“Escena aún sin titular”

El lugar: Sala de la Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático. Nombrada

Espacio María Azambuya, según dicen algunos.
El tiempo: Un día de clase, probablemente.

Aparece en escena El que parece ser el Director/Dramaturgo con una hoja de papel
en las manos. Lee.

EL QUE PARECE SER EL DIRECTOR/DRAMATURGO: (ubicado en el espacio

escénico) Este lugar, que hoy intenta ser un teatro, fue en otros tiempos la Granja
Animal. Una granja donde sus animales se revelaron contra el poder humano, que los
oprimía, sometía y tornaba inhumanamente infelices. Un lugar germinador de
valientes revueltas, defensor de la vida autosustentada y gestionada en colectivo.
El teatro que hoy intenta funcionar aquí, como verán, conserva en gran medida la
forma edilicia de la antigua granja. El cuadrilátero que hoy sirve como sostén de las
luminarias eléctricas es parte del antiguo granero, donde las gallinas, como todos
sabemos, eran encerradas día y noche con la tarea de producir.
La mole negra que hoy en día sirve como armario contenedor de las más increíbles
maravillas nunca vistas en un escenario teatral es, como todos sabemos, el pedestal en
que el chancho Napoleón daba sus discursos. Debido a la magnitud histórica de esas
instancias, es que se decidió resguardar ese elemento. No sin darle alguna utilidad,
por supuesto, como sucede con todos los memoriales, como todos ya sabemos.

Esta suerte de pizarra que vemos aquí a mano izquierda para mí, mano derecha de
ustedes, público, es la antigua placa donde relucían los mandamientos que todo
animal de la granja debía cumplir. Debido a la falta de esta pieza en su realidad
material, un equipo de arqueólogos y filólogos ha trabajado para nosotros, con el fin
de recuperar dichos mandamientos, que se enumeran como lo que sigue:

“Ningún animal hará uso de sustancias líquidas dentro de este recinto.”

“Ningún animal hará uso de las alturas dentro de este recinto.”
“Ningún animal hará uso indebido de la estructura principal del granero, entiéndase
hamacarse en sus barrotes o colgarse de los mismos.”
“Ningún animal tiene permitido realizar acciones que estropeasen el bienestar del
suelo del granero.”
“Ningún animal tiene permitido el uso de instalaciones eléctricas dentro del granero,
salvo expresa aprobación de quienes sí pueden hacerlo.”
“Ningún animal podrá interferir en las acciones voluntarias de cualquier otro animal.”
“De lo expresado anteriormente, se desprende de forma lógica que todo animal que
incumpla con estas reglas será amonestado, sancionado, suspendido de sus derechos.”
Pero toda esta reglamentación quedó atrás. La Granja Animal es ya solo un recuerdo
vago. El teatro que hoy intenta erguirse en este lugar, tiene unos principios muy
distantes de aquella reglamentación tan pero tan presente en tiempos remotos.

Aún así, este teatro que tanto nos llena de felicidad y orgullo, le rinde homenaje a esta
Granja Animal. Para ello, dos actores representaran una escena que recrea parte de la
historia vivida por aquellos animales.

En este momento, El que aparenta ser el Director/Dramaturgo, saca un papel de su

bolsillo. Lee.
“Estimado y querido público hoy presente.

Aquí se comunica con ustedes el Director/Dramaturgo, para expresarles mis más

sinceras disculpas. Como verán, en mi obra intervienen dos actores para realizar
una escena sobre un hecho ocurrido en la Granja Animal, pero eso no sucederá, al
menos hoy.
Iba a utilizar el recurso de “bueno, los actores no pudieron venir, la escena era más
o menos así”, pero como calculo que ya mas de uno debe estar haciendo uso de la
pólvora, me expreso, canallescamente si se quiere, por medio de esta carta para
hacer público que el problema no es los actores que no se presentan, porque
mayoritariamente siempre tienen disposición al trabajo, creo yo, sino porque
efectivamente como dramaturgo no termino aún de confeccionar una escena para
dos actores.
De esta forma les pido disculpas nuevamente, agradezco enormemente la presencia
de El que aparenta ser el Director/Dramaturgo, o sea yo, por comunicarles estas
líneas a ustedes.
Nos estaremos reecontrando en otra instancia, espero que no en forma de carta, sino
en forma de escena, al menos.”