INSTITUTO SUPERIOR DE FORMACION DOCENTE N°82

HISTORIA MUNDIAL (SIGLO XIX)

PROFESOR: Claudio Barboza
ALUMNO: Fernando Hipólito Nuñez
Curso: 3°A DE HISTORIA

TEMA: Industrialización Belga, Francesa y Alemana

 Industrialización Belga, Francesa y Alemana.

La Industrialización de Bélgica:

Bélgica fue la primera región del continente que experimento la revolución industrial, esto se
debió en gran medida gracias a las influencia británicas, para el siglo XIX fuel país más
industrializado de Europa después de Gran Bretaña. Hacia 1860-1870 el país había completado su
industrialización, su éxito se debió por múltiples razones.

En la industria textil: En su inicio se había desarrollado en la edad media en Flandes como un

centro de industria textil lanera, alrededor de ciudad de Gante a principio de del siglo XVIII se
había expandido la industria del lino y la fabricación de telas estampadas de algodón esto se
producían en talleres urbanos Para fine del siglo la industria lanera tenía su principal centro en la
ciudad de Verviers, el hilado el tejido se llevaba a cabo mediante el sistema de trabajo a domicilio,
en la cual ocupaban gran parte de trabajadores.

Con la maquinización de la industria algodonera que se dio en la zona Gante, esto se debió a la
introducción de máquinas y de trabajadores ingleses. Se difundió rápidamente el uso del vapor,
que algunas empresas locales empezaron a fabricar maquinaria textil.

La minería y la industria metalúrgica: En la industria del carbón se desarrolló en la zona occidental

del territorio. Bélgica poseía varias cuencas carboníferas cuya producción se destinaba al consumo
local y a la exportación al norte de Francia. La modernización de la industria del carbón se dio a
mediados del siglo XVIII, obteniendo grandes incrementos en la producción y la productividad,
anteriormente su explotación era llevada a cabo por cooperativas de mineros, a medida que los
requerimientos de capital aumentaron y la organización técnica y financiera se vivió más compleja,
esto dio origen a empresas privadas que tuvieron una participación destacada. Para 1850 Bélgica
fue el principal productor de carbón del continente Europeo.

En la industria del hierro la revolución industrial significo una ruptura y una clara separación entre
las viejas y las nuevas fábricas. Esta últimos se dedicaron a la fabricación de maquinarias de hilar
destinada a la industria a la industria textil lanera y más tarde a la producción de máquinas de
vapor.

Para 1840 Bélgica se había constituido en una de las naciones más industrializada de Europa, esto
se debió principalmente a la trasferencia de tecnología, de recursos humanos y de capitales. Otro
punto a su favor fue el papel del estado, este estuvo orientado a estimular el desarrollo de la
industria. Facilitando el desarrollo de las sociedades anónimas y a la entrada de capitales
extranjeros (franceses, ingleses y holandeses) en la década de 1830 y 1840.

Por último la localización geográfica en la cual se encontraba beneficio a la industrialización. La

cercanías con gran Bretaña facilito la transferencia con ya habíamos mencionado de tecnologías y
sumado esto también la cercanía con Francia que posibilitaba obtener un mercado exterior gracias
a que se destinaba la mayor parte del carbón en esa región.

La Industrialización de Francia:

En el siglo XVIII, Francia era uno de los países ms ricos de Europa al igual que otros países del
continente tuvo un fuerte crecimiento de la actividad proto-industriales. La industria a domicilio se
expandió gracia a la demanda exterior y a la acción de los comerciantes empresarios de las
ciudades que contaron mucha mano de obra de procedencia rural. El sector más importante era la
industria textil, en particular la lana.

Otros sectores industriales destacados, era la minería del carbón y la metalurgia, en este sector
predominaba las viejas técnicas, aunque en siglo XVIII empezaron a utilizarse nuevos métodos del
hierro. En algunas ramas de la industria funcionaban como proto-fábricas que se había expandido
gracias al apoyo del estado, que contribuyo activamente a la creación de grandes empresas para
la producción de bienes de lujo.

