reducían tampoco a ofrendas sim- regalos, según puede verse por el que es mejor lo donado por el pró-
bólicas como las naranjas y los inventario de los bienes de éste jimo que lo obtenido con el propio
limones tachonados de clavos de último, entre los que figura el obse- esfuerzo. Es como si se añadiese un
olor –que solían colgarse como quio de un valioso libro en una edi- valor suplementario al objeto por el
talismanes encima de las jarras de
vino para que éste no se agriara– o
ción que hoy llamaríamos “de lujo”.
Se sabe que la reina Isabel I de …
solo hecho de que se ha aceptado
suite à la page 38

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Los hechiceros y el psicoanálisis
Cuando en Europa se encadenaba a los locos, los pueblos primitivos los trataban con métodos
muy parecidos a los del psicoanálisis, según explica Lévi-Strauss en este artículo publicado
en “El Correo” de julio-agosto de 1956, en el que se hace un paralelo entre los rituales
chamánicos y las psicoterapias modernas.
Claude Lévi-Strauss
Hace años, algu- atraída al más allá por espíritus
nos etnólogos suecos maléficos. En efecto, los indios
recogieron y publica- cunas creen en la existencia de una
ron un largo ritual multitud de almas dotadas con una
de curación utilizado función particular cada una de
entre los indios ellas. El hechicero cuenta a la
cunas de Panamá en enferma, con lujo de detalles, el
casos de parto difí- viaje sobrenatural que él emprende
cil. Ese ritual con- en busca del alma perdida, los obs-
siste en una letanía táculos que encuentra, los enemi-
que el hechicero de gos con quienes combate y cómo
la tribu –o como los domina por la fuerza o la astu-
dicen los especialis- cia, antes de lograr la captura del 31
© Claude Lévi-Strauss tas, el chamán– alma cautiva, liberándola y hacién-
Este hombre, que hablaba portugués, fue uno de los informadores declama ante la dola retornar por fin al cuerpo
de Lévi-Strauss durante su visita a los indios bororo de Brasil
(1935-1939). paciente para su doliente que yace a su lado.
mejorar su estado. El

E l psicoanálisis es, para el hombre


contemporáneo, una conquista
innovadora de la civilización del
hechicero le explica
que su mal proviene de la ausencia
momentánea del alma que preside a
La cura chamánica,
precursora
siglo XX que se coloca en el mismo la creación, ya que ésta ha sido del psicoanálisis
plano que la genética o la teoría de
la relatividad. No obstante, hay Analicemos brevemente las caracte-
algunas personas que, más impre-
sionadas sin duda por el mal uso del
“ Hacia los meses de enero
y febrero de 1936, Yaldeia
rísticas de esta curación, de la que
no hay motivos para suponer que
psicoanálisis que por sus verdaderas Kejara tenía, además de sea ineficaz, por lo menos en cier-
­enseñanzas, persisten en considerar la ‘casa de los hombres’, tos casos. Su primera característica
esta disciplina como una extrava- veintisiete casas, habitadas obedece a su naturaleza puramente
gancia del hombre moderno. En por varias familias en la psicológica: no hay ninguna mani-
ambos casos, se olvida que el psi- mayoría de los casos. […] pulación del cuerpo de la enferma,
coanálisis no ha hecho sino volver a Sólo un indígena que se ni tampoco administración de medi-
encontrar y traducir en términos había fugado de las misiones cinas. El hechicero no hace otra
nuevos una concepción de las enfer- hablaba corrientemente el cosa que hablar o cantar. Se confía
medades mentales que se remonta portugués y, al parecer, había exclusivamente en el discurso para
probablemente a los orígenes de la llegado a leerlo y escribirlo en inducir la curación. En segundo
humanidad y que los pueblos que otros tiempos. Otros cinco o lugar, el tratamiento supone un diá-
llamamos primitivos no han cesado seis más lo comprendían, pero logo entre dos personas: el enfermo
de utilizar, con un arte que sor- su vocabulario se reducía a y el médico. Esto no significa –como
prende con frecuencia a nuestros
mejores profesionales. ”
unas cuantas palabras .
C. Lévi-Strauss (1936)
veremos más adelante– que los
demás miembros  …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
… del grupo social no puedan puede dominar, o más sencilla- acabamos de analizar y una curación
formar un auditorio. Ahora bien, de mente por la turbación de su espí- psicoanalítica reside en el hecho de
esas dos personas, la primera –el ritu, el enfermo se siente excluido que, en el primer caso, es el médico
hechicero, cuyo poder es reconocido del grupo social y llama al médico, quien habla, mientras en el segundo
por toda la tribu– encarna la auto- cuya autoridad es reconocida por el caso esa tarea tiene que realizarla
ridad social y la potencia del orden, grupo, para que le ayude a reinte- el paciente. Se sabe que un buen
mientras que la segunda –la grarse en él. Por último, el trata- psicoanalista permanece práctica-
enferma– padece de un desorden miento no tiene otra finalidad que mente mudo durante la mayor parte
que llamaremos fisiológico, pero extraer del enfermo la narración de del tratamiento. Su misión consiste
que entre los indígenas se considera acontecimientos enterrados en su en ofrecer al enfermo el estímulo de
el efecto de un abuso perpetrado subconsciente que, a despecho de la presencia de otra persona
por la sociedad de los espíritus su antigüedad, siguen rigiendo sus –podríamos decir, incluso, la provo-
contra la de los ­humanos. Dado que sentimientos y representaciones de cación– a fin de que el enfermo
estas dos sociedades deben estar las cosas. pueda investir a ese “otro” anónimo
aliadas normalmente y que con toda la hostilidad
el mundo de los espíritus de que se siente inspi-
es de la misma naturaleza rado. En ambos casos
que el de las almas reuni- la curación consiste en
das en cada individuo, en la producción de un
la mentalidad indígena se mito, con la diferencia
trata verdaderamente de de que entre los indios
32 un desorden sociológico cunas se trata de un
provocado por la ambición, mito totalmente cons-
la malevolencia o el rencor truido, conocido de
de los espíritus, es decir todos y perpetuado por
por motivos de carácter la tradición, que el
psicológico y social. hechicero se limita a
adaptar a un caso
© Claude Lévi-Strauss/Museo del Quai Branly (París)
Finalmente, al exponer Indumentaria de un brujo caduveo. Fotografía tomada por determinado, o mejor a
Lévi-Strauss en el Mato Grosso (Brasil) en 1935-1936.
las causas de la enferme- traducir en un lenguaje
dad y al contar sus aventu- que tenga un sentido
ras en el más allá, el hechicero Ahora bien, cabe preguntarse para el enfermo permitiéndole nom-
suscita en su auditorio representa- cómo definir una historia asignada brar –es decir, comprender y quizás
ciones familiares atribuidas a las a una época remota –tan remota dominar– los dolores que hasta ese
creencias y los mitos que son patri- que a menudo se ha perdido incluso momento eran inexpresables tanto
monio del grupo social en su totali- su recuerdo– que sigue explicando, en sentido propio como figurado, ya
dad. Por otra parte, los adolescentes, empero, las “características” de lo que en un concepto semejante de la
al asistir a curaciones de carácter que sucede actualmente de una enfermedad ambos sentidos se
público, se inician de forma deta- forma mejor que los “acontecimien- confunden.
llada en las creencias colectivas. tos” más recientes. Habría que
definirla para mayor exactitud con En el psicoanálisis, por el con-
Algunas de estas características el término de “mito” utilizado por trario, el enfermo se encarga de
tienen una extraña semejanza con los sociólogos. elaborar su propio mito. Pero, si se
las de una curación psicoanalítica. reflexiona un instante, la diferen-
En este caso, se considera también cia no es tan grande como se cree,
que la enfermedad es de origen psi-
Convergencias y ya que el psicoanálisis atribuye el
cológico y que el tratamiento apli- divergencias origen de los desórdenes psíquicos


