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Introduccion A La Bioetica PDF
Introduccion A La Bioetica PDF
IMPRESO EN ARGENTINA
Primera Edición - Septiembre de 2004
Imprenta:
Mar del Plata - República Argentina
Aprobada provisoriamente por Res. Min. Nº 456/91 conforme lo establece en el art. Nº 64 de la Ley de Educación Superior 24521
E
l progreso científico y tecnológico diariamente pone al hombre
frente a descubrimientos sorprendentes que, mientras suscitan su
admiración, al mismo tiempo lo llevan a interrogarse, a veces con
preocupación, sobre las incógnitas del futuro. Descubre cada vez más que la
dimensión ética de la investigación relacionada con la vida representa un
patrimonio indispensable para garantizar su misma supervivencia.
La bioética, situada en la encrucijada de grandes realidades humanas,
como la persona, la familia, la justicia social y la defensa del ambiente, sabe
que debe afrontar cuestiones que afectan a las mismas fronteras de la vida,
para garantizar el respeto a la naturaleza según las exigencias éticas de una
cultura humanística. Sirviéndose de los necesarios aportes de las disciplinas
biológicas, médicas, jurídicas socio-económicas, ambientales, y sobre todo de
la antropología, tiene el deber de indicar al mundo de la medicina y a la
sociedad en su conjunto la orientación moral que se ha de imprimir a la
actividad humana y al proyecto de futuro.
En la cultura contemporánea frente a la amplitud y la multiplicidad de los
interrogantes que plantean las ciencias biomédicas, surge con insistencia la
necesidad de una reflexión en bioética con raíces ontológicas y antropológicas
que orienten las decisiones.
La bioética constituye el terreno privilegiado de un sincero y benéfico
diálogo entre la Iglesia y la ciencia. En efecto, en la verdad del hombre y en su
dignidad ontológica percibida por la razón y rebelada plenamente por Cristo,
es donde pueden encontrarse respuesta adecuadas al interrogante ético que
plantean la genética, los procesos de procreación, la vida que llega a su fin, los
problemas del ambiente y el futuro de la humanidad.»
Juan Pablo II
Discurso al Congreso «Las raíces de la Bioética»
17 de Febrero de 1996
El Observador Romano
Objetivos Generales
Esquema de Contenidos
dad, las autoridades, y la comunidad política toda con sus ordenamientos jurídi-
cos, sistemas económicos, políticas educativas, culturales, familiares y relacio-
nes exteriores.
Contenidos:
2.1 Importancia del Bioderecho
2.2 Características del derecho y el bioderecho
2.3 La Normas Jurídicas
2.4 Las fuentes del derecho positivo
Contenidos:
6.1 Reproducción artificial
6.2 Clonación
Mapa de Contenidos
12 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
UNIDAD 1
INTRODUCCIÓN
A LA BIOÉTICA
«P
articularmente significativo es el despertar de una
reflexión ética sobre la vida. Con el nacimiento y
desarrollo cada vez más extendido de la Bioética, se
favorece la reflexión y el diálogo – entre creyentes y no creyentes, así
como entre creyentes de diversas religiones – sobre problemas éticos,
incluso fundamentales, que afectan a la vida del hombre.»1
«Este horizonte de luces y sombras debe hacernos a todos plena-
mente concientes de que estamos ante un enorme y dramático cho-
que entre el bien y el mal, la muerte y la vida, la «cultura de la muerte»
y la «cultura de la vida». Estamos no solo «ante» , sino necesariamente
«en medio» de este conflicto: todos nos vemos implicados y obligados
a participar, con la responsabilidad ineludible de elegir incondicional-
mente a favor de la vida...»2
Con la luz de estas palabras del Santo Padre, queremos iniciar
esta primera unidad: «Introducción a la Bioética». En ella, en primer
lugar afrontaremos la dramática situación actual de la cultura de la
vida contra la cultura de la muerte y sostendremos siguiendo a Su
Santidad, la responsabilidad y el deber de todos de defender la vida
humana, desde su comienzo hasta la muerte. La bioética personalista
es un modo de afirmar esta cultura de la vida.
Luego estudiaremos la historia y la difusión de la Bioética, la epis-
temología de esta joven ciencia, su definición, sus ámbitos de acción y
una somera descripción de los actuales modelos de Bioética. Por últi-
mo, profundizaremos en el modelo bioético personalista, fundado
en la persona humana, concepto en el que ahondaremos desde la
perspectiva filosófico-teológica. Así mismo, rescataremos el valor de
la corporeidad y finalizaremos con el análisis de los cuatro principios
sobre los que se basa.
1
Evangelim Vital Nº27
2
Evangelim Vital Nº28
16 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos específicos
1. Definir a la Bioética y a su objeto de estudio, determinando sus alcances.
2. Reflexionar acerca de la necesidad e importancia de la Bioética, como
fundamento de la Cultura de la Vida .
3. Brindar un conocimiento introductorio con fundamentos filosóficos, cientí-
ficos, y Magisteriales sobre la Bioética, desde una cosmovisión personalista
ontológicamente fundada, basada en Santo Tomás de Aquino, centrada
en la Persona y en la inviolabilidad de la vida humana.
4. Introducir en la cosmovisión de la Bioética personalista, a través del desa-
rrollo de los cuatro principios rectores de la misma.
Temario
Cultura de la vida vs. Cultura de la muerte.
La bioética como un modo de fundar la Cultura de la Vida.
Bioética :
• Historia y Modelo
• Epistemología de la bioética.
• Definición.
• Ámbitos de la bioética.
• Modelos en bioética.
• Modelo Personalista.
• Principio de la Bioética Personalista.
Mapa de Contenidos
A continuación le mostramos un esquema de vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 17
1
Juan Pablo II, Carta Encíclica Evangelium Vitae, Nro. 85
18 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
2
Juan Pablo II, Evangelium Vitae, Introducción y N°. 17
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 19
¿Exagera el Papa?
¿Dónde está esa guerra de la que habla?
Justamente, lo más alarmante es que se trata de una guerra cultural, no
convencional, que actúa subrepticiamente, a veces sin ser notada.
Sus manifestaciones son variadas.
Entre ellas encontramos:
Actividad de Aprendizaje
3
Evangelium Vitae N° 27
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 21
Introducción
¿ De qué se trata esta ciencia, moderna y tradicional a la vez?
¿ Porque surge en los años 70 como un nuevo modo de analizar la
conducta humana en el campo de las ciencias de la vida y la salud?
Quizá haya sido a decir de Einstein « que la tecnología ha superado nuestra
humanidad « brindando al hombre atribuirse la posibilidad de decidir sobre la vida o la
muerte de un semejante, quizá fue el abuso en las investigaciones científicas, o quizás
fue un modo que el hombre tuvo para defenderse ante los atropellos a su persona.
El mundo conoció, con estupor por cierto, en 1963, que en el Jewish Chronic
Disease Hospital de Brooklin, le inyectaron a un grupo de ancianos, células
tumorales, sin solicitar la autorización de los mismos. Bajo el pretexto de los
«adelantos» de la ciencia se abusa de las personas, aunque estas por desconocimien-
to, presiones externas, temor o beneficio económico, hubieran dado el consentimiento.
Quizás estos datos nos llenan de estupor y vergüenza porque aquellos que están
llamados desde su profesión a defender la vida, la manipulan, la matan, la destruyen.
Historia de la Bioética
Se reconoce a Van Rensselaer Potter, especialista en cáncer, de los Estados
Unidos, en 1970, como el autor del nombre de Bioética, en su libro « Bioethics:
bridge to the future (La bioética: Un puente hacia el futuro), manifiesta que el
saber científico debe estar relacionado, iluminado por valores morales. Ante los
avances científicos y el desarrollo de la biotecnología, según Potter, el conocimiento
científico solo no alcanza para responder a los desafíos actuales en el campo de las
ciencias de la vida y la salud.
Potter, además, reclama un deber de responsabilidad de la humanidad en el
cuidado de la naturaleza, mirando las futuras generaciones.
Fíjense como el respeto por lo creado, por la naturaleza es, para la bioética
un deber que se reclama desde la fundación misma de esta nueva ciencia.
Epistemología de la bioética
La Bioética reconoce las fuentes, que le han dado origen:
1. La Ética médica hipocrática: la medicina griega con el aporte del juramen-
to Hipocrático, sienta las bases de un modo ético de comportarse basado en el
precepto «primun non nocere», no hacer daño al paciente, respetar al pa-
ciente y a los maestros. Esta ética, si bien está centrada en el médico dando
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 23
4
Constitución Pastoral: «Gaudium et Spes», Concilio Vaticano II, sobre la Iglesia en el mundo contem-
poráneo. 1965
5
Encíclica «Humanae vitae», sobre la recta regulación de la natalidad. Pablo VI. 25 / 3 / 1968.
6
Instrucción de la Sagrada Congregación para la doctrina de la Fe» Donum vitae», sobre el respeto a
la vida naciente y la dignidad de la procreación. ( 22 / 2 / 1987)
7
Declaración de la Sagrada Congregación para la doctrina de la Fe « Iura e bona», sobre la eutanasia.
( 5 / 5 /1980).
8
Encíclica «Evangelium vitae», sobre el valor inviolable de la vida humana, Juan Pablo II, 25/ 3/ 1995.
24 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Definición
Según Monseñor Elio Sgreccia, la Bioética se define como: «Área de investi-
gación, que valiéndose de una metodología interdisciplinaria, tiene por
objeto el examen sistemático de la conducta humana en el campo de las
ciencias de la vida y la salud, en cuanto esta conducta examinada a la luz
de valores y principios morales»9.
Área de Investigación = ciencia.
Metodología interdisciplinaria = no se valoran los hechos desde la filosofía,
la medicina o el derecho.
Es una mirada interdisciplinaria, cada ciencia hace su aporte desde su lugar,
analiza el acto, aportando los conocimientos propios de cada disciplina.
El objetivo es que se llegue a la verdad y se obtenga un juicio verdadero
y valedero , no por vía del consenso sino buscando la verdad que involucre la mejor
solución al conflicto ético planteado.
Examen sistemático de la conducta humana: se trata de evaluar, la con-
ducta humana, libre y consciente, en el campo de las ciencias de la vida y la salud.
Ahora nos queda por ver como se analiza el hecho bioético a fin de poder definir
la licitud o ilicitud del acto. A continuación se comenta el procedimiento de análisis
de casos recomendado por Mons. Sgreccia:
1. Conocer fehacientemente el hecho médico, (momento epistemológico)
esto es fundamental, no se puede soslayar ni conocer a medias.
Para ello es importante la recolección de antecedentes:
historia clínica;
diagnóstico fundamento,
antecedentes sociales,
familiares y circunstanciales del caso.
Destacar si existen alternativas médico- asistenciales en el caso, identificando las
responsabilidades de los actores en el caso.
Valga como ejemplo el caso de la joven Karen Quinlan. En 1976,
por causas desconocidas queda varios meses en coma, a pedido de su
familia y con autorización de la Corte se consintió que los médicos le
retirarán el respirador artificial, considerando que con esto se permitía
que la joven que padecía de muerte cerebral, muriera con dignidad.
Pues una vez retirada la ventilación mecánica, sobrevendría la muerte
inexorablemente. Grande fue la sorpresa de médicos y familiares,
porque Karen no murió, sino que vivió diez años más.
9
Epistemología de Bioética.
10
Fracapani de Cuitiño, M, Giannaccari de Mathus, L.; Bochatey, A.; Bordín, C. Los fundamentos de la
bioetica Pág. 242.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 25
Ámbitos de la Bioética
Los ámbitos de incumbencia de la Bioética son los temas de los cuales
se ocupa esta ciencia:
1. Problemas éticos de las profesiones sanitarias: aquí se evalúan todo lo que
tiene que ver con la relación médico – paciente, la verdad al paciente terminal, aborto,
eutanasia, secreto profesional, etc. Son los temas de la ética medica tradicional.
2. Problemas éticos emergentes en el ámbito de la investigación sobre
el hombre:
respeto por los derechos del hombre,
el consentimiento informado, «la neutralidad de la ciencia»,
uso de placebo, etc.
3. Políticas sanitarias, medicina ocupacional y políticas de planifica-
ción familiar:
uso de los recursos económicos en salud,
asignación del presupuesto en salud,
sociabilidad y subsidiariedad en salud.
11
Di Pietro, M. L.; Sgreccia, E. Bioética y Educación. Edit. La Scuola. Brescia 1997. Pág. 23.
26 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Modelos Bioéticos
¿Hay un solo modelo de Bioética?. ¿Es unánime la perspectiva en Bioética?
¿Qué queremos significar cuando hablamos de modelos Bioéticos.
Queremos expresar cual es el fundamento en el cual se apoyan para juzgar los
hechos de las ciencias de la vida y la salud.
Modelo sociobiologista o Ética Descriptiva
Este modelo de bioética no juzga los hechos, no puede decir si es lícito o ilícito,
simplemente los describe. Se basa en la teoría de la evolución de Darwin, en el
sociologismo de Weber y en el sociobiologismo de Heisenk11. Considera que como el
hombre y el cosmos evolucionan permanentemente, también evolucionan y mutan
los códigos morales, para ellos es imposible detenerse en un punto y juzgar los hechos
de las ciencias de la vida y la salud. Todos viven en una permanente evolución.
Este modelo, más allá de su adhesión al mito del evolucionismo, es reduccionista
pues reduce al hombre a un determinado momento histórico, niega la objetividad de
la ética, puesto que no hay referencias éticas objetivas, se niega la naturaleza huma-
na y su escala de valores inscripta en su corazón gracias a la ley moral natural.
11
Di Pietro, M. L.; Sgreccia, E. Bioética y Educación . Edit. La Scuola. Brescia 1997. Pág. 23.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 27
Como podrán imaginar este modelo favorece cualquier cosa que la co-
munidad de adultos infiere como lícito, sin importar si con ello mata a otro
ser humano.
L
La primera limitación de la autonomía es la incapaci-
I
dad de los pacientes para ejercerla, en casos de enferme-
M
dades mentales, o cuando la misma enfermedad turba la
I
autonomía por temor o desconocimiento.
T
A
C
El otro limitante es que puede entrar en conflicto con la
I autonomía del medico tratante, así por ejemplo un pa-
O ciente puede pedirle al medico algo que el no conciente,
N por ejemplo la eutanasia. Vean ustedes como en estos dos
E ejemplos se demuestra que al no tener un horizonte ético y
S metafísico trascendente los conflictos se manifiestan.
El principio de Justicia.
Actividad de Aprendizaje
Analice cuidadosamente cada uno de los modelos y sus características más
significativas.
12
Pellegrino, Edmund D. «La relación entre la autonomía y la integridad en la ética médica». Bol. Of,
Saint Panam 108 (5 – 6), 1990.
13
Spagnolo, A. Principios de la Bioética Norteamericana y crítica al Principalismo. Bioética, en la
investigación y en la praxis medica. Edic. Camiliana.Torino. 1997 Pág. 91
30 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Definición de Persona
Este personalismo llamado ontológico se basa en un concepto fuerte de perso-
na humana.
Es persona el sujeto que resulta de la unidad sustancial de cuerpo y espíritu
racional, con alma, con capacidad de introspección y trascendente. La palabra
persona, proviene del griego «prosopon», «mascara», refiriéndose a la mascara que
usaban los actores griego para que resuene su voz. La palabra latina que le corres-
ponde es: per - sonare.
Boecio, define metafísicamente el termino Persona:
La sustancia es la esencia de una realidad, aquello que hace que algo sea lo que
es, por esto la persona es un ser que existe en sí mismo y no en otro.14 Individual
quiere decir que es un ser concreto, individuo es un ser que es distinto de los demás
e indistinto de sí mismo. La naturaleza racional implica que el hombre tiene una
apertura a todas las cosas, por el conocimiento el hombre puede descubrir la verdad
objetiva de las cosas y la esencia misma de la realidad.
Santo Tomas de Aquino, toma la definición de Boecio y le da una nue-
va significación diciendo de la persona»:
La persona significa un ser subsistente distinto en la naturaleza intelec-
tual»15, subsistente quiere decir que existe por sí misma, es el modo más perfecto que
tiene una sustancia de existir. Una realidad idéntica consigo misma y diversa de toda
otra. La subsistencia le da la propiedad a la persona de ser incomunicable16. La
naturaleza humana está abierta a la comunicación, a la incorporación de las cosas
por el conocimiento y a la donación de sí mismo por el amor, pero por otra parte se
trata de una totalidad incomunicable, el hombre no puede dejar de ser quién es.
A la persona humana la subsistencia se la da su alma espiritual racional.
El alma es simple e inmortal y es infundida por Dios en el hombre en el mismo
instante de la concepción. La inteligencia y la subsistencia enmarcan ontológicamente
la dignidad de la persona y es en su alma espiritual donde reside la dignidad del ser
humano y el sostén de sus derechos.
14
Ramos, A. Antropología Teológica Colección @quinasNET. 2003. Pág. 113.
15
Santo Tomás: De Potentia, q.2,a.4.
16
Fosbery, A. La Cultura Católica. Bs.As. Edit. Terra Media.1999. Pág.331
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 31
Por ello los derechos humanos son inalienables, dados a los hombres por Dios
creador17. Por poseer un alma espiritual la persona, a través de su inteligencia y
voluntad, es capaz de conocer la verdad y amar el bien.
Puede conocer la ley natural y aceptar el juicio de la conciencia:
La naturaleza humana herida por el pecado original, se inclina al mal, pero por
los meritos de Cristo, encarnado, muerto y resucitado por nosotros, es restaurado el
hombre en su filiación divina y le permite realizar toda la verdad de su ser.
17
Juan Pablo II. Evangelium vitae N°18.
18
Ramos, Alejandro. Antropología Teológica. Cátedra de Teología. Universidad FASTA.2002. Pág.65
19
Ramos, Alejandro. Antropología Teológica Colección @quinasNET. 2003. Pág. 100.
32 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Definición de corporalidad
El cuerpo humano para el hombre tiene una dimensión personal en el sentido
que el hombre existe en un cuerpo, no es algo que se posee sino que expresa al ser
humano, y realiza su existencia. El cuerpo es la encarnación de la persona, ella
entra en la historia por su cuerpo20. Por el cuerpo se identifica a la persona de
acuerdo al sexo femenino y masculino.
También el cuerpo tiene una dimensión relacional en el sentido de la comuni-
cación que se establece con el mundo, con el lenguaje corporal es expresión de
nuestra interioridad, aunque no la agota y a su vez es la reserva de nuestra intimi-
dad.
El cuerpo es un límite, está sujeto a la enfermedad y a la muerte. Pero es la
misma muerte la que nos libera de ese limite, y le permite al espíritu lograr su fin
último, encontrarse definitivamente con Dios.
Tiene también una dimensión social, es un medio de intervención en el mun-
do y es lugar del encuentro con los otros en actos de reciprocidad mutua, la mayor
expresión de esta reciprocidad se da en el matrimonio en el cual se expresa toda la
dimensión del amor humano que es unión y fecundidad.
El cuerpo tiene una dimensión ético religioso en cuanto establece una rela-
ción con Dios.
El ser persona es una totalidad, sin distinción de cuerpo y alma y por ello
tiene una dignidad especial y la forma de tratamiento del cuerpo es de respeto
y nobleza.
21
Pontificio Consejo para la Familia. Sexualidad humana, verdad y significado. Roma 1994. N° 18
22
Sgreccia, E. Op. Cit. Pág.171
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 33
Este principio tiene una segunda condición que ante todo tratamiento se debe
obtener el consentimiento informado del paciente o su representante legal.
Así mismo, este principio exige una proporcionalidad en el tratamiento pro-
puesto para determinada enfermedad y el beneficio que se quiere lograr,
por ejemplo para una angina con aspirinas y en casos particulares algún
antibiótico alcanzaría como tratamiento. Sería desproporcionado proponer una
extirpación de la amígdala. También requiere que el tratamiento tenga espe-
ranza de éxito.
De acuerdo con este principio son licitas aquellas intervenciones que tiene como
fin la curación del paciente, por ejemplo la cirugía del apéndice en casos de
apendicitis aguda. Son ilícitos los anticonceptivos puesto que nada curan.
Por este principio la reproducción artificial al no curar la esterilidad, puesto que
aún cuando fuera positiva la intervención y la paciente puede llevar adelante un
embrazo, sería ilícita porque no cura.
Por eso serán, en este sentido, lícitas las acciones que obrando con libertad y
responsabilidad respeten la vida humana y busquen como fin el bien integral de
la persona.
Agentes de la salud y pacientes ante una intervención deben tomar en conside-
ración la libertad de elegir el bien y la verdad, y luego hacerse cargo de la deci-
sión y de las consecuencias el acto.
Este principio comprende la obligación moral de los pacientes de colaborar
con los tratamientos ordinarios y necesarios para salvar su vida y su salud23 y
para expresar su consentimiento.
Como así también involucra a los médicos a ser responsables con los pacien-
tes y a actuar con ciencia y conciencia frente al ser humano que sufre.
23
Sgreccia, E. Op. Cit. Pág. 175
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 35
Pero también por nuestros actos debemos ser responsables ante nosotros,
ante nuestra comunidad y ante las generaciones futuras. Esto queda cla-
ro en todas las decisiones respecto a la procreación humana. También se con-
templa otro aspecto que tiene que ver con el cuidado que merece la creación,
que fue puesta por Dios bajo nuestro señorío.
Quiera Dios que la Bioética sea como le pide el Santo Padre, un lugar de
dialogo, de respeto por la persona humana y por sus derechos inalienables.
Que esté siempre al servicio de la vida y de la dignidad de cada persona, desde
la concepción hasta la muerte natural.
24
Sgreccia,E.;Mele,V.;Miranda, G. Le radici della bioética. Vol. 1 Vita e pensiero. Milán 1998. Pág108
36 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Síntesis :
Cultura de la vida: una cosmovisión capaz de descubrir y respetar la digni-
dad de la persona humana, sosteniendo la inviolabilidad de la vida, promoviendo
aquello que la eleva y enriquece.
Cultura de la muerte: amenazas sistemáticas a la vida humana.
Bioética: «Área de investigación, que valiéndose de una metodología
interdisciplinaria, tiene por objeto el examen sistemático de la cultura humana en el
campo de las ciencias de la vida y la salud, en cuanto esta conducta examinada a
la luz de valores y principios morales».
Modelos Bioéticos:
1. Modelo sociobiologista o Ética Descriptiva
2. El modelo subjetivista o liberal – radical
3. El Modelo pragmático utilitarista
· El contractualismo.
· Ética Fenomenológica
· Ética de los principios
4. Modelo Personalista:
Personalismo ontológicamente fundado, basado en la persona humana.
«Ser subsistente distinto en la naturaleza intelectual», unidad
sustancial de cuerpo y alma, abierta a lo trascendente, creada a imagen
y semejanza de Dios. Con libertad responsable.
Valor de la corporeidad como encarnación de la persona. Di-
mensión relacional y límite, está sujeto a la enfermedad y a la
muerte. Dimensión social y ética religiosa.
Los principios en los que se basa la bioética personalista son
cuatro:
Principio de respeto y defensa de la vida física
Principio de totalidad o terapéutico
Principio de libertad responsable
Principio de sociabilidad – subsidiariedad.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 37
IMPORTANCIA
DEL BIODERECHO
40 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 41
N
os toca ahora internarnos en el mundo del derecho. Abordar la
bioética sin considerar sus dimensiones sociales y jurídicas resultaría
muy incompleto. No solo nos interesa saber cómo debe comportar
se un profesional de la salud en relación con la vida humana, sino también
que posición deben adoptar la sociedad, las autoridades, y la comunidad
política toda con sus ordenamientos jurídicos, sistemas económicos, políticas
educativas, culturales, familiares y relaciones exteriores.
Además, la mayoría de los temas bioéticos se discuten en ámbitos y con
connotaciones jurídicas: se debate permanentemente sobre proyectos de ley,
fallos de tribunales, reformas constitucionales.
Las potencias y las organizaciones controladas por ellas -como la O.N.U.1,
el Banco Mundial2, La O.M.S., etc.- promueven el aborto, la anticoncepción,
el «sexo seguro» o las uniones homosexuales, todas prácticas infecundas;
influyendo para que los países desarrollen reformas legislativas, fallos judicia-
les, políticas estatales, encolumnadas en ese camino.
1
Conferencia sobre Población y Desarrollo de El Cairo 1994, sobre la Mujer de Pekín en 1995, sobre
Medioambiente en Estambul 1996, sobre Desarrollo Social de Copenhague en 1997, etc.
2
Ya en 1987 Juan Pablo II había denunciado como los organismos de crédito condicionaban la ayuda financiera
a la implementación de políticas de control de la población (V. Encíclica Solicitudo Rei Sociales, nro. 25)
42 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos específicos:
1) Analizar la importancia del concepto de Derecho en relación a la Bioética.
2) Abordar la Bioética desde su dimensión coial.
3) Conocer los ordenamientos jurídicos, sistemas economicos y políticos en
relacion al Bioderecho.
Temario:
Importancia del Bioderecho
• El derecho
• Pero, ¿qué es el derecho?
• El derecho, ¿se crea o se descubre?
Características del derecho y el bioderecho
• Alteridad
• Exterioridad
• Objetividad
• Obligatoriedad
• Relativa coercibilidad
Características del derecho de nuestro tiempo
Las normas jurídicas
Las Fuentes del derecho positivo
Mapa de contenidos
A continuación le mostramos una vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 43
El Derecho
¿A qué nos referimos cuando hablamos de «derecho»?
¿Qué es el «derecho»?
El derecho es un área del saber en el que se juega nuestro modo de vivir, nuestros
bienes más fundamentales. Nos compromete, nos exige. De allí que la tentación
ideológica, de mirar la realidad no como es sino como nos convendría que fuera,
está siempre presente. A veces se adoptan posiciones jurídicas interesadas.
Por ejemplo, la de negar a la vida naciente la protección debida a la persona
no porque se pueda asegurar que no lo sea, sino con la intención oculta de permitir
fabricar, descartar o experimentar con embriones humanos.
Este derecho positivo, puede y debe cambiar según el tiempo y el lugar, para
adaptarse a las diversas situaciones sociales.
Ahora bien, ¿es éste, el derecho creado por los hombres, el único que
existe?
