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Jaime Navarro Rentero, 1º BCSA Grupo 2.

COMENTARIO DE TEXTO
“Por tanto, si se aparta del pacto social lo que no pertenece a su esencia, encontraremos que
se reduce a los términos siguientes: cada uno de nosotros pone en común su persona y todo su
poder bajo la suprema dirección de la voluntad general; y nosotros recibimos
corporativamente a cada miembro como parte indivisible del todo (...).
No siendo la soberanía más que el ejercicio de la voluntad general, jamás puede enajenarse, y
el Soberano, que no es más que un ser colectivo, no puede ser representado más que por sí
mismo (...).
¿Qué es, pues, el gobierno? Un cuerpo intermediario establecido entre los súbditos y el
Soberano para su mutua correspondencia (...) De suerte que en el instante en que el gobierno
usurpa la soberanía, el pacto social queda roto, y todos los simples ciudadanos, vueltos de
derecho a su libertad natural, son forzados, pero no obligados, a obedecer. (...)
La soberanía no puede estar representada, por la misma razón por la que no puede ser
enajenada; consiste esencialmente en la voluntad general, y la voluntad no se representa; es la
misma o es otra; no hay término medio. Los diputados del pueblo no son, pues, ni pueden ser
sus representantes, no son más que sus mandatarios; no pueden concluir nada
definitivamente. Toda ley no ratificada por el pueblo en persona es nula; no es una ley. El
pueblo inglés cree ser libre, y se engaña mucho; no lo es sino durante la elección de los
miembros del Parlamento; desde el momento en que éstos son elegidos, el pueblo ya es
esclavo, no es nada.”
Jean-Jacques Rousseau. El contrato social. 1762.

Este fragmento se trata de un texto discursivo titulado “El contrato social”, difundido
por el famoso filósofo suizo, Jean Jacques Rousseau, escrito en el siglo XVIII. Con la
finalidad de llevar a cabo un comentario adecuado del fragmento presente. A
continuación, desarrollaremos diferentes apartados: análisis, contexto y conclusiones.

Para comenzar a analizar este fragmento, con el fin de encontrar el significado de este
discurso, es esencial exponer que la idea principal del texto que es sobre la libertad e
igualdad de los ciudadanos bajo un Estado, de aquí el título “El contrato social”.

Fijándonos en el texto podemos ver claramente que el autor comenta “¿Qué es, pues,
el gobierno? Un cuerpo intermediario establecido entre los súbditos y el Soberano para
su mutua correspondencia”. Aquí el autor incluye dos palabras muy importantes que
son los súbditos y el Soberano. Con el término de súbditos el autor se refiere a el
pueblo forzado a obedecer al Estado, y con el Soberano se refiere al monarca
absoluto. Los súbditos son los objetos o esclavos forzados del monarca, es decir los
súbditos son esclavos de el Soberano.
Más adelante el autor nos informa diciendo: “El pueblo inglés cree ser libre, y se
engaña, mucho”. El filósofo intenta hacer ver la realidad al pueblo ya que son forzados
por la clase social alta. Al igual el autor al final del fragmento comenta: “el pueblo ya es
esclavo, no es nada”, refiriéndose a lo dicho anteriormente.
Analizando el contexto del texto el autor del fragmento reflexionó en la situación del
pueblo ya que eran forzados a obedecer por el Estado, entonces Rousseau escribió
esto viendo la situación en la que se encontraban los ciudadanos de la clase social
baja. Esta división de estamentos sucede en el Antiguo Régimen. Este sistema se
caracterizaba por tres partes: en primer lugar, la situación política en esta época se
basaba en una monarquía absoluta en la que la persona que tiene el poder como el
rey lo concentra todo en ella, negando a la división de poderes. Por otro lado, existía
una sociedad dividida en estamentos en la que se diferenciaban los privilegiados, que
son la nobleza y el clero este estamento representa el 10% de la población, el otro
estamento se basa en los no privilegiados que representan el 90% de la población
compuestos por la alta burguesía, campesinos, artesanos y marginados. La mayor
diferencia entre estos era que los no privilegiados pagaban impuestos y los
privilegiados no. Y, por último, la economía en el Antiguo Régimen se basaba en el
mercantilismo, se basaba en que la riqueza de un país residía en la tenencia de
metales preciosos. La mayor parte de la población trabajaba en base a la agricultura.
Y la producción artesanal seguía vigilada por los gremios. En esto se basaba la
idiosincrasia del Antiguo Régimen.

Para finalizar, si pensamos en la conclusión del autor en este fragmento podemos


sacar que hace ver al pueblo de que no son libres que están forzados por alguien de
mas poder que ellos. Que no debería ser así y tienen que luchar por ello de aquí las
revoluciones que suceden en los siguientes años dando nombre a las “Revoluciones
liberales”. Y por ello luchan por su libertad de decisión y los derechos humanos. Cosa
que hoy en día seguimos luchando por ello, por las bases de la ilustración.

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