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I.- Introducción
A finales de los años 1980 y principio de los 1990 el sector agropecuario mexicano fue
incluido en el proceso de profundos cambios en la relación entre el Estado y la economía.
Destacan la eliminación de licencias a la importación de granos y oleaginosas que
controlaba la hoy extinta Compañía Nacional de Subsistencias Populares o CONASUPO en
preparación a la entrada de México al Acuerdo General de Comercio y Tarifas (GATT por
sus siglas en inglés); la eliminación de los precios de garantía o de soporte al productor de
los cultivos mencionados; el desmantelamiento de la infraestructura estatal para el
almacenamiento de granos; y la inclusión del sector agroalimentario al Tratado
Norteamericano de Libre Comercio o TLCAN.
Transición
Los precios de los productos agropecuarios determinados en el
Tratado Norteamericano de hasta
mercado internacional
Libre Comercio (TLCAN o 2008
NAFTA)
Prohíbe el uso de licencias de importación aplicando Enero
1
En el Anexo se reportan, en tres cuadros: los procesos de liberalización del comercio agropecuario de
México (cuadro A1) y la liberalización escalonada acordada por México y EUA de los productos que
consideraron sensibles en el marco del TLCAN (cuadro A2 y cuadro A3 respectivamente).
principios de tarificación
Liberalización completa en 2018. Los productos agropecuarios
sensibles sujetos a cuotas y tarifas hasta eliminarlas
paulatinamente en 15 años
1994...
Las intervenciones del gobierno están permitidas en materia de
subsidios agropecuarios, restricciones a la importación por
razones fito sanitarias y se establecieron reglas de origen en
materia de empaquetamiento
Las expectativas
Precios. Con las reformas interna y el TLCAN surgiría lo que en economía se llama la “ley
de un solo precio” es decir, que los productores tomarían sus decisiones a partir de precios
fijados en el mercado internacional. Se esperaba que los de los cultivos mexicanos no
competitivos bajarían (granos y oleaginosas)3, afectando a sus productores y que, con la
eliminación de aranceles, se beneficiarían los de cultivos de exportación (frutas y
hortalizas).
En última instancia, la expectativa oficial fue que con las reformas y el TLCAN el campo
mexicano experimentaría un desarrollo sostenido.
2
Detalles en Yúnez y Barceinas (2003).
3
Estos cultivos –llamados básicos--fueron los principales bienes sujetos a intervenciones de la Compañía
Nacional de Subsistencias Populares o CONASUPO, una paraestatal que, entre otros, determinaba sus
precios (llamados de garantía).
La liberalización del agro mexicano no estuvo exenta de críticas, destacando el argumento
basado en los subsidios que el gobierno estadounidense otorgaba a sus agricultores. Éste se
basaba en que tales apoyos provocarían competencia desleal dañando a los productores
mexicanos de básicos, destacando el maíz. La respuesta oficial a tal crítica fue que el
consumidor mexicano se beneficiaría con dichos subsidios al tener acceso a alimentos más
baratos. En síntesis, los detractores del TLCAN (y las reformas) se enfocaron y han
enfatizado los efectos de tales procesos por el lado de la oferta y su consecuencia: la mayor
dependencia agroalimentaria de México hacia los EUA.
Convergencia. También se esperaba que con el TLCAN y las reformas, la economía de las
distintas regiones rurales del país tenderían a converger. En particular, que la producción de
cultivos competitivos intensivos en mano de obra emplearía a trabajadores agrícolas
desplazados de la producción de cultivos no competitivos.
Migración. La expectativa fue que, durante el periodo de ajuste, la migración rural crecería,
tanto al resto de México como a los EUA, y que esta última se reduciría en el mediano
plazo.
Como se previó, los precios internos de los principales cultivos producidos en México –los
granos—han experimentado una tendencia a su igualación con los internacionales
(Jaramillo, Yúnez y Serrano, 2015). También como se esperó, los primeros decrecieron
durante los primeros años de aplicación del TLCAN. Siguiendo la tendencia internacional,
dichos precios crecieron a medidos de la década del 2000 y han experimentado una gran
volatilidad durante los años más recientes (gráfica 1).