cado es exclusivamente de esta La diferencia principal entre una a un número reducido de situacio-
naturaleza. Por síntomas que no curación chamánica como la que nes posibles 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… entre las voluntariamente en
cuales el enfermo todas ellas, acompa-
sólo tiene libertad ñándolas con sus voces
de escoger. Esas de estímulo, ayudando
situaciones se hallan al enfermo a agrupar
vinculadas a las pri- sus recuerdos y mani-
meras experiencias festando un entusiasmo
de la vida y las rela- comunicativo a medida
ciones del niño que avanza la
pequeño con su curación.
ambiente familiar.
En este caso tam- El Dr. Stewart hace
bién, el enfermo se © Museo del Quai Branly (París)
notar a este propósito
Mandil de un chamán caduveo, traído del Mato Grosso (Brasil)
sent irá liberado por Claude Lévi-Strauss. que no nos hallamos
cuando llegue a tra- aquí en el terreno del
ducir sus ­trastornos por él mismo en una obra publicada psicoanálisis, sino en
inexpresables o inconfesables en recientemente con el título “Pygmies el de una de sus conquistas más
términos de un mito adecuado a su and dream giants” (Pigmeos y gigan- recientes: la psicoterapia colectiva.
historia particular. tes del sueño, Nueva York, 1954). Una de las formas más conocidas de
Stewart había viajado al país de los ésta es el psicodrama, en el que
No obstante, que los psicoana- negritos, pigmeos muy primitivos varios miembros del grupo acceden
listas y sus partidarios se tranquili- del interior de las Islas Filipinas, a encarnar las figuras de los perso- 33
cen. En efecto, al hablar de mito no para estudiar su estructura mental najes del mito del enfermo para
queremos afirmar en modo alguno mediante procedimientos análogos a ayudar a éste a representárselo
que las historias sean falsas o los del psicoanálisis. No solamente mejor y poder llevar así el drama
inventadas. Muchos mitos se fundan los hechiceros del grupo le dejaron hasta su desenlace. Esta participa-
sobre acontecimientos o hechos una total libertad de acción, sino ción sólo es posible a condición de
reales y –como ya se indicó al prin- que enseguida lo ­consideraron uno que el mito del enfermo presente
cipio– su transformación en tales más de ellos. Más aún, intervinieron un carácter social. Los demás miem-
depende de su capacidad de confe-
rir una significación al presente y
de oficio en sus análisis, en calidad
de especialistas competentes y per- …
bros del grupo consiguen participar
en el mito porque 
no de la fidelidad con que reconsti- fectamente enterados de los méto-
tuyan una situación inicial. dos utilizados. Milton Stewart llegó

Después de las analogías que


incluso a considerar que, en ciertos
aspectos, la psicoterapia de los
“ La técnica indígena parece
ser más audaz y fecunda que
hemos observado, no nos sorpren- hechiceros estaba más adelantada la de los países occidentales,
derá el hecho de que algunos psicó- que la nuestra. en un punto por lo menos
logos muy expertos, al visitar
[…] Según la teoría indígena,
algunas sociedades indígenas para Las curaciones chamánicas
no basta con eliminar la
efectuar encuestas valiéndose de –como ya se ha dicho antes– tienen
los más modernos procedimientos un carácter público. Todos los miem- inferioridad social originada
de investigación, se hayan encon- bros del grupo llegan progresiva- por la enfermedad, sino que
trado en igualdad de condiciones mente a la creencia de que sus ésta debe transformarse en
con los hechiceros indígenas y propios malestares, cuando se pro- una ventaja positiva, esto es,
hayan sido a veces superados por duzcan, requerirán procedimientos en una superioridad social
éstos. de curación idénticos a los que han de índole semejante a la
visto aplicar con tanta frecuencia.
que reconocemos al artista


Tal fue la aventura del Dr. Milton Por otra parte, al prever todas las
Stewart, narrada con gran amenidad etapas del tratamiento, participarán
creador .

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… éste es suyo igualmente o,
más exactamente, porque las situa-
ciones críticas a las que nuestra
sociedad expone al individuo son,
en gran medida, las mismas para
todos.

Se ve, pues, cuán ilusorio es el


carácter íntimo y personal de la
situación olvidada que el psicoaná-
lisis ayuda al enfermo a recordar.
De este modo se desvanece incluso
la diferencia con la curación cha-
mánica a la que no habíamos refe-
rido antes.
© Museo del Quai Branly (París)
Máscara de transformación kwakiutl (Canadá – Donante anónimo).
“Como en París o en Viena
–escribe el Dr. Stewart– los psi- dádiva en forma de un nuevo ritmo nosotros, al que debemos, no obs-
quiatras de la tribu negrito ayudan de tambor, de una danza o de un tante, la obra de Utrillo, por ejem-
a los enfermos a rememorar situa- canto. Según la teoría indígena, no plo. Hay mucho que aprender, por
ciones e incidentes pertenecientes basta con eliminar la inferioridad lo tanto, de la psiquiatría primitiva.
34 a un pasado lejano y olvidado, así social originada por la enfermedad, Siempre adelantada con respecto a
como acontecimientos dolorosos sino que ésta debe transformarse en la nuestra en muchos aspectos, su
enterrados en las capas más anti- una ventaja positiva, esto es, en modernidad fue aún más extraordi-
guas de esa experiencia acumulada una superioridad social de índole naria en una época –todavía
que expresa la personalidad”. semejante a la que reconocemos al reciente y de tradición muy difícil
artista creador. de borrar– en que no sabíamos
hacer con los enfermos mentales
Transfigurar el trastorno No cabe duda de que esta rela- otra cosa que cargarlos de cadenas
en obra de arte ción entre un equilibrio psíquico y condenarlos al hambre. 
La técnica indígena parece ser más inhabitual y la creación artística no
audaz y fecunda que la de los países es ajena a nuestras propias concep-
occidentales, en un punto por lo
menos. El Dr. Stewart relata una
ciones. Hay muchos genios a los
que hemos tratado como dementes:
“ Las pulsiones y emociones
no explican nada, ya que
experiencia que hubiera podido rea- Gerard de Nerval y Van Gogh, entre son siempre el resultado de
lizar en cualquier parte del mundo, otros. En el mejor de los casos, con- la potencia del cuerpo o de
en uno de esos pueblos que solemos sentimos a veces en excusar algu- la impotencia del espíritu.
llamar primitivos. Cuando quiso nas locuras porque son cometidas Son consecuencias en ambos
sacar a un enfermo de un estado de por grandes artistas. Pero incluso casos, pero nunca son causas.
“sueño despier to” –en el que los negritos de las selvas de Bataan Estas últimas sólo se pueden
narraba de manera desordenada epi- han sido mucho más perspicaces en buscar en el organismo como
sodios de su pasado, como el con- este ámbito. Han comprendido que sabe hacerlo exclusivamente
flicto con su padre transpuesto la forma de remediar un trastorno la biología, o en el intelecto,
míticamente en visita al país de los mental, perjudicial para el indivi-
y esta es la única vía abierta
muertos– sus colegas indígenas se duo que lo sufre y para la colectivi-
tanto para la psicología como

lo impidieron. Le explicaron que, dad que necesita la sana
para la etnología .
para curarlo definitivamente, era colaboración de todos, consiste en
C. Lévi-Strauss: El totemismo
menester que el espíritu de la enfer- transfigurarlo en obra de arte,
medad hiciese al paciente una método utilizado raramente entre
en la actualidad, 1965.

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Sinfonía de los sabores “ La cocina de una
sociedad es un lenguaje en
¿Sabían ustedes que algunos pueblos del mundo consideran la que esta última traduce
que comer es un acto obsceno y, por lo tanto, comen a solas inconscientemente su estructura,
y a escondidas? En este artículo publicado en “El Correo” a no ser que se resigne, también
de abril de 1957, Lévi-Strauss no sólo examina los aspectos inconscientemente, a desvelar en
sociales de la alimentación del hombre, sino también la ”
ella sus contradicciones .
C. Lévi-Strauss, “Le triangle
aventura humana de la búsqueda de nuevos sabores. culinaire” [El triángulo
Claude Lévi-Strauss culinario], L’Arc, Nº 26, 1965,
Aix-en-Provence, Francia.

C omo el arte de la cocina con-


siste en asociar los sabores
de varias substancias alimenti-
la componen. Aún hoy en día,
algunas tribus –como los nam-
bicuara del Brasil central– se
cias para armonizarlas o desta- contentan con enterrar en
car su contraste, se podría creer cenizas calientes el producto
que todos los pueblos del mundo de la caza y la recolección coti-
han sido capaces de hacer un dianas: animalillos y raíces sil-
descubrimiento tan sencillo. Sin vestres. Las cenizas adheridas
embargo, esto no es así, ya que a los alimentos proporcionan 35
para mezclar diversos productos las sales minerales indispensa-
hay que disponer de ellos simul- bles. Esta miseria culinaria
táneamente, y para fusionar sus trae consigo una suerte de
sabores en una armonía gusta- anulación del sentido del
tiva es menester también cono- gusto, pues el paladar de los
cer procedimientos de cocción nambicuara no soporta nin-
más complicados que el mero guna sensación intensa: la sal
contacto con el fuego. les repugna y los platos calien-
tes les horrorizan. Cuando yo
Hacer hervir agua en un reci- les servía comida caliente o
© UNESCO/ Carol Ecker
piente de arcilla dista mucho de hirviente, se apresuraban a
Venta de especias en un mercado de Megalaya
ser un método universal. Los (India1994). inundarla de agua fría antes de
pueblos que ignoran la alfarería inger irl a. E ste grado de
provocan la ebullición del agua recipiente –ya sea el cuerpo del arcaísmo constituye, desde
sumergiendo piedras ardientes en animal, o una pasta hecha con luego, una anomalía. A la inversa,
un recipiente de madera, o de cor- harina– rellenándolo con una muchas poblaciones no padecen de
teza vegetal, que contiene el mezcla que cuece al mismo tiempo una insuficiencia de técnicas culi-
líquido donde se hallan los alimen- que la envoltura se tuesta o se narias, sino de una carencia –mucho
tos. Los que no poseen la técnica asa. más grave– de medios de produc-
de la ebullición utilizan hornos ción que no les permite disponer
cavados en la tierra donde ponen prácticamente nunca de más de una
también piedras calentadas. Los
¿Un plato caliente? fuente de alimentos a la vez.
alimentos se van asando lenta- ¡Qué horror!
mente entre capas de follaje fresco Todas estas técnicas representan
que despide vapor de agua. otras tantas conquistas de la huma-
Saciar el hambre
nidad de las que no siempre se han