Retrocedamos un poco en el tiempo. Viajemos a Estados Unidos, 1862. Un
esclavo, Dred Scott, fue llevado por su amo a un estado no esclavista, para después
retornar a su estado de origen. Dred Scott se presentó a los tribunales, demandando
se le reconozca la libertad pues, sostenía, la había obtenido al ser llevado a un
territorio donde no se admitían esclavos.
Ahora bien, ¿no sabía Dred Scott, como dijo la Suprema Corte Fede-
ral, que los negros no eran personas para la Constitución de los Estados
Unidos?
Si consideramos que Scott reclamaba su libertad con todo derecho. Si puede ser
justo el reclamo de quienes son víctimas de arbitrariedades de parte de los gobiernos
o las sociedades, entonces además del derecho colocado por los hombres, existe
otro derecho.
Ya los antiguos habían advertido la existencia de un orden natural que prescribe
lo justo y lo injusto, con independencia de la determinación humana. Aristóteles
encontró exigencias que eran justas sólo en algunas polis -ciudades-, y las llamó
justo positivo, mientras que otras tenían valor en todas las polis y no dependían
de nuestra aprobación o desaprobación, y las llamó justo natural. El derecho es
en parte natural y en parte positivo, constató.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 45
3
Las potencias mundiales han gestado un impagable y usurario endeudamiento con los estados en
vías de desarrollo para poder controlar sus gobiernos y dirigir sus políticas. Cfr., entre muchas obras,
Olmos, Alejandro. Todo lo que quiso saber sobre la deuda externa, Bs. As., 1992; Hernández,
Héctor, Justicia y deuda externa argentina, editorial Universidad Católica de Santa Fe, Santa Fe,
1988. Puede verse también www.deudaexterna.org
4
Se impone el control demográfico porque la población de los países desarrollados está en declina-
ción mientras crece en los países en vías de desarrollo, y esta situación es perjudicial para los
intereses económicos y geopolíticos de las primeras como lo demostró el informe encargado por
el gobierno norteamericano a Henry Kissinger. Puede verse entre muchas obras al respecto
Schooyans, Michael, El aborto, implicancias políticas, editorial Rialp, Madrid, 1988, o visitar la página
web www.vidahumana.org
50 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Llamamos norma jurídica a cierta regla de los actos humanos que establece
cuáles son justos y cuáles no lo son.
Las normas jurídicas pueden ser positivas, establecidas por los hombres, o
naturales, descubiertas por los hombres como exigencias de lo justo.
En el marco del bioderecho, cobran especial importancia como nor-
mas positivas:
La Constitución Nacional, en particular el artículo 29 que prohíbe colocar a
merced de gobierno o persona alguna la vida de los habitantes; el artículo 33
que reconoce derechos aunque no estén explícitamente enunciados; el 75 inciso
23 que protege al niño desde el «embarazo»; y el 75 inciso 22 que otorga jerar-
quía constitucional a algunos tratados de derechos humanos que protegen la
vida desde la concepción.
Entre los tratados internacionales suscriptos por nuestro país, se destaca la
Convención sobre los Derechos del Niño, que reclama protección para el
mismo tanto antes como después del nacimiento (preámbulo), y que nuestro
país extiende desde la concepción (Ley 23849) aclarando que «las cuestiones
vinculadas con la planificación familiar atañen a los padres de manera indelegable
de acuerdo a principios éticos y morales». También la Convención Americana
de Derechos Humanos - Pacto de San José de Costa Rica-, que declara a la
vida protegida, en general, desde la concepción. Mencionemos además la De-
claración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, que reco-
noce equilibradamente los derechos y deberes de las personas.
Entre las leyes, las más importantes son el Código Civil con su regulación sobre
la persona, el niño por nacer -persona desde la concepción en el seno materno-,
los menores, el matrimonio -entre hombre y mujer- y la familia; el Código Penal y
su incriminación del homicidio, el aborto, las lesiones, la instigación y ayuda al
suicidio; la Ley 24193 de Trasplante de Órganos; la Ley 24742 de Comités Hospi-
talarios de Ética; la Ley 22990 de Donación de Sangre; la Ley 23798 de SIDA; la
Ley 23511 de Banco Nacional de Datos Genéticos; la Ley 17132 de Ejercicio de
la Medicina; la Ley 25673 de «Salud Sexual y Procreación Responsable», etc.
Decretos hay muchos. Podemos mencionar el 512/95 que reglamenta la Ley
de Trasplantes; el 1244/91 reglamentario de la Ley de Sida; el 1406/98 que
instituye el Día del Niño por nacer; el 1282/03 que reglamenta la «Ley de Salud
Sexual y Procreación Responsable», etc
Sentencias de los tribunales particularmente importantes fueron las de la Corte
Suprema de Justicia de la Nación en los expedientes «Portal de Belén - Asocia-
ción Civil sin fines de lucro c/ Ministerio de Salud y Acción Social de la Nación s/
amparo» (5/3/02) donde consideró inconstitucional la autorización para la venta
de una píldora «anticonceptiva» con efectos destructivos de la vida humana ya
concebida; en «Comunidad Homosexual Argentina» (1991) en la que entendió
que era conforme con la Constitución el rechazar la personería jurídica a una
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 51
El Ordenamiento Normativo
Las normas no son unidades aisladas ni azarosamente vinculadas. Pueden ser
concebidas como un sistema donde cada una de ellas cumple una función y ocupa
un lugar en relación con las otras. Pero un sistema abierto, permeable a modifica-
ciones e incorporaciones. Es imposible prever acertadamente y por anticipado todas
las soluciones que va a requerir una realidad social compleja y cambiante.
Carlos Cossio, jurista tucumano, comparaba el sistema jurídico con una esfera,
que se apoya en un punto, que es el caso, pero en ese punto está apoyado el peso de
toda la esfera, el peso del ordenamiento completo.
52 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
La norma inferior que contradice una superior carece de valor jurídico y debe
ser declarada inválida por los tribunales.
Síntesis
El derecho es un área del saber en el que se juega nuestro modo de vivir,
nuestros bienes más fundamentales. También se denomina derecho a la re-
gla o la norma que prescribe qué es lo justo.
Derecho natural: integrado por las exigencias de lo que es en sí mismo
justo por ley natural, lo que se corresponde con lo que exigen los bienes
humanos según su naturaleza.
Derecho positivo : integrado por las exigencias de justicia creadas por los
hombres en determinado momento y lugar, para regular la convivencia.
Ley eterna : plan de la divina sabiduría que gobierno el mundo.
Ley natural: participación de la ley eterna en la criatura racional.
Ley humana, creada por los hombres para organizar la convivencia respe-
tando siempre la ley natural.
Características del derecho: Alteridad, Exterioridad, Objetividad, Obliga-
toriedad, Relativa coercibilidad
Características del derecho de nuestro tiempo: Relativismo, Individua-
lismo, globalización.
Las normas jurídicas: positivas, establecidas por los hombres, o naturales,
descubiertas por los hombres como exigencias de lo justo.
56 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Lea el siguiente texto, tomado del libro «El Orden Natural», de Carlos Sacheri, e
identifique las causas por las cuales el autor considera no se respeta el derecho
natural:
«Cotidianamente constatamos que muchos individuos, a veces sociedades ente-
ras, admiten como actos lícitos ciertos comportamientos contrarios a la ley natural.
Prueba de esto es la extremada variedad de los usos y de las reglas morales vigentes
en pueblos diferentes, a lo largo del tiempo y el espacio. ¿Cómo se explica este
fenómeno? Diversas razones existen para explicar tales conductas, estas son:
1) El que un individuo sepa cómo debe actuar moralmente según el orden natu-
ral, no garantiza en absoluto que cada uno de sus actos sean rectos.
2) Hay situaciones muy complejas en las cuales no resulta fácil discernir cuál es
el comportamiento ético más adecuado. En tales casos son frecuentes los
errores.
3) Los pueblos primitivos no alcanzaron un conocimiento suficientemente claro
de algunos principios naturales, por la hostilidad del medio o un desarrollo
intelectual muy rudimentario. Por ejemplo, los onas no contaban sino hasta
dos, ¿cómo podrían descubrir ciertas normas?
4) La fuerza de las costumbres, las tradiciones ficticias, la difusión de doctrinas
erróneas hacen peligrar la rectitud de mucha gente»5.
5
Sacheri, Carlos, El orden natural, ediciones del Cruzamante, Bs. As., 5ª. Edición, 1980
58 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
UNIDAD 3
EL INICIO
DE LA VIDA
60 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 61
«E
n esta función suya como colaboradores de Dios que transmiten
su imagen a la nueva criatura, está la grandeza de los esposos
dispuestos a cooperar con el amor del Creador y Salvador, que
por medio de ellos aumenta y enriquece su propia familia cada día
más.»(Evangelium Vitae Nº43)
«La vida es infinitamente más original que cualquier otra cosa que la
mente humana pueda inventar. No nos atreveríamos ni siquiera a imaginar
los hechos que en realidad no son sino fenómenos comunes de la existencia.»
(A. Conan Doyle, 1891)
Estas palabras, que provienen de tan diversos ámbitos, nos pueden servir
para reflexionar sobre la importancia de la vida, y a su vez, reflejan y proyec-
tan una clara mirada sobre los temas centrales que estudiaremos en esta
unidad.
Abordaremos en primera instancia, el inicio de la vida humana desde la
concepción y haremos el fantástico recorrido por el desarrollo intrauterino
hasta el momento del nacimiento. Analizaremos el estatuto antropológico y
biológico del embrión humano y sus características de coordinación,
gradualidad y continuidad que lo hacen persona desde el instante mismo de
la concepción.
Luego, en el marco de la transmisión de la vida humana, y de su dignidad
que se da en el acto de entrega de amor y donación total de los cónyuges,
abordaremos los tópicos referidos a los métodos naturales de planificación
familiar. De ellos estudiaremos su definición , os indicadores de fertilidad,
haremos un breve repaso de la fisiología del ciclo menstrual femenino, para
considerar los fundamentos científicos de los Métodos naturales, y desarrolla-
remos finalmente, el método Billings y el método sintotérmico.
Para concluir esta unidad, repasaremos brevemente el Magisterio Pontifi-
cio de Pablo VI y de Juan Pablo II sobre la Planificación Familiar.
62 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos específicos:
1. Conocer las bases científicas del inicio de la vida, desde la concepción y
el desarrollo intrauterino.
2. Analizar el estatuto antropológico y biológico del embrión humano,
fundamento del ser persona.
3. Reflexionar acerca de la necesidad e importancia de reconocer la
inviolabilidad de la vida humana desde su inicio.
4. Presentar los métodos naturales de planificación familiar.
5. Comprender y caracterizar el método Billings y el método sintotérmico.
6. Valorar el aporte del Magisterio Pontificio de Pablo VI y de Juan Pablo II
sobre la Planificación Familiar.
Temario:
Métodos Naturales de Planificación Familiar (mnpf).
Clasificación.
Fisiología del Ciclo Menstrual Femenino.
Métodos Naturales:
- Temperatura basal corpórea
- Moco cervical
- Cuello uterino
- Observación de ciclos previos o Calculo de los días
El método de la ovulación - «billings»- del moco cervical
El método sintotérmico
El Magisterio de la Iglesia y la regulación natural de la fertilidad
el comienzo de la vida.
Inicio de la Vida: Fecundación y Desarrollo Intrauterino.
Estatuto biológico y antropológico del embrión humano.
Propiedades del Embrión.
Embrión Humano, Persona Humana.
Mapa de contenidos
A continuación le mostramos una vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 63
1
Bottini de Rey, Z. Cuadernillo de seguimiento del método Sintotérmico. Instituto de Bioética.
UCA. Bs. As. 2003.
2
Bottini de Rey, Z. Planificación Natural Familiar a distancia. Pág.13. Módulo I. Unidad I. Instituto de
Bioética. UCA. Bs. As.
64 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Indicadores de Fertilidad
Moco Cervical:
Cuello uterino:
Por acción del Estrógeno, el orificio se dilata (canal cervical externo); se eleva y
se ablanda. Por acción de la Progesterona: el cuello baja, aumenta su consistencia
y el orificio se cierra. Estos datos se obtienen con la autopalpación.
En el siguiente esquema se observan estas modificaciones Tomado de PFN UCA
mod.2. Unid.1 pag 31
Cuello Uterino
Se resta el número veinte (20) al mas corto de los últimos 6 ciclos anteriores.
Este resultado expresa estadísticamente el último día infértil del periodo preovulatorio.
Es útil que quede registrado en la planilla de método sintotérmico.
68 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
El método Billings tiene sus reglas, para que su aplicación sea efectiva:
Fase Menstrual: No se deben tener relaciones genitales durante la menstruación.
Fase Preovulatoria: Se deben tener relaciones sexuales en noches alternas. Ante
modificaciones del PBI, se deben suspender las relaciones sexuales.
Fase fértil: si se desea evitar un embarazo se deben evitar los contactos genitales
en esta fase.
3
Billings, J.J. « Fundamento del método de la ovulación». Edic. Paulinas. Bs. AS. 1º Ed. 1989.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 69
Fase Postovulatoria: luego del día pico, hay que dejar pasar tres días y se
reanudan las relaciones en la noche del 4to. Día.
VENTAJAS: Fácil de aprender y utilizar. Como todo método requiere un periodo
de instrucción y adiestramiento a cargo de una Instructora que guíe a la usuaria.
- Permite conocer la fertilidad e infertilidad antes y después de la ovulación.
- Es aplicable a todas las etapas de la vida femenina.
- Tiene fundamentos científicos.
- Tiene una elevada eficacia: 97,8% (OMS; 1981)
El método sintotérmico
Asocia varios índices de fertilidad:
1). El cálculo modificado de Ogino.
2). La temperatura basal.
3). El moco cervical.
4). La autopalpación del cuello del útero, puede agregarse.
Fase I Relativamente infértil: Comienza el primer día de menstruación
hasta el día previo al día del calculo modificado de Ogino. Se reconoce en
esta etapa el PBI seco o mucoso.
Fase II Fértil: Comienza el día marcado por el calculo con un guión y
finaliza al comienzo de la fase infértil. Se diagnostica por los cambios en el
moco cervical, con la variación día a día del mismo. Se encuentra aquí el día
Pico o culminante.
Fase III Infertil: Comienza cuando las líneas del moco y la temperatura
han sido trazadas, el inicio de esta fase se da al marcar la ultima línea. Días
sin moco, secos.
A veces se pueden agregar otros índices: Ej. La pérdida intermenstrual, el
dolor abdominal.
La gráfica del método Sintotérmico se realiza de la siguiente manera:
Primero se marca con un guión el día siguiente al cálculo modificado de Ogino.
Marcar con un punto en el centro de cada cuadrado la temperatura, luego unirlas
con una línea.
Registrar la apariencia y la sensación del moco día a día. Al llegar al día pico
marcarlo con una cruz y luego marcar 1; 2; 3 días siguientes.
Trazado de líneas:
Línea de Moco: se traza una línea vertical en la noche del tercer día después
del dia pico.
Línea Básica se debe trazar sobre la mas alta de las seis temperaturas bajas
previas al ascenso térmico.
Línea de Temperatura se traza una línea vertical en el tercer día de tempe-
ratura alta consecutiva, debe estar a 0.2ºC por encima de la línea de base.
70 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 71
Citamos a Pío XI en la encíclica Casti Connubi,1930; a Pío XII con sus numero-
sos discursos y alocuciones, especialmente el discurso a Unión Italiana de comadronas
de 1958 , Juan XXIII con Mater et Magistra; el Concilio Vaticano II, con la Constitución
Dogmática Gaudium et spes, y finalmente Pablo VI con su profética Humanae Vitae.
Todo este Magisterio precedente llevo a Juan Pablo II a escribir la Exhortación Apostó-
lica Familiaris Consortio y luego la magnifica encíclica Evangelium vitae.
Si hay un documento que iluminó proféticamente al mundo, respecto de la
regulación de la natalidad es Humanae Vitae, del Papa Pablo VI. Decimos profética
porque cuando el mundo esperaba que el Papa se manifestará a favor de la píldora
anticonceptiva, como medio lícito para regular la natalidad, promulga el 25 de julio
de 1968, este hermoso documento. En aquellos años, habían cobrado fuerza las
teorías maltusianas que veían en la «bomba demográfica» el peligro del planeta y
que buscaban desactivarla con campañas de control demográfico.
Estas campañas promovidas por gobiernos y organismos internacionales, busca-
ban (o buscan) imponer a las parejas el número de hijos con métodos artificiales de
control demográfico, particularmente entre los países del tercer mundo.
Con valentía y heroísmo el Papa, abogó más bien por el respeto del carácter
unitivo y procreador del amor conyugal y la procreación responsable. Reafirma este
desafío frente a la ONU «Vosotros tenéis que hacer que haya pan suficiente
para la mesa de la humanidad; y no favorecer el control artificial de los
nacimientos —algo irracional— para disminuir el número de comensales
en el banquete de la vida»5.
La Humanae Vitae habla en primer lugar, del amor conyugal6 y de sus caracte-
rísticas: plenamente humano, total, fiel y exclusivo hasta la muerte, fecundo.
En el contexto de este amor es donde fructifica la paternidad responsable, y es
allí donde se enmarcan los métodos naturales de regulación de la fertilidad.
La paternidad responsable, exige que los esposos, dóciles al llamado de Dios,
actúen como fieles intérpretes de su designio. Requiere que los cónyuges reconozcan
plenamente sus propios deberes para con Dios, para consigo mismos, para con la
familia y la sociedad, en una justa jerarquía de valores. Que respeten los procesos
biológicos de la naturaleza humana. Que abran generosamente la familia a nuevas
vidas, y que permanezcan en actitud de servicio a la vida, incluso cuando por
motivos graves y respetando la ley moral, los esposos opten por evitar temporalmen-
te o en tiempo indefinido un nuevo nacimiento 7.
5
Pablo VI. Alocución a la Asamblea General de las Naciones Unidas, 4/ X / 1965.
6
Pablo VI. Humanae Vitae. N°9 Edic. Paulinas 1968
7
Pablo VI. Humanae Vitae Nº 10
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 73
8
Concilio Vaticano II. Constitución Dogmatica Gaudium et Spes, La iglesia en el mundo contempo-
ráneo. Nª 50. Ediciones Paulinas 1965.
9
Concilio Vaticano II. Constitución Dogmatica Gaudium et Spes N°51
10
Pablo VI . Humanae Vitae. N°12
11
Pablo VI . Humanae Vitae. N°16
12
Juan Pablo II. Exhortación Apostólica « Familiaris Consortio». Sobre la misión de la familia cristiana
13
Familiaris consortio. N° 32
74 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
14
Familiaris consortio N° 35
15
Juan Pablo II. Evangelium vitae. N° 97
16
Sanahuja, J.C. 30 Años de la Encíclica Humanae Vitae. Curso de planificación familiar natural.
Universidad Austral. 2001.
17
Capella, A. ; Giacchi, E. ; Terranera, E.. La procreación responsable. Fundamentos filosóficos,
científicos y teológicos. Centro de Estudio e investigación de la regulación natural de la fertilidad.
UCSC: Roma 1992
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 75
Actividad de Aprendizaje
1. Defina Métodos naturales de regulación de la fertilidad?
2. Nombre los que conoce.
3. Defina indicadores de la Fertilidad y de acuerdo con ellos como se clasifican
los métodos naturales.
4. Conoce cuales son en su experiencia los « mitos « acerca de los Métodos
Naturales?. Es capaz de responder objetivamente a los mismos.
Síntesis
Los métodos naturales de planificación familiar también llamados de regulación
de la fertilidad, se basan en la observación, reconocimiento e interpretación de
signos y síntomas de las fases fértil e infértil del ciclo de la mujer. Para su aplicación
es necesario el registro diario de estos datos y el conocimiento de las reglas y criterios
específicos de cada método.
Constituye una forma de vida que requiere de la abstinencia sexual temporal,
elegida libremente.
Clasificación
Métodos de Índice simple: utilizan un solo indicador de fertilidad: Méto-
do de la Ovulación.
Métodos de Índice múltiple: utilizan varios indicadores de fertilidad:
Método Sintotérmico.
Indicadores de la Fertilidad: la temperatura basal, el moco cervical, el cuello
uterino y el calculo de los días.
Las tres fases del ciclo menstrual:
Fase I: Periodo infértil preovulatorio
Fase II: Periodo fértil pre y postovulatorio
Fase III: Periodo infértil postovulatorio.
EL MÉTODO DE LA OVULACIÓN - «BILLINGS»- DEL MOCO CERVI-
CAL: Basado en la observación de las modificaciones del moco cervical. Reco-
noce 4 fases:
1era. Fase Menstrual: la menstruación.
2da. fase Preovulatoria: PBI, Patrón básico de esterilidad.
3ra. fase Fértil: el moco varia día tras día, incluye el Día del pico.
4ta. fase: Desde el día siguiente al pico, hasta la próxima menstruación.
SON FÉRTILES: La fase 2da. y 4ta. El método Billings requiere de reglas. Tiene
una elevada eficacia: 97,8%.
EL MÉTODO SINTOTÉRMICO: Asocia varios índices de fertilidad:
1. El cálculo modificado de Ogino.
2. La temperatura basal.
3. El moco cervical.
4. La autopalpación del cuello del útero, puede agregarse.
76 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
« Todo ser humano debe ser acogido siempre como un don y bendición de Dios.»
( Donum Vitae )
Es necesario conocer primeramente a los protagonistas de esta historia maravi-
llosa, de este inicio de la vida, común a todas las personas del género humano, para
poder comprender cuándo ha comenzado a existir mi propia vida.
Serán las gametas sexuales (células encargadas de trasmitir la herencia) las que
deberán realizar el «complicado» trabajo de encontrarse y fusionarse, para dar así,
origen a un nuevo ser.
Desde allí el cigoto debe migrar en sentido inverso, hasta alcanzar el útero, y más
específicamente su endometrio (capa más interna de este órgano capaz de anidar
al huevo). Durante este viaje, suceden cambios importantes en esta nueva célula.
En los próximos cinco días de su gestación va sufriendo sucesivas divisiones, bus-
cando aumentar su número; todo esto es necesario para dar origen a la estructura
del organismo tal como lo conocemos.
Cada nueva pequeña célula que se inicia a partir del embrión bicelular (el
cigoto luego de su primera división), se denomina blastómera. Después de tres a Día 8 comienza la
cuatro divisiones el cigoto se parece a una mora y recibe el nombre de mórula implantación
(estadio de 8 a 32 células). Cuando se forma el blastocisto (estadio de 64 a 128
células, al quinto día aproximadamente), el embrión/blastocisto se prepara para
entrar en la cavidad uterina; un grupo celular se localizará en un polo del embrión,
y serán las encargadas de constituir el saco embrionario propiamente dicho (este
es el grupo celular que luego se dividirá para constituir el organismo del nuevo
individuo); otro grupo celular se ubicará en la periferia, y serán las encargadas de
producir el liquido que contendrá al embrión y darán origen a la placenta, que por
medio de los vasos del cordón umbical, permitirá la nutrición y respiración del
embrión.
La implantación generalmente se produce en las paredes superiores del útero en
el período comprendido en entre el 6º y 14º día de gestación. Día 17, semana 2
Todos los órganos
Desarrollo Intrauterino se estan formando.
Nueve meses.
¡Qué bello es vivir!
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 81
El Genoma Humano
«La vida física, por la que se inicia el itinerario humano en el mundo, no
agota en sí misma, ciertamente, todo el valor de la persona humana, ni represen-
ta el bien supremo del hombre llamado a la eternidad.»
( Donum Vitae )
El genoma es, nada más y nada menos, que la molécula de ADN (Ácido
dexosirribo-nucleico) que compone el código genético en cada una de las células del
organismo. Es el que identifica al nuevo ser como biológicamente humano y da
comienzo en él una serie de cambios, buscando primero, su formación, y luego su
desarrollo; para constituir su propia realidad biológica. Es este código genético la
fuerza intrínseca (propia del nuevo ser), que va determinar el impulso y a la vez la
dirección que va tener esa formación y ese desarrollo.
Conclusiones
Decimos que desde el momento de la fecundación existe una nueva vida hu-
mana, que debe ser respetada siempre, que debe ser protegida; porque además de
haber sido soñada y querida por el Señor, es a partir de ese instante persona
humana; hombre o mujer en acto, con todas sus potencialidades, buscando cons-
tituir su propia realidad biológica, por la fuerza intrínseca que le otorga su genoma,
que la ordena y la impulsa.
En la condición de persona humana está fundamentada la dignidad misma de
la persona, esta dignidad comienza con su vida física y no es producto del recono-
cimiento de otros sino que le es propio.
Síntesis
La Vida Humana comienza entonces en el instante mismo de la fecunda-
ción, es decir, en el momento preciso de la unión de los gametos sexuales: femeni-
no (ovocito) y masculino (espermatozoide).
Con la conformación del huevo o cigoto se constituye un nuevo código
genético contenido en los cromosomas, es decir un nuevo genoma humano; que
es, en todos sus aspectos único e irrepetible en el universo, y distinto al de sus
padres.
Es el que identifica al nuevo ser como biológicamente humano y da comien-
zo en él una serie de cambios, buscando primero, su formación, y luego su desarro-
llo; para constituir su propia realidad biológica. Es este código genético la fuerza
intrínseca (propia del nuevo ser), que va determinar el impulso y a la vez la direc-
ción que va tener esa formación y ese desarrollo.
Por lo tanto el embrión tiene, por ser humano, el valor propio de la
persona humana. ( Dignidad de persona humana)
84 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Actividad de Aprendizaje
2) La fecundación implica :
a) La liberación desde el ovario de un ovocito maduro.
b) La selección de los espermatozoides a lo largo del tracto genital femenino.
c) La fusión del cigoto en el endometrio.
d) La conformación de un nuevo Genoma Humano.
4) Desarrollo Intrauterino :
a) Comprende dos períodos: embrionario y fetal.
b) El período fetal se caracteriza por la llamada « organogénesis».
c) En el período embrionario se producen muy pocas malformaciones.
d) Durante el tercer mes los movimientos son claramente percibidos por la madre.
BIOÉTICA Y
VIDA NACIENTE
86 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 87
E
l mensaje cristiano sobre la vida está «escrito de algún modo en el
corazón mismo de cada varón y mujer, resuena en cada conciencia
desde el principio, o sea, desde la misma creación, de modo que, a
pesar de los condicionamientos negativos del pecado, también puede ser cono-
cido por la razón humana en sus aspectos esenciales»I.
