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Crecer en el temor del Señor 

El problema es claro: la gente es muy grande en nuestras vidas y Dios es demasiado pequeño. 
La respuesta es directa: debemos aprender a conocer que Nuestro Dios es más amoroso y más poderoso 
de lo que imaginábamos. Sin embargo, esta tarea no es fácil. Aun si trabajáramos en un lugar 
espectacular, o la zarza en el patio comenzara a arder sin consumirse, o si Jesús apareciera y peleará 
algunos “rounds” contra nosotros, no tendríamos la garantía de tener una reverencia persistente hacia 
Dios. Muy a menudo nuestras experiencias supremas son sobrepasadas rápidamente por el clamor del 
mundo, y Dios, una vez más, es disminuido en nuestras mentes. La meta es establecer una tradición 
diaria de crecimiento en el conocimiento de Dios. 

El temor de Dios: s​ u belleza. 

1-. Para crecer en el conocimiento del Dios Santo debemos considerar hermosos y 
atractivos dicho conocimiento​. 

Aquí es donde el libro de Proverbios nos puede ayudar. 

El corazón del libro es el temor del Señor: es la puerta de entrada, el camino, y el fin de la 
sabiduría (Prov. 9:10)​ “El temor de Jehová es el principio de la sabiduría,​ ​Y el conocimiento del 
Santísimo es la inteligencia”. ​Para crecer en el temor de Dios, es necesario entender su sabiduría, ese 
es el principio para el temor. Aquí nos presenta el conocimiento del Santísimo lo que sabemos de Él, nos 
lleva a tener inteligencia espiritual para hacer las cosas. Es necesario entenderlo bien, muchos piensan 
que tienen sabiduría e inteligencia porque pueden realizar tal acción. Pero si está creciendo en el temor 
de Dios, entonces tal acción es verdadera no simulada, esta acción es continua no son chispazos que se 
le ocurre, sino que actúa con inteligencia y sabiduría. 

Puesto que el temor del Señor es el gran tesoro de la vida, proverbios trata de guiarnos para ir hacia Él. 
Trata de hacer que el temor del Señor sea tan atractivo como sea posible. 

Aquellos que temen al Señor no temerán a nadie más (19:23) “​El temor de Jehová es para vida, 
Y con él vivirá lleno de reposo el hombre; No será visitado de mal”. ​La belleza del temor de Dios es vida, 
vida terrenal y vida eterna. Cuando un creyente vive en temor a Dios, como dice la Palabra, todas las 
cosas los ayudan a bien. 

2-. Crecer en la belleza de temor de Dios nos hace apreciar la vida​. 


El temor del Señor alarga la vida (10:27)​ “El temor de Jehová aumentará los días;  

Mas los años de los impíos serán acortados”​, es una fortaleza segura para el que teme y para 
sus hijos. Creo que algunos de ustedes han notado que muchos creyentes en Cristo, viven más años de 
vidas, la gran mayoría de los hermanos llegan a los ochenta y más. (14:26)​ “En el temor de Jehová está 
la fuerte confianza; Y esperanza tendrán sus hijos”.​ La vida en Cristo te da la confianza de seguir 
adelante, de seguir caminando firmes hacia la meta, hacia el premio, hacia el galardón que Dios tiene a 
cada uno de sus hijos que perseveran y confían en el temor a Él. 

Es la fuente de vida (15:16) “​Mejor es lo poco con el temor de Jehová, ​ ​Que el gran tesoro donde 
hay turbación”,​ trae honor (22:24) “​No te entremetas con el iracundo, Ni te acompañes con el hombre 
de enojos”​. Con tranquilidad camina, él justo con su Señor hasta la segunda venida. 

¿Qué apariencia tiene el temor del Señor? se ve como el amor al bien y el odio al mal. (18:13​a​) 
“El temor de Jehová es aborrecer el mal”​. Se ve como la confianza en Dios (reverencia) y la obediencia a 
Él, hasta el último minuto de vida del creyente en Jesucristo. 

¿Puedes darte cuenta de que el temor del Señor es una bendición? Solo imagínate como sería 
un odio verdadero hacia el pecado, el nuestro y el de otros (Mt. 7:3-5) “​ ¿Y por qué miras la paja que 
está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? 4 ¿O cómo dirás a tu 
hermano: Déjame sacar la paja de tu ojo, y he aquí la viga en el ojo tuyo? 5 ¡Hipócrita! saca primero la 
viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano” ​¿Qué ocurriría 
con las peleas matrimoniales? Serían casi imposibles. Los cónyuges estarían demasiado ocupados 
otorgando y pidiendo perdón por su propio egoísmo. ¿Qué pasaría cuando alguien pecará en nuestra 
contra? Ya no tendríamos que asesinar a la persona en nuestro propio corazón. Al contrario, 
cubriríamos el pecado en humildad y amor, o confrontaríamos a la persona en el mismo espíritu. 

Finalmente. 

Cuando crecemos en el temor de Dios, podemos ver su belleza del temor, porque nos hace ver 
como personas que necesitamos de la ayuda Dios, nos hace sentir la necesidad de un Dios verdadero, 
nos hace ser pequeños ante un Dios grande. Cuando sentimos todo esto estamos en el camino correcto, 
si no lo siente quiere decir que usted es más grande que Dios, y por lo tanto no tiene temor de Dios. es 
tiempo de ver la belleza y crecer en el temor de Dios. Amen.  

 
 
 
 
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