Asimismo, existe el procedimiento Algunos etnólogos como Evans-­
de utilizar el propio alimento como beneficiado todos los pueblos que Pritchard y Audrey Richards 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… han demostrado que, en la impresión de calor interno pro- perder “el gusto del pan”. Toda la
algunas regiones de África, la perio- ducida por la absorción de una historia de la cocina es una bús-
dicidad de los recursos alimenticios bebida alcohólica, la identifican queda incesante de medios para dar
influye en la salud física y las acti- con la cólera y, a la inversa, aso- sabor al pan de cada día, esto es,
tudes mentales de los indígenas. En cian el estado de ayuno con las más estimular y mantener la apetencia
muchas comunidades el hambre por los alimentos básicos,
se sacia solamente en una proveedores de energía y des-
época del año, esto es, mien- provistos de sabor a un
tras dura la cosecha de man- tiempo: el pan, el arroz, el
dioca, mijo o arroz. Esos son mijo, el maíz o la mandioca,
los “meses de comida”, a los según las regiones del mundo.
que suceden los “meses de La carne aparecería más tarde
escasez” en los que las pobla- en la historia culinaria, pues
ciones sólo disponen de pro- durante mucho tiempo cons-
ductos de recolección. En estos tituyó un lujo privilegiado y,
últimos meses el volumen de la hoy en día, todavía lo sigue
comida cotidiana se reduce y, siendo en muchos lugares. La
sobre todo, se pasa brusca- base verdadera de la cocina
mente de un régimen alimenti- mundial es el hidrato de car-
cio a base de hidratos de bono sazonado con algún
carbono a otro compuesto casi condimento: el pan con cebo-
36 exclusivamente por ­vegetales lla; el “chapati” con “chut-
como calabazas, melones y ney”; el arroz con salsa de
otras cucurbitáceas. © Claude Lévi-Strauss pescado fermentado; y el
Mujer de la etnia tupi kawahib preparando cauin,
una bebida fermentada (Brasil, 1935-1939). mijo, el maíz o la mandioca
En nuestro estado de “segu- con pimientos picantes. Todas
ridad alimentaria” nos resulta difí- altas emociones espirituales. Una estas combinaciones son otras
cil imaginar la intensidad de las anciana africana exclamó un día en tantas variaciones sobre un tema
sensaciones que marcan esa alter- que, por casualidad, había aplacado universal, a partir de las cuales el
nancia. La impresión de saciedad su hambre: “¡Me parece como si arte de la cocina ha creado innume-
desaparece de repente y sobrevie- hubiera vuelto a ser una muchacha! rables melodías para deleite del
nen los dolores producidos por el ¡Ya no tengo el corazón paladar.
hambre. El mal de las diarreas oprimido!”.
agudas sucede al inconveniente
contrario de las flatulencias y fer- En la historia del desarrollo de
Las especias han
mentaciones intestinales. la humanidad hay una efeméride transformado el
memorable, aunque ignorada. Se mundo
Con el cambio de alimentación, trata del día en que el hombre des-
el indígena experimenta transfor- cubrió el medio de disponer simul- La prueba de que la búsqueda de los
maciones profundas en su cuerpo y táneamente de dos fuentes de sabores fue muy laboriosa la pro-
su mente. Por eso no es de sorpren- alimentos durante todo el año y en porcionan las grandes expediciones
der –como ha hecho observar que, asociándolas, logró vencer los marítimas del siglo XVI, cuyo motivo
Audrey Richards– que en esas comu- dos grandes peligros de su vida ali- nos parece hoy irrisorio. Hace
nidades los alimentos parezcan mentaria: la insuficiencia de comida apenas 400 años, Europa organizó
peligrosos y dotados de toda clase y la insipidez de ésta. sobre todo esas empresas gigantes-
de influencias mágicas. Los indíge- cas para conseguir las especias que
nas asimilan las sensaciones vincu- En efecto, no basta con comer le faltaban. De ese entonces data el
ladas a la alimentación con
emociones de origen diferente. Así,
lo suficiente. Es menester también,
como dice un proverbio francés, no y tal vez de la universal,  …
nacimiento de la culinaria europea

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… pues no parece que ningún
país pueda prescindir hoy de una
serie de productos del Nuevo Mundo,
desconocidos hasta el descubri-
miento de éste. Por ejemplo, la
patata, el tomate, el cacahuete, el
chocolate, la vainilla y el pimiento
de Indias.

Queda todo un capítulo de la


etnología por escribir: el dedicado
al examen y la distribución carto-
gráfica de las reglas –unas veces
muy simples y otras increíblemente
complejas– según las cuales se
obtienen, transforman, asocian y
combinan los productos alimenta-
rios básicos. Se vería entonces que
los inventores de la agricultura sin
tierra son los polinesios –que han
llegado a crear verdaderas huertas
en medio de sus arrecifes de coral– 37
y que los pueblos “primitivos” han
logrado la hazaña consistente en
transformar ciertas plantas vene-
nosas como la yuca o mandioca y
las bellotas en alimentos de impor-
© UNESCO/P. Morel Vasquez
tancia fundamental. Asimismo, se El vivo colorido de las especias en el mercado de Asuán (Egipto, 2008).
vería que ciertos pueblos arcaicos
han elaborado una culinaria de gran consta de 14 platos compuestos solas y a escondidas para encubrir
sutileza. Una de las obras consa- por panecillos y galle­t as de maíz el acto impúdico de nutrirse. El
gradas por el célebre etnólogo nor- de seis colores diferentes, así como ceremonial de un banquete entre
teamericano Boas a los kwakiutl por carnes diversas, tripas, salchi- los kwakiutl ocupa varias páginas
–una población de Alaska– contiene chas y morcillas de cordero. Todos de la obra antedicha de Boas: pre-
156 recetas de cocina para preparar estos alimentos se comen con una parativos culinarios, disposición de
diversas clases de pescados de mar,
frutos y raíces silvestres. Una de
escobilla dura que se chupa y se
moja sucesivamente en los guisos esteras, envío  …
los diversos tipos de recipientes y

ellas –escogida al azar– consiste correspondientes.


en batir la nieve hasta transfor-
marla en una crema espumosa a la
que se mezclan aceite de pescado,
Los peces “ofendidos” “ A la inversa de los
indígenas, nuestras
melaza y arándanos crudos. Otro no vuelven a aparecer cocineras han olvidado una
etnólogo, Cushing, ha consagrado por las costas preocupación que fue esencial
un libro encantador, con el signifi- en otros tiempos: la de honrar
cativo título de “Zuni Bread-stuffs” El consumo de alimentos es, en a los animales que se van
[Pan zuni], a la producción y pre- efecto, una actividad eminente-
a consumir, a fin de que su
paración de alimentos entre los mente social. Son muy raros los
especie no desaparezca para


indios pueblo del Estado de Nuevo pueblos que, al igual que los indios
México. Un banquete de día festivo paressi del Brasil central, comen a
siempre .

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… de mensajeros para llevar las nas, como la de los indios tsimshian un tamiz, colocado encima de una
invitaciones –que se deben rehusar de la costa nordeste del Pacífico, vasija, para que una anciana lo
varias veces, antes de aceptarlas en que transcribo aquí, a guisa de con- comprima fuertemente con su
definitiva–, canciones en honor de clusión de este ensayo de etnología pecho desnudo, extrayendo así la
los invitados y atribución a cada culinaria, para que nuestras amas grasa. Esta operación está estricta-
comensal de una porción especial- de casa la mediten. mente vedada a los hombres.
mente escogida en función de su Después se amontonan los residuos
rango. Para preparar la grasa del pez de los pescados en un rincón de la
candela, se dejan secar primero al casa, donde se pudren y agusanan.
Nada de esto puede A pesar del insopor-
sorprendernos. En efecto, table hedor que des-
la etiqueta de los kwa- piden, está prohibido
kiutl no difiere mucho de deshacerse de ellos.
la observada en nuestros Asimismo, a todos
banquetes, ya que noso- los participantes en
tros también rendimos esta faena les está
homenaje a los invitados vedado lavarse y no
con manteles bordados, pueden quitarse de
cubiertos de plata y encima las inmundi-
platos ref inados. Sin cias hasta que ésta
embargo, a la inversa de f inalice, lo cual
38 las mujeres indígenas, puede tomar unas
nuestras cocineras han © Aleksandar Džoni-Šopov dos o tres semanas.
olvidado una preocupa- Los indios tsimshian no hacen consumo de pescado Si no se cumplen
sin tributarle el debido homenaje.
ción que fue esencial todos estos requisi-
antaño: la de honrar a los tos, los peces can-
animales que se van a consumir, a aire los pescados. Luego, se hierven dela se sentirán “ofendidos” y no
fin de que su especie no desapa- en recipientes llenos de agua donde volverán a aparecer nunca más por
rezca para siempre. De ahí el carác- se colocan piedras calentadas al las costas. 
ter a veces desconcertante de fuego. La grasa se va espumando
algunas recetas culinarias indíge- poco a poco y el residuo se pone en