En esta Unidad «Bioética y Vida Naciente», abordaremos tres temáticas en
las cuales queda de manifiesto como la investigación y la ciencia la servicio del
hombre, nos permiten conocer la persona humana, para admirarla y respetar-
la. Queremos aquí poner de manifiesto, que la ciencia y la biotecnología, pue-
den abrirnos al conocimiento de la vida, pero también pueden ser un medio de
manipulación, utilizando a la persona como un medio y no como un fin en sí
mismo.
Así, en primera instancia, analizaremos el diagnóstico prenatal, las técni-
cas utilizadas y las consideraciones éticas sobre las mismas, concluyendo con
la «Donum Vitae» que nos indica que «el diagnóstico prenatal es lícito si respeta
la vida humana.»
Luego, nos introduciremos en el fantástico y novedoso mundo de la genética,
desarrollando el proyecto Genoma Humano, y las consideraciones éticas sobre
la Declaración Universal sobre el Genoma y los derechos Humanos.
Por último, se llama en causa, a las Ciencias Jurídicas, para conocer cómo
el ordenamiento jurídico considera a la persona humana y a sus derechos.
I
Evangelium Vitae Nº 29
88 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos específicos:
1. Conocer las técnicas de diagnóstico prenatal, sus indicaciones y complica-
ciones.
2. Reflexionar acerca de las consideraciones éticas del diagnóstico prenatal.
3. Conocer los alcances del Proyecto Genoma Humano y las consideraciones
éticas relacionadas con el mismo.
4. Analizar los aspectos jurídicos inherentes a la vida naciente a través del
desarrollo del concepto de persona humana y del análisis del ordenamiento
jurídico argentino.
Temario:
Diagnóstico Prenatal:
• Definición
• Técnicas no invasivas: - Ecografía
• Técnicas Invasivas: - Fetoscopia
- Anmiocentesis
- Cordocentesis
- Biopsia embrional
• Consideraciones éticas
Genoma Humano:
• Definición
• Proyecto Genoma Humano
• Consideraciones éticas
Aspectos Jurídicos de la Vida Naciente
• La existencia de la persona en el Derecho Positivo
• El Derecho Argentino: - El Código Civil Argentino
- El Código Penal Argentino
- La persona en el Derecho Natural
• La Vida Humana, la Persona y su existencia ante el Derecho
Natural.
Mapa de contenidos
A continuación le mostramos una vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 89
Definición
Por el contrario, agrava la ofensa que pueda recibir, más aún si se trata de su
propia vida, y aumenta el atropello a su dignidad de persona.
En la Instrucción “Donum Vitae” de la Congregación para la Doc-
trina Católica de la Fe, en el tema sobre la licitud del Diagnóstico
Prenatal se indica lo siguiente: “Este diagnóstico es lícito si los
métodos utilizados, con el consentimiento de los padres debi-
damente informados, salvaguardan la vida y la integridad del
embrión y de su madre, sin exponerles a riesgos
desproporcionados. Pero se opondrá gravemente a la ley mo-
ral cuando contempla la posibilidad, en dependencia de sus
resultados, de provocar aborto: un diagnóstico que atestigua
la existencia de una malformación o de una enfermedad here-
ditaria no debe equivaler a una sentencia de muerte.”
Actividad de Aprendizaje
Síntesis
El Diagnóstico Prenatal involucra a todos lo procedimientos utilizados
para tomar conocimiento de la salud fetal.
Como en todo acto médico, el Diagnóstico Prenatal, no escapa a las condi-
ciones que se cumplen con el “consentimiento informando”.
Este diagnóstico es lícito si los métodos utilizados, salvaguardan la vida y la
integridad del embrión y de su madre, sin exponerles a riesgos
desproporcionados.
La existencia de una malformación o de una enfermedad hereditaria no
debe equivaler a una sentencia de muerte.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 93
Introducción
En el año 2000 se consiguió finalizar la recopilación del código genético, es decir,
se logró conocer en detalle la estructura anatómica del ADN humano.
Fue producto del trabajo mancomunado de los principales grupos científicos del
mundo, y de las principales potencias que los impulsaron.
Definición
El cuerpo humano contiene un billón de células, cada una de ellas posee un
núcleo que encierra 23 pares de cromosomas. En cada par uno de los cromosomas
es encargado de transmitir la herencia del padre y el otro de la madre.Cada
cromosoma contiene los filamentos enrollados del ADN.
El Genoma Humano es el código genético contenido en el núcleo de cada
célula del organismo humano, conformado por la molécula de ADN.
Esta molécula de ADN fue descubierta por Watson en 1950, se trata de una
molécula de doble hélice enrollada, constituida a su vez por segmentos de genes,
encargados de codificar proteínas necesarias para la vida del hombre.
Del genoma se deben distinguir dos aspectos:
Universal: se trata de los 46 cromosomas que comparte toda la especie
humana, que son comunes a todos los hombres y responsables, entre otras
cosas, de las características de nuestro organismo y sus funciones.
Particular: propio de cada individuo humano, determinado por característi-
cas que lo hacen único e irrepetible. Y que constituye la herencia recibida de
sus padres, siendo a su vez, distinto de ellos.
Algunos Resultados
En el proceso de secuenciación del genoma se fueron definiendo algunas cues-
tiones, hasta el momento no claras en relación a la estructura génica de nuestra
especie.
Se determinó, por ejemplo, el número aproximado de genes que posee la especie
humana, 32.000 a 34.000; número cercano al de algunos animales invertebrados.
Se pudo comprobar también que el Hombre no es sólo producto de sus caracte-
rísticas genéticas, sino que interactúa con el medio ambiente, buscando con-
formar así su propia realidad biológica, psicológica, espiritual, etc.
96 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Libertad de investigación
El art. 12 b) reconoce justamente que “la libertad de investigación [...] proce-
de de la libertad de pensamiento”. Esta es una condición necesaria, pero no
suficiente, puesto que para llevar a cabo una investigación de manera verda-
deramente libre, es preciso garantizar del mismo modo también la libertad de
conciencia y de religión. Por otra parte, la Declaración Universal de los Dere-
chos del Hombre (art. 18) y el Pacto internacional sobre los derechos civiles
y políticos (art. 18) ponen en el mismo plano la libertad de pensamiento, de
conciencia y de religión. Sería deseable, pues, que allí donde se hable de
libertad de pensamiento a propósito de la libertad de investigación, se aña-
dan también las palabras “libertad de conciencia y de religión”.
Actividad de Aprendizaje
1. Según lo estudiado por usted en esta unidad, ¿sería capaz de definir en pocas
palabras a qué se denomina “genoma humano”?
1
Cfr. Sanhuja, Juan Claudio, Desarrollo sustentable. La nueva ética internacional, editorial Vortice, Bs.
As., 2003
2
Ollero, Andrés, Derecho a la vida, y derecho a la muerte, ed. Rialp, Navarra, 1994, pág. 33
102 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
El Derecho Argentino
La Constitución Nacional en su texto originario carecía de una referencia
expresa referida al inicio de la persona.
Durante la Convención Reformadora de 1994 se intentó incluir un artículo que
protegiera clara e indubitablemente la vida desde la concepción. Las negociaciones
políticas terminaron con la ambigua redacción del art. 75 inc. 23, 2ª. Parte, el que
atribuye al Congreso «dictar un régimen de seguridad social especial e inte-
gral en protección del niño en situación de desamparo, desde el embarazo
hasta la finalización del período de enseñanza elemental, y de la madre
durante el embarazo y el tiempo de lactancia.» Como vemos, establece la
protección del niño antes de nacer, pero refiere solo al sistema de seguridad social y
104 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
3
Beluscio-Zanoni, Código Civil y Leyes complementarias, ed. Astrea, Bs. As., 1978, tomo 1, pág. 269
4
Barra, Rodolfo, Protección constitucional del derecho a la vida, ed. Abeledo Perrot, Bs. As., 1996,
pág. 29; Boggiano, Antonio, Introducción al Derecho Internacional. Relaciones exteriores de los
ordenamientos jurídicos, Buenos Aires, 1995, pág. 103. Colautti, Carlos E., Los tratados internacio-
nales y la Constitución Nacional, La Ley, Bs. As., 1999. En el mismo sentido se ha pronunciado el
Prof. Germán Bidart Campos.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 105
5
García Elorio, Aurelio, Protección de los niños por nacer en el sistema interamericano de derechos
humano, pág. 35 y ss.
6
Barra, Rodolfo, Protección constitucional del derecho a la vida, ed. Abeledo Perrot, Bs. As., 1996, pág. 60
106 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
El Decreto 1406/98
El Decreto 1406/98 instituye el día del Niño por nacer. Tiene importancia, aun-
que menor, porque, además de tratarse de un decreto y no de una ley, se limita a
instituir una «celebración», y no a regular derechos y deberes. Es especialmente
interesante la fundamentación que invoca, pues alude a que “especialmente en su
etapa prenatal, el niño es un ser de extrema fragilidad e indefensión, salvo la natural
protección brindada por su madre... La vida, el mayor de los dones, tiene un valor
inviolable y una dignidad irrepetible... es necesario dedicar un día en el ámbito
nacional al niño por nacer, con el objeto de invitar a la reflexión sobre el importante
papel que representa la mujer embarazada en el destino de la humanidad, y el valor
de la vida humana que porta en su seno...
Se estima conveniente que el Día del Niño por Nacer se celebre el 25 de marzo de
cada año, fecha en que la Cristiandad celebra la Anunciación a la Virgen María, en
virtud de que el nacimiento más celebrado en el mundo por cristianos y no cristianos
es el del Niño Jesús cuyo momento de concepción coincide con dicha fecha...”.
Constatamos así la tendencia generalizada en el sistema interamericano, a tra-
vés de su derecho interno e internacional, a proteger civil, social y penalmente al por
nacer, a diferencia de lo que ocurre en el viejo continente.
7
Moreno, Rodolfo, El Código Penal y sus antecedentes, Buenos Aires, Tomo III, pág. 408
8
Jack y Bárbara Willke, Aborto, Preguntas y Respuestas, ed. Bonum, Bs. As., 1992, pág. 50
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 107
Actividad de Aprendizaje
El caso de duda
Supongamos que a pesar de haber adoptado un espíritu objetivo y abierto a
los datos científicos, no lleguemos a la certeza. Que no estemos en condiciones de
definir con precisión desde cuando nos encontramos con una persona humana con
dignidad especial que merezca tutela jurídica como tal.
En este caso, ¿qué hacer? O lo que es lo mismo, ¿como resolver la duda?
Si tenemos dudas, debemos presumir que se trata de una persona y tratarla como tal.
¿No optamos, en caso de duda, a favor de la vida?
¿Acaso enterramos a aquellos cuya muerte es dudosa?
¿O acaso no trabajamos frenéticamente para ayudar a rescatar a un
minero atrapado, para buscar un niño perdido en la montaña, o a
personas sepultadas bajo las ruinas de un edificio derrumbado?
¿O es que un cazador dispara antes de estar seguro si ese que entrevé
es un ciervo o un ser humano?
«Nosotros sugerimos que un modo realmente humano de pensar la cuestión es
otorgarle a la vida el beneficio de la duda»8.
108 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
En la causa Roe vs. Wade (1973), por la cual la Suprema Corte Federal Norte-
americana declaró inconstitucional toda prohibición al aborto durante los primeros
meses del embarazo, el tribunal razonó del siguiente modo: no podemos prohibir a
la mujer resolver sobre una cuestión que atañe a su embarazo para proteger una
vida cuando ni los médicos, filósofos, o teólogos, se han puesto de acuerdo acerca
de su naturaleza o su condición de persona. ¿Qué podría responder a esta argu-
mentación?
UNIDAD 5
BIOÉTICA Y
AMENAZAS CONTRA
LA VIDA NACIENTE
114 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 115
E
s cierto que Anticoncepción y aborto desde el punto de vista moral,
son males específicamente distintos: La primera contradice la verdad
plena del acto sexual como expresión propia del amor conyugal, el
segundo destruye la vida de un ser humano; la anticoncepción se opone a la
virtud de la castidad matrimonial, el aborto se opone a la virtud de la justicia
y viola directamente el precepto divino «NO MATARÁS».
A pesar de su diversa naturaleza y peso moral, muy a menudo están ínti-
mamente relacionados, «COMO FRUTOS DE UNA MISMA PLANTA ...»I
Con este cita del Santo Padre, queremos reflejar la dramática realidad con
la cual la cultura de la muerte amenaza la vida humana naciente. Esta pers-
pectiva implica una amenaza a la vida naciente, ya que esta es vista, como un
mal que de todas formas y maneras debe matarse. Es una verdadera conjura
contra la vida, se la desprecia, se corrompe, se mata.
En la presente unidad, estudiaremos el tema del aborto procurado, su de-
finición, las causas y su intrínseca inmoralidad, por lo que recibió del Concilio,
el nombre de crimen abominable. Abordaremos luego, las secuelas físicas y
psíquicas que éste produce. Por último, analizaremos un tema de gran actua-
lidad, sobre todo para nuestro país, como es la dimensión jurídica del aborto.
Completa esta unidad, los conceptos referidos a la anticoncepción. Tam-
bién aquí analizaremos la definición, sus mecanismos de acción, su clasifica-
ción, las complicaciones, su ilicitud a la luz de los principios de la Bioética
personalista y los aspectos jurídicos relacionados.
Toda la unidad, esta enmarcada en el magisterio de la Iglesia, especial-
mente en la Encíclica Evangelium Vitae.
I
Evangelium Vitae N° 13
116 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos Específicos:
1. Analizar el concepto de aborto procurado y su maldad intrínseca.
2. Reconocer la responsabilidad social del delito del aborto.
3. Identificar los métodos de aborto.
4. Conocer las consecuencia físicas y psíquicas del aborto.
5. Conocer la definición del acto contraceptivo, a la luz el Magisterio de la
Iglesia.
6. Conocer los mecanismos de acción, su clasificación y los efectos indesea-
bles de los anticonceptivos de mayor uso.
7. Reconocer la ilicitud de la anticoncepción, fundamentado desde los princi-
pios de la Bioética personalista.
8. Estudiar los aspectos jurídicos relativos al aborto y la anticoncepción.
Temario:
La vida humana destruida: el aborto
• Definición
• Cultura de la muerte y aborto
• Métodos
• Secuelas físicas y psíquicas
• Aspectos jurídicos
La vida humana artificialmente impedida: anticoncepción
• Definición desde el Magisterio de la Iglesia
• Ilicitud de la anticoncepción
• Mecanismos de acción
• Clasificación
• Efectos indeseables
• Aspectos jurídicos
Mapa de contenidos
A continuación le mostramos una vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 117
Definición
« Porque tú mis vísceras has formado » (Sal 139 138, 13):
« Mi embrión tus ojos lo veían » (Sal 139 138, 16)
Se habla de aborto espontáneo cuando la muerte es producto de alguna
anomalía o disfunción no prevista ni deseada por la madre; y de aborto provocado
(que es lo que suele entenderse cuando se habla simplemente de aborto) cuando la
muerte del bebé es procurada de cualquier manera: doméstica, química o quirúrgica.
Juan Pablo II en Evangelium Vitae nos dice sin vueltas: «Todo lo que se opone
a la vida, como los homicidios de cualquier género, los genocidios, el
aborto, la eutanasia y el mismo suicidio voluntario, todas estas cosas y
otras semejantes son ciertamente oprobios que, al corromper la civiliza-
ción humana, deshonran más a quienes los practican que a quienes pade-
cen la injusticia y son totalmente contrarios al honor debido al Creador».1
Opciones, antes consideradas unánimemente como delictivas y rechazadas por
el común sentido moral, llegan a ser poco a poco ,socialmente respetables. La
misma medicina, que por su vocación está ordenada a la defensa y cuidado de la
vida humana, se presta cada vez más en algunos de sus sectores a realizar estos
actos contra la persona, deformando así su rostro, contradiciéndose a sí misma y
degradando la dignidad de quienes la ejercen. En la actualidad los organismos
1
Evangelium Vitae. N°
118 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
2
Evangelium Vitae N°57
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 119
Dios crea y forma al ser humano, modelándolo con sus manos (cf. Sal 118, 73).
En el evangelio, leemos en San Lucas 1, 44: «Porque apenas sonó la voz de tu
salutación en mis oídos ha saltado de gozo el niño en mi seno».
Pero es sobre todo palpable la certeza de que la vida transmitida por los padres
tiene su origen en Dios, como atestiguan tantas páginas bíblicas que con respeto y
amor hablan de la concepción, de la formación de la vida en el seno materno, del
nacimiento y del estrecho vínculo que hay entre el momento inicial de la existencia
y la acción del Dios Creador.
La vida es un bien demasiado fundamental para ponerlo en balanza con otros
inconvenientes, incluso mas graves. Jamás, bajo ningún pretexto, puede utilizarse el
aborto, ni por parte de una familia, ni por parte de la autoridad política, como
medio legítimo para regular los nacimientos.
gametos) es un sujeto humano, existente, con una identidad bien definida, el cual
comienza desde ese momento, a actualizar su propio desarrollo, en forma coordina-
da, continua y gradual; de modo tal que nunca es una simple masa de células sino,
siempre, un sujeto. Como tal, tiene derecho a su propia vida y en consecuencia,
cualquier intervención que no sea a su favor, viola su derecho a la vida.
Visto todo esto, podemos afirmar junto con el Dr. Rafael Luis Pineda que la
discriminación del ser humano en las primeras fases de su existencia no tiene
sustentación antropológica y biológica, ya que el ser humano es, desde su inicio un
ser perteneciente a la especie humana.
El Aborto y La Persona
Respetamos absolutamente el derecho de autonomía en las personas, desde
luego y a lo mejor, con más razones el de una madre, pero el derecho de la madre
se agota cuando comienza el derecho del hijo.
Los procedimientos para abortar son muchos. Métodos científicos han demos-
trado la triste utilización de la medicina en el asesinato de niños indefensos.
Las secuelas psicológicas que produce el aborto, son también conocidas como
Síndrome post aborto (PAS - Post - abortion syndrome)3, queriendo significar un
conjunto de síntomas y signos frecuentes en las mujeres que han abortado y tam-
bién la literatura describe esta sintomatología en quienes practican un aborto: médi-
cos, enfermeras, obstétricas.
Sin duda el aborto produce un estrés por su carácter traumático y por la ruptura
psicobiologica del vinculo materno-fetal, generando afecciones psicosomáticas. A
esto se suma el efecto que produce la elaboración de duelo, por el bebe muerto.
126 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
3
Spagnolo, A. Bioética nella ricerca e nella prassi medica. Ediz. Camilliane. Torino 1997. Pág. 19
4
Pavia, M.C. Consecuencias psicológicas del aborto en la mujer a muy corto plazo. Vida y ética. Año
1. N°0. Dic. 2000. UCA. Pág.43
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 127
Es importante señalar que estos cuadros deben recibir ayuda siquiátrica y psico-
lógica para poder sobrellevarlos, la familia deberá contener y acompañar a la mujer
en su recuperación . En este sentido Juan Pablo II , en Evangelium Vitae N° 99...
Una reflexión especial para vosotras, mujeres que habéis recurrido a un aborto...
quizás la herida aún no haya cicatrizado en vuestro interior... no os dejéis vencer
por el desanimo y no abandonéis la esperanza, antes bien comprended lo ocurrido
e interpretadlo en su verdad... abríos con humildad y confianza al arrepentimiento:
el Padre de toda misericordia os espera para ofreceros su perdón y su paz en el
sacramento de la reconciliación. Os daréis cuenta de que nada está perdido y po-
dréis pedir perdón también a vuestro hijo que ahora vive en el Señor.6
Actividad de Aprendizaje
5
Pavía, M. C. Op. Cit. Pág.47
6
Juan Pablo II. Evangelium Vitae N° 99
128 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Dentro de mí se desencadenó una lucha terrible. Me Fé, podrá servir, sino de ejemplo, por lo menos de
preguntaba por qué Dios permitió que yo fuese des- referencia. De su acción moral y afectiva.
garrada, destruida precisamente en lo que era la ra- Basta un signo, una vocecita, una señal fraterna,
zón de mi vida; pero, también me preguntaba a qué para poner en movimiento la esperanza de tantas
nueva vocación El quería llamarme. criaturas desconocidas. Dios me ha elegido –que él
Me levanté con esfuerzo y mientras ayudada por me perdone esta presunción para guiar a las mas
sor Josefina me enderezaba, me llegó el sonido de humilladas de mi pueblo hacia un alba de redención
la campana del convento de las Agustinas, cercano y de libertad. Ya no podrán dudar de la sinceridad de
al nuestro, que llamaba a oración de las nueve de la mis palabras, porque vengo como ellas, de la fronte-
mañana. Me hice la señal de la Cruz y recité mental- ra del envilecimiento y la profanación.
mente el himno litúrgico: «En esta hora sobre el Gól- Recuerdo que cuando frecuentaba en Roma la
gota,/Cristo, verdadero Cordero Pascual, /paga el Universidad «Auxilium» para la Licenciatura en Le-
rescate de nuestra salvación». tras, una anciana eslava, profesora de literatura, me
¿Qué es madre, mi sufrimiento y la ofensa recibi- recitaba estos versos del poeta Alexej Mislovic:
da, comparada con el sufrimiento y la ofensa de aquel «Tú no debes morir/ porque has elegido estar/ de
por quien había jurado mil veces dar la vida?. Dije la parte del día». La noche, en que por horas y horas
despacio, muy despacio: «Que se cumpla tu volun- fui destrozada por los serbios me repetí estos ver-
tad, sobre todo ahora que no tengo donde aferrarme sos que los sentía como un bálsamo para el alma,
y que mi única certeza es saber que Tú, Señor, tu enloquecida ya casi por la desesperación.
estás conmigo.» Ahora ya todo paso y al volver hacia atrás tengo la
Madre, le escribo no para buscar consuelo, sino impresión de haber sufrido una terrible pesadilla.
para que me ayude a dar gracias a Dios por haber- Todo a pasado, Madre, pero, todo empieza. En su
me asociado a millares de compatriotas ofendidas llamado telefónico después de sus palabras de alien-
en su honor y obligadas a una maternidad indeseada. to, que le agradeceré toda la vida, usted me hizo una
Mi humillación se añade a la de ellas, y porque no pregunta concreta: «¿Qué harás de la vida que ten
tengo otra cosa que ofrecer en expiación por los peca- han impuesto en tu seno?». Sentí que su voz tembla-
dos cometidos por los anónimos violadores y para ba al hacerme esa pregunta, pregunta que no creí
reconciliación de las dos etnias enemigas, acepto la oportuno responder de inmediato; no porque no hu-
deshonra sufrida y la entrego a la misericordia de Dios. biese reflexionado por el camino a seguir, sino para
No se sorprenda, Madre, si le pido que comparta no turbar sus eventuales proyectos respecto de mí. Yo
conmigo un «gracias» que podría parecer absurdo. ya decidí. Seré madre. El niño será mío y de nadie
En estos meses he llorado un mar de lagrimas por más. Se que podría confiarlo a otras personas pero él
mis dos hermanos asesinados por los mismos agre- –aunque yo no lo quería y no lo esperaba- tiene el
sores que van aterrorizando nuestras comunidades derecho a mi amor de madre. No se puede arrancar
y pensaba que no podría sufrir más de eso, ¡tan lejos una planta con sus raíces. El grano de trigo caído en el
estaba de imaginar lo que me había de suceder!. surco tiene necesidad de crecer allí, donde el miste-
A diario llamaban a la puerta de nuestro convento rioso, aunque inicuo, sembrador lo echó para crecer.
centenares de criaturas hambrientas, tiritando de frío Realizaré mi vocación religiosa de otra manera.
con la desesperación en los ojos. Hace unas sema- Nada pediré a mi congregación que me ha dado ya
nas un muchacho de dieciocho me dijo: «Dichosas todo. Estoy muy agradecida por la fraterna solidari-
ustedes que han elegido un lugar donde la maldad dad de las hermanas que en este tiempo me han
no puede entrar». El chico tenía en la mano el rosario llenado de delicadezas y atenciones, y particularmen-
de las alabanzas del profeta. Y añadió en voz baja: te por no haberme importunado con preguntas indis-
«Ustedes no sabrán nunca lo que es la deshonra». cretas. Me iré con mi hijo, no se donde, pero Dios
Pensé largamente sobre ello y me convencí que que rompió de improviso mi mayor alegría me indi-
había una parte secreta del dolor de mi gente que se cara el camino a recorrer para hacer su voluntad.
me escapaba y casi me avergoncé de haber sido ex- Volveré pobre, retornaré al viejo delantal y a los
cluida. Ahora soy una de ellas, una de las tantas muje- zuecos que usan las mujeres los días de trabajo y
res anónimas de mi pueblo, con el cuerpo desbastado me iré con mi madre a recoger a nuestros bosques
y el alma saqueada. El Señor me admitió a su misterio la resina de la corteza de los árboles...
de vergüenza. Es más, a mi, religiosa, me concedió el Alguien tiene que empezar a romper la cadena
privilegio de conocer la fuerza diabólica del mal. de odio que destruye desde siempre nuestros paí-
Se que de hoy en adelante, las palabras de áni- ses. Por eso, al hijo que vendrá le enseñare solo el
mo y de consuelo que podré arrancar de mi pobre amor. Este, mi hijo, nacido de la violencia, testimo-
corazón, ciertamente serán creíbles, porqué mi his- niará junto a mí que la única grandeza que honra al
toria, su historia y mi resignación, sostenida por la ser humano es la del perdón.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 129
Resultaría superfluo recordar las disputas ideológicas que genera el tema del
aborto. Pensadores, legislaciones, movimientos, se han enrolado en una u otra po-
sición. Los puntos nucleares de la discusión están en considerar si el derecho a la
privacidad e intimidad de la madre incluyen el de terminar con su embarazo, la
solución jurídica indicada frente a embarazos por violaciones o situaciones donde el
embarazo es riesgoso para la vida de la madre, para su tranquilidad psíquica, o
para su situación socioeconómica. Contemporáneamente, también se debate sobre
la posibilidad de mantener una legislación prohibitiva ante el auge de abortos clan-
destinos que realizados a espaldas de la legislación resultan de altísimo peligro para
la salud de las mujeres.
Básicamente, una legislación puede ser totalmente prohibitiva, puede
despenalizar algunos supuestos (sistema de las indicaciones) o durante determina-
dos momentos del embarazo (sistema de los plazos), o asumir un criterio mixto
(algunos supuestos dentro de algunos plazos), puede despenalizarlo casi totalmente,
y/o puede financiar abortos considerándolos parte de la cobertura de salud.