5,000
4,000
3,000 Cebada
Maíz
Sorgo
2,000 Trigo
1,000
0
80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 06 08 10 12 14
19 19 19 19 19 19 1 9 1 9 1 9 1 9 2 0 2 0 20 20 20 20 2 0 2 0
1993-2015
2010-2015
2005-2009
2000-2004
1995-1999
-2.00% -1.00% 0.00% 1.00% 2.00% 3.00% 4.00% 5.00% 6.00% 7.00%
120,000.00
100,000.00
80,000.00
60,000.00
40,000.00
20,000.00
-
1993 1998 2003 2008 2013
Importaciones Exportaciones
Fuente: http://www.inegi.org.mx/sistemas/bie/
Las exportaciones mexicanas de frutas y hortalizas también han crecido (aunque las de
carnes y leche son insignificantes), cuadro 3. Destacan las de aguacate, que han crecido
sostenidamente a partir de la eliminación de restricciones a su exportación a los EUA, al
grado que su valor ahora es similar al del jitomate.
Exportacio
Importaciones Volumen Valor Volumen Valor
nes
Las cifras de los censos agropecuarios de 1991 y 2007 indican que no se ha modificado
sustancialmente la estructura agraria en México, en el sentido que las unidades de
producción agrícola o UPA de menor tamaño siguieron siendo las más abundantes, y, no
5
Por ejemplo y según datos del Sistema de Información Agropecuaria y Pesquera o SIAP de la SAGARPA: el
peso de EUA en las exportaciones de las principales frutas mexicanas fluctúan entre el 80% (aguacate) y casi
100% (papaya y piña). Patrón similar tienen las exportaciones de vegetales a tal país. Por ejemplo el 99% de
las exportaciones de jitomate y alrededor del 97% de las de brócoli, coliflor y chiles.
sólo eso, sino que su peso subió en 2007 respecto a 1991 (cuadro 5). 6 Por su tamaño, la
proporción de tierra que explotan estas unidades es baja. 7
La información de los censos 1991 y 2007 también muestra que el ejido ha seguido siendo
un componente de importancia en materia de tenencia de la tierra, y no sólo esto, sino que
la proporción de hectáreas bajo este régimen subió: de 28% en 1991 a 33% en 2007 (cuadro
6).
Convergencia
6
El INEGI define a la Unidad de Producción commo el conjunto formado por terrenos con o sin actividad
agropecuaria o forestal en el área rural o con actividad agropecuaria en el área urbana, ubicados en el mismo
municipio, por los animales que poseen así como el equipo y maquinaria agrícola, pecuaria y forestal, siempre
que durante el periodo de levantamiento del censo se haya manejado bajo la misma administración
7
El último censo agropecuario es el de 2007 y el gobierno de Peña Nieto no cumplió su propósito de levantar
el planeado para 2017, argumentando restricciones presupuestales.
lo mismo aplica a la incidencia de la pobreza (gráfica 5). Asimismo, y entre las regions
rurales, el ingreso neto de los hogares del sur-sureste sigue siendo menor respecto al resto
de las regiones. Lo anterior no obstante que el de los hogares de las dos regiones norteñas
decreció en 2007 respecto a 2002 (gráfica 6). Conviene añadir que la pobreza alimentaria se
mantuvo prácticamente sin cambios en 2016 respecto a 1992, aunque con altibajos por la
crisis macro de mediados de los 1990 y la internacional de la segunda mitad del 2000.