Con la llegada de la revolución Francesa en 1789, hasta el fin de las guerras napoleónicas en 1815,
el país se encontraba permanentemente en guerra, esto provoco una disminución del ritmo la
economía, su impacto fue ambiguo teniendo unos efectos negativos, por ejemplo: la pérdida de
las colonias, del mercado externo y de fuente de abastecimientos

La nueva legislación formada después de la revolución creo un marco favorable para el desarrollo
de iniciativas privadas. Otros aspectos positivos de la etapa revolucionaria fue la política
educativa, con la creación de las escuelas especializadas en materias científicas y en ingeniería
dedicada a la formación de profesionales.

La expresión dualismo industrial hace la referencia a la coexistencia complementaria de formas

tradicionales y formas innovadoras de producción industrial, de la industria manual y la industria
mecanizada

Francia tendría dos oleadas de industrialización en el siglo S.XIX que coinciden con una etapa de
mayor crecimiento de la economía. La primera oleada se dio en 1815 y 1860 con una aceleración
entre 1840 y 1860, durante la primera etapa el crecimiento de la industria tuvo lugar en la forma
de producción tradicional, con la mecanización reducida y un alto empleo de mano de obra que
son de procedencia rural. Entre 1860 y 1885 el ritmo de la economía fue más lento junto con la
industria, como consecuencia del agotamiento de los recursos de la primera industrialización.

Durante el siglo XIX las transformaciones de la estructuras económicas de Francia fue lenta y la
agricultura siguió teniendo una alta participación en el producto total del país, su taza de
urbanización fue baja a diferencia de Inglaterra y Alemania.

Por ultimo A partir de 1847 se observa el incremento de la industria y de la mano de obra

empleada en la misma y teniendo como consecuencia el abandono de las tierras.

La Industrialización de Alemania

Alemania comenzó a industrializarse en la década de 1840, pero a principios del siglo XIX el mayor
obstáculo que tuvo a la hora de industrializarse fue a causa del desorden institucional que estaba
sufriendo. Su territorio se hallaba fragmentado en grandes unidades políticas independientes, esto
causara fuerte trabas para la formación de un mercado interno unificado, su comercio interior se
veía limitado por barreras aduaneras, las diferentes monedas y monopolios comerciales.

A partir del siglo XVIII Alemania tenía diferencias regionales muy marcadas, se encontraba
dividida en dos territorios, la región occidental que se caracterizaba por estar industrializada,
mientras que la región oriental se dedicaba a la producción agrícola, a medida que avanzo la
industrialización ambas regiones se complementaron por ejemplo: el este proveía al oeste de
materia prima y alimentos y el oeste vendía esto productos manufacturados. Este proceso de
modernización de la industria fue en respuesta al desafío que significo la competencia con los
productos británicos, en su procesos de industrialización recibió aporte de capitales extranjeros
(franceses) e importo insumos industriales. Más adelante, la industria local sustituyo las
importaciones y las inversiones contaron con una fuerte financiación interna.

La unificación política de Alemania se completó recién 1871 y para 1884 se formó la unificación de
la unión aduanera, esto permitió la unión del mercado interno, anterior a esto, la industria
alemana tuvo un avance simultáneo de las tecnologías manufacturas y la conversión de la
economía de mercado

En la industrialización el papel del estado fue muy activo y se manifestó de diferentes modos uno
de ello fue la medida de la organización del sistema educativo y la promoción de la investigación
científica, esto sumado que en la primera mitad del SXIX liberaron las estructuras económicas y
social heredadas por el antiguo régimen y crearon las condiciones para una economía de mercado
y más tarde la unión aduanera. Con referencia al transporte el estado alemán adquirieron las
compañías ferroviarias y nuevas líneas fueron construidas, esto fortaleció el intercambio entre
diversas regiones y la comunicación de actividades industriales y las exportaciones