Suele distinguirse la despenalización del aborto, es decir, dejar de considerarlo
delito, al menos cuando es realizado por la propia madre, de la legalización, recono-
cimiento de un derecho al aborto, y a procurárselo mediante el sistema público de
salud.
De todos modos, la distancia entre uno y otro es exigua, puesto que el estado
de bienestar procura eliminar cualquier diferencia que exista por razones económi-
cas y asume entre los gastos del sistema de salud pública las prácticas a las que no
tienen acceso las personas de bajos recursos.
La situación se hace dramática si tomamos en cuenta que la legislación permisiva
del aborto suele ser, en muchos casos, sumamente dura contra los organismos que
luchan en pos de la defensa de la vida.
A comienzos de siglo la situación en Europa era bastante homogénea. El aborto
era considerado un delito. Fue el comunismo soviético el que innovó cuando en
1920 lo legaliza, seguido luego por sus satélites en la década del ’50: Polonia,
Hungría, Rumania, Bulgaria y Checoslovaquia. Unos años más tarde, promulga
Gran Bretaña su Ley de Aborto (Abortion Act) de 1967, autorizando el aborto
hasta las 24 semanas, si se invocan razones vinculadas a la salud física o mental de
la madre o de su familia.
A partir del dictado de la ley inglesa, se repiten normas tendientes a despenalizarlo
total o parcialmente en Alemania Federal y Dinamarca (1973), Suecia (1974),
Francia (1975), Italia, Luxemburgo y Grecia (1978), Holanda (1981), Por-
tugal (1984), España (1985) y Bélgica (1990).
En Estados Unidos, el derecho constitucional al aborto hasta los seis meses
de embarazo fue reconocido desde 1973 por la Corte Suprema en el caso Roe vs.
Wade.
130 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
En países como China o la India, el estado además presiona para que se reali-
cen abortos cuando se trata de niños con deficiencias, o ya se tuvo más de un hijo.
En cambio en Hispanoamérica, con excepción de Cuba y Puerto Rico, al igual
que en la mayoría de los países africanos y de medio oriente, el aborto es consi-
derado delito, a veces con la excepción del que se realiza para evitar un grave
peligro para la salud o la vida de la madre.
Los casos de aborto despenalizados pueden reducirse a los siguientes:
La justicia exige que las personas más débiles e indefensas reciban mayor
protección de la sociedad, no menor.
Canadá.
China.
Corea.
Rusia.
Francia.
Holanda.
Italia, el Reino Unido, etc.
Lógicamente, es inadmisible justificar la muerte de una persona para no alterar
el presupuesto familiar o las relaciones sociales.
7) La pura voluntad de la madre («aborto libre» o «aborto a petición»)
Aquí no hay que demostrar ninguna razón, simplemente invocar el deseo de
realizar el aborto y, en algún caso, someterse a algún examen médico o recibir
consejo interdisciplinario.
Así ocurre en:
Alemania.
Austria.
Bélgica.
Canadá.
Corea (hasta el 7º mes)
Cuba, China, Estados Unidos y Puerto Rico (hasta el 6º. mes)
Holanda (hasta la 24ª. Semana)
Rusia (hasta la 12ª. Semana)
Francia (hasta la 10ª. Semana)
Italia (hasta el 3º. mes, aunque debe manifestar razones sociales o familiares).
Suecia (hasta la 18ª. Semana).
De acuerdo con lo dicho, los abortos no castigados por nuestro Código
Penal serían:
Valoración
El derecho natural se corresponde con la inclinación de todo ser a su propia
conservación, y del viviente a la protección de su vida.
Actividad de Aprendizaje
Un proyecto de ley presentado en 1994 por los diputados Alfredo Bravo (Frepaso,
Capital), Ricardo Molinas (Alianza-Frepaso, Bs. As.) y Héctor Polino (Alianza-Frepaso,
Capital), de «procreación responsable», incluía entre sus métodos al aborto. El mis-
mo, en su art. 14, disponiendo que: «La mujer embarazada podrá solicitar la inte-
rrupción del embarazo a un médico diplomado, en las siguientes circunstancias:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 135
Anticoncepción - Contracepción.
Definición
«La anticoncepción es la elección intencional de no procrear en un
acto conyugal querido y voluntario». Son actos intrínsecamente malos, contra-
dicen la verdad plena del acto conyugal, lo priva de la procreación y así se viola
también la dimensión unitiva del acto conyugal. La unión no es integral; no hay una
donación total del uno al otro. El acto contraceptivo no es un acto conyugal
moral. En la elección anticonceptiva se elige toda acción que, o en previsión del
acto conyugal o en su realización, como fin o como medio hace imposible la pro-
creación7 .
La mentalidad contraceptiva, intensifica la cultura de la muerte y el aborto,
además, es bien diversa del ejercicio responsable de la paternidad y maternidad
Por eso el Santo Padre En Evangelium Vitae dice que: Anticoncepción y aborto son
males específicamente distintos: La primera contradice la verdad plena del acto
sexual; el segundo destruye la vida de un ser humano. La anticoncepción se
opone a la virtud de la castidad matrimonial; el aborto se opone a la virtud de
la justicia y viola directamente el precepto divino «NO MATARÁS». A pesar de su
diversa naturaleza y peso moral, muy a menudo están íntimamente relacionados,
COMO FRUTOS DE UNA MISMA PLANTA...»8
Así, la vida que podría brotar del encuentro sexual, se convierte en un enemigo
a evitar absolutamente, y el aborto en la única respuesta posible frente a una
anticoncepción frustrada.
La estrecha conexión de ambas prácticas en cuanto mentalidad antivida, lo
demuestra la preparación de fármacos, dispositivos y vacunas, que se distribuyen
con la misma facilidad que los anticonceptivos, que actúan en realidad como
abortivos en las primerísimas fases de desarrollo de la vida del nuevo ser humano,
como vimos anteriormente.
Las prácticas anticonceptivas hunden sus raíces en una mentalidad hedonista e
irresponsable respecto de la sexualidad. Existe una falta de responsabilidad en
la vida sexual matrimonial, consiste en separar la procreación del acto
sexual, o sea como se mencionaba en la revolución sexual de los ’60, es « sexo sin
hijos», esto fue posible gracias a los métodos anticonceptivos.
El Magisterio nos ha entregado la estupenda encíclica de Pablo VI, Humanae
vitae, sobre la procreación responsable.
7
Humanae vitae. N°14.
8
Evangelium Vitae N° 13.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 137
Anticoncepción: Clasificación
Anticonceptivos Hormonales
Fue el biólogo Gregory Pincus quien se encargó de coordinar los estudios clínicos
y lograr que la FDA de Estados Unidos, en 1959, otorgó la patente a Enovid 10,
como agente anticonceptivo, con lo que se hizo oficial el nacimiento de la «Píldora».
Cuando la píldora fue ofrecida por vez primera como una opción anticonceptiva
para la población mundial, se le vio, no sólo como una solución para la regula-
ción individual de la fertilidad, sino además como una herramienta para el
control poblacional.
En América Latina sólo el 9.36% de las mujeres emplea la píldora como método
anticonceptivo, mientras que en Europa lo utilizan el 33% de las mujeres.
Los Anticonceptivos orales contienen esteroides ováricos sintéticos, a veces
se combinan estrógenos con progestágenos, otras veces solo progestágenos.
Mecanismo de acción:
Inhiben el eje hipotálamo - hipofisario.
Mantiene la FSH en niveles constantes, no aumenta, no se produce
ovulación. Bloquea LH.
Alteración en endometrio uterino.
Modifica las trompas de Falopio.
Altera el moco cervical.
ORALES:
Píldoras:
Solo Estrógeno Estril - estradiol actualmente con menor contenido
estrógeno.
Solo Progesterona con < actividad androgénica. Composición: combina-
das (estrógenos + progesterona)
Prescripción:
Monofásica = cantidad de estrógenos y progestínicos en c/u 21
días.
Bifásica trifásica secuencial es cantidad variable de hormo-
na para imitar la fisiología del ciclo.
Minipíldoras: Solo progesterona (única dosis); se da diariamente.
Píldoras mensal: Combinados de depósito.
Los estudios epidemiológicos que se han realizado, tiene sesgos entre la asocia-
ción del uso de Anticonceptivos Orales y Cáncer de cérvix, ya que no consideran la
primera relación sexual y numero de parejas.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 141
Contraceptivos de Barrera:
Profiláctico o condón: funda de látex que se coloca en el pene apenas inicia-
da la erección y antes de la penetración.
Diafragma: Arco flexible, en forma de anillo, cubierto de látex, introducido en
la vagina, cubre el cuello del útero. Se coloca 6 hs. Antes del coito y se lo retira
7 hs. después. (En América Latina solamente el 6% utiliza el condón).
El preservativo no sólo se emplea como anticonceptivo, sino para prevenir las
ETS, como el SIDA, lo que deja en evidencia la relatividad de su uso, si uno lee
las cifras actuales de contagio en todo el mundo y en aumento, precisamente
donde más se la ha promovido. Queda en evidencia su escasa efectividad.
142 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Actividad de Aprendizaje
Lea el texto siguiente «La píldora es abortiva», Dictamen del Insituto de Bioética
de la UCA, escrito por el P. Alberto G. Bochatey, O.S.A., y analice ¿Porqué la
píldora del día después es abortiva? Nombre al menos tres fundamentos.
La Píldora es Abortiva
A pesar de un fallo de la justicia, referencia a la siempre, un sujeto. Ningún fin, incluso bueno, puede justifi-
comercialización de la popularmente llamada «píldora del día car una intervención que produzca la muerte y eliminación
después», se ha reavivado la polémica sobre la misma. Con de un ser humano. Un fin bueno, no hace buena una acción
tal motivo, el Instituto de Bioética de la Facultad de Posgrado en sí mala.
en Ciencias de la Salud, de la Pontificia Universidad Católica «El ser humano debe ser respetado y tratado como persona
Argentina, ha producido el siguiente dictamen: desde el instante de su concepción y, por eso, a partir de
ese momento se deben reconocer sus derechos, principal-
1.- Desde el punto de vista técnico. Este fármaco pro- mente el derecho inviolabe a la vida» (Evangelium Vitae 60).
voca una alteración en el transporte tubárico y también una Desde la Bioética personalista, proponemos la superación
desincronización en la maduración del endometrio según lo de ciertas ambigüedades que nos presenta el paradigma de
informa el mismo laboratorio que la elabora y comercializa una autonomía descontextualizada. Posponer arbritariamente
(ver: wwww.gador.com.ar). Si la píldora es tomada en la determinación del inicio de la vida se aparta de la verdad
el período periovulatorio, impide el normal desarro- ontológica e incluso científica. Desarticular la unidad esen-
llo y progreso del embrión humano, lo que elimina cial de la persona, nos lleva a una dualidad desintegradora
las posibilidades de supravivencia de dicho embrión incompatible con la vida.
que ya está presente.
Durante todo el ciclo menstrual dos eventos importantes se 3.- Desde el punto de vista del derecho. Como justa-
producen en el sitema genital de la mujer: la maduración y mente, hace pocos días, afirmaba la internacionalmente re-
salida de un óvulo del ovario, con el objeto de que sea fe- conocida Pontifica Academica para la Vida, la misma historia
cundado y la preparación del endometrio uterino para la de los pueblos ha demostrado, que las exigencias que sur-
anidación del bebe. El endometrio está en su mayor nivel de gen de la ley moral natural -como la dignidad de la persona y
receptividad en el periodo posovulatorio, de tal manera que su inviolable e innegociable derecho a la vida- necesitan
si existe la fecundación, esta receptividad será máxima, ser reconocidads y tuteladas por el derecho positivo. Es
facilitando naturalmente el proceso de desarrollo del em- por esta razón que en la historia del derecho, la digni-
brión. La implantación (sin duda una etapa más) se produce dad de la persona y el derecho a la vida, siempre han
entre el quinto y el noveno día después de la fertilización. A sido cuidados especialmente de la arbitrariedad de
este evento del desarrollo embrionario, y de la maduración cualquier pacto social o del consenso de la mayoría.
de endometrio, se lo llama sincronización y es un proceso No deconocemos que en nuestros días, existe una cierta
natural in vivo, porque ambos factores se dan bajo los efec- tendencia en algunos grupos sociales que, exasperando la
tos de las mismas hormonas. reivindicación de las libertades personales individuales, pre-
El levonorestrel (droga especialmente usada para píldora de tenden que surja en la conciencia colectiva, una mentalidad
la que hablamos) altera la receptividad del endometrio impi- relativista desde donde se le exija al Estado garantizar y
diendo que el embrión siga su desarrollo y pueda implantarse. permitir prácticas y atentados conta la vida humana, espe-
Así, el «terreno» no es apto y la implantación no es exitosa cialmente cuando ésta es más débil, frágil y necesitada.
lo que provoca la muerte del embrión. Esta es enton- Consideramos como Instituto de Bioética, que los dictá-
ces la acción abortiva del levonorgestsrel que por lo precoz menes y normas jurídicas deben ser acorde a la verdad del
de la misma, seguramente pasará inadvertida a la madre. ser humano y su libertad, que no puede existir si no se
respeta toda vida y toda la vida.
2.- Desde el punto de vista antropológico.Tanto la filo- En estos momentos tan difíciles y penosos que estamos
sofía como la teología, sobre la base de un análisis biológico viviendo los argentinos, no podemos olvidar la importancia
completo, afirman que el embrión humano vivo (forma- impostergable de crecer en una culltura de la Vida y en la
do a partir de la unión de los gametos) es un sujeto contrucción de un nuevo orden social, justo y pacífico. El
humano, existente, con una identidad bien definida, el uso y comercialización de «la píldora del día después» impli-
cual comienza desde ese momento, a actualizar su propio ca introducir un nuevo factor de injusticia y retraso en el
desarrollo, en forma coordinada, continua y gradual: verdadero camino hacia la libertad y la grandeza de los
de modo tal que nunca es una simple masa de célular sino, argentinno. (Ver texto completo en www.bioética.com.ar).
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 145
humana. De nada sirve que la ley diga que no deben ser abortivos, pues luego
cambian la definición de embarazo (iniciándolo con la anidación) y así productos
con indudable efecto antiimplatatorio (como el D.I.U., las píldoras postcoitales, la
anticoncepción de emergencia, y muchas píldoras de última generación) son admi-
tidos. Más aún cuando la reglamentación de la ley (Decreto 1282/03, art. 6) admite
cualquier método reconocido por la ANMAT, y el Decreto 150/92 autoriza
automáticamente a través de la ANMAT la venta en el país de cualquier fármaco
autorizado para ser vendido en Estados Unidos o Europa, donde el aborto es legal y
por ello tales productos son aprobados sin objeciones. Algunas acciones judiciales
contra ellos han sido rechazadas por los tribunales considerando que no son
«abortivos» pues actúan antes de la implantación, lo que es una mera confusión
terminológica: lo importante no es si son o no «abortivos» –cosa que depende de la
definición de aborto que se utilice, sino si ponen o no en riesgo la vida de un sujeto
humano.
En rigor de verdad, esta ley y estas políticas deberían ser declaradas, además de
contrarias al derecho natural, inconstitucionales por vulnerar el derecho a la patria
potestad y a la decisión de los padres en materia de planificación de la familia, y el
derecho a la vida y a la salud de madres y niños.
En los hechos la planificación natural de la familia, única manera inocua, res-
ponsable y coherente con el bien de los esposos y de los hijos de ejercer la paterni-
dad responsable, resulta siempre mal informada y no recomendada.
Actividad de Aprendizaje
BIOÉTICA
Y LA VIDA
ARTIFICIALEMENTE
PRODUCIDA
148 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 149
«T
ambién las distintas técnicas de reproducción artificial, que pare-
cerían puestas al servicio de la vida y que son practicadas no
pocas veces con esta intención, en realidad, dan pie a nuevos
atentados contra la vida. Más allá del hecho de que son mortalmente inacep-
tables desde el momento en que separan la procreación del contexto
integralmente humano del acto conyugal, estas técnicas registran altos por-
centajes de fracaso. Este afecta, no tanto a la fecundación como al desarro-
llo posterior del embrión, expuesto al riesgo de muerte, por lo general en
brevísimo tiempo.»I
«La clonación es en el método la forma más despótica y, a la vez, en el
fin, la forma más esclavizante de manipulación genética; su objetivo no es
una modificación arbitraria de la sustancia hereditaria, sino precisamente su
arbitraria fijación en oposición a la estrategia dominante en la naturaleza.»II
Estas dos citas muestran cómo el hombre cuando asume el papel de
homo-faber, pretendiendo fabricar seres humanos pierde su referencia al Crea-
dor y se transforma en una amenaza para la vida humana. Ésta pierde su
valor y es reducida a simple material biológico del que se puede disponer
libremente.
En la presente unidad, estudiaremos las técnicas de reproducción artificial
desde los nuevos desafíos éticos que ellas plantean. Abordaremos el problema
de la pareja estéril, la intervención médica y las nuevas tecnologías de la repro-
ducción humana. Analizaremos la definición y su intrínseca inmoralidad.
Analizaremos luego, el valor de la procreación humana y el trato que
merece el embrión humano.
Por último evaluaremos los aspectos bioéticos de la reproducción artificial
y el Magisterio Católico especialmente la Instrucción Donum Vitae. También
abordaremos los aspectos jurídicos correspondientes.
Finaliza la unidad, el análisis de clonación, su definición, su inmoralidad
y el Magisterio de la Iglesia acerca de este tema.
I
Evangelium Vitae N° 14.
II
Hans, Jonas. «Cloniamo un uomo».
150 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos específicos:
1) Conocer las técnicas de reproducción artificial y su maldad intrínseca.
2) Conocer los riesgos que para la madre y el niño revisten estas técnicas.
3) Clasificar estas técnicas y evaluar las complicaciones de las mismas.
4) Analizar el valor de la procreación humana y la dignidad del embrión humano.
5) Conocer la ilicitud de las técnicas a la luz del Magisterio de la Iglesia y los
principios de la Bioética personalista.
6) Conocer los mecanismos de acción, su clasificación y los efectos indeseables
de las técnicas de reproducción.
7) Reconocer la inmoralidad de la clonación.
8) Conocer los datos del Magisterio al respecto.
9) Estudiar los aspectos jurídicos relativos a las técnicas de reproducción artificial.
Temario:
Técnicas de Reproducción Artificial
• Definición.
• El problema de la pareja estéril.
• Técnicas y su clasificación.
• Complicaciones y riesgos.
• El valor de la procreación humana.
• Aspectos bioéticos.
• Magisterio Católico y Reproducción artificial.
• Aspectos jurídicos .
La Clonación
• Definición.
• Técnicas.
• Inmoralidad de la clonación.
• Consideraciones éticas.
• El Magisterio de la Iglesia.
• Investigación con células estaminales.
Mapa de contenidos
A continuación le mostramos una vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 151
Definición
1
Juan Pablo II. Evangelium Vitae N° 14
2
Academia Pontificia para la vida. Comunicado final « La dignidad de la procreación humana y las
tecnologías reproductivas» Roma. 17/ III / 2004
152 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
3
Pío XII. Discurso « Vous nous avez exprime»al II Congreso Mundial de fertilidad y esterilidad . 19/ V/
1956
4
Juan Pablo II. Evangelium vitae. Nº 44
154 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
La esterilidad es siempre una dura prueba, pero más allá de someterse al diag-
nóstico y tratamiento precisos, el matrimonio debe descubrir que la fecundidad
espiritual se da en un servicio a la vida y a la persona humana a través de la
adopción y el apoyo familiar5.
En el tratamiento y diagnóstico de la esterilidad, es siempre útil estudiar a la
pareja, en una visión integral del problema, que contemple los aspectos físicos (obs-
trucción de las trompas de Falopio por ejemplo) los aspectos psicológicos, éticos y
espirituales de la pareja.
Ante una pareja estéril el diagnóstico debe ser encarado desde una
perspectiva interdisciplinaria: ginecólogos, andrólogos, endocrinólogos, psicó-
logos y bioeticistas, que le propongan a la pareja un iter diagnóstico y terapéutico.
Es imprescindible identificar las dudas, obtener siempre el consentimiento infor-
mando de la misma y no olvidar que la pareja está frustrada y que la esterilidad les
genera sentimientos de culpa, sobre todo en el varón.
La investigación diagnóstica y terapéutica debe ser completa y graduada. Se
debe dar información precisa, puesto que la ignorancia es un factor a remover,
siempre teniendo en cuenta que la información debe tener cuidado de las personas
involucradas6.
El momento de la consulta en esterilidad es un momento de encuentro, de escu-
cha, de búsqueda de una solución ética. En este tema como en tantos otros temas
médicos, lo más importante es la prevención, sobre todo en aquellas causas que
tienen que ver con la modificación de los comportamientos individuales y colecti-
vos.
Para los esposos que desean concebir un hijo, la esterilidad puede constituir un
motivo real de sufrimiento. No puede dudarse que tal deseo sea, totalmente legíti-
mo. Sin embargo, conviene que el comprensible y lícito «deseo de un hijo» no se
transforme en un pretendido «derecho al hijo», incluso «a toda costa». Nadie puede
pretender un derecho a la existencia de otro hombre, pues de ser así, este último
quedaría situado en un plano de inferioridad axiológica con respecto al que invoca
el derecho. El hijo no puede entenderse como un «objeto de deseo» que ha de
conseguirse a toda costa, sino como un regalo precioso que llegue cuando llegue ha
de acogerse con amor.7
5
Donum vitae . Parte II Nº8
6
Di Pietro, M.L. Consejo a parejas estériles. Videoconferencia., UCA. Instituto de Bioética. 15/ 7 /03.
7
APV. « La dignidad de la procreación humana y las tecnologías reproductivas»
8
Donum vitae. Parte II Nº6
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 155
Clasificación10
Homologas: se utilizan los gametos de la propia pareja.
Heterologas: los gametos proceden de un donador diverso a los esposos
(semen, óvulos, útero)
Intracorporeas: Se realiza la concepción dentro del cuerpo de la mujer
1. Inseminación artificial
2. Transferencia intratubaria de gametos. GIFT
3. Transferencia de gametos en la parte inferior de las trompas. LTOT
Extracorporeas: La concepción se realiza fuera del cuerpo de la
mujer.
1. Micromanipulaciones
2. Fecundación in Vitro extracorpórea. FIVET
3. Inyección intracitoplásmatica de un espermatozoide. ICSI
Técnicas de baja complejidad
1. Inducción de la ovulación .
2. Inseminación Artificial
Técnicas de alta complejidad
1. FIVET
2. GIFT
3. ICSI
Se describen a continuación algunas de las técnicas de reproducción asistida:
Inducción de la ovulación : Se administran medicamentos ( Clomifeno, FSH;
hMG, HcG), en mujeres que no ovulan, y en las que ovulan para aumentar las
chances de las técnicas de reproducción artificial.
9
APV. Op. Cit.
10
Di Pietro , M. L. Sgreccia, E. Bioética ed Educazione. Editrice La Scuola. Brescia 1997
156 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
11
Di Pietro , M. L. Cual es el riesgo de la Fecundación artificial. Conferencia dictada en la Jornada por
la vida.UCA. Bs. As. 23/ IX/ 1998.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 159
creen que estos hallazgos podrían explicarse por las complicaciones que surgen, con
frecuencia, cuando dos o más embriones utilizados en la FIV comparten la misma
matriz, más que por las técnicas de FIV en sí mismas.
Cada ser humano es, desde su concepción, una unidad de cuerpo y alma,
posee en sí mismo el principio vital que lo llevará a desarrollar todas sus
potencialidades, no sólo biológicas, sino también antropológicas.
15
Donum vitae II A. 1
16
Pío XII. Op. Cit.
162 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
17
ZENIT. Org. Edición en español. Locuras in Vitro . 21 febrero 2004
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 163
18
E. V. N° 14
164 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Actividad de Aprendizaje:
Lea atentamente las noticias publicadas en CLARÍN en las fechas: 18/ II/
1998; 15/ XII/1997 y 7/ V/ 2001, sobre reproducción artificial que le adjunta-
mos en el Ápendice de «Textos Complementarios» pág 228, 229 y 230. ¿Qué
objeciones éticas suponen?.
Síntesis:
Llamamos reproducción artificial a los diversos procedimientos técnicos
encaminados a lograr la concepción de un ser humano por una vía diversa de la
unión sexual del varón con la mujer.
El porcentaje de éxitos (embarazos conseguidos) tras la fecundación in Vitro
o la ICSI, sigue siendo bajo, oscila alrededor del 25 %.
Esterilidad: como la incapacidad de concebir. Primaria o secundaria
Infertilidad: la incapacidad de la mujer de llevar a termino un embarazo.
CLASIFICACIÓN
HOMOLOGAS: se utilizan los gametos de la propia pareja.
HETEROLOGAS: los gametos proceden de un donador diverso a los esposos
(semen, óvulos, útero)
INTRACORPOREAS:
1. Inseminación artificial
2. Transferencia intratubaria de gametos. GIFT
3. Transferencia de gametos en la parte inferior de las trompas. LTOT
EXTRACORPOREAS:
1. Micromanipulaciones
2. Fecundación in Vitro extracorpórea. FIVET
3. Inyección intracitoplásmatica de un espermatozoide. ICSI
Si la intervención médica sustituye el acto conyugal es ilícita. La técnica debe
ayudar a que el acto conyugal cumpla su cometido.
Las complicaciones de las técnicas : son embarazos de alto riesgo, embara-
zos múltiples. Alteraciones cromosómicas y malformaciones en el embrión.
Sme. De hiperestimulación. Lesiones en las vías genitales al introducir los
gametos. Mayor incidencia de Prematurez y de eclampsia.
La procreación humana adecuadamente querida y elegida debe tener origen
dentro del matrimonio y ser fruto del acto conyugal.
Respeto por la dignidad del embrión, implica no destruirlos, no crioconservarlos;
No crear embriones supernumerarios.
Favorece el aborto eugenésico. Solo viven los mas «aptos».
Violación del amor conyugal, cosifica el acto conyugal. Alteración del con-
cepto de familia. Incestos
Negación de la propia identidad.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 165
El derecho natural exige que todo ser humano sea respetado como un fin en si
mismo, no reducido a un medio, un objeto, o un instrumento en interés ajeno. Y ello
incluso en la procreación. Además de la valoración moral que pueda recibir el fin,
las circunstancias o el modo en que se decide procrear, esta decisión puede encerrar
injusticias si priva a algunas personas de aquello que les corresponde. En concreto,
si ataca su dignidad, expone a graves peligros su vida, su integridad física, su digni-
dad o su pertenencia familiar.