Gráfica 4. Evolución del Ingreso per cápita mensual (pesos de diciembre de 2016)
6,000.00
5,253.06
5,082.52 5,042.69
4,919.47 4,960.76
4,741.00
5,000.00 4,701.96
4,587.68
4,490.52 4,561.35
4,371.22
4,174.31 4,181.25
4,015.95 3,974.51
3,760.12 3,821.22 3,858.99
3,764.20 3,823.65
4,000.00
3,647.25 3,667.84 3,651.70
3,577.56
3,570.98
3,442.84
2,917.99
3,000.00 2,638.70 Todo México
2,380.87
2,307.23 2,336.05 Zona Urbana
2,199.90
2,081.94 2,180.79 Zona Rural
1,994.66 1,993.97 2,061.50 2,006.41
1,897.49
2,000.00 1,769.49
1,512.27
1,389.06
1,000.00
-
1992 1994 1996 1998 2000 2002 2004 2005 2006 2008 2010 2012 2014 2016
*
* El ingreso de 2016 se estimó empleando el "Modelo Estadístico 2016 para la continuidad del MCS-ENIGH".
Fuente: Elaboración propia con datos de la EnCUESTA Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares o ENIGH
50.00%
40.00%
Todo México
30.00% Zona Urbana
Zona Rural
20.00%
10.00%
0.00%
19921994199619982000200220042005200620082010201220142016
* En el periodo 1992-2014 la pobreza se estima mediante la línea de pobreza alimentaria, mientras que para 2016 se
emplea la línea de bienestar mínimo. El ingreso de 2016 se estimó empleando el "Modelo Estadístico 2016 para la
continuidad del MCS-ENIGH".
Fuente: Elaboración propia con datos de la ENIGH
Gráfica 6. Ingreso neto total anual promedio de los hogares rurales por región (pesos
de 2002)
80,000
70,000
60,000
50,000
40,000
30,000
20,000
10,000
0
Sur-sureste Centro Centro Noreste Noroeste
occidente
2002 2007
Fuentes: Encuesta Nacional a Hogares Rurales de México o ENHRUM 2002 y 2007.
Diagnóstico
La exposición de los productores agrícolas mexicanos a los precios internacionales a partir
de las reformas y del TLCAN y el aumento del comercio del sector y del peso de los EUA
en éste no contradicen lo que se esperaba del TLCAN. Sin embargo, y a diferencia de lo
esperado, ha habido acontecimientos no previstos. Destaca el hecho que la producción
mexicana de granos básicos no ha decrercido (recordar que estos cultivos fueron
considerados no competitivos por el gobierno de Salinas de Gortari), no obstante que sus
precios bajaron hasta mediados de los años 2000 (gráfica 1), y porque, con la excepción del
sorgo, sus importaciones han crecido sostenidamente (cuadro 2).
50.00
40.00
30.00
20.00
10.00
0.00
80 82 84 86 88 90 92 94 96 98 00 02 04 06 08 10 12 14 16
19 19 19 19 19 19 19 19 19 19 20 20 20 20 20 20 20 20 20
Volviendo al caso del maíz, para tratar de comprender el por qué su cultivo en México ha
continuado, y crecido, hay que indagar si el maíz amarillo importado es sustituto del
blanco, el que más se produce en México. Al respecto los gobiernos mexicanos han sido
ambiguos. Al considerar al grano como cultivo sensible para México, el gobierno de
Salinas de Gortari acordó un proceso de liberalización escalonada (ver anexo A3), lo cual
significa que este consideró que maíz blanco y amarillo son sustitutos. Sin embargo,
cuando gobiernos posteriores permitieron la importación del maíz estadounidense por
arriba de la cuota y sin cobrar las tarifas establecidas por el TLCAN cuando esto sucediera,
el gobierno de México argumentó que la decisión se tomó porque los dos tipos de maíz no
eran sustitutos. Lo que se argumenta acá (y en otros estudios, Yúnez Naude A., A. Martínez
y M. Orrantia, 2007), es que los dos tipos de maíz son sustitutos imperfectos, por los usos
que se les dan: el amarillo se destina, sobretodo, a la alimentación de ganado y el blanco al
consumo humano.
Lo anterior es parte de las razones que explican la persistencia y crecimiento del cultivo del
maíz en México y también por qué no se ha desplomado la producción del grano en tierras
de temporal por parte de agricultores con excedentes comerciables. En cuanto a los muy
pequeños, su persistencia en producir el grano se debe a varias razones, entre las que están
las relacionadas con cultura y tradiciones y con la economía. Respecto a lo último, un
fenómeno que aísla a los pequeños productores de los precios y sus cambios son los costos
de transacción en los mercados, incluyendo el del maíz y el laboral. Por lo anterior y para
asegurar la subsistencia del hogar, estos agentes cultivan el grano (y otros alimentos en la
llamada milpa y en el traspatio de sus viviendas).
