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INTRODUCCIÓN
Y por último, pero más importante, la usabilidad se logra a través de los conocimientos en
ergonomía, lo cual es el objeto de nuestro estudio. La ergonomía es una parte indisoluble
del diseño desde que todo objeto-artefacto de diseño está orientado a la utilización práctica
de las personas en su vida diaria. Es decir, un producto de diseño es en primer lugar, un
objeto utilitario de carácter práctico, cuyas funciones sólo pueden concretarse con la
participación directa de un ser humano. Así, todo producto se crea para satisfacer
determinada necesidad práctica de un grupo eventualmente numeroso de personas a quienes
se designa como usuarios potenciales. Estos usuarios utilizan el producto en determinados
entornos, con un propósito definido, por lo que el producto tiene que ser diseñado en
función de este propósito, y considerando las características, capacidades y limitaciones de
los usuarios durante su uso, así como las características del entorno en que se van a realizar
las actividades, lo cual es el objeto de estudio de la Ergonomía.
Ejemplo:
Producto :
Usuario : Edad
Sexo
Nivel educativo
Nivel socio-económico
Experiencia previas con productos similares.
Habilidades especiales
Limitaciones físicas
Limitaciones cognitivas
Otras características
Cuando se está diseñando un producto nuevo, el desarrollo del perfil del usuario
es una de las etapas iniciales más importantes, después de plantear los objetivos
generales o requerimientos que tendrá el producto.
Se define el uso como cualquier acción que el usuario realiza sobre o con el
producto. Al relacionarse con un producto, todo usuario ejerce primeramente una acción
perceptual, generalmente visual, aunque puede ser táctil, o auditiva, o una combinación de
las mismas, que le permite identificar al producto, (forma, color, textura, dimensiones,
controles, indicadores, etc.) lo que a su vez le sugiere (acción mental) las posibilidades
funcionales del mismo, (qué es, para que sirve, de dónde puede sujetarse, por dónde se
puede abrir, encender, etc.) lo que a su vez posibilita el ejercicio de acciones motrices sobre
el mismo, (sujetar, abrir, empujar, subirse a él, etc.).
Así entonces, las acciones que un usuario puede realizar sobre un producto son :
Las acciones se organizan como tareas cuando un conjunto de éstas permite lograr una
meta u objetivo particular, por ejemplo, encender un equipo, poner o cambiar las pilas de
un aparato, etc.. De esta manera, una tarea siempre incluirá cuando menos tres acciones,
una perceptual, una mental y una motriz, aunque en algunas ocasiones, la acción motriz no
se realice concretamente.
2.1.Tipos de Tareas
a) En el uso principal.
b) En los usos secundarios o indirectos.
1. Colocar pilas.
2. Colocar el CD.
3. Encender (en caso necesario)
4. Conectar audífonos.
5. Colocarse los audífonos.
6. Regular volumen.
7. Seleccionar pistas.
8. Transportarlo
9. Limpiar.
10. Almacenar (guardarlo).
Las tareas 2 a 7 representan el uso principal, que es escuchar música en forma privada y
unipersonal. Las tareas 1, y 8 a 10 representan usos secundarios cuyo objetivo es mantener
el aparato funcionando y en buenas condiciones.
3. Análisis de tareas.
En este punto, cada una de las tareas se descompone en las acciones que la
constituyen, a través de un cuadro analítico que permitirá identificar los factores de
adecuación o inadecuación ergonómica correspondientes. El esquema es como sigue:
Las dificultades para las acciones motrices están relacionadas con la falta de adecuaciones
anatómicas, antropométricas y biomecánicas entre los elementos del producto y las partes
del cuerpo del usuario que van a entrar en contacto con él al momento de poner a funcionar
el producto.
Una vez terminado el análisis de tareas y acciones, podemos entonces caracterizar las
propiedades y adecuaciones ergonómicas presentes en un producto existente o establecerlas
como requerimientos en el proceso de diseño de un nuevo producto.
Del análisis cuantitativo y cualitativo de las tareas y acciones necesarias para operar un
producto, podemos establecer si éste tiene Facilidad de Uso, es decir, si solo demanda las
acciones estrictamente indispensables, si no hay acciones no pertinentes o si ocasiona
acciones fallidas (acciones que se realizan sin conseguir el efecto deseado), así como si a
cada acción le corresponde un esfuerzo adecuado a las capacidades y limitaciones del
usuario y por último, si la secuencia de acciones tiene un lógica natural y simple.
De la misma manera, si el producto cuenta con las características que permitan realizar las
acciones de mantenimiento con facilidad, y si cuenta con los aspectos que aseguran la
protección física del usuario (ausencia de aristas, filos, elementos punzocortantes, presencia
de aislamientos contra el calor, la electricidad, guardas de protección, etc.) lo que se conoce
como Habitabilidad.
Cada adecuación debe desarrollarse mediante cuadros, diagramas, dibujos, fotografías, etc.
acompañadas explicaciones escritas que muestren gráficamente las interacciones Usuario-
Producto y expliquen sus implicaciones ergonómicas. En muchas ocasiones una sola
ilustración podrá servir para mostrar y explicar varias adecuaciones ergonómicas.