En este contexto, las prácticas que sustituyen el acto de amor de los padres en
la procreación, configuran verdaderas injusticias, vulnerando algunos derechos fun-
damentales.
Sin embargo, pocas legislaciones se han atrevido a asumir posiciones del todo
coherentes con el respeto de la vida concebida, y muchas de ellas hacen concesiones.
En este marco, podemos identificar tres grandes grupos:
a) Legislaciones más protectoras del embrión
En estos casos, como ocurre en Alemania y en Austria, la legislación autoriza la
fecundación artificial intrauterina y extrauterina, pero con algunas limitaciones:
a) restringe la cantidad de óvulos que se pueden fecundar –habitualmente no
más de tres-, y obliga a transferirlos todos al útero materno;
b) no autoriza la crioconservación de embriones;
c) solo permite el acceso a matrimonios, o al menos parejas con varios años de
convivencia;
d) prohíbe, la selección, el descarte de embriones y la experimentación con ellos;
e) prohíbe toda forma de clonación o manipulación genética.
Aunque la imposición de tales límites es digna de encomio, tengamos presente
que no eliminan los riesgos para el embrión que tiene la misma técnica (de los tres
transferidos se espera que varios mueran), ni son capaces de evitar los abusos de los
que pueden ser víctimas los embriones cuando están a merced de las clínicas. No se
diga que también mueren y se enferman embriones en la fecundación natural, pues
en estos casos la muerte es imputable a la naturaleza y no a la técnica implementada
por el ser humano como en la fecundación in vitro.
166 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
19
La redacción es ambigua, pues habla solo de «experimentos», y dice relacionados con seres
humanos, cuando debió decir «clonación de seres humanos», atento que clonar tejido humano
como la piel no constituye algo ilícito.
20
Cfr. Juzgado de Primera Instancia en lo Civil Nº 56, 28/4/95, R.R.D. s/medidas precautorias,
publicada en El Derechmplar del 13/7/95.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 167
Actividad de Aprendizaje:
6.2 Clonación
Autor: Eduardo Paoletti
2. Técnica empleada
Es un procedimiento técnico mediante el cual se obtiene un nuevo individuo a
partir de una célula somática (del cuerpo = soma) extraída de otro individuo ya
existente; con lo que ambos tendrán idéntica carga genética.
Consiste en tomar una célula de una persona, extraerle el núcleo, el cual contie-
ne su genoma y después introducirlo en un óvulo de una donante al cual se ha
privado previamente de su núcleo.
Un complejo procedimiento de activación por medio de descargas eléctricas y
muy delicados detalles de pH, temperatura y otros, llevan al óvulo a aceptar el
nuevo núcleo. La célula resultante de la primera etapa de un clon es un cigoto.
Este cigoto luego es ubicado en el útero de una mujer y comienza así un embarazo.
No se contempla que, al fabricarse un ser humano, se le ha hecho perder a este
el derecho a nacer de un acto de amor de sus padres.
La Iglesia así defiende al embrión humano que es un individuo, una vida huma-
na, que se desarrolla como organismo autónomo hacia su desarrollo pleno en un
feto humano.
Por consiguiente, experimentar sobre él es un grave desorden moral. Esto ya
se ha visto en fecundación asistida.
4. Consideraciones Éticas
Ante la pregunta ¿quién soy yo? al clónico se le ha quitado la humana
posibilidad de ir descubriendo su propia persona, en el misterio que implica el poseer
una carga genética que nadie conoce, que podemos inferir de nuestros padres aun-
que no los conozcamos, la ausencia del secreto anula la posibilidad de un creci-
miento verdaderamente libre y personal.
El principal problema de esto es lo que se puede inferir luego de Dolly, la idea es
la creación de nuevos individuos completos e idénticos al original. En ganadería esto
puede ser un filón riquísimo y lucrativo, aunque habría que considerar el relativo
éxito de la fecundación asistida en la ganadería donde se requieren vacas jóvenes y
en primera preñez.
Otra consecuencia es la instrumentación radical de la mujer, reducida solo a
las funciones biológicas de dar óvulos y prestar úteros, hasta que se inventen úteros
artificiales, por lo menos.
León Kass (Citado por Hans Jonas en Cuaderno de bioética 1997/1
pag.). 693) ha confeccionado una lista que él llama de lavandería con posibles
aplicaciones de la clonación y que él mismo dice crece día a día.
1) Réplica de individuos de gran genio o gran belleza, para mejorar la especie o
hacer la vida más agradable
2) Réplica de sanos para evitar el riesgo de enfermedades hereditarias contenido
en la lotería de la recombinación sexual.
3) Facilitamiento de grandes series de sujetos de la misma herencia para estu-
dios científicos sobre la importancia relativa de lo innato y el entorno en
diversos aspectos de actividad humana.
4) Proporcionar un hijo a un matrimonio estéril.
5) Proporcionar un hijo a alguien con un genotipo de elección propia: de un
famoso admirado, de un fallecido querido, del cónyuge o de sí mismo.
6) Control sexual de los futuros hijos: el sexo de un clon es el mismo que el de la
persona donante del núcleo.
7) Producción de sujetos idénticos para utilizaciones especiales en la guerra y la
paz (espionaje no excluido).
8) Producción de copias embrionales de cada persona, congelación hasta que
sea necesaria como reserva de órganos para transplante a su gemelo de
idéntica herencia.
170 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
9) Batir a los rusos y a los chinos: no dejar que se produzcan lagunas en las
clonaciones. El autor que las cita agrega: 10) Curiosidad ... vamos a ver que
sale. Y aclara la lista es menos divertida de lo que parece y agrega: Ningún
deseo es tan perverso (autorréplica) o tan cínicamente utilitario (equipos de
trabajo homogéneos) o tan científico - fanático (sujetos de investigación ho-
mogéneos) como para no encontrar entre los hijos de Adán y Eva a nadie
dispuesto a realizarlo».
No sabemos si el proceso sería viable en otras especies, incluida la humana. Ni
que pasará con los fracasos totales o parciales, qué monstruos se podrían crear, no
podemos imaginar los sufrimientos de estos seres fallidos, sin padres, solos sin fami-
lias. Esto no es una fantasía ocurre en las clonaciones de ranas.
¿Por qué no va a ocurrir con clonaciones humanas?
¿Quién se responsabiliza de los desechos humanos producidos por errores del
camino?
Actividad de Aprendizaje
BIOÉTICA
Y EL FINAL
DE LA VIDA
174 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 175
E
n el otro extremo de la existencia, el hombre se encuentra ante el
misterio de la muerte. Hoy, debido a los progresos de la medicina y
en un contexto cultural cerrado a la trascendencia, la experiencia de
la muerte se presenta con algunas características nuevas. en efecto, cuando
prevalece la tendencia a apreciar la vida sólo en la medida en que da placer
y bienestar, el sufrimiento aparece como una amenaza insoportable, de la
que es preciso librarse a toda costa. La muerte, considerada «absurda» cuan-
do interrumpe por sorpresa una vida todavía abierta a un futuro rico de
posibles experiencias interesantes, se convierte, por el contrario, en una «libe-
ración reivindicada» cuando se considera que la existencia carece ya de sen-
tido por estar sumergida en el dolor e inexorablemente condenada a un sufri-
miento posterior más agudo.
Mediante sistemas y aparatos extremadamente sofisticados, la ciencia y
la práctica médica son hoy capaces no sólo de resolver casos antes sin solu-
ción y de mitigar o eliminar el dolor, sino también de sostener y prolongar la
vida incluso en situaciones de extrema debilidad, de reanimar artificialmente
a personas que perdieron de modo repentino sus funciones biológicas ele-
mentales, de intervenir con objeto de disponer, en cualquier momento, de
órganos para ser transplantados.
En semejante contexto, es cada vez más fuerte la tentación de la eutana-
sia, esto es, de dominar la muerte, procurándola de modo anticipado y po-
niendo así fin «dulcemente» a la propia vida o a la de otros.I
Con este cita del Santo Padre, queremos reflejar la dramática realidad
con la cual la cultura de la muerte amenaza el final de la vida humana,
despreciándola, instrumentándola o matándola cuando ella es carente de
«calidad» y «vitalidad».
En la presente unidad, estudiaremos el tema de la eutanasia, su defini-
ción a la luz de la Evangelium Vitae, su inmoralidad y su clasificación.
Abordaremos luego las clasificaciones de los medios terapéuticos, relacio-
nándolo con el Magisterio de la Iglesia.
Luego, analizaremos los conceptos de ensañamiento terapéutico y suici-
dio asistido. Profundizaremos un modo ético de acercarse al final de la vida:
cuidados paliativos.
Por último, estudiaremos los aspectos jurídicos relacionados al final de la
vida humana.
I
Evangelium Vitae N° 64.
176 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos específicos:
1) Analizar el concepto de eutanasia y su maldad intrínseca.
2) Identificar y clasificar los métodos terapéuticos a fin de valorar su
aplicación correcta.
3) Conocer las definiciones de ensañamiento terapéutico, suicidio asistido
y cuidados paliativos, a la luz el Magisterio de la Iglesia.
4) Reconocer la ilicitud de la eutanasia, fundamentado desde los principios
de la Bioética personalista.
5) Estudiar los aspectos jurídicos relativos al final de la vida humana.
Temario:
El final de la vida humana: eutanasia
• Definición
• Clasificación
• Medios terapéuticos
Ensañamiento terapéutico
Suicidio asistido
Cuidados paliativos
Aspectos jurídicos
• El derecho internacional frente a la eutanasia y el suicidio asistido
• El derecho argentino y el final de la vida.
Mapa de contenidos
A continuación le mostramos una vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 177
7.1 Eutanasia
Autor Dr. Eduardo Paoletti
Introducción
La muerte de algún ser querido, es algo que nos enfrenta con la realidad de la
finitud de la persona y principalmente con nuestra propia finitud. Esto es difícilmen-
te soportable, sobre todo el primer «encuentro» con esa idea. Luego aparecen
mecanismos de corrección y sobre todo la concientización de la posibilidad de
trascendencia y de otra vida futura al lado de Dios. La idea de una vida después de
nuestra muerte y de la existencia del Cielo nos lleva al consuelo y a darle sentido a
la vida en este mundo.
El miedo a la muerte es universal y todos los filósofos han intentado explicarlo,
explicar la finalidad de la vida, el sentido de la vida, han pensado o intentado
pensar sobre que nos depara la muerte, pero nadie, si no es por la Fe, puede hallar
una respuesta. Como decía Montaigne: «más que la muerte me aterra el morir»
La Iglesia nos enseña que la vida del hombre es un don de Dios del que él, es
simple depositario y no propietario. Por lo tanto el hombre no tiene derecho ni a
matar ni a matarse, ya que siempre se atenta contra los derechos soberanos de
Dios. Por su parte, el suicida priva a la sociedad de uno de sus miembros, matando
o matándose.
La Iglesia sigue a Santo Tomás que nos dice: «...el que alguien se dé muerte es
contrario a la inclinación natural y a la caridad por la que uno debe amarse a sí
mismo; de ahí que el suicidarse sea siempre pecado mortal, por ir contra la ley
natural y contra la caridad» y «porque cada parte, en cuanto tal, es algo del todo;
y un hombre cualquiera es parte de la comunidad y, por lo tanto, todo lo que él es
pertenece a la sociedad; luego el que se suicida hace injuria a la comunidad.»1
Definición
San Agustín escribe con sorprendente actualidad:
«No es lícito matar a otro, aunque este se lo pida y lo quiera y no pueda
ya vivir... para librar con un golpe, el alma de aquellos dolores, que lucha-
ba con las ligaduras del cuerpo y quería desasirse»(Epístola 204,5).
El doctor Francis Bacon (1561-1626) había creado el término Eutanasia, to-
mando del griego el prefijo «eu» (bueno, fácil, correcto) y el sufijo «thanatos»
(muerte, deceso) para significar la buena muerte provocada por misericordia o pie-
dad, una buena muerte sin dolores ni sufrimientos. Esta contraponía a la mala
muerte o cacotanasia (caco significa malo). La llegada del cristianismo cambió las
costumbres, en el judaísmo también se respetaba la vida y no se permitía el suicidio
ni el asesinato.
Las influencias racionalistas y materialistas de Hegel, Engels, Marx, Nietzsche,
Garófalo y otros, han influido en la medicina, la filosofía, la ética médica y llevado
1
Basso, D. Nacer y Morir con dignidad.Bioética.3ª. edición ampliada. Edit. Depalma.Bs. As. 1993.
178 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
a muchos a pensar que «hay vidas sin valor o que no merecen ser vividas.» Se
considera que la sociedad no quiere soportar cargas inútiles, entonces el que moles-
ta o no produce debe desaparecer, ¿qué mejor solución que la eutanasia?
Estamos hablando de eutanasia, pero aún no la hemos definido. ¡Que
mejor que la definición del párrafo 65 de Evangelium Vitae? Allí leemos:
«Para un correcto juicio moral sobre la eutanasia, es necesario ante
todo definirla con claridad».
Por eutanasia en sentido verdadero y propio se debe entender una acción u
omisión que por su naturaleza y en la intención causa la muerte, con el
fin de eliminar cualquier dolor, «La eutanasia se sitúa, pues, en el nivel de
las intenciones o de los métodos usados.» De ella debe distinguirse la decisión de
renunciar al llamado «ensañamiento terapéutico», o sea, ciertas intervenciones
médicas ya no adecuadas a la situación real del enfermo, por ser desproporcionadas
a los resultados que se podrían esperar o, bien, por ser demasiado gravosas para
él o su familia......la renuncia a medios extraordinarios o desproporcionados no
equivale al suicidio o a la eutanasia; expresa mas bien la aceptación de la
condición humana ante la muerte2.
Clasificación de la Eutanasia 3
2
Juan Pablo II. Evangelium Vitae N° 65.
3
Extraído de «Valoración ética de la eutanasia» de Luis Aldo Ravaioli. Editorial SERVIAM 1993 pág. 49
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 179
2. MEDIOS:
3. INTENCIÓN:
4. VOLUNTARIEDAD:
4
Evangelium Vitae N°65.
180 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Medios Terapéuticos
La medicina en su crecimiento científico ha creado métodos, equipos, ha au-
mentado los conocimientos y las posibilidades terapéuticas, a extremos difícilmente
imaginables hace 50 años. Sin embargo la ciencia aún permanece perpleja ante el
misterio del sufrimiento y la muerte. El sufrimiento constituye una experiencia vital
que compromete todo el ser del hombre y es connatural a él y permanece como un
misterio intangible5.El sufrimiento interpela a los agentes sanitarios a dar una res-
puesta compasiva y comprensiva al mismo.
Vale la pena recordar las palabras del Prof. John Wilke de la Universidad de
Cincinatti: «Si no le pueden aliviar el dolor, no pida usted la eutanasia,
cambie de médico, porque el suyo es incompetente.»
Pero cuando se llega al límite de la vida, cuando queda muy poco por hacer y
sabemos del inevitable final, se plantean al médico una serie muy grande de proble-
mas, algunos de difícil solución.
¿Por otra parte no tenemos todos, el derecho de pedir morir con dignidad? ¿O
tener una muerte humana? El problema tiene planteos semánticos, etimológicos y
terminológicos. En la práctica médica, los médicos recibimos a diario pedidos de
familiares para que su pariente no sufra, muera bien y otros similares.
Cuando contamos con el especialista en dolor la tarea es simple, pero si no, el
problema se agudiza. Conviene recordar las recomendaciones de la Carta a los
agentes sanitarios.
«La prudencia humana y cristiana sugiere para la mayoría de los
enfermos el uso de medicamentos apropiados para aliviar o suprimir
el dolor, aunque de éstos puedan derivarse entorpecimiento o me-
nor lucidez mental. Respecto a aquellos que no están en capacidad
de expresarse se podrá presumir razonablemente que desearían to-
mar tales calmantes y, por consiguiente, suministrárselos siguiendo
las indicaciones del médico».
«Está permitido utilizar con moderación narcóticos que calma-
rían el dolor, pero también conducirían a una muerte más rápida».6
5
Juan Pablo II Carta Apostólica Salvifici Doloris, sobre el sentido cristiano del sufrimiento humano.
(11/2/1984. N°4)
6
Pontificio Consejo para la Pastoral de los Agentes de la salud. Carta a los agentes de la salud. 1995. N°122.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 181
S.S. Pío XII7, prioriza la posibilidad que debe tener el enfermo terminal de orde-
nar su situación espiritual y la reconciliación con el Señor. Había clasificado los
Medios terapéuticos en ordinarios y extraordinarios, manifestando la ilícitud de sus-
pender los ordinarios, mientras que es lícito suspender los extraordinarios, los avan-
ces de la medicina hicierón que esta clasificación perdiera vigencia y se reemplazara
por la de medios proporciondos y desproporcionados.
Aquí debemos considerar el tratamiento del paciente por medios proporciona-
dos o desproporcionados. Se debe valorar el tipo de terapia, el grado de dificultad y
riesgo que comporta, los gastos necesarios y las posibilidades de aplicación con el
resultado que se puede esperar de ello, teniendo en cuenta las condiciones del enfer-
mo y su familia8.
a) Medios Proporcionados:
Los medios proporcionados, ordinarios o normales, son los que en cualquier
momento, cualquier situación de gravedad, pronóstico o situación biológica, no se
pueden suspender dado que su ausencia llevaría irremediablemente a la muerte o al
sufrimiento. Estos son prevenir y cuidar escaras, calmar dolores, hidratar al enfer-
mo, sedar al paciente y prevenir su depresión, entre otros tantos. La atención y
contención familiar también forma parte de este tratamiento. En conjunto es lo que
se llama hoy cuidados paliativos.
El abandono de esta actitud terapéutica, es una actitud desaprensiva, facilista y
lleva al concepto de ortotanasia.
b) Medios Desproporcionados:
Estos medios son más difíciles de definir, ya que métodos normales en otro
entorno, pueden, en ciertas situaciones ser considerados métodos desproporcionados.
Pero esto está definido por el estado clínico y de gravedad del paciente, el costo del
tratamiento y hasta las posibilidades económicas de la familia, en los que esos
tratamientos pueden ser demasiado onerosos e imposibles de administrar.
Hoy en día entre nosotros, a raíz de la crisis económica se ve frecuentemente
esta situación sobre todo por la imposibilidad de las obras sociales de aportar medi-
camentos e implementos solicitados.
Recordemos palabras de Pío XII, sobre que: «el cristiano no está obligado a
someterse a tratamientos extraordinarios para retrasar el desenlace fatal
de una enfermedad» el Papa aquí definía los límites de la interpretación absolutis-
ta del carácter sagrado de la vida. Para preservar la dignidad humana es necesario
reconocer que el hombre es mortal a pesar de la tecnociencia9.
Estos medios por lo tanto pueden ser empleados sobre todo cuando las condi-
ciones del paciente son alentadoras de una recuperación. Desde ya estos métodos
dejan así de ser desproporcionados, para ser proporcionados. Debe considerarse
entonces, las condiciones clínicas del paciente, sus posibilidades de recuperación,
7
Obiglio,H. ; López Medrano, C.; Pierin, L. Ray, C. Pío XII y las ciencias médicas. Editorial Guadalupe.
Bs. As. 1961.
8
Sagrada Congregación para la doctrina de la fe. Declaración Iura et bona sobre la eutanasia.5/5/
1980. N°27
9
Baudouin, J.; Blondeau, D. La ética ante la muerte y el derecho a morir. Edit. Herder. Barcelona. 1995.
182 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
luego veríamos la respuesta al tratamiento y las condiciones del paciente con las
salvedades que se especifican a continuación:
Es también lícito interrumpir la aplicación de tales medios,
cuando los resultados defrauden las esperanzas puestas en
ellos. Es siempre lícito contentarse con los medios normales
que la medicina puede ofrecer. Ante la inminencia de una
muerte inevitable, es lícito en conciencia tomar la decisión de
renunciar a unos tratamientos que procurarían únicamente una
prolongación precaria y penosa de la existencia.10
10
Declaración Iura et bona. N° 28.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 183
11
E.V. N° 66.
12
E.V. N° 66.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 185
Conclusiones:
Es probable, que algunas muertes sean de personas que ya han llegado a su final
y en medio de grandes dolores y sufrimientos. Pero, siempre el hombre termina
errando y entonces,
¿Quién repara el daño irreversible de una muerte prematura e injusta?
¿Quién devuelve a la vida a una persona que podría haberse recuperado?
No pasa solo por el hecho de que el hombre no puede disponer de la vida de
nadie, ni de sí mismo, sino que dejamos una puerta abierta a delitos contra la vida
que pueden tener origen en cuestiones raciales, sociales, políticas y quién sabe cuán-
tas más.
Desde la bioética personalista el final de la vida es visto como un modo
privilegiado de servir al hombre , procurando su bien integral, no buscando su muer-
te sino que viva. Por el principio de defensa de la vida física de todo individuo,
la eutanasia, el encarnizamiento terapéutico y el suicidio asistido , son siem-
pre y bajo toda circunstancia ilícitos.
Así mismo por el principio terapéutico los medios desproporcionados y
el encarnizamiento terapéutico se constituyen en ilícitos, pues no curan nada solo
prolongan la agonía del paciente.
186 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
El final de la vida, merece nuestro más absoluto respeto, por aquel hombre o
mujer, niña o niño, que vemos llegar a su fin. No somos dueños de imponerle que
sufran, pero si así lo desearan por querer compartir con Cristo sus dolores salvíficos,
pudiese permitírsenos escatimar los calmantes.
Del mismo modo es obligatorio para el médico preguntar o hacer preguntar al
paciente si ha cumplido con sus deberes religiosos o familiares, si se ha reconciliado
con Dios o hecho testamento.
Si el analgésico necesario hace perder la conciencia y no puede ser reemplazado
por otro tan efectivo pero sin pérdida de la conciencia y se han tomado las precau-
ciones anteriormente consideradas, es lícito su uso.
Pero hoy es difícil no encontrar sustitutos que no hagan perder la conciencia, es
deber del médico llamar a quien esté capacitado para la analgesia.
Pero el profesional de salud no debe olvidar nunca el axioma de la
medicina que dice «curar si es posible, pero prestar asistencia siempre».13
Actividad de Aprendizaje
Juan Pablo II . Discurso al Congreso sobre «Tratamientos de mantenimiento vital y estado vegetativo»,
13
Introducción
Es importante tener presente la cuestión acerca de la relación existente entre el
individuo y la comunidad, porque no es indiferente para nuestra temática. Existen
tres concepciones fundamentales sobre el orden social, el colectivismo, el
individualismo, y el personalismo solidarista, y cada una de ellas tiene su
perspectiva sobre el problema.
¿Es el individuo humano nada más que parte de un todo social que puede
disponer de él a discreción?
¿Es, por el contrario, el individuo y su libertad un absoluto al cual debe
subordinarse cualquier interés social?
¿Puede haber comportamientos injustos a aunque se cuente con el consenti-
miento del interesado?
¿Hasta dónde puede la autoridad pública imponer exigencias a sus miem-
bros?
¿Hay obligación de cuidar la propia vida y salud?
¿Es esa obligación coercible?
En este punto la doctrina tradicional, heredera del derecho natural, es
clara: la voluntad de la persona de querer morir, o el hecho de que sufra graves
patologías o se encuentre en una etapa terminal, no constituye justificante del delito
de homicidio.
Privar a una persona de su vida constituye una injusticia porque la persona
humana está dotada de una dignidad, un valor, que exige respeto incondicional, y
dañarla intencionalmente implica atacar directamente uno de los bienes humanos
fundamentales. No es su estado de salud, la cantidad de tiempo que le queda de
vida, ni su voluntad de vivir, lo que torna injusto el privarla de la vida.
Por eso el deber de respetarla subsiste aunque solicite voluntariamente que se
termine con ella, aunque se encuentre enferma, o con escasas expectativas.
Al mismo tiempo, la doctrina tradicional reconoce que la libertad de decisión de
la persona tiene límites, dado que hay bienes de los que no puede disponer libre-
mente, como la vida humana.
Desde hace unos años, sin embargo, crecen ideas que atacan directamente
esta cosmovisión, y que se estructuran sobre los siguientes presupuestos:
a) Cada persona es «autónoma», es decir, constituye su propia regla moral,
incluso sobre la vida humana. Las decisiones de la persona, en la medida en
que no afecten de un modo directo o grave derechos de los demás, deben ser
respetadas, apoyadas y sostenidas, incluso cuando significan la muerte.
b) La vida de la persona no posee un valor en sí mismo inviolable, sino
que depende de sus condiciones y circunstancias.
188 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Por un lado, de circunstancias individuales, dado que puede ocurrir que una
vida humana no posea la «calidad» suficiente como para merecer su incondicional
respeto.
Por otro lado, puede ocurrir que razones de utilidad o de interés social (como la
necesidad de disponer de los recursos de salud que hoy se destinan a un enfermo)
hagan razonable adelantar una muerte que se ve como inminente.
Estas ideas han llevado a la despenalización de la eutanasia o la ayuda al
suicidio en determinadas condiciones, y al respeto incondicional a las decisiones del
paciente en relación con los tratamientos médicos.
Tales reformas no resultan extrañas si tenemos en cuenta el contexto
cultural en que se debate el mundo contemporáneo:
14
Estas informaciones han sido transcriptas del cable de la agencia Zenit, del 5 de diciembre del
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 191
15
Juzgado en lo Criminal y Correccional Nro. 3 del Dto. Judicial Mar del Plata, de la Pcia. de Buenos
Aires -fallo 43559 del 18/9/95.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 193
Actividad de Aprendizaje:
16
Cfr. Tale, Camilo, La eutanasia, comunicación al Congreso Nacional de Jóvenes, Córdoba, 1994.
15
Ollero Tassara, Andrés, No a la eutanasia «sin ninguna excepción», (Rosario, 2/9/96), La Capital,
2a. secc., pág. 1
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 195
Actividad de Aprendizaje:
BIOÉTICA
Y TRANSPLANTE
DE ÓRGANOS
198 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 199
«L
os transplantes son una gran conquista de la ciencia al servicio
del hombre y no son pocos los que en nuestros días sobreviven
gracias al transplante de un órgano. La técnica de los transplantes
es un instrumento cada vez mas apto para alcanzar la primera finalidad de la
medicina: el servicio a la vida humana. Por esto, en la Evangelium Vitae
recordé que, entre los gestos que contribuyen a alimentar una autentica cul-
tura de la vida «merece especial reconocimiento la donación de órganos,
realizada según criterios éticamente aceptables, para ofrecer una posibilidad
de curación e incluso de vida, a enfermos tal vez sin esperanzas».I
«Expreso mi esperanza de que la investigación científica y tecnológica,
gracias a la labor de tantas personas generosas y cualificadas, siga progre-
sando».