suite de la page 30 tadas en el bosque sagrado de la del grupo social ponen de mani-
u ofrecido como regalo. Los diosa Strenia, de la que proviene el fiesto la esencia misma de la vida
maoríes de Nueva Zelandia han ela- nombre latino de los aguinaldos colectiva, que consiste en una
borado una teoría sobre esta cues- (“strenae”), que los franceses han interdependencia libremente acep-
tión. Según ellos, una fuerza conservado hasta nuestros días tada. No ironicemos, pues, mofán-
mágica, llamada “hau”, se introduce (“étrennes”). donos de esta gran feria anual en la
en el regalo y vincula para siempre que flores, golosinas, corbatas y
al donador y el donante. En el otro Strenia era la diosa de la fuerza. tarjetas ilustradas no hacen más
extremo del mundo, la leyenda Así, para los latinos como para los que cambiar de mano, ya que con
romana relativa a los aguinaldos maoríes, los regalos son objetos tal motivo, y por intermedio de
parece inspirarse en una idea seme- que, por su naturaleza, poseen una estos objetos sencillos, la sociedad
jante. Los primeros aguinaldos fuerza particular. ¿De dónde viene en su conjunto cobra conciencia de
fueron ofrecidos en forma de ramas ésta? Al imponerse la obligación de su propia naturaleza: la reciproci-
verdes al rey sabino Tacio, que com- recibir de los demás bienes de valor dad mutua.
par tía el poder soberano con a menudo simbólico en un determi-
Rómulo. Esas ramas habían sido cor- nado periodo del año, los miembros

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


¿La antropología en peligro de muerte?
En la época de la independencia de los países africanos todo parecía indicar que la
antropología iba a sucumbir a la conjura de unos pueblos que se oponían a ella y de otros
que desaparecían. ¿Cuál debía ser, entonces, el objeto de esta disciplina en el nuevo contexto
mundial? Lévi-Strauss dio respuesta a este interrogante en este artículo publicado en El
Correo de noviembre de 1961.
Claude Lévi-Strauss

E n el pensamiento
contemporáneo la
antropología ocupa un
lugar cuya importancia
puede parecer paradó-
jica. Es una ciencia que
está de moda, como lo
atestiguan no sólo la
popularidad de las pelí-
culas y los libros de
viajes, sino también la 39
curiosidad del público
culto por las obras de
etnología. Hacia finales
del siglo XIX se recurría
sobre todo a los biólo-
gos para pedirles una
filosofía del hombre y
del mundo. Luego, se © Claude Lévi-Strauss
recurrió a los sociólogos Indio de la tribu nambicuara con la cara manchada de ceniza (Brasil, 1935-1939).

y los historiadores, e
incluso a los propios esas dos civilizaciones eran las existencia y en la mayor parte de la
filósofos. únicas sobre las que se disponía de tierra habitada, la humanidad sólo
información suf iciente en el ha conocido los géneros de vida,
Sin embargo, desde hace varios momento en que el hombre consi- las creencias y las instituciones
años la antropología está acce- deró que debía ser él mismo el cuyo estudio incumbe a la antropo-
diendo a una función análoga y se objeto de estudio más adecuado y logía. La reciente guerra ha inten-
espera también de ella que formule necesario, esto es, en la época del
sificado aún más esta orientación.
síntesis generales y dé razones para Renacimiento. Pero en el siglo XIX,
La estrategia a escala mundial
vivir y confiar en el futuro. Esta y sobre todo en el XX, se ha logrado
seguida en ella ha hecho que cobra-
tendencia parece haberse iniciado tener acceso a todas o casi todas
ran súbitamente presencia y reali-
en los Estados Unidos. Este país las sociedades humanas.
joven, que afronta la tarea de crear dad las regiones más apartadas del
un humanismo a su medida, no Entonces, ¿por qué limitarse al planeta, incluso aquellas en las que
tenía motivo alguno para limitarse estudio de unas pocas? Si se quiere se habían refugiado los últimos
a la veneración exclusiva de las contemplar al hombre en su totali- pueblos “salvajes”: la parte septen-


civilizaciones griega y romana, so dad, no puede dejarse de lado el trional de América del Norte, Nueva
pretexto de que en la vieja Europa hecho de que, durante el 99% de su Guinea, el interior 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… de Asia del Sudeste y algu- nea que las une, se han ido impreg-
nas islas de Indonesia. nando de modos de v ida,
pensamiento y acción, que son los
que constituyen el objeto de estu-
El mundo se achica dio de la antropología y los que
Desde entonces, han quedado ins- transforman a esas civilizaciones
critos en el mapa del mundo nom- por dentro, sin que tengamos plena
bres misteriosos y exóticos, aunque conciencia de ello. En efecto, los
sólo sea para designar las escalas llamados pueblos “primitivos” o
de los vapores correos. Al mismo “arcaicos” no desaparecen en la
tiempo que se han ido acortando nada, sino que se disuelven, incor-
las distancias con los avances de la porándose con mayor o menor rapi-
aviación y nuestro planeta se ha dez a la civilización que los rodea.
ido empequeñeciendo, los progre-
sos de la higiene han alcanzado su
pleno efecto, provocando un creci-
¿Es una ciencia sin
miento de la población tanto más objeto antropología?
patente cuanto que, en el plano Lejos de ir perdiendo interés, los
psicológico y moral, se ha visto pueblos primitivos nos interesan
multiplicado en cierto modo por la cada día más. Por ejemplo, la gran
intensificación de los intercambios civilización que enorgullece con
40 y las comunicaciones entre los razón al Occidente y ha fecundado
pueblos. toda la tierra habitada, renace por
doquier cobrando una forma “crio-
En una tierra empequeñecida, lla” y, al extenderse por el mundo,
© Museo del Quai Branly (París)
en la que se agita una población Aguja para sujetar el cabello, traída del Mato se enriquece con elementos mora-
cada vez más densa, no hay frac- Grosso (Brasil) por Lévi-Strauss. les y materiales ajenos, con los que
ción de humanidad, por distante y tendrá que contar en el futuro. Por
atrasada que pueda parecer, que Guinea. No lo estaríamos porque eso, los problemas antropológicos
no esté en contacto directo o indi- éstos también se interesan por están dejando de pertenecer en
recto con todas las demás, y cuyas nosotros y porque unos y otros for- exclusiva a una disciplina específica
emociones, ambiciones, pretensio- mamos parte ya del mismo mundo reservada hasta ahora a científicos
nes y temores no afecten la seguri- y, dentro de poco, de la misma civi- y exploradores y se están convir-
dad, prosperidad y hasta la propia lización, debido al resultado impre- tiendo, directa e ­inmediatamente,
existencia de aquellas otras frac- visto de nuestro contacto y en una cuestión que interesa a
ciones a las que el progreso mate- comportamiento con ellos. todos los ciudadanos.
rial parecía haber conferido una
soberanía intangible. Por toda clase de vericuetos A este respecto, es paradójico
–conocidos y desconocidos– una que –precisamente en estos
En un mundo finito, la boga de serie de caminos insidiosos han ­momentos en que la opinión pública
ese humanismo sin restricción y sin conducido a la compenetración de reconoce el valor de la antropolo-
límites que es la antropología surge, los modos de pensar y las costum- gía– tengamos que preguntarnos si
por consiguiente, como una conse- bres que venían divergiendo desde nuestra disciplina no está a punto
cuencia natural de un cúmulo de milenios atrás. Al esparcirse por de convertirse en una ciencia sin
circunstancias objetivas. Aunque toda la Tierra, las civilizaciones objeto, en la medida en que se ha
quisiéramos, no estaríamos exentos como la cristiana, la islámica y la venido dedicando principalmente al
de la obligación de interesarnos budista que, con razón o sin ella, estudio de las poblaciones “primiti-
–pongamos por caso– por los últi-
mos cazadores de cabezas de Nueva
se creían superiores, así como la
civilización mecánica contemporá- formaciones  …
vas”. En efecto, las mismas trans-

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


“ Las leyes generales del desarrollo de la
sociedad y la cultura, e incluso los límites de
la etnografía (‘antropología’) como ciencia,
son […] objeto de controversias. Pero la
forma en que Lévi-Strauss trata estos y
otros problemas […] adolece de un exceso
de formalismo que es inherente al método
‘estructuralista’, una corriente actualmente en
boga en los círculos científicos de la que Lévi-
Strauss es su más destacado representante

Profesor S.A. Tokarev (Unión Soviética) -
.

Archivos de la UNESCO (documento con fecha


© Claude Lévi-Strauss
Claude Lévi-Strauss en Brasil (1935-1939). del 20 de mayo de 1966).