Dos fenómenos que contrastan con las expectativas oficiales sobre los efectos de las
reformas son la compactación de la tierra agrícola y la privatización de las ejidales (cuadros
5 y 6). A falta de datos oficiales y estudios precisos que den cuenta del contraste entre
predicciones y tendencias, lo que puede decirse es que lo que ha sucedido es un aumento en
el arrendamiento de la tierra y que la privatización de las tierras ejidales se ha circunscrito,
fundamentalmente, a las ubicadas cerca de las ciudades y centros turísticos. A lo anterior se
propone como explicación que para los pequeños productores agrícolas basados en la
economía del hogar seguir produciendo alimentos para el autoconsumo ha seguido siendo
una manera de protegerse frente a eventos negativos inesperados que atentan en contra de la
la subsistencia familiar. 8
9
Hay que añadir que con los aumentos esperados debidos al cambio climático en los precios mundiales de los
alimentos se espera un crecimiento en la incidencia en la pobreza (Intergovernmental Panel on Climate
Change-IPCC, 2015).
Estudiar estadísticamente si ello significa un cambio estructural respecto a las tendencias
históricas y los factores que las explican son temas de investigación pendiente y en curso. 10
Como sucede con otros choques, los cambios en la política interna y de comercio exterior
adoptados por el Estado mexicano desde los años 1990 han traído ganadores y perdedores.
Lo sorprendente es que mientras algunos agentes económicos que se esperaba perdieran no
lo experimentaron, otros que se previó ganarían no resultaron beneficiados.
Como se supuso, los productores de cultivos de exportación (de frutas y hortalizas) han
ganado, pero también sucedió con ciertos agricultores de cultivos básicos de algunas
regiones del país. La que no ha ganado con las reformas es la población en pobreza y con
bajos ingresos.
A partir de lo discutido se concluye que los efectos esperados de las reformas y el TLCAN
se han cumplido parcialmente; a saber, crecimiento sustancial del comercio agropecuario –
sobre todo con los EUA--, un aumento en los rendimientos en la producción agrícola con
10
Las hipótesis de trabajo son que tales cambios se explican por el lado de los precios y la devaluación del
peso , por el clima favorable y por el mayor acceso al mercado estadounidense de las exportaciones
mexicanas como es el caso del aguacate. En las hipótesis no se incluyen las políticas agropecuarias recientes,
entre otros, porque éstas no se han modificado y por la reducción del presupuesto federal desde mediados de
2015.
11
Por cierto, la aplicación de este programa lleva casi 25 años, no obstante que su diseño original fue el de un
programa transitorio. Al PROCAMPO, se le han sumado los apoyos al ingreso de los productores
comerciales, que también siguen vigentes.
riego de un segmento de los productores y la reducción de la emigración al vecino del
norte. También se propone que el aumento en el cultivo de algunos granos y forrajes –del
maíz en especial-- se explica por las intervenciones del gobierno mexicano, por la
persistencia en la producción de maíz en pequeña escala y por el aumento en la demanda de
cárnicos y de otros productos de origen animal. A lo anterior hay que agregar que, las
políticas al campo mexicano han ido en contra de la esperada convergencia económica que
se esperaba con las reformas y el TLCAN. Por último y a diferencia de las expectativas, se
ha estancado el ingreso real de los hogares rurales y subsiste la incidencia de la pobreza.