«Espero que los líderes sociales, políticos y educativos renueven su com-
promiso de promover una auténtica cultura de generosidad y solidaridad. Es
preciso sembrar, en el corazón de todos, y especialmente en el de los jóvenes
un aprecio genuino y profundo de la necesidad del amor fraterno, una amor
que puede expresarse en la elección de donar sus propios órganos».II
El discurso del Santo Padre pone el tema de la presente unidad, el tras-
plante de los órganos, en la órbita del amor fraterno. Este tema que estudia-
remos en la presente unidad, que ha estado mal entendido y desprestigiado,
merecía la claridad del Magisterio Pontificio para otorgarle su justo lugar y
valorar su real dimensión.
Intentaremos entonces, demostrar la licitud de los trasplantes, afrontan-
do esta problemática desde el punto de vista científico, ético y jurídico.
En primer lugar, estudiaremos la definición, el diagnóstico y los criterios
de la muerte. Abordaremos luego, los aspectos éticos del trasplante funda-
mentados en los principios de la Bioética personalista.
Mencionaremos además, la valoración ética de los trasplantes heterólogos
ó xeno-trasplantes.
Por último, analizaremos los aspectos jurídicos relacionados con los tras-
plantes a la luz del derecho natural y positivo.
I
Evangelim Vitae 86.
II
Juan Pablo II, Discurso a la Sociedad de Trasplantes. Septiembre del 2000. ZENIT.org
200 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Objetivos específicos:
1) Analizar la definición y el diagnóstico de muerte.
2) Reconocer la licitud de los trasplantes, fundamentado desde los principios
de la Bioética personalista.
3) Valorar la importancia de los trasplantes como una expresión de amor
fraterno.
4) Conocer el Magisterio Pontificio en el tema.
5) Estudiar los aspectos jurídicos relativos a mutilación y trasplantes, siguien-
do el derecho positivo y el derecho natural.
Temario:
Definición y diagnóstico de muerte
• Criterios de muerte :
- devastación
- cardiocirculatorio
- neurológico
Aspectos éticos del trasplante
• Defensa de la vida, del donante y receptor
• Defensa de la identidad personal del receptor
• Consentimiento informado
• Principio de sociabilidad y subsidiariedad.
• Determinación del momento de la muerte.
• Trasplantes heterólogos ó xenotrasplantes.
Aspectos jurídicos
• Mutilación y derecho.
• Regulación legal de los trasplantes.
• Derecho natural y trasplantes
Ley de trasplante de órganos en la Argentina.
Mapa de contenidos
A continuación le mostramos una vinculación de contenidos:
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 201
Conviene recordar que existe una sola «muerte de la persona» que consiste
en la total desintegración de ese conjunto unitario e integrado que es la persona
misma, como consecuencia de la separación del alma de la del cuerpo1.
UCSC. Roma.
2
Juan Pablo II. Discurso al XVIII Congreso Internacional de la Sociedad de Transplantes. 3/9/200.
Roma. Zenit.org.
202 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
4y5
Juan Pablo II. Congregación para la Doctrina de la Fe, «Donum Vitae», N° 4
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 203
6y7
Discurso de S.S. Juan Pablo II. Sociedad de Trasplante, año 2000.
204 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Consentimiento Informando
Siempre que se lleve acabo una práctica médica de este tipo, se está obligado
a informar clara y completamente sobre los métodos de aplicación, los
riesgos y las consecuencias, a mediano y largo plazo, que encierra la donación y
recepción de un órgano, pra obtener la autorización del paciente para realizar la
práctica. Se debe ser sumamente cuidadoso al momento de dar tal información,
para que resulte exacta y bien comprendida por las personas involucradas.
Si el trasplante se realiza de un donante vivo, la obligación del consentimiento
informando también involucra al dador, y tienen que ver además con las conse-
cuencias sobre su propia salud.
Cuando el trasplante se realiza de un cadáver, y si bien es claro que ya no nos
encontramos frente a la persona, no se debe omitir la importancia que tiene para
los familiares la pérdida, y el vínculo de pertenencia afectiva que los une.
«… La «autenticidad» humana de un gesto tan decisivo exi-
ge que la persona sea debidamente informada sobre los pro-
cesos que implica, de forma que pueda expresar de modo
conciente y libre su consentimiento o su negativa. El consen-
timiento de los parientes tiene su validez ética cuando falta la
decisión del donante. Naturalmente, deberán dar un consen-
timiento análogo quienes reciben los órganos donados.»8
8
Discurso de S.S. Juan Pablo II. Sociedad de Trasplantes, año 2000.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 205
Actividad de Aprendizaje:
Nos toca ahora abordar los aspectos jurídicos de un tema muy interesante, el de
los trasplantes de órganos. La cuestión no es sencilla. Parece contravenir el criterio
general de que la privación de un órgano de un ser humano solo se justifica si es en
interés del mismo. En el caso del trasplante la ablación no se realiza en beneficio del
donante. Por esto es necesario analizar la cuestión no de manera aislada, sino en el
contexto de la problemática jurídica vinculada con la mutilación en general.
1. Mutilación y Derecho
A la persona humana le corresponde el respeto por su vida, salud e integridad
física, con independencia de su voluntad.
9
Entre tales decisiones judiciales mencionemos las que autorizaron ablaciones traspasando estos
límites: no siendo parientes pero con un vínculos afectivos profundos (Juzgado Civil y Comercial nº
13 de Rosario, 9/5/83, La Ley 1984-B-192); ex-cónyuges divorciados (Juzg. Crim. nº 3 Mar del
Plata, 6/6/95, El Derecho 163-371); la esposa del primo hermano del dador (Juzg. Federal nº 3,
1/2/95, La Ley 1996-B-226); medio hermanos de un mismo padre no reconocidos por éste
(Juzg. Crim. nº 3 Mar del Plata, 26/6/96, El Derecho 2/7/97). Incluso admitió la Corte Suprema de
Justicia la donación por parte de una persona que aún no había cumplido 18 años, si bien estaba
próxima a hacerlo (Saguir y Dib, en El Derecho 91-264). Sin embargo, la Cámara Nacional Civil, sala
II, 2/4/89 rechazó la autorización para trasplante entre concubinos.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 211
CONCLUSIONES
1
Grocholewski, Card. Z. La bioética y la Educación al Evangelio de la vida. Medicina e Morale.2004/
2:325-239.
2
Juan Pablo II Ex corde Ecclessia. N°7.
212 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
atenta contra la vida, incluso como dice el Santo Padre, cuando ella es más débil y
necesitada. Atentados contra la vida, atentados contra la persona, el hombre olvi-
dado de Dios y por ende olvidado de sí mismo y perdido.
Aspira la bioética, en primer lugar, a marcar la moralidad de aquellos actos
médicos biológicos que son técnicamente posibles, y nos dirá si estos hechos que la
ciencia nos presenta como «logros», son buenos o malos para la persona, si preser-
van su dignidad o atentan contra ella.
Intentará, además, humanizar la medicina y que se centre en buscar el bien de
la persona y favorezca la cultura de la vida.
Hemos querido mostrar, a lo largo del curso, aunque sin tocar ningún tema
específico respecto al ámbito de la ecología, que se debe respetar la naturaleza
creada y sostener que en ella existe un orden natural que no puede ser alterado ni
desconocido, del respeto por la naturaleza surge el deber y el derecho de los hombres
de cultivar y custodiar la creación.
La Bioética afirma la persona y su dignidad plena, constituida por su esencia
espiritual y su naturaleza racional, sostiene el valor de la corporeidad, el cuidado de
la salud como un bien a alcanzar, reconoce el derecho al acceso al cuidado de la
salud, valora la responsabilidad personal en la gestión de la propia salud.
Hemos definido la Bioética como: Área de investigación, que valiéndose
de una metodología interdisciplinaria, tiene por objeto el examen siste-
mático de la conducta humana en el campo de las ciencias de la vida y la
salud, en cuanto esta conducta examinada a la luz de valores y principios
morales3. Los valores y principios morales, en los cuales se basa este análisis es,
como hemos visto, la propia persona y su bien integral.
Aspira el modelo personalista de bioética, ontológicamente fundado, la preser-
vación de los derechos de la persona y la afirmación de los principios rectores que
iluminan la toma de decisiones. El primero de todo es el respeto por la inviolabilidad
de la vida humana desde su concepción hasta la muerte, luego hacerle el bien al
paciente, curarlo, mejorar su calidad de vida, con su consentimiento y sin avasallar
su realidad personal. Sigue el respeto por su libertad responsable. Por último se
rescata el bien común como la suma de los bienes de los bienes individuales, tratar
de que cada persona alcancen los cuidados necesarios respecto a su salud, y si está
imposibilitada de hacerlo es el Estado y la sociedad toda, quienes deberán ayudar
a lograrlo.
Queremos, con el modelo personalista ontológicamente fundado, ser una pro-
puesta de Bioética que se contrapone y supera a la Bioética de los principios
anglosajona, de base utilitarista y a todo liberalismo a ultranza. Tener claro los
principios rectores, nos permite ante cada hecho, definir su licitud. Así hemos deter-
minado a lo largo de este curso como lícitos: el diagnostico prenatal cuando respeta
la vida del embrión, los métodos naturales de regulación de la fertilidad, el proyecto
genoma humano, los cuidados paliativos y los transplantes. Definimos como ilícitos:
el aborto, los anticonceptivos, la reproducción artificial, la clonación, la eutanasia,
3
Sgreccia, E. Manual de Bioética Tomo 1. Edit. Vita e Pensiero. 2da. Ed. Milán. 1998.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 213
4
Sgreccia, E.; Mele, V.; Miranda, G. Le radici della bioética. Vol. 1 Vita e pensiero. Milán 1998. Pág108
5
Evangelium Vitae N° 101
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 215
Textos Complementarios
LA TENSIÓN ENTRE
LA CULTURA DE LA VIDA Y
LA CULTURA DE LA MUERTE EN LA
EVANGELIUM VITAE
Conferencia pronunciada por el Card. Alfonso López Trujillo, Presidente del Pon-
tificio Consejo para la Familia, en el V Congreso Internacional de la Reconcilia-
ción en el Pensamiento de Juan Pablo II, «Nueva Evangelización rumbo al Tercer
Milenio», Lima, 29 de octubre de 1995.
Es una ideología de la muerte que no sólo se «tolera» sino que se impone, se exporta y se transmuta en
«lenguaje imperial» que todo lo arrasa.
América Latina está amenazada. Hay una «conjura» contra la vida; una «conspiración» en curso. Y las
manipulaciones son evidentes. Algunos gobernantes son vencidos, no convencidos, por las amenazas y las
restricciones. Desafortunadamente hay un positivismo, un pragmatismo, una información superficial que
nos pone en los antípodas de lo que era para Platón el ideal de la democracia. Es decir, el gobierno de los
pueblos no se pone en las manos de los filósofos (o de los sabios), sino de quienes se mueven en el pragmatismo
de fáciles obediencias ante el poder del dinero. Impera una visión inmediatista y el temor a perder el favor de
los poderosos.
Nos hallamos, pues, en el núcleo del problema. Permitidme una reciente anécdota: el 12 de julio pasado
fui invitado a presentar la encíclica Evangelium vitae en el Parlamento Europeo en Estrasburgo (la invitación
provenía de los Partidos Populares). Fueron cerca de cuatro horas de un diálogo muy vivo, cordial e intere-
sante. Fue para mí muy indicativo ver cómo los traductores (un grupo grande) ofrecieron una hora gratis de
su tiempo para dar espacio mayor al diálogo iniciado. Una parlamentaria, de lengua alemana, protestante,
con tono respetuoso me decía: «¿Por qué la Iglesia ha olvidado a los jóvenes?». No acertaba yo a entender
tal aseveración. Ella se explicó: «¿Por qué la Iglesia les niega el uso de los anticonceptivos y de los preserva-
tivos? La Iglesia no ayuda a los jóvenes y, así, los abandona». Varios, sobre todo algunas parlamentarias,
parecían asentir. Algunos, de hecho, después hablaron en una línea semejante. Otros, desde luego, no se
mostraban de acuerdo.
Me llamó mucho la atención esta intervención y más cuando en la presentación de la encíclica no me
había referido a la anticoncepción. Hacia el final resolví avanzar estas ideas: ¿Qué hombre y qué mujer
queremos? ¿Cuál es la imagen y el diseño que queremos promover, si esto estuviera en nuestras manos? El
fondo de la cuestión es la verdad del hombre. Le pregunté, respetuosamente: ¿Qué tipo de hija ella quisiera
construir? ¿Aquella que, en la revolución sexual, sin una comprensión de la verdad del sexo, lleva los
instrumentos anticonceptivos en la cartera...? Si pudiéramos elegir a nuestras propias madres, ¿qué tipo de
mujer y de madre buscaríamos? El Santo Padre en el mensaje a la señora Nafis Sadik, con ocasión de la
Conferencia de El Cairo sobre población y desarrollo, y a los gobernantes, preguntaba: ¿qué clase de juven-
tud queréis modelar hacia el futuro? ¡Sí! la cuestión es antropológica y si esto no se aclara, qué difícil será el
diálogo si se deja de lado lo que es el hombre, ¡imagen de Dios!
Aquello que percibía hace 30 años el Concilio (en estos días celebramos 30 años de la promulgación de
la Gaudium et spes) sobre la centralidad de la antropología -ligada a la cristología- es algo que hoy se capta
con especial evidencia. Unida a la concepción del hombre, como primera expresión de su ser social, está la
familia, la primera comunidad, de tal manera que la sociedad es captada como una cadena solidaria de
comunidades.
Me parece que es ésta la perspectiva de esa profunda intuición de Pablo VI con la célebre concepción de
la «civilización del amor». Más que una visión política peculiar, el Pontífice de la Populorum progressio y de
la Humanae vitae, entendía que la sociedad es sólo concebible como un encuentro comunitario de personas,
más aún, de comunidades congregadas y vivificadas por el amor, a partir de la comunidad básica, célula
primordial y vital que es la familia.
La Gaudium et spes es como una explicación sistemática de la humanidad que se construye
como una familia. El Santo Padre Juan Pablo II centró su reciente intervención en la ONU en el
tema de la familia de naciones.
corrieron presurosos hasta el pesebre de Belén: hay villancicos, hay cantos de los ángeles. Nuestros hogares
se llenan de canciones en la «noche buena». Navidad es la fiesta del nacimiento del Salvador, y en cada
hogar, cuando irrumpe la vida, hay navidad. ¡Quiénes, cómo, con cuáles derechos destruyen estas tradicio-
nes y vuelven los vientres en cárceles, antesalas de las penas capitales del aborto! Qué contraste: mientras la
Iglesia mira con fundada desconfianza y sólo en circunstancias muy especiales, el recurso a la pena capital,
aún cuando se trata de delincuentes -protagonistas de crímenes atroces-, las democracias modernas se
consideran autorizadas para decretar las penas de muerte a los más débiles, indefensos, a los más inocentes.
¡Se equivocan quienes sostienen la idea de que el aborto no es un abominable homicidio!
Es la moderna masacre de 50 millones de víctimas de abortos legalizados, al año, de una democracia
que los despedaza en el útero materno, como homenaje al derecho que les reconoce falso de eliminar a los
nascituri como si fueran simples apéndices, agregados celulares, como una especie de tumor en el seno
materno. Es ésta la idea que muchas madres que abortan tienen: cuando pueden contemplar a sus hijos, en
los scanners, y ven que no son cosas, surge una nueva corriente de ternura y responsabilidad y se convierten
en fervientes defensoras del fruto de su vientre. Hay una cadena de centros de defensa de la vida en México,
por ejemplo, que han salvado más de 10,000 nascituri.
Hoy, el nuevo muro que se alza, dividiendo a la humanidad, no es ya el de Berlín, construido por la
ideología, sino el que separa la cultura de la vida y de la muerte. Y este muro de vergüenza se levanta al
interior de la mayoría de los países del mundo.
Estamos en medio del conflicto, de la lucha. La Iglesia se halla en medio de la batalla. Hay que decidir,
fieles a la voluntad del Señor, por la vida. ¡No podía ser de otra manera! En Estados Unidos los abortistas
pro-choice son contrarrestados así: el mejor pro-choice es pro-life (ésa es la verdad y la libertad).
La Iglesia toma en sus manos la causa de los más débiles e inocentes contra la prepotencia de los
poderosos. Su fuerza arbitraria se transmuta en tiranía, por el peso de las mayorías (mal informadas o
dominadas por las ideologías) en los parlamentos, que creen poder fundar las leyes no en la justicia sino en
su voluntad soberana y arbitraria. La Iglesia no puede callar mientras cunde el grito de los inocentes.
Es una lucha llena de peligros porque los poderosos cuentan con todos los medios, excepto la verdad, el
amor y la justicia. Son ríos de dinero los que corren para difundir el imperialismo contraceptivo y abortivo.
Se habla de más de 13 millones de dólares, sumando los presupuestos de las instituciones que buscan el
control de la natalidad. Hay que recordar que el Fondo de las Naciones Unidas para la Población y el
Desarrollo (UNPFA) tiene metas bien ambiciosas para antes del año 2000. Y esto sin contar las ayudas
oficiales para abortar. Oí en estos días que abortar cuesta cerca de 500,000 liras en Italia (unos 350 dólares).
El resto lo paga el Estado. ¡Y en Singapur costaría cinco dólares! En los países abortistas, los que rechazan
esas leyes inicuas son obligados contribuyentes.
Curiosamente, mientras las democracias modernas admiten toda clase de protestas, van tendiendo a
que se considere imposible protestar contra esta masacre. ¡Se vuelve difícil, con tantos riesgos, propender
por la objeción de conciencia! La Iglesia no protege y menos suscita movimientos violentos en defensa de la
vida. Algunos quieren inculcar esa caricatura. Y ningún movimiento pro-vida apoyaría a quienes buscan
hacer justicia por propia mano, sustituyendo a las autoridades. ¿Cómo hacen creer que hace parte de su
ideario liquidar médicos abortistas? Castigar esos delitos es algo que, con leyes justas, corresponde a las
autoridades. La vergüenza moral es que esto no se haga.
Nos hallamos ante la insensatez de pensar que no castigar el crimen, la despenalización, sea una vía
civilizada. Se olvida que elevar al nivel de principio que el delito no sea punible es cancelar la categoría de
delito. Eso podría corresponder al juez, analizadas las circunstancias. Hay circunstancias atenuantes, como
las hay agravantes. El error radica en que, a priori, el legislador señale quien, en concreto, al cometer un
delito, no merezca ser castigado. ¡He aquí la vía hacia el totalitarismo, por la acumulación de poderes! El
legislador se arroga el papel de juez que elimina la pena.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 219
Es verdad que el problema es dramático cuando las leyes inicuas se vuelven invulnerables, con un muro
de silencio. Será prohibido no sólo actuar, sino -si la manipulación fuera posible- pensar contra lo que las
leyes arbitrarias disponen. ¿Quién, entonces, defiende a los inocentes? Ellos, los nascituri, no pueden protes-
tar, manifestar en las calles, organizar su defensa. Si el nascituro pudiera defenderse de la letal agresión que
perpetran los cómplices del delito al realizarlo, tendría todo el derecho a hacerlo, incluso hasta quitar la vida
al injusto agresor, según la moral con los principios clásicos conocidos. No se puede negar que es en extremo
dolorosa la situación cuando las leyes inicuas se defienden hasta impedir el clamor de una sociedad que se
siente asaltada en sus derechos. Y todo en nombre de una democracia «pluralista» que debiera ostentar un
amor que incluso privilegie a los más necesitados e indefensos. ¡Cuán peligrosa es una democracia que se
complace en despedazar a los más inocentes! En breve, lo esperamos, se reconocerá el límite cruel de una
democracia que silencia y condena a muerte a los más débiles. Cómo hoy los pueblos se avergüenzan de
hablar de democracia cuando aceptaban como un derecho el esclavismo.
Quizás no se ha perdido del todo la vergüenza por semejantes delitos. Se busca cubrir, con el maquillaje
de un lenguaje rebuscado, la gravedad del crimen. Se llega a imaginar que los artificios del lenguaje son
suficientes para ocultar la iniquidad. Es el caso de la expresión «interrupción del embarazo». ¡No se habla del
aborto! A El Cairo se llevaba un paquete de expresiones artificiosas que enmascaraba la realidad y los
propósitos. ¡Cuántos rodeos para hacer pasar inadvertidamente el aborto como instrumento de planifica-
ción de la familia! Cuántos rodeos para no tener que aludir a una deformación de la verdad del sexo y su
responsabilidad que tiene su lugar en el matrimonio.
Como se empezó a hablar de un aborto «seguro» (safe abortion), sin hacer referencia a los derechos del
concebido a quien lo único que se asegura es la muerte; de un «aborto raro», cuando la tendencia en varios
países va en la línea de ampliar las «causales» de aborto, en el tiempo y en las circunstancias... ¿»Raro» el
aborto en Europa, que sólo es rechazado por Irlanda y Malta; «raro» en Estados Unidos, cuando se hacía
circular de nuevo los recursos económicos para un control natal sin referencias morales?
Con todo, el mismo lenguaje tiene sus trampas... Se habla hoy más del «producto», con una expresión de
fábrica, en vez del hijo. Se evita a toda costa hablar del matrimonio y se hace referencia a «uniones», a la
«pareja». Pero no son raros los resbalones. Se difunde la idea de la «vacuna anti-bebé», lo que equivale a
catalogar al nascituro como un virus. Por tanto, la maternidad es una enfermedad y la esterilidad un bien
buscado, no una humillación. Pensar que en Brasil más de la tercera parte de las mujeres en edad fértil han
sido esterilizadas. Mientras en el año 1960 se establecía como proyección para esta década una población
de 210 millones de habitantes, los datos estadísticos indican que no pasan de 160 millones.
Hay otra categoría de personas en altísimo riesgo por la mentalidad anti-vida: son los enfermos, los
enfermos terminales, pero también, los nascituri que no gozan de una «calidad de vida», cuya existencia es
considerada inútil y nociva. Se apela aquí a todos los resortes de la compasión para concluir que la eutanasia
o la eugenesia es una acto de humana compasión, incluso un comportamiento responsable. Al derecho de
«morir dignamente», es decir sin dolores... corresponde el derecho a una complicidad compasiva.
Nuevamente nos hallamos ante un problema serio de distorsión antropológica. ¿Quién es este nascituro?
¿Quién es este enfermo cuyo cuerpo se erosiona irremediablemente? ¿Es imagen de Dios, es cuerpo y alma,
es ser humano, persona humana, o no? ¿La enfermedad, la falta de la salud, de ese tipo de calidad de vida
de la que tanto se habla hoy, cancela su realidad de persona?
Permitidme expresar que, precisamente aquí, es donde, con peculiar claridad, se dan cita la razón y la fe,
la verdad del hombre, iluminada plenamente desde el Verbo encarnado. ¿Este nascituro enfermo, del cual se
quieren liberar, después de un diagnóstico prenatal con tal intención, que merece vivir, tiene un derecho a
ello? ¿Este enfermo que se revuelca en el dolor y en la angustia, vive así una vida digna de ser vivida? No hay
duda de que nos hallamos ante uno de los más duros dramas. La Iglesia no lo oculta. Pues bien, ¿cuál es la
última raíz de su dignidad, de su realidad personal, así nadie los amara, acogiera, acompañara y fueran
declarados fardos pesados e insoportables? La respuesta es ésta: la última raíz de su dignidad personal es
220 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
que ellos son amados, queridos por Dios. Porque Dios los ha amado, por ello vienen al mundo. Dice la
imitación de Cristo: «no hay creatura tan pequeña y humilde (ita parva et humilis) que no represente la
bondad de Dios». En una filosofía digna de tal nombre, Deus est infundens bonitatem in rebus. El bien, todo
bien, la bondad de la vida, esa calidad ontológica única e insustituible, tiene su fuente en Dios que da, que
infunde, la bondad en las cosas.
No es bueno o malo lo que dan como veredicto los parlamentos, sino lo que Dios, Señor de la vida,
establece. ¡Ved cómo es de peligroso olvidar la ley natural!
Aquí la antropología se introduce y se explica, en la mayor profundidad, con lo que llamamos el diseño
de Dios, el plan de Dios. La verdad del hombre pasa por esta pregunta: ¿qué quiere Dios del hombre, de este
hombre, de este niño, de este enfermo, de este hogar? La razón y la fe se enlazan en un homenaje de
obediencia, de apertura a Dios. El hombre es imagen y se hace imagen, como vocación, en la medida en que
él se abre, se comunica, con quien es su Creador. Sólo así se reconoce como objeto de amor y emerge a su
realidad más noble.
Permitidme una anécdota, que quizás hará más comprensible esta verdad del hombre. Llevamos a cabo
un encuentro internacional en Río de Janeiro sobre «los niños de la calle» (os meninos da rua). Fue convoca-
do por nuestro Pontificio Consejo. Me llamó mucho la atención la constante que fue surgiendo de la expe-
riencia de los especialistas, de los que han dedicado lo mejor de sus energías a este apostolado. Contaban
que esos niños abandonados no temen la muerte. Más aún, se desprecian a sí mismos en la medida en que
son despreciados. Diríamos que introyectan esa actitud que los hace experimentar que sobran, que están
como de más... Algo sobre tal sensación fue abordado por la filosofía, cuando el hombre no experimenta la
paternidad.
Los niños, os meninos da rua, se transforman cuando se sienten amados (en una familia que los acoge,
en una institución que les da calor de un hogar), se sienten personas; es como un amanecer, en una como
creación en el milagro del amor. La psicología tendría mucho que decir sobre la forma como se va tejiendo
nuestra conciencia personal y moral, la conciencia de un yo, al encontrarse con el tú, de otros, que reflejan
de alguna manera el Tú (con mayúscula) de Dios mismo.