… que motivan el creciente ductos silvestres–, o bien se ven a los indígenas, ya que éstos no se
interés por los “primitivos” en el expulsados de los inhóspitos desier- han inmunizado todavía contra 41
plano teórico están provocando su tos que les sirven de refugio, debido ellas. Así, se propagan la tubercu-
extinción en la práctica. Este fenó- a la instalación de bases destina- losis, el paludismo, el tracoma, la
meno no es reciente en modo das a efectuar pruebas de explosio- lepra, la disentería, la gonorrea y la
alguno. En la lección inaugural de nes atómicas o lanzar cohetes. sífilis, o el “kuru”, una degenera-
su cátedra de antropología social, ción genética mortal que todavía
pronunciada en 1908, Frazer lo Protegida por un medio natural no tiene tratamiento y que es la
señaló ya en términos dramáticos excepcionalmente hostil, Nueva secuela misteriosa de la civilización
para alertar a los gobiernos y los Guinea alberga varios millones de que la ha suscitado sin haberla
científicos. Sin embargo, hace indígenas y es todavía el último traído verdaderamente consigo.
medio siglo el ritmo de extinción santuario de las instituciones pri-
no era ni mucho menos tan rápido mitivas. No obstante, la penetra- En el Brasil se han extinguido
como el actual y su aceleración es ción de la civilización es tan rápida cien tribus entre 1900 y 1950. De
cada vez mayor. que los 600.000 habitantes de las los caingangues del Estado de Sao
montañas centrales, totalmente Paulo, que eran 1.200 en 1912, sólo
Daremos algunos ejemplos. Al desconocidos hace veinte años, quedaban 200 en 1916 y actual-
principio de la colonización había proporcionan ya contingentes de mente 80. Los mundurucus que
en Australia 250.000 indígenas y trabajadores para la construcción contaba con 20.000 miembros en
hoy sólo son unos 40.000. Los de carreteras, cuyos mojones kilo- 1915, apenas tenía 1.200 en 1950.
informes oficiales señalan que, o métricos y señales son arrojados en De los nambicuaras, que eran
bien están concentrados en los paracaídas desde aviones que 10.000 en 1900, sólo pude hallar
territorios de las misiones o los sobrevuelan selvas inexploradas. vivos unos 1.000 en 1940. Los caya-
aledaños de las explotaciones mine- Además, los indígenas son recluta- pos del río Araguaya eran 2.500 en
ras –donde se ven reducidos al dos “in situ” y transportados por 1902 y tan sólo diez en 1950. La
pillaje clandestino de las basuras vía aérea a las minas o las planta- tribu de los timbiras la componían
depositadas en la puerta de los ciones costeras. Al mismo tiempo, 1.000 personas en 1900 y 40 en
barracones, tras haber dejado de
dedicarse a la recolección de pro-
las enfermedades importadas diez-
man con enorme fuerza destructora
1950, y así sucesivamente… 
 …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
… ¿Cómo se de emplastos de carbón
puede explicar una vegetal para curar heridas
desapar ic ión t an graves. Asimismo, las
rápida? En primer enfermedades más comu-
lugar por la importa- nes cobran una virulencia
ción de enfermedades tal entre ellos que cuando
occidentales, contra los niños se ven aqueja-
las que el organismo dos de oxiurasis, las lom-
de los indígenas brices llegan a salirles por
carece por completo la boca y la nariz.
de defensas. Me con-
tentaré con referir el Otras consecuencias
triste sino de una son menos directas, por
población del noreste ejemplo la desaparición
del Brasil, los urubus, de un determinado género
© Claude Lévi-Strauss
que en 1950, muy Dibujos del diario de viaje de Claude Lévi-Strauss (Brasil, 1935-1939). de vida u organización
pocos años después social. Los caingangues
de haber sido descu- prácticamente inconscientes, apar- de Sao Paulo, a los que ya
biertos, fueron víctimas de una epi- taban de su lado a los pequeños nos hemos referido anteriormente,
demia de sarampión. En el espacio que querían mamar…”. observaban reglas sociales de un
de unos pocos días fallecieron 160 tipo sobradamente conocido por los
de sus 750 miembros. Un testigo etnólogos: los habitantes de cada
42
presencial ha descrito así la
Cuando indígena es aldea estaban repartidos en dos
tragedia: sinónimo de indigente mitades y la norma imponía que los
En 1954, la creación de una misión hombres de una de esas dos mita-
“La primera aldea estaba en la cuenca del río Guaporé, que des debían casarse con las mujeres
desierta. Todos sus habitantes forma la frontera entre Brasil y Boli- de la otra mitad, y viceversa.
habían huido, convencidos de que via, indujo a cuatro tribus diferen- Cuando la población disminuye y la
la enfermedad era un ser sobrena- tes a agruparse. Llegaron a juntarse base demográfica se desmorona, un
tural que atacaba las aldeas y al unas 400 personas, pero poco sistema tan rígido no permite que
que podían sustraerse huyendo muy tiempo después el sarampión las todos los hombres encuentren
lejos. Los volvimos a encontrar en exterminó a todas... Además de las esposa y, por lo tanto, un gran
la selva donde habían ­acampado, dolencias infecciosas, también número de éstos se ven reducidos
huyendo del mal que ya los corroía. hacen estragos las enfermedades al celibato, a no ser que se resignen
Casi todos estaban enfermos y ago- carenciales como los trastornos a no tener en cuenta la regla. Como
tados, tiritaban de fiebre bajo la motores, las lesiones oculares y las esta última situación la consideran
lluvia y estaban tan consumidos, a caries. Ninguna de ellas afectaba a incestuosa, la formación de parejas
causa de las complicaciones pulmo- los indígenas cuando éstos vivían a en estas condiciones sólo es acep-
nares e intestinales, que no tenían su antigua usanza. Estas enferme- table si no tienen descendencia. En
casi fuerzas para buscar de qué dades sólo han hecho su aparición un caso de este tipo, una población
comer. Les faltaba incluso el agua, cuando se les ha concentrado en entera puede desaparecer en el
y el hambre y la sed acababan con aldeas y se les ha obligado a adop- transcurso de unos pocos años [La
ellos igual que la enfermedad. Con tar una alimentación distinta a la mayor parte de estas indicaciones
la esperanza de calentarse, los de la vida en la selva. sobre la desaparición de los indios
niños se arrastraban por el suelo de Brasil provienen de un trabajo
para tratar de mantener encendido Hoy en día, entre los indígenas, del eminente etnólogo brasileño
el fuego bajo la lluvia. Los hombres están resultando ineficaces los tra- Darcy Ribeiro, titulado “Convivio e
ardían de fiebre y estaban paraliza-
dos, mientras que las mujeres,
tamientos ancestrales de probada
eficacia, por ejemplo la aplicación …
contaminaçao”, que ha sido publi-
cado 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Los caingangues de nuestros días
Cuando Claude Lévi-Strauss publicó este texto en El Correo de la
UNESCO, los caingangues se estaban restableciendo a duras penas de
varios decenios de exterminio y matanzas. El índice de mortalidad
infantil de la mayor parte de sus grupos era entonces sumamente
elevado y los estragos causados por el paludismo, la tuberculosis y
el alcoholismo hacían temer el peor de los desenlaces. Hoy en día,
los caingangues viven en reservas administradas por el Servicio de
Protección de los Indios del gobierno federal de Brasil, pero en aquel
entonces los especialistas consideraban que este grupo se hallaba en
un proceso acelerado de disolución cultural e incorporación rápida a la © Clarissa Becker
Niño caingangue.
sociedad nacional brasileña.
Los caingangues forman actualmente uno de los grupos de amerindios
más numerosos de Brasil y su población, según se estima, asciende a
unas 30.000 personas asentadas en los cuatro Estados sureños de Sao Paulo, Paraná, Santa Catarina y Rio Grande do
Sul. El pujante crecimiento demográfico del grupo en los últimos decenios ha hecho que las reservas sean demasiado
reducidas para albergar una población joven y cada vez más escolarizada.
La emigración de los caingangues a las ciudades no les ha impedido seguir profundamente apegados a sus territorios
y tradiciones. Ese apego se manifiesta en concreto por la voluntad de revitalizar y actualizar de su identidad,
valorizando en particular el aprendizaje de la lengua y la transmisión de la tradición oral. Además, los caingangues
se consideran ciudadanos brasileños de pleno derecho. Desde un punto de vista antropológico, esto ilustra una más
de las múltiples paradojas de la mundialización, que suele ir acompañada por una reafirmación de las identidades
locales. 43
La antropología contemporánea no se ha convertido en una ciencia sin “objeto”. Muy al contrario, hoy en día
esta disciplina ha cobrado un auge sin precedentes y lo debe, en parte, a la lección que un joven antropólogo
principiante, llamado Claude Lévi-Strauss, sacó en 1935 de su primer encuentro con los amerindios: un reducido
grupo de caingangues del Estado de Paraná. En su célebre obra “Tristes trópicos”, Lévi-Strauss narra que le había
asombrado el grado de descomposición al que había llegado este grupo, que no le pareció formado ni por indios
verdaderos ni por salvajes. De su encuentro con ellos Lévi-Strauss sacó la siguiente lección, que constituye un
modelo de prudencia y objetividad y sigue estando de actualidad para la antropología: nunca hay que fiarse de las
apariencias externas de una cultura que ha sido víctima de los embates del colonialismo.