Estos resultados implican que no es válido separar los efectos del TLCAN en el agro y
sector rural mexicano de los que corresponden a las políticas internas, y que las últimas son
las más relevantes cuando se trata la cuestión de la seguridadad alimentaria de los
mexicanos. En otras palabras, no es posible atribuir con certeza impactos positivos o
negativos al tratado comercial. Lo que puede asegurarse es que los preceptos de la llamada
teoría pura del comercio internacional —adoptados por el gobierno de Salinas de Gortari y
mantenido por los posteriores—no corresponden con la realidad, y en particular, con la de
la economía rural mexicana. Ejemplo de ello es la presencia de costos de transacción o, de
plano, la ausencia de los mercados relevantes en el ámbito rural y sus consecuencias: la
producción de maíz para el consumo propio y la diversificación de las fuentes de ingreso de
los hogares rurales, entre otras.
Por varias razones, sería aventurado elaborar predicciones para construir posibles
escenarios en cuanto al futuro de la situación alimentaria de México, destacando: a) que,
12
Lo anterior aplica a los posibles impactos del TLCAN estimados a partir de modelos de equilibrio general
aplicados a la agricultura mexicana que se elaboraron durante las negociaciones del mismo (es el caso, por
ejemplo, de los modelos de Robinson, S. et al (1993) y Levy y S. Wijnbergen 1994.
como arriba se indica, es prematuro aún tratar de conocer con precisión las razones que
expliquen la recuperación en años recientes del sector agropecuario en materia productiva y
el saldo positivo en el comercio del sector; y b) porque se desconoce el resultado de la
renegociación en curso del TLCAN. Frente a ello y a partir de lo expuesto en la sección
previa, lo que parece pertinente es hacer una reflexión general sobre lo que le puede
suceder al TLCAN en materia agropecuaria, poniendo énfasis en lo que requieren las
políticas internas para que se logre el desarrollo del campo mexicano.
1.- A grandes rasgos, los agentes a los que les interesa mantener el TLCAN en el ámbito
agropecuario son los exportadores mexicanos exitosos de frutas y hortalizas y los
estadounidenses de granos y oleaginosas, así como a las corporaciones multinacionales
comercializadoras y procesadoras de alimentos ubicadas en México; también les conviene
mantener el status quo a los productores mexicanos de granos beneficiados por las políticas
internas de subsidios a la comercialización. Los últimos son los que han defendido con más
éxito sus intereses en la distribución del presupuesto agropecuario.
2.- El escenario extremo alternativo es que el gobierno del presidente Trump decida de
manera unilateral la derogación del TLCAN. 13
Por lo expuesto en el diagnóstico y con base en las tendencias, el primer escenario implica
el mantenimiento de los subsidios a los productores de granos beneficiados por las políticas
de la SAGARPA y, de mantenerse su configuración, es probable que persista la
polarización de la estructura productiva del agro, la divergencia regional y la pobreza rural.
A lo anterior hay que agregar los límites de las políticas públicas en materia ambiental, que
incluyen al sector agropecuario (Yúnez Naude y P. Aguilar, 2012)
13
Por supuesto, hay escenarios alternativos que no se discutirán por la incertidumbre que hay en el plano de l
renegociación del TLCAN.
Hay evidencia empírica contundente sobre la inequidad estatal, regional y por tipo de
Unidad de Producción Rural que ha caracterizado los programas de la SAGARPA (Scott,
2010, Robles Beranga, H. 2013 y Rodríguez 2017).
Este escenario podría darse aun con recortes al presupuesto de la SAGARPA, ya que la
historia de sus apoyos muestra que los agentes económicos privilegiados por el Estado
mexicano han sido los productores de granos .
V.- retos para las políticas públicas y posibles alternativas para mitigar costos y
promover procesos de desarrollo incluyente
Un rasgo de las políticas de desarrollo rural aplicadas desde el inicio de las reformas y del
TLCAN hasta el gobierno del presidente Peña Nieto ha sido la desvinculación entre las
productivas (que apoyan a productores comerciales) y las sociales, canalizadas a la
población rural en pobreza, incluyendo a los hogares rurales agrícolas. La excepción fue
PROCAMPO, cuya cobertura los incluyó. 14
Por supuesto que tal condición se aplica a los programas y acciones en curso para promover
el aumento en la productividad rural. Los estudios y experiencias que hay hasta ahora
indican que ello no se ha cumplido y que persisten las inercias en las políticas federales
para el desarrollo rural. Una de ellas es la inequitativa distribución del presupuesto federal
encaminado a promover la productividad; dos más son las imprecisiones en la definición de
la población objetivo de los programas relacionados con la producción rural, así como la
falta de consideración en ellos de las especificidades de la producción agropecuaria en
pequeña escala (Rodríguez, 2017).
