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ALCOHOLISMO Y DROGADICCIÓN

Punto de vista religioso


Pastor Moisés Brito Valeras

 Dios existe y nos creó para ser su imagen (en alma y cuerpo). Para cumplir sus propósitos:
Adorarlo; vivir en armonía con los demás; Ser felices obedeciendo sus leyes; trabajar con gozo y
administrar adecuadamente sus dones; producir para compartir con el necesitado y traer a otros al reino de
Dios.
“Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó” Gn. 1:27

 Ser como Jesús:


“Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido
llamados de acuerdo con su propósito. Porque a los que Dios conoció de antemano, también los predestinó
a ser transformados según la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.”
Ro. 8:28-29

 Cuando no vivimos de acuerdo al plan de Dios, se crea un vacío que buscamos llenar:
“A pesar de haber conocido a Dios, no lo glorificaron como a Dios ni le dieron gracias, sino que se
extraviaron en sus inútiles razonamientos, y se les oscureció su insensato corazón… como estimaron que
no valía la pena tomar en cuenta el conocimiento de Dios, él a su vez los entregó a la depravación mental,
para que hicieran lo que no debían hacer. Se han llenado de toda clase de maldad, perversidad, avaricia y
depravación. Están repletos de envidia, homicidios, disensiones, engaño y malicia. Son chismosos,
calumniadores, enemigos de Dios, insolentes, soberbios y arrogantes; se ingenian maldades; se rebelan
contra sus padres; son insensatos, desleales, insensibles, despiadados. Saben bien que, según el justo
decreto de Dios, quienes practican tales cosas merecen la muerte; sin embargo, no sólo siguen
practicándolas sino que incluso aprueban a quienes las practican.” Ro. 1:21, 28-32.
“Ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino
de Dios.” 1 Co. 6:10

 Necesitamos volver a Dios para recibir el poder para vivir una vida saludable:
(Jesús) “Decía: Ya se cumplió el plazo señalado, y el reino de Dios está cerca. Vuélvanse a Dios y acepten
con fe sus buenas noticias.” Mr. 1:15
“Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados, y
recibirán el don del Espíritu Santo.” Hc. 2:38
“A la verdad, no me avergüenzo del evangelio, pues es poder de Dios para la salvación de todos los que
creen” Ro. 1:16

 Estando en Cristo tenemos libertad para usar las cosas, pero bajo principios:
“Todo me está permitido, pero no todo es para mi bien. Todo me está permitido, pero no dejaré que nada
me domine.” 1 Co. 6:12
“¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido
de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; fueron comprados por un precio. Por tanto, honren
con su cuerpo a Dios.” 1 Co. 6:19,20
“En conclusión, ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de
Dios.” 1 Co. 10:31
“Por lo tanto, esforcémonos por promover todo lo que conduzca a la paz y a la mutua edificación. No
destruyas la obra de Dios por causa de la comida. Todo alimento es puro; lo malo es hacer tropezar a otros
por lo que uno come. Más vale no comer carne ni beber vino, ni hacer nada que haga caer a tu hermano.”
Ro. 14:19-21
 Tenemos necesidades espirituales básicas: Sentirnos amados (Por Dios y por los demás), un
propósito en la vida, sentirnos útiles, alguien a quien amar, sentirnos seguros, y sensación de
satisfacción. Y necesitamos más que una buena voluntad.
“Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios sino como sabios, provechando al
máximo cada momento oportuno, porque los días son malos. Por tanto, no sean insensatos, sino entiendan
cuál es la voluntad del Señor. No se emborrachen con vino, que lleva al desenfreno. Al contrario, sean
llenos del Espíritu. Anímense unos a otros con salmos, himnos y canciones espirituales. Canten y alaben al
Señor con el corazón, dando siempre gracias a Dios el Padre por todo, en el nombre de nuestro Señor
Jesucristo.” Ef. 5:15-20

 Satanás quiere destruirnos:


“Humíllense, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él los exalte a su debido tiempo. Depositen en
él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes. Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su
enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar. Resístanlo, manteniéndose firmes
en la fe, sabiendo que sus hermanos en todo el mundo están soportando la misma clase de sufrimientos. Y
después de que ustedes hayan sufrido un poco de tiempo, Dios mismo, el Dios de toda gracia que los
llamó a su gloria eterna en Cristo, los restaurará y los hará fuertes, firmes y estables.” 1 P. 5:6-10

 Necesitamos orden, pureza, disciplina y virtudes para la sanidad.


“Así que les digo: Vivan por el Espíritu, y no seguirán los deseos de la naturaleza pecaminosa. Porque ésta
desea lo que es contrario al Espíritu, y el Espíritu desea lo que es contrario a ella. Los dos se oponen entre
sí, de modo que ustedes no pueden hacer lo que quieren. Pero si los guía el Espíritu, no están bajo la ley.
Las obras de la naturaleza pecaminosa se conocen bien: inmoralidad sexual, impureza y libertinaje;
idolatría y brujería; odio, discordia, celos, arrebatos de ira, rivalidades, disensiones, sectarismos y envidia;
borracheras, orgías, y otras cosas parecidas. Les advierto ahora, como antes lo hice, que los que practican
tales cosas no heredarán el reino de Dios. En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia,
amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas. Los que
son de Cristo Jesús han crucificado la naturaleza pecaminosa, con sus pasiones y deseos. Si el Espíritu
nos da vida, andemos guiados por el Espíritu.” Gál. 5:16-25

 La restauración es un proceso largo de aprendizaje con el Cristo vivo:


“Jesús se dirigió entonces a los judíos que habían creído en él, y les dijo:
—Si se mantienen fieles a mis enseñanzas, serán realmente mis discípulos; y conocerán la verdad, y la
verdad los hará libres.” Juan 8: 31-32

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