Robert Crépeau, Profesor de la Universidad de Montreal (Canadá)

… por la revista brasileña se plantea el problema de su des- Pueblos que se niegan


Sociologia (Vol. XVIII, Nº 1, Sao aparición. Pero ya es muy tarde a ser objeto de estudio
Paulo, 1956)]. para poder conservar su conciencia
de grupo, así como sus idiomas y Hasta aquí sólo hemos descrito la
Entonces, ¿por qué asombrarse culturas. Las encuestas realizadas mitad de la situación actual. En
de que resulte cada vez más difícil, otras regiones del mundo, toda una
por la Organización Internacional
no sólo estudiar las poblaciones serie de poblaciones, de cuyo estu-
del Trabajo (OIT) ponen de relieve
llamadas “primitivas”, sino también dio se venía ocupando tradicional-
que la noción de indígena se está
definirlas de modo racionalmente mente la antropología, cuentan hoy
borrando y está siendo sustituida
satisfactorio? Estos últimos años se con decenas o centenas de millones
ha hecho un esfuerzo por revisar por la de indigente [OIT. de personas y siguen creciendo. Así
las nociones comúnmente admiti- “Poblaciones indígenas. Condiciones ocurre en Centroamérica, la América
das sobre las poblaciones indígenas de vida y de trabajo de las pobla- andina, Asia Sudoriental y África.


que figuran en las leyes de protec- ciones aborígenes en países inde- En este caso, la posición de la
ción vigentes en los países donde pendientes”. Ginebra 1953.] antropología también 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… se ha hecho más precaria, ciencias sociales y humanas, a litamiento progresivo de los rayos
aunque la amenaza que pesa sobre ­d iferencia de las naturales, no emitidos por los astros que se
ella es diferente. En efecto, el peli- pueden efectuar la demostración de alejan cada vez más de nosotros.
gro que corre aquí no es cuantita-
tivo, sino cualitativo y multiforme. El segundo peligro es menos

Objetivamente, esas poblaciones


“ Los occidentales no
lograrán nunca –a menos
grave en sí, ya que se emana de
civilizaciones sobre las que no pesa
se transforman y sus civilizaciones que lo hagan a guisa de amenaza alguna de desaparición
se acercan a la occidental, que la física. Sin embargo, es mucho más
juego– desempeñar el papel
antropología ha considerado difícil de resolver a corto plazo.
durante mucho tiempo ajena a su de ‘salvajes’ con respecto a Para disipar la desconfianza de los
competencia. Lo más importante es los pueblos que dominaron pueblos que hasta ahora eran
que, desde un punto de vista subje-
tivo, son pueblos que toleran cada ”
antaño . objeto de las observaciones de los
antropólogos, ¿será suficiente
vez menos los estudios etnográfi- sentar el principio de que nuestros
cos. Se sabe de casos en los que sus experiencias. Todos los tipos de estudios nunca más se harán en una
algunos museos denominados sociedades, creencias, instituciones dirección única? ¿Volverá nuestra
“etnográficos” han tenido que cam- y géneros de vida constituyen expe- ciencia a encontrar de nuevo sus
biar de nombre y sólo han sido riencias acabadas y forjadas por cimientos si, a cambio de que se
aceptados disfrazándose con el una historia milenaria, y por eso nos siga otorgando la libertad de
título de “museos de artes y tradi- son irreemplazables. Cuando los seguir estudiando a los pueblos
44 ciones populares”. Las uni- africanos o melane-
versidades de los Estados sios, vinieran sus
recién independizados se etnólogos para hacer
muestran muy acogedoras con las gentes y cos-
con los economistas, psi- tumbres de nuestros
cólogos y sociólogos, pero países lo mismo que
no puede decirse que hacíamos antes noso-
traten con los mismos tros con las de sus
miramientos a los antropó- poblaciones?
logos. Parece como si la
antropología estuviera a Esta reciprocidad
punto de sucumbir a la es sumamente desea-
conjura de unos pueblos © Claude Lévi-Strauss
ble, ya que redundaría
que se sustraen física- Indio mondé (Brasil, 1935-1939). en beneficio de nues-
mente a ella desapare- tra ciencia. En efecto,
ciendo de la faz de la tierra, y de pueblos en los que se pueden obser- al ver multiplicadas sus perspecti-
otros que, llenos de vida y en pleno var hayan desaparecido, se cerrará vas, estaría en condiciones de
auge demográfico, se niegan a para siempre una puerta y no se lograr nuevos avances. Pero no hay
aceptarla por motivos psicológicos tendrá nunca más acceso a conoci- que hacerse ilusiones, esto no
y morales. mientos que es imposible adquirir resolvería cabalmente el problema,
de otro modo. De ahí que sea nece- porque la solución propuesta no
La manera de sortear el primer sario para la antropología compen- tiene en cuenta una serie de moti-
peligro no presenta problema sar la reducción de los grupos vaciones profundas en las que se
alguno. Es necesario acelerar las humanos y la desaparición de sus basa el rechazo de la antropología
investigaciones y aprovechar estos costumbres creando métodos de por parte de los pueblos anterior-
últimos años que quedan, a fin de observación cada vez más útiles, al mente colonizados. Estos pueblos
recoger una información que será
sumamente preciosa porque las
igual que el astrónomo subsana con
amplificadores electrónicos el debi-
temen que, so pretexto de una
visión antropológica  …
El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5
… de la historia fortuna parece posible a
humana, se trate de partir del momento en que
hacer pasar por una se reconoce como caracte-
“diversidad” deseable rística original suya el
lo que para ellos es hecho de que no se haya
una “desigualdad” definido nunca de forma
insoportable. Si se absoluta, y de que se haya
nos permite utilizar posicionado siempre en el
una formulación que, marco de una determinada
en boca de un antro- relación entre el observa-
pólogo, excluye toda dor y el objeto observado.
acepción peyorativa, Además, también se le
los occidentales no reconoce la originalidad de
© Claude Lévi-Strauss
lograrán nunca Un “tapehari” –jefe de aldea– de la etnia tupi kawahib que ha aceptado transfor-
–incluso en el plano (Brasil, 1935-1939) marse cada vez que esa
de la observación relación ha evolucionado.
científica y a menos Pasar del estudio Lo característico de la
que lo hagan a guisa de juego– des- antropología ha sido siempre llevar
empeñar el papel de “salvajes” con
“desde fuera” al a cabo un estudio “desde fuera”,
respecto a los pueblos que domina- estudio “desde dentro” pero lo ha hecho así porque le
ron antaño. En la época en que resultaba imposible efectuarlo
nosotros les asignamos ese papel, Para que la antropología sobreviva “desde dentro”. Desde este punto 45
esos pueblos fueron en realidad para en nuestro mundo moderno, no cabe de vista, la gran revolución del
nosotros solamente “objetos” de ocultar que será a costa de una mundo moderno se traduce, en el
estudio científico o de dominación transformación mucho más pro- plano de las ciencias humanas, en
política y económica. Ante sus ojos, funda que la consistente en ensan- el hecho de que civilizaciones ente-
somos los responsables de su suerte char el círculo –hasta ahora muy ras, al haber tomado conciencia de
y, por eso, nos consideran inevita- cerrado– en que se mueve. Será su identidad y haber adquirido, gra-
blemente como “agentes” frente a inútil, por lo tanto, recurrir al cias a la alfabetización, los medios
los cuales es muy difícil adoptar una método un tanto pueril de prestar a necesarios para estudiar su pasado,
actitud contemplativa. los recién llegados nuestros jugue- sus usos ancestrales y todo lo que
tes, a condición de que nos dejen perdura de ellos de forma tan
Los más paradójico del caso es seguir jugando con los suyos. La fecunda como irremplazable, están
que muchos antropólogos adopta- antropología tendrá que cambiar su afanándose por emprender ese estu-
ron –por consideración hacia esos propia naturaleza y confesar que se dio, al igual que lo hizo Europa en
pueblos, sin duda alguna– la tesis da una cierta imposibilidad de la época renacentista.
del pluralismo, que sostiene la carácter lógico y moral para seguir
diversidad de las culturas humanas manteniendo como objetos de una Si África –por no citar más que
y rechaza, por lo tanto, la teoría de ciencia –aun cuando el deseo de sus un ejemplo– se halla a punto de
que unas civilizaciones pueden ser especialistas sea que la identidad sustraerse al ámbito de la antropo-
clasificadas como “superiores” y de esos objetos quede preservada– logía, no podrá sustraerse sin
otras como “inferiores”. No obs- a sociedades que se proclaman suje- embargo al de la ciencia. El cambio
tante, ahora se acusa a esos mismos tos colectivos y que, como tales, radicará en que el estudio de este
antropólogos –y a través de ellos a reivindican el derecho a cambiar. continente será de la incumbencia
la propia antropología– de haber de científicos locales –u otros de
negado esa inferioridad con el fin Para la antropología, esta trans- fuera que adopten los mismos
exclusivo de disimularla y de con- formación del objeto de su estudio métodos que éstos– y no será ya
tribuir así, directa o indirecta-
mente, a que se mantuviera.
supone también una transformación
de sus fines y de métodos, que por …
realizado por antropólogos, es decir
analistas que examinan 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… su objeto “desde fuera” y civilización occidental, cada vez actualmente en tantos países son
trabajan “para afuera”. No serán más compleja y extendida por toda el precio que éstos están pagando
antropólogos los que emprendan la Tierra habitada, esté manifes- por la creciente homogeneización
ese estudio, sino lingüistas, filóso- tando ya las variaciones diferencia- de su cultura material y social? Un
fos e historiadores de los hechos y les que estudia la antropología y fenómeno de este tipo nos parece
las ideas. La antropología aceptará que ésta sólo podía ­aprehender patológico, pero lo que siempre ha
con júbilo este paso a métodos más antaño mediante la comparación de caracterizado a la antropología
sutiles y ricos que los suyos, con la civilizaciones distintas y muy dis- desde su nacimiento es que, gracias
certidumbre de haber cumplido su tantes entre sí. a su labor de interpretación, reinte-
misión de mantener en la órbita del gra en la humanidad y la racionali-
conocimiento científico un gran Ahí está sin duda la función dad las conductas de seres humanos
cúmulo de riquezas humanas, permanente de la antropología. que parecen inadmisibles e
cuando era la única disciplina que Porque si hay, como siempre se ha ­incomprensibles a otros seres huma-
podía hacerlo. afirmado, un determinado “grado nos. En cada época, la antropología
ha contribuido así a
ampliar el concepto pre-
La diversidad ponderante –y siempre
es la razón demasiado estrecho– que
de ser de la se tenía del hombre. La
antropología antropología podría des-
aparecer si la civilización
46 Con respecto a su propio llegara a un estado en el
futuro, la antropología que los hombres fuesen
parece tenerlo asegurado totalmente transparentes
más allá y más acá de sus para los demás, hasta en
posiciones tradicionales. lo más recóndito de su
Más allá en el plano geo- conciencia, fueren cuales
gráfico, porque tendremos fueren el rincón de la
que ir cada vez más lejos Tierra en que habitasen,
para alcanzar a las últimas su género de vida, educa-
poblaciones llamadas pri- ción, profesión, edad y fe
mitivas, que son cada vez religiosa, así como sus
menos numerosas; y más simpatías y antipatías.
allá también en el plano Podemos deplorarlo, cele-
lógico, porque nos vemos brarlo o simplemente
empujados hacia lo esen- constatarlo, pero no
cial en la medida en que © Claude Lévi-Straussr parece que el progreso
Con la hoja que tiene en la mano, este Indio nambicuara se dispone
nuestro acervo de conoci- a probar una cocción de raíces que ha preparado (Brasil 1935-1939). mecánico y el desarrollo
mientos se ha enriquecido de las comunicaciones
y sabemos más cada día. Más acá, óptimo de diversidad” que la antro- nos estén llevando a ese estado.
por último, en dos planos también: pología considera una condición Ahora bien, mientras el modo de
por un lado, el desmoronamiento de permanente del desarrollo de la ser o de actuar de determinados
la base material de las últimas civi- humanidad, podremos tener la seres humanos plantee problemas a
lizaciones primitivas hace que la seguridad de que las variaciones otros hombres, siempre habrá lugar
experiencia íntima sea uno de nues- existentes entre las sociedades y para una reflexión sobre esas dife-
tros últimos medios de investiga- los grupos no se borrarán nunca, renc ias. Prec isamente, esta
ción, a falta de disponer de armas, sino que se reconstruirán en otros reflexión es y seguirá siendo –en
utensilios y objetos hoy desapareci- planos. ¿Quién sabe si los conflic- renovación constante– el ámbito de
dos; por otro lado, es posible que la tos entre generaciones que se dan la antropología. 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Una encuesta difícil
La decisión adoptada por la Conferencia General de la
UNESCO de realizar una encuesta sobre las tendencias
principales de la investigación en ciencias sociales y
humanas no suscitó el entusiasmo de Claude Lévi-
Strauss. En este documento fechado el 13 de marzo de
1964 –del que publicamos algunos pasajes– señala
la serie de problemas planteados por la proyectada
encuesta.
Claude Lévi-Strauss
Un extracto de este documento inédito se publicó en forma de artículo en la
© Claude Lévi-Strauss
Revista Internacional de Ciencias Sociales (Vol. XVI, 1964, Nº 4) con el título Reproducciones de dibujos de los indios caduveos
“Criterios científicos en las disciplinas sociales y humanas”. realizadas por Claude Lévi-Strauss.