Referencias
Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social o CONEVAL (sin
fecha, circa 2014). Diagnóstico de la Capacidad Productiva de los Hogares Rurales y
Pérddd Poscosecha. México.
Levy, S. y S. van Wijnbergen (1994). “Labor markets, migration and welfare: Agriculture
in the North-American Free Trade Agreement.” Journal of Development Economics, núm.
43, pp. 263-278.
Rivera Ramírez F. y A. Yúnez Naude (2015). “Las políticas para el desarrollo rural:
situación actual y retos”. En Yúnez Naude, A. et Al. La economía del campo mexicano:
tendencias y retos para su desarrollo. El Colegio de México.
Scott, J., 2010. “Pobreza rural: principales características, determinantes y desafíos para las
familias rurales”. Paper presented at the Experts’ Meeting: Analysis of Rural Development
Problems of Mexico. Inter-managerial Development Group, Mexico City, July 6th.Taylor,
J. E. y A. Yunez-Naude, 2014. “The True Cost of Corruption.” Capítulo 14 en Taylor, J.
Edward y Mateusz Filipski, Beyond Experiments in Development Economics: Local
Economy-wide Impact Evaluation. Oxford University Press. 336 p. ISBN: 978-0-19-
870787-5 http://ukcatalogue.oup.com/product/9780198707875.do
Taylor, J. E., Yúnez Naude, A. y A. González. Informe consolidado (2007). Estudios sobre
Políticas Públicas para el Sector Rural en México, Proyecto financiado por el Banco
Interamericano de Desarrollo o BID, con la participación de la SHCP. Agosto, 2007.
Yúnez Naude, A. P. Aguilar, “Análisis sectorial para una economía verde (Mx-GESS)”,
Informe Final, Proyecto MX-GESS, Banco Interamericano de Desarrollo, Instituto
Nacional de Ecología y Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Nov.
2012.
Cuadro A.1. México: estructura de protección de los cultivos más importantes: 1985-
1995
Condición: TLCAN y ronda Uruguay
Fracció Condición entre TLCAN (Enero, MFN (Enero,
n 1985 y 1989/90 1994)** 1995)***
Descripción Licencia
tarifari Cuota
a no.* Tarif de Tarifa Cuota
(Canadá Tarifa (%) Cuota
a importaci (%) (EUA)
)
