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Daniela Olascoaga Rodríguez 03/09/2019

Resumen lectura 2

En la lectura se menciona como durante la época de la edad media y el renacimiento, la


iglesia católica tenía una fuerza en Europa, sobre todo en el campo intelectual. Esta
fuerza tenía un carácter hostil hacia la ciencia. La iglesia veía a la ciencia como una
distracción, dado esto, San Agustín decía que a un cristiano le bastaba con creer que la
única causa de las cosas es la bondad del único dios verdadero.
En específico, la astronomía, que tenía una vinculación con la astrología, no era
aceptada, dado su determinismo no podía ser compatible con la doctrina cristiana.
Lactancio, en el tercer libro de “Divinae institutiones”, dedica un capítulo para desmeritar
la idea de que la tierra es esférica, ya que decía que era absurdo que se pudiera tener
una zona donde los hombres estuvieran cabeza abajo y que el cielo estuviera por debajo
de la tierra. Estas creencias de Lactancio no fueron adoptadas por la iglesia cristiana.
Sin embargo, la actitud de la iglesia cristiana de Europa, ante ciertas creencias paganas,
cambiaría, esto debido al restablecimiento de los vínculos culturales y comerciantes con la
iglesia Oriental que radicaba en Bizancio.
Santo Tomás de Aquino, da una estructura física y cosmológica para el universo cristiano,
mismo que tiene una inspiración aristotélica. En ella describe los movimientos celestes y
menciona: “El único cuerpo auténticamente inmutable en el universo cristiano es dios, del
que procede todo cambio en la tierra y en el cielo. [...]. De ahí que los cielos solo
experimenten el mínimo absoluto de cambios. El movimiento es su única alteración y esta
no modifica en lo más mínimo su naturaleza intrínseca.” Tomando las ideas de
Aristóteles, permitía tener una cosmología que tenía un elemento creador dentro del
pensamiento cristiano.
Dante en su poema “La divina comedia” muestra un universo aristotélico. Quería mostrar
el simbolismo del nuevo universo cristiano, ya que, Dante describe un viaje a través del
universo según la concepción cristiana del siglo XIV. También, intento dar una explicación
desde el punto de vista de la astronomía, donde logra decir que el número de los ángeles
que habitan el reino de dios. Estos ángeles se convierten en una fuerza motriz de
epiciclos y deferentes, por lo que admitir un movimiento terrestre conduce a una admisión
de un movimiento del trono de dios.
En la historia se pueden encontrar diferentes preceptores a las ideas de Copérnico. Tal es
el caso de Nicolás Oresme, que escribió el libro “Del cielo de Aristóteles”. Criticaba el
argumento principal del pensamiento aristotélico, el cual era la unicidad de la tierra.
Aristóteles mencionaba, que si existieran dos tierras en el espacio ambas caerían hacia el
centro del universo uniéndose así en una sola. Oresme, creía que esto no tenía validez ya
que se presupone una teoría de movimiento que no había sido probada.
La teoría osmeriana dice que el movimiento natural de un cuerpo es gobernado la
posición relativa con respecto a otros fragmentos de materia y no respecto a su posición
en el espacio aristotélico. Oresme dice: “El movimiento local sólo puede ser percibido
cuando un cuerpo altera su posición con respecto a otro […]”.
Es imposible mostrar si en realidad Copérnico y Galileo llegaron a conocer la obra de
Oresme.
Galileo, en su obra sobre la caída de los cuerpos se puede ser considerada como un
reagrupamiento de los conocimientos dispersos de los científicos medievales.
Un concepto fundamental de esta época está dado por “la teoría de ímpetus”. Aristóteles
creía que dada una interacción con una fuerza exterior, un objeto puede permanecer en
reposo o se desplaza en línea recta hacia el centro de la tierra. Posteriormente,
Aristóteles corrige esta teoría, diciendo que el aire perturbado era la fuente del impulso
que prolonga el movimiento del proyectil. La teoría ímpetus fue, en diferentes ocasiones y
formas, un importante papel para la revolución copernicana, ya que, formo parte de la
edad media y el renacimiento. Esta teoría permite que la tierra en movimiento tenga una
propulsión interna a los cuerpos que la abandonan, esta propulsión permite el seguimiento
por parte de tales cuerpos.
El maestro de Oresme fue Buridan, quien hizo un primer intento de unir bajo un mismo
conjunto de leyes al cielo y la tierra: “Cuando dios creo [los cielos][…], los doto con cierta
cualidad y una cierta fuerza de movimiento de modo similar a como había dotado de peso
las cosas terrestres[…] Así pues, dios abandono los cielos a su continuo movimiento.”
Esta unificando de un movimiento de la tierra y las leyes terrestres y celestes constituyen
las dos contribuciones más directas de la teoría del ímpetus a la revolución copernicana.
Buridan, junto con otros científicos, mencionan que si se encuentra alguna resistencia,
también se perdurara el movimiento, dando así un paso hacia, la actual, primera ley de
Newton.
Dos décadas antes del nacimiento de Copérnico se tuvieron pocas manifestaciones ante
un progreso en el campo de la astronomía. En estos progresos se tuvieron a personajes
como Georg Peuerbach y su pupilo Johannes Müller.
Peuerbach, inicio su carrera de astrónomo trabajando sobre traducciones de segunda
mano del Almagesto, durante este trabajo funciono se convenció, que no se podía obtener
una astronomía bien fundamentada y verdadera a parir de textos árabes.
Johanes Müller, trabajo sobre versiones griegas descubriendo así, que la formulación
original de Ptolomeo era inadecuada.
Es interesante ver el contexto histórico en el cual Copérnico se desenvolvió, ya que, su
vida transcurrió entre 1473 y 1543. En esta época se tuvo el Renacimiento y la reforma.
Se puede observar en la historia que se han tenido diferentes innovaciones científicas
relacionadas con los periodos de convulsión nacional o internacional. Bajo este contexto
fue que vivió Copérnico. Esto se debía a una nueva amenaza por parte de los
musulmanes de absorber diferentes territorios de Europa. Lutero y Calvuno fuero unos de
los personajes que encabezaron las primeras revueltas contra la hegemonía religiosa del
catolicismo. También, se vivía el primer desembarco de colon en tierras de América.
Debido a las necesidades de exploración de creo una nueva demanda sobre los
astrónomos europeos, esto también ocasiono que se tuviera un cambio de actitud ante
ellos y la ciencia.
Se pretendía una nueva reformación al calendario teniendo un efecto ante la práctica de
astronomía, ya que las técnicas y herramientas de observación no eran las mejores.
A inicios del siglo XVI se le encomendó a Copérnico la tarea de aconsejar al papado
sobre la nueva reforma del calendario. Sin embargo, Copérnico rechazo esta oferta, ya
que creía que aún no se tenían suficientes observaciones para tener un nuevo calendario
que fuera eficiente. Copérnico menciona: “En primer lugar, es tal su inseguridad […]
acerca de los movimiento del sol y de la luna que no pueden deducir ni observar la
duración exacta del año estacional “. Por lo que la reforma del calendario necesitaba una
reforma a la astronomía.
Finalmente, en 1582 se adopta el calendario gregoriano, el cual se obtuvo a partir de los
calculas fundados en Copérnico.
En el periodo del Renacimiento, la importancia otorgada a la creatividad de dios pudo ser
un elemento importante en el la opinión que genero la innovación de Copérnico.

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