[ …] El autor del presente informe


espera no sobrepasar los límites
que se imponen al confesar la impre-
su capacidad que el problema de su
realidad se puede considerar zan-
jado de entrada. […]
primeras no lo son y que, si se uti-
liza el mismo término para desig-
narlas, esto obedece a una ficción
sión de molestia, e incluso de semántica y una esperanza filosó-
malestar, que le ha embargado al fica que todavía carece de confir-
tomar conocimiento del proyecto de
Una ficción semántica mac ione s. Por lo t anto, el
47

encuesta decidido por la Conferen- El autor del presente informe, que paralelismo entre ambas encuestas,
cia General [de la UNESCO] en su ha dedicado su vida entera a la aunque sólo sea a nivel de su enun-
Resolución 3.43. En efecto, estima práctica de las ciencias sociales y ciado, revela una visión imaginaria
que media un trecho demasiado humanas, no tiene ningún inconve- de la realidad. […]
grande entre el interés manifestado niente en reconocer que no se puede
por “las tendencias principales de fingir la existencia de una paridad Antes de ponernos a buscar una
la investigación en ciencias socia- auténtica entre éstas y las ciencias solución inevitablemente defec-
les y humanas” y la negligencia o el exactas y naturales. Tampoco le tuosa –y de “poner a mal tiempo
abandono de que son víctimas causa molestia alguna reconocer buena cara”, ya que la decisión está
éstas, precisamente allí donde más que éstas últimas son ciencias y las tomada– quizás no sea inútil hacer
entusiasmo se ha manifes- un repaso rápido de algunas de
tado en favor del proyecto las causas accesorias de la dis-
de encuesta. […] paridad que se da entre las
ciencias físicas y las ciencias
Las dudas expresadas humanas. […]
ahora no las habríamos for-
mulado con respecto a la A decir verdad, la función
encuesta anterior sobre las de las ciencias humanas parece
tendencias de la investiga- situarse entre la explicación y
ción en ciencias exactas y la previsión, como si se halla-
naturales. En efecto, se tra- sen en la encrucijada entre
taba de algo muy diferente, ambas y fuesen incapaces de
ya que estas ciencias exis- optar resueltamente por tomar
ten desde mucho tiempo una u otra de esas dos vías.


© François Briatte
atrás y han dado pruebas tan Esto no significa que esas cien-
Secuencia de la filmación de una entrevista de Lévi-
numerosas y manifiestas de Strauss con P. Boucher. cias sean inútiles 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… en el plano teórico y prác- pretender con más razón a ser
tico. Lo que ocurre es que su utili- objeto de la encuesta. En efecto, si
dad se mide dosificando sus dos el criterio del conocimiento cientí-
orientaciones y esa dosificación, al fico en las ciencias exactas y natu-
tomar un poco de cada una de ellas rales sólo se puede definir tomando
y no admitir nunca por completo como referencia la ciencia de
una u otra, engendra una actitud Occidente –cosa que ninguna socie-
original que resume de por sí la dad pone en tela juicio aparente-
misión específica de las ciencias mente– esto no es aplicable a las
humanas. Nunca, o muy pocas ciencias humanas y sociales. Por
veces, explican los fenómenos hasta ejemplo, los lingüistas contemporá-
el final, y tampoco los predicen con neos admiten de buen grado que
total seguridad. Sin embargo, los gramáticos de la India llevan un
aunque comprendan la cuarta parte adelanto de varios siglos en lo que
o la mitad de ellos y puedan prever- respecta a una serie de descubri-
los en uno o dos casos de cada mientos fundamentales. Es muy
cuatro, sí son capaces –debido a la probable, además, que la lingüística
no sea el único ámbito en el que
íntima solidaridad que crean entre
haya que reconocer primacía a los
esa explicación y esa predicción
conocimientos del Oriente y el
incompletas– de aportar a quienes
Extremo Oriente. En otro orden de
las practican algo que se sitúa a © Museo del Quai Branly (París)