Así, de manera similar, amanece en la vida del enfermo cuando el amor se expresa en compañía, en
cuidados, en la cura debida. Es un modo claro de expresar que valen, que cuentan, que son personas. La
madre Teresa de Calcuta narra cómo los enfermos, aquellos que recoge en las calles, los acribillados por el
sida, mueren como amaneciendo, en paz, cuando se sienten amados. Es la antropología que se vuelve
praxis de caridad.
Es verdad que todo esto representa otro lenguaje. Aquí radica el problema de la comunicación. Se juega
para el futuro la misma posibilidad del diálogo, base de la coexistencia entre personas y pueblos. Hay que
rehacer la posibilidad misma del diálogo en la cultura de la vida. Al drama del enfermo la Iglesia acude
como el Buen Samaritano, con entrañas de misericordia, con una capacidad de compadecer (cum pati) que
es compartir en el respeto, no suprimir o liquidar.
A todo esto se refiere la Evangelium vitae en no pocos lugares. Nada tiene que ver esta compasión con el
encarnecimiento terapéutico. Hay una «lógica» implacable. Si a otros tratamos como cosas, en las que se
«agotaron» las personas, en un cambio cualitativo impuesto... tratados como cosas, no como personas,
como carga, un mañana (un mañana más o menos próximo), cuando la salud se erosione, cuando pasen
los años, también nosotros seremos tratados así. Los periódicos hace un tiempo informaban del comporta-
miento de unas enfermeras en Austria que resolvieron deshacerse de los enfermos (de semejante carga),
asfixiándolos con las almohadas. Mañana los psiquiatras podrán comenzar a hablar de ese «complejo»... del
complejo de la almohada para ancianos y enfermos.
Pero la categoría de personas se torna también categoría de pueblos. Nos hallamos en la perspectiva
demográfica.
Encontramos aquí un amplio campo que entra plenamente en la doctrina social de la Iglesia, y donde se
juega una solidaridad real, con un actitud de respeto y de justicia.
Hay muchos pueblos pobres en el mundo maltratados por los poderosos del mundo. Son manipulados,
recortados en su soberanía, con políticas demográficas impuestas, con procedimientos condicionantes que
la Iglesia no cesa de denunciar.
Hay una denuncia vigorosa, hasta cierto punto inusitada, en la que Juan Pablo II muestra la trama
ideológica que todo lo invade, con un gran temor, en vez de una corriente de solidaridad, porque pueden
disturbar su tranquilidad. Una tranquilidad egoísta, satisfecha e injusta. «Éstos -los poderosos de la tierra-
consideran también como una pesadilla el crecimiento demográfico actual y temen que los pueblos más
prolíficos y más pobres representen una amenaza para el bienestar y la tranquilidad de sus Países. Por
consiguiente, antes que querer afrontar y resolver estos graves problemas respetando la dignidad de las
personas y de las familias, y el derecho inviolable de todo hombre a la vida, prefieren promover e imponer
por cualquier medio una masiva planificación de los nacimientos. Las mismas ayudas económicas, que
estarían dispuestos a dar, se condicionan injustamente a la aceptación de una política antinatalista».
Hay documentos, recientemente publicados, que prueban lo fundado de esta denuncia. Lo que pone en
movimiento drásticos mecanismos de defensa es el temor que suscitan pueblos pobres, agresores de la
placidez de los poderosos. Es un riesgo, o un atentado contra el poder de la fuerza, contra la fuerza transmutada
en «derecho», el de los fuertes. En un organismo de la ONU se celebra la imaginación de festivales de control
natal: los niños inflan como bombas de juguete los preservativos. Se los distribuyen en escuelas y colegios.
¡El sexo es un juego! Se trata de un «Rapport» de 1990, de la Banca Mundial, publicada en Washington. El
profesor Schooyans muestra las inquietantes conclusiones del documento, coordinado por Kissinger, del año
1974, que tiene como título Implications of world wide Population Grow for U.S. security and overseas
interests. El control natal es cuestión de «seguridad».
Se habla de un darwinismo social. ¿Qué significa? En el evolucionismo hay un filum, el de los más
fuertes, que avanza, permanece, mientras otros caen en el camino. En los campos sociales y económicos
pareciera que habría una ideología y unas políticas demográficas que conceden todos los derechos a los
pueblos ricos, los cuales son negados a los pobres. Éstos no tendrían derecho a engendrar hijos, a procrear.
Esto sería ya una irresponsabilidad.
La ideología culpabiliza a los pobres por su acelerado crecimiento poblacional. Ellos así atentarían
contra el ecosistema. Son la causa del deterioro del medio ambiente. Ideas semejantes fueron llevadas a la
Conferencia de Río de Janeiro sobre el medio ambiente. Fue necesario que la delegación de la Santa Sede
recordara los abusos que provienen de los desafueros de una industrialización sin límites y que defendiera los
derechos de la familia y de una paternidad responsable. ¡Poco se habló de la polución letal de centrales
nucleares como Chernobyl!
La ideología se construye sobre mitos.
Primero se exageran los peligros con tonos apocalípticos. El mundo en la «revolución demográfica»,
superpoblado, no soportaría más habitantes. No cabemos en un mundo con recursos limitados. No caben
más pasajeros en la balsa. Las proyecciones hacia el futuro serían aterradoras si no se frena el crecimiento
demográfico de los pobres, rápido y por todos los medios. ¿Dónde está la verdad?
Imposible resumir aquí, en toda su fuerza, una serie de argumentos que han sido objeto en varios
recientes congresos sobre demografía, en una reflexión seria que se ha profundizado en el documento de
trabajo Evoluciones demográficas: dimensiones éticas y pastorales, del Pontificio Consejo para la Familia.
Algunas breves consideraciones:
222 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Se olvida que nos hallamos en un momento de transición que muestra que al crecimiento acelerado
desde 1825, hacia la década del ’70, se ha alcanzado una tendencia hacia una estabilización. Ésta es
producto del hecho de la drástica caída de la tasa de nacimientos en muchos países ricos que acusan el
«invierno demográfico» y de los cambios operados en tantos países en donde no se puede hablar de «explo-
sión» demográfica. Un período de rápido crecimiento poblacional, causado por la reducción notable de la
mortalidad infantil y a los avances de la medicina y de la higiene, que han permitido que la media de
esperanza de vida haya aumentado en forma tan positiva.
Ilustra muy bien este nuevo momento, el hecho de las rectificaciones de proyecciones que antes eran
lanzadas a los cuatro vientos con tintes apocalípticos. Y no me refiero a las confusiones del Club de Roma
hace años. Los mismos datos de las Naciones Unidas cambian sorprendentemente, en los últimos años. Es
aleccionador el libro del profesor Gérard-François Dumont, Le monde et les hommes. Les grandes évolutions
démographiques.
Él trabaja sobre los mismos datos de Naciones Unidas. ¿Qué es posible observar? En menos de cinco
años ya no se usa la proyección alta que hace poco se ofrecía y se difundía por doquiera, es decir, los 11 mil
millones de habitantes para el año 2025. Se habla ahora de la hipótesis media de 8 mil millones. ¡En un
lapso de 30 años, solamente, se hace ya una «rebaja» de 3 mil millones! ¡Más de la mitad de la actual
población mundial! Se trata de hipótesis de proyecciones cambiantes que se suceden caprichosamente. Hay
ya hipótesis que contemplan la posibilidad (es verdad, muy baja) de 4 mil millones de habitantes en el año
2010...
El problema radica en los recursos actuales y potenciales, y los que la imaginación y el trabajo del
hombre pueden descubrir, explotar y arbitrar.
Y esto en cada país, en cada región, y en todo el mundo. Somos una familia. ¡El problema es el
desarrollo «integral», como lo señalaba Pablo VI en la Populorum progressio, de todo el hombre y de todos
los hombres! Hoy hay países como Estados Unidos que son una despensa para el mundo. El progreso, el
crecimiento agrícola es superior, muy superior, a sus necesidades. En el mundo ha habido un notable
crecimiento en la agricultura. En algunas partes guerras intestinas, más que desastres ecológicos, han provo-
cado sensibles reducciones. Hay una capacidad de imaginación que abre nuevas esperanzas. Se dice que si
el hombre tiene una boca, goza de dos manos y de inteligencia. Gracias a ello no es verdad que choquemos
contra límites inalterables.
Es necesario desmontar pieza por pieza los mitos que liquidan la esperanza, por medio de un esfuerzo
científico, serio, abierto al diálogo. Hoy tenemos la sensación de un diálogo de sordos en donde se cree que
la victoria está de parte de quienes cuentan con más medios de comunicación para imponer sus impresio-
nes. La ONU podría ayudar no poco y liberarse de ataduras políticas, burocráticas, que traicionan su noble
diseño original, propiciando un diálogo urgente y posible. Tiene el riesgo de convertir sus órganos en pulpos
de una especie de gran poder omnipotente y arbitrario.
A pesar de la dificultad de acopiar datos serios en muchos países, hay cifras que son indicativas. Si en
Nigeria y en Ciudad de México las estadísticas se caracterizan por caprichosas, no es imposible captar
tendencias y hacer previsiones, al menos por un lapso adecuado de tiempo. Por lo que hemos comprobado,
por ejemplo, en América Latina la cuestión demográfica está lejos de ser dramática. Algunos países están en
el umbral que llevaría incluso a un desequilibrio demográfico. Y esto lo van reconociendo los datos oficiales.
Allí donde los recursos actuales no cubren ni son suficientes para las necesidades de una población en
crecimiento, como v.gr. en algunos países de África y en Asia, un esfuerzo colectivo por el desarrollo, y no el
recurso a métodos y técnicas inmorales, indignas del hombre, es la única vía de solución posible. La digni-
dad de los pueblos no puede ser puesta en juego.
Se equivocan quienes creen que los caudales inmensos de dinero, puestos al servicio de la anticoncepción
y del aborto, para la esterilización masiva, con distintos métodos, son la solución a los problemas. Se
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 223
difunden en las escuelas y colegios primero textos que banalizan el sexo y luego píldoras y preservativos -
como ya lo recordábamos-, como si solamente fuera importante combatir (en forma además equivocada e
insegura) las enfermedades sexualmente transmisibles. Se impone a los pueblos un estilo de vida errado, un
lenguaje imperial desprovisto de verdad, aprovechando temores artificiosamente suscitados, apoyados en
aspectos objetivos y en riesgos que no es dable ni justo ocultar. Un obispo africano me decía: primero les
enseñan a hacer lo que quieran con su cuerpo y luego a abortar.
Permitidme recordar una síntesis, con su toque de humor pedagógico, de un apóstol de la dignidad, como
fue el profesor Jérôme Lejeune, a quien el Santo Padre hizo el homenaje, que recibió casi doblegado por la
enfermedad, de nombrar Presidente de la Academia Pontificia para la Vida: «La anticoncepción es hacer el
amor, sin hacer el niño; la fecundación asistida es hacer el niño, sin hacer el amor; el aborto es deshacer el
niño, y la pornografía es deshacer el amor». Una síntesis de un falso estilo de vida y una suma de errores, que
no dejan de serlo con vanas apologías. Y todo esto cuesta, está costando muy caro, en el desconcierto de
sociedades enfermas, con la peor enfermedad: la que socava las fuerzas del alma.
Hay un enorme riesgo de que se impongan, como si fueran impecables conclusiones de la paternidad
responsable, que las familias pobres y los pueblos pobres deben estar condenados a no tener hijos. En las
vastas dimensiones de la pobreza, sería impedimento moral para procrear.
Preocupa sí que se procree fuera del hogar, en el abandono total. Éste es uno de los más graves proble-
mas. Preocupa mucho la ausencia de mecanismos legales, de códigos de la familia. El futuro, con el avance
de la mentalidad divorcista, será más doloroso. La pobreza es una cruz en muchos hogares y la Iglesia
reconoce numerosas causas justas para limitar la familia y apelar a los métodos naturales de la regulación
de la fertilidad. La enseñanza es conocida y reiterada. Pero donde hay un hogar constituido, estable, respon-
sable, los hijos tienen alguna protección.
5. Conclusión
Es necesario sembrar, en todo tiempo, en todos los lugares, una cultura por la vida, contra la conjura
contra la vida. Debe comenzar en las familias, santuarios de la vida. Debe establecerse y desarrollarse toda
una pastoral de la vida desde la familia. En este Congreso de Teología de la Reconciliación, podríamos decir
que hay que reconciliar a la familia con la vida, partiendo del reconocimiento del don maravilloso de Dios:
la vida humana.
Es una reconciliación que exige gran capacidad de lucha: «Este horizonte de luces y sombras debe
hacernos a todos plenamente conscientes de que estamos ante un enorme y dramático choque entre el bien
y el mal, la muerte y la vida, la «cultura de la muerte» y la «cultura de la vida». Estamos no sólo «ante», sino
necesariamente «en medio» de este conflicto: todos nos vemos implicados y obligados a participar, con la
responsabilidad ineludible de elegir incondicionalmente en favor de la vida».
La cultura por la vida es ya un anuncio, un Evangelio de liberación en el Señor del «valor incomparable
de cada persona humana... El Evangelio del amor de Dios al hombre, el Evangelio de la dignidad de la
persona y el Evangelio de la vida son un único e indivisible Evangelio».
En esta causa, en esta lucha que a todos envuelve y compromete, tenemos una certeza: la victoria en el
Señor. Habrá muchas tribulaciones, incluso «persecuciones por la justicia»... los poderosos se endurecen,
pero terminarán por rendirse ante la evidencia de una verdad que los interpela y que los avergüenza.
Cuánto se reduciría esta masacre si tomaran una actitud humana que es una conversión a la vida.
«Reconciliad a los hombres con la vida». Un imperativo por la vida en la sociedad se impone: «promover un
Estado humano... que reconozca, como su deber primario, la defensa de los derechos de la persona huma-
na, especialmente de la más débil». La victoria está de nuestra parte, porque el Señor de la vida, reina vivo.
224 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
LOS FUNDAMENTOS DE LA
BIOÉTICA EN LA ENCÍCLICA
EVANGELIUM VITAE
Mons. Elio Sgreccia, Secretario del Consejo pontificio para la Familia
Llamamiento profético
En el período de espera de esta encíclica, desde abril de 1991, cuando en el consistorio extraordinario
los cardenales la solicitaron al Santo Padre, los medios de comunicación social anunciaban una
encíclica sobre la bioética y muchos la esperaban como un documento de esta índole.
Si con el término bioética se entiende un tratado en los confines entre la ciencia y la reflexión
moral, de índole esencialmente filosófica en el vasto ámbito de la biomedicina, es preciso reconocer
inmediatamente que la encíclica no se presenta como un tratado de bioética, porque es mucho más.
En realidad, tiene un matiz principalmente profético y pastoral: ilumina con la palabra de Dios el valor
de la vida humana, valor que brota del hecho de estar insertada en el don de la vida divina, fruto de la
Redención. Partiendo de esta visión sobrenatural del hombre creado a imagen de Dios y redimido por
Cristo, la encíclica señala las dimensiones de la dignidad de la vida humana, también en su fase
terrena. Esa dignidad se extiende a su origen y a la procreación. La encíclica deduce de estas
afirmaciones el carácter sagrado e inviolable de la vida corporal e impulsa la reflexión dentro de la
verdad profunda de la persona, cuya perfección se realiza en la entrega de sí.
Ciertamente, la encíclica subraya también la convergencia de la reflexión de la razón humana con
las afirmaciones de la Revelación sobre el carácter sagrado e inviolable de la vida humana y, por eso,
funda en la ley moral natural el precepto de no matar al inocente. Con todo, la Evangelium Vitae sigue
siendo un documento pastoral y esencialmente teológico.
Por lo demás, el texto de la introducción define muy bien la fisonomía de la encíclica: «La presente
encíclica, fruto de la colaboración del Episcopado de todos los países del mundo quiere ser, pues, una
confirmación precisa y firme del valor de la vida humana y de su carácter inviolable, y, al mismo
tiempo, una acuciante llamada a todos y a cada uno, en nombre de Dios: ¡respeta, defiende, ama y
sirve a la vida, a toda vida humana! ¡Sólo siguiendo este camino encontrarás justicia, desarrollo,
libertad verdadera, paz y felicidad! ¡Qué estas palabras lleguen a todos los hijos e hijas de la Iglesia!
¡Que lleguen a todas las personas de buena voluntad, interesadas por el bien de cada hombre y mujer
y por el destino de toda la sociedad!» (n.5). El texto, a continuación, indica el espíritu, el estado de
ánimo con que el Santo Padre lo escribió: «En comunión profunda con cada uno de los hermanos y
hermanas en la fe, y animado por una amistad sincera hacia todos, quiero meditar de nuevo y anunciar
el Evangelio de la vida, esplendor de la verdad que ilumina las conciencias, luz diáfana que sana la
mirada oscurecida, fuente inagotable de constancia y valor para afrontar los desafíos siempre nuevos
que encontramos en nuestro camino» (n.6). Ese evangelio de la vida «puede ser conocido por la razón
humana en sus aspectos esenciales» (n.29).
sí pues, la encíclica tiene el tono del llamamiento evangélico y de la caridad pastoral, un llamamiento
hecho al creyente y a todo hombre, con un impulso de humanidad que impregna todo el desarrollo en
sus diversas partes.
Por consiguiente, no se debe buscar en la encíclica el planteamiento de un tratado o de un manual
de bioética.
Lo confirma el hecho de que la encíclica no afronta algunos temas de bioética de los que hoy se
discute mucho, como por ejemplo el conocimiento y el seguimiento del genoma humano, los límites
de la geneterapia o las aplicaciones de las biotecnologías sobre los animales y sobre las plantas, o la
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 225
cuestión de las patentes de los descubrimientos relativos a la biología humana, de los que se ha
ocupado recientemente el Parlamento europeo. La encíclica sólo toca indirectamente el problema de
las intervenciones en el campo de la genética, y lo hace donde pide que todo lo que la medicina busca
en el ámbito del diagnóstico o la experimentación sobre el embrión y el feto debe tener como única
finalidad el bien del ser humano sobre el que se interviene, basándose en la convicción de que el
embrión humano es digno del respeto que se debe a la persona humana, como veremos más adelante
(cf. n. 63).
Dimensiones bioéticas
Con todo, afirmar que la encíclica carece de autoridad en campo bioético y que se podría reducir a
catequesis para los fieles, sería ciertamente emitir un juicio superficial, que no responde a la verdad,
por varias razones.
Ante todo, por una razón epistemológica, a la que ya aludimos: la defensa de la vida humana desde
su inicio hasta la muerte natural y especialmente en las dos fases más frágiles, como son precisamente
la fase prenatal y la de la enfermedad grave y la muerte, es abordada sobre la base de un principio no
sólo de fe revelada, sino también de razón. El punto esencial de esa fundamentación racional está en
la afirmación según la cual la vida corporal del ser humano, incluso en sus primeras fases, al igual que
en todo momento de la existencia, constituye un momento fundamental, una condición y dimensión
sustancial de toda la persona, por lo que en ningún momento se puede separar la persona de su
corporeidad. «En la biología de la generación está inscrita la genealogía de la persona» (n.43).
Repitiendo lo que afirmó la Declaración sobre el aborto provocado de 1974, la encíclica reafirma
como conclusión de un dato objetivo y científicamente fundado que «con la fecundación se inicia la
aventura de una vida humana, cuyas principales capacidades requieren un tiempo para desarrollarse y
poder actuar» (n.60).
Y, citando también la instrucción de la Congregación para la doctrina de la fe, de 1987, recuerda
que «las mismas conclusiones de la ciencia sobre el embrión humano ofrecen «una indicación preciosa
para discernir racionalmente una presencia personal desde este primer surgir de la vida humana:
¿cómo un individuo humano podría no ser persona humana?»» (ib.; cf. instrucción Donum vitae, sobre
le respeto de la vida humana naciente y la dignidad de la procreación, nn. 87, 78-79).
También es de ética racional el principio del tuciorismo al que alude la encíclica, según el cual,
cuando está en juego un valor de suma importancia, como el valor fundamental de la vida humana,
«bastaría la sola probabilidad de encontrarse ante una persona para justificar la más rotunda prohibición
de cualquier intervención destinada a eliminar un embrión humano» (n.60).
No sólo estamos ante una de las cuestiones de bioética más vivamente discutidas y decisivas en
estos años; también podemos observar el respeto de la metodología racional, de mediación entre la
ciencia y la ética, que es también la metodología propia de la bioética.
La relación entre naturaleza y persona
Otro tema de bioética fundamental, que en cierto modo resume todos los problemas especiales de
bioética, es el de la relación entre naturaleza y persona. Entendemos por naturaleza la interna y propia
de la persona humana, y también la naturaleza biológica externa a la persona, la bioesfera en la que
se desarrolla la vida de los hombres.
Al hacer el análisis de las raíces de la cultura de la muerte, la encíclica toca a fondo e ilumina esta
delicada relación que está en el centro de la reflexión bioética.
A este respecto, un filósofo contemporáneo, Robert Spaeman, ha escrito, pensando en la crisis de
la modernidad: «Cuando el hombre quiere ser sólo sujeto y olvida su vínculo simbiótico con la naturaleza,
vuelve a caer prisionero de un destino primitivo... Para sobrevivir y para vivir bien, es necesario que los
hombres actúen de manera correcta no sólo los unos con respecto a los otros, sino también con
respecto a su propia naturaleza y a la naturaleza externa» (Per la critica dell´utopía politica, Franco
Angeli Editore 1994, p.20).
226 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Se trata del equilibrio decisivo de índole bioética, es decir, precisamente el equilibrio entre el bios y
el ethos del sujeto.
La encíclica, hablando de las causas de la mentalidad de muerte, recuerda la pérdida del sentido
de Dios, como consecuencia de la secularización, y la violencia que se desencadena en las sociedades
complejas; recuerda la rotura del vínculo entre verdad y libertad, ya expuesto en la Veritatis splendor,
pero denuncia ante todo este punto etiológico, que consiste en la rotura de la armonía entre la naturaleza
y la persona como consecuencia de una hiperexaltación de la subjetividad.
El mismo autor, Spaeman, recuerda que, como consecuencia de esa emancipación de la subjetividad,
la naturaleza se convierte en objeto, mecanismo que se pueda poseer y explotar incluyendo la naturaleza
corporal.
La encíclica precisamente confirma esta afirmación cuando recuerda también, entre las complejas
razones de orden cultural que han favorecido el desarrollo de la violencia «aquella mentalidad que,
tergiversando e incluso deformando el concepto de subjetividad, sólo reconoce como titular de derechos
a quien se presenta con plena o, al menos, incipiente autonomía y sale de situaciones de total
dependencia de los demás (...). También se debe señalar aquella lógica que tiende a identificar la
dignidad personal con la capacidad de comunicación verbal y explícita y, en todo caso, experimentable».
(n.19)
Después de haber hablado también de la pérdida del sentido de la verdad integral de la persona, la
encíclica subraya que como consecuencia «el cuerpo ya no se considera como realidad típicamente
personal, signo y lugar de las relaciones con los demás, con Dios y con el mundo. Se reduce a pura
materialidad: está simplemente compuesto de órganos, funciones y energías que hay que usar según
criterios de mero goce y eficiencia. Por consiguiente, también la sexualidad se despersonaliza e
instrumentaliza» (n.22).
A la luz de esta relación entre persona y naturaleza, el Santo Padre ilumina también el problema de
la bioecología. «El hombre, llamado a cultivar y custodiar el jardín del mundo (cf. Gn 2, 15), tiene una
responsabilidad específica sobre el ambiente de vida, o sea, sobre la creación que Dios puso al
servicio de su dignidad personal, de su vida: no sólo respecto al presente, sino también a las generaciones
futuras. Es la cuestión ecológica —desde la preservación del «hábitat» natural de las diversas especies
animales y formas de vida, hasta la «ecología humana» propiamente dicha— que encuentra en la
Biblia una luminosa y fuerte indicación ética para una solución respetuosa del gran bien de la vida de
toda vida» (n.42). El Santo Padre recuerda aquí un concepto que ya aparece en la carta encíclica
Centesimus annus, pero trata un tema eminentemente bioético (Cf. Centesimus annus, 1 de mayo de
1991, n. 38).
Pero tras una primera lectura, puede parecer que sobre los temas de bioética la encíclica, en
definitiva, no ha dicho nada sustancialmente nuevo con respecto a los documentos anteriores de
índole ética. La originalidad de la encíclica consistiría sólo en el hecho de haber dado unidad orgánica
a todas las enseñanzas propuestas con anterioridad.
En realidad, si se hace un análisis más atento, se descubre que hay novedades, tal vez no con
respecto a la doctrina moral, pero sí con respecto al carácter oficial que brota del hecho de que son
tratadas en una encíclica. Bajo este aspecto, me parece una novedad el amplio pasaje dedicado a la
amenaza contra la vida que se realiza en el ámbito demográfico, sobre todo con políticas impuestas a
los países pobres, pero que producen daños también en los países ricos. El Santo Padre compara
esas políticas a las de antiguo faraón. «Del mismo modo se comportan hoy no pocos poderosos de la
tierra. Éstos consideran también una pesadilla el crecimiento demográfico actual y temen que los
pueblos más prolíficos y más pobres representen una amenaza para el bienestar y la tranquilidad de
sus países» (n. 16).
Aquí, en la encíclica, el Papa reafirma el discurso de Denver y lo inserta como un juicio moral con
respecto a las políticas de planificación familiar: «Se trata de amenazas programadas de manera
científica y sistemática» (n.17).
El mandamiento no matarás tiene así un alcance planetario, de acuerdo con la extensión mundial
de los delitos y de las políticas contra la vida.
Otro punto que, a mi parecer, constituye una novedad, no en sentido absoluto, sino en la enseñanza
oficial del Magisterio, es el relativo a la conexión que existe entre anticoncepción y aborto.
Se recuerda que los dos hechos tienen una calificación diversa desde un punto de vista ético,
porque tienen un objeto moral diferente. Pero se subraya que están vinculados entre sí, no sólo desde
el punto de la mentalidad que une esos dos hechos como factores contrarios a la acogida de la vida,
sino también desde el punto de vista objetivo, y lo demuestra el hecho de que «la preparación de
productos químicos, dispositivos intrauterinos y «vacunas» que, distribuidos con la misma facilidad
que los anticonceptivos, actúan en realidad como abortivos en las primerísimas fases de desarrollo de
la vida del nuevo ser humano» (n. 13).
Así, es nueva la consideración dentro de la defensa de la vida humana, la conexión con la
conservación del ambiente, a la que ya aludimos a propósito de la relación entre naturaleza y persona.