(%) ón
1005100
1 Maíz para siembra 0 X Nula Nula
1005900
1 Maíz palomero 20 X 10.0 20
1005900
2 Elotes 0 X 5.0 10
1005909
9 Maíz, otro 0 X 215.0 2,500 1.0 198 10.0
0713330 Frijol para siembra (Phaseolus
1 vulgaris) 0 X Nula Nula
0713339
9 Frijol, otro 0 X 139.0 50 1.5 128 5.0
1003000
1 Cebada para siembra 0 X Nula 10
1003000
2 Cebada 5 X 128.0 118
1107100
1 Malta 10 X 175.0 120 30.0 161 1.2
1001100
1 Trigo duro 10 7.5 67 98.0
1001909
9 Trigo (otro) 0 X 7.5 67
1006100
1 Arroz (arroz con cáscara) 10 5.0 10
1006200
1 Arroz pelado 20 10.0 20
1006300
1 Arroz, entero 20 10.0 20
1006400
1 Arroz, partido 10 5.0 10
1007000
1 Sorgo (Dic. 16 a Mayo 15) 0 X Nula Nula
1007000
2 Sorgo (Mayo 16 a Dic. 15) 15 X Nula 15
1201000
1 Habas de soja para siembra 0 X Nula Nula
1201000
2 Habas de soja (Feb. 1 a Julio 31) 0 X Nula Nula
1201000 Habas de soja (Agosto 1 a Enero
3 31) 15 5.0 15
1203000
1 Copra 10 X 10.0 45
1206000
1 Semilla de girasol (para siembra) 0 X Nula Nula
1206009 Girasol otro 0 X Nula Nula
9
1207200
1 Semilla de algodón para siembra 0 X Nula Nula
1207400
1 Semilla de sésamo 0 X Nula Nula
1207600
1 Semilla de girasol para siembra 0 X Nula Nula
1207600 Semilla de girasol (Enero 1 a Sep.
2 30) 0 X Nula Nula
1207600 Semilla de girasol (Oct. 1 a Dic.
3 31) 10 X 5.0 10
0404109
0 Leche en polvo X 139.0 40 128 80.0
* Corresponden a los primeros seis dígitos del sistema de códigos arancelarios armonizados de la Organización Mundial
del Comercio u OMC.
** Cuando se aplican los contingentes arancelarios, las cifras corresponden a los aranceles por encima de los contingentes
(en cuotas - tarifas son Nulas). Las cuotas son en miles de tons.
*** Cuando se aplican los contingentes arancelarios, las cifras corresponden a los aranceles por encima de los
contingentes (consolidated in-quota tariffs are 50%). Las cuotas son en miles de tons.
Fuentes: elaboración propia a partir de la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial (SECOFI), 1994, y Economic
Comimssion for Latin America web-site, http://www.eclac.cl/
Cuadro A2. EUA: Proceso de liberalización de los cultivos más exportados por México
Fracción Producto Reducciones arancelarias Contingentes arancelarios
Vegetales
Algunas tarifas estacionales se eliminaron en enero
de 1994, otras en 1998 y la tarifa del 25% del 1 de
0709.20.10 Espárragos
febrero al 30 de abril se reducirá gradualmente
hasta su eliminación en diciembre de 2008.
Una tarifa estacional se eliminó en diciembre de
120,800 tm de Octubre a
0706.10.05 Zanahorias y nabos 1998 y la de octubre a abril será eliminada en
Abril
diciembre de 2003
La tarifa se redujo a 15% en 1994 y se eliminará en
704.1 Coliflor y brócoli
diciembre de 2003.
Las tarifas estacionales se eliminarán en diciembre
0707.00.50 Pepinos
de 2008.
0703.20.00 Ajo Las tarifas se eliminaron en 1994.
Las tarifas estacionales se eliminarán en diciembre
703.1 Cebollas 130,700 tm del 1-I al 30-VI
de 2003.
Una tarifa estacional se eliminará a finales de 2003
0709.60.00 Pimientos
y otra en diciembre de 2008.
165,000 tm del 1-III al 14-
Tomates (frescos y Una tarifa estacional se eliminará en diciembre de
0702.00.60 VII y 172,300 del 15-XI al
congelados) 1998 y otra en diciembre de 2003.
28(9)-II
Frutas
Reducciones arancelarias anuales hasta su
804.4 Aguacates eliminación en el 20-12-2003. Restricciones
fitosanitarias.
806 Uvas Libres empezando en enero de 1994.
Reducciones arancelarias anuales hasta su
805.3 Limas y limones
eliminación en el 30-12-2003.
804.5 Mangos Tarifas eliminadas en 1994.
La tarifa del 1-XII al 15-V se eliminó en 1994; la
tarifa del 1-VIII al 15-IX será eliminada en 2003, y
807.1 Cantalupo
habrá libre comercio para el resto del año hasta
diciembre de 2008.
Las restricciones comerciales se reducirán 40 millones de galones SSE
0805.10.00 Naranjas gradualmente hasta que se eliminen en el 30-XII- de FCOJ y 4 millones SSE,
2008 más una snapback provision
La tarifa será eliminada gradualmente hasta
0807.20.00 Papayas
diciembre de 2003.
Fuentes: Secretaría de Comercio y Fomento Industrial (SECOFI), 1994, y Economic Research Service (ERS), USA
Department of Agriculture website.