48
Vara para danzar de 63,5 cm de longitud, ideas, también hay que señalar que
mitad de camino entre el conoci- traída del Mato Grosso (Brasil)
por Lévi-Strauss. los etnólogos tienen la convicción
miento puro y la eficacia. Ese algo
de que algunas sociedades, pese a
es “la sabiduría”, o en todo caso
su ignorancia de la escritura y su
una forma de ésta, que permite
tades prácticamente imposibles de nivel técnico y económico suma-
actuar con menos torpeza porque
superar. […] mente bajo, han imprimido a sus
se comprende un poco mejor,
instituciones políticas o sociales
aunque sin poder determinar nunca
Hemos propuesto también que un carácter consciente y bien medi-
con exactitud qué es lo que se debe
los únicos tipos de investigación tado que les confiere un valor cien-
a uno u otro de los dos aspectos. que sirvan de base a la encuesta tífico. […]
[…] sean los que cumplen con un crite-
rio externo, esto es, su conformi- Si los progresos del conoci-
¿A qué ciencias nos dad con las normas del conocimiento miento llegan a demostrar un día
científico generalmente admitidas
estamos refiriendo? que las ciencias sociales y humanas
no sólo por los especialistas en merecen la denominación de cien-
Cabe interrogarse acerca de las ciencias sociales y humanas –para cias, la prueba de ello emanará de
“tendencias” que se han fijado como evitar así el riesgo de entrar en un la experiencia. Ésta nos mostrará
objeto de la encuesta. ¿Se refieren círculo vicioso–, sino también por que la tierra del conocimiento cien-
esas tendencias a las de la ciencia los especialistas en ciencias exac- tífico es redonda y que –aun cuando
occidental y contemporánea? ¿Com- tas y naturales. crean que se están distanciando
prenden también todas las reflexio- entre sí, en su deseo de alcanzar
nes sobre el hombre que han visto Llegar a un “consenso” sobre por caminos opuestos el rango de
la luz del día en otras épocas y otras esta base parece una empresa reali- ciencias positivas– las ciencias
latitudes? Desde un punto de vista zable. No obstante, vamos a perca- sociales y las ciencias humanas
teórico, no está nada claro en virtud tarnos enseguida de que no son acabarán por confundirse con las
de qué principio habría que optar todas occidentales, ni mucho ciencias naturales, sin darse cuenta
exclusivamente por las primeras, e menos, las investigaciones en cien- ni siquiera, y no se diferenciarán
incluir las segundas crearía dificul- cias humanas y sociales que pueden más de ellas. 

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Lévi-Strauss rememora…
La promoción de la diversidad cultural ha marcado sin duda un hito importante en las actividades
de la UNESCO, y más concretamente en la protección de patrimonio inmaterial. Así dice
Claude Lévi-Strauss en esta entrevista concedida a la UNESCO el 20 de noviembre de 2006,
en la que resume las
etapas esenciales de
su relación con la
Organización.
Documento inédito.
Entrevista realizada
por Georges
Kutukdjian (UNESCO)

F ui nombrado Secretario
General del Consejo
Internacional de Ciencias
Sociales (CICS) cuando
este organismo se creó en 49
el bienio de 1952-1953. Su
pr imer Presidente fue
Donald Young. Por ese © UNESCO/Danica Bijeljac
Lévi-Strauss en la celebración del sexagésimo aniversario de la UNESCO (2005).
entonces, ocupaba el cargo
de Director General de la
UNESCO Jaime Torres Bodet, pero invitado a algunos soviéticos a par- con el CICS. A veces me veía tam-
mis contactos con él fueron esca- ticipar en una de las primeras bién con Samy Friedman, un egipcio
sos. Me encargué de la Secretaría reuniones de este organismo. Los del mismo departamento. Cuando
del CISS hasta el bienio de norteamericanos que iban a asistir dejé el CICS, Szczerba-Likiernik,
1959-1960, época en la que fui ele- a este evento lo supieron nada más que acababa de jubilarse de la
gido para ocupar una cátedra en el poner los pies en París. Estábamos UNESCO, me sucedió en la Secretaría
Colegio de Francia. Entonces dejé el en pleno auge del macartismo y los General. Después pasó a ocuparla el
CICS para dedicarme por entero a la recién llegados amenazaron con propio Samy Friedman, que fue por
docencia. En esos años, mis colabo- regresar a los Estados Unidos al día lo tanto el tercer Secretario General
radores más próximos fueron el siguiente, lo cual hubiera compro- del CICS.
Secretario General Adjunto, Georges metido la celebración de la reunión.
Balandier, y mi secretaria, Edna Como los soviéticos no vinieron, se
Hindie Le May, que luego formaría dio por cerrado el incidente.
Promoción
parte del claustro profesoral de la de la diversidad
Escuela de Altos Estudios en Cien- En la UNESCO mis relaciones más cultural
cias Sociales de París, donde yo intensas fueron las mantenidas con
también enseñaba. Todavía deploro el Departamento de Ciencias En esos años, las dos personalida-
hoy su reciente fallecimiento. Sociales, dirigido por el británico des más notables con las que estuve
Thomas H. Marshall, y dentro de en relación fueron el canadiense
En los inicios del CICS se pro- éste con el polaco Kazimierz Otto Klineberg y el suizo Alfred
dujo un incidente que pudo dege-
nerar en drama. La UNESCO había
Szczerba-Likiernik, que había sido
nombrado enlace para los contactos cuentado entre 1941 y  …
Métraux. A Klineberg lo había fre-

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


… 1947, durante mi estancia
en los Estados Unidos. Lo conocí
en Nueva York, donde era profesor
en la Universidad de Columbia. Con
Métraux tuve trato en la UNESCO.
Era un antropólogo de gran valía,
que ocupaba un puesto en el Depar-
tamento de Ciencias Sociales. Sus
trabajos han tenido una gran
influencia. Creo que el argentino
Edgardo Krebs está preparando
ahora una exposición sobre Métraux
en la Smithsonian Institution.

El trabajo en el CISS consistía


esencialmente en propiciar los
intercambios entre las distintas
disciplinas, reuniendo a especialis-
tas de campos muy diversos: antro-
pólogos, sociólogos, economistas,
psicosociólogos, etc. No hay que
50 olvidar que entonces imperaba la
tendencia a encerrarse en el estu-
© Claude Lévi-Strauss
dio de la propia disciplina y, Reproducciones de dibujos de los indios caduveos realizadas por Claude Lévi-Strauss.
además, no había muchas ocasio-
nes para dialogar.
publicó ese mismo año. Ambos cinco viajes que hice a Japón entre
Después de 1960 mis contactos textos fueron publicados más tarde 1977 y 1988, pedí a mis anfitriones
con la UNESCO fueron episódicos. por la UNESCO en forma de opúscu- que me llevaran a visitar a tejedo-
En algunas ocasiones escribí los y, según tengo entendido, se res, carpinteros y toda clase de
­artículos para El Correo de la UNESCO acaban de reimprimir en francés y artesanos que poseían conocimien-
y el Boletín de Ciencias Sociales, que chino. tos teóricos y prácticos tradiciona-
más tarde se transformaría en la les. Los antropólogos siempre
Revista Internacional de Ciencias La promoción de la diversidad hemos mostrado gran interés por el
Sociales (RISS). Anteriormente, en cultural ha marcado sin duda un patrimonio inmaterial, contribu-
1950, la Organización me invitó a hito importante en las actividades yendo en gran medida a darlo a
formar parte de un grupo de exper- de la UNESCO, y más concretamente conocer con descripciones y análi-
tos internacionales para preparar la en la protección de patrimonio sis detallados. 
primera Declaración sobre la inmaterial. En el transcurso de los
Cuestión Racial, que fue publicada
en el Correo de la UNESCO. El relator
de ese grupo de expertos fue el
norteamericano Ashley Montagu.
Luego, la UNESCO me pidió en 1952
que escribiera un texto sobre el
tema “Raza e Historia”. Veinte años
más tarde, en 1971, me invitó a
pronunciar una conferencia sobre el
tema “Raza y Cultura”, que la RISS

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


Archivos

51

El Correo de la UNESCO • 2008 • Número 5


El Correo de la UNESCO
y la revista Ciencias
Humanas se han aso-
ciado para rendir
homenaje a uno de los
más grandes antropólo-
gos contemporáneos,
que ha cumplido 100
años el 28 de noviem-
bre de 2008.

El Correo de la UNESCO es una publicación de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación,
la Ciencia y la Cultura - 7, place de Fontenoy 75352 París, Francia.
Información por correo electrónico: courier.unesco@unesco.org
Director de la publicación: Saturnino Muñoz Gómez Jefa de la redacción: Jasmina Šopova
Edición francesa: Jasmina Šopova Edición inglesa: Cathy Nolan
Edición española: Francisco Vicente-Sandoval Edición árabe: Bassam Mansour
Edición rusa: Katerina Markelova Edición china: Weiny Cauhape
Maqueta: Marie Moncet Edición gráfica y secciones: Fiona Ryan
Plataforma web: Stephen Roberts, Fabienne Kouadio, Chakir Piro
Los artículos y fotografías pueden reproducirse y traducirse siempre y cuando se cite al autor y se incluya la mención “Tomado del Correo de la
UNESCO”, precisando la fecha y el enlace con la página. La reproducción de las fotografías que no incluyan el crédito de la UNESCO requiere una
­autorización especial.
Los artículos firmados expresan la opinión de sus autores, que no es necesariamente la de la UNESCO.
Las fronteras de los mapas que se publican ocasionalmente no implican reconocimiento oficial por parte de la UNESCO ni de las Naciones Unidas,
como tampoco los nombres de los países o territorios mencionados. ISSN 1993-8616

También podría gustarte