Deseo terminar destacando una novedad muy alentadora para quien se dedica al estudio de la
bioética. Entre los signos de esperanza la encíclica incluye también el desarrollo del estudio de la
bioética. «Con el nacimiento y desarrollo cada vez más extendido de la bioética se favorece la reflexión
y el diálogo —entre creyentes y no creyentes, así como entre creyentes de diversas religiones—
sobre problemas éticos, incluso fundamentales, que afectan a la vida del hombre» (n. 27).
Los que cultivan la bioética deben dar gracias a Juan Pablo II por las muchas contribuciones de su
magisterio y ahora por esta encíclica, con la que ilumina los fundamentos mismos de la bioética: la
dignidad de la persona humana, también en sus fases frágiles, la relación entre naturaleza y persona,
la fundamentación del juicio moral, y la relación entre ley moral y ley civil.
En definitiva, la encíclica, que concluye con una oración a María, recuerda a un mundo centrado en
su horizonte terreno que el hombre no es, como los demás seres vivos, un simple momento del devenir
universal, porque es capaz de devolver al mundo más de lo que recibe del mundo, y de elevarse a lo
eterno.
25/08/95
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228 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
K
Finalmente, cinco de sus óvulos Las clínicas norteamericanas de
Especial para Clarín
fueron fertilizados con esperma de un esterilidad y algunos particulares
hombre de ascendencia rusa, rumana llegan a sacar avisos en los diarios
athy Butler, una mujer de 47 y húngara y otros dos con esperma de de algunas prestigiosas universida-
años del estado de Nueva Jersey, está un individuo de origen galés. des, con la convicción de que una
embarazada de trillizos. Pero los A estos embriones humanos mujer que estudie en Princeton,
chicos no tienen ningún parecido ni prearmados sólo se los encuentra en Stanford o Pensilvania será buena
con ella ni con su marido, Gary. Es algunos centros de Estados Unidos candidata a donante para muchos
que fueron gestados a partir de como el Presbiteriano Columbia, padres.
embriones congelados que los Butler donde los médicos informan a los El doctor Lee Silver, biólogo
eligieron y pagaron en el Centro pacientes sobre su existencia pero no molecular en la Universidad de
Médico Presbiteriano Columbia de hacen ningún tipo de publicidad. Princeton, encontró un aviso en el
Manhattan. «Si alguien consulta en otros diario estudiantil de la facultad que
centros más chicos, le van a decir que decía: «Pareja estéril (graduada de
Los médicos mezclaron nunca escucharon hablar de esto» Yale del 80 y marido) que desea iniciar
aclara el doctor Mark Sauer del una familia necesita mujer blanca,
óvulos y esperma humano y Presbiteriano Columbia. sana, de cabello claro (de entre 21 y
crearon una «biblioteca» de Para Lori Andrews, profesora de 32 años), que esté dispuesta a donar
Derecho en el Chicago-Kent College óvulos. Recibirá 2.000 dólares más
embriones congelados «No se puede aplicar a los em- gastos por su tiempo y esfuerzo. Se
briones un enfoque de supermer- incluye atención médica completa en
Los médicos de este centro cado». Los médicos especialistas en hospital de Nueva York».
médico mezclaron óvulos y esperma esterilidad, obviamente, sostienen Cuando Silver mencionó el aviso
humanos y crearon así una que el planteo no tiene sentido. en una clase, algunas de las estu-
«biblioteca» de embriones. Después Sauer respondió «El hecho de diantes admitieron haber considerado
los congelaron. querer elegir a los donantes de óvulos la posibilidad de contestarlo. Dijeron
La idea era permitir que los futuros y de esperma es algo normal de la que les atraía el dinero pero que tam-
padres elijan los embriones que naturaleza humana. A puertas cerra- bién les interesaba la idea de ayudar
quieren. das, la gente más liberal del mundo a otra gente y «la posibilidad de
Los Butler forman parte de un sembrar el mundo con sus óvulos».
silencioso pero creciente nuevo Quienes donan sus óvulos,
mundo, dispuesto a pagar lo que les A los embriones humanos aceptan que se les inyecten drogas
pidan las clínicas dedicadas a para estimular a los ovarios, logrando
esterilidad. prearmados sólo se les que éstos desborden de óvulos
Los Butler explicaron que ya se encuentra en algunos maduros. Según explicó el doctor
habían gastado todos sus ahorros en Mitchell Tucker, director científico en
tratamientos para la esterilidad y que centros de Estados Unidos una institución dedicada a la
cuando descubrieron que existía un reproducción de Atlanta, la experiencia
lugar en donde podían elegir es sumamente discriminatoria. No no es del todo benigna.
embriones congelados por 2.750 nos pueden acusar de querer jugar a Tucker advierte que en algunas
dólares su alegría fue enorme. Esta ser Dios». raras ocasiones, se estimula en
pareja, con ancestros irlandeses los En Estados Unidos las leyes que exceso a los ovarios de la donante.
dos, quería que los donantes de rigen la donación de óvulos y esperma «Sus niveles de estrógeno se van a
esperma tuvieran sangre irlandesa varían de estado a estado. Muchos ni las nubes y sufren una crisis que las
también «o al menos ojos y cabello siquiera tienen legislación. Y ninguna hace retener líquido. En los casos
claro» -según dijo Kathy-, pero todos ley especifica detalles, como cuál es más graves, los riñones se cierran y
los embriones disponibles eran de el status de los embriones de excepcionalmente la mujer puede
madres de origen italiano, con ojos y laboratorio o quiénes deben ser sus morir». Traducción de Silvia S.
cabello marrones. guardianes. Simonetti
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 229
B
Los Angeles Times
Especial para Clarín El año pasado los médicos del Centro Médico
Regional de Encino-Tarzana, ubicado en la periferia
illy fue concebido en 1990, pero nació ante- de los Angeles, decidieron comprar un nuevo
ayer. La medicina moderna y el olvido de óvulos fe- «freezer».
cundados y congelados en una clínica de Los Ange- En realidad el laboratorio simplemente había ol-
les, en California, hicieron posible esta historia. Una vidado los embriones y se dio cuenta recién cuando
mujer -que recibió un tratamiento de fertilización asisti- decidió su mudanza a un nuevo «freezer». Por eso
da hace ocho años- tuvo ahora un segundo bebé que tuvo que pedir permiso a todos los propietarios de
es mellizo del primero, y nació a partir de un óvulo que óvulos congelados.
no fue utilizado en esa oportunidad. Fue entonces cuando le escribieron al matrimo-
Además, los médicos señalaron que Billy nació nio (cuyos miembros tienen 44 y 54 años) pregun-
del embrión congelado, revivido e implantado, más tándoles qué querían hacer con sus óvulos fecun-
antiguo de la historia. dados olvidados en el fondo de un estante.
Los padres de Billy -un nombre inventado para Recién cuando llegó la carta por correo a la casa
resguardar la intimidad de la familia- tenían proble- de esta pareja, la familia supo que tenía ese «resto»
mas para concebir a un hijo naturalmente. Por eso, guardado.
en 1990 se sometieron a un tratamiento denomina- Aunque hacía años que deseaban un segundo
do GIFT. La mujer recibió una dosis de hormonas bebé, se habían resignado porque el tratamiento
que estimularon sus ovarios y los indujeron a produ- era demasiado costoso para ellos. Hace ocho me-
cir más de un óvulo durante el mismo ciclo menstrual. ses, implantaron en el útero de la mujer ese óvulo
Los óvulos fueron extraídos mediante un proce- fecundado cuando ella tenía 36 años. Este tratamien-
dimiento quirúrgico y luego fecundados in vitro con to les costó 1.000 dólares. Y el lunes nació Billy.
esperma del marido. Algunos fueron implantados
en el cuerpo de la mujer. Un chico sano
Y uno de ellos se transformó, nueve meses des- Con 3,600 kilogramos y una estatura de 55 centí-
pués, en el primer hijo de este matrimonio que vive metros, el bebé que había «sobrado» de un trata-
en las afueras de Los Angeles. miento hormonal exitoso y fue gestado como el «em-
Los óvulos restantes fueron guardados en un brión más viejo del mundo» goza de buena salud,
«freezer», por si la técnica -que cuesta 7.000 dóla- según dijo la portavoz del hospital Kara Walter.
res- no daba el resultado esperado. «Es común que Vermesh explicó, además, que los hermanos son
si la mujer no queda embarazada, se intente unos mellizos: «Fueron engendrados a partir de dos óvulos
meses después sin repetir procesos hormonales diferentes, pero eso ocurrió el mismo día. Por eso se
de estimulación ovárica», explicó Michael Vermesh, trata de mellizos que nacieron con una diferencia de
el especialista en este tipo de tratamientos que atien- edad de ocho años».
230 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
U
Los Angeles Times
Especial para Clarín cutibles», agregó Juengst.
Cohen, quien tuvo que enfrentar las críticas de la
n nuevo método de tratamiento para pare- comunidad cientifíca, explicó que el tratamiento sólo
jas infértiles arrojó como resultado en los Esdos puede ser de ayuda para una pequeña cantidad de
Unidos el nacimiento de bebés con genes de tres parejas infértiles. «Las mujeres que pueden ser tra-
personas. Es decir, los niños recién nacidos -serían tadas con este método son aquellas que, a pesar de
alrededor de treinta- además de portar la informa- poseer óvulos que pueden ser fertilizados de mane-
ción genética de sus respectivos padres, tienen una ra natural, generan embriones incapaces de desa-
pequeña fracción del genoma de otra mujer. rrollarse y mueren antes de poder implatarse en el
El método fue desarrollado por un equipo de útero», explicó el médico que desarrolló la técnica.
cientifíficos del Instituto de Medicina y Ciencia Hace unos años, para probar su tesis, Cohen
Reproductiva de la Clínica St. Barnabas de Livingston, inyectó en óvulos de primeras pacientes citoplas-
en Nueva Jersey. Allí calcularon que la proporción de ma sano de otras mujeres. Los óvulos fecundados
genes de la tercera persona ascien de a un 0,3 por de sus pacientes se desarrollaron y se transforma-
ciento. Y además aseguraron que esos genes no ron en embriones normales, luego en fetos y final-
tiene ninguna incidencia en la personalidad del niño. mente en bebés, que según Cohen son «sanos y
Sin embargo, la polémica no tardó en aparecer. normales».
Otros investigadores estadounidenses criticaron el A pesar de ser una intervención en el desarrollo
método de tratamiento por considerarlo una interven- del embrión, los experimentos no necesitaron auto-
ción en el desarrollo del embrión. Erick Parens, espe- rización por parte del Estado, debido a que fueron
cialista en ética médica del Centro Hasting, dijo que las realizados con el apoyo de fondos privados.
modificaciones genéticas se trasnmitirán a la próxima Esa técnica también fue practicada por el ginecó-
generación. logo italiano Alessandro Di Gregorio. En su clínica de
Pero para Jacques Cohen, el médico que ideo la Turín, gracias a ese método, que según él tiene por
técnica, «no hubo manipulación genética en el pro- objetivo «rejuvenecer las célular huevo de la ma-
cesamiento», y explico que «la técnica empleada no dre», el 2 de marzo de 1999 nació el primer bebé en
manipula los genes sino simplemente agrega ma- Europa con huellas biológicas de dos madres.
terial inocuo extragenético a las nuevas vidas». La técnica de transferencia de citoplasma con-
Eric Juengst, asistente de genética de la Case siste en reforzar el ovocito débil de la madre con
Western Reserve University de Chicago, consideró una especie de transfusión de una parte de citoplas-
que la noticia es «inquietante». «Esto demuestra que ma de la mujer donante. De este modo, no hay nin-
en el entramado del debate sobre investigación guna transferencia de material genético nuclear, sino
genética y nuevos tratamientos para la infertilidad, sólo de nutrición para facilitar la fecundación y el de-
pueden filtrarse técnicas poco verificadas y muy dis- sarrollo del embrión.
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 231
L
Julio Argañaraz El Papa y varios teólogos morales de la Iglesia
Roma. Corresponsal han acusado a los «manipuladores genéticos» de
proponer la quimera de los embriones capaces de
a Iglesia considera que «es un grave aten- dar vida a seres humanos bellos, sanos y perfectos,
tado a la dignidad humana» la clonación de hom- en una alucinante reedición de los experimentos en
bres y mujeres, una probabilidad que varios científi- favor de la «raza aria superior» de los nazis.
cos señalaron como factible e inmediata en los últi- Los colaboradores de Juan Pablo II recordaron
mos meses, después que la experiencia fue reali- que Hitler y sus seguidores ordenaron la eliminación
zada con éxito en ovejas y monos. de los enfermos mentales y los minusválidos en el
El Papa había ya expresado su profunda preo- Tercer Reich. Más de trescientas mil personas fueron
cupación sobre este tema y ayer se dio a publicidad eliminadas en este programa nazi, que incluyó
el comunicado final de la Pontificia Academia por la también el nacimiento de 90 mil niños
Vida, que se reunió aquí a finales de febrero. «perfectamente arios» en campamentos especiales
Juan Pablo II aprobó previamente el documento, a los que eran llevados jóvenes alemanes de
que representa la más clara toma de posición de la ambos sexos oportunamente seleccionados para
Iglesia Católica y el magisterio pontificio en el oficiar de padres de las criaturas.
espinoso tema de la genética avanzada, la La academia pontificia sostiene que «el genoma
manipulación de embriones y fetos y, especialmente, humano no tiene un significado solamente
en el capítulo muy de actualidad de la reproducción biológico: también es portador de una dignidad
idéntica (clonación) de seres vivientes. antropológica (humana), que tiene su fundamento
El documento afirma que «la genética no es en el alma espiritual que lo vivifica».
necesariamente un hecho negativo» y puede ser útil De allí, prosigue el documento, que la clonación
para los seres humanos «si no es utilizada como «representa un grave atentado a la dignidad del
herramienta para distintas formas de concebido y a su derecho a un genoma no
discriminación». predeterminado e irrepetible», en cuanto es «una
Hace unos días, en un mensaje a los forma extrema de intervención manipuladora de la
académicos, el Papa se refirió a la perspectiva de constitución genómica del ser humano».
manipulaciones genéticas con los genomas y la Como lo ha declarado el mismo Juan Pablo II, la
eliminación de los embriones con enfermedades y academia define como «particularmente
minusvalías. preocupante» el «crecimiento de un clima cultural
«El embrión tiene un alma», afirmó el Papa, que conduce a la práctica de la diagnosis prenatal»,
rechazando de plano la proliferación de embriones que considera discriminatoria.
congelados para fertilizaciones asistidas y su
frecuente eliminación. Esperanzas y temores
El documento de la academia pontificia afirma Los seres que no resulten «sanos y perfectos
que los avances en el campo genético son positivos en las primeras fases de su vida» pueden sufrir así
si apuntan a «servir el bien de la persona en la un «atentado a su misma vida, que no verá jamás la
prevención, diagnosis y terapia de las enfermedades luz», afirma el documento, refiriéndose a los fetos
con base genética». en el útero materno.
Pero estos avances son «moralmente inacep- La academia pontificia elaboró un documento
tables» si tienen el fin de «discriminar a aquellos que clarísimo y contundente. A las puertas del fin del
sean portadores de genes patógenos susceptibles milenio, reclama la restauración en la sociedad de
de desarrollar determinadas enferme-dades», agrega «la relación entre vida, libertad y verdad». Al respecto
el texto realizado por los prelados expertos. señala que las legislaciones vigentes sobre
Esta acción es «contraria a la inalienable biotecnologías y nueva genética «hacen ver
dignidad e igualdad de los seres humanos y a la esperanzas pero también temores», por lo que
justicia social», afirma el documento de la academia reclama «un justo orden social de respeto a la
pontificia. persona, a la familia y a los más débiles».
232 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Tendencias
La filosofía
Peter Singer es un filósofo
australiano, defensor de la
eutanasia. Su incorporación a la
Universidad de Princeton
R
de la moral judeocristiana, en la que Para entender las tesis de Singer
ara vez un dilema ético de la se basa la mayoría de las legislacio- hay que remontarse a su tradición filo-
medicina trasciende la intimi- nes de los países de Occidente, Singer sófica, el utilitarismo, una de las teo-
dad de los hospitales y claus- propone reemplazar el principio de la rías clásicas en ética, desarrollada a
tros académicos para ganar la «santidad de la vida» por una ética ba- principios del siglo XIX por Jeremy
opinión pública, pero cuando lo hace, sada en la «calidad de vida». Es decir Bentham y John Stuart Mill. Para los
su impacto es arrasador. Prueba de que en vez de considerar que toda vida utilitaristas, la moral de una acción de-
ello es el escándalo que provocó días es sagrada y debe defenderse hasta pende más de sus consecuencias
atrás el anuncio de que la Universi- las últimas consecuencias, sostiene que de sus intenciones. «El utilitaris-
dad de Princeton acaba de convocar como principio fundamental evitar el mo sostiene el principio de la mayor
para su Departamento de Valores Hu- sufrimiento innecesario e indeseado. felicidad para la mayor cantidad de
manos al filósofo australiano Peter Las teorías de Singer son motivadas gente -explica el filósofo Enrique Marí-
Singer, especialista en bioética que por los avances en los saberes y las Eso implica ya un problema: ¿cómo
sostiene tesis en favor de la eutana- tecnologías médicas, que permiten hacer una regla universal sobre la feli-
sia y el derecho a decidir la propia desde hacer análisis genéticos pre- cidad? Ante la falta de un criterio co-
muerte. natales hasta mantener la vida mún, Bentham debió especificar: la fe-
El revuelo fue tan grande que The artificialmente en casos hasta hace licidad es la suma del mayor placer o
New York Times lo recogió en su tapa. poco irreversibles y que, por eso mis- la menor cantidad de dolor.» Singer
Algunos editorialistas llegaron a cali- mo, están cambiando drástica-men- insiste en que es éticamente incorrecto
ficar de nazis los postulados de Singer. te las formas de vivir y de morir en infligir sufrimiento a otro, sin distincio-
Y un periodista de The Wall Street las sociedades opulentas. nes, incluso de especie. Esto implica,
Journal sostuvo que, con la designa- Así, Singer cita casos como el de entre otras cosas, rechazar la «supe-
ción, la universidad estaba «tirando Anthony Bland, un muchacho inglés rioridad» de la especie humana fren-
por la borda la idea de dignidad que que durante un partido de fútbol en te a otras criaturas, idea que está en
definió a la civilización occidental en 1989 sufrió una tragedia parecida a la la base de su libro Liberación animal,
los últimos dos milenios». El motivo de la Puerta 12, ocurrida en la cancha considerado un clásico del derecho de
principal de las acusaciones radica en de River en los 60: una avalancha em- los animales.
la posición de Singer frente a temas pujó a cientos de personas contra una Hasta aquí no hay mayores obje-
delicados como la eutanasia y el sui- valla. Bland quedó en estado ciones. Pero la polémica se desata
cidio asistido. vegetativo. Según uno de los jueces, cuando aplica su razonamiento a te-
La obra de Singer lleva años tra- su cuerpo estaba vivo «pero él no tie- mas relativos a la vida y la muerte de
ducida al castellano. En libros como ne una vida en el sentido en el que seres humanos. Singer traza una dis-
Etica práctica (1980) y Repensar la incluso el ser humano más lamenta- tinción clave entre un «ser humano» y
vida y la muerte (1994), este filósofo blemente discapacitado pero cons- una «persona». Ser persona, afirma,
de 52 años afirma, por ejemplo, que ciente la tiene». Luego de un largo pro- implica una serie de características,
en ciertas circunstancias es posible ceso, los jueces británicos permitie- como racionalidad, autonomía, con-
defender la eutanasia no sólo para ron que se suspendiera la vida artifi- ciencia de sí, capacidad para
adultos con enfermedades terminales cial de Bland. Según Singer, los jue- interactuar. Y considera que «tal como
sino para recién nacidos con severas ces «optaron por una ética que, acer- reconocieron los jueces en el caso de
incapacidades, como casos graves de tadamente, tiene en cuenta si mante- Anthony Bland, la vida sin ninguna con-
hemofilia o daños cerebrales irrepa- ner la vida beneficiará o perjudicará» ciencia no vale la pena». Por ende, se-
rables. al involucrado. ría admisible que los padres decidan
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 233
quitar la vida a un recién nacido con cide: «Singer es un autor con un pen- bre su futuro no la debería tomar «ni el
drásticas incapacidades, que impidan samiento muy complejo y sofisticado Estado ni los médicos, sino los pa-
la menor interacción física, mental o que a la vez puede ser fácilmente acce- dres».
social. Singer no ve una distinción mo- sible». Para ella, «lo más llamativo es De todos modos, incluso quienes
ral tan clara entre permitir que un chi- su coherencia y su honestidad al lla- elogian el rigor y la coherencia de su
co muera -suspendiendo un trata- mar a las cosas por su nombre». pensamiento, advierten sobre los pe-
miento- y provocarle la muerte con una Sucede que más allá de lo ligros que podría encerrar su puesta
inyección letal. En ese caso, la muer- provocadoras que son sus tesis, «el en práctica. Para Enrique Marí, «tal vez
te podría ser aún más moral si evita hombre más peligroso del mundo hoy no es el caso de Singer, cuyo planteo
el sufrimiento innecesario o el «en- en día» -como lo calificó un activista a es seguramente bienintencionado,
carnizamiento médico». favor de los discapacitados- dio en el pero no hay que perder de vista las
Desde ya, las ideas de Singer no centro de una serie de cuestiones in- consecuencias sociales que pueden
le valieron pocos enemigos. Hugo eludibles en una sociedad globalizada tener las lecturas parciales de sus ar-
Obiglio, director del Instituto de Etica económica y técnicamente. El debate gumentos». Marí dice que «en socie-
Biomédica de la Universidad Católica también se vuelve pertinente en aque- dades como la nuestra, donde hemos
(UCA), opina que «la cultura actual llas sociedades donde la tecnología visto casos como el de Mengele, uno
propone una moral de situación, un médica avanzada es poco menos que podría pensar que mantener el valor
facilismo que las posturas como las un consumo suntuario, dado que ata- absoluto de la vida permite prevenir
de Singer favorecen». En tanto, en ñe a la distribución de los recursos de prácticas cruentas».
Princeton, unos grupos de alumnos salud: por cada enfermo terminal cuya Florencia Luna, por su parte, opi-
prometieron boicotear sus clases. Y agonía es prolongada indefinidamen- na que de todas las tesis de Singer,
varias asociaciones antiabortistas pi- te, se podría reparar el futuro de cien- «la más discutible me parece la apli-
dieron que se anulara su contrato. En tos de niños desnutridos. cación de la justificación de la eutana-
relación con estas críticas, Singer res- La bióloga Susana Sommer, pro- sia a casos de personas que no ex-
pondió a ZONA desde Melbourne: «No fesora de Etica Aplicada de la UBA, presaron sus deseos previamente,
me sorprenden esas reacciones: yo menciona otro ejemplo de dilema mé- sean éstos recién nacidos o perso-
sé que hay un importante movimiento dico que da cuenta de las dimensio- nas adultas. Me preocupa la posibili-
pro vida en los EE.UU., aunque en ver- nes sociales y políticas que entran en dad de abusos en este sentido».
dad no sé bien por qué me señalan juego: el de las madres que alquilan Otro punto es la posibilidad de que
vientres. «No es lo mismo -dice- si se predominen criterios economicistas a
trata de un acto altruista, como cuan- la hora de tomar decisiones sobre la
Singer propone reemplazar do una amiga presta su cuerpo a otra vida y la muerte. Para Marí, este riesgo
el principio cristiano de la para que conciba su hijo, que si el vien- está implícito en las tesis utilitaristas:
tre es el único recurso económico de «El utilitarismo tiene a veces estos des-
«santidad de la vida» por una mujer desesperada en el Tercer víos -explica-, al medir las acciones en
una ética basada en la Mundo. ¿Cómo hacer, entonces, una re- función de los costos, se podría con-
gla universal?», se pregunta. cluir que el discapacitado da pérdida».
«calidad de vida». «La discusión -sigue Sommer- pasa
Los dilemas de la práctica por las consecuencias sociales de al-
particularmente. Hay otros filósofos Nieto de tres víctimas del Holo- gunas decisiones teóricas. Una políti-
con puntos de vista similares que ya causto, Singer ha sido acusado de nazi ca que quisiera evitar el sufrimiento de
enseñan en los EE.UU.. Alguna gente por defender causas como el aborto los discapacitados podría contribuir a
dice que el problema es que yo escri- selectivo por razones de salud. Algu- la tendencia ya instalada en nuestras
bo en forma más clara y llana, que to- nas de las más fuertes críticas provie- sociedades de no hacerse cargo de
dos pueden entender». nen de Alemania, donde la sombra de ellos. El riesgo, entonces, es claro: que
Ese argumento, justamente, esgri- la eugenesia -la «selección artificial» de al impedir su nacimiento, la sociedad
mió George Kateb, politólogo de los nacimientos- sigue siendo podero- se libere de su responsabilidad frente
Princeton, para defender su nombra- sa. Allí, los defensores de los derechos a los discapacitados».
miento: «La filosofía moral no es más de los discapacitados calificaron sus te- Mientras la polémica crece, Singer
que una enorme bolsa de problemas. sis de «fascistas y asesinas». no deja de hacer preguntas: «La tec-
Debemos elogiar a quien pueda ela- Singer sostiene, sin embargo, que nología crea un imperativo: si pode-
borar argumentos rigurosos, basados sus ideas son menos duras que lo mos hacerlo, lo haremos. La ética se
en principios claros y abiertos a cual- que sugieren algunos críticos. En prin- pregunta: Podemos hacerlo, pero ¿de-
quier refutación». La especialista ar- cipio, dice que matar a una persona beríamos hacerlo?». De cómo sea la
gentina Florencia Luna, doctora en fi- discapacitada que quiere vivir jamás ética desde la cual se intente respon-
losofía y directora del posgrado en se justifica. Y que en el caso de los der a estas preguntas puede depen-
bioética de FLACSO -Facultad Latinoa- bebés, que no pueden dar a conocer der la forma en que viviremos y mori-
mericana de Ciencias Sociales-, coin- sus propios deseos, la decisión so- remos en el siglo XXI.
234 UNIVERSIDAD FASTA Introducción a la Bioética
Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 235
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Introducción a la Bioética UNIVERSIDAD FASTA 237
Índice
Conclusión........................................................................................ 211
Textos Complementarios................................................................... 215
Bibliografía........................................................................................ 234